Resumen Corrientes 2016
Resumen Corrientes 2016
Resumen Corrientes 2016
PSICOLOGIA
OM
.C
DD
LA
FI
2016
0
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
OM
.C
DD
LA
FI
1
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
UNIDAD I
Introducción
La psicología del siglo XIX heredo de la aufklarung la preocupación por alinearse con las ciencias de la
naturaleza y por rencontrar en el hombre la prolongación de las leyes que rigen los fenómenos naturales.
Mediante las determinaciones de vínculos cuantitativos, la elaboración de leyes que operen a la manera
de las funciones matemáticas y las hipótesis explicativas son los intentos por los cuales la psicología
intentaba aplicar una metodología que los lógicos creyeron descubrir en la génesis y el desarrollo de las
OM
ciencias de la naturaleza. Así es como el destino de esta psicología está fundada en 2 postulados
filosóficos:
1. Que la verdad el hombre se agota en su ser natural.
2. Y que el camino de todo conocimiento científico debía pasar por la determinación de vínculos
cuantitativos, la construcción de hipótesis y la verificación experimental.
Toda la historia de la psicología hasta mediados de siglo XX es la historia paradojal de las contradicciones
.C
entre ese proyecto y estos postulados. Por perseguir el ideal del rigor y la exactitud de las ciencias de la
naturaleza fue llevada a renunciar esos postulados.
La idea de una precisión objetiva y cuasi matemática en el dominio de las ciencias humanas no es
DD
aceptable si el hombre mismo nos es más del orden de lo natural.
La psicóloga se obligó a si misma a una renovación total y al descubrir un nuevo status del hombre se
impuso a sí misma, como ciencia un estilo nuevo.
Esta renovación no es solo un hecho histórico cuyo desarrollo pueda situarse en los últimos 100 años,
sino que es aún una tarea incompleta que queda por cumplir, aún permanece.
LA
La psicología en estos 100 años instauró relaciones nuevas con la práctica: educación, medicina mental,
organización de los grupos. La psicología genética se constituyó como el marco de toda pedagogía
posible y la psicopatología como una reflexión sobre la práctica psiquiátrica. En sentido contrario, la
psicología se ha interrogado sobre los problemas que promovían esas prácticas: El éxito o fracaso
FI
escolar, el problema de la inserción del hombre a su trabajo, el problema de la inserción del enfermo
en la sociedad. Por esta estrecha y constante ligazón con la práctica, por esta reciprocidad de sus
intercambios, la psicología se hace semejante a las ciencias de la naturaleza.
La psicología nace en ese punto en el que la práctica del hombre encuentra su propia contradicción.
La psicología del desarrollo nació como una reflexión sobre la detención del desarrollo, la psicología de
la adaptación como un análisis de los fenómenos de inadaptación; la de la memoria, de la conciencia,
del sentimiento aparecieron como Psicologías del olvido, del inconsciente y de las perturbaciones
afectivas.
La psicología contemporánea es en su origen un análisis de lo anormal, de lo patológico, de lo conflictivo,
una reflexión acerca de las contradicciones del hombre consigo mismo.
Y se transformó en una psicología de lo normal, de lo adaptativo, de lo ordenado de manera secundaria,
en un esfuerzo por dominar esas contradicciones.
Ahora resta responder en qué medida es capaz de dominar las contradicciones que la hicieron nacer, a
partir de ese abandono de la objetividad naturalista.
2
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
El prejuicio de la naturaleza:
Las psicologías del siglo XIX tienen como rasgo común tres estilos de objetividad tomados de las ciencias
de la naturaleza.
1. El método físico químico: Sirve de común denominador a todas las psicologías de la asociación y del
análisis elemental Según la física Newtoniana, toma dos nociones: 1- a partir de los hechos, acceder a
las leyes más generales, 2- el análisis de un objeto se debe a partir de reducción de los fenómenos
complejos a elementos más simples. La psicología tendrá que reencontrar en los fenómenos más
complejos del pensamiento los segmentos elementales que los componen. En el principio de la
percepción por ejemplo encontrará la sensación, en el principio del espíritu y del conocimiento que el
espíritu tiene de sí mismo, encontrará el sentimiento.
2. El modelo orgánico: ahora el esfuerzo se dirige a captar más de cerca la realidad humana definida por
OM
su naturaleza orgánica. Tanto Bain, Fechner y Wundt a partir de sus análisis valorizaron que el aparato
psíquico no funciona como un mecanismo sino como un conjunto orgánico en el que las reacciones son
originales y por consecuencia irreductibles a las acciones que las desencadenan.
3. El modelo evolucionista: El origen de las especies fue a mediados del siglo XIX el principio de una
renovación considerable dentro de las cs del hombre, el abandono del mito Newtoniano y su relevo del
mito darwiniano. La evolución del individuo es descrita así a la vez como un proceso de diferenciación-
.C
movimiento horizontal de expansión hacia lo múltiple y por un movimiento de organización jerárquica-
movimiento vertical de integración en la unidad. (Spencer). Así procedieron las especies en el curso de
su evolución y así procederán las sociedades en el curso de su historia, así procede el individuo en el
DD
curso de su génesis psicológica.
Jackson en la neurología, Ribot en la psicología patológica retoman los temas spencerianos. Jackson
definió la evolución de las estructuras nerviosas por tres principios: va de lo simple a lo complejo, de lo
estable a lo inestable, de lo más organizado a lo menos organizado. Esto implica como contrapartida
que la enfermedad sigue la ruta inversa a la evolución, deteriora primero las estructuras más inestables
LA
y más recientes y avanza rápidamente hacia las estructuras más sólidas y antiguas. Ribot traslado los
análisis neuropsiquiátricos de Jackson a los dominios de la personalidad, de los sentimientos, de la
voluntad, de la memoria: en las amnesias lo que permanecen son los recuerdos más antiguos y estables,
mientras que se borran los más recientes y superficiales, en las alteraciones de la vida afectiva, los
FI
sentimientos egoístas que son también los más arcaicos reaparecen, así como surgen de nuevo los
automatismos cuando la voluntad se derrumba. La importancia del evolucionismo se debe sin duda a
que ha sido el primero en mostrar que el hecho psicológico no tiene sentido más que en relación a un
porvenir o un pasado, que su contenido actual descansa sobre un fondo silencioso de estructuras
anteriores que la cargan de toda su historia. Este modelo introduce la dimensión del tiempo, porque se
concibe al hombre en la cadena evolutiva, pero aún se lo sigue considerando como un ser natural.
El evolucionismo no es suficiente aún para otorgarle a la psicología una nueva orientación, que es
necesario para que abandone el proyecto natural, dice Foucault, hay que introducir lo que el hombre
tiene diferente del animal.
Es la capacidad simbólica, el lenguaje, la capacidad de significar. Es la dimensión histórica lo que permite
dar una orientación, es más característica y propia está en el hombre.
3
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
sometida a una regulación, es decir, que su desarrollo depende en forma constante del resultado que
acaba de obtener. Esta regulación puede ser interna y presentarse bajo la forma de sentimiento o puede
ser externa y tomar como punto de referencia la conducta del OTRO, la conducta es entonces, reacción
a la reacción de otro, y adaptación a su conducta y exige así un desdoblamiento del cual el ejemplo más
típico es el del lenguaje, que se desarrolla siempre con un diálogo eventual. La enfermedad no es
entonces ni un déficit, ni una regresión, sino una perturbación de esas regulaciones. De eso dan cuenta
los impulsos de los obsesivos por ejemplo, que no pueden concluir sus acciones porque perdieron
esa regulación que permite comenzar y concluir una conducta.
Según Dilthey, “el hombre no aprende lo que es rumiando sobre sí mismo, lo aprende por la historia”.
Para Foucault las significaciones que subyacen a la conducta y escapan a la conciencia son las que en la
historia individual de ese sujeto se cristalizan en el pasado.
OM
Ninguna forma de psicología dio más importancia a la significación que el psicoanálisis, que sigue ligado
en el pensamiento de Freud a sus orígenes naturalistas. Es en el interior del sistema Freudiano que se
produce ese gran trastocamiento de la psicología, es en el curso de la reflexión freudiana que el análisis
causal se transformó en génesis de significaciones.
El sentido es coextensivo a toda conducta”, en lo absurdo de un lapsus en lo incoherente de un sueño,
está pero de manera oculta.
.C
Entonces las significaciones que subyacen a la conducta son los que la historia individual de un sujeto
cristalizó en el pasado en torno de acontecimientos importantes.
Al decir que un síntoma reproduce simbólicamente un traumatismo arcaico queda implicado que el
DD
pasado no invade totalmente el presente, sino que el presente se defiende contra esa reaparición. Está
presente la instancia yoica.
La instancia que en el presente se defiende del pasado, es una instancia social, el superyó.
Freud ha dado su orientación a la psicología moderna, confirió un estatuto objetivo a la significación.
LA
axioma: "frente a todo estímulo efectivo se ejecuta una respuesta y la respuesta es inmediata". Por lo
tanto, todo comportamiento debe explicarse a partir de una constelación estimulante, sin recurrir a
entidades como el instinto, la conciencia, la libertad; inversamente, frente a cualquier estímulo se debe
buscar una respuesta, al menos implícita, como es el caso de las reacciones vegetativas (las emociones)
o las reacciones laríngeas silenciosas (el pensamiento). El campo dinámico de comportamiento deviene
así el objeto mayor de la psicología.
2) Evolución y génesis. Estas estructuras de conjunto y las significaciones que las habitan evolucionan en
el curso del devenir individual.
El devenir psicológico no es el desarrollo de estructuras ya preparadas, sino que es la preparación
efectiva de las estructuras adultas; no se trata ya de evolución espontánea, sino de génesis activa.
3) Performances y aptitudes. Otro problema planteado por la existencia de las significaciones objetivas
es el de sus manifestaciones, sus apariciones en el dominio de la observación. Esto se efectúa de acuerdo
con dos formas, la performance, es decir la realización, la Leisting de los alemanes, y la expresión.
La psicología tradicional era una psicología de lo virtual; las facultades no se inscribían sino entre
posibilidades abstractas. Ahora es en el nivel mismo de lo real, y en el marco por él definido, que se
buscan determinar las consecuencias del comportamiento. De aquí nace el principio del test, debido a
4
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
Cattell y Binet, y definido como un examen estandarizado en el que el resultado es estimado por
comparación estadística entre los individuos a los que se les ha aplicado.
4) La expresión y el carácter. En cambio, los psicólogos de la expresión y del carácter se esforzaron por
recuperar el contenido de las significaciones bajo la forma de la necesidad individual. Este contenido
individual aflora en principio en todos los fenómenos de proyección, y sobre todo en la proyección, a
partir de un estímulo poco diferenciado, de interpretaciones que le otorgan un sentido imaginario: es el
principio de las pruebas de Rorschach y de Murray (manchas de tinta, imágenes de escenas humanas).
5) Conductas e instituciones. Expresadas o silenciosas, las significaciones objetivas de las conductas
individuales están unidas por un lazo esencial a la objetividad de las significaciones sociales: las obras de
Janet, de Freud, de Blondel habían intentado despejar esa relación.
El estudio de la instituciones busca determinar las estructuras de base de una sociedad; aislar las
OM
condiciones económicas en su incidencia directa sobre el desarrollo del individuo y sobre las formas
pedagógicas en sentido amplio El análisis de las opiniones y de las actitudes busca determinar los
fenómenos colectivos que operan como el contexto de las conductas afectivas del individuo, así como
de sus operaciones intelectuales de percepción, de juicio y de memoria. Esas investigaciones son
cuantitativas antes que estructurales y descansan siempre sobre la elaboración de datos estadísticos.
.C
El fundamento de las significaciones objetivas
Todos esos análisis de las significaciones objetivas plantean temas contradictorios cuya distancia
constituye la dimensión propia de la psicología.
DD
La psicología no busca ya probar su posibilidad por su existencia, sino fundarla a partir de su esencia, y
no busca suprimir, ni tampoco atenuar sus contradicciones, sino justificarlas.
La psicología aparece como análisis empírico de la manera en que la existencia humana se ofrece en el
mundo. Pero debe fundarse sobre el análisis existencial de la manera en que esta realidad se
temporaliza, se espacializa y, finalmente, proyecta un mundo: de modo que las contradicciones de la
LA
psicología, o la ambigüedad de las significaciones que describe, habrán encontrado su razón de ser, su
necesidad, y al mismo tiempo su contingencia, en la libertad fundamental de una existencia que escapa,
por derecho pleno, a la causalidad psicológica.
La psicología "científica" nació de las contradicciones que el hombre encuentra en su práctica; y que, por
FI
otra parte, todo el desarrollo de esta "ciencia" consistió en un lento abandono del "positivismo" que la
alineaba desde el origen con las ciencias de la naturaleza. Este abandono y el nuevo análisis de las
significaciones objetivas ¿pudieron resolver las contradicciones que lo motivaron? No lo parece, ya que
en las formas actuales de la psicología se reencuentran esas contradicciones bajo la forma de una
5
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
ALEJANDRO DAGFAL “PARA UNA ESTÉTICA DE LA RECEPCIÓN DE LAS IDEAS PSICOLÓGICAS.
Resumen
El objetivo de este trabajo es abordar algunas cuestiones metodológicas que plantean las historias de la
psicología realizadas en los países llamados “periféricos”. En particular, la posición “no central” de estos
últimos pone a menudo de relieve el problema fundamental de la recepción de las ideas acuñadas en
los centros de mayor producción teórica. Sin embargo, ¿se trata de una mera copia, de una asimilación
pasiva de “influencias” remotas? Para responder a esto se hará un repaso del concepto de recepción.
INTRODUCCION
La estética de la recepción, conocida también como escuela de Constanza, se ha ido transformando, a
partir de 1966, en una teoría de la comunicación literaria. El objeto de sus investigaciones es la historia
OM
literaria definida como un proceso que implica siempre tres factores: el autor, la obra y el público. Es
decir, un proceso dialéctico, en el cual el movimiento entre producción y recepción pasa por la
intermediación de la comunicación literaria. De este modo, la noción de recepción es entendida en el
doble sentido de acogida (o apropiación) e intercambio.
Hugo Vezzetti presentaba un panorama de la historia de la psicología en la Argentina en los siguientes
términos:
.C
Ahora bien ¿qué es lo “argentino” en esta historia? Los autores y los modelos de conocimiento son
europeos en general y franceses en particular. Frente a esto se suele acentuar la “dependencia” y la idea
de la mera copia. El problema es más amplio que el de una historia de la psicología y tiene que ver con
DD
la cuestión de la conformación de un pensamiento y una cultura nacionales. Aquí interesa resaltar la
categoría de recepción: una apropiación activa que transforma lo que recibe.
Dos años después, también Hugo Vezzetti presentaría una historia del freudismo en la Argentina
haciendo estas salvedades:
Un punto de articulación es la insistencia en la dimensión de la recepción, una apropiación […] que no es
LA
meramente reproductiva sino que reconstituye su objeto según la problemática que subtiende las
operaciones de lectura. Las lecturas colocan al texto en el marco de una tradición, lo incluyen en un
ámbito de experiencia o se sirven de él para impulsar un nuevo horizonte de problemas, para trastocar
alguna región del sentido común o para establecer nuevas formas de relación con el público.
FI
El debate de la categoría de recepción es pertinente para una historia de las ideas psicológicas porque,
de hecho, ya ha sido utilizada en la historiografía reciente de la disciplina. Ahora bien, más allá de las
declaraciones de principios, sigue en pie la cuestión de determinar cuál ha sido el verdadero provecho
de transpolar este concepto de la teoría de la comunicación literaria a la historia de la psicología.
6
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
de un mensaje, da lugar a una respuesta, aunque más no sea el silencio o la indiferencia. A su vez, la
respuesta ante una obra bien puede ser el simple placer estético, la toma de distancia crítica o incluso
un acto de creación, es decir, la producción de otra obra, de tal manera que el receptor se transforma
también en productor, teniendo la posibilidad de romper con las normas establecidas y de forjar nuevos
cánones estéticos.
En consecuencia, el lector tiene una función de selección respecto de la tradición con la que se confronta:
puede apropiarse del pasado (incluyendo las interpretaciones realizadas por otros lectores) o puede
rechazarlo y tratar de superarlo. En cualquiera de los dos casos, la interpretación que realice será
forzosamente parcial, ya que estará limitada por su propio punto de vista, por su propia perspectiva,
como veremos a continuación. En suma, es en esta concepción dialéctica (en el sentido de diálogo, de
preguntas y respuestas, de problemas y soluciones), en esta interacción entre producción y recepción,
OM
en este “intercambio continuo entre autores, obras y públicos”, donde reside la originalidad de la
estética de la recepción.
El recurso a la interpretación ubica a esta teoría en el plano de las ciencias del sentido. La conjunción
entre el efecto propio de una obra y su recepción activa por parte del lector no se realiza en el vacío, sino
que responde a todo un “sistema de referencias objetivamente formulable” que modula la disposición
del lector frente a dicha obra. Jauss, basándose en la noción husserliana de “horizonte de lo vivido”,
.C
llama a este sistema de referencias horizonte de expectativas, y lo considera como el fruto de una
experiencia intersubjetiva. Este concepto de horizonte, precisamente, es central para la estética de la
recepción. Por un lado, permite una continua puesta en relación del presente y el pasado, ya que se
DD
aplica tanto al lector (en el momento que interpreta un texto) como al autor (en el momento en que lo
escribe), lo cual abre a una continua tensión entre el texto del pasado y el horizonte del presente. Por
otra parte, diferencia un horizonte de expectativas de tipo social, más general (sostenido por una
precomprensión de la realidad cotidiana, del mundo y de la vida) y un horizonte más propiamente
literario, regido por los códigos estéticos de la literatura de la época, por las normas específicas del
LA
género y por las formas canónicas de relacionar ficción y realidad. De este modo, en el proceso de
recepción, el sentido de una obra surge de una doble fusión de horizontes, que continuamente pone en
relación dialéctica al presente con el pasado y a la literatura con la sociedad. Y es en este punto que la
estética de la recepción aporta algo nuevo respecto de las teorías literarias más tradicionales, resituando
FI
la interpretación en una dimensión histórica y social, sin por ello despojar al hecho literario de su
especificidad estética.
Si se quisiera aplicar las categorías de la “estética de la recepción” a una historia de las ideas psicológicas
debería comenzarse por asumir que se trata de una transpolación de dominios, ya que entre los textos
pertenecientes al campo literario y aquellos que provienen del campo de la psicología existen toda una
serie de diferencias. En primer lugar, es necesario reconocer que en los textos literarios prima una
voluntad de transmisión eminentemente estética, mientras que en los textos psicológicos lo que suele
querer comunicarse son los principios de una teoría o las particularidades de una práctica. Sin embargo,
aun cuando la dimensión estética no quede en primer plano, no puede negarse que, incluso en los textos
de tipo teórico, ella juega un papel insoslayable. Aunque el simple placer estético no sea su objetivo
principal, la producción y recepción de este tipo de textos también están condicionadas por los cánones
literarios de cada época, que determinan en el lector una cierta afinidad o un rechazo que no pueden
explicarse solamente por razones inherentes a los “contenidos teóricos”.
7
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
Por diversas razones, en cada momento histórico, en cada lugar, el “gusto” del público está más
preparado para recibir algunos conceptos, para adoptar ciertas teorías. Y es evidente que la constitución
de ese gusto, la formación de esa sensibilidad, es el resultado de una experiencia estética intersubjetiva,
que entre otros factores responde a la literatura, tanto psicológica como no psicológica. Por este sesgo,
en el que el horizonte de expectativas articula aspectos estéticos y cognitivos que trascienden al campo
literario, puede resultar provechosa la utilización de la categoría de interés intelectual, extraída de la
sociología histórica del conocimiento. Este concepto, que debemos a Kurt Danziger, busca dar cuenta de
la estructura intencional transindividual que caracteriza a una disciplina, toda vez que son sus objetivos,
sus propósitos, sus intereses, en definitiva, los que determinan su lugar respecto de otras
disciplinas. Pero, al mismo tiempo, esos intereses permiten establecer las normas de evaluación de la
producción de los miembros de esa disciplina. Es decir, los intereses intelectuales permiten una doble
OM
legitimación: por un lado, en virtud de ellos, una disciplina puede obtener el reconocimiento y la
legitimación de otras comunidades disciplinares u otros actores sociales (como el Estado, por ejemplo).
Otra categoría de utilidad para la historia de la psicología, que va en el mismo sentido que las de
horizonte de expectativas e interés intelectual, es la de campo, del sociólogo francés Pierre Bourdieu.
Ella busca dar cuenta de la autonomía relativa de una comunidad (científica o intelectual, por ejemplo),
respecto de otros grupos y de influencias sociales más generales. El campo se define como un espacio
.C
complejo, con propiedades y reglas específicas que constituyen un “sistema de relaciones objetivas
entre posiciones adquiridas”, donde las ideas, los textos y las prácticas tienen un valor relativo al carácter
posicional de los actores, ya sean estos individuos, grupos o escuelas. A su vez, dentro del campo, el
DD
acceso a posiciones de autoridad está supeditado a la acumulación de un capital simbólico específico, lo
cual implica necesariamente una dinámica de competencia y de lucha por la legitimidad, el concepto de
campo pone de relieve el carácter conflictivo de la legitimidad y el reconocimiento, que solo pueden
provenir de los pares que integran el propio campo, quienes a su vez compiten por la acumulación de
un capital simbólico limitado. Esta categoría, aplicada a la historia de la psicología, permite pensar el
LA
carácter específico de las ideas y las prácticas de la disciplina, sin por ello perder de vista la dimensión
social, cuya eficacia, sin embargo, resulta mediatizada por la lógica de las relaciones del propio campo.
A su vez, como ya lo señalara Vezzetti, el concepto de campo abre un camino para abordar las
complejidades de la psicología, evitando al mismo tiempo los riesgos de la falsa unicidad y del
FI
una distinción entre problema y problemática. Los problemas puntuales remiten más bien a una
dimensión individual y consciente, en la que los actores se representan aquello que aparece ante ellos
como un obstáculo o una dificultad. La problemática alude en cambio a una estructura colectiva,
patrimonio de un grupo, que es en gran parte inconsciente, y que constituye el marco dentro del cual
los problemas puntuales se hacen posibles. Si consideramos con Danziger que las actividades que
generan conocimiento tienen lugar en un contexto de resolución de problemas, de allí se sigue que los
objetos psicológicos no son el resultado de la invención de sujetos individuales, sino que, forzosamente,
responden a actividades constructivas realizadas por grupos que comparten una misma problemática.
Por ello, los verdaderos sujetos históricos no serán entonces los actores individuales, sino los sujetos
colectivos.
En resumen, los distintos conceptos que hemos examinado, a saber, el de horizonte de expectativas, el
de interés intelectual, el de campo y el de problemática, a nuestro juicio comparten algunas
8
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
características comunes que los hacen provechosos para una historia de la psicología que se pretenda
crítica, a saber:
Rompen con las viejas antinomias entre lo social y lo disciplinar, lo externo y lo interno.
Comprenden los problemas históricos en un marco transindividual e intersubjetivo.
Aspiran a una cierta objetividad, aunque no de manera ingenua.
Por otra parte, estos conceptos, además de ser articulables entre sí, resultan compatibles con una
concepción de la comunicación del conocimiento que considera los procesos de producción y recepción
de manera dialéctica, pudiendo dar cuenta así de la especificidad de la elaboración del conocimiento
psicológico en países situados en la periferia, como es el caso de la Argentina.
A modo de ejemplo, podríamos tratar de aplicar este modelo de manera un tanto esquemática. Para
OM
ello, trataremos de poner en relación la obra de dos autores argentinos de los años 1960. Me refiero a
Luis María Ravagnan y a José Bleger. A primera vista, resulta innegable que ambos fueron
contemporáneos, considerando que en la misma época fueron profesores de las carreras de psicología
recién creadas (en 1959 dictaron incluso la misma asignatura, Introducción a la Psicología, en La Plata y
Buenos Aires, respectivamente), que publicaron diversos libros y artículos durante los años ‘50 y ’60, y
que incluso privilegiaron muchas veces las referencias a los mismos autores franceses, como Maurice
.C
Merleau-Ponty y Daniel Lagache. Sin embargo se hace evidente que allí se terminan las similitudes entre
ambos, ya que si tenemos en cuenta cuáles eran las problemáticas a las que querían dar respuesta y
cuáles eran sus intereses intelectuales rápidamente observamos que en realidad pertenecían a dos
DD
“épocas” radicalmente distintas. En consecuencia, sus horizontes de expectativas eran totalmente
disímiles y buscaban legitimarse en subcampos diferentes.
Ravagnan era uno de los miembros más antiguos del grupo de profesores que intervino en la creación
de las carreras de psicología. Llegaba a esta disciplina a partir de preocupaciones eminentemente
teóricas derivadas de su formación filosófica, en un recorrido que había comenzado en Bergson para
LA
pasar por la caracterología y desembocar en la fenomenología existencial, pero siempre con una
marcada inspiración neokantiana, como buena parte de su generación. A su vez, publicaba con cierta
frecuencia en órganos emblemáticos de la cultura letrada y liberal, como el suplemento dominical del
diario La Nación y en la revista Sur, o incluso daba conferencias en el Instituto Francés de Estudios
FI
Superiores o en la Escuela Superior de Guerra. Bleger, por el contrario, era un joven médico que llegaba
a la psicología desde su formación psiquiátrica y su pasión por el psicoanálisis. Miembro a la vez de la
Asociación Psicoanalítica Argentina y del Partido Comunista, había ganado notoriedad a través de un
libro polémico en el que trataba de conciliar psicoanálisis y marxismo. Para ello, se había inspirado en
sus camaradas franceses –con quienes tenía un contacto fluido– que siendo también psiquiatras
rescataban la psicología concreta de Georges Politzer. Ya en esa época, consideraba que la psicología
era básicamente un oficio que se definía por su propia práctica.
Si Ravagnan citaba a Merleau-Ponty y a Lagache, despojaba a la obra del primero de su dialéctica y a la
del segundo de su vocación clínica y profesionalista, para poner al humanismo existencialista en
continuidad con el “espiritualismo” bergsoniano. Si Bleger citaba a Merleau-Ponty y a Lagache, los
situaba al lado de Politzer y de Pichon-Rivière para fundar una psicología de la conducta compatible con
el materialismo dialéctico y una psicohigiene que definía a la salud mental como un problema social. En
definitiva, aunque hayan coincidido parcialmente en tiempo y lugar, mientras que Ravagnan era uno de
los últimos exponentes del pensamiento de los años ’40, Bleger era uno de los primeros en hacerse cargo
de los problemas que caracterizarían a los años ’60.
9
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
El interés reside justamente en mostrar cómo, detrás de esas supuestas copias o detrás de esas
yuxtaposiciones carentes de valor se esconde todo un horizonte de expectativas radicalmente distinto
del de la obra de origen, enlazado a una problemática sociohistórica compleja y singular. Y es justamente
este horizonte de expectativas que es importante reconstruir, esas problemáticas a las que dan
respuesta los objetos teóricos que es necesario desmenuzar para restituir al proceso de recepción su
carácter activo.
OM
.C
DD
LA
FI
10
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
ALEJANDRO DAGFAL “LA IDENTIDAD PROFESIONAL: EL CAMPO DEL PSICOLOGO-PSICOANALISTA” EN
LA ARGENTINA (1959-1966).
RESUMEN
En Argentina, la creación de las carreras de Psicología, a fines de los años 1950, fue seguida por la
invención de un nuevo rol profesional: el del “psicólogo de orientación psicoanalítica”. Sin embargo, sus
competencias en el campo de la clínica no estaban legalmente establecidas, y eran celosamente
preservadas por los psiquiatras y psicoanalistas más conservadores. Al mismo tiempo, los creadores de
las carreras con un perfil científico no tenían ninguna intención de que los psicólogos se dedicaran a las
prácticas psicoterapéuticas. Así, la identidad profesional de esos primeros psicólogos-psicoanalistas se
fue construyendo de manera reactiva, por oposición a las restricciones que suponía el rol auxiliar que
OM
les era propuesto, tanto desde el campo médico como desde las propias carreras. Por otra parte, los
psiquiatras y psicoanalistas más progresistas funcionaron como modelo identificatorio “positivo” que
les permitió forjarse una identidad profesional posible en el campo de la clínica. Este trabajo aborda este
proceso desde un punto de vista histórico.
.C
La implantación del psicoanálisis en la Argentina es un fenómeno cuya magnitud ha sido destacada por
los historiadores de la disciplina. Esto es aún más remarcable si se considera la realidad de otros países
con fuerte tradición psicoanalítica, como Francia o Brasil, donde las ideas freudianas, a pesar de su
DD
popularidad, siempre han tenido que disputar un espacio con orientaciones psicológicas llamadas
“científicas”, que también tenían una presencia de larga data (Dagfal, 2011; Ohayon, 1999; Roudinesco,
1986). En Argentina, luego de la reacción antipositivista de los años 1930, la tradición experimental de
principios de siglo apenas si tuvo continuadores reconocidos. Aunque en los años 1950 algunos de los
fundadores de las carreras de Psicología hayan querido reflotar esa tradición, su empresa se vio
LA
rápidamente condenada al fracaso, lo cual no hizo más que acentuar la hegemonía de la clínica en
general y del modelo teórico psicoanalítico en particular. En ese sentido, si bien en los años 1940 los
primeros psicoanalistas oficialmente reconocidos fueron médicos en su gran mayoría, a partir de los
años 1960, con el egreso de los primeros psicólogos, se fue conformando una nueva figura profesional,
la del “psicólogo-psicoanalista”, en la medida en que, muy rápidamente, ellos adoptaron masivamente
FI
el psicoanálisis, no solo como marco teórico privilegiado, sino también como modelo de práctica y
referencia identitaria. Y esto es particularmente llamativo, ya que esta adopción del psicoanálisis, según
veremos, no solo se produjo sin ningún tipo de cobertura legal, sino que tuvo lugar de manera
imprevista, contra los proyectos de casi todos los personajes involucrados en la organización del campo
psi. Con el paso del tiempo, cambiarían las modas teóricas y los autores de referencia. La fenomenología
existencial cedería su lugar al estructuralismo y la escuela inglesa (Melanie Klein) a la francesa
(Jacques Lacan). Sin embargo, el psicólogo argentino iba a seguir definiendo su identidad profesional en
relación con el psicoanálisis, modelo que, en sus diversas variantes, ya ha guiado su práctica durante
cerca de medio siglo.
11
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
La conformación de una identidad profesional también trae aparejada la delimitación de una esfera de
competencias. Y si pensamos la profesión con la lógica bourdiana del “campo”, se constata que no está
exenta de luchas y relaciones de fuerza, en la medida en que quienes detentan posiciones dominantes,
a partir de la acumulación de un capital simbólico que siempre es escaso — y que, por lo tanto, es fuente
de disputa —, controlan el ingreso o el ascenso del resto de los miembros (Bourdieu, 1966, 1976). De
este modo, se pone de relieve el carácter conflictivo de la legitimidad y lo reconocimiento en cualquier
campo profesional, ya que sólo pueden provenir de pares que, a su vez, no dejan de competir por la
obtención de legitimidad y reconocimiento, lo cual los sitúa en una posición de “juez y parte”. Para
Abbott, sin embargo, la dinámica de las profesiones — que él entiende en términos de sistema — no
viene tanto de la competencia entre pares sino de aquélla entre profesiones por la determinación de los
límites de cada jurisdicción.
OM
En esta perspectiva, una profesión — es decir, “un grupo ocupacional exclusivo que aplica conocimiento
abstracto a casos particulares” — se desarrolla cuando una jurisdicción queda vacante, sea porque acaba
de ser creada o porque un antiguo ocupante la ha abandonado o ha perdido una parte considerable del
control que ejercía sobre ella (Abbott, 1988, p. 8). Si bien esta visión es muy discutible, sirve para
pensar cómo cada disciplina busca establecer un claro monopolio sobre determinada esfera de
competencias, aunque, en la práctica, otras (profesionales y no profesionales) también aspiren al control
.C
de esa misma zona de problemas.
Si bien, como hemos dicho, en EEUU el surgimiento de esa comunidad de especialistas fue muy
temprano, no sucedió lo mismo en Latinoamérica, donde las primeras carreras universitarias de
Psicología (conducentes a un título habilitante) fueron creadas medio siglo más tarde: en Guatemala en
1946, en Colombia en 1947, en Chile en 1948, en Brasil en 1953, en Perú y Argentina en 1955
FI
(Klappenbach & Pavesi, 1994). En cuanto a Europa, pueden mencionarse los casos de Francia (1947),
Suiza (1965) y Rusia (1966) (Vilanova, 1993). Particularmente en Francia, la Psicología, como disciplina y
profesión, fue muy criticada desde diferentes perspectivas filosóficas, que no dejaban de considerarla
una mera provincia dentro de sus territorios (y ciertamente no la más respetable), Por ejemplo, en 1928,
Georges Politzer comparaba los 50 años de historia de la Psicología con una “epopeya de desilusiones”,
en la que primaban promesas incumplidas e investigaciones aisladas, como si se tratara de “un estanque
de ranas” (Politzer, 1928/1966).
Tres décadas más tarde, otro filósofo, Georges Canguilhem, iba a formular una crítica sin concesiones al
proyecto de Daniel Lagache, uno de los artífices de la profesionalización de la Psicología en Francia.
Lagache, que era médico y psicoanalista, en 1947, en su clase inaugural como profesor de Psicología
General en la Sorbona, había esbozado una “teoría general de la conducta” que trataba de hermanar los
enfoques humanistas y naturalistas, las psicologías experimental y clínica, para sentar las bases de esa
nueva profesión, en la que el psicoanálisis tendría un lugar de privilegio. Esta concepción, que pregonaba
la unidad de la psicología, bajo la égida de la conducta, guió los pasos de los primeros psicólogos
franceses — del mismo modo en que una década más tarde iba a tener una enorme incidencia en la
formación de los primeros psicólogos argentinos.
12
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
Según Canguilhem — que en este punto retomaba los argumentos de Politzer —, la pregunta por el ser
de la Psicología resultaba particularmente incómoda para los psicólogos, cosa que no sucedía a los
filósofos con los interrogantes sobre la Filosofía. Pero para la Psicología, la pregunta por su esencia o,
más modestamente, por su concepto, cuestiona también la existencia misma del psicólogo, en la medida
en que al no poder responder exactamente sobre lo que es, se le hace muy difícil poder responder por
lo que hace.
En cuanto a la supuesta unidad de la que hablaba su amigo Lagache, Canguilhem no era menos incisivo,
ya que la consideraba más “un pacto de coexistencia pacífica concertado entre profesionales” que una
“esencia lógica”. Sin embargo, por esa misma época, Foucault discípulo de Canguilhem, difería en parte
con las concepciones de Politzer y de su propio maestro, aunque se situaba en una perspectiva análoga,
tratando de resumir la historia de la Psicología entre 1850 y 1950 (Foucault, 1957). En ese siglo, para
OM
Foucault, la Psicología había abandonado gradualmente los postulados naturalistas que habían signado
su nacimiento, para poder adaptarse a la especificidad de su objeto de estudio. Tratando de ser precisa
y objetiva, se enfrentó a su propia paradoja, y debió reconocer que el ser humano no podía ser abordado
con los principios y métodos de las ciencias de la naturaleza. Así, entre el siglo XIX y el siglo XX, el filósofo
francés esbozaba una suerte de dirección evolutiva para la disciplina, que iba del “prejuicio de la
naturaleza” hacia el “descubrimiento del sentido”, alejándose del positivismo de sus orígenes. Este
.C
tránsito desde el orden natural hacia el plano de la significación se había realizado por diversas vías
teóricas, entre las cuales el Psicoanálisis había sido la fundamental, al lado de la fenomenología (de
Husserl a Jaspers) y del historicismo diltheyano. En el plano de la práctica, según Foucault, este pasaje
DD
había permitido a la Psicología una mejor aprehensión de su objeto, esto es, de lo anormal, de lo
patológico, de los distintos niveles de contradicción del hombre consigo mismo. Se había apropiado
así de nuevos dominios (educación, medicina mental, organización de los grupos) y se había interrogado
sobre nuevos problemas (como el desempeño escolar, la inserción del enfermo en la sociedad, la
adaptación del hombre a su trabajo, etc.). En todo caso, se había ofrecido como “fundamento científico-
LA
racional” para toda una serie de prácticas. No obstante, como ciencia y como profesión, la Psicología
aún tenía muchas deudas. Estos debates iban a estar muy presentes en la Argentina entre 1950 y 1960,
periodo en el que se produciría el nacimiento del psicólogo como un nuevo profesional.
FI
los años 1950, durante lo que se ha dado en llamar “el primer peronismo”. En efecto, en el transcurso
de los dos primeros gobiernos de Juan Domingo Perón (1946– 1952 y 1952–1955), con el apoyo del
Estado, se desarrolló vertiginosamente una psicología aplicada — particularmente bajo la forma de la
psicotecnia y la orientación profesional —, que resultaba particularmente apta para complementar los
proyectos industrialistas del gobierno. La orientación profesional, por ejemplo (que servía para vincular
el mundo de la educación al del trabajo utilizando toda una suerte de técnicas psicológicas), alcanzó
rango constitucional. Ello implicó el nacimiento de numerosas instituciones destinadas a fomentarla y
aplicarla, así como la creación de carreras menores destinadas a formar profesionales capaces de realizar
esa tarea. Fue a partir de la iniciativa de algunas de esas instituciones que, en 1954, se organizó en la
provincia de Tucumán el Primer Congreso Argentino de Psicología. Como los psicólogos aún no existían
en tanto tales, los participantes eran en su mayoría profesores de psicología, filósofos de orientaciones
diversas, sacerdotes, psicotécnicos, médicos psiquiatras e, incluso, algunos psicoanalistas (Dagfal,
13
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
1997). Lo cierto es que, en una sesión plenaria de ese evento, se aprobó una declaración tendiente a “la
creación de la carrera universitaria del psicólogo profesional” a escala nacional: El Primer Congreso
Argentino de Psicología declara la necesidad de crear la carrera universitaria del psicólogo profesional
con arreglo a las siguientes condiciones: I. Se establecerá como sección autónoma en las Facultades de
carácter humanístico, aprovechando los institutos ya existentes y la enseñanza que se imparte en esas
y en otras Facultades que puedan ofrecer su colaboración (Medicina, Derecho, Ciencias Económicas,
etc.); II. La carrera comprenderá un plan completo de asignaturas teóricas y la debida intensificación
práctica en las distintas especialidades de la profesión psicológica, otorgando los títulos de Licenciado
en Psicología (previa tesis de Licenciatura) y de Doctor en Psicología (previa tesis de Doctorado); III.
Establecerá además carreras menores de Psicólogos auxiliares en los distintos dominios de la terapia
médica, pedagogía, asistencia social, organización industrial, y otros campos de aplicación a las
OM
necesidades de orden nacional y a las regionales servida por las diferentes universidades argentinas.
Así se trazó un programa de estudios para la carrera de psicólogo, cuyo comienzo debía surgir en las
facultades de filosofía y letras de Buenos Aires y La Plata y desarrollarse en un ciclo de cinco años (Horas,
1961, p. 345).
No obstante, en los meses subsiguientes, la mayoría de los proyectos presentados en las distintas
universidades no llegaron a buen puerto, con lo cual cabe preguntarse sobre las diferencias entre el
.C
desarrollo de la Psicología en el ámbito académico y en el profesional11. Todo indica que, en ese
período, si bien el ámbito profesional reclamaba una mayor legitimación del quehacer psicológico, el
académico respondía a otro tipo de imperativos (lo cual resulta entendible si se piensa que las
DD
universidades más importantes habían sido una suerte de bastión de la resistencia antiperonista)
(Mangone & Warley, 1984). Luego del derrocamiento de Perón, en septiembre de 1955, la dictadura que
tomó el poder en cierto modo delegó el manejo de las universidades a los sectores intelectuales más
liberales (progresistas y no progresistas), que durante el gobierno depuesto habían tenido que prosperar
en las sombras. Las universidades nacionales comenzaron entonces una etapa de normalización
LA
académicas para la profesionalización de la disciplina, que vinieron a sumarse a las condiciones del
ámbito profesional que ya parecían estar presentes desde la etapa anterior. Quizás de este modo sea
más fácilmente entendible que, después de que las universidades recuperaran su autonomía, en sólo
dos años — entre 1957 y 1959 —, la carrera de Psicología haya sido creada en cinco universidades
nacionales: en Buenos Aires, en 1957; en La Plata, Córdoba y San Luis, en 1958 y en Tucumán, en 1959
(además de la de Rosario, que había sido reabierta en 1956).
Al no haber psicólogos titulados, el cuerpo profesoral de las carreras se fue conformando de manera no
sistemática, con los recursos humanos disponibles en cada ciudad o en ciudades vecinas, lo cual resultó
en un caleidoscopio de teorías, orientaciones y formaciones (Dagfal, 2009a; Monasterio, 2011).
Entre fines de 1958 y 1960, hicieron una tentativa de organizar en común el campo de la Psicología
académica, para lo cual se reunieron en Buenos Aires en varias oportunidades. Frente al problema de la
falta de profesores formados en las áreas que ellos querían privilegiar, en 1959 dejaban constancia de
su impotencia por escrito: Existen varias especialidades psicológicas para cuya investigación y enseñanza
el país carece de expertos idóneos. Por su generalidad y su trascendencia, ello constituye un problema
universitario y nacional. En esa situación se encuentran, con carácter de primera necesidad, las
asignaturas siguientes: Psicología de Laboratorio, Psicología Industrial, Orientación Profesional.
14
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
La descripción del “estado de situación” más que reflejar la realidad de la disciplina, dejaba ver cuáles
eran los ideales de los fundadores. Era obvio que, para esa época, en la Argentina, a diferencia de otros
países, la “Psicología de laboratorio” prácticamente había desaparecido, al igual que otras formas de
aquélla considerada científica u objetiva. Por otra parte, en la era post-peronista, la psicología industrial
y la orientación profesional tampoco estaban ya entre las ramas más populares. Y si no había
profesionales formados en esas áreas era más bien porque habían quedado identificados con el gobierno
depuesto en 1955.
En ausencia de docentes capacitados para todas las áreas, acordaron que, después de una licenciatura
común, cada carrera se especializara en la orientación más adaptada a su propia tradición, a las
demandas del ambiente, y a los docentes de los que disponía. Siguiendo esa lógica, en los estudios de
posgrado, la carrera de Buenos Aires debía especializarse en clínica y en psicología social, la de Córdoba
OM
en psicología industrial, la de Rosario en psicometría, la de San Luis en psicopedagogía y la de La Plata
en psicología experimental14. Este consenso venía anunciándose desde 1959, pero recién se plasmó en
1960, al cabo de una serie de reuniones en el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONICET), que
había sido fundado en 1958. Sin embargo, la tarea iba a ser dificultosa, ya que las gestiones iniciadas en
Europa para contratar un profesor de psicotecnia no tuvieron ningún éxito.
Si los diversos proyectos de los fundadores parecían acercarse a la idea de una formación científica para
.C
los futuros psicólogos, podría decirse que los alumnos tendrían otro tipo de expectativas. Lo cual no iba
a dejar de incidir en el curso de los acontecimientos. Para muchos de los fundadores, la Psicología se
situaba de plano dentro de lo que Foucault denominaba “el prejuicio de la naturaleza” o de lo que
DD
Lagache, más conciliador, llamaba “enfoque naturalista”. Tan es así que, en un momento dado, surgió la
discusión sobre la pertinencia de crear las carreras de Psicología en facultades de medicina (y no en las
de filosofía y letras o humanidades, como finalmente sucedió. Para otros profesores, particularmente
los más jóvenes (y los que fueron llegando a las carreras con el transcurso de los años), ella debía
ubicarse en el plano de la significación. Servía para interpretar, entre otras cosas, los cambios sociales e
LA
individuales, los procesos políticos, las transformaciones de la familia y el nuevo lugar asignado a la
mujer. Lo cierto es que esta bipartición entre la Psicología concebida como ciencia natural o como
disciplina del sentido, por sus consecuencias para el rol profesional, iba a ser una de las grandes divisorias
de aguas en los primeros debates generados en el seno de las carreras, e incluso más allá de ellas.
FI
A diferencia de Francia, donde el psicoanalista Daniel Lagache había desempeñado un rol muy
importante en la creación de la carrera (Ohayon, 1999), los principales responsables de la
profesionalización universitaria de la Psicología argentina no tenían ninguna intención de privilegiar el
desarrollo de una psicología clínica de filiación psicoanalítica. Se trataba de un rol bastante limitado, que
15
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
1991). En su seno se había desarrollado toda una “tendencia exogámica” que, a tono con los aires de la
época, buscaba aplicar el psicoanálisis más allá del encuadre tradicional, proyectándose a nuevos
espacios de práctica (como los hospitales públicos) y abriéndose a cruces teóricos originales (con la
teoría de los grupos, la fenomenología existencial, el pensamiento sistémico, etc.).
Aunque el representante más ilustre de esta corriente “exogámica”, Enrique Pichon-Rivière, nunca haya
sido docente en las carreras de psicología, sus enseñanzas llegaron a los claustros, sus discípulos más
destacados (José Bleger, Fernando Ulloa, David Liberman, Edgardo Rolla etc.) sí llegaron a ser profesores
en las carreras de Buenos Aires, Rosario y La Plata, donde tuvieron una recepción más que favorable de
parte de los estudiantes. Básicamente, Pichon-Rivière abogaba por un nuevo paradigma psicosocial, que
en el plano teórico combinaba de manera heterogénea una concepción del inconsciente extraída de la
llamada escuela inglesa (Melanie Klein pero también Wilfred Bion) y la articulaba con una definición de
OM
la conducta tomada de la psicología francesa (de Janet a Lagache pasando por el primer Politzer). Al
mismo tiempo, no olvidaba la experiencia vivida de la fenomenología existencial (de Sartre a Merleau-
Ponty), la psicología social elaborada en EEUU (Kurt Lewin, George Mead, etc.), ni dejaba de dotarse de
un cierto barniz humanista, propio de los escritos del joven Marx (Fabris, 2007; Vezzetti, 1998a). El
resultado era una mezcla ecléctica, que a nivel profesional se traducía en la definición del psicólogo
como agente de cambio, lo cual estaba muy en sintonía con las demandas de compromiso social que
.C
venían del estudiantado. De allí que los discípulos de Pichon-Rivière, a pesar de su juventud, hayan sido
tan bien recibidos en las nuevas carreras (Dagfal, 2000).
Por otra parte, no puede ignorarse que, a nivel internacional, el psicoanálisis fue un ingrediente
DD
fundamental del fenómeno que ha dado en llamarse “los años 60”. En efecto, en la Argentina, más allá
de la asociación oficial y del ámbito académico, el psicoanálisis ya tenía una implantación en la cultura
que, desde los años 1930, venía dándose por diversas vías y que a fines de los 1950 iba a acelerarse y
multiplicarse de manera exponencial (Plotkin, 2001; Vezzetti, 1998a). La expansión de las clases medias
iba a ser acompañada por una gran difusión de las ideas freudianas, que pasaron a formar parte de los
LA
gobierno tripartito de docentes, graduados y estudiantes. En cierto modo, ante una oferta curricular
muy heterogénea, ellos funcionaron como un filtro, reteniendo los profesores que más los atraían y
contribuyendo a expulsar a aquéllos que no contaban con su simpatía, además de tejer alianzas para la
designación de autoridades afines. Respecto del perfil del alumnado, la primera cuestión destacable era
la amplia primacía del género femenino, ya que entre 80 y 90% de los ingresantes eran mujeres.
Entre los ritos iniciáticos de esas “mujeres modernas”, además del primer cigarrillo o el primer pantalón,
se agregaba también la primera sesión de análisis. Grupal, para las menos pudientes, o individual, para
las más acomodadas, esa práctica empezaba a ser un ingrediente de la vida cotidiana. Del mismo modo,
sus representaciones sobre la profesión fueron cambiando radicalmente. Aunque algunas hubieran
comenzado la carrera pensando en modelos profesionales tradicionales, a medida que se iban
modificando sus intereses intelectuales y existenciales, esos ideales difusos, en la mayoría de los casos,
daban lugar a una vocación cada vez más definida. En realidad, se trataba de una elección que se
conjugaba con la modificación del lugar de la mujer en la sociedad. En efecto, las estudiantes avanzadas
ya no querían limitarse al dominio educativo o a la aplicación de tests, que implicaban roles más o menos
clásicos, sino que preferían aventurarse también por territorios inexplorados. En el dominio de la clínica,
por ejemplo, ellas consideraban poder asumir tareas más arriesgadas y de mayor reputación, como
16
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
aquéllas ligadas a la cura, que generalmente se atribuían en exclusividad a los médicos. Si en un principio
algunas de ellas (sobre todo las que no provenían de las grandes ciudades) se habían conformado con
un rol menos prestigioso, comparable con el de las enfermeras, con el paso del tiempo, aspirarían a un
reconocimiento semejante al de los médicos. Participaban en grupos de estudios privados con miembros
de la APA y realizaban sus prácticas en instituciones clínicas, como el Servicio de Psicopatología del
Hospital Lanús (Dagfal, 2009b). De este modo, comenzaban a entender qué era atender a un paciente,
supervisar un caso y trabajar en equipo. Una vez que esta máquina fue puesta en marcha, parecía muy
difícil detenerla con discursos normativos sobre la verdadera función del psicólogo, sobre su falta de
competencias en el campo clínico o sobre los obstáculos legales que le impedían el ejercicio de las
psicoterapias.
