Inducción Al Proceso Administrativo
Inducción Al Proceso Administrativo
Inducción Al Proceso Administrativo
Según estipula en la ley N° 27444, La propia ley debe seguir un cierto procedimiento para
lograr una resolución correcta. Esto se puede encontrar en el título 3, en la sección 3.
Donde podemos encontrar como se debe dar iniciado del proceso de manera correcta. La
iniciación del procedimiento tiene lugar cuando el sector superior administrativo competente
decide iniciar el proceso por sí misma, es decir, sin que haya una solicitud previa de un
administrado. Todo el proceso se da por iniciado a causa de una acción de inicio, el cual
tiene el propósito de poner en marcha el procedimiento y notificar al administrado sobre su
existencia. El acto de inicio debe contener información sobre quién emite la decisión, una
descripción de los hechos que motivan el procedimiento, la normativa aplicable, los
derechos y deberes del administrado, así como el plazo para que esté presente sus
argumentos y proporcione evidencia. El acto de inicio debe ser notificado al administrado
siguiendo las disposiciones establecidas en la Ley, asegurando que esté al tanto de la
situación y brindándole la oportunidad de tener una defensa calificada y merecida. El
administrado tiene la opción de presentar sus argumentos y proporcionar evidencia en
respuesta al acto de inicio, dentro del plazo establecido. Estos argumentos y pruebas serán
considerados en el desarrollo del procedimiento administrativo. Una vez que se haya
realizado el acto de inicio y se haya presentado la respuesta del administrado, se procede
con las etapas siguientes del procedimiento administrativo, como la ordenación, instrucción,
participación de los administrados, resolución y acción a partir de lo que no está estipulado
en la propia ley.
ACTO DE INICIO
El acto de inicio es la decisión tomada por la autoridad competente para dar inicio de
manera formal a un procedimiento con el propósito de abordar un asunto específico o
atender una solicitud presentada por un interesado. Este acto de inicio generalmente
contiene información esencial, como la identificación del interesado, una descripción
detallada del asunto o la solicitud, la referencia a la normativa aplicable, la definición de los
plazos relevantes y la especificación con respecto al compromiso que se llega a encontrar
entre ambas partes. El acto de inicio puede emitir de oficio por la autoridad competente
cuando se percatan de un asunto que requiere su intervención, o puede ser resultado de
una solicitud presentada por un interesado. En ambos casos, el acto de inicio establece el
comienzo formal del procedimiento administrativo correspondiente y sienta las bases para
su desarrollo subsiguiente. Es de suma importancia destacar que el acto de inicio debe
cumplir con los principios y requisitos establecidos en la legislación y normativa aplicable.
Esto incluye el principio de legalidad, que exige que el acto esté respaldado por una norma
o ley vigente, y el principio de motivación, que requiere que el acto esté debidamente
fundamentado y justificado.
Este conjunto de disposiciones regula los procedimientos en casos que involucran a tres
partes en el ámbito administrativo. Estas reglas se aplican cuando se presentan situaciones
que pueden denotar ciertos conflictos e impacto en lo que respecta a la ciudadanía, la
administración pública y terceras partes relacionadas. Establece las pautas y pasos a seguir
al imponer sanciones administrativas por incumplimiento de normativas y regulaciones.
Detalla aspectos como las figuras aptas para poder haber regulación a base de
confrontaciones formales y sanciones, el proceso que debe seguirse, los derechos de los
ciudadanos y la seguridad durante todo el proceso que deben si o si seguirse de manera
correcta. Asimismo, establece los principios y fundamentos que rigen que pueden dar paso
a alguna sanción al sector público, junto con las bases legales y criterios a considerar al
aplicar sanciones administrativas. Además, establece las reglas y etapas del proceso
sancionador, incluyendo la formulación de acusaciones, la instrucción del procedimiento, los
plazos, la presentación de pruebas, el derecho a la defensa, la emisión de decisiones
sancionadoras y los recursos administrativos disponibles.
