DPCC
DPCC
DPCC
Dicho de otro modo, se trata de una forma de identificación colectiva, mediante la cual los
miembros de un determinado grupo social (entendidos como una cultura) se diferencian de
quienes no formen parte del mismo.
Todos poseemos una identidad cultural, que en gran parte está determinada por las
condiciones de nacimiento y por la cultura hegemónica (mayoritaria) recibida. Sin embargo,
también influyen los subgrupos a los que se pertenece dentro de su cultura.
Así, dentro de una cultura “oficial” (generalmente coincidente con la cultura o identidad
nacional), existen distintas subculturas o subgrupos que, a pesar de formar parte de la
mayoritaria, presentan rasgos diferentes.
Las identidades culturales, sin embargo, no son monolíticas o totales. Una persona puede
ser más o menos tradicional en su manera de entender y ejercer su identidad y su cultura, o
puede tender al multiculturalismo, o sea, a la convivencia más o menos armónica de
elementos provenientes de diferentes culturas humanas.
Identidad personal
La identidad cultural forma parte de quién uno es y de la propia historia.
La identidad cultural puede ser muy relevante en el trato con los demás, especialmente
cuando ésta se construye en oposición a otros, o en resistencia a otros. Por otro lado,
también puede ser un aliado a la hora de experimentar la sociedad desde un punto de vista
más abierto.
La identidad cultural forma parte de quien uno es y de la propia historia. Constituye un
legado importante que los migrantes llevan consigo y aportan a la sociedad que los recoge,
tanto como esta última les ofrece una nueva. Al final, como todas las identidades, la cultural
es porosa, móvil, no necesariamente estricta.