Universidad nacional autónoma de México

Facultad de economía

Docente: clemente herrera

Asignatura: derecho económico

Alumno: Erik Vergara Gutiérrez

Actividad 31 Facultades del Presidente de la

República

Ciclo 2024-2
De acuerdo con el artículo de Clemente Herrera, Facultades del Presidente de la
República, páginas 1 a 3, explique:
1. El poder de nombramiento
Esta facultad de nombramiento establece una relación personal unívoca entre el
titular del órgano superior y sus colaboradores designados, lo que implica una
correlación jurídica de subordinación. Es decir, los colaboradores nombrados
están sujetos a la autoridad y dirección del titular del órgano superior. Además,
el poder de nombramiento incluye implícitamente el poder de remoción,
otorgando al titular del órgano superior la capacidad de destituir a sus
colaboradores designados si así lo considera necesario.
2. El poder de mando
De acuerdo lo leído en la lectura se puede deducir que, el poder de mando en la
administración pública consiste en la facultad del superior jerárquico para dirigir
e impulsar la actividad de los servidores públicos subordinados mediante
órdenes verbales o escritas. Esta facultad está respaldada por la obligación de
obediencia del subordinado, sin limitación alguna, salvo las que establezcan las
leyes reglamentarias vigentes en cuanto a la amplitud de facultad o poder del
superior, así como del ámbito o materia de su competencia y jurisdicción. Se
entiende también como la capacidad del superior para tomar decisiones que
aseguren el funcionamiento eficiente de la administración pública en todos sus
niveles. Además, el poder de mando está estrechamente ligado al poder de
nombramiento, lo que sugiere una relación de causalidad entre ambos aspectos.
3. El poder de decisión
El poder de decisión en la administración pública permite al superior jerárquico
elegir entre diversas alternativas de resolución de problemas, optando por
aquella que considere más conveniente, y esta decisión debe ser acatada por el
subordinado. Dichas decisiones se basan en lo que establece la normativa
vigente, que puede abarcar desde el ámbito constitucional hasta la
reglamentación interna de la dependencia. De esta manera, el superior
jerárquico ejerce su autoridad dentro de los límites establecidos por las leyes y
reglamentos, garantizando el cumplimiento de las normas y el correcto
funcionamiento de la administración pública.
4. El poder de vigilancia
El ejercicio del poder de vigilancia en la administración pública otorga a la
autoridad superior un conocimiento detallado de las acciones llevadas a cabo
por el personal subordinado. Esta capacidad permite identificar posibles
incumplimientos en las obligaciones de los subordinados y determinar las
responsabilidades administrativas, civiles, penales u otras que pudieran surgir a
raíz de dichos incumplimientos. El poder de vigilancia se materializa a través de
 actos concretos ordenados por el superior jerárquico, los cuales encuentran su
respaldo legal en los reglamentos internos de las dependencias o en decretos
de creación. De esta manera, la autoridad superior ejerce su facultad de
supervisión para garantizar el correcto desempeño y la legalidad de las acciones
dentro de la administración pública.
5. El poder de revisión
La facultad del titular del órgano superior dentro de la administración pública
consiste en revisar la actuación de sus subordinados y, si lo estima necesario,
revocar, suspender, modificar, anular o confirmar los actos o resoluciones
administrativas. En otras palabras, el titular del órgano superior tiene la autoridad
para intervenir en las decisiones tomadas por sus subordinados, garantizando
así la coherencia, legalidad y eficacia de las acciones administrativas.
6. El poder de disciplinario
La facultad conferida al titular del órgano superior en la administración pública le
permite sancionar o reprimir administrativamente a sus subordinados por
acciones u omisiones indebidas o irregulares, que causen perjuicio a la
administración pública, a los particulares o a ambos. La Ley Federal de
Responsabilidades Administrativas de los Servidores Públicos establece
diversas medidas disciplinarias para aquellos que incurran en actos
administrativos indebidos, las cuales incluyen:

a) Amonestación Privada o Pública;

b) Suspensión del empleo, cargo o comisión por un periodo no menor de tres
días ni mayor a un año;
c) Destitución del puesto;
d) Sanción económica; y
e) Inhabilitación temporal para desempeñar empleos, cargos o comisiones en el
servicio público.
Estas medidas disciplinarias garantizan la integridad, la ética y el adecuado
desempeño de los servidores públicos en el ejercicio de sus funciones,
promoviendo la transparencia y la responsabilidad en la administración pública.
7. El poder para la resolución de conflictos de competencia
El titular del órgano superior en la administración pública tiene la facultad de
decidir qué órgano inferior es competente para tratar un asunto específico
cuando varios o ninguno de ellos se consideran aptos para ello. Esto significa
que puede resolver disputas de competencia y asignar las responsabilidades
adecuadas, asegurando una distribución justa de funciones y evitando conflictos
dentro de la administración.
8. Ahora, con las reformas impuestas por el Legislativo tenemos la Ley General de
Responsabilidades Administrativas y se abroga la Ley de Responsabilidades de
los Servidores Públicos. ¿Señale las faltas no graves y graves que regulan el
actuar de todo servidor público? Incluye los 3 poderes. Consulte la Ley General
de Responsabilidades Administrativas que se anexa.
La Ley General de Responsabilidades Administrativas, vigente tras las reformas
legislativas, establece un marco integral para regular el actuar de los servidores
públicos en todos los poderes. Las faltas administrativas, tanto graves como no
graves, están detalladas en esta ley.

