El Sapo y La Flor
El Sapo y La Flor
El Sapo y La Flor
En un jardin vivia una bella flor ,un dia vino al jardin un sapo que cuando paso y la vio quedo admirado de su belleza y dijo eres la mas bella de todas las flores ella respondio si lo soy pero tu eres un sapo muy feo vete del jardin y el sapo muy triste se fue .Pasaron los dias y se largo una tormenta muy fuerte,la flor perdio su belleza a causa de la lluvia y los insectos que comieron sus petalos, pasado un tiempo el sapo volvio y al ver a la flor tan fea le dijo todos somos importantes y necesitamos del otro no importa la apariencia si tu me permites quedarme en el jardin los insectos nunca mas te molestaran y seras siempre bella,la flor muy arrepentida le dijo puedes quedarte a cuidar el jardin ya no me burlare de ti.Y desde ese dia el sapo y la flor son los mejores amigos del jardin.
Pedro y Luzia La noche estiraba su manto de sombras, a travs de la luna que luchaba por reemplazar las penumbras por difanos rayos. Cada vez ms dbiles y fros. Todo se iba tornando de un color azulado cobalto, glido. La escarcha se oa crujir bajo el peso mnimo de un gnomo de barbas tan blancas como rojo su bonete, que caminaba ansioso por llegar al fin, a su morada tibia. An cuando los gnomos, no sienten fro, ni temor, ni se enferman, ni tosen, ni cuando pisan el suelo congelado se le enfran los pies. Ellos son duendes y a los duendes les est permitido vagar por el mundo, llevando alegra, cuentos, fantasas a todos los chicos. ste se llamaba Pedro, igual que las piedras, que pisaba. En el ro siempre hay piedras y al esquivarlas o saltar sobre ellas... Pedro se diverta tanto! Que los dems duendes amigos le decan, que el era una piedra, tambin. Miedo tampoco tena, pero s, estaba cansado. Haba recorrido el bosque en busca de frutos rojos y sabrosos que quera compartir con los suyos y la bolsa echada al hombro pesaba mucho. De pronto la noche le gan a la luna y en extrao sortilegio desat una tormenta, rara, para esa poca del ao. Los juncos que crecan al borde del ro, se hamacaban hasta tocar las aguas, cubiertas de hilachas heladas, que el viento haca volar como un viejo sombrero de alas muy anchas que se metan en los ojos de Pedro. ste apur el paso y logr cruzar el ro que roncaba caudaloso, debajo de la escarcha. Comenz a subir la cuesta con fatiga. Escuchaba a lo lejos el aullar de los lobos, junto al rugir de la borrasca. Igual sigui su camino. No desconoca los peligros, tampoco los ignoraba, pero era valiente nuestro pequeo hroe. Cuando al pasar por unas matas vio a una lucirnaga que luchaba por sobrevivir al vendaval. Baj la bolsa y la invit subir a ella. Si quieres sube y entra en mi bolsa, te llevar a un lugar seguro... encendi, ella su pequea lucecita y sinti que si no aceptaba la amabilidad de Pedro, morira all noms, de un salto subi a la talega de Pedro y ste volvi al camino. Mientras ella lo iluminaba, l cant una hermosa cancin, para que a Luzia, se le pasara el susto. Esto pas una noche, hace tiempo, ya. As naci una hermosa amistad, entre Pedro, el elfo, generoso y trabajador y Luzia, la lucirnaga agradecida, que prest su luz a cambio de abrigo en una noche de tormenta...
El pas ms feliz del mundo Dos nios y nias de nueve aos soaban con buscar un pas denominado El pais mas feliz del mundo. En el camino se preguntaban cmo sera? y cundo llegaran? Tarareaban canciones con alegra pues su sueo perseguan. Salir en la bsqueda del pas mas feliz del mundo del que haban escuchado pero que muy pocos haban visitado. En su camino vieron y escucharon pjaros de un azul brillante e intenso, que cantaban melodas que invitaban a sonrer y sentir un gran gozo. Trataban de imitar el sonido, pero en sus intentos no lograban aquel gozo. Tambin vieron rboles frutales que por lo brillante de sus frutos pareca que con su brillo invitaban a tomarlas y disfrutar de su oloroso y rico sabor. Todo a su alrededor se vea grande y hermoso y pareca un paisaje que invitaba a un gozo. Pasado unos tres das y disfrutando del trayecto comenzaron a pensar que ya estaban cerca de llegar a su final. Pero no saban que les esperaban grandes sorpresas en ese da en particular. Apareci este duende con mirada radiante para decirles que los quera guiar hasta el final para que no se perdieran la belleza de ese lugar del que haban escuchado y pocos visitados. Los nios entusiasmado se miraron y rieron por aquel momento especial y le creyeron a este personaje casi real. Continuaron su camino bajo la mirada especial de este personaje genial. Pasados unos cuantos das su entusiasmo y alegra no disminua y sin querer parecer ansiosos por llegar le preguntaron al duende si faltaba mucho por ver el pas que soaban encontrar. El duende los miro con este rostro de alegra y festividad y con mucha sabidura contesto: --El pas mas feliz del mundo esta tan cerca de ustedes como han visto ya. Es aquel que genera en las personas ese amor a mirar y disfrutar de la belleza de sus rboles y el cantar de los pjaros que no puedes imitar. Los nios se miraron y comenzaron a rer por que en El pas mas feliz del mundo hace rato que se encontraban ya.
