Duelo 1
Duelo 1
Duelo 1
KENNETH C. HAUGK
Atravesando el Duelo
CONTENIDO
Salmo 6:2-3
Nueva Versión Internacional (NVI)
Una nota para ti
Has recibido este libro porque alguien se preocupa por ti. Es el primer libro de cuatro libros titulados
“Atravesando el duelo” que te llegarán durante el próximo año.
La persona que te entregó este libro sabe que has perdido a alguien muy amado por ti. Cuando pierdes a alguien
que amas, pierdes una parte de ti mismo. Y eso puede doler profundamente.
Espero que me permitas caminar a tu lado a través del proceso del duelo no como un experto, ni siquiera como
un guía, sino como un compañero con experiencia en este tema.
Mi corazón está contigo. No hay palabras mágicas que pongan fin a tu dolor. Desearía que las hubiera. Pero
espero que las palabras en este libro, y los otros tres libros que seguirán, en una pequeña medida, te reconforten,
apoyen, fortalezcan, y animen.
Ken Haugh
1. Las tres Ns del duelo
Has sufrido una de las mayores pérdidas que cualquier persona haya experimentado-la pérdida de un ser
amado. Tu vida ha dado un vuelco, y sientes como si te faltara una parte de ti. La respuesta más real y humana es
llorar dicha pérdida.
Sin embargo, a veces las personas aún sienten la presión de que no deberían hacer el luto. El mensaje que
reciben es que el duelo es opcional, anormal, o hasta una señal de debilidad.
Nada puede estar más lejos de la verdad. El duelo es un proceso muy normal, natural, y necesario. Estas son
las tres Ns del duelo.
• El duelo es normal porque es la manera en que las personas responden a una pérdida personal
importante. Es normal esperar que las personas que han perdido a alguien que aman estén
profundamente afectadas por su pérdida.
• El duelo es natural ya que es algo completamente humano. No podemos evitar el dolor. Es parte de
nosotros. Estamos creados para sentir el dolor, así como estamos creados para amar. Amamos, y cuando
perdemos a alguien que amamos, sentimos dolor.
• El duelo es necesario. El duelo proporciona una manera saludable de hacer frente a la pérdida y todo lo
el duelo significa para nosotros. Tratar de ignorar o evitar el duelo no va a funcionar. Sólo hará que el
duelo se extienda por más tiempo y posiblemente le cause aún más dolor.
A través de los años he hablado con mucha gente que ha pedido disculpas por expresar sus emociones ante la
pérdida de un ser querido. Siempre les he dicho cosas como esta: "No tienes que disculparte de nada. Mostrar tus
sentimientos es absolutamente lo mejor que puedes hacer ahora. Es saludable, y muestra que eres humano."
El pensamiento más importante que puedo compartir contigo es este: Date permiso para llorar la pérdida.
Eres humano, entonces permítete ser humano. A veces la gente comienza a sentir que sus lágrimas están brotando
o sus emociones fluyendo, pero luego cierran el grifo y tratan de contener sus sentimientos. Permitirse a uno
mismo sentir es lo mejor y lo más saludable que puedes hacer por ti y por aquellos que te aman.
Cansado estoy de sollozar; toda la noche inundo de lágrimas mi cama, ¡mi lecho empapo con mi llanto!
Salmo 6:6
En este libro y en los tres que siguen, quiero compartir algunos pensamientos que pueden ayudarte en el
próximo año. Algunas personas leen todos los libros de una vez.
Otros los leen de a poco, de la manera que puedan. Podrías querer releer diferentes partes de tanto en tanto.
Lo que quizás no se aplica en este momento puede ser útil para ti en otro momento más adelante.
Mientras que estos libros no pueden decirte exactamente cómo es que debes atravesar el duelo, pueden
ayudarte a entender cómo funciona el proceso del duelo. Cuando sabes algo de lo que podrías esperar, puedes
responder en las maneras que son correctas para ti.
2. El shock de la pérdida
Una vez leí sobre un hombre en Florida que estaba manejando hacia su casa cuando repentinamente por
debajo de la calle se abrió un gran orificio de desagüe y tragó su auto. No se lastimó, pero quedó estupefacto y
confundido. Durante un rato no sabía dónde estaba o lo que le había sucedido. Luego exclamó: “Un minuto estaba
manejando en mi propio barrio en un día brillante y soleado, y en el próximo minuto estaba en el fondo de un
agujero oscuro y profundo con el mundo que se me caía encima”.
Esta historia me recuerda un poco de lo que se siente cuando un ser amado se muere. En un momento tu ser
querido está vivo, y de repente, muerto. De pronto tu mundo se derrumba, y quedas sintiéndote aturdido y
confuso.
Una de las primeras reacciones que la gente tiene luego de la muerte de un ser querido es shock. Lo que ha
pasado es tan terrible, tan doloroso, que sus mentes y emociones están abrumadas. Una mujer una vez me dijo,
“Quedé completamente entumecida, No podía pensar ni sentir nada. Mi mente estaba desenfocada. Todo estaba
en cámara lenta y estaba funcionando en piloto automático”.
Es muy común experimentar la negación durante el shock. ¡Sabemos que es verdad, por supuesto, pero en otro
nivel, tampoco lo podemos creer-no queremos creerlo! Esto no
puede estar sucediendo. Debe haber algún error. Debe haber alguna manera de arreglar las cosas. Pensamos y
esperamos que nos levantaremos un día y nuestro ser amado aún estará vivo.
Cuando perdemos a alguien que hemos Amado profundamente, quedamos con un dolor que puede
paralizarnos emocionalmente… Cuando ellos mueren una parte de nosotros muere también.
