JOKE (NamJin)
JOKE (NamJin)
JOKE (NamJin)
Puede tomar bastante tiempo, pero lograré tener un diagnóstico claro sobre lo que
sucede con él, ayudaré a Kim NamJoon.
01
Jin18
Mis padres decían que sólo perdía el tiempo y el dinero, que no lograría llegar lejos
como un gran médico y profesional, a la hora de cenar nunca faltó el comentario de mi
padre que decía "Tantos años de estudio y terminarás en algún hospital público a
punto de derrumbarse y recetando remedios para el resfriado, el dinero no lo
encontrarás ahí", él era un hombre de negocios y nunca aceptó que yo prefiriera un
camino distinto, pero...18
¿Tendrá razón?15
Llegué al punto en donde creí que sí, que sólo perdía mi tiempo, día tras día tocaba
puertas y puertas buscando empleo y siempre recibía la misma respuesta "Estamos
bastante impresionados con tus estudios, pero lamentablemente no hay vacantes en
este hospital"5
Cómo puede ser posible, la gente muere todos los días por falta de personal medico,
también existen muchas persona con desórdenes mentales y que nadie ayuda.
Ya no quiero depender del dinero de mis padres, quiero valerme por mi mismo y
demostrar que todos mis esfuerzos valieron la pena, pero estoy cansado.
Después de viajar de un lado para otro buscando empleo, decidí volver a mi pequeño
departamento y encendí la computadora, siempre creí que buscar empleos por medio
de Internet era algo que hacía la gente desesperada y tristemente yo lo estaba.
Internet era lo último que me quedaba por probar y luego de casi dos horas frente a la
computadora ya estaba por rendirme hasta que frente a mí apareció un anuncio:5
“Se necesita psiquiatra con o sin experiencia laboral, que haya terminado sus estudios
y esté dispuesto a trabajar de forma responsable y paciente en el establecimiento “le
bonheur de l'hôpital”.”75
Froté mis ojos para no quedarme dormido, rápidamente tomé mi teléfono y anoté la
dirección junto al número de contacto de aquel sitio, apagué la computadora y me dirigí
al cuarto de baño para tomar un ducha, lavé mis dientes y luego en mi habitación me
dejé caer sobre la cama, en la mañana debía ir temprano a consultar por el empleo.
[...]
252
Era un lugar enorme y algo descuidado, las paredes de fuera se encontraban sucias y
la pintura algo gastada, no era mi lugar ideal de trabajo, es más, quería seguir de largo
y no entrar a ese sitio, pero si quería lograr algo, lo debía intentar.18
Subí al viejo ascensor y marqué el número 6 que era el último piso, llegando, la puerta
se abrió y pude ver un gran pasillo con solo tres puertas, una a cada lado de este, las
que parecían ser el lugar de descanso de los empleados y dónde almorzaba y al fondo
otra puerta con un letrero en ella que decía "Min YoonGi", la cual era donde me
dirigía.89
Golpeé dos veces recibiendo un "Adelante" apenas audible del otro lado y entré,
encontrándome un escritorio, dos pequeñas sillas frente a éste y del otro lado un
delgado y pálido hombre que me observó por unos segundos e hizo un gesto para que
tomara asiento frente a él.
–Buenos días, mi nombre es Kim SeokJin y vengo a solicitar empleo como psiquiatra.1
–Buenos días, soy Min YoonGi, el director y encargado de este hospital psiquiátrico –
Dijo mientras pasaba sus ojos de mi a unos papeles sobre su escritorio.– ¿Tienes los
papeles que indiquen que acabaste tus estudios?51
Se los tendí y luego de unos incómodos minutos en silencio, echándose hacia atrás en
su silla, dijo:
Me observó serio y tomando su teléfono llamó a un tal Jimin pidiéndole de favor que
me enseñara el hospital y me asignara al paciente 2322.97
Salí de aquél cuarto encontrándome fuera con un simpático joven vestido con una bata
blanca, el cual me saludó cordialmente y proporcionó una vestimenta similar a la de él.
Luego de casi dos horas con el doctor Jimin, donde me presentó a algunos enfermeros
y enfermeras, recorrimos el hospital y me enseñó las distintas áreas de éste, como el
área de los niños que se encontraba en el primer piso, el área de los adultos que se
apoderaba del segundo y tercero, y finalmente el cuarto y quinto, donde se
encontraban los pacientes más peligrosos y agresivos del lugar, me llevó directamente
hasta una puerta de metal en el quinto piso, la cual tenía sobre ella el número 49, junto
a una pequeña ventana y un cartel que decía:
–Éste será tu primer paciente Jin.– Dijo mi nuevo compañero de trabajo mientras me
entregaba unos papeles que al parecer contenían toda la información de Kim Namjoon.
Abrió lentamente la puerta e hizo un gesto para que entrara, lo siguiente que vi fue a
un joven sentado sobre su cama con una camisa de fuerza, que al parecer y según sus
papeles tendría la edad de veinticinco años.
164
–Hola NamJoon, mi nombre es SeokJin.– Dije acercándome unos cuantos pasos a él,
pero me detuve en seco al sentir la mano de mi compañero agarrándome fuertemente
para que no siguiera con mi camino.
–Cuidado Jin– Me advirtió Jimin.– Él es uno de los pacientes más peligrosos de este
piso, puede llegar a ser bastante violento si te acercas demasiado.20
Con sus palabras automáticamente retrocedí más pasos de los que avancé y me
coloqué detrás de mi compañero, no es que le temiera a lo que pudiera hacer, más
bien no quería salir lastimado en mi primer día de trabajo.41
Jimin al notar que trataba de protegerme tras su cuerpo, giró sobre sus talones y salió
de aquel cuarto conmigo tras él, cerré la puerta y nos dirigimos a una de las salas que
se encontraba en el sexto piso, donde los doctores y funcionarios del hospital tomaban
sus descansos.
Tomé asiento sobre uno de los sofás mientras Jimin servía un poco de café para
ambos, me entregó una pequeña taza y tomó asiento junto a mi.
–Quiero que leas atentamente los papeles de tu paciente, no hay mucha información ni
tampoco hay un diagnóstico sobre lo que pasa con él, pero quiero que estés bien
informado antes de tratarlo.
Asentí mientras miraba la taza de café que poco antes se encontraba llena y me puse
de pié para luego acomodarme en una mesa circular que se encontraba en aquella
habitación.
Tomé la carpeta que contenía la escasa información de NamJoon y comencé a leer:
–¿Cómo es posible que siendo ingresado hace más de un año no tenga un diagnostico
aún?– Pregunté a Jimin mientras dejaba los documentos sobre la mesa.3
–Lo que sucede Jin es que cuando ingresó fue derivado a un doctor que actualmente
se encuentra trabajando en el área de los niños, Jung HoSeok intentó realizar un
diagnostico claro de NamJoon pero un día mientras intentaba hablar con él, le atacó
sacando gran parte de la piel de su brazo derecho, de ahí que nadie se quiere hacer
cargo de él, no sé por qué YoonGi quería que te lo asignara, sinceramente no creo que
puedas hacer gran cosa con él.121
Puede tomar bastante tiempo, pero lograré tener un diagnóstico claro sobre lo que
sucede con él, ayudaré a Kim NamJoon.
02
Jin
Conversando con Jimin averigué que se le administraba diariamente una gran dosis de
tranquilizante para que no ocasionara problemas y no se lastimara, así que ese mismo
día ordené que se le redujera la dosis a la mitad con la esperanza de encontrarlo hoy
con sus sentidos más despiertos que el día anterior, así quizás podría responder o
reaccionar a mis preguntas.
Abrí cuidadosamente la puerta y dejé los documentos y fichas de NamJoon sobre una
descuidada silla que se encontraba en la habitación, me acerqué a la cama, pero no
demasiado y le saludé.
Como no hubo ningún tipo de respuesta tomé los papeles y la silla para sentarme
frente a NamJoon, pero siempre manteniendo la distancia en caso de cualquier cosa
ya que no sabía cómo podía reaccionar o qué podía suceder si me acercaba
demasiado.
Mientras estaba en eso un sonido me distrajo, era algo como... ¿Un crujido?86
El sonido se hacía más fuerte, levanté la vista y NamJoon se movía lentamente sobre
la cama quedando frente a mí, colocó los pies en el suelo y me miró con el ceño
fruncido.86
¿Se va levantar?5
Mierda, de un segundo a otro estaba tan asustado, toda la confianza que sentía en mi
se desvaneció, sabía que era una decisión arriesgada quitarle un poco de calmantes y
venir aquí sin examinarlo antes.
Cerré los ojos aceptando mi destino, si él me haría daño, que fuera rápido y así
terminaba mi sufrimiento de una vez por todas...33
Pero no fue así, no sucedió nada, abrí los ojos después de un buen rato y mi paciente
seguía en su lugar, sentado al borde de la cama y sólo me observaba, respiré hondo
calmandome de inmediato y le sonreí nervioso, pudiendo notar cómo hacía una mueca
en su rostro que quise interpretar como una sonrisa.72
"Posibles síntomas"
Éste era el título de mi lista y comencé a enumerar lo que antes me comentaron de él.
-Alogia.
-Comportamientos violentos.
-...1
Le di una mirada rápida al rostro de NamJoon antes de seguir escribiendo y noté que a
diferencia del ceño fruncido de antes, me observaba con la mirada perdida en algún
sitio de mi cara, sus ojos reflejaban tristeza y desesperación, sentí lástima por él ya
que era un chico joven el cual perdía su vida en este sitio.
[...]
–Jin quiero presentarte a alguien.– Dijo Jimin mientras nos dirigíamos al ascensor,
donde una vez que estuvimos dentro presionó el botón del primer piso.
Cuando se abrieron las puertas Jimin me guió a una habitación que al parecer era de
algún paciente de ese piso, tocó dos veces y noté que tenía un letrero que decía:
–Ya veo, Jung HoSeok– Dijo mientras hacia una leve reverencia.– Es un placer
conocer al valiente doctor que aceptó al peligroso Kim NamJoon.– Continuó soltando
una risa.35
No le respondí, pero hice una reverencia también para que luego comenzaramos los
tres a caminar en dirección al ascensor, el cual nos llevaría a la sala de descanso, una
vez allí con HoSeok tomamos asiento al rededor de la mesa, mientras Jimin servía un
poco de café a cada uno.
–Dime Jin ¿Por qué decidiste trabajar en un hospital psiquiátrico?– Preguntó HoSeok
cruzándose de brazos y echándose hacia atrás en su silla.
–Bueno la verdad es que yo no tenía planeado terminar aquí, yo quería ser profesor de
baile pero...– Dejó la frase a medias para tomar un largo trago de su café y
continuó.– Lo que pasa es que hace diez años mi hermano mayor se suicidó, tenía una
fuerte depresión que nunca fué tratada, le quería mucho y tras su muerte decidí
estudiar psiquiatría para ayudar a jóvenes y adultos con problemas.
–¿Y qué hay de tu paciente, Taehyung?– Pregunté para tratar de cambiar el tema ya
que tras la pequeña historia del hermano de HoSeok me sentí incómodo, no esperaba
una respuesta tan personal y dura como esa.
–Taehyung está aquí hace casi tres años, él fue diagnosticado con trastornos de
bipolaridad y sus padres lo abandonaron en este lugar ya que no se creyeron capaces
de lidiar con él y sus drásticos cambios de humor y conducta, así que desde aquel
incidente con NamJoon me hago cargo de él.51
–HoSeok tiene bastante bien a TaeHyung– Dijo Jimin en lo que jugaba con un lápiz
sobre la mesa.– Ese niño podría irse perfectamente de este lugar a una casa de
adopción pero siempre y cuando se encarguen de darle sus medicamentos.
