Separata Hipotiroidismo Subclinico
Separata Hipotiroidismo Subclinico
Separata Hipotiroidismo Subclinico
SUBCLÍNICO
ÍNDICE
INTRODUCCIÓN ....................................................................................................................................................3
ETIOLOGÍA ...............................................................................................................................................................7
CONCLUSIONES ...................................................................................................................................................19
BIBLIOGRAFÍA .........................................................................................................................................................20
-2-
Separata 2022 - Vol. 30 N° 6
INTRODUCCIÓN
Es habitual en nuestra práctica diaria, tanto ambulatoria como en la internación, recibir consultas
motivadas por un valor de tirotrofina (TSH) por encima del rango de referencia. Muchas veces esta
determinación es solicitada por presentar algún síntoma sugestivo de hipotiroidismo, y otras en
contexto de un control médico de rutina. En su mayoría se trata de valores levemente elevados,
sin otros datos concluyentes tanto clínicos como bioquímicos. En esta instancia nos planteamos el
diagnóstico de hipotiroidismo subclínico, lo cual representa muchas veces una situación de incerti-
dumbre, ya que si bien es una condición prevalente en la población, el tratamiento es aún contro-
vertido, por la falta de evidencia contundente en cuanto a los beneficios de la terapia de reemplazo
con levotiroxina. Por esta razón nos planteamos revisar la evidencia y recomendaciones actuales,
así como mostrar la experiencia en nuestro hospital. Decidimos no incluir en este resumen el hipo-
tiroidismo subclínico en embarazo o búsqueda de fertilidad, ya que consideramos que amerita una
revisión aparte.
El hipotiroidismo subclínico (HSC) tiene una incidencia que varía entre un 4 a 10%, dependiendo del
sexo, edad y la población estudiada, siendo mayor en mujeres, a mayor edad y deficiencia de yodo
(1, 2). En nuestro centro, un hospital público de alta complejidad, con un promedio anual de con-
sultas a consultorio externos de endocrinología de 13.500 entre los años 2015 a 2021, las consultas
por HSC fueron en promedio 350 anuales.
La incidencia también varía según el límite superior tomado como referencia. El rango de referencia
actual de TSH, se basa en el IC del 95% de la distribución de niveles en una población sin enfer-
medad tiroidea conocida; los individuos con valores de TSH en los percentilos 2,5 más bajo y más
alto de esta distribución están fuera del rango, y estos valores son considerados anormales. Sin
embargo, estos valores, no son derivados de los datos que demuestran el beneficio del tratamiento.
Además, la distribución de los niveles de TSH en la población muestra un cambio hacia niveles más
altos con el aumento de la edad (3). La encuesta norteamericana NHANES III (National Health and
Nutrition Examination Survey) demostró que después de los 30-39 años de edad, el percentilo 97,5
de la TSH aumenta en 0,3 mUI/L por cada 10 años de aumento de la edad (4). Un estudio transver-
sal sobre 15.008 sujetos, realizado en China por Zhai y colaboradores, entre los años 2010 a 2011,
publicado en 2018, mostró la distribución de los valores de TSH según la edad. Cuando se utilizó el
rango de referencia de la población general, las tasas de prevalencia de HSC en adultos mayores a
65 años fueron significativamente más altas que en los de adultos más jóvenes a 65 años (2,09 %
frente a 0,80 % y 19,87 % frente a 16,23 %, respectivamente; p <0,001) (5).
De acuerdo las recomendaciones de la guía para el manejo de hipotiroidismo de la Asociación La-
tinoamericana de Tiroides (LATS), para la población general, se recomienda utilizar los valores de
rango normal de TSH tradicionales (0.45-4.5 mUI/L), y se deben considerar niveles de TSH de corte
más altos para pacientes de edad avanzada (6), recomendación compartida por las guías de manejo
del HSC de la Asociación Europea de Tiroides (ETA) (1).
Los valores de TSH pueden ser expresados en mUI/L o µUI/ml, siendo equivalentes.
-3-
Hipotiroidismo Subclínico
Se define al HSC como un cuadro bioquímico, caracterizado por la presencia de TSH elevada, aso-
ciado a valores normales de hormonas periféricas, ya sea triiodotironina (T3) o tiroxina libre (T4L)
(7, 8). Si bien este patrón hormonal puede representar un HSC, existen otras condiciones clínicas,
drogas o anormalidades de laboratorio que pueden resultar en un aumento de la TSH, y que, por lo
tanto, hay que tener en cuenta al momento de evaluar este tipo de pacientes. (Ver tabla 1).