El shock es una respuesta incorporada a la pérdida de un ser amado. Hasta puede ser una bendición que nos
protege del golpe, bloqueando algo de nuestro dolor emocional hasta que estemos más preparados para manejar
el impacto completo de nuestra pérdida
Es por eso que algunas personas parecen tan calmas y serenas en el velatorio o funeral de un ser amado. Su
shock puede estar sirviendo como una anestesia emocional durante un tiempo de dolor inimaginable. Una madre
me dijo que ella se encontró consolando a otras personas en El funeral de su hijo, Ella dijo, “Era casi como si el
funeral era para el hijo de otra persona, no para el mío”.
Incluso si una pérdida es esperada, las personas aún pueden experimentar shock. Un hombre me dijo una vez
“Me sentí en shock cuando el doctor manifestó que el cáncer de mi esposa era terminal, y luego cuando murió, el
shock regresó. Aunque yo sabía que iba a morir, era más de lo que yo podía manejar cuando murió”.
No permitas que el shock te asuste. Si tu mente no está clara, si te sientes insensibilizado, si todo parece una
pesadilla, o si continúas esperando que tu ser amado te llame o aparezca por la puerta, probablemente estés en
shock. El shock es una respuesta muy normal cuando has perdido a alguien que amas.
Yo conozco un colaborador de un centro de asistencia para enfermos terminales y sus familias que realiza más
de mil llamadas de seguimiento a personas en el proceso de duelo cada año para verificar y comprobar cómo
están La primera llamada es al primer mes de la muerte del ser amado.
En estas llamadas iniciales mucha gente le dice que no pueden concentrarse en nada más que en su pérdida,
tienen cambios de humor repentinos, o su vida les parece increíblemente vacía. Algunos dicen que están
agobiados con sentimientos de ira, culpa, tristeza, o soledad, mientras que otros le dicen que se encuentran
insensibilizados y que no sienten absolutamente nada. Algunos dicen que se sienten con deseos de dormir todo
el tiempo, mientras que otros tienen dificultad para dormir. Algunos le dicen que lloran constantemente, mientras
que otros dicen que no han podido derramar una sola lágrima. Muchos describen cómo han tenido sueños
recurrentes sobre su ser amado, y muchos dicen que hay momentos en que piensan que escuchan la voz de su
ser amado.
El colaborador de un centro de asistencia para enfermos terminales y sus familias me dijo que después de que
las personas describen sus experiencias de duelo, su pregunta más común es, ¿Me estaré volviendo loco?” Su
respuesta fue. “No, no te estás volviendo loco. Los sentimientos locos son normales en el duelo”.
Muchas personas me han dicho lo mismo. Sentían que se estaban volviendo locas durante el proceso del duelo.
Estaban seguras que eran las únicas que tenían esos pensamientos o sentimientos y temían ser anormales, Pero
luego comenzaron a hablar con otras personas que estaban también en el proceso de duelo y rápidamente
descubrieron que la mayoría de ellos tuvieron o estaban pasando por las mismas experiencias. Descubrieron que
sus sentimientos eran normales.
Job 3:26
Si alguna vez sientes que te estás volviendo loco, una de las mejores cosas que puedes hacer es encontrar a otras
personas que estén pasando por un duelo o quien conozca sobre el proceso del duelo y contarles lo que tú estás
experimentando. Lo más seguro es que aprenderás que tu “locura” en realidad no es tal. Es sólo una parte muy
normal del duelo.
Cuando mi esposa Joan falleció después de una batalla de tres años y medio con cáncer de ovarios, tomé una
decisión consciente de no ser fuerte. Es decir, iría en contra de la cultura común intentando deliberadamente no
ser totalmente auto-suficiente o sin emociones, intentando no siempre mostrar una apariencia exterior
inquebrantable, actuando como si no hubiera estado devastado por la pérdida.
Cuando las personas que me conocían bien (y aún algunas que no me conocían) me preguntaban cómo estaba,
yo no suavizaba mi respuesta. Si estaba pasando por un mal momento y la gente me preguntaba cómo estaba, les
decía la verdad. Si estaba extrañando terriblemente a Joan, les diría cuánto me estaba doliendo. La razón por la
cual elegí ser más abierto y honesto es que he visto demasiada gente intentando ser fuerte, reprimiendo sus
sentimientos, e intentando soportar el duelo con sus propias fuerzas que no sólo aumentó y prolongó su dolor en
el corazón, sino que además les privó del apoyo de amigos que realmente se preocupaban.
Una mujer me dijo que ella había sido el pilar en la familia. Cuando su madre murió, ella era la fuerte,
preocupándose por su padre y apoyando a todos sus hermanos menores en su duelo. Una década después murió
su gato, y ella tuvo un quiebre. “Yo amaba a mi gato, pero no podía entender porqué estaba tan devastada,”
comentó. “Entonces me di cuenta, todos los sentimientos que estaba teniendo eran por mi madre. Nunca me
permití atravesar el duelo por su muerte. Estaba apareciendo ahora porque yo era la única persona en duelo y no
tenía a otra persona a quien cuidar”.
Es importante que te permitas atravesar el duelo aún si eres alguien que generalmente eres estoico o no
expresivo. No necesitas ser muy sensible o dramático si eso no está en tu naturaleza.
Muchas personas comentaron lo “fuerte” que yo era. Poco sabían sobre todo lo que sucediendo en mi interior.
Pero sí permítete sentir tu pérdida lo más que puedas manejar y encuentra maneras de manejar tus
sentimientos dolorosos que coincidan con quién eres tú. No necesitas relacionarte de esta manera con todas las
personas en todo momento. Yo era selectivo cuándo, dónde, y con quién compartiría mi duelo. Pero a largo plazo,
permitirte atravesar el duelo es mucho más saludable y menos doloroso para ti y para aquellos que amas que
cuando intentas ser fuerte y conservas todo contenido dentro de ti.
