y entró con Francisco de Asís al convento.

Los motivos del lobo Algún tiempo estuvo el lobo tranquilo en el santo asilo. Sus bastas orejas
los salmos oían y los claros ojos se le humedecían. Aprendió mil gracias y
El varón que tiene corazón de lis, hacía mil juegos cuando a la cocina iba con los legos. Y cuando Francisco su
alma de querube, lengua celestial, oración hacía, el lobo las pobres sandalias lamía.
el mínimo y dulce Francisco de Asís, grupo
está en un rudo y torvo animal, izquierdo Salía a la calle, iba por el monte, descendía al valle, entraba en las casas y
bestia temerosa, de sangre y de robo las fauces de furia, le daban algo de comer. Mirábanle como a un manso galgo.

los ojos del mal; el lobo de Gubbia, Un día, Francisco se ausentó. Y el lobo dulce, el lobo manso y bueno, el
el terrible lobo, rabioso ha asolado los alrededores, lobo probo, desapareció,
cruel ha deshecho todos los rebaños; grupo tornó a la montaña, y recomenzaron su aullido y su saña.
devoró corderos, devoró pastores, derecho
y son incontables sus muertos y daños. Otra vez sintióse el temor, la alarma, entre los vecinos y entre los pastores;
colmaba el espanto
Fueron cazadores armados de hierros fueron destrozados. Los duros los alrededores, de nada servían el valor y el arma, pues la bestia fiera no
colmillos dieron cuenta de los más bravos perros, como de cabritos y de dio tregua a su furor jamás, como si tuviera fuegos de Moloch y de
corderillos. todos Satanás.

Francisco salió; al lobo buscó en su madriguera. Cuando volvió al pueblo el divino santo, todos le buscaron con quejas y
Cerca de la cueva encontró a la fiera enorme, las que forman V llanto, y con mil querellas dieron testimonio de lo que sufrían y perdían
que al verle se lanzó feroz contra él. tanto por aquel infame lobo del demonio.

Francisco, con su dulce voz, alzando la mano, grupo derecho Francisco de Asís se puso severo.
al lobo furioso dijo: "¡Paz, hermano lobo ¡". Se fue a la montaña a buscar al falso lobo carnicero.
El animal contempló al varón de tosco sayal; grupo izquierdo Y junto a su cueva halló a la alimaña.
dejó su aire arisco, cerró las abiertas fauces agresivas,
y dijo: "¡Está bien, hermano Francisco!". "En nombre del Padre del sacro universo cominote -dijo- ¡oh lobo
perverso!, a que me respondas:
"¡Cómo! -exclamó el santo- ¿Es ley que tú vivas de horror todas de la V ¿Por qué has vuelto al mal? Contesta. Te escucho." Como en sorda lucha,
y de muerte?". habló el animal, la boca espumosa y el ojo fatal:
"La sangre que vierte tu hocico diabólico,
el duelo y espanto que esparces, el llanto de los campesinos, "Hermano Francisco, no te acerques mucho. Yo estaba tranquilo, allá en el
el grito, el dolor, de tanta criatura de Nuestro Señor, ¿no han de contener convento;
tu encono infernal? ¿Vienes del infierno? al pueblo salía, y si algo me daban estaba contento y manso comía.

¿Te han infundido, acaso, su rencor eterno Luzbel o Bellal?". Yoshi Más empecé a ver que en todas las casas estaban la Envidia, la Saña, la
Y el gran lobo, humilde: "¡Es duro el invierno, y es horrible el hambre! Ira, y en todos los rostros
ardían las brasas de odio, de infamia y mentira. Hermanos a hermanos
hacían la guerra,
En el bosque helado no hallé qué comer Tati perdían los débiles, ganaban los malos,
y busqué el ganado, y a veces comí ganado y pastor. hembra y macho eran como perro y perra,
¿La sangre? Yo vi más de un cazador sobre su caballo, y un buen día todos me dieron de palos.
llevando el azor al puño; o correr tras el jabalí, el oso o el ciervo;
Me vieron humilde, lamía las manos y los pies.
y a más de una vi mancharse de sangre, herir, torturar,de Sarmeli Seguía tus sagradas leyes; todas las criaturas eran mis hermanos, los
las roncas trompas al sordo clamor, y los animales hermanos hombres, los hermanos bueyes, hermanos estrellas y hermanos
de Nuestro Señor. gusanos.
Y no era por hambre que iban a cazar". Francisco responde:
"En el hombre existe mala levadura. Cuando nace, viene con pecado. Y así, me apalearon y me echaron fuera.
Y su risa fue como un agua hirviente,
y entre mis entrañas revivió la fiera,
y me sentí lobo malo de repente;
Es triste. Mas el alma simple de la bestia, es pura. Yoselyn
mas siempre mejor que esa mala gente.
Tú vas a tener desde hoy qué comer. Dejarás en paz rebaños y gente en
este país.
Y recomencé a luchar aquí, a me defender y a me alimentar, como el oso
¡Que Dios melifique tu ser montaraz!". -"Está bien, hermano Francisco de
hace, como el jabalí,
Asís." -"Ante el Señor, que todo ata y desata, en fe de promesa tiéndeme
que para vivir tienen que matar.
la pata.
Déjame en el monte, déjame en el risco,
" El lobo tendió la pata al hermano de Asís,
déjame existir en mi libertad; vete a tu convento, hermano Francisco,
que a su vez le alargó la mano. Fueron a la aldea.
sigue tu camino y tu santidad."

La gente veía y lo que miraba casi no creía. lucy

El santo de Asís no le dijo nada. Le miró con una profunda mirada, y partió
Tras el religioso iba el lobo fiero, y, baja la testa, quieto le seguía como un
con lágrimas y con desconsuelos, y habló al Dios eterno, con su corazón. El
can de casa, o como un cordero.
viento del bosque llevó su oración, que era: Padre nuestro, que estás en
Francisco llamó a la gente a la plaza y allí predicó.
los cielos
Y dijo: "He aquí una amable caza.

El hermano lobo se viene conmigo; me juró no ser ya Arely

vuestro enemigo, y no repetir el ataque sangriento.
Vosotros, en cambio, daréis su alimento a la pobre bestia de Dios" –
"¡Así sea!" contestó la gente toda de la aldea. Y luego, en señal de
contentamiento,
movió testa y cola el buen animal,