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TEM PERATU RA « IB ft « MARACAIBO
C A SA S Y EDIFICIOS 49680
EM P R E S A S IN D U STR IA LES 332
EM PRESA S C O M ER C IA LES 2.195
INSCRIPCION E S C O L A R G EN ER A L 34.621
VEHICULOS DE MOTOR 3916
GOLFO DE VENEZUELA
IGLESIAS Y C A P ILLA S 47
HOSPITALES Y C LIN IC A S 21 SACO DE MARACAIBO
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PU BLICO S S IM IL A R E S
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4 LIMITES NACIONALES +■+■■+■+
DE ESTAD O S -------------- 6 SUCRE Bobures
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W/45 rERREAS San Carlos
8 PERI JA Machiques
E N CONSTRUCCION
TR AE /C A BLE S E N VERANO - 9 URDANETA Concepcion
En la m a je s ta d de las ag u as del Río
C arip e, se alza la p a lm e ra com o
u n c e n tin e la v ig ila n te .

(F o lo c o rte s ía de L oren F . K ah le, de C a rip ito ).

 Colaboraciones Fraternas
RANCIA es el país donde las m atrim oniales, las amistosas y las
F colaboraciones literarias en­
tre herm anos son más frecuentes.
que suman aptitudes distintas que,
al chocar, producen una chispa fe­
Pero, aun entre hijos de los mismos cunda. Contra lo que muchos creen,
padres, estas alianzas del espíritu hay obras magníficas—en la nove­
que llevan im plícito un consorcio la y en el teatro—que proceden de
económico, no suelen ser duraderas. una eficaz asociación y compene­
Póngase aparte el caso ejem plar y tración de ingenios.
patético de los Goncourt, pareja li­ Mas, insistimos, la colaboración
teraria ilustre y noble (Edmundo más natural, menos artificiosa y
quería a Julio como a un hijo), que forzada, es la fraterna, por no ser
fué separada por la m uerte del h e r­ cente, donde en vano se buscaría
ese impulso lírico y esa majestad de difícil que hom bres de la misma
mano menor. sangre, de la misma cuna y de la
la form a literaria que cohonestan
Pero los M argueritte, Pablo y Víc­ los “abusos” naturalistas del inglés misma casa lleguen a poseer almas
tor, se separaron. Y los Fischer, Lawrence. gemelas y — si esta identidad de
Max y Alex riñeron. Y la firm a J. sus espíritus no es absoluta—un
H. Rosny, form ada por los herm a­ En realidad, los escritores viejos elemento de com prensión y de te r­
nos H onorato y Justino Boex, no “m etidos” a novelistas galantes pro­
nura recíprocas que les perm ita
tardó mucho en bifurcarse. Cuan­ ducen compasión. Es una lástima
“disentir” en ocasiones sin que el
do nosotros conocimos y tratam os que uno de los dos Rosny, aun se­
disentim iento sobrepase los límites
—en 1915—al m enor, ya hacía tiem ­ parado del otro, no haya sabi­ de la alianza. Aun entre colabora­
po que cada uno de los Rosny tra ­ do m antener “su línea”. Línea de
dores fraternos la discusión es im ­
bajaba por su cuenta. Mantiénese escritor excelente que se descarría,
prescindible. De esa discusión nace
todavía el “binomio literario ” de que persigue “le gros tirage” recu­
la luz de la obra.
los Tharaud. No puede predecirse rriendo a las descripciones y los
“análisis” morbosos. El talento, Pero si uno de los herm anos pre­
hasta c u á n d o ... tende avasallar al otro, im poner un
más todavía, la genialidad, eran co­
Los Rosny, juntos, produjeron munes en la pareja Rosny, autora criterio despótico, una orientación
obras notables. Fueron entrambos, de' algunos libros, como “El bilate­ arb itraria, la colaboración s,e quie­
como nadie ignora, los albaceas de ra l”, que honran a la literatura de bra.
Edmundo de Goncourt, encargados su tiempo. Tal fué, en suma, el caso de los
de organizar la academia de su M argueritte y de los Rosny. En opo­
Sería curioso investigar las cau­
nombre. sición al de los Goncourt y los
sas de la “ru p tu ra” entre los h er­
Separados, la justicia obliga a re ­ Quintero, paradigm as de esas cola­
manos Boex. Así como las del “di­
conocer que el m ayor de los Rosny, boraciones fraternas que no con­
vorcio” de los M argueritte. Se sien­
el que acaba de extinguirse, siguió cluyen hasta que Atropos, con sus
te uno inclinado a suponer que las
una línea más recta y escaló cum­ colaboraciones “in ter fratres” de­ crueles tijeras, les pone término.
bres más altas que el m enor, hom ­ berían ser todas perm anentes, pu­ Alberto INSUA.
b re actualm ente de setenta y cinco ras, como lo fueron la de Edmundo
años. y Julio de Goncourt, en Francia, y
J. H. Rosny, “ainé”, no desmintió en España la de Serafín y Joaquín
nunca su carácter de escritor bió­ N u e stra Portada
Alvarez Quintero. Y no hablamos
logo, de escritor sociólogo, de es­ de la colaboración de los dos gran­ El presente núm ero de esta Re­
critor m oralista. Su obra es limpia des poetas españoles, los Machado, vista ofrece una linda estampa
de propósitos. Procede del natu­ porque esta fué tardía, esporádica, de flores de mayo. Preciosas o r­
ralism o de Zola, pero de la doctri­ reduciéndose a su labor escénica, quídeas que m arcan la arm onía
na y del sistema del m aestro de menos im portante que su obra lí­ y el ritm o alado de la naturale­
Medan excluye cuanto pueda lindar rica autónoma, adm irable en los za. Ya lo dijo un escritor de no­
con lo torpe. En cambio J. H. Ros­ dos. ta: “la orquídea guarda estrecha
ny, “jeune”—quizá influido por el Se puede objetar que la muerte relación con el alma de la m u­
éxito de los novelones eróticos de prem atura de Julio de Goncourt in ­ jer”. Secreto em brujador el de
Víctor M argueritte,—ha escrito en valida, en parte, el argumento, pues la “parásita” al florecer en un
sus últimos tiempos, muchas pági­ quizá tam bién estos herm anos hu­ m ilagro de pétalos. Y esos péta­
nas de las que en Francia llaman biesen concluido por separarse. No los, grandes, singulares de for­
“pour lire á deux”, en la alcoba. . . lo creemos. El “D iario”, las nove­ ma, brillantes en la seda de sus
Los herm anos Rosny han segui­ las y los ensayos históricos de los galas, los ha captado el artis­
do, en esto, la trayectoria de los Goncourt—como el teatro de los co­ ta venezolano Steiner-Steffens. El
M argueritte. También Pablo y Víc­ mediógrafos españoles—producen la acierto no puede ser más feliz;
to r hubieron de separarse, y m ien­ sensación, m ejor dicho, la emoción la composición de la pintura
tras el m ayor se mantuvo, hasta de dos almas perfectam ente afines, queda lograda con mano experta.
m orir, en su línea de escritor serio de dos tem peram entos artísticos que Hasta la misma ocasión no pue­
y de artista probo, el m enor, Víc­ se funden y se completan en un de ser más propicia: mayo, tra ­
tor, compuso, ya viejo, esa crónica mismo afán. dicionalm ente ha sido mes de
novelesca de “La G arfonne”, que no Todas las colaboraciones litera­ prim avera, que equivale a decir:
es otra cosa sino un libro inde­ rias son posibles: las fraternas, las mes de las flores.
 a veces nunca antes visitados por
el hom bre: la caravana de técnicos,
de trabajadores especializados y de
peones, avanza por aquí y por allá
hasta donde hay caminos carretea-
bles, utilizando camiones y tracto­
res; y de allí en adelante, la muía,
siempre fiel al hom bre cuando todo
otro medio de transporte falla, m ar­
cha cargada con pesados in stru ­
mentos a través de picas que los
peones van abriendo entre la tupi­
da vegetación de la tierra virgen;
más allá tal vez hay que cruzar te­
rrenos pantanosos, haciendo puen­
tes provisionales para tran sportar
la pesada carga. Cuántas veces es­
tas largas jornadas tienen por úni­
ca recompensa la desilusión, cuan­
do, fijada la zona de un probable
yacimiento se hacen una, dos, y
hasta más perforaciones que alcan­
zan profundidades de uno, dos y
más kilóm etros sin encontrar nada
más que tierra y piedra. En cam­
bio, si el éxito corona los esfuerzos
hechos, florecen poblaciones y se
aum enta el bienestar y la riqueza
del país.
Tales fueron tam bién los comien­
zos de Jusepín. Abierto un camino

Jusepín que perm itiera el transporte de m a­

teriales desde Caripito, limpiado y
nivelado el terreno escogido para
las nuevas operaciones industria­
USEPIN es el nombre del les, se procedió a hacer las instala­
J nuevo campo petrolífero de
la Standard Oil Company of Vene­
ta, cubierta de arbustos y malezas,
una vez que los largos' estudios y
búsquedas de geólogos y geofísicos
ciones provisionales necesarias y a
tom ar las medidas de saneamiento
zuela en el O riente de la Repúbli­ que son norm a invariable de las
señalan tal lugar como el punto
ca. El desarrollo de este campo empresas petroleras en Venezuela.
donde la naturaleza tiene oculta
significa un nuevo impulso dado a Ya en junio de 1938, cuando se in i­
una gran riqueza. Y no son pocas ciaron los trabajos de instalación
la ya muy vigorosa industria vene­ las penalidades y los gastos que es
zolana, aumento de la renta petro ­ de la prim era to rre o cabria para
necesario afrontar para dar con las perforar el pozo “Jusepín N9 1”,
lera del país, trabajo para muchos
riquezas del subsuelo en territorios contaba allí la Standard Oil Com-
venezolanos más, aumento del co­
mercio de la región, nuevos cam i­
nos a través de las selvas, mayor
territorio saneado y hecho apto p a­
ra que el hom bre allí trabaje, pros­
pere y viva.
Sólo treinta y seis kilóm etros de
distancia separan el nuevo campo V iv ien d as p ro v isio n ales
p a r a em pleados.
de la Capital del Estado. A poco
más o menos la misma distancia
queda Caicara, que es centro de ac­
tividades comerciales y agrícolas de
no escasa significación. La im por­
tancia industrial de Jusepín en sí,
aunada a la circunstancia de su
ventajosísim a situación, hace vis­
lum brar un magnífico porvenir pa­
ra Jusepín que de simple campo pe­
trolero se convertirá en una rica
población, y con el andar del tiem ­ Un asp ecto del cam po 7/^.#
po en floreciente ciudad. o b rero .

Es muy interesante seguir paso a

' -
paso la transform ación de un peda­ • V-
zo de selva virgen, o tal vez de una
pequeña extensión de tierra incul­

—4—
 L a base p a r a el f u tu ro p u eb lo . T an q u es-D ep ó sito s p a ra el p etró leo .

pany of Venezuela con tres casas La perforación de ese prim er po­ pecial) a fin de evitar cualquier
de ocho departam entos p ara em­ zo fué completada el 13 de octubre fracaso resultante de la presencia
pleados de varias categorías, dos de 1938, habiéndose por tanto em­ de factores desconocidos—como gas
casas para alojar al personal que pleado en esa obra 118 días. Toda a altas presiones, etc., etc. Una vez
debía dirigir la perforación, otras perforación de tanteo, como lo fué conocidas las condiciones del sub­
dos casas para técnicos, casas para ésta, debe siem pre hacerse con muy suelo, la operación de talad rar un
las cuadrillas de obre­ J pozo se puede llevar
ros, y un local para a cabo con m ayor ra -
oficinas, y además se p i d e z . Y así por
establecieron el dis­ ejemplo, los otros po­
pensario y clínica de zos perforados poste­
emergencia, con ade­ riorm ente en dicho
cuadas dotaciones, co­ campo han sido com­
mo es c o s t u m b r e pletados entre 36 y 40
de la Compañía. Lue­ días.
go de instalada la cal­ Las buenas indica­
dera para producir la ciones obtenidas al
fuerza motriz reque­ com pletar e l p o z o
rida, la grúa portátil “Jusepín N9 1”, p er­
para m ovilizar tube­ m itieron a la empresa
ría, la m áquina ro ta­ em prender otras p er­
toria para el taladro foraciones en el m is­
y otros aparatos re ­ mo campo, y al fina­
queridos p a r a esta lizar el año de 1939
clase de operaciones, se habían completado
se dió comienzo a la 26 pozos de los cua­
perforación del pozo El P ro fe s o r y a lu m n o s de la E scuela. les 24 dieron ren d i­
en el mes de junio. Con miento comercial.
la iniciativa de tales trabajos empe­ especial cautela, lo cual im plica la A la par de la perforación de po­
zó a bullir el nuevo campo con extracción a intervalos muy fre­ zos, se fueron desarrollando en Ju ­
gran actividad: m áquinas, m oto­ cuentes de m uestras de las form a­ sepín otras actividades de grande
res y hom bres llevaban a cabo bien ciones que se van atravesando (pa­ im portancia comercial que siempre
concretadas tareas. ra lo cual se usa un aparatico es­ (Pasa a la página 25).

V ista in te r io r de la E stació n de bom bas. T ra b a jo s de p re p a ra c ió n .

 G randes Caciques A borígenes
A m uerte de Yoraco había im ­ necesario que el prestigio hechicero Charagotes. Se tienen noticias de
L presionado hondam ente las gue­
rreras tribus del Valle de Tácata,
se quebrantara para que el cacique
pudiera s u r g ir ...!
que Rodríguez Suárez ha salido de
Caracas con un núcleo poderoso de
de las tierras de Salamanca y de los Y es entonces cuando Terepaim a guerreros hispanos. Pretendía el
dominios de Guaicaipuro. Especial­ comienza a dem ostrar sus grandes caudillo español lograr un entendi­
mente el “poder omnímodo” de los y efectivas aptitudes: valor, método, miento con Fajardo que a la sazón
piaches no encontraba una explica­ sentido de organización y sobre to­ se hallaba en El Tocuyo y con Nar-
ción racional p ara justificar la in ­ do condiciones de e stra te g a ... El váez que m ilitaba por los alrededo­
eficacia del sortilegio o exorcismo, sabía distribuir convenientemente res de Barquisimeto. La intención
—que según ellos—debiera poner a sus fuerzas. El conocía el secreto era clara y definida: com binar un
salvo la vida del gran cacique. Al de la lucha de pequeñas guerrillas plan de nuevas conquistas territo ­
efecto, según refiere la leyenda, con la finalidad de converjer estas riales hacia otras regiones del país
Yoraco poseía un collar de cuentas al sitio señalado de antemano. El, y de paso term inar para siempre
azules con propiedades fabulosas. por último, era capaz de m andar con la rebeldía aborigen m antenida
Las heridas causadas por las arm as miles de indios sin olvidar un solo en ese momento por Terepaim a. In ­
españolas no podrían causar daño instante la posición de todos y cada teligente el cacique se dió cuenta
a quien llevara ese amuleto. Y por uno de sus su b a lte rn o s...! exacta del plan del español y en
ello, Yoraco debía considerarse consecuencia pudo precisar el po­
indemne o inm une del daño que sible camino que seguiría R odrí­
pudiera causarle la espada, el guez Suárez en su re c o rrid o ...!
puñal o el arcabús. Por otra p a r­ Nunca, como en esta ocasión,
te, el referido collar poseía tam ­ estuvo Terepaim a más acertado.
bién el poder de rio perm itir p é r­ Hay m ás: hizo gala de verdade­
dida de sangre por más im pór­ ra táctica m ilitar. Los puntos de
tente que fuera la desgarradu­ contacto de la num erosa gente
r a . . . en fin, que sus virtudes del indio fueron reforzados con­
eran insospechadas: salvaguar­ v enientem ente... Y de esta for­
dia del guerrero que lo usara y ma Rodríguez Suárez no pudo
hemostático seguro en el caso envolverlo por los flancos como
im probable de que las arm as p u ­ era su costum bre en esta forma
dieran alcanzar la carne b ro n ­ prim itiva de guerra. La batalla
ceada del in d io ...! comenzó a las ocho de la m aña­
Sin embargo, Yoraco había na: la lucha fué terrible y cruen­
m uerto y lo que era más grave ta. El ejército de aventureros
había sucumbido por heridas de españoles combatió con denuedo
arm a blanca cuando p o rtara el y con brío. Las fuerzas estaban
“m ilagrero” atributo. De allí que equilibradas. Mas de pronto Te­
los brujos y piaches aborigenes repaim a lanza un ataque tre ­
sufrieran menoscabo en la in ­ mendo; ataque que le cuesta in ­
fluencia que ejercieran en la finidad de vidas. Aquella aco­
conciencia de los indios. Y de m etida le dió el triunfo: se apo­
allí igualm ente el que pudiera al deró del pequeño riachuelo que
fin destacarse el bravo cacique surtía de agua a los conquistado­
Terepaim a quien hasta entonces res. Por último el más comple­
había sido relegado a planos in ­ to triunfo coronaba el esfuerzo
feriores p o r intrigas y malas vo­ T e re p a im a alzó la flech a, p a r a c e le b ra r
su g ra n t r i u n f o ...!
de Terepaim a. Hasta el mismo
luntades de los hechiceros abo­ Rodríguez Suárez encontró la
rígenes. Y era que Terepaim a m uerte en la contienda. El bo­
había desconocido siem pre la auto­ P ronto Terepaima, cacique de la tín tomada por los indios fué im ­
ridad del piache. No creía en ellos tribu de los Arbacos, toma la jefa­ portante y sumamente copioso. El
y mucho menos en sus conjuros y tura de la defensa del territorio que ejército contrario quedó desecho.
exorcismos. Había m ás: en ocasio­ iba desde Los Teques hasta los mis­ La tradición asegura que solamen­
nes les atacó con crudeza y resolu­ mos dominios de GuaicamaCuto. Co­ te se salvaron cuatro españoles que
ción; propugnó con insistencia el mo es hom bre de mucha y rápida sirvieron para llevarle la noticia de
que tales elementos fueran expulsa­ acción ninguna distancia la encuen­ lo sucedido a Narváez que espera­
dos de los campamentos guerreros y tra inacequible. Cubre terreno con ba en Barquisimeto.
por último se perm itió el agredir en brío y seguridad en la posesión. El
forma personal, al más destaca­ enemigo con quien tiene que en­ Y fué así, cómo Terepaim a, el ca­
do e influyente de aquellos pode­ frentarse inspira, desde luego, se­ cique de los Arbacos, supo triunfar
rosos m istificadores. Pero pudie­ rio s temores. Se trata nada menos, en esa época, en la más im portante
ron m á s ...! Terepaim a, jefe de que del famoso Juan Rodríguez Suá- batalla “campal” que se realizara
condiciones extraordinarias, con un rez, indomable aventurero con un en estas tierras entre las fuerzas de
concepto preciso de la guerra valor casi mitológico. P ara la lu­ la conquista y las huestes de la
no obtuvo el puesto que le corres­ cha cuenta el aborigen con la ayu­ defensa.
pondiera por derecho propio. Fué da decidida de los Taram ainas y los Manuel PERFILES.
(C U E N T O )

