Pikaza - Dios Judío, Dios Cristiano Rev
Pikaza - Dios Judío, Dios Cristiano Rev
Pikaza - Dios Judío, Dios Cristiano Rev
Dios judío,
Dios cristiano
El Dios de la Biblia
á'"ot) ,¿
Biblioteca
3rr..o§
Raíces comunes:
El Dios israelita del evangelio
Hamel, Le Magnificat et le renseraement des Jud, Est y 2Mac, en temas 14-15) y los
situations, Greg 60 (1979) 55-8a; D. Jones, Tbe introduce dentro del puente salvífico de
Bachground and Cbaracter of the Luban Lc 1,-2. En ese puente o paso del AT al
Psalmg JTS 19 (1968) 20-28; R. Laurentin, Luc,
I-II, EB, Paris 1957, 82- 861' S. Muñoz I., Zos
NT se sitúan Zacarías, sacerdote poco
cánticos d.el evangelio de la infancia según san
fiel (1,-25), y María,la madre mesiánica
Lucas, CSIC, Madrid 1983,61.-162; E. Peretro, que escucha a Dios y le responde con su
Magnificat, en Nuevo Dic. de Mariología, Pau- fiat (cf.1,26-29).
linas, Madrid 1.988, 1224-1236; G. Ptú2, El
Magnificat. Dios está con los que pierden, SalTe
Llevando en sus entrañas al hijo
mesiánico, Maríavisita a Isabel, esposa de
68 (1980) 369-380; D. M. Scholer, The Magnifi-
cat (Lk 1,46-5t). Reflections on tbis Hermeneu-
Zacarías y madre profética del Bautista.
tical History, en Conflict and Context., Grand Isabel bendice a María,llamándola bien-
Rapids MI 1984, 210-219; L. Schoroff, Das aventurada porque ha creído (cf. t,39-
Magnficat and d.ie álteste Tradition über Jesus 45). María responde engra.ndeciendo a
oon N., Ev. Th 38 (1978) 298-323; §L Vogels, Le Dios con un canto de gozo que asume y
Magnificat, Marie et IsraéL,EgTh 6 (1975) 279- cumple los caminos de la historia israeli-
296. ta. Es una oración única que sólo pudo
decirse unavezy para siempre, en el cen-
El autor de Lc-Hech ha recreado una
tro de la historia; pero, al mismo tiempo,
oración de la liturgia judeocristiana o ha
es oración Permanente y uniaersal que
compuesto él mismo una plegaria de nos abre a la experiencia de transforma-
gozo y alabanza,poniéndola en labios de ción mesiánica del mundo. Sin ninguna
María en el momento clave de su encuen- vacilación, en nombre propio, como
tro con Isabel, madre del Bautista. Rea- portadora de la voz israelita y represen-
sume motivos ya estudiados en los him- tante de la humanidad,María ofrece en
nos de Ana (1 Sam 2; tema2.3) y de Moi- su Magnificat el más hermoso canto al
sés (Ex 15; tema 2.1; cf. textos de Dan, Dios cristiano:
Lc 1,46 A Engrandece mi alma al Señor,
47 se alegra mi espíritu en Dios, mi Salvador;
48 porque ha mirado la pequeñez de su sierva,
por eso me llamarán bienaventurada todas las generaciones;
49 porque ha hecho en mí cosas grandes el Poderoso
y santo es su Nombre
50 y su misericordia (se extiende) de generación en generación
sobre aquellos que le temen.
51 Desplegó el Poder de su brazo,
dispersó a los (que son) soberbios por el pensamiento de sus corazones.
52 Derribó a los potentados de sus tronos,
y elevó a los oprimidos;
53 a los hambrientos los llenó de bienes,
y a los ricos los despidió vacíos.
54 C Acogió a Israel, su siervo,
acordándose de su misericordia
55 como lo había prometido a nuestros padres,
a Abrahán y a su descendencia por los siglos.
1) E str uctura. Hemos distinguido tres la acción de María que canta al Dios que
Partes, La primera (A: 1, 46-50) transmite actúa en ella. La segunda (B: 1, 51-53)
Dios cristiano 339
53): María abre los ojos, amplía su mirada y b') Porque ha mirado... (1,48). María
cuenta lo que Dios hace en la historia en sabe que Dios es Salv¿dor a través de su mira-
favor de los más pobres. da. Su alegría de mujer creyente (1,47) res-
. Ld tercera es memoratiaa ponde precisamente al gesto de los ojos de
(1,54-55):
Dios que se dirigen compasivos hacia ella (cf.
todo lo anterior se convierte en recuerdo y 8x3,7).
confirmación de la fidelidad de Dios con
Israel. a') Porque ha becho en mí cosas grandes...
.U
Iti
(1.,49-50). El mismo canto de María que (1,46-50) a la segunda parte del himno
engrandece a Dios (1,46) está fundado en los (1,51-53). Cambia el destinatario, pero
megala o cosas grandes que Dios realiza en Dios es el mismo. María expande su
ella. De esa forma se engrandecen y regalan palabra haciéndose portavoz (y símbolo)
vida el uno al otro.
de todas las generaciones. Ella es privile-
Conforme a este esquema, el gesto de giada porque sabe y canra, porque ha
María que declara grande a Dios y el de sentido la mirada de Dios y se alegra.
Dios que bace grande a María (^ y a') Pero al mismo tiempo, ella se sabe vincu- ,l
yan internamente unidos. Son como dos lada a todos. Por eso, cuando empieza a
caras del único misterio de amor. En el referirse al conjunto de la humanidad.
centro quedan otros dos motivos tam-
bién complementarios (el gozo de María ta ni aísla. Desde el hondo misterio que
y la mirada de Dios: b y b') que se rela- lleva en su seno, como madre mesiánice
cionan no sólo en clave psicológica (el en el alba de la salvación, ella amplía
niño nace a la vida a partir de la mirada hacia todos su experiencia.
de sus padres), sino también en clave teo- Esta experiencia de la acción salva-
lógica, conforme a la más repetida a{ir- dora responde a la más honda teología
mación de Gén 1: miraba Dios y descu- israelita del éxodo y profetas (cf. temas ,1:
bría que las cosas eran buenas, alegrán- 11, etc.).que presentan a Yahvé como e.
dose con ellas. que invierte con su gracia Ia más dur¿
En Gén 1 actuaba Dios en palabra (y prepotencia y orgullo de los hombres.
dijo...), gesto (así fue...) y mirada (y vio Desde ese fondo ha destacado María e.
que...).En nuestro caso, la palabra perte- pecado fundante (original) de una huma-
nece a María: ella dice y canta; ella se ale- nidad que quiere cerrarse en su soberbia"
gra y engrandece. Dios parece silencioso: Así se distinguen y separan en 1,5 l-53 e
es como si hubiera dejado todas las pala-
camino de Dios y ei de los hombres. l
las generaciones está la mirada del Dios . Reaelación de Dios. Frente a la sober'
Salvador que suscita todo lo que sigue bia del hombre emerge aquí el verdader. 1
recordar) explicitan und nxisrrTa acción al Dios. En esta perspectiva se sitúa lo qu.
seruicio de los bombres. Así podemos slgue.
decir que lo más propio (principio israe-
Siendo plenamente israelita, el Mag-
lita), lo más personal (María) y lo más
nificat puede y debe interpretarse en cla-
universal (apertura a los pueblos) son
ve de superación del judaísmo históricc
notas o momentos del mismo camino
Dios ha cumplido su promesa, ha .,reci-
salvador de Dios. Quizá se pueda hablar
bido" a Israel; por eso, la area del viejt
de un tiempo de la bistoria que va en la
pueblo ha terminado; empieza el tiempc
línea ya indicada (de Israel, por María,
de la universalidad, reflejada en 1,51-5.i
hacia los pueblos) y de un tiempo del
Esta es la ironía gozosa. de la histori.a ri:
cánto qle se despliega en esta línea: en el
principio está el yo de María que canta a la sabación' sabe María que Israel h:
Dios desde la hondura de su vida (1,46- cumplido su misión, ha realizado de for-
ma positiva su tarea. Lo que ahora llegi
5O); en el centro, la esperanza de todos
los humanos (1,51-53); al final se recupe- lo que está expresado en la parte univer-
ra el pasado israelita, en palabra de fuer- sal del canto (fundado en la promesa de
te memoria bíblica (1,54-55). Teniendo niño que alienta en su entraña de madre .
b.
Dios cristiano 343
:ios, pero hallamos en el fondo del can- . Dios de los hombres (1,51-53). A la luz
:-¡ de María otros apropiados, si es que de Io indicado, podemos afirmar que Dios se
. ¡1e esta palabra: revela en fuerte inversión, transformando el
esquema actual de vida de los hombres. Se ha
. Misericordioso, en gesto que se extiende cumplido la antigua promesa de Abrahán (cf.
:Lrr generaciones (1,50). Este título asume la 1,54-55). Amanece por el canto de María la
::ejor tradición del pacto israelita (cf. tema gran luz: la verdad mesiánica de Dios se rea-
-.2) que culmina aquí, en la acción salvadora liza e¡ nuestra historia.
:ue canta María.
o Fiel, porque recuerda la promesa hecha
: Abrahán y a los patriarcas. Esta fidelidad 2, Mandato de amor doble:
:echa memoria activa de la misericordia Dios y el prójimo (Mc 12,28-34)
mnésthénai eleous: 1,54) define la historia y
.rperiencia israelita (y la cristiana). Sobre el trasfondo israelita cf. bibliografía
introductoria sobre el Dios de1 judaísmo, y ade-
. Reoelador: habló en oto tiempo (elalé- más: R. Trevijano, Orígenes del cristianismo. El
,:n: 1,55) y ahora cumple esa palabra, en ges- rrasfondo judío del cristianismo primitivo,
:o de manifestación salvadora. UPSA, Salamanca 1985; K. Hrub¡ L'amour dw
procbain dans la pensée juive, NRTh 91 (1969)
Profundizando en el texto, podemos 493-516; A. Nissen, Gott und die Náchste im
3ncontrar otros nombres apropiados de antiken Juden¿zz, \íUNT 15, Tübingen 1974.
Dios que se vinculan a su misma acción. Sitúa el tema en su contexto cultural y reiigioso
Brevemente evocaremos aquellos que
G. Bornkamm, El doble mandamiento del
amor, ei Id., Estudios sobre el Nf, Sígueme,
ros parecen más significativos: Salamanca 1983, 171-180. Comentarios (sólo a
Mc): J. Gnilka, Marcos, II, Sígueme, Salamanca
. Dios de Israel, sw sieroo (1,,54).Israel es
1986, 190-797; R. Pesch, Marco, II, Paideia,
:lpais (siervo querido, hijo o amigo) de Dios, Brescia 1,982, 355-375.
