Tema: La Restauración Borbónica: concepto y características del sistema político de Cánovas del

Castillo: el turno de partidos y el caciquismo. La Constitución de 1876.

CONCEPTO

En el año 1874 se inició en España una nueva etapa conocida como el periodo de la Restauración que
concluyó en 1923 con el pronunciamiento militar que dio paso a la dictadura de Primo de Rivera. El
nombre de Restauración hace alusión a la recuperación de la monarquía borbónica en la figura de
Alfonso XII y abarcó su reinado, la regencia de Mª Cristina de Habsburgo(madre de Alfonso XIII) y una
parte del reinado de Alfonso XIII (hasta 1923) .
Se implantó un sistema político estable basado en el turnismo con el que se quería alcanzar la paz y dar
fin a la convulsa etapa revolucionaria del Sexenio Democrático. Los dos principales aspectos que
definieron esta etapa de la Restauración fueron :
1. El predominio de lo civil frente a lo militar.
2. El mantenimiento del orden sobre la libertad.

Los problemas y la inestabilidad de la I República favorecieron los apoyos a la vuelta de los Borbones,
este hecho fue aprovechado por el príncipe Alfonso que desde la academia militar en la que estudiaba
firmó el documento redactado por Cánovas del Castillo “Manifiesto de Sundhurst” en el que se definió
como monarca liberal comprometiéndose a respetar la dinámica parlamentaria, mostró su apertura
hacia las dos corrientes mayoritarias del momento, liberales y conservadores, defendió el respeto a la
confesionalidad católica y se puso al servicio de los españoles.
Posteriormente el pronunciamiento militar del general Martínez Campos el 29 de diciembre de 1874
permitió la proclamación de Alfonso XII como rey de España.

CARACTERÍSTICAS DEL SISTEMA POLÍTICO CANOVISTA

Antonio Cánovas del Castillo fue el arquitecto principal de una nueva etapa política, destacando por su
papel activo en el retorno de los Borbones. Durante este periodo, estableció un sistema político que
combinaba elementos liberales conservadores y oligárquicos. Su objetivo principal era abordar los
problemas que habían generado inestabilidad política durante el reinado de Isabel II, como los
pronunciamientos, la predominancia de los moderados y los enfrentamientos políticos.
Cánovas contó con el respaldo de políticos conservadores, hombres de negocios y militares de alta
graduación. Para lograr la tan ansiada estabilidad, implementó un sistema de alternancia política
conocido como el turnismo y favoreció el caciquismo como estrategia política.

Turno de partidos
Organizó un sistema bipartidista que trataba de:
- No excluir del poder a los progresistas (motivo principal de los pronunciamientos militares con
Isabel II)
- Evitar la llegada de los partidos republicanos al poder.
- Limitar la intromisión de los militares en la política pues ya no sería necesaria su intervención para
cambiar el partido en el gobierno.
Se turnaban dos partidos que eran:
- El Partido Liberal-Conservador fue fundado y liderado por Cánovas del Castillo hasta su asesinato en
1897. Surgió como una fusión de los alfonsinos, originados durante el Sexenio Democrático, y
representaba una combinación de antiguos moderados, unionistas, algunos sectores progresistas
y católicos. La ideología predominante del partido era la del liberalismo conservador.
- El Partido Liberal-Fusionista (o Partido Liberal), creado por Sagasta del que fue su figura central
hasta 1903. Estaba formado por progresistas, demócratas y republicanos moderados.
 Ideología

Partido Conservador Partido Liberal

Sufragio censitario Sufragio universal

Limitación de las reformas sociales Reformismo social

Recelo a la ampliación de las libertades Ampliación de los derechos y libertades

Estado confesional y apoyo a la Iglesia Sociedad laica y restricción de los privilegios de la

Iglesia

En materia económica defensores del En materia económica, defensores del libre cambio.
proteccionismo.