Los Vestidos de Pereira

IEMPRE me había intrigado feccionados trajes. ¿P or qué pues, no perdido en la espesura de la sel­
S la m anera desagradable con­
que vestía don Manuel P ereira;
aquel deliberado descuido ante
quienes por motivos de negocios
su
va; grandes ambiciones, pues siem­
pre fui un soñador; y el arte de
posición social, su prestigio comer­ interesaba im presionar mejor? leer, lo cual aprendí en las páginas
cial y su notable cultura, hacían es­ En cierta ocasión, después de uno polvorientas y am arillas de los pe­
p erar de él, hom bre de una consti­ de aquellos tan frecuentes momen­ riódicos que olvidaban los raros
tución física notable y que apenas tos equivocados ante nuevos cono­ viajeros que nos visitaban.
frisaba en los cuarenta años, m ayor cidos, no pude reprim ir el deseo de “Vendí pronto aquella finca sin
atención a su apariencia personal. abordar el asunto y exponiéndome jamás detenerm e a pensar si obtu­
Habían pasado más de dos meses al enojo de don Manuel, con quien ve su verdadero valor; lo im portan­
desde el día en que le fui presenta­ cada día me unía una amistad más te para mí era salir de aquel lugar
do y comencé a prestarle mis ser­ estrecha, me lancé al ataque entre en busca de horizontes más amplios
vicios en calidad de secretario e in ­ excusándome y reconviniéndole: en los cuales pudiera intentar la
térprete, empleo que acepté en con­ “Estoy seguro de que ha notado us­ realización de mis sueños.
diciones verdaderam ente singula­ ted como yo, que la prim era im pre­ “Un buen día llegué a la ciudad
res: mi nuevo jefe hablaba el p o r­ sión que causamos ante nuevos co­ de San Pablo donde pronto me
tugués—pues procedía del B r a s i l - nocidos es la de ser yo P ereira y estrené lavando coches por las no­
francés e italiano; yo, tan sólo es­ usted el subalterno; semejante equí­ ches; el día lo dediqué a estudiar
pañol e inglés. En apariencia, tal voco me apena sobrem anera; estoy con ahinco. Cuatro años después
disparidad de lenguas creaba entre seguro de que tales casos se repi­ ingresé con un orgullo que no pue­
nosotros una dificil situación para ten por la poca im portancia que do expresar con palabras, en una
entendernos; por fortuna, en la usted quiere dar a su apariencia escuela de comercio donde, como
práctica nos entendimos m aravillo­ personal. Estoy por decir que lo h a­ p ara castigar aquel necio sentim ien­
sam ente: él me hablaba en p o rtu ­ ce usted de intento”. to, conocí por prim era vez la im por­
gués y yo le respondía en español. tancia que la hum anidad concede a
El amigo que me recomendó pa­ los vestidos: mis pobres ropas fue­
ra ese empleo me habia dado una ron con frecuencia el blanco de las
burlas de mis condiscípulos.
ligera relación de la posición de
don Manuel en el mundo de los ne­ “Más tarde, sintiéndom e ya capa­
gocios: poseía en su país cerca de citado para poner a prueba los co­
cincuenta salas de espectáculos; era nocimientos tan duram ente adquiri­
Presidente fundador de una pode­ dos, abandoné la cochera y me lan­
rosa casa de im portación y expor­ cé lleno de fe en busca de trabajo
tación; sus haciendas de café eran que me lo perm itiese. P ara mi des­
famosas en aquel país donde es és­ consuelo, los vestidos vinieron nue­
te el principal y más común p ro ­ vamente a influir cruelm ente en mi
ducto, y su viaje a New York obe­ destino: cuantas veces ofrecí mis
decía a las constantes cartas de sus servicios sólo se me confiaron car­
corresponsales en esa ciudad en las gos de repartidor de mercancías,
cuales lo instaban a establecer con­ muchacho de limpieza, cargador u
tactos directos con las num erosas otros sim ilares; nada donde yo pu­
firm as a las cuales lo vinculaban la Después de esta tirada hubo 1111 diera aplicar lo aprendido con ta n ­
variedad de sus actividades com er­ momento de silencio durante el cual tos sacrificios.
ciales. Por tales motivos, nuestras una ligera sonrisa jugaba en los la­ “Decidido a efectuar un nuevo in ­
entrevistas con altas personalidades bios de don Manuel. Luego, lenta­ tento volví a la cochera dispuesto a
del comercio, in dustria y banca de mente, como reflexionando, me res­ trabajar noches y días y a economi­
aquella gran ciudad eran constan­ pondió: “P ara satisfacer su curio­ zar hasta el último centavo que pu­
tes y, para mi embarazo, cada nue­ sidad tendré que contarle una p a r­ diese adquirir; mi única finalidad
vo personaje con quien nos entre­ te de mi v id a ... posiblemente la era ahora la obtención de los me­
vistábamos, al recibir la fina tarje­ más interesante” Me sentí culpa­ dios para adquirir un buen traje,
ta tim brada: “P ereira Moral & Cia., ble y me apresuré a excusarme: zapatos y demás complementos. No
Manuel Pereira, Presidente”, al no­ -—“Perdónem e”, — dije, — “he sido se hizo esperar ese día y para mi
tar la apariencia de P ereira me to­ indiscreto”. — “Nó,” •— me respon­ sorpresa y alegría, obtuve el p ri­
maba a mi por el nombrado, lo que dió, — “hay veces que me com­ m er puesto que solicité en una ca­
me obligaba a efectuar una pronta place rem em orar mis días de lucha; sa de co m ercio ... Desde entonces,
corrección que aclarara nuestras cada paso que di en mi vida co­
son recuerdos amargos pero que es-
respectivas posiciones. mercial quedó enm arcado en un
tan llenos de intim a satisfacción”.
nuevo traje; mi yó, que tanto luché
Para mi m ayor confusión, ya pa­ Se detuvo unos momentos como pa­ por cultivar, nada valía sin su fun­
ra entonces sabía yo de cierto que ra ordenar sus ideas y luego conti­ da nueva. Hoy la historia es otra,
don Manuel tenía muy buen gusto nuó: “No me cupo en suerte cono^ ellos vienen a mí y no yo a ellos.
p ara vestir, pues en varias ocasio­ cer a mi m adre; mi padre, pobre ¿Me pregunta usted que si visto asi
nes en que lo acompañé con su fa­ campesino, m urió cuando apenas de intento? ¡Sí!, ¡mil veces sí!, me
milia al teatro y otras diversiones, contaba catorce años. Mi herencia satisface sentir que quien vale es
le había visto llevar con elegancia fué un cultivo pequeño y un vento­ P ereira y no sus t r a j e s ...”
y soltura los más finos y bien con­ rrillo situado a la vera de un cami­ P. M.

— 7—
 Octavo Congreso Científico Americano
Lógicamente esta asamblea esta­
rá compuesta por figuras represen­
tativas de las Repúblicas am erica­
nas y se dá el ca­
so especialísimo de
que esta reunión
viene a efectuarse
en el justo momen­
to en que una se­
rie de conflictos
arm ados vienen di­
ficultando el me­
jor y deseado des­
arrollo de las in ­
vestigaciones cien­
tíficas normales,
M useo de B ellas A rte s en C aracas. peligro éste, que

N el presente mes, es decir,

E entre los días 10 al 18 de m a­
yo, ten d rá efecto en W ashington la
reunión del Octavo Congreso Cien­
tífico Americano, que cuenta ya
con un historial por demás trascen­
dente. Al efecto, las prim eras reu­
niones de los citados Congresos da­
tan de 1898 cuando en la ciudad de
Buenos Aires tuvo lugar la reunión
inicial, para de allí, en diversas
etapas, ten er como sede a Montevi­
deo (1901), Río de Janeiro (1905),
Santiago de Chile (1908), W ashing­
ton (1915), Lima, (1924), México
(1935) y ahora de nuevo la im por­ Igualmente se han tenido presen­
tante capital estadounidense. tes p ara esta reunión de mayo, los
E ntre los motivos fundam entales principios esenciales de todas las
El C ongreso N acio n al, B u en o s A ires.
para la reunión que hoy nos ocu­ asam bleas interam ericanas, puesto
pa, pueden m encionarse los siguien­ que ellas encierran el dilatado con­
tes: im pulsar el pensam iento y los tenido del estudio de los problem as por otra parte, acarrearía el re ta r­
conocimientos científicos y coope­ peculiares al continente americano do de los progresos científicos. De
ra r asimismo en la celebración del en general y consecuencialmente la allí que las Repúblicas americanas
quincuagésimo aniversario de la aspiración del logro de la mejor puedan ofrecer con esta reunión un
fundación de la Unión Panam e­ com prensión de los países que for­ excelente ejemplo de labor cientí­
ricana. man el referido hemisferio. fica no interrum pida dentro de un

E dificio de la U nión P a n a m e ric a n a , W ashington.

am biente de paz y de co­ La Unión Panam ericana
laboración desinteresada. patrocina con un bagaje
La ciencia y el afán de de experiencia y acrisola­
uniform idades en los an­ da utilidad la reunión del
helos de la sabiduría, ofre­ Congreso del mes de m a­
cen así, bajo la égida de la yo. El Octavo Congreso
Unión Panam ericana una Científico Americano te n ­
efectiva fusión de confra­ drá en esta forma tanto un
ternidad am ericana junto sitio apropiado para la ex­
al propio y mutuo conoci­ posición y discusión de
miento, derivado de los co­ los problem as comunes a
munes empeños científicos la América como la opor­
que im pulsan hoy el pen­ tunidad para que las Re­
samiento de las naciones públicas del Continente
enclavadas en la América. puedan obtener el mejor y
En esta forma queda tam ­ más útil acercam iento en­
bién reforzada la posición tre las figuras de pensa­
prim aria de la Unión P an ­ P a tio I n te rio r de la U n iv e rsid a d de S an M arcos, L im a. miento y de estudio, repre-
am ericana que desde el presentativas de sus paí­
año de 1896 se ha impuesto ses de origen.
y realizado una labor de suyo inte­ Americanos, las Conferencias Sani­ No puede menos que aplaudirse
resante y destacada p ara todo el con­ tarias Panam ericanas y las de ca­ toda esta amplia y m eritoria labor,
tinente americano. Las actividades rácter comercial. En su debida cuya realización m arcará época en
de la Unión periódicam ente han ido oportunidad fué establecida tam ­ las evoluciones de la hum anidad,
en forma ascendente y dilatada con bién en la Unión Panam ericana la dejando constancia de los esfuer­
la adquisición de vastas y nuevas Oficina de Trabajo e Inform ación zos puestos en juego para bien de
esferas de servicio mutuo. Al caso, Social, a los fines de actuar como la civilización. El bien para los
bien pudiera hablarse del estable­ centro de inform ación en las cues­ países pan-am ericanos redundará
cimiento de la Oficina Comercial tiones y problem as obreros de las en bien para todas las naciones del
de las Repúblicas am ericanas, labo­ naciones am ericanas. Igualmente se globo, y así la m archa a la con­
res que por otra parte, se am plia­ ha trabajado con todo interés en quista del ideal de todos los bue­
ron hasta lograr incluir en ellas to­ todo aquello relacionado con el De­ nos patriotas del mundo, llegará a
dos aquellos asuntos relacionados recho Internacional y en la crea­ ser lo más real posible debido al
con la economía y desarrollo de los ción de instrum entos y fórmulas laudabilísimo empuje civilizador de
países adscritos a la organización. adecuadas para el m antenimiento las naciones pan-am ericanas.
También se han celebrado bajo los de la paz, considerado como asun­ Provecho inestim able que nadie
auspicios de la misma Unión gran to prim ordial de la labor que se podrá negar, sino encomiarlo por
número de conferencias especiales, trata de realizar. su justo valer.
siendo de justicia el m encionar
junto con los Congresos Científicos

El C ongreso N acio n al, B u en o s A ires El P alacio L eg islativ o , M ontevideo.