La verdadera fortaleza no significa vivir sin emociones y encarnizadamente independiente. Es permitirte ser
humano, reconociendo tus propias limitaciones, y Permitirles a otros que te ayuden cuando realmente lo necesitas
No pongas una cara feliz porque piensas que eso es lo que se espera de ti. El duele negado es duelo no sanado
5. Tu propio duelo
En varias ocasiones he hablado en la misma conferencia que Earl Grollman, que ha escrito y enseñado
extensivamente en el área del duelo. Durante tales conferencias hemos tenido varias conversaciones. En una cena
una vez me preguntó: “¿Cuál piensas tú que es el peor de los duelos?” Hice algunas conjeturas, todas ellas
incorrectas, Luego el respondió. “Tu propio duelo.”
Piensa sobre eso, El peor de los duelos es el tuyo propio. El peor de los dolores que experimentarás es el tuyo
propio.
Es inútil que trates de determinar si tu pérdida es mayor o más dolorosa que la de otro, La única persona que
puede experimentar por completo tu duelo eres tú. Y la única persona que puede experimentar por completo el
duelo de otra persona es esa otra persona. Comparar pérdidas es como comparar una pierna fracturada con un
brazo fracturado, no hará que la pierna (o brazo) duela menos o se sane más rápido. Lo más útil que puedes hacer
en este momento es simplemente vivir tu propio duelo sin medirlo contra el duelo de otra persona.
Ninguna otra persona atravesará el duelo exactamente como tú. El hecho de que otra persona sienta de cierta
Manera en un punto determinado no significa que tú debes sentirlo de esa manera. Tú eres una persona diferente
y estás procesando una perdida diferente, Incluso otros que están procesando el duelo de la misma persona
amada que tú Con toda seguridad lo atravesarán de diferente manera. Ellos procesarán diferentes temas con
diferentes sentimientos en momentos diferentes. No te puedo decir la cantidad de veces que he visto a miembros
de la misma familia atravesando el duelo en maneras completamente diferentes.
Mis lágrimas son las palabras con las que yo le cuento a Dios mi dolor.
Adolfo Quezada
Ciertamente consuela y apoya a otras personas queridas como te sea posible, pero no compares tu duelo. Las
comparaciones no sólo son inútiles, son a menudo dañinas porque pueden hacernos atravesar el duelo a la
manera de otra persona o en el marco de tiempo de otra persona en lugar de atravesar el duelo a nuestra manera
en nuestro propio tiempo.
Procesa el duelo de la manera que sea buena para ti. Tú eres tú, tu pérdida es diferente a la de cualquier otra
persona, y tú atravesarás el duelo de la manera que necesitas hacerlo.
Tu duelo será únicamente tuyo porque está influenciado por factores que son específicos para ti y tu pérdida.
Quiero hacerte saber cuáles son muchos de estos factores, para que puedas anticipar algunos factores con los que
te puedes encontrar en tu duelo.
Un hombre que ha sufrido múltiples pérdidas me ha dicho, "Cuando pierdes a uno de tus padres pierdes tu
pasado; cuando pierdes a un esposo pierdes tu presente; cuando pierdes a un hijo pierdes tu futuro". Nuestra
relación con nuestro ser amado influye en la manera en que atravesamos el duelo.
La pérdida de un padre o una madre puede generar una gran cantidad de cuestionamientos. En lo más profundo
de nosotros mismos con frecuencia presumimos que nuestros padres siempre estarán ahí. Si uno de los
progenitores aún vive, podemos estar tan preocupados por él/ella que olvidamos nuestro propio duelo. Si nos
quedamos sin ninguno de nuestros padres, podemos comenzar a pensar sobre nuestra propia mortalidad. "Mi
papá era el último que quedaba en nuestra familia de su generación. Cuando falleció, sentí que yo era el próximo,"
comentó un hombre.
La pérdida de un cónyuge puede afectar nuestras Vidas de muchas formas. Una esposa en duelo me dijo, “La
mitad de mí se ha muerto. Estaba incompleta. No supe más quién era yo”. Nuestra soledad puede ser muy
profunda. Podemos haber perdido a nuestro mejor amigo, amante, compañero fundamental, y alma gemela, todo
de una sola vez. Nuestra seguridad física, emocional, y financiera puede verse amenazada. Nuestra identidad
puede cambiar drásticamente. Podemos vernos forzados a enfrentar nuevos roles para los cuales no estamos
preparados (cocinar, reparación del automóvil, finanzas, limpieza).
La pérdida de un hijo puede parecer estar en contra de las leyes de la naturaleza. Ya sea que nuestro hijo
tuviera seis o sesenta años, se suponía que él o ella nos sobreviviría. Las esperanzas y los sueños mueren con
nuestro hijo. Podemos sentir que hemos fallado en nuestros deberes de crianza y protección. Podemos sentirnos
enormemente culpables, “¿Por qué no me morí yo y no mi hija?” dijo un hombre. “Quería tanto tomar su lugar o
estar allí con ella”.
Los abortos espontáneos, nacimientos de un niño muerto, o muertes de bebés son generalmente
minimizados por otras personas. Una mujer dijo, “Me cansé de la gente diciendo, ‘Al menos no te habías
encariñado’ o ‘Puedes tener otros bebés’. Yo me había encariñado con ella, y deseaba esa bebé”.