Aunque su ideología no era la misma, sí compartían:

- La defensa de la monarquía, la Constitución y la propiedad privada.
- Estado unitario y centralista.
Se trataba de unos partidos formados por las altas jerarquías sociales y económicas que se unían en
torno a líderes políticos y que contaban además con el apoyo de la prensa y de sectores locales, todos
ellos se movían por sus propios intereses.

Funcionamiento
Durante la época de la Restauración, cuando el partido en el poder se desgastaba o a solicitud de los
líderes políticos, se proponía al rey la formación de un nuevo gobierno para asegurar la alternancia de
partidos. Este enfoque tenía como objetivo asegurar la rotación de partidos políticos. Antes de las
elecciones, ambas tendencias ideológicas acordaban el resultado electoral para evitar el monopolio del
poder por parte de un solo partido, eliminando así la necesidad de la oposición de recurrir a
pronunciamientos militares para acceder al gobierno.

En este periodo, liberales y conservadores dominaron la vida política, excluyendo a partidos contrarios
como republicanos y carlistas. El proceso electoral comenzaba con el encasillado, donde el Gobierno
diseñaba listas de diputados destinados a ganar en cada distrito, asegurando el resultado electoral al
rellenar las casillas correspondientes. Estas listas eran presentadas a los caciques locales, quienes, a su
vez, informaban a sus "clientes" sobre cómo debían votar a cambio de favores electorales.

Otras prácticas electorales fraudulentas fueron:

Se destacan diversas prácticas electorales fraudulentas, entre las cuales se encuentra el caciquismo,
donde los caciques, generalmente grandes propietarios agrícolas, ejercían su autoridad social y
económica para influir en los electores de su zona. Estos caciques controlaban ayuntamientos y
comarcas a través de redes clientelares, siendo más prevalentes en áreas rurales que urbanas.
Además, se menciona la manipulación de resultados electorales mediante el "pucherazo", que incluía la
alteración de actas electorales, compra de votos, amenazas a electores, inserción de votos falsos y la
inclusión de personas fallecidas en las listas electorales.
En el periodo de 1876 a 1898, el turno de partidos operó regularmente, pero el desastre del 98 y el
excesivo protagonismo de líderes sobre el partido provocaron conflictos internos y la descomposición
progresiva del sistema electoral.
 CONSTITUCIÓN DE 1876
En enero de 1876 se celebraron elecciones a Cortes Constituyentes, la Constitución de 1876 tendría un
claro carácter conservador. Con la intención de favorecer la estabilidad y evitar los cambios cada vez que
subía al poder un nuevo partido, se redactó con cierta flexibilidad .

Aspectos esenciales de la Constitución de 1876:

Soberanía compartida entre el Rey y las Cortes.

Ampliación de los poderes del monarca: participaba en el poder legislativo, podía convocar, suspender y
cerrar las Cortes, nombraba a los ministros, tenía el mando supremo de las Fuerzas Armadas.

Poder legislativo: Cortes bicamerales (Congreso elegido por sufragio directo y el Senado formado por
miembros elegidos y la otra mitad por cargos vitalicios).

El sufragio se alternó según el gobierno. Los conservadores establecieron el voto censitario pero en 1890 los
liberales aprobaron el sufragio universal masculino.

Organización político-administrativa: de carácter centralizador, ayuntamientos y diputaciones quedaban bajo

el control del gobierno.

Papel de la Iglesia: el catolicismo era la religión oficial del Estado, pero permitía el culto a otras confesiones
en el ámbito privado. Se le dio a la Iglesia el control de la educación y se mantuvo el culto y al clero.

Derechos y libertades: se ampliaban en caso de gobernar los liberales y se restringían durante los gobiernos
conservadores.

Es la Constitución de mayor vigencia, se mantuvo de 1876 a 1923, 47 años.