EMISIÓN DE DECISIÓN
ALEGACIONES
Se entiende que, una alegación como documento puede constituirse como un medio
principal, y es a través de él en donde los ciudadanos podrían concurrir bajo condiciones
propias de un interesado dentro del procedimiento administrativo, por otro lado, podrá ser
partícipe de las diversas etapas en donde pueda ser tramitado, de manera que podría influir
dentro del proceso en donde las voluntades son formadas bajo la voluntad perteneciente al
órgano administrativo.
En base a las palabras de Palomar y Fuertes (2020) podemos inferir que dentro del
procedimiento administrativo se conoce a las alegaciones como las razones que, durante el
procedimiento, son las que apoyan de por medio con un fundamento al derecho del
interesado, por otro lado, también hay fundamento en los derechos de los ciudadanos, con
ello, se llevaría a cabo el procedimiento con los datos que deben estar presentes dentro de
la propuesta de resolución, siendo de ese modo, podrá ser considerado por el órgano
competente.
Si un imputado quiere ejecutar su derecho de defensa desde el principio del procedimiento
sancionador puede hacerlo, y esto se avala bajo el régimen de la LPAG, ya que, a pesar
que si hay un plazo para el vencimiento para el derecho de defensa, esto no prohíbe que el
imputado pueda presentar elementos y por supuesto alegaciones que tengan como finalidad
presentarse como pruebas y así se consideren en la tramitación del procedimiento
respectivamente, cabe aclarar que las alegaciones pueden ser presentadas en cualquiera
de los momentos.
Conocemos también que. los particulares son quienes tienen una integración en cuanto a
sus intereses, bajo la condición que adquieren como administrados dentro del
procedimiento administrativo y puede ser realizado por medio de tres vías principalmente:
Con carácter general por medio del trámite de audiencia y las alegaciones, por medio de
solicitudes, o en los procedimientos que fueron originados a raíz de solicitudes elaboradas
bajo el interesado.
El autor Míguez. (2013) argumenta que durante los procedimientos al querer referirse a la
revisión del expediente y el acceso según la Ley 30/1992, en su artículo 86, segundo
párrafo, se permite examinar "el procedimiento o una parte de él". Esto implica que el
derecho de acceso puede tener restricciones significativas, ya que podría limitarse a una
parte del expediente, especialmente en el contexto de la fase de audiencia. En cuanto a las
alegaciones, el plazo para presentarlas es más extenso que el establecido para la fase de
audiencia, ya que nunca debe ser inferior a veinte días, según el artículo 86, segundo
párrafo, segundo párrafo, de la Ley 30/1992. La efectividad jurídica de estas alegaciones es
similar a las presentadas en la audiencia, ya que, aunque el tercer párrafo del artículo 86,
tercer párrafo, advierte que "la comparecencia en el trámite de información estatal no puede
otorgar automáticamente la condición de interesado", también indica de inmediato que "a
pesar de ello, quienes presenten observaciones y alegaciones tienen derecho a recibir una
respuesta razonada de la Administración, que puede ser común para todas las alegaciones
que realicen planteamientos de cuestionamientos".
Continuando con lo que señala este autor, fue en el artículo 35, inciso e), de la Ley 30/1992
que se estableció el derecho de los ciudadanos a presentar observaciones y documentos en
cualquier etapa del proceso antes de la fase de audiencia, los cuales deben ser
considerados por la autoridad competente al elaborar la propuesta de resolución. Este
principio se reafirma en el artículo 79, párrafo primero, que permite a los interesados
presentar observaciones y documentos en cualquier momento previo a la fase de audiencia,
los cuales deben ser tenidos en cuenta al querer hacer una redacción, como es en el caso
de la propuesta de resolución.
También nos manifiesta que, a pesar de que existen procedimientos específicos para la
presentación de observaciones en casos sancionadores, el derecho general reconocido en
los artículos 35, inciso e), y 79, párrafo primero, de la Ley 30/1992 sigue siendo aplicable,
según el artículo 16, párrafo primero, del Reglamento estatal del procedimiento para el
ejercicio de la potestad sancionadora. Además, es importante mencionar que las
observaciones pueden ser presentadas de manera presencial ante las oficinas públicas,
aunque solo se requiere su comparecencia obligatoria si lo establece una norma con rango
de ley, permitiendo la comparecencia voluntaria según el artículo 40, párrafo primero, de la
Ley 30/1992.
