Tarea 3 - Bioetica
Tarea 3 - Bioetica
Tarea 3 - Bioetica
BIOÉTICA
Grupo 1
Integrantes:
• Marco Antonio Amores Aguilar
• Ángel Gabriel Campoverde Villalta PROYECTO SELECCIONADO:
• Jean Daniel Farías Coveña
• Jimmy Leandro Reyes Zambrano BIOÉTICA DEL DERECHO AL AGUA POTABLE
• Ruth Alicia Román Merino
• Cristian Raúl Troya Arellano
RESUMEN:
Improvisación
En Barranquilla, Colombia, el
precio promedio del agua del
servicio público es de US$ 0,55 por
metro cúbico, por el mismo metro
cúbico de agua cuesta a los que se
surten de carro tanques y
transportistas de agua US$ 5,50
LA DIMENSIÓN GLOBAL DEL PROBLEMA
En países con baja expectativa de
El uso per cápita de agua por día,
Según cifras del PNUD alrededor de vida la cobertura de agua está por
medido en litros, el consumo
1.100 millones de personas en el debajo del 20% de la población y
promedio de un norteamericano es
mundo no tienen acceso a agua sólo el 3% de la población tiene
de 600 litros/día, un ciudadano chino
limpia. En América Latina, existen inodoro con cisterna lo que genera
consume 100 litros/día, y un
todavía casi 50 millones de personas que un 69% de la población use
ciudadano en Haití consume menos
sin acceso a este recurso. diariamente el campo para hacer
de 20 litros al día.
necesidades fisiológicas.
• Justicia social
Bienestar colectivo • Principios de equidad
• En contra de la desigualdad
LA JUSTICIA COMO PRINCIPIO EN LA BIOÉTICA.
• Los seres humanos tenemos derecho a los servicios básicos
• la bioética como alternativa para orientar de manera asertiva y Precaución
prospectiva del debate sobre el acceso al agua potable.
• La justicia distributiva debe tener un contenido social y garantizar el
bienestar colectivo.
• La norma de oportunidad social exige que el Estado garantice el acceso a
los servicios, a todas las personas, que indistintamente de las ventajas o
desventajas sociales, necesitan acceder al agua potable. Las limitaciones El
Dignidad
naturales o sociales, no son razón para negar el acceso a un servicio básico humana derecho Vulnerabilidad
que genera bienestar colectivo al agua
• La bioética y la justicia se interesan por las desigualdades para exigir-
reclamar la igualdad de oportunidades por lo que justicia distributiva
pretende que las exigencias individuales y colectivas atiendan de manera
suficiente las necesidades básicas de los ciudadanos
Integridad
ALGUNOS REFERENTES PARA HABLAR DEL AGUA COMO DERECHO HUMANO FUNDAMENTAL.
• Es posible pensar desde la bioética, que la justicia distributiva aplica convenientemente para todas aquellas
personas cuyo esfuerzo personal no es suficiente para suplir las demandas de saneamiento básico. Porque
estas personas por sí mismos no pueden resolver el problema de acceso al agua potable.
• Exigir el respeto del principio de justicia, desde la bioética y con orientación al derecho al agua potable, es una forma
de lucha en contra de la inequidad a la que hace referencia la Defensoría del Pueblo en su estudio sobre el
cumplimiento del derecho al agua potable en Colombia.
• Esta condición de incapacidad urge a los particulares y a los gobiernos para que dispongan los medios
necesarios y los recursos suficientes que establezcan condiciones de igualdad en el acceso al agua potable.
Respetando el principio de justicia se facilita el acceso al agua potable a las personas, indistintamente de sus
capacidades o su estrato social.
BIOÉTICA DEL DERECHO AL AGUA POTABLE
• El término biomímesis es reciente, fue usado en los años noventa en el contexto de la robótica.
(Riechmann, 2006, p. 189)
• Desde la biomímesis se pueden distinguir mecanismos de autorregulación y compensación de
la cadena de consumos relacionada con el elemento agua.
• La autocontención que es un proceso observable en la naturaleza puede ordenarse mediante
la biomímesis y traducirse en actos humanos.