 Gobernadores

N 1764, siendo Gobernador

E de la provincia de Guayana
don Joaquín Moreno de Mendoza,
dispuso el rey Carlos III, por reco­ Cupo a Guayana la suerte de po­ so sin chocar pronto con fuertes in ­
mendación de Solano, que se tra s­ der contar varios de sus goberna­ tereses creados, y fué así como, el
ladase la capital de esa provincia de dores entre los más ilustres y p ro ­ intento de Centurión de reem plazar
su viejo sitio, lugar hoy conocido gresistas de cuantos vinieron a el sistema de misiones con la colo­
con el nom bre de Castillos de Gua­ Venezuela. nización civil, le atrajo la enemis­
yana la Vieja, a la Angostura del tad de los m isioneros capuchinos,
E n 1769 tomó el m ando de la p ro ­
Orinoco, por lo que, aunque More­ vincia don Manuel Centurión Gue­ quienes, considerándose perjudica­
no de Mendoza le dió a esta nueva rre ro de T orres, en sustitución de dos en sus intereses, elevaron sus
población el nom bre de Santo l’o- Moreno de Mendoza. Se distinguió quejas ante la Corte de España.
mas de la Nueva Guayana, el uso este nuevo gobernador desde el mis­ Este ilustre gobernador cuya labor
le designó el de Angostura, el cual mo momento en que pisó tierra hizo anales en el desarrollo de Gua­
conservó hasta después de la Inde­ guayanesa por el interés y activi­ yana, demostró una vez más la no­
pendencia, cuando, por decreto del dad que desplegó en el m ejoram ien­ bleza de carácter que lo distinguía,
Congreso Nacional, se le dió el de to de Angostura, dotando a la po­ cuando, al entregar el mando, dió
Ciudad Bolívar. blación con varias instituciones im ­ la libertad a todos los esclavos que
Fortificó Moreno de Mendoza su portantes tales como: el prim er in s­ poseia.
nueva capital con un bastión alre­ tituto p ara la educación de la ju­ Tam bién se distinguieron entre
dedor del cual se levantaron las ventud, un hospital m ilitar y nue­ los gobernadores de esta provincia,
prim eras casas; sus habitantes, ex­ vas fortificaciones. Tam bién efec­ don Miguel Marmión y don Felipe
perim entados por las m uchas priv a­ tuó el levantam iento de las prim e­ de Inciarte. Estos, aunque su labor
ciones del pasado, diéronse luego a ras calles de la ciudad, abrió cami­ no fué tan fructífera como la des­
sem brar las tierras adyacentes, lo nos, organizó expediciones cientí­ arrollada por don Manuel Centu­
que les perm itió en corto plazo go­ ficas, persiguió duram ente el con­ rión, presentaron sabios y provi­
zar de abundantes cosechas de trabando, protegiendo con esto el dentes inform es ante la Corte, h a­
maíz, plátanos, lechozas, yuca y comercio legal, y fomentó por todos ciendo en ellos recomendaciones
otros frutos. los medios a su alcance el desarro­ que, de haberse adoptado, hubiesen
E n el año de 17GC quedó Guayana llo de la agricultura y la cría. Bajo ofrecido oportunidad más amplia al
subordinada a la Capitanía General su autoridad aum entaron las m isio­ desenvolvimiento de aquella rica pe­
de Venezuela y, en 1708, m uerto ya nes, se fundaron nuevas poblaciones ro desolada región. Indicaban esos
don José de Iturriaga, le fueron y se m ejoraron notablem ente las re ­ inform es las bases sobre las cuales
agregados a su te rrito rio los corres­ laciones de los blancos con los in ­ se podía aum entar la población eu­
pondientes a la Comandancia del dios, a quienes Centurión trató con ropea, m ejorar la condición del in ­
Orinoco y Río Negro, con lo cual los m esura y atrajo asegurándoles una- dio e increm entar grandem ente la
límites de esta provincia se exten­ am istad que nunca traicionó. producción agrícola y pecuaria; por
dieron hasta el Amazonas. Tres P ara mal de la provincia, la épo­ desgracia, nada o muy poco de sus
años más tarde, p o r nueva disposi­ ca no perm itía avanzar muy lejos recomendaciones fué tomado en
ción de la Corona, vuelve la pro- en el desarrollo de obras de progre­ cuenta.

Parque de Recreo donado por la Stan d ard al pueblo de Caripito

La Standard Oil Company of de la Standard, y a un lado de las plano, con cercana y preciosa ve­
Venezuela, vista la necesidad de carreteras principales que con­ getación, está dotado de condi­
un parque de recreo p ara los n i­ ducen al Campamento. Terreno ciones especiales y de una suges­
ños de Caripito, acaba de hacer tiva belleza propicias todas al fin
donación de un terreno en aquel para que ha sido destinado.
pueblo, propio p ara form ar el El pueblo de Caripito está de
Parque, y además ha tomado a plácemes por esta adquisición,
su cargo los trabajos de acondi­ pues sus niños saldrán grande­
cionam iento necesarios, hasta lo­ m ente beneficiados con esta do­
g rar la completa realización de nación de la Compañía, y en el
la obra proyectada. Parque de Recreo fortalecerán
El terreno donado por la Com­ su constitución física y hallarán
pañía en Caripito, está haciendo la necesaria recreación de su es­
T ra c to re s a rre g la n d o el te r re n o p a ra
frente con el “Stadium Boyacá” el p a rq u e . píritu juvenil.

— 10 —
 Grandes Escritores de Todos los Tiempos
ORRIA el prim er período p re­ cisco Aranda, a la sazón M inistro de
C sidencial de la República Ve­
nezolana, cuando nació en la villa
Estado. Los sucesos políticos le
arrojaron luego a la carrera de las
de Carúpano, de padres que traían armas, logrando en ella los más al­
la ejecutoria de la Independencia, el tos grados y la fama de esforzado
señor Pedro Arismendi, el año de y de valiente.
1832. Las poesías de Arismendi, que por
E ra aquella la época en que, aca­ extraño olvido no figuran en la Bi­
llado el estruendo de la guerra mag­ blioteca de Escritores Venezolanos,
na, ya sin unidad política la Gran aunque por lo general llenas de im á­
Colombia, y rendido a los rigores genes pintorescas, de ardor patrió­
de la ingratitud y del hado el inm or­ tico o fuego erótico, y en formas
tal caudillo P adre y L ibertador de amplias y versos armoniosos, no en­
las naciones, empezaba nuestra inci­ carnan aquellas superiores excelen­
piente nacionalidad a trillar, en el PEDRO ARISMENDI cias que pudieran adunar, en su
benéfico seno de la paz, la senda frente, con los laureles de Marte, el
luminosa de las instituciones. P a­ más verde m irto de Apolo. Sus ver­
recía, en efecto, que ro ta como un nacional se ocultó con largo eclipse sos no se calientan en la llama de
astro aquella poderosa unidad po­ en la confusa tiniebla de nuestros la inspiración, sino que surgen del
lítica, deberían sus fragmentos se­ palenques fratricidas. Decayó tam ­ laborioso proceso del entendim ien­
guir girando con regulado movi­ bién, con el sol de la patria, aquel to: a veces son duros como el ace­
miento por la amplia órbita del p ro ­ célebre Instituto de enseñanza que ro de su espada, y sin el brillo de
greso, hasta ren d ir en torno del sol había ungido con el óleo del saber ella. Su lira tiene a intervalos la vi­
de la Libertad, la grande y gloriosa la frente de tantos venezolanos me­ bración del hierro: más parece ta­
revolución del mundo americano. m orables; y el joven Arismendi si­ ñida por Vulcano que pulsada por
¡Halagadoras y risueñas esperan­ guió sus estudios bajo la inm ediata las musas; empero, nunca p rosti­
zas! Los paladines habían depuesto dirección del señor Juan Vicente tuida a la lisonja, ni m ancillada por
sus arm as triunfadoras en los alta­ González en el Colegio de la Paz, el intereses palaciegos. Campea con
res de la patria: prom esas celestes cual abría sus aulas a la juventud, más holgura en la prosa, y sus a r­
como los sueños de Platón en el precisam ente cuando la guerra, con
tículos afectan siempre formas clá­
cabo Senium; ideales que parecían su cuerno bárbaro, convidaba los
sicas, conocimiento del idioma y
concebidos en el Areópago de Ate­ pueblos a la m atanza y a la ruina.
aquella sobriedad y cultura que na­
nas; dianas de victorias incruentas Adoctrinado en retórica y poéti­ ce del buen gusto y de los serios es­
ganadas en los serenos palenques ca por tan distinguido maestro, co­ tudios literarios.
del derecho; celajes que anunciaban menzó Arismendi a cultivar el co­ Su porte es airoso y elegante: de
alboradas; brisas que henchían el mercio de las musas, aunque no por figura corpulenta y erguida como la
corazón con el aire que agitan las eso dejase de inclinarse a estudios del m osquetero Porthos; largo mos­
alas de los genios; rum or de gloria más serios, como el de las ciencias tacho a lo Víctor Emmanuel, som­
como el que arro ja en sus clarines médicas. Rendía ya el prim er trie­ brea sus gruesos labios; y bajo las
la fama pregonando los portentos de nio del curso, cuando la m uerte de espesas cejas le brillan los grandes
la civilización: tales los magníficos su m adre le dió a conocer la falibi­ ojos anunciando su ardim iento. Por
augurios que anunciaban como he­ lidad de la ciencia; y, herido el co­ su carácter y modales semeja un ca­
raldos del porvenir la prosperidad razón de tan duro desengaño, trocó ballero propio de las leyendas h e­
de Venezuela, a la sazón que el se­ aquel estudio por los de ju risp ru ­ roicas, enam orado de su Dios y de
ñor Arismendi, emulado por sus fe­ dencia y siguió la carrera del foro. su dama. El hubiera combatido con
lices disposiciones, educaba su cora­ Ni fué aquí tampoco más afortuna­ Gonzalo de Córdova en G ranada o
zón e ilustraba su talento en el Co­ do, pues al descubrir las falacias y
con H ernán Cortés en Méjico; pero
legio de la Independencia. Empero, vergüenzas a que a veces está suje­ aunque poeta y artista, no habría
qué corta es siem pre la noche de los ta la justicia humana, y de lo cual cantado como Ercilla la Araucana,
sueños venturosos; y qué largo y pocos h abrá que no hayan sido víc­ ni arrebatado el prem io en una jus­
sombrío el día del dolor y la des­ timas, dió de manos a su nueva p ro ­ ta de Apeles.
dicha! Pasaron fugaces aquellos días fesión y obtuvo la secretaría priva­
de esperanza, y el astro de la gloria da de su deudo el Licenciado F ra n ­ Felipe TEJERA.

C o la b o ra d o re s de "E l F a ro l"
Caracas: Enrique Puig Corvé R., M. A. Antonetti. — Maracaibo: G. Rahn. — La Salina: Ramón Salazar,
Pedro Maninat. — Lagunillas: Abundio Montero. — C aripito: S. Chacín Sánchez, A. Fuenmayor, J. B.
Marín. — Q uiriquire: Dr. Ciro Vásquez, Andrés Mistage. — P edernales: José Núñez, Ferm ín Rafael Li­
nares. — Cumarebo: C. F. Defendí ni. — Giiiria: O. Pegazini. — Tem blador: Francisco Ferm ín. — San
Joaquín: Cruz Barreto, Luis F. Cañas.

— 11 —
w _________________________________________________________________________________________

■W\

La Reparación de Buques
ESDE el momento en que un chas, nuevas aletas puestas en sus Pero, demos una ojeada m ientras
D buque - tanque, o cualquier
otro buque, sale en viaje, hasta el
turbinas, y todo pintado de popa a
proa y de quilla a puente.
el veterano jefe del dique se p re ­
para para recibir un gran buque
momento en que llega al muelle, la Los obreros m arinos están acos­ con el fin de una reparación gene­
tripulación sostiene una incesante tum brados a ver buques gigantes­ ral. Está destinado a en trar en el
batalla contra el contacto corrosi­ cos levantados en alto y en seco dique No. 1, un dique seco de 223
vo del mar, del sol y del viento. sobre la tierra; pero los m arineros metros de largo por 28 de ancho y
Cada tres viajes es pintado el puen­ de agua dulce quedan fascinados 12 de profundidad. Suficientemen­
te dp un buque - tanque ESSO. por el pensamiento de sacar del te grande para dar acomodo al
Pero el trabajo necesario para agua un trasatlántico de 50.000 to­ barco más grande de la m arina m er­
m antener un buque en condiciones neladas y luego cam inar debajo de cante americana. El dique está todo
de viaje, no puede hacerse todo en sus hélices. Es un trabajo trem en­ construido de concreto. Descansa
el mar. A intervalos regulares, un do; pero así y todo, lo realizan dia­ sobre una verdadera selva de pilo­
buque debe suspender sus viajes pa­ riam ente en un astillero de Broo­ tes, y en algunas secciones sus pa­
ra recibir el experto tratam iento de klyn, con la ayuda de dos grandes redes y sus pisos tienen hasta 4%
rejuvenecimiento, que sólo un as­ diques de tierra y 4 de los 21 di­ metros de grueso. El jefe ha estu­
tillero bien equipado puede ofrecer. ques flotantes. Los diques de tie­ diado todos los detalles del casco
Sea cual fuere su tamaño, su tipo, rra (profundas hoyas cavadas en del buque y antes de adm itir el
o el servicio a que se le destine, un la tierra, y que pueden ser vacia­ agua en el dique ha term inado com­
buque constituye un equipo costo­ das del agua) son llamados así p o r­ pletamente sus preparativos. A to­
so y produce solamente m ientras que para los trabajadores m arinos do el largo del centro del fondo del
trabaja. Los m odernos obreros de trabajar en el fondo de un barco dique, una línea de bloques fuer­
los astilleros se sienten por esto or­ es “enterrarse”. Los hombres de tes han sido colocados y eslabona­
gullosos de la rapidez con que pue­ tierra regularm ente se refieren a dos de acuerdo a la conformación de
den dar a un barco toda la atención los diques flotantes como “diques la quilla del barco. Más hacia afue­
que necesita. No hace mucho, un secos”, pero el hecho es que tan ­ ra, a cada lado, hay líneas de blo­
lunes tem prano por la mañana, un to los diques de tierra como los ques curvados para ajustarse exac­
gran trasatlántico entró en un asti­ diques flotantes son así, pues sir­ tamente a los contornos del fondo
llero en Brooklyn, y el m artes al me­ ven para sacar un buque del agua del barco. Cada grupo de bloques
diodía estaba nuevamente navegan­ y ponerlo en lo alto y en lo seco. curvados descansa sobre una fuer­
do en el mar. D urante esa breve vi­ En los prim eros, el agua es bom­ te cama y cada grupo lleva ama­
sita, el buque había sido sacado beada afuera desde debajo del bu­ rrado un fuerte cable cuya punta
del agua, su fondo raspado para que; los últimos, se hunden debajo final libre está a cargo de un obre­
librarle de todo crecim iento m ari­ del buque, suben y lo levantan ro sobre el dique.
no, reemplazadas algunas plan­ fuera del agua. Satisfecho de que la cama de
bloques sostendrá sin peligro al
buque que entra, el jefe da la se­
ñal e inm ediatam ente chorros de
agua saltan del fondo del dique.
Rápidamente la quilla y los blo­
ques curvados quedan cubiertos y
antes de mucho el dique queda
completamente lleno a una profun­
didad suficiente para poder llevar
el buque a su am arradero. E nton­
ces la pesada puerta de entrada
que está llena de agua por dentro,
se vacia por medio de bombas, pa­
ra que así flote y se le pueda re ti­
rar. Ahora el dique está listo pa­
ra recibir el barco.
Con el megáfono en la mano el
jefe del dique toma su posición p a­
ra dirigir el difícil trabajo de co­
locar el trasatlántico en su cama,
exactamente sobre los bloques. Po­
co a poco las hélices del barco o
un rem olcador lo im pulsan dentro
del dique, con sus oficiales atentos
a las m aniobras en lo alto del puen­
te. De repente truena la voz a tra ­
vés del megáfono: ¡Atención! Y el
barco empieza a adelantar. Ya lo
separan pocos pies entre su proa