1. Faltas Administrativas No Graves: Estas son acciones u omisiones que

incumplen las obligaciones de los servidores públicos, según lo establecido en
la ley. Entre estas faltas se incluyen:
- Cumplir con las funciones y comisiones encomendadas.
- Denunciar actos u omisiones que puedan constituir faltas administrativas.
- Atender instrucciones superiores, siempre que estén acordes con las
disposiciones del servicio público.
- Presentar declaraciones de situación patrimonial y de intereses en tiempo y
forma.
- Registrar, custodiar y cuidar la documentación e información bajo su
responsabilidad.
- Supervisar el cumplimiento de las disposiciones por parte de los
subordinados.
- Rendir cuentas sobre el ejercicio de las funciones.
- Colaborar en procedimientos judiciales y administrativos.
- Cerciorarse de la inexistencia de conflictos de interés en contratos o
contrataciones.

2. Faltas Administrativas Graves: Estas faltas son catalogadas como graves en

la Ley General de Responsabilidades Administrativas y su sanción corresponde
al Tribunal Federal de Justicia Administrativa y sus homólogos en las entidades
federativas. Algunas de estas faltas son:
- Cohecho: exigir, aceptar o pretender obtener beneficios indebidos.
- Peculado: autorizar actos para el uso o apropiación indebida de recursos
públicos.
 - Enriquecimiento ilícito u ocultación de conflicto de interés.
- Abuso de funciones: ejercer atribuciones no conferidas para beneficio propio
o ajeno.
- Utilización indebida de información privilegiada.
- Tráfico de influencias: usar la posición del servidor público para obtener
beneficios indebidos.
- Encubrimiento: ocultar actos u omisiones que pudieran constituir faltas
administrativas.
- Desacato: proporcionar información falsa o no responder a requerimientos
legales.
- Obstrucción de justicia: realizar acciones que dificulten la investigación o el
proceso legal.
Estas faltas, tanto graves como no graves, se encuentran detalladas en la Ley
General de Responsabilidades Administrativas, proporcionando un marco legal
claro para garantizar la transparencia, la ética y la responsabilidad en el servicio
público.
Capítulo 1 del Título III de la Ley General de Responsabilidad Administrativa Por
infracciones administrativas no graves cometidas por funcionarios públicos:
Artículo 49. Se considerará una falta administrativa no grave cuando un servidor
público incumpla o transgreda las siguientes obligaciones:
I. Cumplir con las funciones, atribuciones y comisiones encomendadas,
mostrando disciplina y respeto tanto hacia otros servidores públicos como hacia
los particulares con los que tenga trato, conforme a lo establecido en el código
de ética referido en el artículo 16 de esta Ley.
II. Denunciar los actos u omisiones que, en el ejercicio de sus funciones, puedan
constituir faltas administrativas.
III. Atender las instrucciones de sus superiores, siempre que estén alineadas con
las disposiciones relacionadas con el servicio público. En caso de recibir
instrucciones contrarias, deberá denunciar esta situación.
IV. Presentar en tiempo y forma las declaraciones de situación patrimonial y de
intereses.
V. Registrar, integrar, custodiar y cuidar la documentación e información que
tenga bajo su responsabilidad debido a su empleo, cargo o comisión, evitando
su uso indebido, divulgación, sustracción, destrucción, ocultamiento o
inutilización.
VI. Supervisar que los servidores públicos sujetos a su dirección cumplan con
las disposiciones de este artículo.
 VII. Rendir cuentas sobre el ejercicio de sus funciones, conforme a las normas
aplicables.
VIII. Colaborar en los procedimientos judiciales y administrativos en los que
participe.
IX. Cerciorarse, antes de la celebración de contratos de adquisiciones,
arrendamientos o enajenación de bienes, prestación de servicios o contratación
de obra pública o servicios relacionados con ésta, de que el particular manifieste
bajo protesta de decir verdad que no tiene empleo, cargo o comisión en el
servicio público o, en su caso, que, a pesar de tenerlo, no hay conflicto de interés
con la formalización del contrato correspondiente. Estas manifestaciones deben
ser por escrito y comunicadas al órgano interno de control antes de celebrar el
contrato, especialmente si el contratista es una persona moral, en cuyo caso
deben presentarse respecto a los socios o accionistas que ejerzan control sobre
la sociedad.
Según esta Ley, se considera que un socio o accionista ejerce control sobre una
sociedad cuando son administradores o forman parte del consejo de administración,
mantienen, ya sea conjunta o separadamente, directa o indirectamente, la titularidad de
derechos que les permiten ejercer más del cincuenta por ciento del capital y tienen
poder de decisión en las asambleas, tienen la capacidad de nombrar a la mayoría de
los miembros del órgano de administración, o bien, disponen de otras facultades que
les permiten tomar las decisiones fundamentales de dichas personas morales.