BIOÉTICA DEL DERECHO AL AGUA POTABLE
Conclusiones
• Mítica, mímesis ancestral, biomímesis y autocontención, son los elementos que estructuran
una visión de la biosfera en condiciones de fragilidad, finitud, volubilidad, fertilidad, fecundidad,
confraternidad.
• La biomímesis consiste en imitar la naturaleza, con el fin de hacer que la inventiva humana sea
compatible con la biosfera, con sus procesos naturales, con sus leyes físicas y sobre todo, con
sus equilibrios y desequilibrios.
• La autocontención como macroproceso vital, que se configura y reconfigura a partir de la
mímesis ancestral y la biomímesis, es posible cuando en la cotidianidad humana y social, la
cadena de consumos ambientales está ajustada a procesos individuales de equilibrio y
compensación.
BIOÉTICA DEL DERECHO AL AGUA POTABLE
Reflexiones
Asignatura: Bioética
Cohorte: III
Integrantes:
Resumen
Introducción
La demanda del uso doméstico del agua en Colombia es cercana a los 3.300 millones
de metros cúbicos al año. Este consumo se relaciona con aproximadamente 10
millones de viviendas que hay en el país (Defensoría del Pueblo. 2009, p. 79). Este
consumo refleja solo el 28% del consumo total de agua en el país, donde los fines
agrícolas representan la mayor demanda.
En Colombia, el 85% del agua del país, se concentra en zonas geográficas donde se
ubica solo el 37% de la población total (Defensoría del Pueblo, 2009, p. 88).
Según este dato, por lo menos siete millonesde personas, están en condiciones de
escasez o en están en zonas de oferta mínima de agua potable. 14 millones de
personas viven en zonas con una relación de escasez latente. En esta situación se
encuentran departamentos como Guajira y Quindío.
145 municipios están en un alto índice de vulnerabilidad por escasez del recurso, y
en 568 municipios este indicador de riesgo es medio.
El costo del acceso al agua potable por ser este un servicio básico, es cubierto por
los usuarios y por el gobierno. Las personas realmente pobres los que viven con
menos de dos dólares diarios se les hace imposible pagar este costo. Por ejemplo,
en Barranquilla, Colombia, donde el precio promedio del agua del servicio público es
de US$ 0,55 por metro cúbico, por el mismo metro cúbico de agua cuesta a los que
se surten de carro tanques y transportistas de agua US$ 5,50, es decir, esta agua es
20 veces más costosa que la que se ofrece mediante los servicios de acueductos
públicos. Y no es agua considerada segura.
El uso per cápita de agua por día, medido en litros, el consumo promedio de un
norteamericano es de 600 litros/día, un ciudadano chino consume 100 litros/día, y un
ciudadano en Haití, Rwanda, Uganda y Mozambique, consume menos de 20 litros al
día. Un referente es el umbral de pobreza en el consumo de agua potable, el cual se
supera con un mínimo de 100 litros por día en una familia conformada por cinco
integrantes.
En países con baja expectativa de vida, y con altos índices de mortalidad la cobertura
de agua está por debajo del 20% de la población y sólo el 3% de la población tiene
inodoro con cisterna. A falta de agua para el saneamiento básico, un 69% de la
población en esos países usa diariamente el campo o los bosques para hacer sus
necesidades fisiológicas. El consumo de aguan contaminada sigue siendo la causa
de por lo menos el 88% de las muertes en menores de edad en todo el mundo, es
decir, 1.5 millones de niños menores de cinco años.
Con respecto al consumo de agua embotellada hay quienes consideran que “mientras
una parte del mundo apoya al mercado del agua embotellada, que no genera ningún
beneficio tangible para la salud, la otra parte sufre graves riesgos para la salud pública
por la necesidad de beber agua de los drenajes o de lagos y ríos que comparten con
animales y que están infectados con bacterias nocivas.”
El acceso al agua limpia, por ser el agua indispensable para el desarrollo económico
y social de las personas debe hacer parte de los debates sobre el reconocimiento y
el respeto de los derechos humanos, lo que propone disminuir los niveles de pobreza
y las tasas de morbilidad y mortalidad en poblaciones urbanas y rurales.
