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JUS SEMPER LOQUITUR

Obra: “Taciturno”, 80 X 120 cms, Mixta sobre lienzo, 2015
Manuel Reyes
La Interculturalidad en el Siglo Xxi:

Una Estrategia Pertinente Dentro
del Sistema Penal Acusatorio
Dr. Neptalí Ramírez Reyes
Sumario: I. Introducción, II. La interculturalidad y el co-

nocimiento jurídico preventivo en México, III. El paradig-
ma de la interculturalidad, IV. Sistema Penal Acusatorio e
innovación paulatina, V. Conclusiones, VI. Resumen.
Doctor en Antropología Social y Cultural por Universitat Autónoma de Barcelona (UAB).

Maestro en Investigación Etnográfica, Teoría Antropológica y Relaciones Interculturales
(UAB) y Licenciado en Psicología por la Universidad Iberoamericana-Puebla. Miembro
del Sistema Nacional de Investigadores (SNI), Nivel I, del CONACYT. Ha sido asesor
en política educativa en la Dirección General de Educación Indígena (DGEI) de la
Subsecretaria de Educación Básica. Coordinador de la Red de Investigadores Indígenas
Mexicanos. Actualmente, es asesor del Centro de Promoción y Defensa de los Derechos
Humanos Joel Arriaga Navarro.
117 Jus Semper Loquitur

DR © 2013. Tribunal Superior de Justicia del Estado de Oaxaca, Escuela Judicial
https://ej.tribunaloaxaca.gob.mx/Contenido/Paginas?layout=2&id=7
TRIBUNAL SUPERIOR DE JUSTICIA DEL ESTADO DE OAXACA
I. INTRODUCCIÓN
En nuestros días, la interculturalidad no constituye única y
literalmente una relación entre culturas (como si las culturas se
relacionaran de manera solitaria) como académicamente se suele
definir. Contrario a esta visión literal, la interculturalidad significa
en el siglo XXI, dinamismo, interacción, intercambio, conocimiento
y desarrollo mutuo entre personas diferentes social y culturalmente
que evidencian o externan de forma cotidiana subjetividades distintas
que, incluso, pueden ser diferentes, desiguales, discrepantes y hasta
antagónicas. La subjetividad, es una parte del bagaje cultural que se
visibiliza cuando la persona socializa su modo de pensar, de sentir,
de vivenciar y construir su mundo.
En tal sentido, la diversidad social entraña un capital

cultural en México. El capital cultural contiene recursos manifiestos
e inmateriales que pueden enriquecer a las instituciones y
contrarrestar la indefensión legal que vive cotidianamente la
ciudadanía.
II. LA INTERCULTURALIDAD Y EL CONOCIMIENTO

JURÍDICO PREVENTIVO EN MÉXICO
La interculturalidad se descubre y se construye justo en el
momento en que, cada persona y cada sociedad configuran cierto
grado de conciencia de la contingencia, es decir, de lo que puede o
no suceder. Y lo que puede suceder, en su sentido positivo, parte del
capital cultural que se tiene cada sociedad. Por un lado, el capital
cultural es entendido como un “activo que incorpora, almacena o
genera valor cultural más allá del valor económico que posea”1 y
puede existir bajo tres modalidades: interiorizado, institucionalizado
u objetivado y, se transmiten a través de un proceso de formación.2
Así podemos abstraer, en la diversidad social de México, un
..........................................................................................
1
PALMA Martos, Luis. Diccionario de Teoría Económica, Editorial del Economista, Madrid,
página 33
2
VÁZQUEZ García, Francisco. Pierre Bourdieu. La Sociología Crítica de la Razón, Montesino,
Madrid, 2002, página 97-98.
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dinámico capital cultural tangible e intangible, en el que la cultura

de la honestidad y de la legalidad prevalece y coexiste con la cultura
de la corrupción y de la deshonestidad.
El capital cultural en México es fuerte, pero distante de

las instituciones. Por esta razón no se ha podido personificar en
liderazgos ni insertar dentro de la estructura institucional para
transformar el sistema jurídico mexicano y situarlo en el siglo
XXI. Las personas encargadas del servicio público han quedado
atrapados en la corrupción sistemática en el interior de la estructura,
priorizando intereses privados o particulares. En tanto que, las
personas representativas del capital cultural, tardarán bastantes
años en ingresar al interior de la estructura para revitalizar el bien
común, la correcta aplicación del derecho y la transformación del
sistema de justicia.
En efecto, las instituciones necesitan algún principio