El sol y la luna se van a casar Pap ratn lleg contando, que el sol y la luna se van a casar Mam ratona dijo, que ese matrimonio no durara, porque separado el sol de la luna siempre estara Abuela ratona dijo, que tendran como hijas las estrellas e hijos los cometas y como padrinos ella quera, fueran los planetas el ratoncito mayor dijo, que todos estaban equivocados, porque el sol se casara con una sola y la luna con un luno, el sol tendra hijos, pero con tantos, con noche no quedara lugar alguno grillos, sapos, renacuajos, ranas y bhos, no tendran mas noches para cantar y por eso el ratoncito mediano se puso a llorar pap ratn llam a la cordura, pues no haba pareja para ellos, porque no se conoca ningn otro sol, ni otra luna, quizs en otra galaxia, pero mas de cien mil aos esa bsqueda dura y para terminar esta querella, el ratoncito mas pequeito suea, con que la luna se enamore de una estrella y el sol de una flor bien bella
La nia y las rosas Una linda nia de oscuro cabello y ojos grandes,se pasaba la vida sembrando rosas,las rosas ms hermosas jams vistas.Ella las vendia para llevarle de comer a su madre enferma y sus hermanitos.cierto dia una anciana se le acerc a la nia cuando recoga las flores y le dijo: -hermosa nia, tienes algo de comer? Es que hace varios dias que no pruebo alimento. La nia, que tena un corazn hermoso, le dijo que no tena nada de comer, pero que la acompaara a vender las rosas. Cuando las rosas estuvieron vendidas compr tres panes, uno para ella y su familia y los otros dos para la anciana, ya que ella pensaba que como era joven podra vender ms rosas al otro da, mientras que la anciana no poda trabajar. La anciana agradecida le di una bolsita con unas semillas y le dijo que las sembrara esa misma noche. la nia sembr las semillas, y al otro da cuando amaneci, sali como de costumbre a recoger las rosas y se llev una gran sorpresa. de las semillas que le di la anciana brotaron unas rosas hermosas , ms hermosas que las que recoga todos los das,y en abundancia. La nia empez a vender cada da ms y ms rosas, y sac a su familia de la pobreza,y no se olvid de aquella anciana que aunque nunca la volvi a ver le agradece todos los das por la bolsita de semillas.
Nilu y gato Nilu deca a todo el que quera orla que su gatito Gato era sorprendentemente listo. Present a Gato al seor perro, al gallo Ki y al pjaro Pi. Un da la madre de Nilu escucho piar en la habitacin de la nia. -No tendrs un pjaro Nilu? - No mama, es Gato.- el gatito hizo pio pio - Dios mo!.- exclamo la madre de la nia.- este gato esta loco - No mama es que .........- la madre no le dejo acabar la frase. Otro da el padre de Nilu escucho ladrar. - Nilu no tendrs un perro en la habitacin - No pap, es Gato.- el gatito hizo guau guau - Santo cielos este gatito esta enfermo! - No papa es que es .....- Pero tampoco le dejo acabar la frase. Una maana muy temprano los padres de Nilu se despertaron asustados al or un gallo cantar. Corrieron a la habitacin de Nilu, sobre el armario de la nia estaba Gato dando los buenos das con su kiriquiki. - Esto no puede continuar as, tendremos que llevarlo al veterinario, este gato esta muy loco. Y as fue, como padres, nia y el gato fueron a visitar al veterinario, - A ver Gato, qu es lo que dicen que puedes hacer guau?.- Pregunto el veterinario.-Y el gatito hizo guaua - Y piar ,sabes piar?.- Y el gato pi - Nilu, por qu crees que tu gatito es tan raro, qu le puede estar pasando? - Nada, dijo la nia - Nada?.-Preguntaron padres y veterinario - Mi gatito no es raro, es muy listo por que sabe idiomas. - Pues s que es listo.- dijo el veterinario - Miau miau.- dijo Nilu.- eso es lo que siempre digo yo, que mi gatito es muy listo.