Desde la visión de la igualdad social mientras tanto se busca una justa distribución de
bienes de consumo y cada persona recibe lo que necesita estableciéndose una
relación justicia –necesidad.
Otro punto de vista es el bienestar colectivo donde se pretende alcanzar una justicia
social con principios de equidad y no se acepta la desigualdad.
Además, existe un principio de dignidad humana por el cual los seres humanos
tenemos derecho a los servicios básicos, y para poder brindar este acceso y en caso
de escepticismo en cuanto a leyes se puede recurrir a la bioética como alternativa
para orientar de manera asertiva y prospectiva del debate sobre el acceso al agua
potable. Porque la justicia distributiva debe tener un contenido social y garantizar el
bienestar colectivo.
Según la Defensoría del Pueblo (2005), el derecho al agua potable está en relación o
en conexión con los derechos económicos, sociales y culturales. Concretamente con
el derecho a la salud, a la vivienda, a la alimentación, a la educación, y al desarrollo.
El agua es un derecho exigible como una obligación de efecto inmediato y
cumplimiento progresivo, es decir, es un derecho exigible con independencia a las
condiciones y problemas de tipo presupuestal que afecten al Estado en el momento
en el que se hace la exigencia. Desde el punto de vista constitucional, se relaciona
con el derecho al medio ambiente sano y el derecho a la prestación de los servicios
públicos.
Esta condición de incapacidad urge a los particulares y a los gobiernos para que
dispongan los medios necesarios y los recursos suficientes que establezcan
condiciones de igualdad en el acceso al agua potable. Respetando el principio de
justicia se facilita el acceso al agua potable a las personas, indistintamente de sus
capacidades o su estrato social.
Exigir el respeto del principio de justicia, desde la bioética y con orientación al derecho
al agua potable, es una forma de lucha en contra de la inequidad a la que hace
referencia la Defensoría del Pueblo en su estudio sobre el cumplimiento del derecho
al agua potable en Colombia.
En esta disposición internacional se establece los tres criterios que dan sentido a la
consideración del acceso al agua como un derecho fundamental: la disponibilidad, la
accesibilidad, y la potabilidad o calidad del recurso.
Cada estado está en capacidad de definir y proponer una idea de bienestar colectivo.
Desde esta idea se admite que todos los miembros de una comunidad, cuentan con
los medios para reconocer para sí y para los otros, unas condiciones que garantizan
la igualdad.
Para concretar estas ideas, las personas libre y voluntariosamente comparten y
respetan unas reglas de juego, y unas normas a través de las cuales se hace la justa
distribución. Si lo anterior no es posible, deben generarse mecanismos coercitivos y
de castigo, para las personas que desconocen las reglas básicas de justicias, de esta
manera, se logra crear un orden social en torno a la justicia.
Desde una visión holística del ambiente, (Dobson, 1999, p. 281), y concretamente
desde una cosmovisión local, y adoptando la idea de un pensamiento ecológico
primitivo, que en Colombia hay evidencias y rasgos importantes de éste, sobre todo
en las cosmovisiones indígenas, se puede hacer un aporte complementario en la
discusión planteada través de este texto. En la mítica y en la ancestralidad de los
pueblos indígenas, hay una variedad de elementos que en cierto sentido pueden
constituir una base axiológica para orientar hábitos y formas de consumo de bienes
ambientales vitales y a veces escasos como lo es el agua potable. Concretamente en
la mítica de los muiscas del altiplano cundiboyacense, por ejemplo, donde se contiene
un fuerte simbolismo en relación con el elemento agua.
Esta visión busca reconstruir las relaciones deterioradas entre las culturas urbanas,
con el ambiente, y con las especies no humas en razón de procesos antrópicos y
entrópicos. La mimesis ancestral y la biomímesis como didáctica de un ejercicio
cotidiano busca conservar un bien ambiental escaso en muchas regiones, busca
cuestionar en la práctica, los consumos exagerados, producto de unos estilos de vida,
donde no hay preocupación por los problemas del ambiente; busca viabilizar formas
culturales de autogestión de los recursos escasos, en las comunidades donde se
presenta este problema, busca también, establecer unos lazos con uno valores
locales donde el agua es valiosa porque tienes múltiples sentidos y significados
culturales.
Conclusiones