CARGA DE PRUEBA
Cuando nos referimos a la carga de prueba, podemos decir que esta rige en base al
principio de impulso de oficio, prescrita en esta Ley. Macassi y, Salazar Ortiz (2020) nos dan
a entender que, los administrados, son quienes deben corresponder con sus respectivos
aportes de pruebas, ya sea por medio de informes o documentos; proporcionar testimonios,
pericias, diligencias e inspecciones que estén plenamente permitidas, por otro lado, también
pueden aducir alegaciones.
No se niega el hecho que los particulares puedan dar prueba de su pretensión, sólo se
señala que la negativa de Administración tiene que estar acreditada debidamente. Se puede
decir incluso que, si la administración no es capaz de desplegar actividad probatoria, se
evidenciaría que los hechos serían verdaderos y afirmados por el particular, con ello la
solicitud estaría declarada como fundada. Magide y Prada (2020) Indica que es la misma
Ley de procedimiento administrativo quien determina que la carga de la prueba se rige bajo
el principio de impulso de oficio, y es por esa razón que resultaría bajo responsabilidad de la
autoridad administrativa, por lo tanto, es quien debería adquirir o poseer material probatorio
idóneo para resolver.
Vendría a ser una regla residual, a la que se acudirían, después de la evaluación de los
medios de prueba, con el objeto de aceptar o descartar las hipótesis planteadas a partir de
los hechos, sin embargo, es la autoridad decisoria quien debe considerar si es inexistente
una suficiencia probatoria. Es considerable como una regla de contingencia, ya que no es
considerablemente ideal que su aplicación sea ejecutada, sin embargo, de no ubicarse las
razones para que la decisión sea justificada en base a los medios de prueba, lo único que
quedaría como opción es acudir a la regla de juicio.
ACTUACIÓN PROBATORIA:
Son todos aquellos actos realizados por las partes ante el juez del juicio oral con el objeto
de incorporar los elementos de prueba tendientes a verificar sus proposiciones de hecho.
Estos actos pueden abarcar una amplia variedad de acciones, como la presentación de
testigos, documentos, peritajes y cualquier otra evidencia que respalde sus argumentos
durante el proceso judicial. El objetivo primordial de estos procedimientos es permitir que
ambas partes presenten de manera efectiva sus argumentos y pruebas para que el juez
pueda tomar decisiones fundamentadas basadas en la evidencia presentada en el tribunal.
En esencia, estos actos son fundamentales para garantizar un juicio justo y equitativo. La
actuación probatoria desempeña un rol de gran importancia en el sistema legal, ya que
establece el procedimiento para la presentación y valoración de pruebas durante un proceso
judicial. (Fernando Ugaz Zegarra, 2012) Durante esta fase, las partes involucradas tienen la
oportunidad de introducir testimonios, documentos, peritajes y otros elementos de evidencia
que respalden sus argumentos y afirmaciones. El tribunal, como entidad reguladora,
supervisa y dirige este proceso, asegurándose de que se respeten las normativas y que las
pruebas presentadas sean pertinentes y admisibles dentro del marco legal establecido. La
actuación probatoria es esencial para la búsqueda de la verdad y para permitir que el juez
tome decisiones imparciales y basadas en evidencia sólida, garantizando así un juicio justo
y equitativo. En última instancia, este proceso contribuye a la justa resolución de disputas
legales y a la protección de los derechos de todas las partes involucradas en el caso. Este
concepto se encuentra arraigado en el artículo 174° de la Ley N° 27444. Este artículo se
refiere a un procedimiento administrativo en el que la administración puede realizar pruebas
para verificar la veracidad de los hechos presentados por los ciudadanos o cuando la
naturaleza del proceso lo requiera. La Ley N° 27444 establece que, en el procedimiento
administrativo, la acción probatoria es la etapa donde las partes pueden ofrecer prueba,
actuar e impugnar. El objetivo de esta etapa es que las autoridades cuenten con evidencia
suficiente para tomar una decisión.