La pérdida de un hermano/o hermana puede ser la pérdida de un mejor amigo/a, de nuestra niñez, y una Parte
importante de nuestra identidad. Otros pueden no reconocer los lazos emocionales profundos y abarcadores que
tuvimos con nuestro hermano/a. Un hombre dijo, “La mayoría de mis amigos nunca conocieron a mi hermano ni
nos vieron juntos, entonces simplemente no pudieron comprender la profundidad de mi duelo”.
Otras pérdidas, tales como la pérdida de un amigo, nieto, abuelo, o colega, pueden ser igualmente importantes,
pero son con frecuencia ignoradas por otros. Pueden no reconocer nuestro duelo porque piensan que no éramos
tan cercanos a la persona fallecida como lo fueron otros. Entonces nuestro duelo es ignorado, y sufrimos en
soledad.
El facilitador de nuestro grupo de duelo me dijo, “Si fue una muerte súbita, la gente dice, “Al menos no sufrió.”
Si fue una muerte anticipada dicen: “Al Menos tuviste tiempo de decirle adiós. Ninguna de las dos maneras es más
fácil o menos dolorosa. Son sólo diferentes, y Ambas duelen profundamente.”
Dios permanece con nosotras en, estos lugares y valles oscuros, aun cuando sentimos que estamos fuera de
control, perdidos y enojados.
Robert J. Miller
Muerte súbita. Cuando la muerte de la persona no es esperada, el shock inicial y el descreimiento es con
frecuencia mayor y dura más tiempo. Lo repentino de la Pérdida es abrumador. No tiene sentido y es duro de
creer, Una mujer me dijo, “Recuerdo pensar. No es posible que esté muerto. No puede estarlo. Recién hablé con
él.
Cuando un ser amado muere sin aviso, no tenemos oportunidad de decir adiós. Puede haber muchos temas no
resueltos y deseamos haber tenido un minuto más para decir “Te amo,” o pedir perdón por un desacuerdo que
ahora parece tan trivial, Una muerte súbita también puede dejarnos sintiéndonos muy temerosos, vulnerables, y
sacudidos.
Muerte anticipada. Muchas personas piensan erróneamente que cuando una muerte es esperada, esto hace
que de alguna manera el duelo sea más fácil de atravesar. Saber que un ser amado está muriendo podría
permitirte comenzar a atravesar el duelo antes de que ocurra la muerte o poder de algún modo pasar la página
con tu ser amado. Pero advierto que dije podría, no que sucederá, porque esto puede no suceder. Y saber por
anticipado con certeza no hace que la pérdida sea menos dolorosa.
Una muerte anticipada también puede traer consigo otros asuntos. Si tú eras el que se preocupada por tu ser
amado, puedes estar física o emocionalmente exhausto. Puedes tener sentimientos conflictivos-alivio de que el
vía crucis se acabó, enojo hacia la persona amada por haberte hecho pasar por ello, y culpa por tener esos
sentimientos-sumado a tu duelo
A veces una muerte anticipada puede volverse una muerte súbita. Nuestro ser amado puede haber sido un
enfermo terminal, pero haberse muerto repentinamente de una complicación. Quedamos tambaleando por la
pérdida inesperada, mientras que todos alrededor muestro piensan que estábamos preparados para la muerte.
Causa de muerte
Salmo 25:16-17
La forma en que murió tu ser amado puede influir en lo que estás enfrentando y cómo te sientes.
Una muerte accidental puede causar un shock emocional tremendo que permanece por bastante tiempo. La
muerte, ya sea causada por humanos o por un desastre natural, parece increíblemente fortuita, sin sentido, o
injusta. Es común enfocarse en quién o a qué había que culpar o los incontables "y si" que podrían haber evitado
que sucediera. Podemos estar increíblemente enojados, a veces con una persona, a veces con Dios, a veces
simplemente enojados porque sí.
Una muerte súbita por causas naturales puede producir shock y también culpabilidad por no haber reconocido
los síntomas con anterioridad. El enojo es muy común con este tipo de pérdida también. Podemos estar enojados
con nosotros mismos, con la persona que murió, o con otros. Una hija dijo. "Estaba enojada con mi padre por no
haber ido al médico, pero también furiosa conmigo misma por no haberlo hecho ir al médico".
Una muerte por una enfermedad crónica o de largo plazo puede traer una sensación de alivio que el
sufrimiento ha terminado, luego culpa por sentir alivio. El duelo puede estar compuesto por agotamiento
emocional y físico y recuerdos dolorosos de la terrible experiencia. Una mujer me dijo, "Estaba preocupada que
sólo recordaría imágenes de mi 'madre sufrida' y nunca ninguna de mi 'madre feliz de hace muchos años atrás
(Por cierto, los recuerdos felices si volvieron).
Una muerte por suicidio deja a los seres queridos preguntándose por qué y puede ocasionar fuertes
sentimientos de enojo o culpa. El duelo está con frecuencia compuesto del estigma que rodea al suicidio y el juicio
y aislamiento que los miembros de la familia pueden sentir. Una mujer dijo, "Luego del suicidio de mi hermano,
mi padre nos hizo jurar que conservaríamos el secreto. No quería que nadie supiera cómo murió mi hermano".
Un asesinato deja a los seres queridos sintiéndose impotentes y vulnerables, y profundamente enojados con el
agresor-conocido o desconocido. Sentimientos de furia y un deseo de venganza puede ser aterrador. y la
frustración con el sistema de justicia penal puede complicar o retrasar el duelo.
Calidad de la relación
Aunque ya hayamos pasado por un duelo antes, este nuevo duelo puede ser diferente.
