Cómo Los Lobos Cambiaron Los Ríos

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Lobos no logran controlar alces en Yellowstone

Mark Kinver
BBC
4 septiembre 2010
La reintroducción de los lobos en un Parque Nacional de Estados Unidos no logró restablecer
los bosques del álamo temblón como habían proyectado varios investigadores.

Álamo temblón
Pie de foto,
La sobrepoblación de alces amenaza al álamo temblón.

Un equipo de científicos señaló en la revista especializada Ecology que los lobos que rondan
por el Parque Yellowstone no han impedido que los alces devoren los retoños de ese árbol.

El álamo temblón (Populus tremuloides) es una especie nativa de América del Norte y su
nombre proviene del hecho de que sus hojas "tiemblan" ante la menor brisa.

En un principio se había pensado que la presencia de los lobos crearía un zona de peligro para
esos herbívoros.

Los expertos señalan que hay que buscar nuevos mecanismos para proteger a los álamos
temblones del parque.

En su artículo en la publicación de la Sociedad Ecológica de Estados Unidos (Ecological


Society of America), los investigadores agregaron que demostró ser errónea la suposición de
que si los lobos eran los predadores del alce, este animal eventualmente aprendería a evitar
zonas de alto riesgo frecuentadas por los lobos.

Lea: Viviendo entre lobos salvajes

Regeneración del hábitat


El control de los alces permitiría que las plantas en esas zonas, como los álamos temblones,
crecieran sin ser consumidas por los herbívoros y a largo plazo el hábitat se regeneraría.

lobo
Pie de foto,
La reintroducción del lobo no logró controlar suficientemente la población de alces.

"Los predadores influyen indirectamente sobre las plantas a través de dos mecanismos
principales", según el artículo. "Al alterar ya sea la densidad o el comportamiento de los
herbívoros en su búsqueda de alimentos".

Al comienzo del siglo XX los lobos fueron eliminados de gran parte de su hábitat natural en
América del Norte debido a la caza, con lo cual se incrementó la población de alces.

"La reintroducción de los lobos en Yellowstone al comienzo de 1995 fue aclamada como un
gran éxito, no solamente por haber restablecido una especie extirpada, pero porque se
esperaba que restauraría el funcionamiento del ecosistema a través de efectos indirectos sobre
otras especies", señalaron los investigadores.

Si bien la población de alces se redujo, el equipo concluyó que no hubo un cambio perceptible
en el comportamiento de los animales en la búsqueda de alimentos.
Conclusiones erróneas
El principal autor, Matthew Kauffman, un científico del Servicio de Mediciones Geológicas de
EE.UU., sugirió que estas últimas conclusiones echan por tierra como prematura la tesis de la
recuperación del álamo temblón en su ecosistema.

"Este estudio no solamente confirma que el alce es el responsable del retroceso del álamo en
Yellowstone desde la década de 1890, sino que adicionalmente ninguno de los bosques de
álamo estudiados tras la restauración de los lobos parece haberse regenerado, inclusive en
zonas de alto riesgo para los alces", señaló Kauffman.

Debido a que la idea de las zonas de peligro no parece haber beneficiado al álamo, el equipo
concluyó que hace falta una reducción adicional de la población norteña del alce (actualmente
hay un 40% menos de estos herbívoros en comparación con el período previo a la
reintroducción del lobo) para que se recuperen los bosques del álamo temblón en Yellowstone.

La exitosa reintroducción del lobo en el Parque Nacional de Yellowstone


La reintroducción del lobo en el Parque Nacional de Yellowstone hace más de 20 años
"es el experimento ecológico más celebrado de la historia", según Mark Boyce; dicho
experimento sólo es posible con una intervención humana mínima

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LOBOS FOTOS DE ANIMALES BIODIVERSIDAD