— 12 —
y la cabeza de concreto del dique, tán ocupados en las entrañas del
y sus máquinas dejan la tarea a barco. En acatam iento a una se­ Extrayendo Caucho del Aceite
cables que dependen de las cabrias ñal otra grúa viajera se mete en el Ya no estarán los Estados Uni­
de tierra. El megáfono sigue vi­ buque y saca el gran ro to r de una dos dependiendo de otras nacio­
brando conforme siguen las órde­ de las inm ensas turbinas. Con un nes en una emergencia de sumi­
nes fuertes y rápidas. “Aflojar la solo movimiento balancea el pesa­ nistro de caucho, según lo afir­
línea de babor!!” “T irar del cable do mecanismo completamente afue­ man los químicos industriales.
de popa!” “Aflojar el cable de ra y lo deposita suavemente a la Solamente pocos meses se nece­
estribor!” puerta del taller p ara turbinas que sitarán para levantar una ma­
Al fin el buque es llevado a una tiene el dique, para su inm ediata quinaria que saque cientos de
posición satisfactoria y queda cui­ inspección y reparación. miles de toneladas de m aterial
dadosamente asegurado. La pesada Uno de los grandes trabajos de crudo para el caucho sintético, y
puerta de entrada es cerrada y vi­ “cirujía m arina” realizados en este esto del casi inagotable abaste­
bra la orden final: “Haced funcio­ dique fué el ejecutado en el vapor cimiento de petróleo y gas natu­
n ar las bom bas!” Dos bombas de inglés “Welcome”. En una colisión ral que posee la nación.
vapor realizan la tarea de vaciar con el “ Cherokee” el barco salió Alemania m anufactura un tipo
el agua del gran dique; cada una con el “espinazo” partido, el lado de caucho extrayéndolo del al­
descarga 260.000 litros de agua por de estribor rajado desde el puente cohol, “buna”, que sale como a
minuto, y la tarea de hacer volver de arriba hasta la sentina, los puen­ unos 60 centavos la libra; pero
al m ar 48.000 o 59.000 toneladas se tes superiores e inferiores y los los Estados Unidos pueden du­
lleva como hora y media. alojam ientos del Capitán m alam en­ plicarla como a 30 centavos la li­
Aun antes de que el dique esté te dañados. El buque se hundió bra, usando petróleo o productos
seco, un pequeño ejército de hom­ pero fué puesto a flote, rem enda­ naturales del gas. Y creen los
bres invade el buque, y ya para el do, llevado al dique y poco des­ ingenieros que una sim plifica­
momento en que se encuentra des­ pués entregado listo para nuevo ción del procedim iento podría
cansando en lo alto y en lo seco, servicio. reducir más el costo.
está bien en camino el trabajo de El tiempo que un buque perm a­ El tiempo no está lejos, en la
prepararlo p ara otros seis meses nece en el dique, depende, por su­ opinión de los principales tecnó-
de servicio. puesto, de la extensión de las repa­ logos del caucho, en que el cau­
En el dique para estos momen­ raciones que necesita. Regularm en­ cho sintético pueda usarse casi
tos hay una babel de ruido y mo­ te una composición de rutina no se exclusivamente en este país, no
vimiento. Los representantes de toma más de 36 horas por térm i­ por necesidad sino porque es su­
los dueños del buque, de la compa­ no medio. Y el agua es bombea­ perior. A lo menos tres diferen­
ñía de aseguros y del dique, han da en el dique, el buque flota li­ tes fórm ulas para obtener cau­
term inado su rápido pero comple­ bre, se abren las puertas, las ama­ cho sintético igual o superior al
to examen del barco y lo han en­ rra s quedan sueltas y el buque p a r­ caucho natural, han sido ya com­
tregado a un ejército de trab aja­ le, apto y listo para seis meses más probadas y desarrolladas.
dores. Los rem aches son exam ina­ de batalla contra el Padre Neptuno.
dos y, si alguno se encuentra da­
ñado, inm ediatam ente tiene toda la
atención de los rem achadores. Ba­
jo la popa otro grupo ha removido
una de las dos hélices de 20 tone­
ladas. A una señal una potente
grúa viajera que está a un lado del
dique, se alarga hacia abajo, aga­
rra y sube las pesadas paletas de
bronce hacia el piso del puente,
donde otro grupo de hom bres las
recibe para trab ajar en ellas. No
hay en esta operación más ajetreo,
pudiera decirse, que la de una E s­
tación ESSO al cam biar una llanta.
Adelante en la proa la gran ancla
cae con ruido de trueno al fondo
del dique levantando una nube de
herrum bre. Braza por braza los
grandes eslabones van siendo p in ­
tados. Sobre plataform as suspendi­
das en lo alto, docenas de hombres
arrancan a m artillo la vieja p in tu ­
ra m ientras que otros raspan de las
placas del fondo la acumulación
de seis meses de brom a y otros
crecim ientos m arinos, anim ales y
vegetales. Y, casi pisándoles los
talones, siguen los pintores arm a­
dos de sus largas brochas. E n tre ­
tanto, invisibles, otros grupos es­
 La B arra de M aracaibo
L problem a de m ayor enver­ tan movedizas, que impiden la en­
E gadura, cuya solución ha sido
una constante interrogación para
trada de buques de gran calado, y
hacen necesaria la conducción de
pat, que tiene cinco kilóm etros de
largo y no es tortuoso como el ac­
tual.
toda Venezuela, lo ha constituido la los buques por “prácticos” de gran A este fin ha sido trasladada al
canalización de la B arra de Mara­ experiencia. Habiéndose puesto aho­ punto preciso la famosa draga “Ja ­
caibo. ra “el Tablazo” mucho más bajo, ya maica Bay”, de la Standard Dred-
Problem a de grandes proporcio­ los buques no podían salir con la ging Company, la que está trabajan­
nes por los millones que cuesta su acostum brada carga perm itida por do desde el 29 de diciem bre del año
realización, y de incalculables con­ la “b a rra ” de afuera. Ha venido “el pasado. Esta es una de las mejores
secuencias por constituir la apertu­ Tablazo” o B arra Interior lim i­ dragas del mundo, capaz de remover
ra del Lago de Maracaibo a los tando con su poca profundidad la 30.000 yardas cúbicas de m aterial
grandes buques, la Nación entera ha carga de los buques. El canal por por día. Se calcula que serán rem o­
estado pendiente de los estudios que donde actualm ente pasan los bu­ vidas alrededor de 1.500.000 yardas
ques en “el Tabla­ cúbicas de arena y que el trab a­
zo” es angosto, to r­ jo será inaugurado el día 18 de
tuoso y demasiado mayo. Se dispondrá entonces de un
bajo, causando co­ canal recto, más ancho y más pro­
mo es de com pren­ fundo que cualquiera otro que h a­
der, dificultades en ya existido en dicho punto.
la navegación, que Además de lo que favorece a las
s e traducen e n Compañías petroleras que ejecutan
el trabajo, favorecerá
indudablem ente a la na­
vegación en general pues
ya se había reducido
mucho el número de bu­
ques que por su calado
podían pasar la Barra.
D rag a “Ja m a ic a B a y ” . Es incalculable el be­
neficio común.

se han hecho para su so-

lución, estudios que han
venido realizándose tan ­
to en el país como en el
exterior. En Vicksburg,
Misísipí, de los E sta­
dos Unidos, existe en ta­
maño pequeño la copia de la barra T u b e ría de succión co­
n e c ta d a con la D raga.
de Maracaibo, con sus arenas move­ T iene 1.000 m etro s de
largo.
dizas y demás peculiaridades, donde
se estudian constantem ente los cam­
bios de profundidad y los movi­ grandes pérdidas
m ientos de las arenas, de acuerdo p ara la moviliza­
con las inform aciones respectivas ción general.
que se trasm iten desde aquí. El Go­ Después de un
bierno Nacional, dando a este asun­ largo estudio de F in a l de la tu b e r ía fie succión.
to toda la atención que merece, ha las corrientes que
venido m anteniendo en el mismo si­ atraviesan “el Tablazo”, las Com­ Ahora, al term inarse el dragado,
tio de la B arra ingenieros naciona­ pañías petroleras decidieron que con m ayor cantidad de agua en el ca­
les y extranjeros dedicados a su es­ puede ser dragado un canal, que­ nal de Ampat, la carga que se tra s­
tudio. dando por resolver si se am plia­ porte aum entará considerablem en­
Del lado afuera de la Isla de San ba y profundizaba el actual o te, eliminándose los inconvenientes
Carlos, hacia el mar, existe lo que se dragaba otro canal conocido presentados en el movimiento co­
siempre se ha conocido con el nom­ por el nom bre de Ampat, que usa­ mercial, y abriendo ancho campo a
bre de “la B arra” ; y del lado aden­ ban en 1928 los buques-tanques las actividades de la navegación.
tro del Lago, hacia Maracaibo, la vacíos y que tam bién se puso tan Ilustram os esta página con va­
otra B arra que se denomina “el T a­ bajo que 110 se pudo seguir utilizan­ rias gráficas de la región del La­
blazo”, ambas tan bajas y de arenas do. Al fin se decidió dragar el A111- go donde actualm ente se trabaja,

— 14 —
 Una Voluntad Firme
Pocas voluntades se apres­
tan, que digamos, al avance
por si solas por el camino del
adelanto y del estudio; y más
contadas son aún aquellas
que, sin tener a la mano la
posesión de medios suficien­
tes se trazan ellas mismas un
ideal, un porvenir, una ru ­
ta más o menos adecuada,
más o menos hábil, m edian­
—La piedad es siem pre muy te la cual la recorrida a
cortés. través de la vida, que es de
—La desconfianza es m ala pero suyo inaplazable, no les re ­
el ser confiado en demasia es peli­ sulte ni tan im posibilitada
groso. ni tan dura. Estas son las
-—El gobernante que va contra los voluntades que al calor de
intereses de su pueblo va tam bién las más acendradas aspira­
ciones se tem plaron para lue­
contra su interés particular.
go,—cuando otros caracteres
—Si has procedido bien no te in ­ se sobrecogieron de inercia y
quieten las censuras de tus seme­ abandono—levantarse gallar­
jantes. das y asum ir frente a sí mis­
—Habla poco pero no seas nunca mas la nueva condición que la
excesivamente discreto. etapa alcanzada les propor­
ciona. Se diría que es enton­
—Tan mala es la discreción exa­ ces más diáfana y más pura RAFAEL FLEMING
gerada como el exceso de elocuen­ la alegría de quien, vencedor
cia. de pasiones y prejuicios se afian­ cia o 110 posesión de un espíritu
—Témele al hom bre que no ex­ zó sobre un pedestal de p rerroga­ moldeado a base de optimismo.
presa sus sentim ientos tanto como tivas, alcanzadas en buena ley, y En efecto, una prueba bastante
al que prodiga sus opiniones. aprem iadas por ejem plar contrac­ elocuente de lo que ahora dejamos
ción en la que prevaleció como ya expuesto es la del señor Rafael F le­
—Concreta siem pre tu pensa­
lo hemos consignado, una voluntad ming, laborioso hom bre de trabajo
m iento y trata de no divagar nunca.
firme. que durante un buen tiempo se ha
—En la precisión de conceptos Cuando se posee una de estas vo­ m antenido consagrado a útiles y
está el secreto literario. luntades; un carácter, digamos, a eficaces estudios.
—Sé generoso en todas circuns­ toda prueba indeclinable; cuando El señor Fleming viene prestán­
tancias pero no adm itas al que sea más impulsados nos sentimos a en­ dole sus servicios a la Compañía
capaz de traicionarte. sanchar nuestro criterio y a per­ Standard desde el año de 193G, y
feccionar el acopio de conocimien­ filé desde entonces que viendo su
—Di siempre de donde vienes pe­ porvenir claro se resolvió a tom ar
ro no te apresures en indicar para tos ya adquiridos, es que precisa­
m ente más necesitamos de esa fuer­ un curso de “Química Industrial”
donde vas. por correspondencia, habiendo re­
za interior que sosteniéndonos nos
—No le confies nunca a nadie tus dá nuevos alientos. cibido, previo largos estudios, su
vicisitudes sentim entales. Diploma en fecha 22 de octubre.
—¡Yo voy a estudiar!—dice el
—Si una m ujer te desaira piensa Precisam ente, la Compañía, por
hom bre aspirante.
siempre que h ab rá otra que no p ro ­ interm edio de su Oficina de Rela­
—¡Yo voy a m ejorar mi condi­ ciones Industriales de Caripito, al
cederá en la misma forma. ción!—dice el hom bre optimista. percatarse del interés de este exce­
—Nunca asistas a los actos a que —¡Yo voy, en fin, a ser!—dice el lente trabajador por m ejorar sus
no te hayan invitado con afecto. hombre, por último, cuando es una condiciones de trabajo, se aprestó
—Témele a la disputa desbocada voluntad firm e que le guía. incontinenti a prestarle su apoyo en
tanto como a la discusión sin en­ Dentro de la acción concreta del el sentido de entrenarlo práctica­
tusiasmo. “Yó Firm e” ; bajo el im perativo de m ente en sus Laboratorios de la Re­
un concepto amplio de trabajo efi­ finería, en donde actualm ente pres­
—Vé siempre acompañado de una ta eficientes servicios a la Empresa.
idea y nunca la traiciones por con­ caz y de estudio es que se puede lo­
grar un bienestar a que todos tene­ La m eritoria y ejem plar voluntad,
veniencia alguna.
mos derecho. Mas, acontece casi así como tam bién la perseverancia
—Olvida siempre la ofensa pero siempre, que aún existiendo los de este hom bre, le hacen acreedor
evita toda am istad con el que te medios necesarios para em prender al m ayor aprecio y estimación.
ofendió. estos pasos de m ejoram iento en la Estas líneas son, pues, nuestra
Raimundo LULIO. vida, se eximen muchos de seme­ mejor felicitación para el señor
jante atrevim iento, lo cual no res­ Fleming.
(V ersión del árabe). ponde a otra causa que a la caren- S. Chacín Sánchez.

— 15 —
 ALENCIA, ciudad procera, es la rodeada de odorantes m alabares, todos qué no m encionar algunos nom bres de
V Capital de Carabobo. Hermosa
ciudad, llam ada la Sultana del Taca-
acuden a adm irarla y a constatar los
sitios donde las columnas simbólicas
artistas auténticos nacidos en esa la ­
titud? Pim entel Coronel, Romanace,
rigua, está situada al pie de la se rra ­ m arcan la caída sin vida de aquellos Víctor Racamonde, entre otros, for­
nía de la costa, en un valle bastante que solo pensaban en el cumplimiento man una famosa trilogía en la histo­
fértil, regado por el río Cabriales. del honor. También el turista visita ria de la lírica venezolana. E l p rim e­
la colina donde G irardot cayó abraza­ ro, atildado, fluido, seguro en la fac­
La capital carabobeña es considera­
do a la bandera; las T rincheras, el tu ra de su rim a. Cáustico, malicioso,
da, con justicia, como una de las
simpático balneario que posee las fino de imaginación, el segundo. Y en
más interesantes ciudades venezola­ más se cumplió una consigna m ilitar En m ateria industrial, Valencia es
aguas más radio-activas del m undo; la cuanto a Racamonde, emotivo, suge-
nas. Efectivam ente, su progreso, sus con m ayor fidelidad! Con solo 200 sede principalísim a del movimiento
playa de “El Palito”, “playa natu­ rente, grácil en la forma y seguro en
industrias, sus m odernos edificios, sus hom bres hábiles la ciudad heroica re ­ fabril en Venezuela. Sus varias em­
ra l”, de sugestiva inspiración, y m u­ la intención.
paisajes hermosos, consagran el in te­ sistió los asaltos de los 4.000 realistas presas de telares, son orgullo de la
chos otros puntos que constituyen v er­ Igualm ente Valencia m arca momen­
rés que despierta en sus diversas m a­ de Ceballos y Calzada, salvando a la Nación, y de ellas unas fabrican telas dadera atracción perenne para nacio­
nifestaciones. Comunicada con Cara­ República, consagrándose a la poste­ de algodón preferidas en toda la Re­ tos trascendentales en la historia de
nales y extranjeros.
cas y con Puerto Cabello por una mag­ ridad e inscribiendo su nom bre con le­ pública y otras fabrican telas de seda la patria. Capital de la República en
nífica carretera, es centro de donde tras de oro en la historia gloriosa de Casa de Correos m oderna, Mercado algunas ocasiones, produjo—como h e­
muy finas. E n éstas y otras im portan­
nuestra epopeya emancipadora. Modelo, Palacio de Gobierno, Hospi- mos dicho—d urante la gesta de em an­
parten diversos caminos p ara ciuda­ tes industrias, gran núm ero de obre­
des de significación, y la gran ca rre ­ ros se han especializado con provecho cipación, cuanto fué necesario.
La del Doctor Miguel Peña, es otra
tera trasandina pasa por ella p ara te­ notable m anifestando su inteligencia Valencia espiritual y altiva. Valen­
M o n u m en to M em orial de C arabobo.
estatua de la cual se enorgullece Va­
ner tam bién im portantes bifurcacio­ lencia, como que el notable abogado y magníficas disposiciones. cia intelectual y artista. Valencia hos­
nes que conducen a lugares de intensa e inquieto com batiente tomó parte p ro ­ pitalaria y siem pre generosa. Curiosa
mucha justicia, pues el famoso sitio
producción agrícola y pecuaria. amalgama de virtudes m orales y m a­
que el procer zuliano sostuvo en m inente en aquellas épocas célebres y
En la Plaza Bolívar, sobre alto y ella con la ayuda de los hijos de la h e­ fué el eje principal de la separación de teriales. Orgullo y prez del Estado
Carabobo que sabe ver en ella junto a
simbólico monolito, se destaca de piés, roica ciudad, es algo que parece una
su pasado opulento una efectiva espe­
en arrogante actitud, la figura egregia página arrancada a la historia espar­
ranza para el porvenir.
del Padre de la P atria, del Libertador tana, tanto fué el heroísmo, la bravu-
de cinco naciones, del genio de Amé­ Porque aquellos pueblos conscien­
rica, del m aravilloso venezolano que tes de su responsabilidad, donde laten
con su victoriosa espada echó para corazones ardientes y vibran cerebros
siempre las bases de la independencia poderosos, constituyen en definitiva,
de estos países que perennem ente h on­ el mejor tesoro de un país.
ran su memoria y se enorgullecen de P or ello, como dijimos al p rin ­
su libertad. Bolívar, el guía del hom ­ cipio de estas líneas, Valencia lle­
bre libre, la luz esplendorosa de la de­ va con razón el distintivo de una de
mocracia, tiene en Valencia el culto las más interesantes ciudades venezo­
que merece, pues Valencia es esencial­ lales y Clínicas, Parques, Clubs, y lanas. Políticam ente, históricam ente,
mente patriota. Y por ello el L iberta­ topográficam ente, por sus bellezas na­
cuanto encierra una ciudad principal,
dor tuvo siem pre los más cálidos elo­ turales, por sus modernos edificios,
tiene Valencia. Y como sitio especial­
gios para la altiva ciudad venezolana por sus progresos de asistencia social,
Cerca de esta ciudad capital, a pe­ mente sugestivo, el Paseo Camoruco,
cuyos hijos derram aron gustosamente y por la inteligencia e industrialidad
nas a media hora de distancia, se en­ con ideales quintas a ambos lados, lle­
su sangre en aras del ideal. de sus hijos, asi lo proclam a, lo atesti­
universi' cuentra el Monumento a Carabobo, no de una exquisitez encantadora.
Tam bién el ínclito Rafael Urdaneta una de las más form idables obras mo­ gua y lo merece.
La originalidad de la región es tra ­
es héroe cuyo recuerdo ha perpetuado Venezuela de la Gran Colombia, a cu­ numentales de estos países, perpetua- dicional en todo el extenso territorio
en bronce la capital carabobeña con yo impulso quedó nuestra P atria cons­ dor de las glorias inm arcesibles con­ patrio. Venezuela se enorgullece con
tituida en Estado Soberano, separa­ quistadas por nuestros libertadores en tan espléndida provincia. Allí el La­
ción consagrada solemnemente en el la batalla que selló la independencia S a n tu a rio de
ra, el denuedo, el espíritu de sacrifi­ go de Tacarigua en posesión del pai­ M aría
Congreso de Valencia. venezolana. Obra de arte verdadero,
cio m ostrado por todos y cada uno de saje máximo: paisaje o estampa lum i­ A u x ilia d o ra .
los soldados que la defendían. Redu­ nosa donde el color parece un m ila­
cida la guarnición a la m itad, exte­ Laguna de V alencia. gro de la naturaleza. Esa “Laguna”,
nuada por la sed y el batallar conti­ remota en su historia, que Humboldt
C apitolio.
nuo, en lugar de am ilanarse se crecie­ m encionara como modelo entre las
ron en coraje y triunfaron como b ra­ más señaladas del mundo. Lindo cro­
vos. — “Defenderéis a Valencia, ciu­ mo, donde muchos poetas supieron
dadano General, hasta m orir” . . . — di­ hallar lo mejor de su inspiración. Y
jo Bolívar a U rdaneta, y a fé que ja- ya que a la lírica nos referim os ¿por