Artículo 50. También se considerará Falta administrativa no grave, los daños y

perjuicios que, de manera culposa o negligente y sin incurrir en alguna de las
faltas administrativas graves señaladas en el Capítulo siguiente, cause un
servidor público a la Hacienda Pública o al patrimonio de un Ente público. Los
entes públicos o los particulares que, en términos de este artículo, hayan
recibido recursos públicos sin tener derecho a los mismos, deberán reintegrar
los mismos a la Hacienda Pública o al patrimonio del Ente público afectado en
un plazo no mayor a 90 días, contados a partir de la notificación correspondiente
de la Auditoría Superior de la Federación o de la Autoridad resolutora. En caso
de que no se realice el reintegro de los recursos señalados en el párrafo anterior,
estos serán considerados créditos fiscales, por lo que el Servicio de
Administración Tributaria y sus homólogos de las entidades federativas deberán
ejecutar el cobro de estos en términos de las disposiciones jurídicas aplicables.
La Autoridad resolutora podrá abstenerse de imponer la sanción que
corresponda conforme al artículo 75 de esta Ley, cuando el daño o perjuicio a la
Hacienda Pública o al patrimonio de los entes públicos no exceda de dos mil
veces el valor diario de la Unidad de Medida y Actualización y el daño haya sido
resarcido o recuperado.
El Capítulo II establece las faltas administrativas graves de los Servidores
Públicos:
Artículo 51. Las conductas previstas en el presente Capítulo constituyen Faltas
administrativas graves de los Servidores Públicos, por lo que deberán
abstenerse de realizarlas, mediante cualquier acto u omisión.
Artículo 52. Incurrirá en cohecho el servidor público que exija, acepte, obtenga
o pretenda obtener, por sí o a través de terceros, con motivo de sus funciones,
cualquier beneficio no comprendido en su remuneración como servidor público,
que podría consistir en dinero; valores; bienes muebles o inmuebles, incluso
mediante enajenación en precio notoriamente inferior al que se tenga en el
mercado; donaciones; servicios; empleos y demás beneficios indebidos para sí
o para su cónyuge, parientes consanguíneos, parientes civiles o para terceros
con los que tenga relaciones profesionales, laborales o de negocios, o para
socios o sociedades de las que el servidor público o las personas antes referidas
formen parte. También incurrirá en cohecho, el servidor público que se abstenga
de devolver el pago en demasía de su legítima remuneración de acuerdo con
los tabuladores que al efecto resulten aplicables, dentro de los 30 días naturales
siguientes a su recepción.
Artículo 53. Cometerá peculado el servidor público que autorice, solicite o realice
actos para el uso o apropiación para sí o para las personas a las que se refiere
el artículo anterior, de recursos públicos, sean materiales, humanos o
financieros, sin fundamento jurídico o en contraposición a las normas aplicables.
Artículo 54. Será responsable de desvío de recursos públicos el servidor público
que autorice solicite o realice actos para la asignación o desvío de recursos
públicos, sean materiales, humanos o financieros, sin fundamento jurídico o en
contraposición a las normas aplicables. Se considerará desvío de recursos
públicos, el otorgamiento o autorización, para sí o para otros, del pago de una
remuneración en contravención con los tabuladores que al efecto resulten
aplicables, así como el otorgamiento o autorización, para sí o para otros, de
pagos de jubilaciones, pensiones o haberes de retiro, liquidaciones por servicios
prestados, préstamos o créditos que no estén previstos en ley, decreto
legislativo, contrato colectivo, contrato ley o condiciones generales de trabajo.
Artículo 55. Incurrirá en utilización indebida de información el servidor público
que adquiera para sí o para las personas a que se refiere el artículo 52 de esta
Ley, bienes inmuebles, muebles y valores que pudieren incrementar su valor o,
en general, que mejoren sus condiciones, así como obtener cualquier ventaja o
beneficio privado, como resultado de información privilegiada de la cual haya
tenido conocimiento.
Artículo 56. Para efectos del artículo anterior, se considera información
privilegiada la que obtenga el servidor público con motivo de sus funciones y que
no sea del dominio público. La restricción prevista en el artículo anterior será
aplicable inclusive cuando el servidor público se haya retirado del empleo, cargo
o comisión, hasta por un plazo de un año.
Artículo 57. Incurrirá en abuso de funciones el servidor público que ejerza
atribuciones que no tenga conferidas o se valga de las que tenga, para realizar