Alec Forssman
Periodista especializado en Historia

22 de enero de 2020, 18:53

1/7

El lobo número 7 antes de su liberación en 1995


Foto: Jim Peaco, National Park Service
2/7

Liberación de un lobo en los años 90


Foto: Jim Peaco, National Park Service

3/7

Lobo negro y gris en una carretera nevada, en 2003


Foto: Jim Peaco, National Park Service

4/7

Lobo en el valle de Lamar, en 2009


Foto: Jim Peaco, National Park Service

5/7

Manada de lobos en el Parque Nacional de Yellowstone


Foto: National Park Service

6/7

Persiguiendo a un ciervo
Foto: National Park Service
7/7

Durmiendo en el bosque
Foto: National Park Service
El Parque Nacional de Yellowstone (Estados Unidos), considerado el parque nacional más
antiguo del mundo, fue creado en 1872 durante la presidencia de Ulysses S. Grant. En sus
inicios, la fauna del parque no recibió la misma protección que hoy en día: los lobos y los
pumas fueron eliminados deliberadamente en 1926 y, al cabo de unos años, la población de
ciervos aumentó tanto que los administradores del parque reconocieron que los herbívoros
estaban alterando la vegetación, por lo que se realizaron matanzas selectivas para controlar la
población de dichos animales. Las matanzas selectivas terminaron a finales de los años 60 y la
población de ciervos volvió a aumentar, por lo que finalmente se optó por reintroducir el
lobo: 14 lobos de la provincia de Alberta (Canadá) fueron liberados en 1995 y otros 17 lobos
canadienses en 1996. "La reintroducción del lobo (Canis lupus) en el Parque Nacional de
Yellowstone es el experimento ecológico más celebrado de la historia", así comienza un
estudio publicado en Journal of Mammalogy por Mark Boyce, de la Universidad de Alberta.
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MÁS INFO
"Los ciervos (Cervus elaphus) se alimentaban de la vegetación boscosa durante el invierno,
sobrepastoreando gravemente los árboles caducifolios y los arbustos", explica Boyce
a National Geographic España. "Al reducir las densidades de ciervos en algunas áreas, la
vegetación boscosa consiguió recuperarse, esto sucedió especialmente en hábitats
ribereños, donde sauces, álamos y alisos proporcionaban pasto cada invierno y a menudo
morían sus plantas. Así que hemos visto c��mo se ha recuperado la vegetación y, además,
se ha incrementado el número de osos grizzly y de pumas, todo ello ha creado un nuevo
estado medioambiental dentro de Yellowstone", destaca.
Es decir, la mayor influencia de osos pardos (Ursus arctos), pumas (Puma concolor) y bisontes
(Bison bison) está creando unas interacciones biológicas más complejas en el parque,
superando la interacción inicial entre ciervos y lobos. Eso sí, este "experimento ecológico" sólo
puede ser aplicado en zonas protegidas libres de explotaciones ganaderas y agrícolas, donde
la intervención humana es mínima.

Cómo los lobos cambiaron el curso del río Yellowstone


 El rewilding es una concepción de la Restauración Ecológica que consiste en la
recuperación de ecosistemas por medio de la reintroducción de especies clave en
ecosistemas de los que han desaparecido debido a la actividad humana.
 Los grandes carnívoros regulan las poblaciones de otras especies, ejerciendo un papel
clave en el mantenimiento de los ecosistemas.
 La reintroducción del lobo en el Parque Nacional de Yellowstone cambió la geología del
ecosistema.
En: Conservación, Poblaciones, Ríos, lagunas, lagos y pantanos

Lobo (Canis Lupus). Imagen de steve felberg en Pixabay.Sara Monzón López


3 julio, 2020 · Modificada: 05/08/2020 - 02:59
La reintroducción del lobo gris (Canis lupus) en el Parque Nacional de Yellowstone (Wyoming,
EEUU) es considerada una gran revelación en el ámbito de la Ecología. La eliminación del lobo
a principios del siglo XX provocó grandes desajustes en los ecosistemas del Parque por el
crecimiento descontrolado de las poblaciones de alces (Alces alces), llegando a afectar al curso
del río Yellowstone. Tras la reintroducción del lobo 70 años después, los ecosistemas pudieron
autorregularse de nuevo.

El inicio del declive

El Parque Nacional de Yellowstone fue el primero declarado en la historia de Estados Unidos,


en 1872. A pesar de la importancia de este acontecimiento, las especies del Parque no
gozaban de ninguna protección legal, por lo que los lobos fueron exterminados
deliberadamente hasta su desaparición en 1926.

Pocos años después, se materializaron los graves efectos de la ausencia de estos carnívoros.
Las poblaciones de ungulados, principalmente alces, comenzaron a aumentar drásticamente, y
la vegetación del Parque sufrió fuertes daños por la herbivoría excesiva. 

Alce americano en Yellowstone. Imagen de stephendixonart en Pixabay.


