Amparo Contra Normas Resumen Final
Amparo Contra Normas Resumen Final
Amparo Contra Normas Resumen Final
AMPARO CONTRA
MATERIA: AMPARO
NORMAS
NOMBRRE: Coronado Lorencez Diego Esteban
Grupo:9501
Amparo Contra normas
Introducción
Una de las acciones que se pueden hacer valer en el juicio de garantías es la
llamada acción de amparo contra leyes según lo permite el artículo 103 de la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. se busca justificar la
existencia de una acción en torno al ataque directo contra una ley considerada
como inconstitucional. Para ello es necesario conocer el desarrollo que ha
presentado a través del tiempo y los elementos que la hacen posible. Para la
protección constitucional se buscan “todos aquellos instrumentos políticos,
económicos, sociales y jurídicos incorporados a las normas fundamentales con el
propósito de limitar el ejercicio del poder y lograr que sus titulares se sometan a
los lineamientos constitucionales. El amparo es una muestra clara de la posibilidad
que existe para llevar a cabo una actividad de control a la constitucionalidad, sin
embargo, no es el único medio para hacerlo y por ello también es necesario
mencionar algunos de los sistemas existentes.
Normas Autoaplicativas
Esta clasificación se basa en el momento en que las normas concretizan sus
efectos en la esfera jurídica de las personas, es decir, en el criterio de
individualización. Las autoaplicativas modifican la esfera jurídica de la parte
quejosa desde el momento en que entran en vigor, es decir, que a partir de que
rigen imponen a las personas obligaciones o crean derechos o le generan ciertas
consecuencias jurídicas. En ese sentido se auto aplican, es decir, no necesitan de
ningún otro acontecimiento para concretarse en la situación de sus destinatarios y
por eso reciben el nombre de normas de individualización incondicionada, pues se
individualizan sus efectos
una ley establezca directamente obligaciones de hacer o no a un tercero, sin la
necesidad de un acto de aplicación, que impacte colateralmente a la parte quejosa
no destinataria de las obligaciones− en un grado suficiente para afirmar que
genera una afectación jurídica relevante la ley establezca hipótesis normativas
cuyos destinatarios no sean los quejosos, sino terceros de manera inmediata sin la
necesidad de un acto de aplicación, pero cuyos efectos resentirán los quejosos
por su posición frente al ordenamiento jurídico. la ley regule algún ámbito material
y su contenido.
¿En qué vía y cómo se impugna una norma?
Si la norma es autoaplicativa y se impugna con motivo de su vigencia, se
reclamará en amparo indirecto, que la norma y los actos de creación y puesta en
vigencia son los reclamados; las autoridades que intervengan esos actos serán las
responsables y todos los conceptos de violación estarán enderezados en contra
de la norma.
Debe identificarse con toda precisión el precepto legal que la contenga, es decir, el
número del artículo, regla o apartado en que se halle inserta; en su caso, la
fracción, el inciso o el párrafo, cuando está en un texto que contiene varias
reglas. El ordenamiento también debe ser identificado con su denominación
correcta y si se trata de un texto reformado, conviene señalar la fecha de su
publicación en el periódico oficial de que se trata o su vigencia. También debe
considerarse que un precepto puede contener diversas reglas la formulación de
argumentos mínimos de impugnación. Precluye si no se hace valer en el recurso
en contra del auto en que se aplicó el precepto que se estima inconstitucional.
Por medio de este mecanismo se ha emprendido la revisión de la regularidad
constitucional de la Ley de Amparo por planteamientos formulados en los recursos
de revisión y queja, en el entendido de que ésta no se tiene como acto
reclamado, no se emplaza a las autoridades que participaron en su creación y, de
estimarse irregular, la sentencia de amparo sólo impedirá su aplicación en el caso
concreto. El propio Alto Tribunal ha establecido que en el mecanismo de control
difuso de constitucionalidad o convencionalidad las partes no pueden exigir que el
Tribunal se pronuncie exhaustivamente sobre los planteamientos que las partes
pudieran formularle, pues es una potestad del Tribunal ejercer o no este tipo de
control y porque las partes tienen expedita la acción de amparo para hacerse oír .