La ley también establece que la administración está obligada a producir pruebas de oficio o
a petición de parte, pudiendo incluso ordenar la práctica de las pruebas necesarias para
resolver el procedimiento. Además, la ley señala que, en los procedimientos administrativos,
todos los medios de prueba permitidos por la ley son válidos para probar los hechos,
siempre que no contradigan la moral o la ley.
Es importante mencionar que los plazos del proceso de verificación no pueden ser
inferiores a cinco días hábiles ni superiores a diez días hábiles, salvo que por la naturaleza
de la prueba se requiera un plazo mayor.
Además, la administración sólo puede rechazar las pruebas propuestas por el ciudadano si
puede justificar de manera fundamentada que no están relacionadas con el asunto en
cuestión, son inapropiadas o innecesarias. El artículo dictamina los procedimientos y plazos
que debe seguir la administración para llevar a cabo pruebas cuando sea necesario en un
proceso administrativo y enfatiza que sólo puede rechazar las pruebas propuestas con
razones específicas y justificadas.
OMISIÓN Y FALTA DE PRUEBAS
Adicionalmente, la Ley N°27444 nos indica el supuesto en el cual se omite la actuación
probatoria en el artículo 175°, el cual nos indica que las instituciones tienen la opción de no
llevar a cabo pruebas en el caso de que tomen su decisión únicamente basándose en los
hechos presentados por las partes, siempre y cuando consideren que estos son fiables y
apropiados para resolver la cuestión en cuestión.
Si una parte no presenta pruebas dentro del plazo establecido en la Ley N° 27444, puede
haber consecuencias, como, por ejemplo:
1. Exclusión de prueba: Si una parte no presenta prueba dentro del plazo señalado, es
posible que esta prueba sea excluida y la autoridad competente no la considere al
momento de tomar una decisión.
2. Pérdida de oportunidad: Si no se presentan pruebas dentro del plazo, se pierde la
oportunidad de presentar pruebas que puedan ser relevantes para el caso. Esto puede
impedir que la parte que no presentó las pruebas a tiempo.
3. Menos apoyo a las reclamaciones: la falta de pruebas puede debilitar las reclamaciones
de una parte y afectar la estabilidad de su posición en los procedimientos administrativos.
Como se estableció anteriormente y según la Ley N° 27444, el plazo para presentar prueba
en vía administrativa es de diez días hábiles, si la naturaleza de la prueba no requiere un
plazo mayor. Sin embargo, en algunos casos excepcionales, la autoridad competente podrá
permitir la presentación de pruebas dentro del plazo fijado, si el motivo para no presentarlas
dentro del plazo está debidamente justificado. Esto puede incluir circunstancias o
situaciones imprevistas que impidieron a una parte presentar pruebas de manera oportuna.
MEDIOS DE PRUEBA
Los medios de prueba tienen como objetivo respaldar los eventos presentados por las
partes, proporcionar convicción al juez en relación con los aspectos en disputa y servir
como base para las decisiones judiciales. Los medios de prueba desempeñan un papel
esencial en el proceso judicial al proporcionar la base para la toma de decisiones
informadas. Su función principal es establecer la veracidad de los hechos presentados por
las partes en litigio y, de este modo, contribuir a la construcción de un juicio justo y
equitativo. En la práctica, estos medios pueden abarcar una amplia gama de elementos,
como testimonios de testigos, documentos, pruebas periciales y evidencia física.
En este contexto, es fundamental subrayar que el análisis que se llevará a cabo no será
exhaustivo, sino que se centrará en los problemas más relevantes y destacados en el
contexto del proceso legal. La finalidad es garantizar que se aborden adecuadamente los
aspectos cruciales del caso y que se proporcione al juez la información necesaria para
tomar decisiones bien fundamentadas.