La regulación natural era la solución
Los daños producidos en el Parque se fueron agravando a medida que las poblaciones de
alces continuaban aumentando. Por ello, a mediados de los 60, la Administración del Parque
decretó el inicio de la reducción de estas poblaciones mediante caza. En 1969 se declaró la
moratoria de la medida, confiando en la regulación natural de los alces tras su previa
disminución. 
Sin embargo, las poblaciones de alces volvieron a crecer descontroladamente, por lo que
finalmente se decidió que el lobo sería reintroducido en el parque en 1995, tras más de 70 años
de ausencia. Se llevaron a cabo dos liberaciones de lobo gris canadiense en años
consecutivos, con un total de 31 individuos.
En muy poco tiempo, los lobos fueron capaces de regular las poblaciones de alces mediante
depredación, controlando la herbivoría desmesurada y permitiendo que los ecosistemas del
Parque se regularan por sí mismos.
El lobo, al igual que otros grandes depredadores, es una especie clave en el funcionamiento de
los ecosistemas, ya que regulan las cadenas tróficas desde el eslabón superior. La pérdida de
estas especies implica la necesidad imperiosa de desarrollar planes de reintroducción para el
mantenimiento de los ecosistemas. En la Península Ibérica pueden destacarse los casos
del quebrantahuesos, y el lince.
Efectos sobre la vegetación
Gracias a la recuperación de la vegetación por la supresión de la herbivoría excesiva, los
bosques de ribera (sauces, álamos, alisos) estabilizaron las orillas de los ríos. De esta forma,
se consolida el cauce del río Yellowstone, disminuyendo su serpenteo y permitiendo que el
paso del agua sea más rápido.
Cómo los lobos (Canis lupus) cambiaron el curso del río Yellowstone
Además, las tasas de erosión disminuyen, y el ecosistema adquiere mayor capacidad de
respuesta frente a perturbaciones futuras, permitiendo el desarrollo de suelos fértiles.
Un notable aumento de la biodiversidad
La reintroducción del lobo permitió la regulación del Parque de Yellowstone gracias al control
sobre las poblaciones de alces. Esto permitió el asentamiento de otras muchas especies con
funciones fundamentales para el funcionamiento de los ecosistemas.
Muchas especies carroñeras (urracas, águilas, cuervos, osos) pudieron aprovecharse de los
restos de las presas de los lobos. Gracias a la recuperación de la vegetación, muchas aves
volvieron a los bosques de Yellowstone, y la vegetación de ribera permitió que los castores
construyeran balsas y diques que a su vez albergaran anfibios, reptiles y peces.
El aumento de la biodiversidad dota a los ecosistemas de mayor resiliencia y resistencia frente
a posibles perturbaciones futuras. Por tanto, la prevención de la pérdida de biodiversidad es
una estrategia esencial, y mucho más rentable ecológica y económicamente para la salud
medioambiental y humana.

LOS LOBOS DE YELLOWSTONE – UN PEQUEÑO MILAGRO ECOLÓGICO


 octubre 31, 2019
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El parque Nacional de Yellowstone es considerado el parque más antiguo del mundo. Con su
creación, en 1872, se intentaba conservar uno de los espacios naturales más singulares de
Estados Unidos. Pero a pesar de ser un espacio protegido, en aquel momento no existían leyes
que resguardaran a las especies que habitaban en él. Entre todas ellas, los Lobos de
Yellowstone iban a sufrir las peores consecuencias.
 Con la disminución de sus presas y la desaparición de sus hábitats naturales, los ataques al
ganado aumentaban sin cesar. La mala prensa que existía contra ellos llevó a que, junto a los
pumas, fueran perseguidos y cazados durante años. En poco más de 10 años se mataron 136
lobos. Incluso los propios guardas del parque ayudaron a la matanza. Finalmente, en 1926,
cayó el último lobo.
Las consecuencias no se hicieron esperar. Se había roto el equilibrio.