En resumen, podría decirse que, luego de la creación de las carreras de Psicología, en la consideración
OM
de los estudiantes, los proyectos científicos y profesionales (bastante difusos) del grupo fundador fueron
rápidamente desplazados por una concepción psicosocial que, si bien no era homogénea, por lo menos
era novedosa. En ese proyecto alternativo, el psicólogo ya no aparecía como un científico riguroso, sino
como un intelectual comprometido con el cambio social. Al mismo tiempo, el psicoanálisis se
transformaba en la matriz teórica privilegiada toda vez que podía articularse en diferentes planos con
todo tipo de experiencias y de concepciones innovadoras.
.C
LOS DEBATES PROFESIONALES COMO CATALIZADORES DE UNA IDENTIDAD REACTIVA.
Los debates más acalorados sobre el rol del psicólogo no se dieron en el momento de la creación de las
DD
carreras, sino cuando los primeros estudiantes empezaban a obtener su título habilitante. Más
específicamente, los médicos psiquiatras se percataron entonces de que la aparición de esta nueva
figura profesional implicaba un riesgo inminente para el mantenimiento del monopolio médico en el
dominio de las psicoterapias. En efecto, los médicos en general y los psiquiatras en particular habían
sido los únicos profesionales legalmente habilitados para tratar las enfermedades “del espíritu”. No es
LA
extraño que la mayor parte de las disputas haya girado en torno del tema de “la cura por la palabra”.
En el campo profesional, en el mes de octubre, el Colegio de Médicos de la provincia de Buenos Aires
hizo publicar una solicitada en varios diarios locales, expresando su preocupación por la “práctica de la
hipnosis” y por el “ejercicio ilegal de la Medicina” que las carreras de Psicología supuestamente
FI
favorecían.
Lo que estaba en discusión no era solamente “quién está preparado para curar”, sino también, como
trasfondo, “cómo se curan las enfermedades mentales”, sabiendo que las opciones disponibles no eran
complementarias sino excluyentes. Si los profesionales que no eran médicos sólo se apoyaban en la
palabra como instrumento de curación, de ello se deducía que, necesariamente, tenían una concepción
de la enfermedad que contradecía la de la medicina orgánica, ello implicaba el derrumbe de todo el
edificio teórico de la psiquiatría contemporánea o la aceptación de que ésta no pertenecía al orden de
la medicina llamada científica. Ambas posibilidades resultaban inadmisibles, por lo cual, para los
psiquiatras, era crucial reafirmar el carácter subsidiario del trabajo psicoterapéutico de los no médicos.
No obstante, no iban a estar solos en esta empresa, en la medida en que los profesores de Psicología
que consideraban que esa disciplina era una ciencia natural (en su mayoría médicos) iban a sostener
posiciones similares. Ese era el caso de Marcos Victoria, el primer director de la carrera de psicología de
la UBA.
Esta toma de partido de quien fuera uno de los fundadores de la carrera de Psicología de la UBA no hacía
más que ilustrar las razones por las cuales había sido excluido de ella. No obstante, sus ideas eran
compartidas por muchos de los otros fundadores, que también se oponían al ejercicio autónomo de las
17
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
psicoterapias por parte de los psicólogos. En ese contexto, es más fácil de entender porque se habla de
la adopción de una identidad “reactiva” por parte de estos nuevos profesionales, que se sentían
triplemente rechazados.
En primer lugar, sus propios profesores les negaban competencia en un área en la cual ellos juzgaban que
tenían mejor formación que la mayoría de los médicos (de hecho, en la carrera de Medicina apenas si
había un par de materias que hicieran alusión a lo psíquico y a la cura de las enfermedades mentales).
En segundo lugar, los psicoanalistas les negaban el acceso a la asociación oficial, aunque fueran
“analistas oficiales” quienes los habían analizado y formado en las ideas freudianas. En tercer lugar, los
psiquiatras querían relegarlos a un rol subalterno, amenazándolos incluso en el plano legal. Nuestra
hipótesis es que, en gran medida, la identidad de los psicólogos se fue conformando como reacción ante
estos roles menores (auxiliar de la psiquiatría, testista, psicotécnico, consejero) que les eran impuestos
OM
por figuras de mucho peso. Cuanto más se les negaba el reconocimiento de sus competencias en el
campo de la clínica, más se aferraban al ejercicio de las psicoterapias desde una perspectiva
psicoanalítica.
COMENTARIOS FINALES
Para concluir, sería justo reconocer que no todo fue reactivo en la construcción identitaria del psicólogo
.C
argentino. Hubo algunas figuras del “campo psi” que les sirvieron como referentes, esto es, como
soportes para una identidad “proactiva”. El más importante, muy probablemente, haya sido José Bleger.
Siguiendo a Pichon-Rivière, como ya mencionamos, este psiquiatra-psicoanalista, miembro del Partido
DD
Comunista, combinaba el atractivo de las ideas freudianas con los imperativos de cambio social. Por un
lado, enseñaba los fundamentos de una Psicología de la conducta que hermanaba la respetabilidad
académica de Daniel Lagache con el militantismo de Georges Politzer. Por el otro, llevaba a los
estudiantes a las villas miseria [favelas], para mostrarles los rudimentos de una Psicología preventiva
que por entonces denominaba “psicohigiene”.
LA
Aunque no impulsara el rol clínico de los psicólogos, llegado el momento, pese a ser médico,
los acompañó en su disputa con los psiquiatras. De hecho, pensaba que el psicólogo era el profesional
mejor preparado para la actividad psicoterapéutica. Pero al mismo tiempo creía que “la carrera de
Psicología tendría que ser considerada un fracaso desde el punto de vista social si los psicólogos quedan
FI
consultorios, siguiendo el modelo médico de atención privada, lo cual los mantenía al margen de las
regulaciones estatales. Otro referente de esos primeros psicólogos (de Rosario y Buenos Aires), fue
Jaime Bernstein. En realidad, encarnaba una de las raras líneas de continuidad entre la Psicología
aplicada desarrollada durante el peronismo y la nueva Psicología clínica de “filiación psicoanalítica”.
Bernstein había pasado de una orientación profesional ligada al trabajo y a la educación a una
concepción clínica más integral, donde las técnicas proyectivas y su interpretación analítica ocupaban
un lugar privilegiado. En esta dirección, todo indica que Bernstein tenía la determinación de contribuir
a la constitución de este nuevo campo.
Sea como fuere, ya sea que se hablara de psicología clínica, psicohigiene o psicoanálisis, tanto Bleger
como Bernstein, entre otros jóvenes profesores, parecían dispuestos a seguir el programa esbozado por
Foucault en 1957, que implicaba una “renovación radical de la Psicología como ciencia del hombre”.
Contarían con la ayuda de psiquiatras reformistas y de psicoanalistas “exogámicos”. Todos ellos, a su
18
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
vez, suscitarían la adhesión masiva de los estudiantes, quienes rechazaban los roles profesionales
prescriptos por los fundadores más cientificistas, los psiquiatras organicistas y los psicoanalistas
considerados “ortodoxos”. De este modo, hace medio siglo, nacía en la Argentina la figura del psicólogo-
psicoanalista, cuya existencia marca el panorama de la disciplina hasta la actualidad.
OM
.C
DD
LA
FI
19
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
HUGO KLAPPENBACH “PERIODIZACIÓN DE LA PSICOLOGÍA EN ARGENTINA”
RESUMEN
El trabajo intenta por primera vez una periodización del desarrollo completo de la psicología en
Argentina. En primer lugar, se analiza el período de la psicología clínica, experimental y social, entre 1895
y 1916.En segundo lugar, el período de la psicología filosófica, desde 1916 hasta 1941. En tercer lugar,
el período de la denominada psicotecnia y orientación profesional, entre 1941y 1962. Posteriormente,
el período centrado en el debate sobre el rol profesional del psicólogo. El último período, iniciado en
1984, ha conducido a un importante desarrollo de la psicología en todo el país.
INTRODUCCION
Es oportuno remarcar que cualquier intento de periodización de la psicología argentina parece ser, en
OM
primer lugar, una empresa prematura. Es decir, no podría tratarse más que de un esquema provisorio,
tentativo, pasible de ser rectificado en la medida en que las investigaciones parciales de carácter más
empírico vayan aportando nuevos conocimientos. De todas maneras, diferentes razones inducen a
avanzar en un intento de periodización.
En la psicología argentina, ¿a qué temas habremos de referirnos para llevar acabo tal periodización?:
Podría afirmarse que una historia de la psicología incluye por lo menos:
.C
Una historia de las teorías científicas consideradas psicológicas;
una historia de las personalidades que han contribuido al desarrollo de la psicología;
una historia de las técnicas psicológicas (desde la historia de los tests mentales hasta la historia de la
DD
escucha y la interpretación, o más ampliamente, la historia de dispositivos como el denominado
encuadre analítico);
una historia de las prácticas psicológicas (desde la historia de la psicología aplicada hasta las distintas
intervenciones en los más variados campos de la disciplina); e) una historia de las instituciones
psicológicas (entendiendo por tal no sólo a las sociedades científicas o profesionales, sino también a la
LA
¿Qué criterios de periodización sería necesario considerar? ¿Criterios externos o internos al propio
desarrollo de la disciplina? ¿Criterios generacionales?:
Resulta posible fundamentar períodos bien característicos en el desarrollo de la psicología argentina.
Aquí, hemos partido de períodos conocidos de la historia institucional y de la historia de las ideas, en
función del impacto de los acontecimientos políticos y sociales sobre la psicología en el país.
20
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
De los tres primeros períodos existe un caudal de investigaciones suficientes como para intentar una
caracterización general. En cambio, del cuarto período es poco lo que se ha investigado hasta el
momento y menos todavía del último. En tal sentido, si consideramos que nuestra periodización es en
general provisoria y tentativa, esa provisoriedad alcanza muy especialmente a los últimos períodos.
OM
mediciones psicofísicas en cerca de quinientos alumnos. Por su parte, en 1899 Horacio G. Piñero
establecía un Laboratorio de Psicología Experimental en el Colegio Nacional Central, y un par de años
después en la Facultad de Filosofía y Letras, donde estaba a cargo de la enseñanza de psicología. Pocos
años después, en 1905, en la Universidad Nacional de La Plata, Víctor Mercante también organizaba un
Laboratorio de Psicología Experimental.
Se puede dar cuenta de la importancia del tamiz francés en la recepción de la temprana psicología en
.C
Argentina. Un claro testimonio de esa tendencia lo constituye la recepción de la psicología wundtiana.
En 1894, Binet había reconocido el importante papel de Wundt en el surgimiento de la denominada
nueva psicología. Sin embargo, consideraba que personalidades como Charcot y Ribot habían
DD
contribuido en un mismo plano jerárquico en el desarrollo de aquella psicología: De quince años a esta
parte la psicología ha entrado en una nueva fase. Esta fase data, aproximadamente, de 1878, época
doblemente importante para la psicología, puesto que es cuando Wundt, en Alemania, abre el primer
laboratorio de psicología experimental, y Charcot, en Francia, inaugura sus investigaciones sobre el
hipnotismo en las histéricas. En la misma época, poco más o menos, M. Ribot, funda la Revue
LA
que Piñero organizó tempranamente en el país, en el Colegio Nacional Central en 1899 y en la Facultad
de Filosofía y Letras en 1901, distaban notoriamente de los objetivos de los laboratorios fundados en
Alemania.
Se ha señalado que los laboratorios de psicología experimental en Alemania tenían fines de investigación
y de producción de conocimientos, coherentes con la finalidad de las universidades alemanas. En
Argentina, en cambio, Horacio Piñero había aclarado que, tanto los laboratorios fundados por él como
el método experimental respondían a la finalidad de divulgación y enseñanza, tendientes a
«complementar la enseñanza de la cátedra».
La segunda cuestión que resulta necesaria esclarecer es que, en el marco de ideas esbozado, la
denominación psicología experimental en la temprana psicología argentina tenía poco que ver con el
concepto de psicología experimental producida en Alemania en el último cuarto del siglo XIX. Por el
contrario, la denominación psicología experimental se relacionaba directamente con la Introducción a
21
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
la Medicina Experimental de Claude Bernard. Este sostenía que la experimentación resultaba la
culminación de la medicina científica, pero advirtiendo que «la medicina experimental no excluye la
medicina clínica; por el contrario, sólo viene detrás de ella».
Toulouse, Vaschide y Piéron, por su parte, consideraban que existían tres grandes dominios y tres
grandes métodos de la psicología: la psicología fisiológica, la psicología patológica o morbosa y la
psicología experimental. A pesar de esta diferenciación y de que reconocían que el método experimental
era «el verdadero método científico de la psicología», también afirmaban que la psicología experimental
se había originado en la obra de «médicos o astrónomos franceses poco conocidos» aunque
imposibilitada de desarrollarse en Francia emigró a Alemania. Y en una dirección coincidente sostenían
que la nueva psicología se había originado «por una reacción contra la concepción dominante, y lo que
ha nacido es una psicología médica». Considerando, entonces, el fuerte impacto del pensamiento
OM
médico y clínico francés en la Argentina de principios de siglo, en trabajos anteriores he caracterizado
aquella temprana psicología con la denominación de psicología clínica y experimental.
.C
propiamente filosóficas, en un doble sentido. En el sentido de preocuparse por establecer los límites de
las formas sensibles de la experiencia, como en el sentido de que si, a principio de siglo lo característico
de los fenómenos psíquicos era que constituían los procesos más heterogéneos y complejos de las
DD
funciones vitales del organismo desde una perspectiva spenceriana en el período que nos ocupa, lo más
importante de los fenómenos psíquicos no podía reducirse a su origen evolutivo, toda vez que
involucraba valores y razonamientos que interrogaban los presupuestos evolucionistas y situaban el
psiquismo humano en un plano diferenciado y singular. O como afirmaba Alejandro Korn, «la
identificación del hecho psíquico con lo orgánico es una superstición vulgar. En segundo lugar, a pesar
LA
de las caracterizaciones más familiares sobre este período, resultó notorio el intenso movimiento de
circulación de autores, instituciones e ideas psicológicas. En tercer lugar, las relaciones con la tradición
de las primeras décadas del siglo fue, por lo menos, ambigua. Es decir, por una parte, no dejaban de
señalarse los límites de la psicología fisiológica, pero, a un mismo tiempo, la tradición clínica y patológica
FI
como una disciplina de carácter filosófico, ya que se consideraba que toda cuestión de psicología era, al
mismo tiempo, una cuestión de filosofía, toda vez que lo que borraba las diferencias entre filosofía y
psicología era que ambas estaban centradas en fundamentar los límites de la experiencia sensible. En
ese marco, y partiendo de Bergson, Scheler, y sobre todo, Ortega, la psicología argentina a partir de la
tercera década del siglo se orientaría hacia posiciones crecientemente estructuralistas y fuertemente
críticas hacia toda forma de naturalismo. Es de destacar que la renovación de las ideas en el campo de
la psicología se producía en un marco de transformaciones más abarcativas. En 1918, se había producido
la reforma universitaria que democratizaría la vida universitaria y permitiría el acceso de sectores medios
a la educación superior.
Una de las obras más importantes de este período fue Instinto, Percepción y Razón de Enrique Mouchet,
que llevaba por subtítulo Contribuciones a una psicología vital. Mouchet, con reminiscencias de José
Ingenieros, enfatizaba el estatuto biológico de la psicología vital: «El psicólogo vital es el biólogo de la
22
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
introspección. Esto quiere decir que su psicología es una psicología biológica». Sin embargo, en seguida
aclaraba que «nuestra psicología vital no es igual –ni de lejos– a lo que comúnmente se entiende por
psicología biológica. El libro de Mouchet fue considerado una de las cien obras más importantes en la
historia de la psicología. Fue el continuador de la tradición clínica y patológica de la primera psicología
argentina. Reconocía su deuda con Piñero y sobre todo con Ingenieros, de quien se consideraba
discípulo. En esa dirección, eran constantes sus referencias a autores como Ribot y Dumas, aunque
también a Marx, Bergson, Scheler, von Uexküll y Köhler. Tal amplitud, por una parte, se debía a una
concepción enciclopédica inocultable, pero, por la otra, a un esfuerzo de especialización sobre los
diferentes dominios de la psicología que no era para nada despreciable, sobre todo cuando Mouchet
abordaba sus temáticas privilegiadas: los fenómenos de la emoción, la percepción de obstáculos en
ciegos, y ciertos fenómenos psicopatológicos como la despersonalización, la desrealización y los
OM
trastornos del lenguaje.
En 1930, por iniciativa de Enrique Mouchet, se recreaba la Sociedad de Psicología de Buenos Aires, que
intentaba continuar a la primitiva Sociedad Argentina de Psicología organizada en 1908 por Ingenieros,
Piñero, de Veyga y Mercante, entre otros.
A finales de 1931, se organizaba el Instituto de Psicología dentro de la Facultad de Filosofía y Letras de
la Universidad de Buenos Aires, sobre la base del Laboratorio de Psicología Experimental y designándose
.C
a Enrique Mouchet al frente del mismo, por entonces profesor titular del Primer Curso de Psicología en
dicha casa de estudios.
DD
PERÍODO DE LA PSICOTECNIA Y ORIENTACIÓN PROFESIONAL (1941-1962)
Eugenio Pucciarelli, graduado en Medicina y Filosofía, reemplazaría a García Morente en el dictado del
curso de Psicología. La enseñanza de Pucciarelli, centrada en las corrientes de psicología de la época, se
iniciaba con un planteo acerca de la esencia de la psicología: si se trataba de metafísica o de una ciencia,
si consistía en un saber especulativo o se trataba de un conocimiento empírico.
LA
Pucciarelli, ubicaba a la psicología en la tradición wolffi ana-kantiana, que reconocía dos vertientes
diferenciadas de la psicología: una psicología racional y una psicología empírica. La crítica kantiana a la
psicología también era desarrollada por Pucciarelli en su curso de Gnoseología y Metafísica, al que
asistían los mismos alumnos. Allí se ocupaba de la cuestión del «alma y los paralogismos de la psicología
FI
racional», en el marco de la imposibilidad de la metafísica como ciencia. El resto del curso de Psicología,
Pucciarelli lo destinaba a la psicología empírica, a las «direcciones de la psicología científica», donde
destacaba tres orientaciones: dirección explicativa, descriptiva y comprensiva. El curso, entonces, se
ocupaba de las distintas teorías, en especial de Bergson, Dilthey, Spranger, la psicología de la forma, la
23
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
El desarrollo de la psicotecnia y la orientación profesional en Argentina estuvo relacionado con dos
procesos complementarios. Por una parte, los avances producidos en el campo de la psicología aplicada
y la psicotecnia en relación con el conocimiento de las aptitudes y características de personalidad que
tornaban posible la recíproca adecuación del trabajo al hombre, así como también en relación con las
técnicas o inventarios de personalidad necesarios para establecer exitosamente el diagnóstico, la
nivelación y la reorientación que aquellos problemas involucraban.
Durante el peronismo, en el que contradictoriamente confluían a un mismo tiempo valores
modernizadores y tradicionalistas, y una cultura democrática pero escasamente republicana, se
consolidó una nueva clase trabajadora urbana que requería de una rápida reconversión laboral. En dicho
marco, la orientación profesional llegó a alcanzar rango constitucional tras la reforma 1949, al ser
incorporada en el artículo 37, que consagraba los derechos del trabajador, la familia, de la ancianidad y
OM
de la educación y la cultura: La orientación profesional de los jóvenes, concebida como un complemento
de la acción de instruir y educar, es una función social que el Estado ampara y fomenta mediante
instituciones que guíen a los jóvenes hacia las actividades para las que posean naturales aptitudes y
capacidad, con el fi n de que la adecuada elección profesional redunde en beneficio suyo y de la sociedad
(Nación Argentina, 1950, p. 23).
En esa misma dirección, el Segundo Plan Quinquenal peronista fi jaba el objetivo de «encausar el
.C
aprendizaje y la orientación profesional» en el campo de la educación y el trabajo. En relación con el
trabajo, se fi jaba que la política social y económica del Estado debía desarrollarse sobre diversas bases,
entre ellas: Establecimiento de correlaciones racionales entre la aptitud del trabajador y su ocupación,
DD
a fi n de obtener los más altos índices de productividad y de retribución. Las aspiraciones evidenciadas
en ese tipo de consideraciones se relacionaban con la orientación profesional colectiva, la cual era
concebida a partir de un interés público. Al mismo tiempo, creaba condiciones para el desarrollo de una
orientación profesional individual, la cual encontraría mejores condiciones para su consolidación a partir
de la década de 1960. Esas condiciones, en cualquier caso, originarían un conjunto importante de
LA
organizaba por años, sino por grupos de materias. El grupo de materias «psicológicas», estaba
conformado por Psicología experimental, Psicología evolutiva, Psicología social y Psicotecnia y
Orientación Profesional. Un segundo grupo de materias eran cursadas en la Facultad de Derecho:
Economía política, Sociografía, Legislación del trabajo y Psicología social. Un tercer grupo de materias se
cursaban en Bioquímica: Anatomía y Fisiología; Higiene mental y fabril. La transformación de esta
carrera, en la carrera de Psicología, surgió luego del Primer Congreso Argentino de Psicología, llevado a
cabo en 1954, precisamente en Tucumán. Allí se recomendó la creación de carreras de Psicología o de
psicólogo, en las universidades nacionales, y en particular, para el caso de Tucumán, «la creación de la
carrera del psicólogo en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional de Tucumán, sobre
la base de los estudios que se cursan en la carrera y profesorado de psicotecnia, y teniendo en cuenta
los lineamientos de la carrera del psicólogo antes aprobado».
24
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
En San Luis, por su parte, la Universidad Nacional de Cuyo organizaría en 1952, la Dirección de Psicología
Educacional y Orientación Profesional que dependía conjuntamente de la Universidad y del Gobierno
provincial y era dirigida por Plácido Alberto Horas, este concebía la orientación profesional como un
punto de encuentro entre las aspiraciones y condiciones individuales –personalidad y aptitud–, por una
parte, y las necesidades sociales, por la otra. En efecto, la orientación profesional «aspira a que se elijan
los oficios y profesiones de modo congruente con la propia personalidad, las aptitudes y el ámbito
social».
En San Luis la orientación profesional aparecía menos relacionada con el ámbito del trabajo y más con
el de la educación, aun cuando estos campos pudieran haber estado íntimamente emparentados. Las
actividades de orientación profesional descritas, más todas aquellas que pre veía la Dirección de
Psicología Educacional y Orientación Profesional, planteaban el problema de la formación del personal
OM
técnico especializado. Para ello, el propio Plácido Horas promovió la creación de una «Especialización en
Psicología», para lo cual tomaba en cuenta, entre otros elementos, los antecedentes de carreras
similares en España, Francia y Estados Unidos; el desarrollo de la psicología en nuestro país y «las
relaciones entre la formación en Psicología y los objetivos del 2.º Plan Quinquenal» (Klappenbach, 1995).
La implementación de la carrera de Psicología luego del Primer Congreso Argentino de Psicología eclipsó
la Especialización en Psicología que había sido imaginada por Horas. Lo que caracterizaba estos
.C
proyectos era la comprobación de que era necesaria una nueva fi gura profesional, capaz de intervenir
ante las nuevas demandas que el campo de la educación y el trabajo planteaban.
En síntesis, al promediar el siglo XX se desarrollaría en Argentina todo un conjunto de teorías, técnicas
DD
e intervenciones prácticas en el campo de la orientación profesional, que serían canalizadas por un
Estado con intenciones planificadoras. Y en tal sentido, cuando al madurar la década del sesenta, dicho
Estado comenzara a perder hegemonía, también lo haría aquella modalidad de orientación profesional,
que comenzaría a ser reemplazada por una perspectiva clínica, centrada principalmente en las
demandas del individuo. En cualquier caso, es oportuno advertir que a pesar del fuerte impulso por parte
LA
del Estado, los procesos involucrados en la psicotecnia y orientación profesional permitían lecturas y la
organización de constelaciones ideológicas bastante complejas. Así, enfrentados a la concepción
taylorista, tanto Claparède como Alfredo Palacios en Argentina se adherían a ideas de izquierda.
Inclusive, el tratado de mayor circulación en la país, aun en las escuelas de psicotecnia oficiales y en
FI
cierto sentido cercanas al peronismo, era el Manual de Orientación Profesional, que otra personalidad
de izquierda, Emilio Mira y López, había publicado en 1947 y que en poco menos de una año había
agotado su primera edición. La obra constituía un verdadero tratado de psicotecnia y orientación
profesional, en el cual Mira discutía al mismo tiempo cuestiones teóricas, técnicas e institucionales.
25
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
En el otro extremo del debate, se sostenía la posición del psicólogo como agente de cambio.
Bleger consideraba que la psicología constituía un ofi cio más que una ciencia. A partir de tal concepción,
definía el rol del psicólogo de diferentes maneras, pero todas ellas orientadas en una misma dirección.
«El psicólogo es un especialista en tensiones de la relación o comunicación humana».
Diferentes posiciones se movían entre uno y otro extremo del debate.
En cualquier caso, la contradicción entre el rol del psicoanalista y el de agente de cambio no excluía el
psicoanálisis para quienes optaran por esta última vía. Al contrario, el propio José Bleger era un
prominente didacta de la Asociación Psicoanalítica Argentina (APA) y Juana Danis reconocía que el
psicólogo podría disponer de conocimientos psicoanalíticos. Una fi gura destacada como Ricardo Malfé
sostenía que, a diferencia del antropólogo que principalmente se interesa en conocer, «un psicólogo –
por toda su tradición como profesional empeñado en provocar cambios– no es solamente un mero
OM
conocedor de ese nuevo campo, sino que debe encontrar estrategias de operación, inclusive sobre una
comunidad, lo que es muchísimo más complicado». Pero al mismo tiempo, opinaba «que no puede
formarse un psicólogo en forma científica, si carece de preparación en Psicoanálisis.
SE HACE REFERENCIA A LO DESARROLLADO EN EL TEXTO DE DAGFAL, SOBRE LOS DEBATES ENTRE
MEDICOS Y PSICOLOGOS (LA PREOCUPACION DE LOS MEDICOS PORQUE SUPUESTAMENTE LA
PSICOLOGIA FOMETANBA EL EJERCICIO ILEGAL DE LA MEDICINA, ETC)!! Y AGREGA: en 1967, el gobierno
.C
de facto sancionaría la ley 17132, de ejercicio legal de la medicina, por la cual incluía las actividades del
psicólogo en el capítulo 9, destinado a los auxiliares de la medicina. Según el artículo 91 de tal normativa,
el psicólogo sólo podía desempañarse profesionalmente bajo dependencia del «médico especializado
DD
en psiquiatría» y sólo «por indicación y bajo su supervisión».
En cierto punto el debate sobre los distintos campos de la práctica profesional se superponía con el
debate acerca del rol. En tal sentido, la cuestión principal era la de definir el rol adecuado para prácticas
menos tradicionales. Un caso interesante lo constituía la definición del rol del psicólogo en el ámbito de
una comunidad terapéutica. Allí, por ejemplo, se volvía necesario replantear la tradicional distinción
LA
entre las instancias de evaluación y operación, ya que ambas se daban simultáneamente. Asimismo, el
espacio de las asambleas exigía poner a un lado las nociones aprendidas acerca del «secreto
profesional». En tal ámbito, en definitiva, «el rol del psicólogo se plasma en función de las nuevas
necesidades que vayan surgiendo, recibiendo modificaciones y reestructuraciones. Es un rol en
FI
transición».
En una dirección parecida, también se trataba de establecer el rol del psicólogo en la institución escolar.
También las áreas más tradicionales exigían una redefinición del rol profesional y, en ese marco,
comenzaban a reconocerse distintas actividades en el campo de la clínica, y, en particular, la posibilidad
de terapias breves o de «procesos correctores de duración y objetivos limitados», como los denominaba
Hernán Kesselman (1970). La posibilidad de las psicoterapias breves también se daban en un contexto
en el cual se negaban las posibilidades de «psicoanálisis para todo el mundo», en función de ciertas
condiciones o exigencias propias del psicoanálisis (Kessselman, 1970). Al mismo tiempo, la propuesta de
la psicoterapia breve también debía contextualizarse en las necesidades de masificación de la asistencia
psicológica, de una asistencia popular y nacional.
En 1976 se produjo un golpe militar que introduciría una de las dictaduras más represivas y sangrientas
en América Latina. El impacto sobre la psicología fue inmediato. No sólo interrumpió bruscamente las
condiciones que habían favorecido el debate sobre el rol del psicólogo, no sólo secuestró e hizo
desaparecer a una enorme cantidad de psicólogos y estudiantes de Psicología, no sólo cerró carreras
universitarias de Psicología, sino que inclusive visualizó a la psicología como una de las ideologías que
habían promovido una visión ajena a la tradición del país.
26
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
PERÍODO DE LA PLENA INSTITUCIONALIZACIÓN (DESDE 1983)
Ante todo sería conveniente señalar que la transición democrática iniciada hacia 1983, con todas sus
limitaciones, ha creado condiciones que favorecieron, al menos, dos cuestiones centrales para el
desarrollo de la psicología. Por una parte, el pleno ejercicio público de la profesión del psicólogo, a través
de leyes, reglamentaciones y disposiciones que ordenaron jurídicamente el campo psicológico. Por otro,
las tentativas de constitución de una tradición académica en torno a la enseñanza y la investigación en
psicología, la cual había sido sistemáticamente interrumpida por razones de tipo ideológico-políticas en
muchos momentos de los períodos anteriores. En tal sentido, un primer rasgo que se destaca en el
período, en lo relacionado con la profesionalización, es la legalización plena del ejercicio profesional de
la psicología, que se consolidaría en todo el territorio de la República.
OM
Después de Malvinas, con la dictadura en retirada, los psicólogos argentinos habían logrado alcanzar
algunas reivindicaciones en sus antiguos planteos profesionales. Durante 1983 se habían sancionado
leyes del ejercicio profesional en el sentido solicitado por las entidades de psicólogos en Salta, Tucumán,
Catamarca y San Luis. Estas coincidían en al menos tres características: reconocían la plena autonomía
del psicólogo, los diferentes campos de la práctica profesional y la pertinencia del tratamiento
psicoterapéutico en el campo clínico. A partir de diciembre de 1983, con la recuperación democrática y
.C
el inicio de la normalización de las universidades, esos logros se afianzarían.
Recuperada la democracia, en agosto de 1985, el entonces secretario de Asuntos Universitarios del
Ministerio de Educación y Justicia, Hugo Storani, convocaba unas jornadas de trabajo para la elaboración
DD
de las incumbencias del título de psicólogo y licenciado en Psicología. En éstas participaron
representantes de las universidades nacionales y privadas donde se dictaba la carrera de Psicología,
representantes de la mencionada Federación de Psicólogos y funcionarios y técnicos de la mencionada
Dirección. El resultado fue el proyecto de resolución, inmediatamente aprobado a través de la resolución
2447/85. Como características salientes de dicha resolución, todavía vigente, hay que señalar en primer
LA
lugar, la de haber surgido a partir de una amplia participación de los sectores involucrados. En segundo
lugar, la de haber contemplado, en sus veinte competencias, tanto las capacidades propiamente
científicas, como las relacionadas con los distintos campos del ejercicio profesional: el clínico, el
educacional, el jurídico, el laboral y el socio-institucional-comunitario, aun cuando pueda discutirse si el
FI
27
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
International Union of Psychological Science (IUPsys), la Sociedad Interamericana de
Psicología/Interamerican Society of Psychology (SIP) y aun la misma American Psychological Association.
Al mismo tiempo, la experiencia del Mercosur, que incluye un área de compatibilización entre la
formación y práctica profesional de los países de la región, ha posibilitado el intercambio con
experiencias académicas y profesionales de otros países de la región, los cuales, salvo Uruguay, han
transitado vías de desarrollo de la psicología muy diferentes a la argentina. Todos esos factores han
contribuido no tanto a debilitar el perfil académico psicoanalítico, como a establecer los límites del
mismo, y con ello a diseñar modelos curriculares alternativos.
En definitiva, la psicología argentina a partir de 1983 pareciera encaminarse hacia un horizonte de mayor
pluralismo teórico y también profesional, sin abandonar el compromiso característico con la esfera
pública. Desde el punto de vista académico, la instancia abierta con la democratización universitaria ha
OM
favorecido un replanteo de cuestiones centrales en la formación del psicólogo, aun cuando el alcance
de las reformas todavía parece muy limitado.
.C
DD
LA
FI
28
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
HUGO VEZZETI: “HISTORIAS DE LA PSICOLOGÍA; PROBLEMAS, FUNCIONES Y OBJETOS”.
RESUMEN
El articulo trata sobre la historia de la psicología como un espacio de conocimiento y un campo de
investigación, dentro del campo mayor de las historias disciplinares.
Un tema importante en la historia de la psicología es la cuestión de la identidad, que se construye
siempre retrospectivamente, tanto más proclamada cuanto más se advierte, desde los comienzos de la
disciplina, que bajo el rubro psicología pueden contenerse conceptos y prácticas muy diferentes. Las
disciplinas suelen instituir filiaciones apoyadas en pequeños mitos familiares que nombran un padre,
Hipócrates o Newton, por ejemplo. En el caso de los practicantes del psicoanálisis, esa operación se pone
en escena de un modo que revela ese pequeño drama identitario: lo usual es instalar y exhibir el retrato
OM
del padre del psicoanálisis como un gesto que asegura la continuidad de un linaje. Pero aquí la
paternidad es siempre cierta e indisputable, mientras que lo primero que salta a la vista en el caso de la
psicología es que se diversifica el elenco de los progenitores. Es por el contraste con esa identidad plena
de la gran familia freudiana (que no impide, como es sabido, profundas fracturas en el plano de las
doctrinas) que resalta la precaria armonía de la comunidad de los psicólogos.
El primer objetivo planteado a la historia de la psicología en su impacto formativo, particularmente para
.C
los estudiantes del grado, apunta a una función pacificadora y compensatoria, que enfrente los riesgos
de la anarquía: es notorio que los fantasmas políticos pueblan las historias latentes de las disciplinas en
general y de la psicología y el psicoanálisis en particular. El recurso imaginado apunta a la composición
DD
retrospectiva de un campo unificado, que se despliega en el elenco de los “precursores” y los fundadores
y en las teorías y los procedimientos que trazan una línea desde un pasado legítimo hasta un presente
celebrado como el único posible.
Ahora bien, si en los últimos años se han abierto intentos de revisión de los objetivos y las funciones de
la historia de la psicología, como el que se propone en esta revista, hay que reconocer un estado de
LA
insatisfacción con esa primera función curricular; y, seguidamente, advertir que esa discusión se hace
posible por un estado del arte en el conocimiento y la investigación históricos que ya ha comenzado a
edificar caminos autónomos. Frente a una historia concebida como una crónica de lo mismo, emerge
una posición distinta, de historiador antes que de profesor, que busca su autonomía en la distancia que
construye respecto de la función celebratoria o la confirmación de las verdades establecidas. Ese trabajo
FI
innovador sobre el pasado, indaga las versiones oficiales, señala los "olvidos", amplía el canon, en fin,
explora una dimensión latente y no reconocida del pensamiento de la disciplina.
Un primer signo de ese giro ha sido la inclusión de la historia de la psicología en el marco de la historia
de las ciencias humanas.
Como es sabido, la pregunta, a menudo acuciante, por la unidad de la psicología ha quedado planteada
junto con la fundación académica de la disciplina.
El territorio de la psicología se extiende entre la filosofía y las humanidades, la biología y los estudios del
comportamiento, las ciencias neurológicas y cognitivas; con apoyos en las disciplinas formales,
matemáticas y estadísticas y lazos con las ciencias sociales, las disciplinas clínicas y el psicoanálisis, que
contiene en sí mismo un potencial de diversidad y de conflicto. El abanico de asignaturas en un plan de
estudios típico revela esa heterogeneidad que en verdad proyecta un programa de formación de casi
imposible cumplimiento. Los posgrados y las especializaciones constituyen los caminos hacia una
29
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
unificación en una tradición (cognitiva, social, clínica...) que se alcanza sobre la base de un olvido
retrospectivo de las otras. Algunos han señalado la evidencia de un campo disciplinar estallado y
concluyen que debería trasladarse esa diversidad a la formación curricular básica, que debería brindar
directamente diplomas en neuropsicología, psicología cognitiva, psicoanálisis, psicología social, etc.
Como consecuencia, junto con el campo disciplinar quedaría desarmada la figura profesional del
psicólogo.
La historia admite que la heterogeneidad del campo en su configuración presente depende de su
proceso de formación.
Hacia el siglo XIX, la diversidad en los comienzos de la psicología puede ser ordenada, tentativamente,
en tres tradiciones: la psicofísica y sus derivaciones en las psicologías experimentales; el evolucionismo y
sus efectos sobre la psicología comparada y evolutiva; y la psicopatología y sus consecuencias en la
OM
clínica de la hipnosis y las formas modernas de la psicoterapia. Se trata de un esquema tentativo que ha
proporcionado un orden en la enseñanza de la historia de la psicología, con miras a iluminar el horizonte
contemporáneo (Vezzetti, 2005).
Toda la historia de las disciplinas “psi” puede ser encarada como una historia de las lecturas y las
apropiaciones, es decir, según los criterios de los estudios de recepción.
.C
2. LA PLURALIDAD EN LA CONSTRUCCIÓN: LAS HISTORIAS.
La psicología se presenta como un objeto complejo, ya sea a partir de los comienzos, las formaciones,
su impacto en el pensamiento, instituciones y prácticas. Dicha complejidad se traslada a las historias
DD
posibles: hay diversas historias en la medida en que los problemas y preguntas que guían la investigación
histórica son diferentes.
mundo moral. No hay concepto ni prácticas en las disciplinas humanas que pueda eludir esa inmersión
en la vida social.
2.4 Una historia de la profesión.
Cruce entre la configuración tecnológica de las disciplinas psicológicas y la implantación extendida en la
cultura y la sociedad. Las variantes de las modalidades profesionales dependen de la historia previa y las
características de los ámbitos de uso. No existe una homogeneidad del grupo profesional.
30
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
en que el pasado puede actuar sobre el presente, la psicología no puede prescindir de una relación con
su pasado, ni con el orden de los conceptos ni en el de sus prácticas en ámbitos institucionales.
En cuanto a la recepción, esta desplaza el acento de los grandes autores y fundadores a la historia de las
lecturas y apropiaciones más eficaces, los contextos de apropiación, las funciones de mediación e
implantación de una disciplina. Se toma en cuenta la recepción como una práctica activa que
modifica aquello sobre lo que se aplica, la lectura no es la incorporación pasiva del texto sino que supone
una apropiación que lo transforma, lo que distorsiona la relación de la obra con su tiempo y contexto.
La complejidad de las disciplinas psicológicas como tópico de la investigación y de la enseñanza históricas
depende en gran medida de la importancia de las tramas intelectuales y los contextos de recepción; a
partir de reconocer esa realidad, las historias resultantes se separan del modelo de la biografía individual
o la memoria de un grupo. En esa indagación quedan igualmente justificados el estudio de las
OM
modalidades de implantación y desarrollo de una disciplina en tradiciones culturales específicas. Es lo
que justifica proponer una historia de la psicología en España o en Argentina, incluso de una psicología
española o argentina.
.C
DD
LA
FI
31
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
UNIDAD 2
OM
de sobremesa mundana.
Las funciones del espíritu, atribuidas otrora al alma, principio inmaterial e intangible, han entrado en el
dominio de la fisiología. El sistema nervioso, especializado para sintetizar las sensaciones y dirigir los
movimientos de todo el organismo animal, es el complicado engranaje de todos los fenómenos que
antes constituían las tres facultades autónomas del alma: inteligencia, sentimiento y voluntad.
El principio biológico de la división del trabajo ha producido en el sistema nervioso diversas
.C
diferenciaciones funcionales. La médula se encarga de las reacciones simples y directas: la corteza
cerebral de las reacciones más complejas e indirectas. Entre la médula y la corteza cerebral existen
centros nerviosos encargados de las reacciones intermedias, cuya coordinación no puede hacer la
DD
médula ni requiere la intervención de la corteza.Las funciones psíquicas son las más complicadas del
animal viviente. Para estudiarlas se necesitan nociones generales de biología y conocimientos especiales
de fisiología general. Su estudio -objeto de la psicología- entra en el dominio de los fisiólogos y requiere
el concurso de sus métodos experimentales y de observación.
Ha podido advertirse que las diversas enfermedades cerebrales producen alteraciones, disociaciones e
LA
de ciencia; su campo de investigaciones no se limita a la “inteligencia humana” pues abarca las funciones
psíquicas de todos los seres vivos.
En suma: la psicología tiende a ser el patrimonio de los sabios especializados en el estudio de las
funciones del sistema nervioso: el psicólogo debe ser, a la vez, un experimentador y un clínico. Estas dos
condiciones pueden estar reunidas en ciertos médicos; por eso, en todas las universidades modernas la
enseñanza de la psicología suele ser confiada a médicos y se lleva a cabo según los criterios comunes a
la enseñanza fisiológica y clínica.
En Francia es cultivada con interés. Ya hemos presentado a algunos de sus más distinguidos
investigadores; hoy trazaremos las siluetas de otros colegas eminentes.
El curso oficial de psicología se dicta en el Colegio de Francia. Hasta hace algunos años dictaba esa
cátedra Ribot. Cuando éste pidió su jubilación se planteó un verdadero conflicto. Los candidatos para
sucederle fueron Pierre Janet y Henri Binet.
Janet tiene mayor preparación clínica, su cultura médica es grande, ha descollado en el estudio de las
enfermedades nerviosas y mentales, posee excelentes condiciones de expositor y cuenta varios libros
en su haber intelectual. Binet es más hombre de laboratorio, su erudición es vasta, prefiere las
32
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
investigaciones de psicología pedagógica, es una dedicación ejemplar y ha escrito libros muy estimados.
Janet es más clínico y mejor conferenciante; Binet es un experimentador más diestro.
La ventaja de este último para suceder a Ribot consistía en que vive consagrado a sus tareas
experimentales, mientras que Janet se reparte entre la ciencia y el ejercicio de la medicina sobre una
vastísima clientela.
La elección era indecisa; cada uno de los postulantes tenía su grupo de amigos y adversarios. Se optó
por aplazar la provisión de la cátedra. Pero Janet quedo provisionalmente a cargo de ella, lo cual
significaba estar ya con un pie en tierra firme. Uno o dos años más tarde, cuando llegó la ocasión del
nombramiento definitivo. Janet fue designado sucesor de Ribot, obteniendo un voto más que Binet, el
cual ha quedado como director del laboratorio de psicología experimental.
Cada uno en su sitio.Nuestro amigo Th. Robot, que nos ha referido estos entretelones mientras
OM
corregíamos pruebas en la librería de Alcan, no tomó partido por ninguno de ellos. Ambos le parecían
dignos de sucederle, aunque desde diferentes puntos de vista. La competencia clínica de Janet se
equilibraba por la competencia experimental de Binet; las voces de expositor brillante del primero se
compensaban por la dedicación exclusiva del segundo a la ciencia.
Janet es un hombre entre los cuarenta y cinco y cincuenta años, de buena presencia. Prefiere tratar
temas de psicología clínica, en los cuales desarrolla vistas originales y demuestra una cultura
.C
excepcional. La experimentación normal, la psicología introspectiva, sus relaciones con la filosofía y la
sociología, las aplicaciones prácticas de su ciencia a la pedagogía, la criminología y otras ramas afines,
no tienen en sus cursos toda la amplitud que merecen. Verdad es que una sola cátedra no puede abarcar
DD
todo. Podría enseñarse cada año una parte distinta, pero sería en perjuicio de la especialización que
constituye la indiscutible superioridad de este profesor.
Para complementar su enseñanza, Janet tiene un consultorio externo en la Salpetriere, anexo al servicio
de Raymond, el sucesor de Charcot.
Georges Dumas enseña psicología experimental en la Sorbona, donde esta cátedra es suplementaria. Es
LA
Para completar su tipo, agréguese una ilustración vastísima, una gentileza efusiva y una infatigable
laboriosa.Sus estudios sobre los estados intelectuales en la melancolía, el estado mental de Augusto
Comte y de Saint Simón, la tristeza y la alegría, etc, revelan un talento superior. Cultiva con igual éxito
los trabajos clínicos y los experimentales, trabajando en el Asilo de Santa Ana, donde tiene su clínica
33
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
Su concepción es original e interesante: puede aceptarse o no, pero es digna de la mayor atención y
señala una etapa considerable en el desenvolvimiento de la psicología clínica.
Tiene ideas generales bien definidas, orientadas según el criterio del determinismo evolucionista, las
que le permiten intervenir en cualquier debate y lucir aptitudes dignas de encomio. Trabaja en el
laboratorio de Psicología Experimental instalado en el manicomio de Villejuif; como investigador es, a
un tiempo mismo, hombre de ciencia y hombre de conciencia.
OM
.C
DD
LA
FI
34
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
VEZZETI, HUGO (1996).AVENTURAS DE FREUD EN EL PAÍS DE LOS ARGENTINOS.
Capítulo 1
JOSÉ INGENIEROS EN LA RECEPCIÓN DEL FREUDISMO
Entre Janet y Freud
Ingenieros se refiere muy pocas veces a Freud, y cuando lo hace deja expuesto el repertorio de argumentos que
constituirán, durante muchos años, el núcleo de la resistencia al freudismo.
Su posición explícita muestra y transmite una matriz francesa de recepción de las ideas freudianas: Pierre Janet y
su crítica al psicoanálisis se anticipan a la lectura directa de la obra. En el agregado a la quinta edición de su conocida
obra sobre la histeria, en 1919, Ingenieros comienza por contraponer el “análisis psicofisiológico” que Janet realiza
de la histeria (a partir de los fenómenos del “automatismo psicológico”) al psicoanálisis de Freud y Breuer.
OM
Pero esa separación que acentúa la distinción entre fisiología y psicología queda desplazada —y alterada en su
significación— cuando agrega que el psicoanálisis se concentra en “la vida emotivo-sexual de los enfermos”, con lo
cual indica un eje diferente de oposición: es la disposición pansexualista (aunque Ingenieros no use ese término) lo
que distingue a la disciplina freudiana.
Esa prevención respecto de la generalización de la etiología sexual vuelve a aparecer hacia el final del agregado
mediante una comparación que arroja al freudismo fuera del campo de la medicina moderna ya que, dice, bajo esa
.C
concepción no hay otra cosa que el resurgimiento de “la vieja teoría uterina de la histeria”. Con ello dejaba
establecido entre nosotros un núcleo central del cuestionamiento al freudismo, que se continuaba con la acusación
—reiterada muchas veces desde entonces— que señalaba en él una disposición a proyectarse fuera de la medicina
DD
“resbalando a un terreno demasiado práctico y mundano”.Pansexualismo y “mundanización” concentran,
entonces, esos dos nódulos interconectados de prevención frente al psicoanálisis.
Sin embargo, la breve exposición destinada a la concepción de la histeria en el primer Freud ofrece otro rasgo
notable que tendrá consecuencias en la recepción de lo que comenzará a llamar-se el “método” psicoanalítico; me
refiero a la exposición de la teoría traumática y la insistencia en el “tratamiento” según el modelo del “desahogo
LA
verbal”. No puede decirse que la exposición sea errónea, ya que corresponde a la primera teoría freudiana y, como
se verá, sigue de cerca la exposición de Janet, la que, en todo caso, mantiene a Freud en el círculo de las tesis de
Charcot sobre la histeria traumática.
Ese papel cumplido por Janet en la caracterización del psicoanálisis, que marcó la temprana recepción de
FI
Ingenieros, se cumplió a través de un texto polémico, de batalla casi, que fue presentado en 1913 en el 18° Congreso
Internacional de Medicina, en Londres, y que, de forma sorprendente, se publicó muy pronto en la revista de Víctor
Mercante en La Plata;
La inclusión es notable si se tiene en cuenta que esa revista prácticamente no publicó ningún otro artículo que se
35
OM
un Freud que permanece unido a Charcot, con lo cual, puede decirse, ataca a ambos con un solo golpe. Frente a la
unilateralidad con la que el psicoanálisis buscaría sólo los recuerdos traumáticos, el “análisis psicológico” sería una
investigación más integral y sistemática, apegada a la observación del paciente en distintas circunstancias y
dispuesta a remontarse a una pluralidad de factores: constitución hereditaria, etapa evolutiva, enfermedades,
intoxicaciones.
Si Freud es cuestionado por pretender explicarlo todo mediante el postulado de un “principio general” (en este
.C
caso la tesis traumática), lo que Janet ofrece como garantía de un saber y de un procedimiento médico legítimos es
una técnica de observación empírica y ciertas formas artesanales de tratamiento; con lo cual se prohíbe toda
teorización y, por lo tanto, cualquier discusión con el psicoanálisis.
DD
Sin embargo, hay un punto en el cual asoma una divergencia que sin duda es teórica y que se afirma en la teorización
janetiana del “subconsciente”, enfrentada en primer lugar con Charcot. Su maestro en la Salpêtrière había
acentuado el papel de la sugestión —y la autosugestión— en las neurosis traumáticas de un modo que ponía de
relieve el papel de las representaciones mentales, lo que significaba proponer un mecanismo fundamentalmente
psíquico en la etiología de ciertas neurosis.
LA
Freud reconoce más de una vez que partió de allí en su primera teoría de las neurosis, y es en ese estado de
transición “charcotiano” (que no duró más allá de 1896) que Janet lo fija para desplegar su batería polémica. A la
concepción psíquica del trauma (desarrollada en Freud con la primera teoría de la represión) opone las
proposiciones fisiopsicológicas, por decirlo así, del “automatismo psicológico”.
