El Espíritu Santo y La Lectura Bíblica
El Espíritu Santo y La Lectura Bíblica
El Espíritu Santo y La Lectura Bíblica
• Él toma las palabras que ya conocemos y las sella, para así dar
mucho fruto.
• Esto pasa una vez y pasa una y otra vez.
3. NOS AYUDA A APLICAR LA BIBLIA
“Enséñame a hacer Tu voluntad, Porque Tú eres mi Dios;
Tu buen Espíritu me guíe a tierra firme”, Salmo 143:10
Aplicar correctamente la Escritura, sin hacer de ellas
un simple libro de reglas que cumplir (como los
fariseos), o sin andar buscando excusas (como los
que no conocen a Dios), no es menos que la obra
sobrenatural del Espíritu de Dios.
4. NOS DA MAESTROS PARA ENTENDERLA
“Pero todas estas cosas las hace uno y el mismo Espíritu, distribuyendo
individualmente a cada uno según Su voluntad”, 1 Corintios 12:11
•“Yo no necesito ir a la iglesia, yo tengo mi Biblia y
tengo mi Espíritu Santo”.
•Dios da maestros físicos en cada congregación.
•Dios nos ministra mientras enseñamos.
•Dios nos ha dado maestros escritos.
5. NOS MUESTRA A JESÚS EN LA BIBLIA
La Biblia aplicada tiene forma de cruz.
De esto hablaremos la próxima clase.
DE MANERA PRÁCTICA:
¿QUÉ PODEMOS HACER?
1. Seamos constantes
2. Leamos en oración
3. Hagamos silencio.
4. Evaluemos nuestra vida espiritual
1. SEAMOS CONSTANTES
•Una relación no se cultiva con visitas esporádicas.
•No todos los días vamos a “sentir” algo.
•Acercarnos diariamente a la Palabra es fundamental
para conocer la Palabra de Dios, y nos da las ideas y
las actitudes correctas para conversar con el Dios de
la Palabra.
2. LEAMOS EN ORACIÓN
•“El trabajo del Espíritu Santo al nosotros leer la Biblia no es ahorrarnos el
trabajo de estudiarla. A la hora de orar para empezar a estudiar, no es orar
‘Señor, dime qué significa este texto’, para luego quedarte ahí sin hacer nada.
Y luego venir y decir, “¡Esto es lo que la Biblia dice! ¿Por qué? Porque tuve
una impresión espiritual. No, eso es malo. Eso es ignorar el proceso que Dios
ha provisto para entender su Palabra.
•Más bien, nuestra oración debería ser de esta manera: “Dios, gracias por esta
palabra. Ahora voy a estudiarla. Dame la motivación, dame la disciplina, y
vence el orgullo de mi corazón para que cuando escuche acerca de la palabra
de la cruz, la reciba, y no la rechace como necedad”, John Piper
3. HAGAMOS SILENCIO
3. HAGAMOS SILENCIO
•No cedamos a la tentación de respuestas inmediatas.
Dios no tiene prisa.
1.Preparar y aprovechar ciertos momentos para
esperar en Dios.
2.Rumiar pasajes por largo tiempo. Quedarnos
minutos en porciones pequeñas.
4. EVALUEMOS
1.¿Te NUESTRA
sientes siempre apurado, VIDA
aun cuando no seaESPIRITUAL*
necesario?
2.¿Pierdes mucho tiempo en la televisión o en las redes sociales?
3.¿Las publicaciones o imágenes de tus amigos felices te estresan, te irritan, te deprimen, o te
tientan a la envidia?
4.Si un vecino o miembro de la familia compra algo nuevo, ¿empiezas a pensar en cómo poder
adquirir ese mismo producto?
5.¿Te sientes atrapado en ciclos regulares de disfunción o conflicto con personas alrededor tuyo?
6.¿Te sientes “atascado” en tu relación con tu esposa o con tus hijos o con tus familiares o padres,
en alguna situación relacional que te falta energía o sabiduría para poder manejar?
7.¿Se te dificulta atender regularmente a la iglesia?
8.¿Luchas con sentirte conectado cuando sí asistes a la iglesia?
9.¿Estás muy ocupado en la mañana o exhausto en la noche como para pasar tiempo enfocado
leyendo la Biblia?
10.¿Oras solo en momentos de crisis, como última medida?
ORACIÓN POR ULRICO ZWINGLI
Nuestro Dios y Señor que vives para siempre,
ayúdanos a escuchar tu Palabra santa con el corazón abierto
para que podamos realmente entenderla;
y, al entenderla,
que podamos creerla;
y, al creerla,
que podamos cumplirla con toda fidelidad y obediencia,
buscando tu honra y gloria en todo lo que hacemos.
Te lo pedimos por medio de Jesucristo, nuestro Señor. Amén.