SEMANA 6 - Nitrogeno
SEMANA 6 - Nitrogeno
SEMANA 6 - Nitrogeno
Transmisión a los animales. Siguiendo el orden de la cadena trófica, el nitrógeno en las plantas pasa a los animales herbívoros y
luego a los carnívoros, esparciéndose entre los distintos eslabones de la pirámide alimentaria. El exceso de nitrógeno es expulsado
de sus cuerpos mediante la orina, rica en amoníaco, volviendo así al suelo para continuar con el ciclo.
Nitrificación. El amoníaco del suelo proveniente de la orina de los animales o de la acción de las bacterias fijadoras sirve de alimento
a otro tipo de microorganismos de acción nitrificante, o sea, que descomponen el amoníaco y lo oxidan a nitritos (NO2–), y luego los
nitritos se oxidan a nitratos (NO3–).
Descomposición desnitrificante. Estos compuestos sirven, a su vez, de alimento a otro tipo de procariontes, esta vez de
metabolismo desnitrificante, o sea, que descomponen los iones nitrito y nitrato, y obtienen energía para vivir y liberando de vuelta a
la atmósfera el nitrógeno en estado gaseoso, para que el ciclo pueda recomenzar.
Ciclo del nitrógeno en el agua
Erosión y meteorización. El fósforo abunda en minerales terrestres, que se encuentran en tierra firme o en el
fondo de los mares. Los efectos constantes de la lluvia, la erosión eólica y solar, así como la acción accidental de
la minería del ser humano permiten que estas reservas de fósforo salgan a la superficie y sean transportadas
hasta los diversos ecosistemas.
Fijación en las plantas y transmisión a los animales. Las plantas absorben el fósforo de los suelos y lo fijan en su
organismo, tanto en el caso de las plantas terrestres, como de las algas y el fitoplancton que lo absorbe de las
aguas marinas. A partir de allí es transmitido a los animales que se alimentan de las plantas, en cuyos cuerpos
también es almacenado, y del mismo modo a los depredadores de dichos animales herbívoros y a sus
depredadores, repartiéndose a lo largo de la cadena trófica.
Retorno al suelo por descomposición. Las excreciones de los animales son ricas en compuestos orgánicos que, al
ser descompuestos por las bacterias y otros organismos del reciclaje natural, retornan a ser fosfatos
aprovechables por las plantas, o transmisibles al suelo. Lo mismo ocurre cuando los animales mueren y se
descomponen, o cuando la carroña dejada de la cacería es descompuesta. En todos estos casos, los fosfatos
retornan al suelo para ser aprovechados por las plantas o para continuar escurriéndose en ríos y lluvias hacia el
mar.
Retorno al suelo por sedimentación. Otra vía de retorno del fósforo del cuerpo de los animales hacia la tierra,
(donde vuelve a formar parte de minerales sedimentarios) es mucho más larga que la permitida por acción de
los animales, y tiene que ver con la fosilización de sus restos orgánicos y el desplazamiento tectónico de las
reservas de fósforo de origen orgánico hacia las profundidades de la tierra. Pero tales levantamientos geológicos
pueden demorar miles de años en ocurrir.
Alteraciones en el ciclo del fósforo
El ciclo del fósforo puede verse alterado en gran medida por las intromisiones
humanas. Por un lado, la liberación de fósforo por la acción minera puede aumentar
la presencia de este material en la superficie terrestre, dado que su extracción por
vías naturales erosivas habría tomado miles de años más.
Por el aumento de los fosfatos y del nitrógeno, aumentan también las algas
y microorganismos que lo aprovechan. Este proceso se llama eutrofización, que
consiste en el aumento excesivo de nutrientes en un ecosistema acuático y que
provoca el desbalancea la dinámica trófica, lo que genera una superpoblación de
algas que compiten entre ellas hasta morir masivamente en la orilla. Al
descomponerse generan contaminación y además aumentan las cantidades de
fósforo circulantes en el agua marina.