FI
Nuevamente, lo determinante es cierto estado de conciencia estrechada (eso que Breuer, que seguía una dirección
análoga, llamó “estado hipnoide”) en el cual un “sistema” de fenómenos, que son a la vez psicológicos y fisiológicos,
sostiene la formación del recuerdo patógeno; éste ve favorecida su expansión por ese estado anormal de conciencia
y por la ausencia de representaciones antagónicas, y se desarrolla por asociación anexando imágenes y
movimientos, todo lo cual, en la mayoría de los casos, no sería causado por el acontecimiento traumático.
El sistema que subyace al complejo sintomático se desarrolla entonces automáticamente, sin que sea necesario
recurrir a la intervención de representaciones fuertes que obrarían por sugestión y autosugestión.
He aquí la explicación “sencilla” que Janet opone a la proposición de Charcot desarrollada por Freud. De ello
derivará su apego a una concepción igualmente “fisiológica” de los procesos separados de la conciencia: la
“subconciencia por des-agregación psicológica”. Se trata de una forma específica de la conciencia histérica y de
otras formas de funcionamiento extranormal, que se corresponde con un funcionamiento psíquico deficitario y
disociado; la mejor ilustración de esa noción, se encuentra en el “polígono de Grasset”, reproducido y expuesto por
Ingenieros.
Janet, al mismo tiempo —aunque no es el primero—, deja establecida la caracterización del psicoanálisis como
doctrina “pansexual”. Y esto, desde la breve referencia de Ingenieros en adelante, será uno de los lugares comunes
36
OM
menopausia, amenorreas) sino sólo de su “resonancia moral” es decir, en términos algo ofensivos, de los “recuerdos
traumáticos relativos a aventuras sexuales”.
También aquí el problema central venía a ser el descuido de la causalidad orgánica, es decir, la concepción de una
sexualidad que se autonomizaba del funcionamiento corporal y donde las representaciones psíquicas impondrían
su dominación sobre la máquina fisiológica.
Se suman allí dos argumentaciones de diversa índole. La primera afirma que la generalización de la etiología sexual
.C
es una exageración, pero no se pronuncia acerca de si la teoría causal es admisible, aunque limitada a algunos casos;
la segunda, en cambio, cuestiona la propia concepción freudiana de la etiología sexual que aparece, en esta versión
apegada al modelo del trauma, como una prolongación de la crítica básica al paradigma derivado de la neurosis
DD
traumática de Charcot.
La primera objeción exige, de un positivista tenaz que es es-clavo de los hechos, el recurso a la estadística. Si no en
todos, ¿en qué proporción de cuadros neuróticos intervienen perturbaciones de la sexualidad? Janet admite que
en su experiencia son más o menos las tres cuartas partes de los casos. Hasta aquí el psicoanálisis quedaría muy
bien situado, si se admite que se mostró capaz de explicar las razones etiológicas de una mayoría notable de los
LA
casos.
Pero la objeción mayor apunta a la concepción misma del factor patológico sexual. Si destaco esa doble
argumentación es porque en la recepción psiquiátrica serán frecuentes los deslizamientos y las condensaciones; a
menudo la acusación de los excesos en los que incurriría el freudismo esconde la otra impugnación fundamental
FI
explicación de algunos casos —o de algunos síntomas— dentro del ámbito polimorfo y complejo de las neurosis.
Por esa vía el psicoanálisis vendría a ocupar su lugar, junto a otras corrientes explicativas, en el capítulo
correspondiente de la psiquiatría, y se habría cumplido así el temor anticipado por Freud.
El tenor de la crítica de Janet no deja lugar a dudas respecto del juicio final sobre las consecuencias de la irrupción
del freudismo: su expansión pone en cuestión el fundamento mismo de la psiquiatría y la neuropatología en su
conformación moderna.
Al lado de ese cuestionamiento de fondo resulta menos importante la objeción moral relativa a la sexualidad. Janet
no quiere pasar por mojigato y deduce del freudismo (como el joven médico al que se refiere Freud en “El
psicoanálisis silvestre” pero con una intención de crítica irónica) una terapéutica sencilla, a saber, el coito normal y
regular.
37
OM
Finalmente, el freudismo es acusado de emplear un lenguaje“vago y metafórico” y ocuparse de temas
propios de la filosofía; si,entonces, el psicoanálisis aparece, para Janet, como una filosofía, el problema mayor es
que pretenda ser parte de la ciencia médica, que se instale junto a “la cama de los enfermos” y en “las salas del
hospital”.
De modo que el cuestionamiento janetiano al freudismo insiste triplemente en esos rasgos que lo tornan ajeno a
las ciencias médicas, con argumentos que, si bien no son fácilmente compatibles, no dejan de ilustrar que el núcleo
.C
fundamental de la resistencia anida en una cierta concepción de la medicina.
Y esto es lo que va a dominar en la recepción psiquiátrica, incluso en quienes busquen integrar el freudismo al
campo médico del que quedaba, en parte al menos, excluido.
DD
Las objeciones podrían escalonarse. Por una parte está el problema del cuerpo: el psicoanálisis se sostiene en una
concepción de los síntomas que elude la fisiología. En segundo lugar se distancia de la medicina moral por cuanto
promueve una terapéutica que no se ocupa de “todo” el paciente y de su existencia moral; finalmente, interviene
la cuestión de la ciencia: en la medida en que no se circunscribe a la observación de los hechos, la voluntad de
generalizar teóricamente conduce a la especulación y la filosofía.
LA
Sin embargo, aunque el carácter del artículo destaca esa cosmovisión médica, y eso es lo que domina en la
recepción psiquiátrica argentina, no puede desconocerse que el procedimiento analítico de Janet es psicológico y
establece cierta sintonía con las proposiciones de Bergson; pero no fue esa la versión de Janet que arribó a estas
tierras.
FI
Janet se presentaba, ante todo, como el representante de una “psicología médica”, cuyo sentido quedaba a la luz
con la expresión feliz “medicamento psicológico”, para aludir a las psicoterapias. Y fue la voluntad de desarrollar
una psicología clínica empírica, analítica y descriptiva, anexada al campo médico, lo que lo llevó a recuperar la
trayectoria de los viejos magnetizadores, en un camino que continuaba la conquista iniciada por Charcot.
Esa es la matriz de una “psicología médica” que Janet inauguró graduándose en las dos carreras —Filosofía y
Medicina— algo que George Dumas recomendaba a sus alumnos y que E. Mouchet hizo entre nosotros.
Ingenieros va a mostrar, en ese sentido, una vía de ingreso y un programa bien diferente en su obra propiamente
psicológica.
Pero Janet ha dejado anclada la recepción del freudismo no sólo por la vía de esa batería de argumentos contrarios;
también impactó en quienes se propusieron incorporarlo y usarlo: el freudismo quedaba centralmente establecido
en torno de la teoría sexual traumática y el modelo catártico como un recurso evacuativo, un procedimiento de
descarga asociado al alivio resultante de una confesión de la sexualidad.
El maestro francés contribuyó también a instituir ciertas “omisiones”. Para esa vía de lectura psiquiátrica no sólo
los sueños y la extensión a los actos fallidos de la vida cotidiana, sino también la teoría del desarrollo de la libido,
el narcisismo o el análisis de la cultura quedaban casi fuera de lo comprendido en la circulación del freudismo.
38
OM
sexualidad.
En el primer caso cumplió el papel de legitimar para la medicina mental argentina el campo de problemas de la
hipnosis y la psicoterapia a través de una obra, Histeria y sugestión, que es el exponente mayor de la recepción de
las escuelas francesas de Charcot y de Bernheim.
En ese sentido, dejó abierto el surco por el cual una primera recepción desde la medicina se hizo posible, algo que
se evidencia en las tesis médicas sobre el tema que durante años remiten siempre a la obra de Ingenieros.
.C
En cuanto a la sexualidad, la intervención de nuestro autor sigue caminos más complejos, que sirven para poner en
evidencia cómo se altera esa distinción inicialmente fácil entre la vía psiquiátrica y la vía literaria de circulación del
freudismo.
DD
Como se vio, en 1919 se sitúa, frente a Freud, en una posición cuestionadora del “pansexualismo”. Y sin embargo,
por sus trabajos sobre la psicopatología sexual y, sobre todo, por sus ensayos sobre la pasión amorosa contribuyó
a construir un espacio —y un público— para una lectura moderna del freudismo, en el marco de una “sensibilidad”,
que sintonizaba con los aires de renovación democrática y de reforma moral en el terreno de la sexualidad que
tendrán una expresión notable en la biografía de S. Zweig.
LA
Es importante resaltar que si nuestro psiquiatra interviene así en dos áreas fundamentales en la difusión del
freudismo, difieren el público —y las repercusiones— en cada una de ellas.
La historia de la hipnosis —y del psicoanálisis, en cuanto nace en ese terreno— muestra cierta incompatibilidad con
el espacio manicomial. También entre nosotros, como en Francia, la investigación clínica y la aplicación terapéutica
FI
de la hipnosis, como núcleo inicial de la psicoterapia moderna, no nacen en el espacio cerrado del hospicio de
alienados sino en los servicios de neuropatología, considerablemente más abiertos a las restantes especialidades
médicas.
Y no puede dejar de destacarse la centralidad de la histeria en ese surgimiento. En efecto, dado que la histeria es
“la gran simuladora” de cuadros orgánicos, neurológicos en particular, los problemas del diagnóstico diferencial
están siempre presentes y en ese sentido es la clínica médica en su conjunto la que queda, por así decirlo, puesta
en cuestión. La histérica se hace presente en la escena médica, ante todo, como la que engaña y parece ser otra
cosa que lo que es.
En ese sentido, estudiar las formas de la importación de la clínica y las teorías de la hipnosis, que se producen
relativamente por fuera del dispositivo psiquiátrico, ayuda a pensar la relación difícil que se establecerá
posteriormente, entre
39
OM
freudismo, no es posible eludir sus trabajos sobre la psicopatología sexual y el amor. “Patología de las funciones
psicosexuales. Nueva clasificación genética”, de 1910, muestra a nuestro psiquiatra en una de sus ocupaciones
preferidas: la de nosógrafo y clasificador.
La misma que había desempeñado, con importante repercusión en los medios nacionales e internacionales, con su
trabajo sobre clasificación de delincuentes basada en la psicopatología y, en alguna medida, en la obra comentada
sobre la histeria.
.C
Pero hay otra producción fundamental sobre el amor sexual, a la que nuestro autor volvió una y otra vez y que tuvo
una repercusión incomparablemente mayor: los ensayos sobre el amor.
A diferencia de los trabajos de la serie científica, publicados en los Archivos, estos textos que podrían considerarse
DD
como una producción propiamente “literaria” tuvieron una amplia difusión entre un público no especializado a
través de su inclusión en las mismas publicaciones que difundían la narrativa sentimental popular.
La psicopatología sexual expone su fundamento genético evolucionista y busca establecer principios estables en un
campo que, para nuestro alienista, hasta ese momento era “una simple enumeración empírica de observaciones
no guiadas por ningún concepto general”. Su ensayo de clasificación sistemática comienza por la exposición de la
LA
“formación genética de las funciones psicosexuales”, es decir de las funciones reproductivas en línea con los fines
de la especie. El marco conceptual es enteramente análogo al presentado en su psicología biológica.
Por una parte, debe partir del cruce entre determinismo filogenético y desarrollo ontogenético de las funciones
biológicas reproductivas; por otra, los procesos psíquicos vienen a ser la expresión, en la evolución de la especie,
FI
individuo una dimensión volitiva que desorganiza la lógica determinista y abre un espacio para el ejercicio de la
libertad subjetiva. Es claro que surgen tensiones inconciliables en su sistema de pensamiento, que han sido, por
otra parte, señaladas.
Pero lo que interesa, en relación con los problemas de la sexualidad, es que en las grietas del determinismo aparece,
en la experiencia del amor sexual, el reconocimiento de la vivencia subjetiva individualizada bajo la forma de la
pasión, un tema central de la serie “literaria” de nuestro autor.
La expresión psíquica de esas funciones reproductivas comprende, para Ingenieros, tres procesos distintos. La
emoción sexual de placer, forma evolutiva-mente avanzada de cumplimiento del fin biológico, tiende a constituir
un hábito; éste, como un carácter adquirido, se transmite hereditariamente para formar la tendencia que se
corresponde con la vieja noción de instinto pero que, dice Ingenieros con criterio moderno, no tiene la fijeza del
instinto. En ese sentido, comparte con Freud un neolamarckismo residual que lo lleva a acentuar la variación en el
40
OM
siglo.
En ese escenario animado por el cruce de historias, verdaderos relatos de las variantes de la pasión, Ingenieros se
muestra como un médico poco convencional, escasamente apegado a la moralina y la hipocresía habituales en las
costumbres de su tiempo. No es que no se publicaran en las revistas médicas, en los Archivos en particular,
presentaciones de casos con patologías sexuales, generalmente asociadas a transgresiones sociales diversas; pero
nadie hasta entonces había expuesto una clínica tan diversificada que, además de exponer algunos casos en los que
.C
el límite con la sexualidad normal era impreciso, mostraba en algunas de sus intervenciones psicoterapéuticas un
notable desprejuicio. Se puede encontrar allí la continuidad de una posición inconformista que está presente,
exaltadamente, en los escritos juveniles sobre el amor a los que me referiré más adelante.
DD
Frente a la visión demonizadora que la medicina positivista había adoptado hacia la masturbación (y que se
mantuvo durante décadas en el discurso psiquiátrico) nuestro autor exhibe una actitud muy poco condenatoria. Da
cuenta de la existencia de la masturbación en ambos sexos, y la interpreta de un modo que revela esa superposición
irresuelta entre la naturaleza y la cultura que sostiene su pensamiento sobre el amor sexual. Ya que, por un lado,
es la expresión de la intensidad de la tendencia instintiva, pero, por otro, forma parte, viene a decir, de la educación
LA
necesaria de la emoción, es decir del aprendizaje de la voluptuosidad sexual. Justamente es el déficit de esa
necesaria educación erótica el factor causal, propiamente psicológico, de los frecuentes casos de déficit de
voluptuosidad en la mujer:
Y aquí aparece una referencia a Freud que no es la única en el trabajo, pero es la más específica; rescata el cuadro
FI
de la “neurosis de angustia” (que traduce “neurosis ansiosa”) y la etiología propuesta por el médico de Viena, que
la adjudicaba a la incompleta satisfacción sexual, pero para insistir en una dirección que no estaba insinuada por
Freud, a saber, la responsabilidad del “egoísmo sexual” del parte-naire; se trata, dice Ingenieros, de un[...] estado
neuropático frecuente en mujeres de sujetos cuya emoción sexual es muy rápida y no se preocupan de devolver
41
Introducción
En relación con el abordaje de la historia de la Psicología en la Argentina se plantean dos interrogantes: ¿Por qué
estudiar el concepto de conducta? ¿Por qué estudiarlo en la Psicología Francesa contemporánea.
Con respecto a la primera cuestión, poder estudiar las diversas definiciones del concepto de conducta en el discurso
psicológico implica en cierta forma investigar los distintos modos en que se ha definido el objeto de la Psicología
en este siglo.
En cuanto a la segunda cuestión, en 1903 Horacio Piñero (uno de los primeros docentes universitarios de psicología
de la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA) sostenía que los argentinos, “intelectualmente, somos en realidad
franceses.”
En las décadas subsiguientes, luego del ocaso del positivismo, la pregnancia de la tradición filosófica francesa en
OM
nuestro país sería considerable.
El recorte realizado del concepto de conducta en esa tradición involucra a autores de lengua francesa como M.
Merleau-Ponty, Edouard Claparede, Henri Wallon y Jean Piaget, pero fundamentalmente privilegia el tratamiento
de dos autores:
Henri Pieron: nos permite situar los inicios de la psicología científica francesa en relación con una particular
.C
utilización del término conducta, independientemente del conductismo norteamericano.
Daniel Lagache: fue el mayor exponente de una voluntad manifiesta de forjar un discurso psicológico unificado,
conciliando el psicoanálisis con la psicología experimental y la psicología social bajo la egida de una teoría general
DD
de la conducta.
que la tendencia a objetivar el estudio de los hechos psicológicos en el marco de las ciencias naturales pudo
consolidarse a partir de las teorizaciones darwinianas en torno a la adaptación de los organismos al medio y la
continuidad evolutiva entre los animales y el hombre.
A principios del siglo XX podemos encontrar las secuelas de esta tendencia objetivista plasmadas en dos tradiciones
psicológicas relativamente independientes:
FI
“Revolución conductista”: originaria de Estados Unidos, como desprendimiento de la psicología animal, liderada
por Watson (con su famoso manifiesto de 1913).
“Psicología científica”: originaria de Francia, formula principios teóricos y metodológicos que más tarde serán
erróneamente reconocidos como invención exclusivamente norteamericana.
42
OM
manera en que un ser vivo recibe las influencias del medio y elabora sus reacciones, no difiere de lo que constituye
el objeto del conductismo de Watson, quien planteaba la conducta en términos de estímulo-respuesta. Pero en lo
que sí difieren ambos autores es en cuanto al objetivo que plantean para la psicología y no tanto su objeto. Para
Watson, desde un principio, lo fundamental es la predicción y el control de la conducta, mientras que Pieron
mantiene una vocación eminentemente teórica que busca validar a través de todo tipo de experimentos.
Conducta y conciencia
.C
Quizas la diferencia más clara entre Watson y Pieron se plantee en relación a la consideración que dan a la
conciencia.
DD
Mientras que Watson en un principio (1913) sólo excluía la posibilidad de estudiarla de manera objetiva (por lo
cual rechazaba la introspección como método valido para la ciencia), en 1919 llega a negar de plano la existencia
de la conciencia, pasando de una exclusión metodológica a una negación ontológica.
Pieron, entretanto, no niega la existencia de la conciencia, pero sí rechaza la existencia de cualquier criterio objetivo
que pueda fundamentarla, ya que la conciencia es lo característico de subjetivo, que como tal es incomunicable.
LA
Sólo puede hablarse con certeza de la conciencia propia, punto de partida de toda la experiencia subjetiva.
El autor no acepta que se pretenda traspolar esta evidencia subjetiva particular a un plano general, con aspiraciones
de cientificidad. En ese sentido afirma que “toda psicología de alguien que no sea uno mismo es necesariamente
objetiva”. Considera que hay en la humanidad una clara oposición entre una tendencia subjetivista, que valora lo
FI
íntimo y lo único, y otra objetivista, que busca reducir los hechos a un “esqueleto manejable, clasificable,
etiquetable”.
Concede razón a la primera en el sentido de que la experiencia íntima es más rica y real que la empobrecedora
esquematización intelectual. Podría decirse que concuerda con Bergson en que la utilización del lenguaje para la
expresión de los fenómenos psíquicos implica ya una forma de objetivación. Para él la experiencia sensorial puede
podría ser el reino del arte o de la filosofía, pero los avances más significativos de la humanidad se han producidos
gracias a las esquematizaciones que la ciencia ha hecho posibles. No obstante, entre estos dos polos que aparecen
como extremos, Pieron plantea una polos, ya que pese a abordar la experiencia individual desde el punto de vista
de la deja de representar un esfuerzo de objetivación, más débil e insatisfactorio que el alcanzado por la conciencia,
no continuidad sin cortes.
La psicología introspectiva podría situarse entre ambos psicología objetiva. De este modo, la psicología sería
una ciencia con un único objeto: el comportamiento de los organismos. Al mismo tiempo sus procedimientos
de investigación son diversos, clasificándose según su nivel de desarrollo y su grado de exactitud. En tal sentido,
la elección del método adecuado está dada por la utilidad que éste puede tener para la labor científica.
43
OM
En su último análisis, el objeto de la psicofisiología es el funcionamiento del Sistema Nervioso Central, ya que éste
es el que asegura la elaboración integrada de los comportamientos globales.
.C
más que una sola psicología”.
En ese contexto, en 1949, Daniel Lagache planteará su programa de unidad para la psicología, considerando a la
conducta como su objeto indiscutible.
DD
Su proyecto implica conciliar lo que para él son los dos grandes enfoques de la psicología: el naturalista y el
humanista. No obstante, a la hora de ver de qué manera estos enfoques se plasman en la práctica, no le resulta
sencillo encontrar alguna corriente que respete todos los postulados. Por un lado, ni siquiera el conductismo se
ajusta a los requerimientos del naturalismo. Tampoco lo hace la psicología experimental, que a partir de la teoría
de la Gestalt se centra en el estudio de las totalidades estructuradas. Por la otra parte, en el bando humanista,
LA
a uno u otro grupo, sino más bien habría que buscar una síntesis más abarcativa que los englobara a los dos. A
partir de allí, su proyecto superador, siempre esbozado pero nunca concluido, de unificar la psicología partiendo
de una teoría general de la conducta.
44
OM
Al humanismo le correspondería el método clínico y el naturalismo se valdría del experimental. La psicología
experimental sería la más rigurosa y eficaz, por su control de las variables y técnicas de laboratorio. Aunque su
limitación sería la imposibilidad de traspolar este tipo de abordaje a la psicología humana.
La psicología verdaderamente apropiada pata el abordaje del hombre en situación es la psicología clínica. En esta
psicología es posible encontrar los rastros de su formación médica en la psiquiatría dinámica (Bleuler, Jaspers,
Blondel, Malinowski), por el otro, de su formación filosófica y fenomenológica (Jaspers, Sartre).
.C
Por último, Daniel Lagache se identificará con el psicoanálisis hasta su muerte en 1972. Ya en 1945 Lagache
“desmedicaliza” y “despsicopatologiza” la clínica, situándola en el seno de la psicología y orientándola hacia el
hombre normal.
DD
La psicopatología clínica se nutre de la psiquiatría, pero su objeto rebasa al de la patología mental: no es el hombre
enfermo, sino la vida del hombre en conflicto, en un enfrentamiento polémico con la realidad y consigo mismo.
Se ocupa de las maneras de ser (más cerca del existencialismo y de la fenomenología) y de reaccionar (adaptadas
como inadaptadas) de un ser humano concreto y total frente a una situación, es decir, se ocupa de la conducta.
En 1949, la psicología clínica queda definida para Lagache en estos términos: “es esencialmente una disciplina
LA
psicológica basada en el estudio profundo de casos individuales, es el estudio de la conducta humana individual y
sus condiciones (herencia, maduración, condiciones fisiológicas y patológicas, historia de vida), el estudio de la
persona total en situación”.
El instrumento específico de esta psicología es la interpretación comprensiva. Aquí toma el célebre binomio
FI
jaspersiano comprensión-explicación, reservando el término comprensión para la formulación de los tipos ideales
(relaciones generales en términos de las cuales deben interpretarse las conductas concretas).
Lagache es un pionero en la inserción del psicoanálisis en la universidad, un medio que, en Francia, siempre le había
sido hostil. Tiene éxito en esa tarea que implica por un lado poder impartir una formación psicoanalítica completa
en la licenciatura en psicología, por otro, lograr que los psicólogos puedan practicar el psicoanálisis sin ser acusados
de ejercer la medicina de manera ilegal. A la larga, logra ambos objetivos. Lagache no vacila en romper con la
ortodoxia médica de la Sociedad Psicoanalítica de Paris en 1953 y en fundar la Sociedad Francesa de Psicoanálisis
(de la cual es elegido presidente).
En ese contexto en que la psicología se define como ciencia de la conducta, para Lagache ya es hora de que el
psicoanálisis aceptes sus progresos. Hablar de inconsciente implica sustantivar un adjetivo: el inconsciente no es
una sustancia, sino una cualidad de ciertas conductas. En consecuencia, la hipótesis que sostiene la existencia de
una “mente inconsciente” no sólo es inexacta sino que es inútil para el estudio de conductas concretas. La psicología
45
OM
enfoca las conductas molares.
.C
En este punto aparece una doble referencia; por un lado, al interaccionismo simbólico, y por el otro, a la teoría del
campo psicológico de Kurt Lewin.
El concepto de campo psicológico implica una representación global que integra las nociones del medio y al
DD
organismo. Desde esta perspectiva la conducta se definiría a partir de las transformaciones del campo psicológico
que tienen por agente al organismo. Lo que “pone en movimiento” al organismo es la motivación, un estado de
disociación y de tensión determinado por necesidades que, al estar mediatizadas por la cultura, dejan de ser
imperativos de la naturaleza.
El psicoanálisis también tiene aquí su lugar, ya que a Lagache le parece necesario articular los determinantes
LA
sociales con los relativos a la historia individual. La obra de Pieron nos permite ver cómo, desde principios de siglo,
una vertiente de la psicología francesa situaba la conducta como objeto de la disciplina. Sin embargo, la concebía
en términos muy distintos de los empleados por el conductismo, apartándose de él, entre otras cosas, en la
consideración otorgada a la conciencia y la fisiología.
FI
Luego vemos a partir de Daniel Lagache, la importancia de no partir de la oposición antitética de conceptos como
hacía la psicología clásica, sino de la interdependencia de las realidades que supuestamente les correspondían. Si
Lagache no logró articular una teoría general de la conducta de manera sólida y convincente, no puede negarse que
su proyecto de unidad haya tenido el valor de un llamado a cerrar filas frente a la eterna crisis de la psicología.
46
Psicoanálisis como una revolución en la ciencia psicológica. El objetivo que se plantea Janet en este trabajo es
establecer la diferencia que existe entre el psicoanálisis y el análisis psicológico. Lo hará examinando tres
problemas:1) el de los recuerdos traumáticos en las neurosis.2) el papel que desempeñan dichos recuerdos .3) el
carácter moral de los mismos.
El Psicoanálisis concibe que todas las mociones tiernas y afectuosas deben considerarse como formando parte de
la vida sexual, pues son su fuente en la impulsión sexual primitiva.
Janet menciona que muchos autores han protestado contra la frase “tendencia sexual” planteada por Freud, dando
cuenta también de sus críticas hacia la frase “deseo genital”. Dice que “ayer” todas las neurosis eran puras
sugestiones y que “hoy” son todas perturbaciones sexuales.”Mañana” serán perturbaciones se sentido moral o de
sentido artístico.
OM
En cuanto al tratamiento de la neurosis, Janet menciona que el psicoanálisis ha realizado el tratamiento de
enfermedades nerviosas, pero que lo que interesa no es que se nos diga si un enfermo se ha curado luego de algún
tratamiento sino poder comprender el determinismo que encadena esos fenómenos y probarnos que es el baño o
el relato lo que ha determinado la curación.
El psicoanálisis utiliza dos formas de tratamiento dice Janet.
.C
1) Es la que aconseja al enfermo un coito normal y regular con uso del preservativo ideal.
2) En ciertos casos de histeria, puede ser convincente, buscar el recuerdo traumático, aparentemente olvidado y
refugiado en el subconsciente y transportar al sujeto a expresar ese recuerdo. Se necesitaba trabajar para las
DD
disociaciones de ese recuerdo traumático, ya sea por sugestión o por otro medio. Ese recuerdo ponía ante los ojos
del sujeto una situación difícil a la que no había sabido adaptarse. El papel del médico no es sólo dar cuenta de cuál
es esa situación traumática sino además ayudar al sujeto a adaptarse a esa situación
Los síntomas histéricos se desvanecen, sin que reaparezcan, cuando se consigue poner en plena luz el elemento
provocador y se logra despertar el estado afectivo que lo había acompañado. Como todos los síntomas dependen
LA
de una excitación sexual desviada de su objeto originario, basta llevar la atención del enfermo sobre el fenómeno
sexual primitivo. El llamado a plena consciencia de los recuerdos sexuales rechazados, será pues el segundo
procedimiento del tratamiento.
Janet menciona que el psicoanálisis quiere ser, al mismo tiempo, una ciencia médica y tiene la pretensión de
aplicarse al diagnóstico y al tratamiento de los enfermos.
FI
La Neurología y la Psiquiatría necesitan hoy de otra clase de estudios y no es bajo esa forma filosófica que la
psicología debe ser presentada a los médicos. Para esto, la psicología no debe limitarse a resumir la conducta y las
actitudes de los enfermos relacionado todos los hechos por un determinismo tan riguroso como posible.
47
OM
psiquiatría argentina. Dicha teoría se basaba en la idea de que ciertas enfermedades físicas y mentales se
transmitían de generación en generación cada vez en proporciones más fuertes y más destructivas.
La extraña combinación teórica de Beltrán formaba parte en realidad de un patrón más amplio de recepción del
psicoanálisis por parte de los círculos médicos en la Argentina durante las primeras décadas del S.XX. El psicoanálisis
y otras corrientes de pensamiento fueron añadidos al arsenal terapéutico y teórico existente, y esto dio origen a
una mezcla que contenía elementos incompatibles entre sí.
.C
Hasta fines del 40’ la psiquiatría no estaba definida en la argentina como una especialidad médica autónoma y
legitima (y por cierto, muchos menos el psicoanálisis).La psiquiatría era considerada una subespecialidad menor de
la medicina .La importancia de los psiquiatras respondía más a su función social y política que a su status científico.
DD
En la recepción del psicoanálisis en la Argentina se pueden distinguir tres momentos:
1) Desde fines de la década del 10’ hasta comienzos de los años 20’ el psicoanálisis fue discutido inicialmente en los
círculos médicos y era considerado una doctrina extranjera. Su conocimiento provenía casi en su totalidad de
fuentes francesas y era concebido como una teoría puramente médica.
LA
2) Desde mediados de los años 20’hasta fines del 30’ los psiquiatras más progresistas comenzaron a incorporarlo
gradualmente a su arsenal terapéutico , o a criticarlo fuertemente, demostrando en ambos casos que la disciplina
ya tenía un lugar asegurado dentro del campo de las terapias y teorías disponibles.
Al mismo tiempo, versiones popularizadas del pensamiento freudiano comenzaron a circular entre el público
general.
FI
El psicoanálisis era reconocido como una corriente importante de pensamiento aun por aquellos que se oponían a
él. Hacia fines de la década del 20’ el psicoanálisis no era solo una técnica terapéutica sino también un objeto de
consumo cultural.
3) Finalmente entre 1930 y 1940, el psicoanálisis y la psiquiatría llegaron a establecerse como especialidades
autónomas en una sociedad altamente polarizada. Para 1942, cuando un grupo de médicos funda la Asociación
Psicoanalítica Argentina, el psicoanálisis ya había ganado un lugar importante en la cultura urbana del país.
OM
existencia de cierto sentimiento nacionalista anti alemán (y antisemita), conspiraba contra la recepción de dicha
disciplina en la psiquiatría.
La teoría de la degeneración, introducida en Francia por el médico Morel, fue durante décadas la corriente de
pensamiento dominante del pensamiento psiquiátrico en la Argentina. Esta teoría en nuestro país adquirió una
dimensión particular al ser asociada con el tema de la inmigración masiva. A comienzos del siglo xx, intelectuales
nacionalistas, argumentaban-citando evidencia “científica “-que la inmigración sin control podía degradar la raza
.C
nacional incorporando grandes cantidades de degenerados en la sociedad.
La psiquiatría formaba parte de un engranaje medico amplio erigido por el Estado para controlar y al mismo tiempo
mejorar las condiciones de vida de las nuevas masas urbanas. Hasta 1930 y también un poco más tarde, la
DD
psiquiatría en la Argentina estaba en sintonía con lo que Hale denominaba “estilo somático “.Se pensaba que los
orígenes de las enfermedades mentales podían descubrirse en la morfología del cerebro o del sistema nervioso y
que los trastornos debían ser tratados de un modo acorde.
Otra figura de gran importancia en la psiquiatría argentina-y en la criminología- es José Ingenieros, que si bien
pensaba que la psicología era una rama de la biología , introdujo y promovió los estudios de la hipnosis, los sueños
LA
sobre psicoterapia promovieron la idea de que el enfermo mental debía ser escuchado, que el discurso del paciente
tenía un significado.
Influidos por la mirada francesa, los argentinos caracterizaban el psicoanálisis como una teoría pansexualista
.Aunque algunos elementos del método freudiano fueron aceptados de manera gradual, Freud seguía siendo
criticado por su dogmatismo- esto es, por el énfasis que ponía en la preeminencia de la sexualidad en la etiología
de las neurosis. Sin embargo, dicha disciplina iría teniendo significado a la largo del tiempo para los médicos
argentinos, al punto que incluso aquellos que adherían a concepciones puramente biológicas de la enfermedad
mental, sentían que era necesario prestarle atención.
Desde fines de la década del 10’ se verifico un creciente interés por parte de los intelectuales latinoamericanos,
hacia corrientes filosóficas de origen europeo, alejadas del positivismo. La declinación de dicha corriente, coincidió
con la emergencia de un campo de producción cultural, ligado a la profesionalización de disciplinas tales como la
filosofía y la literatura.
La crisis del positivismo afecto también a la profesión médica y abrió la puerta a la recepción de teorías terapéuticas
alternativas .Durante la década del 20’, el paradigma de la degeneración hereditaria comenzó lentamente a perder
49
OM
En 1929 un grupo de psiquiatras fundo la Liga Argentina de Higiene Mental, influidos por el movimiento de higiene
mental que había surgido en Estados Unidos y en otros lugares del mundo. Los higienistas mentales promovieron
la noción de que la enfermedad mental podía ser prevenida y curada así como también que la psicoterapia era una
técnica efectiva.
La ideas de la posible curación de los trastornos mentales disparo el interés por la búsqueda de nuevas formas de
tratamiento.
.C
La Liga, en tanta organización que promovía la renovación de la psiquiatría, atraía a jóvenes interesados en nuevos
caminos de abordaje de los trastornos mentales.
En 1940, Enrique Pichon Riviere y su mujer Arminda Aberastury, trabajaban en los consultorios externos creados
DD
por la Liga en el hospicio junto a Rascocsky, otro futuro fundador de la APA .Otro miembro de la Liga era
Goldemberg, un joven psiquiatra que hizo mucho por la promoción del psicoanálisis en los 50’ y 60’.
A partir del 30’, nuevas terapias psiquiátricas comenzaron a estar disponibles en todo el mundo, entre ellas diversos
tipos de shock (eléctricos o químicos). Estas terapias eran relativamente efectivas, pese a no contar siempre con un
anclaje teórico firme.
LA
Aunque la práctica de la psiquiatría seguía centrada en el hospicio, algunos hospitales argentinos comenzaron a
ofrecer servicios de consultorios externos, a menudo a instancias de la Liga argentina de Higiene Mental. Además
algunos médicos de inclinaciones progresistas empezaron a cuestionar los fundamentos básicos de la práctica
psiquiátrica. Ellos tenían una concepción más amplia de la medicina en la cual la dimensión psicológica de la
FI
enfermedad y el tratamiento médico no podían ser ignorados. Algunos terapeutas veían al Psa como una de las
terapias alternativas disponibles que tenía fundamentación teórica más sólida.
El Psa podía incluso ofrecer una fundamentación teórica para algunas terapias somáticas. A finales de la década del
30’mientras los psiquiatras en la argentina y en otras partes, admitían no saber claramente cómo y por qué
operaban las terapias de schok, Pichon Riviere, un pionero en el uso de la terapia electroconvulsiva en el país y más
tarde miembro fundador de la APA, propuso una explicación psicoanalítica .La terapia de shock funcionaba en los
casos de “melancolía”(enfermedad que sería luego considerada por él como la base de la enfermedad mental
)porque satisfacía el deseo de castigo del paciente, reduciendo así sus tensiones y ansiedades.
Por otro lado, en los años 10’ y 20’ el Psa comenzó a ser considerado como una de las corrientes espirituales más
importantes del momento .Hacia 1930, era discutido en nuevos contextos .Se lo publicó en revistas populares. Hacia
finales de esas décadas, varios psiquiatras se sintieron atraídos por dicha doctrina, no como un método exclusivo
sino como una herramienta que podía ser agregada a técnicas y teorías más tradicionales, y a veces combinada con
ellas. Esto último dio cuenta de la gran flexibilidad por parte de los psiquiatras y contribuyó al proceso de
legitimación de la disciplina.
50
OM
un rol que iría, más allá de la mera cura de las neurosis. .La revista planteaba la necesidad de establecer una ruptura
con la psiquiatría tradicional.
La psicoterapia científica y moderna que la revista proponía se diferenciaba de lo tradicional .La psiquiatría debía
ser renovada y la psicoterapia sería un componente esencial de esta renovación y también parte de un programa
político. Era considerada una herramienta para una mejor comprensión de las críticas condiciones históricas y
sociales por las que estaba atravesando el mundo contemporáneo.
.C
Pizarro Cresco, Bermann, Thénon y Beltrán representan sólo algunos ejemplos de personas que buscaban
compatibilizar el Psa con sus respectivas posiciones ideológicas .Todos ellos combinaron dicha doctrina con otras
teorías psiquiátricas.
DD
Psicoanálisis para un público expandido.
Psicoanálisis y otras disciplinas.
El psicoanálisis comenzaba a gozar de una creciente aceptación en otros ámbitos .Si bien la universidad de Buenos
Aires no contaría con una carrera de psicología hasta entrados los años 50’, existía sí una cátedra de psicología
LA
desde 1896. El psicoanálisis fue introducido como tópico de discusión en un programa de estudios por primera vez
en 1914. Cuando Horacio Piñero, un psiquiatra, propuso una comparación entre las teorías de la histeria de Freud
y Breuer por un lado y las de Janet por otro.
La orientación clínica psicopatológica del primer curso, y el declive del positivismo entre los intelectuales argentinos
FI
un método de investigación.
Victor Mercante destacaba sus usos en la pedagogía, introduciendo otra manera de leer a Freud. Este autor fue un
reformista en educación que interpretaba el pensamiento de Freud desde una perspectiva biologicista.
51
OM
Otra razón es el antagonismo de Dilthey con las tendencias dominantes de su época. Dilthey es un romántico
rezagado viviendo en una época positivista hostil a la filosofía. Forma su cultura en la historia y en la literatura, pero
asimila también algunos rasgos del positivismo imperante en su tiempo que cohíben el vuelo de su espíritu. Pero
mientras ellos vivían pendientes de las ciencias naturales, a Dilthey le preocupan las ciencias del espíritu. Este rasgo
es llamado por Pucciarelli la “superación del naturalismo” que lo aleja de las corrientes de su época. Cuando hacia
fines de siglo sobreviene el renacimiento de la metafísica, la nueva generación ve en Dilthey al enemigo de la
.C
metafísica, al positivista preocupado por el problema de la historia.
LA PSICOLOGÍA DE DILTHEY: MATERIALES PARA EL PROBLEMA DE LA FUNDAMENTACIÓN DE LAS CIENCIAS DEL
ESPÍRITU
DD
Una parte de las investigaciones gnoseológicas de Dilthey tenía por objeto delimitar y defender la autonomía de las
ciencias del espíritu frente a las ciencias naturales. Pero después de lograr ese propósito era menester otorgar un
fundamento gnoseológico a las ciencias del espíritu. La obra de Dilthey constituye una lucha por la autonomía de
las ciencias del espíritu, al tiempo que un intento de fundamentación que debía coronar su primera tarea.
Durante muchos años (hasta 1900), Dilthey creyó que la psicología podía proporcionar el anhelado fundamento de
LA
las ciencias del espíritu. No se concibe una jurisprudencia donde estén ausentes los conceptos de responsabilidad,
norma, ley; estos y otros conceptos sólo pueden ser aclarados y entendidos cuando se acude a la vida anímica de
la cual surgen. Se puede decir que el conocimiento de la vida anímica, realizado de un modo científico en la
psicología, condiciona el estudio de las ciencias de espíritu.
FI
Sin embargo, la psicología de la época no se prestaba para cumplir este propósito. Utilizando un método que
triunfaba en las ciencias naturales, había llegado a resultados equivocados y contradictorios, y se corría el riesgo de
trasladarlos a las ciencias del espíritu. En el fondo, todos operan sobre la misma concepción naturalista del hombre
y, por eso, coinciden en querer subordinar cualquier fenómeno psíquico a una conexión causal y explicarlo apelando
a un número de elementos, fuerzas y leyes unívocamente determinado. Pero sólo pueden lograr este fin
complementando el dato empírico mediante hipótesis. La ciencia natural, que se ocupa de hechos que aparecen
en la conciencia desde afuera como fenómenos aislados, reclama la hipótesis como integrante necesaria de toda
sistematización. Pero en psicología, el hecho anímico tolera hipótesis contradictorias sin la esperanza de
comprender ninguna. Sobre tales bases no puede elevarse ninguna construcción segura.
La psicología de la época, explicativa por su intención y constructiva por su proceder, desconoce la autonomía y la
peculiaridad del hecho anímico al intentar la síntesis mental mediante elementos e hipótesis sin advertir que en lo
psíquico el complejo precede a los elementos. La psicología, para Dilthey, estudia hechos que se nos ofrecen
íntimamente como realidad en una conexión vital originaria, por lo que él propone seguir el camino inverso:
descender del todo a las partes valiéndose de un método descriptivo y analítico. Sólo así encontrarían una base
segura las ciencias del espíritu. La psicología descriptiva proporcionará el medio para lograr un conocimiento
52
OM
al conjunto de los procesos psíquicos.
En las investigaciones de Dilthey se pueden distinguir dos tareas de significación desigual: la primera se refiere al
problema de la fundamentación de las ciencias del espíritu y pertenece a la esfera de la teoría del conocimiento, la
segunda constituye el aporte original a la renovación de la psicología empírica. Hay que distinguir en Dilthey,
además, al crítico y al renovador.
Entre sus contribuciones a la renovación de la psicología hay que reconocer su insistencia en la peculiaridad del
.C
acaecer anímico como diferente del físico; la noción de totalidad de la vida anímica y su influencias en los procesos
psíquicos aislados; los tres conceptos fundamentales de evolución, estructura e historicidad; su método descriptivo
inspirado en el respeto por la peculiaridad de los procesos psíquicos; el carácter teleológico de lo anímico y su
DD
relación con la voluntad, su análisis de vivencias, contenidos y actos. Dilthey comprendió que lo puramente
fenomenal debía, ante todo, ser sometido a descripción, análisis y comparación, de modo riguroso y exhaustivo,
antes de tratar de delimitar sus condiciones y leyes, sobre todo físicas y fisiológicas.
Con el correr de los años, preocupado por el problema de la fundamentación de las ciencias del espíritu, Dilthey se
fue alejando de la psicología y desde 1900 se orienta cada vez más hacia la teoría del conocimiento.
LA
Desde 1900, y en parte bajo el influjo de la lectura de Husserl, Dilthey corrige su primer punto de vista y tiende a
separar cada vez más nítidamente estas tareas. Amplía el radio de sus investigaciones y su “psicología comprensiva”
se acerca a lo que será su nueva ciencia: la hermenéutica. Para comprender el mundo espiritual en su proceso
histórico, la hermenéutica debe partir de las manifestaciones sensibles de la vida, de sus objetivaciones, y revivir el
proceso de su creación. Llamamos “comprender” al proceso mediante el cual conocemos lo psíquico a través de
signos sensibles dados que constituyen su exteriorización. La comprensión nos permite interpretar sus expresiones
y la hermenéutica, mediante el análisis gnoseológico, lógico y metódico de la comprensión, nos asegura la validez
general de sus resultados.
Estudiando la estructura interna de las ciencias del espíritu como un todo autónomo, Dilthey descubre la relación
de dependencia fundamental que consiste en la estructura Vivencia-Expresión-Comprensión. La hermenéutica
debe analizar esta relación y así se convierte en el fundamento de todo ese grupo de ciencias. Ella estudia el
complejo proceso que va desde el comprender a la vivencia por el camino de la expresión. Descubre para cada
grupo de expresiones la correspondiente especie de comprensión, analiza sus formas elementales y superiores, y
determina sus categorías fundamentales. La hermenéutica guarda relación con la psicología, porque su base
descansa en la vivencia y sus categorías son objetivaciones de vivencias.
53
OM
idealismo militante.
El colegio considera novecentista toda actitud espiritual que afirme táctica o explícitamente el carácter sustantivo
de la personalidad humana, este es el minimun de doctrina que el novecentismo solicita al adepto, cualquiera fuere
la individual teórica filosófica, ética o política profesada.
El colegio novecentista reaccionara en contra de las formas superadas del positivismo por lo que tiene de
materialismo vergonzante, de dogmatica metafísica rebosada de ciencia, sería entonces, contra toda especulación
.C
inmune de espíritu gnoseológico y axiológico y contra cualquier filosofía que afirma el carácter epifenoménico de
la personalidad humana. El colegio valora todo esfuerzo espiritual, la sustantividad y valor hegemónico de la
personalidad humana.
DD
No es una actitud idealista, sino una presunción vehemente del idealismo con objeto de garantizar a sus miembros
un maximun de libertad, aspiración surgida sobre las ruinas del positivismo materialista o energético y de otras
filosofías que socaban la personalidad y el mundo de los valores.
Lidia Peradotto: Apuntes tomados en la discusión del manifiesto novecentista. Revista humanidades, Tomo I año
1921. Edición de la facultad de humanidades de La Plata.
LA
erige en cosa en sí, para caer en eso que Renouvier llamaba “superstición objetiva”. Es incapaz de fundar la misma
ciencia que deifica.
Lleva al automatismo absoluto, con lo cual socava el valor de sus propias afirmaciones. “El Novecentismo es la
vuelta a Kant en espíritu. “El novecentismo es creencia en la personalidad humana como valor supremo, es
presunción vehemente de idealismo. Su núcleo está en la personalidad, postulado axiológico. “Para evitar el
dogmatismo, limitador de la libertad, debe definirse en Novecentismo en espíritu, más que en la letra. “Debe ser
un idealismo militante, una crítica de la cultura argentina que carece de universalidad, de profundidad, de idealismo
y de moralidad. “Definición de Novecentismo Es Novecentista toda actitud espiritual que afirma, táctica o
explícitamente, la realidad y el valor hegemónico de la personalidad humana, frente de todo otro valor,
cualesquiera fueran la inclinación política, estética, religiosa, etc., preferida por el adherente. “Por eso simpatiza
con toda filosofía o forma cultural que limite la interpretación mesánica del universo y tienda a definir la
personalidad humana en términos de libertad. De ahí que el Novecentismo negativamente es una reacción contra
el positivismo, en lo que éste tiene de materialismo vergonzante, y contra toda especulación inmune de espíritu
gnoseológico y axiológico. Desde el punto de vista afirmativo, el Novecentismo al proclamar la realidad y hegemonía
de la personalidad humana.
54
OM
lucha por una universidad científica, moderna y democrática. El suceso tuvo origen en la universidad de Córdoba,
esa universidad fue fundada en el año 1613 sobre la base del colegio Máximo de los Jesuitas. La ley avellaneda
sancionada en 1885 fijo las bases sobre las que debía ajustarse los estatutos de las universidades. A principios del
S. XX ya reiteradas veces se había solicitado por parte de los alumnos una reforma, pero no se llevaba a cabo. Hacia
1918 los estudiantes denunciaron el atraso científico de la universidad vinculado con el carácter extremadamente
arcaico y elitista del sistema de gobierno de la institución. Se solicitó entonces, necesidad de autonomía, gobierno
.C
tripartito paritario, asistencia libre, régimen de concursos y periodicidad de la cátedra. El autor principal fue
Deodoro Roca que en ese entonces tenía 28 años, doctorado en la misma Universidad de Córdoba, sus textos
combinan el socialismo, la crítica antiimperialista, el antipositivismo y el laicismo, el juvenilismo y el humanismo
DD
cosmopolita, incluyendo el compromiso político, revelando la complejidad del clima de la época.
A continuación el manifiesto de la reforma:
MANIFIESTO LIMINAR DE LA REFORMA UNIVERSITARIA. FEDERACION UNIVERSITARIA DE CORDOBA 1918: La
juventud universitaria de Córdoba a los hombres libres de América.
Hombres libres, acabamos de romper la última cadena que nos ataba a la antigua dominación monárquica y
LA
monástica. Las universidades han sido hasta aquí el refugio secular de los mediocres, la renta de los ignorantes, la
hospitalización segura de los inválidos y el lugar donde las formas de tiranizar y de insenbilizar hallaron la catedra
que las dictara. Nuestro actual régimen universitario es anacrónico, fundado sobre el derecho divino del
profesorado universitario. La federación se alza para luchar contra este régimen. Reclama un gobierno
FI
estrictamente democrático y el derecho de darse soberanía radica principalmente en los estudiantes. Exige
entonces el derecho a exteriorizar el pensamiento propio de los cuerpos universitarios por medio de sus
representantes y la capacidad de intervenir en el gobierno de su propia casa. La juventud universitaria de Córdoba
saluda a los compañeros de América toda y los incita a colaborar en la obra de libertad que inicia.
55
OM
A toda psicología explicativa le sirve de base una combinación de hipótesis, ya que no pueden excluir otras
posibilidades. Por tanto, a cada uno de estos haces de hipótesis se les enfrentan docenas de haces diferentes. Así,
cuando tratamos de establecer un conocimiento causal nos vemos impedidos por una niebla de hipótesis sin poder
comprobarlas con los hechos psíquicos.
Las ciencias del espíritu pretenden determinar de un modo independiente sus métodos, a tenor de su objeto.