Jesde el principio de su acción hasta el final
Jel tiempo, conforme a toda la experiencia y Bibliografía general: K. Berger, Die Geset-
:eología israelita. zesawslegung Jesu, I, BibS, Neukirchen 1.972,
56-257; V. P. Furnish, Tbe looe command in the
. Dios de María, sw sierva (1,48). La pala- NI SCM, London 1973, 22-90;'W. Klassen,
'cra
que se emplea es doulé y ro pais, como Love (NT and Early Judaism), ABD IY 381-
.rntes, Pero es evidente que las dos están rela- 396; H. Merklein, Gottesherrscbaft als Hand-
[: ¡ionadas. María aparec" encarnación y lungsprinzip, FB 34, V'ürzburg 1981, 100-104;
is "o-o
plenitud de Israel; Dios se ha vinculado a ella A. Nygren, Er6s et agapé, I-Il, Aubier, Paris
a- Jel modo más profundo (a través de mirada y 1952/62; P. Perkins, Love Commands in tbe
)-
¡esto). Recordemos que doulé o sierva no es N7l New York 1982; K. H. Schelkle, Teología
rítulo de simple humillación o pequeñez, sino del NT III, Herder, Barceiona 1975, 167-20Q;
R. Schnackenburg, Mensaje moral del N7. Her-
Je máxima grandeza: María es sierva en la
der, Barcelona 1989. 100- I l3: V. Schragc. Errca
línea del Siervo de Yahvé de Is 40-55, es decir,
del NT Sígueme, Salamanca 1987, 8-112; S.
como favorita de Dios y portadora de su
Spicq, Agapé dans le NT. Analyse des Textes, I,
palabra mesiánica. EB, Gabalda, Paris 1969.
¡ Dios del mesías (de Cristo). Ese título
Estudios especiales sobre el texto: Ch. Bur-
no aparece de forma expresa en ei canto, pero chard, Das doppehe Liebesgebot in der friihen
es evidente que se encuentra en su base, al cbristlichen Ueberlieferung, en Fests J. Jeremias,
menos en una interpretación cristiana (desde Vandenhoek, Góttingen L97A, 409-432; R. H.
el fondo de Lc-Hech). Todo 1o que el canto Fuller, Das Doppelgebot der Liebe, en Fests. H.
proclama es verdad porque Dios se ha expre- Conzelmann, Moha Tübingen 1975, 317-329;
sado dei todo por e1 hijo de María (cf. 1,39- \f. Grundmann, Das Doppelgebot d,er Liebe,
-+s). zz 11 (1957) 449-455.
344 Dios judío, Dios cristiano
pero que no 10 es: quien cuestiona a Jesús no El problema no está en que los man-
es un simple discípulo, no es un estudiante, datos sean numerosos (más tarde se reco-
sino un escriba, es decir, un maestro de la iey. pllan 248 positivos y 365 negativos, en
La cuestión va, por tanto, de grammateus rcd|61.3), pues muchos de ellos parecen
(hombre judío del libro, es decir, de la ley) al
didaskalos o maestro mesiánico (cf. 12,32).
y son obvios para los que viven dentro
No es pregunta para aprender, sino para de una sociedad organizada en esa base.
conocerse mutuamente: el escriba judío y el Por eso, situados en su propio contexto)
maestro cristiano. los jwdíos del tiempo de Jesús y sws suce-
sores no se pueden tomal como legalistas
. ResPuesta de Jesús (12,29-31). Contesta
en el sentido peyoratiao del término. No
empleando las palabras de la misma ley. No
son legalistas, pero piensan que su vida
qurere exponer una enseñanza nueva, no
rompe con 1o antiguo. Significativamente se encuentra fundada sobre leyes de
vincula Jesús los dos mandatos primordiales Escritura/Tradición que se presentan
de la Biblia, tomándolos como expresión de como voluntad de Dios. Por eso es
su enseñanza. importante discernir: saber dónde se
. encuentra el centro y clave de los manda-
Confirmación del esqiba (12,32-33).
mientos, como hace nuestro escriba. No
Acepta Ia palabra de Jesús dentro de su pro-
pio judaísmo. Esto significa que le incluye en
los discute; quiere organizarlos de forma
la gran casa de Israel, como un aliado o ami- que puedan integrarse como un todo
go en el camino de la tradición israelita (vin- armonioso. Esta es la función de los
culada a templo y sacrificios). escribas: traducir una Escritura históri-
. ca/ narrariva en formas de código legal.
Ampliación de Jesíts y conclwsión
En el camino que va de la BH a la Misná
EI escriba quedaba dentro del espa-
(1.2,34).
cio judío (sacrificios). Jesús, en cambio, (cf. tema 16.3) se sitúa esta pregunta.
ensancha el horizonte y sitúa al escriba en el En el fondo de los mandamientos
camino del reino de Dios. Desde ese reino busca e/ mandan'tien o, como si los 613
hay que entender todo lo anterior. Nadie se preceptos se pudieran condensar en una
atreve a preguntarle más cosas.
misma y ú,nica raí2. Pues bien, Jesús no
.N) Pregwnta inicial. El manda.to responde con uno, sino con dos, como
(12,28). El escriba, hombre del libro, indicando que al principio no hay un
interpreta a Dios como alguien que tiene tipo de monismo (sólo Dios o sólo el
poder para mandaE es decir, para impo- hombre), sino un dwalismo básico, un
ner unos preceptos a sus criaturas, en diálogo entre Dios y los humanos. A tra-
este caso a los judíos. Ciertamente, en el
vés de este escriba, el buen judaísmo se
AT (BH) hay también narraciones libe- sitúa ante Jesús y eleva la pregunta sobre
radoras, himnos de gratitud, revelaciones el gran mandato. Jesús no elude la pre-
proféticas, bellas historias de encuentro gunta, no rechaza la cuestión como mal
planteada; dentro de ella se sitúa y res-
con Dios... Todo eso vale, pero a los ojos
del escriba resulta secundario: él pregun-
ponde con palabras de la misma BH.
ta por el mandato de la ley (cf . tema t3.2; B) Respwesta. Los dos preceptos (12,
14.1; 16). Ciertamente, su pregunta es 29-31). Jesús responde llegando, más allá
buena y veremos que Jesús la admite, del mandato en cuanto tal, al fundamen-
pero está sesgada al suponer que en el to del que brota: escucha, acoge la ooz de
principio se halla 7a entolé, es decir, aque- Dlos. Só1o quien oyen bien puede cum-
11o que Dios ha mandado cumplir a los plir lo mandado. En el fondo de la ley (1o
hombres. que debe hacerse) se halla la ob-ediencia,
346 Dios jwdío, Dios cristiano
ü.
Dios cristiano 349
":rsal del amor a Dios tal como se expresa en 227-238; A. Ródenas, Orar con Cristo, Sec.Tri-
.. amor hacia los otros (al prójimo). nitario, Salamanca 1979, 51 -132; J. Schiosser, E/
Dios de Jesús, Sígueme, Salamanca 1995; J. M.
R. Tillard, La priére des cbrétiens, Lum Vie 75
i. Reino de Dios, pan compartido:
(196s) 393-394.
profwndos), al abrirse hacia el conjwnto ción israelita. IJna misma oración puede
d.e la humanidad, todo deja de ser jwdío suscitar dos interpretaciones: todo es
en el sentido rabínico o posterior del tér- jwdío si se entiende en clave nacional;
mino. Surge así un mesianismo sin pue- Pero es cristiano si se universaliza.Y con
blo mesiánico o, quizá me¡'or, un cumpli- esto pasamos al texto que citamos en su
ntiento no jwdío del conjwnto de la tradi- forma larga (Mt 6,9-13):
Hay una inpocación introductoria acerca a los modos de orar del judaísmo.
(A), a la que siguen dos grupos de peticio- pues resulta posible, aunque no frecuen-
nes (B y C), cada una con tres miembros. te, que palabras como éstas aparezcan er.
Las primeras (B) están formuladas en textos rabínicos que empiezan: 'Abin;o
imperativo personal: el sujeto de la sebasamayim; ¡Padre nuestro que esrái
acción debe ser Dios, como indican los en los cielos...! Esto lo saben los judíos.
dos pasivos divinos de Ba y Bc, pero no se pero hay algo que resulta nuevo en nues-
dice expresamente; el objeto deseado tra invocación :
:én los jwdíos se ocupan del pan, perdón dad de un ritual de sacrificios (como los de
libertad... Pero luego piden por Sión e Lev 16; cf. tema 7.2). Así se manifiesta como
.rrael. Jesús, en cambio, e,uita esos proble- Padre, desvelando su gracia por encima de la
''.,as nacionales: no pide por el restableci- ley tlel mundo.
:liento del pueblo; no le interesan las o Perdona nuestras dewdas (opheilémata).
rstituciones israelitas. En su oración La palabra se puede referir a pecados (plano
,ó1o importan los humanos en cuanto más sacral) o a ofensas (plano más extenso).
:ales. Todos se encuentran ahora vincula- Por comparación con lo que sigue, debemos
jos en una misma necesidad material y mantener el sentido amplio de deudas: pedi-
.'spiritual y humana. Por todos ellos ele- mos a Dios que no imponga su le¡ es áecir,
..
a su plegaria.
que no utiiice con nosotros la medida del
mlión. Dan 7,'t0 (cf. tema 14.3) afirmaba que
Nwestro pdn cotidid.no hoy (ton arton "se abrieron
los libros" para el juicio. Pues
):émon...).Del Padre nuestro pasamos al bien, aquí pedimos a Dios que no utilice el
?an nLt.estro> es decir, al alimento compar- libro: que no pida, que no exija nada a ios
:ido. El primer signo del Padre Dios no humanos.
es la le¡
Torah, de Israel, sino el pan uni- o Como nosotros perdonlmos... La comu-
Hemos l'uelto al origen de la crea- nidad que surge en torno aJesús no tiene más
'ersal.
ción (Gén 1-3), más allá de los códigos ley que.el perdón. En ella se superan los pre-
sacrales y legales de tipo particularista. ceptos irnpositivos; pasan a segundo lugar o
se suprirnen los códigos de tipo religioso, ali-
Perdónanos nwestras dewdas... (aphes menticio, nacional; lo único que importa es el
bémin ta opheilémata hém6n...). Del pan perdón, es decir, la posibilidad de conviven-
pasamos alapaz, entendida como solida- cia gratuita entre los hombres.
ridad social. Supone 7a oración que hay
deud,as en la vida, que han surgido pro- Llevada hasta el final, esta ley del per-
blemas con Dios. Conforme a una exi- dón iguala a judíos y gentiles, a creyentes
gencia de justicia conmutativa, el hom- y no creyentes, a hombres religiosos y a
bre debería ser capaz de devolverle a no religiosos (en el sentido profundo de
Dios lo que le debe. Pero el Dios del la palabra). Si Dios no pide nada, ¿para
Padrenwestro no es acreedor, ni tampoco qwé ban aalido los ritos? Si decimos que
juez. Es Padre ¡ como tal, perdona, perdone todo, ¿para qué sirue el cwmpli-
como supone la Oración de Manasés (cf. miento de sws leyes? Es normal que los
tema 17.2). Pero hay grandes diferencias. judíos, fieles a su tradición particular y a
OrMan actúa en un ?la.no israelita: ofre- los valores distintivos de su pueblo,
ce perdón a los hijos de Abrahán y como hayan sentido inquietud ante ese Dios
base pone la penitencia o metanoia, de del Padrenuestro. Los creyentes de Jesús
tal forma que interpreta la historia en han de mostrar con su existencia libera-
clave de legalismo penitencial. En contra da, fraterna, gratuita que el perdón uni-
de eso, el Padrenwestro expande el per- versal puede convertirse en base de exis-
dón al ancho ca.nTpo de lo humano y lo tencla.
