Aplicaciones de La Microbiología
Aplicaciones de La Microbiología
Aplicaciones de La Microbiología
• Microbiología Médica
Es la rama de la Microbiología que se encarga de estudiar los microorganismos
causantes de enfermedades (patógenos), también se encarga de la prevención y
control de las enfermedades
infecciosas.
Microbiología de Alimentos
Estudia tanto los efectos dañinos como los efectos beneficiosos de los
microorganismos sobre los alimentos. El papel beneficioso incluye el uso de
microorganismos en la preparación de alimentos tales como quesos, salchichas,
yogur, encurtidos, etc. Por otra parte, los microorganismos son responsables de
algunas de las más serias intoxicaciones alimentarias y causan también la
descomposición de una gran variedad de alimentos.
Microbiología Agrícola
Los microorganismos juegan un papel muy importante en la agricultura, tanto desde
el punto de vista beneficioso como perjudicial. La microbiología agrícola estudia
ambos aspectos, entre otros: el papel de los microorganismos en la formación y
fertilización de los suelos, el control de los insectos dañinos para las plantas
mediante el uso de microorganismos, y los efectos adversos sobre las plantas.
Unas pocas como las chlamydias y las rickettsias, son parásitos intracelulares
obligados, desempeñan un importante papel en los procesos metabólicos de la
materia viva, descomponiendo los substratos orgánicos procedentes de las plantas
y de los animales, mineralizándolos y restituyéndolos a la naturaleza para su nuevo
aprovechamiento.
Las bacterias pueden ser útiles o perjudiciales para las personas. Muchas bacterias
viven en y en los cuerpos de personas y animales, en la piel y en las vías
respiratorias, la boca y los tractos digestivo, reproductivo y urinario, sin causar
ningún daño. Estas bacterias se denominan flora saprófita o microbioma. Hay al
menos tantas bacterias en nuestra flora residente como células en el cuerpo. Gran
parte de la flora saprófita es realmente útil para las personas, por ejemplo, ayudando
a digerir los alimentos o al impedir el crecimiento de otras bacterias más peligrosas.
Sin embargo, solo unos pocos tipos de bacterias causan enfermedades son las
conocidas con el nombre de patógenos. A veces, bajo ciertas condiciones, la flora
bacteriana residente puede actuar como patógeno y causar enfermedades. Las
bacterias causan enfermedades mediante la producción de sustancias nocivas
(toxinas), la invasión de tejidos o ambas cosas
En conclusión, las bacterias son organismos fascinantes que tienen un gran impacto
en nuestras vidas. Aunque algunas pueden causar enfermedades, muchas otras
son beneficiosas y esenciales para nuestra salud y bienestar.
Las bacterias pueden causar una amplia variedad de enfermedades. Algunas de las
enfermedades más comunes causadas por bacterias incluyen infecciones
respiratorias, infecciones urinarias, tuberculosis, meningitis, gonorrea, clamidia y
sífilis. También pueden causar enfermedades como la fiebre tifoidea, causada por
la bacteria Salmonella y la sífilis, causada por la bacteria Treponema pallidum.
Además, las bacterias pueden contribuir a enfermedades globales importantes
como la neumonía, que puede ser causada por bacterias como Streptococcus y
Pseudomonas, y enfermedades asociadas con alimentos, que pueden ser causadas
por bacterias como Shigella, Campylobacter y Salmonella.
Algunos alimentos tienen más probabilidades que otros de contener microbios que
pueden enfermarte. Estos alimentos incluyen:
Los alimentos crudos y poco cocidos provenientes de animales, como las carnes, el
pollo y otras aves, los huevos, la leche cruda (no pasteurizada) y productos
elaborados con ella, y los pescados y mariscos.
Las verduras crudas, los granos y las frutas y productos elaborados con ellas, por
ejemplo, las verduras de hoja verde, los germinados y la harina.
Aunque estos alimentos tienen más probabilidades que otros de contener microbios
dañinos, cualquier alimento se puede contaminar a lo largo de la cadena de
producción alimentaria, que incluye la contaminación cruzada en la cocina. Seguir
cuatro sencillos pasos en casa — limpiar, separar, cocinar y enfriar — puede ayudar
a protegerte a ti y a tus seres queridos.
Hay varias señales que pueden indicar si un alimento está contaminado con
bacterias. Algunas de estas señales incluyen: