TICA Y MEDIO AMBIENTE: EL DESAFO DE FINES DEL SIGLO XX Y PRINCIPIOS DEL XXI Armando M.

PEREZ DE NUCCI *

Desarrollo: Desde hace unos aos, afortunadamente, se ha tomado conciencia de lo que se ha dado en llamar "patriotismo planetario", la toma de conciencia de que nuestra tierra es una gran nave que nos pertenece a todos y que muchas veces no sabemos dnde encaminar. (1) Ecologa, un trmino muy escuchado estos tiempos proviene del griego "oiks", que significa "casa", y de all que el tema nos involucre a todos profundamente. No significa, como alguna vez se pretendi, de un "regreso a la naturaleza", sino la razn para que los seres humanos tomemos conciencia de que podemos modificar la realidad de la naturaleza sin destruirla, transformar la "casa" donde todos vivimos de tal forma que los conceptos de progreso y bienestar se unan armoniosamente con el de conservacin y cuidado del hbitat tierra. Junto a este concepto globalizador, debe existir el criterio de que no habr salud individual sin salud ambiental y que de poco servir lo que hagamos por el bienestar de nuestros pueblos si esta accin no es acompaada del cuidado y conservacin del medio ambiente, de la sociedad en general y de la democracia en particular. Justamente porque es solamente en justicia y libertad que el hombre alianza en profundidad sus logros. A su vez, el trmino "biotica" aparece hace ms o menos diez aos, para establecer el nexo entre tica y ciencia en la era tecnolgica. El vocablo en s mismo es una novedad: La unin de BIOS = VIDA ETHIKE = TICA

Lo que a su vez determina la unin de: 1- CIENCIA Y CONCIENCIA 2- SER Y DEBER SER

3- HECHOS Y VALORES

4- VIDA Y NORMA

Para usar algunos trminos cotidianos de nuestra vida en el planeta. Biotica, por definicin era hacia 1971 el "estudio sistemtico de la conducta humana en el rea de las ciencias de la vida y la atencin de la salud, en tanto que dicha conducta es examinada a la luz de los principios y valores morales". En la ltima edicin de la Enciclopedia de Biotica de Warren Reich, uno de los pioneros en este campo, se define a esta disciplina como "estudio sistemtico de las dimensiones morales (incluyendo la visin moral, las decisiones, las conductas y las polticas) de las ciencias de la vida y de la atencin de la salud, empleando una variedad de metodologas ticas en un contexto interdisciplinar"(2). Lo interesante aqu es la aparicin de "lo moral" en el panorama como sistema de tica cientfica y la toma de conciencia de que la catstrofe ecolgica ha tomado prioridad sobre la guerra nuclear como amenaza planetaria, sobre todo considerado en el contexto de una globalizacin de la economa y una cada de las hasta ahora denominadas "ideologas". El problema del medio ambiente significa un desafo de supervivencia para la humanidad que est pisando los umbrales del siglo XXI. El hombre se est enfrentando al holocausto medioambiental y obligado a un 'mea culpa' frente a la devastacin de la tierra, el agotamiento de los recursos naturales y el deterioro de la biosfera. Conciencia ecolgica plantea, pues, una nueva reformacin de la justificacin del hombre sobre la tierra y su relacin ntima con ella. Felix Guaira (2) opina que se debe crear en este campo una ecosofa, una filosofa del medio ambiente, lo que nosotros llamamos tica del medio ambiente, muy cercana conceptualmente a nuestro programa nacional de biotica. Este autor opina, justificadamente que no puede existir una dimensin material en la solucin de los problemas del medio ambiente sin una dimensin moral que le sirva de sustento que, a nuestro criterio, no solamente estn en peligro las especies animales y vegetales y los paisajes naturales, sino tambin