Tanto la TSH como la T4 libre muestran una variabilidad sustancial entre personas sanas, mientras
que el rango de variabilidad intraindividual tiende a ser relativamente estrecho (10). Este hallazgo
sugiere un punto fijo único (set point) del eje hipotálamo-hipófiso-tiroideo (HHT) para cada persona
y probablemente explica por qué un nivel de TSH de 10 mUI/L puede estar acompañado por un
valor normal de T4 libre en una persona, pero por un valor reducido en otras personas. La herencia
de este punto de referencia del eje ha sido estimada en un 65%, en un estudio danés realizado en
-4-
Separata 2022 - Vol. 30 N° 6
gemelos (11). El set point individual del eje HHT es altamente sensible a mínimos cambios de la T4L.
En condiciones de HSC, donde hay compromiso primario de la tiroides (de causa inflamatoria u
otras), la secreción hormonal no alcanza a aumentar en respuesta a la TSH, llevando a un aumento
crónico de la misma.
Clasificación
Se sugiere categorizar al HSC de acuerdo a los valores de TSH en grado 1 para valores entre el límite
superior del rango de referencia y hasta 9,9 mUI/L, y grado 2, para valores mayores o iguales a 10
mUI/L. (10, 1). Aproximadamente el 90% de los pacientes con HSC serán grado 1, con una TSH entre
4,5 y 10 mUI/L.
Abordaje inicial
Ante un primer resultado de TSH por encima del límite superior de referencia, se deberá repetir la
medición, pasados al menos 2 a 3 meses, teniendo en cuenta la cantidad de factores mencionados
en la tabla 1 que pueden llevar a este aumento. En este sentido, se observa que más del 50% de
los pacientes, normalizan el valor, incluso se ha descripto que en el 60% de los pacientes con HSC
la TSH retorna al rango de referencia dentro de 5 años (7, 12). En esta segunda evaluación, se su-
giere agregar T4 libre para poder diferenciar HTC, y la búsqueda de anticuerpos antitiroperoxidasa
(ATPO) (1, 6). Aproximadamente el 75% de los HSC presentan un nivel de TSH de 4,5–6,9 mUI/L, un
20% TSH de 7–9,9 mUI/L, y sólo el 5% tiene una concentración de TSH de 10 mUI/L o más (13). La
búsqueda de AIT se justifica para poder evaluar la probabilidad de evolución a un HTC o manifiesto
(HTC) en estos pacientes.
El riesgo de progresión a HTC, es uno de los parámetros más importantes a tener en cuenta en la
evaluación inicial, ya que podrían condicionar la decisión de iniciar tratamiento sustitutivo. La tasa
de progresión de HSC a HTC durante un período de seguimiento de 5 años en pacientes en atención
primaria ha sido de sólo un 2,9% en el estudio de Meyerovitch (12). En el seguimiento de los sujetos
del Whickham Survey, se ha reportado una tasa anual de progresión 2,6% con niveles elevados de
TSH sérica >6 mUI/L y 4,3 % cuando además de TSH elevada tuvieran anticuerpos antitiroideos posi-
tivos. En pacientes eutiroideos con autoinmunidad tiroidea (AIT) la tasa de progresión fue de 2,8%
para todas las edades y 2-6% luego de una tiroidectomía parcial (14). Tanto este estudio, como
otros más pequeños, coinciden en esta asociación entre los valores iniciales de TSH y la presencia
de AIT con la progresión a HTC. Así, en un estudio prospectivo con seguimiento a 9 años, se vio un
aumento de la incidencia acumulada de HTC a niveles más altos de TSH, así como la presencia de
anticuerpos antitiroideos (6, 15).
-5-
Hipotiroidismo Subclínico
En un estudio realizado en Brasil por Rosário et al, para evaluar la progresión a HTC, los pacientes
fueron clasificados en dos grupos: uno con ATPO positivo y/o alteración ecográfica característica
de tiroiditis crónica, y otro con ATPO negativo y sin alteración ecográfica; el primer grupo tuvo una
mayor progresión hacia el HTC (31.2% vs 9.5%, respectivamente) y una menor tasa de normaliza-
ción de TSH (15,6% vs 43% respectivamente). Estas tasas fueron similares en pacientes con ATPO
positivo y pacientes con ATPO negativo pero con cambios ecográficos (16). De esta forma surge
la recomendación de la LATS de solicitar también una ecografía de tiroides en pacientes con HSC,
ya que podría ser útil para predecir un alto riesgo de progresión a HTC (6). Así mismo la guía de la
ETA sobre manejo de HSC, recomienda medir TSH en aquellos pacientes con hallazgo de ATPO o
anticuerpos antitiroglobulina (ATg) y/o aquellos con patrón ecográfico hipoecoico o heterogéneo
sugestivo de tiroiditis crónica. Ha sido demostrado previamente que este patrón ecográfico puede
aparecer antes de que se detecte la positividad de ATPO (18).
