FX 3 Mleolo
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FX 3 Mleolo
TEMA DE ACTUALIZACIÓN
a
Equipo de Tobillo y Pie, Servicio de Traumatología y Ortopedia, Hospital Las Higueras, Talcahuano, Chile
b
Universidad Católica de la Santísima Concepción, Concepción, Chile
c
Unidad de Pie y Tobillo, Servicio de Traumatología y Cirugía Ortopédica, Hospital Universitario de Canarias, Santa Cruz de
Tenerife, Islas Canarias, España
d
Escuela de Medicina, Universidad de La Laguna, Santa Cruz de Tenerife, Islas Canarias, España
e
Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología, Hospital Universitario 12 de Octubre, Madrid, España
f
Departamento de Cirugía, Universidad Complutense de Madrid, Madrid, España
PALABRAS CLAVE Resumen Las fracturas del maléolo posterior están presentes en 7-44% del total de fracturas
Fracturas de tobillo; de tobillo.
Fracturas El objetivo de esta revisión es conocer la evidencia actual sobre las indicaciones de fijación
trimaleolares; interna y la elección del abordaje quirúrgico para el tratamiento de estas fracturas.
Maléolo posterior; Las indicaciones clásicas de fijación eran el tamaño mayor a 25-30% de la superficie articular
Tratamiento; y el desplazamiento mayor a 2 mm; sin embargo, la evidencia actual sugiere que, en lugar
Abordaje posterior del tamaño, se deben considerar factores tales como la inestabilidad sindesmal, el escalón
articular mayor a 1-2 mm, la impactación de la superficie articular y la presencia de fragmentos
intercalares.
Al comparar las vías de abordaje, la bibliografía apoya el uso de los abordajes posteriores,
reservando la recomendación de abordaje anterior para casos excepcionales.
Para el tratamiento de esta lesión es fundamental conocer la anatomía del tobillo y considerar
los factores descritos, además de la presencia de lesiones concomitantes.
© 2022 SECOT. Publicado por Elsevier España, S.L.U. Este es un artı́culo Open Access bajo la
licencia CC BY-NC-ND (http://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/4.0/).
https://doi.org/10.1016/j.recot.2022.10.019
1888-4415/© 2022 SECOT. Publicado por Elsevier España, S.L.U. Este es un artı́culo Open Access bajo la licencia CC BY-NC-ND (http://
creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/4.0/).
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The classic indications for fixation were fragment size greater than 25---30% of the articular
surface and displacement greater than 2 mm. However, current evidence suggests that, rather
than size, factors such as syndesmotic instability, intra-articular step-off greater than 1---2 mm,
plafond impaction and the presence of intercalary fragments should be considered.
When comparing the different surgical approaches, the literature supports the use of posterior
approaches and reserves the recommendation of the traditional approach for exceptional cases.
For the treatment of this injury it is essential to know the anatomy of the ankle and to
consider all the factors described above, in addition to the presence of concomitant injuries.
© 2022 SECOT. Published by Elsevier España, S.L.U. This is an open access article under the CC
BY-NC-ND license (http://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/4.0/).
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Figura 1 Clasificación de la FMP basada en TAC, descrita por Bartoníček y Rammelt en 2015.
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Tabla 1 Resumen de estudios clínicos sobre la relación entre el tamaño de la FMP y los resultados funcionales
Autor, año Tipo estudio/ n FMP fijadas Resultados
Seguimiento
Tamaño y Jaskulka et al.2 , Retrospectivo 62 14 FMP fijadas Dos grupos: tamaño < 5% y > 5%
resultados 1989 5,7 años Todas con fijación por (incluyen fijadas y no fijadas).
funciona- anterior Sin diferencias ES en
les Puntuación de Weber
modificada
Xu et al.16 , 2012 Retrospectivo 102 42 FMP fijadas Tres grupos: tamaño < 10%,
2,8 años (media tamaño = 28,5%) 10-25% y ≥ 25%. AOFAS sin
23 fijación posterior y 19 diferencias ES en los grupos
por anterior
Drijfhout Van Retrospectivo 131 24 FMP fijadas Tres grupos: tamaño < 5%,
Hooff et al.17 , 6,9 años (media tamaño = 29%). 5-25% y ≥ 25%).