Algunas relaciones son muy cercanas, otras distantes; algunas son asombrosamente armoniosas, otras cargadas
de conflicto. La calidad de nuestra relación con una persona afectará nuestro duelo cuando el o ella muera Se dice
a menudo que cuanto más cercano hayamos estado emocionalmente a la persona fallecida, mayor será nuestro
duelo. Mientras que eso es absolutamente cierto, también es cierto que una relación muy tirante puede hacer el
duelo más difícil. Los conflictos del pasado pueden llevar a enojo, culpabilidad, o arrepentimiento sobre asuntos
no resueltos o puede causar que procesemos el duelo por el tipo de relación que nunca tuvimos. La muerte de un
padre o un esposo abusivo puede resultar en sentimientos de alivio más que de pérdida. Un hombre me dijo, "La
gente esperaba que estuviera triste cuando mi padre murió. Tenía miedo de decirles que sentí alivio cuando
murió".
No vivimos aislados en la vida. Otras circunstancias en la vida pueden afectar nuestro duelo. Nuestras
responsabilidades de familia o trabajo afectan cuánto tiempo le dedicamos a nuestro duelo y también cuando,
donde, y cómo procesamos el duelo, Múltiples pérdidas experimentadas al mismo tiempo o en sucesión pueden
irse acumulando para agravar o complicar nuestro duelo. Nuestra cultura, tradiciones, y legado afectan la forma
en que procesamos el duelo, como también nuestras personalidades individuales ya sea si somos introvertidos o
extrovertidos, emocionales o intelectuales, audaces o cautelosos. La manera en que manejamos pérdidas previas,
nuestras actuales responsabilidades, asuntos de salud, aptitud física, estrés, si presenciamos la muerte, nuestras
creencias religiosas, y nuestro sistema de apoyo también pueden influir dramáticamente en los asuntos y
sentimientos con los que nos encontramos cuando nos ajustamos a la pérdida de nuestro ser amado.
Todos estos factores, y miles más, harán que tu proceso sea excepcionalmente tuyo. Saber lo que puedes
esperar ciertamente no quitará el dolor, pero puede quitarle un poco de temor a lo desconocido y puede
proporcionar un poco de luz a tu proceso.
7. Cuídate a ti mismo
Soy típicamente un fuerte defensor del altruismo, del servicio, y del cuidado de los demás. Pero cuando hablo
con personas que están en duelo, los aliento firmemente, por una vez en la vida, a que pongan sus necesidades
en primer plano. El duelo es un tiempo donde las personas necesitan dedicar tiempo y energía extra para cuidarse
a si mismos.
El duelo toma tiempo, y el duelo es trabajo. Mucho de esto es trabajo emocional. He hablado con un sinnúmero
de personas que pospusieron su duelo. Doctores, pastores, consejeros, enfermeros, y otras personas dedicadas
al servicio, a menudo son victimas de esto, como pueden serlo aquellos que fueron cuidadores de sus seres
amados antes de morir. Cuando las personas dedican una gran parte de su tiempo cuidando a otros, se vuelve
fácil desatender sus propias necesidades enfocándose continuamente en las necesidades de otras personas.
Un colega mío cuyo hijo murió a poco de su nacimiento dijo que era un acto de constante equilibrio el cuidar a
otros miembros de la familia atendiendo al mismo tiempo las necesidades propias. Encontró muy gratificante el
cuidar de su esposa en duelo y a sus dos hijas pequeñas que habían perdido a un hermano bebe, pero también
fue agotador. Ya que estaban dependiendo tanto de él, sabia que tenia que ocuparse muy bien de si mismo y
permitirse atravesar el duelo también.
Restaura a los de en ellos corazón quebrantado abatidos mientras y cubre de vendas sus heridas. Desatiendes
tus propios
Salmo 147:3
Si tú eres una de esas personas que tienes otros miembros de la familia que dependen de ti; tu esposa,
hermanos, hijos, o un padre aún vivo, puedes encontrar muy fácil enfocar toda tu energía en ellos mientras
desatiendes tus propias necesidades. Recuerda que una de las maneras más importantes de cuidar de aquellos
que dependen de ti es cuidarte mucho a ti mismo. Si estás atendiendo tus propias necesidades de sana manera,
serás mucho más capaz de atender sus necesidades también.
Cuida de tus necesidades físicas
El duelo no sólo afecta a las personas emocionalmente también las afecta físicamente. Muchas personas
experimentan una pérdida del apetito, tienen dificultad para dormir, sufren una ausencia de energía, o
experimentan otros síntomas físicos. Al saber que el duelo puede exigírtelo todo, asegúrate de prestarle atención
a tu cuerpo. Aunque no siempre lo desees, es importante que comas bien, duermas bien, realices ejercicio
regularmente, y tengas cuidado con el consumo De alcohol y medicamentos. Si experimentas dificultades en
cualquiera de estas áreas, no tomes mucho tiempo para llamar al doctor.
Hasta puede ser bueno fijar una hora para un chequeo Médico en el futuro cercano ya que hay algunas pruebas
que la gente que ha sufrido una pérdida importante puede ser más susceptible a enfermedades. Aquellos que
eran los cuidadores fundamentales del ser amado a menudo tienen dificultad en volver a un ciclo regular de sueño.
Nuevamente, tu doctor puede ayudarte a recobrar los hábitos de sueño adecuados.
Ten paciencia con el mundo entero, pero ante ando contigo mismo
El duelo es lo suficientemente duro en sí mismo. Pero puede aún ser más difícil si comienzas a tener problemas
de salud. Cuídate mucho. Tu ser amado era muy importante para ti, pero tú eres muy importante también. Por lo
tanto, haz extra por ti y trátate como la persona importante que eres.
