Haciendo Lo Que Me Da La Gana

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HACIENDO LO QUE ME DA LA GANA.

Jueces 2:11-23. RVR 1960.

Apostasía de Israel, y la obra de los jueces.

“11 Después los hijos de Israel hicieron lo malo ante los ojos de Jehová, y
sirvieron a los baales. 12 Dejaron a Jehová el Dios de sus padres, que los había
sacado de la tierra de Egipto, y se fueron tras otros dioses, los dioses de los
pueblos que estaban en sus alrededores, a los cuales adoraron; y provocaron
a ira a Jehová. 13 Y dejaron a Jehová, y adoraron a Baal y a Astarot. 14 Y se
encendió contra Israel el furor de Jehová, el cual los entregó en manos de
robadores que los despojaron, y los vendió en mano de sus enemigos de
alrededor; y no pudieron ya hacer frente a sus enemigos. 15 Por dondequiera
que salían, la mano de Jehová estaba contra ellos para mal, como Jehová
había dicho, y como Jehová se lo había jurado; y tuvieron gran aflicción. 16 Y
Jehová levantó jueces que los librasen de mano de los que les despojaban; 17
pero tampoco oyeron a sus jueces, sino que fueron tras dioses ajenos, a los
cuales adoraron; se apartaron pronto del camino en que anduvieron sus
padres obedeciendo a los mandamientos de Jehová; ellos no hicieron así. 18
Y cuando Jehová les levantaba jueces, Jehová estaba con el juez, y los libraba
de mano de los enemigos todo el tiempo de aquel juez; porque Jehová era
movido a misericordia por sus gemidos a causa de los que los oprimían y
afligían. 19 Mas acontecía que al morir el juez, ellos volvían atrás, y se
corrompían más que sus padres, siguiendo a dioses ajenos para servirles, e
inclinándose delante de ellos; y no se apartaban de sus obras, ni de su
obstinado camino. 20 Y la ira de Jehová se encendió contra Israel, y dijo: Por
cuanto este pueblo traspasa mi pacto que ordené a sus padres, y no obedece
a mi voz, 21 tampoco yo volveré más a arrojar de delante de ellos a ninguna
de las naciones que dejó Josué cuando murió; 22 para probar con ellas a
Israel, si procurarían o no seguir el camino de Jehová, andando en él, como lo
siguieron sus padres. 23 Por esto dejó Jehová a aquellas naciones, sin
arrojarlas de una vez, y no las entregó en mano de Josué.”

En la época de los Jueces luego de que Josué murió el pueblo de Israel,


estaba en malos caminos creyendo que lo que hacía “ERA BUENO”, pero
estaban “HACIENDO LO QUE LES DABA LA GANA PRACTICAMENTE”

Y en esto quiero hablarles esta tarde.

Hay tres tipos de enfoque en el tema que quiero hablarles hoy.

ME DA LA GANA. NO ME DA LA GANA. LO QUE ME DA LA GANA.

1. ME DA LA GANA.
El pueblo de Israel tenía todos los beneficios de tenerlo a Dios, pero
siempre ellos querían ver algo y tener a alguien que los mande. Ahí
recién les daba la gana de servir a Dios y hacer lo que prácticamente
Él mandaba.
Aquí sus líderes habían muerto, Moisés primero y luego Josué, es por
eso que mas les daba la gana hacerse figuras que realmente dejar que
Dios los guíe en su totalidad.

Normalmente si te mandan a hacer algo que crees que te va a dar


beneficios es obvio que vas a querer hacerlo porque repitan conmigo
“ME DA LA GANA”.
Ejemplo: “Viene alguien con cash, y te dice hace esto y te doy esta
cantidad de dinero, obviamente te va a dar la gana de hacerlo.”

En este sentido muchas veces no tiene que haber algún beneficio


para que vos hagas eso, simplemente querés hacerlo y ya, sin ningún
problema.

Cuando hablamos de esto, Dios siempre está atento y dispuesto a


poder ayudarnos, Él es nuestro maestro y anhela lo mejor para
nosotros.
Pero más tenemos ganas de hacer muchas otras cosas que estar
buscando de Él…

Y Él siempre está con las ganas de poder ayudarnos, de poder


bendecirnos y de sobre todo con las ganas de escucharnos.
Vos me podés decir, pero si Dios sabe lo que quiero, porque tengo que
acercarme a Él, porque Él tiene las ganas de escucharte.

Salmo 34:15. RVR 1960.


“Los ojos de Jehová están sobre los justos, Y atentos sus oídos al
clamor de ellos.”

Salmo 34:15. TLA.


“Dios siempre cuida a los suyos y escucha sus oraciones.”

2. NO ME DA LA GANA.
Aquí podemos entrar muchas veces, y al final no queremos realmente
hacerlo porque, repitan conmigo: “NO ME DA LA GANA”

Jueces 2:17-19. RVR 1960.