2015 Fijación por anterior AOFAS y AAOS sin diferencias ES
Evers et al.18 , Retrospectivo 42 16 FMP fijadas Dos grupos: tamaño < 25% y >
2015 2,5 años 12 fijación posterior y 4 25%.
por anterior AOFAS sin diferencias ES
Neuman et al.19 , Retrospectivo 100 63 FMP fijadas Sin correlación entre el tamaño
2022 7 años 49 fijación posterior y 14 del fragmento y el resultado
por anterior funcional. OMAS, AOFAS tobillo
y retropié, FFI y SF-36
n: número de pacientes con FMP; ES: estadísticamente significativa; AFSS: Ankle Fracture Scoring System; AOFAS: American Orthopaedic
Foot & Ankle Society; OMAS: Olerud Molander Ankle Score; AAOS: American Academy of Orthopaedic Surgeons; FAOS: Foot and Ankle
Outcome Score; SF-36: Cuestionario de Salud SF-36; FFI: Foot Function Index.
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Figura 5 A y B. Cortes axial y sagital de TAC que evidencian la presencia de un fragmento intercalar en un paciente con FMP
Bartoníček y Rammelt tipo III. C y D. Cortes sagitales de TAC pre y postoperatorio en paciente con FMP Bartoníček y Rammelt tipo
II con fragmento intercalar que se fijó mediante un abordaje posterolateral.
en caso de fragmentos pequeños se recomienda retirarlos o reducir hundimientos de la superficie articular, la dificul-
evitando que actúen como cuerpos libres intraarticulares y, tad de la fijación cuando hay fragmentos posterolaterales
en el caso de fragmentos de mayor tamaño, se recomienda pequeños y el riesgo de lesión de estructuras anatómicas
sintetizarlos1 . anteriores tales como el tendón tibial anterior, el tendón
extensor hallucis longus y las ramas del nervio peroneo
Abordajes quirúrgicos para la fijación superficial. Para reducir este riesgo se recomienda que el
de la FMP sitio de inserción del tornillo anteroposterior sea medial al
tendón tibial anterior y con una disección meticulosa39 .
Una vez sentada la indicación de fijación de la FMP, debemos A medida que han aumentado los estudios sobre esta frac-
definir si realizamos un abordaje tradicional por anterior o tura y se ha comprendido la importancia de la reducción
un abordaje posterior. anatómica, se han descrito numerosos abordajes poste-
El abordaje tradicional (anterior) para la fijación de la riores. Estos tienen la ventaja de permitir una reducción
FMP requiere una reducción indirecta mediante ligamen- directa, y por consecuencia anatómica, de lograr una fija-
totaxis por dorsiflexión del tobillo y la fijación con un ción estable con placas/tornillos y además permiten retirar
tornillo anteroposterior4 . Las ventajas de este abordaje son fragmentos intercalares. Las desventajas de estos aborda-
la posibilidad de fijar la fractura en decúbito supino y con jes son el riesgo de lesión de estructuras neurovasculares
un abordaje mínimamente invasivo. Por el contrario, sus y la dificultad en la reducción de fracturas cuatrimaleola-
desventajas son la dificultad de obtener una reducción ana- res y fracturas del colículo anterior del maléolo medial en
tómica, la imposibilidad de retirar fragmentos intercalares posición decúbito prono9 .
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Figura 6 A-D. Radiografías y TAC preoperatorio y (E-H) postoperatorio de paciente con una luxofractura bimaleolar de tobillo con
FMP Bartoníček y Rammelt tipo III que se fijó mediante un abordaje posteromedial modificado en decúbito supino (PMms) asociado
a un abordaje lateral.