.En el sistema continental, es comúnmente utilizado el término "medios de prueba" para
hacer referencia a los elementos que respaldan la dinámica probatoria. En este contexto, se
define a los medios de prueba como "cualquier cosa, hecho o acto que, por sí mismo,
puede demostrar la veracidad o falsedad de una afirmación presentada en un juicio". En la
doctrina chilena, se los describe como "los elementos que en un sistema jurídico se
consideran adecuados para persuadir al juez". Nuestra jurisprudencia los ha caracterizado
como instrumentos destinados a "proveer al juez información sobre los hechos que
determinarán el derecho que debe establecerse en la sentencia". La ley N° 27444 en su
artículo 177° nos delimita que los hechos mencionados o que sean relevantes para la
resolución de un proceso pueden ser sometidos a todos los métodos de prueba necesarios,
a menos que estén prohibidos de manera explícita. Específicamente, en el procedimiento
administrativo, es apropiado:
1. Obtener registros y documentos.
2. Solicitar informes y opiniones de diversas índoles.
3. Brindar oportunidad a los administrados para expresarse, interrogar a testigos y peritos, o
recopilar declaraciones por escrito de los mismos.
4. Consultar documentos y registros.
5. Realizar inspecciones visuales.
Sin embargo, los ciudadanos tienen derecho a rechazar la solicitud en ciertos casos, como
cuando revelar la información violaría el secreto profesional, estaría prohibido por la ley,
implicaría la revelación de actividades ilegales del ciudadano, o afectaría sus derechos
constitucionales. La autoridad decidirá si se acepta este rechazo basándose en las
circunstancias del caso, pero esto no exime a la autoridad de investigar los hechos y emitir
una resolución.
Este enfoque también se encuentra en otros sistemas procesales de derecho civil, como,
por ejemplo, el artículo 299 de la Ley de Enjuiciamiento Civil de España del año 2000, que
trata sobre los "medios de prueba"; el artículo 202 del Códice di Procedura Civile de Italia,
que se refiere a la presentación de "mezzi di prova"; los párrafos 282.1 y 356 de la
Zivilprozessordnung (ZPO) de Alemania, que mencionan los "Beweismittel"; el artículo 378
del Código Procesal Civil y Comercial de la Nación Argentina, que trata sobre los "medios
de prueba"; y el artículo 332 del Código de Processo Civil de Brasil, que establece una
norma general sobre los "meios de prova", haciendo referencia a los "meios legáis", los
"moralmente legítimos" y los "no especificados" en dicha ley. (Pacheco, 2008)
Según la Ley N.º 27444 establece las reglas y normativas para los procedimientos
que se efectúan en el ámbito de la administración peruana. “Donde, dicha ley
establece varias etapas en un procedimiento típico, pero no proporciona una sección
específica sobre el fin del procedimiento administrativo" (Pacori, 2023). Sin embargo,
describe diferentes etapas dentro de un procedimiento, como la solicitud, la
evaluación, la resolución, la notificación, la impugnación, y otras. Lo cual, el
procedimiento administrativo puede considerarse "concluido" en diferentes
momentos, dependiendo de la naturaleza del caso y la realización de las
disposiciones legales.
Por otro lado, el fin del procedimiento administrativo en el Perú es un aspecto crucial dentro
del marco legal y burocrático que rige las actividades gubernamentales y la relación entre
los ciudadanos y las entidades estatales en el país. “Este proceso, que se encuentra
regulado por diversas normativas, tiene como objetivo principal afianzar la nitidez, la
legalidad y la eficiencia en el desarrollo de efectuar las decisiones por parte de la
administración pública” (Obiol, 2018). Asimismo, se alcanza cuando se emite una decisión
final por parte de la entidad pública. Esta decisión puede consistir en la aprobación de una
solicitud, la denegación de la misma, la imposición de sanciones, la emisión de licencias,
entre otros. Es importante destacar que este proceso debe llevarse a cabo de acuerdo con
los principios de legalidad, imparcialidad, celeridad y debido procedimiento, con el fin de
garantizar los derechos y prevenir posibles abusos por parte de la administración.
1. Inicio
Una vez iniciado este procedimiento, se podrán realizar los trámites administrativos
conforme al art. 114 de la Ley 27444 o a petición de las partes.
"En esta etapa los procedimientos administrativos se inician mediante solicitud, denuncia,
petición o de oficio de la administración pública."
2. Instrucciones
Dado que las decisiones administrativas requieren hechos probados, esta guía es apropiada
para la fase de recopilación de pruebas de una investigación o procedimiento administrativo.
