Resumen Quimica Completo
Resumen Quimica Completo
Resumen Quimica Completo
Propiedades intensivas
No dependen de la cantidad de materia analizada sino del tipo de materia. Son las que se refieren a sus
características particulares. Además, no son aditivas, es decir, si se determina la temperatura del agua
contenida en dos vasos y luego se juntan los líquidos en un tercer recipiente, cuando se registre la
temperatura, esta no será la suma de las dos anteriores.
En este grupo de propiedades incluimos tanto las físicas como las químicas. Entre ellas podemos
mencionar: densidad, solubilidad, estados de agregación, temperatura, la reacción con sustancias acidas, la
reacción con el oxígeno, dureza, entre otras.
Propiedades extensivas
Dependen de la cantidad de materia analizada. Estas propiedades son aditivas, es decir, si en una mano
tenemos 40 gramos de arena y en la otra tenemos 20 gramos de arena, la masa total de arena en nuestras
manos será de 60 gramos.
Entre ellas podemos mencionar: masa, volumen, calor acumulado, entre otras.
Hay propiedades que pueden cambiar en una misma muestra, tal como la presión, la temperatura, el
estado de reposo o de movimiento, la carga eléctrica, etc., y se designan como condiciones. La presión y la
temperatura son cualidades muy importantes, pues siempre están afectando a los cuerpos, determinando
las propiedades de los mismos.
Transformaciones de la materia
Los cambios que experimentan las sustancias son de dos clases, físicos y químicos.
Un cambio físico modifica algunas propiedades de la sustancia, pero no hay motivos para suponer que se
ha formado una nueva. Además, son observables y pueden medirse.
Por el contrario, en los cambios químicos o reacciones, tiene lugar una modificación profunda de todas las
propiedades y composición de la materia, lo que obliga a suponer que se ha formado una nueva sustancia.
No existe una delimitación absoluta entre estas dos clases de transformaciones, pues hay diversos procesos
que adquieren una significación intermedia.
Si se electriza un pedazo de cobre, se imanta un trozo de hierro, se calienta una cierta masa de azufre o se
comprime un volumen determinado de cloro, las propiedades físicas de estas sustancias varían tan sólo en
lo que respecta a la modificación producida y en una extensión que depende de ella, pero las propiedades
físicas de estas substancias permanecen inalteradas; ha tenido lugar en cada caso un fenómeno físico.
Si se llega a fundir el pedazo de azufre o si el cloro se licua, las propiedades físicas cambian totalmente pero
el comportamiento químico del azufre fundido o el del cloro líquido es el mismo que el del azufre sólido o
el del cloro gaseoso, por lo que el proceso de fusión o el de licuación es también un cambio físico que
afecta únicamente al estado de agregación de la sustancia correspondiente.
1
En cambio, si se calienta óxido mercúrico, polvo rojo, en un tubo de ensayo, se desprende oxígeno y en la
parte superior del tubo se condensa mercurio en forma de minúsculas gotas; ha tenido lugar un cambio
químico.
SISTEMAS MATERIALES
2
Mezclas
Una mezcla es homogénea, si es completamente uniforme, esto es, que sus propiedades físicas y
composición sean las mismas en cualquier punto de la misma.
Es heterogénea, si está formada por dos o más porciones diferentes, separadas por superficies definidas a
través de las cuales las propiedades cambian bruscamente.
Fase
Un material heterogéneo es una mezcla y cada porción homogénea de la misma constituye, desde el punto
de vista químico, una fase. Cada fase de una mezcla presenta sus propiedades características y, en general,
pueden separarse unas de otras por medios mecánicos.
Sistema homogéneo
Los valores de las propiedades intensivas se mantienen constantes en todos los puntos del sistema, en las
mismas condiciones de presión y temperatura. En estos sistemas no es posible diferenciar fases, no hay
superficie de cambio. Pueden clasificarse en sustancias puras y mezclas o soluciones.
Sistema heterogéneo
Las propiedades intensivas varían de un punto a otro. En ellos es posible diferenciar fases, es decir,
porciones en las cuales las propiedades de intensivas son constantes. Las fases están separadas entre sí por
interfaces.
Pueden estar formadas por un solo componente, como una sustancia en distintos estados de agregación, o
por dos o más sustancias físicamente diferentes y distribuidas en forma desigual. Sus componentes pueden
separarse por métodos mecánicos.
Sistema inhomogéneo
Es aquel en el cual los valores de las propiedades intensivas son distintos en diferentes partes del sistema,
pero éstas partes no se encuentran separadas unas de otras por superficies de discontinuidad bien
definidas. Ejemplos: aire, agua con agregado de una solución coloreada y sin agitar.
Sustancias puras:
Las sustancias puras o cuerpos puros son aquellos que presentan composición y propiedades constantes en
cualquier parte de una muestra determinada. Pueden encontrarse como: Sustancia pura elemental (o
elementos) o sustancia pura compuesta (o compuesto).
Un coloide es la suspensión de partículas pequeñas en un medio. Estas partículas pueden ser sólidas,
liquidas o gaseosas. El medio donde están suspendidas también puede estar en cualquiera de las tres fases.
Todos estamos en contacto con coloides a diario, sin saberlo. Por ejemplo: Si las partículas son sólidas y el
medio gaseoso, estamos en presencia de humo, como el de los cigarrillos. Si son liquidas en gas, es niebla o
un spray. Una emulsión es un coloide liquido-liquido, como la mayonesa.
¿Pero qué diferencia hay con una solución? Una solución es una suspensión de partículas en un medio.
Parece la misma definición que la de un coloide, pero no lo es: la diferencia es el tamaño de las partículas
suspendidas: en un caso (la solución) son moléculas, del orden de tamaño de diezmillonésimas de
milímetro. En el otro, las partículas son cientos o miles de veces mayores.
Dispersiones groseras
Las dispersiones groseras se componen de partículas con un diámetro de más de 1000 Å. Son partículas
invisibles a simple vista, pero visibles al microscopio óptico, y son las responsables de la turbidez u
opacidad a la dispersión. Estas dispersiones sedimentan espontáneamente y la velocidad de sedimentación
puede acelerarse por centrifugación.
Dispersiones finas
Son sistemas donde para diferenciar las fases necesitas usar un microscopio. Dentro de las dispersiones
finas, existen de dos tipos: emulsiones, y suspensiones. La diferencia entre ambas es que en las emulsiones
hablamos de una dispersión grosera entre sustancias liquidas, en cambio, en las suspensiones entre fases
liquidas y sólidas.
Dispersiones coloidales
Las dispersiones coloidales han sido definidas tradicionalmente como una suspensión de pequeñas
partículas en un medio continuo. Las partículas coloidales tienen la capacidad de dispersar la luz visible. Un
haz ruinoso delgado que pasa a través de un coloide en un gas o en un líquido, puede observarse a ángulos
rectos debido a la dispersión. Son partículas invisibles a simple vista o con microscopio óptico. Son estables
a la gravedad y sólo sedimentan mediante centrifugación a altas velocidades.
Las partículas coloidales atraviesan membranas permeables (papel de filtro, filtro de arcilla), pero son
retenidas por membranas dialíticas (celofán, colodión).
Propiedades coloidales:
Adsorción:
Por su tamaño, las partículas coloidales tienen una relación área/masa extremadamente grande, por ello
son excelentes materiales adsorbentes. Aunque la adsorción es un fenómeno general de los sólidos, resulta
especialmente eficiente en dispersiones coloidales, debido a la enorme cantidad de área superficial.
Efecto Tyndall:
Consiste en que un haz luminoso se hace visible cuando atraviesa un sistema coloidal. Este fenómeno se
debe a que las partículas coloidales dispersan la luz en todas las direcciones haciéndola visible. Aunque
todos los gases y líquidos dispersan la luz, la dispersión por una sustancia pura o por una solución es muy
pequeña, que generalmente no es detectable.
Movimiento browniano:
Son ejemplos de este fenómeno los movimientos observados en partículas de polvo que se desplazan libres
al azar en un rayo de sol que ingresa a través de una ventana. El movimiento desordenado de dichas
partículas coloidales es debido al bombardeo o choque con las moléculas del medio dispersante. El
movimiento browniano impide que las partículas coloidales se asienten o formen sedimentos.
Electroforesis:
Consiste en la migración de partículas coloidales cargadas dentro de un campo eléctrico. Las partículas
coloidales adsorben iones en su superficie cargándose positiva o negativamente.
Diálisis:
Se define como el movimiento de iones y moléculas pequeñas a través de una membrana porosa, llamada
membrana dialítica.
5
Separación de sistemas homogéneos
Los métodos mecánicos de separación permiten separar mediante transformaciones físicas las fases de un
sistema heterogéneo:
Filtración: Separa mesclas de líquidos y sólidos, mediante un filtro.
Decantación: Separa dos líquidos no miscibles, se utiliza una ampolla de decantación.
Tamización: Separa sólidos de distinto tamaño, mediante un tamiz.
Flotación: Separa sólidos de distinta densidad mediante el agregado de agua, uno de ellos flota y el otro
no. Ninguno de ellos debe ser soluble en agua.
Sublimación: separa dos sólidos, de los cuales uno sublima y el otro no lo hace, mediante la aplicación
de calor
Centrifugación: separa líquidos de sólidos mediante la fuerza centrífuga provocada en una máquina.
Disolución: separa dos sólidos, de los cuales uno es soluble en una determinada sustancia y el otro no.
Luego se separa el soluto mediante otro método.
Levigación: Se utiliza una corriente de agua o aire que arrastra los materiales más livianos a través de
una mayor distancia, mientras que los más pesados se van depositando; de esta manera hay una
separación de los componentes de acuerdo a lo pesado que sean.
LEYES GRAVIMÉTRICAS
Leyes naturales son aquellas con proposición concisa, frecuentemente en forma matemática, y que tratan
acerca del comportamiento de la naturaleza
Leyes ponderales son aquellas que rigen las transformaciones químicas y el comportamiento de la materia
en cuanto a las masas de las sustancias que intervienen en una reacción, ponderal significa relativo a la
masa. Estas leyes son:
"La materia no se crea ni se destruye, sino que sufre cambios de una forma a otra" es decir que en las
reacciones químicas la cantidad de materia que interviene permanece constante. La masa de un sistema
permanece invariable cualquiera que sea la transformación que ocurra dentro de él, y la masa de los
cuerpos reaccionantes es igual a la masa de los productos de la reacción.
6
En términos generales puede enunciase que la ley de conservación de las masas se cumple estrictamente
para reacciones químicas comunes, pero no para reacciones nucleares. Ya que, en las mismas, parte de la
masa se transforma en energía:
𝐸 = 𝑚𝑐 2
Para formar un compuesto químico, los elementos se combinan en una proporción fija, cualquiera sea el
método de obtención de este compuesto o su lugar de procedencia. En otras palabras, la composición de
una sustancia compuesta será siempre la misma.
“Cuando dos o más elementos se combinan para formar un determinado compuesto lo hacen en una
relación en peso constante independientemente del proceso seguido para formarlo”.
“Para cualquier muestra pura de un determinado compuesto los elementos que lo conforman mantienen
una proporción fija en peso, es decir, una proporción ponderal constante”.
Esto quiere decir que cualquiera que sea la cantidad que se tome de un compuesto, su composición será
siempre la misma. Así, por ejemplo, en el agua los gramos de hidrógeno y los gramos de oxígeno están
siempre en la proporción 1/8, independientemente del origen del agua
Si dos o más elementos químicos se combinan para dar más de un compuesto, entonces el cociente entre
la masa del segundo elemento que se combina con una masa fija del primero, será una razón de números
enteros y pequeños. Dicho de otra manera:
“Las cantidades de un mismo elemento que se unen con una cantidad fija de otro elemento para formar en
cada caso un compuesto distinto están en la relación de números enteros sencillos”.
Así, por ejemplo, el oxígeno y el cobre se unen en dos proporciones y forman dos óxidos de cobre que
contienen 79,90 % y 88,83 % de cobre. Si calculamos la cantidad de cobre combinado con un mismo peso
de oxígeno, tal como 1g, se obtiene en cada caso:
79,90𝑔 𝐶𝑢 3,975 𝑔 𝐶𝑢 4
= ≅
20,19𝑔 𝑂 1𝑔𝑂 1
88,83𝑔 𝐶𝑢 7,953𝑔 𝐶𝑢 8
= ≅
11,17𝑔 𝑂 1𝑔𝑂 1
Los pesos de los diferentes elementos que se combinan con un mismo peso de un elemento dado, son los
pesos relativos de aquellos elementos cuando se combinan entre sí, o bien múltiplos o submúltiplos de
7
estos pesos. En otras palabras, si un elemento químico A forma la sustancia compuesta AB, y también
forma la sustancia compuesta AC, entonces puede existir la sustancia compuesta BC. Estos pesos de
combinación se conocen hoy como pesos equivalentes. Se denomina también equivalente químico.
LEYES VOLUMÉTRICAS
Muchos de los elementos y compuestos son gaseosos, y puesto que es más sencillo medir un volumen que
un peso de gas era natural se estudiasen las relaciones de volumen en que los gases se combinan.
Gay-Lussac formuló en 1808 la ley de los volúmenes de combinación que lleva su nombre. Al obtener vapor
de agua a partir de los elementos (sustancias elementales) se había encontrado que un volumen de oxígeno
se une con dos volúmenes de hidrógeno formándose dos volúmenes de vapor de agua; todos los
volúmenes gaseosos medidos en las mismas condiciones de presión y temperatura. Esta relación sencilla
entre los volúmenes de estos cuerpos gaseosos reaccionantes no era un caso fortuito pues Gay-Lussac
mostró que se cumplía en todas las reacciones en que intervienen gases.
Esta ley nos dice que: En cualquier reacción química los volúmenes de todas las substancias gaseosas que
intervienen en la misma, medidos en las mismas condiciones de presión y temperatura, están en una
relación de números enteros sencillos.
Las leyes ponderales de las combinaciones químicas encontraron una explicación satisfactoria en la teoría
atómica formulada por Dalton. Dalton reinterpreta las leyes ponderales basándose en el concepto de
átomo. Establece los siguientes postulados o hipótesis, partiendo de la idea de que la materia es
discontinua:
Los elementos están constituidos por átomos consistentes en partículas materiales
separadas e indestructibles, inalterables e indivisibles.
Los átomos de un mismo elemento son iguales en masa y en todas las demás cualidades.
Los átomos de los distintos elementos tienen diferentes masa y propiedades
Los átomos compuestos se forman por la unión de átomos de los correspondientes
elementos en una relación numérica sencilla.
Los «átomos» de un determinado compuesto (átomos compuestos) son a su vez idénticos
en masa y en todas sus otras propiedades.
Para Dalton, las últimas partículas de los elementos gaseosos como el hidrógeno, oxígeno, cloro, etc., eran
necesariamente simples y estaban constituidas por un solo átomo (así, H, O, CI, N, etc.) y que las de
8
compuestos gaseosos tan corrientes como el agua o el cloruro de hidrógeno eran naturalmente
compuestas pero formadas por sólo dos átomos distintos (HO, HCI, etc.). Sin embargo, con estas fórmulas
no se podían explicar las relaciones volumétricas de Gay-Lussac:
Al imaginar que estos elementos se unen átomo a átomo, formarán un mismo número de «átomos» (hoy
moléculas) de cloruro de hidrógeno, al ser estos «átomos» indivisibles, debían ocupar un solo volumen, en
cambio, ocupaban un volumen doble según los resultados de Gay Lussac.
La hipótesis de que en volúmenes iguales de gases debían existir igual número de «átomos» enunciada por
Dalton, lo llevo a descartar la ley de los volúmenes de combinación, llegando a la conclusión de que los
resultados de Gay-Lussac eran inexactos. Por el contrario, si la ley de Gay-Lussac era cierta estaba en
contradicción con los postulados de Dalton y su teoría atómica.
Hipótesis de Avogadro
Las últimas partículas de los gases elementales no son átomos sino agregados de átomos (en general dos),
a los que dio el nombre de “moléculas” (del latín pequeñas moles o masas)
En volúmenes iguales de todos los gases, medidos en las mismas condiciones de presión y temperatura,
existen igual número de moléculas.
Avogadro admite de la teoría atómica de Dalton el que los átomos son indestructibles, y sus demás
postulados, pero no así sus ideas sobre la composición de las moléculas tanto de las sustancias elementales
como de los compuestos. Para Avogadro las últimas partículas de los elementos gaseosos eran también
compuestas, aunque formadas de átomos iguales.
Los átomos constituyen las unidades últimas que toman parte en los cambios químicos mientras que las
moléculas son las partículas físicamente separadas que integran los gases. En las reacciones entre cuerpos
gaseosos las moléculas se separan, en general, en sus átomos constituyentes los que se unen en la
transformación de manera distinta.
Por ejemplo, la relación en la formación de agua debería ser, según Dalton, 1 volumen de hidrógeno / 1
volumen de oxígeno / 1 volumen de agua, y no de 2/1/2 como se encontró, experimentalmente. Este hecho
9
lo explica Avogadro al suponer que las moléculas del hidrógeno, cloro, nitrógeno, oxígeno, etc., son
diatómicas. Si el agua, por ejemplo, tiene en su molécula dos átomos de hidrógeno y uno de oxígeno (H 2O),
puede explicarse la relación de volúmenes de combinación conforme indica la figura:
De forma análoga se puede justificar los resultados obtenidos en la formación del cloruro de hidrógeno.
A pesar de que con la teoría de Avogadro se explicaba la ley de los volúmenes de combinación, fue
desechada en su tiempo. Por una parte, a Berzelius le parecía imposible que dos átomos iguales pudieran
unirse, pues juzgaba que el enlace entre átomos sólo podía ocurrir por fuerzas eléctricas opuestas. Por otro
lado, Dalton consideró como inexactos los resultados de Gay-Lussac. Se olvidó así la hipótesis de Avogadro
hasta medio siglo después, en 1858 Cannizzaro daba a conocer claramente su significado y aplicación. La
hipótesis de Avogadro le proporcionó un método para determinar pesos moleculares relativos de gases,
porque la densidad de un gas sería proporcional a su peso molecular. De ahí pudo calcular los pesos
atómicos y obtener una escala correcta de los mismos.
El éxito alcanzado por los resultados de Cannizzaro confirmaron la hipótesis de Avogadro, que quedó
convertida así en una ley y que, a su vez, complementó la teoría atómica de Dalton.
“Volúmenes iguales de gases diferentes en iguales condiciones de presión y temperatura poseen igual
número de moléculas.”
Átomo
Es la mínima partícula, eléctricamente neutra, que interviene en un fenómeno químico y se comporta como
una partícula indivisible.
Molécula
Parte más pequeña, con existencia individual estable, de una sustancia simple o compuesta que mantiene
las mismas propiedades de la sustancia. Consta de dos o más átomos unidos químicamente.
UMA: unidad de masa atómica. Se define como la doceava parte del átomo de carbono. En la actualidad y
desde 1961, para unificar criterios, la IUPAC acordó utilizar un nuevo patrón de referencia para determinar
la masa atómica relativa de los elementos: el isótopo del carbono de número másico 12 (que se representa
como C12), al que se le adjudicó la masa atómica exacta de 12 uma.
10
𝑚𝑎𝑠𝑎 𝑑𝑒 𝑢𝑛 á𝑡𝑜𝑚𝑜 𝑑𝑒 𝐶 12
1 uma = = 1,661. 10−24 𝑔
12
Masa atómica relativa: indica cuantas veces es mayor la masa de un átomo respecto de la unidad de masa
atómica.
Masa atómica promedio: conocida como peso atómico, es el valor de masa que aparece en la tabla
periódica. Se obtiene al hacer el promedio de la mezcla natural de isótopos:
∑ 𝐴𝑖. 𝑋𝑖
𝐴=
100
Formula empírica
Indica cuales elementos están presentes y la proporción mínima entre números enteros entre sus átomos,
pero no necesariamente el número real de átomos en una molécula determinada. Ejemplo: 𝐻2 𝑂2 =
𝐻𝑂(formula empírica)
Formula Molecular
Indica el número exacto de átomos de cada elemento que está presente en la unidad más pequeña de una
sustancia.
Volumen molar
Es el volumen ocupado por un mol de cualquier sustancia. Este volumen resulta ser de 22,4 L cuando el gas
se encuentra en condiciones normales de presión y temperatura (1 atmósfera y 0 °C). Este valor es lo que
se conoce como volumen molar normal de un gas. En condiciones estándar (1 atmosfera y 25 °C) el
volumen molar es un poco mayor, 24,4 L
Isótopos: son átomos del mismo elemento químico que posee distinta masa atómica A. por una variación
en la cantidad de neutrones en el núcleo.
11
Alótropos: sustancias simples que poseen estructuras moleculares diferentes.
Isobaros e Isótonos
Los isobaros son átomos con el mismo número de masa o nucleones (protones + neutrones) , por ejemplo
el 146𝐶 y el 147𝑁. Los isótonos son átomos con el mismo número de neutrones, por ejemplo el 136𝐶 y el 147𝑁
Sustancia química: conjunto de cuerpos de iguales propiedades químicas intensivas que hayan surgido por
modificaciones físicas de sistemas homogéneos o heterogéneos.
TEORÍA ATÓMICA.
La idea del átomo se remonta a épocas muy lejanas en las cuales todavía no se podía realizar ninguna
prueba experimental sobre la existencia del mismo, lo cual dejaba esta idea en algo netamente filosófico.
Demócrito, afirmaba que la materia era discontinua, esto es, la materia era formada por minúsculas
partículas indivisibles, las cuales fueron denominadas " átomo", que en griego significa indivisible.
Demócrito postulo que todos los tipos de materia eran formados a partir de la combinación de los átomos.
William Crookes realizo experimentos con rayos catódicos en su laboratorio. Un tubo de vidrio con dos
electrodos en su interior, se llenaba de aire o algún otro gas a presión atmosférica. Los electrodos se
conectaban a una fuente de tensión del orden de las decenas de voltios:
Estos resultados se podían interpretar en el sentido de que algo parecía estar emanando del cátodo y que
era detenido por obstáculos. A esta emisión se le dio el nombre de “rayos catódicos”
Crookes observó que al cambiar el cátodo plano por otro puntiagudo, las sombras se volvían difusas,
lo cual era una indicación de que los rayos catódicos eran emitidos perpendicularmente a la superficie
del cátodo y en línea recta.
Además descubrió que la localización o la forma geométrica del ánodo no producían ningún efecto
sobre la emisión de los rayos catódicos o sobre la sombra producida por obstáculos.
Otros experimentos diseñados por Crookes mostraban que los rayos catódicos podrían producir
efectos mecánicos, como impulsar unas pequeñas ruedas con aspas de mica, calentar una lámina de
platino ubicada en el foco de un cátodo semicircular, o ser desviados por campos magnéticos.
Estos resultados convencieron a Crookes de que los rayos catódicos consistían de partículas cargadas
emitidas por el cátodo.
J.J. Thompson en 1897 estudió los rayos catódicos en un tubo de descarga modificado, fuera del tubo
estaban ubicadas dos placas cargadas eléctricamente y un electroimán. Cuando se conectaba el campo
magnético solamente, los rayos catódicos alcanzaban el punto A, cuando se conectaba el campo eléctrico,
los rayos llegaban al punto C. Pero cuando ambos se conectaban, se balanceaban no afectando la
trayectoria del rayo. De acuerdo con la teoría electromagnética, un cuerpo cargado interactúa con los
campos magnéticos y eléctricos que atraviesa. Thompson llegó a la conclusión de que si los rayos catódicos
eran atraídos por la placa positiva y repelidos por la negativa, entonces las partículas cargadas que había
descubierto Crookes tenían carga negativa. A estas partículas se las conoce como electrones. Además
𝐶
determino la relación carga masa de un electrón: −1,76. 108
𝑔
En 1909, el físico americano Millikan, logro determinar la carga del electrón a través de su experimento de
la gota de aceite.
13
El objetivo de la experiencia era la determinación de la cantidad de carga que lleva una gotita de aceite. La
experiencia constaba de dos partes realizadas con la misma gotita:
𝑒 − = −1,6. 10−19 𝐶
Dicha cantidad se denomina cantidad fundamental de carga o carga del electrón. Sabiendo la relación de
carga masa obtenida por Thompson y gracias al experimento de Millikan, sabiendo la carga de un electrón,
se pudo determinar la masa de un electrón:
−
𝑒 − (𝑐𝑎𝑟𝑔𝑎) −1,6. 10−19 𝐶
𝑚𝑎𝑠𝑎 𝑒 = − = = 9,1. 10−28 𝑔
𝑒 (𝑐𝑎𝑟𝑔𝑎) 8 𝐶
−1,76. 10 𝑔
𝑒 − (𝑚𝑎𝑠𝑎 )
14
Por lo tanto, y a causa de su aparente relación con las perforaciones o “canales” del cátodo, Goldstein
denominó a esta radiación rayos canales. La relación carga/masa de los rayos canales no es la misma sino
que depende del gas del que proceda. En cualquier caso, la masa era muy superior a la de los electrones.
Se llamó “protón” a la partícula positiva procedente del gas hidrógeno, cuya carga coincidía exactamente
con la del electrón. Las cargas de otros rayos canales eran múltiplos de la del protón, por lo que supuso que
deberían ser partículas con varios protones unidos.
Estos rayos, se descubrió más tarde eran iones positivos o cationes de las moléculas gas encerrado el tubo,
que debido a los continuos choques de los electrones (rayos catódicos) contra las mismas, perdían
electrones que eran atraídos por cátodo perforado atravesándolo.
Thompson partió de las informaciones que se tenían hasta ese momento y presentó algunas hipótesis,
intentando justificar dos hechos:
A. La materia es eléctricamente neutra, lo que hace pensar que, además de electrones, debe de haber
partículas con cargas positivas.
B. Los electrones pueden extraerse de los átomos, pero no así las cargas positivas.
Propuso entonces un modelo para el átomo en el que la mayoría de la masa aparecía asociada con la carga
positiva (dada la poca masa del electrón en comparación con la de los átomos) y suponiendo que había un
cierto número de electrones distribuidos uniformemente dentro de esa masa de carga positiva. Fue un
primer modelo realmente atómico, referido a la constitución de los átomos, pero muy limitado y pronto fue
sustituido por otros.
Los rayos X:
El tercer descubrimiento realizado con el tubo de rayos catódicos ocurrió en 1895, y fue sin duda el más
sorprendente de todos. De manera completamente accidental, Wilhelm Roentgen, observó que una
pantalla de papel cubierto con un material fluorescente (platino cianuro de bario) brillaba intensamente
15
cuando se encendía un tubo de rayos catódicos. Y esto ocurría aun cuando el tubo estuviera perfectamente
cubierto por un cartón negro y a más de dos metros de distancia de la pantalla.
Ante semejante observación, inmediatamente supuso que algún tipo de radiación emanaba del tubo de
rayos catódicos. Sin embargo, verificó que la intensidad del resplandor variaba poco o nada al interponer
entre el tubo y la pantalla objetos tales como papel, madera, hule o, inclusive, láminas delgadas de
aluminio (todos materiales opacos a la luz ordinaria). De todos los materiales que probó, sólo el plomo, y en
un grosor de al menos un milímetro y medio, era opaco a estos rayos. Por ejemplo, en su primer trabajo
Roentgen había escrito “Si se sostiene la mano entre la descarga del tubo y la pantalla, la sombra más
oscura de los huesos se ve dentro de la sombra ligeramente oscura de la mano”
Teniendo serias dudas sobre su naturaleza, Roentgen decidió llamar a esta nueva emanación con el nombre
de rayos X.
Probando con prismas de distintos materiales, Roentgen encontró que, aparentemente, estos rayos X no
podían ser refractados y, por lo tanto, tal vez es imposible enfocarlos por medio de lentes. Además, a
diferencia de los rayos catódicos, los rayos X no podían ser desviados por campos magnéticos y
atravesaban grandes distancias.
Becquerel y la radiactividad:
En su búsqueda de una relación entre la fosforescencia y los rayos X, Becquerel colocó sustancias
fosforescentes, envueltas en papel negro sobre una placa fotográfica, pero sus resultados fueron
enteramente negativos. Entonces se le ocurrió probar con cristales de una sal de uranio. Primero los expuso
a la luz solar para hacerlos fosforecer y luego los envolvió en papel negro y los colocó sobre una placa
fotográfica. Después de una exposición de varias horas, al revelarse la placa, se observó un marcado efecto
fotográfico. El experimento se repitió con un delgado trozo de cristal colocado entre la sal de uranio y la
placa fotográfica a fin de cortar los efectos debidos a posibles vapores, pero nuevamente se obtuvo el
efecto fotográfico.
Al principio, Becquerel supuso que la emisión de rayos que podían penetrar el papel negro estaba
relacionada en alguna forma con la fosforescencia, pero más tarde demostró que los efectos eran
igualmente marcados si la sal de uranio se hubiese mantenido previamente en la oscuridad por varias
semanas, de manera que no hubiera señal de fosforescencia. Más tarde de mostró que todas las sales de
uranio, o incluso el metal mismo, tienen el poder de producir radiación que penetra el papel negro.
16
Marie Curie, una discípula de Becquerel, sugirió el nombre de radioactividad para describir a la
emisión espontánea de partículas. La desintegración generaba tres tipos de partículas:
Las partículas alfa son partículas físicamente iguales a átomos de He+2 , es decir, que han perdido
sus dos electrones. Por tanto, tienen dos neutrones y dos protones. Dada la elevada masa de estas
partículas su velocidad es baja y no son muy penetrantes, no penetran un papel o la piel humana.
Las partículas beta son partículas físicamente iguales a electrones emitidos a grandes velocidades
próximas a la de la luz. Debido a la menor masa que la radiación alfa, tienen más poder de
penetración que las partículas alfa.
Las partículas gamma son radiaciones electromagnéticas que no poseen masa, de la misma
naturaleza que los rayos X pero de menor longitud de onda. Su poder de penetración es muy
elevado frente al de las partículas alfa o beta, pudiendo atravesar el cuerpo humano. Quedan
frenadas con espesores de 1 m de hormigón o unos pocos cm de plomo.
Rutherford realizó una experiencia que supuso en paso adelante muy importante en el conocimiento del
átomo. La experiencia de Rutherford consistió en bombardear con partículas alfa una finísima lámina de
oro. Las partículas alfa atravesaban la lámina de oro y eran recogidas sobre una pantalla de sulfuro de zinc.
Rutherford esperaba que el haz de partículas α pasaría a través de la lámina sin desviarse o siendo
desviadas solamente algunas en pequeños ángulos al encontrarse con los electrones.
Lo que observó fue que la mayor parte de las partículas α atravesaban la lámina sin desviarse, algunas se
desviaban ligeramente, mientras que unas pocas no atravesaban la lámina sino que rebotaban en la lámina
en la misma dirección del impacto.
17
El hecho de que sólo unas pocas radiaciones sufriesen desviaciones hizo suponer que las cargas positivas
que las desviaban estaban concentradas dentro de los átomos ocupando un espacio muy pequeño en
comparación a todo el tamaño atómico, esta parte del átomo con electricidad positiva fue llamado núcleo.
Rutherford poseía información sobre el tamaño, masa y carga del núcleo, pero no tenía información alguna
acerca de la distribución o posición de los electrones.
Con las informaciones que disponía y de las obtenidas de su experiencia, Rutherford propuso este modelo
de átomo:
1. El átomo está constituido por una zona central, a la que se le llama núcleo, en la que se encuentra
concentrada toda la carga positiva y casi toda la masa del núcleo.
2. Hay otra zona exterior del átomo, la corteza, en la que se encuentra toda la carga negativa y cuya masa
es muy pequeña en comparación con la del átomo. La corteza está formada por los electrones que
tenga el átomo.
3. Los electrones se están moviendo a gran velocidad en torno al núcleo.
4. El tamaño del núcleo es muy pequeño en comparación con el del átomo.
El modelo de Rutherford, tenía un problema, se sabía que el hidrógeno poseía un protón y el helio dos
protones, por lo tanto la relación de masa debía ser 2:1. En realidad, esto no ocurría, la relación era de 4:1.
Chadwick, demostró la existencia de otra partícula subatómica de masa ligeramente mayor al protón y
eléctricamente nuestra, llamada neutrón.
La nueva era de la física comenzó en 1900 con Max Planck. Al examinar los datos de la radiación que
emitían los sólidos calentados a diferentes temperaturas, Planck descubrió que los átomos y las moléculas
emiten energía en cantidades discretas o cuanta. Los físicos siempre supusieron que la energía era un
proceso continuo y que en el proceso de radiación se emitía cualquier cantidad de energía.
Para poder entender la teoría cuántica de Planck es necesario poseer conocimiento sobre las ondas:
18
La naturaleza de la luz:
Newton en el siglo XVIII defendió esta idea, suponía que la luz estaba formada por corpúsculos lanzados a
gran velocidad por los cuerpos emisores de luz.
En 1678 Huygens defiende un modelo ondulatorio, la luz es una onda. Con este modelo se explicaban
fenómenos como la interferencia y difracción, que el modelo corpuscular no era capaz de explicar. Así la luz
era una onda longitudinal, pero las ondas longitudinales necesitan un medio para poder propagarse, y
surgió el concepto de éter como el "medio" en el que estamos inmersos.