–Él no saldrá de aquí sin mi consentimiento– Contestó HoSeok con un ligero tono de
molestia.59
–¿Le tienes mucho cariño?– Pregunté sin entender a qué venía su tono.
–Solo no quiero que siga sufriendo, la ha pasado muy mal desde que lo abandonaron y
yo realmente me preocupo por él...1
– Y bueno Jin ¿Como fué tu primer día con NamJoon? –Le interrumpió Jimin.
Entusiasmado les conté todo lo sucedido con él, que se habría estado moviendo un
poco y se mostró tranquilo conmigo, eso sí, omitiendo la parte en que estaba
terriblemente intimidado por él, no quería parecer un cobarde, ¿Qué psiquiatra le tiene
miedo a sus propios pacientes? Quedaría en ridículo si contara aquello. Mientras
hablaba noté que a diferencia de Jimin quien me escuchaba atentamente y muy
sorprendido, HoSeok se encontraba cada vez más molesto, tanto que hasta llegó a
levantarse de su sitio y se retiró de la sala justificando que tenía que medicar a unos
pacientes.78
Quizás HoSeok estaba molesto por lo que dijo antes Jimin sobre TaeHyung, pero
bueno, dejé pasar aquella situación y seguí hablando con mi compañero por un buen
rato, donde me contó que él era el encargado de un pequeño niño de doce años
llamado Jeon JungKook, el cual fue ingresado hace unos meses por traumas
ocasionados por las peleas de sus padres, me contó que este niño tiene síntomas
parecidos a los de depresión y me causó tristeza el pensar que un niño así de pequeño
sufriera tanto por culpa de padres irresponsables.79
[...]
Una vez terminada la hora de descanso continúe con mis labores medicando a unas
cuantas personas del tercer piso y al terminar decidí dirigirme a la habitación de
NamJoon con el propósito de seguir examinandolo pero al abrir la puerta me topé con
que se encontraba completamente dormido, así que decidí no molestarlo y me marché
a mi pequeño departamento, tomé una ducha y me lancé sobre la cama con el
propósito de dormir, pero no lo logré, ya que no podía sacarme de la cabeza la imagen
de NamJoon.
03
Jin
Ya había pasado poco más de un mes desde que conocí a NamJoon, quité por
completo los calmantes y descubrí que tras aquella imagen de chico violento que todo
el mundo decía, sólo se encontraba una persona asustada y desesperada, hice
muchos avances con él, comenzó a "hablar" aunque la mayoría de lo que decía eran
palabras sin sentido y otras que ni siquiera sé si se pueden considerar como palabras,
sólo muy pocas veces tenía momentos de lucidez y lograba hablar conmigo, pero sólo
con eso me sentía feliz y sentía que por fin le estaba ayudando.6
–Hey... Qué suced...– Y lo ví, se volteó hacia mi, asustado, temblando y rápidamente
dejé los papeles que tenía en mis manos sobre la silla y corrí hacia él, le ayudé a
levantarse y lo senté cuidadosamente sobre la cama, con ambas manos tomé su rostro
el cual se encontraba maltratado y húmedo, lágrimas bajaban por sus mejillas y sus
labios sangraban, su ojo izquierdo se encontraba morado e hinchado, tanto así que ni
siquiera podía mantenerlo abierto. –Mierda...– Susurré mientras pasaba
cuidadosamente mis dedos por su lastimado ojo.61
No alcancé a hacer nada más antes de ser interrumpido por el sonido de la puerta, la
que fué abierta por el doctor HoSeok, pude notar que se encontraba con una pequeña
bandeja en sus manos, llena de pastillas y jeringas.
–Espera HoSeok– Le llamé antes de que la cerrara por completo.– ¿No sabrás qué es
lo que le ha pasado NamJoon en la cara?
–N-No... no lo sé, quizás se golpeó o algún paciente de este piso lo hizo.– Contestó
nervioso y luego cerró la puerta dejándome a solas con él.125
–NamJoon iré a buscar algo para revisarte ese ojo.–Le avisé y abrí la puerta para ir a
la sala donde se encontraban los instrumentos médicos y demás.
Volví a la habitación y coloqué una pequeña bolsita de tela con hielo en su interior
sobre el ojo de NamJoon para bajar la hinchazón de este y luego con sumo cuidado se
lo abrí para iluminarle con la linterna de mi teléfono, al notar que su pupila reaccionaba
a la luz y no había quedado ciego por el golpe sentí un gran alivio, no quisiera que
quedara ciego con tan solo veinticinco años. Limpié su labio roto, quité todos los restos
de sangre y con un pedazo de tela húmedo limpié cuidadosamente toda su cara.
–Tranquilo NamJoon, muy pronto tu ojo estará como antes.– Le dije para calmarlo y
sin darme cuenta comencé a acariciar suavemente su rostro.59
Me separé de él, tomé todas las cosas que utilicé y las deposité sobre la bandeja
donde las traje antes, tomé los papeles que se encontraban sobre la silla y dejé la
bandeja ahí, luego le ordenaría a alguna enfermera que se la llevara, por ahora tenía
planeado algo para NamJoon.
–Hoy haremos algo diferente a lo de estas últimas semanas, te llevaré al patio de este
hospital... –Comenté volviéndome hacia él. –Sé que desde que entraste no has salido
ni una sola vez de esta habitación... Hace un lindo día allá afuera y quería que lo
disfrutaras.
Al decir esto pude ver que el rostro de NamJoon cambió por completo a uno ¿Feliz?...
¿Estaba feliz?81
Nos acercamos a una mesa vacía y alejada de los demás doctores y pacientes y antes
de sentarnos me acerqué a NamJoon y comencé a quitar su camisa de fuerza.
–Confiaré en ti y quitaré esto, sí no haces nada malo, no la tendrás que volver a usar.–
Me la estaba jugando demasiado, sabía que era arriesgado quitarle eso y más en un
lugar lleno de personas y con abundante espacio para escapar, pero quería confiar en
él, en que no haría nada y también quería que él confiara en mi, que viera que para mí
no era un peligro y que yo no le haría daño a él. Le ayudé a tomar asiento y luego me
acomodé frente a él por el otro lado de la mesa, noté que observaba todo a su
alrededor como si de un mundo extraño se tratase y yo hice lo mismo, la verdad era
bastante deprimente las vistas del patio, los juegos para los niños se encontraban
viejos y oxidados, el poco de pasto que había se encontraba seco y lo demás era sólo
tierra, no existía mucha vida en este lugar.38
–Hey...– Llamé su atención extendiendo un lápiz y un papel frente a él.– Toma, quiero
que dibujes algo en esta hoja, cualquier cosa... Lo que tú quieras.54
Hace un tiempo leí que famosos pintores como Vincent van gogh o Martín Ramírez
pasaron parte de sus vidas en psiquiátricos y desarrollaron una capacidad artística
gracias a sus diferentes problemas mentales, donde en cada obra expresaban
diversas cosas que sucedían dentro de sus cabezas, así que decidí probar este
método con NamJoon, quizás daría algún resultado.14
Tímidamente recibió las cosas que le ofrecía y lentamente comenzó a dibujar, luego de
casi una hora y media donde yo simplemente me dediqué a observarlo, dejó caer de
golpe el lápiz sobre la mesa y llevó sus manos a sus orejas mirando asustado a su
alrededor.
150
Era un dibujo extraño y a mi parecer fácil de entender para sacar conclusiones, dos
personas luchando en un mismo cuerpo, dos mentes ,una ahogando a la otra,
cortando su voz y expresión, luchando por el control...21
–NamJoon ¿Me escuchas?– Pregunté y el asintió asustado, aún con sus manos en su
cabeza. –Dime... ¿Escuchas... escuchas a alguien más que no sea yo?
–¿Qué es lo te dicen?
–N... no... ¡No!– Gritó haciendome sobresaltar en mi silla por la sorpresa, el levantó su
rostro y comenzó a llorar.
–¿No?
–Quie... Quieren que... Que te golpee o sino... me... me van a matar.– Dijo tomando el
borde de su camisón para intentar meter su cabeza dentro.86
–Tranquilo, no va a pasar nada.– Intenté calmarlo para que no hiciera alguna cosa
estúpida como golpearse a si mismo o atacarme.
"Alucinaciones auditivas" anoté rápidamente sobre la hoja en la cual ya tenía
descartados los síntomas iniciales, me levanté de mi sitio para acercarme a NamJoon,
se veía bastante nervioso y asustado así que lo agarré por los hombros sobando estos
con mis dedos pulgares, a este punto ya confiaba más en él, sabía que no me haría
daño si me acercaba demasiado aunque siempre existía la posibilidad la cual en ese
momento no recordé, sólo quería tranquilizarlo.
–Dime NamJoon ¿Qué es lo que ves en aquel lugar?.– Pregunté una vez que se
tranquilizó, apuntando una parte del patio donde no había absolutamente nada, sólo
restos de ramas secas y lo demás sólo era tierra con pequeñas piedras.
–Niños... niños siendo apla... aplastados por un dragón.– Dijo cerrando fuertemente su
ojo que no se encontraba morado.59
–Do... doctor Jin me... me quiero ir de aquí.– Dijo mientras miraba detrás mío, como si
alguien se encontrara allí pero la verdad es que solo estábamos los dos.13
–Si NamJoon, vamos.– Tomé los papeles que estaban sobre la mesa, el dibujo de
NamJoon y la camisa de fuerza que antes se encontraba en el cuerpo de mi paciente y
con tranquilidad lo llevé a su habitación donde una vez dentro se sentó en su cama
como lo hacía de costumbre, de espalda a la puerta, me despedí de él y me marché de
aquel cuarto para visitar y medicar a más personas.
[...]
Ya era hora de marcharme así que fui a buscar mis cosas a la sala de descansos y allí
me encontré a Jimin sentado en uno de los sofás individuales con su celular en una de
sus manos y en la otra un gran taza de café.
–Hoy me tocó jornada completa, tengo que vigilar a los pacientes del tercer y cuarto
piso esta noche... Debo estar bien despierto ante cualquier situación de emergencia.–
Respondió frotando sus ojos, se le veía bastante cansado.
–Todo va bien, ya me estoy haciendo una idea de lo que pueda estar pasando con él...
Por cierto Jimin ¿Sabes quién vigiló ayer en el quinto piso?
–Gracias, bien yo ya debo irme...– Dije tomando mis cosas del suelo y colocando la
mochila sobre mi espalda.– Nos vemos mañana... Espera... ¿Sabes por qué no hay
cámaras de seguridad en el quinto piso y en los demás sí?
–No lo sé, creo que deberías preguntarle eso a YoonGi, después de todo él es el
director y encargado de este maravilloso hospital.– Contestó con entusiasmo, creo que
tomar tanto de ese café ya le comenzaba a afectar.
04
Jin1
–No es necesario.– Respondió YoonGi con el tono más relajado y tranquilo del mundo,
cosa que ya me estaba haciendo perder la paciencia.1
No dije nada más y salí de su oficina, me sentía muy molesto, NamJoon tenía su ojo
morado y yo no podría averiguar la causa, si pudiera hubiera estado todo el día
peleando con YoonGi por lo sucedido, pero no podía quedarme sin empleo por
aquello, me sentía frustrado por no poder hacer nada más.
[...]
–Dime NamJoon... ¿Tienes familia, amigos, conocidos o algo que puedas recordar de
tu pasado?
–¿Una tortuga?
–Jin...