Pesquisa de HSC
A pesar de ser una condición prevalente, la falta de datos concluyentes sobre el beneficio del trata-
miento, así como la baja tasa de progresión a HTC, no está recomendada la pesquisa universal de
HSC. Las guías recomiendan su búsqueda en aquellos grupos considerados de mayor riesgo, como
aquellos pacientes con: (6)
-6-
Separata 2022 - Vol. 30 N° 6
• Anemia perniciosa
• Síndrome de Down
• Síndrome de Turner
• Tiroideopatía autoinmune en familiares de primer grado
• Historia de irradiación de la tiroides o de cabeza y cuello
• Historia previa de cirugía o disfunción tiroideas
• Alteración de la semiología de lo tiroides
• Desórdenes psiquiátricos
• Tratamiento con amiodarona o litio
• Otros:
Insuficiencia adrenal
HTA
Alopecia
Anemia inespecífica
Hipercolesterolemia
Arritmias cardíacas
Xerodermia
Insuficiencia cardíaca
Constipación
Demencia
Dismenorrea
Miopatía inespecífica
Prolongación de QT
Etiología
Siendo la más frecuente la tiroiditis autoinmune, seguida por el hipotiroidismo post tratamiento con
radioyodo o cirugía.
-7-
Hipotiroidismo Subclínico
Cuadro clínico
Cuando nos enfrentamos a un paciente con diagnóstico o sospecha de HSC, es importante tener en
cuenta la presencia de síntomas. A pesar de que muchos son asintomáticos, los pacientes con HSC
suelen reportar síntomas de hipotiroidismo más frecuentemente que sujetos control apareados por
edad (1). Los síntomas suelen ser más leves que los de los pacientes con HTC y tienden a aumentar
tanto en número como en gravedad con niveles más altos de TSH. Algunos estudios han mostrado
mayor tasa de síntomas depresivos, peor calidad de vida y función cognitiva, así como alteración de
la memoria entre personas con HSC comparadas con personas con función tiroidea normal. Tam-
bién se han informado fatiga, debilidad muscular, aumento de peso, intolerancia al frío y constipa-
ción en asociación con el HSC (20,21). Las personas mayores parecen tener menos síntomas que las
personas más jóvenes (22, 23). En un estudio de prevalencia de enfermedad tiroidea de Colorado
(Colorado Thyroid Disease Prevalence Study), sobre 25.862 encuestados, tanto en HTC como en
el subclínico, los sujetos reportaron mayor número de síntomas, dentro de los cuales figuran piel
seca, alteración de la memoria, enlentecimiento del pensamiento, debilidad muscular, cansancio,
calambres musculares, intolerancia al frío, edema palpebral, voz grave, constipación, voz ronca
(25). El estudio TRUST (Thyroid Hormone Replacement for Untreated Older Adults with Subclinical
Hypothyroidism), es un ensayo aleatorizado, doble ciego, controlado con placebo que incluyó a 737
adultos mayores de 65 años, con una media de edad de 74,4 años. La mediana del valor inicial de
TSH fue de 5,8 mUI/L, con un rango de 4.6 a 17.6 mUI/L, y el 75 % de estos fueron inferiores a 7
mUI/L. Al cabo de un año, los resultados de las escalas de síntomas de hipotiroidismo fueron simila-
res o menores que en la población general (escala utilizada: Thyroid Related Quality-of-Life Patient
Reported Outcome Measure, a mayor puntaje, más síntomas) (24). La mayoría de los estudios su-
gieren que los síntomas están relacionados con el grado de elevación de TSH.
Surge además la pregunta de qué otras implicancias o consecuencias clínicas y pronósticas puede
tener el paciente con HSC.
Cardiovascular
Dentro de los aspectos más relevantes, se encuentran los efectos adversos a largo plazo sobre el
riesgo de enfermedad cardiovascular, por su asociación con trastornos en el perfil lipídico, tensión
arterial, sobrepeso e insulino resistencia. En los últimos años la gran cantidad de estudios al respecto
ha arrojado resultados controvertidos. Algunos muestran un claro aumento de riesgo de enferme-
dad coronaria (EC) y mortalidad, mientras otros sólo encuentran una diferencia modesta. Estas
discrepancias pueden deberse a diferencias en las poblaciones estudiadas en cuanto a edad, sexo,
etnia, valor de corte de TSH, sesgos de selección, entre otros (6).
-8-
Separata 2022 - Vol. 30 N° 6
El HSC se asoció con un empeoramiento de la función cardíaca en pacientes con insuficiencia pre-
existente. En una cohorte prospectiva de 1.365 pacientes ambulatorios con insuficiencia cardíaca
preexistente (edad media 57 años), un nivel de TSH ≥7 mUI/L se asoció con mayor gravedad y peor
pronóstico al inicio (29).
Sgarbi, Matsumura et al. estudiaron una población japonesa-brasileña, con un total de 1.110 su-
jetos mayores de 30 años, sin enfermedad o medicación tiroidea. Un total de 913 (82,3%) parti-
cipantes se encontraban eutiroideos, 99 (8,7%) tenían HSC y 69 (6,2%) hipertiroidismo subclínico.