estabilizador que impidan su fallecimiento y vuelva a la institución
algo razonable.3 De esta manera, queda claro que las deficiencias
del actual sistema jurídico mexicano, no se corrigen solamente con
reformas, sino con la praxis de las personas encargadas de aplicarlas.
Únicamente éstos pueden fortalecer a las instituciones canalizando
adecuadamente el capital cultural. En tal sentido, resulta oportuno
argumentar que, pese a las deficiencias estructurales, no se puede
poner en entredicho la legitimidad del sistema jurídico mexicano. Lo
adecuado, en este momento es tener conciencia de la contingencia
para actuar constructivamente.
Si bien, no pueden negarse los entredichos tampoco puede

evadirse el tema de la indefensión legal del ciudadano, ya que es
una situación latente y se refiere a una expectativa en la experiencia
(ciudadana) previa de falta de control, de que, todos los esfuerzos
inevitablemente conducirán al fracaso4 -legal-. La indefensión debe
entenderse dentro de la tríada: ciudanía, instituciones y leyes.
..........................................................................................
3
DOUGLAS, Mary. ¿Cómo piensan las instituciones?, Alianza Editorial, Madrid, página 77-78.
4
WOOLFOLK, Anita. Psicología Educativa (11ª edición). Madrid, 2010, Siglo XXI, página 371.

Ante la indefensión, el capital cultural constituye la palanca más

poderosa para impulsar en nuestro país un desarrollo con justicia5 y,
sobre todo, es importante reconocer que la cultura, en sus diversas
manifestaciones en México, puede enriquecer a las instituciones
que imparten justicia y transformar el entorno legal, generando
contrapesos fuertes a la corrupción y la simulación jurídica para
enriquecer el sistema jurídico.
En tal sentido, la interculturalidad, contrarresta desde

la relación directa entre personas y a partir de las instituciones
de justicia (pero no únicamente), las desigualdades sociales
que prevalecen en el presente mexicano. De la misma forma, las
discrepancias generadas por la comparación y contrastación de
ideas, sentimientos y acciones, suelen mitigarse en la medida en
que, la relación entre sujetos predomina. Así, la interculturalidad
permite la disminución del desacuerdo personal que se evidencia
no únicamente en las opiniones, sino en los comportamientos.
De igual forma, los antagonismos conducidos por el tamiz de la
interculturalidad, permite procesar jurídicamente la contrariedad y
construir un Estado de derecho socialmente responsable.
La interculturalidad se puede hacer realidad socialmente, en

la medida en que los individuos, las instituciones y las sociedades
desarrollan habilidades para el intercambio, la interrelación y
la intercomunicación. Estos tres elementos son socialmente
pertinentes e institucionalmente necesarios y convendrían tomarse
en cuenta, ya que, pueden personificarse en la medida en que, la
ciudadanía y las instituciones, a través de los servidores públicos,
son capaces de desarrollar habilidades para escuchar, respetar las
leyes y, sobre todo, respetar la dignidad de hombres y mujeres. El
respeto a la dignidad se genera de la sociedad hacia las instituciones
y de las instituciones hacia la sociedad, el enriquecimiento y la
ilustración mutua se construye desde los diversos espacios del
Estado mexicano.
..........................................................................................
5
DE LA FUENTE, Juan Ramón. “La Educación y la Cultura”, El Universal, 2017, http://www.elu-
niversal.com.mx/entrada-de-opinion/columna/juan-ramon-de-la-fuente/nacion/2017/05/15/
la-educacion-y-la-cultura

JUS SEMPER LOQUITUR
El intercambio, dentro de los esquemas (ideas o conceptos)

de la interculturalidad, encarna la reciprocidad por el conocimiento
jurídico preventivo. Esto implica que, las instituciones que
imparten justicia, asuman la responsabilidad social que les
corresponde, es decir, encauzar acciones para que, socialmente
se conozcan las leyes. Las leyes se rompen por acción u omisión,
por negligencia y voluntad deliberada, pero también, se rompen
por el desconocimiento y la inacción institucional. En tal sentido,
el intercambio de conocimiento jurídico entre instituciones y
sociedad, implica reciprocidad y, sobre todo, responsabilidad social
colectiva para dignificar el conocimiento del entramado legal del
México contemporáneo.
Por su parte, la interrelación en la interculturalidad, se refiere