–Dime NamJoon.
–...La tortuga.26
Al rato después me levanté de la silla con mis papeles de siempre bajo el brazo, me
despedí de NamJoon y tomé el ascensor al sexto piso, una vez allí de dirigí a la sala
de descansos y me dejé caer sobre una silla frente a la mesa revolviendo los papeles
que traía conmigo en busca de una ficha en blanco para comenzar a escribir:
–¿Diagnostico?– Preguntó Jimin tomando asiento a un lado de mi. –De verdad lo has
podido diagnosticar en tan solo un mes?2
–¿Sólo eso? ¿De verdad?... Creí que tendría algo más grave como quizás una
esquizofrenia hebefrénica, psicosis, abulia, algún tipo de trastorno bipolar o hasta una
depresión aguda.12
Casi una hora de tener que soportar los estúpidos regaños de YoonGi donde ni
siquiera me dejaba explicar lo sucedido ya me tenían más que aburrido “Ahora mismo
anda a ver como se encuentra esa niña” me ordenó para que saliera de su oficina,
cosa que hice encantado y me dirigí a su habitación la cual se encontraba cerca de la
de NamJoon y cuando pasé por fuera de la ésta, una mano salia de la pequeña
ventanilla sujetando mi bata acercadome bruscamente a puerta, haciendo que me
diera un fuerte golpe contra ella.
40
–¡Jin ayudame!–Oí gritar a NamJoon del otro lado.– ¡Por favor Jin!28
Gritos desesperados de escuchaban del otro lado y sin pensarlo dos veces entré a la
habitación olvidándome por completo de la joven que había intentado suicidarse.6
–¿Dónde te golpeó?
Tímidamente apuntó su ojo morado el cual se encontraba bastante mejor que el día
anterior, le tomé de un brazo y lo ayudé a levantarse para sentarlo sobre su cama.
–Tranquilo NamJoon, yo me haré cargo para que no te lastime más.– Salí furioso de
allí y tomé el ascensor, bajé hasta el primer piso y me dirigí a la habitación de
Taehyung, el paciente de HoSeok, lo más probable es que lo encontraría ahí. Toqué la
puerta de Taehyung y sin esperar repuesta entré pero no se encontraba allí, más bien
estaba Jimin con el paciente de HoSeok, el cual vio mi rostro que se encontraba rojo
de furia, se despidió del pequeño y salió a preguntar qué es lo que me sucedía.7
–¿Que HoSeok golpeó a NamJoon? ¿Cómo es que estás tan seguro de eso?
–NamJoon me lo dijo.
–Jin... NamJoon no está bien, quizás su mente le jugó una mala pasada haciendo que
te dijera eso.–Jimin tenía razón, no puedo dejarme llevar por lo que dice NamJoon...
Quizás esté mintiendo.33
¡Genial!
Ahora tendría que esperar a que vuelva para poder hablar de esto con él.
05
Namjoon37
Ya no recuerdo cuánto tiempo llevo en este extraño lugar y tampoco sé por qué estoy
aquí, sólo sé que hace un tiempo conocí a un amable doctor el cual me ha estado
acompañando todos los días desde entonces, me hace preguntas y habla sobre
diferentes cosas conmigo, desde que lo conocí extrañamente me inspiró confianza,
todo lo contrario a lo que decían unas voces por ahí, ellas decían que él solo quería
lastimarme pero pese a todas la malas criticas que ellas hicieron yo seguía pensando
en que el doctor Jin era la persona más buena, adorable y paciente del mundo ya que
recuerdo que al principio aunque quería, no podía comunicarme con él, extrañamente
no sentía muy bien mi cuerpo y no podía hablar, pero cuando por fin logré decirle
cosas, se puso bastante contento y recuerdo que me dio un largo discurso de como
me curaría de lo que sea que pasa conmigo y de que se encargaría de sacarme de
este asqueroso lugar, pero a decir verdad no sé a qué cosa se refería el doctor.1
Al igual como de costumbre, le vi entrar con su pelo bien arreglado y su misma sonrisa
de siempre por la puerta de mi habitación, pero extrañamente ya no traía consigo un
montón de papeles como otras veces, si no que ésta vez traía una especie de bandeja
con unas extrañas cosas dentro, tampoco tomó asiento en la silla a un lado de la
puerta si no que pasó de largo, directamente hacia mi cama.
¿Medicarme?
No lo escuches...
NamJoon...
Te está mintiendo...
Miré al doctor Jin el cual a diferencia de unos segundos atrás ahora se veía bastante
contento y no pude pensar en las palabras de aquellas voces.
–Nam...
Golpéalo...
–No quiero hacerlo, Jin... no quiero.– Susurré mientras levantaba mi puño para
golpearlo, pero le di a la pared justo al lado de su rostro, haciendo que mi puño
sangrara salpicando la ropa y cara de Jin.
Cobarde...
–Lo siento–Dije dando varios pasos hacia atrás mientras tapaba mi rostro con mis
manos y me sentaba en el piso de la habitación– Lo siento mucho, yo...
Patético...11
Cállate...2
–Con ésto lo harán.– Dijo mientras apuntaba a la bandeja que había dejado sobre la
cama.– Ahora levantate del suelo, te ensuciarás.
Le hice caso, tomé asiento junto a la bandeja y Jin la cogió sacando de esta una
pequeña pastilla color blanco, me ordenó abrir la boca y la depositó dentro.
Muérdelo...4
–Ahora debes tragarla, por favor.– Dijo acercándome un pequeño vaso con agua. –
Aquí tienes.
Escupe eso...11
–Esta pastilla se llama Olanzapina– Me explicó. –Desde hoy comenzarás a tomar una
cada día, yo te las administraré y si veo resultados positivos podrás salir de aquí en
poco tiempo.
Te acabas de condenar...7
¿Salir de aquí?
Jin tomó mi mano que se encontraba aún sangrando un poco por el golpe y comenzó a
limpiarla con un pequeño pedazo de tela que se encontraba húmedo, al terminar lo
depositó sobre la bandeja y tocó mi cabello.
–Qué linda sonrisa tienes, nunca antes te había visto sonreír– ¿Una sonrisa?
–Gracias.– Le respondí sintiendo como un calor calor subía hasta mis mejillas.
¿Por qué?
–Bueno NamJoon, iré a ver como se encuentran los demás pacientes–Dijo mientras
tomaba la bandeja y se dirigía a la puerta.– Volveré más tarde para ver como te
encuentras.
Estúpido.
[...]
Ya poca luz entraba por la ventana y esta era de un color rojizo, ya pronto se haría de
noche y el cuarto se sentía vacío y helado, me sentía sólo, pero sabía que no lo
estaba, ellas seguían aquí conmigo.
Me sentía inquieto y no dejaba de dar vueltas por todos los rincones de la habitación,
Jin dijo que volvería, él vendrá, me vendrá a ver...
–¡No!... No... Sólo quiero hablar, no quiero escucharlas a ellas, lo quiero escuchar a
usted.9
Y así fue, no sé cuánto tiempo pasó, pero del otro lado de mis ventanas todo estaba
oscuro, hablamos de diferentes cosas aunque el doctor Jin no siempre entendía lo que
yo decía, creo que algo anda mal con él, varias veces dijo "no entiendo lo que
dices" ¿Cómo no va a entenderme? Decía que sin darme cuenta yo lograba decir
cosas sin sentido, pero... ¿Cómo es eso posible?, Además me contó un poco de su
vida y me contó cómo es estar afuera, fuera de esta habitación, decía cosas realmente
maravillosas y describía lugares sacados de cuentos de hadas... Definitivamente yo
quería conocer todo eso.22
-Ojalá hubieran sido vacaciones.- Respondió HoSeok y escuché su fuerte risa, por fin
podría hablar con él.
Dos semanas, dos semanas le tomó retomar su trabajo, dos semanas donde tuve que
aguantar la impotencia de ver a NamJoon golpeado y sin respuestas de quién y
porqué, una parte de mi estaba seguro de que aquella vez NamJoon dijo la verdad,
HoSeok le había hecho daño, pero otra parte de mi decía que sólo fue una mala
pasada de su mente y que quizás él solo se lastimó, tal como había dicho mi
compañero Jimin.
-Muy bien Jin, ya estoy completamente recuperado.- Me enteré que HoSeok habría
enfermado de un fuerte resfriado y que él era muy delicado con esas enfermedades,
por eso le habría tomado tanto tiempo regresar.
-Bien, vamos a beber un café.- Comentó Jimin aplaudiendo entusiasmado y los tres
nos dirigimos a la sala de descanso.31
Una vez sentados cada uno en un sofá individual y con una buena taza de café
comenzamos a hablar de distintos temas, Jimin contó que TaeHyung habría extrañado
mucho a su doctor encargado, que JungKook habría estado mejorando y ya jugaba
con otros niños y bueno yo... Yo hablé del increíble cambio de Namjoon, me
entusiasmaba demasiado hablar de los avances con él, los medicamentos que le he
estado dando han ayudado mucho en su recuperación, dice que las voces lo han
dejado tranquilo, no del todo, pero sí por largos periodos de tiempo... Me hacía tan feliz
saber que por fin estaba cambiando su vida gracias a mi.
Dios, podría pasar horas y horas, perderme en el tiempo hablando de NamJoon y lo
feliz que estaba por él.11
-Hey... ¡Hey!... ¿Jin?- Una mano sacudiéndose frente a mí me despertó del viaje en mi
cabeza.- Ya debemos ir a trabajar.
-S-Sí... Ya voy...-Me levanté del sofá dispuesto a salir del lugar pero me detuve frente
a mí compañero recién llegado.- Necesito hablar contigo.2
-¿Qué sucede?
-NamJoon me confesó que tú lo golpeaste.- Dije sin rodeos, apretando mis manos en
puños para controlarme y no hacer un escándalo.
-¿Qué? -Preguntó extrañado y comenzó a reír.- Jin eso es estúpido, perdón por decirlo
así, pero lo es... ¿Qué motivos tendría para golpearlo? ¿Crees que fui donde
él arriesgándome a ser atacado otra vez sólo para golpearlo?40
-Bueno, es lo que dijo él... Además ¿Qué hacías entrando a su habitación ese día que
apareció con su ojo morado?
-Sólo fue una equivocación, nada más que eso... Sabes que tengo otros pacientes en
ese piso.10
Su explicación no fue convincente para mí, sabía que algo no estaba bien con las
excusas de Hoseok e iba a descubrir qué sucedía.12
Salí de la habitación dejando a mis compañeros solos y me dirigí al quinto piso, pero
ésta vez a la habitación de Hee Young, la chica que hace un tiempo atrás intentó
suicidarse, YoonGi me había pedido que desde aquello semanalmente le llevara un
informe de ella y así poner al padre al tanto sobre su situación, así que ahí estaba yo,
observando a una joven encadenada al suelo de ambos pies y con una camisa de
fuerza que en todo momento intentaba quitarse.2
Tan solo una hora en aquel lugar bastaba para dejarme totalmente agotado, Hee
Young no hacía nada más que ruidos extraños e intentaba lastimarse con cualquier
cosa, por suerte no había nada en su habitación, más que los grilletes en sus pies que
le impedían salir corriendo de aquí y la verdad no la culpo, yo también quisiera salir
corriendo a veces.1
Caminé rápidamente hasta el ascensor y subí para llevarle el reporte a YoonGi, toqué
dos veces la puerta y nada, no oí respuesta, dos toques más y aún nada, quizás
YoonGi no se encontraba así que decidí pasar de igual manera para dejar los papeles
sobre su escritorio y marcharme, pero al entrar vi que estaba equivocado, YoonGi
estaba sentado en su silla y sobre sus piernas se encontraba Jimin...175
¿Jimin?
