Música en El Nivel Inicial: Enseñar Desde El Juego: Módulo 4. Repertorio Musical para Las Infancias
Música en El Nivel Inicial: Enseñar Desde El Juego: Módulo 4. Repertorio Musical para Las Infancias
Música en El Nivel Inicial: Enseñar Desde El Juego: Módulo 4. Repertorio Musical para Las Infancias
Introducción 1
Objetivos 2
Contenidos 2
El juego como patrimonio cultural 2
¿Cuál es la importancia de los juegos musicales en la educación infantil? 4
Las Intervenciones docentes 5
¿Cómo utilizar los juegos musicales como una herramienta educativa? 6
¿Qué tipo de materiales seleccionamos para escuchar en la Sala de NI? 6
Un mundo de sonidos por descubrir 11
A modo de cierre 14
Licencia Creative Commons 16
Introducción
Objetivos
● Reflexionar acerca de los criterios de selección de los distintos recursos musicales
que se ofrecen a las infancias.
Contenidos
Los juegos sonoros y musicales. Propuestas para interpelar y ampliar diferentes
repertorios y recursos musicales. Música latinoamericana. Pluriculturalidad. La
intervención docente desde un enfoque sistémico.
A medida que las niñas y los niños manifiestan mayor autonomía en su lenguaje, en sus
desplazamientos y en el dominio en su motricidad en general, encontramos en la
tradición familiar y social juegos que enriquecen el legado cultural (Akoschky, 2017, p.
86).
Es importante destacar que los juegos musicales son actividades que se realizan de
forma grupal y colectiva, lo que estimula a las niñas y los niños a relacionarse con sus
pares e interactuar entre ellos, propiciando la socialización. El juego es un medio de
vincularse con otras y otros, de conocer y aprehender el mundo.
Cada cultura tiene un lenguaje musical propio y una particular manera de utilizar este
lenguaje en el conjunto de sus pautas, costumbres, valores (Aguilar, 1996 en Akoschky y
otros, 2002). Así, alentamos la recopilación y armado de un cancionero que incluya,
también, música de los pueblos originarios en el marco de la interculturalidad y el
respeto a la diversidad; juegos tradicionales y populares, tomados como expresiones
de las memorias y tradiciones propias de distintos grupos y pueblos que se transmiten
oralmente de generación en generación.
A través de las canciones y de los juegos musicales, las y los infantes adquieren
seguridad y confianza en sí mismas y sí mismos, fortalecen destrezas, habilidades,
valores y actitudes que son muy necesarios para el desarrollo y proceso integral
durante los primeros años de vida, ya que potencian la creatividad.
Al cantar, reír y jugar en las rondas, las niñas y niños expresan de modo espontáneo sus
emociones, vivencias, sentimientos e ideas, a la vez que se familiarizan con los juegos y
rondas tradicionales de su entorno. Cantar y mover el cuerpo siguiendo sonidos y
ritmos, permite que las niñas y los niños desarrollen sus capacidades rítmicas. El ritmo
es significativo en el desarrollo de las y los infantes ya que les permite ejecutar danzas,
juegos, canciones, expresarse rítmicamente en el lenguaje oral, que gradualmente será
escrito y estará presente en la lectura y la escritura, y más tarde, al mejorar la
pronunciación cuando separen en sílabas, formen palabras y reconozcan las sílabas
tónicas, además de continuar añadiendo nuevo vocabulario a su repertorio.
De la mano de sus maestras y maestros, los niños y las niñas pueden iniciar un itinerario
lúdico y sensibilizador, cuyo objetivo será el disfrute estético que produce la audición
sonora y musical. Escuchar sonidos y músicas será el objetivo que tendrá a las alumnas
y los alumnos de esta etapa como protagonistas, con sus características, posibilidades e
intereses, será la maestra o el maestro quien seleccionará los distintos objetos
productores de sonidos, juguetes sonoros o instrumentos musicales (Orengo, 2020).
La o el docente es quien permite que las niñas y los niños desplieguen sus propios
saberes, comprensiones, significados; es ser quien pregunta para provocar una nueva
vuelta a eso que se está pensando; es quien genera y coordina un espacio de
intercambio, de escucha, de reconocimiento de otras interlocutoras y otros
interlocutores válidos.