Al inicio del estudio, no se encontró asociación entre las enfermedades subclínicas y el perfil car-
diometabólico o la enfermedad cardiovascular. Los HR ajustados para la mortalidad por todas las
causas fueron significativamente más altos para las personas con hipertiroidismo subclínico (HR, 3,0
(1,5-5,9); n=14) e HSC (HR, 2,3 (1.2-4.4); n=13) que para sujetos eutiroideos. La mortalidad cardio-
vascular se asoció significativamente con el hipertiroidismo subclínico (HR, 3,3 (1,4-7,5); n=8), pero
no con el HSC (HR, 1,6 (0,6-4,2); n=5). Se realizó un análisis de regresión de Cox, el cual reveló que
estas asociaciones significativas se mantuvieron incluso después de ajustar por edad, sexo y otros
factores de confusión (30).
Obesidad
Es conocido que niveles mayores de TSH están asociados a un aumento del índice de masa corporal
(IMC), así como también de la circunferencia de cintura. Esto último probablemente se deba a los
efectos de la leptina secretada por el tejido adiposo, sobre la secreción hipotalámica de la hormo-
na liberadora de tirotrofina (TRH), lo que conduce a un aumento de los niveles de TSH. No se han
realizado ensayos aleatorios sobre el impacto del tratamiento con levotiroxina en pacientes con
elevación de los niveles de TSH relacionada con la obesidad. Sin embargo, dado que los estudios
de observación son consistentes al mostrar que los niveles de TSH vuelven a la normalidad tras la
reducción de peso, se descarta una relación causal entre el HSC y la obesidad (10, 31).
-9-
Hipotiroidismo Subclínico
Perfil lipídico
El hipotiroidismo es una de las causas de dislipemia secundaria más frecuentes, llevando a un au-
mento del colesterol LDL y triglicéridos, y es por eso que está indicada la pesquisa de hipotiroidismo
en pacientes con hipercolesterolemia o hipertrigliceridemia (32). Esta asociación, sin embargo, es
más controvertida en el caso de HSC. En el estudio epidemiológico de Canaris et al mencionado
anteriormente (25), se documentó una relación positiva entre la TSH y la dislipemia, lo que sugiere
que el HSC podría ser un estado intermedio entre el eutiroidismo y el HTC en términos del perfil de
lípidos. Las guías de ETA mencionan dos metaanálisis que mostraron el beneficio del tratamiento
con levotiroxina en pacientes con HSC sobre el perfil lipídico, siendo estos efectos más notorios para
valores de TSH mayores a 12 mUI/L (1). Los datos que surgen entre otros estudios, del NHANES III,
no mostraron alteraciones lipídicas en el HSC cuando se ajustaron para variables confundidoras. Y
una revisión sistemática de Cochrane mencionada en las guías LATS para manejo del hipotiroidismo,
sólo mostraron un leve beneficio sobre los lípidos bajo tratamiento sustitutivo con levotiroxina (33).
Bocio
Conociendo el estímulo trófico de la TSH sobre la tiroides, desde hace muchos años se ha estudia-
do la asociación de sus niveles con la presencia de bocio, sea difuso o nodular, así como también
el riesgo de cáncer de tiroides. En el Whickham Survey no se encontró asociación entre bocio por
palpación y anormalidades bioquímicas en 20 años de seguimiento (14). El estudio de Fiore y col
sobre más de 10.000 pacientes en 2009 ha mostrado una asociación de mayor riesgo de cáncer de
tiroides a mayor TSH, incluso dentro del rango de referencia (34). Boelaert hace una revisión poste-
rior, en la cual concluye que cada vez hay más pruebas del hallazgo de TSH más altas en pacientes
con nódulos tiroideos malignos. Además, los niveles basales de TSH son más altos en pacientes con
cáncer de tiroides más agresivo, independientemente de la edad (35). Ante estos hallazgos, una
inferencia posible, pero no comprobada, es que el tratamiento del bocio nodular con levotiroxina
puede proteger contra el desarrollo de carcinomas tiroideos. Sin embargo, dada la baja frecuencia
del carcinoma de tiroides y el lento desarrollo de estos tumores, un estudio prospectivo que propor-
cione un alto nivel de evidencia para respaldar esta afirmación es difícil (1).
- 10 -
Separata 2022 - Vol. 30 N° 6
mayores de 60 o 75 años respectivamente (36, 37). Un tercer metaanálisis que incluyó siete cohor-
tes prospectivas, realizado en pacientes con una media de edad mayor de 65 años, no mostraron
asociación entre el HSC y demencia o deterioro cognitivo (38), como así tampoco entre el HSC y el
riesgo de enfermedad de Alzheimer en un metaanálisis del año 2021 (39).
Adultos mayores
Esta población conforma el mayor desafío cuando presentan un ligero aumento de TSH, ya que el
sobretratamiento puede ser francamente perjudicial. La decisión de tratar o no a estos pacientes,
requiere de una evaluación cuidadosa de la edad, los factores de riesgo cardiovasculares preexis-
tentes, grado de elevación de TSH, presencia de comorbilidades y toma de otros medicamentos.
