Aspectos de La Emoción
Aspectos de La Emoción
Aspectos de La Emoción
De ser así, la sensación fue leve porque una expresión facial fingida no es tan auténtica ni produce
una emoción tan real como la expresión facial espontánea.
A medida que nos ocurren sucesos vitales importantes, se activan reacciones biológicas y cognitivas
en nosotros. Los procesos biológicos y cognitivos resultantes generan emociones que nos preparan
para lidiar de manera adaptativa con el suceso vital importante al que nos enfrentamos.
El cuerpo se prepara para afrontarla de manera efectiva (por ejemplo, se prepara para correr)
mediante la activación de lo siguiente:
En esta teoría se preguntaban si las distintas emociones tenían reacciones corporales únicas que se
les asociaran o no.
¿El temor y la alegría también tienen reacciones corporales diferentes entre sí?
¿Nuestro corazón, pulmones y hormonas se comportan de una manera cuando estamos temerosos y
de otra cuando experimentamos alegría?
Y, de ser así...
¿Estas diferencias biológicas explican por qué son distintas las emoción es que experimentamos?
La experiencia personal sugiere que experimentamos una emoción y que cambios corporales siguen
rápidamente a la emoción experimentada.
Tan pronto como vemos luces rojas que parpadean y escuchamos la sirena de una patrulla de policía,
surge el temor y este sentimiento de temor hace que nuestro corazón se acelere y que nos suden las
palmas de las manos. La secuencia de eventos parece ser:
William James (1884, 1890, 1894) argumentaba contra esta perspectiva común.
Ejemplo; ante las luces parpadeantes y los sonidos de la sirena, se producen cambios corporales los
que ocasionan la experiencia emocional:
A fin de apreciar la hipótesis de James, piense en las respuestas fisiológicas de su cuerpo ante una
ducha que se enfría de manera sorpresiva e inesperada.
Investigadores les solicitaron a varios actores profesionales y les pidieron a cada uno de ellos que
revivieran cinco emociones distintas :
-enojo
-temor
-tristeza
-alegría
-asco
Al tiempo que los investigadores realizaban mediciones en busca de pautas específicas de la emoción
en la actividad fisiológica.
Surgieron diferencias claras en la frecuencia cardiaca (FC) y en la temperatura cutánea(TC).
Justo como lo había sospechado Willian James, las diferentes emociones realmente sí producían
pautas distinguibles de actividad corporal.
Existe evidencia convincente de actividad en el sistema nervioso autónomo (SNA) que se asocia con
el enojo, el temor, el asco y la tristeza.(Ekman y Davidson,1993; Ekman et al., 1983; Levenson, 1992;
Levenson,Carstensen, Friensen y Ekman, 1991; Levenson, Ekmany Friensen, 1990; Sinha y Parsons,
1996; Stemmler, 1989).
Estas pautas de actividad del SNA emergen porque podían movilizar formas de comportamiento que
resultaron ser adaptativas.
Por ejemplo, en una pelea que despierta el enojo, un aumento en la frecuencia cardiaca FC y en la
temperatura cutánea TC facilitan un comportamiento fuerte y asertivo.
El sistema nervioso autónomo es la parte de su sistema nervioso que controla las acciones
involuntarias, tales como los latidos cardíacos y el ensanchamiento o estrechamiento de los vasos
sanguíneos. Cuando algo malo ocurre en este sistema, puede causar problemas serios, entre ellos:
Problemas con la presión arterial.
Los investigadores contemporáneos concuerdan en que la activación fisiológica acompaña, regula y
prepara el marco para la emoción, pero no es causante directa de la misma.
La perspectiva moderna es que las emociones reúnen el apoyo biológico y fisiológico para hacer
posibles las conductas adaptativas de pelea, huida y crianza (Levenson, 1994b).
Circuitos neurales específicos
Del mismo modo en que los primeros investigadores buscaron patrones específicos para las
emociones en la actividad fisiológica, los investigadores contemporáneos buscan patrones
específicos de la emoción en la actividad cerebral (Gray, 1994; LeDoux, 1987; Panksepp, 1982,1986).
Por ejemplo, los hallazgos neuroanatómicos de Jeffrey Gray (1994; trabajos con animales no
humanos) documentan la existencia de tres circuitos neurales diferenciados dentro del cerebro.
1) un sistema de aproximación conductual que prepara al animal para buscar e interactuar con
oportunidades ambientales atractivas
2) un sistema pelea-huida que prepara al animal para huir de sucesos aversivos, pero también para
defenderse de manera agresiva en contra de otros.
3) un sistema de inhibición conductual que dispone al animal para inmovilizarse ante sucesos
aversivos. Estos circuitos neurales subyacen a las cuatro emociones: alegría, temor, rabia y ansiedad.
En las que se abordan las distintas partes de la amígdala que generan emociones negativas
diferentes, incluyendo temor, enojo y ansiedad.
La corteza prefrontal izquierda genera alegría y afecto positivo; la corteza prefrontal derecha genera
temor y afecto negativo. En términos más generales, las vías dopaminérgicas a lo largo del sistema
límbico subyacen al afecto positivo. La idea básica es que las áreas cerebrales subcorticales (no
cognitivas), al activarse, son totalmente capaces de generar y regular emociones específicas.
Activación neural
Las diferentes emociones se activan por distintas tasas de descargas neurales corticales (Tomkins,
1970). La descarga neural se refiere al patrón de actividad electrocortical (en el cerebro) en cualquier
momento dado. Según Silvan Tomkins, existen tres patrones básicos de descarga neural: la actividad
aumenta, la actividad disminuye o la actividad permanece constante.
Por ejemplo, si usted está durmiendo (tasa baja de descarga neural, medida por medio de un
electroencefalograma o EEG) y un gato le brinca a la cara (un evento estimulante), la tasa de
descarga neural aumentará.
Si usted se encuentra en una calma relativa, la tasa de descarga neural disminuirá. En otras
ocasiones, la actividad neural es constante, como cuando hay un esfuerzo cognitivo persistente al
leer el periódico.
Con estos tres patrones básicos de descarga neural, la persona está equipada para casi cualquier
suceso vital importante.
Es decir:
Esta descarga constante (y elevada) activa ya sea la angustia o el enojo, dependiendo de la magnitud
de la estimulación neural.
Es decir:
Por ende, las emociones son “conjuntos de respuestas musculares y glandulares localizadas en el
rostro”(Tomkins, 1962).
Musculatura facial
Las pautas de conducta facial producen emociones discretas. Por ejemplo, el enojo, el temor, el asco,
la angustia y la alegría tienen expresiones faciales reconocibles.