las especies morales, tales como los valores de solidaridad, de internacionalismo - el "patriotismo planetario" al que nos referamos mas arriba -, los culturales y existenciales tales como la tendencia a la renovacin del gusto por la vida, la iniciativa y la creatividad. Todo ello sin olvidar el llamado por los griegos "amor de efusin", que no puede desarrollarse cuando lo que est amenazado es la propia existencia, frente a un ambiente deteriorado y sin esperanzas. Proponemos entonces el reemplazo del concepto "hombre contra la naturaleza", tan prometeico en su concepto de dominio de sta, por el de "hombre 'con' la naturaleza " u " hombre 'en' la naturaleza " , mucho ms acorde con los tiempos que estamos viviendo. Debemos encontrar un nuevo sistema filosfico y tico en el cual apoyarnos, base de proyectos educacionales fundamentales en todos los niveles de la enseanza y cuya filosofa en el mbito universitario hemos venido desarrollando dentro del programa de Antropologa Mdica de nuestro Departamento de Humanidades Mdicas en Tucumn, mientras me desempeaba como Profesor de la Facultad de Medicina de esa provincia. As surgi un axiograma referido a la biotica y el medio ambiente que adjuntamos a nuestras guas de trabajos prcticos y que sirvieron al planteo de problemas concretos a los estudiantes de medicina. Lamentablemente, al retirarnos, el proyecto qued trunco y hubo una sensible disminucin de las horas-ctedra dedicadas a temas especficos de Humanidades Mdicas, beneficindose con este cambio las materias biologistas. Pero esta ha sido una constante de nuestras escuelas de medicina, donde con mucha frecuencia se ha dado el doble discurso de que por un lado estimula el desarrollo y la investigacin en Humanidades Mdicas, y por el otro disminuye las horas dictadas o los recursos, so pretexto de "racionalizar y mejorar el curriculum mdico". Mas all de estas disquisiciones acadmicas, tres son las posturas que desarrollamos para la comprensin del problema del medio ambiente a nivel educacional y el anlisis tico del mismo. La primera de ellas: la naturaleza debe ser conquistada. Este razonamiento pertenece a la primera etapa, la ms primitiva del hombre, inserto en el esquema prometeico ya mencionado. Para esta teora, el hombre se halla en la tierra para dominarla, para crear cultura y, a travs de ella, manipular a la naturaleza para sus propios propsitos. El fuego de Prometeo es la adquisicin de la cultura y su

castigo por la violacin a las reglas de los dioses ya no es la exvisceracin corporal , sino que esta ex-visceracin en la cultura actual es la ambiental y la ecolgica. Cultura es conocimiento, y ste es poder para controlar la naturaleza. Quien nombra, conoce y quien conoce, domina; esto ya est establecido en la Biblia como un precepto de Dios. Podemos colegir entonces que el descubrimiento y adquisicin de conocimientos fueron virtudes preciosas para el hombre primitivo. Veamos sino el caso de la agri-cultura, la cultura de la tierra en la cual el hombre empieza a dominar la naturaleza y dirigirla en el sentido de sus apetencias. La aplicacin de este concepto tico trajo como consecuencia una tica de la manipulacin y el intento de control de la tierra por el hombre. Una segunda postura anunci "el hombre en la naturaleza o el hombre como parte de la naturaleza". Aqu se inscribieron los ambientalistas ms radicales y reactivos en una etapa de la ecologa no totalmente superada. Esta concepcin afirma : "el hombre no es nico, no pudiendo reclamar para s la posesin de todo el mundo bitico y abitico". Aqu existen dos puntos de vista, uno religioso y uno secular. El primero opina que la naturaleza es contemplable, como una parte de la creacin de Dios, que tiene que ser protegida y cuidada por buenos administradores; todos los integrantes de la naturaleza pasan a poseer, pues, autonoma espiritual. En una primera etapa de nuestra formacin ecolgica adherimos a este principio, creyendo en la actualidad que sigue siendo vlido para un mejor desarrollo de las formulacin de problemas en ecologa, y as lo hemos venido propiciando a travs de trabajos y desarrollo docente. La forma secular propona a la naturaleza y al hombre como una sola cosa, el ser humano mereca consideracin y respeto extremos a la primera. Esta concepcin fue origen de terrorismo de estado y de organizaciones ecologistas que esperan el juicio de la historia para evaluar su accionar, y que no nos corresponde juzgar ni tratar aqu. Queda una tercera postura, a nuestro entender ms equilibrada que las anteriores, que es el punto de vista teleolgico - del griego teleos, forma final - que afirma que "hay un propsito y una lgica que se debe encontrar en la naturaleza", y el estudio de esta teora puede aportar importantes puntos de vista aplicables a la conducta humana. La diferencia con los puntos de vista anteriores es que, mientras todava usamos la naturaleza y la cambiamos, la finalidad no