El duelo produce una niebla espesa que se introduce en nuestras vidas. La niebla del duelo puede afectar
nuestra capacidad de pensar o concentrar. Muchas veces, esta niebla aparece justo luego de que se muere un ser
amado. Pero incluso luego de que el shock desaparece, la niebla puede permanecer o ir y venir durante un largo
periodo de tiempo.
Un hombre en duelo me comentó cómo había salido de un supermercado, empujó su carrito cargado de
comestibles hacia su auto, entró al auto y se volvió para su casa dejando los comestibles atrás. Otra mujer
describió cómo había leído la misma página de un libro cinco o seis veces y aún no podía recordar lo que había
leído.
Lo que sucede es que nuestro duelo se torna tan pesado que nos rodea, nubla nuestras mentes, e interfiere
con nuestra capacidad de pensar claramente. Estamos sobrecargados.
Las personas describen este sentimiento de muchas maneras: "hacía las cosas por inercia", "una existencia
robótica", "funcionaba al 50 por ciento", "olvidadizo y confundido", "con un retraso de reacción de 10 segundos.
o "desorientado e indeciso". por nombrar sólo algunas.
Si estas atrapado en la niebla del duelo, sé paciente contigo mismo. Es normal y pasará con el tiempo. Por
ahora, trata de evitar abordar cualquier cosa que es realmente difícil o requiere de mucha concentración. Si debes
hacer esa tarea, pide ayuda a alguien. Sé extremadamente cuidadoso cuando realizas actividades potencialmente
peligrosas tales como conducir, cocinar, trabajo de jardín, o mantenimiento de la casa, ya que las personas son
propicias a tener más accidentes durante el duelo. Si estás perdiendo cosas, haz como hizo un hombre-lleva una
libreta contigo y escribe notas y recordatorios durante el día. Si es posible, evita tomar decisiones mayores o
irreversibles hasta que llegues a un punto donde puedas pensar claramente todas las consecuencias a largo plazo.
¡Aunque por momento parece que Dios se te va de las manos-no te preocupes Dios te tiene sujetado
firmemente!
David Paap
Recuerda, la niebla es sólo temporaria. Puede permanecer por momentos o ir y venir por un rato, pero tarde o
temprano se levantará.
Más que a menudo luego de perder a un ser amado, las personas vuelven su mirada a sus propios defectos y
errores y hacen demasiado hincapié en todas las maneras que sienten que podrían no haber defraudado a su ser
amado. En consecuencia, no sería inusual para ti que te sintieras culpable sobre algunas de tus palabras o acciones
cuando tu ser amado murió.
Es muy fácil cuestionarse a posteriori y, mirando hacia atrás, encontrar miles de cosas que podrías haber dicho
o hecho de forma diferente.
Date cuenta, sin embargo, que pasaste por una de las experiencias más difíciles que cualquiera puede vivir.
Puedes haber tenido que tomar algunas de las decisiones más duras que cualquiera puede haber tomado, quizás
muy rápidamente y bajo gran presión. Puedes no haber tenido absolutamente ningún indicio de que tu ser amado
iba a morir, o no tener idea sobre la seriedad de la situación. Para rematar, eres humano - no eres ni un santo ni
un superhéroe. Tú, como cualquier otra persona, te cansas, te vuelves irritable, ya veces cometes errores. Tu ser
amado también era un ser humano normal que lidió con el mismo tipo de límites y debilidades. Dado todo esto,
actuaste como mejor has podido en ese momento preciso en el tiempo.
No hay nada que podemos hacer para que Dios nos ame más. No hay nada que podamos hacer para que Dios
nos ame menos
Philip Yancey
What’s So Amazing about Grace
Si te estás sintiendo culpable o con remordimientos sobre algún asunto que has hecho o no has hecho o no has
dicho, está bien. Es común que una persona en duelo se sienta de esa manera. Pero trata de no ser muy duro
contigo mismo. Date a ti mismo el beneficio de la duda. En tiempos difíciles, bajo circunstancias difíciles, quizás
bajo condiciones desconocidas, actuando dentro de nuestras propias limitaciones humanas has hecho lo mejor
que has podido.
Un amigo mío me dijo que su madre pensó que algo terriblemente extraño le estaba sucediendo porque aún
lloraba luego de tres meses de muerto su marido. No le sucedía nada extraño. Se preocupó innecesariamente.
Porque había creído un mito que decía que ya lo debía haber superado para ese entonces.
Hay muchos mitos sobre el duelo- creencias falsas de que sólo sumarán a tus preocupaciones y te agregarán más
dolor. Lo último que precisas ahora es más dolor, por lo tanto, quiero compartir algunos de estos mitos contigo.
Esto puede darte poder para rechazarlos antes de que te causen algún problema.
Mito: Una persona debe ser capaz de atravesar una pérdida sin mostrar emoción.
Mito: Debes estar bastante bien volviendo a tu vida normal luego de dos o tres meses.
Mito: Enojarse con Dios o realizarle a Dios preguntas difíciles significa que tienes una fe débil.
Mito: Puedes decir cuánto amaba una persona al que murió por cuán profundo y cuánto tiempo le llevó
procesar la pérdida.
Mucha gente no se permite hacer lo que tiene que hacer en su duelo porque piensa que le sucede algo
Therese Rando
Mito: Resolver tu duelo significa quitarte a tu ser amado de la mente y seguir adelante.
Mito: Una persona fuerte debe ser capaz de manejar su duelo solo.
Mito: Los cristianos no deben llorar por la pérdida si saben que su ser amado está en el Cielo. Sólo deben sentir
alegría. Aquí no debemos confundir lloro con desconsuelo y desesperanza.
Mito: Continuar hablando de la Persona que murió sólo hace Que el dolor dure más tiempo.
