07 12 23 Suplemento Periodico Espana

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 16

KioskoMas

La vida extraordinaria de un
disidente español y francés:
la leyenda de Jorge Semprún

MÓNICA OJEDA
ESCRITORA

«La emoción es
un lugar de
conocimiento»

SUPLEMENTO LITERARIO
DE EL PERIÓDICO DE ESPAÑA

JOSÉ LUIS ROCA


2 -3
— Si yo le digo nuevo boom latino- — Una de las cosas más importan- Dice Mónica Ojeda (Guayaquil, Ecuador, 1988) que lo que ella busca cuando escribe es asombrarse, ex-
americano, ¿usted qué me dice? tes que me han pasado fue migrar. plorar la posibilidad de ser, pero, sobre todo, de volver a sentir. Y una se pregunta, al escucharla, al leer-
— Esta pregunta siempre es muy — ¿Cuándo se marchó de Ecuador? la, si será consciente de que es eso, asombro, lo que sus libros provocan. Su escritura, que hunde sus
difícil de responder y a la vez fácil. La — A finales de 2017. raíces en la cordillera andina, en la violencia, en el terror, en la fantasía, en la magia de estar vivo en un
he respondido tantas veces que ya — Entonces tenía 29 años. mundo temible y maravilloso, es deslumbrante. Harta de etiquetas, de géneros limitantes anclados a
no sé si creo lo que estoy diciendo... — Sí. Para mí fue muy importante, un pasado que ignoró y a veces hasta silenció a las escritoras, forma parte de una generación de autoras
— ¿Y su respuesta es la misma? porque tuvo que ver con una con- latinoamericanas con una sola cosa en común, además del talento: la voluntad de experimentar con la
— Siempre es la misma con mati- ciencia de que a mí me afectaba pro- palabra, de volver el mundo narrativo del revés para crear el suyo propio. Desde que decidió dejar su pa-
ces, pero los matices son pepitas de fundamente a nivel psicológico, fí- ís natal, hace ahora justo seis años, y se instaló en España, ha ido predicando en su obra con el ejemplo
oro, porque son formas de ir enten- sico, escritural, también, vivir en de uno de los versos más hermosos del peruano Enrique Verástegui: «Lentamente hurgando en el
diendo que se trata de algo mucho Guayaquil, una ciudad increíble- asombro». Ahí están Mandíbula, finalista de los National Book Awards, los cuentos de Las voladoras, los
más complejo de lo que al principio mente violenta, en donde poner el poemas de Historia de la leche o su nueva novela, Chamanes eléctricos en la fiesta del sol, que llegará a las
creíamos. Yo sí tenía cierta irritación cuerpo en la calle es una pesadilla. librerías a principios de febrero. Y ahí está ella, Mónica Ojeda, porque su voz es su literatura. Escúchenla.
con lo del boom latinoamericano — Sobre todo si eres mujer.
contemporáneo, pero ahora ya no — Sobre todo si eres mujer. Yo tomé
me molesta tanto porque ha perdi- la decisión de mudarme para tener

MÓNICA OJEDA
do su fuerza. Me molestaba cuando menos miedo. La migración es un
sentía que era la manera en la que se ejercicio de cambiar unos dolores
nos estaba vendiendo. por otros. Dices, bueno, estos dolo-
— ¿Vendiendo y encasillando? res los dejo, pero acepto estos otros:
— Sí. Lo que está ocurriendo ahora no estar con tu familia, alejarte de
es más complejo que simplemente todo lo que es para ti conocido, las ESCRITORA
algo que se pueda comparar con el violencias, la extranjería... Decides

«No utilizo
boom de los años 60 en Latinoamé- hacer el trueque. Mi literatura está
rica. Se nos suele encasillar diciendo llena de esa violencia, de esos mie-
que todas trabajamos el tema del dos, pero también de todo ese deseo
terror, y no es verdad. Si algo quere- que compone mi experiencia histó-
mos desactivar de ese proceso son rico-geográfica con Ecuador.

mi literatura
las generalizaciones que eliminan — ¿Cómo se escribe de la violencia
los matices, que son esas cosas por sin perder la perspectiva humana?
descubrir. Hay terror, hay violencia, — Cualquier escritora que trabaja
todos esos elementos están ahí pu- con la violencia tiene que plantear-
lulando, pero hay más cosas. Quere- se una búsqueda ética con la pala-

como denuncia»
mos descubrir qué está pasando bra, y para que esa búsqueda ética
ahora, queremos conectar con tra- sea literaria tiene que estar vincula-
diciones que a lo mejor no son las da siempre con un ejercicio poético,
que se han visto siempre desde el en el sentido de que la poesía, para
norte global al pensar en Latinoa- mí, es una especie de desvío de la
mérica. La visión de la literatura la- lengua: tomas otro camino para
tinoamericana desde el norte global hablar de algo de lo que ya se ha ha-
es bastante reduccionista. blado miles de veces. Al tomar ese
— La escritura canónica siempre desvío, encuentras esos recovecos,
ha venido de autores que eran esos matices que de repente resig- mente fascinantes, duros, pero fas- cuerpo, que está más allá de las pa-
hombres y eran blancos, y eso de- nifican todo y, además de eso, ena- cinantes. Esos momentos quizás labras. El lenguaje del cuerpo va co-
termina mucho la idea de persona. jenan el panorama discursivo sobre son las razones por las cuales escri- mo cincuenta kilómetros por de-
— Sí, totalmente. Esa es también la violencia. Eso es lo más valioso bo, por esos momentos en los que te lante y uno llega siempre al pasado
una de las críticas que estamos ha- que puede hacer alguien cuando es- das cuenta de que en la escritura ha del cuerpo, no al presente.
ciendo las autoras latinoamericanas cribe sobre violencia. Hay palabras surgido algo vivo, temible pero vivo, — Pero el cuerpo tiene memoria.
a día de hoy. Todavía nos falta mu- que utilizamos una y otra vez para algo que tiene que ver con tus preo- — Exacto, y ahí sale justamente la

E
cho. No sólo es el tema del machis- hablar de muertes, femicidios, ase- cupaciones, con tu mundo interior. literatura, porque la memoria es un
POR INÉS MARTÍN
mo en la literatura o el tema de au- sinatos, palabras que pierden su po- Y has arrastrado tanto ha salido al- ejercicio ficcional, es ese ejercicio de
toras relegadas, autoras tremendas tencial emotivo porque ya no signi- go verdadero; quizás es demasiado RODRIGO construir, de hacer pasado, de hacer
como Elena Garro, Armonía Som- fican nada. Una palabra que se repi- pretencioso decir verdadero, pero es identidad a través de las experien-
mers, Inés Arredondo, a las que te- te mil veces pierde toda su potencia. algo que te toca y que, por lo tanto, cias del cuerpo. Me gusta pensar la
nías que leer en ediciones que en- Cuando la escritura trabaja con esos puede tocar a otros. literatura como un conjuro, algo que
contrabas milagrosamente en las li- temas, tiene que repensar el len- — Ahora que habla del tacto, ¿la el cuerpo está conjurando. La escri-
brerías de viejo. No sólo es una rei- guaje. Tengo que pensar cómo decir escritura es siempre cuerpo? tura hace el cuerpo, lo rehace, lo
vindicación de autoras que ya esta- esto de una manera que vuelva a — Sí, sin duda alguna. La escritura transforma, pero también el cuerpo
ban haciendo cosas similares a las sentirse. Y a veces eso que se vuelve es física, corporal. La escritura sale transforma y hace la escritura en esa
que nosotras estamos haciendo en a sentir puede ser tremendo, puede de un cuerpo que vive, respira, suda, especie de baile perpetuo.
la contemporaneidad; venimos de ser algo doloroso, puede ser duro. llora, se alegra. Es este cuerpo lleno — Tengo la sensación de que, para
esa tradición, no es que de repente — En ese sentido, ¿usted es cons- de emociones, que no para de sen- usted, la sensibilidad es una forma
aparecemos de la nada. Poner eso ciente de que su propia escritura tir, el que se sienta durante un año a de pensar.
sobre la mesa es un acto politico y incomoda, de que a veces perturba? escribir algo. Es ese cuerpo con to- — Sí, absolutamente. Esto es algo
también es una forma de entender — Sí, te vuelves más consciente de das las cosas que le atraviesan, su que me aportaron las feministas
que nos queda mucho por delante. eso cuando empiezas a conversar entorno, el paisaje, la gente. Me negras estadounidenses, que pusie-
En Latinoamérica nos quedan más con tus lectores. Cuando estás escri- gusta pensar que es el cuerpo el que ron en el centro la epistemología de
cosas, por ejemplo, las autoras indí- biendo, vives esa emoción con una piensa, y a veces piensa más veloz- la emoción. Hablemos de feminis-
genas y afroamericanas, que han voluntad de entrega tremenda. mente que las palabras, que la men- mo, pero no caigamos en la trampa
estado todavía más relegadas. — ¿Y en algún momento ha tenido te. El cuerpo tiene otras formas de racionalista de volver a poner la ra-
— Teniendo en cuenta que es mes- que parar de escribir porque ha ba- pensar, con otros lenguajes. Y la li- zón por encima de las emociones.
tiza, latinoamericana y mujer, ¿qué jado demasiado a la ciénaga? teratura está siempre haciendo una ENTREVISTA Entendamos que la emoción es un
temas atraviesan su literatura? — Sí, y son momentos paradójica- especie de caza del lenguaje del lugar de conocimiento. Eso se con-
7 DE DICIEMBRE DE 2023

abril SUPLEMENTO LITERARIO


DE PRENSA IBÉRICA

virtió en el corazón de mi literatura.


— Recuerdo una frase de Mandí-
bula: «Cuando la idea del bien y el
mal desaparece, sólo queda la na-
turaleza y su violencia». ¿Se puede
aprender a vivir en el horror?
— Yo creo que se tiene que aprender
y, de una u otra manera, es lo que
hacemos todos. Todos tenemos que
vivir y lidiar con la conciencia de fi-
nitud y muerte. Pero, aunque viva-
mos con esa conciencia y, por lo
tanto, convivamos con el horror, es
Chamanes eléctricos
importante no naturalizar el horror
en la fiesta del sol
de la violencia de nuestras socieda-
Mónica Ojeda. Random House
des. Tenemos que vivir con el ho-
288 páginas. 19,90 euros
rror, pero pensar cómo mejorar
En librerías el 8 de febrero
nuestras vidas, aunque sean cortas.
— ¿Su voz es su literatura?
— Yo creo que sí, creo que es una escuchar música, de ver pinturas, de
voz no estable, mutante, que cam- leer. Para mí es una forma de asom-
bia, se transforma, un «monstruo brarme. El arte te permite ver como
sucesivo», como decía Borges. niños otra vez un mundo viejo. Raúl
Nunca me senté a escribir pensan- Zurita dice que el arte es el sueño de
do: voy a escribir para utilizar mi li- la humanidad. Si no puedes soñar,
teratura como denuncia. No me ¿para qué vivir? En el sueño también
gusta pensar la literatura desde ese está la pesadilla, y la pesadilla te di-
sitio, porque me limitaría, me haría ce cosas muy profundas, muy reve-
instrumentalizar la escritura e ir ha- ladoras y a veces incluso las pesadi-
cia un solo camino. Es difícil des- llas pueden ser salvadoras. La litera-
viarse si ya tienes un camino fijo. Es tura tiene ese juego, todas esas do-
necesario borronear un poco el ca- bles caras, es peligrosa y también es
mino y confiar en que esa escritura un lugar de refugio. Yo creo que la li-
corpórea te va a llevar naturalmen- teratura nos consuela.

K
— En su nueva novela, que llegará
a las librerías a principios de febre-
«Me imagino un mundo ro, están otra vez los Andes, la vio-

en donde seamos más lencia, pero también hay una hija


que busca a su padre y, sobre todo,
gentiles con las personas hay mucha música. ¿Cómo la en-

que se van de su tierra» tiende en ese baile que es su obra?


