LEVADURAS
LEVADURAS
LEVADURAS
Las levaduras son hongos unicelulares cuyo nombre científico es Saccharomyces cerevisiae, su
particularidad es alimentarse de azúcares y dar como material de desecho, en determinadas
condiciones, dióxido de carbono (gas) y alcohol. Esta habilidad de las levaduras se aprovecha
para la fabricación de cerveza, vino y pan.
Como todos los microorganismos, las levaduras se alimentan del medio para dividirse y generar
nuevas levaduras que a su vez, se dividirán y así sucesivamente.
En el caso de la fabricación del vino, lo que se aprovecha es el alcohol generado y no el dióxido
de carbono. Por eso durante la fermentación (así se llama el proceso de alimentación de las
levaduras, por el cual se transforma el azúcar en dióxido de carbono y alcohol) los tanques se
dejan destapados y se remueven para que el dióxido de carbono vaya escapándose de líquido
que luego será vino.
En el caso de la cerveza, una vez producida la cantidad deseada de alcohol y dióxido de carbono,
las levaduras se separan de la cerveza formada para que no se sigan alimentando ni
reproduciendo (así se limitan tanto la graduación alcohólica como la cantidad de gas del producto).
Pero para la fabricación del pan, el producto de la fermentación que nos interesa es el dióxido de
carbono, quien hará que la masa se hinche y genere los alveolos que luego encontraremos en la
miga. De esta forma, si les damos a las levaduras las condiciones adecuadas durante la
elaboración, la miga será esponjosa y liviana. El gas puede quedar atrapado gracias a la red de
gluten que se crea con el amasado (por este motivo las personas celiacas, que no pueden comer
gluten, tienen dificultades para encontrar panes esponjosos).
En el pan, el alcohol obtenido durante la fermentación, se disuelve en el agua de la masa y se
evapora durante la cocción. Por eso los panes no tienen sabor alcohólico pero la masa fermentada
sí.
Para que las levaduras puedan multiplicarse se deben dar las condiciones adecuadas en la masa.
Como todo microorganismo, necesitan agua (en la masa hay suficiente) y alimento. Pero por otra
parte, la velocidad y el tipo de reproducción se verán afectados por la temperatura, la cantidad de
sal y de azúcar que contenga el medio, la acidez y la presencia de oxígeno. Todos estos factores
entraran en juego durante la fermentación, ayudando o impidiendo la reproducción, y por lo tanto,
regulando la cantidad de dióxido de carbono que se genere.
Hemos dicho al principio que las levaduras se alimentan de azúcares (por lo general hidratos de
carbono) para crecer y multiplicarse. Sin embargo, no todos los azúcares les sirven como alimento.
Las levaduras pueden alimentarse de sacarosa (azúcar común), maltosa (azúcar compuesta por
la unión de dos glucosas), glucosa y fructosa. El origen de estos azucares dependerá de la receta,
lo importante es que debemos alimentar de alguna manera a las levaduras para que se
multipliquen y realicen el levado. La proporción de azúcares libres en la harina es muy escasa, sin
embargo existen enzimas que son capaces de romper el almidón separándolo en maltosa y
glucosa. Estas enzimas pueden comenzar a actuar una vez que se ha mezclado la harina con el
agua, aunque es un proceso bastante lento. Frente a esta realidad tenemos dos alternativas:
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Al inicio agregar “alimento para la levadura” directamente a la masa, como un poco de azúcar
de mesa o extracto de malta.
Realizar una mezcla de harina y un poco de agua un poco antes y dar tiempo a que las enzimas
se hidraten, se activen y se pongan en contacto con el almidón dentro de la mezcla.
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una fermentación tan larga es desarrollar un sabor y aroma más complejos y exquisitos a partir del
trigo.
En cambio, el método directo consiste en agregar la levadura en el momento que se está
haciendo el pan, junto al resto de ingredientes.
Biga
Este prefermento, más bien seco (bajo en hidratación) es el que se utiliza, por ejemplo, para hacer
ciabatta.
Mezclar 200 g de harina con 100 g de agua
Incorporar 0,5 g de levadura.
Mezclar vigorosamente
Dejar fermentar tapado durante 12 hs a temperatura ambiente
Al principio se verá una preparación dura y grumosa, pero luego del descanso será suave y
esponjosa.
Poolish
Este prefermento es más alto en hidratación. Tiene una consistencia mucho más hidratada y
menos “chiclosa” que la biga.
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Mezclar 200 g de harina con 200 g de agua y 1 g de levadura
Mezclar vigorosamente
Tapar y dejar descansar 12 hs a temperatura ambiente
Masa madre
La masa madre es un fermento natural que se usa desde hace siglos para elaborar pan.
Al mezclar harina y agua logramos que las levaduras y las bacterias ácido lácticas que se
encuentran en el ambiente, en la harina, en el agua, en nuestras manos y también en nuestra
cocina, comiencen a multiplicarse.
Esta combinación de levaduras y bacterias hace que nuestro pan leve, tenga mejor sabor, cuente
con una miga aireada y tenga una increíble corteza.
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¿Qué necesito para elaborarla?
Harina
Agua
Recipiente transparente con tapa
Tiempo
Preparación
Opcionales:
Se puede utilizar una cucharada de harina de centeno para que le dé un sabor más complejo
al producto terminado. Además, ayuda a que la masa madre fermente más rápidamente.
Se puede utilizar agua previamente fermentada con frutas, pasas de uva, etc. (colocar las
frutas y el agua en un recipiente a fermentar de 24 a 48 hs, a 25°C).
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Día 2: Hoy se realizará el primer refresco, es decir, alimentar por primera vez la masa madre.
Agregar una cucharada de harina y otra de agua, así se alimentarán las bacterias y los
microorganismos existentes dentro del frasco, para que la fermentación no decaiga.
Día 3: En este día, es posible ver alguna actividad (burbujas que hagan que nuestra masa
madre crezca) y la textura es más cremosa, aireada y con un perfume impresionante a
levaduras.
En este momento, se desechará una pequeña parte del fermento y se hará un nuevo refresco.
Revolver y dejar descansar hasta el otro día a 25°C.
¿Cómo nos damos cuenta si la masa madre está lista para ser utilizada?
Otra prueba es la flotabilidad. Poner una cucharada de masa madre dentro de un vaso con agua
y, si flota, es otra señal de que la masa madre está lista para ser utilizada.
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Si no la voy a utilizar diariamente... ¿Dónde la guardo?
Si, simplemente se deberá ajustar algunas cantidades en los ingredientes, ya que la característica
principal de los panes elaborados con masa madre es la cantidad de agua que se usa en la
preparación.
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¿Cuáles son los beneficios de utilizar masa madre para elaborar nuestros panes?
Al margen del sabor y la textura que se logra utilizando masa madre en la preparación de los
panes, también a nivel nutricional hay una gran ventaja. Los panes fermentados naturalmente con
masa madre, a diferencia de los panes que son leudados con la levadura industrial, ya están
fermentados. De esta forma facilita al proceso de digestión y asimilación de nutrientes.
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