a la relación cercana y sensible entre ciudadanos culturalmente
diferentes y los actores que están involucrados en el Sistema Penal
Acusatorio. La interrelación favorece la integración, a partir del
correcto ejercicio del derecho, desde el Sistema Penal Acusatorio.
Lo que favorece la construcción de comportamientos éticos, no sólo
de la ciudadanía en general, sino de impartidores de justicia, en
particular, desde una institución que necesita urgentemente corregir
errores graves y sistemáticos, como la corrupción y la simulación. La
apuesta está en la nueva interrelación que se puede generar entre
individuos para fortalecer el respeto por las leyes.
III. EL PARADIGMA DE LA INTERCULTURALIDAD

En el siglo XXI, la interculturalidad es pertinente y benéfica.
Como paradigma sirve para reorientar o encauzar la vida pública
social e institucional en el México contemporáneo. Contribuye a
reorientar la vida cotidiana tanto de las sociedades como de las
culturas, además de las instituciones, al fijar una dirección distinta
en el trato entre personas, entre personas e instituciones, entre
instituciones y la sociedad, entre el Estado y la comunidad y, en
consecuencia, entre el Estado y la colectividad. De esta forma, la
interculturalidad encamina a las diversas sociedades y a la cultura,
hacia la construcción de entornos más sociables que se enriquecen
de la diferencia.

Un paradigma, es un sistema básico de creencias y

representa una visión del mundo que define para quien la sustenta,
la naturaleza del mundo, el lugar del individuo en él y la extensión
de las posibles relaciones con ese mundo y las partes. Las creencias
son primordiales en el sentido de que deben ser aceptadas por
convicción subjetiva y no hay manera de establecer que las creencias
o convicciones subjetivas sean la verdad última.6 El paradigma de
la interculturalidad, como todos los paradigmas, está basado en
supuestos ontológicos y epistemológicos que pueden ser aceptados
como verdaderos, sin la certeza de que así lo sean. Los supuestos
son principios contingentes, que pueden favorecer la propagación
de más ideas y el desarrollo de más prácticas orientadas hacia una
nueva interrelación entre sujetos o actores sociales.
Los supuestos ontológicos de la interculturalidad comienzan

a tomar forma cuando las y los servidores públicos y la ciudadanía,
actores sociales e instituciones intentan responder a ¿Qué es la
justicia? ¿Cómo pueden conocer la justicia las personas que habitan
este país? Si la respuesta a la primera pregunta apunta hacia algo
inexistente, entonces no puede construirse porque no consta tal
cosa ni objeto de relación jurídica, es decir, no cuenta con una
entidad concreta.
En tal sentido, tampoco habría una respuesta pertinente

ni una práctica precisa para responder a la segunda pregunta. Por
el contrario, si la respuesta tiene una representación simbólica,
entonces se puede comenzar a configurar algo más que una idea y la
posibilidad de la justicia comienza a surgir paulatinamente, porque
ya existe una entidad concreta, aunque sea imaginaria. De este
modo, a partir de la respuesta y práctica de la segunda pregunta,
se puede comenzar a trabajar en la generación de condiciones que
..........................................................................................
6
Cfr. GUBA G. Egon y LINCOLN S. Yvonna. “Paradigmas en Competencia en la Investigación
Cualitativa”, en DENMAN A. Catalina y HARO, Armando Jesús (Coordinadores). Por los Rinco-
nes. Antología de Métodos Cualitativos en la Investigación Social. Sonora: El Colegio de So-
nora, páginas 113-142.Dispobible en: http://www.ecominga.uqam.ca/PDF/BIBLIOGRAPHIE/
GUIDE_LECTURE_2/4/1.Guba_y_Lincoln.pdf. Fecha de verificación: 20.08.2017.