Partiendo de los conceptos más generales de la metodología general, tienen que llegar a métodos y principios más
.C
genuinos dentro de su campo. Las ciencias del espíritu se diferencian de las ciencias de la naturaleza, primero,
porque éstas tienen como objeto hechos que se presentan en la conciencia procedentes de fuera, como
fenómenos, mientras que en las ciencias del espíritu se presentan desde dentro, como realidad y como una
DD
conexión viva. La naturaleza la "explicamos" y la vida anímica la "comprendemos". Las hipótesis no desempeñan
en la psicología el mismo papel que dentro del conocimiento natural donde sirven para establecer toda conexión;
en la psicología la conexión es dada de un modo originario y constante en el vivir: la vida se nos da sólo como
conexión y no necesita, por lo tanto, de conceptos subyacentes logrados por una inferencia inductiva para
establecer una conexión que abarque a los grandes grupos de hechos psíquicos. Además, tampoco las hipótesis en
LA
de conocimientos psicológicos, las realidades psíquicas constituyen su elemento más importante y no es posible
estudiarlas sin recurrir al análisis psicológico, así como tampoco es posible conseguir el enlace de las mismas en un
todo sin comprender antes la conexión psíquica en que se hallan trabadas. Sólo partiendo de la conexión psíquica
amplia, uniforme, pueden hacerse comprensibles las relaciones en que se hallan la economía, el derecho, la religión,
el arte y el saber entre sí y con las organizaciones externas de la sociedad humana, pues de esta conexión se han
ido desplegando y por virtud de ella coexisten en cada unidad psíquica de vida sin confundirse o destruirse
mutuamente.
Pero la relación de la psicología con la teoría del conocimiento es diferente de la que guarda cualquier otra ciencia.
La conexión psíquica constituye el fondo del proceso cognoscitivo y, por lo tanto, este proceso puede ser estudiado
y fijados sus alcances sólo en esta conexión psíquica. Ya vimos que la ventaja metódica de la psicología consiste en
que ella se da la conexión psíquica de un modo inmediato, vivo, como realidad vivida; que se halla también en la
56
OM
toda conexión utilizada por ella puede ser verificada unívocamente mediante la percepción interna y que toda
conexión semejante puede mostrarse como miembro de la conexión más amplia, total, no inferida, sino
originalmente dada.
Si entendemos por psicología una exposición de la conexión regular de la vida psíquica, las obras de los poetas no
contienen psicología alguna. Se pide una psicología que fuera capaz de captar en la red de sus descripciones lo que
estos poetas y escritores contienen y que no se encuentra en la teoría psicológica actual. Sólo una psicología
.C
descriptiva y analítica puede hacerlo, porque parte de la conexión vivida, que se nos da de un modo original y con
una fuerza directa; y expone aún aquello que todavía es inaccesible al análisis, sin menoscabarlo.
DD
APUNTES DE TEORICOS DE DILTHEY Y ARTICULACIONES.
Dilthey era filósofo, historiador, sociólogo y psicólogo que estudio la hermenéutica (estudio de las interpretaciones
y significados de los textos) nacido en Alemania en 1833. En el recorrido que Foucault nombra a la disciplina del
sentido o disciplina de la subjetividad pasa por Dilthey. Este es un autor estructurante de la disciplina del sentido.
LA
Para entenderlo hay q hacer una especie de comprensión hermenéutica para aplicárselo a el mismo. Otras razones;
a partir de él se introduce, y oficialmente se empieza a hablar de ciencias del espíritu, aunque ya existían, es a partir
de Dilthey se empieza a asentar que las ciencias del espíritu no pueden tener como método de las ciencias naturales,
consideradas las ciencias aceptadas auténticamente científicas. Es el primero en plantear de manera contundente
FI
que el objeto de estudio de las Cs del espíritu es radicalmente distinto a la q estudian las ciencias naturales, va a
plantear que semejante singularidad de objeto merece otro método. Los planteos de Dilthey generalmente se
sitúan de manera sintética usando una expresión “LA QUERELLA DE LOS METODOS”; a partir de Dilthey, habría
querellado la idea q las ciencias de espíritu podían tener el mismo método que las Cs naturales. La dualidad de
objeto y método parten de estos planteos de Dilthey. Por otra parte, es uno de los primeros la importante de la
historia para la comprensión del sujeto humano. Con estos planteos sobre todo en la bisagra de 1900, abrió un
surco por el cual fueron planteos que fueron avanzados posturas posteriores, como fenomenología o hermenéutica
en un sentido más contemporáneo.
Pucharelly habla del primero periodo de Dilthey antes de 1900. Y otro después de 1900.
Se vincula la historia de la psicología Argentina con las referencias provenientes de Francia, las versiones canónicas
de la historia de la psicología partir de ideales de objetividad ligadas a posiciones experimentales, a menudo
establecen relatos que comienzan en Alemania con Flechner y Jung para desembocar en Watson y Binet dentro de
otros, es decir se trata de relatos que eligen comenzar con la psicología experimental y la psicofísica para
desembocar en el conductismo a la psicología diferencial y la psicometría , es decir algo que ustedes conocen muy
bien, relatos históricos a cerca de la psicología que van por esta línea que se llamaría el prejuicio de la naturaleza.
57
OM
tradición forma parte de la genealogía de las ideas de Hanleir?, pero también las de Sartre y Merleau Ponty.”.
Ravagnan es un argentino, filosofo, dentista, y que tuvo mucho peso en la psicología argentina en los años 40 y los
60, tuvo peso y ejercicio en la Universidad de la Plata, fue uno de los directores de la carrera de psicología. Fue el
que impulso la revista de psicología (1* época de la revista), personaje muy representativo de un tipo de psicología
de corte muy filosófico, fenomenológico, experto en Merleau Ponty, e iba por esa autopista, de toda esa formación
en relación de la disciplina del sentido.
.C
Vamos a tomar primero el texto de Pucciarelli Eugenio “Introducción a la Filosofía de Dilthey” (texto de1936 y
publicado en 1966), siguiendo este juego entre esta corriente y la disciplina del sentido en el exterior y Argentina.
Pucciarelli es argentino, filosofo, y fue la referencia Argentina en función al pensamiento de Dilthey, hizo su tesis
DD
doctoral sobre Dilthey, hace todo un trabajo de investigación en relación con los pensamientos de Dilthey, en La
Plata. Si nosotros periodismos la historia de la psicología en la Argentina, hay un primer periodo positivista, del
prejuicio de la naturaleza, que sus referentes son Piñero e Ingenieros, se extiende más o menos al 1925 o 1926, y
se habla ya en un segundo periodo de la reacción anti positivista sus referentes son varios, pero podemos marcarlos;
uno es Alejandro Korn (H. Romero), otro es C. Alvedrini, apoyados en los autores Bergson y Stein.
LA
Pucciarelli dice que Dilthey vivió casi parado, casi ignorado en su tiempo. Tenía Fragmentarias en revistas de poca
circulación. Tenía un estilo poco rotundo y poco personal, cosa que no estoy tan de acuerdo, ustedes podrán notar,
hace una crítica radical a la psicología de la época; si bien el denominador común a todo los autores que estamos
viendo es el de hacer planteos que inician con una crítica rotunda a esta psicología muy del orden del prejuicio de
FI
la naturaleza. También decía que Dilthey tenía cierto antagonismo con la tendencia dominantes en su tiempo,
porque iba en contra, a la vez, del positivismo y de la metafísica claramente planteaba la superación del
naturalismo. La idea central es este planteo esta diferencia entre las ciencias de la Naturaleza y las ciencias del
espíritu como de diferencia de objeto y de método. A partir de Dilthey no solo se va a hablar de la querella de los
métodos, sino que se va a habla de ese dualismo de explicación y comprensión que en general aparecen como
pares opuestos. Dice Dilthey que lo que tiene que ver con el orden de lo natural se explica, lo que del orden de lo
humano se comprende, a objetos diversos, métodos diversos, a un objeto tan particular como lo es el objeto de
estudio vinculado a lo humano, al espíritu se debe diseñar un método que sea auténticamente adecuado Dilthey
se opone al positivismo de la época, que está representado por Comte autor del curso de filosofía positiva la cual
defendía la continuidad entre la ciencias naturales y las ciencias de la sociedad, continuidad, mismo método. Comte
se opone al fundamento de la metafísica porque piensa que el orden lógica del mundo no puede ser conocido a
priori.
Dilthey se propone emancipar a la psicología de todo prejuicio naturalista, señala que las cosas se nos ofrecen como
fenómenos cuando son dadas de la percepción externa o como realidad cuando se dan en la percepción intima.
Dilthey ya empieza a hablar de realidades, en una interioridad, en una descripción de una psiquis, de un psiquismo.
58
OM
original y revolucionaria sino que además involucraba una crítica radical a la psicología existente por atomista, por
asociacionista. Entonces la propuesta de Dilthey es la de una nueva psicología, no existente hasta el momento que
él llamaba descriptiva y analítica, estudia hechos que se nos ofrecen íntimamente como realidad en una conexión
vital original. Conexión vital original, para nombrar algo de lo psíquico en definitiva y que para él estaba en el centro
de las relación del hombre con el mundo. Pucciarelli opone esta psicología (como estructural la define) a las otras
psicologías de corte atomístico.
.C
Foucault dice “la puesta al día de las significaciones dentro de la conducta humana se ha realizado igualmente a
partir del análisis histórico, el hombre no aprende lo que es rumiando sobre sí mismo, lo aprende por la historia. Es
la historia la que le enseña que no es un elemento segmentario de procesos naturales, sino una actividad espiritual
DD
cuya producciones se fueron depositando sucesivamente en el tiempo” (prestarle atención a esta descripción es
bien el pensamiento de Dilthey) para que tengan algunas coordenadas piensen en oposiciones lo que es del orden
de lo cultural y de lo innato. Y vayan poniendo a Dilthey en esa grilla va a caer en el lado de lo cultural. El plantea
que la historia le enseña al hombre que no es un segmento de la naturaleza de procesos naturales que deben ser
estudiados sino una actividad espiritual cuyas producciones se fueron depositando sucesivamente en el tiempo,
LA
idea de espíritu objetivo, homologado se habla de cultura, de lo que ustedes entienden por cultura.
Pucciarelli dice que Dilthey nada tiene que ver con la metafísica, ni con el positivismo, y Foucault dice que Dilthey
propone una metafísica del espíritu; la hipótesis que podemos decir acá es que Foucault lee a Dilthey como si no
estuviera haciendo ninguna modificación de la idea de espíritu objetiva que aparecen en el pensamiento de Hegel,
FI
es decir la atribución de la metafísica del espíritu, y Dilthey habla de algo que no tiene nada que ver con la
metafísica.
Como Dilthey La fenomenología la ha establecido como un análisis del sentido inmanente a toda experiencia vivida.
Dilthey, en el planteo de Cornejo, está en el lado del sentido, y aparece con una voz disidente minoritaria en la
época (igual en este punto con Pucciarelli), dice que la dicotomía explicación comprensión atraviesa todas las
ciencias incluso hasta la actualidad, e inclusa en las discusiones epistemologías. Para Cornejo, Dilthey, oficializa esa
separación entre las dos culturas de psicología que trabaja Cornejo, con la cultura cientificista y la cultura
comprensiva hermenéutica, y lo pone como autor fundacional de la tradición hermenéutica. Dentro de la disciplina
del sentido, entre la interpretación del sentido a nivel individual y a nivel más cultural y ubicando al sujeto en
contexto social.
En el texto de Dilthey de 1894 “Ideas de una psico descriptiva y analítica” está en plena elaboración de este proyecto
de una ciencia del espíritu en una nueva psicología de carácter descriptiva y analítica, y hace una secuencia de la
fundación psicología de la cs. Del espíritu. Empieza con un análisis de la psicología tradicional del momento, que
luego va a criticar, y critica del concepto de hipótesis y el concepto de método científico natural como conexión
causal, para decir que no se puede transferir ese método, la crítica al paralelismo entre procesos nerviosa y
59
OM
de la psicología de la época para explicar desde el orden de la vivencia de lo interior es mucha más valida la
literatura de la época, hay más psicología experimental y analítica en las obras literarias, claro q no de modo
sistemático. Esta crítica que hace Husserl, al tomar esta idea de Dilthey de plantear a la psicología como fundamento
de las ciencias del espíritu produce un giro Dilthey acerca de esta crítica de Husserl. Y empieza hablar de espíritu
objetivo y acepta que comprender el espíritu objetivo, de la cultura, excede a una psicología. Dilthey va a seguir
planteando q se trata de comprender, ya no pone a la psico en el centro, Trabaja con esta idea conceptual, la
.C
vivencia la expresión y la comprensión.
Es a partir de la crítica de Husserl que Dilthey empieza a hablar de hermenéutica como el arte de interpretar el
sentido como disciplina que va a estudiar el complejo proceso que va desde el comprender a a la vivencia por el
DD
camino de la expresión, él habla de esta triada la vivencia, formas de expresión y el método de la comprensión para
entender aquello de lo que se expresa a través de esa vivencia son como niveles. Clasifica las expresiones, las
expresiones de las vivencias, él hablaba de manifestaciones de vivencia, de vida. Si nosotros queremos entender la
psicología humana hay que estudiar las manifestaciones de vida de los hombres, y armar una clasificación. Hay
manifestaciones de vida que son del orden de los prejuicios de los razonamientos, hay manifestaciones que son del
LA
orden de la acción, y hay manifestaciones que son expresiones de vivencias. Entonces Dilthey decía cómo llegamos
a conocer la conexión vital originaria desde la cual se produce una determinada obra por ejemplo como se llegamos
a acceder a este interior, como lo podemos comprender, cómo armamos la realidad de este interior podemos
tomarlo juicios los razonamientos pero son como leyes generales son atracciones que circulan de la misma manera
FI
que en todos los hombres podemos tomar las acciones pero él decía de que las acciones sólo expresan una parte
del ser, porque dependen del contexto de los intereses, depende de coerciones, de influencias de decisiones si las
acciones no permiten conocer algo del orden de la vital pero solo expresa una parte de nuestro ser. Por lo tanto la
vía regia para acceder a esa comprensión era la vivencia. Dice Dilthey: “existe una relación particular entre ella, la
vivencia, la vida de la que brota y la comprensión que produce”, estos son términos que él usaba para acceder a la
vida interior de la vida humana , “la expresión de la vivencia puede contener más conexión anímica de la que puede
a atisbar cualquier introspección, la extrae de profundidades que la conciencia no llega a eliminar” Si lo leemos en
clave Freudiana, conceptualiza algo que está mafiosa de la conciencia pero sin embargo está adentro. Es decir que
para Dilthey existen en el alma humana profundidades que la conciencia no llega a eliminar por eso la comprensión
no se trata de una simple introspección. “ Entiendo por tal espíritu objetivo las múltiples formas que se ha
objetivado en el mundo sensible la comunidad existente del entre los individuos es decir en el mundo sensible algo
que es común a los sujetos múltiples formas comunes de los seres humanos, múltiples formas que se objetiva en
el mundo, a partir del psiquismo obtiene alimento desde la primera infancia”, va a anunciando que esa conexión
anímica que esa vida psíquica o psicológica tiene que ver con modos ,formas que se van plasmando en objetos,
reproducciones, en obras, monumentos, en textos, leyes, en objetos, parte de la cultura de lo que le llama espíritu
60
OM
hermenéutica se planteaba como el arte de reconstruir el sentido de los textos sagrados incluso la idea de un
sentido correcto adecuado de los textos. Un personaje que influyo en Dilthey, que es Mayer, que concebía al
hermenéutica como arte general de la comprensión, comprender un texto implicaba reproducir el proceso creativo,
la experiencia mental del autor a través de un estudio minucioso de su estilo, vocabulario, etc., que culminaba en
un acto de eliminatorio empático Que nos pone en contacto con la mente y la visión del autor, había que abstraerse
todos los elementos propios que tenía que entrar en conexión empática con el autor, nutrirse, familiarizarse con
.C
sus términos. Éste era el planteo inicial de un hermenéutica, primera propuesta que va a tomar Dilthey, en su
intención, sigue siendo un proyecto de esclarecimiento del sentido del texto pero que ya se desborda los textos
sagrados. Dilthey prosigue a Mayer para dar un método objetivo a las ciencias históricas, los datos del conocimiento
DD
histórico no son manifestaciones culturales inertes beatificadas sino manifestaciones vitales que cristalizó en ellos,
para Dilthey comprender consiste en despojarse del propio presente y revivir tener la vivencia estuvo por detrás
de una manifestación cultural. El investigador a través de este método la hermenéutica tenía acceso a al pasado
histórico en sí mismo. Esta propuesta fue considerada luego muy ambiciosa porque es tentadora como tomarlo
como ideal. Es decir que cómo ideal es una propuesta más que interesante, como ideal de estudio.
LA
FI
61
En 1954, cerca del final del segundo gobierno de Perón, se realizó en San Miguel de Tucumán el Primer Congreso
Argentino de Psicología, a instancias de un pequeño grupo de personas que, de diversas maneras, aplicaban la
psicología en el campo de la educación. Dicho grupo venía afianzándose desde 1949, año en que se realizó en
Mendoza el Primer Congreso Nacional de Filosofía, donde se dieron cita por primera vez algunos profesores
universitarios, filósofos y médicos interesados en el tema. El congreso de 1954 fue la culminación de una década
durante la cual la psicología había ganado terreno en el país básicamente a partir de la utilización de los tests
OM
psicométricos y proyectivos en instituciones estatales vinculadas principalmente a la educación y a la orientación
profesional. Si bien la disciplina no contaba con figuras que sobresalieran por sus desarrollos teóricos, como a
principios de siglo, sus múltiples aplicaciones la habían difundido en el plano institucional a partir de la creación de
institutos y carreras menores de psicología, que comenzaban a pugnar por un mayor reconocimiento oficial. Es de
notar la fluidez de los intercambios entre los “precursores” de este grupo “pionero”. La mayoría de ellos se había
.C
desempeñado en instituciones de distintas ciudades. Por ejemplo, Ricardo Moreno, uno de los Secretarios del
congreso, había dirigido la Dirección de Psicología Educacional y Orientación Profesional de La Plata entre 1949 y
1952, antes de emigrar a Tucumán. Plácido Horas, egresado de la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA, creó en
DD
San Luis en 1952 una institución con el mismo nombre a partir de sus contactos personales con Moreno. Por otra
parte, publicaba asiduamente en la Revista de Educación, de La Plata. Luis María Ravagnan también escribía a
menudo para esa revista, además de dictar clases en la UBA y de llegar a ser Director de la mencionada Dirección
de Psicología de La Plata. Pucciarelli, en Tucumán, había sido decano de la Facultad de Filosofía y Letras, dictando
clases a su vez en la UBA y en la UNLP. Guerrero había hecho otro tanto en la UBA y en la UNLP, pero, además, había
LA
estado en la Universidad del Litoral. Este grupo tan heterogéneo, conformado por filósofos, pedagogos y
psicotécnicos parecía haber logrado los consensos necesarios para comenzar a gestionar ante los poderes públicos
la creación de la carrera universitaria de psicología.
FI
En la ciudad universitaria de Tucumán se celebró, entre los días 13 y 22 de marzo, el Primer Congreso Argentino de
Psicología. Nacido por iniciativa de un grupo de jóvenes profesores de la Facultad de Filosofía y Letras –Diego F.
Pro, Oscar Oñativia, Ricardo Moreno, Ricardo Nassif– encontró acogida cordial en las autoridades de la Universidad,
que le prestaron amplio apoyo. El número considerable de comunicaciones recibidas obligó a distribuir las tareas
en diez comisiones, con el siguiente temario: Problemas históricos y epistemológicos de la psicología; Psicología
general, especial, social y del arte; Técnicas psicológicas de exploración; Aplicaciones educacionales, médicas,
forenses y militares y económicas; Perspectivas y necesidades de los estudios psicológicos en nuestro país. Al
crecido contingente de profesores argentinos se sumaron delegados extranjeros y a parte de los delegados de las
universidades argentinas concurrieron representantes de los Ministerios de Asuntos técnicos, de Defensa nacional,
de Aeronáutica, de Marina, de Trabajo y previsión y de Salud pública de la Nación.
En carácter de delegados de la Facultad de Humanidades actuaron el doctor Eugenio Pucciarelli que, como relator
de una comisión, disertó sobre Los estudios psicológicos en la Argentina, habiendo presentado además una
comunicación sobre Interpretación psicológica de la catarsis; y el profesor Francisco González Ríos quien como
relator de una comisión se ocupó sobre Psicología diferencial, constitucionalidad, caracterología y de la
personalidad, presentando también tres comunicaciones sobre Explicación y aprehensión significativa en el
62
En la sesión plenaria realizada en la ciudad de Salta el 22 de marzo se aprobó una ponencia relativa a la creación
de la carrera universitaria del Psicólogo profesional presentada por los profesores Luis Juan Guerrero, Eugenio
Pucciarelli, Alberto Palcos, Francisco González Ríos, Carlos Astrada, Ricardo Moreno, Oscar Oñativia, Plácido Horas,
Luis M. Ravagnan y Osmán Dick, y concebida en los siguientes términos:
“El Primer Congreso Argentino de Psicología” declara la necesidad de crear la carrera universitaria del Psicólogo
profesional con arreglo a las siguientes condiciones:
OM
1) Se establecerá como sección autónoma en las Facultades de carácter humanístico, aprovechando los institutos
ya existentes y la enseñanza que se imparte en esas y en otras Facultades que puedan ofrecer su colaboración
(Medicina, Derecho, Ciencias Económicas, etc.);
2) La carrera comprenderá un plan completo de asignaturas teóricas y la debida intensificación práctica en las
distintas especialidades de la profesión psicológica, otorgando los títulos de Licenciado en Psicología (previa tesis
de Licenciatura) y de Doctor en Psicología (previa tesis de Doctorado);
.C
3) Establecerá además carreras menores de Psicólogos auxiliares en los distintos dominios de la Terapia médica,
Pedagogía, Asistencia social, Organización industrial y otros campos de aplicación a las necesidades de orden
nacional y a las regionales servidas por las diferentes universidades argentinas”.
DD
LA
FI
63
Resumen
El “Primer Congreso Argentino de Psicología” reunido en el mes de marzo de 1954 propició la creación de las carreras
universitarias. Considerando la amplitud de su programa científico puede tomarse como un evento histórico en el
cual se representa un cuadro de situación de las ideas y las aplicaciones de la Psicología argentina a mediados de
siglo.
OM
la Psicología en nuestro país hacia mediados del siglo. Segundo, tal heterogeneidad se amalgamaba disimulándose
en lo que se convertiría en la suposición esencial para la legitimación de la Psicología: su capacidad de “aplicación”.
Tercero, un conocimiento aplicable en acciones dirigidas al “bienestar” justificaba tanto su organización académica
como la invención de un agente que lo ejerciera; el Congreso propició la creación de las carreras universitarias de
Psicología como así también el perfil “profesional” del futuro egresado. En este sentido al año siguiente, en 1955,
se inauguró la primera carrera universitaria de “Psicólogo” de la Argentina en la Facultad de Filosofía, Letras y
.C
Ciencias de la Educación con sede en la ciudad de Rosario.
Aspiramos a que este artículo pueda concitar la atención sobre las otras dimensiones que confieren trascendencia
al primer evento científico de la Psicología argentina contemporánea.
DD
La presente comunicación integra una investigación más amplia a cargo del autor denominada “Historia crítica de
las ideas del Psicoanálisis y de la Psicología en Rosario 1920-1960” radicada en el Consejo de Investigaciones de la
Universidad Nacional de Rosario (CIUNR). Gran parte de esta contribución es producto del procesamiento de la
información primaria con la metodología sociobibliométrica debida a Helio Carpintero.
LA
Presentación histórica
El congreso fue organizado por la Universidad Nacional de Tucumán y sesionó entre el 13 y el 20 de marzo de 1954
en las instalaciones de la Ciudad Universitaria “Eva Perón” de Tucumán y entre el 20 y el 22 del mismo mes en la
ciudad de Salta.
FI
La época fue de grandes transformaciones para la Argentina que determinaron las características fundamentales
del país para las décadas siguientes, no sólo en lo económico y en lo político sino también en lo cultural y en lo
ideológico y social. En este marco es destacable el carácter oficial de este primer congreso de Psicología, no sólo
porque fue organizado por una institución estatal sino porque la Psicología podría contribuir a una planificación
racional de la actividad del estado; en los considerandos de la resolución rectoral convocando al congreso, se puede
leer: “Que el estudio de las aplicaciones de las disciplinas psicológicas a los problemas de la educación, la industria
y el comercio, la defensa nacional, la medicina y el derecho, es de sumo interés para la tarea en que está empeñado
el Estado argentino al facilitarle una serie de valiosos aportes para una planificación racional de su actividad”
(Universidad Nacional de Tucumán).
El Primer Congreso Argentino de Psicología fue propiciatorio para la creación de las carreras universitarias y para la
invención de un nuevo profesional: el psicólogo. Atendiendo a la organización temática del congreso es posible
inferir un modo de organización del saber de la psicología como independiente de la medicina y de la filosofía,
ámbitos académicos dentro de los cuales tradicionalmente se la incluía. En síntesis el estudio del Primer Congreso
resulta paradigmático en cuanto a la creación incentivada por los intereses del estado de una matriz que vincula
un modelo científico y académico con un rol eminentemente profesional para el egresado.
64
OM
producido el golpe de estado que derrocó a Perón el nuevo equipo responsable de la universidad, de signo político
antagónico, reprodujo en lo esencial el modelo académico - profesional que prohijara el peronismo.
Concluiremos este pantallazo histórico refiriéndonos brevemente a la obra institucional de la Prof. Erminda Benitez
de Lambruschini, miembro participante del Congreso de Psicología que nos ocupa. En 1947 a sus instancias fue
creada la Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación de la Universidad Nacional del Litoral, en la ciudad
de Rosario, de la que fue primera decana. En el seno de esa Facultad creó el 29 de abril de 1953 la carrera menor
.C
de Auxiliares de Psicotecnia. Entre el 13 y el 22 de marzo participó del Congreso que recomendaría la creación de
las carreras de Psicología. El 14 de mayo de 1954 fundó el Instituto de Psicología de la mencionada Facultad de
Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación y un año más tarde, el 13 de mayo de 1955, se inauguraron los cursos de
DD
la carrera universitaria de psicólogos propiciada por la profesora Benitez, Carlos Lambruschini y Armando Asti Vera.
Uno de los considerandos justificatorios de la creación de la carrera fue, precisamente, la recomendación hecha por
el Primer Congreso Argentino de Psicología.
En la sesión plenaria de cierre del Congreso, el 22 de marzo de 1954 en Salta, se aprobó por unanimidad la
declaración a la que venimos refiriéndonos y que fue presentada a la asamblea por Juan Luís Guerrero, Eugenio
LA
Pucciarelli, Alberto Palcos, Francisco González Ríos, Carlos Astrada, Ricardo Moreno, Oscar Oñativia, Plácido Horas
y Luís María Ravagnan. Transcribimos el texto aprobado.
“El Primer Congreso Argentino de Psicología declara la necesidad de crear la carrera universitaria del psicólogo
profesional con arreglo a las siguientes condiciones: I.- Se establecerá como sección autónoma en las Facultades de
FI
carácter humanístico, aprovechando los institutos ya existentes y la enseñanza que se imparte en esas y en otras
Facultades que puedan ofrecer su colaboración (Medicina, Derecho, Ciencias Económicas, etc.); II.- La carrera
comprenderá un plan completo de asignaturas teóricas y la debida intensificación práctica en las distintas
especialidades de la profesión psicológica, otorgando los títulos de Licenciado en Psicología (previa tesis de
Licenciatura) y de Doctor en Psicología (previa tesis de Doctorado); III.- Establecerá además carreras menores de
Psicólogos auxiliares en los distintos dominios de la terapia médica, pedagogía, asistencia social, organización
industrial y otros campos de aplicación a las necesidades de orden nacional y a las regionales servidas por las
diferentes universidades argentinas.”
65
OM
Especial: a) Psicología genética y comparada, b) Psicología diferencial, caracterológica y de la personalidad y c)
Psicología evolutiva del niño y del adolescente. IV) Psicología Social y del Arte. V) Técnicas psicológicas de
exploración: a) Psicoestadística y b) Tests psicométricos y proyectivos. VI) Aplicaciones educacionales: a) Psicología
del educando y del educador, b) Higiene del escolar y c) Educación diferencial y orientación vocacional. VII)
Aplicaciones médicas: a) Relaciones de la psicología con la medicina, b) Técnicas de exploración y contribuciones
psicológicas a las especialidades médicas, y c) Psicopatología e Higiene Mental. VIII) Aplicaciones forenses y
país.
.C
militares, etc. IX) Aplicaciones económicas. X) Perspectivas y necesidades de los estudios psicológicos en nuestro
Este temario es un inventario o un estado de situación de los conocimientos psicológicos a mediados de siglo en la
DD
Argentina; por supuesto que no es el único posible pero nos parece significativo de un modo de organizar el saber
de la Psicología para su transmisión académica en el más alto nivel y para legitimar la invención de un nuevo
profesional: el psicólogo.
La distribución temática del Congreso respeta una estructura que se puede encontrar reproducida con pocas
variantes en casi todas las curricula de las carreras universitarias de psicología que se irán creando en la Argentina.
LA
Esa estructura se compone de una mitad que podría denominarse básica o de los fundamentos, en la cual se
consideran temas históricos y epistemológicos, teorías psicológicas generales, investigaciones diferenciales y
evolutivas, adiestramiento en técnicas de exploración y la dimensión social de la disciplina, y de otra mitad que
llamaremos aplicaciones de la psicología, por las que se responde a necesidades sociales dando origen a las
FI
especialidades profesionales, dichas aplicaciones son educacional, médica (será posteriormente la psicología
“clínica”), forense y militar y económicas; es decir el amplio terreno de lo que en la época se conocía como
Psicotecnia.
Colegios invisibles
La temática de las aplicaciones educacionales de la psicología fue la que despertó el mayor número de intereses
entre los autores y reunió la mayor cantidad de ponencias. Le siguieron las temáticas relacionadas con las técnicas
psicológicas de exploración y con las aplicaciones médicas de la psicología. En estas tres áreas se concentró el 45,6%
de los autores y en ellas se inscribió el 42,91% de las comunicaciones.
En aplicaciones educacionales de la psicología nueve trabajos trataron cuestiones relacionadas con las
discapacidades sensoriales y neurológicas, cuatro abordaron los problemas de la readaptación, cinco se refirieron
a los distintos niveles de la orientación escolar y profesional, nueve abordaron temas de política educacional o
pedagógica, hubo un sólo trabajo histórico, tres ponencias se refirieron a las aplicaciones de tests en la escuela,
ocho trabajos se dedicaron a los trastornos del temperamento, carácter, atención del escolar y a la relación maestro
discípulo, una suerte de psicopatología educativa; el resto de las comunicaciones versaron sobre tópicos teóricos
66
OM
En el Primer Congreso Argentino de Psicología se hizo manifiesto el interés por las aplicaciones educativas, la
exploración psicológica y las aplicaciones médicas -”clínicas”- de la psicología; esta relación psicología- educación-
clínica será una característica de la psicología en la Argentina. Está ausente el paradigma y el estilo conductista tan
difundido en los EEUU y en otros países de América y son escasas las investigaciones básicas, experimentales o de
laboratorio. Todo lo cual se complementa con un perfil profesionalista del egresado que hacia fines de la década
del cincuenta egresaría de las universidades argentinas con el título de Psicólogo.
.C
Epílogo. ¿Cuál fue el destino de las Actas del Congreso?
DD
La frase que nos parece significativa es “...perdimos la pista de todo cuanto estaba archivado...”.
¿Cuál fue el destino de los trabajos que conformarían los nueve tomos de la memoria del Congreso? Nosotros
descartamos que los organizadores hayan “perdido la pista” por desidia o desinterés, la hipótesis que proponemos
es que todo lo archivado cayó bajo el siniestro efecto proscriptivo de la represión de estado aplicada
sistemáticamente luego del golpe militar de setiembre de 1955. Dicho de otro modo, la pista que conducía al
LA
archivo se perdió porque una orden mandaba borrarla. Sustentamos esta hipótesis o quizás sea más apropiado
llamarla conjetura en lo siguiente: el partido peronista fue disuelto por las autoridades militares por decreto nº
3855/55 (Nación Argentina, 1955); por decreto nº 4161 del 5 de marzo de 1956 se extiende la represión prohibiendo
el uso del nombre de Perón y de toda inscripción que recordara o aludiese al peronismo depuesto (Nación
Argentina, 1956). En los considerandos de dicho decreto se expresa que la simbología peronista “ofende el
FI
sentimiento democrático del pueblo argentino afrenta que es imprescindible borrar...”. Este decreto proscriptivo
llevó la firma del general Pedro E. Aramburu, del almirante Isaac Rojas y la de todos los ministros del gabinete y en
su parte final establecía las penalidades -desde multas hasta prisión- para quién no lo cumpliera o lo hiciese cumplir.
Oscar Terán caracterizó a este acto de barbarie como “una cruzada dispuesta a sellar a cal y canto hasta las fuentes
de la producción simbólica peronista, cruzada que chocaba además con la persistencia de esa identidad política en
vastos sectores populares”.
¿Es inconsistente conjeturar que uno de los tantos efectos de esa norma proscriptiva, verdadero acto de terrorismo
de estado y emblema de intolerancia, haya sido el borramiento de las pistas que conducirían a la publicación
completa de las memorias del Primer Congreso Argentino de Psicología?
67
ROUDINESCO, ELISABETH (1993). LA BATALLA DE CIEN AÑOS. HISTORIA DEL PSICOANÁLISIS EN FRANCIA.
PRIMERA PARTE.
OM
activo de éstas. No hay primacía de una vía sobre la otra sino concomitancia de dos procesos de introducción.
Por el lado literario se tiende a reivindicar el psicoanálisis como expresión de un auténtico descubrimiento, mientras
que del lado médico se lo adapta a los ideales de un supuesto genio latino o cartesiano.
Mientras que el movimiento psicoanalítico se organiza en una institución de notables donde reinan los ideales de
la cura terapéutica, el medio literario en su conjunto sirve de vehículo a una representación profana (lalenanalyse)
o no médica del psicoanálisis se abre un nuevo campo del conocimiento que apasiona a los escritores, si bien
.C
algunos de ellos se psicoanalizan por motivos personales como Michel Leiris, Georges Batalle, René Crevel o
Raymond Quene au, para ellos la cura sigue estando separada de la aventura que representa el descubrimiento
freudiano, este puede o no atravesar lo que ellos escriben, independientemente de un compromiso con el análisis.
DD
Dentro de la vía literaria, el grupo surrealista se distancia más que los demás de las posiciones del medio médico.
El patrioterismo es el rasgo dominante de la casta médica, mientras que entre las características del compromiso
surrealista figura el rechazo a toda forma de racismo, antisemitismo y xenofobia.
Para los surrealistas la lucha por el análisis laico no tiene como objetivo reconocer a los no médicos el derecho a
practicar curas, como en el caso de María Bonaparte. Por el contrario, se pretende efectuar un corte radical entre
LA
Pichón, Hesnard o Laforgue. No pertenecen a la misma Francia. Su Freudismo no es el mismo freudismo. En el seno
de esta diversidad se desarrolla el combate del día contra la noche y de la noche contra el día. Los surrealistas
impugnan el principio del acto novelesco para crear nuevas modalidades de expresión creadora. Los psicoanalistas
en cambio se repliegan a posiciones académicas. En vez de seguir la senda freudiana que trata de dilucidar la
condición de la creación poética, aplican a las obras literarias la técnica de la cura, esto da origen a la psicobiografía
que se limita a estudiar obras clásicas y trata la historia de los escritores como si fuera la narración de un caso,
haciendo de la escritura la expresión de una neurosis o de una enfermedad mental.
Los psicoanalistas franceses sepultan en las sombras las enseñanzas de Charcot, por el contrario, los surrealistas
reivindican la herencia de la Salpetriere y hacen de la histeria un acto poético, en 1928, Aragón y Bretón rinden
homenaje a las actitudes pasionales de la bella Agustina: nosotros, surrealistas, escriben, queremos celebrar el
cincuentenario de la histeria, el descubrimiento poético más grande de finales del siglo y ello en el preciso momento
en que el desmembramiento del concepto de histeria parece cosa consumada.
En unas líneas los autores rinden homenaje a Galeno, Platón, Hipócrates Bemheim y a las poseídas de Loudun. Por
último proponen una nueva definición de la histeria: “la histeria escriben es un estado mental más o menos
irreductible que se caracteriza por la subversión de las relaciones que se establecen entre el sujeto y el mundo
68
OM
una posición de dominio. Para los surrealistas, la histeria es un lenguaje, un modo de expresión, una obra poética
cuya forma subversiva debe ser reivindicada contra el propio arte, contra la literatura. Aragon y Breton no le dan
importancia a la sugestión y muestran que no es otra cosa que una seducción engañadora para el médico.se niega
a reducir la histeria a una simulación y la diferencian de los sistemas delirantes, marcando así las fronteras del
fenómeno psicótico. Rechazan, por último el factor patológico es decir la anomalía a favor de la forma expresiva.
Los manicomios son comparados con los cuarteles, los trabajos forzados y la cárcel y los autores reivindican el
.C
derecho de todos al acto individual, antisocial por excelencia. Por último los surrealistas exigen que se abran los
manicomios, sin insistir en el carácter perfectamente genial de las manifestaciones de algunos locos, en la medida
en que somos aptos para apreciarlas, afirmamos la absoluta legitimidad de su concepción de la realidad y de todos
DD
los actos que de ella se derivan.
Este manifiesto parece ilustrar anticipadamente una concepción de la locura que volverá a tomar el movimiento
antipsiquiátrico de los años sesenta. Mirándolo de más cerca, notamos que si bien este texto es antipsiquiátrico,
no enuncia verdaderamente la antipsiquiatría contemporánea. Por lo demás, los representantes de este
movimiento que no nació en Francia sino en Inglaterra e Italia, se inspiran muy poco en el surrealismo pues
LA
de una alienación social o familiar. En otros términos para los surrealistas el acto individual es siempre una locura
y el loco un creador de igual condición que el soñador o el histérico. En estos tres estados encontramos una
concepción de la realidad cuya legitimidad debe ser reconocida por completo. En Francia este texto es
contemporáneo a la creación del grupo Evolution Psychiatrique, pero esquiva los objetivos de la psiquiatría
dinámica. Con Marie Bonaparte, Paul Schiff, Minkowski, Borel y más tarde Henri Ey, se toma una orientación hacia
una profilaxis que tiende a sustraer la locura de la esfera del poder judicial. Con el surrealismo se perfila otro
movimiento que pretende quitar a la mirada psiquiátrica el derecho de gobernar el ámbito de lo mental. De allí
proviene la idea de que tanto la locura como la histeria son irreductibles a la razón.
Es pues el surrealismo o sea un movimiento literario el que blande contra el psicoanálisis oficial la antorcha de los
taumaturgos y los hipnotizadores pero tampoco allí hay verdadero ocultismo. En su forma francesa el surrealismo
lleva el blasón de un romanticismo que se volvió científico. Pertenece a lo oculto más por la manera en la que
reivindica una visión clandestina, nocturna, maldita, de las doctrinas que defiende que por la adhesión a los
ornamentos místicos del ocultismo. Breton se identifica de un lado a otro con la aventura freudiana en lo que ésta
tiene de más resueltamente moderno, por eso su espiritismo y de sus amigos se parece más a un barullo iconoclasta
que que a una llamada a la mesa que habla. Pese a su culto a los astrólogos y los videntes, Breton no cae en la
69
OM
comprobado en efecto que el espíritu, liberado de todas las presiones críticas y las costumbres escolares, ofrecía
imágenes y no oraciones lógicas, y que si aceptábamos adoptar lo que el psiquiatra Pierre Janet llamaba escritura
automática, anotábamos textos en los que describíamos un universo hasta ahora inexplorado. Decidimos entonces
damos quince días para escribir juntos una obra en la que nos prohibimos corregir y tachar nuestras elucubraciones.
No nos costó nada respetar al plazo y con gran alegría leímos los textos. La noción de automatismo es central en la
redacción de champs magnétiques pero a lo que la obra se refiere es a los cantos de Maldoror. Evoca el famoso
.C
libro que enunciara isidore Ducasse a punto de morir y prolonga el célebre slogan: la poesía debe ser hecha por
todos y no por uno. En cuanto a la idea del pensamiento dictado sin ningún control de la razón, se apoya tanto en
el programa de los alienistas como en el proyecto de rimbaud respecto a yo es otro. Según Breton, este texto
DD
inaugural se redactó en ocho días, a costa de un largo desajuste de los sentidos, está dedicado a Jacques Vaché y
termina con la simulación de un suicidio.
Desde abril de 1919, vive en parís el pintor Francis Picabla. A principios de enero de 1920, se une a él Tristan Tzara
que llega de Zurich, donde el psicoanálisis ha sido implantado a través de la corriente freudiana y la desidencia
junguiana, esta no comparte el entusiasmo de sus amigos franceses respecto a la nueva doctrina y expresa
LA
opiniones que se parecen a las de Kari Kraus antes: l psicoanálisis es una idea peligrosa, adormece las inclinaciones
antirreales del ser humano y sistematiza la burguesía.
Vemos perfilarse aquí la oposición existente entre el hombre nuevo surrealista y el hombre nuevo comunista. En el
surrealismo, la reivindicación del derecho a la muerte es expresión de una apología razonada por la cual el individuo
FI
debe revelarse contra el orden establecido. Este cambio de actitud respecto a la condición pasiva del destino suicida
lleva a los surrealistas a transformar el deseo de morir en un paso al acto voluntario. Este cambio no es ajeno a
todo un contexto en el cual Freud elabora su nueva doctrina de la pulsión de muerte.
La publicación en alemán de más allá del principio del placer, que será traducido en Francia en 1927, no influye en
los surrealistas. No obstante, la seducción de la muerte que atraviesa la escritura poética desde sus orígenes
constituye en el surrealismo un terreno propicio para la implantación de la noción freudiana de pulsión de muerte
noción que rechazan a la vez el movimiento psicoanalítico, el freudo-marxismo y el discurso comunista. Frente a
este rechazo el culto surrealista al suicidio adquiere el aspecto de una verdadera teoría de la energía mórbida.
Cuando Freud termina la redacción de más allá del principio del placer tiene la precaución de escribir a Eltingon
estas palabras: por fin acabé el más allá, podrá usted confirmar que estaba casi terminado en la época en que Sofía
vivía y estaba resplandeciente. Esta cautela se justifica por el hecho de que los que rodean a Freud se resisten a
aceptar la nueva doctrina atribuyendo su génesis no a un descubrimiento sino a un contexto por el cual el maestro
se hubiera dejado influir y se menciona al respecto la matanza de la guerra, el miedo a tener un cáncer y dos
fallecimientos juntos: el de una hija querida, Sofía, y el de un amigo íntimo, Anton Von Freud.
70
OM
constante interrogación. Entre Breton y Freud el malentendido se basa en una doble equivocación que remite no
tanto a la hostilidad de Freud especto a las ideas nuevas como a las posiciones respectivas de los dos hombres, en
esta época Breton busca en Freud la imagen de ese maestro rebelde que él mismo sueño ser. Le pide un
reconocimiento que aquel no puede darle. Se equivoca respecto a él porque lo cree capaz de comprender la
naturaleza del dadaísmo. En cuanto a Freud se equivoca respecto a Breton porque piensa estar tratando con el
representante de una nueva escuela literaria y no con el animador de un proyecto de negación de la cultura.
.C
El automatismo según Breton remite a una noción de subconsciente anterior al concepto de inconsciente freudiano
pero en la medida en que libera una forma anónima de la expresión universal disuelve la idea cartesiana según la
cual el lenguaje sería la propiedad de un sujeto. El automatismo de los surrealistas aparece como el instrumento
DD
de un descentramiento o desestabilización del sujeto, quien ya no se reconoce, en la certeza de sí, con ello la poesía
ya no es la representación de una realidad o el lugar de una inspiración sino el lenguaje mismo objetivado como
una forma del ser. Así en Francia el surrealismo se encuentra al servicio del psicoanálisis porque acompaña la
aventura del inconsciente freudiano del cual es la expresión no teórica sino analógica con la escritura automática
los surrealistas funcionan filosóficamente como si la conciencia hubiera desaparecido cosa que por lo demás
LA
Georges Bataille les reprochará más tarde. En un artículo publicado en 1968 titulado Freud Myera, Breton, Jean
Starobinski, pensando en la obra de Lacan, escribe: el orfismo frío de una literatura de inspiración estructuralista
(para la que el sujeto es suplantado por el lenguaje mismo para la que yo no hablo sino que ello habla en mí) se
aproxima a la escritura automática del surrealismo por vías muy diferentes, Breton para aceptarla hubiera
FI
empezado por ecigir poco más de calor. Y decir que el inconsciente es lenguaje sigue sin conciliar a Freud con la
escritura automática pues el inconsciente freudiano no es lenguaje sino en el modo de la imposibilidad de hablar
solo es lenguaje para el intérprete que lo hace hablar si bien es cierto que la concepción estructural de la lengua de
la que Lacan saca su argumentación después de la segunda Guerra tiene poco que ver con el mensaje automático
ello no impide que la experiencia surrealista ponga en evidencia por primera vez en Francia un encuentro entre el
inconsciente freudiano el lenguaje y el descentramiento del sujeto, que va a inspirar muy ampliamente la formación
del joven Lacan incluso si más tarde éste es llevado a criticar el surrealismo saca de él su juventud un alimento que
se revelará esencial en su itinerario ulterior.
Naturalmente el día siguiente la prensa se apodera del asunto y aprovecha el incidente con fines humorísticos. A
Janet lo toman a la chacota por sus meteduras de pata pero no se comente la declaración de Clerambault. Breton
empuña entonces su pluma más inspirada y publica un artículo titulado la medicina mental y surrealismo.
Janet tiene poca suerte con los creadores. Su sordera al talento sólo puede igualarse a su chatura de estilo en
materia de narración clínica. Durante varios años atiende a Raymond Roussel, que padece una depresión crónica,
sin percatarse de que está tratando con uno de los escritores franceses más importantes del siglo, hay que decir
que en esa época sólo los surrealistas a quiénes detesta Janet reconocen el genio de este autor extraño, solitario y
71
CAPÍTULO IV
OM
JACQUES LACAN: NOVELA DE JUVENTUD:
Contrariamente a Sigmund Freud, Jacques Lacan no tuvo que probar en sí mismo la existencia del inconsciente, no
tuvo que interpretar sus propios sueños ni publicar el catálogo de sus fantasmas. No expuso la historia de su vida.
No escribió una Selbtdarstellung como se dice en alemán. Pocos hombres manifestaron tanto como él el deseo de
conservar secreta. Si no intacta, la parte de su ser relativa a su infancia o a sus orígenes familiares. No falsificó nada,
pero no tomó en cuenta en su enseñanza o en la representación de su historia las aventuras de su diario íntimo. El
.C
historiador no tiene obligación de respetar esa actitud, pero si quiere comprender la importancia que tomo el
personaje en el umbral de los años treinta, debe interrogarse sobre la significación que hay que atribuir a esta
voluntad de no hacer corresponder de manera lineal el trazado de su vida y elaboración de una obra teórica.
DD
La tesis de medicina sobre la psicosis paranoica es dedicada a una mujer MTB Marie-Therese, su primer amante,
una cita en griego indica lo que el autor le debe sin su ayuda no hubiera llegado a ser lo que soy, en la página
siguiente en otra dedicatoria, Lacan se dirige a su hermano de religión, Marc Francois, monje benedictino de la
congregación de Francia. Luego de gracias a su padre y su madre en un reconocimiento filial del ejemplo de ambos
y de sus favores a su hermana y también a su cuñado. Agrega su homenaje a todos sus maestros de psiquiatría,
LA
Claude , Heuyer, Toulouse, Logre, Trenel, Alajouanine, Guitlain, Dumas, menciona a un mayor de renombre,
Edouard Pichon. Por último saluda calurosamente a sus amigos y compañeros de internado, Henri Ey, Pierre Male,
Pierre Mareschal. El primero será tan célebre como él y seguirá siendo su amigo pese a sólidos divergencias. El
segundo analizado por Loewenstein y luego por Marie Bonaparte, optará por la SPP en el momento de la primera
FI
escisión. En cuanto al último hace maravillas en 1931 en la sala de guardia del hospital Sinte-Anne divirtiéndose con
las disputas entre compañeros.
Un año después de la defensa de la tesis en 1933 Lacan redacta un exposición general de sus trabajos científicos,
rinde homenaje a la originalidad de sus tesis que fundó por primera vez en Francia, una auténtica interpretación de
la personalidad paranoica. Toma pues como punto de partida de su historia personal el surgimiento de una nueva
visión clínica de la que dice ser indicador. A los treinta y dos años se dirá no se toma por cualquiera. No está
completamente equivocado, su talento acaba de ser reconocido en el medio iterario y dentro del grupo de L
Evolution Psychiatrique, únicamente la comunidad psicoanalítica no ha percibido aún la amplitud del
acontecimiento.
Treinta años más tardecon sesenta y cinco de edad, Lacan publica la recopilación de sus principales artículos titula
el libro Ecrits sencillamente. En el corazón de este vasto pasado de novecientas páginas se encuentra una notita
orgullosamente titulada de nos antecedents, el padre la madre el hermano los antiguos maestros y compañeros no
aparecen, en cambio el nombre de Gaetan Gatian de Clerambault figura en buen lugar. ESTE hombre criticado en
1932 y ausente de los agradecimientos ahora es reconocido por Lacan como su único maestro de psiquiatría.
72
OM
ser rey sabiendo que el rey esta tan loco como él. De nos antecedents refleja esa situación en ese texto ya no
encontramos al Lacan de los años treinta sino a un personaje de leyenda hijo de nadie sin parientes ni familia que
tuvo como único maestro a un psiquiatra solitario y por compañeros de camino a un poeta que se suicidó y un
pintor célebre. Sin embargo si bien la leyenda no restituye toda la verdad no por eso es mentirosa Lacan no expone
su itinerario de la misma manera en 1932 y 1966 pero entre estas dos versiones antagónicas hay que agregar
nombres acontecimientos fijaciones sin cubrir con un manto principesco el esqueleto de diplodoco es posible
.C
mostrar que los enunciados contradictorios evidencian con un intervalo de treinta años una verdad no unívoca sino
dialéctica atravesada ella misma por la historia de sus propias refundiciones en consecuencia la fábula aparecerá
por lo que vale por un trozo de novela.
