El Comercio en La Edad Antigua
El Comercio en La Edad Antigua
El Comercio en La Edad Antigua
El Trueque
Una vez que las sociedades se organizaron de tal forma que pudieron satisfacer sus necesidades
básicas, fue posible que los bienes y servicios producidos por una sociedad fueran intercambiados
con otra. Este suceso fue resultado de la división del trabajo, pues cada individuo y sociedad pudo
especializarse en la producción de determinados bienes, los cuales serían intercambiados
posteriormente por otros no producidos por un individuo o al interior de una sociedad.
En un principio, el intercambio tenía por objeto el consumo, pero con el paso del tiempo, el truque
se hizo más complejo de tal forma que el intercambio ya no sólo tenía por objeto satisfacer una
necesidad básica de alimento o vestido, sino que además se podía realizar con el propósito de
obtener una ganancia. Es en este momento en el que se hizo necesaria una unidad común de
intercambio, dando como resultado a la moneda.
La moneda
Por esta razón, el derecho mercantil tal como lo entendemos actualmente no existió durante la
Edad Antigua, pues ninguna sociedad desarrolló un conjunto de normas sistematizadas con el
propósito exclusivo de regular a las relaciones comerciales tal como sucede en la actualidad.
Préstamo a la gruesa Al igual que la echazón por avería, el préstamo a la gruesa también
era un mecanismo jurídico para hacer frente a los riesgos que comúnmente se corrían en
el comercio marítimo. El préstamo a la gruesa consistía en un con trato por medio del cual
una de las partes se obligaba a entregar una suma de dinero a otra, ésta última a su vez se
obligaba a devolver el principal más intereses al finalizar el viaje, sólo si su regreso era
exitoso. Si la embarcación no regresaba como consecuencia de una catástrofe, entonces la
obligación de regresar el principal de la suma prestada más intereses quedaba extinguida.
La caída del Imperio Romano marca el inicio de la Edad Media. Esta época se caracterizó
por la confusión, la inseguridad y la violencia. El territorio europeo quedó fragmentado
como consecuencia de las constantes invasiones de los bárbaros. El feudalismo surgió
como una alternativa. El feudalismo nació como un sistema político en el que el señor
feudal garantizaba la seguridad de sus siervos al interior del feudo pues los monarcas eran
incapaces de proteger a sus propios súbditos. El feudalismo también implicó una forma de
organización social dividida en nobleza, clero y el pueblo llano. Asimismo, el feudalismo se
constituyó como un sistema económico caracterizado por la producción para el
autoconsumo.
Debido a la falta de un marco jurídico adecuado para resolver los conflictos derivados del
ejercicio del comercio, los comerciantes medievales se organizaron en gremios de acuerdo
a su industria. Los gremios dictaban sus estatutos teniendo como base los usos que regían
su actividad. Para la solución de los conflictos se instituyeron tribunales que aplicaron
dichos estatutos. El derecho mercantil surgió precisamente en este momento histórico,
pues las normas consuetudinarias de los gremios fueron un sistema de normas
diferenciadas que regularon específicamente la actividad de los comerciantes. Como
ejemplo de estas normas podemos mencionar al Consulado del Mar del siglo xiii.
Evolución del derecho mercantil
Edad Moderna
Renacimiento
Una vez que se consolidó el Estado-nación, los estatutos fueron reemplazados por leyes
expedidas por los soberanos, pues éstos eran quienes tenían la facultad exclusiva de
expedir leyes. El surgimiento del Estado-nación significó la centralización del poder en el
soberano (monarca) y como consecuencia, el soberano era quién estaba legitimado para
crear normas válidas. Es por esta razón que la costumbre perdió importancia frente a la
ley durante esta época. No obstante, es necesario tener en mente que las leyes expedidas
por los monarcas fueron resultado de las prácticas comerciales que se habían desarrollado
con anterioridad. En este sentido, la costumbre como fuente del derecho aparentemente
perdió importancia frente a la ley pero siguió dando contenido a las normas jurídicas.
Los cambios sufridos por el derecho mercantil a partir del Renacimiento culminaron con la
Ilustración. Este movimiento del pensamiento fue resultado de la revolución científica de
la época, del aumento del poder del Estado y del ascenso de la burguesía como clase
social. La Ilustración propuso a la razón como valor supremo y base del conocimiento; la
tradición y la religión perdieron legitimidad como fuente del conocimiento y eje de la
realidad social, económica y política; por otro lado, se exaltaron la libertad y la igualdad.
Las ideas de la Ilustración dieron lugar al movimiento de la enciclopedia, el cual consistió
en un esfuerzo por compilar y divulgar todo el conocimiento obtenido hasta el momento.
Este movimiento culminó con la Revolución Francesa de 1789. Durante este periodo, el
derecho mercantil sufrió una transformación, pues se abandonó la idea del derecho
mercantil como normas que rigen a una clase social. El derecho mercantil se replanteó
como un sistema de normas que regulan una actividad sin tomar en consideración la
profesión de los sujetos que la realizan. La doctrina explica esta transformación como un
cambio de un criterio subjetivo, es decir, el comerciante, a un criterio ob jetivo, es decir,
los actos de comercio. En cuanto a la forma, el derecho mercantil también sufrió cambios,
pues, al igual que con la enciclopedia, se elaboraron códigos de normas en un esfuerzo por
sistematizar la legislación por materia y reunirlas en un solo ordenamiento.
Siglo xx
Globalización
Situación actual