JUS SEMPER LOQUITUR
faciliten la aparición de la justicia y, por lo tanto, su conocimiento tanto

negativo como positivo. En cualquier caso, los valores y los conceptos
relacionados con la justicia pueden comenzar a tomar una forma
más perceptible para la ciudadanía. La interculturalidad favorece una
concepción distinta del sujeto y la eliminación de su cosificación.
En virtud de lo anterior, es pertinente que las personas

involucradas dentro del Sistema Penal Acusatorio, sobre todo las y
los servidores públicos, no abandonen su disposición por contestar
a la pregunta ontológica, ya que ésta exige una respuesta necesaria.
Si no hay respuesta, no hay idea, si no hay idea no puede imaginarse
la construcción de una realidad diferente. La pregunta y la respuesta
ontológica, es el punto de partida para construir un sistema diferente.
Por otra parte, los supuestos epistemológicos del paradigma

de la interculturalidad, son importantes en la medida en que las y
los servidores públicos o los diversos actores sociales inmersos en el
Sistema Penal Acusatorio, responden a ¿Cuál es el origen de la relación
entre el ciudadano y la justicia? ¿Qué importancia tiene la justicia para
el ciudadano en México?
Por supuesto, las respuestas que se brinden al componente

epistemológico estarán estrechamente relacionadas con la respuesta
proporcionada a la pregunta ontológica.7 La importancia del fundamento
epistemológico dentro de la interculturalidad, reside en que puede
clarificar principios útiles para el ejercicio del derecho y es esencial
para cimentar practicas distintas dentro del Sistema Penal Acusatorio.
Además, favorece la construcción de un bagaje de conceptos para
tipificar acciones y proporcionar definiciones útiles que contribuyen
en el desarrollo de procedimientos legales fundamentados en el
conocimiento. La base epistemológica sirve para orientar el correcto
actuar de los sujetos dentro del sistema.
Con respecto al componente metodológico, podría preguntarse

¿Qué caracteriza a la justicia y cómo puede un ciudadano conocerla
a través del Sistema Penal Acusatorio? ¿Cómo puede generar este
..........................................................................................
7
Ibíd. página 120.

sistema certidumbre en el ciudadano? Siguiendo la misma lógica,

la respuesta implicará necesariamente la visibilización a través del
discurso y la acción de los procedimientos que se asumen como
adecuados.
Las respuestas implican clarificaciones metodológicas,

es decir, el conocimiento de los pasos que deben seguir las y los
servidores públicos para impartir justicia. En efecto, la metodología
que se ha seguido hasta nuestros días, deja entrever que son
inadecuados porque regularmente se refieren a la corrupción y
simulación y esto se traduce en indefensión para la ciudadanía. Por
esta razón, es acertado que las respuestas de las y los servidores
públicos apunten hacia la construcción de pasos o procedimientos
metodológicos distintos para generar certidumbre jurídica.
De acuerdo con lo anterior, es importante que las y los

servidores públicos sepan que no deberían de ser tales, si no son
capaces de responder las preguntas ontológicas, epistemológicas
y metodológicas. La omisión de las respuestas facilita el desarrollo
de una práctica inercial socialmente dañina y que se traduce en
un fuerte distanciamiento entre los sujetos y las instituciones
encargadas de impartir justicia. En efecto, las respuestas son
construcciones humanas y, por lo tanto, invenciones de la mente
humana susceptibles de error.8 Sin embargo, también las respuestas
pueden ser muy positivas porque permitirían que la persona imagine
algo diferente para construir situaciones distintas que contribuyan a
una nueva relación entre el sujeto y la justicia impartida dentro del
Sistema Penal Acusatorio.
IV. SISTEMA PENAL ACUSATORIO E INNOVACIÓN

PAULATINA
La interculturalidad, como estrategia de innovación, es
una maniobra proactiva que involucra el respeto a la diversidad
de personas y el enriquecimiento de la atención en el Sistema
..........................................................................................
8
Ibíd. página 121.

JUS SEMPER LOQUITUR
Penal Acusatorio. La justicia, es el punto de encuentro que tiene

la diversidad para construir sociedades estables y equilibradas.
La justicia no es para eliminar la diversidad, sino para reforzar su
acercamiento en el marco de la legalidad. Desde esta posición, las
personas encargadas de impartir justicia, hacen evidente que tienen
conciencia de la contingencia, de los problemas existentes en los
contextos cotidianos diversos.
Así, en el Sistema Penal Acusatorio, la interculturalidad

facilita una intervención positiva, el reconocimiento de la diversidad,
interacción efectiva y fluida, gestación de convivencia sensible al
sujeto y relación equilibrada. Esto que parece insignificante, no lo
es, puesto que, a partir de estas pequeñas acciones, se puede hacer
evidente una innovación paulatina.
Y esa innovación paulatina se refiere a que, no se trata de