vincula al amor de Dios ), al mismo per-
Y no nos bagas entrar en la tentd-
dón mutuo. Frente a una sociedad de ción... Es difícil traducir el texto. Si el mé
penitentes (OrMan) surge ahora la
eisenenkés se toma en forma activa, le
comunidad de p erdonados.
decimos al Padre que no nos introduzca
. Dios Perdona por sí mismo antes de toda en la tentación: lo normal sería que 1o
metanoia o conversión humana, sin necesi- hiciera, como hizo en el principio (Gén
354 Dios judío, Dios cristiano
2-3); pues bien, nosotros, débiles huma- . El Magnifi.ca, nos ha permitido recup.e-
nos, le decimos que no ponga a prueba rar en perspectiva cristiana la esperanza is-
nuestra vida, que no nos lleve al peiras' raelita. Como profetisa mesiánica ha cantad¡
a Dios la madre de Jesús, que aquí apárec:
rnos, entendido aquí a mar.eÍa de tribwla-
como encarnación de Israel; ella testimonia ¡
ción escatológica; en el fondo pediríamos
cumplimiento de las viejas promesas patria:-
a Dios que nos libere del gran cáliz que cales. Todo era judío en esa perspectiva: Ic,
Jesús debió beber en la hora de su tenta- nombres de Dios, su forma de mirar hacia lc,
ción (cf. Mt 26,39-41). Pero el texto se hombres, los gestos de su acción transform:-
puede interpretar en clave permisiva: zo dora. Pero todo se hacía universal en .
nos introduzcas (no nos bagas caer) en la momento en que María aplicaba su experier,-
tentación. Se supone que existe tenta- cia al conjunto de lo humano.
ción, que hay prueba; pero el Padre pue- . La ley fundamental remite a las palabr:
de y quiere ayudarnos; por eso le pedi- introductorias del Sema'. Con los buen¡,
mos que no nos abandone ni rechace en judíos de entonces (y de luego), Jesús acep::
medio de ella. Posiblemente las dos tra- el primer gran mandamiento: escuchar -
Señor, que es único Dios, y amarle con toi
ducciones resultan semejantes.
el coraz6¡/alma/fierza. También es judía .-
El hecho de que Dios sea Padre no manera de entender el segundo mandamie:'
significa que nos deje sin riesgos. El ries- to: «amar al prójimo como a uno mism."
go existe, es fuerte. Por eso no podemos Pero en el momento en que el prójimo apar.-
ce simplemente como humano, se superan i-
hacernos los valientes, confiando en ven-
límites judíos.
cer todas las pruebas. Al contrario, la
oración de Jesús es oración de la debili-
. El Padrenuestro sigue el mismo esq;,:'
ma. El judaísmo puede aceptar sus petici .-
dad: es súplica de hijos que se saben
introducir.:
nes, pero siente la necesidad de
pobres y pequeños; plegaria de aquellos dentro del esquema de su historia nacion'
que deben pedir al Padre ayuda en medio Los cristianos, en cambio, se atreven a enter-
de la prueba o peirasmos escatológico. der y practicar (a or.ar y cumplir) el Pad¡.
Esto mismo es lo que pide la segunda nuestro en PersPectiva universal, de for:--.
parte de esta tercera petición: mas líbra- que no existe ya lugar para Israel, su let'
nos de! mal (o del Malo, si Ponerós es templo en la plegaria. Esta es, a mi juicio. "-
masculino personal). La primera necesi- novedad delesits: profundiza de tal forma .'
el mensaje del Dios israelita qwe 'uiene a p':'
dad era pan; la segunda paz; la tercera
sentarlo corno oerdad abierta a todos .,
libertad respecto al mal o Malo. Desde hombres de la tierra (de la bistorin). Por e-.
este fondo, teniendo en cuenta todo lo los cristianos seguimos siendo israelitas e: .
anterior, podemos trazar unas sencillas sentido más profundo del término, Pero i -
conclusiones: no somos judíos en sentido nacional.
19
Novedad mesiánica:
Amor de Dios, crisis del pueblo
Po:
Esteban, Salamanca 1992,61-150; P. Hoffmann
. Mt 5,43-48: alnoral enemigo. Entre las y V. Eid, Jesus oon Nazaretb und eine cbristli-
cbe Moral, QD 66, Herder, Freiburg 1975,147-
antítesis (Mt 5,21-48) que marcan la novedad
185; E. Kahlefeld, El Sermón de la Montaña,
de Jesús frente a la le¡ escogemos la última,
EVD, Estella 1965; G. Lohfink, La iglesia qwe
que asume y completa de algún modo todas
Jesús quería, DDB, Bilbao 1986, 60-66; ld., El
il
las restantes. Dios aparece en ella como gra- sermón de la montaña, Herder, Barcelona 1988;
cia sobre (contra) las justificaciones de tipo J. Piper, 'Love your enemies,, SNTS MonSer
nacional o legalista. 38, CambridgeUP 1979 (con amplia bibliogra-
fía); J. Schlosser, Le Diew de Jésus, Cer{, Paris
c Lc 15,11-32: bermanos di<tididos. Ur'o 1987, 235-260; O. Seitz, Looe your enemies,
de ellos cumple la ley (está en la casa). El otro NTS 16 (1969/70) 39-64; S. Schulz, Q. Die
1arompe. ¿Podrán juntarse?, ¿tiene sentido Sprucbquelle der Evangelisten, TYZ, Zirtch
una convivencia fundada en Ia pura gratui- 1972, 1.20-141.; G. Theissen, La renuncia a la
dad, más allá de las imposiciones normativas ,tiolencia y el amor al enemigo (Mt 5,38-48 / Lc
de una ley que expulsa al malo? 6,27-38) y su trasfondo histórico social, en lá..,
Estudios de sociología del cristianismo primitivo,
o Mc 12,1-12: frwtos de la ley, ,uiñadores Sígueme, Salamanca 1985, 103-147.
bomicidas. Cuidan la viña y quieren conser-
Gran parte de la controversia sobre el Jesús
var sus frutos. Jesús, en cambio, quiere que histórico se centra en esta palabra del amor al
los abran o regalen para todos. ¿Será posible enemigo; ella sitúa y define a Jesús en el contex-
convertir la propiedad en don, el trabajo en to de su tiempo, como de formas diversas han
regalo, la vida en fraternidad universal? mostrado judíos, cristianos y agnósticos. Así Io
356 Dios jwdío, Dios cristiano
he destacado en Antropología bíblica, Sígueme, cielo y tierra han de pasaE como realic.:.-
Salamanca 1993, 255-337. Perspectiva judía, des temporales; ella, en cambio, perter-.-
contraria a la no violencia universal de Jesús, en
ce al misterio de la eternidad de Dic ,
J. Klausner, Jestis de Nazaret, Paidós, Buenos
Aires 1971, 363-415; B. D. Levy, ElTestamento por eso ha de cumplirse plenamente ::
de Dios, El Cid, Buenos Aires 1980, 221-28Q:G. 5,18). El problema está en el cómo:
Vermes, Jesús el judío, Mtchnik, Barcelona
1.977,63-1.09.
. Los jwdíos rabínicos acentuarán el cu: "
Suponemos que este texto proviene nes con Lc 6,27-28.32-36. Es posible quc
básicamente de Jesús y guarda conexio- ambos (Mt y Lc) beban en una mism;.
Dios cristiano 357
tuente escrita (el documento Q), ofre- que de ella derivan. También puede tratarse
ciendo versiones distintas y complemen- de una interpretación sesgada de la BH: hay
tarias de una misma experiencia fundan- lugares donde supone que el judío debe sepa-
te de la Iglesia. Nuestra aportación será: rarse del gentil. Finalmente, puede aludir a la
Regla de Qwmrán (cf. 1 QS 1,10; 9,21ss; 10,
tonTamos el texto corno está y lo analiza-
17, etc.) donde se promete atnar a los bijos de
mos en clave teológica y social, destacan-
Dios y odiar a los de las tinieblas (cf. tema
do el sentido de Dios y la novedad del 16.2).
grupo eclesial qwe se atre'ue a formwlarlo
como gwía de su aida. Jesús ha llevado a. su extrento una
interpretación posible de la ley israelita:
A) ¡Habéis oído...! Tesis natwral (5,43).
el amor alpropio grupo puede (y en algún
Todo grupo particular presupone o sus-
sentido debe) tradwcirse como recbazo de
cita diferencias: trata de una forma a los
los otros grupos. Parece que el ser huma-
de dentro (amor) y de otra a los de fuera
no opera por antítesis, de forma que sólo
(odio o, por lo menos, prevención). Esta
puede defender lo propio en la medida
es la ley que brota del talión: ¡ojo por ojo
en que combate la postura del contrario.
y diente por diente! (5,38). Es la tesis Este sería el buen talión, esta la más alta
natural que sigue guiando la vida de los
posibilidad de la ley, entendida como
pueblos. Bastará con formularla en
expresión de la propia identidad del gru-
esquemal
po.
o Habéis oído que se ba dicbo. Jesús se
La ley actúa normalmente en forma
dirige a los judíos, especializados en la escu-
de talión. Sanciona eso que podemos lla-
cha de una palabra que viene de Dios. El ver-
mar maniqweísmo fwndante de la cwbura:
bo (errethé) es pasivo divino, de manera que
el sujeto decisivo es Dios. Pero Jesús no 1o nacemos a la vida en el momento en que
destaca de una forma expresa. Más aún, empezamos a oponer el bien y el mal (cf.
pudiendo utilizar una fórmula que cite direc- Gén2-3), en distinción que lleva a prote-
tamente la Escritura (como en 1,22-23;1,5-6; ger a unos (los buenos, los nuestros) y
2,17-18, etc.) no 1o hace. Por eso, este se ha combatir a los otros (los malos, los de
dicbo p:udiera aludir a una sentencia de maes- fuera). Pues bien,/esús havenido a supe-
tros judíos que Jesús combate y no a la BH o rar esa disociación, recreando así la pala-
Escritura (los LXX). bra de Gén 2,17: más allá de la ley de lo
o Arnarás a tu prójimo. Es cita clave de bueno y malo hay un ancho espacio de
Lev 19,18, asumida por Mc 12,31 par altratar realidad; sobre la división de los hom-
de la ley (cf. tema 18b). Todo es norma en bres está el campo de la gracia creadora
ella, Jesús no Ia discute. El problema estará en de Dios que les unifica, en encuentro
su aplicación: precisar la extensión de ese universal de amor.
prójimo; saber si ha de entenderse de manera
universal o exclusivista. B) Pero yo os digo: revelación mesiá-
nica (5,44). Frente al impersonal babéis
. Y odiarás a tw enemigo. Esta palabra oído, frase que, pareciendo venir de
constituye una ampliación de la cita, pues no
Dios, procede en realidad de la misma
se encuentra (tal como aquí aparece) en nin-
lucha de la historia, ratíficadapor un tipo
guno de ios textos del AT. ¿Por qué se for-
mula? Pueden darse múltiples respuestas. de ley judía, eleva.Jesús su más clara
palabra personal: pero yo os digo. Como
Quizá es una d.rnplia.ción retórica: Jesús toma
la frase anterior (amar al prójimo) en sentido testigo auténtico de Dios presenta su ,/o
particularista, como hacen muchos judíos de unificante. Parecía que la vida de los
su tiempo y se limita a sacar las consecuencias individuos se encontraba definida desde
358 Dios judío, Dios cristi¿no
fuera y cada uno tenía que amoldarse al pedir a Dios que les bendiga, sosteniendo su
lugar donde se hallaba (ser amigo de los camlno.
amigos, enemigo de los enemigos). Pues
Esta doble palabrarompe la lógica del
bien, la palabra de Jesú.s ronlPe ese fata-
lismo, stpera la determinación de la ley talión. Humanamente hablando, normal
es que pidamos que el bien triunfe del
de contrarios y sitúa al hombre ante la
posibilidad de una respuesta unitaria, en mal; que se desplieguen y venzan los
línea de amor y superación del juicio (Mt buenos sobre el mundo. Pues bien, aquí
7,t-6). pedimos precisamente lo anormal (su-
pranormal): rogamos por el triunfo de
c
Juzgar significa discernir y dividir, dan- los adversarios. Cesa la lógica ordinaria,
do a cada uno su lugar en el conjunto: es el se abandona el nivel de la ley (¡a cada
plano del talión o correspondencia entre uno según sus méritos!) y se introduce
acción y reacción; el plano de la ley que pide sobre el mundo una nueva lógica de gra-
a cada uno lo debido, como si estuviera escri-
twidad, abierta precisamente hacia aque-
ta dentro de un conjunto de normas la actitud
que ha de seguirse en cada caso. llos que parecían ser contrarios.