M ercado
M a tad ero
P rin c ip a l.
M odelo.
 S e g u rid a d P rim e ro
DE LA POSTURA DE LAS MANOS DEPENDE EN GRAN PARTE LA SEGURIDAD

Uno de los hábitos más comunes, Fuera de las consecuencias cita­

en lo que a la postura respecta, es das, hay que tener en cuenta que
el de apoyar el brazo izquierdo en las incorrectas posturas pueden dar
el m arco de la ventanilla, con el co­ lugar a confusión por parte de quie­
do de fuera y los dedos de la mano nes manejan automóviles que vayan
derecha tocando el volante. El lle­ detrás, por tom ar como señales de
var puesto el brazo izquierdo en la
tránsito lo que no es sino im perdo­
posición indicada se considera co­
mo excelente precaución, porque nable descuido, y se crean así obli­
puede así usarse la mano en el ins­ gados en un momento dado ora a
tante preciso de peligro. Pero si la detenerse súbitamente, ora a hacer
mano derecha se lleva puesta en el un rápido sesgo a tal o cual lado,
extremo superior del diám etro ver­ casos ambos en que bien pueden
tical im aginario del volante, no es o cu rrir horribles accidentes.
cosa tan fácil el gobernar el coche
en el momento de peligro.
P O STU R A IDEAL
Por otra parte, quien tiene la cos­
tum bre de apoyar el brazo en el
m arco de la ventanilla, con el codo
de fuera, está expuesto constante­
mente a herírselo gravem ente y
aun a perderlo, al pasar otro coche
rozando con el suyo. La estadísti­
ca revela que así ha sucedido en
m ultitud de casos.
Y todavía peor es el hábito que
tienen algunos de poner la mano
derecha en el extremo superior del
diám etro vertical im aginario del
volante y sacar del todo el brazo iz­
quierdo y apoyar la mano por en­
cima de la ventanilla. Si aun en el
m ejor de los casos es difícil m ane­
jar así debidam ente el coche, resul­
ta casi imposible el gobernarlo en
el instante de peligro.
P ara convencerse de esto no hay
más que seguir al que vaya m ane­
jando en esas condiciones, pues en
el acto se verá el culebreo que va
haciendo el coche, especialmente
cuando acelera la m archa para p a­
sar al que vaya delante y volver a
ocupar el lado que le corresponde
PO STU R A IN CORRECTA en el camino.
El que pase a toda velocidad un
ASI todos los autom ovilistas coche rozando con el que uno vaya
C tienen su m anera especial de
m anejar, de ag arrar el volante y
m anejando y éste se vuelque sucede
con una rapidez tal, que no viene
descansar los brazos y, en general, uno a darse cuenta de ello hasta
de proporcionarse la m ayor seguri­ después de haber ocurrido el acci­
dad posible en el camino. Millares dente. De m anera que por uno mis­
de páginas im presas hay ya acerca mo y por sus semejantes, quienes
de la seguridad durante el tránsito, tam bién tienen personas que los
y como consecuencia de ello no es quieren y tienen el mismo derecho
ahora cosa tan común como antes que uno a la vida, la salud y la fe­
la tem eridad en el m anejo; pero, así licidad, debe uno llevar en toda
y todo, hay cierta creciente tenden­ ocasión ambas manos en el volan­
cia hacia el descuido en la postura, te, a los extrem os respectivos del
por p arte de los que van m anejan­ diám etro horizontal; o, si es fuerza
do, descuido que a muchos les ha descansar una de ellas, apoyarla en
costado la pérdida de una mano, a el muslo de su lado, porque así po­
otros la de un brazo y a otros la de d rá uno en el instante preciso lle­
la vida misma. varla al volante.

•18 —
 Evitad los Catarros
AS más de las personas p i­ Aun cuando, quizá por lo común estómago, tales como la carne, el
L llan de uno a tres catarros al
año, pocas son aquellas que pillan
que es y por el hecho de que las
más de las veces nos perm ite andar
pescado, la clara de huevo, las nue­
ces y alm endras de todas clases,
solamente uno, y las hay, en cam­ por todas partes, el catarro es te­ la grasa animal, los guisantes y ju­
bio, que a cada rato pillan uno. No nido por afección de poca im por­ días (o frijoles), a menos que se
ha llegado a saberse a ciencia cier­ tancia, lo cierto es que hace más hallen verdes, el pan, y los cerea­
ta a qué se debe tal diferencia, aun­ estragos en el organismo que m u­ les en general. Todo lo cual pue­
que se han descubierto m uchas de chas otras enfermedades. Lo más den comer únicamente en cantida­
las causas a que obedece el que de­ probable es que cada catarro que des pequeñas, debiendo en conse­
term inada persona sea más suscep­ nos dá deje huella indeleble en cuencia consistir la alimentación
tible que otras a los catarros. nuestro organismo y tienda a acor­ más bien en frutas, verduras y le­
tarnos la vida. Frecuentes son los che y los productos derivados de
llace unos cuantos años se dijo casos de pulmonía que han tenido ésta.
que los catarros provenían de las su origen en algún catarro, y es Deben asimismo, en lo que de la
corrientes de aire, el enfriam iento, frecuente asimismo el que un ca­ alim entación se trata, reducir en lo
los piés mojados, etc. Después, que tarro nos debilita al punto de de­ posible la sal y evitar que los gui­
el origen de todos los catarros eran jarnos expuestos a otras infeccio­ sos se hallen muy condimentados.
ciertos microbios, que se trasm itían nes. En las personas de edad avan­ Las personas cuyo peso sea m enor
las personas entre sí. Ahora sabe­ zada el catarro es una de las cau­ del que corresponde a su edad y es­
mos que ambas teorías son ciertas, sas comunes de defunción. tatura, deben p rocurar nutrirse lo
pues si es verdad que los catarros bastante para adquirir el peso nor­
son contagiosos, tam bién lo es que mal. Por otra parte, el comer de­
la predisposición al contagio es m a­ masiado es causa frecuente de ca­
yor cuando nos exponemos a una tarros, como lo son tam bién el es­
corriente de aire o tenemos los piés treñim iento y la indigestión.
mojados o húmedos. Otras cosas
Corre por ahí la anécdota de que
hay que, reduciendo nuestra re sis­
cierto individuo de descendencia
tencia física, nos hacen más suscep­
europea se encontró una vez en el
tibles a los catarros, y son, entre
campo, en pleno invierno, a un in­
otras, el no dorm ir lo bastante, el dio semidesnudo, y le preguntó,
no alim entarnos debidam ente, el asombrado, si no tenía frío. El in ­
calentar con exceso las habitacio­ dio a su vez le preguntó al blanco
nes en el invierno, el estreñim ien­ si éste no tenía frío en la cara, que
to, la am igdalitis y la sinusitis. llevaba descubierta, y al contestar
Tiempo hace ya que médicos y el interrogado en sentido negativo,
becteriólogos se han impuesto la le dijo el indio: “Yo todo cara”.
El acatarrado debe lavarse fre­
tarea de buscar el microbio del ca­ Ciertamente no seremos nosotros
cuentem ente las manos, para li­
tarro, y no pocos de ellos han anun­ quienes le recomendemos a nadie que
brárselas de los microbios, y evitar
ciado en ocasiones diversas el ha­ ande semidesnudo, para que llegue
el que persona alguna utilice el va­
berlo descubierto, tan sólo para que el cuerpo a habituarse a la tempe­
so, taza, plato o cubierto de que
viniera a averiguarse después que ratura am biente en el invierno, al
acabare de valerse él. Ya se deja
estaban errados. Ahora se ha lle­ com prender que hay que lavar ta­ punto de no sentir en ninguna p a r­
gado al convencimiento, en lo gene­ les utensilios con agua hirviendo te del cuerpo más frío del que sien­
ral, de que se trata de m icro-orga­ tan pronto como le hayan servido ta en la cara; pero no nos cabe la
nismos ultram icroscópicos, esto es, a una persona acatarrada. m enor duda de que la ropa relativa­
que ni por medio del microscopio mente sencilla y los baños de agua
pueden ser vistos. Las personas a quienes a m enu­ fría nos ponen en condición de no
do les dan catarros pueden muy p illar catarros tan fácilmente.
El contagio se verifica por medio
bien, de diversos modos, ponerse
de la tos y del estornudo, o por Los ejercicios al aire libre nos
en condiciones de resistirlos, tra ­
contacto directo, y los microbios le fortalecen. Por regla general los
tando para ello de fortalecerse. Lo
penetran a la futura víctim a por la hom bres que trabajan a la intem pe­
prim ero que deben hacer es hacer­
boca y por la nariz. Hállanse p re­ se reconocer las amígdalas y las rie contraen menos catarros que los
sentes tam bién en las manos de la fosas nasales, p ara ver si no hay que trabajan en bien abrigadas h a­
persona acatarrada, circunstancia alguna infección crónica en ellas, bitaciones. Debemos evitar el que
por la cual pueden ser trasm itidos se hallen mojados o húmedos los
la cual no produce necesariam ente
con el solo saludo consistente en un dolor ni se m anifiesta siempre por zapatos y la ropa que llevemos
apretón de manos, y pueden serlo, medio de síntomas locales; pero sí puestos durante el trabajo, tenien­
por igual razón, por medio de las es causa de frecuentes catarros. do cuidado de m udárnoslos lo más
toallas y aun de los tiradores de las pronto que sea posible. Hay que
puertas. Evidente es que se les Luego, deben sujetar a determ i­ darle al cuerpo el necesario des­
trasm ite asimismo por medio de los nado plan su alim entación, evitan­ canso, y en consecuencia debemos
vasos, las tazas, los platos y los do el comer en exceso alimentos dorm ir por lo menos ocho horas
cubiertos. que tiendan a producir acidez en el diarias.
¿ k .

Hora A m ateu r " E sso / /

UBLICAMOS en esta página las 8 Va durante los dos últimos meses. facultades, lograr la cultura artís­
P fotografías de algunos de los
am ateurs que han obtenido prem ios
Como dijimos en ediciones ante­
riores, las compañías “Esso” han
tica a que aspiran.
Ya la buena acogida que le ha da­
en nuestra hora “Esso”, que se ha patrocinado este torneo para que do nuestro público a esta hora de
venido efectuando en los “Estudios sirva de estímulo a los am ateurs y aficionados, es de por sí un aliento
U niverso” todos los lunes de 7M> a puedan, en noble ejercicio de sus para su continuación.

irn ien M a ch ad o

González
F ra n c isc o
DÚO A la r i a ■ancísco E lia s G o n z á l e z
V U '°™ l M o re n o

C arm en S 4 n < * « liares

Segundo A lberti Genoveva Cedeño

— 20 —
 Club Stan d ard -Lag o
El 18 del pasado mes se efectuó
la inauguración del Club Standard-
Lago, el nuevo centro social de
los empleados de las Compañías
“Esso”, de cuyos trabajos prelim i­
nares dimos cuenta en nuestra an ­
terio r edición.
Una numerosa concurrencia de
damas y caballeros dió prestigio al
acto, que resultó de verdadera tra s ­
cendencia. Los salones y jardines
del Club estaban bellam ente ador­
nados y a los acordes de la orques­
ta “Alfonso L arrain ” se bailó has­
ta la m adrugada del viernes.
Con la inauguración del Club
Standard-Lago se realizó una nece­
sidad espiritual sentida desde hace
tiempo por los empleados de d i­
chas Compañías, p ara que los h e r­
manados por su labor en una m is­ Uno de los salones d el Club.
ma empresa, puedan seguir herm a­
nados en lo que significa deleita­ esforzados luchadores que han la­ La nota social de esta inaugura­
ción del espíritu. De allí nació la borado tesoneram ente hasta lograr ción ha dejado en todos un recuer­
sim pática idea y de allí surgieron la realización del ideal. do gratísimo, lleno de sugestivos
detalles, recuerdo que perm ane­
ce como un perfum e sutil y pe­
netrante.
Por todo ello enviamos un aplau­
so a los que han logrado con sus
esfuerzos la constitución de este
nuevo centro social, que deseamos
sea siempre alto exponente de cul­
tura y lazo de concordia entre to­
dos sus miembros.
Engalanamos esta página de “El
F arol” con varios aspectos gráfi­
cos del simpático instituto.

P a tio p rin c ip a l y p re fe rid o lu g a r de baile.

U n rin c ó n del b ar.