— Es un baile nuevo, con movi-
mientos que nunca había probado
te a tus preocupaciones fundamen- antes. Hay cosas que regresan y as-
tales. Si veo mis libros, mis preocu- pectos muy distintos a mis otros
paciones políticas están ahí, pero trabajos. Me gusta cambiar, pero no
nunca me he sentado a escribir con puedo cambiar al 100% porque sigo
el programa por delante, sino con la siendo yo. Está mi voz. La voz justo
búsqueda poética por delante. tiene un lugar central dentro de la
— Teniendo en cuenta que ser mi- novela. De hecho, la novela comien-
grante define su literatura, me pre- za con una frase de Nietzsche: «El
gunto si la escritura es para usted oído es el órgano del miedo». En
una herramienta de arraigo, de realidad, la resumiría y diría que es
pertenencia, de fijación al mundo. sobre intentar imaginar un futuro
— Totalmente. Lo único que siento en un mundo que está devastado.
que nunca cambia en mi vida es que — ¿Y cómo se imagina usted nues-
escribo. No tengo casa, vivo de al- tro futuro? Porque ahora cuesta…
quiler, todas mis cosas entran en — Yo creo que cuesta, pero tenemos
una maleta. La gente que amo, mis que imaginarlo o, si no, nos tiramos
padres, están envejeciendo, sé que al acantilado. Yo imagino un mundo
en algún momento no los tendré. feminista, antirracista, ecologista,
Las amistades cambian también. que nos tomemos cada vez más en
Quién sabe si mañana estoy vivien- serio el cambio climático y que nos
do en otro país. Hasta mi cuerpo tomemos cada vez más en serio lo
cambia. Mi personalidad también que está pasando con las migracio-
cambia. Pero mi escritura no, ese nes a nivel mundial. Acá todavía fal-
deseo inagotable de escribir como ta muchísimo con el tema de la mi-
forma de emocionarme y de asom- gración, hay que derogar la ley de
brarme con el mundo. extranjería. Yo me imagino un
— Por tanto, para usted el arte es mundo en donde consigamos ser
un espacio de salvación. más gentiles y más amables con las
— Sí, para mí lo ha sido. Yo no sé qué personas que se van de su tierra y
JOSÉ LUIS ROCA haría si no tuviera la posibilidad de que necesitan un hogar y refugio.
4 -5
Vivió su disidencia y fue español y francés. Clandestino en su país, parecía hecho de
historia y de lucha o de renuncias. Fue un hombre de leyenda que dejó atrás un legado
inmenso, de valentía y controversia, que ahora protagoniza un extraordinario libro,
‘Destino y memoria. Cien años de Jorge Semprún’, cuya edición se debe a Mayka Lahoz.

Centenario de su nacimiento

La vida extraordinaria
de Jorge Semprún

R REPORTAJE

ILUSTRACIÓN SARA MARTÍNEZ

La última vez que lo vi fue para ha- del restaurante donde siempre lle- que dijera, porque era quizá la prime- Al final de la conversación se hi-
blar de su autobiografía, que era vaba a almorzar a sus amigos, ha- ra vez que él sintió que debía hablar zo tiempo de almorzar. El fotógrafo
como un enorme baúl extraordi- blara de Santiago Carrillo, a ver si de sin tapujos de aquel amigo que fue su Daniel Mordzinski bajó con él a la
nario, del que salían y salían histo- una vez explicaba qué pasó entre jefe y finalmente resultó parte de un habitación donde tenía su ropa de
rias que a otro lo hubieran matado ellos, cómo se construyó y se rom- pasado del que no renegó, pero del salir, y donde dormía, y aprovechó
de susto o de cobardía. pió su tiempo en común. que escapó como alma que lleva el para pedirle que se echara en la ca-
En esa ocasión se trataba de que, Él estuvo sincero, pero esquivo, y diablo.«¿Culpables?Yo tengo mi idea, ma, como si se hiciera el muerto, a
en su casa del centro de París, cerca JUAN CRUZ el periodista tomó notas de todo lo y creo que él no tenía la razón». Mordzinski le gustan esas poses.
7 DE DICIEMBRE DE 2023
Destino y memoria. Cien abril SUPLEMENTO LITERARIO
años de Jorge Semprún DE PRENSA IBÉRICA
Edición de Mayka Lahoz
Tusquets. 448 páginas. 20,90 €

Felipe Nieto hace recuento


Daniel volvió contento de la pose y de la fo- entrada de aquel campo de concentración de « la aventura comunista»
tografía, y allí esperamos a Jorge, a que su-
biera para salir a la calle, hacía frío.
para anunciar, ante el júbilo de los prisione-
ros, que aquella guerra había terminado.
de Federico Sánchez
Era como si Semprún, que también tenía Él contó allí mismo, otra vez, ese júbilo, en
tanto de actor, escenificara su propia muer- medio del mediodía helado. Luego celebra- J. C.
te. El azar de los huesos y de la carne y de la ría con sus antiguos compañeros de cautive-
vida convirtieron tiempo después (más de un rio el hecho cierto de que la vida les deparó
año después de la entrevista, y de la pose), aquella tragedia, pero que el tiempo les había Felipe Nieto (Santander, 1948), profesor de Historia Contemporánea de la UNED,
cuando murió Semprún, el 7 de junio de 2011, dado ocasión, aún, para el último brindis. Se- ganó el premio Comillas de Memorias de 2013 por su obra La aventura comunista de
en una premonición de cuyo origen y posibi- ría con vino, español quizá. Jorge Semprún. Exilio,clandestinidad y ruptura (Tusquets, 2014). ABRIL le propuso un
lidad tuvimos noticia en cuanto el autor de La Fue la última vez que lo vi reír. Antes ha- cuestionario sobre la actualidad de la figura del ahora centenario autor de La escritu-
escritura y la vida volvió de su cuarto, vesti- bía estallado ante la audiencia helada, y ra o la vida. Aquí preguntas y respuestas.
do para salir, con aquel suéter de cuello alto, atenta, sobrecogida, en estas palabras: «Por — ¿Qué significa, cien años después, este español transterrado?
de color negro, que tan bien se llevaba con su última vez, el 11 de abril, ni resignado a mo- — Semprún se sintió siempre un hijo del exilio. La condición de exiliado no se
pelo airoso pero de nieve. En ese momento rir ni angustiado por la muerte, sino furioso, pierde nunca. Semprún quiso en numerosas ocasiones representar ese exilio al que
en la cara del hombre había la declaración extraordinariamente irritado por la idea de él, podía dar voz, hacer lo posible para que la memoria republicana, memoria roja,
amarga del estupor. Dijo: que pronto ya no estaré aquí, en medio de la pudiera estar presente en el devenir de España. Y ello a pesar de que vino muchas a
—Es imposible. No puedo. No puedo salir belleza del mundo o, por el contrario, en su veces a España, donde vivió largas temporadas, y hasta fue miembro del gobierno.
ni nada. grisácea insipidez –que en este caso concre- Fueron estancias temporales que no rompieron del todo la realidad de español
Miré las manchas de sus manos, el estu- to son la misma cosa–, por última vez, diré transterrado. De ahí que, en algún momento, reconocía tener problemas de identi-
por en su rostro, sus ojos acobardados por el lo que tenga que decir». dad, no ser ni español, ni francés, ser de ninguna parte, o de muchas, más bien de
dolor. Advertí, en la elegancia con la que se Ese fue el momento culminante de su vida cualquier rincón de Europa
había preparado para ir a la calle y el instan- pública, potente su voz aun frente a las ruinas — ¿Cómo le parece que lo trató en su propia memoria?
te en que se declaró inútil para dar un paso, de la mala inteligencia del mundo que comba- — La clandestinidad, aunque parezca y sea de hecho novelesca, es una realidad
el derrumbamiento del hombre, su tristeza. tió, el imperialismo nazi, la maldad humana. muy cierta, duró diez años, y muy arriesgada. Lo obligaba a estar en vigilia constan-
Los huesos, la carne, la mirada, todo iba di- Exiliado de España, escritor de su propias de- te. Lo vivió como una aventura, con pasión. Fue uno de los periodos mejores de su
ciendo adiós, y él ya no pudo más, ni habló. Y rrotas o aventuras civiles (La escritora o la vida, vida. Le permitía estar en Madrid, donde estaban sus recuerdos de infancia, los años
nos fuimos lentamente, como si él se fuera El largo viaje, Federico Sánchez se despide de us- felices… Podía desarrollar su actividad política en la que creía, movilizar a sus mili-
con nosotros quedándose. tedes), clandestino en su país, parisino de alma tantes contra la dictadura. Aquí encontró y en parte creó, una camaradería fraterna,
y de corazón netamente español, aceptó ser que acabaría formando parte del núcleo más íntimo de su vida.
Hombre de leyenda
ministro de Cultura en el país donde nació, pa- — ¿Qué supone en la historia La escritura o la vida?
Este hombre de leyenda enfermó ya más seó por estas calles de Madrid para reconci- — Este libro reproduce el gran reto de la vida de Semprún que desde la infancia
gravemente y poco a poco se fue apagando liarse con aquellas paredes en las que vivió hu- quiso ser escritor, cómo narrar la experiencia de la deportación que acaba de vivir
su vida extraordinaria. Pero se mantuvo fir- yendo de Franco y de la policía, se reencontró encerrado en el campo de concentración de Buchenwald. Necesita ser capaz de ela-
me, con vida y entusiasmo, para conme- con la amistad comunista (Ángel González, borar un relato literario que vaya más allá de la descripción superficial y fría de unos
morar, tiempo más tarde, el fin del cautive- Javier Pradera, Juan García Hortelano), vivió datos acumulados. Semprún desde finales de abril de 1945 se afanó por hacer ese li-
rio en Buchenwald, adonde fue a despedir- su disidencia, acompañado de Fernando bro, pero renunció a la escritura para seguir viviendo. Este es el drama que narra es-
se, el 11 de abril de 2010, del episodio más Claudín, y fue español y francés a la vez aun- te libro publicado en 1994 en francés. El libro se sitúa en el tiempo de la vuelta de los
grave de su vida, el cautiverio en el campo que, en el dolor y en aquel escenario desolado campos, del comienzo de una nueva vida, de la reconstrucción de Europa, de los con-
de concentración nazi. de Buchenwald, su giro fue español, como su flictos que se plantean en torno a la reorganización de la paz y del mundo de la pos-
Dejó atrás un legado inmenso, de valen- alma, o como aquel momento en que, vol- guerra. El libro recuerda cuándo Semprún pudo recuperar el don de la escritura, a co-
tía y de controversia, que ahora protagoni- viendo de su cuarto, y de su padecimiento, nos mienzos de los años 60, con El largo viaje, el libro que conduce a sus lectores lenta-
za, por ejemplo, un extraordinario libro que dijo a Mordzinski y a este periodista que ya no mente a las puertas del horror de la deportación. La escritura o la vida, el libro mayor
acaba de publicar Tusquets, su editorial es- podía más, ya se habían acabado, con aquel de Semprún, el que tuvo más resonancia y le dio más lectores, se cierra con la vuelta
pañola, con el título Destino y memoria. Cien dolor, sus ganas de andar. del escritor, Semprún, al campo, en compañía de sus nietos, para recuperar un mun-
años de Jorge Semprún, cuya edición se de- Pero meses después, aquel 11 de abril de do nunca abandonado por completo, recordar su vigencia y su amenaza y, a través
be a Mayka Lahoz. Ahí aparece Semprún, en 2010, Jorge Semprún apareció, pálido pero ri- de sus jóvenes descendientes, hacer recordar 0al mundo lo que fue y lo que puede
la portada, entre muchacho y adulto, mi- sueño, en la salida del aeropuerto de Berlín volver a ser y por tanto no se debe olvidar.
rando a la nada, acomodado en una silla de para reencontrarse con los amigos que fue- — ¿Qué significó, en la política y en su paso por la política, el gesto de aceptar ser
madera, su pelo blanco, aquel suéter de cue- ron sus compañeros de estupor en el campo ministro?
llo alto, su boca cerrada y sin risa. de concentración. Éstos le preguntaban si se — Aceptó la oferta del presidente del gobierno, Felipe González, con interés y con
Era un hombre que reía, y era también ce- acordaba de ellos. Se sabía los nombres, los curiosidad. Al fin y al cabo, con la escritura, la política es su otra vocación. Era una
ñudo y misterioso, un agente secreto del co- iba saludando minuciosamente, al que venía oportunidad de participar en el proceso de consolidación de la democracia, por la que
munismo de la posguerra mundial, un clan- de Sevilla, al que seguía viviendo en Murcia, a había lucha desde muchos años antes, era una forma de cooperar en el proceso de
destino en su país, España, un presidiario en un albañil de Pola de Siero; se sabían sus nú- reforma de su país desde su país. También era una forma de reivindicar, desde la se-
Buchenwald, un guionista, un escritor, un meros de presos, y él se conocía también de guridad de la democracia, los años de la aventura comunista como Federico Sánchez.
disidente del comunismo más brutal, un po- memoria la identificación que muchos de Era una forma de continuidad en muchos de los objetivos pasados con la sensación
lemista, un amigo de unos pocos amigos (de ellos llevaban como un peso en la memoria del reconocimiento por lo hecho y con los instrumentos políticos a mano para la me-
Yves Montand y Fernando Claudín a Javier que había nacido en una Europa sin piedad. jora de la vida democrática de España. La sensación final fue un tanto agridulce.
Pradera y Beatriz de Moura y Toni López, sus «Esemocionante»,medijoSemprún,«es- Semprún chocó con el aparato del partido socialista, el llamado guerrismo, al que se
inolvidables editores) que lo quisieron con el tar aquí… Aunque no sé si de aquí me voy más enfrentó y denunció en sus rasgos incluso corruptos.
respeto que se debe a los héroes, y también a jovenomásviejo,viendoalosqueconmigoso- — ¿Cómo cree que le ha tratado su propio país?
los incomprendido héroes. brevivieron». Le pregunté si, como propone su — Creo que Semprún merecería mayor reconocimiento público del que tiene en
Después de aquel encuentro en París, títulomásfamoso,habíaqueelegirentrelame- España. Sin duda, su figura tiene el respeto y la alta estima de amplios sectores de la
cuando parecía que Semprún ya diría adiós a moria y la vida, y él me dijo, siempre con aque- cultura española. Pero sigue habiendo un cierto porcentaje de gente, de la política y
aquella existencia de combatiente, el 11 de llos ojos que, a esa altura de su experiencia y de de la cultura, que no aprecia las cualidades de su escritura, la hondura de su reflexión
abril de 2010, a los 65 años del fin de la trage- su viaje, parecían llorosos como los de un niño política y moral. Carece del reconocimiento incontestable, que no debería estar
dia que fue el campo de concentración de Bu- perdido: «Escribir es quedarse en la memoria exento de crítica, del que goza en Francia. Quizá su brillantez, el curso de una vida a
chenwald, pronunció su último discurso. Ha- delamuerte».Yluego,comosirecibieraelim- caballo del siglo que le tocó vivir, fundamentalmente fuera de España, hacen a mu-
bía llegado, apoyado por el bastón que alivia- pulso de un resorte castellano, radicalmente chos españoles sentirlo como algo ajeno y, por tanto, mantenerlo en el desconoci-
ba su dolor, ante la expectación de los que madrileño, aquel Semprún que parecía hecho miento. En mi opinión, su legado sigue vivo.
eran supervivientes como él a celebrar aque- de historia y de lucha o de renuncias, me dijo
lla jornada en que un jeep del ejército alemán, alzando la voz, y riendo luego a carcajadas:
«hacia las cinco de la tarde», se presentó a la —Ahora, ¡que me quiten lo bailado!
6
7 DE DICIEMBRE DE 2023
El fascio de las Ramblas: abril SUPLEMENTO LITERARIO
los orígenes catalanes DE PRENSA IBÉRICA
del fascismo español Simpatía por el baterista.
Xavier Casals Meseguer Por qué importa Charlie Watts
y Enric Ucelay-Da Cal Mike Edison