. No jwzgar supone en cambio situarse en C) Para que seáis bijos de 't)uestro
un nivel superior de gratuidad; no se trata de Padre: el Dios de la gratwidad (5,45).
dejar que las cosas sucedan de modo fatalista, Este evangelio no se prueba, porque toda
sin influir en ellas; tampoco es poner la vida prueba cae dentro del talión. No se prue-
social en manos de la pura violencia de los ba, pero puede razonarse en clave de
prepotentes. Todo lo contrario. Este es un n o revelación: quien obre en gratuidad sabrá
juicio actioo que nos capacita pard suPerdr que todo es gracia y entenderá a Dios,
la ,tiolencia de aqwellos qr,te no como un hijo que comprende por conna-
:;.f:* turalidad al propio padre. Esta no es una
Se rompe así la simetría, se quiebra el demostración racional, en la línea de las
mimetismo que consiste en depender de vías cósmicas (Aristóteles), racionales
algo exterior: de aquello que nos hacen. (Descartes) o morales (Kant), sino una
Debemos asumir las riendas de la vida, verdadera revelación concomitante: don-
no en plano de capricho o egoísmo (bus- de emerge la gratuidad, donde ella
car nuestro provecho, pase lo que pase), encuentra sentido, rompiendo el talión
sino en gesto de cre.atividad, ofreciendo de la le¡ emerge lo divino:
amor gratuito precisamente a aquellos o Dios estaba antes. Quien actúa en gra-
que no pueden reportarnos beneficio.
tuidad y responde al odio con amor descubre
. Amad a vuestros enemigos. Enemigos que su gesto no ha surgido de la nada, ni es
son aquellos que están fuera de nuestro cír- invento de su esfuerzo. Quien obra en gra-
culo y se pueden aprovechar de nosotros. El tuidad descubre que el mismo Dios le ha pre-
amor que les debemos ofrecer no es respues- cedido y le sostiene (le acompaña) en su
ta al amor que recibimos (o esperamos reci- camlno.
bir), sino don de pura gracia: deseo de que o Para que seáis hijos... Hljo es el que
vivan, se desplieguen, triunfen. lo que ya estaba en el padre. Serán
expresa
o Orad por ,rwestros persegwidores. Son hijos de Dios los que imiten su gesto gene-
perseguidores aquellos que nos ameflazar, et:, rante, respondiendo en gratuidad (amor)
concreto y nos hacen daño, los que impiden donde imperaba antes el odio. Desplegar la
que vivamos en libertad, los que ponen en vida como filiación, en clave amor: gratuidad:
riesgo nuestra vida. Orar por ellos significa esta es la tarea que ofrece nuestro texto.
Dios cristiano 359
nO,: o Dios bace salir su sol pd¡a bwenos/ dueño, no tienen color racial, moral o inte-
malos, sw lluoia para justos/injustos. Estas son lectual.
palabras de tipo sapiencial, pero superan la
sabiduría dividida de este mundo: Dios se . t La ¡¿ida bwmana es gracia. En el princi-
ort-.:. ocupa de todos, ofrece beneficios por igual,
pio (Gén 1) está la gracia, el descubrimiento
de la vida como fuente de amor, regalo de
fe;, rompiendo de esa forma el pretendido repar-
abundancia que se ofrece por igual a todos
n- to moralista que tiende a distinguir la suerte
los humanos. Malo es el deseo de apoderarse
de buenos y malos.
, áC- de algo (hacerlo mío) en contra de los otros.
t' (s_'
Estamos en el centro de una proble- Sólo sobre un mundo interpretado como gra-
[o ;, mática moral que ha preocupado desde cia puede hablarse de Dios y los humanos
far:.- antiguo. A Job le han torturado estas
pueden vincularse sin violencia, superando 1a
ca;: distinción moralizante (nacionalista o social)
preguntas (¿por qué sufren los buenos ?),
du;, de buenos y malos, de amigos y enemigos.
lo mismo que a Leibniz y Dostoiewski.
07" - . Paternidad de Dios. Sólo sobre un mun-
Pues bien, las palabras deJesús acerca del
qu.- Dios que ama a buenos y malos, a iustos do entendido como don puede hablarse de
e injustos, pueden interpretarse de for- Dios como Padre, superando de raíz el exclu-
mas opuestas. sivismo judío y haciendo que todos se vuel-
van hermanos,
o Fatalismo. Si llueve lo mismo sobre jus-
tos e in¡'ustos, si el sol alumbra igual a buenos Cuando se plantean las cosas de esa
y malos... no merece la pena hacerse justo; forma desaparecen los signos peculiares
nada cambia orando, nada mejora cambiando de Israel. No se pwede hablar de un Dtos
de conducta. Sobre un mundo de fatalidad naciona[ como si los judíos tuvieran
vivimos; Dios es simplemente un nombre del derechos especiales; no bay wn Dios pro-
destino. pio de jwstos y bwenos, como si dependie-
o Solución escatológica. Los apocalípticos ra de la forma en que los hombres cum-
antiguos, igual que Kant en tiempos más plen su ley. Dios es dbino por sí mismo.
recientes, han buscado la respuesta en los en gesto Paternal de amor, abierto a bue-
novísimos: los problemas (vida) de los hom- nos/rr7alos, jwstos/injwstos; su revelación
bres no encuentran respuesta en este mundo; en Cristo quiebra por dentro el equili-
sólo tras la muerte habrá justicia: un equili- brio religioso/nacional del judaísmo.
brio entre conducta y felicidad humana.
hace que estallen las bases de su ler- r-
Pues bien, nuestro texto no es fatalis- surjan dos caminos:
ta (no todo da 1o mismo) ni escatológico o Podemos t.,oloer a la barbarie. Si no r'¿le
ra-
bre
(no deja la respuesta para el fin), sino yalaley, ¿qué queda?, ¿cómo podemos com-
ES
providencialista: interpreta el hecho de portarnos? De esa forma han pregunradc.
ra- que llueva sobre justos y pecadores muchos temiendo que retorne la violencia.
como signo de la gracia universal. De esa
re- . O podemos trascender la ley en gesto tlt
su forma se vinculan Dios y el mundo
amor. No se trata de negarla (en su pl,rno
o El mundo es oalioso. Sólo puede hablar sigue teniendo valor), sino de potenciar el
ue de Dios (y obrar en actitud de gracia) aquel surgimiento de una experiencia fuerte de vid;.
án que sabe descubrir en gratuidad el mundo: en gratuidad universal.
e- sol y lluvia son regalos que al mismo tiempo
r) Dios ofrece, sin regateos ni equilibrios parti- Los jwdíos han logrado hermosos
la distas, para unos y otros. Democrático es el equilibrios sociales: han suscitado for-
). sol, democrática la liuvia: viene como don y mas muy valiosas de vida comparrida.
nadie puede apoderarse de ellos; carecen de Pero siguen en plano de talión: organi-
360 Dios jwdío, Dios cristiano
zan el mundo (su mundo), pero no son recompensa dela gracia,lo que Jesús lla-
capaces de transformarlo. Jesús, en cam- ma misthos (5,46). Ni publicanos ni gen-
bio, ha querido presentar ya desde ahora tiles pueden alcanzarla; nadie que la exi-
un ideal universal de gratuidad. ja por ley puede lograrla. Dentro del
mismo equilibrio social de este mundo.
D) Mundo sin Dios: paganos y publi- marcado por 1e¡ judíos, pwblicanos 1
canos (5,46-a7). Se confirma 1o dicho con
gentiles yahan tenido su paga mundana.
unas preguntas de tipo retórico sobre la
pues por ella han laborado. Por el con-
ley fwndamental de las sociedades egoístas trario, los que aman en gratwidad, los
(de publicanos y paganos) que no tienen
que dan sin exigencia (los que han ofre-
evangelio. Es evidente que aquí podemos
cido oración y gesto bueno a enemigos v
incluir también a los judíos que aman al
adversarios) pueden confiar en la sanción
amigo y odian al enemigo, diitinguiendo
divina: corl su misma acciófl apelan a la
así tres tipos de personas y/o sociedades:
recompensa de la gracia.
. Sociedad de publicanos. Defienden su Este es el mistbos o don supremo, el
grupo y encuentran en su misma relación la
perisson (gesto especial) que distingue a
recompensa que buscaban. Es evidente que
su amor puede entenderse en clave de nego- los cristianos: más allá áe la ley, superan-
cio económico: al servicio de su interés do toda imposición, ellos pueden presen-
monetario se ayudan; para triunfar juntos se tarse sobre el mundo como testigos de la
defienden. gratuidad. De esa manera hablan de
c Sociedad de paganos. También ellos se Dios. No demuestran su exigencia con
saludan, es decir, se respetan entre sí. No
ninguna norma externa; no convencen a
viven en clima de puro egoísmo indioidwal, nadie uttlizando leyes o apelando a posi-
porque en ese caso no podrían subsistir. bles secretos interiores que Dios les ha
IJnos a otros se saludan y protegen, creando ofrecido. Esta es su verdad, esta la prue-
así un espacio más extenso de egoísmo grupal. ba de su religión: creen en la gratuidad r
. Sociedad de judíos. Se mantiene en un la expresan sobre el mundo. De esa for-
plano semejante, de interés de grupo. Como ma se ponen en manos del Padre de la
los publicanos se ayudan para bien de su eco- gracia: son testigos de un amor que des-
nomía; como los paganos se saludan para borda toda le¡ representantes de la vida
triunfo de sus estrategias. Así quieren mante- que se vuelve gracia; es aquí donde Dios
ner su proyecto nacional y religioso. Por se manifiesta.
beneficio grupal se defienden; por interés par-
ticular se aman. Es evidente que no actúan de E) Conclusión: Como awestro Padre
manera puramente gratuita. celestiales perfecto (5,48). El texto para-
lelo de Lc 6,36 ha pedido que los hom-
Pues bien, en contra de eso ha ofreci- bres sean oiktirmones (misericordiosos).