Abordaje tradicional vs. abordajes posteriores y el abordaje posteromedial utiliza el intervalo entre el fle-
xor digitorum longus y el flexor hallucis longus, desplazando
Al analizar la calidad de la reducción, Drijfhout Van Hooff las estructuras neurovasculares hacia lateral.
et al. publicaron 42% de malreducción con el abordaje tradi- Se han descrito múltiples modificaciones para estos abor-
cional, definiendo malreducción como un escalón articular dajes. En el caso del posteromedial, se ha planteado una
mayor a 1 mm 17 . Vidović et al., por su parte, informaron modificación manteniendo el decúbito prono, pero con des-
23% de malreducción con el abordaje anterior y solo 4% con plazamiento de las estructuras neurovasculares hacia medial
abordajes posteriores, en este estudio se consideró como (PMmp) y una modificación con el paciente en decúbito
malreducción la presencia de un escalón articular mayor a supino, abducción de la cadera y flexión de la rodilla (en
2 mm40 . posición de «4»), realizando retracción del tendón tibial
En cuanto a los resultados funcionales, Pilskog et al. obtu- posterior hacia anterior (PMms)44 (fig. 6).
vieron resultados similares entre ambos tipos de abordaje Assal et al. describieron que el abordaje PMmp, con des-
en los cuestionarios SEFAS, RAND-36 y en la escala EVA; sin plazamiento de las estructuras neurovasculares a medial,
embargo, describieron una menor necesidad de fijación sin- permite una visualización de 91% de la superficie posterior
desmal (14 vs. 49%) en los abordajes posteriores.41 Por su de la tibia45 . Sumado a lo anterior, Mitsuzawa et al. demos-
parte, Erinç et al. publicaron diferencias estadísticamente traron que este abordaje genera menor fuerza de retracción
significativas en los cuestionarios SF-36 y FAOS en favor de en partes blandas por medial con un menor riesgo de lesión
los abordajes posteriores42 . neurovascular cuando se requiere visualizar la región poste-
Finalmente, en relación con el riesgo de complicacio- romedial de la tibia46 .
nes, una revisión sistemática y metaanálisis informa que
no existen diferencias significativas en el riesgo relativo
de complicaciones, pero al analizar en forma aislada cada Discusión
complicación concluye un mayor riesgo de infección en los
abordajes posteriores (p = 0,01) y mayor riesgo de dolor pos- Durante muchos años se mantuvo la recomendación de
toperatorio y relacionado con la osteosíntesis en las cirugías que el tamaño del maléolo posterior mayor a 25-30% tenía
sin abordaje posterior. En este último punto es importante indicación de fijación. Posteriormente, algunos estudios pos-
destacar que no fue posible aislar las complicaciones del tularon que el límite para la fijación serían los fragmentos
abordaje anterior, ya que, en la mayoría de los casos, ade- mayores al 10% de la superficie articular15 . Actualmente no
más de ese abordaje fueron necesarios abordajes laterales existe evidencia para recomendar un límite en tamaño para
y/o mediales43 . fijar esta fractura.
Los abordajes posteriores de tobillo clásicamente se rea- El LTFPI tiene su origen en el maléolo posterior y se dirige
lizan en decúbito prono, pudiendo ser posterolaterales o en forma oblicua hasta el borde posterior de la fíbula. Su
posteromediales. El abordaje posterolateral utiliza el inter- importancia en la estabilidad del complejo sindesmal, ya ha
valo entre los tendones peroneos y el flexor hallucis longus; sido demostrada y cobra mayor relevancia cuando existe una
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Tabla 3 Resumen de opciones de abordajes quirúrgicos según la morfología de la FMP y las lesiones concomitantes
FMP aislada con FMP + Fractura fíbula FMP + Fractura FMP + Fractura fíbula
indicación de fijación compleja Tillaux-Chaput o compleja +
Lefort-Wagstaffe Tillaux-Chaput o
Lefort-Wagstaffe
Bartoníček tipo II y PL PMmp + lateral PL + AL (cambio de PMmp + lateral (cambio
IV posición) posición)
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cuando se ha sintetizado previamente el maléolo lateral. 5. Donohoe S, Alluri RK, Hill JR, Fleming M, Tan E,
Posterior a la fijación de todos los maléolos comprometi- Marecek G. Impact of Computed Tomography on Ope-
dos, recomendamos evaluar la estabilidad de la sindesmosis rative Planning for Ankle Fractures Involving the
y, en caso de duda, realizar una exploración artroscópica Posterior Malleolus. Foot Ankle Int. 2017;38:1337---42,
http://dx.doi.org/10.1177/1071100717731568.