Pasado & Presente Traducción de Vinnie Lawrence


568 páginas.29 euros Libros del Kultrum
296 páginas. 19,90 euros

Una historia alternativa La piedra angular


del fascismo español de los Rolling Stones
Xavier Casals y Enric Ucelay-Da Cal En ‘Simpatía por el baterista. Por qué
postulan que la primera generación del importa Charlie Watts’ , Mike Edison brinda
movimiento nació en Barcelona en 1919 un merecido tributo al añorado músico
En marzo de 1919 nacen los Fasci Italiani di Combattimento. Entre esta fecha y la Aclaremos una cosa: Charlie Watts, el batería de los Rolling Stones, fue mu-
fundación del Partido Nacionalista Español en 1930, las JONS en 1931 y la Fa- cho más que ese tipo elegante e introvertido que durante casi seis décadas
lange en 1933, en España pasaron cosas que según los historiadores Xa- ejerció de testigo de las aventuras y desventuras musicales de Mick Jagger
vier Casals y Enric Ucelay-Da Cal no pueden despacharse como efíme- y Keith Richards. La carrera de «la banda de rock más grande de la historia»
ros brotes miméticos del fascismo italiano o meras prefiguraciones se habría ido al garete si él no hubiera ejercido de contrapunto entre las ín-
del falangismo. En El fascio de las Ram- fulas del cantante y los desvaríos del guitarrista. Fue el propio Richards quien
blas. Los orígenes catalanes del fascismo es- ERNEST ALÓS confesó que «sin Charlie no habrían existido los Stones». Y todos están de
pañol postulan una genealogía alterna- acuerdo en que, de no haber existido, los Rolling habrían tenido que inventar
tiva al fascismo español, liberada de lo a Charlie Watts. Así que es de justicia destacar su aportación al grupo.
que denominan la «falangística» que marcó un «relato codificado en Tal y como apunta Mike Edison en Simpatía por el baterista. Por qué im-
los términos que transmitieron los propios falangistas» y que contami- porta Charlie Watts, este fue siempre el «insobornable custodio de la fórmu-
nó también a los influyentes trabajos de Stanley G. Payne. Casals y Ucelay ar- la secreta de los Rolling», la piedra angular sobre la que reposa el legado de
gumentan que entre 1919 y 1923 se desarrolla lo que no dudan en calificar de «pri- sus Satánicas Majestades; el techo y el suelo de una enorme casa en la
mera generación» del fascismo, con características inherentes a este modelo po- que la mayoría solo entraba para asomarse a los dos grandes y con-
lítico (indiscutiblemente, el nacionalismo integrista, el escuadrismo violento con- trapuestos ventanales (Jagger y Richards) por los que entraba la
tra el movimiento obrero organizado) y las especificidades propias de su aplica- luz. El reconocido periodista y batería
ción en España, como la supeditación al poder militar de cualquier movimiento JESÚS ZOTANO de varias formaciones –Raunch
civil o milicia, reducido, en palabras muy posteriores de Franco, a «claca». Hands, Pleasure Fuckers, Guadalupe
En la reinterpretación de Casals y Ucelay, todo empieza en Cuba con la forma- Plata…– despliega su admiración por
ción de un modelo de ejercicio del poder ante un desafío separatista que denomi- Watts en un entretenidísimo ensayo en el que intercala la biogra-
nan como de «capitanía cubana» y que, de la mano de mandos militares como Joa- fía del músico con la historia de los Stones, todo ello regado de curio-
quín Milans del Bosch y Severiano Martínez Anido, se replicaría en un lugar don- sas anécdotas y certeros análisis críticos sobre las canciones y los discos.
de se conjugaron el conflicto social con el temor a la réplica de la pérdida de la isla Amante y estudioso del jazz, heredero de Gene Krupa y ferviente admi-
caribeña: Barcelona. Sus componentes: poderes de excepción, desplazamiento del rador de Charlie Parker, Watts tejió con su cadencia y ritmo las costuras de
poder civil y apoyo en movimientos civiles lealistas de carácter tan auxiliar como los Rolling a su antojo; dando cuando tenía que dar y abriendo espacios su-
violento. Aquí hacen los autores una primera categorización que seguramente no ficientes para generar una impronta que lo convirtió en un batería único.
estará exenta de debate: considerar estos dos periodos como las dos primeras dic- «Marcaba con fuerza cuando se le requería y se relajaba cuando la canción
taduras militares españolas, en directa continuidad con las de Primo de Rivera y no lo exigía; al fin al cabo, era un tipo humilde que siempre se ponía detrás
Franco y distinguibles de las distintas fórmulas de estado de excepción e interven- de la canción», relata Edison. Pero además de ser un refinadísimo batería,
ción militar que se arrastraban desde el agitado XIX español. más interesado en encontrar el roll que el rock, era el menos Stone de los Sto-
Su segunda tesis es tipificar como fascistas (ni proto, ni pre) la galaxia de grupús- nes. No quiso saber nada de las orgías de grupies –se casó a los 23 años con
culos nacidos a la sombra de la autoridad en el periodo 1919-1923, desde el pisto- Shirley Ann Shepherd y jamás estuvo con otra mujer– y siempre rechazó en-
lerismo patronal a los movimientos anticatalanistas estrechamente vinculados a trar en las sesiones drogadictas que se organizaban durante las grabaciones
la oficialidad de la guarnición local. Desde la Liga Patriótica Española, contempo- y las giras. Pese a haber pasado años al margen de ese circo, cayó en brazos
ránea de los primeros grupos de arditi italianos pero dos meses previa al fascismo, de la heroína y el speed a comienzos de los 80, justo cuando sus colegas esta-
de cuyo manifiesto de 1919 dicen sin embargo que «fija el programa de toda la ex- ban ya de vuelta de todo. Su coqueteo con las drogas duró poco: «Me paré en
trema derecha española hasta Vox» hasta grupos incluso estéticamente fascistas seco, por mí y por mi mujer. Nunca fui yo, en realidad», confesó después, y
como La Traza con sus camisas azules ya en 1922. O el mismo Sindicato Libre (con al poco retomó su tarea de marcar el ritmo de los Rolling.
una combinación de retórica obrerista y acción violenta al servicio de la patronal Sus Satánicas Majestades celebran estos días el lanzamiento de Hackney
típicamente fascista, por cierto) y el pistolerismo que se desarrolla desde este sin- Diamonds, con dos cortes –Live by the sword y Mess it up– grabados por Watts
dicalismo amarillo y desde apéndices parapoliciales como la Banda Negra del ba- antes de su muerte. Y acaban de anunciar una gira para 2024. La parca no les
rón König. Si una de las características del fascismo es la violencia, argumentan, pillará en un sofá, sino haciendo rock, afirman. Wats siempre se consideró
mucho más lo fue el Sindicato Libre que el primer falangismo joseantoniano de ni- un músico de jazz, al que se dedicaba cuando no estaba con la banda. El rock
ños bien nacido en Madrid una década después. era su trabajo, y decía que ir con los Rolling era como ir a la oficina.
Casals y Ucelay plantean la imbricación innata entre el fascismo español (y en
todo caso, de los movimientos nacionalistas encajen o no en la definición amplia
de fascismo que asumen) y el nacionalismo catalán. Y no solo, aunque sobre todo,
en términos de reacción a este. Recuerdan que la burguesía catalana de la Lliga vio
compatible, hasta la misma decepción que supusieron las decisiones que empezó
a tomar el directorio de Primo de Rivera, el apoyo a la mano dura contra el movi-
miento obrero desde capitanía y el gobierno civil con la construcción de las insti-
tuciones de autogobierno. Ese magma que garabateaba manifiestos y cargaba sus
pistolas en cafés de la Rambla quedó domesticado bajo Primo, que fracasó en su in-
tento de consolidar como bases civiles a la Unión Patriótica o el Somatén, pero ha-
bía diseñado ya el marco ideológico de esa dictadura y de la que vendría. Que poco
margen daría, salvo cambio de chaqueta, a un catalanismo del que aquel manifies- Charlie Watts
to de 1919 decía: «No se contentan con ir a Europa a pedir lo que no les será conce-
dido de ninguna manera, sino que salen por esas calles a dar gritos subversivos».
7
7 DE DICIEMBRE DE 2023

abril SUPLEMENTO LITERARIO


DE PRENSA IBÉRICA

De contenido semiautobio- No es la primera obra de la jo-


gráfico, Los bordes es la pri- ven escritora mallorquina (ha
mera novela de Angelo Ti- publicado dos novelas más y
jssens, guionista de Close, pe- textos teatrales) ni tampoco el
lícula ganadora del Gran Pre- Proa, que acaba de conquis-
mio del Jurado en Cannes. tar, es su primer premio im-
Con un universo literario pró- portante (ganó un Goya co-
ximo a los de Ocean Vuong y mo guionista por el corto de

s
Douglas Stuart, Tijssens animación Woody & Woo-
muestra a un niño marcado dy), pero esta historia inspira-
por el miedo, a un adolescen- Los bordes da en su abuelo sobre un pa- Les cendres a la piscina
te que descubre sus impulsos Angelo Tijssens yés que se enriquece constru- Laura Gost
y a un adulto que ya no se Dos Bigotes yendo hoteles apuntala su ca- Proa
17,95 € 19,90 €
atreve a pedir amor. rrera en la literatura catalana.

«Cuando un inesperado de- En Después de Safo, como Las divertidas experiencias


seo maternal me estalló en la en el Orlando de Virginia de un aprendiz de veterinario
cara, descubrí que ya era de- Woolf, realidad y ficción se fu- en la Inglaterra rural de los
masiado tarde», escribe la sionan para trazar un puente años 30. Desde su publica-
periodista Júlia Bertran La- que conecta las búsquedas, ción, estas memorias han si-
fuente. Este es el relato ho- las resistencias y las reinven- do el libro de referencia de
nesto y valiente de su camino ciones de aquellas que, desde millones de amantes de la na-
hacia la maternidad, que pu- el siglo VII a. C. hasta hoy, han turaleza. Tiernas, divertidas y
do recorrer gracias a la ovo- sido tocadas por el deseo de embebidas en el ambiente
donación. Un proceso con vivir y crear libremente. Una bucólico de la campiña ingle-
implicaciones físicas, emo- historia hecha de fragmentos sa, son uno de los testimonios
cionales, económicas, socia- de muchas historias e hilvana- más celebrados sobre el
SELECCIÓN
les y, por supuesto, morales da por la prosa lírica de Selby amor por los animales, el
que no duda en abordar. Wynn Schwartz. compañerismo y la vida rural.