— 21 —
 BANCO CENTRAL DE FERIA-AGRO PECUARIA EN
VENEZUELA SAN FELIPE
“Hablábamos en nuestra nota iQ Q “Los agricultores y criadores con­
editorial de ayer acerca del gene­ Ì currentes tendrán oportunidad de
roso y espontáneo sentim iento con establecer un contacto mutuo del
que el pueblo venezolano impulsa cual ahora carecen y al mismo tiem ­
desde los estrados de la opinión po de hacer transacciones com er­
cuantas gestiones se llevan a efecto ciales de im portancia. Quienes ex­
para instalar definitivam ente el hiban los mejores productos ten ­
Reproducción sin comentarios, de
Banco Central de Venezuela dentro drán el estímulo de los prem ios ofi­
algunos párrafos de recientes edi­
del plazo legal, y del íntim o origen ciales, tanto del gobierno de Yara-
ciones de la prensa del País.
colectivo de esos sentim ientos, que cuy como del Ejecutivo Federal.
se nutren en la convicción popular
OTRA FABRICA DE CEMENTO “Estos certám enes nacionales sir­
de lo sólido, útil y efectivo, de un
ven para despertar en el campesi­
organismo económico nacido en su
“El surgim iento de la fábrica de nado el deseo de m ejorar sus siem­
propio seno y al compás de una si­ cemento del Zulia, dada la n atura­ bras y sus explotaciones pecuarias.
tuación real, en contraste con la in ­
leza de la empresa, que es preciso En algunas regiones, donde ya es
diferencia y hostilidad sufridas por
señalar como verdaderos alientos costum bre celebrarlos periódica­
instituciones de carácter artificio­
y que hace concebir firmes espe­ mente, se ha podido com probar el
so, endeble y patriotero, que no ranzas en lo relativo al increm ento hecho de que los agricidtores y
responden a ninguna necesidad p ri­ criadores han regresado a sus pro­
en Venezuela de una im portantísi­
mordial ni se distinguen por sus fi­ piedades con el propósito de aban­
ma industria, ojalá sirva como m o­
nalidades, sórdidam ente m atizadas donar los métodos virgilianos y ru ­
tivo ejem plar para que se movili­
de insinceridad y doblez. tinarios, para introducir reform as
cen nuevos capitales o se constitu­
“Aparte de este fenómeno subjeti­ adecuadas y poder presentarse en
yan nuevas compañías, de cuya ac­
vo que se registra en relación con otra oportunidad con el resultado
ción, vengan a derivarse no sólo
cuanto concierne al Banco Central de nuevas y fecundas iniciativas.
positivos beneficios para la econo­
de Venezuela, es justo reconocer La preocupación de ensayar nue­
mía venezolana, sino a convertirse
además que el interés general de­ vos cultivos o de poseer razas de
en centros de trabajo para no esca­
mostrado por el establecim iento del so núm ero de obreros, principal­ animales seleccionados nace preci­
nuevo instituto bancario, se funda mente en momentos como los actua­ samente de esta clase de ferias, cu­
principalm ente, en el anhelo de ver les, en que la prensa ha venido r e ­ ya difusión y regularización ojalá
resueltos, siquiera parcialm ente, los gistrando el aumento del desem­ abarque a todas las capitales de los
problem as fundam entales que tr a ­ Estados de la Unión”.— (“C rítica”).
pleo entre los sectores trabajadores
ban el desenvolvimiento económico
de algunas latitudes patrias.
de la República.”— (“A h ora”.) EL MUTUO RESPETO
“Que el empuje y la voluntad que
EL CONSUMO DE LA SEDA anim a a quienes hoy llevan hacia “Creemos que la predicación del
“El consumo de la seda en Vene­ una realidad firm e la instalación de mutuo respeto es la fórm ula autén­
zuela se cifra en más de doce m illo­ la fábrica de cemento del Zulia, tica para el logro de verdadera de­
nes de bolívares anuales. Si el país culmine en un éxito completo, ya mocracia. Las tiranías, de ordina­
produjera centenares de miles de que por este medio, una de las más rio, no surgen sino cuando se abo­
kilogram os de capullos podría ex­ im portantes y ricas regiones del na el terreno de la discordia con la
p o rtar la seda natural hacia los país contará con un nuevo y valio­ violación de los fueros que al hom­
mercados consum idores y encontrar so factor industrial”. — ("El U n iver­ bre se le deben. Quienes se quejan
sa l”).
una compensación p ara su balanza de la imposición tiránica o dictato­
comercial. Este debiera ser el ob­ FORMACION MORAL DE LA rial no paran mientes en que no po­
jetivo a perseguir con energía y fir­ INFANCIA cas veces tal actitud se debe a los
meza, porque no sólo se obtendría “Cuando escribimos desde estas abusos y violaciones de ciertos sec­
el mencionado feliz resultado, sino mismas columnas, recientem ente, tores que siem bran discordias, odios
que con la expansión de una indus­ acerca de la necesidad de propen­ y llegan, prevalidos de engaño, a
tria em inentem ente doméstica se der a la m ejor formación moral de violaciones de la justicia, o form an
procuraría trabajos a miles de b ra ­ la infancia y de la juventud, tuvi­ revueltas, y necesariam ente los ve­
zos en todo el territo rio nacio­ mos presente los factores que en­ jados y ofendidos rechazan, por la
nal. No hay otro medio p ara m ejo­ torpecen esa obra de suprem a con- fuerza, la agresión.
ra r nuestras condiciones de vida si­ venieilcia nacional. Establecimos la “Tal es la historia de la hum ani­
no haciendo una realidad de las po­ diferencia que existe notoriam ente, dad. Las tiranías y dictaduras no
sibilidades en espera de una acción entre la educación puram ente in te­ nacen de por sí mismas, ni son tam ­
consciente, entusiasta y patriótica. lectual y el perfeccionam iento m o­ poco producto del respeto y orden
“Es oportuno recordar lo que he­ ral. De esta últim a necesitan nues­ sino del desorden y de los abusos,
mos afirm ado en pasadas ocasiones tras promociones, si queremos sal­ sobre todo, fruto de los manejos de
con respecto a las prim as de la varlas y con ellas el futuro de la quienes, para engañar al pueblo,
agricultura: en ese plano procede­ Nación. Múltiples son, en efecto, pretenden m antenerlo en discordia
mos con el criterio de los países las causas determ inantes de la p ro ­ continua en pugna con los grandes
que tienen una in dustria florecien­ funda desviación del sentido moral principios, sustentadores de la so­
te y grande: hemos favorecido la que amenaza a nuestra infancia. ciedad: el principio de orden espi­
exportación de los productos como E x tirparlas es un deber patriótico ritual y el principio de autoridad.
si tuviéram os congestión de los impostergable, de realización no tan Hombres sin probidad que en
mismos a causa de incesantes y n u ­ difícil, pues nadie las desconoce”. nom bre de la democracia, destru­
merosas cosechas.—(“La E sfera”). __ (“El H eraldo”). yen la dem ocracia”.—(“L£* R elig ió n ”).
t

— 22 —
 Hemos tenido el gusto de recibir
un interesante opúsculo del distin­
guido hom bre de ciencia Doctor L.
López Villoría, titulado “Fibrom as
Naso-Faringeos”, el cual aborda
puntos muy interesantes en ese di­
latado campo científico.
La figura del Doctor López Villo­
ría es amplia y ventajosam ente co­
nocida en los centros científicos de
dentro y fuera del país y son, ya
con éste, numerosos los trabajos
que le han acreditado como una
efectiva autoridad en la especiali­
dad que ejerce.
Váyanle nuestras felicitaciones al
Doctor López Villoría por esta nue­
Con la asiduidad y gentileza de DOCTOR ANTONIO REYES.
siempre, ha llegado a nuestras m a­ va prueba de su inteligencia y la­
boriosidad.
nos el último núm ero de “T rabajo”,
Revista que el M inisterio de T raba­ Nuestro apreciado compañero de
jo y de Comunicaciones viene edi­ Tenemos en nuestra mesa de re ­ labores, el Dr. Antonio Reyes, aca­
tando, y la cual está encam inada a dacción el último número del “Bo­ ba de publicar un nuevo libro titu ­
enfocar m ensualm ente todos aque­ letín de la Academia Nacional de la lado: “Mitos, m ujeres y encajes”.
llos aspectos relacionados en una Historia, publicación ésta que co­ En un loable afán de inquisición
u otra forma con la vida del tra b a ­ mo siempre viene integrada por una psicológica, Reyes in terpreta las
jador venezolano. muy interesante selección de tra b a ­ características especiales de los
jos de carácter científico. El suma­ “m itos”, adentrándose en la difícil
Este número último trae, como rio en referencia recoge de prefe­ crítica de tan complejo asunto, y,
desde su iniciación, un selecto ma­ rencia todo lo relativo al cincuen­ para mejor movimiento de la obra,
terial inform ativo, y en él vemos tenario de tan docta Corporación. lo hace en forma novelada.
que:
Interpreta el “mito” con inteli­
De 1937 a 1938 pagaron U tilida­
gencia y m aestría para llegar a la
des en el país 1.268 empresas, de Ultimamente ha dado a la luz pú­ conclusión de que éste lio conoce
acuerdo con el Decreto respectivo. blica el conocido escritor S. Díaz de sexo. Y opinamos nosotros que
El número de trabajadores que p e r­ Mantilla una serie de ensayos que ha acertado, pues en el estudio de
cibió U tilidades fué de 51.381, as­ ha recogido bajo la denominación la psiquis fem enina se encuentran
cendiendo la cantidad estipulada de “Escritores y Poetas del Táchi- de relieve, además de sus especia-
a este efecto a Bs. 16.279.791,46. De ra ”, labor ésta que como su nombre lísimas y sutiles condiciones, las
esta suma fueron entregados direc­ lo indica viene a llenar un vacío en mismas pasiones que en el hombre,
tam ente a los trabajadores Bs. la bibliografía critica de la región siendo así comunes los casos de la
8.779.363,27, y destinados a diversos andina. Mujer Don Juan, la Mujer Fausto,
Bancos del país, a fines del ahorro, Por otra parte la utilidad de esta la Mujer Quijote, la Mujer Hamlet,
Bs. 7.500.428,19. Asimismo, durante obra resulta claram ente manifiesta la Mujer Otelo, etc., etc. Viven
el año de 1939, fueron pagados a puesto que en dicha obra se encuen­ siempre, tanto en el predio mascu­
los trabajadores en toda la Repú­ tra señalada con precisión la labor lino como en el femenino, esos ca­
blica, por concepto de Vacaciones de los intelectuales del referido racteres espectaculares que parecen
Bs. 1.945.263,49. P o r concepto de Estado. ser la reencarnación del “m ito” a
indem nizaciones m otivadas a des­ través de las edades. Extrem a sensi­
pidos Bs. 1.075.841,54. Lo indem ni­ bilidad espiritual, o lo que sea, lo
Ha llegado a nuestra mesa de re ­
zado por concepto de accidentes cierto es que el psico-análisis de
dacción, nítidam ente impreso, un
Bs. 1.010.856,05. P or concepto de interesante opúsculo contentivo del los “m itos” dem uestra que éstos
reclamos diversos Bs. 2.109.433,45. subsisten a través del tiempo y en
brillante discurso que pronunciara
P or Utilidades de ese año Bs. todas las latitudes.
en su reciente incorporación a la
16.300.409,93. Las multas impuestas
Academia de la Lengua, el joven y “Cuentos Brujos”, “El Blasco Ibá-
por diferentes motivos arrojaron ya ilustre intelectual Doctor Ed- ñez que yo conocí”, “Lucrecia Amo-
un total de Bs. 14.125,00. Todas es­
gard Sanabria. En esta nueva pro­ rós”, “Las Viudas de Color” y “La
tas sumas redondeadas, dan un to­
ducción del Doctor Sanabria, ra ti­ Unica Verdad de la B ailarina”, son
tal de Bs. 22.455.929,46. obras que tam bién debe la literatu­
fica ampliamente el nuevo Acadé­
También se desprende de la sec­ mico, sus proverbiales condiciones ra venezolana a la pluma de Reyes;
ción inform ativa, que durante el re ­ de hom bre de pensam iento y litera­ todas bien acogidas por la critica;
ferido año de 1939 las Oficinas de to de muchos quilates. Condiciones pero creemos que ésta de ahora lo
Colocaciones, en sus respectivas lo­ éstas, que, como es sabido, le han será en m ayor escala, tal como lo
calidades, colocaron 2.996 trab aja­ valido honrosas distinciones, al fué otra de sus obras: “Del Racio­
dores, lo que no deja de ser asimis­ prestigioso autor, tanto en el cam­ nalismo Averroista al Razonamien­
mo otro aspecto sumamente elo­ po de las letras como en el Profe­ to Lulíalo”, laureada en Madrid con
cuente de las actividades de este sorado y asimismo en el dilatado el premio A. B. C. en 1936, y que le
Organismo Nacional. campo de los empeños jurídicos. mereció los honores de académico.

— 23 —
 Los Ultimos Dictados de la Moda
El Cultivo de la B e lle z a

UBO un tiempo en que creía­

H mos que la belleza y la ele­
gancia de una m ujer dependían del
bios, polvos rosados. Lo mismo
puede decirse a las m ujeres de tipo
“conservador”, inclinadas a ser al­
sombrero que usara. Pero los tiem ­ go remilgadas. P ara sintetizar, po­
pos han cambiado, y desde que los dríam os decir que el m aquillaje de­
diseñadores se han vuelto locos, fa­ be de estar de acuerdo con el ca­
bricando som breros tan estram bó­ rácter, los sentimientos, y el modo
ticos que rayan en lo ridículo, nos de ser de la persona. Una joven
hemos convencido de que la m ujer ingenua se ve ridicula si trata de
ha de verse bonita y elegante, a parecer coqueta, pero, desgraciada­
pesar del som brero. La busca de un
mente, son m uchas las caricaturas
som brero suave y halagador, es ta­
que vemos en este mundo.
rea “de gigantes”, tan ardua, que
es capaz de hacer desfallecer a las Las innovaciones en m ateria de
m ujeres de indómita voluntad. Zan­ maquillaje puede decirse que se p re­
jan la dificultad, com prando el som­ cipitan una tras otra ofreciendo
brero que detestan menos. Mas sea­ tantos cambios, bruscos algunos,
mos im parciales. No echemos toda que casi desconciertan. P or eso,
la culpa a las tiendas de modistas. absteniéndom e de hacer su censura
Si las m ujeres protestaran, los dise­ o su alabanza, comunico a quienes
ñadores recobrarían el sentido co­ siguen esta sección que se ha pues­
mún, y sus creaciones no serían tan to de gran moda en P arís el m aqui­
raras. llaje rosado, al que se da el nombre
Lo prim ero que debe hacer una sea parca en la aplicación, y si de­ peregrino de Trianon, m aquillaje
m ujer es lucir un tocado bonito y que recuerda la dulzura de colori­
sea que se destaque más el color,
un m aquillaje divino. En esta fo r­ do de la escuela pictórica francesa
use polvos claros, como contraste.
ma, por lo menos, si no se evita, se de tiempos pasados. Adelanto por
No use colorete, pero píntese los
suaviza la “m aldición” de los som­ el momento, que todas las com bina­
breros que nos vemos obligados a ojos todo lo que quiera.
ciones se efectuarán a base de una
llevar. En lo que respecta al peina­ Recuerde, sin embargo, que el variada gama de rosas, llegando del
do, ya se nota mucho adelanto. Es carm ín p ara los labios puede u sar­ más claro, casi blanco, al rosa que
más sencillo, y no por esto menos se de día o de noche, pero no así la linda con la púrpura de algunas de
elegante, y no se desarregla con pintura en los ojos. Déjese ésta pa­ las flores de ese nombre.
tanta facilidad como los in trin ca­ ra la noche solamente. Sea el ne­
dos tocados que usábamos antes. En Agrego que se anuncia que este
gro su color predilecto. Use lo me­ m aquillaje sienta idénticam ente a
cuanto al m aquillaje, éste ofrece nos que pueda los colores en pas­
muchas más posibilidades de las las rubias que las morenas, lo que
tel, que no son apropiados para su supone una ventaja en su adopción
que se im agina la m ujer. Usar
tipo. Los trajes deben ser elegan­ nada despreciable.
polvos, colorete y carm ín p ara los
tes, pero sencillos. Los encajes y
labios no es suficiente. La m ujer Se han lanzado al mercado, tam ­
debe usar la cabeza, cultivar la vis­ los volantes fruncidos no se han
bién en el extranjero, sombreados
ta para seleccionar un maquillaje creado p ara las m ujeres de este ti­
como los en uso para los párpados,
que im parta delicadeza, lozanía y po, seguras de sí mismas, satisfe­
pero destinados especialmente al
belleza al rostro. Pero lo más esen­ chas de su apariencia.
rostro. Se afirm a que dicho som­
cial es que se escoja el maquillaje ¿Es usted como una violeta? ¿Mo­ breado es de bello efecto y realza
que esté a tono con la personalidad desta, tem erosa siempre de no ver­ notablem ente la herm osura natural,
o carácter de la mujer. se bien? Pues entonces no se exce­ eliminando, por otra parte, cual­
—¿Qué tipo de m ujer es usted? da en el uso del m aquillaje. Use un quier asomo de artificio en el a rre ­
¿Es usted de porte elegante? ¿Tie­ carm ín del color natural de los la­ glo de la cara.
ne usted seguridad en Tam bién las com­
sí misma? ¿Sabe lle­ presas de aceite de
var la ropa con ele­ alm endras d u l c e s ,
gancia? ¿Es usted la aunque más conoci­
m á s resplandeciente das, son de eficacasí-
estrella de la fiesta? mo resultado para de­
Si la respuesta es volver la lozanía a un
afirm ativa, no tiene rostro fatigado.
u s t e d necesidad de Por último, si es us­
preocuparse por el ted rubia, no im porta
matiz del carm ín p a­ a qué tipo pertenezca,
ra los labios. Use un sea parca en el uso de
color brillante y no maquillaje.