do Jesús el ideal de su amor gratuito, Mt 5,48 ha preferido que ellos sean per-
siguiendo el gesto de Dios Padre que feaos (tammim) reelaborando desde Dt
generosamente ama sin buscar ninguna 18,13 las palabras de Lev 19,2 (sed sa.ntos.
forma de oculta recompensa. Al llegar como yo Yaboé...). Buenas son las tres
aquí, cuando se ha superado el egoísmo y palabras. Clara es la exigencia de miseri-
seguridad grupal, puede hablarse de una cordia que brota de Dios y se expresa en
verdadera sanción de la gratwidad. Esta el amor gratuito (como quiere Lc). Fuer-
es la paga más alta, que no se busca, que te la experiencia de santidad que exige
no se exige, pero que emerge luminosa amar al prójimo, visto aquí como enemi-
porque hay Dios y Dios nos ama. Esta es go (desde Lev 19,2). Definitiva es la gra-
Dios cristiano 36L
cia de la perfección que nos asemeja al 1,959; I. Broer, Das Gleicbnis oom verlorenen
Dios que ama a todos los humanos. Sobn und die Theologie des Lukas, NTS 20
(1973/4) 453-462; J. D. M. Derret, Law in tbe
NT.Tbe Parable of the Prodigal son, NTS 14
(1967/8) 56-74; P. Greiot, Le Pére et ses deux
2. Dios de los pródigos:
acoge a los perdidos (Lc 15,11-32) fik: Lrc 15,11-32, RB 84 (1977) 319-348, 538-
565; O. Hofius, Abtestamentliche Motive im
He citado la parábola del hijo pródigo al Gleichnis vom oerlorenen Sobn, NTS 24
rratar de Jonás (tema 12.2): cf . J. Alonso, Para- (1977/8) 240-248; L. Schottroff, Das Gleichnis
lelos entre la narración del libro de Jonás y la vom verlorenen Sohn,ZTK 68 (1971) 27-52;K.
parábola del hijo pródigo, Bib 40 (1959) 632- Silva Costoya, La parábola d.el bijo pródigo,
640. También he citado comentarios a Lc en CulBib 23 (1966) 259-263; M. A. Yázquez, El
¡ema 19.2. Sobre el mensaje de Jesús y las pará- perdón libera del odio: Lectwra estructural d,e Lc
bolas, con referencia a Lc L5,1,1,-32: C. H. 15,11-32, Communio 11 (1,978) 271-323;D. O.
Dodd, Las parábolas del reino, Cristiandad, Yia, Tbe Prodigal Son: a Jwngian Reading,
Madrid 1974, 117-147; P. Grelot, Las pakbras
Semeia 9 (1977) 21-43.
de J e swcristo, Herder, Barcelona 1988, 239 -252;
'W'.
Harnish, Las Parábolas de Jesús, Sígueme,
El judaísmo es una fraternidad de me-
Salamanca 1989, 1.75-201; J. Jeremias, Die
Gleichnisse Jesu, ZwirrrgliY, Zirich 1.952, 1A6- sa donde se reúnen los puros, es decir, los
110 (trad castellana: Las parábolas de Jesíls, que cumplen la ley de comensalidad a
EVD, Estella 1991); E. Jüngel, Paolo e Gesü, nivel de raza (pueblo) y costumbres. Pues
Paideia, Brescia 1978, 195-199; E. Kahlefeld, bien, Jesú.s ha roto esa. ley de fraternidad,
Parábolas y ejemplos del eoangelio, EVD, Este-
ofreciendo un puesto en el banquete del
llaL967,207-216;T. \L Manson,The Sayings of
'§leder, reino a los que debían quedar fuera. Como
/esas, SCM, London 1971,282-290; H.
Die Gleichnisse Jesu als Metapbern, FRLANT un peligro para \a identidad del pueblo
120, Góttinge n 797 8, 252-262. aparece su comportamiento. Por eso le
Sobre Lc 15,11.-32: H. Brandenburg, Das acusan fariseos y escribas (cf. Lc l5.l-2).
Gleichnis vom oerlorenen Sohn, Gladbach, Él h, ."rporrdido con parábolas.
Y empezaron el banquete.
25 D El hijo mayor estaba en el campo.
Y cuando al volver se acercó a la casa,
26 oyó la música y las danzas; y llamando a uno de los muchachos le preguntó
27 qué significaban aquellas cosas. El le respondió: Ha vueho tw bermano,
y padre ha matado el ternero cebado, porque lo ha recobrado sano.
tw
28 El enfureció y no quería entrar.
se
29 E Pero su padre, saliendo, quería convencerle, El, respondiendo, dijo a su padre:
-Mira cwántos años te siroo y no he desobedecido ningwno de tws mandamientos;
y a mí no me has dado ni siquiera un cabrito para que lo celebre con mis amigos.
30 Pero cuando ha venido este hijo tuyo, que ba comido tus bienes con prostitutas,
tú bas matad,o para él el ternero cebado.
31 El padre respondió:- Hijo, tú. has estado siempre conmigo y todo lo mío es tuyo.
32 Pero babía que hacer fiesta y alegrarse porqae ese hermano tuyo
estaba mwerto y ha reohtido, estaba perdido y ha sido encontrado.
Ir
Dios c"ristiano 363
El bermano tnenor está al principio y que nos puede parecer duro: ¿por qué r..
centro de la parábola, pero no es su prota- ha salido al encuentro del menor, si t;
gonista. Es evidente que representa a los que sabía (suponía) que estaba en rier::
publicanos y pecadores, a los expulsados extraia, sufriendo el hambre e impure. i
del sistema, a los que, conforme a la teo- de los cerdos?, ¿por qué no corrigió i
logía oficial del rabinismo, han dilapida- mayor y le {orzó a ser tolerante? El rei.-
do su fortuna humana y son dignos de to no responde. Deja que lo hagamc,
amor (cf. Lc 15,1-2). Ampliando la vi- nosotros.
sión, hijo/hermano menor son los genri-
. El padre y el menor (C: 15,21-24). Le'. ;
les: los pueblos de la tierra que han vivi-
dejado en libertad, pero corre a su encuenr:.
do de manera deshonesta, quedando al cuando viene. Le ha permitido llegar hasra :
fin sin bienes ni derecho (cf. Rom 1,18- extremo de la necesidad (impureza, hambrt
31). En su primera parte, siendo hermo- pero luego le ofrece todo lo que puede y r:.-
so, el texto se limita a repetir los tópicos ne (dignidad filial, poder y fies.ta) sin pedi:.,
que sabe todo buen judío: los genriles siquiera permiso, sin imponerle correctir'.,
(publicanos y prostitutas, genres de mala sin plantearle la exigencia de su arrepen:-
vida) encuentran aquello que buscaban y miento. La ley exigiría condiciones: devol.'.:
sufren lo que merecen; han malgastado la
lo gastado o quedarse sin herencia; mosrr.:
fuertes signos de conversión, etc. Pero .
fortuna del padre, se han manchado con padre está por encima de la ley y puede (qui.,
terribles impurezas. Si quieren volver es re) iniciar con el hijo pródigo una experien;,;
simplemente porque tienen hambre; no nueva de gratuidad y fiesta.
están arrepentidos (A y B: 15,12-19). El
. El padre y el mayor (15,29-32). Tambie:
hermano menor está al principio (A y B)
le ha dado libertad, aunque siga a su lado (;--
y centro (C); pero al final de la parábola 15,32). Por eso le recuerda que si ha cump.:-
ya no juega ningún papel activo: había do una ley austera (¡no ha comido con l¡,
preparado su discurso de descarga de amigos ni un cabrito!) ha sido porque él mi.-
conciencia, se había presentado parajor- mo Io ha querido. Es como si de pronto .
nalero..., pero el padre le recibe y engen- Dios del AT dijera que los judíos han cur:-
dra de nuevo: le devuelve su gracia de plido la ley porque les ha gustado hacerl¡
hijo, le regala con su fiesta. Desde ahora Han sido ellos quienes la escogieron, no Dic
'
quien se la impuso. Este es el Dios que dice :.,
ya no tiene que hacer nada; se limita a
buen judío (hijo grande) que supere la 1e.,
estar allí, como destinatario del gozo del que venga ya ala casa y acoja a su hermanc.
padre, como objeto de la envidia/ley del celebrando juntos el gozo de la vida.
buen hermano (D yE).
Esta es la paradoja: el padre del texr -
El padre por orden de acentuación
es
no cu?nple la ley, pues, en contra. de ell.;
el segundo personaje. Ha dejado en liber- recibe al menor y le ofrece los bienes de l;
tad a los hermanos, dándoles la misma casa, sin exigirle arrepentirniento preaic.
herencia (15,12). Libre ha sido el menor ha pasado por alto los rituales de purifi-
para marcharse (15,13). Libre el mayor cación, las normas relativas a la conver-
para imitarle, pues había recibido igual sión. Más aún, desea que el bijo mayo,
fortuna; por eso, cumplir la le¡ estar'en buen judío, deje de cumplir la ley que
casa no ha sido para él obligación peno- Dios mismo le ha dado. ¿No estar:
sa, sino opción que alegremente podía loco?, ¿no habrá cambiado los papeles d.
haber gozado y manrenido. En libertad la vida de una forma injusta? Así puede
ha dejado el padre a los hijos, en gesto de preguntar el mayor, la ley hecha persona.
!i,
Dios cvistiano 365
T.
::, ei umbral de la casa antigua. Ese padre austeridad y al fin siente que el padre ofrece
'. es le)t, es don de aida: por eso goza fiesta al otro.
. , n el hijo que vuelve, por eso se alegra 'La parábola nos introduce en el cen-
3xtiende la fiesta. Se ha ido el menor
,:scando diversión; el padre le ofrece
tro de la complejidad humana, enla raíz
de los conflictos de la historia, tal como
:-'.-ersión más grande: el toro cebado, la
aparecen de algún modo en la historia
--jsica y el baile. Quedan en segundo
primera de CaínlAbel (Gén 4). Este es eI
:.ano las restantes normas y principios
conflicto de la diversidad, de la envidia
, -,"-iales, religiosos, familiares. La volun-
hecha violencia, de la lucha por el reco-
:-:d del padre es dar vida. Esta es su reli-
nocimiento mutuo.
:ión, esta su norma. Ante el hijo que
.-:elve se acaban, se apagan las leyes pro- . Elpródigo no exige nada: estádispuesto
,isorias que han guiado por siglos la a trabajar como jornalero. No exige, pero se
.ristencia de los "buenos" israelitas, her- pone en manos del padre que le ofrece la fies-
:1anos mayores. ta de la vida. Dejarse amar, esa es su única
tarea; permitir que le hagan fiesta y particrpar
El hermano nTayor es ley becba perso- en ella, ese es su mérito. Nada defiende, pues
la razón: está de su parte el
':.2. Tiene se siente indigno de todo. Por eso no rechaza
jerecho israelita; le apoyan los princi- a nadie, ni pone condiciones; es evidente que
está dispuesto a recibir al hermano ..legal"
:alión, que es su defensa y argumento, el cuando llegue.
renor ha de pagar lo merecido (¡ojo por o El mayor exige el cumplirniento de la
oio, diente por diente!) si es que quiere legalidad. Ha trabajado con justicia y tiene
rolver de nuevo a casa. Según le¡ el derecho a la justicia. Ha mantenido la casa
orden y la vida sólo triunfa allí donde las con su esfuerzo y rto quiere que el otro malo-
normas se respetan. Por eso protesta gre el resultado de ese esfuerzo. Piensa que la
quedándose en la calle (Lc 15,28-32): vida se defiende con la ley por encima de la
gracia. Evidentemente es bueno, pero bueno
.
