Clase2 Conflicto - Primer Acto

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ETER - ESCUELA DE COMUNICACIÓN

EDUCACIÓN A DISTANCIA

INTRODUCCIÓN
INTRODUCCIÓN
AL
AL GUION
GUION

CLASE 2

TÉCNICO SUPERIOR EN GUION INTEGRAL


PARA MEDIOS AUDIOVISUALES

*MATERIAL PRODUCIDOO POR


ETER - ESCUELA DE COMUNICACIÓN*
CONFLICTO

Un texto dramático puede ocurrir en cualquier espacio y con cualquier


clase de personajes. Lo único que nunca puede faltar es un CONFLICTO.

El CONFLICTO es el enfrentamiento entre fuerzas, entendiendo


que una de esas fuerzas será nuestro personaje o personajes
PROTAGONISTA/S, y la otra todo lo que se oponga a que
nuestro protagonista obtenga aquello que desea. Y es que, en
rigor, cualquier historia cuenta lo que un personaje debe hacer
para obtener lo que desea. Aquello que debe hacer es
enfrentar a todo lo que se le opone. Este enfrentamiento es el
CONFLICTO principal de cualquier historia.

El hombre siempre tiene contradicciones y deseos que le cuesta alcanzar o


no puede. Esta característica del ser humano es la que permite la existencia
del drama. No hay drama, obra de teatro ni película sin conflicto.

Desde el corto del conejito al Padrino, pasando por Hamlet, Edipo, Toy Story
y cualquier capítulo de cualquier serie que vean: siempre hay conflicto.

Cuanto más conflictos haya, cuanto más extensa sea la RED CONFLICTUAL,
más compleja será una obra. Lo cual no quiere decir que sea mejor, claro.
(Al final de la clase dejo un video en el que vamos a analizar la RED
CONFLICTUAL en el primer acto de TOY STORY.)

Click para ver el video.

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Es cierto que en la vida hay momentos –dicen– carentes de conflicto. Pero
no son esos los momentos que convertimos en drama. El drama siempre es
un recorte de una gran novela imaginaria.

TIPOS DE CONFLICTO
Hay diferentes tipos de conflicto, que vamos a clasificar sin entrar en
categorías demasiado complicadas: el conflicto externo y el conflicto
interno. Como sus nombres dejan en claro, el “conflicto externo” es el que
el personaje tiene con otra fuerza que está fuera de él. Puede ser una fuerza
humana: otro personaje, y este es el conflicto más común. Un personaje
quiere algo y otro se le interpone.

También puede ser que nuestro personaje tenga un conflicto con un grupo
de personas e incluso con una institución. Y también puede ser que tenga
un conflicto con la naturaleza (el cine catástrofe sería un perfecto ejemplo)
o con otras entidades indefinibles: extraterrestres, monstruos, almas en
pena, etc. Pero en cualquiera de estos casos siempre estamos hablando de
CONFLICTOS EXTERNOS.

Ahora que NETFLIX volvió a subir la película


TIBURÓN, obra maestra del guion, allí puede verse
cómo el Protagonista debe enfrentarse al líder
político de la comunidad, a la comunidad toda y
finalmente al Tiburón gigante. Es decir, debe sortear
uno a uno los diferentes tipos de conflictos externos
que un personaje debe enfrentar. Lo que no cambia
nunca es el objetivo del protagonista: reestablecer el
orden, el equilibrio. También podríamos decir que
toda historia se trata un poco de eso: un equilibrio
que se rompe por la aparición de algo inesperado y
un héroe que debe restaurarlo. Aquello “inesperado”
tiene nombre en la estructura dramática, pero no
nos adelantemos.

El otro tipo de conflicto con el que solemos encontrarnos es el


CONFLICTO INTERIOR. Allí el personaje está enfrentado consigo mismo:
con sus prejuicios, con sus miedos, con sus deseos inconscientes, etc. Toda
vez que un personaje debe tomar una decisión (y como ya vimos: un
personaje activo debe hacerlo todo el tiempo) está poniendo en juego algo

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del orden del CONFLICTO INTERIOR. Como señala Robert McKee, las
decisiones interesantes dramáticamente son las que llamamos DILEMAS.
Cualquiera puede elegir entre lo bueno y lo malo, lo lindo o lo feo. Un
DILEMA es aquella decisión en la que siempre se pierde algo. Por eso resulta
clave para contar cualquier historia.
Robert McKee

El genial dramaturgo norteamericano Neil Simon decía: “Pienso en obras


temáticas, pero no creo que las escriba. Nada toma forma verdaderamente
hasta que no es específico en cuanto al protagonista y al dilema en el que
se encuentra. Dilema es la palabra clave. Siempre es un dilema, no una
situación. Para decir la verdad, nunca sé cuál es el tema de la obra hasta
que la escribo y los críticos me lo dicen.” (Entrevista de James Lipton de
1992 en el Paris Review)

Neil Simon

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Además de llamar la atención sobre la cuestión del DILEMA, Simon
introduce aquí otra palabra clave: lo ESPECÍFICO. Lo opone a lo temático.
No podemos escribir un guion sin pensar en un personaje específico, en un
conflicto específico, en un mundo específico. Por el contrario, pensar
nuestros guiones desde el tema que queremos tocar nos vuelve
GENÉRICOS, que siempre es poco interesante.