La solución al problema la dio Maxwell en 1865, dijo que la luz es una onda electromagnética que se
propaga en el vacío. Maxwell se basó en los estudios de Faraday del electromagnetismo, y concluyó que las
ondas luminosas son de naturaleza electromagnética.
Una onda electromagnética se produce por la variación en algún lugar del espacio de las propiedades
eléctricas y magnéticas de la materia. No necesita ningún medio para propagarse, son ondas transversales.
Una carga eléctrica oscilando con una determinada frecuencia, produce ondas electromagnéticas de la
misma frecuencia. La velocidad con la que se propagan estas ondas en el vacío es:
𝑚
𝑐 = 3. 108
𝑠
Radiación electromagnética:
Una de las formas en que la energía se transporta en el espacio, es por medio de la radiación
electromagnética. Todas las formas de radiación de energía exhiben un comportamiento de ondas y viajan
a la misma velocidad, no importando si su origen es visible, ultravioleta, infrarroja o gama. La radiación está
constituida por dos ondas que se desplazan perpendicularmente, una es eléctrica y la otra es magnética.
𝑐
𝜈=
𝜆
19
Espectro electromagnético
Cuando los sólidos se someten a calentamiento emiten radiación electromagnética que abarca una amplia
gama de longitudes de onda. Las mediciones hechas en el siglo XIX mostraron que la cantidad de energía
radiante que emitía un objeto a cierta temperatura dependía de su longitud de onda. Sin embargo la
explicación de esta dependencia con la teoría ondulatoria y las leyes de la termodinámica no era del todo
satisfactoria.
Planck resolvió el problema de una forma radical. La física clásica asumía que los átomos y moléculas
emitían cualquier cantidad arbitraria de energía radiante. Planck proponía que lo hacían en pequeños
paquetes o cúmulos. A la mínima cantidad de energía que se podía emitir o absorber en forma de radiación
electromagnético, a la que llamó cuanto. La energía de un cuanto está dada por:
𝐸 = ℎ. 𝜈
Pero como:
𝑐
𝜈=
𝜆
Entonces:
𝑐
𝐸=ℎ
𝜆
De acuerdo a la teoría cuántica, siempre se emite en múltiplos de hν, es decir la energía esta empaquetada
o cuantizada.
20
Efecto fotoeléctrico
Einstein consideró la luz como un torrente formado por un gran número de partículas cuyas energías
seguían el comportamiento de los cuantos de Planck y explicó el efecto fotoeléctrico como el resultado de
la incidencia de las partículas de luz sobre los electrones del metal, si la radiación tiene suficiente energía
puede desprender los electrones del metal, generando una corriente eléctrica. Ahora sabemos que la luz y
la electricidad tienen estructura granular: la luz se compone de partículas llamadas fotones y la electricidad
de electrones.
Se sabe que la capacidad para emitir electrones no depende de la intensidad de la radiación sino
únicamente de su frecuencia “”, es decir, un haz muy luminoso de baja frecuencia puede no producir
ionización, mientras que uno mucho menos luminoso pero de mayor frecuencia, sí. La frecuencia mínima
para extraer un electrón de un átomo (efecto fotoeléctrico) se denomina frecuencia umbral “0”.
Einstein, aplicando la hipótesis de Planck, elaboró la teoría corpuscular, en la que suponía que la luz estaba
formada por partículas, a los que denominó “fotones” cuya energía venía determinada por E = h · Si dicha
energía se igualaba o superaba a la energía de ionización se producía la ionización del electrón.
𝐸𝑖𝑜𝑛𝑖𝑧𝑎𝑐𝑖ó𝑛
𝜈0 =
ℎ
Si se suministra una radiación de mayor frecuencia, el resto de la energía se transforma en energía cinética
del electrón:
1
𝐸𝑐𝑖𝑛é𝑡𝑖𝑐𝑎 = 𝑚𝜈 = ℎ𝜈 − 𝐸𝑖𝑜𝑛𝑖𝑧𝑎𝑐𝑖ó𝑛 = ℎ(𝜈 − 𝜈0 )
2
Se llega a la conclusión que los fotones son físicamente iguales, difieren entre sí en la cantidad de energía
que portan:
𝑐
𝐸=ℎ
𝜆
21
Modelos atómicos de Bohr (Modelo planetario)
En el modelo de Rutherford, los electrones se movían alrededor del núcleo como los planetas alrededor del
sol. Los electrones no caían en el núcleo, ya que la fuerza de atracción electrostática era contrarrestada por
la tendencia del electrón a continuar moviéndose en línea recta. Este modelo fue satisfactorio hasta que se
observó que estaba en contradicción con una información ya conocida en aquel momento: de acuerdo con
las leyes del electromagnetismo, un electrón o todo objeto eléctricamente cargado que es acelerado o cuya
dirección lineal es modificada, emite o absorbe radiación electromagnética. El electrón del átomo de
Rutherford modificaba su dirección lineal continuamente, ya que seguía una trayectoria circular. Por lo
tanto, debería emitir radiación electromagnética y esta radiación causaría la disminución de la energía del
electrón, que en consecuencia debería describir una trayectoria en espiral hasta chocar con el núcleo.
En 1913, el físico danés Niels Bohr (1885-1962) propuso un modelo que podía explicar resultados
experimentales tales como la absorción y emisión de luz por los átomos, la estabilidad de los electrones.
Basando su teoría en el átomo de hidrogeno, Bohr postuló que:
Los electrones se mueven describiendo una órbita alrededor del núcleo como los planetas
alrededor del Sol.
El electrón posee una energía definida y característica de la órbita en la cual se mueve. Un electrón
de la capa más cercana al núcleo posee la energía más baja posible. Con el aumento de la distancia
del núcleo, la energía del electrón aumenta.
Un electrón en la capa más cercana al núcleo tiene la energía más baja o se encuentra en estado
basal. Cuando los átomos se calientan, absorben energía y pasan a niveles exteriores, los cuales
son estados energéticos superiores. Se dice entonces que los átomos están excitados.
Cuando un electrón regresa a un nivel inferior emite una cantidad definida de energía a la forma
de un cuanto de luz. El cuanto de luz tiene una longitud de onda y una frecuencia características y
produce una línea espectral característica.
Para Bohr el átomo sólo puede existir en un cierto número de estados estacionarios, cada uno con una
energía determinada.
Bohr consideró que la fuerza centrífuga que experimenta el electrón al moverse en una órbita circular es
compensada por la atracción entre el núcleo y los electrones, debido a que tienen cargas de distinto signo.
De esta manera se explican los espectros atómicos, que en el caso del Hidrógeno los niveles de energía
posibles están dados por la fórmula:
ℎ
𝐸𝑛 = −𝑅
𝑛2
En donde R es la constante de Rydberg que tiene un valor de 2,18. 10−18 𝐽 y n es el número cuántico
principal
La longitud de onda y la frecuencia de un fotón producido por el paso de un electrón de un nivel de energía
mayor a uno menor en el átomo de Hidrógeno está dada por:
| Ef - Ei |=E =R .h (1/ni2 - 1/ nf2) =h.
Esta situación se puede describir diciendo que la radiación electromagnética es una onda que al interactuar
con la materia manifiesta un comportamiento corpuscular. Con igual derecho podemos también decir que
consta de partículas, los fotones, cuyo movimiento está determinado por las propiedades de propagación
de ciertas ondas que les están asociadas. En realidad ambos puntos de vista son aceptables. Pensando en
términos de la segunda alternativa y razonando por analogía, de Broglie exploró la idea que el movimiento
de una partícula está gobernado por la propagación de ciertas ondas asociadas con ella. A estas ondas las
denomino estacionarias.
23
h
λ=
mν
De Broglie tenía una idea particular respecto al comportamiento ondulatorio de los electrones alrededor
del núcleo. La onda asociada al electrón es una onda estacionaria, es decir una onda con sus extremos fijos
Así dentro del perímetro de la circunferencia orbital del electrón en cuestión para el que asociamos una
onda, podrán ubicarse numero entero de longitudes de onda, si no era numero entero esa onda se
cancelaba.
“Aunque nos limitemos a mirar una cosa para verla, la percibimos gracias a los fotones de luz que rebotan
en el objeto, y eso introduce ya un cambio. Tales cambios son diminutos, y en la vida corriente de hecho los
ignoramos; pero los cambios siguen estando ahí. Imaginemos lo que ocurre cuando los objetos que
estarnos manejando son diminutos y cualquier cambio, por diminuto que sea, adquiere su importancia.”
Como una definición simple, podemos señalar que se trata de un concepto que describe que el acto mismo
de observar cambia lo que se está observando. En 1927, el físico alemán Werner Heisenberg se dio cuenta
de que las reglas de la probabilidad que gobiernan las partículas subatómicas nacen de la paradoja de que
dos propiedades relacionadas de una partícula no pueden ser medidas exactamente al mismo tiempo. Un
observador puede determinar o bien la posición exacta de una partícula en el espacio o su velocidad
exacta, pero nunca ambas cosas simultáneamente
Cuando un fotón emitido por una fuente de luz colisiona con un electrón, el impacto señala la posición del
electrón. En el proceso, sin embargo, la colisión cambia la velocidad del electrón. Sin una velocidad exacta,
el impulso del electrón en el momento de la colisión es imposible de medir.
Cuanto mayor es la precisión con que determinamos la posición, menor es la del momento, y viceversa.
Heisenberg calculó la magnitud de esa inexactitud o incertidumbre de dichas propiedades.
ℎ
Δ𝑥. Δ𝑝 ≥
4𝜋
24
Mecánica cuántica
La mecánica cuántica, es la parte de la física que estudia el movimiento de las partículas muy pequeñas, el
comportamiento de la materia a escala muy pequeña. El concepto de partícula "muy pequeña" atiende al
tamaño en el cual comienzan a notarse efectos como la imposibilidad de conocer con exactitud arbitraria y
simultáneamente la posición y el movimiento de una partícula, entre otros. A tales efectos suele
denominárseles "efectos cuánticos". Las suposiciones más importantes de esta teoría son las siguientes:
La energía no se intercambia de forma continua, sino que en todo intercambio energético hay una cantidad
mínima involucrada (cuantización de la energía).
Al ser imposible fijar a la vez la posición y el momento de una partícula, se renuncia al concepto de
trayectoria, vital en mecánica clásica. En vez de eso, el movimiento de una partícula queda regido por una
función matemática que asigna, a cada punto del espacio y a cada instante, la probabilidad de que la
partícula descrita se halle en tal posición en ese instante.
Ecuación de Schrödinger:
Fue Erwin Schrödinger, quien ideó el modelo atómico actual, llamado "Ecuación de Onda", una fórmula
matemática que considera los aspectos anteriores. La solución de esta ecuación, es la función de onda 𝛙 , y
es una medida de la probabilidad de encontrar al electrón en el espacio. En este modelo, el área donde hay
mayor probabilidad de encontrar al electrón se denomina orbital. En general una onda puede tomar
valores positivos y negativos. Una onda puede representarse por medio de una cantidad compleja que
matemáticamente es una ecuación diferencial de segundo grado, es decir, una ecuación en la cual
intervienen derivadas segundas de la función Ψ.
Al resolver la ecuación diferencial, se obtiene que la función Ψ dependa de una serie de parámetros, que se
corresponden con los números cuánticos.
La ecuación:
|𝜓𝑛,𝑙,𝑚 (𝑟, 𝜑, 𝜙)|2 𝑑𝜏 = 𝜓 2
Nos da la probabilidad de encontrar el electrón en un elemento de volumen dτ, es decir se le conoce como
la densidad de probabilidad.
La función de onda depende de los valores de tres variables que reciben la denominación de números
cuánticos. Cada conjunto de números cuánticos, definen una función específica para un electrón y lo
identifican.
25
Del modelo atómico de Dalton al de Schrödinger
26
27
Números cuánticos
Un número cuántico se refiere a los números que caracterizan los estados propios estacionarios de un
electrón de un átomo hidrogenoide.
Representa los niveles energéticos. Se designa con números enteros positivos desde n=1 hasta n=7 para los
elementos conocidos. El número cuántico principal determina la distancia relativa del electrón al núcleo.
Para calcular el número máximo de electrones que acepta cada nivel se calcula con la fórmula 2n donde
"n" es el nivel. El valor de "n" determina el volumen efectivo.
Determina el subnivel y se relaciona con la forma del orbital. Cada nivel energético n tiene "n-1" subniveles.
Se designa con números que van de 0 a n-1, los cuales se identifican con las letras s, p, d, f.
s = 2 e-
p = 6 e-
d = 10 e-
f = 14 e-
Representa la orientación de los orbitales presentes en un subnivel. Se designa con números que van de -l a
+ l pasando por cero. Cada orientación acepta un máximo de 2 electrones
28
• Número cuántico por spin “s”
Se relaciona con el giro del electrón sobre su propio eje. Al estar juntos en un mismo orbital, un electrón
gira hacia la derecha y otro hacia la izquierda. Se le asignan números fraccionarios: -1/2 y +1/2.
Configuración electrónica
La configuración electrónica de un átomo es la manera en que están distribuidos los electrones entre los
distintos orbítales atómicos. El conocimiento de las configuraciones electrónicas es fundamental para
entender y predecir las propiedades de los elementos.
Casillas cuánticas o diagramas de orbitales: Los electrones van formando los orbitales atómicos de
menor a mayor contenido de energía. Cada uno de los subniveles con su respectivo nivel principal,
tienen diferente energía. Los subniveles están ordenados de acuerdo con su incremento de energía
en la siguiente lista: 1s < 2s < 2p < 3s < 3p < 4s < 3d <4p < 5s < 4d < 5p
29
Orden de llenado (es el mismo para todos los elementos) : 1s , 2s , 2p , 3s , 3p , 4s , 3d ,4p 5s , 4d ,5p ,6s,
4f, 5d, 6p, 7s, 5f, 6d
El principio de exclusión fue enunciado por Wolfgang Pauli en 1925 que indica que no hay dos electrones
en un átomo puede ocupar el mismo estado energético al mismo tiempo. Los estados de energía, o niveles,
en un átomo se describe en la teoría cuántica de los valores distintos de cuatro diferentes números
cuánticos, el principio de exclusión sostiene que dos electrones no pueden tener los mismos cuatro
números cuánticos de un átomo. Uno de estos números cuánticos describe una de las dos direcciones
posibles de espín intrínseco del electrón. Como resultado del principio de exclusión, dos electrones que se
encuentran en el mismo nivel de energía tal como se describe por los otros tres números cuánticos se
diferencian unos de otros porque tienen espines opuestos.
En un determinado sistema cuántico (átomo o molécula) no pueden existir dos electrones con los cuatro
números cuánticos idénticos Por tanto, en un orbital sólo caben dos electrones que compartirían tres
números cuánticos y se diferenciarían en el número cuántico de spin (s).
Los orbitales se llenan respetando la regla de Hund, que dice que ningún orbital puede tener dos electrones
antes que los restantes orbitales de la misma subcapa tengan al menos uno. Los electrones de un
determinado subnivel de energía no se aparean en un orbital hasta que todos los orbitales del subnivel
tengan por lo menos un electrón cada uno.
En el siglo XIX cuando los químicos solo tenían una vaga idea respecto de los átomos y las moléculas, y sin
saber aun de la existencia de los electrones y protones, desarrollaron una tabla periódica utilizando su
conocimiento de las masas atómicas.
En 1864 el químico Newlands observo que cuando los elementos se ordenaban según sus masas atómicas
cada octavo elemento mostraba propiedades similares, Newlands se refirió a esta peculiar relación como la
ley de las octavas. Sin embargo, tal ley resulto inadecuada para elementos con masa mayor a la del calcio,
por lo que el trabajo de Newlands fue rechazado por la comunidad científica
En 1869 los químicos Mendeleev y Meyer propusieron una disposición mucho más amplia para los
elementos basada en una repetición periódica y regular de sus propiedades. El sistema agrupo los
elementos de acuerdo a sus propiedades e hizo viable la predicción de las propiedades de elementos no
descubiertos aún.
La tabla periódica de Mendeleev incluyo 66 elementos conocidos hasta entonces, en 1900 se incorporaron
30 más. A pesar que dicha tabla tuvo gran éxito, presentaba algunas incongruencias. Dichas discrepancias
sugirieron que otra propiedad diferente a la masa atómica debería ser la base de la periodicidad observada.
30
Resulto que dicha propiedad se relaciona con el numero atómico, aún desconocido para los científicos de
esa época.
Al utilizar datos experimentales de dispersión, Rutherford calculo el número de cargas positivas que había
en el núcleo de algunos elementos. En 1913, el físico Mosley, descubrió una correlación entre lo que el
llamo número atómico y la frecuencia de los rayos x que se generaban al bombardear un elemento con
electrones de alta energía. De esta manera, con muy pocas excepciones, Mosley demostró que el número
atómico aumenta en el mismo orden que la masa atómica.
De acuerdo con el tipo de subnivel que se ha llenado, los elemento se dividen en categorías: los elementos
representativos, los gases nobles, los elementos de transición, los lantánidos y los actínidos. Los elementos
representativos son los elementos de los grupos IA hasta el VIIA, todos los cuales tienen incompletos los
subniveles s o p del máximo número cuántico principal. Con excepción del helio, los gases nobles,
elementos del grupo VIIIA tienen completo el subnivel p, además son puramente inertes desde el punto de
vista químico (a excepción del Xe y el Kr).
Los metales de transición son los elementos que tienen incompleto el subnivel d o forman fácilmente
cationes con el subnivel d incompleto. Los lantánidos y actínidos algunas veces se denominan elementos de
transición del grupo f porque tienen dicho subnivel incompleto.
Los electrones externos de un átomo son los implicados en un enlace quince y a menudo reciben el nombre
de electrones de valencia. La semejanza en la configuración electrónica es lo que hace que elementos del
mismo grupo se parezcan entre sí (esta observación es válida para el resto de los elementos
representativos)
Al desplazarse de izquierda a derecha a lo largo de un periodo hay una transición de metales a metaloides a
no metales. El carácter metálico de los elementos disminuye de izquierda a derecha a lo largo de un
periodo y aumenta de arriba hacia abajo en un grupo
La mayor parte de los óxidos se caracterizan como básicos o ácidos, sin embargo, algunos son anfóteros, lo
que significa que tienen propiedades tanto acidas como básicas.
31
Valencia
Es el número que expresa la capacidad de combinación de un átomo con otros para crear un compuesto. En
la estructura de Lewis correspondería a la cantidad de electrones que el elemento pone “en juego”. Es
decir, qué cantidad de sus electrones de valencia participan en enlaces. Corresponde normalmente con el
nº de grupo. Electrones del último nivel.
Numero de oxidación
Se diferencia de la valencia porque es una carga, no solo un número, es la valencia más la carga, según la
electronegatividad del elemento. El nº de oxidación es positivo si el átomo formalmente pierde electrones,
o los comparte con un átomo que tenga tendencia a captarlos. Y será negativo cuando el átomo gane
electrones, o los comparta con un átomo que tenga tendencia a cederlos. En los compuestos, la suma de
todos los estados de oxidación es igual a cero. En un ion poliatómico, la suma de todos los estados de
oxidación es igual a la carga del ion. Electrones puestos en juego en un enlace
Afinidad electrónica
Es la cantidad de energía necesaria que necesita liberar un átomo para ganar un electrón y así convertirse
en anión. También, puede decirse que es el cambio de energía que ocurre cuando un átomo en estado
gaseoso, acepta un electrón para formar un anión. Cuanto más positiva sea la afinidad electrónica de un
elemento, mayor la afinidad de un átomo de dicho elemento para aceptar un electro. Otra manera de
visualizar esto es considerarla como la energía que se debe suministrar para desprender un electrón de un
anión. Un valor grande positivo de afinidad electrónica significa que el ion negativo es muy estable,
mientras que una alta energía de ionización en un átomo significa que el electrón es un muy estable en
dicho átomo
Electronegatividad
Es la capacidad de un átomo de adquirir un electrón cuando esta químicamente combinado con otro. Los
elementos más electronegativos ganan electrones y forman aniones, como en el caso de los no metales.
Los elementos con bajas electronegatividades pierden electrones y forman cationes, es el caso de los
metales. La electronegatividad de los electrones se presenta en una escala arbitraria llamada escala de
Pauling. En la tabla periódica la electronegatividad aumenta de izquierda a derecha a través de los periodos
y de abajo hacia arriba en los grupos. Dos elementos con electronegatividades diferentes tienden a
reaccionar uno con otro para formar compuestos iónicos. Dos con electronegatividades similares tienden a
formar enlaces covalentes.
Radio atómico
Es la mitad de la distancia entre dos núcleos de dos átomos adyacentes. Los radios atómicos se determinan
en gran medida por la fuerza de atracción entre los electrones del nivel externo y el núcleo. A mayor carga
nuclear efectiva, los electrones son atraídos con más fuerza por el núcleo, en tanto que el radio atómico es
menor. En un grupo de elementos el radio atómico se eleva cuando el numero atómico aumenta. Como el
tamaño de orbitales crece a medida que aumenta el número cuántico principal, el tamaño del átomo se
eleva y el radio atómico es mayor. Eeste radio disminuye de izquierda a derecha en un periodo dado debido
al aumento de carga nuclear efectiva.
La presencia de electrones protectores reduce la atracción electroestática entre los protones del núcleo,
que tienen carga positiva y los electrones externos. Además, las fuerzas de repulsión entre los electrones,
en un átomo poli electrónico, compensan la fuerza de atracción que ejerce el núcleo. El concepto de carga
32
nuclear efectiva permite entender los efectos de protección en las propiedades periódicas. La carga nuclear
efectiva Zefec = Z-σ en donde z es la carga nuclear (el numero atómico) y σ es la constante de
apantallamiento (menor a Z y mayor que cero)
Radio iónico
Es el radio de un catión o un anión. Cuando un átomo neutro se convierte en un ion, se espera un cambio
en el tamaño. Si el átomo forma un anión, su tamaño aumenta, debido a que la carga nuclear permanece
constante pero la repulsión que resulta por la adición de un electrón adicional aumenta el dominio de la
nube electrónica. Al desprender uno o más electrones, la repulsión electrón electrón se reduce, pero la
carga nuclear se mantiene, por lo que la nube electrónica se contrae y el catión es más pequeño que el
átomo.
Energía de ionización
Es la mínima energía en KJ/Mol necesaria para desprender un electrón de un átomo en estado gaseoso, en
su estado fundamental. La magnitud de ionización es una medida de que tan fuerte se encuentra el
electrón unido al átomo. Cuando se desprende un electrón de un átomo neutro disminuye la repulsión
entre los restantes. Debido a que la carga nuclear permanece constante, se necesita más energía para
desprender otro electrón del ion cargado positivamente, por lo que las energías de ionización aumentan.
En un grupo, la energía de ionización disminuye a medida que aumenta el número atómico, es decir hacia
abajo del grupo. Los elementos de un mismo grupo tienen configuraciones electrónicas semejantes. Sin
embargo, a medida que aumenta el número cuántico principal n, de igual manera aumenta la distancia
promedio de los electrones de valencia con respecto al núcleo. Una mayor separación significa menor
atracción por lo que resulta más fácil desprender un electrón al ir de un elemento a otro hacia abajo en el
grupo. De la misma manera, el carácter metálico de los elementos aumenta de arriba hacia abajo.
La estabilidad global del compuesto iónico solido depende de la interacción de un catión con un anión. Una
medida cuantitativa de la estabilidad de cualquier solido iónico es su energía reticular, que se define como
la energía necesaria para separar completamente un mol de un compuesto iónico solido en sus iones en
estado gaseoso.
Ciclo de Born-Haber
Es un ciclo de reacciones químicas que comprende la formación de un compuesto iónico desde la reacción
de un metal con un no metal. Como no es posible calcular la energía reticular directamente, se puede
determinar conociendo la estructura y la composición del compuesto iónico. En este proceso, primero se
33
separan los compuestos y se calcula el cambio de entalpia para pasarlos a estado gaseoso de cada uno de
los compuestos, posteriormente, se calcula el cambio de energía al perder o ganar electrones de cada uno
de los elementos y finalmente, se suman los elementos para dar origen al compuesto generando un cambio
de entalpia desconocido. Conociendo el cambio de entalpia total del proceso, se puede despejar esta
última entalpia incógnita y obtener su valor.
34
Carácter iónico porcentual o parcial
Solo los átomos del mismo elemento, con igual electronegatividad se unen por medio de enlaces
covalentes puros. Para describir la naturaleza del enlace, los químicos utilizan el termino de carácter iónico
porcentual. Lo que se hace es restar electronegatividades, como regla general, si esa resta es menor que
dos, el enlace es covalente, caso contrario, es iónico.
Momento dipolar:
Es una medida de la separación de las cargas en moléculas que contienen átomos de diferente
electronegatividad. Es la resultante de todos los momentos de enlace presentes en ella. La presencia de un
momento dipolar genera un polo en la molécula.
35
UNIÓN QUÍMICA
Es la energía o fuerza electrostática que mantiene unidos a los átomos de una molécula. Solo se modifican
los electrones de valencia , los cuales se ceden, ganan o comparten en una unión química. Estos electrones
se intercambian para formar el octeto en su último nivel de energía y así parecerse al gas noble más
cercano.
Enlace iónico: se da con un elemento de alta afinidad electrónica y otro con baja afinidad electrónica. La
primera afinidad es exotérmica (se libera energía). Entre estos elementos debe haber una gran diferencia
de electronegatividad, es decir, no se puede formar enlace iónico entre 2 no metales. Ejemplo: ClNa
El Na cede su último electrón para que lo acepte el Cl y así quedar ambos en equilibrio. Estos iones se
mantienen unidos por fuerzas electrostáticas.
Enlace covalente: se forma cuando dos átomos comparten uno o más pares de electrones para formar
ambos el octeto electrónico. Al electrón del átomo vecino lo atrae el núcleo del átomo adyacente y
viceversa. Los electrones apantallan los núcleos para que estos no se repelan.
Se pueden formar enlaces covalentes simple (1 par), dobles (2 pares) o triples (3 pares). Cuando existe más
de un enlace, se denominan enlaces múltiples.
Enlace covalente polar: las moléculas presentan una distribución no uniforme de carga eléctrica, es
decir, los electrones pasan más tiempo en la vecindad de un átomo que del otro, esto es
comparable con una transferencia parcial de electrones o un desplazamiento de la densidad
electrónica. Una propiedad útil para distinguir el enlace covalente no polar del polar es la
electronegatividad, el átomo más electronegativo atrae los electrones, convirtiéndose en un polo
negativo. Ejemplo: HCl
El Cl atrae al H y comparte su electrón, pero no se lo saca y así provoca la aparición de un polo.
(+) H:Cl:::(-)
Para la existencia de polaridad entre moléculas debe existir un enlace covalente polar y una
geometría que lo permita. Toda molécula que tenga un momento dipolar tendrá un enlace
covalente polar. Los momentos dipolares son vectores.
Existen excepciones como el H2O que es un compuesto polar por su geometría y no tiene
momento dipolar. Y como el CO2 que sus momentos dipolares se anulan.
Enlace covalente no polar: la molécula resultante es simétrica o bien sus momentos polares son
opuestos y se anulan.
Enlace metálico: es el modelo de “mar de electrones”. Los electrones están sueltos y no pertenecen a
ningún átomo por eso se pierden con facilidad. Los núcleos se sumergen en los electrones libres
convirtiéndose en cationes y uniéndose a los electrones por fuerzas electrostáticas.
ESTRUCTURA DE LEWIS
Cuando los átomos interactúan para formar un enlace químico solo entran en contacto con sus regiones
más externas. Cuando se estudian los enlaces químicos se considera sobre todo los electrones de valencia.
Un símbolo de puntos de Lewis consta del símbolo del elemento y un punto por cada electrón de valencia.
Los elementos de un mismo grupo poseen configuraciones externas semejantes, y en consecuencia,
también se asemejan los símbolos de puntos de Lewis. Los metales de transición, actínidos y lantánidos,
tienen capas internas incompletas, y en general no es posible escribir símbolos sencillos de puntos de Lewis
para ellos.
En las fórmulas de Lewis, se muestra el número de electrones de valencia, el número y tipo de enlace y el
orden en que los átomos se encuentran conectados, pero no sirve para representar formas
tridimensionales de moléculas o iones poliatómicos. Estas fórmulas puntuales de Lewis pueden emplearse
36
tanto para átomos o iones monoatómicos como para moléculas o iones poliatómicos, teniendo en cuenta
el número de pares electrónicos que se comparten pero sin tener en cuenta hasta el momento cuáles son
los orbitales que participan en el enlace. Los pasos a seguir son los siguientes:
Ej.: H2 S O4
A) Nº de electrones totales: Se suman los electrones de Valencia de cada átomo que forma la molécula
(corresponde al nº de grupo de cada uno). Nº e- Totales= 2x1(H) + 6(S) +6x4 (O)= 32
Si en lugar de una molécula es un ion poliatómico se deberá sumar la carga del mismo si es un
anión Ej.: Nº e- totales CO3= = 4+6x3 +2(Carga del anión) =24
Si fuera un catión poliatómico se deberá restar la carga del catión a los electrones totales
Ej. : Nº e- totales NH4+= 5 +4x1-1(Carga del catión) = 8
B) Nº de electrones por átomos individuales: es la suma de electrones que cada átomo adquiere en la
estructura de Lewis, teniendo en cuenta que el hidrogeno adquiere 2 electrones y el resto de los
átomos 8 (completan el octeto electrónico). Nº de e individuales=2x2(H) +5 x 8(S y O)= 44
O
H O S O H
O
O
H—O— S—O — H
O
2) Reglas de Lewis
Sabiendo la formula molecular del compuesto se procede:
El elemento menos electronegativo se elegirá como elemento central (excepto el hidrogeno). El
átomo central es el que tiene número de oxidación mayor y por lo tanto el que necesita mayor
cantidad de electrones para llenar su octeto, el resto a su alrededor simétricamente.
Los átomos de oxígeno no se enlazan entre sí, salvo en las moléculas de O2 y O3, el O siempre
tiene valencia 2 salvo en los peróxidos (H2O2) es -1.
37
En los oxácido el hidrógeno se enlaza siempre a un átomo de oxígeno, el cual a su vez estará unido
al elemento central (nunca se unirá directamente un hidrógeno con el elemento central).
Proponer un esqueleto razonable (simétrico) en aquellas moléculas con más de un átomo central.
Una molécula que tiene una estructura de Lewis con un nº de enlaces esperado para su nº de grupo
no tiene carga formal.
Dos átomos adyacentes en una estructura de Lewis no pueden tener la misma carga formal.
En una molécula la suma de las cargas formales es = 0 .En un ion poliatómico es igual a la carga de
dicho Ion ( sean cationes o aniones)
:Ӧ: -1 .
+2
H—:Ӧ— S —Ӧ: — H
:Ӧ: -1
N O
También para el NO2, Cl2O.
38
Es el caso del Cloruro de Berilio:
Cl
Cl F F
Cl
P Cl Xe
Cl F F
Todos estos átomos tienen orbitales d disponibles para el enlace (3d, 4d, 5d), donde se alojan los pares de
e- extras.
Resonancia: Una estructura de resonancia es entonces una de dos o más estructuras de Lewis para una
sola molécula que no se puede representar de forma única. La doble flecha señala que las estructuras
mostradas son estructuras de resonancia. El termino resonancia sugiere que se utilizan dos o más
estructuras para una sola molécula particular. Sin embargo, el error más frecuente en este concepto es
creer que dichas estructuras representan realmente a la molécula. Ejemplo: ion carbonato.
Geometría molecular: Se refiere a la disposición tridimensional de los átomos de una molécula. Solo en
compuestos de unión covalente. Esto se debe a la repulsión de sus electrones. La geometría determina
propiedades físicas y químicas. La geometría adoptada por una molécula es aquella en la cual sus partes
tienen la menor repulsión. El modelo que define esto, se denomina RPEVC, modelo de la repulsión de los
pares electrónicos de la capa de valencia, el cual explica la distribución de los pares electrónicos que rodean
el átomo central en términos de la repulsión electroestática entre dichos pares. Dos reglas generales son:
- Al considerar la repulsión, los enlaces dobles y simples pueden tratarse como enlaces sencillos.
- Si una molécula tiene dos o más estructuras resonantes, es posible aplicar el modelo a cualquiera
de ellas.
39
La geometría molecular, se determina generalmente mediante tablas.
Este enfoque explica la distribución geométrica de los pares electrónicos que rodean al átomo central en
términos de la repulsión electrostática entre dichos pares electrónicos. Para realizar la geometría molecular
dividiremos las moléculas en 2 grupos:
Hay que considerar las siguientes reglas para aplicar el modelo de la TRPEV a todo tipo de moléculas:
La teoría de Lewis del enlace químico no explica con claridad porque ocurren dichos enlaces. Para una
explicación más completa de la formación del enlace químico se debe recurrir a la mecánica cuántica. La
teoría del enlace de valencia, supone que los electrones de una molécula ocupan orbitales atómicos de los
átomos individuales. Esto permite conservar la imagen de los átomos individuales tomando parte en la
formación del enlace. La segunda teoría es la de los orbitales moleculares, que propone la formación de
orbitales moleculares a partir de los orbitales atómicos.
