Síntesis - El Principito.

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TRABAJO

REMEDIAL DE ESPAÑOL

Síntesis de “El Principito”.

Nombre del estudiante: Angela Cosío Estavillo

Nombre del Maestro: David González Aguilar

David González Aguilar

11 – Junio - de 2023
(de Saint-Exupéry, 1943) “Todos los mayores fueron primero niños, pero pocos lo
recuerdan.” (Pág. 5)

La historia de El Principito comienza cuando un aviador queda varado en el


desierto del Sahara después de que su avión se estrellara. Mientras él intentaba
repararlo, conoce al principito, quien le pidió que le dibuje un cordero. A partir de
ahí, el Principito comienza a compartirle sus aventuras y reflexiones de vida.

El planeta del principito era muy pequeño; más pequeño que una casa. En el
existían 3 volcanes pequeños, dos activos y uno extinto que a menudo utilizaba
para hacerse el desayuno. Lo más importante que existía en su planeta, era su
rosa, personaje que representa el amor.

El Principito llega a diferentes planetas que representan distintas actitudes y


formas de vida. Conoce a un rey ambicioso que gobierna sobre un planeta vacío;
a un vanidoso que exige que le aplaudan; un bebedor que bebe por pena a admitir
que es alcohólico; a un hombre de negocios que cuenta las estrellas; a un farolero
que enciende y apaga su farol cada minuto, y a un geógrafo que no conoce su
planeta por qué no existen exploradores. El Principito se frustra por no encontrar
amigos verdaderos y se siente cada vez más sólo.

“Las personas grandes nunca comprenden nada solas y es cansador para los
niños tener que estar dándoles explicaciones todo el tiempo”. (de Saint-Exupéry,
1943, pág. 8).

El Principito, al llegar a la Tierra, platica con una serpiente del desierto que le
propone buscarla cuando él extrañe a su planeta. Él
comprendió su propuesta, pero le intrigaba entender por qué la serpiente hablaba
con enigmas. Ella solo respondió que era por qué sabía resolverlos todos.

Después de un largo recorrido en la Tierra, llega a un campo muy grande de rosas.


Él se sintió muy triste después de darse cuenta de que su rosa no era la única de
su especie en el universo como ella lo dijo. Se creía rico con una rosa única pero
no tenía más queuna rosa común.

Aquí es cuando el Principito conoce al zorro, quien le enseña el verdadero poder


de la amistad, recordándole que lo más difícil de “domesticar o ser domesticado”
son las despedidas, ya que es inevitable llorar. También le comparte un secreto:
lo esencial es invisible a los ojos. El zorro le enseña que su rosa es única, y así
existieran 5,000 especies iguales, ninguna iba a ser igual de especial que su
rosa y el principito comprendió que él es responsable de ella.

Si vienes, por ejemplo, a las cuatro de la tarde, comenzaré a ser feliz


desde las tres. Cuanto más avance la hora, me sentiré más feliz. A las
cuatro me sentiré agitado e inquieto; ¡descubriré el precio de la felicidad!
Pero si vienes a cualquier hora, nunca sabré cuándo preparar mi corazón…
Los ritos son necesarios. -El Zorro. (de Saint-Exupéry, 1943).

Durante el tiempo que el Principito contaba de su experiencia al aviador, fueron a


buscar un pozo de agua. El principito le pide al aviador que regrese a su nave
para terminar el trabajo y le dice que lo espera en el mismo lugar al día siguiente
por la tarde.

Cuando el aviador regresó, observó que el principito estaba arriba de un muro


intentando escapar de una serpiente venenosa. A lo lejos escuchaba que
platicaban acerca de la
propuesta que la serpiente le hizo al Principito. El aviador intentó matar a la
serpiente, pero ella fue más rápida y alcanzó a inyectarle su veneno al Principito.
Por suerte pudo atraparlo en sus brazos y con la mirada perdida y la piel pálida, el
Principito le explicaba que ese día se cumplía un año de haber llegado a la Tierra,
y que esa noche su estrella se encontraría en el mismo lugar en el que él cayó el
año pasado.

El aviador se encontraba triste por la sensación de lo irreparable y entre palabras,


el Principito intentaba consolarlo. Él le dijo que podía buscarlo en las estrellas,
recordar su risa. Que no importaba si no sabía a qué estrella mirar, era suficiente
ver todas las estrellas en el cielo.

“Mi estrella será para ti una de las estrellas. Entonces te agradará mirar todas las
estrellas. Todas serán tus amigas” (de Saint-Exupéry, 1943)

Y así fue como el aviador y el principito se despidieron y junto a su triste despedida


y la inevitable muerte del principito, termina el libro.

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