En primer lugar, debemos considerar el grado de elevación de TSH, ya que como fue mencionado
anteriormente, la distribución de los valores de TSH tiende a ser más alta cuanto mayor es la edad.
Muchos estudios en personas mayores con HSC han evaluado el riesgo cardiovascular. Los cambios
propios de la edad sobre la estructura cardíaca, pueden contribuir al mayor riesgo de desarrollar
disfunción cardíaca en dicha población.
Los pacientes con enfermedad cardiovascular preexistente han sido menos estudiados. En un ensa-
yo de Jabbar y col, controlado aleatorizado, doble ciego, realizado en 6 hospitales del Reino Unido,
evaluando el efecto del tratamiento con levotiroxina comparado con placebo sobre la función ven-
tricular izquierda en pacientes con infarto agudo de miocardio e HSC, no se observó mejoría signi-
ficativa después de 52 semanas. Estos hallazgos no respaldan el tratamiento del HSC en pacientes
con infarto agudo de miocardio (41).
Un análisis retrospectivo del Reino Unido mostró que la terapia de reemplazo de levotiroxina en
personas ≥70 años con niveles de TSH entre 5,01–10 mUI/L no se asoció con efectos beneficiosos; sin
embargo, se observó una disminución en los eventos de cardiopatía isquémica letales y no letales,
y una reducción en mortalidad por todas las causas en personas de 40 a 70 años. Por lo cual el tra-
tamiento con levotiroxina se asoció con menos eventos de cardiopatía isquémica en personas más
jóvenes, pero esto no fue evidente en personas mayores (42).
En la Tabla 2 se muestran los resultados de diferentes estudios que han evaluado el riesgo de pre-
sentar eventos de insuficiencia cardíaca o coronaria, su relación con la edad y el valor de TSH (1, 6).
Es de notar, que la asociación fue mayor cuando los valores son mayores a 10 mUI/L.
- 11 -
Hipotiroidismo Subclínico
- 12 -
Separata 2022 - Vol. 30 N° 6
Justificación de tratamiento
Ante lo visto, podemos decir que las posibles indicaciones de tratar un HSC, serían mejorar los sínto-
mas, evitar la progresión a hipotiroidismo manifiesto y prevenir los eventos adversos principalmente
cardiovasculares, intentando evitar un hipertiroidismo iatrogénico (9).
No existe evidencia contundente que permita atribuir de forma confiable, los síntomas referidos
por los pacientes al HSC (Bekkering y col). Sin embargo, muchos autores coinciden en considerar
tratamiento en pacientes con síntomas compatibles, siempre y cuando no existan contraindicacio-
nes, a modo de prueba terapéutica. Sin embargo, vemos en la práctica clínica, que es muy difícil
diferenciar el verdadero beneficio de la terapia sustitutiva, del efecto placebo, además de que
muchos pacientes persisten medicados por varios años a pesar de no tener respuesta. Por esto se
aconseja la suspensión de la terapia con levotiroxina, luego de 3 a 6 meses en aquellos pacientes
que no hayan mostrado mejoría sintomática, para reevaluar la función tiroidea. Por otro lado, esta
conducta no debe retrasar el correcto diagnóstico de trastornos del estado de ánimo u otras con-
diciones psiquiátricas.
En una revisión sistemática y metaanálisis de Feller y et al. (43) sobre 21 publicaciones identificadas,
con 2192 adultos asignados al azar, se observó que, después del tratamiento por un rango de 3 a 18
meses, la terapia con hormona tiroidea, si bien logró una reducción del valor medio de TSH al rango
de referencia en comparación con el placebo (rango, 0,5 a 3,7 mUI/L frente a 4,6 a 14,7 mUI/L), no
se asoció con un beneficio respecto a la calidad de vida general (n = 796; SMD, −0,11; IC del 95 %,
−0,25 a 0,03; I2 = 66,7 %) o síntomas relacionados con la hipofunción tiroidea (n = 858; SMD, 0,01;
IC del 95 %, −0,12 a 0,14; I2=0,0%). Por lo cual estos autores concluyen que estos hallazgos no res-
paldan el uso rutinario de la terapia con hormona tiroidea en adultos con HSC, excluyendo de esta
conclusión a mujeres embarazadas.
Como se mencionó previamente, el riesgo de evolución a HTC es bajo, siendo mayor cuanto mayor
es la TSH o cuando hay alguna evidencia de AIT, sea por presencia de anticuerpos antitiroideos o
por presencia de patrón ecográfico sugestivo de tiroiditis crónica. Por lo cual será importante tomar
estas condiciones en consideración para decidir el inicio o no del tratamiento sustitutivo.