Jimin.
YoonGi le acariciaba las piernas de arriba hacia abajo repitiendo la acción un par de
veces, para luego tomar su mentón, pero antes de hacer cualquier otra cosa ambos se
voltearon a verme, ya que estaba parado aún con el pomo de la puerta en una de mis
manos.1
-Voy...-Me acerqué a él y le tendí los papeles que llevaba en la mano.- Sólo vine a
traer esto, el reporte de Hee Young.
-Gracias, ya puedes retirarte...- Cogió los documentos y los dejó sobre la mesa, le di
una rápida mirada a Jimin el cual se encontraba inmóvil y aún con su cara roja.- Ah,
Jin... Para la próxima toca antes de entrar.50
¿Qué?2
[...]
-¡Jin espera! ¡Detén el ascensor! -La voz de Jimin retumbaba a lo largo del pasillo
acompañado del sonido de sus zapatos mientras corría.- Gracias... Yo... Jin quería
explicar lo que viste antes... YoonGi y yo... Emm...
-Sí... Bueno, de igual manera quería decirte que con YoonGi estamos saliendo hace un
tiempo.
-Lo es, él es una buena persona.- Respondió mi compañero, pude ver como sus ojos
brillaban y su rostro se llenaba de felicidad por estar hablando de YoonGi.2
-Puede ser, pero es bastante gruñón, siempre que lo veo está gritando y molesto por
algo.
-No lo sé... Sí así fuera, se hubiera preocupado más por el ojo morado de NamJoon.
-¿Sabes Jin? Yo podría ayudarte con eso...-Salimos del ascensor para dirigirnos a la
entrada principal.- Hablaré con YoonGi para que ponga cámaras de seguridad.6
-¿En serio?- Estaba realmente sorprendido, sería de gran ayuda que hiciera eso.12
-Por supuesto, somos amigos Jin, yo te ayudaría en lo que necesites... Además sé que
te preocupas mucho por NamJoon.25
Ayer fue mi día libre y el día anterior había hablado sobre las cámaras con Jimin, que
para mi sorpresa ya se encontraban instaladas y funcionando en el pasillo del quinto
piso.20
-Gracias Jimin...- Susurré con una sonrisa y sentí una mano en mi hombro, la cual me
hizo saltar del susto.
-Buenos días.
-Buenos...- Era HoSeok el que me saludaba, sí bien nuestra relación como colegas no
era muy buena, hablábamos por pura cortesía.11
Luego de eso, seguí mi camino hasta la sala de descansos, donde me coloqué la bata
y ordené los papeles de los pacientes que debía ver, bajé hasta el primer piso y me
acerqué hasta "la farmacia" que era un pequeño cuarto donde se guardaban todos los
medicamentos, recogí los que Jimin había preparado para mí el día anterior ya que
hoy fue su turno de descansar, yo me haría cargo de el pequeño JungKook en su lugar
y él se encargaba de medicar a Namjoon cuando yo no estaba.
-¿El doctor Jimin sabe que pintas en las paredes?- Me parecía extraño que lo hiciera si
sobre la silla de su cuarto habían un montón de de papel en blanco y otros de colores
junto al resto de lápices que se encontraban intactos.
-Él dijo que pintara si me sentía triste.- Se volteó hacia mí y pude ver como sus labios
no reflejaban ningún tipo de expresión y sus ojos estaban ligeramente hinchados, al
parecer habría estado llorando.
-Con ésto te sentirás mejor...-Le tendí sus medicamentos y un vasito plástico que
contenía agua, el pequeño niño los recibió y tragó éstos sin peros.- Más tarde pasará
una enfermera a verte y te llevará a jugar con los demás niños, ¿Te agrada la idea?
JungKook asintió y volvió a lo que hacía antes, pintando y mezclando con empeño los
dos colores de sus crayones, espero que Jimin no se enfade con él por hacer aquello.
Tomé una de las hojas de colores antes de salir del cuarto y la guardé entre los
documentos, se la llevaría a NamJoon más tarde para que se entretenga con algo ya
que al estar en el área más peligrosa del hospital, no está permitido llevarle a los
pacientes cualquier tipo de objeto que pueda significar un peligro para ellos y el
personal, pero ¿Qué podría hacer con un trozo de papel? Eso no lastimaría a nadie.109
[...]
- Adelante.- Le oí decir y entré, NamJoon estaba sentado sobre su cama, con las
piernas cruzadas igual que un indio y daba pequeñas palmaditas en sus muslos.
-Para nada, este cuarto es más divertido que un parque de diversiones.- Sarcasmo,
NamJoon ya hablaba como cualquier persona normal y me agradaba bastante que
fuese así.71
Poco más de dos semanas con Olanzapina bastaron para cambiar al asustadizo y
sensible NamJoon y transformarlo en una persona completamente distinta, ya iba
demostrando su verdadera forma de ser, posee una personalidad seria, pero no llega a
ser desagradable, es amable, atento, simpático y además muy varonil.57
-Te traje esto...- Rebusqué entre mis cosas y saqué una hoja color verde que horas
antes sustraje de la habitación de JungKook y me acerqué a dársela, vi como sus ojos
brillaban al verla y la recibió feliz.- Es un simple papel, sólo pude conseguir esto para
poder tráete.
-Es perfecto...- Rápidamente comenzó a doblar y doblar la hoja.- Muchas gracias Jin.41
Tomé asiento a los pies de la cama y hablamos por horas y horas, el tiempo pasaba
volando con NamJoon, bueno, más con éste NamJoon. En ningún momento dejó de
dar dobleces al papel, sólo lo hacía para mirarme de vez en cuando y sonreír.
-¿Qué terminaste?.- Sentía curiosidad por lo que había hecho con aquella hoja de
papel, se acercó a mí y estiró su mano, dejando ver una pequeña tortuga de origami.
137
-Es para ti.- Su voz se hizo ligeramente más ronca y acortó un poco más la distancia
entre nosotros.127
Al verla recordé aquella vez donde mencionó haber tenido una tortuga de mascota y
derrepente algo haciendo presión sobre mis labios me sacó de aquellos pensamientos
y recuerdos.
Juntó ligeramente nuestros labios y cerró sus ojos por unos segundos, llevó una des
sus manos a mi mejilla y comenzó a acariciarla, tan suave, tan suave y cálido era
aquel contacto que no quería separarme de él, así que comencé a mover de a poco
mis labios viendo cómo él seguía el juego... Pero de repente volví a la tierra, esto no
era correcto.82
-¿C-Con un beso?7
-No sabía cómo más hacerlo.49
-Y-Yo... Debo irme.- Rápidamente guardé la tortuga de origami en el bolsillo dela bata,
tomé mis cosas y salí de la habitación, fui casi corriendo al ascensor presioné el
número seis y una vez que subió, abrió sus puertas y fui a tirarme sobre uno de los
sofás en la sala de descanso.
Acerqué mis dedos a mi boca, palpando ligeramente mis labios... Y no pude evitar reír,
reí de los nervios, reí de alegría, reí porque no sabía qué más hacer, sentía mi cuerpo
temblar y mi corazón latiendo cada vez más rápido por aquel suceso que se repetía
una y otra vez en mi mente, sus gruesos labios se sintieron tan suaves junto a los
míos, tan cálidos, como si fueran el uno para el otro, fue todo tan... Rico.114
No, no no no... Él está confundido, aún no está bien del todo, él no pudo haber hecho
eso queriendo y yo soy su doctor, no corresponde y no puedo estar pensando así de
él.
¿O sí?25
[...]
–Shh... –Me acerqué rápidamente a tapar su boca con una de mis manos.– Mierda
Jimin, no grites o todos se van a enterar
–Cuéntamelo todo.– Dijo cuando quité mi mano, colocando ambos codos sobre la
mesa y su cabeza apoyada en sus manos.54
–Ayer fui a visitarlo y bueno... Él... Sólo me besó, dijo que quería agradecerme por
ayudarlo y cuidar de él.
–Espera, yo también ayudé en algo ¿Dónde está mi beso?– Al decir esto frunció el
ceño e hizo un puchero.86
–Ve a pedirle besos a YoonGi.21
Jimin siempre lograba hacerme reír y con todo esto me hacía sentir más tranquilo, se
tomaba las cosas con humor, aunque ya parecíamos quinceañeras enamoradas
hablando así más que doctores.21
Rato después Jimin se levantó de su sitio e hizo una señal para que le siguiera,
obedecí y sin tocar antes entró a la oficina de YoonGi, al parecer éste no se
encontraba así que tomó asiento frente al escritorio, quedando yo de pie a un costado
de él y encendió una pequeña computadora portátil que había allí.
–Desde aquí YoonGi controla las cámaras...– Me informó, enseñándome los sitios que
grababan cada una.– Quería que vieras que ya todo está en orden.
–¿Lo vas a controlar? –Comentó en un tono burlesco en lo que hacía caso a lo que le
pedí.–Jin...¿Ese no es HoSeok?
Me acerqué más a la pantalla para poder ver con más claridad y efectivamente, era él
fuera de la puerta de NamJoon.
08
NamJoon
He llevado unas últimas semanas bastante tranquilas, aquellas voces casi ni aparecen
y eso me ha aliviado un montón, me siento tan tranquilo y relajado, porque sé que
ahora yo comenzaré a controlar mi vida y no ellas, le agradezco mucho a mi doctor
Jin...8
SeokJin.
Siempre fue una persona muy amable conmigo, ayer trajo un trozo de papel para que
pudiera entretenerme y como él siempre ha sido muy bueno conmigo quise hacerle un
pequeño regalo, desde que era un niño siempre fui bueno para hacer figuritas con
papel, ya que nunca fui de tener amigos y me tenía que entretener en algo.2
Cuando le entregué aquella tortuga pude ver como sus ojos se iluminaban, sus
robustos y rosados labios se abrían de a poco y formaban una sonrisa.
Lindo.
Patético.95
Esa era la mejor palabra que podía describirlo en aquel momento y bueno, no pude
resistirme ante tal hombre y sólo lo besé.31
Jin lograba despertar en mi algo que nunca antes había sentido, me hacía sentir feliz,
lograba atraparme por completo cuando me contaba historias de él, mi cuerpo
temblaba a su tacto, mi corazón aceleraba cuando cuidadosamente curaba mis heridas
o decía que quería lo mejor para mi, Jin es realmente maravilloso, él me hace sentir
vivo.7
–Y-Yo... Debo irme.– Fue lo último que le escuché decir y se marchó, dejándome sólo
en mi habitación.
Hoy vendría a verme también así que decidí ordenar mi cuarto... Aunque bueno,
tampoco había que hacer gran cosa, sólo es una cama en mal estado que ni siquiera
tiene sábanas y una silla a punto de desarmarse.40
–Adelante Jin, te estaba esperando...– Dicho esto aclaré un poco mi garganta y pasé
una de mis manos sobre mi cabello en un intento de peinarlo.
En un segundo mi cuerpo se paralizó y sudé frío, era él, entró a la habitación y luego
cerró la puerta tras suyo, en una de sus manos traía una jeringa vacía y comenzó a
jugar con ésta frente a mi.51
–Ho... HoSeok.29
–Veo que sigues hablando como retrasado Kim NamJoon... Yo sólo vine a visitarte.35
¿Visitarme?
Dio otra patada y se agachó frente a mi con una cínica sonrisa dejando la jeringa que
traía en sus manos a un costado de él y comenzó a subir la manga de su brazo
derecho dejando ver una grande y fea cicatriz.