— 24 —
 Convierta en Dinero sus Ideas
LGUIEN ha dicho, y con razón, ter la electricidad a práctico do­ dieron a la tarea de averiguar si se­
A que la curiosidad es m adre de la
inventiva. Demás está el decir, por
minio, cosa que no hubiese logrado
nunca, de haber estado desprovisto
ría posible idear otros más eficaces.
Y todos conocemos individuos,
supuesto, que p ara que aquélla la de curiosidad. en m ayor o m enor número, cuya
dé a luz es m enester que en cada curiosidad los llevó a la delantera
caso exista el germen de ésta, pues de los demás. No contentos con co­
no se espera que quien no tenga piz­ nocer a perfección los detalles de
ca de genio vaya a inventar nada, su propia tarea, afanábanse tam ­
por muy curioso que sea. bién por conocer los de las tareas
Sabido es, asimismo, que la cu­ encomendadas a otros en su ramo
riosidad puede consistir en el sano de actividades, lo cual los hizo pe­
y legítimo deseo de saber y averi­ netrarse de éste en toda su exten­
guar alguna cosa, o en la pésima sión, dando ello por resultado el
que, por virtud de su curiosidad, lo­
costum bre que tienen ciertas perso­
grasen en poco tiempo saber lo que
nas de in q u irir lo que no debe im ­
no llegaron a saber otros que se pa­
portarles; pero aquí nos referim os
saron toda una vida trabajando en
a la prim era clase de curiosidad.
el mismo ramo.
Fué la curiosidad que por las des­ Es ésa, pues, la clase de curiosi­
cargas eléctricas tenía Benjamín dad que a todo el mundo le convie­
F ranklin, lo que hubo de llevarlo a ne, y que es digna de adm iración y
la invención del pararrayos, y los estímulo, aparte la circunstancia de
descubrim ientos que sobre aquéllas que lleva siempre consigo su p ro ­
hizo el propio F ranklin sirviéron­ A cada paso vemos el resultado de pia recompensa. Así, se llega a la
le de inspiración a otro genio, To­ la curiosidad de personas que, no idea feliz y ella puede ser la base
más Edison, y le perm itieron some­ satisfechas con caducos sistemas, se de su fortuna.

Ju sep ín
(V iene de la pág. 5).
D atos In te r e s a n te s
corren paralelas con las labores de E ntretanto, y no obstante el ca­
La prim era tierra visitada por
explotación de un nuevo yacim ien­ rácter provisional que ha tenido el
Colón en su tercer viaje fué la
to: entre ellas mencionarem os de campo hasta ahora, la Standard Oil
de las Playas de Macuro, en la
m anera especial el Oleoducto de Company of Venezuela, no dejó re ­
Península de Paria, el l 9 de Agos­
Jusepín, cuya construcción se in i­ legadas a segundo plano, ni la sa­ to de 1498. Se llama hoy “Cris­
ció en el mes de julio de 1939 y fué lud ni la educación, pues si desde tóbal Colón”, en honor del in ­
term inada el 16 de setiem bre del un principio se establecieron allí signe descubridor.
mismo año debido a la eficacia e un dispensario y clínica de em er­
—El censo de 1926 en Venezue­
intensidad con que se trabajó en gencia, tam bién han venido funcio­
la dió un total de 3.037,398 ha­
esta instalación. En el núm ero co­ nando con toda regularidad la es­
bitantes. El de 1936, diez años
rrespondiente a enero pasado, “El cuela diurna p ara los hijos de los
después, dió un total de 3.467.839,
F arol” dió cuenta detallada de es­ trabajadores, y escuela nocturna pa­
es decir, un aumento de 430.441
ta obra. ra los trabajadores mismos. Y, pa­ habitantes.
N aturalm ente, a los trabajos de ra coronar ese program a de des­
arrollo social, la Compañía cons­ -—Venezuela tiene 2.050 kiló­
construcción propiam ente dichos metros de frontera con Colom­
precedieron meses de difíciles es­ truyó hace poco un campo para de­
portes, donde las amables activida­ bia, 2.000 con el Brasil y 743 con
tudios técnicos p ara seleccionar la la Guayana Británica.
ruta más conveniente para dicho des del base-ball, del basket-ball,
oleoducto, lo cual envolvió un estu­ etc., no sólo ofrecen oportunidad
dio porm enorizado del terreno, me­ de sana distracción para los trab a­
diciones, levantam ientos de planos, jadores y sus familias, sino que pro­ Traslad o de O ficinas
y muy considerables, erogaciones de porcionan nuevas fuerzas al múscu­ La Standard Oil Company of
dinero. lo y al espíritu. Venezuela y la Lago Petroleum
Ya hoy la Compañía empieza a Tal, hasta la fecha, la historia de Corporation están efectuando el
levantar en Jusepín un cam pam en­ Jusepín, prom etedor de trabajo traslado de todas sus oficinas pa­
to perm anente; y sólidas viviendas, abundante p ara muchos padres de ra el nuevo Edificio, situado de
oficinas, escuelas, clínica y locales familia, de nuevas rentas para el Sociedad a Traposos N9 4; y, to­
para depósitos y talleres, etc., ocu­ Tesoro Nacional, y de mayores ac­ da la correspondencia para di­
tividades comerciales para las po­ chas Compañías, asi como la que
pan actualm ente la atención de un
blaciones vecinas—nueva fuente de se dirija a esta Bevista “El F a­
competente cuerpo de ingenieros y
rol”, debe ser enviada a dicha
trabajadores especializados en cons­ vida arrancada a la selva m alsana
dirección.
trucciones. e inhospitalaria.
 CARACAS LAGUNILLAS CUMAREBO
Después de amables días en esta La felicidad sonríe, por el naci­ Estuvo entre nosotros en jira de
Capital, donde recibieron m últiples m iento de simpáticos nenes, en los inspección, el Superintendente de
manifestaciones de sim patía, regre­ hogares de los esposos José T. Ma­ las Escuelas de la Standard Oil
saron a los Estados Unidos los se­ tos y Angela de Matos; Eduardo Al­ Company of Venezuela en la Repú­
ñores Nelson y Law rence Rocke- bornoz y Carmen de Albornoz; Ale­ blica, doctor Francisco Ib a rra Ma-
feller, acompañados de sus d istin­ jandro Alfonzo y Rafaela de Alfon- yorga, quien dictó una charla en los
guidas señoras esposas. zo; José Querales y señora; Emilio salones de la Escuela de la Stan­
Llevan a su vuelta a la metrópoli Dawson y señora; Juan Romero y dard, en presencia del D irector de
am ericana las mejores im presiones W elminia de Romero. las Escuelas del D istrito Zamora,
de la culta sociedad caraqueña. Unimos nuestros votos a los m u­ señor José Vicente Cuervo, h. y p er­
chos que se han hecho por la vida sonas de nuestra sociedad. Habló
Los señores Santiago Sucarino, venturosa de los pequeñuelos. sobre el deber del niño con la es­
Elio A. T orres, Angel F. Bravo, cuela y vice-versa; la escuela y el
Iván de Pool, José Núñez, Carlos CARIPITO hogar; la cooperación entre los
Puchi, Felipe Rubio, Segundo Ca- m aestros y los padres de fam ilia y
Un nuevo bebé alegra el hogar otros tópicos im portantes sobre
m arillo, Jesús M. Navas, Ramón D. del doctor Palís y su señora espo­
Leiva, José R. Guerra, R. Neumann, educación.
sa, a quienes envía por tal motivo
Antonio Aguirre, Alcibíades Prieto, su felicitación esta Revista. Esta visita indudablem ente resul­
R. Quintero y J. M. Aponte, han si­ tará en efectivo provecho para nues­
do transferidos del Estado Zulia pa­ tros planteles de educación y para
T ransferido ha sido al vecino dis­ los educandos que en ellos reciben
ra las oficinas de la Standard Oil
trito de Q uiriquire, en donde ejer­ su instrucción.
Company of Venezuela en Caracas.
cerá el cargo de Jefe de la Oficina
A todos les deseamos éxito en sus de Labor, el señor Sixto Gil H. QUIRIQUIRE
labores en esta capital.
Enviamos nuestros parabienes a
El día 10 del pasado mes de abril los hogares del señor Carlos Sala-
El éxito que ha venido obtenien­ celebraron los esposos Fuenm ayor- zar y esposa; Telésforo Córdova y
do la Hora “Esso” todos los lunes Hernández, el prim er aniversario de esposa; esposos Idrogo; y Tomás
de IV-i a 8 V2 p. m. en los Estudios su niñita Nelly, quien con tal mo­ Moreno y esposa, por el placer que
Universo, hizo que el jueves 25 del tivo se vió muy hom enajeada por en ellos se experim enta por el na­
pasado mes se efectuara una audi­ sus amiguitas del Campo “La Flo­ cimiento de sendos niños, para los
ción por los mismos Estudios a las resta” en esta localidad. que deseamos una vida muy feliz.
9 de la noche, lim itada a com peten­
cia entre los aficionados que hasta Con motivo de la celebración de
ahora han obtenido prem ios en la H an llegado a ésta, transferidos de
la gloriosa efemérides del 19 de
hora regular de los lunes. la Oficina de Caracas, los señores
abril, la Asociación de Padres y
Pagés y Pino, del Departam ento de
C oncurrieron 12 am ateurs p re­ Maestros, de nuestro Campo de P ue­
Tierras.
miados, y el acto quedó bastante lu ­ blo Nuevo, en Quiriquire, llevó al
cido y del agrado no solo de los más alto grado de culto entusiasmo
concurrentes, sino de muchos de U ltimamente fué visitada la región los festejos tendientes a tan plausi­
los radio-escuchas que así lo p a r­ por un Cuerpo de Boy-Scouts veni­ ble celebración. Al efecto, hubo
ticiparon por teléfono. dos de la vecina antilla inglesa de terneras suculentas a la llanera, ob­
T rinidad, en misión de acercam ien­ sequiadas por la Compañía, bailes,
Se habían destinado tres premios, to scout. E n el Club Bolívar de
de Rs. 25, 15 y 10, respectivam ente, cantos y otras fiestas escolares.
Caripito, la Standard obsequió a
los cuales fueron adjudicados como
tan simpáticos exploradores con una Recientemente han sido transfe­
sigue, según dictam en del Jurado:
suculenta y sabrosa tern era a la ridos al Campo de Jusepín los seño­
le r prem io: Trío Esqueleto. llanera, participando tam bién de res Pedro S. Cañas y José R odrí­
2? prem io: Trío Los Criollos. este hom enaje los Boy-Scouts de guez M., ambos empleados del De­
3er. prem io: Carmen C. Machado. M aturín y los equipos infantiles de partam ento de Seguridad.
Por opiniones de algunos de los Base-Ball de Quiriquire. El acto se
presentes en el acto, así como de prolongó por algunas horas, que­ El sábado 20 del pasado mes de
otros que lo m anifestaron telefó­ dando todo muy simpático y los ho­ abril se celebró en el Campo “El
nicamente, ya se lia formado en la m enajeados muy satisfechos. P orvenir” el enlace nupcial del se­
Hora “Esso” un apreciable núm ero ñor M artín Gómez con la joven se­
de am ateurs, que pronto no podrán El hogar del señor doctor Luis ñora Rosario Garantón. Form ula­
considerarse como tales, porque sus V illarroel y su esposa la señora Yo­ mos votos pór su eterna felicidad.
felices facultades están siendo m e­ landa Plaz de V illarroel, está de f I______

joradas grandem ente. plácemes con el advenimiento de Se encuentra de plácemes el ho­

Este m ejoramiento, nos complace, su prim ogénito. Una felicitación gar del señor Luis Zam ora y su se­
pues eso y no otra cosa fué el fin tiene “El F arol” para los padres y ñora esposa por el feliz adveni­
perseguido por las Compañías p ro ­ sus votos de larga ventura para el miento de su prim ogénita, una h er­
m otoras de la H ora “Esso”. nene. mosa niña.
 CARACAS Hace poco se llevó a efecto un
festival deportivo en el Estadio de
Tía Juana, con motivo de la entre­
ga de trofeos y medallas simbólicas
a los Campeones de Base-ball Lago
para 1940, a los Sub-campeones y a
los jugadores más destacados. El
Campeón resultó ser el Standard de
Tía Juana por haber ganado mayor
número de juegos a los otros con­
juntos de la Lago; y Sub-campeón,
el Campo Rojo de Lagunillas.
La señora Babin, esposa del Su­
perintendente del Campo, hizo en­
trega a las m adrinas de los Clubs
Campeón y Sub-campeón, de unos
bonitos trofeos así como también
a los campeones y jugadores más
De iz q u ie rd a a d e re c h a (d e ro d illa s ): E u d o m a r Esis, F élix A lm arga, Je sú s P a re d e s, Jo sé destacados les prendió en el pecho
G onzález, L u is G u illerm o A lvarez, M anuel G u ev ara, Je sú s L ugo, L uis A rias.
D e iz q u ie rd a a d e re c h a (d e p ie s ): R obinson V illalobos (M an ag e r), F ra n cisco C o n treras, simbólicas medallas como premio
A lb e rto M oreno, R a ú l C h irin o s, C ésar Gil, Y olanda R om ero (M a d rin a ), M anuel O roño, a sus buenas actuaciones durante el
F ra n c isc o H ern án d ez, P a s to r U rd a n e ta , D om ingo R am írez, Jo sé E ste b a n O livares
(P re s id e n te del C am po R ojo S p o rt C lub). torneo, prem ios donados por la
Compañía.
El team de base-ball “Esso”, com­ Esta jira del “Esso” es patrocinada LA SALINA
puesto de trabajadores deportistas por la Compañía, que, como recom ­
de la Lago Petroleum Corporation pensa a los esfuerzos por los cuales Un brillante resultado tuvo como
en Lagunillas, inicia en este mes, conquistó el campeonato amateur, final el Campeonato de Rasket-Ball
¿ajo los auspicios de la Compañía, ha dispuesto poner a su disposición Inter-Colegial que con gran regoci­
un viaje por tierra desde aquella uno de los buses en que se hace el jo y valentía se disputó la chi­
población lacustre hasta esta ciu­ trasporte de empleados en los cam­ quillería venezolana que cursa
dad de Caracas, para dirim ir en ga­ pamentos, financiar todos sus gastos educación en los bien ordenados
llardas contiendas el campeonato y pagarles sus sueldos completos planteles de enseñanza que sostiene
nacional am ateur con los teams de durante todo el tiempo del viaje. la Lago Petroleum Corporation en
Barquisimeto, Valencia, Puerto Ca­ Al adelantar un cordial saludo a sus campos petroleros de Cabimas
bello, Maracay, Caracas y La Guai­ nuestros entusiastas muchachos, es­ y Lagunillas.
ra. El team “Esso”, que es el gana­ peram os que en todo momento de la Gracias a los valiosos conocimien­
dor del campeonato am ateur en el sim pática jira den prueba de que tos del diplomado Instructor de
Zulia, ajustará su recorrida al si­ son trabajadores - deportistas que Cultura Física, señor Paúl W inge-
guiente itinerario: caballerosam ente luchan por el yer y a la desinteresada colabora­
Mayo 9. Sale de Lagunillas. triunfo definitivo para sus colores. ción que en este sentido le p resta­
Mayo 10. Llega a Valencia. LAGUNILLAS ron todos los representantes de los
Mayo 12. Juega en Valencia. dos citados locales educativos, el
Mayo 14. Juega en Pto. Cabello. Se considera un “h it” de oro la
Torneo lució m aravillosam ente en
resolución de que el Conjunto De­
Mayo 1G. Juega en Maracay. todo su esplendor, proporcionando
portivo “Esso” salga en jira para el
Mayo 18. Juega en Caracas. gratos momentos de entusiasmo en­
centro de la República a enfren tar­
Mayo 19. Juega en Caracas. se a los Clubs de base-ball am ateur tre los diversos núcleos de escola­
Mayo 21. Juega en La Guaira. de Puerto Cabello, Valencia, Mara­ res que en él participaron.
Mayo 23. Juega en Caracas. cay, Caracas y La Guaira. Los ju- Después de reñidas alternativas
Mayo 24. Sale de regreso para jadores están muy entusiasmados y la puntuación concluyente se divi­
Lagunillas. m anifiestan seguridad de portarse a dió en dos partes iguales de ganan­
Mayo 26. Juega en Valencia o la altura de su deber deportivo. Se cias. Los defensores del “Ayacu-
Puerto Cabello. piensa que en 19 días se efectúe la cho”, de Lagunillas, en el género
Mayo 28. Llega a Lagunillas. jira, según y como se presenten las masculino obtuvieron los prim eros
Como se ve, son 19 días de tra b a ­ circunstancias. Ojalá lleve siempre puestos, m ientras que del “Concor­
jo fuerte p ara nuestros actuales en mente que es un representante dia” se salieron con la suya las
campeones am ateurs en los que hay de trabajadores petroleros y pelo­ simpáticas muchachas de la catego­
concertados 8 juegos que pondrán teros zulianos, que va en pos del ría juvenil y las intrépidas chiqui­
a prueba su temple. honor campeonil. tínas del grupo infantil.