C.S. Lewis
A Grief observed
Mito: Luego de que un ser amado ha muerto, nunca puedes volver a ser feliz nuevamente.
El duelo es lo suficientemente difícil como para permitirte la presión de expectativas poco realistas o de
interpretaciones erróneas generadoras de culpa. Por lo tanto, si escuchas cualquiera de estos mitos, no los creas.
Simplemente no son verdad.
Las maneras de enfrentar el duelo son actividades que nos dan una salida para nuestra energía emocional y física,
nos ayudan a conectarnos con nuestros pensamientos y sentimientos, y comienzan a restaurar un poco de
equilibrio en nuestras vidas.
Llevar un diario es una de las actividades más habituales. Una mujer me dijo que a veces nadie parecía querer
escucharla, entonces escribía. Escribir le permitía que sus sentimientos fluyeran y registrar recuerdos que llevaba
en el corazón. Un hombre me dijo que cuando se sentía atascado, miraría hacia atrás en su diario y podría ver
cuán lejos realmente había llegado.
Pero escribir un diario no es para todos. Otra mujer me dijo, Todos me dijeron que tratara de escribir un diario.
Lo hice, y no resultó para mí. Me sentaba ahí mirando un papel en blanco". Entonces encontró otras maneras de
enfrentar el duelo que funcionaron mejor para ella.
Una sola actividad no funcionará igual para todo el mundo; tendrás que encontrar aquella actividad que funcione
mejor para ti. Además de escribir un diario, aquí hay algunas otras actividades que me han contado ayudan a
manejar el duelo.
• Música. Encuentra canciones o CDs que disfrutas (o quizás que tu ser amado disfrutaba) y escúchalas. O
canta, juega, o compone música si tienes talentos en dicha área.
• Trabajo en arte. Dibuja, garabatea, pinta, teje, talla. haz carpintería. Las actividades creativas pueden ser
una maravillosa salida en tu duelo.
• Meditación, oración, y las Escrituras. Algunas personas encuentran útil escuchar música suave, y sentarse
en silencio a meditar u orar o leer la Biblia o un libro devocional.
Cualquiera sea la manera que elijas, encuentra la forma de permitir que tus sentimientos se muevan desde tu
interior hacia afuera.
James E. Miller
Escribe cartas. La gente me dijo cuán sanador era escribirle cartas a Dios o a su ser amado, cartas que las
guardaban en una libreta o incluso en el lugar de la tumba. Algunos les escribieron cartas a otras personas vivas.
Si realmente se las enviaron o no, el hecho de escribir les ayudó a expresar sus sentimientos.
Ejercicio. Actividades físicas-trotar, caminar, andar en bicicleta, nadar, senderismo, golf, tenis, básquetbol.
levantamiento de pesas, ejercicio aeróbico-ayudan a mucha gente a desquitar exceso de energía y a despejar la
mente. El ejercicio físico genera químicos en nuestros cuerpos que nos ayudan a sentirnos mejor para poder
enfrentar nuestra pérdida. (Hable con su doctor antes de iniciar un nuevo régimen de ejercicios).
Grita. Esto puede sonar conto, pero muchas personas encuentran que gritar es terapéutico. Grita en la ducha, en
una almohada, en el auto, o en un estacionamiento cerca del aeropuerto ya que los aviones despegan o aterrizan
sobre la cabeza. La expresión de energía emocional contenida puede ser liberador.
Lee. Algunas personas atravesando el duelo no pueden permanecer quietas durante el tiempo suficiente para leer
más de unas pocas páginas por vez mientras Otros pueden enterrarse en los libros. Algunos leen extensamente
sobre el tema del duelo mientras que otros leen novelas o revistas para tomarse un descanso del duelo.
Habla. Hablar sobre tus sentimientos es una de las mejores maneras de trabajar sobre ellos. Encuentra un amigo,
un familiar, un pastor, una persona dedicada al servicio, un grupo de apoyo, o alguna otra persona con quien
puedas hablar.
Esto es sólo una lista para comenzar. Puedes pensar en otras actividades que son adecuadas para ti.
Probablemente encuentres que los métodos para hacer frente que funcionan mejor para ti involucrarán
actividades que disfrutabas en el pasado. Por ejemplo, si siempre te gustó escribir, puedes encontrar que escribir
un diario funcionaria para ti. Si disfrutabas de caminar o trotar, puedes encontrar esas actividades muy útiles.
A medida que pasa el tiempo, también puedes descubrir que tus actividades para luchar cambian. Lo que no era
útil antes puedes ser muy reconfortante más adelante. Por ejemplo, mucha gente encuentra que una colección
de fotos y recuerdos del ser amado es demasiado doloroso para enfrentar inmediatamente pero muy sanador
más adelante en su duelo. Permítete ser tu propio juez. Haz esas actividades que te sientan bien y que son muy
útiles en ese momento.
¡Si una actividad funciona para ti, es saludable, no te pone en peligro a ti o a otra persona, entonces hazlo! Los
métodos para hacerle frente al duelo pueden ser muy efectivos para liberar la energía y los sentimientos que se
acumulan durante tu duelo.
No sé cómo estás con tu fe desde la muerte de tu ser amado. El duelo también afecta nuestra relación con Dios a
veces de maneras nunca esperadas.
Algunas personas encuentran que se acercan más que nunca a Dios durante el duelo. Un hombre en el proceso
de duelo me comentó, "Mi fe era lo único que tenía sentido en un tiempo donde nada lo tenía. La presencia de
Dios fue la única cosa con la que podía contar. Fue la única manera en la que pude atravesar estos tiempos de
terrible oscuridad".