- 13 -
Hipotiroidismo Subclínico
Tabla 3: Recomendaciones para el tratamiento del HSC según las diferentes agrupaciones
Organización y año Recomendaciones
Guías del Instituto Nacional para TSH >10 mUI/L:
la excelencia en la Salud y la • <70 años: tratar
Atención (National Institute for
Health and Care Excellence NICE) TSH >4 <10 mUI/L:
CKS guidelines, 2018 • <65 años: considerar tratar como prueba terapéutica si hay
síntomas
Traducida y modificada de Tratamiento con hormonas tiroideas para el HSC: una guía de práctica
clínica, Bekkering et al. British Medical Journal, 2019 (45).
- 14 -
Separata 2022 - Vol. 30 N° 6
Dosis de levotiroxina
La terapia de reemplazo debe realizarse con levotiroxina (1, 6, 44), con el objetivo de restaurar el
eutiroidismo.
Debido a que el grado de disfunción tiroidea es leve, dosis pequeñas de levotiroxina (ej. 25 a 75 μg),
suelen ser suficientes para normalizar los valores de TSH. También pueden utilizarse dosis calcula-
das a 1.1-1.2 μg/kg/día, menores a las requeridas en el HTC. En pacientes jóvenes sin factores de
riesgo cardiovascular y mujeres embarazadas se podría iniciar el tratamiento con la dosis completa
calculada (19, 47).
En pacientes con cardiopatía isquémica o arritmias y en ancianos, el tratamiento debe iniciarse con
las dosis más bajas de levotiroxina: 12,5 a 25 µg diarios (6) que se incrementarán paulatinamente
en intervalos de 4 a 6 semanas, de acuerdo a la tolerancia del paciente (48). Es importante emplear
dosis iniciales bajas, ya que un incremento en el metabolismo basal y del gasto cardíaco pueden
agravar una condición cardiaca preexistente, facilitando el desarrollo de episodios de angina de
pecho, infarto de miocardio, arritmias o muerte súbita.
- 15 -
Hipotiroidismo Subclínico
Nuestra experiencia
Con el objetivo de evaluar la frecuencia de HSC en las consultas a nuestro servicio, así como descri-
bir la prevalencia de AIT en esta población y el porcentaje de indicación de tratamiento sustituti-
vo. Para ello se revisaron historias clínicas de pacientes atendidos entre 2015 y 2021, que tuvieran
diagnóstico o sospecha de HSC. Se tomó un n de 100.
Criterios de inclusión:
• >18 años
• Diagnóstico o sospecha de HSC (TSH >4 uUI/ml)
Criterios de exclusión:
• Mujeres embarazadas
• Diagnóstico de HTC
• Pacientes bajo tratamiento con amiodarona, inmunoterapia, litio u otros fármacos que inter-
fieran en la función tiroidea.
Resultados:
De las 100 historias clínicas analizadas, la media de edad fue de 42 años (± 16,8), la mediana 48
años, con un rango entre 19 y 83 años, correspondiendo el 80% al sexo femenino, y el 20% al sexo
masculino.
El rango de TSH en la primera consulta fue de 4.07 µUI/ml a 15,34 µUI/ml, encontrándose en 91
pacientes (91%) por debajo de 10 µUI/ml. 68 pacientes (68%) presentaron una TSH entre 4.07 y 7
µUI/ml. (Gráfico 1)
- 16 -
Separata 2022 - Vol. 30 N° 6
Gráfico 1
Los síntomas más frecuentemente referidos en la historia clínica fueron cansancio, caída de cabello
e intolerancia al frío. 21 (21%) pacientes no referían síntomas compatibles.
El tiempo promedio entre el primer valor de TSH y el segundo fue de 7 meses con un rango de 1 a
46 meses.
En la segunda consulta el nivel de TSH se encontró en un rango de 1.63 µUI/ml a 23 µUI/ml. 14 de
estos pacientes fueron considerados eutiroideos por presentar TSH <4 µUI/ml y 80 persistieron con
valores elevados (50% con niveles de TSH entre 4.03-7 µUI/ml), y en los 6 restantes no se solicitó una
segunda determinación. (Gráfico 2)
Gráfico 2
- 17 -
Hipotiroidismo Subclínico
27 pacientes presentaron AIT positiva y 47 negativa tanto para ATPO como para ATg. 17 pacien-
tes presentaron ATPO negativos, pero no fue evaluada la presencia de ATg, por lo cual no puede
descartarse AIT. Los 9 pacientes restantes no contaban con los valores de anticuerpos antitiroideos.
Los pacientes considerados con diagnóstico de HSC fueron 86/100. De los cuales 6 de ellos, recibie-
ron tratamiento precoz con una sola determinación de TSH, sin contar en la historia clínica con una
clara justificación.
A 59 pacientes (68,6%) de los 86 con HSC se les indicó tratamiento sustitutivo con levotiroxina. La
media de edad de la población tratada es de 44,42 años (± 16,2), de los cuales 86% son menores de
65 años, 34 pacientes (57,6%) fueron tratadas con un nivel de TSH entre 4 a 6,9 µUI/ml. 18 (30,5%)
pacientes tratados presentaban AIT. 14 (77,7%) de estos pacientes fueron mujeres.
