Derecho Agrario – UBP- Año 2021

Unidad 11: “Explotación Minera De Primera Categoría”

1- Adquisición de las minas: Procedimiento. Personas que pueden adquirir minas. Capacidad.
Inhabilidades. Descubrimiento. Concepto. Importancia. Clases. Primer descubridor.
2- Manifestación de descubrimiento: requisitos. Personas que pueden manifestar por otro.
Principio y excepciones. Ratificación. Registro. Concepto. Importancia. Efectos. Publicación.
Preferencia. Manifestación sucesiva. Manifestación simultánea. Concurrencia. Casos.
3- Concesión minera: concepto. Caracteres. Naturaleza jurídica. Objeto de la concesión.
Requisitos. Concesión por yacimientos.
Unidad 12: “Explotación Minera De Primera Categoría”. Continuación
1- Pertenencia minera: Concepto. Importancia. Determinación de las pertenencias: en la
superficie y en profundidad. Pertenencias ordinarias y pertenencias extraordinarias. Inclinación, casos
especiales.
2- Derechos y obligaciones del descubridor: Pertenencias que puede solicitar. Distintos casos.
Labor legal. Fundamento. Forma y plazos. Petición de mensura. Mensura y demarcación.
Procedimiento. Inscripción y efectos. Ampliación. Mejora. Demasías. Socavones. Conceptos.
Importancia. Procedimientos.
ADQUISICION DE LAS MINAS
CONCESION MINERA
La concesión minera es la concesión legal. Es gratuita, el empresario minero no debe pagar para
obtener la concesión. El pago del canon no tiene características fiscales, no es una tasa ni una retribución.
El plazo es por tiempo ilimitado, esta dado por la existencia del mineral, es decir que mientras exista
mineral existe la concesión. Con la concesión se le entrega al minero la propiedad del mineral.
La concesión es el acto mediante el cual la autoridad competente le otorga la propiedad del
yacimiento al minero para que pueda extraer el mineral.
- El Estado otorga la concesión legal: Si hacemos la división entre dominio originario y
dominio derivado, el dominio originario es aquel Estado detenta de acuerdo al poder soberano
que éste tiene en su territorio y el dominio derivado es aquel en el cual se lo entrega para su
explotación a través de lo que llamamos la concesión legal, es el la ley la que a través del Estado
le entrega al particular la propiedad minera, a través de lo que se llama la concesión minera,
por eso decimos que la propiedad minera es la concesión minera y también decimos que esta
concesión minera es la concesión legal, legal porque es la ley la que otorga al particular la
posibilidad de explotar teniendo esta propiedad la mina, el Estado a través de la ley le otorga al
particular la propiedad minera.
TITULO IV
De la adquisición de las minas
Art. 44. – Las minas se adquieren en virtud de la concesión legal otorgada por autoridad competente
con arreglo a las prescripciones del presente Código.
Son objeto de concesión:
Los descubrimientos.
Las minas caducadas y vacantes.
MINAS VACANTES, CADUCAS Y ABANDONADAS
Puede solicitarse la concesión de una mina caduca, vacante o abandonada. La autoridad minera
lleva un registro de minas caducas, vacantes o abandonadas.
Mina vacante: Es una mina que, si bien fue demarcada, no tiene dueño porque la vacancia es
la sanción mediante la cual se castiga al minero que no solicito la mensura en el tiempo oportuno. Se
inscribe así la mina como vacante.
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Mina caduca: Mina que cayó en esa situación por la falta de cumplimiento del amparo minero.
El amparo minero es el conjunto de derechos y obligaciones que le asegura al propietario de la mina
mantenerse en el uso y goce de la mina.-
Minas abandonadas: Su dueño lleva adelante un proceso de abandono, si no le avisa a la
autoridad minera la decisión de abandonar y simplemente lo hace no podrá llevarse sus pertenencias. La
autoridad minera le ordenará ciertos trabajos para preservar el recurso y luego de ello el minero podrá
sacar sus pertenencias y todas las maquinarias.
Registro de minas caducas y vacantes
Las minas están en este Registro durante 3 años. Transcurrido este tiempo pierde el carácter de
mina y vuelve a ser terreno libre. Con las minas caducas el Estado tiene un crédito a su favor y quien lo
solicite deberá cubrir pagando ese crédito a favor del Estado.
Para las minas vacantes y abandonadas solo se necesita la solicitud, no se debe realizar ningún
tipo de pago.