Cuando dos átomos se aproximan, cada electrón es atraído por el núcleo del otro átomo, al mismo tiempo
los electrones se repelen entre si y también los dos núcleos. Mientras los átomos están separados, la
atracción es mayor que la repulsión, por lo que la energía potencial del sistema disminuye a medida que los
átomos se acercan, esta tendencia continua hasta que alcanza un valor mínimo, en dicho punto el sistema
es más estable. Si la distancia entre los núcleos disminuyera más, la energía potencial aumentaría
rápidamente y sería positiva como resultado del aumento de las repulsiones electrón-electrón y núcleo-
núcleo.
Se produce un traslapso de los orbitales atómicos, lo que significa que los dos orbitales comparten una
región común en el espacio.
40
Hibridación de orbitales atómicos:
El concepto de traslapso de orbitales atómicos se aplica también a moléculas poliatómicos. La teoría de los
electrones de valencia utiliza el concepto hipotético de los orbitales híbridos, que son orbitales atómicos
que se obtienen cuando dos o más orbitales equivalentes del mismo átomo se combinan. La hibridación es
el término que se utiliza para explicar la mezcla de los orbitales atómicos en un átomo, para generar un
conjunto de orbitales híbridos. Para resumir:
-El concepto de hibridación no se aplica solo a átomos aislados. Es un modelo teórico que se utiliza solo
para explicar el enlace covalente.
-La hibridación es la mezcla de dos orbitales atómicos no equivalentes, como consecuencia, un orbital
hibrido no es un orbital atómico puro.
-El número de orbitales híbridos generados es igual al número de orbitales atómicos puros que participan
en la hibridación.
-El proceso de hibridación requiere de energía, que recupera durante la formación del enlace.
-Los enlaces covalentes en las moléculas y en los iones poliatómicos se forman por el traslapso de orbitales
híbridos, o de orbitales híbridos con orbitales puro.
El enlace sigma es un enlace covalente formado por el traslapso de orbitales por los extremos. En este
enlace la densidad electrónica está concentrada entre los núcleos de los átomos enlazados.
El enlace pi se define como un enlace covalente formado por el traslapso lateral de los orbitales, la
densidad electrónica se concentra arriba y abajo del plano que forman los núcleos de los átomos enlazados.
En la siguiente imagen se ve un ejemplo de la molécula del 𝐶2 𝐻4, en la cual posee dos enlaces pi y uno
sigma entre los carbonos.
41
FORMACIÓN DE COMPUESTOS
La formación de compuestos está totalmente relacionada con el estado de oxidación, el cual debe cumplir
las siguientes reglas:
El elemento menos electronegativo tendrá estado de oxidación positivo ya que aleja sus electrones a los
del elemento más electronegativo.
Reacciones de combinación: Los reactivos son 2 o más sustancias y forman un producto, la formación de
óxidos, ácidos e hidróxidos son reacciones de combinación. También son llamadas reacciones de síntesis
Ejemplo: H2+O22H2O
Reacciones de descomposición: El reactivo es una sustancia que se descompone en 2 o más. Esto se puede
lograr por calentamiento.
Ejemplo: 2KClO32KCl + 3O2
Reacciones de desplazamiento: En este caso un elemento reemplaza a otro elemento en un compuesto.
Ejemplo: Zn + HClZnCl2 + H2
Reacciones de doble desplazamiento: En estas, participan dos compuestos en los cuales se intercambian
los elementos.
Ejemplo: Cl+Na- + Ag+(NO3)- Cl(NO3) + AgNa
Reacciones de neutralización: es aquella en la cual un ácido reacciona con una base para dar una sal
neutra, y en la mayoría de las reacciones, agua.
42
ESTEQUIOMETRIA
Significa medir la reacción. Se basa en las leyes cuantitativas de la combinación química, relacionando la
cantidad de moles, masa y volumen de reactivos y productos.
Reactivo limitante: El reactivo limitante de una reacción es la especie de la cual hay menor cantidad que la
requerida por la reacción estequiométrica de los reactivos. Podemos determinar cuál de ellos es por medio
de una regla de 3 simple. Determina la cantidad de productos que ha de formarse.
Rendimiento teórico: Es lo que rinde la reacción, la máxima masa del producto que puede obtenerse en
base a la estequiometria de una ecuación química.
FUERZAS INTERMOLECULARES
Estas fuerzas mantienen unidas a las moléculas de una sustancia y alteran las propiedades físicas (cambios
de estado) en cambio las fuerzas interatómicas o intramoleculares alteran las propiedades químicas. Por lo
general son fuerzas débiles, pero al ser muy numerosas, su contribución es importante.
Fuerzas
intermoleculares
Fuerzas de Van
der No Van der
Waals
Waals
Puente
hidrógeno
Fuerzas de
dispersión
London
Dipolo: Una molécula es un dipolo cuando existe una distribución asimétrica de los electrones debido a que
la molécula está formada por átomos de distinta electronegatividad. Como consecuencia de ello, los
electrones se encuentran preferentemente en las proximidades del átomo más electronegativo. Se crean
así dos regiones (o polos) en la molécula, una con carga parcial negativa y otra con carga parcial positiva.
Cuando dos moléculas polares (dipolos) se aproximan, se produce una atracción entre el polo positivo de
una de ellas y el negativo de la otra. Esta fuerza de atracción entre dos dipolos es tanto más intensa cuanto
mayor es la polarización de dichas moléculas polares o, dicho de otra forma, cuanto mayor sea la diferencia
de electronegatividad entre los átomos enlazados. Los enlaces.
43
Dipolo-Dipolo: Es una fuerza de atracción entre moléculas polares, es decir, entre moléculas que poseen
momentos dipolares. A mayor momento dipolar mayor será la fuerza.
Dipolo-dipolo inducido: Es una fuerza de atracción entre moléculas no polares. Si un ion o molécula polar
se acerca a una molécula no polar, la distribución electrónica del no polar se distorsiona por la fuerza que
ejerce el polar, dando lugar a la formación de un dipolo llamado dipolo inducido, ya que el ion o molécula
polar lo polarizo. Una molécula o átomo tiende a ser más polarizable a medida que aumente el número de
electrones. Se produce la formación de un dipolo transitorio.
Dispersión de London: En este caso no existe separación de carga dentro de una molécula. Y se forma lo
que se conoce como un dipolo inducido instantáneo, cuando un átomo o molécula produce un dipolo
momentáneo o instantáneo en otro átomo. Se puede pensar, que la fuerza de dispersión es una fuerza de
atracción débil del núcleo de un átomo (o molécula) por los electrones de otro átomo cuando los dos
átomos pasan cerca. La resistencia de estas fuerzas depende principalmente de cuántos electrones estén
distribuidos alrededor del átomo y de qué tan unidos se mantengan. En los átomos y en las moléculas con
gran número de electrones débilmente atraídos, se encuentran fuerzas de dispersión más fuertes.
Puente hidrógeno: Para que exista unión puente hidrógeno la molécula debe cumplir una condición: que
exista un átomo de hidrógeno unido directamente a un átomo muy electronegativo (F, O o N). Las uniones
puente hidrógeno son las responsables de que exista el agua en estado líquida a temperatura ambiente, y
con ello de que exista la vida tal cual la conocemos. Las fuerzas puente hidrógeno son 10 veces más
intensas que las dipolo–dipolo y éstas son 10 veces más intensas que las fuerzas de London.
Los puentes de hidrógeno constituyen un caso especial de interacción dipolo-dipolo. Se producen cuando
un átomo de hidrógeno está unido covalentemente a un elemento que sea:
Muy electronegativo y con dobletes electrónicos sin compartir.
44
De muy pequeño tamaño y capaz, por tanto, de aproximarse al núcleo del hidrógeno.
Existe un caso muy especial de un sólido que flota, hablamos del hielo. Este forma en su interior 6 uniones
covalente y 6 uniones puente hidrogeno.
Ion-dipolo: Se produce entre un ion y una carga parcial en el extremo de una molécula polar. Las moléculas
polares son dipolos, tienen un extremo positivo y un extremo negativo.
La fuerza de esta interacción depende de la carga y tamaño del ion y de la magnitud del dipolo. Las cargas
en los cationes están generalmente más concentradas, dado que los cationes suelen ser menores que los
aniones. En consecuencia, a cargas iguales, un catión interactúa más fuertemente con los dipolos que un
anión.
GASES
Muchas sustancias familiares para nosotros existen a temperatura y presión normal en forma gaseosa, tales
como H2, N2, O2, F2, Cl2 y los gases nobles, además de una gran variedad de compuestos. Los gases se
diferencian en forma marcada de los sólidos y los líquidos en varios aspectos:
45
7. Cada molécula en este estado tiende a comportarse como si no hubiera otras. El grado relativo de
aislamiento de las moléculas hace que los diferentes gases se comporten en forma similar, aun
cuando se trate de moléculas diferentes.
8. Poseen bajas densidades.
Entre las propiedades que caracterizan a los gases y que se miden con más facilidad en un gas están la
temperatura, el volumen, la presión y numero de moles. Las cuatro variables son suficientes para definir el
estado de muchas sustancias gaseosas.
Presión
Físicamente, la presión puede interpretarse como la fuerza que actúa sobre un área determinada:
𝐹 𝑁
𝑃= = [ 2 ] = [𝑃𝑎]
𝐴 𝑚
En donde la fuerza F se mide en Newton, y al ser aplicada sobre una superficie de área A en metros
cuadrados, da como resultado una presión P medida en Pascales.
Presión atmosférica:
La atmósfera terrestre está formada por el aire que nos rodea siendo este una mezcla de gases. El aire
también realiza una presión sobre la tierra mediante la atracción que la gravedad produce sobre el mismo.
Podemos definir a la presión atmosférica como el peso que ejerce la columna de aire sobre la superficie
expuesta de la tierra. La presión atmosférica real en cualquier punto depende de la altura y de las
condiciones atmosféricas.
Presión de un gas:
Los gases ejercen una presión sobre la superficie con la que están en contacto:
46
Para medir las presiones de los gases distintos a los de la atmósfera se utilizan manómetros, de tubo
cerrado para presiones menores a la atmosférica y de tubos abiertos para presiones iguales o mayores.
Temperatura
La temperatura de un sistema mide el vigor del movimiento de todos los átomos y moléculas del mismo
cuando el calor aumenta. Existen distintas escalas para la determinación de la temperatura, entre ellas la
escala Celsius, la escala Kelvin, la escala Fahrenheit y la escala Rankine:
Volumen
El volumen corresponde a la medida del espacio que ocupa un cuerpo. La unidad de medida para medir
volumen es el metro cúbico, sin embargo, en química se utiliza frecuentemente el litro. En un gas a 0°C y 1
atm, es decir en CNPT, 1 mol del mismo ocupa un volumen de 22,4 L. Si la temperatura o la presión a la que
está sometido el gas varía, el volumen se modifica y no es posible asegurar lo dicho.
Ley de Boyle (P – V)
La ley de Boyle establece que el volumen de una cantidad fija de gas mantenida a una temperatura
constante es inversamente proporcional a la presión del gas. Esto significa que a medida que la presión
aumenta el volumen disminuye.
47
1 1
𝑃∝ →𝑃=𝑘
𝑉 𝑉
Boyle comprobó esto fácilmente, introduciendo en un tubo curvo cantidades de mercurio de manera
creciente y verificó que el volumen del gas disminuía a medida que aumentaba la presión que ejercía la
columna de mercurio:
La ley de Charles – Gay Lussac establece que el volumen de una cantidad fija de gas mantenido a presión
constante es directamente proporcional a la temperatura absoluta del gas. Es decir, el gas se expande a
mayor temperatura y se contrae a menores temperaturas.
𝑉 ∝ 𝑇 → 𝑉 = 𝑘𝑇
En la siguiente imagen puede verse la variación del volumen de una muestra de gas con respecto a la
temperatura, a presión constante. Al ser directamente proporcional, la gráfica es una recta. Cada línea
representa la variación a cierta presión, y cuando estas se extienden, todas coinciden en el punto que
representa el volumen cero a una temperatura que es igual al cero absoluto.
48
Ley de Avogadro (n – T)
Establece que, a presión y temperatura constantes, el volumen del gas es directamente proporcional al
número de moles del gas presente
𝑉 ∝ 𝑛 → 𝑉 = 𝑘𝑛
Gas ideal
Un gas ideal es un gas hipotético cuyo comportamiento de presión, volumen y temperatura se puede
describir completamente con la ecuación de los gases ideales. Debe cumplir con dos características: las
moléculas de un gas ideal no se atraen ni repelen, y el volumen del gas ideal es despreciable en relación del
volumen del recipiente que lo contiene.
𝑉 ∝ 𝑇 → 𝑉 = 𝑘𝑇
𝑉 ∝ 𝑛 → 𝑉 = 𝑘𝑛
𝑛𝑇 𝑛𝑅𝑇
𝑉 ∝ →𝑉=
𝑃 𝑃
Despejando:
𝑚
𝑛=
𝑃𝑀
Reemplazando n:
𝑚
𝑛𝑅𝑇 𝑃𝑀 𝑅𝑇 𝑚𝑅𝑇
𝑉= = →𝑃=
𝑃 𝑃 𝑉 𝑃𝑀
49
Pero el cociente entre masa y volumen es la densidad, entonces:
𝛿𝑅𝑇 𝛿𝑅𝑇
𝑃= → 𝑃𝑀 =
𝑃𝑀 𝑃
En los casos que implican mezclas de gases, la presión total de una mezcla de gases es igual a la suma de las
presiones que cada gas ejerciera si estuviera solo:
𝑛1 𝑅𝑇 𝑛2 𝑅𝑇 𝑛𝑛 𝑅𝑇 𝑅𝑇
𝑃𝑇 = 𝑃1 + 𝑃2 + ⋯ + 𝑃𝑛 = + + ⋯+ = (𝑛1 + 𝑛2 + ⋯ + 𝑛𝑛 )
𝑉 𝑉 𝑉 𝑉
Y si hacemos el cociente entre cada presión y la presión total se obtienen las fracciones molares del gas,
que es una cantidad adimensional que expresa la relación del número de moles de un componente con el
número de moles de todos los compuestos presentes:
𝑛𝑛 𝑅𝑇
𝑃𝑛 𝑉 𝑛𝑛
𝑋𝑛 = = =
𝑃𝑇 𝑅𝑇 𝑛1 + 𝑛2 + ⋯ + 𝑛𝑛
(𝑛1 + 𝑛2 + ⋯ + 𝑛𝑛 )
𝑉
𝑃𝑛 = 𝑃𝑇 𝑋𝑛
Entendemos por teoría cinética de la materia a la teoría que desea explicar las propiedades observables en
niveles macroscópicos de sistema a partir de las leyes que gobiernan las partículas microscópicas que los
forman. Los postulados de la teoría cinética son:
50
Se intentará demostrar que la presión de un gas y su temperatura son proporcionales a su energía cinética.
Consideremos un recipiente de forma cúbica, con aristas de longitud d, que contiene en su interior una
molécula de un gas que se mueve aleatoriamente a una velocidad 𝑣 = 𝑣𝑥 + 𝑣𝑦 + 𝑣𝑧
En teoría, el choque contra la pared es perfectamente elástico. Por lo que si la cantidad de movimiento que
traía la partícula era 𝑚𝑉𝑥 y luego del impacto cambia su dirección pero no el modulo, es decir −𝑚𝑣𝑥 , la
𝐾𝑔 𝑚
cantidad de movimiento transmitida a la pared es de ∆𝑝𝑥 = 𝑚𝑣𝑥 − (−𝑚𝑣𝑥 ) = 2𝑚𝑣𝑥 [ 𝑠
]
∆𝑝𝑥
= 𝐹𝑥 → ∆𝑝𝑥 = 𝐹𝑥 ∆𝑡
∆𝑡
Una vez producido el choque, la molécula irá a la pared de enfrente, chocará y volverá. El tiempo empleado
en el camino de ida y vuelta lo podemos expresar como:
2𝑑
∆𝑡 =
𝑣𝑥
Reemplazando:
2𝑚𝑣𝑥 2𝑚𝑣𝑥 𝑚 2
∆𝑝𝑥 = 𝐹𝑥 ∆𝑡 = 2𝑚𝑣𝑥 → 𝐹𝑥 = = = 𝑣
∆𝑡 2𝑑 𝑑 𝑥
𝑣𝑥
Entonces, esa es la fuerza ejercida por una molécula en x, para un numero N de moléculas:
𝑁𝑚
𝐹𝑥 = [𝑣1𝑥 2 + 𝑣2𝑥 2 + ⋯ + 𝑣𝑛𝑥 2 ]
𝑑
Como una molécula tiene una velocidad v, con sus componentes en el eje x, y, z, entonces:
51
𝑁𝑚 𝑁𝑚 𝑁𝑚 𝑁𝑚
𝐹 = 𝐹𝑥 2 + 𝐹𝑦 2 + 𝐹𝑧 2 = 𝑣𝑝𝑥 2 + 𝑣𝑝𝑦 2 + 𝑣𝑝𝑧 2 = [𝑣𝑝𝑥 2 + 𝑣𝑝𝑦 2 + 𝑣𝑝𝑧 2 ]
𝑑 𝑑 𝑑 𝑑
Si consideramos que al ser un numero grande de partículas y al ser el movimiento aleatorio, los valores
promedio de las componentes de la velocidad son iguales entre sí. Entonces, encontramos que:
𝑣𝑝 2
𝑣𝑝 2 = 𝑣𝑝𝑥 2 + 𝑣𝑝𝑦 2 + 𝑣𝑝𝑧 2 = 3𝑣𝑝𝑥 2 → 𝑣𝑝𝑥 2 =
3
𝑁𝑚 𝑁 𝑚 𝑣𝑝 2
𝐹𝑥 = 𝑣𝑝𝑥 2 =
𝑑 𝑑 3
𝑁 𝑚 𝑣𝑝 2 2 2
𝐹𝑥
𝑃𝑥 = 2 = 𝑑 3 = 𝑁 𝑚 𝑣𝑝 → 𝑁 𝑚 𝑣𝑝 = 𝑃 → [2𝑁] [1 𝑚 𝑣 2 ] = 𝑃 → [2𝑁] [𝐸 ] = 𝑃
𝑥 𝑝 𝑥 𝑐 𝑥
𝑑 𝑑2 3 𝑑3 𝑉 3 3𝑉 2 3𝑉
Este resultado muestra que la presión es proporcional al número de moléculas por unidad de volumen y a
la energía cinética traslacional promedio de la molécula:
𝑃 ∝ 𝐸𝑐 𝑃∝𝑁
Debido a que en un gas el número de moléculas es del orden de 1023, la cantidad de movimiento
transferida a la pared es constante y uniforme en todos los puntos en situación de equilibrio térmico. En
otras palabras, la presión en un gas es la misma en todos los puntos del recipiente cuando existe equilibrio
térmico.
Si:
2 𝑅
𝑃𝑉 = 𝑛𝑅𝑇 = [ 𝑁] [𝐸𝑐 ] → 𝑇 = [𝐸𝑐 ]
3 𝑁
Y R/N es la constante de Boltzmann. Entonces la temperatura está relacionada con la energía cinética
media de las moléculas.
3𝑅𝑇
𝑣𝑐𝑚 = √
𝑃𝑀
Compresibilidad de los gases: como las moléculas en la fase gaseosa se encuentran separadas por
grandes distancias, los gases se pueden comprimir fácilmente para ocupar un volumen menor.
Ley de Boyle: la presión ejercida por un gas es consecuencia del impacto de sus moléculas sobre las
paredes del recipiente que lo contiene. La velocidad de colisión o el número de colisiones
moleculares por segundo contra las paredes es proporcional a la densidad numérica del gas. Al
disminuir el volumen que ocupa una cierta cantidad de gas aumenta la densidad numérica y por lo
tanto la velocidad de colisión. En consecuencia, al disminuir el volumen aumenta la presión.
Ley de Charles: puesto que la energía cinética promedio de las moléculas de un gas es proporcional
a la temperatura absoluta de la muestra, al elevar la temperatura aumenta la energía cinética
52
promedio. Por consiguiente, las moléculas chocan más a menudo contra las paredes del recipiente
y con mayor fuerza si el gas se calienta, por lo tanto, a mayor temperatura mayor presión.
Ley de Avogadro: a la misma presión y temperatura, volúmenes iguales de gases iguales o
diferentes, contienen igual número de moléculas.
Ley de Dalton de las presiones parciales: si las moléculas no se atraen ni repelen entre si, entonces
la presión ejercida por un tipo de molécula no se afectará por la presencia de otro gas. Como
consecuencia, la presión total estará dada por la suma de las presiones parciales.
La teoría cinética de los gases permite investigar el movimiento molecular con mayor detalle. Suponga que
tenemos muchas moléculas de gas en un recipiente, mientras la temperatura se mantenga constante, la
energía cinética promedio y la velocidad cuadrática media permanecerán inalteradas con el paso del
tiempo. Como es de esperar, el movimiento de las moléculas resulta totalmente aleatorio e irrepetible. En
un momento dado, ¿cuántas moléculas estarán en movimiento a una velocidad particular? Para responder
a esta pregunta, Maxwell analizó el comportamiento de las moléculas de los gases a distintas temperaturas.
En la siguiente figura se muestran algunas curvas de distribución de velocidad, que indica el número de
moléculas que se mueven a cierta velocidad. El pico de cada curva representa la velocidad más probable, es
decir, la velocidad del mayor número de moléculas. Para una cierta temperatura dada, la velocidad
molecular es inversamente proporcional al peso molecular. Además, al aumentar la temperatura, aumenta
la velocidad de las moléculas.
53
Ley de Graham: bajo las mismas condiciones de presión y temperatura, las velocidades de difusión de los
gases son inversamente proporcionales a las raíces cuadradas de sus masas molares. Esto se expresa como:
𝑣1 𝑃𝑀1
=√
𝑣2 𝑃𝑀2
Difusión: es la mezcla gradual de las moléculas de un gas con moléculas de otro gas en virtud de sus
propiedades cinéticas, constituye una demostración directa del movimiento aleatorio de los gases. A pesar
de que las velocidades moleculares son muy grandes, el proceso de difusión toma un tiempo considerable
para completarse. La razón es que una molécula experimenta numerosas colisiones mientras se mueve a
través de otras. Se produce a favor de gradiente, es decir, de donde hay mayor concentración a donde hay
menor concentración.
Los gases reales no cumplen exactamente las leyes de los gases ideales. A medida que aumenta la
presión o disminuye la temperatura aparecen desviaciones del comportamiento ideal. Un índice de esta
desviación es el llamado coeficiente de compresibilidad:
𝑃𝑉
𝑍=
𝑅𝑇
Las leyes de los gases ideales fueron deducidas de la teoría cinética en base a dos importantes suposiciones
que el volumen de las moléculas es despreciable en comparación con el volumen total del gas, y que las
moléculas no se atraen mutuamente. Debido a que ninguna de estas dos suposiciones se puede considerar
aplicable a los gases reales, éstos presentan desviaciones del comportamiento ideal. En realidad, las
moléculas poseen un volumen efectivo, y fuerzas de atracción mutua y repulsión entre ellas. Ha habido
numerosos intentos de encontrar ecuaciones que satisfagan mejor el comportamiento de los gases reales.
La más reproducida de ellas es la introducida en 1873 por Van der Waals. Este investigador holandés
supone que la presión y el volumen medidos experimentalmente no coinciden con los de la ecuación de los
gases ideales porque, por una parte, las moléculas ocupan un volumen real que debe ser descontado del
volumen total del recipiente, y por otra, hay que contar con la presencia de fuerzas intermoleculares que
frenan las moléculas en su choque con las paredes, con lo que la presión resulta menor que la esperada
teóricamente. La ecuación sería la siguiente:
54
𝑎𝑛2
(𝑃 + ) (𝑉 − 𝑛𝑏) = 𝑛𝑅𝑇
𝑉2
En donde b se conoce como volumen no compresible. ¿Qué tan cerca se pueden acercar dos moléculas?
Cada molécula está rodeada por una esfera imaginaria, cuyo radio r es igual a la suma de los radios
de las moléculas que chocan. Esta esfera define el volumen excluido, en el que el centro de otra molécula
no puede entrar.
4𝜋 (2𝑟)3
𝑏=
3
Licuación de gases
La licuación o conversión de un gas en líquido es uno de los fenómenos que demuestran la existencia de
fuerzas intermoleculares y tiene gran importancia científica y tecnológica. La licuefacción puede
conseguirse bien aumentando la presión, o bien disminuyendo la temperatura, o haciendo las dos cosas
simultáneamente. La razón de ello está en que la presión aproxima las moléculas unas a otras permitiendo
que entren en juego las atracciones intermoleculares, pero aumenta la energía cinética de las mismas,
mientras que el enfriamiento disminuye la energía cinética de las moléculas causante de su dispersión y
alejamiento.
Hay que tener en cuenta que cada gas tiene una temperatura específica, llamada temperatura critica por
encima de la cual no se puede licuar no importa cuánto se le comprima. Para licuar un gas por presión, por
lo dicho, hay que enfriarlo primero por debajo de su temperatura crítica. La temperatura crítica es una
medida de la intensidad de las fuerzas intermoleculares.
La presión del gas necesaria para licuarlo a su temperatura crítica se llama presión crítica. En ocasiones se
distingue entre gas y vapor, según si la sustancia gaseosa se encuentre por encima o por debajo de su
temperatura crítica. Vapor es una sustancia por debajo de la temperatura crítica y gas es una sustancia por
encima de la temperatura crítica. Es por ello que un vapor se puede licuar por simple compresión y un gas
es necesario enfriarlo por debajo de la temperatura crítica. El gas por encima de su temperatura crítica y a
presiones relativamente altas se denomina fluido supercrítico.
55
Efecto Joule-Thomson
Una técnica empleada para licuar gases a muy bajas temperaturas consiste en dejarlos expandirse
libremente, con lo que se enfrían sin realizar ningún trabajo exterior, este fenómeno se conoce como
efecto Joule-Thomson. Supongamos un recipiente aislado térmicamente del exterior dividido mediante un
diafragma en dos compartimentos, uno con el gas comprimido y el otro, vacío. Al pasar el gas por el orificio
desde un compartimiento a otro, las moléculas se separan entre sí venciendo la atracción intermolecular,
pero a costa de reducir su energía cinética y, por lo tanto, reduciendo su temperatura.
QUÍMICA NUCLEAR
Con excepción del hidrógeno, todos los núcleos contienen dos tipos de partículas fundamentales, los
protones y los neutrones. Algunos núcleos son inestables y espontáneamente emiten partículas o radiación
electromagnética. A este fenómeno se lo denomina radiactividad. Todos los elementos que tienen un
número atómico mayor a 83 son radiactivos. Existe otro tipo de radiactividad conocida como transmutación
nuclear, que se origina al bombardear el núcleo con neutrones, protones y otros núcleos. Con esta se
originaron muchos compuestos transuránicos artificiales, los cuales poseen semividas muy cortas
desintegrándose rápidamente.
La desintegración y la transmutación nuclear son reacciones nucleares, muy distintas a las reacciones
químicas ordinarias, principalmente porque los elementos cambian de uno a otro, están involucradas todas
las partículas y no solo los electrones, las cantidades de energía absorbidas o liberadas son tremendas y,
por último, porque las velocidades de las reacciones no se ven afectadas normalmente por la presión, la
temperatura y otras condiciones.
Partículas elementales
1 Protón
+1𝑝
1 Neutrón
0𝑛
0 Electrón proveniente de un orbital atómico
−1𝑒
56
Balanceo de las ecuaciones nucleares
Al balancear cualquier ecuación nuclear, se deben cumplir que el número total de protones y neutrones, y
el número total de cargas nucleares en los productos y reactivos sean los mismos.
Estabilidad nuclear
El núcleo ocupa una porción muy pequeña del volumen total de un átomo, pero contiene la mayor parte de
su masa porque allí residen los protones y los neutrones. Al estudiar la estabilidad del núcleo atómico,
conviene conocer algo acerca de su densidad, ya que esta propiedad refleja que tan empaquetadas se
hallan las partículas.
La enorme densidad del núcleo nos lleva a preguntar qué es lo que mantiene fuertemente unidas a las
partículas, ya que de acuerdo a la ley de Coulomb las cargas iguales se repelen, además existen fuerzas de
atracción de corto alcance entre protones, neutrones y protones y neutrones. La estabilidad del núcleo
depende de la diferencia entre estas fuerzas de atracción y las fuerzas de repulsión. Si las de repulsión son
mayores, el núcleo se desintegra y emite partículas o radiación. Si predominan las de atracción, el núcleo es
estable.
El factor principal que determina la estabilidad del núcleo es la relación neutrón protón. Para los átomos de
número atómico bajo se acerca a 1. Conforme aumenta el número atómico, la relación crece haciéndose
mayor a 1.
Los núcleos más estables se localizan en una zona llamada banda de estabilidad. La mayor parte de los
núcleos radiactivos se encuentran fuera de este cinturón. Por arriba de este, los núcleos tienen una
proporción mayor que aquellos que se encuentran dentro del mismo, y para disminuir esta proporción, se
emiten partículas beta que lleva a aumentar el número de protones en el núcleo y se disminuye el número
de neutrones. Por debajo de esta banda, los núcleos tienen una proporción menor y para aumentarla,
emiten un positrón o capturan un electrón. La captura de un electrón se lleva a cabo por el núcleo, cuando
es capturado, se combina con un protón para formar un neutrón y de esta manera el número atómico
disminuye en una unidad, pero el número de masa no cambia.
57
Periodo de semidesintegración
Radiactividad natural
Los núcleos que se encuentran fuera de la banda de estabilidad y los que poseen más de 83 protones
tienden a ser inestables. La radiactividad emite partículas o radiaciones alfa, beta y gama
espontáneamente.
Fisión nuclear
En el proceso de fisión nuclear se divide un átomo pesada para formar núcleos más pequeños de masa
intermedia y uno o más neutrones. Este proceso libera una gran cantidad de energía debido a que el núcleo
pesado es menos estable que sus productos. La fisión produce más neutrones que los que se capturan al
principio. Por esta propiedad es posible obtener una reacción nuclear en cadena, es decir, una secuencia
autosuficiente de reacciones de fisión nuclear. Los neutrones iniciales producen más neutrones y así
58
indefinidamente, volviendo a la reacción incontrolable, para evitar esto, se utilizan moderadores. Se utiliza
en los reactores nucleares (de agua ligera, de agua pesada y de cría), además se aplicó en las bombas
nucleares.
Fusión nuclear
A diferencia del proceso de fisión nuclear, la fusión nuclear es la combinación de pequeños núcleos para
formar otros más grandes. Para los elementos más pequeños, la estabilidad nuclear aumenta con el
número de masa. Este comportamiento sugiere que, si dos núcleos ligeros se combinan para formar uno
más grande y estable, se liberará una gran cantidad de energía en el proceso. Las reacciones de fusión
también son llamadas termonucleares, ya que solo se llevan a cabo en temperaturas muy elevadas.
59
ESTADO LÍQUIDO:
Los líquidos se pueden encontrar por todas partes en nuestra vida cotidiana. El líquido más importante para
los seres vivos es el agua.
El estado líquido es una de los estados de agregación de la materia que se caracteriza por su: expansión
limitada, falta de forma característica, conservación de volumen, baja compresibilidad, alta densidad y
miscibilidad con otros líquidos.
En los líquidos las moléculas se encuentran más próximas entre sí que en los gases, ejercen alguna fuerza
de atracción o repulsión entre sí y no son perfectamente elásticas. El resultado son las siguientes
características generales de los líquidos:
Expansión limitada: Los líquidos no se expanden infinitamente como los gases.
Forma: Los líquidos no tienen una forma característica y toman la del recipiente que los contiene.
Volumen: Los líquidos conservan su volumen sin importar el tamaño del recipiente q los contenga.
Compresibilidad: Son ligeramente compresibles cuando ocurre algún cambio de temperatura o de
presión.
Alta densidad: Tienen una densidad mucho mayor a la de los gases.
Miscibilidad: Las moléculas de un líquido se encuentran en un movimiento constante. A diferencia
de un gas, las moléculas de un líquido pueden moverse solo a una corta distancia antes de chocar
con otra molécula, reduciendo su movimiento.
Es la propiedad que tiene un líquido de arrastrar las moléculas superficiales hacia su centro y por
consiguiente reducir la superficie a un mínimo. Es la cantidad de energía necesaria para estirar o aumentar
la superficie de un líquido por unidad de área.
Esta propiedad de un líquido puede explicarse por las diferencias en las fuerzas de atracción
intermoleculares de diferentes líquidos. Cualquier molécula que se encuentre en el seno del líquido está
rodeada por moléculas que la atraen con igual fuerza en todas direcciones. Pero una molécula que se
encuentre por debajo de la superficie de un líquido, es atraída por moléculas que se encuentran por debajo
de ella y no por encima. Esto da como resultado una fuerza que no está balanceada y que se dirige hacia
abajo, tendiendo a arrastrar a las moléculas de la superficie hacia el seno del líquido y con ello la superficie
se reduce a un mínimo, por lo que el líquido se comporta como un sólido en su superficie.