Evolución política
Este primer periodo de la Restauración incluye dos momentos: Reinado de Alfonso XII (1874-1885) y la
Regencia de M.ª Cristina (1885-1902)

Reinado de Alfonso XII (1874-1885)

A) Gobierno de Cánovas del Castillo (Conservador) 1875-1880
- Se aprobó la Constitución de 1876.
- Se fundó la ILE (Instituto Libre de Enseñanza) por Francisco Giner de los Ríos 1876. Su objetivo era
un programa de renovación de la enseñanza secundaria y universitaria, basado en una educación
integral, activa y científica.
-Fin de la Tercera Guerra Carlista (1872-1876), este periodo fue marcado por la victoria del general
Martínez Campos, quien logró la rendición de los carlistas en Cataluña, Valencia y Aragón. En
1876, Alfonso XII entró triunfante en Pamplona, llevando a la huida de Carlos VII a Francia. Esta
victoria condujo a la abolición del sistema foral, que incluía los fueros vascos y la exención de
quintas e impuestos. En su lugar, se instauró un sistema de conciertos económicos, otorgando
autonomía fiscal a estos territorios mediante el pago anual acordado a la administración central,
recaudado directamente por las diputaciones provinciales.
- En 1878, la Guerra de los Diez Años en Cuba finalizó con el acuerdo de la "Paz de Zanjón" gracias al
general Martínez Campos, quien asumió el mando en 1876. Este pacto incluyó una amplia
amnistía, la abolición de la esclavitud y promesas de reformas políticas y administrativas, como la
representación de Cuba en las Cortes españolas. A pesar de estas expectativas, el incumplimiento
de algunos compromisos condujo al estallido de la "Guerra Chiquita" en 1879-1880, liderada por
el general Calixto García.
- Fundación del PSOE 1879. (pregunta corta)
 B) Gobierno de Sagasta (Liberal) 1881-83
- Levantamiento republicano federalista encabezado por Ruiz Zorrilla.
- Escisión del partido liberal, surge el partido “Izquierda Dinástica”.
C) Gobierno de Cánovas del Castillo (Conservador) 1884-1885
- Incorporación en el gobierno de Cánovas de Alejandro Pidal y Mon dirigente de la “Unión Católica”.
- En 1885 murió Alfonso XII y se firmó el Pacto de El Pardo 24 noviembre 1885 por el que Cánovas y
Sagasta se comprometieron a mantener el sistema de la Restauración.
1. Apoyar la regencia de M.ª Cristina Habsburgo.
2. Garantizar la permanencia de la monarquía
3. Seguir con el turno de partidos.

Tema: La crisis de 1898: definición breve y contextualización en la Restauración Borbónica. La Guerra

de Cuba (1895-98) y sus consecuencias.

A finales del siglo XIX, durante la regencia de Mª Cristina de Habsburgo (1885-1902), el sistema de turno
de partidos establecido por Cánovas enfrentó una profunda crisis, principalmente desencadenada por la
pérdida en 1898 de las últimas colonias de Cuba, Puerto Rico y Filipinas. Este suceso, denominado
"Desastre del 98", resultó en una significativa disminución del peso político de España a nivel
internacional y generó una humillación para la sociedad. La Guerra de Cuba, que abarcó distintas etapas,
desde la Guerra de los Diez Años hasta la Guerra Chiquita, culminó en la tercera y última contienda
conocida como la Guerra de la Independencia (1895-1898). Este acontecimiento provocó una profunda
crisis interna en España, generando un fuerte pesimismo entre los intelectuales y despertando el deseo
de iniciar una regeneración en todos los ámbitos del país.