–¿Creías que esta te la dejaría pasar?.– Alzó la voz mientras colocaba su brazo frente
a mis ojos.– Además te dejaste llevar por el estúpido de SeokJin dejándolo como el
héroe, el gran doctor y psiquiatra, ah, pero conmigo fue lo contrario ¿Por qué
NamJoon? ¿Qué te hice para que te descargaras contra mi?63
–¿Fue por las veces que te grité NamJoon?.– Seguía preguntando, mientras yo aún no
me enteraba de lo que sucedía, yo no recordaba nada, no sabía qué le sucedió en su
brazo y mucho menos sabía por qué se desquitaba conmigo.– Tú nunca respondías a
mis preguntas, si te grité y golpeé sólo fue por fines médicos, fue por tu bien...– Tomó
mi cabello levantando mi cabeza para luego golpearla contra el suelo.– Me hiciste
quedar como un estúpido frente a todos después de que me lastimaste y ya no te lo
dejaré pasar.49
Defiendete.64
Retorció su cuerpo bajo el mío y se volteó, quedando frente a frente, con mis piernas
una a cada lado de su cuerpo aprisionandolo con éstas, levanté la jeringa frente a él en
un intento de clavarla en su rostro, mi respiración estaba agitada y mi cara ardía por el
enojo que sentía, sólo buscaba defenderme de él, pero con sus manos capturó mis
muñecas interfiriendo con mi propósito y derrepente escuché gritos a lo lejos y sentí
como me empujaban hacia atrás tirándome dentro de la habitación y alejándome de
HoSeok, sentí que arrebataban el objeto que tenía en mis manos y lo lanzaban lejos.
SeokJin.
Sentí las suaves manos de Jin sobre mi rostro, que lo acariciaban lentamente haciendo
que de a poco me fuera calmando, controlando mi respiración y pude ver como tenía
una expresión de preocupación acompañada de unos ojos llorosos.
A lo lejos vi como el doctor Jimin capturaba a HoSeok, acompañado de unos
enfermeros, por todo el sitio se escuchaban los gritos de mi agresor el cual intentaba
zafarse del agarre sobre él.25
–Jin...
–Dime.
–Duele...– Dicho esto me soltó, sintiendo como el calor que emanaba su cuerpo
desaparecía, me ayudó a colocarme de pie y me sentó sobre la cama con cuidado.
[...]
Luego de un largo rato los gritos dejaron de escucharse, todo el pasillo ya estaba en
sumo silencio y tranquilidad, yo me encontraba recostado sobre la cama mientras Jin
limpiaba la sangre y heridas de mi rostro una vez más, él era cuidadoso con lo que
hacía y se concentraba demasiado para no lastimarme más, podía notarlo porque en
todo momento su entrecejo se encontraba fruncido y no desviaba jamás su vista de lo
que hacía.
–N-No digas eso NamJoon, no seas bobo.– Contestó nervioso y comenzé a reír, me
gustó ver aquella reacción acompañada de sus mejillas cambiando de color.
Estúpido.
09
Jin
–¿Despedido?7
A tres días del incidente con HoSeok y por fin hoy YoonGi me habló del tema, me
informó que sólo fue despedido del hospital y no fue posible llevarlo con la policía.22
¿Por qué?
–Bien, fuera de los golpes y heridas ya no hay nada malo con él.
–Todo bien con eso, aumenté su dosis inicial hace unos días y todo está bajo control.
¿Irse?
¿A dónde?
YoonGi me informó que como NamJoon ya se encontraba mucho mejor debían sacarlo
del hospital, ya que no se puede mantener "gente cuerda ocupando espacio", esas
fueron las palabras de mi jefe.
–Pero YoonGi ¿dónde irá? –Alcé la voz ligeramente molesto por su falta de
empatía.– Él no tiene dónde ir, tampoco tiene familia.26
–No lo sé y no me interesa, ahora firma esto para que pueda marcharse.– Dejó unos
documentos frente a mi e hizo un solo gesto para que los firmara.– Además, si no
hubiera matado a sus padres en primer lugar, podría estar con ellos.63
¿En serio está diciendo eso?
–Mañana mismo se irá, voy a informarle.– Dije firmando los papeles y retirándome
indignado de su oficina.
[...]
–¿Irme?– Preguntó feliz, con una gran sonrisa en su rostro la cual marcaba unos
hoyuelos en sus mejillas.34
–¿De verdad?
–¿NamJoon?
[...]
El bondadoso Min YoonGi había dado su autorización para que pudiera venir a buscar
a NamJoon y me tomara el resto del día libre y como mañana me tocaba descansar,
tendría dos días para poder estar con él y ayudarlo a instalarse en mi departamento
por un tiempo.22
Llegué a su piso cargando una pequeña mochila que contenía ropa y unas zapatillas
para NamJoon, no permitiría que se fuera de aquí con esa fea ropa de hospital, me
acerqué a la puerta y antes de tocar, ahora mi ex paciente la habría abierto dejándome
con la mano alzada, lista para golpear, me tomó de la muñeca y jaló de ésta para
dejarme dentro de la habitación.
–Ho-Hola...Te traje esto.– Le tendí la mochila y éste la recibió rápidamente.
–¿Una mochila?12
–¡Muchas gracias! –Me abrazó con fuerza por unos segundos y luego se alejó.– Me
encanta.52
La abrió y dejó caer las cosas sobre la cama y rápidamente comenzó a quitarse la ropa
frente a mi para colocarse lo que le había traído.53
–¿Qu-Qué haces? Por lo menos déjame salir para que te cambies.– Dije dando media
vuelta para salir del cuarto, pero derrepente sentí unos brazos que me rodearon,
impidiendo que saliera.
Y ahí estaba yo, como un camaleón cambiando mi cara de color, NamJoon comenzó a
reír y se alejó para continuar lo que hacía, mientras yo seguía observando la fea y
oxidada puerta de metal frente a mi.8
Una vez estuvo listo di media vuelta y me topé con un chico muy distinto al de unos
minutos atrás y muchísimo más cambiado que cuando lo conocí.
Una camiseta blanca que resaltaba sobre su ligero color moreno, una chaqueta color
negra y unos pantalones del mismo color haciendo un contraste y en sus pies unas
zapatillas color naranjo resaltando todo el conjunto.
–¿Cómo me veo? – Preguntó estirando un poco sus brazos hacia los costados y
dando una vuelta.45
–Te queda muy bien.– Demasiado bien.– Pero falta un detalle, siéntate.
–Ahora sí.– Susurré alejándome un poco, estaba listo para abandonar este lugar.
Nos subimos al ascensor y bajamos hasta la primera planta, bajamos de éste
caminando hacia la puerta para abandonar aquel lugar que por tanto tiempo tuvo
prisionero a NamJoon.
–“le bonheur de l'hôpital”... – Leyó el nombre del lugar que se encontraba escrito sobre
la gran entrada en letras que antes fueron doradas y que ahora se veían de un color
marrón.– ¡Le bonheur de l'hôpital, vete a la mierda!– Gritó una vez en la calle y
comenzamos a reír.57
Pocas cuadras más adelante decidí sacar mi teléfono adelantando un poco el paso,
dejando atrás a NamJoon para tomar una fotografía de él.
166
–Ahora este es tu hogar también, así que puedes hacer lo que quieras, sin pena
¿Okay?64
–Está bien.– Me regaló una linda sonrisa la cual aprecié y guardé en mi memoria como
lo más preciado del mundo.
Entré al cuarto de baño y comencé a quitar todo rastro de ropa, una vez desnudo me
sumergí en aquel pequeño lugar, dejando que el agua empapara por completo mi cara
y cabello, me sentía en el paraíso, Jin había preparado la bañera para mí y llenó esta
de agua que se encontraba a la temperatura perfecta.
–Pasa.
–Vine a... A... A traerte unas... Unas toallas.– Palabra que decía, tono que aumentaba
en su rostro, con dificultad logró murmurar aquellas palabras, se le veía muy distraído.
Tímidamente dejó las toallas y otro cambio de ropa sobre la tapa del retrete mientras
me miraba de reojo.
Antes de que se marchara le pedí de favor que ayudara a limpiar mi espalda, pero la
verdad es que sólo fue una excusa para estar juntos, él accedió a hacerlo y
tímidamente tomó asiento al borde de la tina, puso un poco de jabón en una esponja
de baño y comenzó a pasarla lentamente por mi espalda, de inmediato me relajé, cerré
los ojos y disfruté de aquel momento, luego Jin tomó uno de mis brazos para pasar la
esponja también, mi cuerpo se encontraba lleno de jabón al igual que el agua, me
sentía tan tranquilo y seguro, me hubiera gustado estar toda la vida así, sintiendo la
suave esponja recorrer mi cuerpo, pero derrepente el sonido de ésta cayendo al suelo
y los dedos de SeokJin tocando mi brazo me hicieron volver a la realidad.1
–¿Qué le pasó a tu cuerpo? – Escuché un suave murmuro detrás de mi, lo volteé a ver
y sentí mi pecho apretarse.
Nunca antes había visto tales expresiones en el rostro de Jin, nunca había visto sus
ojos gran tristes como ahora, cristalizados al borde de las lágrimas, su labio inferior
temblaba junto al resto de su cuerpo y sus manos... Sus manos temblorosas recorrían
mi cuerpo en busca de explicaciones.1
–¿Quién?
–Mis padres.– Debido al gran camisón de hospital, asumo que Jin nunca antes se
había percatado de la cantidad inmensa de marcas que recorrían mi cuerpo, las cuales
eran las claras señales de que no tuve la mejor infancia de todas.– Mi padre era un
asqueroso alcohólico que le gustaba apagar sus cigarrillos en el cuerpo de su hijo, mi
madre se encargaba de golpearme siempre que podía ya que decía que sólo era un
estorbo y un tonto... Que por mi culpa éramos pobres, por mi culpa mi padre la
engañaba, por mi culpa mi hermano menor falleció cuando mi madre daría a luz, por
mi culp...73
–Yo...– Sorbía sus mocos para que no terminaran cayendo.– Lo siento mucho, haz
tenido una vida muy díficil.
–Sí, pero desde que te conozco todo ha estado mejor, eres lo mejor que me pudo
pasar.32
Pude ver que Jin sonreía intentando calmarse, luego apoyó una de sus manos en el
borde de la bañera y como esta se encontraba mojada de un segundo a otro resbaló
cayendo dentro detrás de mi.58
–N-No seas bobo...– Llevó las manos hasta su rostro apartando un poco el jabón que
tenía encima y salió del cuarto.
6
[...]
En lo que Jin se daba una ducha, yo me dediqué a observar por el pequeño balcón del
departamento, miraba los edificios de los alrededores y la gente pasar de un lado a
otro en las calles, definitivamente esto es mucho mejor que el encierro y realmente
tenía unas muy buenas vistas este lugar.6
Derrepente sentí unas frías manos sobre mi cuello, volteé rápidamente y me encontré
al que fue mi doctor con una polera color rosa y unos pantalones grises, también traía
sobre sus hombros una toalla con la cual secaba su negro cabello y lo despeinaba.14
Tú111
–Claro que sí.– Respondió con una sonrisa, tendió su toalla en la baranda del balcón y
tomó mi brazo arrastrándome hasta la cocina.
Como era de esperarse fui un completo caos y más que ayudar, sólo le causé
problemas a Jin, "No te quites la servilleta de ese dedo" "¡Te dije que no lo
hicieras!" gritaba alterado después de que por accidente pasé a cortar mi dedo pulgar,
nunca antes había cocinado y no sabía que era tan difícil, así que dejé que SeokJin
terminara con eso mientras yo colocaba la mesa.18
–¿Y?¿te gustó?2
[...]