Cuanto más fuerte son los enlaces entre las moléculas en el líquido, más grande es la tensión superficial.
Hay también una fuerza de adhesión entre un líquido y las paredes del recipiente que lo contiene. Cuando
la fuerza de adhesión es más grande que la fuerza de cohesión entre las moléculas liquidas, se dice que el
líquido moja al sólido.
60
Capilaridad
Es la cualidad que posee una sustancia de absorber a otra. Sucede cuando las fuerzas intermoleculares
adhesivas entre el líquido y el sólido son mayores que las fuerzas intermoleculares cohesivas del líquido.
Esto causa que el menisco tenga una forma cóncava o convexa cuando el líquido está en contacto con una
superficie vertical. El líquido es absorbido en contra de la gravedad. Para demostrar la capilaridad se utiliza
un aparato llamado tubo capilar:
Cuando la parte inferior de un tubo de vidrio se pone en contacto con un líquido como el agua, la tensión
superficial succiona la columna liquida hacia arriba hasta que el peso del líquido sea suficiente para que la
fuerza de la gravedad se equilibre con las fuerzas intermoleculares.
El peso de la columna liquida es proporcional al cuadrado del diámetro del tubo, por lo que un tubo
angosto succionara el líquido más arriba que un tubo ancho. Cuanto más pequeño es el diámetro del tubo
capilar, mayor será la presión capilar y la altura alcanzada.
La capilaridad es la subida espontanea de un líquido a un tubo estrecho. Se debe a dos tipos de fuerzas
diferentes: cohesivas, que son las fuerzas entre las moléculas del líquido; y adhesivas, que son las fuerzas
que operan entre las moléculas del líquido y el capilar. En el agua las fuerzas cohesivas corresponden a los
enlaces por puente de hidrogeno. Las fuerzas adhesivas ocurren cuando el capilar está compuesto de un
material que tiene enlaces polares, como el vidrio.
El agua tiene la capacidad de ascender por un tubo de vidrio porque las fuerzas de adhesión agua-vidrio son
mayores que la fuerza de cohesión agua-agua. Cuando las fuerzas cohesivas son mayores que las fuerzas
adhesivas, se forma un menisco convexo, como es el caso del mercurio.
61
El menisco formado es el resultado del balance de fuerzas entre la adhesión tirando para la columna para
mojar la pared de vidrio y la fuerza de gravedad tirando hacia abajo en el líquido.
Pueden ocurrir dos casos según sea la intensidad de las fuerzas de cohesión y adherencia:
Que el líquido moje. Las fuerzas de adherencia son mayores que la de cohesión. Menisco cóncavo.
Que el líquido no moje. Las fuerzas de cohesión son mayores que la de adherencia. Menisco
convexo.
Viscosidad
Es otra propiedad importante de los líquidos y se trata de la resistencia de un líquido a fluir. Algunos
líquidos, como la miel, se resisten a fluir; pero otros como el agua fluyen con mucha facilidad. Esta
propiedad puede explicarse mediante las fuerzas de atracción o cohesión entre sus moléculas. Mientras
mayores sean las fuerzas de atracción, más viscoso será el líquido. La viscosidad se mide determinando la
razón a la cual un líquido fluye a través de un tubo de vidrio con diámetro pequeño. La viscosidad se
reporta en unidades llamadas Poise. Cuando la temperatura aumenta, la energía cinética promedio
aumenta, lo cual rompe las fuerzas intermoleculares y disminuye la viscosidad de una sustancia.
Presión de vapor:
La presión de vapor de equilibrio es la presión de vapor medida cuando hay un equilibrio dinámico entre la
condensación y la evaporación.
La teoría molecular cinética sugiere que la presión de vapor de un líquido depende de su temperatura, a
mayor temperatura, mayor presión.
La presión del vapor se incrementa más rápidamente que la temperatura del sistema. Los líquidos que
tienen presiones de vapor elevadas se dice que son volátiles, esta propiedad depende de las fuerzas
intermoleculares existentes en el líquido. A menor fuerza molecular, menor será la presión de vapor y más
volátil será el líquido. La presión de vapor de un líquido es independiente de la cantidad presente de líquido
y vapor, pero varia con la temperatura. La presión de vapor de un líquido es la presión que ejerce un vapor
en equilibrio con su líquido.
62
Enlaces hidrogeno y las características anómalas del agua
La mayoría de los sólidos se expanden cuando se derriten. El agua se expande cuando se congela.
La mayoría de los sólidos son más densos que sus líquidos correspondientes. El hielo es menos
denso que el agua líquida.
El agua tiene un punto de fusión 100ºC más arriba de lo esperado con base a los puntos de fusión
del H2S, H2Se y H2Te.
El agua tiene un punto de ebullición de casi 200ºC más arriba de lo esperado en base a los puntos
de ebullición de H2S, H2Se y H2Te.
El agua tiene mayor tensión superficial que cualquier otro líquido común, excepto el mercurio.
El agua tiene una viscosidad inusualmente grande.
El agua es un solvente excelente.
El agua tiene una capacidad de calor inusualmente alta. Se requiere más calor para elevar la
temperatura de un gramo de agua en 1ºC que cualquier otro líquido.
Todas estas propiedades anómalas resultan de los enlaces intermoleculares fuertes en el agua. El agua se
puede describir como una molécula polar en la cual hay una separación parcial de carga para dar polos
positivos y negativos. La fuerza de atracción de un átomo de hidrogeno positivamente cargado en una
molécula de agua y el átomo de oxigeno negativamente cargado, da lugar a un enlace intermolecular
fuerte. Este tipo de unión dipolo-dipolo entre las moléculas de agua se conoce como enlace por puente de
hidrogeno. Los enlaces por puente de hidrogeno son inusualmente fuertes.
Evaporación
A temperaturas muy por debajo del punto de ebullición, algunas moléculas de la superficie de un líquido se
mueven tan rápidamente que pueden escaparse del líquido. Cuando sucede esto, la temperatura del
líquido disminuye, por lo que el líquido debe estar más frio. Por lo tanto, absorbe energía de sus
alrededores hasta que vuelve al equilibrio térmico. Pero tan pronto como suceda esto, algunas de las
moléculas de agua logran tener nuevamente bastante energía para escaparse del líquido. Así, en un envase
abierto este proceso continuo hasta que toda el agua se evapora.
En un envase cerrado, algunas de las moléculas se escapan de la superficie del líquido para formar vapor. La
tasa a la cual el líquido se evapora para formar el gas llega a ser eventualmente igual a la tasa a la cual el
gas se condensa para formar líquido. En este punto, el sistema se dice que está en equilibrio. El espacio
sobre el líquido se satura con el vapor de agua y no se evapora más agua.
Cuando se calienta un líquido, alcanza eventualmente una temperatura en la cual la presión de vapor es lo
bastante grande como para que se formen burbujas dentro del cuerpo del líquido. Esta temperatura se
llama punto de ebullición. Una vez que el líquido comience a hervir, la temperatura permanece constante
hasta que todo el líquido se transforme en gas. El punto de ebullición es la temperatura a la que la presión
de vapor del líquido es igual a la presión atmosférica. El punto de ebullición del agua es de 100ºC, porque a
esa temperatura la presión del vapor de agua es de una atmosfera, es decir, es igual a la presión
atmosférica.
A 100ºC, en condiciones normales, el agua empezara una transición de fase a un estado gaseoso. Por
consiguiente, no importa cuán alta sea la llama de la cocina (mayor aporte de calor), el agua hirviendo en
63
un recipiente se mantendrá a 100ºC (punto de ebullición). El exceso de energía introducido por la alta llama
acelerara la transición de líquido a gas, pero no cambiara la temperatura.
Los líquidos tienen una temperatura característica a la cual se solidifican, conocida como punto de
congelación. En teoría, el punto de fusión de un sólido debe ser igual al punto de congelación del líquido.
En la práctica existen diferencias pequeñas que pueden ser observadas.
Es difícil calentar un sólido por encima de su punto de fusión porque el calor que entra en el sólido en su
punto de fusión es utilizado para convertir el sólido en un líquido. Es posible, sin embargo, enfriar algunos
líquidos a temperaturas debajo de sus puntos de congelación sin la formación de un sólido. Cuando se hace
esto, se dice que el líquido este sobreenfriado.
A 100ºC el agua empieza a experimentar una transición de fase y la temperatura se mantiene constante,
aun cuando se añade energía. La energía que se introduce durante este periodo es la responsable de la
separación de las fuerzas intermoleculares para que las moléculas de agua puedan escapar hacia el estado
gaseoso. Finalmente, una vez que la transición ha terminado, si se añade más energía al sistema,
aumentara el calor del agua gaseosa o vapor sobrecalentado.
Calor de fusión: Se denomina así a la energía (entalpia) asociada a un sólido que se funde. Se denomina
entalpia molar de fusión o calor a presión constante.
Calor de vaporazación: Se denomina así a la energía necesaria para que un mol de un líquido se evapore. Se
denomina entalpia molar de vaporización, es una medida de la intensidad de las fuerzas intermoleculares
que se ejercen en un líquido.
Calor sensible: Calor que se requiere o libera en un proceso de calentamiento o enfriamiento, sin que exista
un cambio de estado.
Vapor saturado: Es el punto en el cual las fases liquida y vapor se encuentran en equilibrio, a una
temperatura determinada.
64
Vapor sobrecalentado: Es aquel que se encuentra a una temperatura mayor que la temperatura de
saturación a una presión determinada.
La relación cuantitativa entre la presión de vapor P de un líquido y la temperatura absoluta T está dada por
la ecuación de Clausius-Clapeyron:
∆𝐻
ln 𝑃 = −
𝑅𝑇
Dicha ecuación, representa gráficamente a una recta. Si se conocen los calores de la entalpia de
vaporización y la presión de vapor de un líquido a una determinada temperatura, es posible calcular
mediante una variante de esta ecuación esa presión vapor a otra temperatura diferente:
𝑃1 ∆𝐻 1 1
ln = ( − )
𝑃2 𝑅 𝑇2 𝑇1
Resumen de conceptos
La presión de vapor de un líquido mide la tendencia del líquido a evaporarse. La presión de vapor es la
presión parcial del vapor cuando está en equilibrio dinámico con el líquido. En el equilibrio, la tasa de
transferencia de moléculas del líquido al vapor es igual a la tasa de transferencia del vapor al líquido.
Cuando mayor es la presión de vapor de un líquido, más fácilmente se evapora y más volátil es. La presión
de vapor aumenta de forma no lineal con la temperatura. Hay ebullición cuando la presión de vapor es
igual a la presión externa. El punto normal de ebullición es la temperatura en la que la presión de vapor es
igual a 1 atm.
Diagramas de fase
Fase es toda porción de un sistema con la misma estructura, con aproximadamente la misma composición y
propiedades en todo el material que la constituye y con una interface definida. Puede tener uno o varios
componentes. Componente, se refiere al tipo de material que puede distinguirse de otro por su naturaleza
de sustancia química diferente.
Los equilibrios entre fases pueden responder a los más variados tipos de sistemas heterogéneos: un líquido
en equilibrio con su vapor, una solución saturada en equilibrio con el soluto en exceso, dos líquidos
parcialmente solubles el uno en el otro, dos sólidos totalmente solubles en equilibrio con su fase fundida,
dos sólidos parcialmente solubles en equilibrio con un compuesto formado entre ellos, etc.
El comportamiento de estos sistemas en equilibrio se estudia por medio de gráficos que se conocen como
diagramas de fase que se obtienen graficando en función de variables como presión, temperatura y
composición.
La mayoría de los diagramas de fase han sido construidos según condiciones de equilibrio, siendo utilizadas
por ingenieros y científicos para entender y predecir muchos aspectos del comportamiento de materiales.
A partir de los diagramas de fase se puede obtener información como:
1. Conocer que fases están presentes a diferentes composiciones y temperaturas bajo condiciones de
equilibrio.
2. Averiguar la solubilidad, en el estado sólido y en el equilibrio, de un elemento compuesto en otro.
3. Determinar la temperatura a la cual una aleación enfriada bajo condiciones de equilibrio comienza
a solidificar y la temperatura a la cual ocurre la solidificación.
65
4. Conocer la temperatura a la cual comienzan a fundirse diferentes fases.
Un diagrama de fase, que muestra las tres fases, contiene tres curvas importantes y cada una representa
las condiciones de presión y temperatura en las que puede coexistir varias fases en equilibrio.
Punto triple: corresponde al punto en el cual las tres fases están en equilibrio a una temperatura y presión
determinada.
Punto sobre las curvas: representa un equilibrio entre dos fases.
Punto fuera de las curvas: corresponde a las condiciones en las que solo existe una sola fase.
Los diagramas de fase representan una expresión gráfica de la regla de las fases, la cual permite calcular el
número de fases que pueden coexistir en equilibrio en cualquier sistema, y su expresión matemática está
dada por:
P+F=C+2
Donde:
C= número de componentes del sistema.
P= número de fases presentes en equilibrio.
F= número de grados de libertad del sistema.
El número de componentes más dos, representa el número máximo de fases que pueden coexistir al
equilibrio, donde los grados de libertad no pueden ser inferiores a cero. El número de grados de libertad se
determina por la regla de las fases, si y solo si, el equilibrio entre las fases no está influenciado por la
gravedad, fuerzas eléctricas o magnéticas y solo se afecta por la temperatura, presión y concentración.
66
SÓLIDOS
En el estado sólido las partículas se encuentran en forma más compacta e interactuando fuertemente.
Llamamos sólido al estado de agregación caracterizado por ser compacto, incomprensible, con forma y
volumen propios, dependiendo esté último de las leyes de la dilatación, también se caracteriza por tener
sus partículas ordenadas cuyo movimiento es restringido.
Las partículas de un sólido no pueden fluir unas sobre otras y solamente pueden efectuar un movimiento
de vibración alrededor se su posición, por consiguiente, los sólidos tienen forma definida.
Como sus partículas están muy próximas, son incomprensibles y muy densos, en relación con los gases. Las
partículas de un sólido no difunden en otro sólido.
Punto de fusión
Algunos sólidos como el iodo y el hielo seco, se vaporizan sin pasar por el estado líquido a presión
atmosférica, se dicen que subliman. A este proceso se denomina también sublimación progresiva mientras
que el paso directo de gas a sólido sin pasar por el estado líquido se conoce como sublimación regresiva o
deposición. Los sólidos tienen presiones de vapor muy inferiores a los líquidos, los sólidos con presiones de
vapor elevadas subliman muy fácilmente.
El calor de fusión es una medida de las fuerzas intermoleculares de atracción en estado sólido. Los calores
de fusión aumentan generalmente con el aumento del punto de fusión. El calor de solidificación es igual en
magnitud al calor de fusión. Representa la cantidad de calor que debe eliminarse de una cantidad dada de
líquido en su punto de congelación para que solidifique.
Los sólidos pueden ser cristalinos o amorfos (no cristalinos). En un sólido cristalino, los átomos, iones o
moléculas están ordenados en disposiciones bien definidas. Estos sólidos suelen tener superficies planas o
caras que forman ángulos definidos entre sí. Las pilas ordenadas de partículas que producen estas caras
también hacen que los sólidos tengan formas muy regulares. El cuarzo y el diamante son sólidos cristalinos.
67
Un sólido amorfo (de las palabras griegas que significan “sin forma”) es un sólido cuyas partículas no tienen
una estructura ordenada. Estos sólidos carecen de formas y caras bien definidas. Muchos sólidos amorfos
son mezclas de moléculas que no se pueden apilar bien. Casi todos los demás se componen de moléculas
grandes y complejas. Entre los sólidos amorfos más conocidos están el hule y el vidrio.
Dado que las partículas de un sólido amorfo carecen de un orden de largo alcance, la intensidad de las
fuerzas moleculares varía de un punto a otro de una muestra. Por ello, los sólidos amorfos no se funden a
una temperatura específica; más bien, se reblandecen dentro de cierto intervalo de temperatura a medida
que se vencen las fuerzas intermoleculares de diferentes intensidades. Un sólido cristalino, en cambio,
funde a una temperatura específica.
Celdas unitarias
El orden característico de los sólidos cristalinos nos permite tener una imagen de todo un cristal
examinando sólo una pequeña parte de él. Podemos imaginar que el sólido se forma apilando bloques de
construcción idénticos, así como una pared de tabiques se forma apilando tabiques individuales
“idénticos”. La unidad de repetición de un sólido, el “tabique” cristalino, se denomina celda unitaria. En
general, las celdas unitarias son paralelepípedos (figuras con seis caras que son paralelogramos). Cada
celda unitaria puede describirse en términos de las longitudes de las aristas de la celda y los ángulos entre
dichas aristas. Las redes de todos los compuestos cristalinos se pueden describir en términos de siete tipos
básicos de celdas unitarias
Un sólido cristalino puede representarse mediante una matriz tridimensional de puntos, cada uno de los
cuales representa un entorno idéntico dentro del cristal. Tal matriz de puntos se denomina red cristalina.
Podemos visualizar la formación de toda la estructura cristalina acomodando el contenido de la celda
unitaria repetidamente en la red cristalina.
68
Hay tres tipos de celdas unitarias cúbicas, Si los puntos de red están sólo en las esquinas, describimos la
celda unitaria como cúbica primitiva. Si también hay un punto de red en el centro de la celda unitaria, la
celda es cúbica centrada en el cuerpo. Cuando la celda tiene puntos de red en el centro de cada cara
además de en las esquinas, es cúbica centrada en las caras.
Observe que los átomos que están en las esquinas y en las caras no quedan totalmente dentro de la celda
unitaria; más bien, se comparten entre celdas unitarias, la fracción de un átomo que ocupa una celda
unitaria cuando los átomos se comparten entre celdas.
Las estructuras que los sólidos cristalinos adoptan son aquellas que permiten el contacto más íntimo entre
las partículas, a fin de aumentar al máximo las fuerzas de atracción entre ellas. En muchos casos, las
partículas que constituyen los sólidos son esféricas o casi esféricas. Tal es el caso de los átomos en los
sólidos metálicos. Por tanto, resulta interesante considerar la forma en que esferas de igual tamaño se
pueden empacar de la forma más eficiente (esto es, con el mínimo de espacio vacío).
El acomodo más eficiente de una capa de esferas de igual tamaño se muestra en la siguiente figura:
Cada esfera está rodeada por otras seis en la capa. Se puede colocar una segunda capa de esferas en las
depresiones de la primera, encima de ella. Luego se puede agregar una tercera capa sobre la segunda con
69
las esferas asentadas en las depresiones de la segunda capa. Sin embargo, hay dos tipos de depresiones
para esta tercera capa, y dan pie a diferentes estructuras.
Si las esferas de la tercera capa se colocan alineadas con las de la primera, como en la figura superior de la
izquierda, la estructura se denomina empaquetamiento compacto hexagonal. La tercera capa repite la
primera, la cuarta repite la segunda, y así sucesivamente para dar una secuencia de capas que denotamos
con ABAB.
Por otro lado, las esferas de la tercera capa se pueden colocar de modo que no queden exactamente arriba
de las esferas de la primera capa. La estructura resultante, se denomina de empaquetamiento compacto
cúbico. En este caso es la cuarta capa la que repite la primera, y la secuencia de capas es ABCA.
En las dos estructuras de empaquetamiento compacto, cada esfera tiene 12 vecinas más cercanas
equidistantes: seis en un plano, tres arriba de ese plano y tres abajo. Decimos que cada esfera tiene un
número de coordinación de 12. El número de coordinación es el número de partículas que rodean
inmediatamente a una partícula en la estructura cristalina.
Si esferas de tamaño desigual están empacadas en una red, las partículas grandes a veces asumen uno de
los acomodos de empaquetamiento compacto, y las partículas pequeñas ocupan los huecos entre las
esferas grandes.
Sólidos moleculares
Los sólidos moleculares consisten en átomos o moléculas unidos por fuerzas intermoleculares (fuerzas
dipolo-dipolo, fuerzas de dispersión de London y puentes de hidrógeno). Dado que estas fuerzas son
débiles, los sólidos moleculares son blandos. Además, estos sólidos suelen tener puntos de fusión
relativamente bajos (por lo regular de menos de 200ºC). Casi todas las sustancias que son gases o líquidos a
temperatura ambiente forman sólidos moleculares a temperaturas bajas. Como ejemplos podemos citar al
agua y el dióxido de carbono
Las propiedades de los sólidos moleculares no sólo dependen de la intensidad de las fuerzas que actúan
entre las moléculas, sino también de la capacidad de las moléculas para empacarse de forma eficiente en
tres dimensiones. Por ejemplo, el benceno es una molécula plana altamente simétrica. El benceno tiene un
punto de fusión más alto que el tolueno, un compuesto en el que uno de los átomos de hidrógeno del
benceno ha sido sustituido por un grupo metil.
La menor simetría de las moléculas de tolueno evita que se empaquen de forma tan eficiente como las de
benceno. En consecuencia, las fuerzas intermoleculares que dependen de un contacto íntimo no son tan
eficaces, y el punto de fusión es más bajo. En contraste, el punto de ebullición del tolueno es más alto que
el del benceno, lo que indica que las fuerzas de atracción intermoleculares son mayores en el tolueno
líquido que en el benceno líquido. Los puntos de fusión y de ebullición del fenol, otro benceno sustituido
que se muestra en la figura, son ambos más altos que los del benceno a causa de la capacidad para formar
puentes de hidrógeno del grupo OH del fenol.
70
Sólidos de red covalente
Los sólidos de red covalente consisten en átomos unidos en grandes redes o cadenas mediante enlaces
covalentes. Puesto que los enlaces covalentes son mucho más fuertes que las fuerzas intermoleculares,
estos sólidos son mucho más duros y tienen un punto de fusión más alto que los sólidos moleculares. El
diamante y el grafito, dos alótropos del carbono son sólidos de red covalente. Otros ejemplos incluyen el
cuarzo, el carburo de silicio, y el nitruro de boro.
En el diamante, cada átomo de carbono está unido a otros cuatro átomos de carbono como se muestra en
la figura. Esta matriz tridimensional interconectada de fuertes enlaces sencillos carbono-carbono
contribuye a la inusitada dureza del diamante. Los diamantes de grado industrial se emplean en las hojas
de sierras para los trabajos de corte más exigentes. El diamante también tiene un elevado punto de fusión.
En el grafito, los átomos de carbono están dispuestos en capas de anillos hexagonales interconectados que
se encuentran en capas una por encima de la otra, como se muestra en la figura. Cada átomo de carbono
está unido a otros tres de la capa.
Sólidos metálicos
Los sólidos metálicos consisten exclusivamente en átomos de metal. Los sólidos metálicos suelen tener
estructuras de empaquetamiento compacto hexagonal, de empaquetamiento compacto cúbico (cúbica
centrada en las caras) o cúbica centrada en el cuerpo. Así, cada átomo normalmente tiene 8 o 12 átomos
adyacentes. Los enlaces metálicos son demasiado fuertes para deberse a fuerzas de dispersión de London,
y sin embargo no hay suficientes electrones de valencia para formar enlaces covalentes ordinarios entre los
átomos.
La unión se debe a electrones de valencia que están deslocalizados a lo largo de todo el sólido. De hecho,
podemos visualizar el metal como una matriz de iones positivos sumergida en un mar de electrones de
valencia deslocalizados.
En estos sólidos, los electrones de enlace se encuentran totalmente deslocalizados ocupando orbítales
moleculares que se extienden sobre la totalidad del cristal metálico, en el cual los cationes se ubican en
posiciones fijas. La movilidad electrónica resultante explica el alta conductividad eléctrica y térmica de los
metales. Se pueden suministrar electrones por medio de un generador de corriente eléctrica a un extremo
de un alambre metálico y recuperar una cantidad igual en forma prácticamente instantánea por el otro
extremo sin que se produzca ningún cambio observable en las propiedades físicas o químicas del metal.
Cuando se calienta el metal los electrones libres pueden adquirir energía cinética térmica y al moverse
rápidamente a través del cristal transportar el calor.
Cuando un haz de luz choca con una superficie metálica, origina un movimiento oscilatorio de los
electrones superficiales que los convierte en nuevos sistemas emisores de radiaciones electromagnéticas.
El efecto neto es que el rayo de luz incidente se refleja dando como resultado el brillo metálico.
71
Los metales varían considerablemente en cuanto a la fuerza de sus enlaces, como pone de manifiesto su
amplia gama de propiedades físicas, como dureza y punto de fusión.
Sólidos iónicos
Los sólidos iónicos consisten en iones que se mantienen unidos por enlaces iónicos. La fuerza de un enlace
iónico depende en gran medida de las cargas de los iones. Así, el NaCl, tiene un punto de fusión de 801 °C,
mientras que el MgO, funde a 2852 °C.
Estos son, en general, duros, quebradizos, buenos aislantes y tienen puntos de fusión y ebullición altos. En
la red cristalina iónica, se alternan aniones y cationes, entre los cuales actúan fuerzas electrostáticas de
magnitud considerable y no dirigidas, es decir que cada ion del cristal está ligado por fuerzas coulómbicas a
todos los otros iones, de tal manera que no hay grupos discretos de partículas.
Las fuerzas coulómbicas entre iones de distinto signo son atractivas (negativas) y entre iones de igual signo
son repulsivas (positivas) y el valor de la energía de formación del cristal depende de la importancia relativa
de cada tipo de fuerza coulómbica. Naturalmente, la estabilidad de los cristales iónicos existentes indica
que prevalecen las fuerzas de atracción sobre las de repulsión.
Estas fuerzas interiónicas explican la dureza y los altos puntos de fusión y ebullición; esto, sumado a la
resistencia a la movilidad de los iones de la red, impide la conductividad eléctrica y los convierte en buenos
aislantes. En cambio, cuando están fundidos son buenos conductores eléctricos porque los movimientos
iónicos se hacen más amplios.
Son poco solubles en la mayoría de los solventes, sólo lo hacen en los más polares, como por ejemplo el
agua.
Las estructuras de los sólidos iónicos simples se pueden clasificar en unos cuantos tipos básicos.
72
Resumen de características de los diversos tipos de enlace
Las sustancias químicas se clasifican en metálicas, iónicas, covalentes y moleculares. Los metales se
caracterizan por: presentar brillo metálico y conducir la corriente eléctrica y la energía térmica. En general,
tienen puntos de fusión y ebullición elevados y son dúctiles, tenaces y maleables.
Las sustancias iónicas presentan puntos de fusión y ebullición altos, caracterizándose por su dureza y
fragilidad.
Las sustancias covalentes, que forman redes bi y tridimensionales, son muy duras y tienen puntos de fusión
y ebullición muy altos.
Las sustancias moleculares suelen ser gases, líquidos y sólidos que presentan puntos de fusión y ebullición
bajos.
Polimorfismo
Un mismo compuesto puede cristalizar con más de una estructura. Se trata de la misma molécula pero que
se apila en el espacio de varias formas distintas creando estructuras cristalinas diferentes. Se les llama
polimorfos y al fenómeno polimorfismo, y es de importancia vital. Cada una de esos polimorfos tiene su
propio patrón de difracción, tienen un carnet de identidad diferente. Y lo que es más importante, sus
propiedades físicas y químicas son distintas. Estamos hablando de grafito y diamante, de aragonito y
calcita, pero también de chocolates y de fármacos.
Una misma molécula puede cristalizar de varias formas distintas. Lo entenderá con un sencillo ejemplo.
Hagamos un cristal en el que las celdas unidad sean monedas. Lo podemos hacer de dos maneras distintas,
es decir con dos estructuras distintas:
73
Una estructura cuadrada (a la derecha) y una estructura hexagonal (izquierda). A las distintas estructuras
en las que puede cristalizar un mismo compuesto químico se les llama polimorfos. Los polimorfos, a pesar
de tener la misma composición, en este caso monedas, tienen propiedades distintas. A simple vista, se
observa que la estructura hexagonal es más densa (las monedas dejan huecos entre ellas más pequeños)
que la estructura cuadrada.
Isotropía y anisotropía
La anisotropía es una consecuencia de la estructura interna del mineral. Si carece de organización interna
(minerales amorfos) o si presenta una organización muy regular son isótropos, los demás son anisótropos.
Un material es anisótropo cuando sus propiedades dependen de la orientación según la cual se hace la
medición de ellas.
Los minerales que cristalizan en el sistema cúbico, es decir, el de máxima simetría, con sus átomos o iones
igualmente distribuidos en las tres direcciones principales del espacio, son isótropos. Los pertenecientes al
resto de los sistemas cristalinos (hexagonal, trigonal, tetragonal, rómbico, monoclínico y triclino) son
anisótropos, las disposiciones de sus elementos constituyentes varían con la dirección y por tanto su
elasticidad para las ondas luminosas también es diferente.
74
TERMODINÁMICA
La termodinámica se ocupa de la energía y sus transformaciones en los sistemas desde un punto de vista
macroscópico.
Termoquímica
Cuando se produce una reacción química, no sólo hay una transformación de unas sustancias en otras, sino
que también tiene lugar un cambio energético. Este cambio es tal, que la reacción consume o produce
energía, ya sea en forma de calor, trabajo mecánico, trabajo eléctrico o energía luminosa.
La energía es, desde el punto de vista químico, la capacidad de producir cambios. Es una propiedad
inherente a los cuerpos materiales, los cuales, al transformarse por medio de reacciones químicas, o por
cambios de tipo físico, pueden liberar parte de su energía en nuevas formas de energías.
Sistemas termodinámicos
Sistema es la porción de materia cuyas propiedades estamos estudiando. Todo lo que le rodea constituye el
ambiente o entorno. El conjunto formado por el sistema y el ambiente se denomina universo. El estado
termodinámico del sistema es el conjunto de condiciones que especifican todas sus propiedades:
temperatura, presión, composición y estado físico.
Clasificación de sistemas
Abiertos: son los que intercambian energía y materia con el exterior. Un ejemplo sería una taza de café
caliente.
Cerrados: son aquellos que intercambian energía, pero no materia con el ambiente. Un ejemplo sería el
café en una jarra de vidrio tapada.
Aislados: son aquellos que no intercambian materia ni energía con el entorno, este sistema no produce
efectos observables sobre el exterior. Por ejemplo, el café en un termo.
75
Funciones de estado
Son magnitudes que tienen valores fijos característicos de cada estado del sistema. Su valor sólo depende
del estado del sistema y no de la forma en que el sistema alcanzó ese estado. Cualquier propiedad del
sistema que sólo dependa de los valores de sus funciones de estado también es una función de estado. La
composición, la energía, la temperatura, la presión y el volumen son funciones de estado.
Establece que la energía en un sistema puede convertirse de una forma en otra, pero no se crea ni
destruye. Esto es verificable midiendo el cambio de energía interna de un sistema entre su estado inicial y
su estado final:
∆𝐸 = 𝐸𝑓 − 𝐸𝑖
La energía interna del sistema tiene una componente cinética, que depende del movimiento molecular y de
los electrones dentro de las moléculas. La otra es una componente potencial que está determinada por las
fuerzas de atracción y repulsión entre electrones y núcleos, así como también por la interacción de las
moléculas.
De acuerdo a la primer ley de la termodinámica, la suma de los cambios de energia debe ser igual a cero,
por lo que si un sistema intercambia energia con sus alrededores:
∆𝐸𝑠𝑖𝑠𝑡𝑒𝑚𝑎 + ∆𝐸𝑎𝑙𝑟𝑒𝑑𝑒𝑑𝑜𝑟𝑒𝑠 = 0
∆𝐸𝑠𝑖𝑠𝑡𝑒𝑚𝑎 = −∆𝐸𝑎𝑙𝑟𝑒𝑑𝑒𝑑𝑜𝑟𝑒𝑠
Se llega a la conclusión que en un sistema que experimenta un cambio de energía, sus alrededores deben
experimentar un cambio de energía igual, pero de signo opuesto. Esto es lógico ya que la energía ganada en
un lugar tiene que ser perdida en algún otro sitio.
En química, se estudian los cambios asociados al sistema y no a los alrededores, por lo tanto, una forma
más útil de la primera ley es:
∆𝐸 = 𝑞 + 𝑤
76
Criterio de Signos
SSSSssssssssssssss
W>0 W<0
SISTEMA
Q>0 Q<0
Trabajo
𝑤 = −𝑃∆𝑉
Las unidades de trabajo, desde el punto de vista químico, se expresan en litros-atmósfera que son
aproximadamente 101,3 Joule. El trabajo no es una función de estado, ya que no solo depende de los
estados finales e iniciales, sino también de cómo se lleva a cabo el proceso.
En el lenguaje cotidiano solemos confundir los términos calor y temperatura. Así, cuando hablamos del
calor que hace en el verano o lo mal que saben los refrescos calientes, realmente nos referimos a la
temperatura, a la mayor o menor temperatura del aire o los refrescos. Las nociones científicas de calor y
temperatura se apoyan en la idea intuitiva que nos transmite nuestro propio cuerpo. Así, esa sensación
fisiológica revelada por el tacto, que permite clasificar los cuerpos en fríos y calientes, da lugar a la idea de
temperatura y por extensión a la de calor.