El mayor se enfada por la ley, porque se conforme al modelo de juicio y justicia de
siente responsable de ella y quiere que se este mundo.
cumpla. Le llena el celo de Dios (cf. Rom
10,2). Para que la casa de Israel subsista y La parábola no a.caba. El que ahora
pueda dar por siglos fiel ejemplo de justicia está en peligro es el mayor: su misma
hay que expulsar (no recibir sin condiciones "perfección" le puede echar de casa; si
claras) a los pródigos que vuelven sólo por quiere mantener su propia ley en lugar
comida. de compartir la vida con su hermano aca-
. El mayor se enfada con su ltermano. Es bará quedando solo, porque es evidente
evidente que no puede aprobar su conducta, que el padre no puede (no quiere) dividir
Sería indigno sumarse a la fiesta que el padre \a casa, dejando a.cada uno un lugar
ha preparado. El verdadero amor al pródigo aparte, sin comwnicd.ción. Y con esto
consiste en reprenderl e: no se le hace wn fartor hemos llegado ala palabra clave. El pró-
recibiéndole así; no se le ayuda; bay que dar- digo se ha ido porque buscaba comunica-
le wn escarmiento. ción, pero al final queda más solo que al
. El mayor se enfada con el padre. En el principio: rodeado de cerdos, hambrien-
fondo tiene envidia: quería monopolizar su to de pan (y de cariño) piensa en la casa
amor, actuando como dueño de la casa. Pero del padre. El legal tampoco ha logrado
ahora descubre que el menor le ha destrona- comunicación, pues sólo ha tratado con
do. Ha trabajado con dureza, ha vivido en su yo: no ha tomado ni un cabrito del
366 Dios judío, Dios cristiano
rebaño para compartirlo con amigos, mayor. Por eso sale a la puerta y se pone :
pues carece de amigos; tampoco sabe conversar con é1, en gesto de confianza bás:,
dialogar con su padre; no quiere entrar y ca, escuchando sus reclamaciones a Ia vera c,
hablar con el hermano... Ia casa y procurando convencerle: ¡Recib;-
mos a tu bermano! ¡Hagamos un proyec
Sólo el padre a.parece en la parábo- nue'uo y compartido de existencia! ¡Deja a :,"
la como principio de contwnicación. Sabe lado los exclusi,uismos de tw ley, oeamos ju.--
dejar que los hijos se vayan (o queden), tos la manera de qwe el mundo,,nuestro mu-."
sin imponerles nada. Sabe recibir al que do, sea fiesta! Esta es la intención del pad.,
viene, sin hacerle examen de conciencia, que los hermanos hablen, que puedan da.,,
sin acusarle ni exigirle el cumplimiento la mano e iniciar un diálogo gozoso, sin en'.
dias ni recelos, pues hay bastante lugar p.:,
de mandatos. Por encima de todas las
los dos en la gran casa.
posibles leyes le ofrece el gozo de la vida:
eltraje de hijo, el anillo de mando, el ter-
nero de fiesta, la música y la danza...
Todos son elementos de cornwnicación,
3. Dios de la viña:
pues eso significa fiesta: wna vida com- fruto para todos (Mc l2,l-12 par t
partida, abierta al gozo del encuentro con Nos hemos referido a Mc en tema 18.1 '
los otros. Esta es la cura de urgencia del las parábolas en 1.9.2 Sobre nuestro texrc :'
padre en la que todo sucede con rapidez: concreto cf.: J. D. Crossan, Tbe Seroant P;'-
tahby, ¡pronto!, así dice poniendo en bles of Jesws, Semeia I (1974) 17-64; ld., - "
movimiento los resortes de una casa con- Parable of the Hwsbandmen, JBL lO 1i.-
451-465;J. D. M. Derret, Allegory and V.i:t..
vertida en lugar de comunicaciín para
Vinedressers, JTS 25 (1974) 426-432:
los hermanos y vecinos. Donde había Hubaut, La parabole des vignerons homic:.
triunfado la soledad, donde se había CahRB 16, Paris 1976;P. Grelot, Las Pal.;:'--
hecho fuerte la impotencia y la üisteza, de Jesucristo, Herder, Barcelona 1988,281-:-
ofrece el padre Dios la {iesta. Este es el X. Léon- Dufour, La parábola de los oiña;.'
signo del amor que no perdona (en el sen- bomicidas, enld., Estudios de eoangelio, E,:, .-
tido exterior), sino que arna. y amando es Barcelona 1969,300-337 (2" ed. en Cristia:,:--
Madrid); R. N. Longenecker, The Cbrisi.. -
capaz de swscitar forma.s a.ntes no ensa.ya-
of Early Jewish Cbristianity, SCM, Lo::
das ni gozadas de existencia.
1970,50-53; J. A. T. Robinson, The Para:-.
. the Wicbed. Husband,men: a Test of St,:.::.
Este padre no exige qwe pidan perdón.
Relationship, NTS 21 (1974/5) 443-461.
No tiene necesidad de perdonar, pues bace
algo más grande: ama, ofrece fiesta. Este es un
padre que no tiene mied.o al hijo pródigo: no Jesús ba venido a llamar a los im;'^"
le pide certificado de buena conducta, no \e
al banqwete d,e la fraternidad (ci.
hace pruebas sanitarias o morales. Simple- 1,4,15-24). Es normal que los limpi-,
mente confía en é1, ofreciéndole de nuevo el legales se sientan preteridos y qu:. *:
oponerse. Jesús insiste. Como delE.-;': r
"baile" bueno de la vida, el lugar de encuen-
tro alegre con los otros y de forma especial de todos los pródigos actúa; como rr: -: f
con las mujeres, a las que antes sólo había sentante de la gracia presenta su :,- "
. Este padre ta.ftipoco recbaza al hermano que estudiamos en versión marca:-¡ -:,:'
Dios cristiano 367
:z de una casa tenemos una viña. El teros se sienten propietarios. Jesús les
::dre (dueño) se ha marchado. Los ren- responde:
l.-12,1 A Un hombre plantó una viña, la rodeó con un cercado, excavó un lagar
y edificó una torre, y la arrendó a unos campesinos y se marchó lejos.
2B Y a su tiempo envió a los campesinos un siervo para recibir de los campesinos
3 los frutos di la viña. Y ellos, apoderándose de é1, lo hirieron y despidieron sin nada.
4 Y de nuevo les envió otro siervo, y a éste le hirieron en la cabeza y le deshonraron.
:-- 5 Y envió a otro, y a éste 1o mataron.
Y envió a otros muchos: a unos los hirieron, a otros los mataron.
6C Le quedaba todavía uno: su hijo querido. A éste se 1o envió el último, diciendo:
-¡A mi hijo lo respetarán!
7D Pero aquellos campesinos se dijeron para sí
-Este es el beredero ¡Venga! Matémoslo y será nuestra la berencia.
8 Y agarrándolo lo mataron y lo arrojaron fuera de la viña.
9E -¿Qué hará el dueño de la ¡¡iña?
10F -Vendrá y matará a los campesinos y dará la oiña a otros.
11 G ¿Es que no conocéis esta Escritura: la piedra que desecharon los constructores,
ésta ha sido hecha piedra angular; del Señor proviene esto
y es algo admirable a nuesrros ojos? (cf. 5a1118,22-23).
amo enviaba a sus criados. Ahora manda a su en 1o que ello significa. El amo (Dios) ha :,
hijo único o querido (no tiene dos, como en actuar en plano de talión: es señor de ler-. .,
Lc 15,11-32), dejándole indefenso en manos muerte que venga a la muerte (en contra ;,
de los duros renteros. Este amo parece un Mt 5,43-48 que pide amor al enemigo).
inconsciente y culpable de asesinaro indirec-
to (por mandar 2. Jesús introduce la nueva lógica del r. -
así a su hijo).
no, y signo de ella es el hijo desarmado. L.,
o Lógica de los arendatarios (12,7-8). renteros sólo saben de dinero y posesiont,
Están bajo laley y quieren sacar provecho de quieren dominar la viña, están dispuestos :
ella Se sienten manejados por la fuerza del matar por ella. Jesús, en cambio, quiere q'-:
amo e intentan responder utilizando su fuer- sus frutos se den en gratuidad (para bien ;.
za: si matan al hijo/heredero, se harán due- todos los pródigos).
ños, propietarios de la viña. Quieren el
poder. O quizá
buscan tan só1o e1 orden y 3. Los sanedritas piensan que son hijos c:
provecho de la viña: se han esforzado por Dios y no renteros. Pero se ponen en la lín.=
siglos en ella; quieren mantenerla para su de aquellos que han matado a los profetas
beneficio. siervo: utilizan la fuerza para defenderse d.
verdadero Hijo de Dios que pone en riesgo -.:
c Pregunta (12,9). La parábola no resuel- estabilidad y ley del pueblo.
ve por sí misma los temas, sino que se limita
a iluminarlos. En un primer momento, los 4. La Iglesia cristiana, desde una perspec-
oyentes se mantienen en la incertidumbre: no tiva prepascual, entiende la muerte de Jesú.
saben de quién trata. Lo queJesús va presen- (ya realizada) como asesinato del Hijo ¡ a.
tando ante ellos es como un espejo: han de mismo tiempo, como culminación de la obr,:
mirarse a sí mismos, descubriendo en la pará- de Dios (piedra angular). La vieja viña de
bola el sentido de su vida. Israel se vuelve casa de la Iglesia en la que
todos tienen sitio (cf. Lc 15).
o Primera respuesta (1.2,10). No se sabe
quién la formula ¿El propio Jesús? Es más Dejemos la visión del pueblo; pres-
probable que sean los oyentes (cf . Mt 21,41) cindimos por ahora de la Iglesia. Quedan
que emplean el talión: que la fuerza de la ley frente a frente dos posturas. Por un lado
destruya a los malvados.
esfá Jesús que ofrece en 7a parábola su
.Segwnda respuesta (12,11). Evidente- forma de asumir la historia.
mente ha sido formulada por la Iglesia, intro-
duciendo un tema nuevo sobre el fondo de 1a Por un lado están los jefes del judaís-
parábola anterior: el hijo asesinado aparece rno, empei.ados en defender su propia
como piedra rechazada; la viña se vueive edi- viña. Procuremos entender sus razones.
ficio, construcción de Dios que sólo encuen- Ellos pueden aceptar la imagen de la viña
tra su posible cumplimiento (piedra angular) (A: 12,1), pero no se sienten arrendata-
en el Cristo asesinado. rios: no están a sueldo; no trabajan por
ningún tipo de ganancia. Se esfuerzan
Acabada la parábola, los sanedritas
por el bien del mismo Dios (por su ley)1-
(cf. tt,zz¡ comprenden que Jesús alude a
por el bien de todo el pueblo (para que la
ellos y deciden matarle o apresarle
cumpla). Ciertamente, se saben herede-
(12,12), pero tienen miedo al pueblo.
ros de una historia dura, de muerte de
Esto significa que exisren por 10 menos
profetas; pero intentan ponerse al lado
cuatro lecturas de la parábola y todas
bueno, actuando como imitadores de los
son, en algún sentido, buenas.
profems y no de sus verdugos (12,2-5).
