TEMA #3 Derecho Agrario
TEMA #3 Derecho Agrario
TEMA #3 Derecho Agrario
De esta manera una Reforma Agraria deberá ser el resultado de una política agraria real y con
objetivos claros, no se pueden dar improvisaciones y además una reforma agraria tiene como
protagonistas a estrategas agrarios y al pueblo en su conjunto y como escenario el área rural.
Ahora bien, podemos señalar los objetivos de toda Reforma Agraria, teniendo como base, el
hecho de tener una vivencia, para revolucionar la producción y la productividad del suelo, es decir
enriquecerla mediante fertilizantes, químicos naturales, hacerla descansar (purumas). Además de
contar con educación, asistencia técnica, asistencia social, asistencia crediticia, destacando de esta
manera que no sólo es importante el reparto de tierras. En consecuencia, el objetivo sustancial será
elevar la calidad y el nivel de vida de los trabajadores del agro.
Encontramos personajes como Mao Tse Tung en la China Continental, que a la vez bebió de
las vertientes doctrinales del Marxismo, Leninismo y Stalinismo.
En Sudamérica encontramos a Roberto Gavaldón, venezolano, figura principal de la reforma
agraria de su país, quien señala: “La transformación de la estructura agraria se forma en el
fraccionamiento de latifundios y la entrega de pequeñas propiedades familiares a favor de los
campesinos”.
Ramón Fernández, enseña que “una reforma agraria significa combatir “las manos muertas”
nobiliarias y eclesiásticas, que solo usufructúan la tierra y que el efecto más importante radica en la
ruptura de una estructura económica social anquilosada para favorecer la capilaridad social y permitir
la dedicación de energías y recursos para diversificar la economía”.
Jacques Chochol, supone que sólo la socialización de la tierra es el elemento básico para una
Reforma Agraria.
a) Tipo Zarista, que libera a los siervos para convertirlos en arrendatarios, si bien desaparece la
sujeción personal, subsiste y se ahonda la explotación feudal.
b) Tipo Prusiano, que consiste en la abolición de la servidumbre, convierten los latifundios
feudales en latifundios burgueses, o sea en grandes empresas capitalistas.
c) Tipo Americano, donde aparece la propiedad familiar (Homesteid) y desaparece el latifundio.
En Punta del Este, Uruguay, el 1961, se aprobó un documento, por 19 países latinoamericanos,
donde sus dignatarios se comprometen a impulsar programas de Reforma Agraria Integral orientada a
la transformación de las estructuras, eliminando los factores perturbatorios, como son el latifundio y el
minifundio.
Entre los bolivianos ideólogos de la Reforma Agraria Integral, lo tenemos a Mario Velarde
Dorado, que tuvo brillantes intervenciones en diversos foros internacionales, identificando lo que es
una Reforma Agraria Integral. Señala que: “Es un instrumento jurídico, de desarrollo económico-social-
político y técnico, que comprende no sólo la división física de la tierra, sino también los elementos
técnico económicos y sociales que permiten este desarrollo integral y conducen a una mejor y mayor
producción del agro, cuya finalidad es el bienestar del campesino y la comunidad”.
REFORMA AGRARIA INTEGRAL
Es un concepto moderno, científico y sistémico, de Reforma Agraria, deviene del Desarrollo Integral,
cuya fórmula permite el desarrollo de los pueblos, basando su proyección histórica en la explotación
eficaz de la tierra. Sus elementos sistémicos constitutivos son: lo político, lo económico, lo social, lo
tecnológico y lo jurídico.
Además, hacemos hincapié que ninguna Reforma Agraria puede permanecer estática, por el contrario,
es dinámica, su renovación es continua, dada su adecuación a la realidad que es siempre cambiante.
Este significativo hecho nos permite deducir que una Reforma Agraria necesita periódicos reajustes,
programas y proyectos, tomando en cuenta las requisitorias sectoriales.