Sin embargo, la física va más allá de estas nociones intuitivas y busca representaciones que puedan ser
expresadas en forma numérica, esto es, como magnitudes o atributos medibles. La temperatura es una
magnitud física que nos permite definir el estado de una sustancia.
77
Cuando se ponen en contacto dos sustancias a distinta temperatura, evolucionan de forma que el cuerpo a
mayor temperatura la disminuye y el que tenía menor temperatura la aumenta hasta que al final los dos
tienen la misma temperatura, por lo que terminan alcanzando un estado de equilibrio entre ambos que se
denomina equilibrio térmico. Decimos que la sustancia a mayor temperatura ha cedido calor a la sustancia
que tenía menor temperatura.
La teoría cinético-molecular de la materia recibe ese nombre porque admite que las diferentes partículas,
átomos y moléculas, que constituyen las sustancias están en continuo movimiento. En los cuerpos sólidos
este movimiento es de vibración en torno a puntos fijos o de equilibrio. En los gases el movimiento es
desordenado y zigzagueante, a consecuencia de los choques de las moléculas del gas entre sí y con el
recipiente que las contiene. En los líquidos, como estado intermedio, pueden darse ambos tipos de
movimientos moleculares.
La temperatura es una medida del nivel de esa agitación térmica o interna de las partículas que constituyen
un cuerpo, nivel expresado por el valor de su energía cinética media. Cuanto mayor es la energía media de
agitación molecular, tanto mayor es la temperatura que detecta la sensibilidad del hombre y que miden los
termómetros
La energía térmica se debe al movimiento de las partículas que constituyen la materia. Un cuerpo a baja
temperatura tendrá menos energía térmica que otro que esté a mayor temperatura.
Pero hay que distinguir con claridad la diferencia entre la temperatura y la energía térmica, una taza de
café a 70°C tiene una temperatura mayor que una bañera llena de agua a 40°C, pero la bañera tiene mayor
energía térmica que la taza dado que posee mayor masa de líquido. En consecuencia, la temperatura es
una propiedad intensiva y la energía térmica es extensiva.
El calor es la energía que se transfiere entre un sistema y su entorno como consecuencia de una diferencia
de temperatura entre ambos.
Se diseñó un método para medir el calor transferido en función del incremento de temperatura de los
cuerpos: Existe una relación entre esta unidad y la unidad de energía del 1 Caloria son 4,18 Joule
El cambio de temperatura experimentado por un objeto cuando absorbe cierta cantidad de energía está
controlado por su capacidad calorífica. La capacidad calorífica de un objeto se define como la cantidad de
energía calorífica que se requiere para subir su temperatura 1 grado. Entre mayor sea la capacidad
calorífica
de un objeto, mayor será la energía requerida para subir su temperatura. Para una sustancia pura, la
capacidad calorífica se indica para una cantidad específica de dicha sustancia. A la capacidad calorífica de 1
mol de una sustancia se le conoce como capacidad calorífica molar.
La capacidad calorífica de 1 gramo de sustancia se le conoce con el nombre de calor específico. El calor
específico de una sustancia puede determinarse experimentalmente midiendo el cambio de la temperatura
(ΔT) que presenta una masa conocida (m) de la sustancia al ganar o perder una cantidad específica de calor
(q).
Sabemos que:
𝑞𝑠𝑖𝑠𝑡𝑒𝑚𝑎 = 𝑞𝑐𝑎𝑙 + 𝑞𝑟𝑒𝑎𝑐𝑐𝑖ó𝑛 = 0
Entonces:
𝑞𝑟𝑒𝑎𝑐𝑐𝑖ó𝑛 = − 𝑞𝑐𝑎𝑙 = −𝐶𝑐𝑎𝑙𝑜𝑟í𝑓𝑖𝑐𝑎 ∆𝑇
Entalpia
La mayoría de las reacciones ocurren en condiciones de presión constante. Si dicha reacción produce un
incremento neto en el número de moles de un gas, entonces el sistema realiza un trabajo sobre los
alrededores (expansión). Esto se debe al hecho de que para que el gas formado ingrese a la atmosfera debe
actuar contra la presión atmosférica. Si se consumen más moléculas de gas que de las que se producen, los
alrededores realizan un trabajo sobre el sistema. Por ultimo no se realiza trabajo alguno si no hay un
cambio neto en el número de moles de los gases de reactivos a productos.
∆𝐸 = 𝑞 + 𝑤 = 𝑞𝑝 − 𝑃∆𝑉
𝑞𝑝 = ∆𝐸 + 𝑃∆𝑉
Ahora se presenta una nueva función termodinámica de un sistema que se llama entalpia:
𝐻 = ∆𝐸 + 𝑃∆𝑉
Ahora se tienen dos cantidades ∆E y ∆H que se pueden asociar a una reacción. Si esta ocurre en
condiciones de volumen constante, entonces el cambio de calor q es igual a ∆E. Si ocurre a presión
constante, el cambio de calor q es igual a ∆H. Para un proceso a presión constante:
79
𝐻 = 𝑞𝑝
La mayoría de las reacciones ocurren a presión constante, se puede igualar el cambio de calor en estos
casos con el cambio de entalpia. Para cualquier reacción de este tipo se define el cambio de entalpia,
denominado entalpia de la reacción, que es la diferencia entre las entalpias de los productos y de los
reactivos. Dicha entalpia puede ser positiva, si el sistema absorbe calor (endotérmico), o negativa, si el
sistema cede calor (exotérmico). En la práctica no es posible medir la entalpia individual de reactivos y
productos, sino que se mide el cambio de la misma:
∆𝐻 = 𝐻𝑝𝑟𝑜𝑑𝑢𝑐𝑡𝑜𝑠 − 𝐻𝑟𝑒𝑎𝑐𝑡𝑖𝑣𝑜𝑠
Es posible determinar el cambio de entalpia de una reacción midiendo el calor absorbido o liberado.
Además el cambio de entalpia puede calcularse si se conocen las entalpias reales de los reactivos y
productos. No es posible medir el valor absoluto de entalpia, sino que solo se determinan valores relativos
con respecto de una circunferencia.
El punto de referencia que se toma, recibe el nombre de entalpia estándar de formación: ∆𝐻𝑓°
Se dice que las sustancias están en estado estándar a una atmosfera. Por convenio, la entalpia estándar de
formación de cualquier elemento en su forma más estable es cero.
Se puede definir a la entalpia estándar de formación de un compuesto como el cambio de calor relacionado
cuando se forma un mol de compuesto a partir de sus elementos a una atmosfera de presión. La
importancia de las entalpías estándar de formación, es que permiten calcular la entalpia estándar de la
reacción a una atmósfera de presión:
𝑎𝐴 + 𝑏𝐵 → 𝑐𝐶 + 𝑑𝐷
°
∆𝐻𝑟𝑒𝑎𝑐𝑐𝑖ó𝑛 = [𝑐 ∆𝐻𝑓° 𝐶 + 𝑑 ∆𝐻𝑓° 𝐷] − [𝑎 ∆𝐻𝑓° 𝐴 + 𝑏 ∆𝐻𝑓° 𝐵]
Muchos compuestos no se pueden sintetizar directamente a partir de sus elementos. En algunos casos, se
debe utilizar la Ley de Hess, que permite determinar la entalpia de reacción indirectamente. Dicha ley
enuncia lo siguiente: “Cuando los reactivos se convierten en productos, el cambio de entalpia es el mismo
independientemente de que se efectúe la reacción en un paso o en una serie de pasos”. En otras palabras,
es posible separar la reacción de interés en una serie de reacciones para las cuales se pueda medir el valor
° °
de ∆𝐻𝑟𝑒𝑎𝑐𝑐𝑖ó𝑛 y luego calcular el ∆𝐻𝑟𝑒𝑎𝑐𝑐𝑖ó𝑛 para la reacción total.
La regla general para aplicar la ley de Hess es que se debe acomodar una serie de reacciones químicas, de
tal manera que cuando se sumen se cancelen todas las especies excepto los reactivos y productos que
aparecen en la reacción global. Esto significa que deben quedar los elementos del lado izquierdo y los
compuestos del derecho. En algunos casos, para poder simplificar las ecuaciones, es necesario multiplicar
alguna o todas las ecuaciones por coeficientes para anularlas.
°
𝐶 + 𝑂2 → 𝐶𝑂2 ∆𝐻𝑟𝑒𝑎𝑐𝑐𝑖ó𝑛 = −393,5 𝑘𝐽/𝑚𝑜𝑙
80
1 ° 𝑘𝐽
𝐶𝑂2 → 𝐶𝑂 + 𝑂2 ∆𝐻𝑟𝑒𝑎𝑐𝑐𝑖ó𝑛 = +283
2 𝑚𝑜𝑙
1 °
𝐶+ 𝑂 → 𝐶𝑂 ∆𝐻𝑟𝑒𝑎𝑐𝑐𝑖ó𝑛 = −101,5 𝑘𝐽/𝑚𝑜𝑙
2 2
Tipos de entalpia
Entalpías de reacción: cantidad de calor obtenida o absorbida al hacer reaccionar las sustancias en las
cantidades molares representadas por sus ecuaciones químicas balanceadas, en sus estados estándares.
Entalpía de combustión: el quemar una sustancia en presencia de oxígeno se conoce como combustión,
este proceso siempre genera calor. La cantidad de calor obtenido depende de la cantidad y la naturaleza de
la sustancia quemada.
Entalpías de enlace: es una medida de la estabilidad de una molécula, es el cambio de entalpia necesario
para romper un enlace especifico de un mol de moléculas gaseosa de reactivo para formar un mol de
molécula gaseosa de producto.
Proceso reversible: es aquel que mediante un cambio en el medio ambiente, se puede hacer que recorra su
trayectoria a la inversa. Un proceso es reversible si, después de que ocurre, tanto el sistema como entorno
pueden, por cualquier medio posible, regresar a sus estados originales.
Proceso irreversible: ocurre espontáneamente en una dirección determinada con cambios drásticos del
sistema y su entorno lo que hace imposible la reversibilidad. Un proceso es no reversible cuando una vez
terminado el mismo nunca volverá a establecerse nuevamente el sistema inicial.
Los ríos corren de cordillera a mar y nunca al revés y sin embargo la primera ley solo exige que la energía
sea constante por lo que, de acuerdo a este principio, cualquier cambio puede ocurrir. Hacia 1870 se había
propuesto que la dirección de un cambio espontáneo es aquel en el que se disminuye la entalpía del
81
sistema es decir las reacciones exotérmicas .Pero los siguientes ej. Son una muestra de la existencia de
procesos espontáneos y endotérmicos:
Es necesario introducir otros conceptos que nos permitan determinar el curso normal de un
acontecimiento. Esa función se denomina entropía, y es una medida del grado de desorden o aleatoriedad
de un sistema.
Es una función de estado, y es una propiedad extensiva.
∆𝑆 = 𝑆𝑓 − 𝑆𝑖
La entropía puede considerarse como una medida de la probabilidad (desorden). Una forma simple de
enunciar la segunda ley de la termodinámica es: “Cualquier proceso que ocurre espontáneamente produce
un aumento de entropía del universo”. En un proceso reversible, la entropía del universo es constante. En
un proceso irreversible, la entropía aumenta.
Proceso reversible:
Proceso irreversible:
∆𝑆𝑢𝑛𝑖𝑣𝑒𝑟𝑠𝑜 = ∆𝑆𝑠𝑖𝑠𝑡𝑒𝑚𝑎 + ∆𝑆𝑒𝑛𝑡𝑜𝑟𝑛𝑜 > 0
La entropía está relacionada con la probabilidad. Esto fue observado por Boltzmann, quien propuso una
ecuación entre entropía y probabilidad:
𝑆 = 𝑘 𝐿𝑛 (𝑃)
Consideremos una sustancia cristalina perfecta en el cero absoluto. En estas condiciones, los movimientos
moleculares son mínimos, y el número de microestados es uno, ya que solo es posible distribuir de una
forma los átomos para formar un cristal perfecto. De acuerdo con la tercera ley de la termodinámica, la
entropía de una sustancia cristalina perfecta es cero a la temperatura del cero absoluto:
𝑆 = 𝑘 𝐿𝑛 (1) = 0
El punto importante de esta ley es que permite calcular la entropía absoluta de las sustancias a partir del
conocimiento de que la entropía de esa sustancia cristalina a cero absoluto es cero, y midiendo el cambio
de la misma hasta una temperatura deseada. Al calentar una sustancia, el movimiento molecular es mayor,
y en consecuencia su entropía aumenta, se la denomina entropía absoluta, debido a que el punto de
referencia es fijo.
∆𝑆 = 𝑆𝑓 − 𝑆𝑖
Entropía estándar
Se denomina entropía estándar a la entropía absoluta de una sustancia a 1 atm y 25°C. El valor de entropía
de las diferentes sustancias depende principalmente de los microestados y del nivel de orden que posean.
82
Por ejemplo, el grafito posee mayor entropía que el diamante, así como también la entropía del vapor de
agua es mayor que el del agua líquida.
Como la entropía es una función de estado, entonces el cambio de entropía en una reacción química
vendrá dado por la diferencia entre la entropía de los productos (estado final) y los reaccionantes (estado
inicial)
°
∆𝑆𝑟𝑒𝑎𝑐𝑐𝑖ó𝑛 = [𝑐 ∆𝑆°𝐶 + 𝑑 ∆𝑆°𝐷] − [𝑎 ∆𝑆°𝐴 + 𝑏 ∆𝑆°𝐵]
El valor de la entropía es negativo si el sistema al final está más ordenado que al inicio, caso contrario, si el
desorden aumenta, el valor de la misma es positivo
A continuación, se verá cómo se calcula la entropía de los alrededores. Cuando se lleva a cabo un proceso
exotérmico en el sistema, el calor transferido a los alrededores aumenta el movimiento de las partículas de
los alrededores. Como consecuencia, la entropía de los alrededores aumenta. Si el proceso es endotérmico,
se absorbe calor de los alrededores, disminuyendo el movimiento de las partículas del mismo y por eso la
entropía de los alrededores disminuye. Para los procesos a presión constante, el cambio de calor es igual al
cambio de entalpia del sistema, por ello el cambio de entropía de los alrededores es proporcional a la
entalpia del sistema:
∆𝑆𝑎𝑙𝑟𝑒𝑑𝑒𝑑𝑜𝑟𝑒𝑠 ∝ −∆𝐻𝑠𝑖𝑠𝑡𝑒𝑚𝑎
El cambio de entropía para determinada cantidad de calor absorbido también depende de la temperatura.
Si la temperatura de los alrededores es alta, las moléculas tendrán bastante energía. Por lo tanto, la
absorción de calor por un proceso exotérmico del sistema tendrá relativamente poco impacto en los
movimientos moleculares y el consiguiente aumento de la entropía será pequeño. Pero si la temperatura
de los alrededores es baja, entones la adición de la misma cantidad de calor producirá un incremento
notable de la cantidad de movimientos moleculares y por lo mismo un mayor incremento en la entropía. A
partir de la relación inversa entre la entropía de los alrededores y la temperatura, se llega a la siguiente
formula:
−∆𝐻𝑠𝑖𝑠𝑡𝑒𝑚𝑎
∆𝑆𝑎𝑙𝑟𝑒𝑑𝑒𝑑𝑜𝑟𝑒𝑠 =
𝑇
La segunda ley de la termodinámica indica que una reacción espontánea hace que la entropía del universo
se incremente, es decir, dicha entropía es mayor que cero. Para determinar el signo de la entropía del
universo cuando ocurre una reacción, es necesario calcular tanto el signo de la entropía del sistema como
la de los alrededores. Sin embargo, por lo general solo interesa lo que ocurre en un sistema en particular.
Por esto, es deseable tener otra función termodinámica que ayude a determinar si una reacción ocurrirá
espontáneamente si solo se considera al sistema:
83
∆𝐻𝑠𝑖𝑠𝑡𝑒𝑚𝑎
∆𝑆𝑢𝑛𝑖𝑣𝑒𝑟𝑠𝑜 = ∆𝑆𝑠𝑖𝑠𝑡𝑒𝑚𝑎 − >0
𝑇
Esta ecuación establece que para un proceso que se lleva a cabo a presión y temperatura constante, los
cambios de entalpia y entropía del sistema son tales que dicha resta es menor a cero, en dicho caso el
proceso debe ser espontáneo.
A fin de determinar la espontaneidad de una reacción de una manera directa, se introduce otra función
denominada energía libre:
𝐺 = 𝐻 − 𝑇𝑆
∆𝐺 = ∆𝐻 − 𝑇∆𝑆
Entonces, la energía libre es la energía disponible para realizar un trabajo. Conceptualmente podemos
definir ΔG como la fracción de variación total de energía que es capaz de efectuar trabajo a medida que el
sistema tiende al equilibrio. Cuanto más alejado esté el sistema del equilibrio, más trabajo podrá realizar.
En procesos irreversibles G < 0: esto representa una tendencia hacia el estado final. En una
reacción química indica que la formación de productos está favorecida (espontáneos).
Por el contrario, un valor de G > 0: representa una tendencia de espontaneidad hacia los
reactivos a partir de los productos (no espontáneos).
En procesos reversibles G = 0; esto representa la condición de un sistema estable en que la
tendencia entre los dos estados es la misma. En una reacción química esto indica que se ha
alcanzado un estado en que tanto reaccionantes como productos están en equilibrio químico.
Criterios de espontaneidad
Como, para una reacción determinada, es posible calcular el valor de H y S, entonces el valor de G
quedará determinado por los valores de estos parámetros:
84
H S G Resultado
+ No espontáneo a baja temperatura
+ + 2𝑁𝐻3 (𝑔) → 𝑁2 (𝑔) + 3𝐻2 (𝑔)
- Espontáneo a alta temperatura
+ No espontáneo a alta temperatura
- - 𝐻2 𝑂(𝑙) → 𝐻2 𝑂(𝑠)
- Espontáneo a baja temperatura
+ - + No espontáneo a cualquier temperatura
3𝑂2 (𝑔) → 2𝑂3 (𝑔)
- + - Espontáneo a cualquier temperatura
2𝑁2 𝑂(𝑔) → 2𝑁2 (𝑔) + 𝑂2 (𝑔)
Se denomina energía libre estándar de reacción al cambio de energía libre en una reacción cuando se lleva
a cabo en condiciones estándar, cuando los reactivos en su estado estándar se convierten en productos en
su estado estándar.
𝑎𝐴 + 𝑏𝐵 → 𝑐𝐶 + 𝑑𝐷
°
∆𝐺𝑟𝑒𝑎𝑐𝑐𝑖ó𝑛 = [𝑐 ∆𝐺𝑓° 𝐶 + 𝑑 ∆𝐺𝑓° 𝐷] − [𝑎 ∆𝐺𝑓° 𝐴 + 𝑏 ∆𝐺𝑓° 𝐵]
° ° °
∆𝐺𝑟𝑒𝑎𝑐𝑐𝑖ó𝑛 = ∆𝐻𝑟𝑒𝑎𝑐𝑐𝑖ó𝑛 − 𝑇∆𝑆𝑟𝑒𝑎𝑐𝑐𝑖ó𝑛
SOLUCIONES
Disolución (Sln.): mezcla homogénea de dos o más sustancias en una única fase. Uno de los componentes
se llama solvente o disolvente y el otro soluto:
• Disolvente (Slv.): componente que está presente en mayor cantidad o que determina el estado de
agregación en que existe la disolución.
• Soluto (Sto.): el que se encuentra en menor proporción.
85
Naturaleza del disolvente.
Electrolíticas:
- El soluto se disocia en iones. Ejemplo: NaCl.
- Conducen la corriente eléctrica.
No electrolíticas:
- El soluto no se disocia en iones. Ejemplo: Azúcar.
- No conducen la corriente eléctrica.
Acuosas
No acuosas
Saturadas
Insaturadas o no saturadas
Sobresaturadas
Las sustancias no se disuelven en igual medida en un mismo disolvente. Con el fin de poder comparar la
capacidad que tiene un disolvente para disolver un producto dado, se utiliza una magnitud que recibe el
nombre de solubilidad. Se denomina solubilidad a la máxima cantidad de un material que se disolverá en
una cantidad dada de disolvente, a una cierta temperatura, para producir una disolución estable. También
se dice que es es la concentración que corresponde al estado de saturación a una temperatura dada.
La capacidad de una determinada cantidad de líquido para disolver una sustancia sólida no es ilimitada.
Añadiendo soluto a un volumen dado de disolvente se llega a un punto a partir del cual la disolución no
admite más soluto (un exceso de soluto se depositará en el fondo del recipiente si se continúa agregando).
Se dice entonces que está saturada.
• Una disolución es saturada cuando se ha disuelto de forma estable la máxima cantidad de soluto en el
disolvente. La concentración del soluto en ese momento es igual a la solubilidad del soluto. El soluto y el
solvente se encuentran en equilibrio dinámico entre sí.
• Una disolución es no saturada o insaturada cuando la cantidad de soluto es menor que la máxima
admitida por el disolvente a esa temperatura.
• Una disolución es sobresaturada cuando la cantidad de soluto es mayor que la máxima. Es inestable y se
logra por calentamiento de una solución saturada con disolución del soluto depositado.
La solubilidad depende:
86
Naturaleza del soluto y del solvente
Interacciones soluto-solvente:
Factor energético
Cuando una sustancia sólida se sumerge en un disolvente apropiado, las moléculas o iones situadas en la
superficie del sólido son rodeadas por las del disolvente; este proceso lleva consigo la liberación de una
cierta cantidad de energía que se cede en parte a la red cristalina y permite a algunas de sus partículas
componentes desprenderse de ella e incorporarse a la disolución. La repetición de este proceso produce, al
cabo de un cierto tiempo, la disolución completa del sólido. En algunos casos, la energía liberada en el
proceso de solvatación no es suficiente como para romper los enlaces en el cristal y, además, intercalar sus
moléculas o iones entre las del disolvente, en contra de las fuerzas moleculares de éste. La diferencia de
energía entre el proceso de solvatación y la separación de los iones del cristal y de las moléculas de
solvente determina si los procesos de disolución serán endotérmicos o exotérmicos.
Interacción soluto − solvente > Interacción soluto − soluto, e interacción solvente − solvente
Interacción soluto − solvente < Interacción soluto − soluto, e interacción solvente − solvente
Por lo general:
87
Factor desorden
Los procesos físico-químicos están influidos, además, por el factor desorden, de modo que tienden a
evolucionar en el sentido en el que éste aumenta. La disolución, sea de sólido en líquido, sea de líquido en
líquido, aumenta el desorden molecular y por ello está favorecida. Contrariamente, la de gases en líquidos,
está dificultada por el aumento del orden que conllevan. (El NaCl se disuelve instantáneamente si se lo
introduce en agua, mientras que, para disolver dióxido de carbono en una bebida gaseosa, hay que insertar
el gas a una presión elevada). Del balance final entre los efectos de ambos factores, el de energía y el de
desorden, depende el que la disolución sea o no posible.
Curvas de solubilidad
La solubilidad depende de la temperatura; de ahí que su valor vaya siempre acompañado del de la
temperatura de trabajo. En la mayor parte de los casos, la solubilidad aumenta al aumentar la temperatura.
Se trata de procesos en los que el sistema absorbe calor para apoyar con una cantidad de energía extra el
fenómeno la solvatación. En otros, sin embargo, la disolución va acompañada de una liberación de calor y
la solubilidad disminuye al aumentar la temperatura. Son gráficas que nos permiten ver la solubilidad de un
soluto en una cantidad fija de solvente, a medida que crece la temperatura o algún otro parámetro
utilizado:
Velocidad de disolución
Depende de:
- La agitación: mayor contacto entre las partículas de soluto y de disolvente.
- El grado de subdivisión: puesto que si aumenta la superficie de contacto y habrá mayor exposición
de partículas de soluto y solvente.
- La temperatura: un aumento de la temperatura aumenta la energía cinética y favorece la
interacción del soluto y del solvente.
- La presión: en los sistemas gaseosos, un aumento de la presión produce un crecimiento del
contacto entre las partículas del soluto y del solvente.
Miscibilidad: capacidad de un líquido para disolverse en otro y formar una mezcla homogénea.
- Si las interacciones disolvente – disolvente, y soluto – soluto son semejantes, los líquidos son
completamente miscibles en cualquier proporción. Ejemplos: agua y metanol, benceno y hexano.
- Si las interacciones disolvente – disolvente, y soluto – soluto son muy diferentes, los líquidos son
completamente inmiscibles. Ejemplo: agua y aceite.
- Si las interacciones disolvente – disolvente, y soluto – soluto no son muy diferentes, los líquidos son
parcialmente miscibles.
88
Soluciones de gases en líquidos:
No es posible disolver un gas en un líquido espontáneamente, esto se debe a que la tensión superficial del
líquido no permite que el gas penetre al seno del líquido. Por esto, para disolver un gas en un líquido es
necesario aplicar una presión externa. La tensión superficial no permite que el gas ingrese, pero no es lo
suficientemente fuerte como para retener al gas en el interior del líquido una vez que se ha disuelto, es por
esto que las bebidas gaseosas pierden el gas cuando están destapadas. La solubilidad de un gas en un
líquido viene dada por la ley de Henry que establece que la solubilidad es proporcional a la presión del gas
sobre la disolución:
𝑐 = 𝑘𝑃
En donde c es la concentración molar del gas disuelto, k es una constante que depende de la temperatura y
P es la presión en atmósferas.
Concentración
𝑚𝑎𝑠𝑎 𝑑𝑒 𝑠𝑜𝑙𝑢𝑡𝑜
𝑃𝑜𝑟𝑐𝑒𝑛𝑡𝑎𝑗𝑒 𝑒𝑛 𝑚𝑎𝑠𝑎 (% 𝑚𝑎𝑠𝑎) = . 100
𝑚𝑎𝑠𝑎 𝑠𝑜𝑙𝑢𝑡𝑜 + 𝑚𝑎𝑠𝑎 𝑠𝑜𝑙𝑣𝑒𝑛𝑡𝑒
𝑣𝑜𝑙𝑢𝑚𝑒𝑛 𝑑𝑒 𝑠𝑜𝑙𝑢𝑡𝑜
𝑃𝑜𝑟𝑐𝑒𝑛𝑡𝑎𝑗𝑒 𝑒𝑛 𝑣𝑜𝑙𝑢𝑚𝑒𝑛 (% 𝑣𝑜𝑙𝑢𝑚𝑒𝑛) = . 100
𝑣𝑜𝑙𝑢𝑚𝑒𝑛 𝑑𝑒 𝑙𝑎 𝑠𝑜𝑙𝑢𝑐𝑖ó𝑛
𝑚𝑜𝑙𝑒𝑠 𝑑𝑒 𝑠𝑜𝑙𝑢𝑡𝑜
𝑀=
𝑣𝑜𝑙𝑢𝑚𝑒𝑛 𝑑𝑒 𝑠𝑜𝑙𝑢𝑐𝑖ó𝑛 (𝐿)
89
- Molalidad (m) o concentración molal: es la expresión de la concentración referida al número de
moles de soluto por kilogramo de disolvente:
𝑚𝑜𝑙𝑒𝑠 𝑑𝑒 𝑠𝑜𝑙𝑢𝑡𝑜
𝑚=
𝑚𝑎𝑠𝑎 𝑑𝑒 𝑠𝑜𝑙𝑣𝑒𝑛𝑡𝑒 (𝑘𝑔)
- Fracción molar (X): se denomina fracción molar del soluto al cociente entre el número de moles de
soluto de la disolución y el número total de moles:
𝑚𝑜𝑙𝑒𝑠 𝑑𝑒 𝑠𝑜𝑙𝑢𝑡𝑜
𝑋𝑠𝑜𝑙𝑢𝑡𝑜 =
𝑚𝑜𝑙𝑒𝑠 𝑑𝑒 𝑠𝑜𝑙𝑢𝑡𝑜 + 𝑚𝑜𝑙𝑒𝑠 𝑑𝑒 𝑑𝑖𝑠𝑜𝑙𝑣𝑒𝑛𝑡𝑒
1 − 𝑋𝑠𝑜𝑙𝑢𝑡𝑜 = 𝑋𝑑𝑖𝑠𝑜𝑙𝑣𝑒𝑛𝑡𝑒
Donde el número equivalentes de cada sustancia es igual al número de iones hidrógenos (H+) de un ácido,
o de iones hidroxilo (OH) de una base, o la carga del catión en una sal (por ejemplo Al+3) multiplicada la
cantidad de cationes.
Dilución
Cuando se diluye una solución, se agrega más solvente a la misma cantidad de soluto, haciendo que la
solución sea menos concentrada.
Las propiedades coligativas son propiedades que dependen solo del número de partículas de soluto en la
disolución y no de la naturaleza de las partículas del soluto. Todas estas propiedades tienen un mismo
origen, todas dependen del número de partículas de soluto presentes, independientemente si son atomos,
iones o moléculas. Las propiedades coligativas no guardan ninguna relación con el tamaño ni con cualquier
otra propiedad de los solutos. Son función sólo del número de partículas y son resultado del mismo
fenómeno. Las cuatro propiedades coligativas son:
90
Descenso relativo de la presión de vapor
Si un soluto es no volátil, la presión de vapor es menor en su disolución que en el disolvente puro. Se dice
que la presión de vapor de un disolvente desciende cuando se le añade un soluto no volátil. Este efecto es
el resultado de dos factores:
1. La disminución del número de moléculas del disolvente en la superficie libre.
2. La aparición de fuerzas atractivas entre las moléculas del soluto y las moléculas del disolvente,
dificultando su paso al estado de vapor.
Ley de Raoult: la presión de vapor del disolvente en disolución es igual a la presión de vapor del disolvente
puro por la fracción molar del disolvente en la disolución. Esta fórmula tiene validez para todas las
disoluciones ideales, es decir, soluciones diluidas:
°
𝑃𝑠𝑜𝑙𝑣𝑒𝑛𝑡𝑒 = 𝑃𝑠𝑜𝑙𝑣𝑒𝑛𝑡𝑒 . 𝑋𝑠𝑜𝑙𝑣𝑒𝑛𝑡𝑒
° °
∆𝑃 = 𝑃𝑠𝑜𝑙𝑣𝑒𝑛𝑡𝑒 − 𝑃𝑠𝑜𝑙𝑣𝑒𝑛𝑡𝑒 = 𝑃𝑠𝑜𝑙𝑣𝑒𝑛𝑡𝑒 − 𝑃𝑠𝑜𝑙𝑣𝑒𝑛𝑡𝑒 . 𝑋𝑠𝑜𝑙𝑣𝑒𝑛𝑡𝑒
° °
(1 − 𝑋𝑠𝑜𝑙𝑣𝑒𝑛𝑡𝑒 ) = 𝑃𝑠𝑜𝑙𝑣𝑒𝑛𝑡𝑒
∆𝑃 = 𝑃𝑠𝑜𝑙𝑣𝑒𝑛𝑡𝑒 𝑋𝑠𝑜𝑙𝑢𝑡𝑜
El descenso relativo (ΔP/P°) de la presión de vapor del disolvente en una disolución es proporcional a la
fracción molar del soluto:
∆𝑃
°
= 𝑋𝑠𝑜𝑙𝑢𝑡𝑜
𝑃𝑠𝑜𝑙𝑣𝑒𝑛𝑡𝑒
Elevación ebulloscópica
∆𝑇𝑒 ∝ 𝑚
∆𝑇𝑒 = 𝑘𝑒 𝑚
La constante ebulloscópica es característica de cada disolvente, no depende de la naturaleza del soluto. Sus
unidades son °C/m. La elevación del punto de ebullición se define como el punto de ebullición de la
disolución menos el punto de ebullición del disolvente puro:
Descenso crioscópico
La temperatura de congelación de las disoluciones es más baja que la temperatura de congelación del
disolvente puro. El punto de congelación es la temperatura a la cual coexisten en equilibrio líquido y solido
a la presión de 1 atm. La explicación es la siguiente, la congelación requiere la transición de un estado
desordenado a un estado ordenado, para que esto suceda, el sistema debe liberar energía. Como en una
disolución hay mayor desorden que en el disolvente puro, es necesario que libere más energía para generar
el orden que en el disolvente puro, por lo tanto, la disolución tiene menor punto de congelación que el
91
disolvente. La disminución del punto de congelación se define como la diferencia entre el punto de
congelación del disolvente puro menos el punto de congelación de la disolución:
∆𝑇𝑐 ∝ 𝑚
∆𝑇𝑐 = 𝑘𝑐 𝑚
Presión osmótica
La presión osmótica es la propiedad coligativa más importante por sus aplicaciones biológicas, industriales,
pero antes de entrar de lleno en el estudio de esta propiedad es necesario revisar los conceptos de difusión
y de ósmosis.
