9.1 Enfermdad Luxante de Cadera
9.1 Enfermdad Luxante de Cadera
9.1 Enfermdad Luxante de Cadera
DESTINADO A:
FECHA DE DIFUSION:
FECHA DE ENTREGA:
Signo del telescopaje: la flacidez capsular permite que la cabeza femoral se separe del
cótilo al traccionar el muslo en el sentido de su eje, para volver a su lugar al dejar de
traccionar.
Signos de certeza de L.C.C.
• Palpación de la cabeza femoral en un lugar anormal, por
migración de ella fuera del acetábulo.
• Lateralización y ascenso del trocánter mayor, que puede estar
encubierto, cuando el niño es muy gordo.
• Desplazamiento lateral de la cabeza femoral.
En el niño que camina existen otros signos:
• Marcha claudicante.
• Signo de Trendelenburg, que traduce insuficiencia del músculo
glúteo medio.
• Acortamiento de la extremidad luxada.
DIAGNOSTICO
El diagnóstico de certeza es radiológico. La radiología simple es la más usada y generalizada. En
los últimos años se ha empleado también ultrasoonografía, que nos da información sobre la
dinámica de la cadera. Este examen evita la irradiación del paciente, especialmente del recién
nacido y lactante. Desgraciadamente es un método que aún no está generalizado.
La radiografía, es útil a cualquier edad y nos da signos de certeza desde el recién nacido.
La radiografía, para que tenga valor, debe ser técnicamente perfecta. La placa radiográfica
debe ser centrada (sínfisis pubiana en la línea media) y simétrica (agujeros obturadores y alas
ilíacas de igual forma y tamaño).
Las proyecciones más usadas son la anteroposterior, con los miembros en posición neutra, y la
Lauenstein, con los muslos flexionados y abducidos, que nos da una visión lateral del 1/3
proximal del fémur.
En la radiografía simple antes de los 6 meses de edad, cuando aún no se ha iniciado la
osificación de la cabeza femoral, se trazan varias líneas y se miden distancias y ángulos para
hacer un diagnóstico de certeza de enfermedad luxante de la cadera, ya que no se puede ver
directamente dicha cabeza femoral, si está dentro o fuera de la cavidad cotiloídea, ya que ésta
es transparente a rayos por ser sólo de cartílago. (Figura 16).
Figura 16 Radiografía de una lactante de 3 meses de edad con Displasia Bilateral. Obsérvese la inclinación
aumentada del cótilo y la cabeza femoral transparente a rayos, formada sólo de cartílago. Se puede comparar esta
radiografía con el esquema de la displasia de cadera.
Trazado de líneas de referencia en la radiografía AP en lactante menor de 6 meses
• Línea de Hilgenreiner
• Línea de Perkins
• Distancia D
• Distancia H
• Angulo acetabular
• Arco de Shenton
• Signo de Foseta (de Doberti)
• Osificación de la cabeza femoral
Diagnóstico diferencial
Se debe hacer con otros cuadros parecidos:
• Luxación teratológica.
• Luxación de la artrogriposis.
• Luxación por coxitis tuberculosa.
• Luxación por artritis piógena.
• Luxación de la parálisis flácida espástica.
• Coxa vara congénita.
• Distrofia progresiva.
Estos dos últimos cuadros dan insuficiencia glútea, igual que la L.C.C.
TRATAMIENTO
Para lograr caderas normales, el tratamiento debe ser precoz. De aquí la importancia que el
diagnóstico sea también precoz (antes del primer mes de vida). La OMS define el diagnóstico
precoz de la L.C.C. al que se realiza antes del primer mes de vida.
Básicamente el tratamiento depende de la edad en que se inicia y de la etapa de la L.C.C.
• En el niño menor de 12 meses el tratamiento es ortopédico. Se usa un método funcional
dinámico, que básicamente es la correa de Pavlic, aparato que flexiona caderas y rodillas
en forma progresiva. Se puede enfrentar el inicio del tratamiento con flexión progresiva
o usando el aparato de Pavlic por horas en el día; por ejemplo primer día 2 h, segundo
día 4 h, tercer día 8 h, cuarto día 16 h y quinto día 24 h; o primera semana 30º, segunda
semana 60º, tercera semana 90º de flexión.
• El peso del muslo y piernas logra espontáneamente la abducción, que es lo que se busca
con este método. Los niños pueden mover sus extremidades inferiores dentro de un
rango aceptable y deseable. No hay tensión ni compresión de la cabeza femoral. (Figura
20).