Las causas que provocaron esta guerra fueron:

- Estos territorios aunque eran españoles recibían un trato colonial pues no tenían representantes
en las Cortes españolas lo que les impedía participar en la votación de leyes que después les
afectaban.
- La principal riqueza de la isla residía en una agricultura de plantación (café, tabaco y caña de
azúcar) que beneficiaba especialmente al Estado y a grandes empresas españolas.
- Su actividad comercial estaba controlada por el gobierno español que obligaba a Cuba a comprar
los productos españoles a unos precios elevados y además se les ponían impedimentos para la
exportación hacia otros territorios, “mercados cautivos”.
- Tras la Guerra Grande se había firmado la “Paz de Zanjón” 1878 y se había acordado que los
cubanos tendrían representantes en las Cortes españolas, la abolición de la esclavitud y en
general la toma de decisiones que facilitasen la progresiva autonomía cubana, sin embargo
pasado un tiempo sólo se cumplió con la abolición de la esclavitud, el resto de acuerdos
quedaron incumplidos.
- El descontento de la población se fue acrecentando en 1891 cuando el gobierno español impuso
en Cuba un impuesto a la importación de productos que no procediesen de España “Arancel
Cánovas”. Esta medida afectó negativamente a las relaciones comerciales que tenían los Estados
Unidos con Cuba.
La isla era para España una importante fuente de ingresos por lo que no había ninguna intención por
parte de las clases dirigentes de ceder ante las peticiones de los autonomistas cubanos.
La Tercera Guerra de Cuba, también conocida como la Guerra de la Independencia (1895-1898), tuvo
lugar durante la regencia de María Cristina y se inició en 1895 en Baire, al sureste de la isla, con el "Grito
de Baire" liderado por José Martí, fundador del Partido Revolucionario Cubano. La insurrección se
extendió rápidamente por toda la isla.
En un principio, España intentó sofocar la revuelta con armas, pero el general Martínez Campos buscó
combinar el ataque con el diálogo. Ante el avance de los insurrectos, se entregó el mando al general
Weyler, quien actuó con contundencia, castigando a los rebeldes y aislando a los campesinos,
provocando una crisis alimentaria y protestas internacionales.

Tras el asesinato de Cánovas en 1897, Sagasta asumió el gobierno e implementó medidas conciliadoras,
como destituir al general Weyler y ofrecer autonomía política a Cuba, sufragio universal masculino,
igualdad de derechos y autonomía arancelaria. Sin embargo, estas medidas llegaron tarde, y los
insurrectos, respaldados por los Estados Unidos, no las aceptaron.

Los eventos se precipitaron con la explosión del acorazado Maine en el puerto de La Habana. Aunque no
había pruebas concluyentes, Estados Unidos culpó a España, lo que sirvió como pretexto para intervenir
directamente en la guerra. España se negó al ultimátum estadounidense, desencadenando la guerra
entre ambas naciones.

La flota estadounidense resultó crucial para los rebeldes, llevando a una clara derrota de España en
Santiago de Cuba. Simultáneamente, en 1896, se desató una insurrección en Filipinas, con una fuerte
represión dirigida por el capitán general Polavieja. Tras la pacificación temporal bajo el mando de
Fernando Primo de Rivera, la entrada de Estados Unidos en el conflicto condujo a la derrota española en
Cavite, Filipinas.

Consecuencias:
- Se firmó el Tratado de París en 1898 que dio fin a la guerra y España perdió Cuba, Puerto Rico y
Filipinas , además los Estados Unidos tomaron la isla de Guam en el Pacífico y en 1899 España
vendió a Alemania los restos de su imperio colonial (los archipiélagos de Palaos, Marianas y
Carolinas).
- Una sensación de humillación entre la población española que llevó a calificar la derrota como
“Desastre del 98”.
- El elevado número de pérdidas humanas, especialmente por causa de las enfermedades
tropicales.
- La pérdida de importante ingresos procedentes de las colonias y de uno de nuestros mercados
más importantes.
- La derrota era una clara muestra del fin del imperio colonial español.
- La exigencia por parte de un importante grupo de intelectuales de la necesidad de llevar a cabo la
regeneración y modernización de España.
- Una dura crítica al sistema del turnismo de partidos y sus malas prácticas. - El desarrollo de los
movimientos nacionalistas, especialmente en Cataluña y País Vasco que defendían la autonomía
abogando por la descentralización.