— 27 —
 Los Segundos Juegos Olím picos ¿e l O rien te de V e n e zu e la
ONFORME lo ofrecimos en dor, pues ha m ostrado de m anera
C nuestra anterior inform ación,
damos hoy a nuestros lectores las
evidente el empeño de triunfo y la
caballerosidad verdaderam ente de­
gráficas de los triunfadores en los portiva m anifestada por todos.
Segundos Juegos Olímpicos del
O riente de Venezuela, efectuados Causó muy buena im presión, ver
que todos y cada uno de los p a rti­
cipantes se m ostraban animados de
un entusiasmo inusitado, como si
ya hubiesen participado en otros
torneos, m ostrando el más alto es­
píritu en las diferentes pruebas del
program a.

le , ,l°n>b.
Puesto.
* Puesto.
t afiJ)ito, 3er

S alto larg o con im p u lso p a r a n iñ o s. —

C e n tro : V inicio G arcía, Q u iriq u ire , 1er.
p u esto . Iz q u ie rd a : R. U gas, C arip ito , 29
p u esto . D e re c h a : R. R on d ó n , C arip ito ,
3er. pu esto .
100 m e tro s p lan o s p a r a n iñ o s. — C en tro
M. F e rm ín , C a rip ito , 1er. p u esto . Iz q u ie r­
da: R. Ugas, C a rip ito , 2? p u esto . D erech a
V. G arcía, Q u iriq u ire , 3er. p u esto .

bajo los auspicios de la Standard

Oil Company of Venezuela en su
Stadium Boyacá, en los días del 21
al 24 del mes de marzo. También,
p ara m ejor ilustración, publicamos
el cuadro de los resultados finales
con los tiempos correspondientes a 400 m e tro s p lan o s p a ra
n iños. — C e n tro : R afael
S alto larg o con im pulso. — C e n tro : T eófilo cada evento. Una vez más felicita­ Un éxito completo ha sido esta Q u ijad a, Q u iriq u ire , 1er.
L u n a, C a rip ito , 1er. p u esto . Iz q u ie rd a : p uesto. D erech a: B en ito
mos a todos los que lom aron parte justa que tan gratos recuerdos de­ G arcía, C a rip ito , 29 p u e s­
M endoza, M a tu rín , 29 p u esto . D erech a:
O scar B lan co , C a rip ito , 3er pu esto . en dichos Juegos Olímpicos, com­ ja, y que es precursora de eventos to. Iz q u ie rd a : N arciso L ó ­
1600 m e tro s p lan o s p a ra h o m b res. — C en tro pez, C a rip ito , 3er. p u esto .
placiéndonos mucho el resultado de gran trascendencia en el futuro
H aro ld P ie rc e , C a rip ito , 1er. p u esto . D erech a
obtenido, que ha sido muy halaga- deportista del Oriente de Venezuela. J . Y anes, C arip ito , 29 p u esto . Iz q u ie rd a : T. G ra ­
n ad o , Q u iriq u ire , 3er. p u esto .

100 m etros p lan os J. Jim én ez. M aturín 11 se g u n d o s y 3 /4 .

200 ” ” O. M achín. Q u iriq uire 23 seg u n d o s y 5 /1 0 .
55 seg u n d o s y 1 /2 . 100 m etro s p lan os D. R egard iz. M aturín 15 segu n d os.
400 ” ” T. Luna. C aripito
50 ” ” Carm en Moy. M aturín 8 segun d os,
800 ” ” J. R auseo. M aturín 2 m in u to s 6 -1 /2 sgds.
1.600 ” ” H. P ierce. C aripito 5 m in u to s 42 sg d s. R elevo 3 x 50 E quipo de M a­
tu rín . 25 segun d os.
L an zam ien to de d isco T. Cover. C aripito 22 m etros.
L an zam ien to de J a b a lin aC. N olck . C aripito 46.50 m etros.
L an zam ien to de P eso C. N olck . C aripito 8.40 m etro s.
S alto largo T. Luna. C aripito 5 .4 7 -1 /2 m etros.
NIÑOS (12 a 14 años)
S alto alto C. N olck . C aripito 1.57-1/2 m etros. M. F erm ín . C aripito 13 seg u n d o s.
100 m etro s p lan os
C arrera de relev o 4 x 100 E quipo de Q ui­ R. Q uijada. Q u iriq uire 1 m in u to s 2 1 -1 /2 sgds.
400 ” ”
riq u ire. C aripito 16 seg u n d o s.
100 ” con o b stá cu lo s R. R ondón.
N udo de G uerra E quipo de Ma­ E quipo de Q ui­
R elevo 4 x 100
tu rín . riq u ire.
100 m etro s con o b stá cu lo s O. M achín. Q u iriq uire 15.1 segun d os. V . G arcía. Q u iriq uire 4.54 m etro s.
S a lto largo
C arrera de b ic ic le ta s (15 A. Coa. M aturín 1 m in u to , 56 sgds,
C arrera de b ic ic le ta s
E q u ip o del B a ta lló n A n zo áteg u í de M aturín, K m s.) C. F ern án dez. C aripito
V en ce d o r en el N udo de G u e rra . (1.200 m etr o s)
 E n tra un ebrio a un botiquín y Un patrón, furioso con un em­
dice, dando una moneda de a dos pleado muy haragán, le dice un día:
bolívares: —Creo que tendré que buscar otro
—Déme un buen trago de brandy. em pleado. . . .
—Estos dos bolívares son falsos, —H ará usted muy bien, patrón,
le dice el botiquinero. contestó el haragán: el trabajo es
— ¿Falsos? — ¿Todos dos? mucho para uno solo.

Un campesino, en su prim er via­

La madre.—Niño, hoy has sido je por ferrocarril a Puerto Cabello,
m alo; en cuanto venga tu padre se tomó por equivocación el tren que
lo diré. va para La Guaira. Se encuentra ya
Empezar.—El comienzo de algo. In i­ El niño.—¡Cómo se conoce que en viaje con un antiguo conocido y
ciar una acción o .Un acto sen­ eres m ujer! ¡No te es posible guar­ le pregunta para dónde va.
tim ental o utilitario. El empe­ d ar un secreto! El amigo le contesta:
zar siem pre ofrece dudas, y so­ —Voy para La Guaira.
bre todo es peligroso el antici­ —Mira todo lo que inventan, le
p a r como se saldrá en la aven­ dice el campesino: tú vas para La
tura. Guaira, yo voy para Puerto Cabe­
Emotivo.—Sentir emoción por algo; llo, y viajamos en el mismo t r e n ...
particularm ente p o r una dama
o una flor. El emotivo no es En la feria:
tipo corriente. Mas se da por —He conocido en esta feria todas
ahí el hom bre práctico aquel las clases de caballos, desde el pony
que dice neciam ente que la enano hasta el fino árabe; pero to­
emoción no existe. davía me falta uno por ver.
Enam orado. — Loco, irresponsable, —¿Cuál?
mal esotérico que solamente se
—El caballo de vapor.
cura con el am or mismo. Los
enam orados andan por la calle
como ciegos: atropellando a los —No es nada, dice el médico. Us­
peatones y haciendo suspirar a ted lo que tiene es una gastro-en-
la suegra. teritis.
—“ Yo c re ía q u e m i v e lo c ím e tro m a rc a ­ El campesino se incorpora en el
Encender. — P ren d er algo con fós­ ba 25; p ero a h o ra veo q u e e r a la esfe ra
foro u otra sustancia química del rad io la q u e lo m a rc a b a ” . lecho y exclama:
o eléctrica que tenga esa p ro ­ —Cónfiro! Dice que no tengo na­
piedad. Tam bién se llama “en­ Un andaluz que conducía una ca­ d a ... y tengo un gato enterito!
cendedor” a los “yesqueros” rreta, se encontró con un pastor
casualm ente p o r que nunca en­ que estaba en el camino obstaculi­
cienden. E n sentido figurado: zando el paso, y como éste le d iri­
pasión volcánica difícil de do­ giera varios insultos, algo amosta­
m inar. zado el andaluz le dijo:
Enfriam iento. — C atarro seguro e —¡Oye, tú, monigote, no me si­
inevitable. Tam bién se traduce gas insultando, porque si te doy un
como p erd er el entusiasm o en puntapié te pongo por telaraña en
casos especiales: cuando la no­ el c ie lo !...
via es gastiva el enfriam iento
se presenta casi siempre. —“¡Ah, b ribón”, dice la señora
Engaño. — Artificio usual. Como que lee el periódico del día.
usual ninguno puede ganarle. —“Qué pasa, m ujer”,—le pregun­
El engaño se ha generalizado ta el marido.
demasiado. Hay quien asegura “—Un hom bre que ha vendido su
que el mal es demasiado agudo. esposa por mil libras esterlinas!”
Sin embargo otros afirm an que —“Pero, hija mía, ten en cuenta
el engaño es sinónim o de des­ que mil libras es una cantidad im ­
—“ Se ro m p ió re p e n tin a m e n te , p a d re , p ero
vergüenza. p ortan te!” . .. n in g u n o de ios dos su frim o s n a d a ” . . .
 PAGINA PARA LOS NIÑOS

Solución del pasatiem po “Si los sueños

fueran verdad”.

DOS CORAZONES QUE PALPITAN COMO

SI FUERAN UNO SOLO
La solución en el próxim o núm ero junto
con nuevos pasatiempos.

Silbato de Fácil Construcción

UANDO en la prim avera o a ella como de m artillo, golpeamos ma que m arca la figura 3. Después
C principio de verano estamos
en el bosque, podemos hacer fácil
la corteza en todos los sentidos, sin
dejar de hum edecerla, y cuidando
se vuelve a poner la corteza que h a­
bíamos quitado, y ya está completo
y rápidam ente un silbato. Cuanto de golpear suavemente para no es­ el silbato, como se ve en la figura 4.
se necesita es una navaja y un tropearla. Hecho esto, echaremos Al soplar en él dará una nota agu­
tronquillo de bam bú o lechozo que de ver que la corteza se puede se­ da y clara. Si no la da es que el ori­
cortarem os de un árbol o arbusto. p a ra r entera desde donde hicimos ficio no es bastante grande, o que
El modo de hacerlo es muy senci­ el corte circular, hasta la emboca­ no se ha cortado lo suficiente de la
llo; prim ero cortarem os la m adera dura del silbato. La superficie del parte superior de la embocadura. Se
y escogere­ rem edian es­
mos un trozo tos defectos,
hermoso, de si existen, y
suave corteza I. Fase primera. s e torna a
y lo más r e ­ probar. Si se
dondo posi­ logran buenos
ble, de unos resultados, y
diez o quin­ se quiere con­
ce centím e­ v ertir el sil­
tros de largo. bato en flau­
Se corta rec­ ta que dé va­
tam ente por 4 . E l silbato acabado. rias notas de
un extremo, y la escala, se­
luego por el mismo, se corta al ses­ tronquillo, una vez removida la cor­ rá preciso tom ar un tronco más la r­
go, como se ve en la Fig. I. Esto for­ teza, se presenta suave y con una go, de unos 25 o 30 centím etros y
ma la embocadura del silbato, en substancia transparente y viscosa antes d e .so lta r la corteza, haremos
cuya parte superior se practica un adherida a ella. Esa substancia es varios agujeros que lleguen al tro n ­
orificio, como se ve en la Fig. 2. Lue­ la savia del árbol, y si no fuera por co. Después de rem over la corteza
go se m arca un anillo con el corte esta savia que asciende por debajo se amplían todos los agujeros del
de la navaja solamente en la corteza, de la corteza, el árbol m oriría. Lim­ tronco, correspondientes a los agu­
todo alrededor y se moja la corteza piamos la savia y agrandamos el jeros pequeños de la corteza. Esta
con un poco de agua. Después, ce­ orificio que habíamos hecho por flauta se debe tra ta r con cuidado,
rrando la navaja y valiéndonos de arriba, de modo que quede en la fo r­ pues se rompe fácilmente.

— 31 —
 CRUCIGRAMAS

HORIZONTALES PROBLEMA N9 12.

1 — Acción y efecto de hacer resbaladi­

za una cosa.
10 — Carbonato de sosa natural.
l l w— Cosa hecha o producida p o r al­
guien.
12 — Cimbalo turco.
13 — Segundo elemento del nom bre de un
te rrito rio federal de Méjico.
14 — Iniciales de una famosa agencia de
noticias.
16 — Nombre de una letra.
18 — Segunda persona del presente de in ­
dicativo de un verbo muy usual.
22 — Objeto de form a cilindrica.
23 — Iniciales de una célebre monja y
poetisa aragonesa del siglo XVII.
25 — Pronom bre neutro inglés.
26 — T ercera persona del im perativo de
un verbo relacionado con valores.
28 — Profeta entre los moriscos.
30 — Fam osa m arca de productos deriva­
dos del petróleo.
31 — Ligero, pronto.

VERTICALES
SOLUCION DEL PROBLEMA N? 11. 1 — Agente físico.
2 — Cantón de Suiza.
3 — Cosa en extrem o perjudicial para la
c 0 M P R 0 M E T 1 D A vida.
4 — Voz con que, repetida, se arrulla a
los nenes.
0 R A R T U1 E T 1 L 5 — Tom ar ciertas substancias una fo r­
ma poliédrica más o menos regular.
N A S A R 11 M 1 E L 6 — Preposición inseparable que deno­
ta unión y compañía.
F L 1 T 0 R1 A L Z A 7 — Provincialism o asturiano que signi­
fica desperdicio.
8 —- Algo que todo el mundo ambiciona.
9 — Vehículo acuático.
R A N Alr N e ( i s L A 15 — Substancia líquida m ineral.
16 — Cosa indispensable para los auto­
R 0 s | o su S 1 A M móviles y aeroplanos.
17 — Substancia pingüe que puede ser de
origen animal, vegetal o m ineral.
19 — Voz de arrullo.
i'.
C A M A C A L E R E 20 — Artículo y pronom bre.
21 — Múrete o vallado de piedra u otra

1 R A N A L A T U N m ateria.
24 — Cuerpo aeriform e.
25 — Villa de la provincia española de
A N 1 S N 1 M 0 N T Alicante.
27 — A breviatura inglesa de vapor.
R A Z 0 N A M 1 E N T 0 29 — Fórm ula química de la plata.

— 32 —
 En C a rip ito , la v ie ja tra d ic ió n colonial
h a b la en la silu e ta de ese
olvidado farol.

(F o to c o rte sía d e L oren F . K ah lc, d e C a rip ito ).

3?