Difusión:
Es el proceso mediante el cual las moléculas del soluto tienen a alcanzar una distribución homogénea en
todo el espacio que les es accesible, lo que se alcanza al cabo de cierto tiempo. La presencia de una
membrana separando dos medios diferentes impone ciertas restricciones al proceso de difusión de solutos,
que dependerán fundamentalmente de la relación entre el diámetro de los poros de la membrana y el
tamaño de las partículas disueltas. Las membranas se clasifican en cuatro grupos:
Ósmosis:
Es la difusión de líquidos a través de membranas. Supongamos una disolución de NaCl separada del
disolvente por una membrana semipermeable que, como hemos visto, permite el paso del agua pero no de
la sal. El agua tiende a atravesar la membrana, pasando de la disolución más diluida a la más concentrada o
sea, en el sentido de igualar las concentraciones. Esta tendencia obedece al segundo principio de la
termodinámica y se debe a la existencia de una diferencia en la presión de vapor entre las dos disoluciones.
El equilibrio se alcanza cuando a los dos lados de la membrana se igualan las concentraciones, ya que el
flujo neto de agua se detiene. El flujo de solvente desde una solución diluida hacia una solución más
concentrada a través de una membrana semipermeable recibe el nombre de ósmosis.
Presión osmótica:
Se define la ósmosis como la tendencia a diluirse de una disolución separada del disolvente puro por una
membrana semipermeable. Un soluto ejerce presión osmótica al enfrentarse con el disolvente sólo cuando
no es capaz de atravesar la membrana que los separa. La presión osmótica de una disolución equivale a la
presión mecánica necesaria para evitar la entrada de agua cuando está separada del disolvente por una
92
membrana semipermeable. Para medir la presión osmótica se utiliza el osmómetro, que consiste en un
recipiente cerrado en su parte inferior por una membrana semipermeable y con un émbolo en la parte
superior. Si introducimos una disolución en el recipiente y lo sumergimos en agua destilada, el agua
atraviesa la membrana semipermeable y ejerce una presión capaz de elevar el émbolo hasta una altura
determinada. Sometiendo el émbolo a una presión mecánica adecuada se puede impedir que pase el agua
hacia la disolución, y el valor de esta presión mecánica mide la presión
Las leyes que regulan los valores de la presión osmótica para disoluciones muy diluidas, ideales, son
análogas a las leyes de los gases. Se conocen con el nombre de su descubridor Vant Hoff se expresan
mediante la siguiente fórmula:
𝜋 = 𝑀. 𝑅. 𝑇
Si comparamos la presión osmótica de dos disoluciones podemos definir tres tipos de disoluciones:
Disoluciones isotónicas son aquéllas que manifiestan la misma presión osmótica que la disolución
de referencia.
Disoluciones hipotónicas son aquéllas que manifiestan menor presión osmótica que la disolución
de referencia.
Disoluciones hipertónicas son aquéllas que manifiestan mayor presión osmótica que la disolución
de referencia.
Ejemplo: la membrana del eritrocito o glóbulo rojo puede considerarse como una membrana
semipermeable, que permite el paso del agua, pero no de las sales. En un medio isotónico (de igual presión
osmótica), el eritrocito permanece inalterable. Si el eritrocito se introduce en agua destilada o en un medio
hipotónico el agua atravesará la membrana hacia el citoplasma, con lo que aumenta el volumen celular,
distendiendo la membrana hasta que llega un punto en que ésta se rompe (Este fenómeno se conoce con
el nombre de hemolisis). Si el eritrocito se pone en un medio hipertónico (de mayor presión osmótica), el
agua sale del eritrocito hacia el exterior, con lo cual su volumen disminuye, y la membrana se retrae, de
forma que ofrece al microscopio un aspecto estrellado.
93
Relación entre las propiedades coligativas
La presión osmótica y las demás propiedades coligativas de las disoluciones diluidas guardan una relación
de proporcionalidad con la molalidad de la disolución. Por lo tanto, si despejamos el valor de m en cada
fórmula podemos relacionar todas las propiedades coligativas de las disoluciones entre sí:
∆𝑃
𝑋𝑠𝑜𝑙𝑢𝑡𝑜 𝑃𝑑𝑖𝑠𝑜𝑙𝑣𝑒𝑛𝑡𝑒 ∆𝑇𝑐 ∆𝑇𝑐 𝜋
𝑚= = = = =
0,018 0,018 0,52 1,86 𝑅𝑇
De esta forma, basta conocer un sólo dato para deducir inmediatamente todos los demás. Esta fórmula
sólo es aplicable en el caso de que el disolvente sea el agua. Cuando se trata de otro disolvente, los
descensos de la presión de vapor y los valores de las constantes crioscópicas y ebulloscópicas serán
distintos
De la misma manera pero utilizando cualquiera de las propiedades coligativas se puede determinar la masa
molecular de un soluto incógnita.
Otras sustancias, al disolverse en agua, se disocian originando un número de partículas mayor que el
número de moléculas teóricas. Como cada molécula se disocia en varias partículas, en general iones, las
propiedades coligativas detectan una concentración de soluto aparentemente mayor que la previsible. El
caso más importante lo constituyen las sustancias electrolíticas.
Los electrolitos son sustancias no metálicas que conducen la corriente eléctrica en disolución acuosa o
fundida. Son electrolitos las sales, los ácidos y las bases.
94
Las leyes de las propiedades coligativas siguen siendo válidas siempre que la molalidad se multiplique por
un factor corrector: el coeficiente de Van’t Hoff (i).
Este coeficiente informa del número de partículas en que se ha disociado la molécula de soluto. Si la
disociación es completa, el electrolito se considera fuerte, y el coeficiente I es prácticamente igual al
número de iones en que se disocia cada molécula. En los casos de los no electrolitos, dicho coeficiente es
igual a uno
∆𝑇𝑒 = 𝑖 𝑘𝑒 𝑚
∆𝑇𝑐 = 𝑖 𝑘𝑐 𝑚
𝜋 = 𝑖 𝑀𝑅𝑇
Azeótropos
Un azeótropo es una mezcla líquida de dos o más compuestos químicos que hierven a temperatura
constante y que se comportan como si estuviesen formadas por un solo componente. Un azeótropo puede
hervir a una temperatura superior, intermedia o inferior a la de los constituyentes de la mezcla,
permaneciendo el líquido con la misma composición inicial, al igual que el vapor, por lo que no es posible
separarlos por destilación simple o por extracción líquido-vapor utilizando líquidos iónicos.
El azeótropo que hierve a una temperatura máxima se llama azeótropo de ebullición máxima y el que lo
hace a una temperatura mínima se llama azeótropo de ebullición mínima, los sistemas azeotrópicos de
ebullición mínima son más frecuentes que los de ebullición máxima.
Un ejemplo es la mezcla de etanol y agua, que forma un azeótropo para una concentración del 96 % en
peso de alcohol, que hierve a una temperatura de 78,2°C. Con una destilación simple se obtiene un alcohol
con esta concentración, pero para conseguir un compuesto más puro se necesita utilizar recursos
especiales como una destilación azeotrópica.
95
Destilación fraccionada
La presión de vapor de una disolución tiene relación directa con la destilación fraccionada, procedimiento
de separación de los componentes líquidos de una disolución que se basa en la diferencia en sus puntos de
ebullición.
CINÉTICA QUÍMICA
Es el área de la química que estudia las velocidades con que ocurren las reacciones químicas, los factores
que determinan la rapidez de la reacción y los mecanismos mediante las cuales transcurren.
Velocidad de reacción
Es la rapidez con la que se consumen los reactivos y se forman los productos en una reacción química. Para
describir la velocidad de una reacción se determina la razón de cambio en la concentración de un reactivo o
producto que tiene lugar en un periodo de tiempo. Se suele expresar (M/s) o (mol/l.s)
Durante una reacción, los reactivos se consumen mientras se forman los productos; como resultado, es
posible seguir el progreso de una reacción al medir, ya sea la disminución de la concentración de los
reactivos o el aumento en la concentración de los productos.
𝑎𝐴 + 𝑏𝐵 → 𝑐𝐶 + 𝑑𝐷
96
Constante de velocidad
velocidad 𝛼 [Reactivos]
Por lo tanto, se puede afirmar que existe una constante de velocidad k que relaciona la velocidad de la
reacción con la concentración de los reactivos:
velocidad
𝑘=
[Reactivos]
Esta constante es particular para cada reacción y solo se ve afectada por los cambios de temperatura (ver
teoría de colisiones – mayor energía cinética).
Ecuación de velocidad
Expresa la relación de la velocidad de una reacción con la constante de velocidad y la concentración de los
reactivos, elevados a una potencia, y está dada por la fórmula:
𝑣 = 𝑘[𝐴]𝛼 [𝐵]𝛽
Donde α y β son los órdenes de reacción determinados experimentalmente y especifican la relación entre
las concentraciones de los reactivos A y B y la velocidad de reacción. Al sumarlos, se obtiene el orden de
reacción global, que se define como la suma de los exponentes a los que se elevan todas las
concentraciones de reactivos que aparecen en la ley de velocidad.
Clasificación de reacciones
Las potencias a las que se elevan las concentraciones son normalmente números enteros o 0, pero en
ocasiones son fraccionarios o aún negativos.
Una potencia de uno significa que la velocidad es directamente proporcional a la concentración de ese
reactivo, una potencia de dos significa que es directamente proporcional al cuadrado de esa concentración,
una potencia de cero significa que la velocidad no depende de la concentración de ese reactivo, siempre
que haya algo de reactivo presente.
No hay manera alguna de predecir órdenes de reacción a partir de una ecuación química completa y
ajustada, deben determinarse experimentalmente.
Ejemplos:
97
Reacción de orden cero
Una reacción de orden cero es una reacción cuya velocidad no depende de las concentraciones de los
reactivos.
𝑎𝐴 ⟶ producto
1 Δ[A]
velocidad = − =𝑘
𝑎 Δ𝑡
Para una reacción de orden cero, si se elabora una gráfica de [A]t en función del tiempo se obtiene una
recta con una pendiente igual a -𝑘 y una ordenada al origen igual a [A]0:
Una reacción de primer orden es una reacción cuya velocidad depende de la concentración de los reactivos
elevados a la primera potencia.
𝑎𝐴 ⟶ producto
1 Δ[A]
velocidad = − = 𝑘[𝐴]
𝑎 Δ𝑡
98
Mediante el cálculo diferencial se puede demostrar que
1 1
− = 𝑘𝑡
[𝐴]𝑡 [𝐴]0
donde ln es el logaritmo natural, y [𝐴]0 y [𝐴]𝑡 son las concentraciones de A en los tiempos t = 0 y t = t,
respectivamente.
1
=(𝑎𝑘)(𝑡)+ln[𝐴]0
[𝐴]𝑡
↕ ↕ ↕
↕
𝑚 𝑥 𝑏
𝑦
Para una reacción de primer orden, si se elabora una gráfica de ln [A]t en función del tiempo se obtiene
una recta con una pendiente igual a −𝑘 y una ordenada al origen igual a ln [A]0:
Una reacción de segundo orden es una reacción cuya velocidad depende de la concentración de uno de los
reactivos elevados a la segunda potencia.
𝑎𝐴 ⟶ producto
1 Δ[A]
velocidad = − = 𝑘[𝐴]2
𝑎 Δ𝑡
[𝐴]𝑡
ln = −𝑎𝑘𝑡
[𝐴]0
donde ln es el logaritmo natural, y [𝐴]0 y [𝐴]𝑡 son las concentraciones de A en los tiempos t = 0 y t = t,
respectivamente.
99
Si se despeja correctamente la ecuación se puede obtener la función lineal:
1 1
=(−𝑎𝑘)(𝑡)+
[𝐴]𝑡 [𝐴]0
↕ ↕
↕
𝑚 𝑥 ↕
𝑦 𝑏
1
Para una reacción de segundo orden, si se elabora una gráfica de [𝐴] en función del tiempo se obtiene una
𝑡
1
recta con una pendiente igual a 𝑘 y una ordenada al origen igual a [𝐴]0
:
Vida media
La vida media, t1/2, es el tiempo requerido para que la concentración de uno de los reactivos disminuya a la
mitad de su concentración inicial
La vida media, t1/2, de un reactivo es el tiempo que tarda la mitad de ese reactivo en convertirse en
producto. La ecuación que relaciona la concentración con el tiempo es la ecuación integrada de velocidad y
sirve para determinar la concentración que queda de un reactivo después de un tiempo determinado, o
cuanto tardaría en consumirse una cierta cantidad de reactivo.
[𝐴]0
0 𝑣=𝑘 [𝐴]𝑡 = −𝑎𝑘 𝑡 + [𝐴]0 (mol/l.s) t1/2 = 2𝑎𝑘
ln 2
1 𝑣 = 𝑘[𝐴] ln[𝐴]𝑡 = −𝑎𝑘 𝑡 + ln[𝐴]0 (1/s) t1/2 = 𝑎𝑘
1 1 1
2 𝑣 = 𝑘[𝐴]2 = 𝑎𝑘 𝑡 + (l/mol.s) t1/2 = 𝑎𝑘[𝐴]0
[𝐴]𝑡 [𝐴]0
100
Determinación de la ecuación de velocidad por el método empírico
Un modelo que explicar el mecanismo mediante el cual las reacciones químicas se llevan a cabo afirma que
tales procesos son el resultado del choque entre las moléculas de las sustancias reaccionantes. Sólo cuando
dicho choque es suficientemente violento se romperán las moléculas y se producirá la reordenación entre
los átomos resultantes. El desarrollo riguroso de estas ideas básicas constituye la llamada teoría de las
colisiones. El aumento de las concentraciones de las especies reaccionantes produce como resultado un
mayor número de colisiones por unidad de tiempo. Deben producirse colisiones para que una reacción
química tenga lugar, pero no garantizan que una reacción vaya a suceder. Para que una colisión sea
efectiva, las especies reaccionantes deben:
- Poseer al menos una cantidad de energía mínima necesaria para reordenar los electrones externos y
romper enlaces para formar otros nuevos.
- Tener las orientaciones adecuadas entre sí en el momento de la colisión.
101
De acuerdo a la teoría de colisiones las reacciones ocurren cuando hay choques efectivos entre moléculas
donde la rapidez de la reacción es proporcional al número de choques por unidad de tiempo multiplicada
por la fracción del número total de choque que son efectivos.
(n° choques)
velocidad 𝛼 × (fraccion de choques efectivos)
𝑡
Energía de activación
Cualquier molécula en movimiento posee energía cinética; cuanto más rápido se mueve, su energía
cinética será mayor. Pero una molécula que se mueve rápidamente no se romperá en fragmentos por sí
misma, para reaccionar, debe chocar con otra molécula. Cuando estas impactan, parte de su energía
cinética se convierte en vibraciones y, si la energía cinética inicial es grande, las moléculas que chocan
vibraran tan fuerte que romperán algunos enlaces químicos. Se dice que existe una energía mínima de
choque, por debajo de la cual las moléculas prácticamente “rebotaran” intactas y no habrá cambios por la
colisión.
Se supone que para que ocurra una reacción, las moléculas deben tener una energía cinética total mayor o
igual a la energía de activación (Ea), que es la mínima cantidad de energía requerida para iniciar la reacción
química. Cuando las moléculas chocan, forman un complejo activado (o estado de transición) que es una
especie formada temporalmente por las molecular reactivas, como resultado de la colisión, antes de formar
el producto.
Ecuación de Arrhenius
Con base en la teoría cinética molecular, podemos afirmar que a mayor temperatura la energía cinética
tendrá una magnitud mayor, y como consecuencia la velocidad de reacción será mayor
independientemente de si la reacción es de tipo endotérmica o exotérmica. La dependencia de la constante
de velocidad (k) de una reacción con respecto de una temperatura (T) se expresa mediante la siguiente
ecuación:
−𝐸𝑎
𝑘=𝐴𝑒 𝑅𝑇
donde Ea es la energía de activación de la reacción (kJ/mol), R es la constante de los gases (8,314 J/mol.K),
T es la temperatura absoluta. La cantidad A representa la frecuencia de las colisiones que tiene las mismas
dimensiones que la constante de velocidad y se llama factor de frecuencia.
102
La ecuación se expresa de una forma más útil como una recta lineal que define ln k en función de 1/T:
Mecanismos de reacción
Una ecuación global balanceada no indica cómo se lleva a cabo la reacción, en muchos casos, solo
representan una suma de varios pasos elementales, una serie de reacciones sencillas que representan el
avance de una reacción global a nivel molecular. Se llama mecanismo de reacción a la secuencia de pasos
elementales que llevan a la formación de producto.
Las especies que aparecen en el mecanismo de la reacción, pero no en una ecuación balanceada se llaman
intermediarios. Un intermediario siempre se forma en un paso elemental y se consume en alguno
posterior.
La molecularidad de una reacción es el número de moléculas que reaccionan en un paso elemental pueden
ser:
- Reacción unimolecular, paso elemental en el que solo participa una molécula reaccionante.
- Reacción bimolecular, paso elemental que implica dos moleculas.
- Reacción termolecular, reacciones donde participan tres moléculas en un paso elemental.
103
Catálisis
Un catalizador es una sustancia que aumenta la velocidad de una reacción química sin alterarse o
reaccionando para formar un intermediario que se regenera en un paso subsiguiente de la reacción, por lo
que su concentración inicial será igual a la final. Tiene la habilidad de acelerar la reacción, pero no tienen la
capacidad de hacer que una reacción no espontánea, ocurra.
Un catalizador acelera una reacción a proporcionar una serie de pasos elementales con cinéticas más
favorables que las que existen en su ausencia. A partir de la ecuación de Arrhenius se sabe que la constante
de velocidad (y por tanto la velocidad) de una reacción depende del factor de frecuencia A y de la energía
de activación Ea; cuanto mayor sea A, o menor sea Ea, mayor será la velocidad. Un catalizador aumenta la
velocidad disminuyendo la energía de activación de una reacción.
Para que dos compuestos rompan sus enlaces y den lugar a otro, debe superarse una barrera energética
que se denomina energía de activación. Además, los choques entre las moléculas deben tener la
orientación adecuada, en el caso contrario, los mismos no son eficaces y será imposible que la reacción
tenga lugar.
104
105
EQUILIBRIO QUÍMICO
La mayoría de las reacciones químicas no se producen en forma completa, es decir, cuando los reactivos se
mezclan en cantidades estequiométricas, no se transforman completamente en productos. La mayoría de
las reacciones son reversibles en cierto grado. Tan pronto como se forman moléculas de producto, algunas
de estas vuelven a transformarse en reactivos.
Se dice que un sistema está en equilibrio cuando la velocidad de la reacción directa es igual a la inversa o se
ha perdido la tendencia espontanea a cambiar y ha llegado a una condición de energía libre mínima, es
decir, se trata de un equilibrio dinámico no estático. Un ejemplo análogo es el movimiento de esquiadores
en un centro de esquí repleto de personas, la cantidad de personas que ascienden o descienden por el
teleférico es la misma y el acarreo es constante.
𝑎𝐴 + 𝑏𝐵 ⇋ 𝑐𝐶 + 𝑑𝐷
Donde las letras mayúsculas representan las fórmulas y las minúsculas los coeficientes estequiométricos. La
doble flecha indica que la reacción es reversible y que pueden producirse simultáneamente las reacciones
directas (de izquierda a derecha) e inversa (de derecha a izquierda). Cuando A y B reaccionan para formar C
y D con la misma velocidad con la que C y D reaccionan para formar A y B, el sistema está en equilibrio.
El equilibrio químico se logra cuando dos reacciones opuestas ocurren simultáneamente con la misma
velocidad. Estos equilibrios son dinámicos ya que las moléculas individuales están reaccionando
continuamente, aunque la composición global de la mezcla de reacción no cambie.
Una reacción es irreversible, cuando la energía que se requiere para romper los enlaces de los reactivos es
mucho menor que la que se requiere para romper los enlaces de los productos. Como hemos dicho
anteriormente, a esta energía se le llama energía de activación; por lo tanto, en una reacción reversible, la
energía de activación de los productos es igual o menor que la de los reactantes.
Constante de equilibrio
Ley de acción de masas: la rapidez con la que un sistema reaccionante se descompone para dar productos
se conoce como velocidad de reacción. Esto es proporcional a las masas activas que reaccionan.
106
𝑉𝐷 = 𝐾1 [𝐴]𝑎 [𝐵]𝑏
𝑉𝐼 = 𝐾2 [𝐶]𝑐 [𝐷]𝑑
En estas expresiones, k1 y k2 son respectivamente las constantes específicas de velocidad de las reacciones
directa e inversa. Por definición, las dos velocidades son idénticas en el equilibrio.
𝑉𝐷 = 𝑉𝐼
A cualquier temperatura fija el cociente K1/ K2, es una constante. A dicha relación se le conoce con el
nombre de constante de equilibrio Kc. Los corchetes de la constante de equilibrio indican concentraciones
de equilibrio en moles por litro. Sea cual sea el mecanismo de la reacción, siempre se obtiene la misma
expresión para la constante de equilibrio.
La constante de equilibrio Kc es el producto de las concentraciones de equilibrio (en moles por litro,
molaridad) de los productos, elevada cada una de ellas a una potencia igual a sus coeficientes en la
ecuación ajustada, dividida entre el producto de las concentraciones de los reactivos elevadas cada una de
ellas a su coeficiente estequiométrico.
Aunque el uso de los términos reactivos y productos sea confuso en este momento dado que los que
llamábamos reactivos serán productos en algún momento de la reacción, por convención las sustancias
escritas a la izquierda del equilibrio se consideraran reactivos y las que están a la derecha serán productos.
En el caso de los gases, es más conveniente medir presiones que concentraciones. Al despejar la presión en
la ecuación del gas ideal se obtiene:
𝑛
𝑃 = 𝑅𝑇 = 𝑀𝑅𝑇
𝑉
Por lo tanto, la presión de un gas es directamente proporcional a su concentración (n/V). En los equilibrios
en que participan gases, la constante de equilibrio suele expresarse en función de las presiones parciales
(Kp) en vez de hacerlo en función de las concentraciones (Kc).
El término n/V es una concentración. Si se cumple la ecuación de los gases ideales la concentración del gas
será:
𝑛 𝑃
=
𝑉 𝑅𝑇
𝑃
𝐶𝑜𝑛𝑐𝑒𝑛𝑡𝑟𝑎𝑐𝑖ó𝑛 =
𝑅𝑇
Al sustituir P/RT por n/V en la expresión de Kc de equilibrio, obtendremos la relación entre Kc y Kp:
107
𝐾𝑝 = 𝐾𝑐 (𝑅𝑇)∆𝑛
Donde el delta n es el número de moles de los productos gaseosos menos el número de moles de los
reactivos en la ecuación balanceada:
∆𝑛 = 𝑛𝑝 − 𝑛𝑟
La constante de equilibrio de una reacción química indica en qué grado los reactivos se transforman en
productos una vez alcanzado el equilibrio:
- Si K es muy grande la reacción progresa hasta que prácticamente se agota alguno de los reactivos.
- Si K es igual a uno, las concentraciones de reactivos y productos son similares.
- Si K es pequeña, la reacción está muy desplazada hacia los reactivos y apenes se forman productos.
Se habla de reacción homogénea cuando tanto reactivos como productos se encuentran en el mismo
estado físico. En cambio, si entre las sustancias que intervienen en la reacción se distinguen varias fases o
estados físicos, hablaremos de reacciones heterogéneas.
𝑛 𝑚𝑎𝑠𝑎 𝛿 𝛿
= =
𝑉 𝑃𝑀 𝑚𝑎𝑠𝑎 𝑃𝑀
[𝐶]𝑐 [𝐷]𝑑
𝑄=
[𝐴]𝑎 [𝐵]𝑏
Tiene la misma fórmula que la KC pero a diferencia de ésta, las concentraciones no tienen por qué ser las
del equilibrio. Por ejemplo, las concentraciones iniciales.
108
- Si Q = Kc entonces el sistema está en equilibrio.
- Si Q < Kc el sistema evolucionará hacia la derecha, es decir, aumentarán las concentraciones de los
productos y disminuirán las de los reactivos hasta que Q se iguale con KC.
- Si Q > Kc el sistema evolucionará hacia la izquierda, es decir, aumentarán las concentraciones de los
reactivos y disminuirán las de los productos hasta que Q se iguale con KC.
Una vez alcanzado el equilibrio, el sistema permanecerá así hasta que se produzca alguna perturbación que
cambie las condiciones. Vamos a estudiar los distintos tipos de cambios que pueden ocurrir, teniendo en
cuenta que el valor de la constante de equilibrio depende sólo de la temperatura.
Cambios en la concentración
Cambios de presión
Cambios de temperatura
Catalizadores
Cambios de concentración
Si se añade una cantidad adicional de cualquiera de los reactivos o productos, el estímulo se anulará y se
desplazará el equilibrio en la dirección en que se consuma la sustancia añadida. El sistema
responde oponiéndose a este aumento, transformando reactivos en productos, de forma que disminuye la
concentración de reactivos y aumenta la de productos, dando como resultado la formación demás
productos.
109
Cambios de volumen y presión
Estos tipos de cambios no afectan a los sólidos ni a los líquidos, solo a los gases. Cuando un sistema gaseoso
se comprime o expande existe una modificación de equilibrio. En general, un aumento de la presión
(disminución del volumen) favorece la reacción neta que reduce el número total de moles de gases y una
disminución de la presión (aumento del volumen) favorece la reacción neta que aumenta el número total
de número total de moles de gases. Para las reacciones en las que no cambia el número de moles, el
cambio de presión no modifica la posición de equilibrio.
Cambios de temperatura
La temperatura de una mezcla en equilibrio puede modificarse suministrando o extrayendo calor. Según el
principio de Le Chatelier el aumento de calor favorece las reacciones endotérmicas y la extracción de calor
favorece las reacciones exotérmicas. El calor es un producto de la reacción. Si en una reacción exotérmica
se aumenta la temperatura, a presión y volumen constantes, se aumentará la cantidad de calor del sistema.
En consecuencia el equilibrio se desplazará hacia la izquierda y se consumirá el exceso de calor añadido. Si
por el contrario, se disminuye la temperatura, el equilibrio se desplazará a la derecha para regenerar el
110
calor eliminado. Del mismo modo, en una reacción endotérmica (consume calor) al aumentar la
temperatura, a presión y volumen constante, se desplazará la reacción a la derecha; una disminución lo
hará hacia la izquierda. En la práctica, los valores de las constantes de equilibrio cambian con la
temperatura. La relación entre la constante de equilibrio, la temperatura y la entalpia se conoce como
ecuación de Van´t Hoff:
𝐾2 −∆𝐻 1 1
𝑙𝑛 = ( − )
𝐾1 𝑅 𝑇2 𝑇1
Catalizadores
Un catalizador cambia la velocidad de una reacción, pero no desvía el equilibrio hacia los productos ni hacia
los reactivos. Afecta igualmente a la energía de activación de la reacción directa y a la de la inversa y por
ello, lo único que hace es que el equilibrio se alcanza con mayor rapidez. La misma mezcla se obtendría en
equilibrio, pero el tiempo para lograr dicho estado sería mayor.
El equilibrio químico homogéneo, está dado por un sistema en donde todos los reactivos y productos se
encuentran en el mismo estado de agregación. En cambio, en el equilibrio heterogéneo hay distintas fases
por lo que debe hacerse un tratamiento un poco diferente ya que las especies puras que están en estado
líquido y solido no se incluyen dentro de la expresión de la constante de equilibrio, cuando un disolvente
participa en el equilibrio, su concentración también se excluye de la expresión de la constante. En cambio
las presiones parciales de los gases y las concentraciones molares de una disolución si se incluyen en la
constante de equilibrio porque estas pueden variar.
Un sistema está en equilibrio cuando ha perdido la tendencia espontanea a cambiar y ha llegado a una
condición de energía libre mínima a presión y temperatura. Conceptualmente podemos definir ∆G como la
111
fracción de variación total de energía que es capaz de efectuar trabajo a medida que el sistema tiende al
equilibrio:
∆𝐺 = −𝑊 = ∆𝐻 − 𝑇∆𝑆
El cambio de energía libre estándar, ΔG° es el cambio de energía libre que acompaña a la conversión de
reactivos en sus estados estándar a productos en sus estados estándar para un mol de reacción según está
escrita. En condiciones que no son del estado estándar para predecir la dirección de la reacción se debe
usar ΔG en vez de ΔG°. La relación entre ΔG y ΔG° es:
∆𝐺 = ∆𝐺 ° + 𝑅𝑇 𝑙𝑛 𝑄
0 = ∆𝐺 ° + 𝑅𝑇 𝑙𝑛 𝑄
𝛥𝐺° = −𝑅𝑇 𝑙𝑛 𝐾
Despejando K:
−𝛥𝐺°
( )
𝐾=𝑒 𝑅𝑇
𝐽
𝑅 = 8,314
𝐾 𝑚𝑜𝑙
La constante de equilibrio termodinámica es función de las actividades de las sustancias que intervienen en
la reacción. La actividad a está relacionada con la concentración:
112
𝑐𝑜𝑛𝑐𝑒𝑛𝑡𝑟𝑎𝑐𝑖ó𝑛 𝑒𝑓𝑒𝑐𝑡𝑖𝑣𝑎 𝑑𝑒 𝑙𝑎 𝑠𝑜𝑙𝑢𝑐𝑖ó𝑛
𝑎=
𝑐𝑜𝑛𝑐𝑒𝑛𝑡𝑟𝑎𝑐𝑖ó𝑛 𝑒𝑓𝑒𝑐𝑡𝑖𝑣𝑎 𝑑𝑒 𝑒𝑠𝑎 𝑠𝑢𝑠𝑡𝑎𝑛𝑐𝑖𝑎 𝑒𝑛 𝑢𝑛 𝑒𝑠𝑡𝑎𝑑𝑜 𝑒𝑠𝑡á𝑛𝑑𝑎𝑟 𝑑𝑒 𝑟𝑒𝑓𝑒𝑟𝑒𝑛𝑐𝑖𝑎
Para un gas:
𝑝𝑟𝑒𝑠𝑖ó𝑛 𝑒𝑓𝑒𝑐𝑡𝑖𝑣𝑎 𝑑𝑒𝑙 𝑔𝑎𝑠
𝑎=
𝑝𝑟𝑒𝑠𝑖ó𝑛 𝑑𝑒𝑙 𝑒𝑠𝑡𝑎𝑑𝑜 𝑒𝑠𝑡𝑎𝑛𝑑𝑎𝑟
Electrolitos
Electrolitos son las sustancias que originan iones libres al disolverse en agua. La mayor parte de los
compuestos iónicos se disuelven en sustancias polares como el agua. Este proceso de disolución conlleva
que las moléculas de agua se interponen entre los iones que forman el compuesto, separando los cationes
de los aniones. Por tanto, las disoluciones de este tipo de sustancias, electrolitos, conducen la corriente
eléctrica: los aniones se desplazan al polo positivo del generador y los cationes al polo negativo.
No electrolito
Son aquellas sustancias que en disolución acuosa mantienen su integridad como molécula. No electrolitos
son la sacarosa, el etanol, el oxígeno gaseoso y el monóxido de carbono, entre otros.
Características
113
Clasificación de electrolitos
Se denominan electrolitos fuertes a aquellos que se disocian completamente en disolución acuosa; es decir,
aquellos que tienen elevada concentración de iones al disolverse. Son muy buenos conductores de la
electricidad. Ejemplo: todas las sales, ácidos y bases fuertes.
Se denominan electrolitos débiles a aquellos que se disocian poco en disolución; es decir, aquellos que
tienen baja concentración de iones al disolverse. Ejemplo: ácidos y bases débiles.
Teorías ácido-base
Según Arrhenius se denominan ácidos a aquellos electrolitos que disueltos producen iones hidrógeno. Por
tanto, dichas sustancias, ácidos, disueltos darían un anión y el catión H+. Ejemplo de ácidos en disolución:
𝐻𝐶𝑙 → 𝐶𝑙 − + 𝐻 +
Según Arrhenius se denominan bases a aquellos electrolitos que disueltos producen iones hidroxilo. Por
tanto, dichas sustancias, bases, disueltos darían un anión OH- y un catión. Ejemplo de bases en disolución:
𝑁𝑎𝑂𝐻 → 𝑁𝑎+ + 𝑂𝐻 −
Una limitación de la teoría de Arrhenius sobre los ácidos y las bases es el hecho de que en ella no se
considera el efecto del solvente en el proceso de ionización. Además, no explicaba el caso del amoniaco,
que al disolverse en agua formaba hidroxilos, según su clasificación debía tener propiedades ácidas, pero
esto no se comprobaba:
𝑁𝐻3 → 𝑁𝐻4+ + 𝑂𝐻 −
Teoría de Lewis
Ácido: es una sustancia que puede formar un enlace covalente aceptando un par de electrones de
una base.
Base: es una sustancia que posee un par de electrones sin compartir, con el cual se puede formar
un enlace covalente con un átomo, una molécula o un ion.
114
Teoría de Bronsted y Lowry
Un ácido es toda sustancia capaz de ceder uno o más protones y una base es toda sustancia capaz de
aceptarlos. Esta teoría tiene una consecuencia importante: sólo se puede hablar de ácido si hay presente
una base y viceversa. La neutralización de acuerdo con esto, es una reacción que implica una transferencia
de protones. En este proceso se pueden o no formar sales.