ADQUISICION DE LAS MINAS:
La prueba de la existencia de mineral en el yacimiento es, en nuestro derecho, una condición
esencial para la concesión de la mina.
Se considera mina a aquel yacimiento que pueda ser explotado con provecho. No basta, la simple
presencia de mineral en el criadero, sino que este debe contener un volumen o tonelaje suficiente y
características tales que posibiliten razonablemente instalar en él un trabajo industrial.
Las minas se adquieren originariamente, por concesión otorgada por autoridad competente, esto
es por la autoridad de cada provincia.
Del descubrimiento minero y su manifestación:
Art. 45. – “Hay descubrimiento cuando, mediante una exploración autorizada o a consecuencia de un
accidente cualquiera, se encuentra un criadero antes no registrado”.
Se considera que hay descubrimiento de una mina, cuando mediante una explotación autorizada
o consecuencia de un accidente cualquiera, por ejemplo, realizando una perforación cualquiera en
búsqueda de agua, se encuentra un criadero antes no registrado.
Descubridor, para la ley, es el primero que efectúa la denuncia o declaración del hallazgo ante
la autoridad minera.
Según el Art. 46, el descubridor presentara un escrito ante la autoridad minera haciendo la
manifestación del hallazgo y acompañando muestra del mineral.
El escrito, del que se presentaran dos ejemplares, contendrá:
 el nombre, estado y domicilio del descubridor;
 el nombre y el domicilio de sus compañeros, si los tuviere,
 el nombre que va a llevar la mina,
 el punto del descubrimiento,
 el nombre y mineral de las minas colindante
 a quien pertenece el terreno.
El área determinada deberá tener la forma de un cuadrado. Dicha área quedara indisponible
hasta que se opere la aprobación de la mensura.
Tramites del procedimiento adquisitivo de la mina:
Art. 49. – “El escribano de minas pondrá constancia en cada uno de los ejemplares del pedimento, del
día y hora en que le fuere presentado, aunque el interesado no lo solicite.
El escribano certificará a continuación, si hay otro u otros pedimentos o registros del mismo cerro o
criadero; y en su caso, lo manifestará al interesado, quien firmará la diligencia.
Después de esto, se devolverá UNO (1) de los ejemplares al solicitante, reteniéndose el otro para la
formación del expediente de concesión.
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Si sólo se ha presentado UN (1) ejemplar del pedimento, se dará de él copia autorizada al interesado,
con sus anotaciones y certificaciones”.
El escribano certificara a continuación, si hay otro u otros procedimientos o registros del mismo
cerro o criadero, y en su caso, lo manifestara al interesado, quien firmara la diligencia. Después de esto,
se devolverá uno de los ejemplares al solicitante, reteniéndose el otro para a formación del expediente
de concesión.
Si la autoridad notare que se ha omitido alguna indicación o requerimiento de los que exige la
ley en las manifestaciones, señalara el plazo que juzgue necesario para que se hagan las rectificaciones
o se llenen las omisiones (art. 48 CM).
Durante el plazo que fije la autoridad para subsanar los defectos, el peticionante mantendrá la
prioridad en la zona designada.
Intervención del catastro:
Según el art. 50, presentada la solicitud se le asignara un número cronológico y secuencial y sin
más la autoridad del catastro minero lo analizara para determinar si la misma recae en terreno franco o
no.
Excepto que el terreno este franco en su totalidad, el peticionario deberá pronunciarse en 15 días
sobre su interés o no respecto del área libre.
De no existir un pronunciamiento expreso, la petición se archivará sin más trámite.
Registro de la manifestación:
II Del registro
Art. 51. – “El escribano presentará en la primera audiencia el escrito de manifestación, que la
autoridad mandará registrar y publicar”.
Salvados los inconvenientes que puede obstaculizar su progreso, la autoridad minera ordenará
el registro del pedimento o manifestación en el protocolo del escribano de mina.
El registro es la copia de la manifestación con sus anotaciones y proveídos, hecha y autorizada
por el escribano de minas en libros de protocolo que debe llevarse al efecto (art. 52).
Desde el día del registro el minero puede tomar posesión del terreno.
A partir del registro minero puede dar comienzo a la explotación del yacimiento descubierto,
aun antes de haber demarcado en el terreno los lotes o pertenencias que desea reservar para su
aprovechamiento.
Finalmente, desde la fecha del registro comienza a computarse el plazo de exención del pago
del canon minero que, por el término de 3 años, beneficia a los descubridores y, también, a correr el
plazo para la ejecución de la labor legal, diligencia indispensable, para realizar la mensura y
demarcación de la mina.