Pero también he visto lo opuesto. Personas que eran pilares de fe estaban tan devastadas por la muerte de un ser
amado que les sacudió hasta sus cimientos. Una mujer que perdió tres seres amados en un accidente de auto
comentó, ¿Qué he hecho mal? ¿Cómo pudo Dios permitir que esto sucediera? Sus muertes han destrozado todo
en lo que siempre he creído".
He estado en ambos lugares en diversos momentos y en muchos lugares entre medio. Hay tanto que no sé. pero
he venido a saber y creer unas cuantas cosas con todo mi corazón. Si Dios parece estar cerca o lejos o en algún
lugar entre medio ahora, comparto estos pensamientos con la esperanza que puedan ser de alguna utilidad y
consuelo para ti.
• Lo primero que sé es que es fundamental para nosotros es ser nosotros mismos con Dios. Por ejemplo,
pretender no estar enojado con Dios, cuando realmente lo estamos, no engaña a Dios ni nos ayuda a
nosotros. Entonces, si estás enojado o en paz, si sientes que Dios está cerca o que Dios te ha abandonado,
admítelo, dilo, siéntelo. Allí es donde estás. Eso es real. Siempre sé real con Dios. Es la manera en que Dios
puede ser real contigo.
Si existe ahora un enorme abismo entre tu fe y tus sentimientos debido al daño y el dolor que sientes, eso no
es hipocresía, eso es honestidad.
Joey O'Connor
• Dile a Dios lo que verdaderamente sientes. Si deseas hacerle algunas preguntas difíciles a Dios, ¡hazlo! Si
tienes serias dudas sobre lo que Dios está haciendo o incluso si Dios existe, ve y expresa tus dudas. Si
dudas de eso, sólo lee algunos de los Salmos. Los escritores de estos poemas, oraciones, y canciones
expresaron exactamente lo que sentían. Si ellos lo hicieron tú también puedes.
• No confundas sentirte abandonado por Dios a ser abandonado por Dios. Grandes hombres y mujeres de
fe se han sentido abandonados por Dios por momentos, pero todos los demás sabían que Dios estaba vivo
en Ellos. El gran ejemplo es Jesús, quien, mientras estaba muriendo. En la cruz. Gritó, “Mi Dios, mi Dios.
¿por qué me has abandonado?” Entonces, si tú también sientes “ese terrible dolor de pérdida.” Estás en
muy buena compañía, la compañía de Dios.
John Claypool
Finalmente, de alguna manera misteriosa. Dios procesa el duelo y sufre contigo. Digo misteriosa porque no puedo
explicar cómo funciona. Las maneras de Dios no son Nuestras maneras. Sin embargo, Dios ha entrado en nuestro
mundo por su Hijo Jesús, y lo que le importaba a Jesús era siempre ayudar a aquellos que sufren. Jesús era
profundamente compasivo con aquellas personas cuyos corazones estaban quebrados por aflicción. Cuando tú
lloras, Jesús llora. Tus lágrimas son sus lágrimas. Tu dolor, su dolor. Éste es un misterio total para mí, pero creo en
ello: Dios no nos quita nuestro dolor, pero si lo comparte. Esa es la manera en que funciona el amor de Dios. Esa
es la razón por la cual toda persona que sinceramente, Profundamente comparte el dolor de tu duelo contigo está
haciendo el trabajo de Dios,
Quédate quieto, y susurra el nombre de Dios, y escucha. Él está más cerca de lo que piensas.
Max Lucado
La mujer cuya fe fue devastada luego de perder a tres seres queridos, más adelante me comentó, “Me llevó
mucho tiempo, pero comencé a ver que Dios realmente estaba ahí. Sólo que era muy diferente al Dios que me
había imaginado antes. Era más real, más consolador, y descubrí que había estado conmigo durante todo el
accidente, antes del accidente, luego del accidente, hoy, y siempre”.
No importa cuánto tiempo te lleve, espero que tú experimentes a Dios de esta manera también.
Sobre el Autor
Como pastor y sicólogo clínico, Dr. Kenneth C. Haugk ha aconsejado y se ha interesado por mucha gente en el
proceso de la pérdida de un ser querido. Como fundador y director ejecutivo de “Stephen Ministries”, ha dedicado
su vida profesional a ayudar a congregaciones a que capacitaran a sus miembros a que apoyen a aquellos en el
proceso de duelo o en la lucha con otras dificultades en su vida.
Su ministerio tomó una importancia más profunda cuando tuvo que enfrentar la muerte de su esposa, Joan, a
principios del 2002 luego de una batalla de tres años y medio con cáncer de ovarios. Al compilar los cuatro libros
que comprenden Atravesando el Duelo, Dr. Haugk escribe desde el corazón, extrayendo desde su trabajo
profesional, sus propias experiencias personales, y lo que ha aprendido de otros que estaban en duelo.
Dr. Haugk es el autor de numerosos libros y un orador y educador conocido en los Estados Unidos En el año 2003
recibió el Premio Nacional Samaritano (National Samaritan Award) del Samaritan Institute por sus importantes
contribuciones en el campo del ministerio de apoyo.
Stephen Ministries es una organización de capacitación y educativa cristiana sin fines de lucro con sede en St.
Louis, Missouri. Desde 1975 Stephen Ministries ha provisto de capacitación y recursos centrados en Cristo a miles
de congregaciones de más de 180 denominaciones. Stephen Ministries ofrece herramientas en las áreas de apoyo
al duelo, servicio laico, pequeños grupos, descubrimiento de dones espirituales, evangelización, crecimiento
espiritual. Y más.
Para saber más sobre nuestro ministerio y recursos, contáctese con nosotros a:
Stephen Ministries