Es por ello, que esta formación consistirá en un acto de conformidad con lo dispuesto en el
inc. 170.1 del art. 170:
En esta etapa se realizan todas las investigaciones y acciones necesarias para recopilar la
información relevante necesaria para la decisión que tome la administración. Esto incluye
audiencias, investigaciones y recopilación de pruebas.
3. Sustanciación
Luego de presentada la evidencia, la agencia administrativa debe realizar una revisión que
permita a los administradores exponer su caso y presentar cargos adicionales según lo
consideren conveniente. Este es un derecho que forma parte de los procedimientos
ejecutados por la ley. De conformidad con el art. 4, numeral 1.2, se dispone lo siguiente:
De tal manera, los administrados disfrutan de los derechos y garantías inherentes a los
debidos procedimientos administrativos. Lo anterior incluye: derechos de notificación,
acceso a archivos, negar las acusaciones, presentar pruebas y hacer nuevas afirmaciones.
Es por ello, que las autoridades pueden tomar decisiones razonables basadas en la ley
dentro de un período de tiempo razonable e impugnar las decisiones que las afecten.
4. Resolución
Según el art, 39 de la Ley 27444, el trámite administrativo desde el inicio del procedimiento
administrativo hasta la emisión de la resolución no excederá de treinta (30) días hábiles si:
5. Ejecución
Este concepto se aplica cuando la autoridad administrativa considera que los beneficios de
continuar el procedimiento o lograr un objetivo administrativo particular superan los costos,
dificultades, cambios de circunstancias u otras consideraciones de interés público (Pacori,
2021).
7. Por caducidad
Se trata de un concepto relacionado con un término legal que estipula el plazo o plazo
dentro del cual una administración pública puede concluir procedimientos administrativos en
curso y adoptar una resolución o decisión. Este plazo tiene como objetivo garantizar que las
cuestiones administrativas se resuelvan de forma rápida y eficaz, evitando demoras
innecesarias que puedan causar daños a las personas, empresas u organizaciones que
participan en el procedimiento. (Neil Herrera, 2021)
CONTENIDO DE LA RESOLUCIÓN.
Cuando se pone fin a un procedimiento administrativo, es necesario que se corrobore la
decisión del juez encargado de dictar resolución del proceso; por ello es que, se da fin al
procedimiento cuando realice y justifique el contenido de lo que se resolvió; esto implica el
desarrollo de lo que se ha resuelto, que se respete el Derecho a una adecuada resolución y
que este recaiga sobre motivación suficiente y correcta. Esto en conformidad con el art. 29
de la LPAG; el cual menciona que, el procedimiento administrativo es aquel grupo de actos
y diligencias que son tramitadas a través de entidades, que direccionan a una emisión de
algún acto administrativo para generar y producir efectos jurídicos individuales sobre los
derechos, deberes e intereses de los administrados; explica que todo procedimiento debe
llegar a su fin cuando se derive la obtención de un acto administrativo a expresión de parte
administradora. De esta manera, se respeta el ejercicio que tiene cada ciudadano para
obtener resolución respecto a su pedido.
Esta resolución de la que se habla, como ya se mencionó, debe estar correctamente
fundada y debe adecuarse al derecho que corresponde según las reglas propias del acto
administrativo. Por lo tanto, depende de su contenido para ejercer el pedido de parte de los
administrados. El art. 187 de la regla recurrente, hace mención al contenido que debe tener
una resolución administrativa; en ella se convocan a dos incisos:
1) Para que tenga validez la resolución que da por finalizada el procedimiento, esta
debe cumplir con todos los requisitos del acto jurídico que se encuentran
contemplados en primer capítulo de primer título de la ejercida ley.
2) Cuando el procedimiento se inició por petición del interesado, la resolución debe ser
congruente con el petitorio de dicho interesado, sin perjudicar su situación inicial y
tampoco la potestad de iniciar un nuevo procedimiento de oficio.
La normativa expresada, redacta los requisitos y ante qué peticiones debe resolverse.
Como bien lo menciona el inciso primero de la norma pronunciada, para que se ponga fin al
proceso se debe instaurar las fundamentos y decisión en base a lo que la normativa misma
dice con respecto a los actos administrativos.