La publicación dispone es el Art. 53, que se hará insertando integro el registro en el periódico
que designe la autoridad minera, por tres veces en el espacio de 15 días.
Concurrencia y preferencia
El código establece que el primer descubridor es el primero que solicita el registro, siempre que
esto no resulte de dolo o fraude (art. 60).
Art. 61. – “Si se presentan a un mismo tiempo DOS (2) o más pedimentos de una misma mina, aquel
que determine de una manera cierta, clara e inequívoca la situación del cerro y la naturaleza y condiciones del
criadero, será preferido a los que no llenen satisfactoriamente este requisito”.
El código también establece que ocurre si dos personas se presentan al mismo tiempo para
declarar un descubrimiento en el mismo lugar. Se le dará prioridad a aquel que pueda determinar con
más exactitud el lugar del descubrimiento y si los dos lo definen con la misma exactitud, se tendrá por
tal a la de mayor importancia (art. 61 y 62).

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El Art. 66 indica que las personas que se crean con derecho a un descubrimiento manifestado
por otro deben deducir sus pretensiones dentro de los 60 días siguientes al de la publicación del registro.
Derechos y obligaciones del descubridor:
La labor legal:
Una vez resueltas las cuestiones de derecho, se ordena el registro de la mina.
Comienza a correr el plazo para que el minero lleve adelante la labor legal.
Denominado como pozo de ordenanza en el derecho español. Pone al descubierto el yacimiento
para comprobar la orientación de la corrida y la concentración de mineral, es decir, en que porcentaje
existe el mineral que le interesa descubrir al explorador. Esto es importante para delimitar y que el
empresario minero tenga noción de la concentración del mineral y si económicamente le va a rendir.
La labor legal es el pozo, trinchera o perforación que el código exige realizar en el cuerpo del
criadero descubierto, para probar su existencia y sus principales caracteres técnicos, como condición
previa e indispensable de la mensura y demarcación de las pertenencias, que completan el trámite de
concesión de la mina.
El objeto de la labor legal es demostrar la verdad del hallazgo y las principales condiciones
geológicas del criadero, hasta ahora solo conocido y aceptado por la entrega de la muestra del mineral.
El Art. 68 dispone del plazo de los 100 días desde el día siguiente al del registro, el descubridor
tendrá que hacer una labor que ponga de manifiesto el criadero, de manera que pueda descubierto. La
labor tendrá 10 metros de extensión y se abrirá sobre el cuerpo del criadero, no siendo esto necesario en
caso de la labor ejecutada pueda reconocerse las circunstancias efectuadas.
Si las pertenencias se toman en forma continua no es necesario labrar una labor de este tipo en
cada una de ellas, siempre que técnicamente pueda presumirse la continuidad del criadero en cada uno
de los lotes o pertenencias que se desmarquen.
Contrariamente, cuando las pertenencias se toman en forma separada, debe existir una labor en
cada una de ellas.
Comprobada la existencia de un obstáculo que no era posible superar dentro de los plazos fijados
para la labor legal, la autoridad podrá prorrogarlo hasta 100 días más (art. 69).
El Art. 70 indica que, una vez efectuada la labor legal, resultare que no puede reconocerse
convenientemente las condiciones del criadero, o que el descubridor quiere situar mejor sus minas, se
concederá una prórroga de 50 días para la continuación del trabajo, o de 100 días para una nueva labor
sobre otro punto del criadero.
El próximo pasó que debe cumplirse el minero, en términos perentorios, es la petición de
mensura de la supuesta mina descubierta y confirmada por esa labor.
Si pasado 30 días una vez vencidos los plazos de los art. 68. 69 y 70, el descubridor no hubiese
solicitado la mensura, la autoridad procederá a hacerla de oficio a cargo del interesado. Los derechos
del descubridor serán declarados caducos y la mina o minas perdidas por él, serán registradas en calidad
de vacantes (art. 71).
De las pertenencias y su demarcación:
I De las pertenencias
Art. 72. – “La extensión del terreno dentro de cuyos límites puede el minero explotar su concesión, se
llama pertenencia”.
Las pertenencias o lotes de explotación, son las parcelas que la ley concede para el
aprovechamiento del yacimiento o mina.