Según Brönsted y Lowry, los ácidos al donar un protón dan origen a una base conjugada, es decir, a una
especie que es capaz de volver a captar el protón y formar el ácido inicial. Lo mismo puede decirse de las
bases; al aceptar éstas un protón, dan origen a un ácido conjugado, especie que puede donar el protón y
originar nuevamente la base inicial. Por ejemplo:
𝑁𝐻3 + 𝐻2 𝑂 → 𝑁𝐻4+ + 𝑂𝐻 −
A los pares:
𝑁𝐻3 /𝑁𝐻4+
𝐵𝑎𝑠𝑒/Á𝑐𝑖𝑑𝑜 𝑐𝑜𝑛𝑗𝑢𝑔𝑎𝑑𝑜
𝐻2 𝑂/𝑂𝐻 −
Á𝑐𝑖𝑑𝑜/𝐵𝑎𝑠𝑒 𝑐𝑜𝑛𝑗𝑢𝑔𝑎𝑑𝑎
Como es bien sabido el agua es un disolvente único. Una de sus propiedades especiales es su capacidad de
actuar tanto como un ácido o como una base. El agua es un electrolito muy débil y por lo tanto un mal
conductor de la electricidad, sin embargo, presenta una ligera ionización:
𝐻2 𝑂 ⇆ 𝐻 + + 𝑂𝐻 −
En ocasiones, a esta reacción se la conoce como auto-ionización del agua. También puede representarse
como:
Ya que solo una fracción pequeña de las moléculas de agua se ionizan, la concentración del agua
permanece invariable. Por consiguiente, la constante de equilibrio del agua es:
𝐾𝐶 = 𝐾𝑤 = [𝐻3 𝑂+ ][𝑂𝐻− ]
115
Para indicar que se refiere a la constante de equilibrio del agua, lo que se hace es reemplazar el subíndice c
por w, en donde dicha constante se denomina constante del producto iónico que es el producto de la
concentración de hidronios y la concentración de hidroxilos a una temperatura en particular. En el agua
pura, a 25°C las concentraciones de iones hidronios e hidroxilos son iguales y equivalen a:
𝑝𝐻 = − log [𝐻3 𝑂+ ]
Además:
𝑝𝐻 + 𝑝𝑂𝐻 = 14
Esto quiere decir que si el pH es igual a 7, la solución es neutra, si es menor a 7 la solución es ácida y si es
mayor a 7 la solución es básica.
Sabemos que:
𝑝𝐻 = − log [𝐻3 𝑂+ ]
𝑝𝐻 + 𝑝𝑂𝐻 = 14
116
Fuerzas de los ácidos y las bases:
Los ácidos fuertes son electrolitos que se supone que se ionizan completamente en el agua. La mayoría de
los ácidos fuertes son los ácidos inorgánicos como el ácido clorhídrico, el ácido nítrico, el ácido perclórico y
el ácido sulfúrico.
La mayor parte de los ácidos son ácidos débiles, es decir, son aquellos que se ionizan solo en forma limitada
en el agua. En el equilibrio, las disoluciones acuosas de los ácidos débiles contienen una mezcla de
moléculas del ácido sin ionizar, iones hidronio y la base conjugada. Ejemplos de estos son el ácido acético y
el ácido fluorhídrico.
Igual que los ácidos fuertes, las bases fuertes son electrolitos fuertes que se ionizan completamente en el
agua. Los hidróxidos de los metales alcalinos y algunos de los metales alcalinos térreos son bases fuertes.
En sentido estricto, los hidróxidos de estos metales no son bases de Bronsted porque son incapaces de
aceptar un protón. Sin embargo, el ion hidroxilo que se forma si lo es, por lo que se dice que dichos
hidróxidos son una base.
Las bases débiles al igual que los ácidos débiles son electrolitos débiles. El amoniaco es una base débil ya
que se ioniza muy limitadamente en agua:
𝑁𝐻3 + 𝐻2 𝑂 ⇄ 𝑁𝐻4+ + 𝑂𝐻 −
Como se ha visto, existen relativamente pocos ácidos fuertes. La gran mayoría de los ácidos son débiles.
Considere un ácido débil HA. Su ionización en el agua se representa como:
𝐻𝐴 (𝑎𝑐) + 𝐻2 𝑂 (𝑙) ⇄ 𝐻3 𝑂+ + 𝐴−
[𝐻3 𝑂+ ][𝐴− ]
𝐾𝑎 =
[𝐻𝐴]
Donde Ka es la constante de ionización de un ácido. Cuanto mayor sea el valor de Ka, más fuerte será el
ácido debido a la mayor cantidad de iones.
La ionización de las bases débiles se analiza de la misma manera que la de los ácidos débiles. Supongamos
una base débil B como el amoniaco, entonces si el equilibrio es el siguiente:
117
[𝐵𝐻 + ][𝑂𝐻− ] [𝑁𝐻4+ ][𝑂𝐻 − ]
𝐾𝑏 = =
[𝐵] [𝑁𝐻3 ]
En comparación con la concentración total del agua, en esta reacción se consumen muy pocas moléculas de
agua por lo que la concentración del agua es una constante. Al igual que en los ácidos, esta constante indica
en qué medida de disocian las bases en un medio.
Porcentaje de ionización
Una forma alternativa de medir la disociación es mediante su porcentaje de ionización, que se define como
alfa para los ácidos y beta para las bases:
[𝐴− ] [𝐻3 𝑂+ ]
𝛼= . 100 = . 100
[𝐻𝐴] [𝐻𝐴]
[𝐻𝐵+ ] [𝑂𝐻 − ]
𝛽= . 100 = . 100
[𝐵] [𝐵]
Mientras mayores sean estas constantes, más fuerte son los ácidos o las bases.
Se puede encontrar una relación importante entre la constante de ionización de un ácido y la constante de
ionización de su base conjugada. Por ejemplo, para el amoníaco:
[𝐻3 𝑂+ ][𝑁𝐻3 ]
𝐾𝑎 =
[𝑁𝐻4+ ]
𝐾𝑎 . 𝐾𝑏 = 𝐾𝑤
Esta fórmula tiene vital importancia, ya que lleva a una conclusión importante, cuanto más fuerte sea un
ácido (mayor Ka), su base conjugada será más débil (menor Kb) y viceversa.
118
Hidrólisis de sales
Una sal es un compuesto iónico formado por la reacción de una base y un ácido. Las sales son electrolitos
fuertes que se disocian por completo para formar iones en agua. El término hidrólisis de una sal describe la
reacción de un anión o un catión de una sal o de ambos con el agua.
En general se cumple el hecho de que las sales que contienen un ion de un metal alcalino o alcalinotérreo,
excepto el berilio, y la base conjugada de un ácido fuerte, no se hidrolizan en una medida apreciable y sus
disoluciones se consideran neutras. Por ejemplo:
El ion de sodio no dona ni acepta iones hidrógeno, mientras que el ion nitrato es la base conjugada del
ácido nítrico, que es un ácido fuerte y por lo tanto no tiene afinidad con los iones hidrógeno. Por lo tanto, la
disolución es neutra.
Nota: El 𝑁𝑎𝑁𝑂3 proviene del 𝑁𝑎𝑂𝐻, que es una base fuerte y del 𝐻𝑁𝑂3 , que es un ácido fuerte. Cuando
ocurre esto, la sal es de carácter neutro y por ende, la disolución que producen también lo es.
La disolución de una sal derivada de una base fuerte y un ácido débil es básica. Por ejemplo, la disociación
del acetato de sodio en agua está dada por:
Dicha sal, proviene del ácido acético, que es un ácido débil y del hidróxido de sodio, que es una base fuerte.
Por esto, la sal es básica. El catión 𝑁𝑎+ es un ácido débil y el anión 𝐴𝑐 − es una base fuerte. Esta base es la
conjugada del ácido débil y reacciona con el agua de la siguiente manera:
[𝐻𝐴𝑐][𝑂𝐻 − ]
𝐾𝑏 =
[𝐴𝑐 − ]
Cuando se disuelve en agua una sal derivada de un ácido fuerte y una base débil, la disolución resulta ácida.
Por ejemplo, la sal derivada del amoniaco y el ácido clorhídrico es el cloruro de amonio, que es una sal
ácida:
El catión amonio es un ácido fuerte y el anión cloro es una base débil. Por lo tanto, el que reaccionará con
el agua en el proceso de hidrólisis el ion amonio:
119
La constante de hidrólisis ácida es en este caso:
[𝐻3 𝑂+ ][𝑁𝐻3 ]
𝐾ℎ𝑎 =
[𝑁𝐻4+ ]
Hasta ahora se han considerado sales en las que solo un ion se hidroliza, pero en el caso de las sales
derivadas de un ácido y de una base débil, se hidrolizan tanto el catión como el anión. Sin embargo, una
solución de estas sales puede ser ácida, básica o neutra. Depende principalmente de las fuerzas relativas de
la base y el ácido débil. Por ejemplo, el nitrito de amonio, se descompone para formar el catión amonio y el
anión nitrito:
En este caso, hay que evaluar ambas reacciones de hidrolisis y ver cual constante de hidrólisis es más
grande.
[𝐻3 𝑂+ ][𝑁𝐻3 ]
𝐾ℎ𝑎 =
[𝑁𝐻4+ ]
[𝑂𝐻 − ][𝐻𝑁𝑂2 ]
𝐾ℎ𝑏 =
[𝑁𝑂2− ]
Kha > Khb La disolución del catión es mayor que la del anión, por lo tanto, la disolución es ácida.
Kha < Khb La disolución del anión es mayor que la del catión, por lo tanto, la disolución es básica.
Kha = Khb Las disoluciones son iguales y la disolución es neutra.
Se toma siempre la reacción de hidrólisis cuya constante sea mayor para el análisis de la acidez.
El acetato de sodio es un electrolito fuerte mientras que el ácido acético es un ácido débil y se ioniza solo
en parte. De acuerdo con el principio de Le Chatelier, la adición de iones 𝐶𝐻3 𝐶𝑂𝑂− provenientes del
acetato a una disolución de ácido acético suprime la ionización del ácido, por lo que disminuye la
concentración de iones hidrógeno. En consecuencia, una solución que contenga el ácido acético y el
acetato de sodio será menos ácida que aquella que solo posea el ácido a la misma concentración. El
desplazamiento del equilibrio se debe a los iones acetato de la sal. El 𝐶𝐻3 𝐶𝑂𝑂− es el ion común y lo
aportan tanto el acetato de sodio como el ácido acético.
120
Se dice entonces que el efecto del ion común es el desplazamiento del equilibrio causado por la adición de
un compuesto que tiene un ion común con la sustancia disuelta.
Ecuación de Henderson-Hasselbalch
𝑝𝐾𝑎 = − log 𝐾𝑎
Una solución reguladora del pH o buffer es una solución que tiene la capacidad de amortiguar o minimizar
los cambios de pH. Se forman entre un ácido débil y sal de dicho acido o entre una base débil y una sal de
dicha base. Su función es mantener el pH de un sistema más o menos constante frente al agregado de
ácidos o bases fuertes.
Son muy importantes en la industria de los alimentos ya que la calidad de los productos depende de que su
pH se mantenga constante. La regulación del pH es muy importante no sólo cuando se hacen en el
laboratorio reacciones en las cuales el cambio en el pH puede afectar la reacción, sino en todas las
reacciones que ocurren en los organismos vivos. Las reacciones biológicas están catalizadas (aceleradas)
por enzimas, que son proteínas. Las enzimas no solamente pueden destruirse (desnaturalizarse) con
cambios bruscos de pH, sino que tienen un rango de pH óptimo para su trabajo. Cuando se trabaja en el
laboratorio con reacciones enzimáticas es necesario regular el pH. De la misma manera en los organismos
vivos el pH está regulado. En el cuerpo humano el pH se mantiene entre 7.2 y 7.5.
Indicadores
Muchas sustancias presentan diferentes colores de acuerdo con el pH en que se disuelven y se utilizan
como indicadores. Muchos indicadores son ácidos o bases orgánicas débiles. El equilibrio de un indicador
ácido se describe de manera general como:
La disociación del indicador se acompaña con cambios en la estructura. El punto final de una valoración se
alcanza cuando el indicador cambia de color.
Si el indicador está en un medio suficientemente ácido, el principio de Le Chatelier predice que este
equilibrio se desplazará hacia la izquierda y predominará el color del indicador de la forma no ionizada.
121
(HIn). Por otra parte, en un medio básico, el equilibrio se desplazará hacia la derecha y predominará el
color de la base conjugada (In-). En general:
[𝐻𝐼𝑛]
≥ 10 → 𝑃𝑟𝑒𝑑𝑜𝑚𝑖𝑛𝑎 𝑒𝑙 𝑐𝑜𝑙𝑜𝑟 𝑑𝑒𝑙 á𝑐𝑖𝑑𝑜 [𝐻𝐼𝑛]
[𝐼𝑛− ]
[𝐻𝐼𝑛]
≤ 0,1 → 𝑃𝑟𝑒𝑑𝑜𝑚𝑖𝑛𝑎 𝑒𝑙 𝑐𝑜𝑙𝑜𝑟 𝑑𝑒 𝑙𝑎 𝑏𝑎𝑠𝑒 𝑐𝑜𝑛𝑗𝑢𝑔𝑎𝑑𝑎 [𝐼𝑛− ]
[𝐼𝑛− ]
[𝐻𝐼𝑛] ≈ [𝐼𝑛− ] → 𝐸𝑙 𝑐𝑜𝑙𝑜𝑟 𝑒𝑠 𝑢𝑛𝑎 𝑐𝑜𝑚𝑏𝑖𝑛𝑎𝑐𝑖ó𝑛 𝑑𝑒 𝑙𝑜𝑠 𝑐𝑜𝑙𝑜𝑟𝑒𝑠 𝑑𝑒𝑙 á𝑐𝑖𝑑𝑜 𝑦 𝑙𝑎 𝑏𝑎𝑠𝑒 𝑐𝑜𝑛𝑗𝑢𝑔𝑎𝑑𝑎
El color de una disolución a la que le hemos añadido indicador universal nos indicará el pH que tiene.
También existen unos equipos especiales, denominados pHmetros que nos indican el valor numérico del
pH. Estos aparatos deben calibrarse previamente con disoluciones que tiene un pH conocido. También se
utilizan tiras reactivas que contiene un colorante orgánico que cambia de color según el pH.
Valoraciones ácido-base
Es la neutralización o la reacción de un ácido y una base para generar sal y agua. La titulación a tratar es la
de un ácido fuerte con una base fuerte. Cuando un ácido reacciona completamente con la base se puede
decir que la concentración del ácido es igual a la concentración de la base. Este punto donde esto ocurre se
denomina punto de equivalencia. Si las soluciones no son coloreadas, es necesario el uso de una sustancia
o componente externo a la reacción que indique que se ha llegado a la neutralización. El punto final es el
punto en el cual el indicador reacciona con el exceso de ácido o de base y cambia de color.
122
123
ELECTROQUÍMICA
La electroquímica es una rama de la química que estudia la transformación entre la energía eléctrica y la
energía química. Los procesos electroquímicos son reacciones redox, es decir, de óxido-reducción. En ellos
la energía liberada por una reacción química espontanea se convierte en energía eléctrica, o bien, la
energía eléctrica se utiliza para inducir una reacción química no espontanea. En las reacciones redox se
transfieren electrones de una sustancia a la otra, por ejemplo:
En este caso, hay un cambio en el número de oxidación de los elementos magnesio e hidrógeno:
2𝐻 +1 → 𝐻2 0 𝑆𝑒 𝑟𝑒𝑑𝑢𝑐𝑒
Es decir, en dicha reacción la perdida de electrones se evidencia como un aumento del número de
oxidación, a esto se le denomina oxidación. Por su parte, la reducción de un elemento implica una
disminución del número de oxidación, debido a la ganancia de electrones.
Se define como agente reductor al elemento que se oxida y como agente oxidante al elemento que se
reduce. No hay reducción sin oxidación.
Celdas electroquímicas
Una celda electroquímica o galvánica es un dispositivo experimental para generar electricidad mediante
una reacción redox espontanea. Una barra de zinc metálico (𝑍𝑛) se sumerge en una solución de sulfato de
zinc (𝑍𝑛𝑆𝑂4 ) y una barra de cobre (𝐶𝑢) es introducida en otro recipiente que contiene una solución de
sulfato de cobre (𝐶𝑢𝑆𝑂4 ). Las barras de zinc y cobre se denominan electrodos. Esta distribución particular
de electrodos y soluciones en concentración 1 M se denomina celda de Daniell.
El funcionamiento de la celda se basa en el principio de que la oxidación del zinc y la reducción del cobre se
pueden llevar a cabo en recipientes diferentes. Las semireacciones serían las siguientes:
𝑍𝑛0 → 𝑍𝑛+2 + 2𝑒 −
𝐶𝑢+2 + 2𝑒 − → 𝐶𝑢0
En una celda electroquímica el ánodo es donde se lleva a cabo la oxidación y el cátodo es donde se lleva a
cabo la reducción.
Observe que si el recipiente sería el mismo para ambas barras y soluciones, los iones de cobre cargados
positivamente reaccionarían directamente con la barra de zinc, por lo que no se obtendría trabajo eléctrico
útil:
Para lograr obtener trabajo eléctrico, se completa el circuito mediante un puente salino, que es un
conductor mediante el cual pueden pasar los aniones y cationes de un compartimiento al otro.
Generalmente está compuesto de un electrolito inerte tal como 𝑁𝐻4 𝑁𝑂3 o 𝐾𝐶𝑙, cuyos iones no
reaccionaran ni con la solución ni con las barras. Sin el puente salino, se acumularían cargas positivas en el
ánodo y negativas en el cátodo, impidiendo que la celda funcione.
124
Durante la reacción redox global, los electrones fluyen desde el ánodo hacia el cátodo, mientras que los
aniones y cationes de la disolución se dirigen al ánodo y al cátodo respectivamente. La corriente eléctrica
fluye desde el ánodo al cátodo porque existe una diferencia de potencial eléctrica entre los electrodos. Esta
diferencia de potencial se mide con un voltímetro, que nos da el voltaje de la celda. El voltaje también es
comúnmente llamado fuerza electromotriz. La representación de la reacción se hace de la siguiente
manera:
La línea vertical representa la diferencia entre las fases, mientras que la doble línea representa el puente
salino. El ánodo se escribe primero a la izquierda y los demás componentes aparecen en el mismo orden
que se encontrarían al moverse del ánodo al cátodo.
La elección de una referencia arbitraria para medir el potencial del electrodo es análoga a elegir la
superficie del océano como punto de referencia para determinar la altitud, y desde ahí referirse a cualquier
altitud por encima o debajo de dicho punto.
Para determinar esto, se utiliza un electrodo de hidrogeno, en una disolución de ácido clorhídrico 1M se
burbujea gas hidrogeno a 25°C y una atmosfera de presión. El electrodo de platino tiene dos funciones, la
primera es que proporciona la superficie para que se disocien las moléculas de hidrogeno, y la segunda es
que sirve como conductor eléctrico para el circuito externo:
𝐻2 0 → 2𝐻 + + 2𝑒 −
2𝐻 + + 2𝑒 − → 𝐻2 0 𝐸0 = 0 𝑉
Esto se denomina potencial estándar de reducción, o el voltaje asociado con una reacción de reducción
cuando todos los solutos están en concentración 1 M y todos los gases están a 1 atm. Este electrodo, se
conoce como EEH (electrodo estándar de hidrógeno).
125
Intercambiando electrodos y comparándolos con el de hidrogeno, se obtienen todos los potenciales de
reducción que encontramos en las tablas.
Como en el caso de la energía libre de Gibbs, se puede utilizar el valor de la fem estándar de la celda para
predecir el alcance de una reacción redox. Si es positivo, la reacción redox favorecerá la formación de
productos en el equilibrio, es espontanea en ese sentido. Si es negativo, se formaran más reactivos que
productos en el equilibrio, siendo no espontanea en ese sentido. Mientras más positivo sea, mayor será la
posibilidad de que ocurra dicha reacción.
En una celda electroquímica, la energía química se transforma en energía eléctrica, la cual es igual al
producto de la fem de la celda por la carga eléctrica total. La carga eléctrica está dada por:
𝐶𝑎𝑟𝑔𝑎 𝑡𝑜𝑡𝑎𝑙 = 𝑛 . 𝐹
Pero además:
∆𝐺 = −𝑅 . 𝑇. ln 𝐾
Entonces:
0
−𝑅 . 𝑇 . ln 𝐾 = − 𝑛 . 𝐹. 𝐸𝑐𝑒𝑙𝑑𝑎
0
𝑅. 𝑇 0,0592 𝑉
𝐸𝑐𝑒𝑙𝑑𝑎 = ln 𝐾 = log 𝐾
𝑛. 𝐹 𝑛
La ecuación anterior sirve si la fem de la celda está dada en condiciones estándar, en otras condiciones hay
que aplicar la ecuación de Nerst:
0
0,0592 𝑉
𝐸 = 𝐸𝑐𝑒𝑙𝑑𝑎 − log 𝑄
𝑛
Durante el funcionamiento de la celda electroquímica los electrones fluyen del ánodo al cátodo, lo que da
por resultado la formación de productos y una disminución en la concentración de los reactivos. Así,
aumenta Q, por lo que E disminuye. Finalmente, la celda logra el equilibrio, en donde no hay transferencia
neta de electrones dado que E = 0, y Q = K.
Celdas de concentración
Como el potencial de electrodo depende de las concentraciones de los iones, es factible construir una celda
electroquímica con dos semiceldas hechas del mismo material pero con distinta concentración iónica.
0
0,0592 𝑉 0,0592 𝑉 [𝑋]𝑑𝑖𝑙𝑢𝑖𝑑𝑎
𝐸 = 𝐸𝑐𝑒𝑙𝑑𝑎 − log 𝑄 = − log
𝑛 𝑛 [𝑋]𝑐𝑜𝑛𝑐𝑒𝑡𝑟𝑎𝑑𝑎
La fem de las celdas de concentración suele ser pequeña y va disminuyendo continuamente durante la
operación de la celda a medida que se igualan las concentraciones iónicas en los dos compartimientos.
127
Características de las celdas de concentración:
Las disoluciones de los electrodos están formadas por disoluciones de análogas composición y
diferentes concentraciones, de modo que se tiende a alcanzar el equilibrio que implica la igualdad
en las concentraciones de ambas disoluciones.
En ellas no se produce reacción global.
En una pila de concentración, el electrodo de menor concentración actúa como ánodo mientras
que el de mayor concentración actúa como cátodo.
Baterías
Una batería es una celda electroquímica o un conjunto de celdas electroquímicas combinadas que pueden
servir como fuente de corriente eléctrica directa a un voltaje constante. Aunque funcionan igual que las
celdas electroquímicas, la batería tiene la ventaja que no requiere de un puente salino.
Electrolisis
A diferencia de las reacciones redox espontaneas, que convierten la energía química en energía eléctrica,
en la electrólisis se utiliza la energía eléctrica para inducir una reacción química que es no espontanea. Este
proceso se lleva a cabo en un dispositivo que se conoce como celda electrolítica.
Si se coloca un par de electrodos en una disolución de un electrólito y se conecta una fuente de corriente
continua entre ellos, los iones positivos de la disolución se mueven hacia el electrodo negativo y los iones
negativos hacia el positivo. Al llegar a los electrodos, los iones pueden ganar o perder electrones y
transformarse en átomos neutros o moléculas, la naturaleza de las reacciones del electrodo depende de la
diferencia de potencial o voltaje aplicado.
La conducción electrolítica, en la cual la carga es transportada por los iones, no ocurrirá a menos que los
iones del electrólito se puedan mover libremente. Por consiguiente, la conducción electrolítica es exhibida
principalmente por sales fundidas y por soluciones acuosas de electrólitos. Por consiguiente, una corriente
que pase a través de un conductor electrolítico requiere que el cambio químico acompañe el movimiento
de los iones.
Para predecir qué tipo de reacciones se producirán en el ánodo y cátodo de una celda electrolítica con un
determinado electrolito hay que tener en cuenta:
a) Sobrevoltaje: potencial adicional con respecto al calculado para conseguir una determinada
reacción en los electrodos.
b) Reacciones competitivas: son las distintas reacciones que se producirán dentro de una celda
electrolítica, pero dependen del potencial aplicado para que estas se produzcan o no.
En su fase fundida el cloruro de sodio se puede electrolizar para formar sodio metálico y cloro. En el 𝑁𝑎𝐶𝑙
fundido, los cationes y los aniones son los iones 𝑁𝑎+ y 𝐶𝑙 − . La celda electrolítica posee un par de
electrodos conectados a una batería. Esta funciona como una bomba de electrones, que los lleva del
cátodo al ánodo:
𝑁𝑎𝐶𝑙 → 𝑁𝑎+ + 𝐶𝑙 −
Ánodo:
128
1
𝐶𝑙 − → 2 𝐶𝑙2 + 𝑒
Cátodo:
𝑁𝑎+ + 𝑒 → 𝑁𝑎
Los cálculos teóricos indican que el valor de 𝐸 0 para el proceso global es de 4 V mínimo para que el proceso
se lleve a cabo, sin embargo, en la práctica se necesita un voltaje mayor, denominado sobrevoltaje. Esto es
debido a la poca eficiencia del proceso electrolítico.
129
Este es el más complicado de los tres ejemplos de electrolisis ya que hay varias especies que pueden
oxidarse y reducirse. Las reacciones que pueden llevarse a cabo en el ánodo son:
Como vemos, esto sugiere que en el ánodo, debido a necesita menos potencial, se debiera liberar oxígeno.
Esto no ocurre debido al sobrevoltaje, que se define como la diferencia entre el potencial del electrodo y el
voltaje real necesario para la electrólisis. En consecuencia el gas liberado es el cloro. Por otra parte en el
cátodo pueden llevarse a cabo las siguientes reducciones:
Como consecuencia de la reacción se producirá gas cloro e hidrógeno, y los hidroxilos libres se unirán con
los aniones sodio que libera la disolución de cloruro de sodio, formando como producto secundario
hidróxido de sodio.
Primera ley
𝑚 = 𝜀. 𝑞 = 𝜀. 𝐼. 𝑡
𝑃𝑒𝑠𝑜 𝑎𝑡ó𝑚𝑖𝑐𝑜
𝐸𝑞 =
𝑛° 𝑒𝑙𝑒𝑐𝑡𝑟𝑜𝑛𝑒𝑠 𝑖𝑛𝑡𝑒𝑟𝑐𝑎𝑚𝑏𝑖𝑎𝑑𝑜𝑠
𝐸𝑞 𝑃𝑎
𝜀= =
𝐹 𝑛. 𝐹
130
Reemplazando en la primera ecuación obtenemos que la masa depositada en el electrodo será:
𝑃𝑎. 𝐼. 𝑡
𝑚 = 𝜀. 𝑞 = 𝜀. 𝐼. 𝑡 =
𝑛. 𝐹
Segunda ley
“Las masas de diferentes sustancias producidas por el paso de la misma cantidad de electricidad, son
directamente proporcionales a sus equivalentes químicos”. Esta ley permite calcular la masa de diferentes
sustancias depositadas por la misma cantidad de electricidad.
𝑚1 𝐸𝑞1 𝜀1
= =
𝑚2 𝐸𝑞2 𝜀2
Corrosión
La corrosión es el término que suele aplicarse al deterioro de los metales por un proceso electroquímico. Es
un proceso redox para el cuál los metales se oxidan en presencia de oxígeno y humedad, buscando su
forma más estable, es decir, de menor energía interna.
Componentes de la corrosión:
Siempre que la corrosión esté originada por una reacción electroquímica (oxidación), la velocidad a la que
tiene lugar dependerá en alguna medida de la temperatura, de la salinidad del fluido en contacto con el
metal, el pH de la solución, la presencia de bacterias (microorganismos) y de las propiedades de los metales
en cuestión. Otros materiales no metálicos también sufren corrosión mediante otros mecanismos. El
proceso de corrosión es natural y espontáneo.
El ejemplo típico de la corrosión es la formación de herrumbre u oxidación del hierro. Para que el metal se
oxide debe estar en contacto con oxígeno y agua. Aunque las reacciones Implicadas son muy complejas y
todavía no se conocen en su totalidad, se cree que las principales etapas son las siguientes. Una parte de la
superficie del metal funciona como ánodo, donde se lleva a cabo la oxidación (ánodo):
Fe(𝑠) → F𝑒 2+ (𝑎𝑐) + 2𝑒 −
Los electrones donados por el hierro reducen el oxígeno atmosférico a agua en el cátodo, que a su vez es
otra región de la misma superficie del metal (cátodo):
0 0 0
𝐸𝑐𝑒𝑙𝑑𝑎 = 𝐸𝑐á𝑡𝑜𝑑𝑜 − 𝐸á𝑛𝑜𝑑𝑜 = 1,67 𝑉
131
Observe que esta reacción se lleva a cabo en un medio acido; parte de los iones H+ provienen de la
reacción del dióxido de carbono atmosférico con el agua, en la que se forma ácido carbónico. Los iones
ferrosos que se formaron en el ánodo se oxidan posteriormente gracias al oxigeno:
Esta forma hidratada de óxido de hierro (III) es lo que se conoce como herrumbre. La cantidad de agua
asociada con el óxido de hierro es variable, así que la formula se representa como se vio arriba.
En la siguiente figura se muestra el mecanismo de formación del óxido de hierro. El circuito eléctrico se
completa por la migración de electrones y de iones; esto explica por qué la oxidación es tan rápida en el
agua salada. En los climas fríos, las sales esparcidas en las carreteras para derretir el hielo y la nieve son las
causantes principales de la oxidación de los automóviles.
La corrosión metálica no se limita al hierro. El aluminio sirve para fabricar muchas cosas útiles, incluso
aviones y latas para bebidas, pero tiene mayor tendencia a oxidarse que el hierro. El aluminio tiene un
potencial estándar de reducción más negativo que el del hierro. Con este solo hecho se esperaría ver que
los aviones se corroyeran lentamente durante las tormentas, y que las latas de bebidas se transformaran en
montones de aluminio oxidado. No obstante, esto no sucede porque la misma capa de óxido de aluminio
insoluble, que se forma en la superficie del metal expuesto al aire, protege al aluminio que está debajo. Por
el contrario, la herrumbre que se forma en la superficie del hierro es demasiado porosa para proteger al
metal. Se han puesto en práctica varios métodos para proteger a los metales de la corrosión, que se verán a
continuación
Tipos de Corrosión
Con el término corrientes vagabundas o parásitas se designa a aquellas corrientes eléctricas que circulan en
el suelo fuera de los circuitos previstos. La intensidad de estas corrientes con frecuencia es variable y
depende esencialmente de la naturaleza y funcionamiento de la fuente que las emite: tracción eléctrica,
subestaciones, etcétera. La corriente eléctrica busca siempre recorridos de menor resistencia y por esta
razón sigue con facilidad las canalizaciones metálicas enterradas y en particular las envolturas metálicas de
los cables eléctricos y telefónicos. La corrosión se produce siempre en los lugares en donde la corriente sale
de la estructura que ha recorrido, provocando una disolución anódica tanto más peligrosa cuanto más
localizada este el suelo al estar húmedo y contener sales favorece la conducción. Dicho daño puede
disminuirse con una cubierta adecuada en las cañerías, cables o haciendo instalaciones eléctricas
cuidadosas.
132
Corrosión por aireación superficial
Cuando una parte de una pieza metálica se encuentra en contacto con una concentración de oxígeno
mayor que la que hay en otra zona de la misma pieza, siempre se cumple que en la zona rica de oxígeno
tiende a producirse la reducción de dicho gas, mientras que en la zona más pobre en oxígeno tiende a
producirse la oxidación del metal como ejemplo práctico podemos nombrar un trozo de hierro sumergido
hasta la mitad en agua.
En otras palabras, la zona rica en oxígeno actúa como cátodo y la pobre en oxígeno como ánodo. Este
fenómeno, que se conoce como principio de la aireación diferencial, tiene un gran interés desde el punto
de vista práctico. En este caso comprobamos que en la corrosión no solo puede tener un papel importante
el agua, sino también el oxígeno.
Al emplear dos electrodos metálicos iguales, introducidos ambos en soluciones idénticas; cuando se elimine
el oxígeno en una de ellas se tendrá una pila de corrosión ¿Qué electrodo será el ánodo? La reacción de la
celda tenderá a igualar la concentración de oxígeno en ambos compartimientos por lo tanto donde hay
mayor concentración de oxígeno éste se reducirá y los electrones necesarios serán provistos por la
disolución del hierro del otro compartimiento que consecuentemente será el ánodo.
Por lo tanto, en general las zonas más pobres de oxígeno serán ánodos y allí la corrosión del metal se
acelerará. Este fenómeno ocurre en túneles ferroviarios, la corrosión en las vías es mayor dentro de los
túneles debido a los escases de oxígeno y a la presencia de humedad.
133
Corrosión galvánica
Corrosión bacteriana
Generalmente las bacterias son descritas clínicamente por su actividad patógena para el ser humano, pero
algunas no solamente lo atacan a él sino también a sus obras. En este grupo de organismos existen las que
sin ser patógenas son responsables de la corrosión biológica, ya que algunas se desarrollan muy bien en
presencia de sales minerales viviendo y sustentándose prácticamente de “aire” a falta de cualquier
sustancia orgánica.