o inducir actos u omisiones arbitrarios, para generar un beneficio para sí o para
las personas a las que se refiere el artículo 52 de esta Ley o para causar perjuicio
a alguna persona o al servicio público.
Artículo 58. Incurre en actuación bajo Conflicto de Interés el servidor público que
intervenga por motivo de su empleo, cargo o comisión en cualquier forma, en la
atención, tramitación o resolución de asuntos en los que tenga Conflicto de
Interés o impedimento legal.
Al tener conocimiento de los asuntos mencionados en el párrafo anterior, el
servidor público informará tal situación al jefe inmediato o al órgano que
determine las disposiciones aplicables de los entes públicos, solicitando sea
excusado de participar en cualquier forma en la atención, tramitación o
resolución de estos. Será obligación del jefe inmediato determinar y comunicarle
al servidor público, a más tardar 48 horas antes del plazo establecido para
atender el asunto en cuestión, los casos en que no sea posible abstenerse de
intervenir en los asuntos, así como establecer instrucciones por escrito para la
atención, tramitación o resolución imparcial y objetiva de dichos asuntos.
Artículo 59. Será responsable de contratación indebida el servidor público que
autorice cualquier tipo de contratación, así como la selección, nombramiento o
designación, de quien se encuentre impedido por disposición legal o inhabilitado
por resolución de autoridad competente para ocupar un empleo, cargo o
comisión en el servicio público o inhabilitado para realizar contrataciones con los
entes públicos, siempre que en el caso de las inhabilitaciones, al momento de la
autorización, éstas se encuentren inscritas en el sistema nacional de servidores
públicos y particulares sancionados de la Plataforma digital nacional.
Artículo 60. Incurrirá en enriquecimiento oculto u ocultamiento de Conflicto de
Interés el servidor público que falte a la veracidad en la presentación de las
declaraciones de situación patrimonial o de intereses, que tenga como fin
ocultar, respectivamente, el incremento en su patrimonio o el uso y disfrute de
bienes o servicios que no sea explicable o justificable, o un Conflicto de Interés.
Artículo 61. Cometerá tráfico de influencias el servidor público que utilice la
posición que su empleo, cargo o comisión le confiere para inducir a que otro
servidor público efectúe, retrase u omita realizar algún acto de su competencia,
para generar cualquier beneficio, provecho o ventaja para sí o para alguna de
las personas a que se refiere el artículo 52 de esta Ley.
Artículo 62. Será responsable de encubrimiento el servidor público que, cuando
en el ejercicio de sus funciones llegare a advertir actos u omisiones que pudieren
constituir Faltas administrativas, realice deliberadamente alguna conducta para
su ocultamiento.
 Artículo 63. Cometerá desacato el servidor público que, tratándose de
requerimientos o resoluciones de autoridades fiscalizadoras, de control interno,
judiciales, electorales o en materia de defensa de los derechos humanos o
cualquier otra competente, proporcione información falsa, así como no dé
respuesta alguna, retrase deliberadamente y sin justificación la entrega de la
información, a pesar de que le hayan sido impuestas medidas de apremio
conforme a las disposiciones aplicables.

Artículo 64. Los Servidores Públicos responsables de la investigación,

substanciación y resolución de las Faltas administrativas incurrirán en
obstrucción de la justicia cuando:
I. Realicen cualquier acto que simule conductas no graves durante la
investigación de actos u omisiones calificados como graves en la presente Ley
y demás disposiciones aplicables;
II. No inicien el procedimiento correspondiente ante la autoridad competente,
dentro del plazo de treinta días naturales, a partir de que tengan conocimiento
de cualquier conducta que pudiera constituir una Falta administrativa grave,
Faltas de particulares o un acto de corrupción, y
III. Revelen la identidad de un denunciante anónimo protegido bajo los preceptos
establecidos en esta Ley.
Para efectos de la fracción anterior, los Servidores Públicos que denuncien una
Falta administrativa grave o Faltas de particulares, o sean testigos en el
procedimiento, podrán solicitar medidas de protección que resulten razonables.
La solicitud deberá ser evaluada y atendida de manera oportuna por el Ente
público donde presta sus servicios el denunciante.

Bibliografía
ENRIQUE PEÑA NIETO. (2016). LEY GENERAL DE RESPONSABILIDADES ADMINISTRATIVAS.

Herrera, C. (s.f.). Facultades del Presidente de la República. 1 a 3.