Ritual de Institución de Acólitos

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Ritual de Institución de Acólitos.

Celebrante: El acolito es uno de los servidores más queridos y entrañables de la Iglesia.


Da importancia a las celebraciones litúrgicas y colabora como servidor del Altar.

Quien acompañó en la formación de estos Adolecentes, ahora los llamará para ser
instituidos como monaguillos. Al ser nombrados responderán AQUÍ ESTOY y se
acercarán al Altar.

Formador de Monaguillos: Acérquense los que van a ser instituidos como Acólitos:

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Compromiso
El Sacerdote, dirigiéndose a los Acólitos dice:
Celebrante: En nombre de la Iglesia voy a hacerles algunas preguntas.
C: ¿Están dispuestos a servir a Jesús en las celebraciones litúrgicas con dedicación y
cariño?
-Respuesta: Sí, estamos dispuestos.
C: ¿Están dispuestos a manifestar la cercanía a Jesús rezando cada día y haciendo
buenas obras en favor de los demás?
-Respuesta: Sí, estamos dispuestos.
C: ¿Se comprometen ser obedientes a los ministros de la Iglesia y a respetar a sus
compañeros dando buen ejemplo a la comunidad parroquial?
-Respuesta: Sí, estamos dispuestos.
C: Prometen ser fieles a la oración, visitar asiduamente el Santísimo y Confesarse
frecuentemente.
-Respuesta: Sí, estamos dispuestos.

El Sacerdote, dirigiéndose a los Padres y Padrinos de los Niños dice:


C: Apreciados papás y padrinos ¿Ustedes están de acuerdo con la decisión de sus hijos
y se comprometen a apoyarlos?
-Respuesta: Sí, estamos dispuestos.
Celebrante: Roguemos a Dios Padre que bendiga a estos hijos suyos que se han
comprometido a ser acólitos para que realicen con empeño el servicio del altar.
Por Jesucristo Nuestro Señor.
Amen.

Bendición de la Albas.
Guía: El alba es signo de servicio y amor. Por eso serán bendecidas por nuestro Párroco
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(Guía: Se acercan los padrinos con las albas)
Celebrante: Señor, por cuya Palabra son santificadas todas las cosas bendice + estas
albas que estos hijos tuyos llevarán como signo del compromiso que acaban de
asumir. Por Jesucristo Nuestro Señor
Amen.
(Se revisten los acólitos)

BENDICIÓN E IMPOSICIÓN DEL CRUCIFIJO


El coordinador de los Monaguillos presenta los crucifijos al Sacerdote y éste los bendice
diciendo:
C: Señor, Padre Santo, que hiciste de la cruz de tu Hijo fuente de toda bendición y
origen de toda gracia, dígnate bendecir + estas cruces y haz que quienes las lleven a
la vista de los hombres se esfuercen por irse transformando a imagen de tu Hijo, les
concedas tu gracia en este mundo y la gloria eterna en la vida futura. Por el mismo
Cristo nuestro Señor.
Todos dicen: Amén.

Guía: Antes de recibir la cruz, deben manifestar su deseo de aceptar libremente esta
nueva condición haciendo un compromiso ante Cristo Nuestro Señor y
ante la comunidad cristiana aquí presente:
Sacerdote: ¿Quieren llevar el signo de la cruz, aceptando que para ser
verdadero discípulo de Jesús hay que cargar con la cruz de cada día?
Monaguillo: Sí, quiero
Sacerdote: ¿Prometen amar cada día más a Jesús, puesto que Él
nos ama verdaderamente desde su cruz?
Monaguillo: Sí Prometo

ENTREGA DE LA CRUZ
Sacerdote le colocará el crucifijo diciendo: Recibe este signo del amor de Cristo y de
nuestra fe; predica a Cristo, y éste crucificado, fuerza y sabiduría de Dios.
Monaguillo: Amén
(Los acólitos hacen su oración de compromiso)
Yo,... (nombre), prometo servir al Señor en el altar, quien se da por amor a todos los
hombres. Quiero también servir a la Iglesia, ayudando en las celebraciones litúrgicas
con respeto por amor a Jesucristo presente en la Eucaristía. Quiero dar testimonio de
buen cristiano, llevando a los hermanos la alegría de seguir a Jesús y ayudándolos en
lo que necesiten. Te pido, Señor, que estés siempre conmigo guiando mi vida con tu
amor.
Amén.
Una vez que se les ha impuesto la Cruz continúa la misa como de costumbre.

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