Ya era la hora de dormir y ambos nos encontrábamos agotados por el largo día, yo no
estaba acostumbrado a tener días tan emocionantes como el de hoy así que estaba a
punto de caer rendido en cualquier parte.
–Tú dormirás en la cama...– Sentí como los brazos de Jin me rodeaban tímidamente
por detrás.– Yo me quedaré en el sofá.15
Era la primera vez que se acercaba a abrazarme sin la intención de calmarme por
algo.
Con las luces ya apagadas y cada uno en su mitad de la cama, decidí voltearme para
quedar justo detrás de él y abrazarlo, acercándolo bien a mi cuerpo.
–¿Por qué? –Le Cuestioné de inmediato, no aceptaría que me rechazara una vez
más.– Ya no eres mi doctor... ¿A caso tienes a alguien?51
–Para nada, no es eso... Sólo que esto es nuevo para mi, nunca antes he estado en
relaciones o en algo, además hace un día atrás eras mi paciente en el psiquiátrico y
hoy estás en la misma cama que yo...
–NamJoon yo...
–Permiteme entregarte la mejor de mis peores partes Jin...– Sin poder ver nada, sentí
como también se volteó quedando frente a mi, podía sentir su respiración muy cerca
de mi rostro, amaba aquella cercanía con él.– Sé bien que estuve mal y que toda la
oscuridad de la que huí me la traje conmigo, está dentro de mi, pero ya estuve una
temporada en el infierno y ahora quiero otra en el paraíso... Tú eres mi paraíso.78
Escuché una pequeña risa de Jin mientras se acercaba más a mi, para poco después
caer dormidos.
11
Jin
Jimin no paraba de preguntar sobre NamJoon, me seguía a todos lados para que le
contara qué hacíamos en el departamento, pero no había mucho que contar, hacíamos
muchas cosas juntos, él siempre trataba de ayudarme en todo y era muy atento,
aunque no le tengo permitido acercarse mucho a la cocina, siempre intentaba preparar
cosas sencillas para que comiera al llegar del trabajo, "Vi muchos videos de cocina
hoy, quería sorprenderte con esto" decía siempre esperándome con un plato servido
sobre la mesa.23
–No seas estúpido.– Ya había entendido qué es lo que quería escuchar, pero para su
mala suerte no ha pasado nada de ese tipo.– Y ya vamos a trabajar, hoy tengo mucho
que hacer.
Salimos de la sala de descansos y bajamos hasta el primer piso donde Jimin atendería
a Jungkook y como TaeHyung habría quedado sin un médico a cargo, me lo habrían
asignado a mi.
No hubo respuesta.
–¿Sucede algo?.– Pregunté acercándome a él, me agaché justo detrás y coloqué una
mano en su hombro para llamar su atención.
–¡No quiero hablar contigo!.– Gritó volteando hacia mi para quitar mi mano de encima,
luego se levantó e hice lo mismo.– ¡Quiero al doctor HoSeok! ¡Dónde está el doctor
HoSeok!39
Él tiene un trastorno bipolar el cual le causa cambios drásticos de humor y vive sus
emociones de manera diferente a los demás y por esto mismo nos encontrábamos en
esta situación.
–¡Quiero al doctor HoSeok! ¡Lo necesito!– Alzaba la voz en un tono molesto, luego me
empujó para que me hiciera a un lado y corrió hasta la puerta de la habitación para
salir de esta.15
Fui detrás de él y vi que se dirigía al patio del hospital alarmando a todos mis
compañeros, ya que se le veía bastante descontrolado, les hice una señal para que lo
dejaran y fui a buscarlo, tenía que calmarlo y controlar rápidamente la situación.
A lo lejos vi como caía de rodillas en la tierra y comenzaba a golpear el suelo con sus
puños.
–Tranquilo Tae.– Le susurré una vez estuve con él y tomé su mano para que no se
terminara lastimando.
–Doctor Jin... ¿Por qué tuvo que irse? ¿Por qué me dejó solo?– Preguntaba entre
sollozos y con tristeza.– Él dijo que siempre cuidaría de mi.3
Me dolía.
Me dolía verlo así por HoSeok, TaeHyung sufría por no estar con el doctor que tanto le
cuidó, lloraba por él pensando que fue su culpa, pero no podía contarle la verdad, no
podía decirle lo malo y violento que fue con NamJoon, no podía cambiar la buena
imagen que tiene de HoSeok.8
–No digas eso, él no se fue por tu culpa... Él tuvo que irse por una emergencia
familiar.– Dicho esto, Tae se incorporó, levantándose del suelo y sacudiendo su ropa
que se encontraba llena de tierra.
–¿Y él está bien?.– Preguntaba ahora con preocupación, olvidando por completo todo
lo que había llorado y gritado hace unos momentos.– ¿Volverá?
–Tranquilo, él se encuentra bien... Y no sé si podrá volver, sólo hay que esperar para
ver qué sucede más adelante.
Llevé a TaeHyung hasta su habitación donde por suerte pude darle su dosis sin
problema alguno, hablamos por un rato para que pudiéramos conocernos más y luego
volvimos a salir para que jugara con el pequeño Jungkook.2
–Vi lo que pasó antes...– Dijo Jimin tomando asiento junto a mi en una de las mesas
que habían en el patio.– Tendrás que tener mucha paciencia con él.
–Lo sé...– Respondí frustrado enredando mis dedos en mi cabello.– Pero es muy
díficil... ¿Sabes que tuve que mentirle a TaeHyung? ¿Sabes lo mal que me siento por
verlo sufrir tanto por el imbécil de HoSeok?
Mi compañero comenzó a reír mientras negaba con la cabeza, estoy seguro de que no
sabe lo difícil que será para mí todo esto.
Jimin asintió y yo recosté mi cuerpo sobre la mesa escondido mi rostro entre los
brazos mientras a lo lejos estaba Jungkook y TaeHyung corriendo de un lado para
otro.
[...]
–Horrible... –Dije alejándome de él antes de que pudiera hacer algo más.– Sólo quiero
tirarme en la cama y dormir.
NamJoon asintió sin decir nada más y fuimos hasta la habitación, una vez allí me senté
al borde de la cama sintiendo como unas cálidas manos tomaban el borde de mi
camisa para quitarla y reemplazarla por el pijama.
–Bobo...
–¿Y lo hiciste?
–Yo... Lo olvidé.
12
NamJoon
SeokJin me sacudía con fuerza para que despertara y le prestara atención, aún estaba
oscuro afuera y según el reloj que se encontraba sobre la mesita de noche, eran las
2:15 AM.
–Oí unos ruidos...– Susurraba Jin asustado mientras tomaba uno de mis brazos con
fuerza.– ¿Puedes ir a ver qué es?48
Asentí pasando con fuerza las manos por mi cara, para poder despertar bien, me
levanté de la cama y encendí la luz de la habitación así Jin no se asustaba más, para
luego salir.
Todo se encontraba a oscuras y lentamente caminé hasta la cocina para ver si los
ruidos provenían de allí, esperé unos segundos y nada.
Es allí.21
¿Y eso?
–¿Quién está ahí? –Pregunté esperando algún tipo de respuesta, pero nada más se
oyó.21
Decidí salir al balcón cuando derrepente sentí un dolor en mis pies descalzos.
–¿Qué es esto?.– Murmuré agachándome para recoger aquello que pisaba y pude
distinguir en la oscuridad que se trataba de unas pequeñas piedras pintadas de rojo.1
Como el departamento de Jin sólo estaba en un segundo piso era fácil que alguien
lanzara cosas para molestar.
Y a esta hora.
Me levanté y asomé ligeramente mi cuerpo fuera de las barandas para poder ver más
allá y buscar al responsable de aquello, pero las calles se encontraban vacías, ni un
alma se veía en ellas.9
Rápidamente entré cerrando el ventanal y corrí para ver a Jin, pensando que algo le
había sucedido.
–¿Qué sucede?– Pregunté alterado abriendo la puerta, viendo como Jin se encontraba
sentado abrazando una almohada.
–Como no volvías, creí que te sucedió algo... Me había asustado.– Susurró mientras
apretaba más la almohada.– Y... ¿Encontraste algo?
–Algún gracioso estaba lanzando piedras al ventanal, pero no pude ver quién era. –
Apagué la luz y me metí nuevamente a la cama, abrazando con fuerza el cuerpo de
Jin.5
–Estás helado...– Metí mis manos bajo su polera de pijama esperando que pudiera
calentarlas un poco mientras él se acercaba a besarme.– Gracias por ir revisar.
Dejé un beso sobre el cabello de Jin y al poco tiempo después nos quedamos
dormidos.
1
[...]
¿Qué haces aquí solo? ¿No nos extrañas? Nosotros a ti sí... Eres un estúpido
NamJoon, nosotros siempre estaremos contigo aunque no lo quieras...69
¿Qué pasó?
¿Una pesadilla?
Fui hasta el armario de Jin y tomé prestada una camisa blanca junto a unos pantalones
negros, un gorro y algo más para abrigarme ya que afuera estaba nublado.
Hoy tenía la tarea de comprar un par de cosas que hacían falta, así que cogí el dinero
que Jin dejó para las compras y salí del departamento con una pequeña lista en mis
manos la cual intentaba leer en mi mente.
43
[...]
Una vez en el supermercado, tomé una pequeña canasta para colocar los productos
que compraría y comencé a ir de un lado para otro por los pasillos buscando lo de
aquella lista.
–Al... Almi... Almidón de ma... Mierda Jin, escribes muy extraño, se nota que eres
doctor...– Susurraba para mí intentando descifrar lo que ponía en el papel.109
El lugar no se encontraba muy lleno así que era raro toparme con gente en los pasillos,
pero derrepente sentí como alguien me observaba a lo lejos llamando mi atención,
sentía como su mirada pesaba sobre mi así que me volteé, pero no había
absolutamente nadie.61
Una vez compré las cosas salí rápidamente del lugar camino al departamento, sentía
mi cuerpo extraño y algo me decía que venían detrás de mi, pero cada vez que
intentaba mirar, la sensación desaparecía y nadie estaba detrás.1
Sentía miedo y desesperación, sabía que él venía por mí una vez más, podía escuchar
como sus pasos retumbaban tan fuertes a lo largo del pasillos que aquel sonido
traspasaba perfectamente las paredes, deteniéndose una vez estuvo fuera de mi
cuarto, quería correr o defenderme de aquel hombre, pero sabía que algo no andaba
bien con mi cuerpo, no se movía, no podía controlarlo.
–Lo siento, no quise decirte eso...– Me disculpé para acercarme a él y besarlo, aún
estaba medio adormilado.– Sólo estaba teniendo una pesadilla Jin, no dije eso por ti.
–Claro que sí, jamás le diría algo tan feo a alguien tan precioso como tú.
No debes mentir.65
[...]
Una fuerte música provenía desde fuera del cuarto y salí para ver de qué se trataba
encontrándome con un bailarín hombre en la estrecha cocina, el cual se encontraba
picando unas verduras para el almuerzo, me acerqué a él por detrás y con sigilo para
sorprenderle.