La selección del repertorio de canciones para las infancias trae a la mesa una
problemática en cuanto a los criterios de dicha selección. Estamos en tiempos en los
cuales los medios audiovisuales y los medios digitales nos apremian con una gran
cantidad de posibilidades para ofrecer en las aulas.
Las canciones son uno de los patrimonios culturales más importantes de una
comunidad (Malbrán y Malbrán, 2011, p. 169). Es tarea de las y los docentes colaborar
con las nuevas generaciones desde temprana edad, brindando las posibilidades de
conocer, ampliar y apreciar los diferentes ejemplares del acervo de pertenencia, como
así también, incluir obras de autor por su valor artístico.
Reconocer sus componentes primordiales para pensar una propuesta del aula será labor
docente tanto para una primera instancia de presentación, como para su enseñanza,
interpretación, juego u orquestación (DGCyE, 2022, p. 319).
Para escuchar
Cada canción, al presentarla, necesita una “puesta en escena” (Malbrán y Malbrán, 2011,
p. 170), diseñar un contexto de aprendizaje al enseñarla, despertar el estado de alerta,
de intriga. Es favorable acompañar el juego vocal con instrumentos o climas sonoros
según la propuesta de la letra o con un esquema de movimiento corporal o un juego
rítmico.
La actividad proponía
improvisar y componer
recuperando el “estado de
infancia” desde la inquietud,
desde los gestos espontáneos
y desde una actitud de escucha
sutil dispuesta a la sorpresa y
abierta a lo imprevisto. Un
espacio para ser explorado,
para ser habitado. Habitar
como idea de soñar, componer,
comprender, reconstruir como
Para ver
Las y los invitamos a ver el siguiente video de “La cocinerita”, que es una cueca tradicional de
la Quebrada de Humahuaca, en una versión colectiva realizada por varios músicos del
movimiento de música para niñas y niños (MOMUSI), donde podemos observar diferentes
formas de producir sonido mediante objetos sonoros tradicionales y no convencionales o
cotidiáfonos.
Para las niñas pequeñas y los niños pequeños el trabajo de exploración con los
materiales cotidianos es una fuente inagotable de aprendizaje motriz y perceptivo. Con
diferentes acciones –modos de acción o ejecución–, variando palillos y baquetas, se
producen modificaciones en los sonidos resultantes: otro registro, otra duración, otra
intensidad, otro timbre. La exploración descubre un amplísimo universo sonoro
(Akoschky, 2017).
Para explorar
—¿Duran mucho?
—¿Y si hacemos dos campanarios, uno cerca y otro muy lejos, en el fondo de la sala?
—¿Y si ahora acompañamos una música a la que le queden bien las campanas?
—¿Quién quiere ser el director de la música acompañada por los dos campanarios?
Para concretar esta actividad, la maestra o el maestro habrá reunido suficientes objetos
e instrumentos de metal que puedan producir buen sonido. Necesitó probarlos,
“tocarlos” de diferentes formas y con distintos palillos para conocer diferentes
respuestas sonoras. Esta exploración previa del maestro determinará, en primer lugar,
Asimismo pudo acondicionar el espacio de modo que las alumnas y los alumnos
pudieran utilizar distintos rincones para la conformación de los “campanarios”. Es de
destacar que la escucha sonora es un aspecto relevante a lo largo de esta clase y las
sucesivas. La escucha acompaña todas las actividades sonoras y musicales,
constituyendo el factor más relevante y específico de la educación musical.
A modo de cierre
Akoschky, J. (2017). Música y juego. Música en el nivel inicial. Varios temas, varias voces.
Buenos Aires: Homo Sapiens.
Soto, C. y Violante, R. (2016). Experiencias estéticas en los primeros años. Buenos Aires:
Paidós.
La chancletera:
http://www.imaginaria.com.ar/wp-content/uploads/2011/07/07-Los-Musiqueros-Pe
que%C3%B1o-romance-de-barrio-La-Chancletera.mp3