DD
Nacido el 13 de abril de 1901 en una familia católica de la burguesía media perisina Jacques Marie Emilie Lacan
pasa parte de su infancia leyendo atías y sacando todos los años los primeros premios de idioma alemán duerme
poco trabaja mucho tiraniza a los que rodean con continuas demandas y prácticamente no lo afecta una delgadez
que las comidas de su madre no logran borrar desde temprana edad se muestra interesado en bibliofilia en
coleccionar objetos varios y en ganar dinero. Alfred Lacan es un padre ahorrativo de origen auvernés que no se
LA
ocupa de cosas intelectuales es representante comercial de fábricas de aceite y de jabón. Sin tener una fé
extraordinaria va a misa como todo el mundo. Contrariamente a él su mujer. Emilie Baudry ha heredado una gran
cultura cristiana y un misticismo ardiente hija de una madre devota y de un padre batidor de oro secunda a su
esposo en el negocio y en la educación de los hijos. Después de Jacques, Marie, da a luz un segundo hijo que pronto
FI
le será arrebatado por la enfermedad. Luego vienen Madeleine nacida en 1903 el día de navidad y luego Marc-
Francois en 1908 también un 25 de diciembre. Los niños pasan sus primeros años en un apartamento situado en el
boulevard Beaumarchais y luego la familia se instala en la rue du Montspamasse frente al colegio Stanisías donde
los dos niños cursarán sus estudios. En 1924, Alfred y su esposa se trasladan de París a Boulogne y viven en una
73
OM
general, Clerambault igual que Kraepelin trata de proporcionar una clasificación coherente del campo de la psicosis.
Propone definirlas a partir de un elemento común esencial el síndrome de automatismo mental, este término
refrenda la naturaleza delirante de la enfermedad independientemente de la multiplicidad de sus manifestaciones.
Es apuntalado con trastornos psíquicos y sensoriales siempre los mismos que se imponen a la mente del sujeto de
manera brutal es decir automáticamente. Estos trastornos surgen del exterior y no tienen nada que ver con las
ideas que la persona enuncia, en cuanto al síndrome en sí su origen sigue siendo puramente orgánico con esta
.C
definición del automatismo Clerambault se separa de la filiación janetiana elige la estructura organizacional contra
la deficiencia mental. En este caso su posición no está alejada de la de Freud quien prefiere la doctrina de Kraepelin
en vez de la de Bleuler en la medida en que aquella le parece adecuarse a su modo de clasificación pese al núcleo
DD
organicista que la determina. Pensador anacrónico y marginal, Clerambault está a la vez retrasado respecto a su
tiempo ya que privilegia un constitucionalismo estrecho en detrimento del dinamismo y adelantando respecto a
sus contemporáneos porque capta la pertinencia de tesis estructurales necesarias para una nueva organización del
saber.
Freud se separó del constitucionalismo rígido de la tradición alemana integrando la experiencia del dinamismo a su
LA
concepción estructural. Ahora bien respecto a este punto Clerambault sigue siendo sin duda el heredero de
Kraepelin no solamente sostiene el organicismo sino que rechaza las reformas en materia de atención conservador
y tiránico trata primero de desemboscar el síntoma o de probar la coherencia de su doctrina antes que preocuparse
de la persona del enfermo. Violentamente hostil a las ideas reformadoras DEdouard Toulouse y marginal respecto
FI
a la nueva psiquiatría de los años veinte, pertenece a esa categoría de alienistas que se atribuyen como misión
encerrar a los locos en una época en que se intenta primero atenderlos representa muy bien la función represiva
del aparato del Estado y su situación de médico jefe de la enfermería especial refleja su posición doctrinal. Sin
clientela privada pasa su vida dedicado a perfeccionar si mirada de águila manipula y observa de un confesor genial.
El síntoma de automatismo mental permite a Clerambault clasificar por un lado las psicosis alucinatorias y por otro
los delirios pasionales y allí entre los celos y la reivindicación conceden un lugar privilegiado a la erotomanía. Con
este término se ha designado clásicamente la locura del amor casto. Un sujeto equis se cree amado platónicamente
por el objeto que persigue, que por lo general es un personaje célebre. El aporte de Clerambault consiste primero
en ubicar la erotomanía en la categoría de los delirios pasionales, que se convierten una entidad clínica y segundo
en introducir un tema sexual en la descripción del fenómeno. Esta renuncia al platonismo hace de la erotomanía
una especie de psicosis histérica descrita a partir de su envoltura formal. Se vuelve una ilusión delirante en la que
domina el orgullo sexual puesto que el objeto es superior al sujeto. Este orgullo se estructura alrededor de una idea
fija que se desarrolla en tres fases: la esperanza, el despecho y el rencor, así por ejemplo una señora se cree amada
por el rey de Inglaterra. Este hace ciertas proposiciones y todos los cortesanos quieren asistir al desenlace de esta
pasión. La señora espera luego atraviesa la mancha y recorre las salas de espera de las estaciones donde el rey le
74
OM
decide operarse con un cirujano español cuyo método consiste en extirpar el cristalino fijándolo por aspiración
después de la intervención Clerambault no recupera la percepción del relieve.
¿Qué guarda Lacan de la esperanza que recibió de Clerambault durante el año 1928-1929?
Encontramos un rastro en un artículo de 1931 titulado “estructura de las psicosis paranoicas”, que fue publicado
en la semana des hopitaux de parís. El autor estudia sucesivamente tres tipos de psicosis paranoica: la constitución,
el delirio de interpretación y los delirios pasionales. Toma por su cuenta la noción de paranoia constitutiva con los
.C
tres temas de la sobreestimación patológica de sí la desconfianza y la falsedad del juicio. Concluye su estudio
adoptando una posición favorable a la internación sistemática de los delirantes considerados agitadores, en el
manicomio las protestas deben ser comunicadas sin excepción y con regularidad a las autoridades administrativas
DD
competentes y más adelante escribe asimismo en presencia de jóvenes insumisos del servicio militar conviene ente
el fracaso cierto de la escala creciente de penas disciplinarias orientar más bien a estos enfermos hacia la justicia
militar que a su vez puede remitirlos al psiquiatra podemos preguntarnos lo que habrían pensado Benjamín Peret
y René Crevel al leer semejante texto. Con respecto a una idea que toma Clerambault, agrega al pie de la página la
siguiente nota: esta imagen proviene de la enseñanza oral de nuestro maestro M.G de Clerambault a quien le
LA
debemos tanto por lo que se refiere a la materia y al método que para no caer en el plagio tendríamos que remitir
a él cada uno de nuestros términos de hecho reivindica la enseñanza de su maestro pero la transforma puesto que
reemplaza el concepto de síndrome de automatismo mental por el de estructura e integra el delirio pasional en el
marco general de la paranoia. Por otra parte hablando de plagio sabe lo que hace. El gran jefe de la enfermería
FI
especial siempre se mostró desconfiado de los que le rodeaban está convencido de que le roban las ideas. Después
de la publicación de este artículo es presa de violenta cólera e irrumpe en una reunión de la sociedad médico-
psicológica. Entonces le tira a Lacan en la cara unos ejemplares con dedicatoria de sus obras.
75
OM
En efecto, Lacan subraya que el psicoanálisis no debe servir de técnica de apoyo del saber psiquiátrico sino que por
el contrario puede transformar radicalmente la forma de enfocar la locura siempre y cuando no sea utilizado de
manera pragmática. En otros términos, Lacan produce, sin saber, una nueva introducción del freudismo en Francia,
antes que él la primera generación psiquiátrico- psicoanalítico implantó la doctrina vienesa en el marco de un saber
psiquiátrico nacido de una refundición de la teoría de la heredo degeneración provocó una modificación dinámica
de ese saber confrontándolo con un cuerpo extraño pero con la publicación del caso Aimee se asiste al surgimiento
.C
de un encuentro inédito entre el antiguo dinamismo y el freudismo una especie de encuentro del segundo tipo.
Este se caracteriza por la liquidación de la noción de integración del psicoanálisis a la psiquiatría. Lacan no intenta
hacer entrar la teoría freudiana en el molde ya existente de una nosografía sino que por el contrario invierte el
DD
orden de las cosas para introducir la primacía del inconsciente en el estudio clínico.
Así como Freud había dado a la histeria credenciales de nobleza haciéndola existir como verdadera enfermedad.
Lacan cuarenta años más tarde da a la paranoia y más en general a la psicosis un lugar simétrico para el movimiento
francés. Ya no se trata de hacer de ella una autentica enfermedad sino al contrario de designar una proximidad
entre las realidades la de la locura y la de la razón mejor aún se trata de disolver el mundo de la razón y de volver
LA
de la cura. Lacan descubre la doctrina psicoanalítica a través de la lectura de los textos de Freud y no por la
experiencia del diván su concepción se caracteriza desde el origen por una apropiación personal de la teoría vianesa
fuera de toda relación transferencial con los didácticos de la primera generación. Por lo que respecta a su formación
Lacan sigue una trayectoria tradicional pero con la cobertura de un enfoque clásico ocupa una posición de franco
tirador en el ámbito teórico. Dentro de la segunda generación y frente a la primera no sólo es el primero sino el
único que opera una síntesis importante entre todas las corrientes doctrinales de la entreguerras entre la psiquiatría
dinámica y el psicoanálisis por un lado, la filosofía alemana y la teoría del inconsciente por el otro y por último entre
el surrealismo y la etnografía. El genio de Lacan se parece muy poco al de Freud radica menos en la capacidad de
forjar enteramente un saber nuevo que en la de reunir en sutil labor lo esencial del saber de una época.
La disputa latente entre los dos hombres tiene por objeto la técnica de la cura para Loewenstein el psicoanálisis es
principalmente un método médico de curación de los síntomas y comprensión de las resistencias mientras que para
76
OM
permiten convertirse en el artesano de una nueva introducción del freudismo en Francia con Clerambault Lacan
aprende a observar a los locos. Con Aimee, renuncia a convertirse en Clerambault. En Sainte-Anee, se opone a
escribir se transforma y adquiere una identidad de teórico y psicoanalista. Si Clerambault es a Lacan lo que Charcot
es a Freud Aimee es también a Lacan lo que Fliess es a Freud. Ocupa el lugar de un analista que tendría la
particularidad de parecerse tanto a Shereber como Anna O…siempre hay una mujer en el origen de un maestro y
cómo esta Lacan hace una especie de autoanálisis espontáneo que le impedirá tal vez reclinarse de veras en el diván
de un hombre.
de la paranoia. Por ejemplo el delirio irrumpe con motivo de un incidente aparentemente banal pero sin duda este
tiene un significado inconsciente para las dos hermanas que siempre tuvieron un comportamiento tan normal,
Lacan emite la hipótesis de que la oscuridad que se manifiesta el 2 de febrero a causa de un apagón tal vez remite
a otra oscuridad más simbólica en la que están sumidas las protagonistas del drama de un grupo a otro entre las
FI
sirvientas y las patronas la corriente no pasa porque no se hablan sin embargo este silencio escribe Lacan no podía
estar vacío aunque fuera oscuro a los ojos de los actores.
Más allá de esta serie de interpretaciones a través de las cuales Lacan elabora su doctrina vemos emerger la
originalidad de una posición que tiende a forjar una nueva concepción de las relaciones entre la psiquiatría la
criminología y la justicia penal frente a los partidarios de la psiquiatría dinámica que tratan de sustraer de la
guillotina a los locos y frente a los expertos oficiales que se hacen cómplices de los verdugos Lacan emite por
primera vez en Francia la hipótesis de una tercera vía que no dará frutos hasta después de mayo de 1968. No da la
razón ni a los partidarios de la irresponsabilidad ni a los de responsabilidad. Según él explicar el crimen no es
perdonarlo ni condenarlo ni castigarlo ni aceptarlo es por el contrario irrealizarlo es decir volver a darle su
dimensión imaginaria y luego simbólica. Desde esta perspectiva si el criminal es loco no por eso es un monstruo
sólo tiene de instintos asesinos.
77
OM
busca del tiempo perdido se convertirá para él en un texto fundamental.
Cuando René Laforgue se retira de la dirección del grupo de L Evolution Psichiatrique, Henry Ey de un nuevo impulso
a la revista que empieza a salir trimestralmente su política consiste en confrontar la psiquiatría y el psicoanálisis y
reclamar una orientación más rigurosa de la primera a través del segundo.
En 1934 Henri Ey publica un estudio titulado Hallucinations et Delires que constituye una especie de resumen de
sus primeras posiciones respecto a la unicidad estructural de la enfermedad llamada mental basándose en los
.C
trabajos de Séglas, crítica como Lacan el automatismo de Clerambault y sostiene que la esencia del delirio
alucinatorio crónico radica en una patología de la creencia que perturba la relación existente entre el sujeto y el
mundo viviente en esta perspectiva el loco defiende su propia realidad como si fuera la expresión de una auténtica
DD
objetividad Ey pone en tela de juicio la distinción clásica entre la alucinación verdadera y la seudoalucinación a fin
de clasificar la alucinación en las estructuras mentales y los comportamientos delirantes.
Para esto se apoya no en una nosología prestablecida sino en una escucha del discurso de los alienados. Igual que
toda la segunda generación psiquiatro- psicoanalítica francesa integra el mensaje freudiano a su concepción de la
locura se comprende por qué Lacan redacta para L Evolution Psychiatrique un artículo elogioso sobre el libro de su
LA
compañero aprovecha la ocasión para mostrar que las hipótesis de éste se acercan a las suyas lo que por lo demás
es perfectamente cierto sin embargo le reprocha no dedicarse lo suficiente al estudio del mecanismo creador de la
alucinación ni a la noción de estructura de la personalidad que según él determina la unidad de todos los delirios
crónicos una vez más Lacan historiza su propia doctrina situando al movimiento dinámico en las categorías
FI
conceptuales que él mismo ha enunciado parecería que no es el ser plagiado lo que teme sino el no ser
suficientemente reconocido por sus pares.
Henri Ey empieza en 1936 a elaborar la noción en adelante clásica de órgano dinamismo inspirada en la neurología
Jacksoniana de la que Freud sacó algunas de sus herramientas teóricas esta doctrina plantea una primacía de la
jerarquía de las funciones sobre su organización estática considera las funciones psíquicas dependientes unas de
otras de arriba hacia abajo así la disolución de las actividades nerviosas superiores acarrea una liberación
desconexión de las actividades interiores que antes eran controladas por aquellas desde el punto de vista de la
orientación anticonstitucionalista de los años treinta, el modelo Jacksoniano ya introducido en Francia por Ribot es
a Henri Ey lo que el modelo freudiano es a Lacan. Si Jackson sustrajo la neurología de sus presupuestos mecanicistas
Freud abandonó la neurología para fundar la teoría del inconsciente y aportar a la psiquiatría una concepción nueva
de la locura según Henri Ey ahora hay que reunir la neurología y la psiquiatría para dotar a esta última de una
verdadera teoría que integre el freudismo. Desde el punto de vista de Lacan conviene por el contrario volver a hacer
el gesto separatista de Freud aunque ello obligue a volver a pensar el saber psiquiátrico en base al modelo del
inconsciente freudiano. En otros términos. Lacan no opone una psicogénesis de las psicosis a su órganogénesis, lo
que equivaldría a mantener la simetría original de lo orgánico y lo psíquico con la psicogenia sustituye a la vez la
78
OM
psicofisiológico. Por el contrario la teoría lacaniana se separa de este dualismo haciendo descansar la psicogenia en
una dialéctica de la personalidad inconsciente única capaz de aislar una casualidad psíquica sin eliminar no obstante
el fondo orgánico que se encuentra simplemente disociado del psiquismo. La doctrina de Ey se basa en una teoría
de la involución de la personalidad en la que el iconsciente se convierte en expresión de las partes involucionadas
de la personalidad humana. A través de éstas aparecen entidades mórbidas que van desde la neurosis como la más
superficial hasta la demencia como la más profunda pasando por los estados intermedios de la paranoia la manía y
.C
la esquizofrenia. La doctrina de Lacan por el contrario supone una teoría estructural de la personalidad irreductible
a cualquier noción de déficit o involución pero que da al inconsciente el lugar de la estructura psíquica misma como
en Freud las entidades mórbidas provienen de la organización inconsciente del sujeto.
DD
Durante los treinta años Henri Ey comparte con Lacan la convicción de que el psicoanálisis no debe usarse como
técnica de apoyo de la vieja psiquiatría para los dos amigos el descubrimiento freudiano devuelve un sentido a la
psiquiatría en la medida de que refuta la idea de una nosología que está supuestamente separada de la dimensión
humana de la locura en otros términos el psicoanálisis es para ellos una rebelión moderna contra el sin sentido de
una clínica que le saca al loco el enunciado de la locura y en su lugar le deja una clasificación escrita de jerga.
LA
En 1936 Lacan va por primera vez a un congreso de la IPA que se celebra en Mariebad Freud enfermo se queda en
viena se elige ese balneario cercano a Austri para que Anna en caso de necesidad acudir al lado de su padre también
Vn María Bonaparte y René Spitz en representación del grupo francés en cuanto a Lacan expone sus ideas sobre el
estadio del espejo expresión sacada de Henri Wallon a la que da un significado nuevo. Al cabo de diez minutos Jones
FI
lo interrumpe descontento el francés expresa entonces su rencor con respecto al galés quizá por esta razón se
olvida de entregar su comunicación a las autoridades competentes por lo que esta no figura en las actas de congreso
lo esencial de la misma se encuentra en el artículo que publica en 1938 en L ENCYCLOPEDIE Francaise a petición de
Wallon.
V. ALEXANDRE.
Nacido en 1902 en una familia acomodada de la burguesía moscovita Alexandre Kojeve tiene la misma edad que la
mayoría de sus alumnos vio morir a su padre durante la guerra ruso-japonesa y luego a su primer padrastro en un
combate contra bandidos. En 1919 siendo un joven estudiante se ve obligado a abandonar su país porque no lo
autorizan a seguir estudios superiores debido a sus orígenes de clase una noche decide cruzar clandestinamente la
frontera pese al trío atraviesa Polonia y se refugia en Alemania en casa de un tío pronto aprende la lengua del país
y estudia filosofía en la universidad de Heldelberg donde se inicia en el pensamiento hegeliano. Gracias a un
compañero recupera unas joyas de la familia que le permiten cubrir sus necesidades con su pequeña fortuna llega
a París en 1928, se mantiene ligado a los ideales de una revolución que no obstante lo echó de su país y va a la
unión soviética todos los años naturalizado francés coloca su dinero en un negocio que quiebra y pronto se ve
79
OM
La enseñanza de Kojeve ejerce sobre Lacan influencia en el sentido literal de esta palabra cada vez que se confronta
con el texto hegeliano, Lacan reproduce la chispa de una lectura Kojeviana. Asi pone en acto el momento fecundo
del kojevismo en la categoría de un hegelianismo. No aportará jamás nada sobre Hegel que no sea sacado de Kojeve
como si esa enseñanza lo hubiera penetrado hasta el punto de formar cuerpo con su lectura ulterior del texto
hegeliano.
A excepción de Clerambault Lacan nunca invocó verdaderamente el nombre de un maestro o más bien el nombre
.C
de un padre cuando dice ser freudiano es para situarse como intérprete de un texto y no como discípulo de un
teórico cuando se basa en algo de levi Strauss o de Jakobson cita sus fuentes y les rinde homenaje de la misma
forma procede respecto a Meriau- Ponty cuando se refiere a Koyre y lo toma como guía en materia de epistemología
DD
es para sinificar de paso que sus trabajos no son reconocidos en su justo valor por otra parte manifiesta su adhesión
a Clerambault primero en 1946 y luego 1966 cuando este ya no puede acusarlo de plagio sin razón por otra parte
dicho de otro modo la deuda del heredero respecto al maestro o del hijo respecto al padre se expresa cuando el
hijo se ha convertido el mismo en padre fundador.
LA
Lacan enunció en Marienbad su tesis del estadio del espejo como olvido entregar su comunicación a las autoridades
competentes en el texto sobre la familia expresa por requerimiento de Wallon lo esencial de su posición respectoa
eso so comparamos el punto de vista walloniano con el de Lacan notamos que este transforma radicalmente una
experiencia psicológica en una teoría de la organización imaginaria del sujeto humano de ahí que cambie la
terminología la prueba se convierte en estadio y pasamos así de la descripción de una experiencia concreta a la
elaboración de una doctrina desde 1931 Wallon ha mostrado como se opera en el niño el paso de lo imaginario a
lo simbólico. El psicólogo es hegeliano pero no es kojeviano subscribe la idea según la cual la transformación de un
individuo en sujeto pasa por los desfiladeros de una dialéctica natural concebida en términos de resolución de las
contradicciones y los conflictos Wallon piensa la psicología dentro de la categoría de una conciencia hegeliana
oponiéndose a la tradición francesa que la sitúa de manera estática y hace de la conciencia la parte cisible de un
subconciente en Wallon la prueba del espejo específica el paso dialéctico de lo especular a lo imaginario y luego de
lo imaginario a lo simbólico repitiendo en 1938 esta formulación pero sin definir aún la naturaleza de lo simbólico
Lacan conceptualiza la experiencia Walloniana para completar la teoría de Edipo que según el no permite explicar
la manera en la que el sujeto se proyecta en su imagen especular para construirse un yo imaginario dominado por
la estructura narcisista. Lacan se separa del enfoque Walloniano describiendo el proceso desde el punto de vista
80
OM
tiende a biologizar la teoría de Freud por ejemplo identificando la pulsión con el instinto o el deseo con la necesidad
Lacan vuelve a centrar el descubrimiento vienés en la noción de deseo inconsciente revisada y corregida por una
perspectiva hegeliano- kojeviana.
.C
DD
LA
FI
81
INTRODUCCIÓN.
Primeramente surgió Wundt, que proconizó la psicología sin alma, comenzando la migración de aparatos del
laboratorio de fisiología a los laboratorios de los psicólogos que orgullo que regocijo los psicólogos tenían
laboratorios y publicaban monografías… se asían los lagoritmos por los cabellos y Ribot calcula el número de células
cerebrales con el fin de saber si pueden alojar todas las ideas la psicología científica vino entonces al mundo.
Una vez llegados a medir hasta la milésima de segundo las asociaciones comenzaron a sentir algún cansancio los
reflejos condicionados llegaron por fortuna para reanimar la fe, Bechterev presentó la psicorreflexología a los
psicólogos maravillados también este movimiento quedó aletargado luego fueron la afasia, seguida de la teoría
fisiológica de las emociones tras la que vino la de las glándulas de secreción interna las que hicieron renacer las
OM
grandes esperanzas frustradas pero en ello no se trataba más que de tensión y retención de un deseo impotente
porque quimérico y al mismo tiempo después de cada uno de los períodos de agitación objetivista reaparece el
moustro vengador de la introspección.
Por eso el advenimiento de la psicología experimental lejos de representar un nuevo triunfo del espíritu científico
no fue más que una humillación en lugar de dejarse renovar por él y servirle , se trataba en efecto de aprovechar
su vida para aplicarla a las viejas tradiciones que se hallaban faltas de ella y para las que esta operación era la última
.C
probabilidad de existencia esto explica el hecho reconocido hoy que todas las psicologías científicas que se han
sucedido a partir de wunt no son más que disfraces de la psicología clásica.
La psicología objetiva clásica no podía llegar a otro resultado nunca ha sido más que la voluntad imposible de la
DD
psicología introspectiva de convertirse en ciencia de la naturaleza y no representa sino el homenaje que esta última
ha rendido al gusto de la época hubo un momento en que la filosofía lo mismo que la metafísica quisieron
convertirse en experimentales pero no se tomó en cuenta. La psicología ha logrado conseguirlo.
Falso sería decir sin embargo que la psicología clásica se alimenta solamente del pasado por el contrario ha logrado
unirse a ciertas exigencias modernas la vida interior en el sentido fenomenista de la palabra ha logrado
LA
Behaviorismo consecuente el de Watson reconoce el fracaso de la psicología objetiva clásica y aporta con la idea
de behavior fuere cual fuere finalmente su interpretación una definición concreta del hecho psicológico pero la más
importante de estas tres tendencias es el psicoanálisis sin duda alguna es la que nos proporciona la visión
verdaderamente clara de los errores de la psicología clásica y nos muestra inmediatamente la psicología nueva
OM
mismo tiempo asir el núcleo vivo de los procedimientos clásicos de este modo no sólo obtendremos una clara visión
de la incompatibilidad de que acabamos de hablar sino también importantes indicaciones sobre la psicología del
porvenir.
Pero como el análisis debe ser preciso y debe comprender el modo como se elabora y construye el psicoanálisis
hemos creído que lo mejor que puede hacerse es estudiar la teoría del sueño el mismo Freud dice el psicoanálisis
reposa sobre la teoría del sueño la teoría psicoanalítica del sueño representa la parte más acabada de esta joven
.C
ciencia por otra parte en la interpretación de los sueños es donde mejor aparece el sentido del psicoanálisis y
quedan al desnudo con un cuidado y claridad extraordinarios sus procedimientos constitutivos.
DD
CAP 1
DESCUBRIMIENTOS PSICOLÓGICOS EN EL PSICOANALISIS Y LA ORIENTACIÓN HACIA LO CONCRETO.
Lo primero que llama la atención en el psicoanálisis es que el psicóloga puede adquirir por su mediación verdadera
sabiduría no me refiero al saber profesional empleo el término sabiduría para subrayar el caso que esta es la
primera vez que la psicología rebasa el plano del lenguaje para alcanzar algo del misterio que encierra el objeto de
LA
su estudio Es la primera vez que el psicólogo sabe es la primera vez que se nos aparece como mago.
Nos encontramos en presencia de verdaderos descubrimientos el descubrimiento del sentido del sueño es uno de
ellos me refiero el descubrimiento del sentido concreto e individual del sueño. El descubrimiento del complejo de
Edipo tan desacreditado por los adversarios de Freud es otro de ellos comparad la psicología del amor tal cual
FI
resulta del freudismo parad la psicología del amor tal cual resulta del freudismo con todo lo que la psicología clásica
incluso Schendal pueda enseñaros sobre esta materia efectuad esta comparación desde el punto de vista de la
posibilidad que los procuran una y otra para comprender un caso concreto y quedarais sorprendidos ante su
diferencia. No hablo del valor terapéutico tan discutido del tratamiento psicoanalítico lo paso por alto a sabiendas
pues me sitúo en el punto de vista del saber que el psicoanálisis puede aportar a la psicología.
En cuanto acabamos de decir no hay solamente simples juicios de valor pues analizando el contraste indicado
podremos descubrir en la psicología clásica la necesidad de la ignorancia así como la del saber en el psicoanálisis
esto es lo que nos proponemos demostrar en el ejemplo del sueño.
Freud se ha permitido el lujo de consagrar el primer capítulo de la interpretación de los sueños a la parte histórica
del problema del sueño acompañando la exposición de observaciones críticas que deben justificar su intervención
en esta cuestión siendo difícil dejar de reconocer en este capítulo el viaje de u hombre que ve al país de los que nos
han visto nada. Freud da a sus críticas un aspecto y aire modestos lo que se propone es dejar sentir que después
de cuanto se ha dicho quedan cosas aún por decir sobre el sueño mejor dicho que lo esencial no ha sido dicho
todavía pues hasta hoy se ha tratado esta cuestión con demasiado ligereza comparando los diferentes trabajos
obtiene al cuadro de las dificultades que debe resolver la teoría de los sueños.
83
OM
cierto punto el retorno de Freud al seno de la psicología clásica consagra de hecho la ruptura con la definición
clásica de hecho psicológico para ser breves asistimos a un fenómeno muy conocido en la historia de las ciencias
un esquema de interpretación clásica con una anomalía que se revela finalmente como fenómeno dialéctico muy
potente y acaba por romper el esquema clásico para convertirse en punto de partida de una visión el sueño ha
opuesto a la psicología clásica la misma resistencia que la electricidad al mecanismo de los físicos del siglo XIX y
constituirá como el experimento de Michelson en cuanto a las teorías de la relatividad el punto de partida de una
.C
nueva visión del universo de la psicología pero de todos modos es cosa visible a partir de esta crítica de las teorías
orgánicas que debemos hallar en la interpretación de los sueños una nueva definición del hecho psicológico
irreductible ante aquella a que la teoría clásica nos había habituado.
DD
LA
FI
84
En esta entrevista Jacques Lacan explicita qué surco ha sido abierto por Freud y a qué exigencias debe responder la
formación de los analistas para recuperar el retraso que su disciplina tiene en relación a los avances de su fundador,
Jacques Lacan no cesará de trabajar en retomar este proyecto freudiano asegurando así las bases de la reconquista
del campo freudiano y el porvenir del nuevo racionalismo qué el implica.
EL OTRO SUJETO.
- Hay AQUÍ UNA ESPECIE DE TERRORISMO, UNO SE SIENTE VIOLENTAMENTE ARRANCADO DE SÍ MISMO…
El psicoanálisis le anuncia que usted no es más el centro de usted mismo ya que había allí otro sujeto el inconsciente.
Es una novedad que no ha sido de entrada bien aceptada, ese supuesto irracionalismo del cual se ha pretendido
OM
disfrazar a Freud, pero es exactamente lo contrario no solamente Freud racionalizó lo que hasta entonces había
resistido a la racionalización sino que incluso él mostró en acción una razón razonante como tal quiero decir en acto
de razonar y de funcionar digamos el campo de la pasión.
ARTICULADO Y DESCIFRABLE.
.C
La experiencia freudiana no es del nivel de la organización de los instintos o de las fuerzas vitales, esa experiencia
no los descubre sino ejerciéndose si puedo decirlo, a una segunda potencia.
DD
No es de efectos instintivos a su primera potencia que trata Freud lo que es analizable lo es porque ya está
articulado en lo que hace la singularidad de la historia del sujeto, si el sujeto puede reconocerse allí es en la medida
en que el psicoanálisis permite la transferencia de esta articulación. Dicho de otra manera cuando el sujeto reprime
eso no quiere decir que rehúse tomar consciencia de algo que sería un instinto pongamos por ejemplo un instinto
sexual que quisiera manifestarse bajo forma homosexual – no, el sujeto no reprime su homosexualidad, reprime la
LA
- USTED DICE QUE EL SUJETO REPRIME UN DISCURSO ARTICULADO EN UN LENGUAJE. SIN EMBARGO NO ES ESO LO
QUE SE SIENTE CUANDO UNO SE ENCUENTRA FRENTE A UNA PERSONA QUE TIENE DIFICULTADES PSICOLÓGICAS,
UN TÍMIDO POR EJEMPLO O UN OBSESIVO. SU CONDUCTA PARECE SOBRE TODO ABSURDA, INCOHERENTE Y SI SE
FI
ADIVINA QUE EN RIGOR ELLA PUEDE SIGNIFICAR ALGO, SERÍA ALGO IMPRECISO, BIEN POR DEBAJO DEL NIVEL DEL
LENGUAJE.
- SÍNTOMAS CUANDO USTED CREE RECONOCERLOS, NO LE PARECEN IRRACIONALES MÁS QUE PORQUE USTED LOS
TOMA AISLADOS Y USTED QUIERE INTERPRETARLOS DIRECTAMENTE…
Y bien los fenómenos con los que nos vemos en el análisis son de ese orden, son un orden lenguajero. El
psicoanalista no es un explorador de continentes desconocidos o de grandes fondos es un lingüista el aprende a
descifrar la escritura que está allí bajo sus ojos ofrecida a la mirada de todos pero que pertenece indescifrable
mientras que de ella no se conocen las leyes la clave.
LA REPRESIÓN DE UNA VERDAD.
- USTED DICE QUE ESTA ESCRITURA ESTÁ OFRECIDA A LA MIRADA DE TODOS SIN EMBARGO SI FREUD HA DICHO
ALGO NUEVO ES QUE EN EL DOMINIO PSÍQUICO SE ESTÁ ENFERMO PORQUE SE DISIMULA SE ESCONDE UNA PARTE
DE SÍ MISMO, SE REPRIME.
85
OM
Eso es exactamente lo que no se produce con la conciencia la verdad persistirá pero traspuesta a otro lenguaje en
lenguaje neurótico.
De tal modo que ya no se es más capaz de decir en ese momento cuál es el sujeto que habla sino que eso habla,
que eso continúa hablando y lo que pasa es descifrable enteramente a la manera en que es descifrable una escritura
perdida es decir no sin dificultad.
El sujeto que ha reprimido la verdad no gobierna más él no está más mas en el centro de su discurso: las cosas
.C
continúan funcionando solas y el discurso continúa articulándose pero más allá del sujeto y este lugar este más allá
del sujeto es estrictamente lo que se llama inconsciente. Usted ve bien que lo que se ha perdido no es la verdad es
la clave del nuevo lenguaje en el cual ella se expresa en lo sucesivo. Es allí donde interviene el psicoanálisis.
DD
EL HOMBRE DE LAS RATAS
¿Y SOBRE EL PLANO DE LA SEXUALIDAD?
La neurosis obsesiva está extendida y puede pasar desapercibida si no se está especialmente advertido de los
pequeños signos que siempre la traducen estos enfermos se mantienen aún muy bien en su posición social mientras
LA
Así estaba el hombre de las ratas enloquecido atrapado en un retoño de síntomas que lo lleva a consultar a Freud
desde los alrededores de Viena donde participaba en maniobras como oficial de reserva y pedirle su consejo en una
historia inverosímil de reembolso al correo del envío de un par de anteojos a propósito de la cual se pierde hasta
no poder decir más.
Si se sigue literalmente hasta sus dudas el escenario instituido por el síntoma en cuatro personas se reencuentra
rasgo por rasgo traspuestos en un vasto simulacro sin que el sujeto lo suponga las historias que han conducido
hasta el matrimonio del cual el sujeto es el fruto.
- PUEDE SER QUE LA VERDAD REPRIMIDA SE ARTICULE COMO USTED LO DICE COMO UN DISCURSO CON EFECTOS
DESVASTADORES SÓLO QUE CUANDO UN ENFERMO VIENE A USTED NO ES ALGUIEN QUE ESTÁ EN BÚSQUEDA DE
SU VERDAD, ES ALGUIEN QUE SUFRE HORRIBLEMENTE Y QUIERE SER ALIVIADO SI YO RECUERDO BIEN LA HISTORIA
DEL HOMBRE DE LAS RATAS HABÍA ALLÍ TAMBIÉN UN FANTASMA DE RATAS.
- DICHO DE OTRA MANERA MIENTRAS USTED SE OCUPA DE LA VERDAD HAY ALLÍ UN HOMBRE QUE SUFRE…
86
Los fenómenos de los que se trata en el análisis y a nivel propio de los instintos son los efectos de los registros de
un lenguaje el reconocimiento hablado de elementos mayores de la historia del sujeto historia que ha sido cortada
interrumpida que ha caído en los fondos del discurso.
En cuanto a los efectos que deben definirse como perteneciendo al análisis los efectos analíticos como se dice
efectos mecánicos o efectos eléctricos los efectos analíticos son efectos del orden de ese retorno del discurso
reprimido.
Y no puedo decirlo que en el momento en que ha puesto usted al sujeto sobre un diván y aún si usted le ha explicado
OM
la regla analítica de la manera más sumaria el sujeto ya está introducido en la dimensión de buscar su verdad.
Si el sólo hecho de tener que hablar como él se encuentra constreñido a hacerlo frente a otro el silencio de otro un
silencio que no está hecho ni de aprobación ni de desaprobación sino de atención lo siente como una espera y que
esta espera es la espera de la verdad.
Y también él se siente allí empujado por el prejuicio del que hablábamos hace un momento por creer que el otro el
experto el psicoanalista sabe sobre usted mismo lo que usted mismo no sabe la presencia de la verdad se encuentra
.C
fortificada ella está ahí en estado de implícita.
El enfermo sufre pero él se da cuenta de que la vía hacia la cual volverse en fin para superar apaciguar sus
dificultades es del orden de la verdad saber de eso más y saber mejor.
DD
INVERSIÓN INQUIETANTE
- PUEDE PERO EL PSICOANÁLIS ¿ESTA SUFICIENTEMENTE BIEN VISTO? EN LOS MEDIOS RELIGIOSOS SE HARÍA DE ÉL
MAS BIEN UNA CIENCIA DEL DIABLO.
Yo creo que los tiempos han cambiado sin duda después de que Freud hubo inventado el psicoanálisis este
LA
permaneció durante mucho tiempo como una ciencia escandalosa y subversiva no se trataba de saber si se creía
en ella o no se la combatía violentamente con el pretexto de que las personas psicoanalizadas se desenfrenarían se
abandonarían a todos sus deseos se entregarían a cualquier cosa..
Hoy en día admitido o no en tanto que ciencia el psicoanálisis entró en nuestras costumbres y las posiciones se han
FI
invertido es cuando alguien no se conduce normalmente cuando actúa de una manera juzgada escandalosa por su
medio que se habla de enviarlo al psicoanálisis
Todo esto entra en lo que yo llamaré no con el término demasiado técnico de resistencia al análisis sino objeción
masiva.
El temor de perder su originalidad de ser reducido al nivel común no es menos frecuente hace falta decir que sobre
esta noción de adaptación se ha producido en estos últimos tiempos una doctrina cuya naturaleza engendra
confusión y a partir de allí inquietud. Se ha escrito que el análisis tiene como finalidad adaptar al sujeto de ningún
modo al medio exterior digamos a su vida o a sus verdaderas necesidades eso significa claramente que la sanción
de un análisis sería que uno se ha vuelto padre perfecto esposo modelo ciudadano ideal en fin que uno es alguien
que no discute más nada lo que es totalmente falso tan falso como el primer prejuicio que veía en el psicoanálisis
un medio de liberarse de toda sujeción.
87
OM
diría que no hay nada más favorable para el desarrollo del psicoanálisis que una batalla permanente y un deseo
insatisfecho de reconocimiento.
Después de la escasez de los años de la liberación y pese a la derrota sufrida en indochina Francia entra en la era
de consumo. La abundancia recobrada beneficia a las clases medias y nuevas capas de la población tienen acceso a
la atención psíquica o a la profesión de psicoanalista no comunista, cuyas aspiraciones humanistas rozan los muros
de la casa freudiana, Sartre se interesa en el inconsciente, la fenomenología del en sí del para sí y del signo reina
.C
como dueña y señora sobre una filosofía aún hegeliana y a los psicoanalistas les desagrada el compromiso político
pese al interés que sienten por un freudismo más existencial y menos médico. Solamente dos de ellos Maud
Mannoni y Jean Bertrand Pontalis, firman el manifiesto de los 121 sobre el derecho de Argelia a la Insumisión y hay
DD
que esperar el advenimiento de la cuarta y de la quinta generación para ver surgir en la comunidad psicoanalítica
una interrogación antiimperialista, marxista, libertaria o izquierdista. Entre 1958 y 1963 el medio sigue instalado
dentro de cierto confort y encuentra en el gaullismo la expresión de un ideal expansionista acorde con sus modos
de representación del poder.
Desde sus orígenes la SFP pertenece a los hombres de la tercera generación pese a la importancia numérica que
LA
adquirieron las mujeres todavía son ellos los que ocupan dentro del movimiento los lugares preponderantes
alumnos en la SPP luego testigos en análisis asisten a la discordia de sus maestros jugando en la aventura su propia
partida. La nueva sociedad liberal responde a sus ambiciones serán su punta de lanza cada uno a su manera. El
motivo de la segunda escisión es la reintegración a la IPA a la que nadie piensa en oponerse de tan normal que
parece el proceso de reintegración. En esta época no hay psicoanálisis posible en Francia sin pertenecer al gran
FI
imperio freudiano cualesquiera que sean sus exigencias. A esta tercera generación se las llama los juniors por
oposición a los seniors que son los maestros de la SFP y están dotados de motes: el grand Jacques es Lacan, el oncie
Dany es L agache, Juju jojo y Bouliette Jutonier son lo favez, a estas denominaciones Granoff agrega otras
inventadas por él: Dany- caca es Lagache en recuerdo de una anécdota privada Zipa en la IPA y además les cloches,
les ploucs,
Esta nueva generación llega a los cuarenta años a mediados del decenio 1960, ya no sabe nada de la actividad de
los doce pioneros cuyas obras considera decepcionantes y cuyo recuerdo se borró con la depuración y la primera
escisión. En resumidas cuentas está desconectada de la historia Francesa del psicoanálisis. Formada en el corazón
del gran renacimiento, olvido la época heroica y se siente más inclinada a leer la literatura anglosajona o vienesa
que los textos de pichón o Altiendy. Antes que ella los maestros de la generación procedente, borraron la memoria
de los orígenes, haciendo de sus alumnos unos huérfanos de la historia. Para todos los juniors, la aventura francesa
del psicoanálisis empieza en 1948 con la enseñanza de Bouvet, Lacan, Dolto y Lagache.
Para ellos los dirigentes de la SFP aparecen como los verdaderos fundadores del movimiento frente a los seniors
tienen la impresión de ser los herederos de una doctrina que puede reindicar sus credenciales de nobleza entre el
aparato de normalizar en que se ha convertido la IPA. Por esta razón terminarán queriendo integrarse al imperio
88
OM
de escritos en parte autobibliográficos o de amigos como Anne Lise Steam y Jean Laplanche que estaban también
en cura con Lacan. Serge Leclaire ama a este maestro silencioso y se convierte en su discípulo sin zalemas ni
sumisión el primer lacaniano de la historia.
En la Spp, se hace un control con Pasche y participa con Granoff en la rebelión de los cursillistas juntos asisten con
entusiasmo al congreso de Roma y se persuaden de la necesidad de hacer que la IPA reconozca la nueva sociedad.
En opinión de ellos ésta no es lo bastante fuerte para existir sola en Francia sin soporte internacional. Tan
.C
cosmopolita es el ruso, siempre con su pasaporte en el bolsillo como el alsaciano gran servidor de la política de un
príncipe. No esconde jamás su origen pero no hace funcionar su condición de judío como síntoma de una historia
del psicoanálisis su proyecto no es totalmente idéntico al de Granoff. Para Leclaire se trata menos de enganchar el
DD
vagón del lacanismo a la epopeya fastuosa de una diáspora de su sueño que de hacer que la IPA admita la existencia
de un maestro francés del psicoanálisis obligado a la vez a este a aceptar algunos límites a su poder.
En este famoso grupo de los siete los alumnos de Lagache analizados por Lacan se muestran aparentemente menos
empeñados en la negociación internacional que los hombres de la trolka. Hay que decir que su formación
universitaria les permite tener acceso directo a un movimiento de ideas centrado en la filosofía o la psicología. En
LA
el fondo para hacer carrera en Francia podrían prescindir del reconocimiento de la IPA.
Pero eligiendo esta vía correrían el riesgo de seguir pagando las consecuencias de un encierro que los excluiría de
cualquier encuentro con colegas extranjeros, es por eso por lo que como los miembros de la trolka pero por otras
razones también ellos aspiran al sacrosanto reconocimiento. Para obtenerlo están dispuestos no a traicionar su
FI
formación lacanianae sino a exigir a Lacan un sometimiento a las normas si Granoff y Leclaire tienen un verdadero
proyecto internacionalistas basado el uno en un sueño de reencuentro con la diáspora y el otro en la adhesión a
una doctrina y a un maestro si Perrier sueña con ser un gran jefe francófono, los juniors universitarios a los que se
unen algunos médicos tienen la impresión de jugarse el porvenir formando un legítimo desquite de una historia de
la cual se sienten excluidos desde la escisión de 1953..reprochan a sus maestros el haber dimitido de la IPA sin
percatarse de las consecuencias de semejante acto por añadidura mantienen con Lacan una relación transferencial
compleja que va desde la idealización excesiva hasta una decepción igualmente excesiva que encontrará la solución
en la reintegración al imperio.
89
OM
Entre 1951 y 1953 el seminario se celebra en el domicilio de Sylvia. Todos los miércoles Lacan comenta los grandes
textos freudianos: el hombre de los lobos y el hombre de las ratas ha sustituido sus trajes de gales por ropas más
extravagantes ahora se viste con un estilo que se asemeja a su sintaxis barroca inmediatamente después de la
primera escisión se instala en el anfiteatro del hospital saint-anne que le presta Jean Delay. Allí durante diez años
habla con voz vacilante sincopada o atronadora llena de suspiros y titubeos escribe antes lo que va a decir y después
ante el público improvisa a la manera de un actor de la Royal Shakespeare company que hubiera tenido a Greta
.C
Garbo como profesora de dicción y a Arturo Toscanini como director espiritual Lacan desafina porque dice la verdad
como si con su palabra rigurosa pero siempre pronta a quebrarse hiciera resurgir como un ventrílocuo el espejo
secreto del inconsciente síntoma de un dominio en perpetuo desfallecimiento brujo sin magia gurú sin hipnosis,
DD
profeta sin dios tascina a su auditorio en una lengua admirable en la que se opera en los márgenes del deseo el
gran despertar de un siglo de luces Lacan no analiza asocia Lacan no diserta produce resonancias en cada sesión de
cura colectiva los alumnos tienen la sensación de que si el maestro habla de ellos y para ellos en un mensaje cifrado
secretamente destinado a cada uno por eso se precipitan a las mejores librerías para comprar tal libro citado por
él o devorar tal pasaje de un texto ignorado durante diez años y luego veinte más. Su majestad hace trabajar a la
LA
Francia freudiana.
En la SFP Lacan intentan aplicar esa política del inconsciente de lo que Freud fue el fundador desfalleciente no
obstante no está en salvo de las paradojas de su temperamento por eso el fusionar su persona con su doctrina
exigiéndole a sus alumnos que lo amen o le sirva es algo más fuerte que él. Pero como no es un dictado ni un
FI
peligroso paranoico conoce perfectamente los límites de esa especie de reinada se sabe rey de una monarquía
imaginaría fundada en la servidumbre voluntaria eso por lo que durante diez años espera integrarse al imperio.
Despidiéndose a abandonarlo correría el riesgo no sólo de tener que renunciar a cualquier proyecto expansionista
sino sobre todo de verse obligado a crear una escuela a su imagen donde funcionaría de veras la doctrina y la
persona del maestro es evidente que el pertenecer a la IPA puede permitir a Lacan seguir siendo un pensador y
evitarlo tener que administrar una política en su nombre por el contrario cualquier ruptura definitiva lo conduciría
inevitablemente a identificarse con un poder político que haría de él ya no un productor de significantes sino un
jefe de escuela.
De forma más o menos consciente sabe que esa posición fusionante es insostenible en efecto vale más ocupar el
difícil lugar de un animal dinamitero que es el otro, confortable de una tortuga libre de escorpiones se puede
entonces hacer la hipótesis de que la búsqueda lacaniana de una integración al imperio funciona como el síntoma
de una voluntad del maestro de no convertirse en el jefe de una institución según estas perspectivas hay que admitir
que Lacan fundará su escuela sólo obligado y forzado cuando se percate de que ya no puede escapar a las normas
ni hacer que la IPA acepte su posición de maestro pero al mismo tiempo al perder toda esperanza de pertenecer al
imperio correrá el riesgo de perderse en una identificación soberana con su propio nombre o más exactamente con
90
OM
esta paradoja inaudita: el lacanismo existe en la medida en que no existe porque se constituye históricamente en
el corazón de la aventura posfreudiana y en parte contra ella pero no existen porque se piensa a sí mismo en su
totalidad como un freudismo y más aún el único resultado teórico de la realización del freudismo.
A quisa de la segunda hipótesis se puede mostrar que Lacan opera dos lecturas sucesivas de la obra saussuriana. La
primera se efectúa antes de 1953 e integra a la vez el paisaje filosófico de la recepción del heideggeranismo en
Francia y el del descubrimiento de las estructuras elementales del parentesco mientras que la segunda se traduce
.C
en una refundición estructuralista y casi cartesiana de la conceptualidad los textos de esa época revelan que Lacan
no lee al mismo Saussurre antes y después de 1953. Para el discurso de Roma y la conferencia que lo antecede
sobre lo simbólico lo imaginario y lo real…lee a saussurre con levi-strausspor un lado y a Heidegger por el otro. Por
DD
una parte privilegia la noción de pensamiento simbólico y por otra insiste en la cuestión del sentido del ser a través
de la revelación verdadera de la palabra y el lenguaje. Cuando Lacan en Roma habla se significante, se refiere a un
pensamiento del logos y del decir y al mismo tiempo a una concepción levi-straussiana del símbolo. Pero no ha
elaborado aún una verdadera teoría de la determinación significante. Para llegar a eso, entre 1953 y 1963, tiene
que releer a sausurre a la luz de Jakobson considerando una posible relación entre la segunda tópica Freudiana y el
LA
descubrimiento ginebrino. Dicho de otro modo, durante diez años Lacan piensa de nuevo la doctrina psicoanalítica
del sujeto a partir de una lectura fecunda y ya no pasiva de la obra saussuriana.
El primer encuentro entre Lacan y Heidegger se produce en 1950, la que no significa nada por lo que atañe a la
aportación del pensamiento heideggeriano a la doctrina lacaniana como siempre las relaciones y las amistades son
FI
una cosa y los empréstitos conceptuales otra. Así, por ejemplo, Levi-Strauss y Lacan seguirán siendo buenos amigos
pero el primero no apoyará en nada la doctrina del segundo y él mismo reconocerá que no comprende mientras
que el segundo se nutrirá continuamente del pensamiento del primero a la vez que enuncia otra cosa.