Estos fundamentos normativos se constituyen en base de lo dice el art.; el capítulo primero,
en su artículo primero, el cual contiene en ella dos supuestos legales, lo que respecta a lo
que es correctamente un acto administrativo, y lo que no es un administrativo.
El inciso primero del artículo mencionado se redacta expresando que, es acto
administrativo, siempre que, estas sean las declaraciones que las entidades administrativas
han determinado para provocar efectos jurídicos con respecto a lo que interesa, obliga y
protege al administrado dentro de cualquier situación necesaria para ser resuelta por esta
entidad.
Así mismo, el inc.2 del mismo artículo destaca que no se pueden determinar, como actos
administrativos, PRIMERO, aquellos actos internos de la misma entidad que son
direccionadas a organizar o suplir la funcionalidad de las actividades o servicios de la
misma. En su lugar, estos actos internos son regulado por la misma entidad interesada, y
está sujeta, de la misma forma, por lo que dispone el título preliminar de la ley 27444, y
todas las normas que ésta, expresamente, establece en su regulación. SEGUNDO, a
aquellos que derivan de actuaciones y actividades de sujeción material de la entidad
interesada.
Entonces, se estima que este inciso determina que actos administrativos, o resoluciones
dada por el funcionario administrativos, son válidos para estar sujetos a su cumplimiento y
efectividades en la administración pública, dado que, si no se corrobora éste recae bajo
sanción de nulidad.
El inciso dos, del art. 187, por su parte, invoca que las resoluciones deberán,
obligatoriamente, ser adecuadas al caso; la autoridad no puede resolver en base a una
pretensión (incluso si son simples demandas) distinta a la que el administrado haya
formulado; además de ello, la autoridad debe cuestionar, observar y valorar los argumentos
y consideraciones que fueron impuestas por el interesado dentro del proceso; en otras
palabras, tal como el proceso penal, el juez debe resolver en base a la valoración de los
medios de prueba; en el proceso administrativo, pasa lo mismo, para dar solución y resolver
la incertidumbre, se tiene que valorar los argumentos que son entregados por los
intervinientes, como lo son las alegaciones, defensas relevantes y pruebas, de esta manera
se adopta una correcta decisión administrativa son faltar al debido proceso.
Otro punto importante que refiere la norma expresada es que la entidad administrativa en el
área de procedimiento, tiene la obligación de resolver todas aquellas incertidumbres,
solicitudes que hayan sido peticionadas por la parte administrada, sin necesidad de dilatar
el proceso, en cambio, debe formular modos para que la petición se resuelva en plazo
previsto por la ley y de forma correcta y congruente, respetando el debido proceso.
Huapaya (2015) dice que, en caso no se brinde una resolución o ésta se dé de manera
parcial o inadecuada respecto a la pretensión solicitada, se notará la afectación al debido
procedimiento administrativo, y por tanto el derecho a obtener una resolución congruente y
fundada ante una incertidumbre; que a su vez invoca una vulneración de los principios de
congruencia y transparencia.
Es necesario recordar que, el deber de resolver de parte de la autoridad administrativa
imparcial – según el principio de imparcialidad - es de forma general, exceptuando el uso
del silencio positivo, o que, por decisión del interesado administrado, se someta a instancias
superiores o al marco jurisdiccional; esto sucede en el caso del silencio negativo de
administración.
El artículo estudiado, en este punto, también da entender que, es obligación de la autoridad
administradora el fundar y motivar correctamente la decisión que haya tomado, de esta
manera se le da sentido de justificación a la decisión que se da con respecto a lo que se
solicita sin llegar a la arbitrariedad o injusticia. Es decir, no se puede implicar una solución
en una fundamentación de “porque sí”, sino que se debe fundar con razonamiento y justicia
para el buen funcionamiento de la administración y el debido proceso.
En tal sentido, se puede indicar que, el contenido de las resoluciones administrativas se
refiere a la decisión que pone fin al proceso y que debe estar correctamente fundamentada,
para evitar injusticias, además debe mantener congruencia con lo solicitados por el
administrado y estar de la mano con lo que indica la regla general del acto administrativo.