En la etapa de explotación la unidad de medida de la concesión de la propiedad minera
se llama pertenencia, es la unidad mínima de explotación, por eso dijimos que está prohibido
la división material de la mina cuándo coste de una pertenencia, cuando conste de más de una

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pertenencia la podemos dividir, por supuesto con autorización de la autoridad de aplicación en

este caso que son las autoridades mineras.
Su número y extensión son variables y dependen, de la cantidad de personas que resulten
titulares del derecho, la clase o categoría de mineral descubierto y forma de presentación del yacimiento.
La concesión minera puede estar constituida por una o más pertenencias.
Según el Art. 74, pertenencia o unidad de medida es un sólido que tiene por base un
rectángulo de TRESCIENTOS (300) metros de longitud y DOSCIENTOS (200) de latitud,
horizontalmente medidos y de profundidad indefinida en dirección vertical.
La pertenencia será un sólido de base cuadrada en el caso de darse a la latitud igual
extensión que la asignada a la longitud.
Puede darse otras formas a la pertenencias, cuando atendidas las condiciones del terreno o
criadero, sea necesario para una mas útil explotación.
Determinación
El art. 73 refiere que la extensión se determina en la superficie por líneas rectas, y en profundidad
por planos verticales indicados por esas líneas.
Las pertenencias constaran de 300 metros de longitud horizontal y de 200 de latitud, la que
puede extenderse hasta 300, según la inclinación del criadero. Y la profundidad se proyecta hasta el
centro de la tierra.
Según el Art. 77, la longitud de la pertenencia se medirá por la corrida o rumbo del criadero;
pero si este serpentea, varía o se ramifica, se adoptará el rumbo dominante o el de su rama principal, o
el rumbo medio entre los diferentes que se manifiesten, a elección del interesado.
La medida partirá de la labor legal o del punto de la corrida que designe el mismo interesado.
Se deja también a su arbitrio tomar la medida de la longitud a uno u otro lado de dicha labor, o
distribuirla como lo crea conveniente.
Pero, en ningún caso quedará esa labor fuera del perímetro de la pertenencia.
Pertenencias especiales
Pertenencias de minas especiales. (art. 76):
- Minas de hierro: 700 metros de longitud y 400 metros de latitud, que pueden extenderse hasta
600 según su inclinación.
- Minas de carbón y demás combustibles: 900 metros de longitud y 600 metros de latitud, que
puede extenderse a 900 metros.
- La pertenencia de yacimientos de tipo diseminado de primera categoría, cuando la
mineralización se halle uniformemente distribuida y permita la explotación a gran escala por métodos
no selectivos, constará de CIEN (100) hectáreas.
- Las de borato y litio constarán también de CIEN (100) hectáreas.
MENSURA Y DEMARCACIÓN DE LAS PERTENENCIAS:
II De la mensura y demarcación de las pertenencias
Art. 81. – “Se procede a la mensura y demarcación de las pertenencias en virtud de petición escrita
presentada por el registrador o por otra persona interesada.
La petición y su proveído se publicarán en la forma prescripta en el Artículo 53”.
El acto de mensura y demarcación de las pertenencias fijara definitivamente la extensión del
terreno a explotar y dejar libre, para otros concurrentes, el sobrante del terreno y del yacimiento.
La mensura puede tener lugar a petición de la parte interesada, o ser dispuesta de oficio por la
autoridad minera.

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a) Mensura a petición de parte interesada. Una vez cumplida la labor legal, y dentro de los
30 días posteriores al vencimiento del plazo, el registrador del yacimiento debe presentar la solicitud o
petición de mensura, en decir, la descripción de la forma como desea que se ubiquen en el terreno las
pertenencias pedidas, bajo apercibimiento de que la autoridad minera, en caso de no hacerlo, proceda a
dar la mensura de oficio y declare caducos los derechos sobre la mina solicitada.
Se procede a la mensura y demarcación de las pertenencias en virtud de la petición escrita
presentada. La petición y su proveído se publicarán. En la petición de mensura se expresará la aplicación,
rumbo, distribución y puntos de partida de las líneas de longitud y latitud, de manera que pueda
conocerse la situación de pertenencia y del terreno que deba ocupar.
La petición de mensura u proveído se notificaran a los dueños de las minas colindantes y las
reclamaciones se realizaran 15 días siguientes de dicha notificación o publicación. Las reclamaciones
se resolverán con audiencia de los interesados, dentro de los 20 días siguientes al de su presentación
(art. 84).
b) Mensura de oficio. Se da cuando el interesado no la ha solicitado o practicado en término.