Las bacterias de la corrosión actúan en cualquier parte que haya hierro, manganeso o derivados azufrados
en presencia del agua, dentro o fuera de las tuberías o bien al aire libre en los depósitos, sin importar que
el agua sea dulce o salada. Por su gran diversidad, proliferan aún en las condiciones más desfavorables si no
se toman algunas precauciones. Algunas de estas bacterias se desarrollan particularmente en ciertos sitios
del medio ambiente, los que son determinados por características específicas como, por ejemplo: tensión
de oxígeno, ambiente reductor, pH, etc.
Algunas bacterias no provocan directamente la corrosión, pero sí la aceleran porque inciden en la cinética
del mecanismo de reacción.
134
Pueden ser ubicadas en una de estas tres clases:
En aleaciones como el acero se producen adherencias que son fácilmente removidas con la pérdida del
producto de corrosión, desprendiéndolas a intervalos durante la exposición. En las aleaciones pasivas se
adhieren rápidamente, las que se fijan con fuerza. El efecto de corrosión se produce por las
concentraciones de oxígeno en el ambiente permitiendo el desarrollo de ciertas bacterias, aeróbicas o
anaerobias según corresponda, y cuando el metal corroído se agrieta, se afectan a los organismos
anaerobios incrustados. No todos los metales que podría esperarse forman películas tóxicas; se ha
observado que el berilio y plomo permanecen libres de incrustaciones. Las aleaciones en base a cobre son
resistentes a la incrustación debido a la formación de óxido de cobre que es tóxico a los organismos, pero
no afecta a las estructuras adyacentes.
Impedir la corrosión implica impedir reacciones electroquímicas. Es decir, eliminar la posible presencia de
un electrolito que actúe como medio conductor para facilitar una reacción de transferencia de electrones
desde un metal anódico. Así, las soluciones podrían ser:
Es decir, crear una capa o barrera que aísle el metal del entorno. Dentro de este tipo de protección
podemos hallar:
Recubrimientos no metálicos:
- Pinturas y barnices: Es económico y exige que la superficie esté limpia de óxidos y grasas
- Plásticos: Son muy resistentes a la oxidación y son flexibles, pero apenas resisten el calor. El más
empleado es el PVC.
- Esmaltes y cerámicos: Tiene la ventaja de resistir las altas temperaturas y el desgaste.
a) Inmersión: Se recubre el metal a proteger en un baño de metal fundido. El metal al solidificar forma
una fina capa protectora. Los metales más empleados son:
b) Electrodeposición: En este caso se hace pasar corriente eléctrica entre dos metales diferentes que
están inmersos en un líquido conductor que hace de electrolito. Uno de los metales será aquel que
135
hará de ánodo, el cual se oxidará y sacrificará. El otro metal, el que se desea proteger, hará de
cátodo y ambos estarán inmersos en el electrolito que estarán en una cuba. Cuando pasa la
corriente eléctrica, sobre el metal catódico se crea una fina capa protectora hecha del material
procedente del metal anódico, pues la pila obliga a ceder electrones al ánodo que alcanzarán al
cátodo. Cuando el metal que hace de cátodo y se desea proteger es acero y el otro que va a
protegerlo (que hace de ánodo) es cinc, el proceso se llama galvanizado.
Se provoca la reacción de las piezas con un agente químico que forme compuestos en su superficie que
darán lugar a una capa protectora. La superficie metálica se puede desactivar mediante un proceso
conocido como pasivación. Cuando el metal se trata con un agente oxidante fuerte se forma una delgada
capa de óxido, por ejemplo:
- Cromatizado: Se aplica una solución de ácido crómico sobre el metal a proteger. Se forma una capa de
óxido de cromo que impide su corrosión.
- Fosfatación: Se aplica una solución de ácido fosfórico y fosfatos sobre el metal. Se forma una capa de
fosfatos metálicos que la protegen del entorno.
Protección catódica
Se fuerza al metal a comportarse como un cátodo, suministrándole electrones. Se emplea otro metal que
estará en contacto con el metal que se desea proteger, llamado “ánodo de sacrificio”, el cual se corroe y
acaba destruyéndose aportando electrones al metal. En definitiva, el metal “ánodo de sacrificio” se pone
en contacto con el metal a proteger el cual recibe electrones del primero. Se necesita la presencia de un
electrolito. Se emplea mucho en tuberías enterradas. En el proceso de protección catódica, el metal que va
a ser protegido de la corrosión se convierte en el cátodo de una celda galvánica. Se evita la corrosión de un
clavo de hierro al conectarlo a un trozo de zinc. Sin esta protección, el clavo se oxidaría rápidamente en el
agua. La corrosión en las tuberías de hierro subterráneas y de los tanques de almacenamiento puede
evitarse, o reducirse bastante, conectándolos a metales como zinc y magnesio, ya que estos se oxidan más
fácilmente que el hierro.
136
Protección por inhibidores
Se trata de añadir productos químicos al electrolito para disminuir la velocidad de la corrosión. Ejemplo:
Sales de cromo.
137
138
139
140
QUÍMICA ORGÁNICA
Una cadena carbonada es el esqueleto de prácticamente todos los compuestos orgánicos y está formada
por un conjunto de varios átomos de carbono, unidos entre sí mediante enlaces covalentes carbono-
carbono y a la que se unen o agregan otros átomos como hidrógeno, oxígeno o nitrógeno, formando
variadas estructuras, lo que origina infinidad de compuestos diferentes.
La facilidad del carbono para formar largas cadenas es casi específica de este elemento y es la razón del
elevado número de compuestos de carbono conocidos, si lo comparamos con compuestos de otros
átomos. Las cadenas carbonadas son bastante estables y no sufren variación en la mayoría de las
reacciones orgánicas.
Grupos funcionales
La reactividad de los compuestos orgánicos se puede atribuir a átomos o grupos de átomos específicos
dentro de las moléculas. Un sitio de reactividad de una molécula orgánica recibe el nombre de grupo
funcional porque gobierna el comportamiento o el funcionamiento de la molécula. Como hemos visto, la
presencia de dobles enlaces C=C o triples enlaces C≡C en un hidrocarburo intensifica notablemente su
reactividad. Además, cada uno de estos grupos funcionales sufre reacciones características. Cada clase
definida de grupo funcional suele sufrir los mismos tipos de reacciones en todas las moléculas, cualquiera
que sea el tamaño y la complejidad de la molécula. En consecuencia, la química de una molécula orgánica
está determinada en gran medida por los grupos funcionales que contiene. Al conjunto de compuestos
orgánicos que poseen el mismo grupo funcional pero que difieren en un elemente, se le denomina serie
homóloga.
141
142
Otra clasificación de los hidrocarburos
Tipos de carbono
143
Isomería
Los compuestos que tienen la misma fórmula molecular pero diferente disposición de sus enlaces (y, por
tanto, diferente estructura) se llaman isómeros estructurales.
Los isómeros estructurales de un alcano en particular difieren poco unos de otros en cuanto a propiedades
físicas. El número de isómeros estructurales posibles aumenta rápidamente con el número de átomos de
carbono del alcano. Hay 18 isómeros posibles de fórmula molecular 𝐶8 𝐻18, por ejemplo, y 75 isómeros
posibles de fórmula molecular 𝐶10 𝐻22.
Isómeros geométricos
Los isómeros geométricos son compuestos que tienen la misma fórmula molecular y los mismos grupos
enlazados unos con otros, pero que difieren en la disposición espacial de estos grupos. Los isómeros
geométricos poseen propiedades físicas distintas y suelen diferir en grado significativo en su
comportamiento químico.
En el isómero cis penteno los dos grupos están del mismo lado del doble enlace, en tanto que en el isómero
trans penteno se hallan en lados opuestos.
Isómeros de función
Varía el grupo funcional, conservando el esqueleto carbonado. Por ejemplo, el 𝐶3 𝐻6 𝑂 puede corresponder
a la molécula de propanal (función aldehído) o a la propanona (función cetona).
144
Esta isomería la presentan ciertos grupos de compuestos relacionados como: los alcoholes y éteres, los
ácidos y ésteres, y también los aldehídos y cetonas.
Hidrocarburos
Por ser tan numerosos los compuestos de carbono, es conveniente organizarlos en familias que presentan
semejanzas estructurales. La clase más sencilla de compuestos orgánicos es la de los hidrocarburos, que
son los que se componen sólo de carbono e hidrógeno. La característica estructural clave de los
hidrocarburos (y de la mayor parte de las otras sustancias orgánicas) es la presencia de enlaces estables
carbono - carbono.
El carbono es el único elemento capaz de formar largas cadenas estables de átomos unidos por enlaces
sencillos, dobles o triples.
Los hidrocarburos se dividen en cuatro tipos generales, de acuerdo con el tipo de enlaces carbono-carbono
de sus moléculas. Los cuatro tipos son: alcanos, alquenos, alquinos e hidrocarburos aromáticos.
En estos hidrocarburos, al igual que en otros compuestos orgánicos, cada átomo de C tiene
invariablemente cuatro enlaces (cuatro enlaces sencillos, dos enlaces sencillos y un doble enlace, o un
enlace sencillo y un triple enlace).
Los alcanos son hidrocarburos que contienen únicamente enlaces sencillos, como el etano (𝐶2 𝐻6). Debido a
que los alcanos contienen el máximo número posible de átomos de hidrógeno por átomo de carbono, se les
llama hidrocarburos saturados. Los alquenos, también conocidos como olefinas, son hidrocarburos que
contienen un doble enlace C=C, como el etileno (𝐶2 𝐻4). Los alquinos contienen un triple enlace C≡C, como
el acetileno (𝐶2 𝐻2). En los hidrocarburos aromáticos los átomos de carbono están unidos formando una
estructura de anillo plano que contiene enlaces tanto sigma como pi entre átomos de carbono. El benceno
(𝐶6 𝐻6) es el ejemplo mejor conocido de hidrocarburo aromático. Los alquenos, alquinos e hidrocarburos
aromáticos se describen como hidrocarburos insaturados porque contienen menos hidrógeno que un
alcano con el mismo número de átomos de carbono.
Los miembros de estas distintas clases de hidrocarburos presentan diferentes comportamientos químicos,
como veremos en breve. Sin embargo, sus propiedades físicas son similares en muchos aspectos. Debido a
que el carbono y el hidrógeno no difieren mucho en cuanto a electronegatividad (2,5 en el caso del carbono
y 2,1 en el del hidrógeno), las moléculas de hidrocarburo son relativamente poco polares. En consecuencia,
son casi totalmente insolubles en agua, pero se disuelven con facilidad en otros disolventes no polares.
Además, sus puntos de fusión y de ebullición están determinados por las fuerzas de dispersión de London.
Por esta razón los hidrocarburos tienden a ser menos volátiles al aumentar la masa molar.
Alcanos
Los alcanos se presentan en los tres estados de agregación: sólido, líquido y gaseoso. El estado de
agregación dependerá del número de átomos en la cadena principal.
145
Por esta razón, los alcanos de bajo peso molecular (metano, etano, propano y butano) son gases, pero a
medida que el número de carbonos en la serie homóloga aumenta también lo hace el número de pequeños
dipolos instantáneos porque crece el número de enlaces C-C y C-H y así las moléculas se mantienen más
fijas, y el compuesto se presenta a temperatura ambiente como líquido (pentano, hexano, etc.) y los
alcanos con más de 18 átomos de carbono son sólidos a temperatura ambiente. De la misma manera al
aumentar el tamaño de la molécula se incrementa el punto de fusión, ebullición, así como la densidad.
La mayoría de los alcanos son insolubles en agua, y solo se disuelven en solventes no polares, de la misma
forma son excelentes disolventes de grasas y algunas ceras. Los alcanos tienen una baja densidad, la cual
crece al aumentar el peso molecular. Sin embargo, siempre su valor es menor que la densidad del agua.
Los alcanos son compuestos poco reactivos debido a que no tienen sitios de reacción con electrones
disponibles o deficiencia de ellos. Es por ello que no sufren transformaciones en presencia de metales,
ácidos, bases o agentes oxidantes sin la presencia de energía, generalmente en forma de calor. Sin
embargo, los alcanos son excelentes combustibles y en presencia de oxígeno arden y desprenden dióxido
de carbono y agua.
Alquenos
Las propiedades físicas de los alquenos son comparables a las de los alcanos, de la misma forma el estado
de agregación de los alquenos dependerá del número de átomos de carbono presentes en la molécula.
Por lo que los alquenos más sencillos, eteno, propeno y buteno son gases, los alquenos de cinco átomos de
carbono hasta quince átomos de carbono son líquidos y los alquenos con más de quince átomos de
carbono se presentan en estado sólido. Los puntos de fusión de los alquenos se incrementan al aumentar el
tamaño de la cadena, al aumentar las interacciones entre los átomos. Al igual que en los alcanos, la
densidad de los alquenos es menor a la del agua y solamente son solubles en solventes no polares.
Los alquenos son más reactivos que los alcanos debido a la presencia del doble enlace. Este doble enlace
carbono – carbono está conformado por un enlace sigma (σ) y un enlace pi (π) que es más débil, pero que
en conjunto (enlace σ y enlace π son más fuertes que el enlace de los alcanos que es solamente enlace σ).
Las reacciones típicas de los alquenos involucran el rompimiento de este enlace π con la formación de dos
enlaces σ.
Los alquenos, como los alcanos son altamente combustibles y reaccionan con el oxígeno formando como
productos dióxido de carbono, agua y energía en forma de calor.
Alquinos
Las propiedades físicas de los alquinos son muy similares a las de los alcanos y los alquenos de masas
moleculares parecidas. Al igual que con los alcanos y alquenos, el estado de agregación de los alquinos
dependerá del número de átomos de carbono presentes en la molécula.
El etino o acetileno, así como el propino y el butino son gases a temperatura ambiente, y sus puntos de
ebullición y fusión son semejantes a los de los alcanos y alquenos correspondientes por lo que los alquinos
de cinco átomos de carbono hasta quince átomos de carbono son líquidos y los alquinos mayores de quince
átomos de carbono se presentan en estado sólido.
Los alquinos son compuestos de baja polaridad y tienen propiedades semejantes a las de los alcanos y
alquenos, por lo que también su densidad es menor a la del agua, los puntos de fusión y ebullición se
incrementan al aumentar el tamaño de la cadena y solamente son solubles en solventes no polares.
Las reacciones químicas de los alquinos son muy semejantes a las de los alquenos. De la misma forma que
los alquenos, los alquinos reaccionan con el oxígeno formando como productos dióxido de carbono, agua y
energía en forma de calor.
146
Los alquinos, como los alcanos y alquenos son altamente combustibles y reaccionan con el oxígeno
formando como productos dióxido de carbono, agua y energía en forma de calor; esta energía liberada, es
mayor en los alquinos ya que libera una mayor cantidad de energía por mol de producto formado. Es por
ello que se utiliza el acetileno como gas para soldar.
Hidrocarburos aromáticos
El miembro más simple de la serie es el benceno (𝐶6 𝐻6). La estructura plana y sumamente simétrica del
benceno, con sus ángulos de enlace de 120°, sugiere un alto grado de insaturación. Cabría esperar, por
tanto, que el benceno se pareciese a los hidrocarburos insaturados y que fuese muy reactivo. Sin embargo,
el comportamiento químico del benceno es diferente al de los alquenos o alquinos. El benceno y los demás
hidrocarburos aromáticos son mucho más estables que los alquenos y los alquinos porque los electrones p
están deslocalizados en los orbitales p
Los anillos aromáticos se representan mediante hexágonos con un círculo inscrito en ellos para denotar el
carácter aromático. Cada vértice representa un átomo de carbono. Cada carbono está unido a otros tres
átomos—ya sea tres carbonos o dos carbonos y un hidrógeno. Los átomos de hidrógeno no se muestran.
Aunque los hidrocarburos aromáticos son insaturados, no sufren reacciones de adición con facilidad.
Debido a la deslocalización de sus enlaces p, los hidrocarburos aromáticos se comportan de modo muy
diferente a los alquenos y alquinos. Por ejemplo, ni el cloro ni el bromo se adicionan a los dobles enlaces
del benceno en condiciones ordinarias. En cambio, los hidrocarburos aromáticos sufren reacciones de
sustitución con relativa facilidad. En una reacción de sustitución se extrae un átomo de una molécula y se
reemplaza (sustituye) por otro átomo o grupo de átomos.
Alcoholes
Propiedades físicas
Los alcoholes son compuestos orgánicos que contienen el grupo hidroxilo. Las propiedades físicas de un
alcohol se basan principalmente en su estructura. Contiene un grupo hidrofóbico y el hidroxilo que es
hidrófilo.
El grupo oxidrilo es muy polar y es capaz de establecer puentes de hidrógeno lo que permite la asociación
entre las moléculas de alcohol. Los puentes de hidrógeno se forman cuando los oxígenos unidos al
hidrógeno en los alcoholes forman uniones entre sus moléculas y las del agua. Esto explica la solubilidad del
metanol, etanol, 1-propanol, 2-propanol y 2 metil-2-propanol. A partir de 4 carbonos en la cadena de un
alcohol, su solubilidad disminuye rápidamente en agua, porque el grupo hidroxilo, constituye una parte
relativamente pequeña en comparación con la porción hidrocarburo. A partir del hexanol son solubles
solamente en solventes orgánicos.
En los alcoholes el punto de ebullición aumenta con la cantidad de átomos de carbono y disminuye con el
aumento de las ramificaciones. La densidad de los alcoholes aumenta con el número de carbonos y sus
ramificaciones.
Aldehídos
A temperatura ambiente, los aldehídos con uno o dos carbonos son gaseosos, mientras que de 3 a 11
carbonos son líquidos y los demás son sólidos. Los aldehídos más simples son bastante solubles en agua y
en algunos solventes apolares. Mientras tanto, no se forman enlaces de hidrógeno intermoleculares, visto
que ellos contienen apenas un hidrógeno enlazado al carbono.
147
Presentan también olores penetrantes y generalmente desagradables. Con el aumento de la masa
molecular esos olores van volviéndose menos fuertes hasta volverse agradables en los que contienen de 8 a
14 carbonos.
El grupo carboxilo confiere una considerable polaridad a los aldehídos y por esto poseen puntos de
ebullición más altos que otros compuestos de peso molecular comparable.
Los aldehídos son bastante reactivos debido a la gran polarización generada por el grupo carboxilo. En
relación a las cetonas, los aldehídos son bastante más reactivos.
Cetonas
Presentan puntos de ebullición más bajos que los alcoholes de su mismo peso molecular. No hay grandes
diferencias entre los puntos de ebullición de aldehídos y cetonas de igual peso molecular. Los compuestos
de cadena corta son solubles en agua y a medida que aumenta la longitud de la cadena disminuye la
solubilidad.
Al hallarse el grupo carbonilo en un carbono secundario son menos reactivas que los aldehídos. Sólo
pueden ser oxidadas por oxidantes fuertes, dando como productos dos ácidos con menor número de
átomos de carbono.
Ácidos carboxílicos
El grupo carboxilo confiere carácter polar a los ácidos y permite la formación de puentes de hidrógeno
entre la molécula de ácido carboxílico y la molécula de agua. La solubilidad disminuye a medida que
aumenta el número de átomos de carbono. A partir del ácido dodecanóico o ácido láurico los ácidos
carboxílicos son sólidos blandos insolubles en agua.
Los ácidos carboxílicos presentan puntos de ebullición elevados debido a la presencia de doble puente de
hidrógeno. El punto de fusión varía según el número de carbonos, siendo más elevado el de los ácidos
fórmico y acético. Después de 6 carbonos el punto de fusión se eleva de manera irregular.
El comportamiento químico de los ácidos carboxílicos está determinado por el grupo carboxilo -COOH. Esta
función consta de un grupo carbonilo (C=O) y de un hidroxilo (-OH). Donde el -OH es el que sufre casi todas
las reacciones: pérdida de protón (H+) o reemplazo del grupo –OH por otro grupo.
Esteres
Los ésteres no presentan puentes de hidrógeno intermolecular por lo que sus puntos de ebullición son
similares a los de los alcanos de peso molecular similar. A partir de los tres átomos de carbono, su
solubilidad en agua disminuye. Se disuelven bien en solventes orgánicos. Los más volátiles tienen olores
agradables.
Haluros de ácido
La mayoría son líquidos de bajo punto de fusión y olores irritantes. No presentan puente de hidrógeno
intermolecular, por lo que sus puntos de ebullición son más bajos que los de los ácidos de los que se
derivan.
Amidas
El primer miembro de la serie alifática es la metanamida que es diluida a temperatura ambiente, el resto de
las amidas son sólidas. Presentan un puente de hidrógeno intermolecular por lo que sus puntos de
ebullición son altos. Son compuestos polares, lo cual junto con la formación de puente de hidrógeno con el
agua las hace solubles en esta. La solubilidad disminuye a partir de los cinco carbonos, debido a que la
148
relación carbono – amino es mayor que 3:1. La etanamida y sus homólogos son excelentes solventes
orgánicos.
Aminas
Las aminas son compuestos incoloros que se oxidan con facilidad. Los primeros miembros de esta serie son
gases con olor similar al amoníaco. A medida que aumenta el número de átomos de carbono en la
molécula, el olor se hace similar al del pescado. Las aminas aromáticas son muy tóxicas ya que se absorben
a través de la piel.
Las aminas primarias y secundarias son compuestos polares, capaces de formar puentes de hidrógeno
entre sí y con el agua, esto las hace solubles en ella. La solubilidad disminuye en las moléculas con más de 6
átomos de carbono.
El punto de ebullición de las aminas es más alto que el de los compuestos apolares que presentan el mismo
peso molecular de las aminas. El nitrógeno es menos electronegativo que el oxígeno por lo que los puentes
de hidrógeno entre las aminas se dan en menor grado que en los alcoholes. Esto provoca que el punto de
ebullición de las aminas sea más bajo que el de los alcoholes del mismo peso molecular.
Las aminas se comportan como bases. Cuando una amina se disuelve en agua, acepta un protón formando
un ión alquil-amonio.
RESIDUOS Y EFLUENTES
Medioambiente
El medio ambiente es el conjunto de componentes físicos, químicos, biológicos y sociales capaces de causar
efectos directos o indirectos, en un plazo corto o largo, sobre los seres vivos y las actividades humanas. Se
puede dividir en:
Recursos naturales
Elementos y fuerzas del ambiente que el hombre puede utilizar y aprovechar para satisfacer nuestras
necesidades.
Renovables: suelo, aire puro, lluvia, vegetación, fauna, agua dulce, etcétera.
No renovables: metales y combustibles fósiles.
Inagotables: fenómenos atmosféricos, energía solar o eólica.
Contaminación
Con los cambios sociales y económicos, además de las revoluciones industriales y tecnológicas, se aumenta
el impacto sobre el medioambiente, lo que se conoce como contaminación y se define como: “Un cambio
indeseable en las características físicas, químicas y biológicas del aire, agua y suelo, que pueden afectar
negativamente al hombre y a las especies animales y vegetales”
La misma puede venir de fuentes puntuales, de la cual se conoce exactamente de donde provienen o de
fuentes no puntuales.
149
Desarrollo sustentable
Se refiere a un tipo de desarrollo que satisface las necesidades de los actuales habitantes del planeta, pero
sin arriesgar la supervivencia de futuras generaciones.
Degradación ambiental
Contaminación atmosférica
La atmósfera es la capa de gas que rodea a un cuerpo celeste. Los gases resultan atraídos por la gravedad
del cuerpo, y se mantienen en ella si la gravedad es suficiente y la temperatura de la atmósfera es baja. En
la tierra la composición de la misma es la siguiente:
Se han clasificado más de un centenar de sustancias contaminantes de la atmósfera. Las más importantes
son:
Dióxido de azufre
Monóxido de carbono
Óxidos de nitrógeno
Hidrocarburos
Compuestos orgánicos volátiles liberados tras una combustión incompleta de los hidrocarburos
líquidos
Material particulado
Plomo
Clorofluorcarbonos
150
Efecto invernadero
El efecto invernadero es un proceso en el que la radiación térmica emitida por la superficie planetaria es
absorbida por los gases de efecto invernadero atmosféricos y es reirradiada en todas las direcciones. Ya
que parte de esta irradiación es devuelta hacia la superficie y la atmósfera inferior, resulta en un
incremento de la temperatura superficial media respecto a lo que habría en ausencia de los gases de efecto
invernadero.
Los denominados gases de efecto invernadero o gases invernadero, responsables del efecto descrito, son:
Dióxido de carbono
Metano
Óxido de nitrógeno
Clorofluorocarbonos
Calentamiento global
Se entiende como calentamiento global al aumento observado en los últimos siglos de la temperatura del
sistema climático de la Tierra y sus efectos. Múltiples líneas de pruebas científicas demuestran que el
sistema climático se está calentando. Aunque a menudo la prensa popular comunica el incremento de la
temperatura atmosférica superficial como medición del calentamiento global, la mayor parte de la energía
adicional almacenada en el sistema climático desde se ha usado en calentar los océanos. El resto ha
fundido el hielo y calentado los continentes y la atmósfera.
Lluvia ácida
151
152
Métodos para disminuir los contaminantes atmosféricos
En nuestro planeta el agua ocupa una alta proporción en relación con las tierras emergidas, y se presentan
en diferentes formas:
Mares y océanos
Aguas superficiales (ríos, lagunas y lagos)
Aguas subterráneas
153
Contaminación del agua
Consiste en una modificación, generalmente provocada por el hombre, de la calidad del agua, haciéndola
impropia o peligrosa para el consumo humano, para el uso en la industria, la agricultura, la pesca y las
actividades recreativas, así como para los animales y la vida natural.
Los factores que determinan la gravedad de la contaminación del agua son los siguientes:
Naturaleza química
Concentración
Persistencia: a su vez puede dividirse en:
o Degradables o no persistentes (biodegradables)
o Persistentes o lentamente degradables (DDT, plásticos, CFC)
o No degradable (Metales: Hg, Pb, Cr)
La demanda bioquímica de oxígeno (DBO) es un parámetro que mide la cantidad de oxígeno consumido al
degradar la materia orgánica de una muestra líquida. La materia susceptible de ser consumida u oxidada
por medios biológicos que contiene una muestra líquida, disuelta o en suspensión. Se utiliza para medir el
grado de contaminación.
La demanda química de oxígeno (DQO) es un parámetro que mide la cantidad de sustancias susceptibles de
ser oxidadas por medios químicos que hay disueltas o en suspensión en una muestra líquida.
154
La cantidad de oxígeno disuelto mide la cantidad de oxígeno gaseoso en una solución acuosa. El oxígeno se
introduce en el agua mediante difusión desde el aire que rodea la mezcla.
Metales pesados: son metales pertenecientes al grupo de elementos de densidades altas. Son uno de los
contaminantes más peligrosos ya que:
Son tóxicos
No son biodegradables
Potencial de bio-acumulación
Minería
Erosión y lixiviado de rocas y suelo
Industrias de tratamiento superficiales
Otros vertidos industriales
Aguas residuales urbanas
155
Efectos de la contaminación del agua
Amplificación biológica
Proceso por el cual los organismos que viven en un medio, que contiene una concentración relativamente
baja de una sustancia química, pueden llegar a acumular en sus tejidos dichas sustancias, alcanzando
concentraciones considerablemente más altas que las existentes en el medio, debido a que dicho
contaminante es poco susceptible a ser metabolizado y, además es liposoluble lo que ocasiona efectos
negativos sobre su salud.
Tratamientos de efluentes
El tratamiento de los residuos y efluentes es importante desde dos puntos de vistas, tanto ecológicamente,
ya que debemos cuidar los recursos que disponemos, así como también legalmente para cumplir con las
normativas y leyes vigentes. El tratamiento eficiente de las aguas residuales permite devolver el líquido al
ambiente natural y reducir el impacto y contaminación producidos por el consumo de agua tanto en los
hogares como a nivel industrial.
Pretratamiento
Tratamiento primario
Tratamiento secundario
Tratamiento terciario
156
El pretratamiento consiste en un primer método generalmente mecánico, en donde con el uso de mallas
metálicas, tambores o filtros se logra separar los residuos sólidos gruesos del agua. Los sólidos que se
remueven son de gran tamaño, por ejemplo, botellas, palos, bolsas, balones, llantas, etc. Con esto se evita
tener problemas en la planta de tratamiento de aguas, ya que si no se remueven estos sólidos pueden
llegar a tapar tuberías o dañar algún equipo.
El tratamiento primario es para reducir aceites, grasas, arenas y sólidos gruesos. Este paso está
enteramente hecho con maquinaria, de ahí que se conoce también como tratamiento mecánico. Muchas
plantas tienen una etapa de sedimentación donde el agua residual se pasa a través de grandes tanques
circulares o rectangulares. Estos tanques son comúnmente llamados clarificadores primarios o tanques de
sedimentación primarios. Los tanques son lo suficientemente grandes, tal que los sólidos pueden situarse y
el material flotante como la grasa pueden levantarse hacia la superficie y desnatarse. El propósito principal
de la etapa primaria es producir un líquido homogéneo capaz de ser tratado biológicamente y unos fangos
o lodos que pueden ser tratados separadamente. Los tanques primarios de asentamiento se equipan
generalmente con raspadores conducidos mecánicamente que llevan continuamente los fangos recogidos
hacia una tolva en la base del tanque donde, mediante una bomba, se pueden llevar hacia otras etapas del
tratamiento.
El tratamiento secundario está diseñado para degradar sustancialmente el contenido biológico del agua
residual, el cual deriva los desechos orgánicos provenientes de residuos humanos, residuos de alimentos,
jabones y detergentes. La mayoría de las plantas municipales utilizan procesos biológicos aeróbicos para
este fin. Las plantas de tratamiento usan una variedad de mecanismos y procesos para promover el
crecimiento de organismos biológicos que remueven substancialmente materia orgánica. Puede realizarse
en lechos percoladores, en lagunas de estabilización, biodiscos o fangos activados.
157
El tratamiento terciario proporciona una etapa final para aumentar la calidad del efluente al estándar
requerido antes de que éste sea descargado al ambiente receptor (mar, río, lago, campo, etc.) Más de un
proceso terciario del tratamiento puede ser usado en una planta de tratamiento. El propósito de la
desinfección en el tratamiento de las aguas residuales es reducir substancialmente el número de
organismos vivos en el agua que se descargará nuevamente dentro del ambiente. La efectividad de la
desinfección depende de la calidad del agua que es tratada (por ejemplo: turbiedad, pH, etc.), del tipo de
desinfección que es utilizada, de la dosis de desinfectante (concentración y tiempo), y de otras variables
ambientales. Los métodos comunes de desinfección incluyen el ozono, la clorina, o la luz ultravioleta. La
desinfección con cloro sigue siendo la forma más común de desinfección de las aguas residuales debido a
su bajo costo y del largo plazo de la eficacia.
158
Residuos sólidos
Los residuos sólidos comprenden todos los residuos que provienen de actividades humanas y animales, que
normalmente son sólidos y que son desechados como inútiles o superfluos. El proceso para tratarlos
adecuadamente es el siguiente:
El proceso comienza con una separación de los residuos en casa, diferenciando lo que es degradable con lo
que no lo es y es posible reutilizar o reciclar. Se entiende como reutilización al uso de material que es
considerado como desecho para otro propósito. Por su parte, el reciclaje implica deshacer totalmente el
desecho original para utilizar el material del cual está hecho para la fabricación de otro objeto. Ambos
procesos pueden realizarse en casa o la empresa de residuos puede optar por utilizarlos. En el caso de las
empresas, esto se realiza en una planta de clasificación, en donde se separa lo útil de lo no útil y por el tipo
de material de lo que estén hechos los residuos sólidos, para posteriormente venderlo o reciclarlo. La
materia orgánica debe ser utilizada para el compostaje que es un proceso aerobio de descomposición
biológica de los residuos y tiene como objeto su transformación en un producto utilizable para la mejora de
suelos en agricultura. Otra opción menos deseable es la de los vertederos, que traen consecuencias severas
para el medioambiente debido a que por lo general crecen sin control alguno en terrenos que no han sido
preparados para el depósito de residuos, produciendo problemas como olores, contaminación del agua,
159
aparición de animales transmisores de enfermedades, posibilidad de incendio de los mismos, entre otros.
También en algunos casos en donde no se dispone de mucho espacio físico para la deposición y/o
tratamiento de los residuos es útil el proceso de incineración que consiste en la quema de los residuos a
muy altas temperaturas (alrededor de los 1000 °C) con el fin de reducir su peso y volumen a un mínimo,
además se puede utilizar como fuente de calor para generar energía. El problema es que si los gases de la
combustión de los residuos no son tratados correctamente, puede generar contaminación atmosférica.
Por último, también existe la posibilidad de depositar los residuos en un relleno sanitario que es una
técnica de disposición final de los desechos sólidos en el suelo con miras a su eliminación, que no causa
molestia ni peligro para la salud; tampoco perjudica el medioambiente durante su operación, después del
proceso de sellado. Posee como partes a las siguientes:
160