Ahora bien, Márquez (2023), en su ponencia sobre las resoluciones administrativas
menciona que, el contenido de una resolución también implica la estructura que esta debe
tener para ser eficaz o por lo menos, consentirse como una resolución válida. Esta
estructura, en conformidad con lo expresado por Cabrera (2014), está conformada por
cuatro partes o puntos específicos que detectan el inicio y el fin del procedimiento. En otras
palabras, los autores, formulan que una resolución administrativa está contenida en
estructuración que indica, en un primer momento, lo que se debe resolver, y en último
punto, lo que se ha resuelto, teniendo en cuenta además la motivación que esta debe tener
para ser válida.
Entonces, los autores dividen el contenido de la resolución en las siguientes partes:
1. PARTE EXPOSITIVA
Con esta parte concluye la resolución, y esta la que autoriza que la resolución está
motivada, se encuentra correctamente fundada según los derechos y hechos, y por tanto
ordena que sea notificada a las partes, o parte interesada, por lo que se formula con la frase
“regístrese y comuníquese”.
Sin embargo, debemos saber que no siempre va a ver un acto administrativo como una
forma de culminación del proceso, ya que existen otras maneras en las cuales van a
terminar el proceso cómo el silencio administrativo, el desistimiento y abandono.
Todos los mencionados anteriormente van a ser variaciones en las cuales van a finalizar un
procedimiento teniendo en cuenta que no van a cumplir con todos los pasos que se van a
dar en la resolución si no va a haber una culminación anticipada del proceso.
1.El acto administrativo final
Esta forma de culminación del proceso administrativo está presente en el artículo 198 de la
ley 27444 en la cual hace alusión que el proceso administrativo va a terminar con un acto
administrativo dando a conocer que este vendría a ser la decisión que ha sido tomada por la
administración pública. En el artículo 198 dan a conocer dos incisos, el primero, en cuando
menciona que el acto administrativo va a ser el término del procedimiento administrativo
como esto también viene a estar relacionado con el capítulo primero del título primero de la
ley 27444; con referente al segundo inciso dan a conocer que cuando un procedimiento al
iniciarse por el administrado se llegue a dar el acto administrativo esta va a ser relacionado
con las peticiones que fueron hechas por el administrado.
Es el hecho más común en el cual se pueda dar y por tal motivo se puede decir que vendría
a ser el método por excelencia de un procedimiento administrativo, teniendo en cuenta que
cuando se va a iniciar un procedimiento se va a tener un objetivo el cual vendría a ser el
acto administrativo, ser resuelto esto teniendo en cuenta de que va a estar facultado por la
autoridad administrativa.
2. Silencio administrativo
Cabe señalar que solo si los procedimientos administrativos son iniciados por parte, el
régimen aplicable vendría a ser el silencio administrativo. (Robalino, J.2000)
3. Desistimiento
El desistimiento está presente en nuestro artículo 200 como también del artículo 201 de
nuestra ley 27444 la cual tiene como finalidad la forma de terminación de un procedimiento
administrativo, teniendo en cuenta que este se va a dar sin ningún pronunciamiento de la
autoridad administrativa dando a conocer que en sí la doctrina lo va a derivar llamándolo
como una forma de terminación el proceso administrativo es anormal, ya que se va a dar sin
ningún pronunciamiento sobre el fondo de lo tratado. (Pacori, 2021).
Como también una definición aceptable vendría a ser una terminación la cual va a ser
anormal, ya que aquí estaría interviniendo un proceso en el cual el administrado va a
presentar su voluntad de no continuar con esta pretensión, dando a conocer también de que
no va a renunciar al derecho en el cual encontraba ejerciendo, consecuentemente podría
retomar de nuevo su derecho y seguir con una nueva demanda.
4. Abandono
Desde luego es muy importante tener en cuenta que a partir del derecho administrativo
moderno se ha llegado a dar a conocer métodos los cuales son utilizados con el fin al cual
se digna facilitar una solución de un proceso administrativo, dando a conocer que podemos
encontrar una conciliación como también una transacción extrajudicial, esto siempre en
cuando todo lo actuado sea entre el administrado y la autoridad administrativa, de igual
manera cuando no quieren esperar tanto tiempo por la decisión. (Ballesteros, 2011).
CONCLUSIÓN:
REFERENCIAS:
Ministerio de Justicia.