SOLDADOS MUESTRAN UNA PIEL DE LOBO. PARQUE NACIONAL DE


YELOWSTONE 1905.   NATIONAL PARK SERVICE
En unos pocos años, el número de alces aumentó sustancialmente, lo que provocó a su vez
importantes cambios en la vegetación del parque. Sin ningún peligro del que preocuparse, este
herbívoro pronto empezó a diezmar arbustos y árboles. Los álamos y sauces que cubrían las
riberas de los ríos disminuyeron de manera dramática. Pronto la situación se hizo insostenible.
Para mantener su número estable e intentar controlar su efecto negativo, se inició una
campaña de matanzas controladas de alces que tuvo más o menos efecto durante un tiempo.
Pero a finales de los 60, con el aumento de la conciencia ambiental, se acabaron prohibiendo.
Como era de esperar el número de alces volvió a crecer. En pocos años la sobrepoblación se
convirtió en un problema y una posible solución pasaba por reintroducir al lobo.  Finalmente, en
1995, después de años de intentos y la modificación de varias leyes, se trajo al lobo de
vuelta. Habían pasado 70 años desde que el último de su especie pisara esas tierras.
La vuelta del lobo
Primero se reintrodujo un pequeño grupo de 14 lobos traídos directamente desde Alberta,
Canadá. A cada lobo se le colocó un collar de seguimiento por radio y durante todo el proceso
se minimizó al máximo el contacto con humanos. Durante una fría mañana de invierno, y
después de meses de preparación, por fin se abrieron las jaulas y los lobos pudieron pisar
la nieve del que sería su nuevo hogar.

LIBERACIÓN DE UN CACHORRO – JIM PEACO  NPS


Un año después, en 1996, se repetiría otra vez el proceso con otros 17 individuos. La idea
inicial era que la campaña durara 5 años, pero el éxito fue tan abrumador que no hizo falta más
que esas dos incursiones. Esos 31 lobos fueron suficientes para repoblar Yellowstone, y a día
de hoy, todos los lobos que hay en el parque han nacido allí.

Los lobos de Yellowstone – Un experimento único


El icónico parque se había convertido en un laboratorio gigante. Pocas veces se puede
estudiar los efectos que tiene la reintroducción de una de sus especies clave, de su principal
depredador, en un ecosistema. Sin duda, era una oportunidad única  y los científicos no
perdieron detalle. Durante años recogieron datos y tomaron nota de cualquier posible cambio.

Con la reintroducción del lobo se buscaba controlar la población de alces que crecía sin
control, pero se produjeron muchísimos más cambios. Se inició una reacción en cadena, una
cascada de interrelaciones que acabó afectando a todo el ecosistema.  Un pequeño milagro
que sorprendió a todo el mundo.

GRUPO DE LOBOS PERSIGUIENDO A UN ALCE – DOUG SMITH  NPS


Como era de esperar, la población de alces disminuyó significativamente con la vuelta del lobo.
Pero las consecuencias no se quedaron ahí; su comportamiento también se vio afectado. Para
evitar los ataques, estos herbívoros se movían más y pasaban menos tiempo alimentándose en
los mismos sitios (al menos durante las horas en las que los lobos estaban más activos).
Pronto, se empezó a ver el efecto en la vegetación. En tan solo 6 años, la altura de algunos de
los sauces a las orillas de los ríos se quintuplicó.  Su número también aumentó, al igual que el
de otros matorrales, arbustos y bayas. A su vez, esto provocó que el número de  insectos
creciera, lo que atrajo también a numerosos pájaros.
Con la llegada del lobo, otras muchas especies amenazadas se recuperaron. Disminuyó el
número de coyotes, su principal competidor, pero aumentó el de osos pardos, pumas y
bisontes. También el de las águilas y los buitres, que volvían a tener carroña de la que
alimentarse.

UN LOBO JUNTO A UN CADÁVER DE ALCE ACOMPAÑADO DE URRACAS Y


CUERVOS. JIM PEACO  – NPS

En resumen, toda la biodiversidad aumentó, y  las interacciones biológicas de todo el


ecosistema se hicieron más ricas y complejas. Pero la reaparición del lobo no solo afectó a
la biología del parque. También tuvo un sorprendente impacto en la geografía del terreno,
cambiando incluso el curso de los ríos.
 “La reaparición del lobo también tuvo su impacto en la geografía del terreno”
 
El aumento de la vegetación en sus orillas ayudó a fijar el terreno y a reducir la erosión. Con
ello, el número y calado de los meandros disminuyó y el curso de los ríos se consolidó. Se
volvieron más rápidos. En estas condiciones, los castores, que también habían estado
desaparecidos durante años, regresaron. Estos pequeños ingenieros empezaron a construir
sus diques y barreras con la madera de sauce, generando así balsas de agua que favorecieron
aún más el crecimiento de estos árboles.

Lo que en un inicio comenzó por el lobo y su presa, había impactado en todo el


ecosistema.
MANADA DE LOBOS EN LA NIEVE – FOTO DE  EVA BLUE DESDE UNSPLASH
Cuando tocas una pieza, todas se mueven
Si algo nos demuestra esta historia es la importancia de cada una de las especies de un
ecosistema. Cada uno de los eslabones de esa intrincada cadena es esencial. Al final, un
ecosistema sano y rico no es más que una intricada red de relaciones en donde todas las
partes dependen unas de otras.