atender de manera diferenciada a los sujetos, sino de ser consciente
de la diferencia en la impartición de justicia y en el respeto a
los valores comunes, porque son puntos de encuentro para la
convivencia.
De manera local, cada entidad puede implementar procesos

formativos para que los diversos sujetos dentro del Sistema
Penal Acusatorio, aprendan a gestionar procesos de negociación,
consenso, orientación y mediación, suficientemente sensibles para
que se empleen como medios que ayuden a construir convenios
o acuerdos. De esta forma, se debe actuar para alcanzar objetivos
precisos que ayuden a no saturar de juicios orales en sistema penal.
La interculturalidad, como paradigma, facilita la prevención de los
juicios orales y posiciona la mediación y la negociación para resolver
conflictos de manera directa y equilibrada.
La negociación, el consenso, la orientación y la mediación,

son pequeñas innovaciones que tienen una lectura muy particular,
dentro del paradigma de la interculturalidad. Son procesos que
tienen en común el lenguaje, sobre todo, cuando se discierne y se
asume que es un elemento no sólo comunicativo, sino un punto

de partida para transformar la acción de la justicia. Es así como el

paradigma de la interculturalidad, puede ser transformado en una
estrategia de innovación dentro del Sistema Penal Acusatorio, al
apuntar hacia la construcción de acuerdos mutuos para:
¶ Encauzar constructivamente un conflicto.
¶ Transformar el conflicto en diálogo.
¶ Construir una solución que respete la diferencia.
¶ Proporcionar una vía positiva de resolución mutuamente
incluyente.
¶ Posibilitar la resolución pacífica de diferentes situaciones
conflictivas.
¶ Conciliar intereses de beneficio recíproco.
En efecto, la innovación en el interior del Sistema Penal

Acusatorio, no es otra situación más que, construir cambios y generar
transformaciones desde las personas servidoras públicas, pero estas
novedades no pueden construirse con las mismas prácticas, con los
mismos discursos y sin premisas ontológicas, epistemológicas y
metodológicas en distintas y situadas en su contexto.
El Sistema Penal Acusatorio requiere de nuevos sujetos.

Competentes, diferentes y dispuestos a situarse en su contexto; que
comprendan la necesidad de transformación, que entiendan que
depende de su correcto actuar para modificar la pésima imagen que
se tiene del sistema de justicia en México. La innovación, no es otra
cosa que volver al sujeto, ahí se generan los problemas y es a partir
de él, que pueden generarse las transformaciones positivas. En tal
sentido, el paradigma de la interculturalidad, serviría para dar forma
a este actuar del personal al servicio público.

CONCLUSIONES
La interculturalidad, dentro del Nuevo Sistema Penal
Acusatorio, podría simbolizar la revitalización de la palabra y el
fortalecimiento del diálogo para saber qué piensan las personas con
las que compartimos el espacio y con las que se generan conflictos.
Implica reconocimiento recíproco, la construcción de interrelaciones
entre la ciudadanía, las instituciones y las leyes. Implica fomentar
el conocimiento del sujeto para cambiar las concepciones erróneas
y desarrollar prácticas distintas que contrarresten la corrupción y
la simulación que impera en las salas de impartición de justicia.
El paradigma de la interculturalidad, favorece la prevención de la
discriminación con formación. Por esta razón, no sólo es oportuno,
sino útil y necesario, desarrollar experiencias formativas y establecer
protocolos de atención a personas social y culturalmente diferentes.
En síntesis, la interculturalidad fortalece una visión pro

persona de la justicia, prioriza la justicia restaurativa, contextualizada
y generadora de equilibrios. Favorece la construcción de puntos
equitativos válidos para la ciudadanía, las y los servidores públicos
y los actores sociales. La interculturalidad permite resignificar
la carga teórica de la justicia y la praxis que se puede desarrollar
desde las salas de impartición de justicia. Asimismo, es importante
mencionar que, favorece la construcción de un marco teórico
diferente de la justicia, al afirmar valores distintos, interactivos y
que se retroalimentan mutuamente de la diferencia social y cultural
del presente.


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En virtud de lo anterior, es pertinente que las personas

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Por supuesto, las respuestas que se brinden al componente

Con respecto al componente metodológico, podría preguntarse

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