–Si me das un beso, puede ser que lo haga.– Al decir esto sus mejillas se volvieron de
un tono rosado y llevé mis manos a estas para sentir como aumentaba su temperatura,
uní nuestros labios y poco a poco comencé a moverlos, notando como Jin hacía lo
mismo bajé mis manos por su cuello y pecho acariciándolo suavemente, al llegar al
borde de su camisa metí mis manos dentro para acariciar también su espalda.42
Jin rodeaba mi cuello con sus brazos mientras yo seguía acariciando su espalda, pero
quería ir más allá así que metí ambas manos por el pantalón de pijama tocando su
trasero a mi antojo, apretándolo ligeramente y Jin se dejaba hacer.44
Comencé a repartir besos por todo su cuello mientras que con mis dedos pulgares
estimulaba sus pezones, escuchando jadeos y pequeños gemidos en respuesta.
Moví mis caderas en su dirección notando como su miembro ya se encontraba erecto
al igual que el mío, así que decidí rozarlos una y otra vez, sintiendo como una
desesperación crecía dentro de mi y ligeras cosquillas aparecían en mi entrepierna.
–Terminaré más loco si sigues ha-haciendo eso...– Me sentía impaciente, quería más
contacto, así que con suavidad le tomé por el cabello e introduje mi hombría en su
boca, él comenzó a hacer suaves movimientos con su cabeza de arriba a abajo,
roncos gemidos escapaban de entre mis labios, me gustaba tanto lo que hacía que no
podía evitar jalar un poco de su cabello, me encantaba sentir su cálida boca realizando
aquel trabajo.
Luego de un rato se levantó y volvimos a cambiar de posiciones, pero esta vez Jin se
encontraba de espaldas a mi, quité la poca ropa que aún le quedaba y lamí dos de
mis dedos para luego acercarlos a su entrada, los froté un poco sobre ésta e introduje
uno escuchando un suspiro como respuesta y luego el otro, moviéndolos un poco
podía notar como el cuerpo frente a mi se estremecía.52
Una vez se encontraba listo, retiré mis dedos de su interior y alinee mi miembro con su
orificio, frotandolo un poco contra este para luego introducirlo lentamente, por su parte
Jin se encontraba ligeramente apoyado en el mesón apretando con fuerza un paño de
cocina que había allí, su rostro estaba de un color rojizo y temblaba un poco a medida
que me introducía en él, soltaba pequeñas quejas, así que con mi mano libre comencé
a acariciar su espalda para que se sintiera más tranquilo y relajado.
Derrepente sentí como Jin comenzaba temblar más, sus piernas cedían y todo su
cuerpo se estremecía mientras su interior apretaba con más fuerza mi hombría, estaba
tan agitado y ya no aguanté un segundo más llegando al orgasmo, me corrí en su
interior para luego retirar mi miembro y voltearlo, él abrazó mi cuello y yo le rodeé por
la espalda con uno se mis brazos, llevando mi mano libre a su erección la cual
comencé a masajear lentamente primero para luego hacerlo con más rapidez, acerqué
mi rostro al de Jin y éste intentó unir nuestros labios, pero no paraba de gemir con
fuerza, así que mordí suavemente su belfo inferior, sintiendo como al segundo se
corría en mi mano y arañaba mi espalda con fuerza.
–Me encantas...– Susurré y se subió sobre mi, tomando mis manos dejándolas sobre
mi cabeza.
–Y tú a mí... Bobo
14
Jin
NamJoon dormía, así que para no molestarle me levanté con sumo cuidado y caminé
hasta el cuarto de baño para tomar una ducha, cuando salí del baño vi que Nam habría
despertado y se encontraba preparando el desayuno para los dos.
–Muchas gracias NamJoon– Hice caso y en lo que colocaba las cosas sobre la mesa,
noté que a lo lejos justo frente a la puerta había un pequeño sobre color rojo tirado en
el suelo, me levanté para ir a buscarlo y al recogerlo revisé el contenido.
–¿Qué es eso?
–No lo sé, estaba aquí tirado.– Me dirigí a NamJoon para enseñárselo.– Solo tiene un
papel con una dirección y números... Creo que es una fecha y una hora.
¿Siento celos?
–Tú deberías conocerlo, es un chico muy guapo llamado Kim SeokJin, lo veré mañana
cuando vuelva del trabajo.54
[...]
Una vez llegué al hospital comencé con mi larga jornada, le di su medicina a unos
cuantos pacientes, hablé y examiné a otros, para luego casi a las 5 de la tarde
reunirme con Jimin en el patio, nuestra rutina era siempre la misma así que
quedábamos a esa hora para poder descansar un poco mientras Tae y Jungkook
jugaban.
Le conté a Jimin que últimamente han estado sucediendo cosas muy extrañas en
casa, ya más de una vez nos han despertado el ruido de pequeñas piedras contra el
ventanal, NamJoon dice que lo siguen por la calle cada vez que sale y lo del sobre de
esta mañana.
–Ellos nunca hacen nada Jimin, además que no ha pasado nada tan grave.
–Eso está mal Jin, sabes que si NamJoon no es constante con las pastillas pueden
pasar cosas malas... ¿No ha actuado raro?
–Jin eres psiquiatra y uno de los mejores de acá, sabes que debes preocuparte por
eso, no vaya a ser que NamJoon te lastime o...
–¡No! –Le interrumpí molesto antes de que dijera algo más y di un pequeño golpe
sobre la mesa donde nos encontrábamos.– NamJoon jamás me lastimaría Jimin.22
–E-Está bien Jin, no te pongas así... Y dime, ¿Qué es eso del sobre de esta mañana?
–Alguien dejó en la puerta un sobre con una dirección y el nombre de NamJoon dentro,
además de una hora y fecha que es dentro de tres días...
–Pues no lo sé... Sólo creo que alguien nos está molestando, prefiero no darle
importancia.
[...]
La noche cayó y el hospital se encontraba en absoluto silencio, del primer piso hasta el
tercero sólo había tranquilidad, ya que todos se encontraban durmiendo, sólo le
alcanzaban a oír los pasos de los enfermeros que rondaban por ahí en caso de algún
problema, pero para mí suerte yo era el encargado del cuarto y quinto, donde sólo
habrían gritos y llantos de los pacientes peligrosos y recorrer aquellos pasillos donde a
penas había una pequeña luz que los iluminaban, me hacían temblar y asustarme un
poco, otra razón más para odiar los turnos de noche.2
Primero revisé el cuarto piso, inspeccionando una por una las habitaciones desde
afuera, por la pequeña ventanilla de cada puerta.
Para mi suerte todo se encontraba en órden, algunos pacientes sólo estaban parados
el fondo de su oscuro cuarto, otros sólo dormían, algunos golpeaban las sucias
paredes como buscando una salida, nada muy distinto al día ya que siempre es lo
mismo.
Tomé el ascensor y una vez en el quinto piso repetí mis acciones del anterior,
encontrándome con las mismas escenas del otro piso, sólo que esta vez había una
diferencia, me detuve frente a la puerta con un oxidado número 49 en ella.
NamJoon.
¿O si?
Yo lo quiero y debo preocuparme más por él, NamJoon no merece caer en lo mismo
una vez más.
Quizás Jimin tenga razón y deba empezar a preocuparme más, también debería
prestar más atención a las cosas que nos están sucediendo.
Y derrepente un susto.
Salté sobre la cama al sentir como la puerta se abría de golpe dejando que la luz del
pasillo entrara a la habitación y marcando una silueta masculina frente a mi.
–Doctor Jin...– Pude reconocer la voz de un enfermero.– El paciente 2709, Jungkook
tuvo una crisis y como usted es el más cercano a él de todos los del turno... Es
preferible que vaya usted a verlo.7
Desperté encontrándome aún solo en la cama, me froté con fuerza los ojos dispuesto a
levantarme para ir a desayunar, al colocar una taza de café en la mesa me percaté de
un sobre exactamente igual al del día anterior, el cual abrí y en su interior había una
pequeña hoja de papel que contenía la misma fecha y hora que el anterior, también
traía la dirección escrita y mi nombre, pero a diferencia del otro, éste tenía escrito "Dos
días" bajo todo lo demás.
Me acerqué a una pequeña estantería que Jin tenía en la sala y lo guardé entre los
libros, jamás le he visto leer uno de estos así que dudo que pueda encontrarlo allí, no
quiero que lo vea y se preocupe, ya que ha tenido unos días bastante difíciles.
Ya eran casi las 09 a.m. y Jin ya estaba por llegar de su largo día de trabajo, ya que
habría tenido un turno de noche también, comencé a preparar un desayuno para él, le
gustaban mucho las cosas dulces así que en un plato coloqué un pequeño quequito
relleno de manjar y cubierto de algún tipo de glaseado, también preparé un jugo de
frutas para él.
Una película de acción me atrapó, la veía con mucha atención hasta que de reojo pude
notar una extraña sombra detrás de la cortina que daba al balcón.5
¿Qué es eso?
Te vigilan NamJoon.10
Volví a tirarme sobre el sofá y al levantar mi vista hasta el televisor, éste se encontraba
en llamas.
¿Qué sucede?
Asustado corrí rápidamente hasta la cocina, llenando una olla con agua, la tomé y
lancé el contenido al televisor con la esperanza de que el fuego no se propagara por
todo el edificio, pero algo andaba mal...11
Destruye todo.
–Buenos días y bienvenido...– Le saludé estirando mis brazos para abrazarle, aún con
la olla en una de mis manos.
Jin me miraba con una expresión molesta y a la vez de no entender lo que le decía,
intenté ser lo más claro posible con él sobre lo que había visto, me disculpé un millón
de veces esperando que no se molestara conmigo, pero de igual manera recibí un
regaño.
–Solo por ésto te perdonaré el que hayas estropeado mi televisor junto a la electricidad
de todo el edificio.– Comentó regalándole una sonrisa.14
[...]
Dos días pasaron, Jin trabajaba hoy hasta las 10 P.M. así que podría salir sin que él se
enterase, pensaba asistir al lugar que decían los sobres para saber de qué se
trataba.22
¿Arriesgado?17
Estos días habría estada bastante nervioso por el asunto, "No me preocupa, sólo creo
que hay que ignorar esto" decía cada vez que le mencionaba el asunto, pero ambos
sabíamos que se preocupaba y el tema del sobre rondaba su cabeza todo el tiempo.
09:00 P.M. Era la citación, salí con media hora antes para llegar al lugar sin problema,
fuera oscurecía lentamente, como comenzaba a hacer frío tomé una chaqueta, las
llaves del departamento, un poco de dinero y salí a la calle para tomar un taxi.
–¿Puede llevarme a ésta dirección?– Le tendí el papel al chofer del taxi y éste arrancó
el auto.
–Aquí es.– Dijo el señor luego de conducir un buen rato, pagué el viaje y salí del auto,
encontrándome con una especie de pequeño bosque alejado un poco de la ciudad.24
–Gracias Tae... ¿De dónde sacaste estos dulces?– Pregunté extrañado ya que dentro
del hospital no había ningún lugar en donde obtenerlos.
–¡Sí! –Gritó derrepente.– Ho... MinHo, su madre vino a verlo y le trajo dulces, luego él
los compartió conmigo y yo con usted.24
Al cabo de varios minutos hablando con el joven Tae, haciendo preguntas diversas
para ver cómo iba con sus cambios de humor, comencé a sentirme un poco extraño,
mi vista era borrosa y a pesar de estar sentado sobre la silla de la habitación del chico,
todo a mi alrededor daba vueltas y sentía que iba a caer al suelo.33
–Yo... Lo siento Tae, más tarde... Seguiremos con est...– Un duro golpe en mi cabeza
me hizo cerrar los ojos con fuerza, al parecer había caído y luego de eso no supe nada
más.
[...]