El ladrn de plumas Cuando las aves estrenaron su plumaje, el pavo real no era tan bonito como ahora ms bien era un ave sin chiste, de plumas descoloridas. Pero un da, cuando se preparaba una gran fiesta para todas las aves, el pavo real se encontr a un pjaro de veras bonito,de largas plumas azules. -A dnde vas?-le pregunto el pavo real. -A la fiesta de las aves, tu no vas a ir? -No-contest el pavo real abriendo sus alas-, es que no me gusta. -Mira-dijo el otro pjaro-,prstame tu vestido y yo te doy el mo para que vayas a la fiesta. Te gustan mis plumas? -S, las tuyas son bonitas. -Entonces,cambiamos?, ya despus me regresas mis plumasasegur el pjaro. -bueno- dijo el pavo real. Los dos cambiaron sus vestidos y se fueron a la fiesta, el pavo se sinti como nunca, orgulloso de devolverlo a su dueo. As que sali corriendo de la fiesta y ni adis le dijo a su amigo. El pjaro a buscar al pavo por todos lados, pero nunca lo encontr. Desde entonces, el pavo real luce vestido ajeno. Lo nico feo que ahora tiene son sus patas y, cuando alguien las mira, se esponja como un abanico para que no se fijen en ellas. Al otro pjaro, el que se qued con las ropas feas del pavo real, hoy le llamamos tapacaminos. Y ser verdad o ser mentira, pero se cuenta que el tapacaminos aparece en todas las veredas, para preguntar quin ha visto al pavo que se llev su vestido.
Mi miedo al dentista Todo empez as Tena un amigo dentista que me insisti tanto, tanto, tanto que fui a su consultorio y all me dice - No te voy a poner anestesia, no tengas miedo !!!. Y en verdad no me minti Pero pas el tiempo y mi amigo se fue a vivir a otro lado Entonces me dej y de ah tuve que elegir otro dentista, y otro consultorio. Cada vez que voy, preferira no hacerlo, siempre le tuve miedo, pero mi mam dice que hay que ir, es por tu salud!, repite cada vez Hoy a la tarde tengo que ir. Espero que est todo bien, es solo por control, pero tengo que ir no me queda otra !!!. Estoy con un poco de miedo, pero ella me est esperando. De todos modos, lo bueno de ir al dentista es que no tens muelas cariadas y tus dientes estn limpios y sanos. Y adems pods comerte todos los caramelos y chocolates que querssin culpa.
El sueo de la nona. Haba una vez una nena, ella tena una abuela a la que adoraba porque desde chiquita se la pasaba todo el da en la casa de ella. Todas las noches pensaba: -Qu hara sin mi abuela? -Ella me dio todo siempre. -Tengo que premiarla con algo. Una tarde le pregunto: -Abu, que es lo que mas te gustara? Y ella respondi: -volver a las tierras donde nac. - y en donde naciste? -Yo nac en Italia, en Calabria. Y as conversaron hasta que llego la noche y la nena volvi a su casa. Cuando se acostaba, pens como podra conseguir la plata para pagar un pasaje de ida y vuelta, entonces para su cumpleaos pidi dinero y junto $100, pero igual no alcanzaba, entonces para el da del nio pidi otro tanto de dinero y junto $100 ms. Era imposible juntar tanta plata; entonces muy triste pens que no podra cumplir el sueo de su abuela. Un da su papa, que le gustaba jugar a la quiniela, le pregunt seis nmeros, y ella le respondi: -Jug al 22, al 43, al 65, al 40, al 86 y al 67. Todos eran nmeros normales, menos el ultimo que era la edad de su abuela. Rpidamente su padre jugo los nmeros y a la noche cuando vieron si ganaron por la tele se dieron cuenta que acertaron todos los nmeros, y entonces su padre le dijo gracias y le pregunto que le gustara comprarse, y ella respondi: -Quiero llevar a la abuela a Italia. Su padre sorprendido dijo: -Si eso es lo que deses, as se har. Una maana fue a la casa de su abuela y le dijo: -Mi papa sac los pasajes para Italia, en tres semanas viajamos. Ella, sorprendida, hablo con su hijo y este le cont todo lo de la quiniela y la decisin de la nena y as es como cumplieron el sueo de la nona.