Los libros
con estilo
escogidos
por ‘Abril’

Estimada desconeguda Después de Safo Todas las criaturas


Júlia Bertran Lafuente Selby Wynn Schwartz grandes y pequeñas
La Campana Alianza Editorial James Herriot
20,90 € 21,95 € Blackie Books. 22 €

Las exquisitas ilustraciones Una colección de 47 historias


de Marjolein Bastin, recono- vinculadas a los volcanes de
cida a nivel internacional, Islandia, que van desde las
muestran una nueva visión aventuras de los primeros co-
de la obra más conocida de lonizadores de la isla hasta las
Jane Austen. La edición hazañas de exploradores ex-
cuenta con elegantes encar- tremos, desde las antiguas sa-
tes extras que dan vida a la gas nórdicas hasta las misio-
historia de Elizabeth Bennet. nes de la NASA, alternando
Con traducción de Concha ciencia, poesía, crónica y le-
Cardeñoso, este nuevo for- Orgullo y prejuicio yenda. El Atlas de los volca- Atlas novelado de los
mato del clásico llega para (El Jardín Secreto) nes de Islandia es un curioso volcanes de Islandia
hacer las delicias de los lec- Jane Austen recorrido por la singularidad Leonardo Piccione
tores más bibliófilos. Alma. 39 € geológica de esta isla. Nórdica. 25 €
8 -9 Amores patológicos
Nuria Barrios

Páginas de Espuma
160 páginas. 17 euros

Vidas cruzadas JUAN GAITÁN


Veinticinco años después de su

entre novela y relato


publicación, Nuria Barrios (Ma-
drid, 1962) ha «intervenido» en
su primer libro, Amores patológi-
cos, para afrontar su reedición en
la editorial Páginas de Espuma,
Un cuarto de siglo después de su que tanto ha hecho y hace por el

fulgurante aparición en el panorama relato en español. Esa «interven-


ción», confesada por la propia au-
literario, Nuria Barrios reedita su tora en una suerte de preámbulo

primer libro, ‘Amores patológicos’, con


de la edición actual, no queda de-
terminada si es mucho, poco o re-
un preámbulo de la propia autora gular. Confieso que no he hecho la
oportuna lectura comparada para
averiguar este alcance, porque al
cabo eso no me parecía de gran Nuria Barrios
importancia. Me interesaba más
saber cómo había resistido el pa-

Últimas secuencias
gonismo. Comienza con una des- Eso que define como el enigma glos a partir del nacimiento del eu-
cripción de su padre, que desem- de la unidad y a la vez de la diversi- ro dejaron a gran parte de la Unión
barcó en Normandía el Día D con dad halla aquí inquietantes diso- atrapada en el incómodo punto in-
las tropas británicas y se abrió ca- nancias. Si se empuja demasiado termedio de una moneda única sin
mino hacia Alemania con las fuer- en favor de la unidad, la unión for- una estrategia común.
Timothy Garton Ash mezcla erudición y zas aliadas que liberaron el conti- zada comienza a desmoronarse. Si El autor ve en el Brexit un caso
periodismo para ayudar a entender la nente, para luego convertirse en un
euroescéptico. El hijo, en cambio,
se presiona excesivamente en fa-
vor de la diversidad, los europeos
extremo de ira contra la clase do-
minante, no algo atípico exclusi-
reconstrucción europea y sus crisis desde es un apasionado proeuropeo. Con terminan peleándose entre sí. Cri- vamente antieuropeo. Lo mismo

el final de la Segunda Guerra Mundial la caída del Muro de Berlín en 1989,


compartió el espíritu espontáneo y
sis tras crisis, las fuerzas de con-
vergencia y divergencia se enfren-
sucede con el desafío populista,
que ahonda como excusa en las
alegre del poder popular de enton- tan. Siendo el imperio más reacio desigualdades de la crisis. Pero los
ces. Cuando se produjo el Brexit, de la historia, la UE va adquiriendo logros de la creciente libertad
LUIS M. ALONSO ta aún con el pie en el estribo con- deseado por Donald Trump y Vla- raíces profundas y límites más eclipsan cualquier obstáculo. Sin
tada desde una perspectiva perso- dímir Putin para debilitar a la UE, amplios al tiempo que se enfrenta perder de vista, claro, que la guerra
Europa es el libro de un historiador nal y en viñetas: un relato fluido del fue una dolorosa derrota para al- a los enemigos que pretenden la en Ucrania muestra que la violen-
del presente como es Timothy Viejo Continente desde la Segunda guien que, como periodista y aca- desunión. Si por un lado la caída del cia aún yace amenazante bajo el
Garton Ash (Londres, 1955), pero Guerra Mundial, salpicado de se- démico, ha vivido comprometido Muro trajo una ampliación espec- suelo de la paz europea de 1945.
también la crónica de un periodis- cuencias testimoniales y de prota- con los ideales europeístas. tacular, las manipulaciones y arre- Como antes ya ocurrió con el en-

El verdadero héroe tan sensacional descubrimiento de


la arqueología americana. La escri-
tora germana Sabrina Janesch
Berns, nacido en 1842 en Krefeld, al
oeste de Alemania, y obsesionado
por las leyendas sobre Julio César y
aunque ellos intentaron en todo lo
posible obstaculizar la codicia de
los occidentales, guardándolo pa-

de Machu Picchu
(Gifhorn, 1985) repara un inadver- el mítico oro del Rin, pasa su tiem- ra sí de la ambición conquistadora,
tido error de la historia al presen- po en la tienda de su progenitor el emplazamiento, en lo más in-
tarnos con vibrante pulso narrati- fantaseando sobre la legendaria trincado de la jungla y las grandes
vo y convincente verosimilitud la ciudad de los incas, todo ello espo- cordilleras, de su legendaria ciudad
Sabrina Janesch narra las peripecias peculiar biografía de un apasio-
nante personaje que en 1887 fue
leado por las seductoras crónicas
del viaje a Perú de Johann Jakob
sagrada de El Dorado.
Ya Gonzalo Pizarro la había
del olvidado aventurero Rudolph celebrado por el periódico La Gace- von Tschudi, en las que se detallan buscado afanosamente sin prove-

August Berns en ‘La ciudad de oro’ ta de Lima como el que había resti-
tuido al conocimiento universal la
las maravillas de aquel país remo-
to con sus yacimientos de metales
cho, llegando hasta el descubri-
miento de las fuentes del Amazo-
mítica ciudad entresoñada de El nobles y piedras preciosas, y sus nas, pero sin hallar rastros de su
Dorado, que desde la época de la deslumbrantes construcciones y misterioso emplazamiento. Igual-
CARLOS CLEMENTSON de que el explorador norteameri- conquista por los españoles ya ha- palacios revestidos de oro. mente, el investigador Alexander
cano Hiran Bingham obtuviese fa- bía imantado la ambición de tantos En dichas crónicas se narraba von Humboldt, que ya anciano
El aventurero alemán Rudolph Au- ma, fortuna y reconocimiento uni- exploradores y aventureros. cómo, a la llegada de los españoles, aparece en la novela y se constitu-
gust Berns descubrió las perdidas versal reivindicando para sí desde La ciudad de oro se inicia en la los incas fueron constreñidos a re- ye en el mentor o modelo de su jo-
ruinas de Machu Picchu, la antigua la revista National Geographic y el primera mitad del siglo XIX, cuan- velar la situación de sus grandes ven protagonista, había discurrido
ciudad de los incas, 44 años antes prestigio de la Universidad de Yale do el pequeño Rudolph August templos y ciudades en la selva, también en sus andanzas explora-
7 DE DICIEMBRE DE 2023

abril SUPLEMENTO LITERARIO


DE PRENSA IBÉRICA
Europa. Una
historia personal La ciudad de oro
Timothy Garton Ash Sabrina Janesch

Traducción de Traducción de Bernd Dietz


Antonia Martín/Anna Llisterri Almuzara
Taurus/Arcàdia 464 páginas. 21,95 euros
496/560 páginas. 23,90/29,95 euros

so del tiempo este libro que, cuan- El lenguaje cansino (imagino que más le re- Lo más que tantos nos impresionaron en
do se publicó por vez primera,
causó un cierto revuelo por sus no ha perdido sultará a la autora) que ese, el
erotismo explícito en la obra, sea importante del
la década de los 90, lo que nos
acaba proporcionando, en vez de
dosis de erotismo. Siempre es- frescura, sigue constantemente el punto refe- libro no es un libro de relatos (que también
candaliza más el erotismo pro-
nunciado por mujeres. Ese tabú teniendo ese rencial, cuando, en realidad, eso
es, o debería ser, lo de menos. Lo su temática
lo es) una especie de novela frag-
mentada, o un híbrido entre libro
social sigue vigente y, como se leve toque de más importante que tiene Amores –el amor, el de relatos y novela, o todo al mis-
comprueba en las referencias leí-
das en torno al libro desde su nue- lirismo y estilo patológicos no es su temática (el
amor, el sexo), sino su estructura. sexo–, sino su
mo tiempo.
Y también sorprende, igual de
va aparición, siguen siendo así las que le imprime Esa ligazón entre los relatos, esa estructura. Esa gratamente, que el lenguaje no
cosas. Y sin embargo…
No hay motivos de alboroto. La una alta dosis conexión que existe entre unos y
otros a través de los personajes, ligazón entre las
haya perdido frescura, que siga te-
niendo ese leve toque de lirismo y
elegancia con que Barrios trata el de gracia y que pasan de ser secundarios en historias a través estilo que le imprime una alta do-
erotismo, el sexo, cómo algunas
pequeñas obsesiones devienen en elegancia unos a ser protagonistas en otros,
que entran y salen de las historias de los personajes
sis de gracia y elegancia.
Así que leído de nuevo un cuar-
parafilias en algunos relatos, no como se entra y se sale en la vida. to de siglo después, Amores patoló-
deberían llamar a escándalo a na- Y es esa estructura la que sigue gicos sigue siendo ese libro que nos
die. Estas cuestiones, a estas altu- siendo una grata sorpresa, la que gustó, que nos gusta y, probable-
ras del siglo XXI, deberían ya es- sigue manteniendo ese aire a lo mente, nos seguirá gustando den-
tar más que superadas. Resulta short cuts, esas «vidas cruzadas» tro de 25 años más.

frentamiento balcánico. En su opi- su punto máximo con el colapso de convertirse en los Estados Unidos
nión, lo más grave es no haber la URSS en 1989, cuando el com- de Europa. La migración hace que
aprendido la historia de los impe- promiso intelectual, la política las sociedades sean más diversas
rios en decadencia y su falta de re- pragmática y la legitimidad moral culturalmente y más fuertes eco-
signación ante el declive. Cuando el parecían converger en una causa nómicamente, pero genera pro-
imperio ruso-soviético desapare- justa. Pero no duró. En muchos testas populistas. Las fronteras es-
ció en tres años, las potencias occi- países, los sistemas comunistas tán más abiertas que nunca, pero
dentales no deberían haber asumi- dieron paso a gobiernos cuestiona- las democracias liberales están a la
do que ese era el final de la historia. bles democráticamente. Todavía defensiva. Él está convencido de
Tendrían que haber sospechado en otoño de 1998, en un viaje por la que es necesario defender, mejorar
que el imperio podría contraatacar. antigua Yugoslavia, Garton Ash y ampliar el ideal de una Europa li-
El enfoque junta erudición y pe- exclama ante el presidente eslove- bre, íntegra y diversa. Sin embargo,
riodismo. El libro está organizado no Milan Kucan que ni siquiera tras años de esfuerzo intelectual,
cronológicamente, con un surtido Slobodan Milosevic se atrevería a nadie sabe cómo hacerlo. Los avan-
de imágenes vividas y jugosas una limpieza étnica de los 1,8 mi- ces hasta 2008 se vieron truncados
anécdotas personales que trans- llones de albaneses de Kosovo y es- por una cascada de crisis que cul-
miten la sensación de estar en el te le responde: «No lo conoce». Timothy Garton Ash minaron con la invasión Ucrania.
mismo momento y el lugar por La UE, aunque fuerte y estable, Una victoria ucraniana permitiría
donde transita la historia. Alcanza ha abandonado su aspiración de renovar esos esfuerzos, insiste.