Lacan va a Friburgo en esta época en la que Heidegger sigue teniendo prohibido enseñar por haber apoyado el
régimen nazi antes de la guerra un año más tarde será reintegrado en Francia la intelligentsia de izquierda ya lo
celebra como el mayor maestro moderno de la filosofía en Friburgo Heidegger y Lacan como al mayor maestro
moderno de la filosofía. En Friburgo, Heidegger y Lacan no se comunican demasiado el primero no habla Francés y
el segundo no sabe expresarse en alemán no obstante intercambian algunas palabras en idioma filosófico
probablemente una mezcla de griego antiguo y viejas etiología germánicas, lo cierto es que Lacan ya ha leído el ser
y el tiempo y Heidegger no ha oído hablar nunca de Lacan por lo demás el psicoanálisis no le interesa y Freud muy
poco Lacan está subyugado por la filosofía heideggeriana por su estilo por su problemática del ser y de la revelación
de la verdad todo esto aparece reflejado en el informe de Roma pero no saca de Heidegger lo que saca de Hegel,
Levi-Strauss, Saussurre o Jakobson. Hay eco, sonoridad mimetismo y fascinación no mucho más.
91
OM
escondida por el ministro aquella esta puesta a la vista entre los arcos de la chimenea de su escritorio visible para
quien quiera verla pero los policías no la encuentran porque han caído en la trampa de la psicología en vez de mirar
la evidencia que surge ante sus ojos atribuyen intenciones al ladrón Dupln procede de otra forma. Cortésmente
solicita audiencia al ministro y mientras le habla observa la pieza con ojo avizor. Unas gafas oscuras ocultan su
mirada inmediatamente localiza el objeto se apodera de él sin que el ladrón se dé cuenta y lo reemplaza por idéntico
de modo que el ministro permanece en la ignorancia de su secreto descubierto continúa creyéndose el dueño del
.C
juego y de la reina pues poseer la carta es detentar un poder sobre su destinataria.
Un mes más tarde, comienza la redacción propiamente dicha del texto y la concluye en el mes de agosto en san
Casciano pueblo natal de Maquiavelo visita la casa y la taberna donde venden ceniceros como recuerdo con el efigie
DD
del gran hombre en este artículo príncipe que once años más tarde servirá de apertura a los Escritos aporta el
testimonio de su lectura fecunda de la obra saussuriana. Al igual de que Dpln, teoriza ya no sólo una función
simbólico sino una lógica del significante una lógica política. Una carta siempre llega a destino porque la carta (o el
significante), como la fortuna, determina al sujeto en su recorrido. Bajo la influencia de este estructuralismo
marcado por la presencia de Maquiavelo Lacan pretende ser un padre fundador.
LA
Pero le falta explicar sus pasos: el porqué de un predominio de la carta (del significante) sobre la palabra el porqué
del cambio acaecido desde el informe de Roma.
Se suceden dos conferencias que como siempre hay que relacionar con el seminario lugar del enunciado oral.
Durante dos años entre 1957 y 1959, Lacan toma como tema de sus clases las formaciones del inconsciente y el
FI
deseo y su interpretación como contrapunto escribe dos conferencias que pronuncia en sitios determinados una
en el anfiteatro Descartes de la soborna el 9 de mayo de 1959, a petición de la federación de estudiantes de letras
y la otra en Royaumont en septiembre de 1980 en un coloquio sobre la dialéctica organizado por Jean Wahl por
una parte la literatura donde empieza a hacerse sentir la importancia de la lingüística y por la otra filosofía donde
92
OM
en su lugar.
Por esta razón Lacan sustituye el pienso cartesiano por el ello freudiano sin embargo el cogito es un momento
fundamental de la historia humana ya que divide al sujeto en un saber reflexivo y una verdad reprimida de eso
Lacan extrae la conclusión de que el inconsciente es de alguna manera un efecto del lenguaje, pero ¿por qué al
renunciar al hegelianismo convoca al antiguo cartesianismo? ¿Por qué hace surgir ese término aberrante de sujeto
del inconsciente cuando Freud se había tomado el trabajo de desecharlo? En realidad Lacan infiere que Freud no
.C
inventa ni suprime al sujeto sino que se apodera de él donde se encuentra, es decir, en las consecuencias de la
perspectiva cartesiana que inaugura después de Galileo la ciencia moderna. Si Freud decía ser copernicano Lacan
obligado a ser galileano al sacar la conclusión lógica de la segunda tópica.
DD
Esta noción de sujeto surge en las meditaciones el concepto pretende describir al hombre como si estuviera libre
de toda determinación externa el sujeto escribe Bertrand Ogilvie- autor responsable de su pensamiento y
comportamiento iniciador de todo sentido y en Kant de toda moral da la clave de una ideología de futuro, ideología
del derecho, o humanismo, al fundamento de las sociedades industriales.
Aprovechando esto Lacan produce pues a través de Freud la teoría del yo moderno es decir el sujeto paranoico de
LA
la civilización científica. Así la experiencia freudiana es exactamente inversa a la filosofía nacida del cogido pero al
convocar a Descartes con Freud es decir al sujeto fundado por la ciencia Lacan convoca también al sujeto de la duda
un no sé lo que soy puede entonces a través de Descartes dotar al inconsciente de un sujeto dividido.
Basándose en esta demostración Lacan transcribe de otra manera la concepción freudiana del trabajo del sueño el
FI
cual de la clave del funcionamiento del inconsciente como un lenguaje si el sueño se caracteriza en general por una
actividad de transposición esta puede traducirse a la luz de Saussurre como el deslizamiento incesante del
significado bajo el significante. Existen dos vertientes de la influencia del significante sobre el significado una se
define como una condensación y remite a una estructura de superposición de los significantes (personajes y
palabras compuestas), la otra se relaciona con un viraje de significación (la parte por el todo o la contigüidad) y
designa un desplazamiento. Contrariamente a Jakobson, Lacan asimila pues la noción freudiana de condensación
con el procedimiento de elaboración de metáforas y el desplazamiento con el de formación de metonimias, en la
metáfora se determina el síntoma en su calidad de sustitución por un significante corporal de otro significante
reprimido mientras que en la metonimia viene a engancharse el deseo inconsciente como deseo del deseo.
A partir de allí Lacan integra la estructura del sujeto en una lógica del significante el lugar que ocupo como sujeto
de significante es concéntrico o excéntrico con respecto al que ocupo como sujeto de significado excéntrico ,
responde según la subversión que le impone al cogito: “pienso donde no soy entonces soy donde no pienso”. La
nueva tópica lacaniana consiste pues en atribuir al inconsciente la estructura de un lenguaje en el cuál el je es
definido como efecto del significante ese je-sujeto se asemeja a un shifter según el término que emplea Jakobson
es decir a una unidad gramatical cuya significación tiene referencias en el mensaje. El shifter designa al sujeto del
93
OM
basta al momento en el cual en ciertos lugares privilegiados de la cadena el significante se anuda al significado para
dar nacimiento a una significación en la cura esa vasta se traduce como puntuación. Esta es esquemáticamente
toda la operación teórica que permite a Lacan dotar a la doctrina psicoanalítica de una teoría no freudiana del
sujeto es de destacar que ésta se presenta como filosóficamente freudiana porque extrae más allá del hegelianismo
y el cartesianismo las consecuencias de la doctrina de Freud que ni él había pensado estamos por lo tanto ante un
retorno al inconsciente.
.C
DD
LA
FI
94
Este trabajo profundiza desde una perspectiva histórica y epistemológica el contexto de surgimiento de una de las
tesis principales del pensamiento de Jean Laplanche la del realismo de la inconsciente explicitada por primera vez
en colaboración con Serge Leclaire en el coloquio de Bonneval organizado por Henri Ey en 1960 en confrontación
con las ideas de Georges Politzer y Jacques Lacan.
En aquella reunión que era en rigor el sexto coloquio coordinado por H. Ey el tema de la convocatoria fue la
convocatoria del inconsciente allí Laplanche presenta un trabajo en colaboración con Leclaire titulado El
inconsciente un estudio psicoanalítico que marcará a posteriori su ruptura teórica con Lacan y el inicio de un
OM
recorrido propio original en un debate con su maestro que tendrá varias idas y vueltas a partir de la publicación de
las actas del coloquio ocurrida recién en 1966. La dimensión de una verdadera diferencia en torno al concepto de
inconsciente de ambos autores no se tomaría explícita hasta el momento de la publicación.
Este coloquio se da en un momento de máxima producción y debate cuyo eje central son las discusiones entre la
fenomenología y el psicoanálisis están presentes los dos grupos principales del psicoanálisis francés (luego de la
escisión de 1953 que inaugura la llamada edad de oro del lacanismo), por un lado el ala más tradicional
.C
representadapor Serge Lebovici, René Diatkine, André Green y Conrad Stein por otro Laplanche Pontalis Serge
Leclaire y Francois Perrier, los mejores discípulos de Lacan quien también está presente pero no como expositor
disertante sino para participar comentando las ponencias y discusiones, en presentación de la filosofía están
DD
Merieau ponty, Lefevre e Hyppolite entre otros.
La ponencia de Laplanche y Lclaire se coloca en primer plano fundamentalmente porque para el imaginario del
momento los dos psicoanalistas constituían la primera línea del pensamiento lacaniano sus porte.parole. Presentan
un texto compuesto de cinco capítulos tres redactados por Laplanche dos por Leclaire donde están trabajando en
un movimiento de expansión y desarrollo la tesis principal que Lacan acaba de establecer la del inconsciente
LA
estructurado como un lenguaje. Los capítulos de Laplanche son eminentemente teóricos los de Lacleire son un
intento de articulación clínica a través de una viñeta de un paciente suyo de la reciente novedad teórica propuesta
por Lacan en ellos hay un relato de un análisis en detalle de varios sueños y elementos de sesiones analíticas donde
prácticamente no hay resto en el sentido de que lo que se quiere transmitir teóricamente se refleja, aparentemente
de un modo impecable en el material clínico expuesto confirma el concepto de cadena significante la idea de la
FI
remisión de significante a otro y la importancia del lenguaje en síntesis de cómo los desplazamientos y las
condensaciones habitan los significantes.
Los capítulos de Laplanche por un lado el centro inicial es una crítica a Georges Politzer un autor que estaba muy
presente en las discusiones de la época y que había realizado un planteo de corte fenomenológico en su famoso
texto de 1928 la crítica de los fundamentos de la psicología el psicoanálisis Laplanche defiende a Freud respecto de
Politzer y esa defensa se estructura en torno a tres vértices por un lado el retorno a Freud (a algunos conceptos
freudianos para desandar con argumentos la lectura de politzer), por un lado avanza programáticamente con
algunas de las tesis lacanianas del momento (como el uso de las nociones de metáfora y metonimia) y en tercer
lugar incluye una crítica al núcleo de la propuesta de Lacan cuya primera forma es no acordar totalmente con la
idea del inconsciente estructurado como un lenguaje para plantear que más que ser el lenguaje condición del
inconsciente sería el inconsciente condición del lenguaje.
Recordemos quién era Politzer para seguir en detalle la polémica: nacido en Hungría en 1903 en 1919 se tiene que
exiliar porque su familia participa en una insurrección comunista, antes de instalarse en Francia (1921) pasará dos
años en Viena a los 17 años mientras estudia filosofía y asiste a seminarios de la sociedad psicoanalítica conociendo
personalmente a Freud y Ferenczi.
95
OM
de la interpretación no es el yo abstracto de la psicología oficial sino el sujeto concreto de la vida individual la
psicología concreta como psicología de la primera persona sólo puede estudiar el acto del individuo concreto es
decir la vida singular del individuo deseante en su devenir histórico. La vida propiamente humana la vida en el
sentido dramático del yo así se deduce del psicoanálisis una nueva definición del objeto de la psicología los hechos
psicológicos deben ser segmentos de la vida dramática del individuo particular emprendiendo que el término drama
designa aquí a un hecho vivido sin ninguna resonancia romántica ni significación conmovedora.
.C
Para su proyecto de psicología concreta y acordes a esta noción de drama el concepto de identificación y el
concepto de Edipo del psicoanálisis le venían muy bien pero el modelo tópico del capítulo séptimo de la
interpretación de los sueños y el mismísimo concepto de inconsciente eran para Politzer producciones de carácter
DD
abstracto en las cuales Freud no podía librarse de las aporías de la psicología tradicional. Esto no ocurría en un
momento en el cual Freud y el psicoanálisis estuvieran completamente implantados en Francia. Coinciden los
historiadores en que es a través de Politzer entre otros que empiezan a entrar el psicoanálisis en ciertos
intelectuales franceses vinculados a la disciplina filosófica. Dirá Althusser posteriormente que fue a partir del
filósofo franco-húngaro que tanto Merleau Ponty como Sartre se interesaron en el psicoanálisis.
LA
En el texto seminal que estamos comentando, Politzer centraba el análisis en el par contenido Latente –contenido
manifiesto del sueño para establecer lo que podemos denominar la tesis de la inmanencia del sentido que el sueño
tiene un solo contenido y que es el relato que el sujeto hace de él. En efecto para Politzer la significación latente
está presente en el relato del paciente del mismo modo que están presentes las reglas del juego en la conciencia
FI
del jugador durante un partido de tenis es decir que el sentido no está en otra parte en otras representaciones con
otra localización tópica la significación estaría allí como el recuerdo de infancia que determina un sueño está ahí en
el momento del sueño al año siguiente de escribir este texto fenomenal para su época Politzer experimenta una
crisis: siente que ocupándose tanto de la cuestión de la psicología se aleja de los problemas sociales económicos y
políticos que consideraba cada vez más urgentes a consecuencias del avance de Hitler y del nazismo lo resuelve
engrasando en el partido comunista francés afianzando una militancia y sigue con su producción de la fundación
de la universidad obrera de parís y dicta clases a los obreros en ese marco es que escribe” el fin de la psicología
concreta “que incluye una crítica ya no conceptual sino política al psicoanálisis donde lo asocia a la burguesía y a la
derecha se integra a la lucha armada e intelectual de la resistencia francesa cuando los alemanes invaden Francia.
Funda dos revistas clandestinas en las que escribe con seudónimos combatiendo al nazismo hasta que en 1942 una
patrulla alemana lo captura y es fusilado quedando trunco todo el viejo proyecto de refundación de la psicología la
crítica marxista la genialidad la vida.
En un coloquio de Bonneval anterior (el de 1947) Lacan inicia una disertación homenajeando a Politzer, habla de
una pérdida lamentable y de todo lo que perdieron los que lo leían evidencia documentada de la influencia de
Politzer en Lacan ya señalada por varios autores en relación a su trabajo sobre el caso Aimée en 1932 y en el
96
OM
inconsciente por la realidad del lenguaje, objeto de la lingüística el segundo problema que discute es si el campo
del inconsciente es asimilable al campo del sentido es decir si es viable la tesis de la inmanencia del sentido de
politzer o y ahí va la respuesta si debe ser reubicado el realismo del inconsciente en términos de la primera tópica
freudiana pensando los sistemas contrapuestos delimitados por la represión originaria. Por realismo del
inconsciente Laplanche entiende una realidad escindida completamente del campo de la conciencia y retorna a
Freud como la enseñara Lacan recuperando la idea, de la represión originaria, la división entre sistemas para
.C
considerar el primer modo de la expresión en su recorrido el inconsciente es una realidad otra y antes que estar
estructurado como un lenguaje, es condición del lenguaje lo atraviesa y se hace presente en el disruptivamente.
Este constituye el primer esbozo de recepción posterior en Argentina por Silvia Bleichmar ya con sustentos material
DD
en la clínica de niños para proponer la represión originaria como real y no va como mítica.
En un mismo movimiento entonces Laplanche discute con Politzer y planta una diferencia con Lacan echando el
ancla en Freud para ambas cosas en un momento en el que Lacan acaba de inaugurar uno de los giros cruciales de
su obra la vía ligada a la recepción de la lingüística de Saussurre y la propuesta estructuralista de Levi-Strauss. Para
Laplanche la tesis del inconsciente estructurado como un lenguaje implicaba el riesgo de un reduccionismo del
LA
inconsciente a lo lenguajero, sobre todo porque también se perdería allí la concepción freudiana del lenguaje, la
idea de que en el inconsciente las cuestiones del lenguaje se descomponen de que se pierden la referencia de
proveniencia y devienen representación cosa razón por la cuál a partir de allí señalará siempre la diferencia entre
un lenguaje freudiano y un lenguaje lacaniano.
FI
Veamos cómo caracteriza este momento Elizabeth Roudinesco: “La ponencia es la viva imagen de la tormenta que
se avecina tumultuosa cómo un océano de Turner”. Si Leclaire sostiene la tesis del inconsciente-lenguaje a través
de un ejemplo clínico sorprendente Laplanche por el contrario se separa de la hipótesis lacaniana, afirmando la
idea de que el inconsciente es según él la condición del lenguaje. El conjunto del trabajo tiene un hermoso aire
teórico y Lacan, después de la segunda escisión no volverá jamás a encontrar en sus discípulos un tono de discusión
tan libre de la pesadez que él mismo contribuyó a instaurar”.
Partiendo de un homenaje a Politzer, Laplanche se plantea el asunto de saber si el inconsciente es del orden de un
sentido o de una letra en el primer caso, según la perspectiva polizeriana el inconsciente tendría sólo un contenido
y daría fe de la verdad de un sujeto en primera persona mientras que en el segundo caso, con el enfoque freudiano
sería una entidad distinta interpolada a partir de las lagunas del discurso consciente.
El autor elige la vía vienesa y luego valiéndose de un simple cálculo fraccional aplica el proceso de represión la
fórmula lacaniana de la metáfora.
En otoño de 1960 Lacan se niega a discutir las tesis de Laplanche lleva el agua a su molino y se conforma con lucir
lo más vistoso de su doctrina. Bonneval es para él un acontecimiento político. El éxito del informe de los alumnos
debe ser útil al lacaniano éramos los portaestandarte escribe Laplanche... quedé bastante decepcionado en aquel
97
OM
formó de pies a cabeza siente que hay ahí como una rampa por la que podría emerger de él. Hay que leer ese librito
sus páginas mordaces sobre la psicología especialmente la universitaria, dan paso extrañadamente a un
procedimiento que de alguna forma, le lleva de vuelta a ella. Pero lo que le permitió encontrar algo que le daba
esperanza de emerger de esta psicología es que puso el énfasis es esto nadie lo había hecho hasta su época que lo
esencial del método freudiano para abordar las formaciones del inconsciente es fiarse del relato. Se subraya así
este hecho de lenguaje del que todo a decir verdad hubiera podido partir.
.C
Habían pasado exactamente 10 años mucha agua había corrido bajo el puente y sin embargo la disputa seguía
vigente y politzer ya era una herramienta un arma el caballo de Troya de una contienda entre dos referentes del
psicoanálisis francés que sería recepcionada años más tarde en Argentina de un modo que aún requiere ser
DD
estudiado en profundidad por ahora me interesa concluir señalando la impronta establecida por la obra de Politzer
cuya función fue del orden de lo originario en el sentido de dar origen a hipótesis centrales tanto de Laplanche
como de Lacan. En efecto ambos forjaron en parte determinante tanto sus tesis sobre el inconsciente como el
rumbo siguiente de sus investigaciones a partir de una exigencia de trabajo la de dar respuesta a aquella crítica de
los Fundamentos construidas con toda la irreverencia de la imaginación radical politzeniana, que hoy sigue brillando
LA
98
99
WINNICOT, DONALD (1987) EL GESTO ESPONTANEO (CARTAS ESCOGIDAS COMPILADAS POR ROBERT
RODMAN)
OM
En primer lugar, no hay muchas personas creativas en la Sociedad con ideas personales y originales.
En segundo lugar, pienso que en correspondencia con mi deseo de decir cosas a mi modo hay algo de parte suya, a
saber, la necesidad de que todo sea formulado en sus propios términos.
Lo que yo quería es que hubiera algún movimiento de su parte en dirección al gesto que hago en este artículo. Es
un gesto creativo y no puedo establecer ninguna relación a través de este gesto si no hay alguien que salga al
encuentro. Pienso yo quería algo que no tengo ningún derecho a esperar de su grupo y que realmente tiene la
.C
naturaleza de un acto terapéutico, algo que no pude obtener en ninguno de mis dos largos análisis. No hay duda
de que mi critica a la señora Riviere no solo era una crítica sincerada basada en la observación objetiva, también
estaba coloreada por el hecho en este punto que fallo que su análisis fallo conmigo.
DD
Pienso que la obra suya sea reenunciada por personas que hagan descubrimientos a su manera y que presenten lo
que descubren en su propio lenguaje, así se mantendrá vivo el lenguaje. Si usted estipula que su lenguaje debe ser
usado para la enunciación de los descubrimientos de otra gente, el lenguaje se convertirá en lenguaje muerto, como
ya se convirtió en la Sociedad.
Quizás el peor ejemplo sea el artículo de C, en el que simplemente paso de boca en boca de lo que ahora se llama
LA
contenido Kleniano sin transmitir la impresión de que aprecia los procesos personales del paciente.
Lo que me preocupa es algo que considero más importante que este artículo mío. Me preocupa este modo de
presentación de (set up) que podría llamarse kleniana y que a mi juicio es el verdadero peligro para la difusión de
su obra. Sus ideas solo perduraran en tanto y en cuanto sean redescubiertas y reformuladas por personas originales
dentro y fuera del movimiento psicoanalítico. Es necesario que tenga un grupo en el que pueda sentirse como en
FI
su casa. El peligro es que el circulo se desarrolle hasta convertirse en un sistema basado en la defensa de la posición
ganada por el autor original, en este caso usted. Freud vio el peligro de esto. Usted es la única capaz de destruir
este lenguaje kleniana y klenismo y todo esto con un propósito constructivo. Si no lo destruye este fenómeno será
atacado en forma destructiva. Inicia su ataque la Señora Riviere en su introducción, por otra parte presenta la
cuestión en palabras que pueden ser citadas por personas que no son enemigas de sus ideas, pero si enemigas de
los sistemas. La oración de la señora Riviere da la impresión de que hay un rompecabezas del cual existen todas las
piezas; el futuro consistirá en ordenarlas.
El hecho de que toda comprensión ulterior como la que usted ha aportado con su obra no lleva a ningún
estrechamiento del campo de la investigación. Su obra nos ha hecho saber que las psicosis serán un día
comprendidas en términos psicológicos. No es ninguna deshonra que el psicoanálisis, incluso representado por
usted misma sea capaz de formular una enunciación clara acerca del motivo por el cual el niño moja la cama; que
la psicología de la delincuencia no haya sido abordada por la Sociedad, pues sus claves principales faltan, y que
usted escoja a los pacientes con propósitos de enseñanza y también para la labor terapéutica.
100
OM
Mi sugerencia es que sostener que no es solo verdad los grupos A y B eran esenciales 10 años atrás y que la
adopción de estos grupos salvo a la Sociedad de la escisión, sino también que en la actualidad ha cesado la razón
de este ordenamiento, es decir que no hay peligro que sean expulsados los seguidores de A. Freud. Tampoco es
cierto que uno u otro grupo tengan probabilidades de irse; la Sociedad se ha avenido al hecho de que existen
discrepancias científicas que se aclaran con el tiempo y que también aparecen discrepancias nuevas.
Quiero hacer aquí un comentario, que existen una leve diferencia en la formación de los grupos. En el caso de los
.C
colegas y amigos de la señora Klein ya sea por azar o por otra causa, la inclusión en el grupo depende del hecho de
haberse analizado con ella. La única excepción es la señora Riviere. En el caso de los seguidores de la señora A.
Freud se vincula con el tipo de educación y que ocurre que fija límites menos rígidos. Menciono esta diferencia
DD
entre los dos grupos porque produce sus propias complicaciones y contribuye a la falsa visión que tiene el recién
llegado al psicoanálisis cuando se entera que hay dos grupos.
Considero de importancia vital para el futuro de la Sociedad que ustedes disuelvan los grupos. Nadie puede hacerlo
salvo ustedes.
Queda en pie la cuestión de que la Sociedad solo tiene sentido en la actualidad si sirve de base para una Sociedad
LA
Científica en desarrollo que continuara sirviendo a la causa de la ciencia y el estudio de la naturaleza humana.
muy intolerante al respecto. En verdad sabrá lo que quiero significar si le digo que primero era necesario que la
Sociedad hiciera un pedido oficial a un miembro de la Societe Psychoanalytique de Paris. Creo que esto ahora ya ha
sido arreglado y que alguien vendrá a darnos una conferencia, tras lo cual quedaremos en libertad de invitarlo a
usted. Lamento que tenga que haber sido dispuesto de este modo, pero también lamento la división del
psicoanálisis francés y deseo que vuelvan a unirse. Temo que el malestar haya aumentado a tal punto que ya no
pueda corregírselo, pero desde mi punto de vista las personas que se hayan a uno y otro lado de la controversia
siguen siendo humanos que luchan por algo que cada cual cree que es lo bueno.
101
OM
había interesado por la medicina psicosomática y la endocrinología se reunía con un grupo de personas, que muchos
de los cuales no eran médicos para leer y discutir la obra de Freud.
Rascovsky fue presentado por Pichón Riviere los dos mantenían relación con un circulo de artistas de vanguardia
que tenían interés en el psicoanálisis. Riviere y su esposa Aberastury comenzaron a participar de las reuniones de
Rascovsky. Este grupo se fue ampliando y más tarde cuando se creó la asociación fueron admitidas como
integrantes y posteriormente llegaron a la jerarquía más alta de la profesión analítica como miembros didactas.
.C
En los comienzos los miembros del grupo no consideraban el psicoanálisis como una profesión. Riviere era el único
que tenía conexiones con la psiquiatría. El psicoanálisis se vivía como una pasión intelectual. Rascovsky utilizaba
terapias de orientación psicoanalítica para tratar a niños obesos. Su cuñado quien era abogado (Wenceblatt) veía
DD
una aplicación del psicoanálisis a la criminología.
Riviere nacido en Suiza emigro con su familia que se instaló en Corrientes, más tarde se mudó a Buenos Aires para
estudiar y mientras concurría a la universidad se conectó con el ambiente de la bohemia porteña y de los artistas
de vanguardia. Fue un psiquiatra joven que se interesó por el sistema público de asistencia psiquiátrica. Su carrera
se desarrolló mediante la tutela de Bosch.
LA
Aberastury pertenecía a una familia de intelectuales de descendencia vasca. Uno de sus hermanos Federico había
estudiaba medicina y no termino sus estudios, pero se interesó por el psicoanálisis y publico diversos artículos sobre
el tema en revistas de medicina. El ejemplo de Federico muestra esa “zona gris” ocupada por la psicoterapia en los
márgenes de la profesión médica. Pedro otro hermano, era abogado y se interesó por el psicoanálisis y comenzó a
participar del grupos de Rascovsky.
FI
En 1938 Garma emigro a Buenos Aires. Era un psiquiatra que había completado su formación psicoanalítica en
Berlín bajo la dirección de Reik. Luego en España se empleó como experto forense en el tribunal de menores de
Madrid. Cuando estalló la guerra Civil Española se mudó a Francia y estableció relaciones con la comunidad
psicoanalítica parisina. En parís conoció a Celes Cárcamo un médico argentino que estaba realizando su formación
psicoanalítica. Cuando llego a parís ya era reconocido por círculos psiquiátricos locales. Era la única persona que en
Argentina había completado los requisitos para la formación psicoanalítica establecidos por la IPA. Por tanto llego
a Argentina portando credenciales psicoanalíticas indiscutibles. En 1939 Cárcamo se instaló definitivamente en
Argentina.
Desde su arribo tanto Garma como Cárcamo recibieron una cálida bienvenida de parte de las figuras más
destacadas de la psiquiatría argentina. Comenzaron a publicar en las revistas de psiquiatría más importantes de
Argentina. Participaban de congresos y daban conferencias en distintas sociedades médicas y criminológicas. En
1941 la revista de Psiquiatría incluyo al psicoanálisis como una nueva categoría en su sección de reseñas
bibliográficas. Garma se convirtió en una presencia relevante dentro de la revista Index en la cual Riviere era uno
de sus editores.
102
OM
“silvestre” rehusaban someterse a los requerimientos de la a IPA: el análisis didáctico, extremadamente costoso en
términos de dinero y tiempo.
Finalmente en 1942 se creó la APA. Si bien los miembros fundadores tenían título médico, la APA también aceptaba
en sus orígenes miembros no médicos tales como las esposas de los fundadores.
.C
En la década del 20 la IPA había logrado imponer reglas estrictas para la formación de psicoanalistas. La formación
analítica era muy costosa en tiempo y dinero y rigurosa. Los requisitos impuestos por la IPA para un tratamiento
psicoanalítico incluían 300 horas de análisis didáctico y aprobación de seminarios. Luego de esto se lograba ser
DD
miembro adherente de la asociación y con el pasar de los años de práctica y trabajos teóricos pueda ser admitido
como miembro titular. El mayor cargo jerárquico consistía en ser elegido miembro didacta, es decir aquel analista
autorizado a formar a otros aspirantes psicoanalistas.
Las asociaciones psicoanalíticas cuentan con los institutos de formación donde se dictan los seminarios. Asi las
asociaciones psicoanalíticas no solo se convirtieron en organizaciones profesionales sino también que monopolizan
LA
1961 solo existían 17 analistas didactas para atender a los 166 miembros de la APA. La escasez además elevaba los
precios, los honorarios eran muy altos y candidatos no podían ejercer el psicoanálisis cuando se estaban formando.
Garma propuso que los mismos pudieran atender pacientes privados a tarifas no reguladas durante su formación.
A diferencia de otras profesiones, la práctica del psicoanálisis no estaba regulada legalmente. Los títulos de las
asociaciones no cuentan con un soporte legal. Algunos países han limitado la práctica a los médicos y en ciertos
casos a los psicólogos o trabajadores sociales. Durante los primero años de existencia de la APA la práctica de la
psicoterapia no estaba legislada en la Argentina. En 1954 el ministro de salud la reglamento limitándola a los
médicos.
En sus comienzos la APA también intento establecer vínculos con los médicos, a diferencia de los Estados Unidos
no iba a ser dentro de la profesión médica donde el psicoanálisis argentino estaba destinado a florecer. Luego de
la fundación de la APA, los psicoanalistas en general se mantuvieron apartados del establishment de los médicos.
Hasta la década del 50 rara vez participaban en conferencias organizadas fuera del circuito psicoanalítico y luego
de la salida de la Revista de Psicoanálisis en 1943, en contadas ocasiones aparecieron sus trabajos en publicaciones
médicas. En 1944 la sección psicoanálisis de la Revista de Psiquiatría y criminología se redujo y desapareció. De la
103
OM
.C
DD
LA
FI
104
En 1936 Claparade en un artículo dedicado a la psicología funcional decía: “… aparecieron las psicologías de 1925 y
las de 1930: conductismo, la reflexología, la psicología dinámica, el psicoanálisis, la psicología de la reacción. Son
trabajos interesantes pero prueban que nuestra ciencia está atrasada. No hay varias físicas, varias químicas del
mismo modo no hay, o no debería haber más que una sola psicología”.
¿Las de 1936 son las mismas que las de 1947? Las psicologías llaman la atención por su multiplicidad, se enfrente
uno con su objeto, método o doctrina. Sin embargo el panorama no es igual, el psicólogo de 1947 se encuentra en
una posición más favorable para discernir que es o lo que debería ser la unidad en las ciencias.
Frente a esto se puede recurrir a dos métodos:
OM
2) Aislar ciertas actitudes dominantes.
Nos preguntaremos cuales eran entre 1930 y 1940 las preocupaciones epistemológicas y doctrinales de los
psicólogos que intentaban reflexionar acerca de la ciencia. El dilema se resume en ciencias de la naturaleza o
ciencias del hombre. Así se puede definir un humanismo y un naturalismo psicológico.
HUMANISMO NATURALISMO
CONCEPCION DE .C
Los hechos psicológicos son conciencias, en las
que se leen las vivencias del otro. Se concentra
sobre la existencia vivida.
Tiende a eliminar la conciencia y tratar
los hechos psicológicos como cosas,
este cosismo encuentra su forma en el
DD
LOS HECHOS conductismo de Watson. El objeto de la
PSICOLOGICOS psicología es la conducta en lo que se
presenta como exterior y material.
LA
RELACION ENTRE EL El todo es anterior a las partes. La anterioridad de los elementos de las
TODO Y LAS PARTES leyes elementales.
LOS HECHOS síntesis limitadas que sirven para comprender naturaleza y se expresan mediante
PSICOLOGICOS más que para explicar. relaciones cuantitativas; es decir
reducirlos a componentes más simples
y de número limitado.
FINALIDAD Y Señala su importancia el mundo del ser viviente Rechaza la finalidad y los valores en
VALORES es siempre un mundo de valores. razón de sus implicaciones subjetivas.
105
OM
lo tanto sea posible determinar mediante los hechos quien tiene razón y quién no. Las proposiciones de la seria
humanista representan una reacción comparada con las proposiciones de la serie naturalista: el principio de la
totalidad se opone al atomismo psicológico, la comprensión a la explicación, el inconciente a lo fisiológico, el
funcionalismo al mecanismo.
Es preciso admitir que no nos enfrentamos con posiciones irreductibles y que el choque de principios corresponde
a la historia de las ideas a un movimiento dialectico que no es otra cosa que el esfuerzo colectivo de los estudios
en busca de la verdad.
.C
En el plano de la historia de la ideas existen fuertes razones para pensar que el psicólogo se encuentra en una
situación abierta, en un conflicto en vías de superación y no en una situación cerrada como sucedería en el caso de
DD
elegir entre humanismo y naturalismo. Todo ello se comprueba si se definen y comparan las maneras de trabajar
que tienen los psicólogos.
Podemos pasar rápidamente por los prácticos y los teóricos para considerar dos grandes maneras de abordar los
problemas psicológicos: la del experimentalista y la del clínico.
La psicología experimental y la comparada se hallan en mejor posición para asegurar la unidad de la psicología y su
LA
integración son las demás ciencias. Solo una psicología comparativa puede ser general; por derecho, la psicología
de los seres humanos no tiene más importancia que la de un animal, la comparación de los animales permite
comprender mejor a los hombres. Y por otro lado recurrir a los animales permite el empleo extensivo de los
métodos experimentales, introduciendo un rigor de las ciencias naturales.
FI
Las limitaciones del método experimental y comparativo están determinadas por la dificultad de tratar en esa forma
a las conductas humanas.
Pero el estudio experimental directo de esa conducta humana concreta es mucho más laborioso, solo pueden
controlarse artificialmente, poco se puede esperar de la experimentación. Se pensó entonces y se piensa mucho
todavía en la existencia del hombre en el mundo pertenece al dominio de la literatura, durante mucho tiempo la
psicología de la conducta humana permaneció tributaria de la literatura.
Aunque existen trabajos experimentales, la psicología científica de la conducta humana concreta sigue
perteneciendo ante todo al dominio de la psicología clínica.
El termino psicología clínica, no quiere decir psicología patológica. La humanidad del objeto le es menos específica
que el modo de ser y reaccionar de un hombre concreto y completo frente a una situación; intentar establecer su
sentido, la estructura, la génesis, descubrir los conflictos que la motivan y los pasos que tienden a resolver
conflictos.
El experimentador y el clínico operan de modos diferentes para lograr un mismo objetivo: controlar las condiciones
de la conducta. El primero deja afuera el conjunto de las condiciones y maneja una variable independiente. El
segundo constituye el conjunto de las condiciones, lo que le interesa es el ser humano como portador de un
106
OM
Preguntémonos solamente si una definición del psicoanálisis puede intentarse fuera del marco de la psicología
clínica de la conducta humana.
Solo se tendrá una idea incompleta de la psicología de la clínica hasta que no se hayan definido sus relaciones con
la psicometría. Método clínico y método de los test (psicométrico) se oponen:
.C
El clínico ayuda a ajustarse a la situación y se esfuerza
por acomodarlo a su modo de actuar.
Ante diferentes sujetos emplea las mismas pruebas
presentadas del mismo modo.
DD
Observa el conjunto y los detalles de las reacciones Anota de modo uniforme en condiciones tales que
del sujeto en una situación. todos los técnicos puedan llegar a resultados
idénticos sin interpretar del mismo modo cualquier
LA
resultado.
Se refiere a tipos cualitativos de naturaleza ideal. Evalúa los resultados numéricos con referencia a una
escala medida que se establece sobre sujetos del
FI
Sea psicométrico o clínico el test no proporciona más que un dato parcial. Le corresponde a la clínica darle su
ubicación y descubrir el sentido de sus datos. Las relaciones de la clínica psicología y la de los test son comparables
con las de la medicina clínica y los exámenes de laboratorio: este aporta una respuesta a la cuestión planteada por
la clínica y la clínica es la que despeja el sentido de esta respuesta. Toda investigación o aplicación psicológica
concreta recurre al espíritu clínico. Inversamente la psicología clínica aumenta su eficacia al armarse de test
únicamente así el clínico y el psicotécnico podrán reunirse y colaborar.
Resulta entonces que experimentación y clínica no solo pueden reunirse sino que además prestarse apoyo mutuo.
¿Qué significa el conflicto entre experimentalistas y clínicos? En el plan de unificar la psicología, no puede más que
corresponder a más que a un momento superado en la historia de las ideas. Este conflicto era inevitable. La
psicología se ha escindido en varias disciplinas, los psicólogos diferían en su formación e intereses, pero no hay un
hecho real que pueda invocarse a favor de una incompatibilidad radical.
107
OM
adapta al estudio de la conducta humana concreta.
No solo la psicología experimental y la psicología clínica se complementan, sino que existe una convergencia, tanto
una como para la otra. Pues la psicología es la ciencia de la conducta esta entendida como el conjunto de respuestas
significativas mediante las cuales el ser viviente en situación integra las tensiones que amenazan a la unidad y el
equilibrio del organismo.
El conflicto entre psicología experimental y psicología clínica es un momento superado de la historia de la psicología.
.C
DD
LA
FI
108
El objetivo del texto es mostrar cómo se fue modificando, en la Argentina, la relación entre psiquiatría, psicoanálisis
y psicología en el pasaje de la higiene mental a la salud mental, a lo largo de cuatro décadas. Luego de un inicio
ligado a sociedades y publicaciones afines a la higiene mental, Pichón-Riviére, terminaría promoviendo una
articulación de las distintas “disciplinas psi” con las ciencias sociales, cercana a las nuevas concepciones que
acompañaron el surgimiento del movimiento de la salud mental.
INTRODUCCION. Luego de la caída del paradigma heredo-degenerativo que había dominado gran parte del siglo
XIX, las causas de la patología mental comenzaban a situarse del lado del medio, en términos adaptativos. Así, la
higiene mental comenzaba a hacer énfasis en las condiciones ambientales de la enfermedad. En este marco, para
OM
evitar la aparición de enfermedades mentales, era necesario apelar a medidas profilácticas de tipo inespecífico,
prestando atención a las condiciones de habitación y de alimentación, promover el ejercicio físico y el deporte,
entre otros, que contribuían a una vida saludable. Esto es considerado un sesgo por el cual la higiene mental se
termina confundiendo con higiene pública.
La enfermedad mental admitía entonces ciertas diferencias de grado, lo cual hacía que las afecciones menos
importantes pudieran ser tratadas de forma ambulatoria, sin necesidad de hospitalización, recomendando estos
.C
tratamientos para los alcohólicos, neuróticos y formas leves de la locura. Sin embargo, el higienismo mental nunca
llegó a cuestionar los asilos, sólo limitó sus indicaciones terapéuticas, abogando por mejores condiciones de
internación.
DD
La higiene mental en Argentina, siguiendo la tradición francesa, se había desarrollado directamente en la esfera
pública, en el marco de programas y acciones del Estado. Esto en oposición a la norteamericana, que surge en la
iniciativa privada con financiamiento igualmente privado.
LA HIGIENE MENTAL ENTRE FRANCIA Y ARGENTINA. El mayor impulso de la higiene mental llegó a la Argentina a
LA
partir del impacto producido por la nueva tradición que planteó la “Liga de Higiene Mental” de Francia, la cual
solicitaba la creación de servicios abiertos para “psicópatas lúcidos y no agresivos”. Fue Toulouse (integrante de
dicha Liga) quien, en 1922, inauguró el Centro de Profilaxis Mental del Departamento del Sena.
LA LIGA ARGENTINA DE HIGIENE MENTAL Y LA REVISTA PSICOTERAPIA. Esta Liga fue creada en 1929 y dentro del
FI
grupo fundador cabe destacar la figura de Gonzalo Bosch. Bosch, a su vez, no pudo escapar a las preocupaciones
eugenésicas que estaban a la orden del día; y es en este sentido que en 1933 fue nombrado vicepresidente de la
Asociación Argentina de Biotipología, Eugenesia y Medicina Social.
Frente a los fantasmas de la degradación de la raza, los higienistas se presentaban como los guardianes de un nuevo
orden, de una moderación “saludable” apoyada en principios científicos. Fue en este marco que, en 1931, nace la
Asociación de Biotipología, Eugenesia y Medicina Social (nombrada previamente), en la cual cohabitaban fascistas
antisemitas con psiquiatras de ideas liberales y educadores laicos.
ENIQUE PICHON-RIVIERE Y SUS INICIOS EN EL AMBITO DE HIGIENE MENTAL. Pichón-Riviere era psiquiatra y
psicoanalista, devenido psicólogo social. Terminaría transformándose en el representante de una psicología de base
psicoanalítica que se implantó en la sociedad incluso más allá de la institución analítica y de la universidad. La
trayectoria de este psicoanalista entre los años 30 y 60 sirve para ilustrar el pasaje de la higiene mental a la salud
mental en Argentina.
(Dagfal realiza una descripción de la vida de Pichón-Riviere desde de su infancia que no me pareció relevante para
el resumen)
109
PICHON-RIVIERE Y LA FUNDACIÓN DE LA APA. A finales de los años 30, tal autor comenzó a frecuentar a Arnaldo
Racovsky y con él conformaría el grupo local que posibilitó la creación de la Asociación Psicoanalítica Argentina a
finales de 1942.
OM
El encuentro de Pichón-Riviere con el psicoanálisis se dio de manera bastante particular. En 1938, siendo ya jefe del
servicio de admisión del Hospicio de las Mercedes, emprendió la tarea de formar y sensibilizar a los enfermeros,
con el fin de mejorar las condiciones de vida de los pacientes. Para eso, los reunía en grupos, con el fin de discutir
los distintos casos a la luz de las concepciones psiquiátricas modernas, con resultados asombrosos. En 1945, su
servicio fue privado de enfermeros por razones políticas, y por lo tanto, tuvo que enfrentar ese problema utilizando
como enfermeros a los pacientes en “mejor condición”, a quienes formó en la técnica de grupos. Para Pichón tanto
.C
esta experiencia, como el Asilo de Torres tomarían más tarde un valor fundacional.
De este modo, habría sido su voluntad reformadora y progresista la que lo habría llevado a cuestionar la lógica
asilar.
DD
En 1947, logró crear un servicio específico para adolescentes psicóticos en un hospicio, en el que habría comenzado
a utilizar técnicas grupales, siendo esta una experiencia innovadora. Sin embargo, ese mismo año debió renunciar
a la dirección del servicio, que terminó siendo cerrado. La experiencia del servicio de adolescentes llegó a su fin,
pero entró en el imaginario de los psi argentinos como el origen mítico de una tradición grupal autóctona.
El alejamiento de Pichón del hospicio dio inicio a la creación de una serie de instituciones que él mismo dirigía y
LA
que, en un principio, funcionaba como complemento o extensión de la APA. Al mismo tiempo, seguía creciendo
dentro de la APA. Llegó a ocupar el cargo de presidente entre 1951 y 1953.
Si bien los orígenes de Pichón estaban más cerca de Jaques Lacan, su futuro estaría más ligado a una mezcla de
kleinismo con psicología social lagachiana.
FI
Después de las catástrofes de Hiroshima y Nagasaki, era necesario volver a pensar los fundamentos mismos de la
vida en sociedad. En ese contexto, el movimiento de la salud mental nacía gracias al impulso moral del cambio y la
libertad, basada en las posibilidades humanas de aprendizaje, tanto en los grupos como en las instituciones y en la
sociedad en su conjunto. Cambio, libertad y aprendizaje serían entonces algunas de las claves para comprender la
salud del hombre, quien a la luz de las ciencias humanas, ya no podría ser considerado fuera de su contexto
sociocultural.
LA PSICOLOGIA SOCIAL PICHONIANA Y SU RELACION CON LA SALUD MENTAL. Entre los golpes de estado de 1955 y
1966, tuvo lugar una asombrosa renovación social y cultural, en el seno de la cual las universidades se
democratizaron. Entre 1957 y 1959, se crearon carrera de psicología en cinco universidades nacionales (Buenos
Aires, Córdoba, La Plata, San Luis y Tucumán). Comenzó entonces la historia de la psicología como profesión. Al
mismo tiempo, el psicoanálisis dejaba de ser patrimonio exclusivo de algunos médicos, para insertarse en ámbitos
diversos, desde los hospitales públicos hasta la carrera de psicología. Y en cuanto a la psiquiatría, aceleraba
rápidamente su proceso de institucionalización.
110
OM
Y es aquí donde se enlaza con la segunda teoría de Pichón-Riviere que es la de los grupos operativos. El enfermo
era aquel que asumía un rol patológico, que en realidad le era atribuido por los miembros de la familia. Era entonces
el “emergente dinámico” de una configuración vincular colectiva. El líder, el portavoz y el chivo emisario constituían
roles inherentes a la vida grupal. Podían ser desempeñados de manera sucesiva por miembros diferentes, en el
marco de un juego de atribución y asunción de roles concebido en términos de identificaciones proyectivas e
introyectivas. En el juego de roles había siempre un depositario, un depositante y algo depositado. La patología
.C
residía en la cristalización de un rol, en la imposibilidad de desmarcarse de las funciones establecidas por los otros.
En cierto modo, podría decirse que la consecuencia de la teoría del vínculo fue la teoría de los grupos operativos.
En este sentido, no puede subestimarse la importancia de lo que el autor denominaba “esquema conceptual,
DD
referencial y operativo” (ECRO, otro concepto que está mejor explicado en “Teoría del Vínculo”), el cual se
modificaba en contacto con la realidad, confrontándose a lo existente, lo cual daba lugar a nuevos “emergentes”,
sobre los que había que trabajar. La extensión de este concepto a los grupos hacía que la primera “tarea” colectiva
fuera la de construir un ECRO común, para poder actuar con eficacia.
En 1958, el IADES bajo la dirección de Pichón, emprendió la tarea de probar los grupos operativos a gran escala. Se
LA
planificó una ambiciosa intervención en la ciudad de Rosario, bajo la forma de laboratorio social. Se trataba de
“movilizar” a tantas personas como fuera posible, en un encuadre estrictamente implementado por una veintena
de coordinadores. Finalmente, la experiencia tuvo ligar en la Universidad Nacional del Litoral, en las facultades de
Economía, Filosofía y Letras y Medicina, con la colaboración del Departamento de Psicología y el Instituto de
FI
Estadística.
Si a fines de los años 40 los grupos de enfermeros conformados por Pichón habían constituido el mito de origen de
un enfoque innovador de la cuestión asilar, “la experiencia de Rosario” cumpliría esa misma función respecto de
una nueva psicología social.
CONCLUSIONES. Hoy en día, se pueden ver tres disciplinas (psicoanálisis, psiquiatría y psicología) profesionalizadas
e íntimamente relacionadas en el marco del movimiento de salud mental. La psicología social pichoniana es un fiel
exponente de esta interrelación, que reclamaba un abordaje interdisciplinario.
Los dos golpes militares sucesivos (el de 1966 y el de 1976) implicaron un sucesivo repliegue de los “practicantes
psi” hacia el ámbito privado. En este marco, es comprensible que toda práctica de tipo grupal o colectivo fuera
considerada sospechosa e incluso peligrosa, mientras que el consultorio privado se constituía en una suerte de
refugio. De este modo fue produciéndose una paulatina privatización de las “actividades psi”. En este contexto se
produjo el fallecimiento de Pichón-Riviere, en 1977.
111
El objeto central de las investigaciones psicológicas es el campo psicológico, donde se establecen las interacciones
entre la personalidad y el mundo. El concepto de situación es importante porque connota las modificaciones en
que el medio es el agente, en tanto que el concepto de conducta connota las modificaciones en que la personalidad
es el agente.
El objeto mismo de la psicología es el campo de la interacción. Antes se consideraba que este campo era hueco o
vacío a causa de la dicotomía que la psicología clásica establecía entre el individuo y la sociedad. Pichón se plantea
trabajando precisamente ahí, en el sitio donde antes existía una dicotomía entre individuo y sociedad.
El campo psicológico según Lagache ofrece al investigador cinco clases principales de datos: 1) el contorno, definido
como el conglomerado de situaciones y de factores humanos y físicos que están en permanente interacción. La
OM
situación interpersonal estudiada profundamente y que sirve para todo orden de investigación es la situación
analítica; 2) la conducta exterior espontánea o provocada; 3) la vivencia, o sea la experiencia vivida, inferida por la
conducta exterior y comunicada verbalmente por el sujeto; 4) la modificaciones somáticas objetivas aparecidas en
una determinada situación; 5) los productos de la actividad del sujeto. De modo que el campo psicológico estudia
el contorno, la conducta exterior, la vivencia, las modificaciones somáticas y los productos de la actividad del sujeto.
En psicoanálisis se ha tratado siempre de señalar que en cierto modo la teoría y la práctica están juntas en
.C
permanente interacción, a través de un proceso en espiral dialéctica. Es decir que teoría y práctica se resuelven en
el campo de la investigación, cualquiera que sea ésta, en el momento mismo del trabajo operacional.