Discusión
Nuestro estudio es un análisis retrospectivo que como tal, presenta limitaciones y solo debe inter-
pretarse dentro del contexto de la población que acude a nuestro centro. Como ha sido reportado
en la literatura, es creciente la cantidad de consultas por valores de TSH por arriba del rango de
referencia, que luego debe confirmarse para el diagnóstico de HSC.
En la población estudiada el 90% presentó TSH menor de 10 µUI/ml, hallándose un 27% de AIT.
Al 68,6% de los pacientes (59/86) con diagnóstico de HSC, se le indicó tratamiento sustitutivo. Si
bien el porcentaje de pacientes tratados es elevado, la mayoría de ellos eran menores de 65 años,
en los cuales tendría menor impacto el sobretratamiento. Será importante el seguimiento a largo
plazo de estos pacientes, con el fin de reevaluar la necesidad de continuar con el tratamiento.
- 18 -
Separata 2022 - Vol. 30 N° 6
Conclusiones
Recordar que el HSC requiere para su diagnóstico, al menos dos determinaciones de TSH, con un
intervalo de 3 a 6 meses, y también descartar otros diagnósticos diferenciales.
Es imprescindible que cada centro cuente con su propio rango de referencia de TSH, así como ajus-
tados a la edad.
Si bien se ha reportado la asociación de HSC con diferente sintomatología propia del hipotiroidis-
mo, no hay evidencia contundente sobre la causalidad. Por lo cual será importante evaluar en cada
caso la presencia de los mismos y su respuesta al tratamiento en caso de indicarse, recordando no
sostener el mismo durante tiempo indefinido, en caso de no hallarse beneficio.
La tasa de progresión a HTC es baja, y es más alta cuanto mayor es el valor de TSH y la presencia
de AIT.
Respecto del tratamiento sustitutivo podemos concluir que debemos tener en cuenta dos factores
principales: la edad y el valor de TSH. En cuanto a la edad, habrá mayor beneficio en pacientes me-
nores de 65 años, con factores de riesgo cardiovascular asociados. En cambio, en adultos mayores
a 65 años, es creciente la evidencia de la falta de dicho beneficio, con mayor riesgo de las complica-
ciones del sobretratamiento. Si el valor de TSH es mayor a 10 µUI/ml, el tratamiento está justificado.
En cambio cuando los valores son menores a este límite, deberá individualizarse de acuerdo a edad,
presencia de síntomas, AIT, bocio, otras condiciones médicas asociadas.
Recordar que aunque un tratamiento sea bien tolerado o con pocos efectos colaterales, sólo deberá
indicarse si es beneficioso.
- 19 -
Hipotiroidismo Subclínico
Bibliografía
1. Pearce S, Brabant G, Duntas LH, et al. 2013 ETA Guideline: Management of Sublinical Hypo-
thyroidism. Eur Thyroid J 2013;2:215–228
2. Taylor, PN; Albrecht, D; Scholz A; et al. Nature Reviews. Global Epidemiology of hyperthyroi-
dism and hypothyroidism. Nat Rev Endocrinology. 2018. Vol 14: 301-316.
3. Cappola, Anne R., The Thyrotropin Reference Range Should Be Changed in Older Patients.
JAMA Oct 2019
4. Hollowell JG, Staehling NW, Flanders WD, Hannon WH, Gunter EW, Spencer CA, Braver-
man LE 2002 Serum TSH, T(4), and thyroid antibodies in the United States population (1988
to 1994): National Health and Nutrition Examination Survey (NHANES III). J Clin Endocrinol
Metab 87:489–499.
5. Xiaodan Zhai, Le Zhang, Lulu Chen, Xiaolan Lian, Chao Liu, Bingyin Shi, et al. An Age-Spe-
cific Serum Thyrotropin Reference Range for the Diagnosis of Thyroid Diseases in Older Adults:
A Cross-Sectional Survey in China. Thyroid, 2018. Vol 28, Nº 12 1571-1579.
6. Brenta, G; Vaisman, M; Sgarbi, AS; Berglgio LM; Carvallo de Andrada, N; Orlandi, AM:
Graf, H. Clinical practice guidelines for the management of hypothyroidism. Arq Bras Endocri-
nol Metab. 2013;57/4
7. Biondi B & Cooper DS. The clinical significance of subclinical thyroid dysfunction. Endocrine
Reviews 2008; 29: 76–131.
8. Bernadette Biondi, MD Natural history, diagnosis and management of subclinical thyroid dys-
function Best Practice & Research Clinical Endocrinology & Metabolism Vol 26, Issue 4, August
2012, Pages 431-446.
9. Biondi B; Cappola AR; Cooper DS. Subclinical Hypothyroidism. A Review. JAMA. 2019; Vol
322, Nº 2, 153-160.