torias a lo largo de los Andes en gra intuir o vislumbrar, enmasca- traordinario pulso narrativo y la
busca de tan legendaria ciudad. rada entre el maremágnum luju- afinada indagación psicológica de
Nuestro protagonista, determi- riante de la avasalladora botánica los personajes y de la sociedad li-
nado a encontrarla, emprende tropical y las extremas altitudes meña de la época, con una implíci-
desde Berlín un azaroso periplo a andinas, las ruinas de la antigua ta y contundente dimensión moral
todo lo largo del Atlántico, atrave- ciudad conocida como Machu final, que termina dejando un son-
sando el amenazador cabo de Hor- Picchu. Todo ello descrito y pre- riente rictus de ironía ante las con-
nos y el Pacífico hasta arribar al an- sentado con el más sugestivo cro- tantes y sonantes debilidades de
tiguo reino del Perú, que se en- matismo, una brillante plasticidad nuestra común condición humana.
cuentra inmerso en los últimos co- y un vivo sabor a realidad. De fluente lectura y vívidos diá-
letazos bélicos de su independen- Otras peripecias llevan a nues- logos, la traducción de la obra al
cia contra España, participando tro personaje, especializado ya en español se debe a Bernd Dietz, que
desde el primer momento en el ingeniería tropical, tanto a EEUU realiza una labor ardua y magistral
combate desde tierra contra la fra- como a participar en los trabajos por la profusión de vocablos espe-
gata acorazada Numancia, en el del canal de Panamá, para termi- cíficos y otros tecnicismos propios
puerto de El Callao. Una vez pacifi- nar recalando de nuevo en su ado- de ciertas labores industriales de-
cado el país, se interna en las selvá- rado Perú. Allí planea una sociedad cimonónicas y el vocabulario pe-
Sabrina Janesch ticas fragosidades vírgenes del in- anónima para la explotación de la culiar de estos meridionales y sel-
terior, donde tras azarosas aven- mítica ciudad. Esta tercera parte de váticos horizontes por los que
turas, proyectos y desilusiones, lo- la novela es apasionante por su ex- transcurre la obra.
10 - 11 Un espía privado.
Las cartas de John le Carré
John le Carré

Traducción de Ramón Buenaventura


Edición de Tim Cornwell
Planeta
712 páginas. 23,90 euros

interesado en cotilleos y famosos


tampoco se va a sentir decepcio-
nado con un Un espía privado. En-
tre los más de 140 destinatarios
que aparecen en este volumen hay
nombres tan conocidos como los
de Graham Greene, Ian McEwan,
William Burroughs, John Banville,
Philip Roth, Sydney Pollack, John
Boorman, Alec Guinness, Stephen
Fry, Hugh Laurie, Pierce Brosnan
y Margaret Thatcher, entre mu-
chos otros. De Margaret Thatcher
llega a confesar a un amigo que
para su propia sorpresa la encon-
tró en cierta forma «admirable»
después de conocerla.
Entre lo que aquí se puede en-
contrar el lector más fiel a Le Ca-
rré quizá sea de mayor interés
descubrir su fracaso en la escritu-
ra inconclusa de una última nove-
la sobre George Smiley o el pro-
yecto de una obra teatral sobre su
padre. También es de enorme in-
terés comprobar sus esfuerzos
Ilustración: para recabar documentación, aquí
Pablo García la correspondencia para conse-
guir información útil para sus no-
velas es numerosa, y podemos
constatar el gran esfuerzo y dedi-

El espía que escribía cartas


cación que pedía a sus colabora-
dores y editores –son varias las
misivas de despedida a estos últi-
mos, a los que abandonaba en
busca de más y mejor ayuda–.
Generosidad de espíritu
Y sí, también aparece en Un espía
‘Un espía JOSÉ LUIS G. GÓMEZ un enorme interés por contactar
con todas aquellas personas que
fieles, y no falta aquí el acompaña-
miento de numerosas fotos perso-
privado una serie de cartas a otros
espías –recordemos que Le Carré
privado. Las Quizá un verdadero espía habría conoció y apreció en una larga vi- nales, la gran mayoría de ellas iné- fue miembro del MI5 y el MI6 bri-
cartas de quemado toda su corresponden-
cia en sus días finales sin que le
da pública. Un trabajo tan arduo le
llevó más de dos años de esfuerzo,
ditas y tomadas del álbum fami-
liar, además de una curiosa serie
tánicos–. Así, llama la atención su
relación con Nicolas Elliott, la úl-
John le Carré’, temblara el pulso, y así todas esas cuyo final no pudo ver terminado de dibujos realizados por el mismo tima persona del servicio secreto

antología de la posibles cartas reveladoras acu-


muladas tras una vida larga, pro-
porque murió poco antes de su
publicación original en el Reino
Le Carré. Sin duda, la sensación
que Un espía privado deja al lector
con la que Kim Philby habló antes
de desertar a Moscú, y con el infa-
correspondencia ductiva y oculta habrían termina- Unido el año pasado. que se acerca a estas páginas es me general del KGB Oleg Kalugin.

del creador de
do en una chimenea; pero aunque Un espía privado. Las cartas de que le han invitado a conocer de «Recopilar las cartas de mi pa-
David Cornwell fue un espía, sin John le Carré reúne 309 cartas es- forma más cercana a ese escritor dre ha sido una tarea fácil; él dejó
George Smiley duda fue más un escritor, y no uno
cualquiera sino el maestro de la li-
critas por el novelista entre 1945 y
2020, dirigidas a algo más de 140
del que tanto ha leído pero del que
quizá sepa tan poco. Pero hay que
una enorme reserva de amor, ad-
miración y buena voluntad. Una de
que editó su teratura de espionaje, el autor que destinatarios distintos. Tim Cor- recordar que para saber de prime- las cualidades omnipresentes en

propio hijo, nos elevó un género menor a las altu-


ras de la mejor literatura de su
nwell las agrupó en 24 capítulos
temáticos y añadió una cronología
ra mano sobre la vida de Le Carré
es mejor acercarse primero a Volar
sus cartas es su generosidad de es-
píritu, ya sea dedicada a un autor
acerca a los tiempo. David Cornwell fue John sobre su padre al final del libro. en círculos (2016), sus memorias principiante, ya sea a un niño de 5

amores, pasiones
le Carré (Poole, Reino Unido, Todas las cartas están contextua- sin tapujos –tampoco sería mala años que le preguntaba cómo ha-
K
1931-Truro, Reino Unido, 2020) y lizadas por su hijo, quizá el mejor idea leer En la corte de Ronnie cerse espía», explica Tim Cornwell
e inquietudes del Un espía privado. Las cartas de John
le Carré es el último regalo que de-
guía posible por el mundo de su
padre, un hombre público pero
(2008), ese texto sobre su padre
que publicó en The New Yorker y
sobre su progenitor.
Esa es la intención detrás de es-
autor a través de ja a sus lectores. discreto, y no faltan en sus anota- aquí nos llegó en forma de un libro ta antología, mostrarnos el lado
309 misivas Tras la muerte en 2020 del
creador de George Smiley y tantos
ciones muchos y muy curiosos
detalles, además de bastantes re-
breve pero revelador y duro–.
Aunque Tim Cornwell recono-
cálido y cercano de un escritor, y
quizá por eso, y porque fue así, la
datadas entre otros espías melancólicos y hu- velaciones íntimas: «Mi padre es- ce haber soslayado la correspon- misiva que cierra Un espía privado

1945 y 2020 manos, su hijo Tim Cornwell co-


menzó a editar y ordenar la amplí-
cribió a mano la mayoría de sus
cartas, que normalmente firma-
dencia de su padre con sus nume-
rosas amantes –el autor de El
es un breve y amable correo elec-
trónico de despedida a un editor
sima correspondencia de su padre, ba: ‘As ever, David’». amante ingenuo y sentimental sabía escrito desde un iPad en el Royal
un prolífico escritor de cartas, un Este volumen tiene aires de de lo que escribía, y de hecho ese Cornwall Hospital de Truro (Reino
corresponsal atento con sus ami- pieza complementaria, de guiño libro se basa en la que fue su Unido). Sí, Le Carré fue un corres-
gos y familiares, y un escritor con final dirigido a los lectores más amante más conocida–, el lector ponsal incansable hasta el final.
7 DE DICIEMBRE DE 2023

abril SUPLEMENTO LITERARIO


DE PRENSA IBÉRICA

El desierto blanco Casada i callada


Luis López Carrasco Emma Zafón

Anagrama Empúries
168 páginas. 17,90 euros 200 páginas. 18,90 euros

Perdidos Cuando las mujeres


Luis López Carrasco trata de narrar
el mundo desde fuera en ‘El desierto
no eran nada
blanco’, Premio Herralde de Novela Emma Zafón se traslada a los años 70
para retratar un matrimonio-prisión
en su novela debut, ‘Casada i callada’
El desierto blanco, obra con la que Luis López Carrasco (Murcia, 1981) ha gana-
do el Premio Herralde de Novela, es un texto que, desde la primera página, su-
me al lector en un universo extraño, no diré distópico, y de cuyo laberinto no La escritora y periodista Emma Zafón (Llucena, Castellón, 1987) viaja a una
sale algo airoso hasta que encara la parte quinta y última del libro, La línea del época, los 70, en que la mayoría de mujeres vivían a la sombra de sus maridos,
horizonte. Lo que ha tratado de hacer el autor con esta ficción –palabra que aquí atrapadas en un matrimonio-prisión. Casada i callada, su novela debut –en
no es solo sinónimo de novela, sino que implica sentidos más profundos liga- 2016 publicó con Chimo Bayo No iba a salir y me lie (Roca)–, revela a una au-
dos a un espacio continuo de multiplicidades en red– es, diría, narrar el mun- tora de sensibilidad y talento que, con una construcción sencilla y lineal, es ca-
do desde una distancia sideral, desde fuera –literalmente– y tratando de au- paz de dar vida a una constelación familiar en el centro de la cual se halla una
nar desde el pasado los sentidos no evidentes de un presente marcado por una mujer. Es a través de sus ojos que se va desgranando retrospectivamente la his-
serie de futuros imaginados para «sobrevivir a ciertos peligros invisibles». toria, muy de actualidad puesto que aborda el tema de la violencia de género.
La novela presenta una serie de mundos posibles, futuros y ajenos, desde Hija del panadero del pueblo, la protagonista aspira y llega a ser maestra,
los que imaginar una contemporaneidad que clausura «el presente des- pero su futuro está fijado de antemano: «Todas las chicas nos criábamos
de un futuro aterrador». Y ese futuro se erige en el punto nuclear del con la presión de encontrar a un marido a quien servir y a quien que-
libro: ¿cómo cabe imaginar no tanto lo venidero cuanto el presente rer por encima de nosotras mismas». Tampoco ha recibido ningún
desde una distancia que vendrá? ¿Qué tipo de educación sexual y los terrores
RICARDO cantidad de realidad cabe en la capacidad VALÈRIA relacionados con un posible embarazo
BAIXERAS de imaginar lo inimaginable? ¿Hasta qué GAILLARD persiguen su juventud cándida pero
punto idealizamos el pasado? ¿Es la me- también fogosa. Y luego, claro, conoce a
lancolía la piedra de toque de nuestra época? Ximo en la fiesta del pueblo y su vida bascula. Apuesto, de clase so-
Esta es una novela sobre la distancia entre lo real y lo imaginado que cial superior (su familia tiene una fábrica de cerámica) y procedente de
trata de explicar el tiempo presente, de ahí que el lector se tope con una se- Alcora, cuando la saca a bailar en una fiesta ni ella misma se lo cree. Así se
rie de notas al pie en las que el narrador explica quiénes son Irene Villa y José establece una relación desigual en la cual el hombre siempre tiene el poder.
Luis Rodríguez Zapatero, en qué consistía Guantánamo y la TDT, y qué sig- El relato, ágil gracias a capítulos cortos y bien definidos, avanza para con-
nificó la serie de Lost y Equipo de investigación. Y entre situaciones intensas que tar cómo se va transformando esta relación del amor más intenso, con dos
no pretenden resolverse (y que no desvelaré por motivos evidentes), una sen- hijos pequeños de por medio, a un odio triste. La maestra se siente estafada y
sación constante de extrañeza: ¿qué se está narrando?, ¿quién está narran- empieza a poner límites a su «servitud incondicional», pero no tiene más re-
do? y, sobre todo, ¿desde dónde se está narrando? Como si el autor quisiera medio que tragar y callar. Si bien ya se vivía en democracia, la palabra divorcio
indicar que lo real absoluto demanda un distanciamiento sin paliativos para era tabú y la mujer que se atrevía a pedirlo era una «mala mujer divorciada».
poder dar cuenta, entre «la ebriedad y el vértigo», que no hay ni principio ni Los maltratos son cada vez más insoportables; la sumisión, total. «Yo no
final y que ningún «espacio era tan solo un espacio, sino una red…, no, no una era nada», afirma en un momento la protagonista, cuyo nombre, en un ges-
red [...]. Cada espacio era a la vez cientos de espacios». to significativo, solo se revela al final del relato. Sin embargo, la novela no es-
El desierto blanco parece una descripción exacta de las mónadas de Leibniz: tá exenta de humor, con escenas divertidas que sirven para pintar con cua-
figuras simples, indivisibles y autárquicas que contienen en su sencillez toda tro pinceladas este microcosmos integrado por mujeres humildes que tra-
la complejidad del mundo. Sujetos independientes que no parecen determi- tan de salir adelante en el contexto histórico y social que les ha tocado vivir.
nados por la causalidad de lo que sucedió: «No había por tanto separación en En su afán realista costumbrista, la autora también indaga sobre la reali-
mi memoria –en mi percepción– entre lo acontecido y lo imaginado, porque dad lingüística de la época, que se pone en evidencia sobre todo en las fiestas.
lo imaginado había acontecido, había sido experimentado. Mi percepción era «Los jóvenes que venían de arriba, del Castillo o de Villahermosa», hablaban
mi memoria y mi memoria era mi percepción». castellano, cosa que a los habitantes de Llucena les resultaba «exótico» por-
Lo que sí parece claro es que el autor ha querido ofrecer un retrato de la épo- que decían «moza» o «zagala», mientras que los jóvenes que provenían «de
ca actual en la que las historias están inevitablemente interconectadas, en la abajo», de pueblos como Figueroles, Alcora y Atzeneta, hablaban catalán, co-
que la memoria es frágil, la vida es precaria y el futuro es dependiente de una mo en Llucena, y eso les acerca «a una valencianidad que siempre les había
cobertura que salva vidas. Si algo queda es un fondo de esperanza melancólica quedado lejos». Así, los flirteos suponían también un «cruce lingüístico». De
al que el narrador no renuncia nunca: estamos irremediablemente perdidos hecho, el aspecto lingüístico es uno de los puntos fuertes de la novela. Descu-
como perdidos están aquellos que compiten por un puesto de trabajo en el que brimos un festival de expresiones autóctonas, los barbarismos que más cir-
está en juego la vida, como están perdidos los hermanos que se escriben cartas culaban, un catalán meridional tan efervescente como alejado de los diccio-
tratando de explicarse el uno al otro sus propios mundos, sí, perdidos, pero en narios y las gramáticas. En este sentido, Zafón se alinea al lado de autoras co-
«el templo de la ficción» contar lo que somos es lo que nos queda. No es poco. mo Marta Rojals y Maria Climent que exploran la riqueza del registro oral.