“La reintroducción del lobo (Canis lupus) en el Parque Nacional de Yellowstone es el


experimento biológico más celebrado de la historia” (Mark S Boyle)

El efecto en el parque muy probablemente no se debe únicamente al lobo, otras muchos


factores y especies han aportado también su granito  de arena, pero la reintroducción del lobo
en Yellowstone es sin duda uno de los ejemplos más bonitos de lo que en ecología se conoce
como “cadena trófica”. Fue la visibilización de que cualquier ecosistema es mucho más
fascinante y complejo de lo que podemos imaginar. Un recordatorio de que aunque los
grandes depredadores se alimentan de una serie de especies, esto permite a muchas otras
sobrevivir.

FOTO DE EVA BLUE DESDE UNSPLASH


Una reflexión final
Un dato importante del que no podemos olvidarnos es que, además de reintroducir al lobo,
durante todos estos años se mantuvo la interacción humana al mínimo. Por decirlo de forma
sencilla, se sacó al hombre de la ecuación y se dejó a la naturaleza seguir su curso. Todo junto
hizo que  el experimento fuera un éxito. Los lobos habían vuelto para quedarse, y con ellos,
se había recuperado gran parte del rico ecosistema del parque.

Aún así, a pesar de la reintroducción del lobo y de todas las mejoras que trajo consigo,
Yellowstone sigue estando amenazado por numerosos peligros y ciertas zonas del parque
siguen igual que antes. Al final, un parque Natural es tan solo una pequeña isla que para bien y
para mal, no está aislada de su alrededor.

 Los lobos de Yellowstone nos hablan de la importancia de cuidar todas las especies de


un ecosistema. Intentar revertir la situación cuando una de las especies desaparece es muy
complicado, y las consecuencias son impredecibles. Es mucho más rentable evitarlo desde un
principio que intentar arreglarlo después.

Una idea  que ilustra perfectamente por qué en muchas ocasiones se centra toda la atención
en una única especie. Las grandes campañas para salvar a los leones del Serengueti, a los
tigres de Bengala, o al lince de Doñana, no solo están resguardando a estos carismáticos
animales. Junto a ellos, también se está protegiendo el resto del ecosistema.
FOTO DOUG SMITH – NPS
FOTO PORTADA: D. STAHLER – NPS
– REFERENCIAS:
 WOLF REINTRODUCTION CHANGES ECOSYSTEM IN
YELLOWSTONE HTTPS://WWW.YELLOWSTONEPARK.COM/THINGS-
TO-DO/WOLF-REINTRODUCTION-CHANGES-ECOSYSTEM
 WOLVES FOR YELLOWSTONE: DYNAMICS IN TIME AND
SPACE HTTPS://ACADEMIC.OUP.COM/JMAMMAL/ARTICLE/99/5/102
1/5107035
 DIEL PREDATOR ACTIVITY DRIVES A DYNAMIC LANDSCAPE OF
FEAR HTTPS://ESAJOURNALS.ONLINELIBRARY.WILEY.COM/DOI/F
ULL/10.1002/ECM.1313
 WATER TABLES CONSTRAIN HEIGHT RECOVERY OF WILLOW ON
YELLOWSTONE’S NORTHERN
RANGE. HTTPS://ESAJOURNALS.ONLINELIBRARY.WILEY.COM/DOI/
ABS/10.1890/07-0212.1
 THE CHALLENGE OF UNDERSTANDING NORTHERN
YELLOWSTONE ELK DYNAMICS AFTER WOLF
REINTRODUCTION HTTPS://WWW.NPS.GOV/YELL/LEARN/YS-24-1-
THE-CHALLENGE-OF-UNDERSTANDING-NORTHERN-
YELLOWSTONE-ELK-DYNAMICS-AFTER-WOLF-
REINTRODUCTION.HTM
 YELLOWSTONE’S WOLVES ARE BACK, BUT THEY HAVEN’T
RESTORED THE PARK’S ECOSYSTEM. HERE’S
WHY. HTTPS://EU.USATODAY.COM/STORY/TECH/SCIENCE/2018/09
/07/WOLVES-REINTRODUCTION-YELLOWSTONE-ECOSYSTEM/
973658002/
 IS THE WOLF A REAL AMERICAN
HERO? HTTPS://WWW.NYTIMES.COM/2014/03/10/OPINION/IS-THE-
WOLF-A-REAL-AMERICAN-HERO.HTML?_R=3

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