–Jin... ¿Me escuchas? –Esa era la voz de Jimin que me llamaba, con gran esfuerzo
logré abrir mis ojos viendo primero el sucio techo que al parecer pertenecía a una
habitación de los pacientes, luego más allá divisé a mi amigo parado cerca de la
puerta.
–¿Q-Qué sucede?– mis párpados pesaban y mi cabeza giraba lentamente de una
dirección a otra, no entendía qué pasaba.
–Te golpeaste contra el suelo... Pero no pasó nada más, estarás bien.– Dió unos
suaves golpes sobre mis piernas y comenzó a sonreír.
–Vete a tu casa, regresa cuando te sientas mejor... –Dijo en tono de órden.– Y tú... –
Añadió apuntando a mi compañero.– A mi oficina y luego te harás cargo de los
pacientes de Jin.8
Ambos asentimos y YoonGi abandonó el lugar junto con Jimin, al cabo de unos
minutos decidí levantarme, los mareos casi eran inexistentes, mi vista estaba casi del
todo recuperada y mi cabeza... Bueno, dolía por el golpe, pero nada más. Quité mi
bata con pereza y guardé un par de cosas en mi mochila colocándola en mi espalda,
bajé por el ascensor dirigiéndome a la entrada principal y abandoné el hospital.15
[...]
06:45 P.M. Marcaba el reloj de mi muñeca, ya casi llegaba a casa, faltaban unas pocas
cuadras y ya me sentía bien casi del todo, el dolor que provocó el golpe en la cabeza
aún estaba, pero era leve.
Doblé en una esquina entrando por una pequeña calle que usaba como "atajo" a casa,
cuando derrepente un auto paró junto a mi con brusquedad, el conductor bajó y tapó
mi cabeza con una especie de tela, luego me golpeó un par de veces tomando con
fuerza uno de mis brazos y sin saber qué sucedía caí sobre una superficie blanda,
escuchando una puerta cerrarse detrás de mi, estaba dentro del auto y éste comenzó
a moverse, intenté pedir ayuda o quitar aquella prenda de mi cabeza, pero mi cuerpo
no respondía y mis párpados pesaban, pocos segundos después y sin darme cuenta
caí dormido.44
[...]
Hacía frío y sólo veía oscuridad, mi cabeza aún se encontraba cubierta, mis brazos y
pies estaban atados, sentía el cuerpo temblar sin poder controlarlo, al parecer estaba
sentado y de rodillas en el suelo.
¿Dónde estoy?
Estaba asustado, a mi alrededor sólo oía lo que al parecer eran ramas y hojas siendo
pisadas, no estaba solo.
Por otra parte estaba SeokJin, de rodillas al piso y temblando, su rostro cubierto y
escuchando una risa muy familiar para él.
–Nos vamos a divertir mucho los tres.– Le escuchaba decir con tonos burlescos, Jin
tenía miedo de enfrentarlo en aquellas condiciones, le conocía y sabía de lo que era
capaz.
HoSeok.29
Aquel sujeto que le atormentó y agredió por mucho tiempo en su estadía en el hospital
psiquiátrico, aquel violento doctor que intentó matarle la última vez que se vieron,
¿Pero cómo habían llegado a aquella situación?¿Por qué se encontraban los tres en
medio de un bosque y a oscuras?
Una semana antes HoSeok volvió al hospital, pero no como un doctor más o un
visitante, más bien lo hizo como si de un ladrón se tratase. Desde que lo corrieron de
su trabajo, habría estado visitando recurrentemente el lugar, tanto para observar a
SeokJin como a su querido TaeHyung, sabía la rutina de ellos y sabía que podría
encontrar al niño solo en el patio del hospital y nadie les molestaría, cruzó la alta pared
de cemento que cerraba el patio del hospital, escondiéndose tras los escasos árboles
que habías, los cuales eran suficientes para pasar desapercibido.6
Sin saber de aquella presencia, TaeHyung corrió tras los árboles para esconderse
también, pero de JungKook, ya que ambos se encontraban jugando, pero Tae no
esperaba ser apresado por un brazo que le rodeaba por detrás y una mano que cubría
su boca para que no gritara.
–Tranquilo pequeño, soy yo. –Le susurraba HoSeok para que el asustado joven se
calmara, el cual de inmediato le reconoció y comenzó a llorar, se volteó y lo abrazó con
fuerza. HoSeok era la persona más importante en la vida de TaeHyung y éste haría lo
que fuera por él, el mayor sabía que podía contar con él para sus planes así que con
discursos como que le sacaría del hospital y que siempre lo cuidaría, logró persuadir al
menor para que éste accediera a ayudarle.– Necesito que le des esto al doctor Jin en
exactamente siete días más, ¿Puedes hacerlo por mi TaeHyung?11
–Tae, con esto Jin dormirá y podré sacarte de aquí, te lo contaré todo.– Y así explicó
con detalles y algunas mentiras el plan que traía en mente, manipulando al chico logró
convencerle para que le ayudara y ciegamente TaeHyung aceptó cada cosa y guardó
silencio, después de todo Tae estaba más feliz que nunca por aquel encuentro, estaba
feliz porque el mayor no se olvidó de él, estaba feliz porque sentía que HoSeok era el
único que se preocupaba por él y allí estaba para sacarle.34
Le entregó dos pequeñas bolsitas con unos caramelos las cuales Tae escondió entre
sus ropas, "Los de la bolsita roja son para Jin y los de la bolsa verde son para ti." Le
explicaba despeinado sus cabellos con cariño, después de todo, HoSeok realmente se
preocupaba por el niño y sabía lo mucho que le gustaban los dulces, no quería correr
el riesgo de que se tentara y terminara consumiendo los que eran destinados a
SeokJin.
–Sueltalo ahora mismo.– Exigía NamJoon con voz firme y sudor en su frente.– Deja a
Jin fuera de esto... ¡Estás enfermo HoSeok!33
–Te explicaré algo NamJoon...– Hablaba HoSeok con tranquilidad mientras bajaba
lentamente el cuchillo hasta los brazos de Jin, cortando un poco la piel haciendo que
este gritara por el dolor y provocando más a NamJoon, el cual a penas lograba
contenerse, no aceptaría que agredieran así a la única persona que le quería y que le
ayudó cuando peor se encontraba.– Desde aquel día en que me lastimaste el brazo
juré que jamás te lo dejaría pasar, jamás te lo perdonaría, no lo olvidaría fácil y como
ves, por fin hoy quedaremos a mano...22
–¡Basta! –Enfurecido y con su rostro ardiendo, NamJoon gritó para que HoSeok se
detuviera, ya que seguía lastimando a Jin y su llanto se oía por todas partes logrando
desaparecer en lo más profundo del bosque, desesperado por aquella cruel imagen se
lanzó de rodillas al suelo logrando llamar la atención del agresor de su pareja.– Ven
aquí y hazme todo eso a mi... –Levantó los brazos a la altura de sus hombros sin
apartar la vista de HoSeok.– No seas cobarde y ven aquí.23
En lo que se daba tan fuerte enfrentamiento, SeokJin logró colocarse de pie, estando
aún con sus manos atadas se acercó con cautela hasta la espalda de HoSeok,
lanzando una patada para que éste cayera al suelo al igual como lo había echo
NamJoon segundos antes, el cual rápidamente se colocó de pié y corrió hasta el
cuchillo en el suelo, lo tomó y se abalanzó sobre HoSeok el cual se había volteado tras
caer al suelo.
Una, dos, tres y más puñaladas comenzó a repartir NamJoon con rabia y violencia
sobre el cuerpo de HoSeok, logrando cortar sus brazos y manos primeramente, ya que
se habría intentado cubrir del ataque.56
–¡NamJoon para! –SeokJin gritaba desesperado, asustado y con lágrimas cayendo por
sus mejillas.– ¡Para por favor!¡NamJoon!7
Tras unos pocos minutos de gritos, los cuales parecieron eternos a los ojos de Jin,
NamJoon se alejó del cuerpo ahora sin vida de HoSeok, lanzó el cuchillo lejos y se
acercó a su pareja para desatarle, asustado SeokJin se alejó de él sin permitirle que se
acercara más y cayó de rodillas al suelo, luego frente a él se arrodilló NamJoon.41
–Ellas dijeron que lo hiciera... Tenía que protegerte Jin, yo... Yo no podía permitir que
te hicieran daño, no quería perderte.22
–Aquella vez cuando dije que eras mi paraíso Jin, hablaba en serio... Eres una persona
maravillosa Kim SeokJin...– A lo lejos mientras NamJoon hablaba se comenzaban a oír
cada vez con más intensidad el sonido de unas sirenas, también luces se asomaban
de entre los árboles y pisadas cada vez más cerca se hacían presentes.– Te amo.34
El corazón de Jin dolió y se apretó al oír aquello, era primera vez que NamJoon lo
decía y eso lo hacía sentir extrañamente mal.3
–Jin, quiero que cierres tus ojos.– Le susurró logrando que él escuchara e hiciera caso
sin cuestionarlo.4
Jin simplemente obedeció, cerró sus ojos y bajó su cabeza, escuchó como las hojas
secas del suelo crujían frente a él, luego un golpe se escuchó seguido de unos
disparos y un cuerpo cayendo violentamente al suelo.57
Jin sabía qué había pasado y nuevamente se largó a llorar, pero esta vez con más
desesperación y tristeza, gritaba tan fuerte que su garganta dolía y negándose a abrir
los ojos, los apretaba evitando a toda costa ver lo que había sucedido.
Epílogo
SeokJin ya no sabía cuánto tiempo llevaba en aquel lugar, encerrado sin poder ver a otras
personas o poder ir a su departamento y darse una buena ducha.1
Cinco meses habían pasado desde aquel suceso traumático en la vida de Jin, donde vio como su
querido y preciado NamJoon asesinaba a una persona, para luego morir a manos de unos
policías.55
Aquel día TaeHyung lloraba desconsoladamente en su cuarto del hospital y como Jimin se haría
cargo de él por el resto del día, intentaba animarle un poco, pero Tae para nada se alegró, ya que
sintiéndose culpable y traicionado por su querido y antiguo doctor HoSeok, el cual no aparecía en
busca de él como prometió, decidió contar lo sucedido, contó cómo se había reunido con él y lo
que tramaba hacer, le contó todo lo que sabía a Jimin y de inmediato éste avisó a YoonGi y a la
policía.4
Jimin en compañía de una ambulancia y los oficiales llegaron al lugar, se escucharon disparos y
gritos, llantos desconsolados y de inmediato se supo que algo no andaba bien, a lo lejos divisó a
su amigo caminando con dificultad junto a un oficial, corrió a abrazarle y socorrerle.
–Todo estará bien.– Le susurraba para calmarle, aunque sabía que nada mejoraría la situación.
Desde aquel día SeokJin perdió el brillo en sus ojos, su sonrisa se esfumó junto con las ganas
que tenía de vivir.37
Poco tiempo antes de ser encerrado, junto con Jimin llegaron a la conclusión de que HoSeok
tenía rasgos psicópatas y tenía una obsesión con NamJoon, cosa que para nada ayudó a Jin, ya
que se sentía culpable por no haber hecho algo antes o haberlo notado. Ahora cada día que
pasaba se lamentaba por lo mismo y se culpaba por la muerte de NamJoon y como si de un mal
chiste se tratase, fue diagnosticado con depresión y encerrado en el mismo piso y habitación
donde antes estuvo su amado.85
Jimin hacía lo que podía para que su amigo estuviera bien, pero como si él no quisiera cooperar,
tuvo que ver como poco a poco los antidepresivos, pastillas para dormir y tranquilizantes se
llevaban la vida de SeokJin.
Fin