Ejecución de mensura
Según el Art 85, no habiéndose presentado oposición relativa a la petición de mensura o
definitivamente resuelta la que hubiere presentado, la autoridad precederá a practicar la diligencia,
acompañada de un ingeniero oficial y del escribano de minas. A falta de ingeniero oficial, se nombrará
un perito o ingeniero particular y a falta de escribanos se actuara con dos testigos abonados.
La autoridad realizara las notificaciones a los administradores de las minas colindantes.
La operación principiará por el reconocimiento de la labor legal, acto continuo se marcarán los
puntos donde deben fijarse los linderos que determinen la figura.
Estos linderos deben ser sólidos, bien perceptibles y duraderos (art. 86).
Para la designación de los rumbos, se referirán los ingenieros al norte verdadero y si la
autoridad lo declarare conveniente, o si los interesados solicitaren, a objetos fijos y bien manifiestos,
indicando su dirección y distancia con relación a la labor legal (art. 87).
Las personas interesadas en la mensura pueden nombrar cada una por su parte un perito que
presencie la operación y haga las indicaciones, reparos y reclamaciones a que los procedimientos
periciales dieren lugar, todo lo que quedara decidido antes de darse por concluida la diligencia (art. 88).
De las operaciones, solicitudes o resoluciones que haya tenido lugar en el curso de la diligencia
hasta su terminación se extenderá un acta (art. 89).
El concesionario tendrá colocados los linderos dentro de los 20 días siguientes a la designación
de los puntos correspondientes, de no constatarse ello, será pasible a una multa de 3 a 10 veces el canon
anual de la mina (art. 94).
Como asi también deberá conservar en buen estado los mismos y en caso de deterioro o
desaparición, deberá concurrir a la autoridad minera para que ordene su reparación, la cual designará un
ingeniero para que marque nuevamente los puntos, previa notificación a los colindantes.
El minero en un término de 20 a 40 días, deberá reparar o reponer los linderos, bajo pena de
multa de 3 a 10 veces el canon anual de la mina, en caso de incumplimiento (art. 96).
La autoridad no permitirá ni ordenada la remoción de los linderos, sino en los casos de mejoras
y aplicación de pertenencias, determinados por la ley, o en virtud de sentencia del tribunal Superior de
minería en los recursos contra la ilegalidad de las mensuras, o cuando se haya definitivamente declarado
que hay lugar a rectificación, o en los casos que expresamente determina la ley (art. 95).
Titulo definitivo de propiedad de la mina:
Art. 93. – “Practicada la mensura y demarcación con arreglo a lo dispuesto en los artículos
precedentes, la autoridad mandará inscribirla en el registro, y que de ella se de copia al interesado, como título
definitivo de propiedad.
El expediente de mensura se archivará en un libro especial a cargo del escribano de minas.
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Con la diligencia de mensura queda constituida la plena y legal posesión de la pertenencia”.

Practicada la mensura y demarcación la autoridad mandara inscribirla en el registro como título
definitivo de propiedad. El expediente de mensura se archivará en un libro especial a cargo del escribano
de minas.
No existe en nuestro derecho necesidad de que la autoridad minera dicte resolución alguna
concediendo la mina al peticionante. La concesión está en la ley y es obra de la misma. No requiere
declaración alguna de la autoridad. Si el descubridor ha cumplimentado los requisitos legales se hace
acreedor a la concesión minera y la autoridad no puede denegarla por ningún motivo.
Rectificación e impugnación de las mensuras:
Impugnación
Según el artículo 97, la operación de mensura y demarcación presidida, aprobada o reformada
por la autoridad, sólo puede ser impugnada por:
 Error pericial, que conste en el acta.
 Violación manifiesta de la ley, también debe constar en el acta correspondiente.
 el fraude o dolo empleados en las operaciones o resoluciones concernientes a la mensura
y demarcación, y que se refieran a hechos precisos y bien determinados.
Rectificación:
Cuando la mina demarcada contenga una extensión mayor de la que sus títulos expresan, podrá
rectificarse la mensura a solicitud de otro registrador inmediato, que pretenda el exceso para completar
su pertenencia.
Pero esta rectificación sólo tendrá efecto cuando se han removido clandestinamente los linderos,
o cuando en la designación de los puntos donde debían colocarse, o en la colocación misma, ha habido
dolo o fraude.
La solicitud del nuevo registrador no será admitida después de los 500 días siguientes al de la
mensura.