debe ser subyugarla ni vivir de ella. El sistema tico derivado de esta teora establece que los seres humanos deben crear sus propias normas ticas, pero la naturaleza debe proporcionarles las guas para desarrollar una buena vida moral con y sin ella. De ello se trata el denominado "desarrollo sostenible", que no se trata de un desarrollo que no toque o no transforme la naturaleza, sino un tipo de desarrollo que no la degrade o no la erosione en sus propias bases ambientales de produccin y habitabilidad. Es ste un concepto a la vez filosfico y natural, un camino tico hacia la calidad de vida, en el que la manipulacin de la estructura y funcin de los ecosistemas no entra en colisin con ellos, minimizando el conflicto de intereses y maximizando los beneficios a obtener. Es decir un adecuado balance de la ecuacin coste-beneficio, tan cara a la reflexin tica en los problemas del ambiente y el hombre. Y, como hemos manifestado ms arriba, es absolutamente compatible con una visin religiosa cristiana - que de eso se trata - del problema ecolgico. La crisis ecolgica muestra cmo la naturaleza ha pasado de ser "medio" de produccin a ser "objeto" universal del conocimiento y fin fundamental del ser humano. La degradacin ambiental no es slo un problema que exige soluciones cientfico tcnicas, tambin requiere del hombre una toma de conciencia y un cambio de actitud. La pregunta de la tica es entonces cmo debemos vivir?, al menos para sobre-vivir, pero conciliando el imperativo de supervivencia con el de dignidad humana y con el de libertad. Adaptando un principio tico de Kant podramos decir : "Acta de tal manera que las consecuencias de tu accin sean compatibles con la permanencia de una vida genuina en la tierra". Debemos llegar, en definitiva a una tica de la naturaleza, que promocione una relacin armnica de equilibrio entre las necesidades, los deseos y las actividades humanas y nuestro inters deber estar centrado, al menos, en tres objetivos inmediatos: *Composicin gentica ptima de la poblacin. *Desarrollo ptimo individual. *Ambiente ptimo.

Al primero estamos arribando en muchos aspectos, ya que la eufenesia y la eugenesia son una realidad de la medicina actual, y son necesarias en tanto y cuanto no intenten transformar al hombre en objeto de la ciencia ni lo manipulen en el sentido contrario al orden natural. Al ptimo desarrollo individual se debe arribar a travs de la salud ideal, a su vez lograda por la mejora de factores tales como la nutricin, la prevencin, la reduccin de accidentes y la creacin de un entorno de paz , amor y justicia. Con respecto al ambiente ptimo, se lograr por la concientizacin de la poblacin, al menos en cinco niveles bsicos: *Conocimiento del problema del medio ambiente. *Toma de conciencia de su importancia para la sobrevida del planeta. *Educacin suficiente y real sobre el problema. *Planificacin de soluciones a corto, mediano y largo plazo. *Decisin poltica de cumplir con los objetivos propuestos. Finalizo estas reflexiones insistiendo en el punto de que lo que hoy vemos y omos quede en lo ms ntimo de nuestro ser y que la inclusin del ecosistema en nuestro pensamiento se apoye en la preocupacin por la "casa", la nave tierra. Que se haga carne en nosotros una bella frase del Deuteronomio que lemos en Washington: "Para que no olvides cosas que tus ojos vieron y para que estas cosas no partan de tu corazn todos los das de tu vida, habrs de hacerlas saber a tus hijos y a los hijos de tus hijos". --------------------------Axiograma- Algunos Principios Vlidos En Eco - Sofa (3) 1. - Toda tica se apoya en una premisa, el individuo es miembro de una comunidad de partes interdependientes. 2. - Una tica de la naturaleza ampla los lmites de la comunidad humana, para incluir el suelo, el agua, las plantas y los animales. 3. - Una tica ecolgica requiere una meditacin crtica acerca de las consecuencias de nuestras acciones y nuestros estilos de vida.

4. - Los seres humanos necesitan de la naturaleza para realizar todo el potencial de su humanidad. Recordemos que no somos dueos de la tierra sino meramente sus administradores y que debemos optimizar nuestra funcin da a da. 5. - La tica humana no debe separarse de los hechos biolgicos. 6. - Toda especie tiene derecho a la supervivencia continuada en el ambiente en que vive. Para el desarrollo en pleno de un organismo es esencial que ste se encuentre bien en el ambiente donde est evolucionando. 7. - La ciencia y la tecnologa deben utilizarse para resolver los problemas ambientales, dentro del marco que establezca la tica y sin vulnerar nunca los derechos de los individuos a su autonoma y realizacin fsica, cultural y espiritual. 8. - Nuestro bienestar actual no debe tener preferencia sobre el de las generaciones futuras. Al contrario, nuestro trabajo es para los que habrn de venir despus de nosotros. *Doctor en Medicina. Miembro de las Academias Nacionales de Medicina y de la Historia. Miembro de la Comisin Nacional de Biotica.