10. Peeters, Robin P. Subclinical Hypothyroidism. NEJM, 2017. 376:2556-65.
11. Hansen PS, Brix TH, Sørensen TIA, Kyvik KO, Hegedu¨sL Major genetic influence on the re-
gulation of the pituitary-thyroid axis. A study of healthy Danish twins. J Clin Endocrinol Metab
2004 89:1181–1187.
12. Meyerovitch J, Rotman-Pikielny P, Sherf M, Battat E, Levy Y, Surks MI. Serum thyrotropin
measurements in the community. Arch Intern Med. 2007;167(14):1533-1538
13. Surks MI, Hollowell JG. Age-specific distribution of serum thyrotropin and antithyroid antibo-
dies in the US population: implications for the prevalence of subclinical hypothyroidism. J Clin
Endocrinol Metab 2007; 92: 4575–82.
14. Vanderpump MP, Tunbridge WM, French JM, Appleton D, Bates D, Clark F, et al. The inci-
dence of thyroid disorders in the community: a twenty-year follow-up of the Whickham Survey.
Clin Endocrinol (Oxf). 1995;43: 55-68.
15. Huber G, Staub JJ, Meier C, Mitrache C, Guglielmetti M, Huber P, et al. Prospective study of
the spontaneous course of subclinical hypothyroidism: prognostic value of thyrotropin, thyroid
- 20 -
Separata 2022 - Vol. 30 N° 6
- 21 -
Hipotiroidismo Subclínico
33. Villar HC, Saconato H, Valente O, Atallah AN. Thyroid hormone replacement for subclinical
hypothyroidism. Cochrane Database Syst Rev. 2007:CD003419.
34. Fiore E, Vitti P: Serum TSH and risk of papillary thyroid cancer in nodular thyroid disease. J Clin
Endocrinol Metab 2012;97:1134–1145.
35. Boelaert K: The association between serum TSH concentration and thyroid cancer. Endocr
Relat Cancer 2009;16:1065–1072.
36. Akintola AA, Jansen SW, van Bodegom D, et al. Subclinical hypothyroidism and cognitive
function in people over 60 years: a systematic review and meta-analysis. Front Aging Neurosci
2015;7: 150.
37. Pasqualetti G, Pagano G, Rengo G, et al. Subclinical hypothyroidism and cognitive impair-
ment: systematic review and meta-analysis. J Clin Endocrinol Metab 2015; 100: 4240–48.
38. Rieben C, Segna D, da Costa BR, et al. Subclinical thyroid dysfunction and the risk of cognitive
decline: a systematic review and meta-analysis. J Clin Endocrinol Metab 2016; 101: 4945–54.
39. Tang X, Song ZH, Wang D, et al. Spectrum of thyroid dysfunction and dementia: a dose-res-
ponse meta-analysis of 344, 248 individuals from cohort studies. Endocr Connect 2021;10:
410–21.
40. Feller M, Snel M, Moutzouri E, et al. Association of thyroid hormone therapy with quality
of life and thyroid-related symptoms in patients with subclinical hypothyroidism: a systematic
review and meta-analysis. JAMA 2018; 320: 1349–59.
41. Jabbar A, Ingoe L, Junejo S, et al. Effect of levothyroxine on left ventricular ejection fraction
in patients with subclinical hypothyroidism and acute myocardial infarction: a randomized clini-
cal trial. JAMA 2020; 324: 249–58.
42. Razvi S, Weaver JU, Butler TJ, Pearce SH. Levothyroxine treatment of subclinical hypothyroi-
dism, fatal and nonfatal cardiovascular events, and mortality. Arch Intern Med 2012; 172:
811–17.
43. Feller M, Snel M, Moutzouri E, et al. Association of thyroid hormone therapy with quality
of life and thyroid-related symptoms in patients with subclinical hypothyroidism: a systematic
review and meta-analysis. JAMA 2018;320:1349-59. 10.1001/jama.2018.13770.
44. Garber JR, Cobin RH, Gharib H, et al. Clinical practice guidelines for hypothyroidism in adults:
cosponsored by the American Association of Clinical Endocrinologists and the American Thyroid
Association. Thyroid 2012;22:1200-35.
45. Bekkering GE, Agoritsas T, Lytvyn L, et al. Thyroid hormones treatment for suclinical hypo-
thyroidism: a clinical practice guideline. BMJ, 2019;365
46. Biondi B, Cappola A. Subclinical hypothyroidism in older individuals. Lancet Diabetes Endo-
crinol 2022; 10: 129–41
47. Jonklaas J. The Thyroid. A Fundamental and Clinical Text. Braverman L & Cooper D. 10°. Vol.
46. Wolters Kluwer. 2013; 611–625 p
48. Jonklaas J, Bianco AC, Bauer AJ, et al. Guidelines for the Treatment of Hypothyroidism: pre-
pared by the American Thyroid Association Task Force on Thyroid Hormone Replacement.
- 22 -
Separata 2022 - Vol. 30 N° 6
- 23 -