Opinion

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UNIVERSIDAD NACIONAL

AUTONOMA DE MÉXICO
FACULTAD DE ESTUDIOS
SUPERIORES ARAGON

ENSAYO GONZALES Y OTRAS VS MEXICO


“(CASO ALGODONERO)”

ALUMNOS: ANAYA TELLEZ JOSE ALEJANDRO


HERNANDEZ ENCISO JARED ALEJANDRO
DÍAZ JIMÉNEZ LUZ MARÍA
MATERIA: DEONTOLOGIA JURIDICA

LIC. EBELIA MENDOZA CORTEZ

GRUPO: 1353
Opinión del documental “la ausencia de las
inocentes (el caso del campo algodonero)”
¿Te imaginas vivir en un país donde salir a cualquier hora del día sea tan peligroso como
para llegar al grado de ser secuestrada, violada, mutilada y asesinada?, ¿Te imaginas a tu
madre buscando tu cuerpo entre campos? ¿no?

Pues no, no es necesario imaginarlo, Mexico es uno de los países más inseguros del mundo
y con un numero inimaginable de feminicidios, se ha vuelto tan realista este tema que antes
era más “tabú” ahora las mujeres viven con el miedo constante mientras transitan por las
calles de ser secuestradas y violentadas, y no solo en la calle, ahora en nuestros propios
domicilios, mujeres que son violentadas, violadas, mutiladas y asesinadas por sus propias
parejas o familiares.

Después de haber visto y analizado el documental “La ausencia de las inocentes: el caso del
campo algodonero”, me causa ciertos sentimientos como el de rabia, enojo y tristeza ver a
las madres llorar por el arrebato de sus hijas, mujeres llenas de sueños, esperanzas,
quitándoles esas ilusiones en un abrir y cerrar de ojos.

Viendo como la justicia no hace nada, a pesar de haberlas encontrado en un estado


deplorable y la suma evidencia de que fueron violentadas y aun así tomarlo como si no
fuese nada, como si la vida de esas mujeres fuera basura, dejando delado sus derechos
humanos, que fueron privados al haber sido asesinadas por esas personas que hasta el día de
hoy puede que sigan por las calles y cometiendo los mismos delitos.

Como menciona la madre de una las mujeres asesinadas, ella lucho durante tantos años para
que al menos bajara el número de asesinatos de mujeres, que la vida de su hija no fuera en
vano, pero hoy en la actualidad nos damos cuenta de que tristemente así fue, siguen
sucediendo estos casos día con día y no solo uno por día, son varios.

Las mujeres que acuden al ministerio público a denunciar violencia de cualquier tipo son
minimizadas y no son tomadas en cuentas, hay casos en los que ellas denunciaron a sus
agresores, fueron ignoradas hasta que su agresor les quitó la vida.
La justicia ni con pruebas han hecho lo que se deben merecer esos agresores, agresores que
han quitado vida a mujeres, han quedado impunes de la justicia por la ignorancia y el
desvalor que les dan a esas mujeres, que no merecían esa violencia, ni esa muerte. El caso
del campo algodonero es un vivo ejemplo de que ni luchando por años veremos una justa
respuesta de las autoridades, tardo tantísimos años para que hubiera resolución y tuvo que
llegar hasta la corte interamericana y a pesar de dar sentencia al estado mexicano como
culpable, este tardara dará un año más en dar respuesta y solo a lo mínimo.

Así que tristemente es lo que viven las mexicanas, viven con el miedo de que su vida sea
arrebatada por el simple hecho de ser mujeres, de que sus derechos humanos sean
invalidados, tenemos que seguir con la lucha día con día, hasta que la justicia haga su
verdadero trabajo, no queremos más muertes de mujeres, queremos que esto pare.

Que las mujeres puedan ser libres y que a los agresores se les ejerza las justicia que
merezcan.

Este documental podemos observar que el estado mexicano prefiere tener mas mujeres
muertas que en realidad tomar acciones para erradicar los asesinatos de estas mujeres.

También las instituciones deberían tomar de verdad esa seriedad, ya que es donde las
madres que buscan justicia para sus hijas. La madre de este documental comenta como es
que dos veces le perdieron los expedientes y tuvo que llevar a la persona que tenía que
recibir la carpeta para que así prosiguiera su caso, y que tuvo que ser otra persona que la
alentara a llevar a su caso a la corte.

Es triste que la justicia y las personas que la operen no sean empáticas con las personas que
van y denuncian casos de violencia de todo tipo contra las mujeres, que debería de ser todo
lo contrario, porque no sabemos el día que uno puede sufrir lo mismo, es ahí donde la
justicia solo aplica a la conveniencia de quienes son relevantes.

Debemos ser empáticos con las mujeres que sufren esto y los familiares que al final del día
son lo que se quedan con ese dolor, no sabemos el día que nos toque algo parecido, que por
mas que uno no lo quiera, la justicia tardara años en que la violencia a la mujer sece y de
verdad haya justicia para esos agresores que quedan impunes de la justicia.

¡QUE LA LUCHA SIGA!

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