Cuando se aplica la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación en autos o
resoluciones por los Tribunales de amparo o alguna otra legislación que regule el
juicio, también es posible cuestionar su regularidad constitucional a través de los
recursos
Debe identificarse con toda precisión el precepto legal que la contenga, es decir, el
número del artículo, regla o apartado en que se halle inserta; en su caso, la
fracción, el inciso o el párrafo, cuando está en un texto que contiene varias
reglas. El ordenamiento también debe ser identificado con su denominación
correcta y si se trata de un texto reformado, conviene señalar la fecha de su
publicación en el periódico oficial de que se trata o su vigencia. También debe
considerarse que un precepto puede contener diversas reglas la formulación de
argumentos mínimos de impugnación. Precluye si no se hace valer en el recurso
en contra del auto en que se aplicó el precepto que se estima inconstitucional. Por
medio de este mecanismo se ha emprendido la revisión de la regularidad
constitucional de la Ley de Amparo por planteamientos formulados en los recursos
de revisión y queja, en el entendido de que ésta no se tiene como acto
reclamado, no se emplaza a las autoridades que participaron en su creación y, de
estimarse irregular, la sentencia de amparo sólo impedirá su aplicación en el caso
concreto.
El propio Alto Tribunal ha establecido que en el mecanismo de control difuso de
constitucionalidad o convencionalidad las partes no pueden exigir que el Tribunal
se pronuncie exhaustivamente sobre los planteamientos que las partes pudieran
formularle, pues es una potestad del Tribunal ejercer o no este tipo de control y
porque las partes tienen expedita la acción de amparo para hacerse oír .
Cuando se aplica la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación en autos o
resoluciones por los Tribunales de amparo o alguna otra legislación que regule el
juicio, también es posible cuestionar su regularidad constitucional a través de los
recursos previstos en la Ley de Amparo .
¿Quiénes son las responsables cuando se impugna una norma
autoaplicativa?
Como los únicos actos reclamados pueden ser los referentes a la creación y, en
su caso, a la puesta en vigor de la norma, las autoridades responsables son las
autoras de éstos, en el caso de las leyes federales o generales, cada una de las
Cámaras del Congreso de la Unión, es decir, la de Diputados y la de Senadores;
en el caso de las leyes estatales, el Congreso del estado. Cuando hay actos de
refrendo y publicación, no hace falta llamar a las autoridades que los realizan si no
se les atribuyen vicios propios, pero siempre debe llamarse a la que
promulga, aunque no se planteen vicios propios de la promulgación.
¿Quiénes son las responsables cuando se impugna una norma con motivo
de su aplicación?
En amparo indirecto, como se reclaman la norma y el acto de aplicación, debe
llamarse a las autoridades creadoras de la norma y a las autoridades o
particulares en funciones de autoridad que intervienen en el acto de
aplicación, pero no a los particulares auxiliares que aplican la ley, pues ellos no
son autoridades ni responsables para efectos del amparo. Por excepción, el
Máximo Tribunal ha ordenado que se llame como responsable a una autoridad
que no interviene en el acto de aplicación, tratándose de la autoliquidación de un
tributo declarado inconstitucional por la jurisprudencia en un juicio en el que no se
reclamó la ley. La autoridad emisora o promulgadora de una ley que el quejoso se
auto aplicó tiene legitimación para interponer este recurso, aunque no haya sido
señalada como responsable. En amparo directo no se señala como acto
reclamado la norma, entonces, sólo se llama como responsable a la que dicta
y, en su caso, ejecuta la sentencia, laudo o resolución que pone fin al juicio.
La regla que permite reclamar una norma como autoaplicativa, por su
vigencia, sólo es aplicable a quienes se encuentren en la hipótesis de la ley
cuando entra en vigor, pero no a las personas que se coloquen en la hipótesis
normativa en un momento posterior, pues en este supuesto sólo podrán combatirla
con motivo del primer acto de aplicación .En ciertos supuestos , basta que una
persona esté colocada en el supuesto de una norma o que ésta se le aplique para
que esté en aptitud de reclamar todas las demás normas que pertenezcan al
mismo sistema de causación y se refieran a su misma categoría como
contribuyente, siempre que constituyan efectivamente una unidad . Igual ocurre
cuando se trata de un sistema normativo complejo, compuesto por normas
autoaplicativas o hetero aplicativas.
Puede reclamar una norma, como titular de interés legítimo, quien se vea afectado
por el mensaje valorativo discriminatorio o por cierto efecto disuasivo.