Lucio Mendieta y Núñez señala que la Nación, como grupo étnico o conjunto de habitantes de
un país no puede ser dueña de tierras y aguas porque no tiene personalidad jurídica y que ésta sólo
se adquiere cuando la Nación está constituida en Estado o forma parte de un Estado.
Posteriormente, algunos partidos como el PIR, FSB y MNR hicieron planteamientos a favor de
una reforma agraria reconociendo una propiedad comunitaria inembargable, imprescriptible e
inalienable y la expropiación por el Estado de la propiedad rural improductiva.
Con el triunfo de la guerra de la independencia la situación del indio no mejoró, las comunidades
estaban peor que antes y la propiedad absolutista daba mayor amplitud a la explotación.
De ahí en adelante se produce una cadena interminable de abusos y exacciones a los indios,
se usurpan las tierras comunarias, las convierten en propiedades particulares y a los comunarios en
colonos de hacienda.
En 1937, FSB afirmaba que “el indio es la raíz de nuestra nacionalidad” y propugnaba un plan
de Reforma Agraria de liberación económica del indio, un plan de educación y liberación cultural,
habilitándolo en el trabajo técnico. El PIR propugnó desde su fundación la reforma agraria expropiando
el latifundio y la servidumbre, otorgando tierras a los campesinos y estableciendo granjas colectivas y
cooperativas de tipo socialista. En 1944, el MNR propugnaba la protección del Estado al campesino y
a la pequeña propiedad, la expropiación del latifundio improductivo, así como el reconocimiento de la
comunidad campesina, etc.
En el proyecto de la reforma Agraria, confluyeron los colonos de las tierras que trabajaban en
condición de siervos, pongos, sayañeros, arrimantes, pegujaleros, agregados, forasteros y otros sin
derecho a la tierra que trabajan para el patrón, indígenas que fueron despojados de sus tierras
comunales; unos pretendían liberarse de la servidumbre, otros la restitución de sus tierras y los demás
a liberar la fuerzas productivas del país.
- El Art. 75 del Decreto Ley Nº 3464 señala “los campesinos que hubieses sido sometidos al régimen
de trabajo y explotación feudal (en su condición de siervos, obligados, arrimantes, pegujaleros,
agregados forasteros, y otros) son declarados propietarios de las parcelas que las poseen y trabajan”.
El argumento central es, abolir la servidumbre campesina, poner término al régimen feudal de la tierra
y proporcionar tierra labrantía a los campesinos que no la posean.
- Restituir a las comunidades indígenas las tierras que les fueron usurpadas y cooperar en la
modernización de sus cultivos; respetando y aprovechando en lo posible, sus tradiciones colectivistas.
- Conservar los recursos naturales del territorio, adoptando las medidas técnicas científicas
indispensables y ampliar el mercado interno permitiendo la industrialización del país.
- Promover corrientes de migración interna de la población rural, ahora excesivamente concentrada,
en la zona interandina, con objeto de obtener racional distribución humana, afirmar la unidad nacional
y vertebrar económicamente al oriente con el occidente de Bolivia.
Los límites de la propiedad agraria, sin ningún conocimiento técnico son definidos
arbitrariamente a ojo de buen cubero, la productividad de las tierras de occidente como del oriente no
son los mismos teniendo en cuenta las características de clima y acceso a los mercados, de manera
que la renta fundaría y la renta de trabajo que la reforma agraria quería eliminar con la prohibición formal
del latifundio se mantiene incólume.
Las grandes haciendas ganaderas, mantiene relaciones de servidumbre a los vaqueros bajo
régimen de aparcería mucho más desventajoso que el de la agricultura y el patrón no realiza ninguna
inversión pero es más rico que los antiguos latifundistas.
Finalmente debemos decir, que la reforma agraria no pudo alcanzar sus objetivos, la crisis de la
institucionalidad agraria implantada como efecto de la revolución nacional del 52, resultó ser el producto
de una estructura administrativa inconexa, de un conjunto de prácticas ineficientes, con procedimientos
lentos y poco transparentes, así como la corrupción evidente de sus funcionarios, desde la más alta
cúpula hasta el último funcionario de la institución.