Luis López Emma Zafón


Carrasco
12
7 DE DICIEMBRE DE 2023

abril SUPLEMENTO LITERARIO


DE PRENSA IBÉRICA

Jaccottet
me da la vida
Su extraordinaria sensibilidad, una
capacidad de observación justísima
y su fino sentimiento de la lengua lo
convierten en poeta, filósofo y sabio

ENTRE EL CIELO Y EL AGUA, LA poeta muerta trágicamente como


LÍNEA DEL HORIZONTE, NADA Ingeborg Bachmann; contarnos
MAS. Escribir es construir con la punto por punto los numerosos
precariedad de la lengua un reser- sueños y pesadillas que atraviesan
vorio frágil para guardar la inquie- sus noches, citar escritores, filóso-
tud de pensar, las ausencias de la fos, sabios con las frases exactas
razón, la naturaleza imprevisible de que le servían para iluminar su iti-
las horas, las agitaciones sexuales, nerario o describir por qué le hacía
la belleza de las cosas, la desazón y llorar la Sonata para piano en sí be-
las batallas del amor, las rabias y los mol mayor de Franz Schubert en la
llantos, la dulzura de vivir. interpretación de Clara Haskil; des-
tacar la finura de Nuno Judice
PHILIPPE JACCOTTET, UN cuando nos cuenta la misteriosa
MAESTRO. Lo conocí en uno de metamorfosis de la pérdida o la in-
mis viajes juveniles a París con uno vención de una metáfora sobre la
de sus primeros carnets de notas almendra como una concha de ma-
de esa serie que ha titulado La se- dera llena de poros. Philippe Jaccottet, poeta y traductor suizo que vivió afincado en Francia.
maison (Gallimard) y que no ha pa- Cuando en 2014 salieron sus
rado de escribir a lo largo de su vi- Oeuvres (Gallimard) en un volumen
da. La semaison es la dispersión na- de 1.603 páginas en la Bibliothèque En 1900, el restaurante tomó dres. La mezcla y el mestizaje de
tural de las semillas de una planta, de La Pléiade fui feliz. Y por añadi- partido y se vistió con el arte emer- géneros le lleva a combinar el dul-
y en su obra es él mismo quien nos dura esta publicación era un privi- gente: el art nouveau. La caoba, los ce y rítmico Falling in love del gru-
da todas sus semillas a lo largo de legio, porque solo 15 autores vivos adornos de cobre, los espejos bise- po Shazz con el salsero y caribeño
una existencia, todas sus lecturas, han podido ver publicada su obra lados, los decorados de lianas, de Son al sueño de la Orquesta Ara-
todos sus paisajes, todos sus auto- completa. Mi amigo, editor y poeta hojas, de flores o de tallos estiliza- gón, que el clásico de los 60 Mo-
res, todos sus latidos más claros. Y Antoni Clapés ha sido el introductor dos vistieron desde el salón de la liendo café sea interpretado en
lo hace de una manera tan simple y y traductor de seis libros de Jacco- entrada hasta el gran salón lleno de versión melódica por Omar
sencilla que te enamora, con una ttet al catalán. Los libros traducidos hojas de castaño. Una gran vidriera Bashir, y el Bacalao salao, por unos
muestra de una sensibilidad ex- son Rèquiem (Cafè Central-Eumo BIEL MESQUIDA lateral cortada y pegada con capas electrónicos Sidestepper. Confie-
traordinaria, una capacidad de ob- Editorial), A la llum de l’hivern superpuestas que representaban re músicas étnicas tan alejadas
servación justísima y un senti-
miento de la lengua tan fino que le
(Lleonard Muntaner Editor), El
passeig sota els arbres (Días Conta-
Cuaderno flores de adormidera, nenúfares y
umbelíferas en las aceras de un río
como la arabesca L’histoire de
Cheb Tarik y la andaluza Frontera
convierten en un maestro que es a dos), L’ignorant. Poemes 1952-1956 de notas daba a la luz del restaurante la cali- del ensueño de Rey de Copas.
la vez poeta, filósofo y sabio. Jacco- (Lleonard Muntaner Editor), Aires dez de un acuario de aguas color de En cuanto a Félix, empezó en
ttet es un sensible de verdad y toda (Cafè Central-Eumo Editorial) y ámbar, de fondo vegetal y selvático. 1995, cuando en el Festival de Cine
su obra está impregnada de una Quadern de verdor (Adia). Jaccottet En 1981, el modisto Pierre Car- de Cannes puso música a una fies-
hiperestesia que le lleva a estar era también un magnífico traduc- la historia de este restaurante míti- din compró el Maxim’s y lo con- ta de Wim Wenders. El creador de
atento a las más escasas palpita- tor creador. Entre las obras que ver- co de la Rue Royale, 3 de la capital virtió en un lugar vivo que atraía a moda Éric Bergère le confió la ves-
ciones del tiempo, a las vibraciones sionó en francés se encuentran la francesa. En 1852 era una heladería una clientela joven, prestigiosa y timenta sonora de sus desfiles y
más claras del espíritu. Odisea de Homero, la poesía de de un tal Imoda. Maxime Gaillard lo cosmopolita del mundo de la cul- también Paul & Joe y Jean-Paul
Esas libretas llenas de notas son Friedrich Hölderlin y las obras transformó en restaurante, Ma- tura, las finanzas, la moda y la po- Knott. Su disco de Maxim’s crea,
un tesoro continuo de hallazgos, completas de Robert Musil y de Ra- xim’s et George’s, y se convirtió en lítica. Inauguró unos rendez-vous sobre todo, atmósferas sonoras
unos libros de poemas, unas for- iner Maria Rilke. A pesar de haber lugar de encuentro de los cocheros. que comenzaron con Carolina de con músicas de percusión, cantos a
mas rizomáticas de literatura sin- muerto a los 95 años en 2021, han En la primavera de 1893, Irma de Mónaco y Mick Jagger. Dentro de capela, funk y jazz. Me entusiasma
gularísima que encuentro extraor- salido dos libros inéditos suyos, La Montigny, que acababa de dejar con este new look, Cardin creó los Vier- la voz de Martha Cinader en Lasting
dinarias: conjugar la descripción de clarté Notre-Dame y Le dernier livre mucho revuelo el Café de París, ba- nes de Maxim’s, unas cenas gas- y el grupo Crackpot interpretando
un paisaje revelador con unas notas de madrigaux (Gallimard). ¡Leed a jó a pie, acompañada por Antoine tronómicas con un ambiente de Heavy flowers. Turtle E’s de La Ta-
sobre Bashô y la traducción de tres Jaccottet y os ayudará a vivir! de Contades, la Rue Royale y ambos fiesta en el que ponían banda so- verne du Lac es música dance de
haikus suyos; comentar una revis- empujaron la puerta de la sala de nora dos DJ: Albert de Paname, fi- lujo y One night Samba de Tim Love
ta como Hermès números 1 y 2 o la MAXIM’S. Maxim’s de Paris es un aquel restaurante popular lleno de gura emblemática de la noche pa- Lee podría ser música contempo-
Oda en otoño de John Keats y unos conjunto de dos cedés que contie- humo y gente. Ella quedó fascinada risina que ha hecho bailar a varias ránea. ¡Placeres sonoros!
versos de Giacomo Leopardi; hacer nen 15 y 14 canciones de cantantes y por el sitio y el propietario. Cenaron generaciones, y Félix.
un obituario sentido y de verdad de grupos muy diversos que han sido como reyes y prometieron volver. Albert de Paname empezó en Biel Mesquida es escritor. Su último
un amigo como Jean Paulhan, de un mezclados por dos magníficos DJ: Todo el París de la belle époque des- 1964 en el Tabou y pasó al mítico libro publicado es Passes per Palma
pintor como Pablo Picasso o de una Albert de Paname y Félix. Me gusta cubrió entonces el Maxim’s. Balajo y al Café de París de Lon- (Vibop Edicions, 2023).
13
7 DE DICIEMBRE DE 2023

abril SUPLEMENTO LITERARIO


DE PRENSA IBÉRICA

Tirar los trastos año 2000 en uno de los estribillos


más pegadizos de la música de
los años noventa y del que hasta
Nick Cave se enamoró y terminó
‘Buen pop, mal pop’ son unas originalísimas memorias de Jarvis Cocker versionándola. Es una de las can-
ciones de Different Class (1995), el
disco más aclamado de la banda y
Mi madre ha sido siempre una en el que está la famosísima
gran economista del lenguaje. Common People, un estandarte
Para mi madre, un juguete era un del buen pop y un himno de la
trasto, la tostadora era un trasto conciencia de clase (o retrato de
más en la cocina, mi habitación las pijas, según se mire) también
siempre estaba llena de trastos; basado en las memorias de
para ella, ahora, mi salón está Cocker, la historia de aquella
lleno de trastos. Mi madre se compañera griega y rica que es-
queja de mi tendencia al trasto, tudiaba con él en la prestigiosa
pero mi madre debería estar LAURA BARRACHINA escuela de arte Central Saint
agradecida por no tener como hi- Martins de Londres y que quería
ja a Jarvis Cocker. hacer una inmersión y conocer a
El músico británico, uno de los Alta fidelidad «la gente normal», vivir la aven-
padres del britpop y estiloso icono, turilla de no llegar a fin de mes y
ha vivido a lo largo de sus sesenta Cocker le acaba gritando, básica-
años recién cumplidos en muchos mente, que pasar hambre no tie-
países y ha tenido varias casas, nial, un señor de Sheffield en tra- ne nada de emocionante.
pero solo en una tenía un desván je y corbata siempre, un señor Ya conocíamos bastante de
donde iba acumulando esas cosas con gafas de pasta muy culto de El músico británico Jarvis Cocker. Jarvis por sus letras, como esa Li-
que mi madre llamaría trastos y verdad, sino un magnífico escri- ttle Girl (1985) que habla de su
los nostálgicos, recuerdos. tor de canciones y de libros. A pop con sus fotografías de los ob- banda que creó con sus amigos madre. Se la compuso cuando
Un día, Jarvis se vio obligado a medida que Cocker iba sacando jetos y sus juegos tipográficos, en del colegio y que marcó un antes cumplió la misma edad con la
vaciar ese desván y, según iban objetos del desván se preguntaba realidad son unas originalísimas y un después en la música preci- que ella se quedó embarazada de
saliendo objetos, su memoria se si debía tirarlos o guardarlos (qué memorias del músico. samente con letras en las que hay él sin querer, la letra fue un poco
desataba, porque eso de la me- suerte tuvo de que mi madre no Con la excusa de encontrarse mucho de memoria y nostalgia. escandalosa y con la excusa de

K
moria es un tema complejo y pasara por allí) y se le ocurrió que un paquete de chicles antiguo, No he podido evitar leer este encontrarse una foto la cuenta en
apasionante, pero lo resumiría podía ser divertido convertir ese una cassette de Barry White o inventario escuchando de fondo el libro, otro trasto de tapa dura
en que sin objeto de memoria no escrutinio en un libro que acaba una pastilla de jabón, Cocker va canciones como Disco 2000, en la más que no saldrá de mi salón, ya
hay memoria, llámalo recuerdo, de publicar Blackie Books en describiendo a su familia, su ori- que Jarvis Cocker le habla a una está en mi inventario.
llámalo trasto. nuestro país bajo el título de Buen gen social, aquel Sheffield pobre- primera novia con la que todos
El líder de Pulp ha demostrado pop, mal pop. Un inventario que, tón de su infancia, su pasión por creían que acabaría casándose y Laura Barrachina es periodista,
no solamente ser un músico ge- disfrazado de inocuo artefacto la ropa o el nacimiento de Pulp, la se pregunta qué será de ellos en el directora de El Ojo Crítico de RNE.