¿De quién puede provenir el acto de aplicación?
Una autoridad, la cual deberá ser señalada como responsable en la demanda.
Un particular con funciones de autoridad que deberá ser señalado como
responsable. Un particular sin funciones de autoridad, que actúa en auxilio del
Estado y que igualmente está sometido al cumplimiento de la ley. Esta persona no
queda comprendida en la categoría de autoridad o particular responsable y no
debe ser llamada como responsable. Un particular en relaciones de coordinación
con la parte quejosa. La propia parte quejosa, cuando se auto aplica la ley para
evitar ser sancionada o sufrir las consecuencias de su desacato. En este caso, la
parte quejosa no es por supuesto responsable. En amparo indirecto, por regla
general, si no se reclama la norma con motivo del primer acto de aplicación, se
sobreseerá por consentimiento tácito respecto de la norma , sin perjuicio de
que, de ser el caso, si el acto de aplicación proviene de una autoridad o de un
particular con funciones de autoridad y se expresaron conceptos de violación por
vicios propios de este último, se puedan estudiar dichos argumentos si no se
actualiza una causal de improcedencia respecto del acto o algún otro obstáculo
legal.
Frente a esta regla, operan diversas excepciones: entre ellas, cuando el afectado
optó por combatir el primer acto de aplicación a través de un medio ordinario de
defensa y éste resulta exitoso al invalidar el acto, entonces podrá reclamarse la ley
con motivo del siguiente acto de aplicación, o cuando se aplicó tácitamente y no
hay evidencia de que la parte quejosa tuviera certeza de su aplicación. En amparo
directo, el consentimiento de una norma no genera el sobreseimiento, porque la
norma no es señalada como acto reclamado, sino que sólo es materia de los
conceptos de violación. Además, no existe limitación para combatir en los
conceptos de violación la norma aplicada a la parte quejosa, aunque no sea el
primer acto de aplicación, pero existe la limitación de que el planteamiento debe
proponerse en el primer juicio de amparo que derive de ese juicio si la norma ya
fue aplicada.
Así, es posible impugnar una norma aplicada con anterioridad, si se trata de una
nueva secuela procesal; en cambio, habrá precluido el derecho para hacerlo si esa
norma fue aplicada anteriormente en la misma secuela procesal y no fue
impugnada, o se impugnó en un amparo directo anterior, pero no se estudió y esa
omisión no fue recurrida en revisión; la preclusión no operará en este último
supuesto si la omisión en el estudio obedeció a que se concedió el amparo por
una violación procesal que impidiera el estudio del tema de inconstitucionalidad de
la norma .Aunque estas reglas pueden parecer complicadas, la idea central es que
la aplicación de una ley debe ser combatida en la primera oportunidad que se
tenga para no perder el derecho de hacerlo por preclusión.
¿Cómo se estudia la constitucionalidad o la convencionalidad de una
norma?
En conclusión
El juicio de amparo es una herramienta fundamental para contrapuntar el poder de
las instituciones y por lo que resulta indispensable el conocimiento de esta para
hacer valer los derechos inalienables del ciudadano. Es el único medio de control
constitucional que tienen los ciudadanos de hacer cumplir sus derechos, es
necesario hacer mención que el juicio se rige bajo los mismos principios que el
juicio de amparo que deben observarse durante la tramitación y resolución del
procesó de amparo este juicio tiene sus hipótesis previstas en el artículo 103
constitucional y que se considere violatorio de sus derechos humanos y sus
garantías, reconocidos en la Constitución o en Tratados Internacionales. Su objeto
es la declaración de inconstitucionalidad del acto que se impugna, invalidándose o
molificándose en relación con el agraviado y restituyéndolo en el pleno goce de
sus derechos.
BIBLIOGRAFIAS
1.- ARELLANO GARCIA, Carlos. “El juicio de amparo”, Ed. Porrúa. Primera edición.
México 1982.
2.- BRICEÑO SIERRA, Humberto. “Teoría y Técnica de Amparo”. Ed. Cajica, Tercera
Edición. Puebla México 1966.
3.- BURGOA ORIHUELA, Ignacio, “Las Garantías Individuales”, Ed. Porrúa, Vigésima
Segunda Edición. México 1989.
4.- BURGOA ORIHUELA, Ignacio, “El Juicio de Amparo”. Ed. Porrúa. Segunda Edición,
México 1997.