El analista, que trabajando e investigando al mismo tiempo, en el momento anterior a la formulación de una
DD
interpretación recurre al uso de un esquema referencial que denomina esquema conceptual, referencial y operativo
(ECRO), con el cual construye la interpretación sobre la base de la observación de todos los indicios obtenidos en
las cinco direcciones antes señaladas. Con esta esquema y con los indicios señalados, se construye una
interpretación sobre lo que está sucediendo, se le formula al paciente y en el momento en que se formula (es el
acto operacional), ya se hace la síntesis entre teoría y práctica. Este esquema referencial es el instrumento de
LA
trabajo, dinámico y plástico en el sentido de que debe ser rectificado o ratificado en cada momento y en cada pasaje
del espiral.
El autor plantea, a lo largo del texto varias antítesis o dicotomías: normal/patológico (donde las variaciones son
predominantemente cuantitativas); conducta/conciencia (el aporte de Lewin permite demostrar la unidad de
ambos conceptos); consciente/inconsciente; psiquis/soma. Pero por ahí las más importantes o destacadas son las
FI
de individuo/sociedad y la de constitucional/adquirido.
Con respecto a la dicotomía entre individuo y sociedad, el autor plantea que la sociedad está adentro y está afuera,
pero la sociedad que está adentro lo está de una forma particular para cada individuo. Podemos tener en cuenta la
acción del medio sobre el individuo, así como la acción del individuo sobre el medio y esto en un continua espiral
dialéctica
La otra dicotomía, la constitucional y adquirido, Pichón-Riviere va a decir que si no tomamos en cuenta el factor
interno y la manera en que la realidad es vivida por ese sujeto en particular de acuerdo con su historia personal,
estamos ignorando lo fundamental, la reacción particular de ese individuo ante una situación determinada.
Con respecto a las dimensiones de la temporalidad se puede ver cómo en cada acción del sujeto, en cada conducta,
en cada cosa que él hace o dice, en cada momento, están incluidos siempre su pasado, presente y futuro. Y a través
del emergente investigado en el análisis se indaga qué es lo que está condicionando la actitud y la conducta del
sujeto en ese momento. Al autor le interesa contribuir a la investigación de las motivaciones que dirigen la conducta
actual y presente del individuo, y trabajar más en profundidad con una teoría de la conducta. Si se actúa en ese
contexto, se podrá modificar el campo psicológico creando un nuevo campo operacional donde el psicólogo podrá
operar en forma activa.
112
OM
.C
DD
LA
FI
113
La investigación social ha adquirido en los últimos tiempos gran importancia debido a la multiplicidad de hechos
incorporados a su campo de estudio, así como al progreso de sus métodos y técnicas.
Los resultados obtenidos han contribuido decididamente tanto al conocimiento de la sociedad, como a la solución
de agudos problemas. La tarea más o menos explícita que se propone el psicólogo social es el intento de descubrir,
entre otras cosas, cierto tipo de interacciones que entorpecen el desarrollo pleno dela existencia humana. Pero
esto representa sólo un aspecto de los propósitos, pues toma también como objeto de indagación el
descubrimiento de los factores que favorecen aquel desarrollo aludido.
El psicólogo social, para poder operar con eficacia, necesita un largo aprendizaje de su oficio. Es considerado por
su medio de dos manera bien opuestas: por un lado, es desvalorizado, mientras que por otro es sobrevalorizado en
OM
su tarea, con la misma intensidad. Esta situación condiciona tensiones en él, y entre él y los grupos.
El psicólogo social aborda cuestiones fundamentales y, al indagar tanto en individuos como en grupos, debe evitar
conductas de huida como sufrir el influjo de las opiniones corriente de medio inmediato.
Steiner. “De Viena a Londres y Nueva York. Emigración de psicoanalistas durante el nazismo”
Capítulo 1
Las cartas entre Anna Freud y Ernest Jones, aquellas escritas entre 1933 y 1939,centradas en los problemas
.C
generados por la persecución de los judíos y la emigración obligada de los psicoanalistas alemanes y austríacos
Gracias a estas cartas podemos conocer las tácticas que se adoptaban y la habilidad con la que se manejaban los
DD
problemas en PSA en un nivel más general. Estas estratagemas deben verse a la luz del modo particular de
conducción de las instituciones psicoanalíticas y las características que asumieron en este contexto.
Lo que busca el autor es echar luz sobre esta nueva diáspora (dispersión de un pueblo) y los factores que incidieron
en las características que esta asumió. En algunos aspectos, todos estos elementos tendrían efecto sobre la historia
del movimiento psicoanalítico.
LA
Sin embargo cabe recordar que estas cartas son testimonio de un período específico pero limitado y su contenido
no puede considerarse como objetivo o neutral. En consecuencia, es precisa su reinterpretación constante,
sabiendo que una interpretación histórica definitiva no es del todo posible.
En este sentido, recupera los aportes de Bloch, sobre cómo considerar los documentos históricos, ya que incluso su
presencia o ausencia depende de factores humanos. Lo que se pone en juego es el paso de la memoria a través de
FI
una época y la sociedad que lo ha producido. Se trata por lo tanto del resultado de fuerzas ejercidas por las
sociedades históricas precedentes para transmitir una imagen determinada de sí mismas.
De esta manera, contemplando todas estas particularidades del material, Steiner se pregunta qué posibilidades hay
de que las cartas se hayan escrito pensando en publicaciones futuras; con omisiones deliberadas, etc. Concluye que
aquí entra en juego el rol del lector.
Persecución racial, confiscación de bienes y medidas similares llevan tanto a la familia nuclear de Freud como a la
familia psicoanalítica a un torbellino institucional, personal, psíquico, emocional. Cada una de estas familias
psicoanalíticas ya podía contar su propia historia, de diferencias culturales e históricas, con diferentes tradiciones
y enseñanzas. La diáspora sometió a todos a los padecimientos de la emigración, el despojo cultural, la
fragmentación, desorientación y una aculturación más o menos forzosa.
114
OM
Por otro lado, es preciso estar advertidos de la necesidad de abordar la cuestión de la emigración de psicoanalistas
del viejo continente, tomando en cuenta junto a sus características específicas y elitistas, el contexto más general
en que se produjo este desplazamiento y los problemas de que los judíos emigraran de Alemania, Europa del Este,
Austria y los países centroeuropeos, en general a Gran Bretaña y los Estados Unidos.
Vale la pena entender cómo reaccionaron algunos de los principales protagonistas del PSA, ya que la interpretación
que dieron de los sucesos y sus consecuencias determinaron los consejos brindados sobre la coordinación de los
.C
esfuerzos emigratorios, impulsaron el llamado a una acción urgente cuando la situación así lo exigió e influyeron
en la escala temporal de la emigración. También interesa entender algunos de los razonamientos objetivos
subyacentes al hecho de que un psicoanalista buscara refugio en un lugar determinado del exilio y no en otro. Qué
DD
lo llevó a GranBretaña o EE.UU., donde la gran mayoría de los psicoanalistas esperaba encontrar refugio. Deben
considerarse, además, las presiones que sobre los gobiernos de esos dos países ejercían la opinión pública y en no
menor medida, las diversas asociaciones judías existentes en ellos durante esos días.
Hay otro factor: cada uno de los posibles lugares de refugio tenía sus peculiaridades, sus infraestructuras
institucionales y un clima cultural específico. También había diferencias en lo concerniente al PSA entre ambos
LA
países, determinadas por su cultura específica y sus distintas concepciones de la disciplina. Por otra parte, el modo
de desarrollo del PSA no era un reflejo exacto del PSA tal como se lo concebía en Viena o Berlín.
En lo que refiere a Gran Bretaña, Steiner retoma a Anderson, quien señala que una cultura tan tradicional, basada
en perdurables instituciones académicas y científicas, con su tendencia positivista tardía y empirista, tenía atractivo
FI
para cierta categoría de refugiados intelectuales, mientras que los refugiados potenciales que tenían un elevado
compromiso político o provenían de un ambiente marxista, habían apuntado a estados unidos.
GranBretaña fue un país donde la emigración judía fue relativamente tolerada y recibieron trato generoso, aunque
otras fuentes más críticas indican que el antisemitismo tenía bastante difusión en ese país. La situación
socioeconómica de esa década hizo que el gobierno impusiera varias restricciones en materia de políticas
inmigratorias. Sumado a esto, el pertenecer a una categoría específica de profesional liberal, y más si se competía
por el terreno laboral de la medicina, complicaba más las cosas. Sumado a la dificultad para ejercer, estaba el
problema de la falta de pacientes.
115
OM
preocupaciones. Esta expresión suscita la impresión de una familia muy extensa compuesta por criaturas, niños,
hermanos y hermanas mayores y padres cuyo deber es ponerlos bajo su ala. Las personas a quienes se refería en
esos términos no eran sino psicoanalistas adultos que al encontrarse en circunstancias muy precarias, se veían
obligados a volver a una situación de dependencia de Anna, Jones y los norteamericanos.
En cuanto al vocablo “sorge”, que simboliza no solo las muchas angustias de los refugiados, también hace referencia
a las preocupaciones de las personas que estaban en condiciones de ayudarlos a encontrar lugar de refugio, todos
.C
los cuales eran miembros y por lo tanto parte constituyente de la familia psicoanalítica.
Por otro lado, la situación de los emigrantes en Francia era dificultosa, aunque algunos meses después, la situación
para los refugiados no pintaba bien tanto en París como en muchos otros lugares. Londres parecía haber aceptado
DD
de inmediato a algunos de los refugiados alemanes, mientras que en París el comportamiento con los refugiados le
resultaba a Anna bastante decepcionante, aunque aceptaban el ingreso de legos, no podían tolerar el ingreso de
médicos como miembros porque no tenían matrícula francesa. “La principal característica de una asociación
internacional no es acaso la existencia de un lazo internacional por añadidura al sentimiento nacional”, escribía
Anna.
LA
La diáspora había comenzado, sin duda, y arrastraba con ella todas las contradicciones, sentimientos y problemas
que despertarían en tantos países y tantas personas que trataron de ayudar a los refugiados, a menudo tensando
hasta el límite lo que Anna llamaba un “lazo internacional”, por el predominio tan frecuente de muchos intereses
locales y nacionales.
FI
En cuanto a Freud, ya en abril de 1933 Ferenczi intentaba alertarlo a él y su familia a marcharse a Gran Bretaña,
pero pasarían otros cinco años antes de que aquél tomara finalmente una decisión en ese sentido y dejaran atrás
su “prisión”.
En este punto parece necesario precisar una inquietud generalizada por el PSA como institución, y la preocupación
de que su futuro pudiera peligrar si todos sus miembros emprendían una huída repentina. “Partir es una solución
excesivamente fácil y uno deja demasiadas cosas en la estacada. Si es expulsado, entonces no queda otra solución”
La postura asumida por Freud expresaba un escepticismo, y Anna se hacía eco de la actitud de su padre durante los
primeros meses de los nazis en el poder en Alemania “Viena está en calma”. Con gran ingenuidad, sobre la base de
una idea bastante idealistas de la Liga de las Naciones Unidas, Freud añade “Aquí, la persecución legalizada de los
judíos resultaría de inmediato en la intervención de la Liga”.
Al leer esta correspondencia podemos apreciar las dificultades encontradas en el imprevisible clima reinante en
esos primeros meses posteriores al ascenso de Hitler al poder.
116
La clave del impacto freudiano reside en que se dirige, en una única apelación, a médicos y legos, hombres de
ciencia y humanidades. Allí donde ambos grupos han tenido una actitud favorable, la influencia de Freud ha sido
mayor. Sin embargo, en esta apelación dual, la medicina, como representante de la ciencia, jugó el papel decisivo,
y el status del psicoanálisis como ciencia ha dependido casi enteramente de su aceptación por la medicina clínica.
El trabajo del autor postula que el PSA fue más fácilmente aceptado por los médicos en EE.UU que en Europa,
debido al estado de fluidez de las instituciones médicas americanas y a otros factores culturales intervinientes
en el momento. En los años formativos de la década del veinte, el PSA europeo había consolidado una orientación
humanista y de servicio social. Éste carácter quedó suprimido con la transformación del PSA en una especialidad
OM
médica de elite. Al volverse parte de la medicina establecida, el PSA americano formó instituciones más rígidas y
estrechas y creó una teoría que acentuaba el papel de la adaptación y reducía la insistencia freudiana sobre la
agresividad y la sexualidad. Este desarrollo volvió al PSA particularmente vulnerable a los cambios en los intereses
médicos y en los estilos culturales.
Papel social de la medicina el prestigio médico no reposa solo en las necesidades de la comunidad ni en las
organizaciones profesionales ni en sus logros objetivos, lo hace (también) sobre un elemento afectivo que puede
.C
ser incluido en la categoría de “carisma secular”, es decir, el poder de quienes ponen orden en las preocupaciones
centrales de una sociedad. El científico y el médico han heredado algo de los poderes antes asociados a la religión.
Como emergente del tratamiento médico de los trastornos nerviosos y mentales (lo que hoy se llama psiquiatría),
DD
el PSA se orientó a poner en orden y a exponer sus puntos de vista en asuntos primordiales: sexo, familia, infancia,
agresión, sueños. Los psicoanalistas han insistido en presentarse como científicos que buscan establecer
empíricamente una psicología general. Por otra parte, también los simpatizantes legos atribuyeron al psicoanalista
ese doble rol de científico y de guía carismático.
En los primeros años del PSA, la medicina europea estaba ya sólidamente organizada, dividida en especialidades y
LA
con patrones de investigación asentados, ligada a las universidades y controlada crecientemente por el Estado. Por
todas estas razones, permanecía menos abierta a las ideas nuevas y marginales.
En los primeros años de su influencia en EE.UU (1910- 1940), en cambio, la medicina americana estaba entrando
en la fase de organización moderna: los centros de investigación psiquiátricos eran nuevos, las escuelas de medicina
y las normas de habilitación profesional comenzaban a ser rigurosas.
FI
El PSA en Europa emerge como una psicología médica a partir de la práctica privada de Freud en el tratamiento de
las perturbaciones nerviosas, no surge de la investigación universitaria oficial y continua su desarrollo por fuera
de la medicina establecida. Muchos de los primeros psicoanalistas eran legos de disciplinas variadas. Esa
marginalidad respecto de la medicina trajo como consecuencia que los practicantes del PSA deban crear una
clientela voluntaria.
Médicos y legosDesde sus comienzos el PSA encontró a sus seguidores parejamente entre los médicos y los legos.
Tanto en Europa como en EE.UU hubo pacientes agradecidos que jugaron un papel importante como difusores y
patrocinadores del movimiento. Después de la Primera Guerra Mundial, escritores europeos y americanos y otros
intelectuales contribuyeron crecientemente a popularizar el PSA. Pero, esta apelación simultánea a médicos y
legos, se volvió al mismo tiempo una fuente de conflictos. Para algunos legos, los médicos apuntaban a otorgar
respetabilidad a las ideas más audaces de Freud, y para ello buscaban monopolizar la práctica del PSA. Por su parte,
el entusiasmo de los legos era, para los analistas médicos, comprometedor y competitivo. Otros legos sin formación
ocasionalmente se proclamaban a sí mismos psicoanalistas. En la mayor parte de los países no se reconocía al PSA
como una profesión que requiriera licencia, en parte por las disputas entre las escuelas psicoanalíticas y en parte
por la existencia de analistas legos.
117
OM
psiquiatría europea, desde entonces, continuó en un molde somatista y hereditario en investigación y tratamiento.
La actitud dominante de los europeos continuó inclinándose por la fijeza de los rasgos humanos y no por su
maleabilidad psicológica. Por otra parte, también había otras tendencias hostiles al PSA.
Pero a pesar de estos factores, hubo una asimilación considerable e indiscriminada del PSA en la medicina y
psiquiatría europeas. Es posible pensar que de no ser por Hitler, el PSA pudo llegar a ocupar en Austria y Alemania
una posición semejante a la que alcanzó en Inglaterra.
.C
El interés por el PSA que creció entre psiquiatras y psicoterapeutas fue marcadamente ecléctico incorporaban
lo que querían de Freud, sin considerar al PSA como una trama única de teoría y práctica. Se desarrollaron
psicoterapias que incorporaban elementos del PSA.
DD
Los seguidores de Freud desarrollaron su propio sistema privado de prácticas y derivaciones, en Europa, en los
márgenes de la medicina establecida y de los círculos universitarios y, en los veinte, sus propios institutos privados
de formación. Pero el patrón de una actividad privada y voluntaria era más compatible con la medicina
norteamericana que con la europea, por cuanto esta última se socializaba crecientemente. El tratamiento
psicoanalítico no se integró en sistemas de seguridad médica estatal hasta después de la Segunda guerra mundial
LA
(SGM).
InstitutosLos institutos europeos, entonces, establecieron las bases para la instauración del PSA como profesión,
con controles sobre el ingreso, la calificación y la certificación de los miembros. Los institutos marcaron una
diferencia entre la primera generación de pioneros y todas las generaciones analíticas subsiguientes. Los pioneros
FI
se habían seleccionado a sí mismos. Durante un tiempo iniciaron casualmente a otros, puestos en situación de
aprendices. Pero desde 1920 en adelante, los comités de los institutos controlaron la formación; los lazos
emocionales fueron modelados en la relación con los analistas didactas, quienes se convirtieron en una nueva elite
en movimiento. Los primeros textos sistemáticos de PSA surgieron de estos institutos al modo de codificaciones
que respondían a las necesidades de enseñanza. La función primaria del instituto fue la formación y no la
investigación. Cada uno de ellos constituyó una asociación voluntaria de practicantes y candidatos.
En los veinte, los institutos estaban inclinados a un liberalismo de centroizquierda, eran todavía pequeños e
informales. En parte como un reflejo del liberalismo y el socialismo europeos, en parte como consecuencia de la
propia práctica médica en Europa, cada instituto manejaba una clínica con honorarios reducidos. En ese sentido,
los europeos podían proclamar que estaban cumpliendo con el ideal freudiano de extender a los pobres los
beneficios del PSA. Los institutos europeos estaban preocupados por los temas sociales y culturales. Esa tendencia
humanista reflejaba el tipo de reclutamiento que caracterizaba al movimiento europeo.
Es difícil construir un panorama total de la clínica y la práctica privada en Europa. Los pacientes privados incluían
profesionales de clase media alta que pagaban bien por el análisis. Sin embargo, en los 30, el PSA no era todavía
una especialidad de elevado prestigio reconocida por la medicina establecida.
118
EN ESTADOS UNIDOS
Además de proveer un dispositivo institucional más favorable, los EE.UU se hallaban en una posición única para
para operar sobe esa doble apelación del PSA a los médicos y los legos. La interacción entre la cultura científica y
la cultura popular era un rasgo creciente de la vida americana. Ello aseguró que una innovación médica,
especialmente si involucraba al PSA, recibiera rápida y amplia publicidad.
OM
La medicina norteamericana fue más receptiva al PSA porque era todavía relativamente abierta. Sus patrones
de investigación y sus lazos con las universidades y con el gobierno recién se estaban fijando. Su organización
profesional moderna se fue completando entre 1910 y 1940 y empujaba hacia la uniformidad, la especialización, el
status elevado y el monopolio.
El optimismo y el ambientalismo del PSA que iba en contra de las principales corrientes de la medicina europea,
fueron acentuados por los médicos, quienes encontraron en el PSA la más radical de las nuevas terapias psíquicas,
.C
con influencia en la psiquiatría y la neurología.
La prosperidad americana en los 20 y después de la SGM, el rápido crecimiento de una clase media acomodada,
alimentaron la expansión de la profesión psiquiátrica, su clientela privada y sus actitudes subsidiarias. La medicina
DD
se volvía cada vez más próspera, poderosa y conservadora.
Los médicos americanos rehicieron la profesión psicoanalítica. Primero, la volvieron exclusivamente médica y
psiquiátrica en los 20. Luego, en los 30, la transformaron en una especialidad de elite, con una nueva teoría
adaptada al medio norteamericano y con institutos de formación organizados rígidamente.
Los primeros psicoanalistas americanos fueron médicos, y se orientaban a convertir al PSA en una parte integral de
LA
dominaba el abordaje psicológico. Hacia 1930 la psicoterapia psicoanalítica comenzó a ser vista como un
tratamiento promisorio y la formación psicoanalítica a ser considerada como una disciplina importante.
Entre 1920 y 1940, se produjo el surgimiento de la moderna práctica de consultorio en la psiquiatría. Cambiaron
los bajos salarios del hospital público por una práctica privada, urbana y lucrativa. Mientras que la neurología se
convirtió en una especialidad somática, en la nueva psiquiatría de consultorio el PSA proporcionaba un importante
método terapéutico.
En 1930 no existía en EE.UU institutos y los aspirantes a analistas debían buscar su formación sistemática en Europa.
La aparición del eclecticismo fue exacerbada porque un creciente número de psiquiatras y otros médicos adoptaban
psicoterapias híbridas y se llamaban a sí mismos psicoanalistas. En este sentido, el monopolio freudiano del
término, consagrado medicamente en Inglaterra, nunca se estableció en EE.UU. Para los analistas ortodoxos, los
eclécticos aparecían como una amenaza equivalente a la de los practicantes legos. Pero existía una situación más
conflictiva en la medida en que algunos de los ortodoxos y muchos de los eclécticos no habían sido psicoanalizados
ni formados sistemáticamente.
El movimiento norteamericano fue alterado drásticamente por la nueva generación psicoanalítica, una elite que
se adueñó del poder en desmedro de sus mayores. Esta falange había sido formada en los institutos europeos. De
119
OM
en Europa y la amplia cultura humanística europea no sobrevivió en el ambiente médico norteamericano. Esa
estrecha perspectiva americana alentó una ortodoxia igualmente estrecha. Pero, convirtió al PSA en una profesión
bien paga y próspera, prefiriendo la práctica privada a la docencia o investigación.
En ese ambiente no hubo lugar para que echara raíces en los institutos la misión de asistencia social a las masas.
Los pacientes de las clínicas provenían de clase media, hacia los 70 de clases altas. Sin embargo, dese 1910 en
adelante también hubieron psicoanalistas trabajando en clínicas con honorarios reducidos, dispuestos más que los
.C
psiquiatras, a variar el cobro de acuerdo a la capacidad económica del paciente.
En Norteamérica, el PSA venía apareciendo desde 1910 en revistas de circulación masiva y de cultura media,
sobrepasando la divulgación europea y no tan dirigido a un público exclusivo. Esta divulgación se correspondía con
DD
la creciente absorción del PSA en las universidades y escuelas médicas y en disciplinas académicas.
El status ascendente de la ciencia freudiana quedó marcada por la tendencia dominante orientada a hacer del PSA
una psicología del yo. Tendencia que representaba el intento de enfrentar las limitaciones evidentes de la teoría
derivadas de sus fundamentos en la psicopatología. Áreas enteras del funcionamiento psicológico tenían un lugar
reducido en el esquema psicoanalítico, (dominio intelectual, juego, funciones de síntesis, etc.). Los psicoanalistas
LA
confrontaron con los psicólogos académicos en la medida en que se enfrentaron a problemas más amplios de
educación, higiene mental y la personalidad total. La creación de una psicología del yo generalizada representó un
deslizamiento desde un énfasis reduccionista sobre los instintos y el inconsciente hacia una focalización en las
instancias internas de control y, más adelante, en las funciones de la personalidad no neurótica.
FI
En su emigración desde los institutos europeos a América cambiaron dos conceptos centrales de la teoría
psicoanalítica: la agresividad y el yo. Toda enfermedad, es atribuida a los instintos de muerte o sus derivados, son
ignorados los principios lógicos inherentes a la exposición freudiana del principio de nirvana. Se enfatiza el poder
benéfico de Eros, y después del desfile de horrores viene la salvación psiquiátrica. Como se vence al instinto de
muerte? Por hobbies, artesanías, y la rápida intervención del psiquiatra. Aparece un ejercicio de fortalecimiento,
de optimismo y ambientalismo, fe en la educación, control de la ciencia de la mano de Menninger.
Los psicólogos del yo produjeron un aplanamiento sutil y elaborado de la teoría freudiana de la agresividad. En
lugar de ser fuente inexorable de perturbación
La psicología del yo, que se volvió dominante en los 50, representaba algo así como una psicología general que
encajaba con el estatuto establecido del psicoanálisis. La americanización del psicoanálisis, particularmente sus
lazos estrechos con el establishment médico, lo volvieron muy vulnerable a los cambios normativos y
metodológicos, tanto en el nivel profesional como de divulgación. Esos cambios habían producido una crisis en la
psiquiatría y particularmente en el psicoanálisis. Vista en profundidad y en sus consecuencias, esta crisis es análoga
a la crisis histórica que hacia fines del siglo XIX hizo posible la emergencia del psicoanálisis y su posición de privilegio.
120
Durante el período de 1920-1945 Anna Freud en Viena junto a su padre y Melanie Klein en Berlín junto a Abraham
van a crear cada una por su lado una escuela psicoanalítica infantil. Sus investigaciones conducirán a campos
diferentes. Anna trabajaba en las aplicaciones del psicoanálisis infantil en el campo de la educación y la observación.
Aunque se muestra interesada por la cura psicoanalítica en niños, es reticente sobre su existencia, dado los
problemas técnicos y teóricos que considera, en ese momento, insalvables.
Klein, por el contrario, decide desde el principio realizar curas analíticas a los niños.
Los psicoanalistas de la época tuvieron que tomar partido por una o por la otra y rápidamente estas mujeres
formaron escuelas rivales.
Se acusaba a los kleinianos de divergencias lo suficientemente graves de la teoría freudiana como para que éstos
OM
fueran excluidos del movimientos analítico freudiano.
Anna es nombrada miembro de la Sociedad psicoanalítica de Viena en el 22 a los 27 años. En esta época la práctica
del análisis de adultos es imposible para los no-médicos de Austria, por ello Anna se convierte oficialmente en
psicoanalista infantil.
Anna hizo de la observación del niño pequeño uno de los pilares de lo que fue su construcción analítica. Trataba de
completar los conocimientos aportados por las curas. Había que “construir de manera sistemática una psicología
.C
psicoanalítica del niño: integrar dos tipos de datos, los que provenían de la observación directa y los que provenían
de las reconstrucciones operadas en adultos”.
Las producciones del niño se convirtieron en material de observación. De este modo, el juego se convirtió en fuente
DD
de información.
Klein había aparecido en escena del psicoanálisis infantil en el Congreso de Salzburgo en 1924. Anna no responderá
a las declaraciones de Klein hasta 1927 donde abrirá las primeras controversias con Klein rechazando su postura en
la que trata de hallar detrás de cada uno de los gestos en un juego el valor simbólico que éstos pueden tener.
Hoy algunos analistas ingleses que conocieron a ambas afirman en tono de broma que si Anna prefirió a los niños
LA
antes que el psicoanálisis, Klein en cambio se mostró más interesada por el psicoanálisis que por los niños.
Klein afirmará que fue Ferenczi quien la inició en el psicoanálisis, que le enseñó la verdadera naturaleza de éste y
todo su significado.
La obra de Klein resulta de una coyuntura personal e histórica. Personal porque para ser analista al igual que Anna
no le quedó más remedio que ocuparse los niños; histórica porque si bien aborda el psicoanálisis infantil armada
FI
con la teoría de Freud, decide cambiar de perspectiva. El juego del niño es para ella lo mismo que el sueño para
Freud, la vía regia para acceder al inconsciente, a los fantasmas. Su técnica consiste en analizar el juego
exactamente como se analizan los sueños y las asociaciones libres en el adulto.
Freud llegó a decir que lamentaba que la Sociedad británica y su presidente Jones no fueran aptos para traducir y
publicar en Inglaterra su 1ra obra, mientras que en Viena siempre se habían publicado los artículos de Klein. El
meollo del problema era que Klein contaba con el apoyo de Jones, presidente de la IPA.
Muchas veces las discusiones giraron en torno a Freud. Cada grupo tenía “su Freud”, cada grupo pretendía ser más
freudiano que el otro, y citaban para apoyar sus palabras uno de los aspectos de sus formulaciones; el grupo
annafreudiano permanecía fiel a las 1as teorizaciones, el grupo kleiniano citaba sus trabajos posteriores
121
OM
con diferentes nombres hasta hoy. Otorgaban consejos en la búsqueda de empleo, apoyo financiero y tenían
también como misión la de lograr una aceptación mayor de la sociedad hacia estos individuos excluido de la vida
social. No se puede decir de estos movimientos que sean reformadores.
Más interesante en Francia fue el movimiento que generó Toulouse, psiquiatra que inicia la lucha por servicios
abiertos a comienzos de este siglo. Llego a crear e primer hospital psiquiátrico libre. El debate entre los partidarios
de los servicios abiertos, libres y los que defendían el asilo, cerrado, comenzó con el siglo. Lo impulso Serieux, fue
.C
agitado por Heuder y Toulouse, y fue conformando una ideología antialienista que ha de triunfar finalmente con la
liberación del nazismo en Francia y la realización de la política del Sector.
La existencia de estos movimientos no logro modificar el panorama de la psiquiatría. Los movimientos de Higiene
DD
Mental o de crítica asilar terminaron en instituciones humanitarias o de beneficencia para ayudar a los internados,
sin afectar tampoco al poder representado por el asilo psiquiátrico.
El psiquiatra dispone de un poder sobre el enfermo que no ha servido para producir ningún conocimiento ni para
comprender mejor sus operaciones practicas; y que además ha utilizado para defenderse del paciente, de la
angustia frente a la locura y lo desconocido. El enfermo, precisamente en cuanto internado, se adecua rápidamente
LA
a este poder objetivante, que lo libera de la problemática real que no supo o no puede enfrentar. Ambos, psiquiatra
y enfermo, aceptan finalmente el poder de la institución que asigna lugares, distribuye saberes y regla el poder.
Como afirma Jaspers, el diagnóstico es finalmente un juicio de valor, reconociendo la incomprensibilidad de muchos
procesos patológicos. En la realidad institucional lo que no comprende es intrínsecamente malo, y debe ser
FI
doblegado o reeducado. La guerra también ayudo a ver que la población de los hospicios provenía de los sectores
más pobres de la sociedad.
Tres hechos contribuyeron a partir del año ’45 a la reforma institucional de lo psiquiátrico. En primer lugar, la guerra
ha provocado la destrucción de las organizaciones de salud en los países de Europa, tanto en la cantidad de recursos
materiales y humanos como en los sistemas de cobertura y financiamiento. Por otra parte, la guerra dejó una
cantidad importante de individuos con necesidad de atención psiquiátrica. Esto hace necesario una reconstrucción
acelerada de los sistemas de atención, pero a la vez facilita que puedan introducirse reformas en el sistema. En
segundo lugar, la guerra genera un crecimiento de las posiciones humanistas, tras el horror de lo vivido. En este
contexto, el psicoanálisis y la reflexión fenomenológica atraen a muchos intelectuales y también a algunos
psiquiatras y psicólogos que van a potenciar en el plano de las ideas la necesidad de un cambio en las relaciones
que instituye la psiquiatría asilar.
Finalmente el mismo crecimiento de las posiciones humanistas tiene su expresión política en el ascenso de los
sectores populares, progresistas y democráticos a los gobiernos de Europa y hace a los Estados más sensibles y
dispuestos a los planteos innovadores en salud. La medicina social tiene entonces su primavera europea de la mano
122
OM
Un principio básico de la comunidad terapéutica es el del aprovechamiento de todos los recursos de la institución,
a la que concibe como un conjunto orgánico, no jerarquizados, de médicos, pacientes y personal.
Las caracteristcas mas generales son:
a) Establecer una libertad de comunicación en todos los niveles, evitando la organización jerarquica de la
comuncacion.
b) Tender al analisis de los intercambios institucionales en terminos de dinamicas grupales.
.C
c) Crear espacios terapeuticos grupales y no bipersonales.
d) Liquidacion de las estructuras jerarquicas tradicionales, de carácter piramidal.
e) Generar un espacio social de reconocimientos reciprocos, como forma de fomentar la sociabilidad del grupo.
DD
f) Proponeder a que la asamblea comunitaria, en lo posible en reunion diaria, sea el organo de gestion, organización
y evaluacion de todas las actividades.
Principios propuestos por Rappoport: propender a una democratización que otorgara idealmente el mismo valor
de opinión para todos, incluidos médicos, enfermeros y enfermos; generar un ambiente de permisibilidad que
diluyera el rostro siempre represivo de los reglamentos institucionales; construir una comunidad de intereses y
LA
objetivos, que consoliden al grupo en las tareas propuestas; propender a una relación de la comunidad con el
exterior. La instalación de en hospitales psiquiátricos de estas comunidades hizo difícil la concreción de estos
principios.
Durante algunos años, el montaje de las comunidades terapéuticas en asilos y hospitales psiquiátricos se convirtió
FI
en el nuevo rostro de la institución psiquiátrica. Detrás de los servicios de comunidad terapéutica sobrevivió, más
desprestigiada y repudiada que nunca, la vieja psiquiatría asilar, con sus hedores y miserias.
Sin embargo, más allá de las críticas que ha merecido el dispositivo institucional de la comunidad terapéutica, el
panorama asilar cambió a partir de ella. La guerra forzó a los psiquiatras en Europa a mirar fuera de los hospitales.
Algunos volvieron a los asilos, pero ya no fue lo mismo: no se pudo seguir siendo psiquiatra sin hacer explícita su
función social. En la inmediata posguerra se había producido una importante modificación de los esquemas político-
culturales de la sociedad inglesa, con una participación inédita de la comunidad en responsabilidades sociales. El
gobierno laborista implementó una medicina social y un sistema de cobertura previsional. El éxito, aunque relativo,
de la despsiquiatrización que impulsó la comunidad terapéutica, no hubiera sido posible sin este contexto político
y esta conciencia social. En 1953, la Organización Mundial de la Salud, recomendó la transformación en comunidad
terapéutica de todos los hospitales psiquiátricos. Solo se tomó una parte de la recomendación: se construyeron con
una parte de la población internada comunidades terapéuticas, que funcionaban junto a la organización tradicional
del asilo. Esta, creemos, fue la razón mayor del fracaso. Basaglia sostuvo siempre que toda reforma que permita
alguna forma de existencia del asilo, termina por ser absorbida y neutralizada por éste.
123
OM
una medicina social. Un encuentro fructífero entre psiquiatras reformadores de su institución y una sociedad que
se hace sensible a asumir su compromiso con la salud y el bienestar de la comunidad.
Los principios
1) Apoyados en la crítica al asilo, toda la política en Salud Mental se basa en el rechazo de toda forma de segregación
de los enfermos.
.C
2) Integración en todos los niveles: a) integración del enfermo mental en el conjunto social; b) subordinación del
hospital psiquiátrico a la totalidad de la red de instituciones y equipamientos de higiene mental del Sector, de modo
que son los equipos de Salud Mental siempre la primera instancia; c) implementación del equipo del Sector en el
DD
medio donde vive el enfermo (atención e internación domiciliaria, asistencia en y con la comunidad, etc.); d)
entender al Sector como unidad de integración y dimensionado de acuerdo con la capacidad del equipo médico-
social.
3) Asegurar la unidad e indivisibilidad de las tareas terapéuticas: a) integrando en una sola red o cadena a todos los
equipos del Sector; b) haciéndose responsable cada equipo de la totalidad de las fases del tratamiento o
LA
intervención preventiva; c) asegurando la unificación y coherencia por el equipo de salud mental de todas las
operaciones terapéuticas implicadas, desde la consulta, de manera de tener un control homogéneo de todo el plan
terapéutico.
4) El equipo de Sector es la “celular productiva” de cuidados en Salud Mental, alrededor del cual se ordena el
FI
cualitativos las necesidades de equipamiento, establecer las demandas de la población, diseñar programas
específicos e implementarlos.
A partir de los años ’70 se produce todo un replanteo de la idea del Sector, basado en una reconsideración de los
asentamientos urbanos, la pérdida de relaciones comunales, el anonimato creciente de los individuos, la dispersión
de las familias, etc.
Parece correcto considerar un cierto fracaso de esta política. Fracaso en la generación de un poder colectivo capaz
de impulsar una nueva concepción de las relaciones poder-saber entre curadores y enfermos, ya que al no lograr
su traspaso a la comunidad éstos tienden a coagular en la figura del médico (ahora psicoanalista o psicoterapeuta).
El hospital psiquiátrico quedo, una vez más, intacto y con nuevos prestigios.
124
OM
había ya una aplicación, aunque parcial y esporádica, de los ideales del Sector y existían algunas comunidades
terapéuticas. Basaglia, por entonces director del Hospital Psiquiátrico de Gorizia, supo impulsar un movimiento
social y político de logro en pocos años el cierre definitivo de un número importante de estos establecimientos.
Algunas cuestiones clave del pensamiento y la propuesta de Basaglia: la psiquiatría es definida como la práctica de
una contradicción, pero que se escinde y niega. En esto ve la función de encubrimiento que hace la medicina mental,
ya que desplaza el problema sociopolítico que el enfermo y la institución representan hacia una solución técnica-
científica.
.C
El problema sigue siendo, en cuanto al asilo, el mismo con que se encontró Pinel: discernir entre el marginado por
la pobreza o el desamparo social, el recluido por asocial o delincuente y el loco, a quien la psiquiatría significo como
DD
enfermo. Basaglia trata de no ubicarse en sitio que ocupó Pinel, acepta y se compromete con la dimensión
sociopolítica del problema del asilo, y advierte contra el encubrimiento que acompaña las categorías teóricas y
técnicas. El enfermo mental se constituye socialmente como tal en tanto estigmatizado social, es víctima de una
exclusión violenta, como el pobre, el asocial, el delincuente.
Porque Basaglia toma la dimensión global del enfermo en su contexto sociopolítico, indisociable, necesita
LA
cuestionar las propuestas de la psiquiatría comunitaria, crítica sobre la cual va a surgir su propuesta de
desinstitucionalización.
Vamos a intentar una síntesis del proceso italiano en tres ítems: a) el incidente de Gorizia y el diseño de la política;
b) el Programa de Psiquiatría Democrática y la Ley de Salud Mental; y c) hacia donde se avanza: los resultados.
FI
El incidente de Gorizia
El hospital psiquiátrico de Gorizia era un asilo típico. En los años ’70 Basaglia, director del hospital, junto a otros
trabajadores del mismo, se plantearon una crítica del funcionamiento, que se concretaron en propuestas para
125
OM
a) Generar un movimiento social y político organizado para apoyar en una primera etapa la apertura de los
hospitales psiquiátricos, para lograr posteriormente su cierre definitivo.
b) Se emprende la tarea, para incluir a los pacientes internados en el proceso de apertura, haciéndolos
protagonistas de su propia externación: visita a las familias, reencuentro con amigos, formación de clubes de ex
internados, búsqueda de empleo y de vivienda, etc.
c) Se agrupa a los pacientes, dentro y fuera del hospital, para realizar “colectivos de externación”, un espacio grupal
.C
de elaboración de todas las vicisitudes del proceso de externación y reinserción social.
d) A partir del cierre del Hospital Psiquiátrico de Trieste, se trabaja con los enfermos para su instalación fuera del
hospital, algunos en nuevos hogares de ancianos, otros en casa que el Estado dispone. En estas casas se continúa
DD
el trabajo colectivo de reinserción social.
e) Se va clausurando el hospital, a medida que se desocupa. No se admiten nuevas internaciones ni reinternaciones.
f) Los pacientes externados que requieren atención psiquiátrica son asistidos en el Centro de Higiene Mental de la
zona.
g) Algunos pacientes que no pueden ser desinstitucionalizados por incapacidades diversas son conducidos a
LA
hogares especiales para vivir, en general, sin tratamiento psiquiátrico, es decir, una forma no psiquiátrica de
institucionalización.
El gobierno decide sancionar la nueva ley de Salud Mental en 1978. Por esta ley se establece que a partir de su
sanción no puede admitirse ningún paciente nuevo en los hospitales psiquiátricos de toda Italia y tampoco se puede
FI
reinternar a ningún enfermo que haya sido externado. Para aquellas internaciones obligatorias que se crean
necesarias (es decir, sin consentimiento del enfermo), deben certificar el pedido al menos dos médicos y una
autoridad civil local. Solo puede internarse por un periodo fijado y no mayor de diez días. Estas internaciones, al
igual que las voluntarias, pueden hacerse en los servicios de psiquiatría de hospital general.
La ley crea en cada Unidad Sanitaria Local un Departamento de Salud Mental, el Servizio d’Igiene Mentale (S.I.M).
Todo el sistema está basado en la participación política local.
En toda la primera etapa se trabajó principalmente en el S.I.M. con los pacientes que se habían, o estaban siendo,
externados, para proveer ayuda de resocialización. El enfoque es más comunitario, se tiende a no objetivar la
enfermedad. Esta primera etapa fue ampliamente exitosa. Se logró la desinstitucionalización masiva de enfermos,
al mismo tiempo que se creaban las condiciones para prevenir la hospitalización, se cerraban hospitales
psiquiátricos aseguro un nivel adecuado de resocialización; se logró agitar a la sociedad sensibilizándola al problema
de la exclusión y encierro, consiguiendo una aceptación notable de los enfermos liberados.
126
OM
suficiente para resolver la problema subjetiva del enfermo, o si es necesario acompañar alguna forma de
tratamiento. Al no fundar una alternativa en la práctica, los pacientes reciben habitualmente tratamiento
psicofarmacológicos.
La experiencia de la reforma en Salud Mental en Italia no está cerrada. Pero creemos que una de sus mayores
enseñanzas ha sido la de mostrar la inmediata contextualización social y política que acarrea toda crítica al sistema
institucional de la psiquiatría y la revelación, por lo mismo, de la complejidad de elementos en juego: la fuerza de
.C
las disciplinas, los efectos sociopolíticos de los saberes constituidos, los requerimientos de institucionalización de
lo mental por parte del aparato estatal, la presión de una conciencia social, cuyas representaciones de lo sano y
enfermo están dominadas por la existencia social de saberes constituidos y disciplinas reguladoras del consenso.
DD
Todo intento de procurar una reforma del dispositivo de la Salud Menta, luego de de la experiencia adquirida, no
puede obviar la necesidad de actuar sobre estos diversos planos de manera conjunta.
exámenes para la incorporación a las fuerzas armadas mostraban altos índices de rechazos por cusas mentales; el
regreso de los veteranos aumento las necesidades de asistencia. En la misma población, los problemas por
trastornos psíquicos habían hecho crecer notablemente las consultas.
En esos años se creó el “Grupo para el Desarrollo de la Psiquiatría”, que nuclea a jóvenes psiquiatras y
FI
psicoanalistas, muchos de los cuales habían servido en el ejército durante la guerra. Este grupo fue tejiendo
relaciones políticas a partir de diversos proyectos de reforma de la psiquiatría. Cuando se aprueba la ley Kennedy
de 1963, aportará al proyecto el grueso de los técnicos para la creación de los Centros Comunitarios de Salud
Mental. Cuando en 1946 se aprueba la ley nacional de Salud Mental, Felix, que era Director de Higiene Mental e
impulsor de la reforma, pasa a ocupar el cargo de Director del Instituto Nacional de Salud Mental que la ley creo.
Esto es esencial para el comienzo de la reforma. En el período que va desde la creación del Instituto hasta 1960, las
medidas que se tomaron fueron más bien de humanización de algunos servicios y sobre todo la promoción, apoyo
y financiamiento de una formación profesional más ligada al psicoanálisis.
El Congreso de los EE.UU. decide en ese año formar una Comisión Especial para que le informe sobre la situación
de la Salud Mental en el país.
La elección de Kennedy como presidente estuvo muy ligada a la defensa de una política social de protección a las
minorías, de asistencia a los pobres, solución a los desempleados, atención médica para ancianos, etc. poco después
de asumir Kennedy estaban dadas las condiciones para el lanzamiento de la reforma bajo la confección de un
Programa Federal de Psiquiatría Comunitaria.
127
OM
mental, sino que iguales soluciones se procuran para otras formas de institucionalización represiva (hogares de
menores, menores delincuentes, las cárceles, etc.)
El Centro Comunitario de Salud Mental, institución madre del nuevo dispositivo, debe estar abierto a todos los
individuos de la comunidad, pobres y ricos, jóvenes o ancianos, enfermos psicóticos o gente con neurosis leves, etc.
La idea es clara: abolir las formas institucionales de la psiquiatría, expresada en los hospitales psiquiátricos, requiere
de una reformulación paralela de las teorías, las prácticas terapéuticas y de una relativización de las categorías
diagnósticas.
.C
Los Centros se instalaron progresivamente en todos los Estados. Cada uno de ellos, aunque adaptado a la población
que cubría, debía contar mínimamente con cinco servicios, considerados básicos: a) consultorios externos para
DD
atención ambulatoria de pacientes y seguimiento de expacientes de hospitales psiquiátricos; b) servicio de
urgencias psiquiátricas, bajo la dominancia de la “intervención en crisis”; c) servicio o departamento de admisión;
d) servicio de consulta y educación, dedicado a coordinar las actividades de prevención primaria y promoción de
salud mental en las organizaciones de la comunidad; e) servicio de internación total o parcial (Hospitales de Día,
Hospitales de Noche).
LA
La desinstitucionalización se basaba en una suerte de dispersión del asilo, creando una serie de instituciones
intermedias, mas agiles y económicas, para la recolocación de los enfermos y su reubicación en la sociedad. Al cabo
de unos años estos hogares para enfermos externados se fueron convirtiendo en nuevo depósitos de personas, ya
que no se resocializaban, como sucedió en Italia, sino que se los mantenía allí a un costo más bajo.
FI
constituida en un individuo, la intervención en crisis consiste en actuar sobre la familia, el grupo social, la institución
escolar, etc., en el momento en que ha surgido una situación difícil. Esta intervención puede ayudar a una resolución
de la crisis que facilite el desarrollo y fortalecimiento psicológico del grupo, evitando que la crisis se fije y se resuelva
en una patología individual.
Más adelante, Caplan, psiquiatra norteamericano propone encarar los problemas de la salud mental con una actitud
preventiva generalizada, que logre implicar a la comunidad en cada uno de los niveles de intervención preventiva
que propone: prevención primaria, secundaria y terciaria.
La prevención primaria es el conjunto de acciones sobre los factores que hacen que una comunidad o grupo humano
funcione de modo patológico o tenga capacidad de provocar patologías mentales en sus miembros.
La prevención secundaria incluye las acciones asistenciales clásicas sobre individuos detectados enfermos o con
riesgo alto a enfermar.
128
OM
.C
DD
LA
FI
129
OM
psiquiátrica en la Argentina?
2. ¿Cómo se expresa, en la actualidad, la situación de crisis institucional, tanto en el nivel corporativo como en el
asistencial?
3. ¿En su opinión, cuáles son los aspectos que presentan mayor urgencia en el desarrolla teórico y técnico, en
relación con la situación señalada en 1 y 2?
.C
Contesta Enrique Pichón-Riviere:
Entendemos que lo que recorre como implícito los tres puntos del cuestionario es la pregunta por la salud mental,
su concepción y la organización del sistema asistencial y de prevención. La elaboración de un criterio de salud es a
DD
nuestro juicio el único punto de partida posible para la caracterización y evaluación de estructuras asistenciales,
situaciones institucionales y puntos de urgencia en el desarrollo teórico técnico en la formación de los agentes de
salud.
El análisis de los distintos criterios y definiciones de salud, y de las formas de organización y asistencia que inspiran
o justifican nos remite a sus condiciones de producción, condiciones histórico-económica-políticas. Toda definición,
LA
toda teoría de la salud y enfermedad implica y reenvía a una concepción del sujeto, del mundo y la historia que la
fundamenta.
Según las características de esa concepción, ocultante u objetiva y científica se elaborarán los criterios de
normalidad y anormalidad.
FI
La norma de comportamiento, el criterio que permite establecer si la conducta de un sujeto es adaptada, normal o
patológica está emparentado: a) con un sistema de representaciones; b) con una infraestructura de relaciones
sociales, de producción, legitimada en ese sistema de representaciones, que orienta las expectativas sociales y las
encuadra. El criterio de salud, la norma que evalúa la forma de adaptación a la realidad, es funcional al sistema de
130
OM
protegidos, comunidad terapéutica, etc.
Reformulamos el par conceptual vigente en psiquiatría: salud y enfermedad, en términos de adaptación activa o
pasiva a la realidad. Con el término adaptación nos referimos a la adecuación o inadecuación de la respuesta del
sujeto a las exigencias del medio. A la conexión operativa, transformadora o inoperante, empobrecida, entre sujeto
y mundo.
El sujeto es "sano" en la medida en que aprehende la realidad en una perspectiva integradora y tiene capacidad
.C
para transformar esa realidad transformándose a la vez él mismo. El sujeto está "activamente adaptado" en la
medida en que mantiene un interjuego dialéctico con el medio, y no una relación rígida, pasiva, estereotipada. La
salud mental consiste en aprendizaje de la realidad, en una relación sintetizadora y totalizante, en la resolución de
DD
las contradicciones que surgen en la relación sujeto-mundo. Adaptación no implica aquí "competencia social",
aceptación indiscriminada de normas y valores sino por el contrario, una lectura de la realidad con capacidad de
evaluación y propuestas de cambio.
En nuestro esquema conceptual el concepto de Adaptación Activa se identifica con el de aprendizaje, al que se
define como Apropiación instrumental de la realidad para transformarla.
LA
Como trabajadores en Salud Mental estamos obligados a lograr esa forma de lectura de la realidad.
131
OM
Contesta Gregorio Baremblit:
1) Se trata de una prestación totalmente ineficaz y antieconómica no ya para los objetivos que genuinamente
debería cumplir sino aún para la funcionalidad represora y de recuperación compulsiva de fuerza de trabajo a la
que el Estado de nuestra formación económico-social-capitalista dependiente la tiene destinada. Está orientada
fundamentalmente hacia el depósito e inmovilización del enfermo "consumado". La actividad psicoprofiláctica:
.C
familiar, grupal, laboral, comunitaria, etc. es prácticamente inexistente, al igual que la articulación entre el aparato
asistencial con otros organismos estatales a los fines del seguimiento para consolidar la rehabilitación de los pocos
que tienen la suerte de egresar de alta.