CONFLICTO MATRIZ

El conflicto INTERNO y el conflicto EXTERNO no son formas


excluyentes. Y está muy bien que no lo sean: en un guion hay varios
conflictos y de diverso tipo. Sin embargo, uno solo es el CONFLICTO MATRIZ,
es decir: el que hace que la acción avance. Puede no ser el más interesante,
profundo o el que da cuenta de lo que queremos contar. Pero es el que
permite que la trama se mueva.

Por ejemplo, en PRESTO el conejo tiene un deseo concreto: comerse una


zanahoria. Hace un intento por obtenerla. Pero el Mago se lo impide. El
conflicto principal que mueve la trama es la oposición entre el conejo y un
agente externo que se opone a su deseo: el mago. La trama no es otra cosa
que la serie de intentos del conejo por comer la zanahoria. O por derrotar al
hombre que se lo impide. Sin embargo, subyace otro conflicto de tipo
vincular que es el que termina produciendo la modificación de los
personajes. Pero para que se resuelva, en este DISEÑO CLÁSICO de guion,
hace falta el otro conflicto moviendo la trama. Y dentro del DISEÑO
CLÁSICO ese conflicto matriz es siempre un CONFLICTO EXTERNO.

Vayamos a un ejemplo más “prestigioso”: EL PADRINO (que también ha


vuelto a Netflix y que está en muchas otras plataformas. Y que toda persona
de bien debe ver).
Película "El Padrino"

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Sin dudas que en EL PADRINO el conflicto más profundo y que más
modificará al protagonista, Michael Corleone, es su conflicto interior entre lo
que desea ser (o más bien, lo que desea no ser) y el lugar en el que las
circunstancias lo van poniendo. Si se quiere profundizar más hasta
podríamos decir que es el conflicto entre sus principios (NO QUIERO
PERTENCER A ESTO) y su deseo inconsciente (QUIERO SER MI PADRE). Pero
no es este el conflicto que mueve la trama. El CONFLICTO que mueve la
trama es el enfrentamiento de la familia Corleone con otras familias de la
mafia y la lucha por la hegemonía. Ese es el conflicto que trae a Michael de
nuevo al seno de su familia y el que lo someterá a las diferentes peripecias
(en términos de Aristóteles).

DOS ESCENAS, MUCHOS CONFLICTOS


A continuación los invito a ver dos escenas de “Cuenta conmigo”, una
película del director Rob Reiner del año 1986.

Dentro de lo que se ha llamado “Género de maduración”, es decir,


películas que cuentan el fin de la infancia y que suelen ocurrir durante las
vacaciones de verano de alumnos de la preparatoria en Estados Unidos,
CUENTA CONMIGO narra la historia de un grupo de amigos que,
compitiendo con un grupo de jóvenes malos (hoy llamaríamos acosadores)
desea ir a encontrar un cadáver que supuestamente hay en el bosque.
Veamos la primera escena (y perdonen el doblaje español, por favor):

Click para ver el video.

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Estos amigos, como grupo, tienen un conflicto principal: llegar a encontrar
el cadáver antes que los chicos malos. Ese es el CONFLICTO MATRIZ, el que
los pone en movimiento. Y con respecto a él, actúan como un personaje
colectivo (ya hablaremos mejor de esto en la próxima clase). Pero a la vez
ellos tienen conflictos entre ellos, conflictos que tienen que ver con sus
diferentes personalidades y (en algunos casos) hasta con los conflictos
internos de cada uno. Y todos esos conflictos son pulsados por un conflicto
EXTERNO NO HUMANO: el tren.

Veamos la segunda escena:

Click para ver el video.

En su libro EL GUION McKee dice que el


guionista siempre debe ver la manera de crearle
más y más problemas a sus personajes. Y esto
incluye muchas veces llevarlos al borde de la
muerte. El pasaje entre la primera escena y la
que vimos recién no es otra cosa que el ejemplo
más gráfico de ese principio: si la vía de un tren
es un peligro, pues bien, pongámosla a muchos
metros de altura.

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ÚLTIMOS APUNTES SOBR E E L CONFLICTO

En el DISEÑO CLÁSICO el CONFLICTO MATRIZ empieza y termina ante los


ojos del espectador. Empieza con la llegada de aquel acontecimiento que –
como dijimos antes– viene a romper el equilibrio en el que el personaje vive.
Y termina con la resolución que llega inmediatamente después del CLÍMAX,
que es el momento de mayor tensión de nuestro Guion. Ya veremos cómo
se organiza esta sucesión cuando abordemos la estructura dramática. Si la
película termina sin que el conflicto central se haya resuelto ante los ojos
del espectador, hablamos de un final ABIERTO: un fuerte desplazamiento
con respecto al diseño clásico.

Pero más allá de todas estas definiciones y distinciones, hay algo que
debería quedar grabado a la hora de pensar cualquier incursión en la
escritura dramática:

UN CONFLICTO NO ES UN PROBLEMA
Y esto quiere decir que un problema no alcanza a funcionar
como conflicto si no empuja a nuestro personaje a tomar una
serie de decisiones que se traduzcan en acciones, que no son
otra cosa que intentos por resolverlo. Porque la principal
función del CONFLICTO es la de organizar la acción.

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