Las displasias en el primer trimestre de vida se tratan sólo con doble pañal, que logra una
adbucción suficiente para el tratamiento de esta etapa de la L.C.C.
En esta etapa de vida (primer año) se ha proscrito el uso de yesos en posición forzada para
mantener la cadera reducida (yesos en posición de Lorenz). La necrosis aséptica grave de la
cabeza femoral, es un riesgo inminente.
Otra forma de tratamiento de la L.C.C. es el uso del calzón de abducción o de Frejka. (Figura
21).
Figura 21
Muestra la abducción de la cadera, lograda con el calzón de Frejkza.
• Cuando hay fracaso de tratamiento con el aparato de Pavlic se puede pasar a otro tipo
de tratamiento, que se usa también en pacientes mayores, como las botas de yeso con
yugo de abducción. De 12 a 18 meses, cuando hay displasia, se practica tenotomía de
aductores que tienden a relajar la cadera para evitar la compresión de la cabeza femoral
y posterior necrosis avascular. Esta tenotomía puede o no ir seguida de neurectomía del
nervio obturador superficial. Enseguida se ponen botas con yugo o férula de abducción,
que es un método más rígido que los anteriores, pero ya con cadera relajada, lo que
previene la necrosis avascular de la cabeza femoral.
Si hay subluxación se hace lo mismo, siempre que la cabeza se centre bien (buena reducción de
la cabeza femoral) y no quede alejada del cótilo. Si esto ocurre, es decir, la cabeza queda fuera
cótilo, lo más probable es que el tendón del psoas esté interpuesto, por lo que se debe hacer su
tenotomía.
Si hay luxación, el tratamiento es quirúrgico, practicando la reducción cruenta y reposición de la
cabeza femoral en la cavidad cotiloídea, seguido de inmovilización con yeso. Estos
procedimientos todavía logran caderas prácticamente normales, ya que el niño aún posee un
gran potencial de crecimiento y remodelación.
• Sobre los 18 meses, si hay displasia, se puede tratar con férulas de abducción o yesos
que no signifiquen presión sobre la cabeza femoral, de modo que se colocan sólo en
caderas relajadas (tratadas previamente o con tenotomía de aductores).
Si hay subluxación, el tratamiento es quirúrgico:
- Reducción cruenta.
- Reducción cruenta más osteotomía, para derrotar el extremo proximal del fémur
(disminuir antetorsión o para acortar el fémur).
- Reducción cruenta más osteotomía acetabular, para mejorar el techo cotiloídeo,
aumentando la superficie de carga. Estas osteotomías son variadas y, de acuerdo a su
autor, se les denomina de Pemberton, Salter, Chiari, etc.
- Tectoplastías: se coloca un injerto óseo en el reborde cotiloídeo cubriendo la cabeza
femoral, buscando el mismo objetivo que se logra con las osteotomías pelvianas.
- Artroplastías: se usa en período de secuela de la luxación de cadera, cuando hay dolor,
rigidez, necrosis o artrosis de cadera. Son tratamientos de rescate de caderas
(artroplastía de Colonna) o de reemplazo de cadera (prótesis total).
COMPLICACIONES
Estas se originan frecuentemente en tres situaciones:
• L.C.C. mal tratada.
• L.C.C. insuficientemente tratada.
• L.C.C. no tratada.
En los primeros años, y en forma muy precoz, la necrosis aséptica es la complicación más
frecuente. Es de variado grado y va desde una necrosis mínima de la cabeza que se recupera
espontáneamente sin dejar secuela, hasta la necrosis grave (de los yesos de Lorenz), que deja
una cabeza más pequeña, deformada, irregular y que podría llevar al paciente a la artrosis en
forma precoz (a los 30 ó 40 años).
Los diferentes métodos de tratamiento dan diferentes porcentajes de necrosis. Cuando una
L.C.C. es insuficientemente tratada o no tratada, los pacientes quedan con subluxación o
luxación, lo que llevará posteriormente a que el paciente claudique, presente dolor y haga
artrosis precoz de la cadera.
Para evitar estas complicaciones es necesario recalcar finalmente dos aspectos de la L.C.C.:
• El diagnóstico debe ser precoz y el tratamiento adecuado. Con ello se obtienen
caderas anatómica, radiológica y funcionalmente normales.
• La evolución de la L.C.C. es progresiva. Si no se trata, la agravación es inevitable.
CUESTIONARIO
PALABRAS CLAVES