El deseo de
Jorge Luis Borges dijo que siempre ferencia es que entonces era un mal de finitud. Quizá, por eso, la medida
imaginó que el paraíso sería algún que atacaba a un grupo reducido y de la lectura no debe ser el número
tipo de biblioteca. Joan Margarit es- ahora nos afecta a todos. «Todas las de libros leídos, sino el estado en

saberlo todo
cribió que la libertad era una libre- personas que utilizan un smartpho- que nos dejan. ¿Qué importa si uno
ría. Me gusta pensar que ambos tie- ne tienen que responder a retos si- es culto, está al día o ha leído todos
nen razón, pero en estos tiempos de milares a los que se enfrentaba un los libros? Lo que importa es cómo
excesos, de librerías y bibliotecas bibliotecario del siglo XVI». se anda, cómo se ve, cómo se actúa,
descomunales, no siempre hallo
placer en el acto de elegir; entre tan-
No siempre hallo placer en el acto Gabriel Zaid, en Los demasiados
libros (Random House, 2010), tam-
después de leer. Si la calle y las nu-
bes y la existencia de los otros tienen
tas opciones me pierdo y no siem- de elegir, entre tantas opciones no sé bién se cuestionó acerca de cómo algo que decirnos. Si leer nos hace,
pre sé qué caminos quiero recorrer.
Esa ansiedad ante la sobreabun- siempre qué caminos quiero recorrer defenderse ante la avalancha de li-
bros que ya percibía en 1972, cuan-
físicamente, más reales».
Cuando entro en una biblioteca o
dancia es un mal de nuestro tiempo, do se publicó la primera edición. «¿Y una librería, más que el deseo de sa-
pero no solo de este. Xavier Nueno para qué leer? ¿Y para qué escribir? berlo todo, sigo manteniendo la es-
acaba de publicar El arte del saber li- Después de leer cien, mil, diez mil peranza de descubrir algún libro
gero (Siruela), una breve historia del libros en la vida, ¿qué se ha leído? que dé respuesta a algo en lo que
exceso de información que explora Nada. Decir: Yo solo sé que no he aún ni siquiera he pensado. Entre
el papel de las bibliotecas a lo largo leído nada, después de leer miles de tanta reseña y tanta crítica, hacer
del tiempo y que tiene que ver con la libros, no es un acto de fingida mo- descubrimientos plenos es casi im-
obsesión por conservarlo todo. Ese destia: es rigurosamente exacto […]. posible, eso solo me puede ocurrir
empecinamiento ha hecho evolu- Pero ¿no es quizá eso, exactamente, en lugares donde mi mirada no se
cionar el concepto de biblioteca (sin socráticamente, lo que los muchos pierde en la inmensidad de los pisos
los primeros ficheros no habríamos SARAY ENCINOSO libros deberían enseñarnos? Ser ig- llenos de estanterías; en aquellas li-
llegado hasta aquí) y ha incidido en norantes a sabiendas, con plena brerías o bibliotecas que son limita-
la definición de creatividad. «En un aceptación. Dejar de ser simple- das y que deben elegir qué me ofre-
mundo obsesionado por el exceso En puntas de pie mente ignorantes, para llegar a ser cen. Solo esos espacios pequeños,
de información, convencido de que ignorantes inteligentes». reducidos, acotados, pueden orde-
todo ha sido dicho, la creatividad no Ahora que llega diciembre y em- nar el mundo. Y eso es lo que yo les
reposa ya en el mito romántico de pezamos a escribir nuestras listas pido: que me salven del caos.
una palabra original y soberana, si- Pero Nueno precisa, además, de libros leídos, recuerdo lo que
no en el arte de organizar, seleccio- que ese crecimiento descontrolado también decía Zaid: «Quizá toda Saray Encinoso es periodista y
nar, reducir y sintetizar lo que otros de libros e información ya lo sufrie- experiencia de infinitud es ilusoria, escritora, autora de El año que no
han producido», escribe. ron otros antes que nosotros; la di- Torre de libros en Praga. si no es, precisamente, experiencia viajé a Buenos Aires (2021).
14 - 15
Seguir la moda Era viernes. En el escenario, Jowa
nos invitó a brindar con el vino de He venido a hablar
de rebote. No sabía nada del libro, y
una tarde cualquiera empezó a

de Urueña Les iaies, el salto al vacío de dos


hermanas brillantísimas que ho- de mi libro
leerlo. «Cuando terminé –me dijo–
supe que ya no podía volver atrás».

y Calonge menajeaban a una abuela que no


conocieron, trabajando su tierra REGINA RODRÍGUEZ SIRVENT
«¿Y por qué lloras?». «Porque
siempre quise marcharme a vivir
para hacer aceite y vino. Entre el fuera y no lo hice. Estudié Matemá-
público había gente repartida por ESCRITORA ticas». (¡Matemáticas! ¡Increíble!).
muchas etapas de mi vida. A una de «Y ahora trabajo en finanzas y ten-
ellas, Helena, no la había visto des- go 25 años y soy demasiado mayor,
de 2008, cuando nos encontramos demasiado mayor para irme».
en el The Art Institute of Chicago. Era viernes y Júlia lloraba por-
Yo no sabía quién era pero, como si que tenía 25 años y llegaba tarde a la
me conociera de toda la vida, me vida. Fuera, el sol iluminaba el llan-
preguntó cuándo enviaría el si- to de los viñedos. El lunes, esta ma-
guiente mail. «¿Perdona?». «Sí, los temática brillantísima de 25 años
leemos en el aula de informática, dejó su trabajo financiero para ser
ÁLEX SÀLMON todas las amigas. Nos han echado au-pair en Irlanda.
DIRECTOR DE ABRIL más de una vez, por reír».
Estábamos delante de Tarde de
domingo en la isla de la Grande Jatte Las bragas al sol

M
de Seurat. Y acompañadas de aquel Les calces al sol
La Noche de la Edición, organizada por el grupito de gente adinerada con tra- Regina Rodríguez Sirvent
Gremi d’Editors de Catalunya, dio buenas jes incomodísimos pasando el do- Suma / La Campana
noticias. El sector editorial sigue bien. Este mingo bajo las sombras del verano, 460 / 464 páginas. 21,90 / 20,90 €
«bien» es lacónico y escueto, pero
claro. Las ventas ni se triplican, ni Escribo estas palabras en una
se doblan, eso que convence a los mesa redonda del Roseta, un bar-
responsables de una cuenta de re- casa de la Barceloneta con un pas-
sultados. Sin embargo, la progre- tel de zanahoria que hace cantar a
sión se mantiene razonable. Esta- los ángeles. Le envío un wasap a

Nunca imaginé
mos hablando del libro de papel. Júlia. «Tía, ¿cómo estás? ¿Qué ha-
De ese material que, según algu- ces?». Tarda en contestar y, cuando

que llegaría a existir una


nos gurús hace unos 10 años, esta- lo hace, me envía un vídeo de esos
ba llamado a desaparecer. que solo puedes ver una vez. Apare-
Las noticias son buenas tam- ce Sally, una pequeña de 3 años que
bién para el libro en catalán. Du-
rante estos años de subidas en el
Júlia y una Sally y su ríe y da saltitos como una niña de
película. «Sally! Say hello to Regina!».
castellano, la lengua de Ramon
Llull se había quedado estancada. unicornio irlandés Sally me dice hello y me enseña un
unicornio de peluche. Y a mí me en-
Las cifras de 2023 marcan un incremento MISCELÁNEA tra una especie de vértigo universal,
ÓSCAR BAYONA
del 12%. Algunas fuentes del sector relacio- porque Júlia me dice que nunca ha-
nan ese aumento con que, durante este año, Helena se convirtió, sin saberlo mano. Sin embargo, pensaba en el pel verde menta manoseado. Cogía bría conocido a Sally si no hubiera
se habría casi solucionado el problema de la ninguna, en el clímax de la novela aceite. ¿Qué porcentaje de arbequi- el libro con familiaridad, dominan- leído mi libro. Y yo pienso en el día
distribuidora Entredos, que nació de la fu- que escribiría años después. El per- na? Me obsesiona el aceite de oliva. do su tamaño y peso y las posibili- en que me senté en ese bar y empe-
sión de Les Punxes y Àgora, esta última de sonaje también se llama Helena, Arbequina bitch, siempre. Para fir- dades de movimiento según todos cé a escribir. Así como quien no
Enciclopèdia Catalana. La cuestión es que pero, en vez de hablar ante el pun- mar los libros de la buena gente que los ángulos. Lo había leído rápido. Y quiere la cosa. Nunca imaginé el
las cosas van mejor y eso es lo que cuenta. Si tillismo de élite, habla con Rita en había venido, me pusieron una lloraba. La chica sonreía. año que he vivido. Ni que llegaría a
a ello le añadimos los magníficos niveles de Atlanta, ante la casa de Martin mesa en una hermosa sala de pie- Tras más de una hora, cuando existir una Júlia y una Sally y su uni-
ventas que ofrecen los libros de papel fren- Luther King. Que es otra clase de dra cálida. Y enseguida me di cuen- ya no pudo evitarlo más, le llegó el cornio irlandés. Y alucino. Y doy
te a los digitales, los primeros un 93% sobre élite. Y no es literal, pero como todo ta de que había una chica que, cada turno. Y cuando las lágrimas la de- gracias. Gracias. Gracias. Zequiu.
la cantidad del 5% de los segundos, más el en la novela es verdad. vez que le tocaba a ella, cedía su jaron, por fin, habló. «¿Sabes eso de PS: También hay un perro lla-
2% de audiolibro, como decía destruyendo Bajé del escenario del Vinseum turno. Tenía el pelo rizado y llevaba que un libro te elige a ti? Pues me ha mado Rita Racons, pero eso ya es
la idea de los futurólogos agoreros, el hori- todavía con la copa de Les iaies en la Las bragas al sol envuelto con un pa- pasado». Las bragas al sol le llegaron otra historia.
zonte es positivo, sin bajar la guardia.
Lo mejor fue descubrir que hay dos pue-
blos en España, Calonge-Sant Antoni en
Girona y Urueña en Valladolid, que tienen Ya saben, porque están muy bien enterados, publicado por Alianza Editorial, grupo edito-
más librerías por habitante que cualquier que el lunes llegó a las librerías Tierra firme, el El mentidero rial independiente y que, por tanto, nada tiene
municipio en la Península. En Urueña, en segundo libro de Pedro Sánchez. Lo saca Pe- que ver con Planeta ni con Penguin, su princi-
concreto, más que bares: una librería por
cada 18 habitantes. No es un chiste. Se ha
nínsula, sello de Planeta que también editó
Manual de resistencia, que fue la primera obra
Entre Sánchez pal competidor. Sarkozy hablará de su libro en
una presentación que tendrá lugar en el Salón
convertido en un aliciente turístico. Es todo
un detalle que habla del buen momento de
publicada por un presidente del Gobierno es-
pañol durante su mandato y a la que dio «for-
y Sarkozy Real del Hotel Mandarin Oriental Ritz a las seis
y media de la tarde. Es decir, que la jornada li-
las librerías de pueblo y de barrio, consoli- ma», que no fondo, la periodista Irene Lozano. terario-política de ese día será muy intensa.
dadas durante la pandemia y que se man- Aún no lo he leído, claro, pero la editorial ven- RIGOBERTA CABELLO Yo no pensaba pasarme por Madrid, porque
tienen. Mejor nos quedamos con esta idea de Tierra firme como una crónica en primera son fechas de mucho lirili de gente y poco lere-
más que con las lamentables cifras del In- persona que abarca hasta la noche electoral del el que Sánchez presentará el libro en Madrid. le de reuniones, pero en cuanto supe lo de Sán-
forme PISA en la comprensión lectora de 23 de julio y aborda la acción de Gobierno, ade- Será el lunes 11, y menos mal que la cita será al chez me compré unos billetes de tren para no
nuestros chavales. Eso, otro día. más de «lo que es posible lograr como nación mediodía, porque ese mismo día, pero por la faltar al que será uno de los saraos editoriales
en el futuro: pasar de la resistencia a esa tierra tarde, Nicolas Sarkozy hará lo mismo con el del año. No sabía entonces la feliz coincidencia
firme que España alcanzará cuando culminen segundo volumen de sus memorias. El que con Sarkozy, así que estoy más contenta que
todas las transformaciones ya en marcha». fuera presidente de la República Francesa ha unas castañuelas. Iré a ambas presentaciones,
Los privilegios que a veces me concede mi elegido la capital española para la puesta de y prometo contarles, con todo lujo de detalles,
profesión han hecho que me entere del día en largo en nuestro país de Los años de las luchas, lo que en ellas acontezca.
7 DE DICIEMBRE DE 2023