1. El pueblo en general (okhlos de 12,72) No quieren adueñarse de la herencia de
sigue a favor de Jesús y responde: matdrá a Dios, sino todo lo contrario: ¡actúan al
los campesinos... (12,10) sin pensar demasiado servicio de la misma ley de Dios! Por
Dios cristiano 369
Con los temas anteriores han queda- riores llevan al surgimiento de una comuni-
do claras dos posturas: los creyentes dad universal, entendida como presencia del
nacionales reafirman su propia ley de Espíritu santo.
pueblo, codificando en forma sistemática
sus vie¡'as tradiciones; los creyentes
mesiánicos (= cristianos), centrados en la
1, Dios resucitó a Jesús
herencia de Jesús, reinterpretaron el de entre los muertos
pasado en forma universal. Hasta ahora (Rom 4,13-24)
había continuidad. Ahora se acentúan las
He estudiado el tema con cierta detención
diferencias: los nuevos creyentes confie- en El Eoangelio. Vida y Pascua de Jesús, Sígue-
san que ¡Dios ha reswcitado a Jesús, reve- me, Salamanc a 1993, ofreciendo allí bibliografía
lando sw misterio más profundol y desde más extensa. Ahora lo evoco otra vez destacan-
esa clave hermenéutica elaboran eso que do los aspectos más teológicos. En plano litera-
llamamos la historia cristiana de Dios. Se rio me han servido los análisis de J. N. Aletti,
Comment Dieu est-il juste? Clefs pour interpré-
tata de wna bistoria teológica, es decir, ter l'építre aus Romains, Seuil, Paris 1991, con
de un proceso de revelación en que reci- su fino análisis retórico del proceso discursivo
ben plena fuerza no sólo Dios (como de Pablo; allí se encontrará amplia bibliografía.
Padre) Padre, sino también el Cristo En perspectiva literaria son también fundamen-
(como Hijo) y el Espíritu Santo. Esos tales los trabajos de R. Penna, L'apostolo Paolo.
son los motivos que ahora destacamos: Stwdi d,i esegesi e teologi.a, Paoline, Milano 1991.
En España ha realizado labor de pionero S.
o Dios ha resucitado a Jesús (Rom 4,13- Yidal, La reswrrección de Jesús en las cartas de
25). Le han matado judíos y romanos (todos Pablo. Análkis d.e las tadicion es, Sígueme, Sala-
los hombres), pero Dios le ha resucitado, manca 1982; dedica especialmente a nuestro
revelando de esa forma todo su misterio. tema p. 15-80.
Salamanca 1983, 9-36; \f. D. Davies , Paul and hijo?) diciendo que el amo/ Dios ofrece su
RabbinicalJudaism,SPCK, London 1955; E. P. berencia sahtadora en Cristo y ?erdona a
Sanders, Paul and Palestinian Judaism, SCM, los misrnos que ban ma.tado i ,L A;¡o. f^
London 1981; J. L. Segundo, La bistoria perdi-
ley israelita'había sido incapazd. á.orr_
da y recuperada de Jesús de Nazaret. De los
sinápúcos'a Pablo,sriTerrre,santander 1991.
',.
clllarnos con ñ. r roalo
L'los' nos encerraoa
podíamos haber esrudiado orros
pasajes significativos como los relatos
Hn.1'ffff:t?i:ffi'á:t#'**l
suerte de condena. Pero Dios ha querido
pascuales (Mc 16; Mt2B;Lc24;1n20-21.) liberarnos a través de la nueva justicia y
o los sermones de Pedro (Hech 4,10; salvación universal que se ha expresado y
5,30; 2,36). Por su hondura teológica realizado en Cristo (Rom 3,21-31). Des-
escogemos Rom 4,13-24 que reinterpreta de este fondo, superando el viejo plano
el gran motivo de la bléronomia (¿quién de la la ley del Sinaí y recreando unos
es el heredero?: cf. Mc 12,1-11; tema motivos que aparecen en escritos de ese
19.3) y responde a la pregunta de Mc tiempo (cf. Test XII Pat, OrMan: 17b),
19,9 (¿qwé bará el amo si matan a su Pablo acude a la figura de Abrahán:
A) Cómo consegwir la herencia (4,13- ban dispuestos a matar al mismo hijo del
l6c). Losrenteros de Mc 1.2,7 se juzgaban amo. En esa línea están /os que qwieren
propietarios: armados de "derecho>> esta- apoyarse en la ley, pensando que ella les
T
ffi
H
i8
Dios cristiano 373
I*
l* ofrece derechos especiales; ellos no Quieren convertirse en dueños de su
:ü'
defienden unos frutos de la viña de Is- vida, agentes de su propio destino y nun-
* rael, sino la misma herencia del cosmos. ca 1o consiguen. Frente a eso ofrece
i$
,{
Pues bien, fundándose en la muerte/pas- Pablo el aalor de la prornesa que es segu-
]fl
cua de Jesús, Pablo ha roto ese esquema ra (bebaia) por fundarse en la fidelidad
r$
legalista, destruyendo un tipo de judaís- originaria de Dios que, en pura fe, pro-
I
,i mo. Pero allí donde parece que se acaba mete su herencia a los creyentes.
el mundo, empieza todo: termina la le¡ B) El Dios de Abrahán (4,16d-21).El
se cumple y triunfa la experiencia radical
final de 4,16 y el comienzo de 4,17 son
de la promesa que buscaba el más hondo
fundamentales en la argumentacíón. La
judaísmo. Así se muestra en claro argu-
unidad anterior (A) concluye con Abra-
mento retórico: hán; ese mismo nombre, reasumido por
a) Afirmación o tesis general (4,13). La el relativo bos (el cual) inicia y da tema a
promesa de la herencia (para Abrahán y des- la nueva (B). La he titulado el Dios d,e
cendientes) se vincula con la fe, no con la le¡ Abrahán, pero sería más justo decir fe de
que es secundaria. En el principio hallamos la Abrahán, pues de ella ffata, de forma
palabra de Dios abriendo un campo de exis- ejemplar y precisa, esta sección. Como
tencia ( riqrteza futura) a los creyentes. indica la estructura, divido el pasaje en
b) Refwtación o antítesis (4,14-15). Prue- dos partes unidas (^ y que evocan el
ba lo anterior mostrando la falsedad de Ia fondo positivo de la fe^')y en otras dos,
tesis contraria, con tres argumentos que en el también unidas (b y b'), que expresan las
fondo están relacionados: dificultades que ella debe vencer. Tam-
bién podría hablarse de una fe general
- La ley vacía a la fe,le quita contenido,
(4,16d-L7: Abrahán es padre por haber
pues la ley es seguridad, la fe confíarza;laley
puede exigir, la fe nunca se impone. Si se creído en Dios) y de una fe concyetizada
mereciera por ley no existiría lugar para la en sw existencia (4,18-21: en su misma
gracru, forma de engendar siendo ya anciano).
- La ley anula la promesd. Si dependiera En un primer momento, Abrahán
de las obras de la le¡ la promesa de Dios ya cree en el mismo Dios judío de la 2^ de
no sería autónoma, gratuita; e[ mismo Dios Ias Dieciocho Bendiciones (cf . rcma 17.3)
acabaría subordinado a los hombres. que llarna a la existencia a los vivos y
- La ley prodwce ira, pues actúa sobre un reswcita a los mwertos (Rom 4,17). Los
nivel de transgresiones, allí donde la vida es israelitas de línea farisea habrían acepta-
lucha entre el bien y el mal. La promesa en do sin más esta palabra. Pero luego Rom
cambio nos sitúa en un campo de pura gra- 4,18-21 añade algunos rasgos que po-
tuidad divina. drían parecer sospechosos para un buen
a') Confirmación (4,l6abc). La refutación fariseo:
previa le ha servido a Pablo para asegurar,
. Relación entre fe y mnerte. Pablo acen-
ampliar y universalizar la tesis, introducien-
do la palabra nueva kbaris, gracia, tan im- túa el contraste entre el cuerpo actual de
Abrahán (de Israel) que está como muerto
porranre en Rom (cf.3,24;4,4;5,2, erc.).
(nenehr|menon: 4,19) y su futuro de vida/
Esta es la paradoja. Bwscan los jwdíos descendencia nurnerosa.
la segwridad plena por ley y nunca logran . SwPeración de la ley. Ese Abrahán de
alcanzarla; siguen encerrados en las muerte es signo de la ley; sólo la fe le vuelve
mallas de su propia fatiga impotente. padre, en gesto de esperanzaque supera todo
374 Dios jwdío, Dios cristiano
legalismo. Este Abrahán creyente va en con- general, sino aquel que, en gesto rn'-
tra de la tradición judía que destaca la exigen- concreto, ha resucitado ya a Jesús.
cia de cumplir todas las leyes. Es como si en
las Dieciocbo Bendiciones de la oración judía o Pwnto de partida: Sabemos con Abra,:;"
(cf. tema 17.3) pasáramos de la fe de Abrahán qwe Dios crea y resucita. Estuvo al comie:.:
alapaz escatológica (de la 1 ala l9). (ha creado todas las cosas) y estará al :.-
(ofrece la resurrección a los humanos).
Siendo totalmente israelita, este Dios
o Base: Dios de la promesa. En el cen::.
de Abrabán rompe las barreras del jwdaís-
mo nacional, porque su ejernplo oale para del tiempo, entre creación y resurrección. ,
creyente descubre una promesa de Dios c-,
todos los que asumen el camino de la fe,
Ie abre camino, haciéndole creyente.
sean jwd.íos o gentiles. Ya no hay lugar para
la ley; se l'uelve secundaria la circuncisión, o ldentificación: Dios de Abrabán (1 ..
la observancia de los ritos alimenticios, las patriarca). La fe no posee ley externa, p.:
ceremonias de sábados o fiestas... En el tiene unos testigos o "padres" que nos ol:.
centro de su vida sólo queda ya la fe. cen el testimonio de su propia vida funda:.:
en la promesa.
Fortalecido por ella, Abrahán ha iniciado
un camino de gracia que culmina en c Sentido: Dios de gracia y fe. Gracia .
Cristo. Dios; en fe le hallamos y no a golpe de pu.
razonamiento, arbitrariedad o capricho
C) El Dios de Jesús (4,22-24). Las
primeras palabras (4,22) son conclusión . Cumplimiento: Dios d.e la berencia. P.'
de la unidad anterior (B) y principio de Ia Abrahán la ofreció, la ha ratificado en Cris:.
nueva (C), como puente que subraya el ofreciéndola a los pobres y perdidos de e.:,
paso (continuidad y ruptura) entre el mundo, en gesto que culmina por la pascu.
