Escultura Prado

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ESCULTURA GRECO-ROMANA DEL MUSEO DEL PRADO

1. INTRODUCCIÓN

El grueso de la colección de escultura romana y griega que encontramos en el Museo del Prado
procede de la Colección Real, y entre estas obras destacan el Grupo de san Ildefonso y
Apoteosis de Claudio.

Por otro lado, las obras reunidas por José Nicolás de Azara, Marqués de Nibbiano, uno de los
mayores mecenas del arte español en el s. XVIII que fueron cedidas al Estado un siglo después
de su fallecimiento.

Los dos grupos mayoritarios se incorporaron al ya desaparecido Museo Nacional de Arte y


Escultura, que trasladaría toda su colección al hoy conocido como Museo del Prado, y desde el
fin de la Guerra Civil española es visitable el cien por cien de la colección expuesta con la
entrada general.

2. LA SALA DE LAS MUSAS

Las ocho composiciones que se exponen en el museo fueron halladas en 1.500 en la Villa
Adriana de Tivolí, su origen se encuentra en el final del mandato de Adriano (+-130 d.C.) y
fueron realizadas por dos talleres romanos distintos.

En el año 1670 las obras fueron adquiridas por la Reina de Suecia y trasladadas a Palacio. Pero
en el 1725 fueron adquiridas por la monarquía española, a decisión de Felipe V, y ubicadas en
el Real Palacio de La Granja de San Ildefonso.

Solo tres de las ocho musas están identificadas completamente, y catalogadas con su origen
concreto, las otras cinco restantes son atribuidas a otro taller romano, pero sin ser capaces de
concretar cual.

La Sala de Las Musas del Museo del Prado se llama así ya que las figuras expuestas son musas
de la razón, de la estética, de la comedia, de la ciencia, de la memoria, etc. Pero también por la
sala de los Museos Vaticanos, también pintada en rojo y con una estética muy similar con los
pilares a modo de atril.
3. PIEZAS DEL PERIÓDO ARCAICO

Las piezas de la Era Arcaica están repartidas, las piezas más pequeñas y más antiguas están
expuestas en la sala contigua, la alargada, en el lado izquierdo y son pequeñas figuras del
tamaño de medio brazo, que eran utilizadas como ofrendas. Las esculturas exentas están en
esta sala redonda, en ellas se muestra al personaje con muy pocos rasgos de naturalidad, y
siguiendo en las dos obras que hay el mismo canon, las demás obras de la sala son replicas
romanas y bustos de la era Romana.

De esta sala no hay foto porque no me dejaron.

4. PIEZAS DEL PERIODO CLÁSICO

Las piezas de la Era Clásica se ubican en la otra sala pequeña circular, opuesta a la sala
anterior, en ella se observan estatuas de un tamaño medio, representando cuerpos reales, en
los que se aprecia el tratamiento de los paños, especialmente en una de ellas, una mujer
vestida con una túnica que se ciñe a su cuerpo y marca sus caderas. En esta sala se ven una
docena de esculturas, la mayoría réplicas romanas de escultura griega
5. PIEZAS DEL PERIODO HELENÍSTICO

Las piezas de la etapa Helenística se encuentran en la sala más grande dedicada a la escultura,
la sala alargada, y la mayoría de ellas en la parte derecha de la sala, ya que comparte sala con
las obras arcaicas y con alguna réplica romana. En esta sala destacan las composiciones
artísticas, que hasta ahora no se han visto en la historia del arte, son conjuntos sencillos de dos
figuras la mayoría, y uno de tres figuras, una sostenida sobre la otra. Las obras muestran con
gran detalle los rostros y las características de los figurantes, así como la edad de cada uno de
ellos
6. ESCULTURA ROMANA

La escultura romana que vemos en el Museo del Prado se puede dividir en dos grupos, uno son
las réplicas de originales griegos, la mayoría de las obras expuestas; y el otro son los retratos,
bustos y estatuas propias de su arte y cultura. Todas las obras del Arte Romano, no replicas,
son de Hispania, repartidas entre España y Portugal, especialmente el sur peninsular.

En estas esculturas, todas de bulto redondo, se ven que muchas de ellas son retratos,
encargados por las familias de la jet set romana, todos los retratos son de militares,
comerciantes o dirigentes políticos de la zona. Este hecho se debe a que en la época tener un
retrato a modo de busto otorgaba una importancia pública notable.

Durante el periodo romano la disciplina que más se desarrolla frente a las anteriores etapas de
la historia del arte es la escultura, en la escultura se profundiza en el retrato, a modo de busto,
y el retrato ecuestre, aunque no hay en la colección ningún retrato ecuestre, en la sala
principal hay un busto de caballo muy notable artísticamente.

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