abril SUPLEMENTO LITERARIO


DE PRENSA IBÉRICA

Tiempo para leer


Los libros llegaron a la vida de Josefina Vaquero porque
no tenía hermanos. Estudió Letras en la Universidad de
Buenos Aires para entender K toda la parte teórica y, al
mismo tiempo, Periodismo para practicar escribiendo.
Entró en el mundo del libro trabajando en la Biblioteca
NATALIA EYRE
Nacional de Argentina, en la revista institucional Cuader- LICENCIADA EN BELLAS ARTES,
no de la Biblioteca: «Íbamos por cada sector de la biblio- PINTORA, DISEÑADORA DE MODA,
teca a ver qué novedades había, qué archivos entraban ESTILISTA Y BUENA COCINERA SON
nuevos, qué hacía el equipo de investigación», recuerda. ALGUNOS DE LOS ATRIBUTOS QUE LA
Tras cinco años, su interés por todo lo que pasa desde un CONVIERTEN EN UN PERSONAJE
manuscrito hasta que el libro se materializa la llevó a la RENACENTISTA QUE, ADEMÁS, LLEVA
UN APELLIDO LIGADO A LA LITERATURA.
editorial Ampersand. «La había conocido en la feria del
libro, igual que a otras pequeñas». Empezó en el equipo
de edición y corrección, para heredar después su actual
cargo «que consiste en acompañar ese libro una vez que «En este mundo
Los otros oficios del libro se publica, después del proceso infinito». En Ampersand
se encontró con el desafío de defender colecciones «muy de pusilánimes no
JOSEFINA VAQUERO
minuciosas de la forma al contenido, muy de nicho, so-
bre historia del libro, moda, sociología... que hay que te- se puede entender
REPRESENTANTE DE COMUNICACIÓN
Y PRENSA DE AMPERSAND EN ESPAÑA
ner ganas de leer». Para llegar a más gente, aunque nun-
ca aspirando a algo masivo, su truco es el entusiasmo, «ir a una Tía Tula»
a la historia pequeña para interpelar desde ahí, crearle un
himno a cada libro que se pueda transmitir a los libreros, ANNA R. ALÓS
«Creo un himno a cada los periodistas, en las redes, y tener la chispa para que se
acuerden de vos». Para asentarse en un mercado edito-

libro y lo transmito a rial «atiborrado» como el de España, han buscado los lu-
gares que faltan por explorar y despertar cualquier curio-
— ¿Me aconseja algunos títulos de su estantería?
— Pues La Tía Tula, de Miguel de Unamuno; Guerra

libreros y periodistas» sidad en el lector, lo que ella siente como «la magia abso-
luta de trabajar en cultura». CARMELA GARCÍA PRIETO
y paz, de León Tolstoi; Pedro Páramo, de Juan Rulfo;
El arte del buen vivir, de Arthur Schopenhauer, y Cien
años de Soledad, de Gabriel García Márquez.
— La Tía Tula, un personaje algo sombrío, ¿no?
¿Por qué le llama la atención?
— La que es sombría es Rosa, la hermana de Tula.
Me sorprendió por su carácter, por su lógica, por su
fortaleza, ella va a lo que va sin recovecos, con na-
turalidad.
— ¿Cree que hay hoy lectores para una novela de
este calibre?
— En este mundo de pusilánimes no se puede en-
tender a una Tía Tula.
— Cien años de soledad... ¿cuál fue el impacto?
— Leer esa novela fue una experiencia mágica. Des-
pués leí Pedro Páramo, la primera novela de Juan
Rulfo.
— Realismo mágico en el auge franquista. No es-
taba bien visto.
— Su obra es única, genial, inédita, ¡es brutal! Hay
que meterse en Comala, ese pueblo de las almas en
pena que pululan el silencio, la nada de nada. ¡Su-
rrealista! Rulfo es un gran escritor.
— El arte del buen vivir, de Arthur Schopenhauer,
un manual para vivir lo mejor posible.
— El autor sabe del buen vivir desde pequeño, su
educación es exquisita, viajando por Europa asiste
a los lugares más bellos y se empapa de cultura, de
pintores, escritores, músicos, filósofos.
— Era un pesimista nato.
— Sí, porque cree que la felicidad no existe, pero di-
ce que se puede alcanzar a través del arte.
— ¿Tiene un libro fijo en la mesita de noche?
— Confesiones, de san Agustín. Me lo regaló mi ma-
dre. El protagonista es un hombre pecador y luju-
rioso que lucha por el saber más profundo, por la
verdad, por que Dios se acerque a él. Su madre, san-
Heredera de la librería Escolar, que fundó su padre con tres amigos hace 50 ta Mónica, con años de plegarias y llantos consigue

Librerías años, L’Altell y su librera, Irene Tortós-Sala, son fruto de un intercambio de


favores. Ella acababa de tener mellizas y su padre le propuso que se quedara
que su hijo se convierta al cristianismo.
— ¿Suele releer un libro si le gusta?
la Escolar y él abriría L’Altell. A finales de 1991 cerraron la antigua librería, de- — Sí, con frecuencia Guerra y paz, El lirio en el valle, de

L’Altell jaron prensa y revistas e Irene se centró en los libros. En 2009 cambió de lo-
cal y se acercó al centro histórico de Banyoles, y hoy es la librería de referen-
Honoré de Balzac, En busca del tiempo perdido, de
Marcel Proust. Tengo anotaciones de los pasajes más
Calle de la Canal, 2 cia de la ciudad y la comarca, a pesar de Girona. «Ha sido una ardua tarea ex- bellos. Y El manantial, de Ayn Rand, qué maravilla.
plicar a la gente que lo que encuentran en Girona lo tenemos también aquí», — ¿Creció rodeada de libros?
17820. Banyoles (Girona)
comenta con un pelín de ironía esta mujer que parece nacida para prescribir: — En casa de mi abuelo, magistrado del Tribunal
«no había pensado ser librera, pero me gusta tratar con la gente». Tiene nue- Supremo y abuelo también de mi prima Pilar Eyre,
ve clubs de lectura (de infantil a inglés), charla no falta. RAFAEL VALLBONA las bibliotecas cubrían paredes enteras.
7 DE DICIEMBRE DE 2023 | NÚMERO 78
Era distinto abril, entonces había alegría y rastro de mejillones en la escollera. | Manuel Vázquez Montalbán
abril suplemento literario de Prensa Ibérica. Director: Álex Sàlmon. Director de Arte: Jorge Martínez. Coordinador: Jacobo de Arce. Redacción: Inés Martín Rodrigo e Inma González. Comité de redacción:
Juan Cruz, Leticia Blanco, Tino Pertierra, Rogelio Fenoll, Nora Navarro, Pilar Garcés, Joan Carles Martí, Salvador Rodríguez, Virginia Guzmán. Diseño: Joel Mercè, Ricardo Villoria y Sara Martínez.

16 Mucho ha llovido, sobre todo en Gali-


cia, pero Ismael Ramos (Mazaricos, A
natural pero vacilante. Y más en abril
de2020».Enplenoconfinamiento,es-
Coruña, 1994) aún recuerda su prime- taba en erte –entonces trabajaba en
ra incursión en la poesía. Tenía 10 años. una librería; ahora es profesor de ins-
«Mi generación fue la primera que su- tituto– y traduciendo Lixeiro. «Era an-
frió la fiebre de las extraescolares. Mis gustioso, porque tenía editorial para la
padres me apuntaron a atletismo, ba- versión en castellano, pero no para el
loncesto, pintura… y nada me gustaba. original en gallego, mi lengua. Me pa-
Hasta que, ya harta, mi madre me dijo: saba el día dándole vueltas hasta que
‘Vas a escribir un poema para este pre- Elena Medel, de La Bella Varsovia, me
mio’». Era el concurso con motivo del dijo: ‘Escribe algo. Lo que sea: un ensa-
Día de las Letras Gallegas que organi- yo, un diario, un relato’. Y escribí un
zaba su escuela. «Como no se me ocu- cuento. Tras recibirlo, me contestó
rría nada, cogí un libro que había por muy resolutiva: ‘Vas a comenzar un li-
casa y copié un poema. Y, claro, gané». bro de cuentos’. Y unos fueron tirando
En su inocencia, lejos de avergonzarse de otros hasta completar el libro».

IDILIO LITERARIO

RAMOS Dos elementos definen La parte fá-


cil. Por un lado, los detalles. «Son parte
de mi estilo. Para mí son un lugar de
consuelo.Enestepasotanasfixiantede
los días, ¿dónde se halla la paz? No en
unas grandes vacaciones, sino en la vi-
sión de unas flores que crecen en la cu-
neta. Pero además son mi manera de
abordar los grandes discursos. La pre-
cariedad, por ejemplo, queda reflejada
INMA GONZÁLEZ
en esas deportivas que tienen que du-
rar todo el año». Y por otro lado, están
los no lugares: las tramas ocurren en
por el plagio, experimentó «una sacu- un coche, el almacén de una tienda de
dida mágica»: «Mi profesor me obligó ropa,unpisoquehayquevaciar…«Son
a leerlo en clase y por primera vez tuve espacios en los que a priori no sucede
la sensación de ser escuchado. Al año nada. Pequeños pero determinantes,
siguiente busqué de nuevo el libro, pe- aunque no determinados, que permi-
ro ya ninguno de sus poemas me gus- ten que el lector se adentre en ellos».
taba. Decidí entonces escribir mi pro- ¿Yparacuándounanovelaenlaque
pia poesía… y volví a ganar». suceda de todo? «Tras más de un año
Ese fue su primer premio como sin escribir algo con cierta entidad,
poeta. El último –o penúltimo, porque tengo muchas ganas, aunque aún no
sujuventudauguraquellegaránmás– sé qué. Es el momento más placentero.
es el Nacional de Poesía Joven, que el Yo lo comparo con el enamoramiento:
Ministerio de Cultura le otorgó hace un cuandoestásempezandounarelación,
año por su obra en gallego Lixeiro (Xe- se acumula un gran deseo de estar con
rais), en castellano Ligero (La Bella la otra persona. Ahora estoy en esa fa-
Varsovia), y que el jurado definió como se de enamoramiento con mis ideas.
«uncantogeneracionalentonadodes- Vivo grandes idilios con mis libros».
de un desencanto reconciliado que
conjuga ironía y nostalgia». La incerti-
dumbre del futuro, la falta de expecta-
tivas, la familia que te abraza y a la vez
te asfixia, la trascendencia de la amis-
tad en el paso a la adultez… son temas
presentesenLigero y ensuspoemarios
anteriores, Lumes (Apiario, 2017) y Os
fillos da fame (Xerais, 2016). Y también
aparecen en su primera recopilación
de cuentos, La parte fácil (en gallego, A
parte fácil,enXerais),queacabadepre-
sentar en castellano y catalán. «Como
escritor y como lector, la literatura me

ISMAEL
ayuda a entender qué lugar ocupo en el
mundo y a la vez a seguir indagando,
porque cada vez que uno aprende algo La parte fácil / La part fàcil
aparecen otras incógnitas, el abismo». Ismael Ramos
Así se sintió cuando empezóA parte fá- Traducción al catalán
cil, al borde del precipicio. de Eduard Velasco
«La poesía es mi hogar. Escribir Las afueras / Angle
prosa era como salir de casa, un paso 184 / 160 páginas. 16,95 euros
XOÁN ÁLVAREZ

También podría gustarte