por vía anterior para evaluación y posible tratamiento de la
6. Haraguchi N, Haruyama H, Toga H, Kato F. Pathoanatomy of pos-
misma50 .
terior malleolar fractures of the ankle. J Bone Joint Surg Am.
Por último, es de suma importancia conocer la anatomía 2006;88:1085---92, http://dx.doi.org/10.2106/JBJS.E. 00856.
del tobillo al momento de planificar el tratamiento de una 7. Mason LW, Marlow WJ, Widnall J, Molloy AP. Pathoa-
fractura, y además comprender que este tratamiento debe natomy and Associated Injuries of Posterior Malleolus
ser ‘‘a la carta’’, es decir, considerando todos los factores Fracture of the Ankle. Foot Ankle Int. 2017;38:1229---35,
antes descritos asociados al maléolo posterior, además de las http://dx.doi.org/10.1177/1071100717719533.
lesiones concomitantes, ya sean fracturas de maléolo lateral 8. Bartoníček J, Rammelt S, Kostlivý K, Vaněček V, Klika D, Trešl
o medial, fragmentos de Tillaux-Chaput y Lefort-Wagstaffe, I. Anatomy and classification of the posterior tibial fragment
lesiones ligamentarias, lesiones osteocondrales, entre otras. in ankle fractures. Arch Orthop Trauma Surg. 2015;135:505---16,
http://dx.doi.org/10.1007/S00402-015-2171-4.
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Developments. Foot Ankle Clin. 2017;22:125---45,
El tratamiento de las FMP exige una óptima planificación qui- http://dx.doi.org/10.1016/J.FCL.201609009.
10. McDaniel WJ, Wilson FC. Trimalleolar fractures of the ankle. An
rúrgica que dependerá del tipo de fractura según la TAC de
end result study. Clin Orthop Relat Res. 1977:37---45.
tobillo preoperatoria, pero además dependerá de las comor- 11. Heim D, Niederhauser K, Simbrey N. The Volkmann
bilidades del paciente y del estado de los tejidos blandos. dogma: A retrospective, long-term, single-center
Se sugiere realizar fijación interna de esta fractura study. Eur J Trauma Emerg Surg. 2010;36:515---9,
en presencia de inestabilidad sindesmal, escalón articular http://dx.doi.org/10.1007/S00068-010-0061-6.
mayor a 1-2 mm, impactación de la superficie articular tibial 12. Gardner MJ, Streubel PN, McCormick JJ, Klein SE, Johnson JE,
y de fragmento intercalar. Ricci WM. Surgeon practices regarding operative treatment of
Recomendamos el abordaje posterior como la vía de elec- posterior malleolus fractures. Foot Ankle Int. 2011;32:385---93,
ción para lograr una reducción anatómica de la fractura y http://dx.doi.org/10.3113/FAI. 2011.0385.
disminuir la necesidad de fijación transindesmal, pudiendo 13. Mingo-Robinet J, López-Durán L, Galeote JE, Martinez-Cervell
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considerarse el uso de un abordaje anterior tradicional en
gement and results. J Foot Ankle Surg. 2011;50:141---5,
presencia de fragmentos grandes sin fragmento intercalar, http://dx.doi.org/10.1053/J.JFAS.201012013.
escalón ni hundimiento de la superficie articular. 14. Kuyumcu M, Bilgin E, Bombacı H. Factors Affecting the Clini-
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Financiación 16. Xu HL, Li X, Zhang DY, Fu ZG, Wang TB, Zhang
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Este trabajo no ha recibido ningún tipo de financiación. malleolus fractures. Int Orthop. 2012;36:1929---36,
http://dx.doi.org/10.1007/S00264-012-1591-9.
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