Dios de Abrahán y el Dios cristiano. El A partir de aquí llegamos a la exp.-
texto clave es Gén '1.7,1,7: se le contó riencia clave de 4,24,Ia fórmula páscu:
(compwtó) como jwsticia. Lo que a Abra-
más honda (y quizá la más antigua) i:
hán le justifica es la gracia de Dios y no
NT. No es palabra cristológica (no hab.:
las obras grandes o servicios legales que
directamente de Jesús), sino teológica. E
realiza. Esto es 1o que puede aplicarse y
problema central (ya planteado en L-
se aplica a todos los creyentes que asu-
15,11-32 y Mc 1,2,1-11) es: ¿cómo descu-
men su Íe (cf.4,16).
brir la realidad de Dios?, ¿cómo defini:
.Abrahán ha encarnado la fe en el Dios le? Responde nuestro texto:
de vida/resurrección al descubrir su presen-
cia en propia carne: precisamente en su cuer-
¡ Dios ha resucitado. Ha realizado ¡ -
po omortecino" ha sabido encontrar la fuer- obra. No tenemos que esperar angustiados ;-
za grande del Dios que da Ia vida. futuro. Ha llegado el tiempo final: se ha cu;:-
plido para siempre la promesa.
o Los cristiaaos (incluidos en el bémas,
nosotros, de 4,24) encarnamos la misma fe,
. A lesús. No ha resucitado Dios a l¡ ,
descubriendo a Dios como aquel que ha muertos en general, sino en concreto, de '::
resucitado modo muy preciso, a Jesús de Nazaret, pr.-
a Jesús de entre los muertos.
dicador del reino. Este es su nombre: rles;,.
Las reflexiones anteriores nos han Esta su obra: le ha resucitado, confirmani:
ayudado a entender la estructura general aquello que había prometido.
del texto. Ahora acentuamos el análisis . Nuestro Señor (ton hyrion bém6n). L,
temático. Podemos decir que el Dios de Kyrios o Señor pascual, sentido y culmen i.
Pablo no es alguien que crea y resucita en todo 1o que existe, porque en él se ha realizz-
L.
Dios cristiano 375
gia cristiana (2,6-11) y una parénesis el mundo y luego sube, al estilo de las
introdwctoria que él mismo ha compues- avafaras de la India o las emanaciones de
to (2,1-5). Ambas se implican de una for- la gnosis, sino la historia bien concreta
ma estrecha. El centro de la fe cristiana de Jesús y la exigencia/experiencia de
no es un ser divino que se abaja, entra en amor mutuo que proviene de ella:
t
Dios cristiano 377
E^
Dios cristiano 379
"__ 'l I
- rr a costa de otros. Por eso, en un exaltación no es sometimiento o sumisión ma-
:.:erminado aspecto, no quiere ser divi- soquista, sino triunfo de la gratuidad trans-
jj"
- t'. formadora.
:'ti :1,
Así le ballamos al final del proceso, L¡ f,t no*bre suprelno. Para los israelitas,
,:metido a los hombres, condenado a el nombre de Dios era Yahvé: ahora ese nom-
bre es Jesús, el Dios-qwe-saloa al entregarse
:uerte. No ha terminado en la cruz por
':;alidad; no ha fallecido por simple exi- por los otros.
..:'-.ñ, :-ncia de su condición humana. Ha c) El nombre de Jesús: es la revelación
-::l :uerto por vaciarse a sí mismo y hacer- definitiva, sentido y centro de todo lo que
: ,,: siervo universal, en entrega que trans- existe. Jesús no necesita títulos: no aparece
''lii -rrma el sentido de la historia. Así nos aquí mesías o Hijo de Dios. Su mismo nom-
)eja el texto, inmersos en la más profun- bre humano es plenitud y tírulo de todo lo
que existe.
tparadoja: un ser divino que no quiere
:.;¡rar como Dios (en el sentido posesi- b') Adoración wnioersal. No ha sido
necesaria ninguna imposición. No hace falta
'o); un ser humano que se entrega por ningún tipo de ley o norma externa. Brilla en
,os otros, en gesto de gracia que le lleva a
-ill
rorir crucificado. Cristo la nueva realidad y todos los seres lo
descubren y cantan, en gozo exultante. Cul-
D) Acción de Dios en Cristo (2,9-ll). mina así la creación (Gén 1), encuentra pleni-
Es una respuesta a 1o anterior: como tud todo lo que existe.
J] iterza del camino de Jesús, como triunfo
a') Kyrios y Padre. Así emergen las dos
Je su amor hecho servicio, como gozo y
figuras centrales: Jesús como Kyrios, Señor
canto pleno en las raíces de todo lo que de un señorío no impositivo y Dlos como
existe viene a desvelarse el Dios cristia- Padre a quien se ofrece la gloria verdadera.
no. No es el Dios que quiere ejercer su
señorío en forma posesioa. No es tarnpo- Queda claro el quiasmo. En el centro
co wn Dios/talión que aguanta. el swfri- está el nombre de Jesús que viene a
miento de Jesús para venga.rse luego, res- presentarse como título supremo (reve-
pondiendo desde arriba con su fuerza y lación suma) de Dios. Culmina así y se
devolviendo su sentido a lo que antes expresa con toda claridad la verdadera
parecía sin sentido. No es un Dios tras la teodicea cristiana en la que culminen los
cruz, ni tanTpoco wn Dios fuera de la temas anteriores.
crwz. Es el Dios de Jesús: aquel que está
presente en todos los momentos de su
. Sólo se Pwede bablar de Dios en contex-
to de seruicio. Quien confunde a Dios con la
amor kenótico y activo, en actimd de
seguridad de su propio sistema, quien desea
donación/entrega creadora. Es fuente y
verle como expresión de poder o triunfo pro-
sentido, principio y meta la entrega de
pio se equivoca: destruye su vida y acaba
Jesús. No es que primero sepamos quién haciéndose tncapaz de comprender el ser
es Dios para decir después quién es el divino (2,1-4).
Cristo. Sólo podemos conocer a uno en
o Sólo se puede bablar de Dios en ámbito
el otro.
de Cristo. Antes no había entrega plena por
a) Exahación Se ha humillado Jesús (Cc los otros. Ahora existe. Mirando a Jesús, los
y Cc'), se ha rebajado haciéndose hypékoos, cristianos se han sentido iluminados por la
alguien que está y escucha/acoge por abajo. gracia suprema del misterio, entendido como
Pues bien, Dios lo ha elevado (hyperyps6sen), vida que se ofrece hasta Ia muerte por los
desvelando en él su propio ser divino. Esta otros (2,6-11).
380 Dios jwdío, Dios cristiano
Hech 1,1 A Compuse el primer trabajo (!ogon), oh Teófilo, acerca de las cosas que Jesús
2 comenzó a hacer y enseñar, hasta el día en que fue elevado (aneléphthé),
habiendo dado órdenes por me_dio del Espírilu sanro a los apóstolis que había elegi;-
J a los que_ después de haber pa decido (paiheim) se presentó-vívo (ds6nta),
con muchos signos, dejándose ver poi ellos y habiándoles de 1o referente
al reino de Dios (basileia tou Tbeoi) durante cuarenta días.
4 Y comiendo con ellos (synalidsomenos), les mandó
-que no se alejaran de Jerusalén,
-ln9 que aguardaran la prom'esa del Padre (epangelia tou Patros),
5 de la que me oisteis hab[an pues Juan bautizó corl ogro,
p_ero noso.tros s.eréis bawtizad,os, con Espíritw Santo dintro de pocos d,ías.
6 C Los reunidos le preguntaron diciendo:
-Señor, ¿,uas restdurdr el reino d,e Israel en este tiempo?
t
Dios cristiano 381
: -lnder directamente como hace Pablo mundo el nuevo testimonio (ejemplo activo)
, r Rom 9- 1 1 . Pero Lucas utiliza aquí un de la vida de Jesús.
::scurso narrativo y así puede insinuar la
Parecía que el Espíritu podía separar-
:3spuesta, dejando que el mismo trascur-
nos de Jesús, llevándonos a un mundo
,o del libro la complete. Pregwntan los
donde ya no fuera necesario el evangelio
;iscípwlos acerca del reino y Jesús respon-
de entrega de la vida, del amor gratuito y
ie hablando del Espíritu.
el servicio hacia los pobres. Pues bien,
o No os üoca... Reasumiendo una palabra esa impresión resulta falsa. El Espíritu
-'lave de la tradición sinóptica (cf. Mc 13,32), que Cristo nos ha dado desde el culmen
-llech
1,7 deja tiempos (hhronous) y modos de su entrega nos conduce nuevamente al
hairows) para el Padre. No podemos impo- centro de su vida, para hacernos testigos
;rer a Dios un tipo de culminación mesiánica, de su obra. Hay en el mundo otras ver-
un esquema político, social o religioso.
dades, al menos relativas: la verdad de
e Pero recibiréis... y seréis mis testigos una mente que argumenta, la razón del
i1,8). El bautismo (nuevo nacimiento) en-el poder y de las estructuras legales y socia-
Espíritu debe interpretarse como <<muerte>> les... Pues bien, nuestro pasaje, con todo
recreadora: se cierra una etapa (la del "agua" el NT, sólo concede valor pleno a la ver-
o ley judía), pero se abre un nuevo camino dad del testimonio.
que lleva deJerusalén hasta los confines de la
tlerra. Testigo (martyr) es qwien dice lo qwe
ba visto, lo que sabe/siente poniendo en
Son muchos los temas evocados en juego la vida al dar su testimonio:
esta contraposición (1,7-8) e iré indicán- habiendo renacido en el Espíritu, llenos
dolos de un modo expositivo más que de su fuerza,los apóstoles del Cristo tes-
argumentativo. Trazaré por tanto un tifican su experienc ia. Empiezan en Jeru-
elenco de motivos que, puestos aquí, al salén, donde el mismo Jesús les ha man-
fin de las palabras delJesús pascual, reco- dado quedar (cf. 1,4), pero, en vez de
gen la temática anterior (de Hech 1,1-6 y esperar a que vengan los pueblos (cf. Is
de todo Lc-Hech), para situarla en pers- 62), son ellos los que salen, va¡r hacia
pectiva nueva) dentro de la Iglesia: todos los pueblos de la tierra. No van a
o La autoridad fundante (exowsia) perte- conquistar el mundo, para retornar luego
nece al Padre. No es autoridad dictatorial, como triunfadores a Sión, sino para que-
impuesta por alguien que quiere dominarnos darse, ofreciendo a todos la gracia de
desde arriba, manteniendo su ventaja. Al Jesús y la vida (nacimiento, apertura uni-
contrario, el Padre muestra su poder dando la versal) del Espíritu.
vida (como madre): es bueno aceptarle,
Ponerse en sus manos.
. El EsPíritu es promesa del Padre y don
del Cristo: herencia que nos dio al dejarnos.
. Espíritw y poder. El nuevo principio
(¡seréis bawtizados!) se expresa ahora como . El Espíritu es principio materno de la
fortalecimiento recibiréis la fuerza (dynarnis) Iglesia: seno bautismal del que nacemos.
del Espíritu Santo (1,8). Antes el Espíritu era o El Espíritu es, en fin, poder de comu-
promesa (1,4), ahora es poder.
nión: el mismo encuentro de amor entre los
. EsPíritu y misión. Ese nuevo nacerl hombres.
poder se expande en forma de camino testi-
monial: seréis mis testigos. No es poder para D) ¿Qwé hacéis mirando al cielo...?
instaurar un reino israelita, ni para dominar (1,9-11). Esta conclusión reasume lo
sobre los otros, sino para ofrecer en todo el dicho en Lc 24,50-53 y lo evocado en
384 Dios jwdío, Dios cristiano