“17 pero tampoco oyeron a sus jueces, sino que fueron tras dioses
ajenos, a los cuales adoraron; se apartaron pronto del camino en que
anduvieron sus padres obedeciendo a los mandamientos de Jehová;
ellos no hicieron así. 18 Y cuando Jehová les levantaba jueces, Jehová
estaba con el juez, y los libraba de mano de los enemigos todo el
tiempo de aquel juez; porque Jehová era movido a misericordia por
sus gemidos a causa de los que los oprimían y afligían. 19 Mas
acontecía que al morir el juez, ellos volvían atrás, y se corrompían más
que sus padres, siguiendo a dioses ajenos para servirles, e inclinándose
delante de ellos; y no se apartaban de sus obras, ni de su obstinado
camino.”

Ellos tenían a Dios de su lado, pero NO LES DABA LA GANA DE


SEGUIRLO, porque más veían beneficios en los baales que en el
mismo Dios.
El pueblo de Israel desde que Dios los sacó de Egipto realmente se
volvió en pueblo bastante caprichoso, tenían ganas de hacer otras
cosas, y no les daba la gana de servir a Dios.

Proverbios 14:12 RVR 1960.


“12 Hay camino que al hombre le parece derecho;
Pero su fin es camino de muerte.”

Cuando NO NOS DA LA GANA DE HACER LAS COSAS, y tomamos


nuestras propias decisiones, al final terminamos perdiendo el rumbo y
encerrándonos en un ciclo, que trae muchos problemas más que
bendición.

3. HACIENDO LO QUE ME DA LA GANA.


El HACER LO QUE NOS DA LA GANA, engloba las dos anteriores, pero
muchas veces nos encontramos en una peor situación de la que
creíamos que vendría.
Porque el HACER LO QUE NOS DA LA GANA, no trae nada, pero
absolutamente nada bueno.

Leamos Jueces 2:20-23.

“20 Y la ira de Jehová se encendió contra Israel, y dijo: Por cuanto este
pueblo traspasa mi pacto que ordené a sus padres, y no obedece a mi
voz, 21 tampoco yo volveré más a arrojar de delante de ellos a ninguna
de las naciones que dejó Josué cuando murió; 22 para probar con ellas
a Israel, si procurarían o no seguir el camino de Jehová, andando en él,
como lo siguieron sus padres. 23 por esto dejó Jehová a aquellas
naciones, sin arrojarlas de una vez, y no las entregó en mano de
Josué.”

1 Timoteo 4:12 RVR 1960.


“12 Ninguno tenga en poco tu juventud, sino sé ejemplo de los
creyentes en palabra, conducta, amor, espíritu, fe y pureza.”

2 Timoteo 3:1-5 RVR 1960.


“También debes saber esto: que en los postreros días vendrán tiempos
peligrosos. 2 Porque habrá hombres amadores de sí mismos, avaros,
vanagloriosos, soberbios, blasfemos, desobedientes a los padres,
ingratos, impíos, 3 sin afecto natural, implacables, calumniadores,
intemperantes, crueles, aborrecedores de lo bueno, 4 traidores,
impetuosos, infatuados, amadores de los deleites más que de Dios, 5
que tendrán apariencia de piedad, pero negarán la eficacia de ella; a
estos evita.”

Dar mi ejemplo con el tema de la salud.

Cuando nos tratamos de acercar a Dios, como decía anhelamos que él


nos use y bendiga, pero hay situaciones que al HACER LO QUE NOS
DA LA GANA, no nos dejan seguir adelante.

Vos me podés decir, pero yo hago esto, me acerco a Dios, le pido


perdón, y él me va a seguir amando, puedo estar tranquilo.

Ezequiel 11:19-20 RVR 1960.


“19 Y les daré un corazón, y un espíritu nuevo pondré dentro de ellos; y
quitaré el corazón de piedra de en medio de su carne, y les daré un
corazón de carne, 20 para que anden en mis ordenanzas, y guarden
mis decretos y los cumplan, y me sean por pueblo, y yo sea a ellos por
Dios.”

Dios nos ama, pero en su amor también es JUSTO, seguro te ha


pasado lo mismo que a mí, que querés amar a Dios, pero hay algo que
te frena.
Esa situación es el HACER LO QUE NOS DA LA GANA, en muchísimos
sentidos.

Para ir terminando, entonces ¿CÓMO PUEDO CAMBIAR ESTA


SITUACIÓN?
- ANDAR EN LO QUE DIOS ORDENA PALABRA.
- GUARDAR Y CUMPLIR SUS DECRETOS QUE ESTÁN EN SU
PALABRA.
- SOBRE TODO, DEJAR DE HACER LO QUE NOS DA LA GANA.

Vos me podés decir también pero no me hallo sin esto, no me hallo en


la Iglesia, no hallo buscando a alguien que no veo y me podés poner 1
y 1000 excusas más.

Pero cuando nos acercamos a Dios anhelamos recibir bendiciones


cuando ni nosotros mismos somos capaces de entregar muchas cosas
delante de Él, no somos capaces de AMAR A DIOS, con todo nuestro
corazón.

Este es el momento para que juntos podamos experimentar ese


AMOR DE DIOS QUE ES SIN CONDICIÓN, su AMOR es así, pero tal cual
lo recibimos de parte de Él eso también debemos darlo.

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