DD
2) La asistencia es clasificable en: privada, mutual, de beneficencia y estatal. La primera suele consistir en una
hotelería de lujo que no por lo inalcanzable de su costo disimula su régimen carcelario cuyo instrumental favorito
es el llamado "chaleco de fuerza químico" y el "sueño prolongado". La segunda se suele articular con la primera y
la tercera en tanto los mismos sanatorios particulares operan como concesionarios, empleando instalaciones de
menor categoría donde los servicios se abaratan a costa de masificarse deshumanizándose. La asistencia oficial,
LA
insuficiente por razones presupuestarias, comprende los hospicios, secciones psiquiátricas de hospitales generales,
centros de salud, etc. Estos últimos, al igual que algún otro servicio privilegiado de hospital y contadas salas de
hospicio intentan emplear técnicas avanzadas psico y socioterapéuticas, sin embargo la falta de recursos y de una
adecuada revisión teórica y control de la aplicación de esos instrumentos técnicos convierte esas iniciativas en
FI
centros de ideologización reaccionaria, reclutamiento de pacientes para los consultorios privados y trampolines
demagógicos para psiquiatras oportunistas con vocación de ascenso político-burocrático. Debe sumarse a todo esto
la superconcentración de trabajadores de la Salud Mental en la Capital Federal, debida al déficit institucional
sanitario psiquiátrico en el interior y la superproducción universitaria de profesionales sin preparación adecuada ni
inserción posible en el mercado, lo cual genera una desocupación y degrada la calidad de su trabajo.
3) La exigencia básica sería que todo reordenamiento se realice involucrado en un plan de medidas tendientes a la
socialización de la medicina, la reestructuración universitaria y un auténtico mejoramiento del bienestar social
entendiendo por tal la atención a las necesidades de vivienda, alimentación, instrucción y régimen laboral de la
población. Con todo la medida precaria más impostergable es la radical transformación de los hospicios y la
implementación de una campaña psicoprofiláctica intensiva.
132
OM
Lo que caracteriza a una institución asilar es su necesidad de persistir.
El hospicio no produce salud ni se centra sobre los pacientes. Está dirigido a su propia permanencia. En ese sentido
sus componentes pueden jerarquizarse según la importancia que tienen para mantener a la institución. El cambio
del hospicio no pasa por la introducción de modificaciones parciales sino de alteraciones de los valores, de los
objetivos, de la orientación de los esfuerzos, de los programas. Sin una disminución de la opresión de los enfermos
mentales, no hay futuro en el que pueda inscribirse la concepción de la salud mental.
.C
La visualización de los problemas psicológicos como problemas inherentes al campo global de la salud de la
población permite entender que las soluciones son de la órbita de la planificación de acciones colectivas, que sus
agentes no son individuos sino sectores de técnicos preparados para detectar las necesidades y especialmente para
DD
entender la forma en que los sectores populares definen sus necesidades, que el marco de la respuesta adecuada
es el marco de las instituciones a crear, y que la función de la Universidad es capacitar para tales instituciones.
de un modo de producción capitalista dependiente, la asistencia psiquiátrica muestra, en marzo de 1974, la marca
indeleble de una neta discriminación clasista.
Quien por sus recursos deba apelar a la atención brindada por las entidades estaduales, se hallará con graves
deficiencias en varios órdenes, sea que su asistencia requiera un tratamiento ambulatorio, sea que se imponga la
FI
internación. Si se trata de la internación, nos encontramos con un paciente que a su disturbio mental adicionará el
provocado por su estancia en el establecimiento, que propenderá muy probablemente a su cronificación
irreversible.
La violencia va desde los "recursos terapéuticos" -shocks de diversa naturaleza, manguerazos de agua fría,
inyecciones de leche, celdas individuales de reclusión, etc.-, hasta la escasez de habitaciones, camas, ropas,
alimentos y profesionales.
Para quien disponga de excedentes pecuniarios pasibles de inversión en asistencia psiquiátrica, el panorama muta
radicalmente. Se hallan las clínicas, centros o institutos privados que a aranceles medios intentan obviar las
falencias de los hospitales y la privacidad selectiva de los consultorios, a los que se accede desde la pequeña y
mediana burguesía hacia arriba.
2. Dada la gratificación económica que elementalmente otorga, y el clima confortable de trabajo, el profesional de
la salud mental tiende a volcarse paulatinamente desde su egreso a la labor privada. Lo paradojal es que el
profesional recientemente egresado, necesita acopiar experiencia y aprendizaje clínico, se ve forzado a luchar por
la obtención de un cargo gratuito en un hospital. Como de éste no ha de poder vivir, debe a su vez privilegiar otra
tarea, fundamentalmente la de consultorio privado. Cuando comienza a intensificarse su trabajo privado, se puede
133
OM
.C
DD
LA
FI
134
OM
La participación psicológica en el reclutamiento y la asignación no fue aceptada con los brazos abiertos en las
fuerzas británicas. Se le prestó poca atención a la selección de personal en los años de entreguerras. El Ministerio
de Pensiones expreso la intención de no otorgar pensiones para casos de neurosis desarrollados durante el servicio
activo, pero sí de proveer tratamiento, esperando combatir la posibilidad de una epidemia de “neurosis de guerra”.
En 1939 Rees y Rodger presentaron un memorándum a las autoridades médicas en la Oficina de Guerra donde
proponían una experiencia preliminar para evaluar la contribución de la evaluación psicológica y psiquiátrica a la
.C
velocidad y calidad del entrenamiento de los conscriptos. Este memorándum dirigía la atención, no solo a las
experiencias previas de los servicios de combate, sino también a los resultados de la investigación en psicología
industrial, que había intentado demostrar la contribución de las psiconeurosis a la pérdida de días laborales y la
DD
pobre eficiencia industrial, así como mostrar el valor de los test de aptitudes especiales en la asignación de
individuos a tareas especializadas. No está claro por qué el proyecto fue rechazado.
Desde abril de 1940 la participación de la psiquiatría en el ejército aumento, primero con la designación de
psiquiatras de comando asignados a los cuarteles médicos de cada comando en Gran Bretaña y poco más tarde, en
1941, con la adscripción de hasta quince psiquiatras de área para cada uno de estos comandos. La marina también
LA
Un sistema de evaluación de la inteligencia fue introducido en todos los centros de reclutamiento; se usaron las
Matrices Progresivas, y todos los evaluados como mentalmente lerdos o retrasados fueron derivados a psiquiatras.
Pronto, fueron los psiquiatras, antes que los oficiales en comando, los que hacían las recomendaciones sobre la
asignación de estos hombres. Hacia 1942, un nuevo programa de admisión fue introducido, en el que todos los
hombres ingresantes al ejercito eran llevados a un Cuerpo de Servicios Generales, donde estaban sujetos a una
serie de tests de inteligencia y aptitud, eran entrevistados por personal entrenado de selección de oficiales y
derivados a psiquiatras si quedaban en el grupo más bajo de selección.
El Directorio de Selección de Personal no era el único preocupado por segregar a los imbéciles y los inestables. Los
objetivos no eran solo negativos sino también positivos. En palabras de Rees: el directorio ha sido capaz de
presentar los estándares de inteligencia y otras aptitudes necesarias para cada trabajo, proveyendo de esta manera
una base para la correcta asignación de puestos. La realización de este trabajo produjo un cambio revolucionario
en la utilización del potencial humano por parte del Ejército. La correspondencia de un hombre con el trabajo
adecuado es un medio valioso de la profilaxis psiquiátrica.
Esta cuestión sería continuada con entusiasmo en los EE.UU. en el periodo inmediato de posguerra.
135
OM
una situación, sino la relación subjetiva del individuo con su situación. Lo significativo del concepto de actitud fue
que captaba esta relación subjetiva.
La inscripción de la actitud fue hecha a través de un nuevo dispositivo de calibración mental: la escala. La escala era
la técnica de construcción de preguntas de forma tal que la respuesta de un individuo a un ítem particular permitía
que pudiesen ser predichas sus respuestas a otros ítems de una dimensión particular. La técnica de la escala,
desarrollada por Likert y Guttman, permitió que una nueva dimensión subjetiva de la condición humana entrada
.C
en la esfera del conocimiento y la regulación. El desarrollo correlativo del concepto de actitud y de la técnica de la
escala abrió esta dimensión para la gestión; las actitudes pudieron ser investigadas, medidas, inscriptas, informadas
y calculadas, iluminando las decisiones administrativas. El conocimiento de las actitudes hizo posible concebir un
DD
modo de administración en la cual el soldado podía estar satisfecho y ser eficiente, ser eficiente por estar satisfecho.
Parecía que esta satisfacción tenía poco que ver con el compromiso del soldado hacia los objetivos de la guerra.
Stouffer y sus investigadores no pudieron encontrar en sus sujetos soldados ningún pensamiento claro acerca de
los principios sobre los que se estaba llevando a cabo la guerra. Lo que era crucial para crucial para el
mantenimiento de la moral y la eficiencia era el grupo. El grupo tenía dos funciones principales en la motivación en
LA
el combate: establecía y reforzaba estándares de conducta grupales y apoyaba y sostenía el individuo bajo
estresores que de otra manera no sería capaz de soportar.
Por ende, la conducta durante el combate parecía ser una cuestión de fortaleza de los vínculos entre el soldado y
sus compañeros, fortalecida por la lealtad al liderazgo inmediato. Con el descubrimiento del grupo primario como
FI
el elemento clave en las relaciones entre el individuo y la organización, los científicos sociales norteamericanos, en
la guerra, reforzaron las tesis que los psicólogos industriales habían elaborado en la década del 30: la gestión en el
ejército, como en la fábrica, se lograba actuando sobre los lazos del grupo primario y alienando a los individuos por
medio de este mecanismo con los objetivos de la organización. La psicología social podía convertirse en una ciencia
de la administración.
El estado psicológico de los oficiales no era menos importante que el de los reclutas. La selección de oficiales
comenzó a plantearse como un problema en los primeros años de la guerra. Estaban acostumbrados a elegir
individuos cuya procedencia y opiniones les eran familiares. Ahora se encontraban en aguas desconocidas:
aceptaban para la formación a muchos que podrían fallar y rechazaban a muchos que podrían tener éxito. Esto
impulsó la sospecha de que las preferencias de clase estaban influenciando las decisiones de las promociones, lo
que producía daños en la moral y en las solicitudes de promoción.
Rees y Wittkower junto con Rodger, llevaron a cabo experimentos desde 1941 que condujeron a un sistema
permanente de Juntas de Selección de la Oficina de Guerra en 1942, junto con el Centro de Investigación y
Entrenamiento que investigó formas de mejorar las técnicas. Los candidatos eran investigados durante un período
136
OM
En lo que concierne a los psicólogos, su falta significó que la mayoría del trabajo de evaluación fue llevado a cabo
por sargentos entrenados que actuaban como asistentes de los psiquiatras, quienes interpretaban los resultados
de las evaluaciones. El grueso de los psicólogos profesionales estaba confinado a los centros de investigación y
entrenamiento; tenían mayores dificultades para encontrar un punto de apoyo efectivo dentro de los
procedimientos institucionales que los psiquiatras, mejor calificados por ser médicos.
La guerra permitió que esto cambiara. Grandes poblaciones estaban disponibles para la investigación psicológica.
.C
Mientras los EE.UU. proveían las técnicas para la estandarización de la personalidad, Gran Bretaña innovó en el uso
de situaciones reales para la evaluación de la capacidad de los candidatos mientras hacían las tareas asignadas.
Parecía que las características de todos los oficiales exitosos poseían no eran cualidades constantes del individuo.
DD
El liderazgo no era una cualidad inherente del individuo que podía ser demostrada tanto en los test como en la vida
real. La “cualidad de oficial” debería, por ende, ser analizada y evaluada en términos de los principales roles a los
que los futuros oficiales estarían llamados a ocupar: el más crucial era el liderazgo en pequeños grupos, capaz de
darle una dirección al grupo y mantener su cohesión y su solidaridad contras las fuerzas disruptivas internas y
externas.
LA
El concepto de grupo se transformaría en el principio organizador del pensamiento psicológico y psiquiátrico con
respecto a la conducta individual. Desde los años de la guerra en adelante, la vida social e institucional fue
concebida cada vez más como un conjunto de relaciones emocionales intersubjetivas, el interjuego entre
solidaridades sociales y dinámicas individuales de personalidad. Lo que estaba en cuestión no eran los rasgos
FI
estáticos del carácter, sino las formas en las que los individuos resolvían los conflictos personales en el contexto de
las decisiones, las direcciones y la cohesión del grupo. La invención del “grupo”, la concepción de las relaciones
“sociales” o “humanas” como determinantes clave de la conducta fue la lección psicológica y psiquiátrica más
consistente de la experiencia de la guerra.
En EE.UU. la “evaluación situacional” seria la base de las técnicas usadas para la selección de personal. Los soldados
no serían entrenados para pelear eficientemente por la vía de inculcarles un odio hacia el enemigo. Lo crucial eran
los lazos psicológicos y las relaciones entre sus miembros, la solidaridad del grupo. No era cuestión de disciplina
externa, de obedecer órdenes y seguir reglas. Era una cuestión de disciplina interna, del orgullo de cada individuo
en orden a su grupo, de su sentimiento de valía y pertenencia y del valor y significado de sus propias contribuciones
a la vida del grupo.
Bion buscó producir hombres que se respetaran a sí mismos y socialmente adaptados, capaces de aceptar
responsabilidades; lo hizo a través de unir a los individuos del pabellón en un grupo haciendo frente a un problema
en común. Decidió que el problema a enfrentar era precisamente la existencia de la neurosis que amenazaba el
éxito del trabajo de rehabilitación de la institución. El entrenamiento impartido en el área de capacitación se
convierto en un curso de entendimiento y resolución de problemas en las relaciones interpersonales. Por esta vía,
137
OM
individuos neuróticos.
Para tal reforma tecnológica, el régimen institucional fue definido como un sistema de relaciones que sería más
emocional que técnico. El rol del médico ya no fue de dirección sino de interpretación. Todos los circundantes al
enfermo –pacientes, domestico, enfermeros- fueron incluidos dentro del campo de la enfermedad y de su cura. Las
relaciones sociales de la vida en grupo se concibieron no sólo como un medio de tratamiento de la neurosis, sino
también como el campo donde la neurosis debía manifestarse e incluso podía ser estimulada: el origen de la
.C
neurosis seria descubierta en sí misma en los problemas de las relaciones sociales.
Al mismo tiempo, un experimento paralelo se estaba desarrollando. En 1942, Wood, un cardiólogo y Jones, un
psiquiatra, se convirtieron en directores para el tratamiento “síndrome de esfuerzo”. Luego de un examen
DD
cardiológico, concluyeron que el síndrome de esfuerzo (falta de aliento, palpitaciones, dolor en el lazo izquierdo del
pecho, vértigo postural, ocasionales ataques de desmayo y fatiga) no estaba relacionado con una enfermedad
cardiaca. Por el contrario, fue considerada una dolencia psicosomática. Se desarrolló todo un trabajo de discusión
para explicar a los pacientes los mecanismos fisiológicos que producían sus síntomas, en la búsqueda de aliviar la
ansiedad y de cambar las actitudes de los pacientes hacia sus síntomas. Estos grupos de discusión pronto se
LA
expandieron y comenzaron a tratar temas surgidos de la vida en el pabellón; tomaron la forma de discusiones
grupales. Había nacido la psicoterapia de grupo.
Estas nociones de la patología como un fenómeno grupal y la cura como un asunto de rehabilitación de individuos
asocializados fueron luego desarrolladas en las unidades que se establecieron para los prisioneros de guerra que
FI
regresaban.
La vida relacional del grupo se había transformado tanto en el campo de la enfermedad como en el dominio de la
cura.
Estos procedimientos se extendieron más allá de los prisioneros de guerra retornados, hacia muchas otras
categorías de individuos socialmente desajustados. Los problemas de los trabajadores discapacitados motivo el
establecimiento de un elaborado aparato social en el período inmediato de posguerra.
En los años inmediatos al fin de la guerra el grupo de había transformado en un medio crucial para conceptualizar
la conducta social del individuo, para analizar la eficiencia de todas las formas de practica social, para promover la
satisfacción individual y la eficiencia organizacional, y para conducir la empresa de la cura.
138
OM
La psiquiatría y la psicología de guerra habían llevado a un creciente reconocimiento de la importancia de los
vínculos humanos y las condiciones grupales en el origen de los trastornos subjetivos y en las acciones de
prevención. En consecuencia, la medicina tendía a perder su posición dominante. El reducto tradicional de la vieja
psiquiatría terminaba asediando desde dos flancos: el psicoanálisis y las ciencias sociales.
.C
El abandono o directamente el rechazo de los dogmas de la eugenesia, sobre todo después de las prácticas estatales
de esterilización compulsiva de presuntos alienados (en Alemania, pero también en EE.UU. y algunos países de
Europa), está en la base del reemplazo de “higiene” por “salud” en el discurso de la nueva psiquiatría. Son los
DD
tiempos de una redefinición de la significación de la salud, que pasa a ser considerada como algo más que ausencia
de enfermedad. “La salud es un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de
enfermedades o afecciones”. Esa reorientación que habilitaba a la asociación con políticas sociales y de intervención
psicosocial en la familia y en la vida colectiva tiene una historia previa que se despliega en el período de
entreguerras, desde los EE. UU. A Europa occidental y América Latina.
LA
En sus comienzos, la higiene mental se concentraba en la reforma de los manicomios t combinaba la acción de
grupos privados con algunos psiquiatras. La Primea Guerra Mundial va a producir, de manera limitada, un primer
encuentro de la medicina con las ideas provenientes de la higiene mental. La psiquiatría de guerra durante la
primera contienda descubría numerosos casos afectados de lo que comenzaba a llamarse “neurosis de combate”,
FI
y esa experiencia ofrecía un primer laboratorio para la reorientación de la psiquiatría, en un camino que
incorporaba la tesis sobre las neurosis, y buscaba herramientas psicoterapéuticas y modelos preventivos. La
combinación del movimiento nacido para la reforma de los manicomios con las exigencias de la guerra, entonces,
abría un nuevo horizonte e impulsaba otras búsquedas para la disciplina psiquiátrica. Nacían así las condiciones
para una psiquiatría separada del reducto manicomial, en un proceso que va a desplegarse a lo largo de tres
décadas.
La primera declinación de la psiquiatría organicista, apegada a las tesis de herencia y degeneración, comenzó en las
situaciones excepcionales de la guerra, frente a centenares de miles de afectado por conductas de descontrol
psíquico y emocional. Esta fue la experiencia que dio las condiciones para una recepción amplia y ecléctica del
psicoanálisis en EE. UU.
En lo que refiere a higiene mental, la implantación del psicoanálisis fue determinante en la formación de una
especialidad moderna, distanciada del modelo asilar y centrada en la consulta ambulatoria. Así va a nacer el
psicoterapeuta como como el especialista en trastornos subjetivos y desajustes menores y una nueva figura del
paciente, separado del manicomio. Esta primera operación será necesaria para el giro reformador que
desembocará en el movimiento de salud mental.
139
OM
PSIQUIATRIA Y SOCIEDAD.
Frankwood Williams, director del Comité Nacional para la Higiene Mental desde 1922, fue el promotor de una
nueva visión en este campo.
Lo destacable es que, en un plazo relativamente breve, entre los años veinte y los cuarenta, el papel de la herencia
va a quedar relegado, se destacará la importancia de la educación temprana y se promoverá un esfuerzo preventivo
que comenzará por reunir a los psiquiatras con otros profesionales no médicos, psicólogos sobre todo, así como
.C
maestros y trabajadores sociales.
El derrumbe económico y social iniciado en 1929 produjo un impacto profundo en el discurso de la higiene mental.
Las ideas predominantes en la década anterior consideraban a los trastornos sobre todo como desajustes
DD
ambientales. El enfoque ecléctico de Meyer indicaba que todas las manifestaciones del desorden social podían
abordarse con la idea psicobiológica de la adaptación, de modo que el comportamiento social era considerado
sobre todo como el plano de la expresión de la patología. En principio los higienistas mentales se habían apoyado
en esas ideas para desplazar su programa más allá del asilo. Su objetivo eran individuos “en riesgo” señalados a
partir de indicadores de una conducta perturbada. Pero el incremento de tales indicadores durante la “Depresión”
LA
venía a confirmas la importancia de una caracterización preventiva y positiva de la salud mental. Se trataba de
favorecer individuos capaces de enfrentar los conflictos en el medio social y familiar con la idea de salud mental
positiva. También se apuntaba a una intervención preventiva sobre los factores sociales que participan en los
desajustes emocionales. Esa reorientación del diagnóstico hacia la sociedad necesariamente traía aparejado un
FI
desplazamiento del foco del tratamiento individual a una propuesta de gestión colectiva; el deslizamiento a la
política era inevitable.
En ese marco, cambiaban las ideas sobre los resortes de la salud y de la patología en el orden mental y el énfasis se
trasladaba de la dimensión de la “desadaptación” a las condiciones y beneficios de lo que comenzaba a llamarse
“seguridad social”. Las nociones que en los veinte inspiraban a Meyer para definir la salud mental en términos de
adaptación ya no eran sostenibles.
El programa de la higiene mental se debía ampliar hacia propuestas de reorganización social, hacia el sostén de esa
seguridad que debía apuntalarse en el interior del sujeto y esa perspectiva social reformista ya no era compatible
con las consideraciones de la psiquiatría clásica.
LONDRES, 1948.
El congreso realizado en Londres se proponía como un acontecimiento internacional destacado. El objetivo explícito
era retomar contactos e intercambios interrumpidos por la guerra y desarrollar algunos conceptos nuevos en el
ámbito de las relaciones humanas. Apuntaba a un conjunto de disciplinas y profesiones consideradas relevantes
para los problemas de la salud mental en una perspectiva global.
140
OM
Mental, creada durante el congres. Otra figura importante fue George BrockChisholm que en 1944 era designado
secretario ejecutivo de la comisión interina para la creación de la OMS y fue su primer director en 1946 y él se debe
la ambiciosa definición de salud.
La psiquiatría de guerra consolidó los cambios en el patrón de las prácticas psiquiátricas en la medida en que
respondía a la exigencia de intervenir sobre los trastornos allí donde se originaban, fuera del asilo y el hospital. Esto
hizo posible una doble transformación en el campo de la medicina mental, por un lado, la insitencia en la patología
.C
como reacción a situaciones ambientales intolerables descubría la importancia de los vínculos y de la protección de
los grupos y la institución; por esta vía, se incorporaban conceptos y técnicas provenientes de los modelos de las
ciencias sociales. Por otro lado, los trastornos en general confirmaban la tesis del psicoanálisis sobre la importancia
DD
de los conflictos inconscientes implantados en la propia historia personal.
William Menninger, proponía un balance de las enseñanzas de la psiquiatría de guerra y tomar en consideración
factores sociales y grupales en el surgimiento de los trastornos. Este autor decía, que el trabajo del psiquiatra es
estudiar y tratar las reacciones anormales de las personas antes situaciones normales; en la situación de guerra
debe ocuparse de reacciones normales ante una situación anormal. Esta transferencia de las enseñanzas de la
LA
guerra se fundaba en una convicción, a saber, que las reacciones las situaciones de la guerra no diferían demasiado
de las que emergían en las condiciones inhóspitas del mundo social. Un saber sobre los conflictos subjetivos
intensificados en la guerra, sería capaz de iluminar los conflictos en la vida social corriente.
La traducción de los malestares subjetivos en términos de conflictos ambientales, hacía reaparecer y a la vez
FI
transformaba el viejo tema positivista de la adaptación y el papel del medio. Ahora era la antropología social, y no
la biología, la que ofrecía los modelos dominantes. Para el enfoque culturalista, la adaptación ya no era una
peripecia individual en la lucha por la existencia, sino que dependía básicamente de la socialización como
aprendizaje cultural. De allí se derivaba la importancia de la infancia, de las primeras experiencias y de la historia
de la socialización familiar temprana, lo que posibilitaba la convergencia con el freudismo. Esta convergencia del
psicoanálisis con el nuevo campo de salud mental se edificaba también en Londres.
141
OM
amenaza global. Evitar y prevenir para siempre las guerras, exigía admitir que lo que debía cambiarse residía en el
comportamiento humano. Y las responsabilidades sobre los cambios necesarios recaían en los científicos y
profesionales de la conducta, psiquiatras y psicólogos, sociólogos, economistas y políticos. El término clave para
Chisholm era la “madurez”, que se conjugaba en una seria abierta: perseverancia, confiabilidad, independencia,
determinación, flexibilidad, tolerancia, adaptabilidad, compromiso. Las consecuencias para la psiquiatría eran
obvias, ya no podían limitase a tratar individuos, sino que, trasladado el énfasis a las tareas preventiva, debía
.C
trabajar para producir una generación de ciudadanos maduros.
En la segunda conferencia, este autor desplegaba la cuestión de las responsabilidades de los profesionales,
convertidos a partir de la guerra y sus consecuencias en ciudadanos del mundo. Concluía con los lineamientos de
DD
un programa de salud mental amplio y ambicioso, que debía extender sus influencias sobre todas las especialidades
médicas t comprometerse en prácticas de profilaxis en todas las áreas de la vida social
Otro autor importante es Sullivan, que ponía el acento en la necesaria reforma de la disciplina psiquiátrica y sus
practicantes. Y atribuía un papel de avanzada a quienes habían participado de la experiencia de la guerra, en
condiciones muy diferentes de las de la psiquiatría tradicional. Se infería que era la guerra la que había despertado
LA
en algunos psiquiatras la voluntad de alcanzar objetivos que no podían reducirse a la escala modesta del hospital
o consultorio.
“Mental Health and WorldCitizenship” es el informe que preparó la Comisión Internacional y que aprobó como
declaración final el Congreso. Exponía objetivos análogos a los de Chisholm, sobre todo el tópico de “ciudadanía
mundial”. El objetivo de la preservación de la paz requería una solidaridad que iba más allá de la colaboración
internacional en la medida en que convocaba a formar una comunidad mundial edificada sobre el respeto por las
142
OM
PROMESAS, DEBATES Y FRACASOS.
El Congreso abarcó tres conferencias internacionales: la de psiquiatría infantil, la de psicoterapia médica y la de
higiene mental. En la conferencia de la psiquiatría infantil, el problema central que aparecía en el documento
preparatorio era la agresividad, las consecuencias de las tensiones grupales, resentimientos, prejuicios raciales,
sentimientos y estereotipos nacionalistas. El desarrollo de la personalidad en sus aspectos individuales y sociales,
.C
con especial referencia a la agresión, fue el tema general de esta conferencia. El foco en el niño, como el núcleo
duro de la salud y la madurez prometida al adulto, ilustraba el abordaje que el congreso procuraba de los
especialistas convocados, aunque por supuesto muchos de ellos no respondieron del modo esperado. Vale la pena
DD
destacar una posición común de mucho participantes, en la cual, si bien admitieron el marco general de la
convocatoria, llevaban al congreso el tipo de trabajos habituales en las reuniones científicas que solían frecuentar.
La conferencia sobre psicoterapia médica había definido como tema general, la culpa, que sin duda guardaba
relación con la experiencia de la guerra.
Por último, la Conferencia Internacional de Higiene Mental fue la más importante y la que daba sentido al Congreso.
LA
Recuperaba la tradición de los anteriores congresos, pero al mismo tiempo se renovaba al constituirse en el
nacimiento del nuevo movimiento de salud mental. Se desarrolló durante una semana y reunió a la mayor cantidad
de participantes. John Rees declaró en la inauguración, que no se iban a dedicar a individuos sino a grupos y
comunidades que están enfermos. Los objetivos de la salud mental para una sociedad mundial se incluían en un
FI
marco institucional explícito, la ONU, y en relación con agencias específicas como la OMS y la Unesco.
Más allá de la expresión de deseos condensada en la figura de ciudadanía mundial, no era fácil cernir sus contenidos
y alcances. A diferencia de las conferencias anteriores, en las intervenciones apareció con más frecuencia el
pensamiento de las ciencias sociales.
La unanimidad de los buenos propósitos disimulaba los malentendidos, pero el optimismo de la voluntad chocaba
con las experiencias recientes, la guerra, los muertos.
Algo quedaba eludido de manera casi unánime en ese conjunto de intervenciones sobre la edificación de la paz y
el proyecto de una sociedad mundial: la fractura que ya estaba implantada en las relaciones internacionales. La
ausencia de especialistas soviéticos en el Congreso era una directa manifestación de la división, pero el problema
apenas era reconocido. Alcanza con señalar lo excluido en el heterogéneo discurso sobre la ciudadanía mundial, lo
supieran o no sus enunciadores: más allá de la apelación global, plasmaba una idea de sociedad y de pertenencia
internacional que nacía de la hegemonía política y cultural norteamericana. Y sin embargo, en el acontecimiento
del Congreso, en esa conjunción de discursos, trayectorias y experiencias, no todo merecía ser aplastado bajo la
acusación de americanismo ni de imperialismo.
143
OM
Ley Nacional de Salud Mental 26.657
Objeto: Asegurar el derecho a la protección de salud mental de todas las personas y el pleno goce de los derechos
humanos de aquellas con padecimiento mental que se encuentran en territorio nacional.
Definición de salud mental: Proceso determinado por componentes históricos, socio-económicos, culturales,
biológicos y psicológicos, su preservación y mejoramiento implica una dinámica de construcción social vinculada a
los derechos humanos y sociales de toda persona.
.C
No puede hacerse diagnostico en el campo de la salud mental sobre la base de:
- Status político, socioeconómico, pertenencia a un grupo cultural, racial o religioso.
- Demandas familiares, laborales.
DD
- Elección o identidad sexual.
- Mera existencia de antecedentes de tratamiento u hospitalización.
Las adicciones deben ser abordadas como parte integrante de las políticas de salud mental. Las personas con uso
problemático de drogas, legales e ilegales, tienen todos los derechos y garantías de la ley y su relación con los
servicios de salud.
LA
OM
- Medicación: debe responder a necesidades fundamentales de la persona y se administrara exclusivamente con
fines terapéuticos y nunca como castigo o conveniencia de terceros.
Internación: Recurso terapéutico restrictivo y sólo puede llevarse a cabo cuando tiene mayores beneficios
terapéuticos que el resto de las intervenciones que se pueden realizar con su entorno familiar, comunitario o social.
- Debe promoverse el mantenimiento de vínculos y la comunicación de las personas con sus familias.
- Debe ser breve y ser registrado todo en su historia clínica.
.C
- Requisitos de internación voluntaria: evaluación, diagnostico interdisciplinario y motivos de la internación; datos
sobre la identidad y el entorno familiar; consentimiento informado (puede decidir por sí misma el abandono de la
internación). Internación involuntaria: recurso terapéutico excepcional cuando no son posibles los abordajes
DD
ambulatorios, pueden recurrir a un abogado. El equipo de salud está obligado a externar a la persona o transformar
la internación en voluntaria.
- La internación involuntaria debe concebirse como recurso terapéutico excepcional en caso de que no sean
posibles abordajes ambulatorios y solo podrá realizarse cuando a criterio del equipo de salud mediare situación de
riesgo cierto e inminente para sí o para terceros.
LA
- Está prohibida la creación de nuevos manicomios o neuropsiquiátricos. Los ya existentes deben adaptarse a los
nuevos objetivos y principios hasta su sustitución definitiva.
- Las internaciones de salud mental deben realizarse en hospitales generales con los recursos necesarios.
FI
145
OM
podía crear universidades libres, que estarían capacitadas para expedir diplomas y títulos habilitantes. Esto implicó
que se destinaran fondos públicos para subsidiar los establecimientos privados, con el conseguiente debilitamiento
de los presupuestos destinados a la educación pública.
En 1958, Arturo Frondizi asume la presidencia y se le presenta el anteproyecto de ley de universidades privadas. Ya
había defraudado a sus propios partidiarios con inesperadas privatizaciones de importantes empresas y acuerdos
petroleros. En este contexto la denominada “enseñanza libre” adquiere singular relieve. Por enseñanza libre se
.C
alienaron la Iglesia Católica y los grupos conservadores. Por la laica, la gran mayoría de la población, incluyendo
ciertos sectores católicos no conservadores.
El intento de reglamentación del artículo 28 tuvo una repercusión muy intensa a nivel de los tres claustros de las
DD
universidades, y en los sectores populares.
En septiembre de 1958 se realiza una movilización histórica frente al Congreso, pero el artículo 28 se mantuvo,
aunque se lo tachó de inconstitucional.
En este marco convulsionado, se crea la carrera de Psicología en La Plata a mediados de 1958.
La clase inaugural de la carrera estuvo a cargo de la primera directora de la misma, la Dra. Fernanda Monasterio.
LA
Delucca también ubica las figuras de E. Pucciarelli y N. Pousa en Filosofía, Ravagnan en Introducción a la Psicología.
Señala que esta marca fundante les imprimió a los de esa generación una actitud de resistencia y de participación
activa, un “espíritu militante”, que supone poder articular en cada acción esa participación activa con un sentido
de pertenencia: a un grupo, a un movimiento, a la búsqueda de ir “más allá” del objetivo individual, para
FI
Resalta lo positivo de su generación: el debate permanente, el alto nivel de formación filosófica y política, la cultura
del libro por sobre el apunte, la posibilidad de pluralidad teórica de los profesores. Señala que la propuesta del
psicoanálisis fue la más rica, sistematizada y coherente, ya que les aportó un conocimiento o una interrogación
nueva sobre el ser humano.
Lo negativo que sitúa de su promoción es la ausencia de trabajos prácticos, ya que sólo se nombraron profesores
titulares y adjuntos en algunas cátedras.
Finalmente, Delucca señala que la formación clínica la realizó por fuera de la carrera, y continúa siendo una deuda
que tendrán que saldar las generaciones anteriores con las actuales.
146
OM
La carrera de Psicología que se cursa en la Facultad de Humanidades de la UNLP, ofrece un plan de estudios acorde
a la naturaleza unitaria del hombre. La formación recibida de índole estrictamente científica, capacita para cumplir
tareas en el orden clínico, educacional y laboral.
El campo de actividades del Psicólogo Educacional.
o Se ocupa de la orientación educacional y vocacional en los cuatro niveles de la enseñanza.
Colabora en la elección de los métodos más adecuados a las características personales y de aprendizaje de los
.C
o
alumnos y estudiantes.
o Asesora al maestro y al profesor en los aspectos psicológicos vinculados a la educación.
o Estudia problemas de rendimiento escolar, adapta o constrye pruebas psicológicas para examinar las aptitudes de
DD
los estudiantes.
o Asesora al educador para crear un clima psicológico favorable para el proceso del aprendizaje.
Dicha formación pedagógica y psicológica que el médico no tiene, justifica la presencia técnica del psicólogo
educacional. El psicólogo educacional deberá solicitar al médico escolar diagnóstico y medidas terapéuticas
necesarias en los casos que deba establecerse la naturaleza de la enfermedad que afecte a un escolar.
LA
El Psicólogo Laboral se ocupa de la selección y orientación profesional en el campo de las relaciones humanas en
los lugares de trabajo, y no en sujetos que presentan problemas médicos.
o Estudia, planifica e investiga acerca de las funciones psicológicas que participan en el desempeño de una ocupación
FI
Cuando los problemas psicológicos se producen por afecciones de cualquier naturaleza, caen bajo la competencia
del médico laboral.
El Psicólogo Clínico. Dicha denominación exige una aclaración: es una traducción literal de la expresión inglesa
“ClinicalPsychology”, rama de la psicología del campo de la psiquiatría, que colabora con el médico en el exámen
de algunos aspectos psíquicos que requerían técnicas psicológicas. Tiene por objeto definir las características y
aptitudes vinculadas al comportamiento mediante métodos de medición, análisis y observación. Se integra dicha
información con datos del exámen médico e historia social, para luego formular sugerencias y recomendaciones
para la adaptación del individuo.
147
Las funciones enumeradas no invaden la jurisdicción de ninguna laboral específica profesional, sino que intentan
contribuir al desarrollo de un humanismo técnico, que abrace la totalidad humana comprometida.
Si bien la participación del psicólogo es ajena a todo ejercicio propio de las ciencias médicas, esto no implica que él
deba desconocer determinadas disciplinas o estudios particulares acerca de los cuales deba poseer la información
adecuada para que lo capacite para una eficaz colaboración.
OM
La psicología puede captar la unidad biopsicosocial del hombre sin necesidad de recurrir a la medicina, la cual se
ocupa de la salud y la enfermedad en el ser humano. Aquí participan factores psicológicos. Este hecho puede
justificar la intervención del psicólogo en el equipo que integra las clínicas de la conducta.
El psicólogo no puede quedar excluido de ningún sector en el que esté presente un determinado problema humano.
Su título universitario, su preparación científica y la concepción holista de la conducta, le acuerdan valores
suficientes para intervenir en una acción conjunta como colaborador y miembro de un equipo.
.C
DD
LA
FI
148
¿Qué es un psicólogo?
A fines de los 50 y principio de los 60 se instaló en Argentina la disputa entre el campo medico psiquiátrico y la
recién creada carrera de psicología, por el ejercicio de la psicoterapia. Al no estar reglamentada dicha profesión, la
formación clínica que se impartía a los estudiantes amenazaba con poner en peligro la exclusividad del ejercicio de
la psicoterapia por parte de los médicos. Se generó una polémica produciendo divisiones dentro del mismo campo
psiquiátrico, algunos profesores de la carrera de psicología eran médicos y pensaban que los psicólogos debían
estar autorizados para curar por medio verbales.
OM
Marcos Victoria (primer director de la creación de la carrera de psicología de la UBA) por el contrario estaba en
contra de la intromisión de los psicólogos en el campo de la enfermedad. En el 59 la Facultad de Cs Medicas solicitó
al Consejo Superior de la UNLP que suprimiera la rama clínica del ciclo superior de la carrera de psicología, por
considerar que el ejercicio de la clínica implicaba un ejercicio ilegal de la medicina. En el 65 se había alcanzado un
cierto consenso sobre las incumbencias del psicólogo en el área clínica, pero no había aun una reglamentación de
la profesión.
.C
Según el autor es necesario poder empezar a ordenar el campo de la psicología debido a la confusión de la función,
los roles, que no permite al público diferenciar entre psicólogos capaces y charlatanes. Por eso el primer trabajo es
proporcionarle a este público interesado, conocimientos precisos y básicos y una visión exacta de lo que debe ser
DD
el psicólogo. El psicólogo deja de ser un ser mágico, para convertirse en un intermediario entre las verdades
científicas inobjetables y los problemas particulares en los individuos y la sociedad. Al igual que el médico, sus
conocimientos deben tener un basamento empírico.
Para ser psicólogo debe tener formación universitaria y no ser un mero aplicador de test, debe tener una formación
biológica con agudo espíritu crítico para poder enfrentar diferentes escuelas sin base empírica (psicoanálisis) con
LA
psicosis de los adultos. La discusión se potencia en relación al ámbito de la psicoterapia. Hay un punto inatacable
en la resistencia de los médicos a permitir la entrada de estos intrusos: es la existencia de la responsabilidad médica.
El psicólogo no está vinculado a un juramento hipocrático del ejercicio de su profesión, diferente al médico que
debe responder ante la justicia llegado el caso, por los errores cometidos, que pueden acarrear daños considerables
o la muerte de su enfermo. La resolución de la UNLP que facilita el ejercicio de la profesión de los futuros psicólogos
los autoriza a ejercer la psicoterapia por medio verbales sin haber tenido en cuenta que un psicólogo inexperto
(que no está obligado a ningún juramento médico) puede provocar el suicidio de un deprimido ansioso por una
terapia mal conducida, etc. Siendo lo más grave la aplicación en la psicosis.
Nadie que no sea medico tiene derecho a curar, con medio físicos o con medios psicológicos. El psicólogo no es
médico y carece de autoridad científica y profesional para ejercer la psicoterapia por medios verbales, la labor del
psicólogo es otra.
OM
.C
DD
LA
FI
150
El presente trabajo forma parte de una investigación más amplia sobre la psicología en Argentina, financiada por la
Secretaría de Ciencia y Técnica de la Universidad Nacional de San Luis y el COINCET.
Resumen:
El trabajo comienza por describir los primeros desarrollos de la psicología.
Se analiza el papel jugado por la psicotecnia y la orientación profesional en ’40 y comienzo del ’50, perfil bajo el
cual se crearían la mayoría de las carreras de psicología luego de la segunda mitad de los cincuenta.
A partir del ’60 se produciría un giro hacia la clínica, que sería evidente en los primeros conflictos de incumbencia
profesional con profesionales de disciplinas afines, como así también en los contenidos de las resoluciones sobre
OM
incumbencias profesionales del título de psicólogo, dictadas entre 1980 y 1985, aún vigentes en el país.
.C
Facultad de Derecho de la UBA y el 1896 el curso en la Facultad de Filosofía. Tal como ocurría en otros países la
psicología que se enseñaba en nuestras aulas universitarias formaba parte de la currícula de otras carreras.
Este programa entró en crisis en la tercera década del siglo, debido a diferentes causas: la crítica al positivismo que
DD
figuras como Alberini y A. Korn llevaban adelante, la recepción del neoidealismo alemán, y la caída de la psicología
europea luego de la 1º Guerra Mundial.
A partir de los ’40 la psicología argentina experimentaba reorientaciones de importancia.
A partir de la década del ’30 se estaba produciendo en el país un incipiente proceso industrial, que se aceleró a
partir de la primera experiencia peronista, cuyos planes quinquenales (1947 y 1953) estuvieron destinados a un
LA
y la cultura. Allí se explicita que la orientación profesional resulta una función social que el Estado ampara y fomenta
mediante instituciones que guíen a los jóvenes hacia las actividades para los que posean naturales aptitudes y
capacidad, en beneficio suyo y de la sociedad.
Así, el Segundo Plan Quinquenal fijaba el objetivo de “encausar el aprendizaje y la orientación profesional” en el
151
OM
A nivel internacional comenzó a incrementarse el papel de la psicología entendida como profesión, destinada a la
promoción del bienestar humano.
En dicho marco socio económico y científico se fundamentaron diversos proyectos curriculares en nuestro campo
disciplinar: carrera de Psicotécnico y Orientador Profesional en 1950 en la Universidad Nacional de Tucumán;
Especialización en Psicología en la universidad de Cuyo en 1953; y la Carrera de Asistente en Psicotécnica en Rosario.
Luego del 1º Congreso Argentino de Psicología en 1954 en Tucumán, se recomendó la creación de carreras de
.C
psicología o de psicólogo en las Universidades Nacionales, con los siguientes lineamientos: Que se establezca como
sección autónoma en las Facultades de carácter humanístico; Que la carrera comprenda una plan completo de
asignaturas teóricas e intensificación práctica en las distintas especialidades, otorgando los títulos de Lic. Y Doctor
DD
en Psicología; Se establezca además carreras menores de Psicólogos auxiliares.
En definitiva, entre 1954 y 1959, se organizarían carreras de psicología en seis universidades nacionales: del Litoral
(en Rosario), Buenos Aires, Cuyo (en San Luis), Córdoba, La Plata y Tucumán. Aun cuando en algunas universidades,
como la UBA, el sesgo clínico apareció tempranamente, en los comienzos no había un énfasis exclusivo en el
psicoanálisis, ya que “se enseñaban y discutían muy diversas teorías de la personalidad”. Al mismo tiempo, se
LA
enfatizaba la necesidad de una formación universitaria que capacitara para distintos campos laborales: clínico,
laboral, pedagógico y social, en función de concebirse a los psicólogos como “especialistas en los aspectos técnicos-
científicos.”
Muchas de las primeras carreras, no fueron de psicología sino de psicólogo, evidenciando el perfil fuertemente
FI
profesionalista de las mismas. Los debates acerca de qué era la psicología, parecían subordinarse al debate acerca
del rol del psicólogo.
2. Los primeros problemas sobre los alcances del título y la legislación sobre el ejercicio profesional.
El primer problema suscitado por los alcances del título de psicólogo, ya en 1957, fue un conflicto interprofesional.
El “centro” de la preocupación era definir si al psicólogo le correspondería o no la curación de enfermos.
En 1959, el Colegio de Médicos de la Provincia de Buenos Aires expresaba su preocupación por la “práctica de
hipnosis” y porque la carrera de psicología supuestamente fomentaba el ejercicio ilegal de la medicina. Por eso, en
1960, el Consejo Académico de la Facultad de Ciencias Médicas de la UNLP, elevaba un Informe al Consejo Superior
donde recordaba que entendía por ejercicio legal de la medicina “El hecho de anunciar, prescribir, administrar o
aplicar cualquier procedimiento directo, indirecto o de sugestión destinado al diagnóstico, pronóstico y tratamiento
de las enfermedades o a la conservación de la salud de las personas”. En tal sentido, la palabra “clínica”
correspondería al “arte de aplicar en la práctica los conocimientos de la ciencia médica para la investigación y
curación de la enfermedades”. Coherentes con tal posición, el informe de la Facultad de medicina proponía que el
título de psicólogo clínico se reemplazara por el de “psicólogo auxiliar del médico psiquiatra”.
152
OM
alcance del título de psicólogo. No existía aún una Resolución general sobre Incumbencias del título de psicólogo,
entendiendo por estas a las competencias, capacidades que el psicólogo ha desarrollado tras su formación
universitaria y mediante las cuales está en condiciones de llevar adelante determinadas acciones o actividades. Las
incumbencias de un título tiene una función demarcativa, establecen los alcances y límites de unan determinada
formación universitaria.
Primera resolución sobre incumbencias del psicólogo (1980). “En el área de la Medicina y sin perjuicio de su
.C
competencia en otras áreas le incumbe la obtención de tests psicológicos y la colaboración en tareas de
investigación psicológica únicamente por indicación y bajo supervisión y contralor del médico especializado en
Psiquiatría. Además, en Medicina de recuperación o rehabilitación, pueden actuar como colaboradores del médico
DD
especializado y con las limitaciones que indica el párrafo anterior. No les incumbe la práctica del psicoanálisis, de la
psicoterapia, ni la prescripción de drogas psicotrópicas”.
Dicha resolución fue conocida como la “resolución de los tres no”. Las incumbencias del psicólogo venían a definirse
por sus restricciones o prohibiciones: no al psicoanálisis, no a la psicoterapia, no a la administración de drogas
psicotrópicas.
LA
profesionales de psicología, planteando que debían ser las entidades representativas de cada disciplina las que
debían establecer tales incumbencias.
c. Fuerte repercusión en la opinión pública. El tema de las incumbencias del título de psicólogo fue comentado y
analizado por editorialistas en notas de fondo u opinión en distintos periódicos, evidenciando solidaridad con la
posición sostenida por las entidades de los psicólogos. Una de las razones de dicho respaldo teníaque ver con que
el tema de la restricción inconsulta a las incumbencias del psicólogo se había transformado en paradigma de un
enfrentamiento entre posturas que defendían un mínimo de libertad de la sociedad civil por un lado, y las posiciones
de un estado fuertemente autoritario, que ya comenzaba a evidenciar fisuras.
Todo esto llevó a una segunda propuesta de incumbencias de título de psicólogo en 1980elaborada por la Tercera
Asamblea del Consejo de Rectores de Universidades Nacionales, que modificaba algunos criterios de la resolución
anterior:
“El título es habilitante para toda labor de orientación psicológica que se realice exclusivamente mediante la
utilización de métodos y técnicas propios de esta disciplina, tales como las entrevistas y los tests psicológicos, y
tenga por mira promover el desarrollo armónico de la persona. Dicha labor se orienta hacia el análisis y
153
OM
corregir los defectos que se observaban en las anteriores.
Después de Malvinas, con la dictadura en retirada, la psicología argentina obtenía nuevos reconocimientos
institucionales.Durante 1983 se sancionaron leyes del ejercicio profesional de la psicología y coincidían en por lo
menos tres características: el reconocimiento de la plena autonomía del psicólogo, la existencia de diferentes
campos de la práctica profesional y la pertinencia del tratamiento psicoterapéutico en el campo clínico. Dos años
psicología.
.C
después de la recuperación democrática, todos los estados del país legalizaron el ejercicio profesional de la
Desde el punto de vista legan, todavía seguían vigentes las resoluciones sobre Incumbencias de título dictadas en
DD
1980. Ante una solicitud de la FePRA convocó a las Jornadas deTrabajo para la elaboración del as Incumbencias del
título de Psicólogo y Lic. En Psicología. El resultado fue el proyecto de resolución, inmediatamente aprobado, a
través de la resolución 2447/85, cuyas características salientes hay que señalar en primer lugar, el haber surgido a
partir de una amplia participación de la comunidad psicológica nacional. En segundo lugar, haber contemplado
tanto las capacidades científicas como las relativas a los distintos campos del ejercicio profesional: el clínico, el
LA
Para finalizar, es oportuno señalar que las incumbencias merecen algunas críticas, toda vez que están atravesadas
por criterios de demarcación y referencias teóricas muy diversas. Esas inconsistencias estaban claras y no parecían
resultar fundamentales en aquel momento. De la misma manera, el énfasis en las competencias del área clínica,
podían explicarse por razones coyunturales, ya que había sido el primer y principal foco de tensión y conflicto en la
delimitación de los alcances del título. No obstante, las incumbencias resultaron relativamente equilibradas, han
constituido una herramienta de enorme valor para la elaboración de los perfiles de graduado de los planes de
estudio de las carreras de psicología en la Argentina. Y al mismo tiempo, esos perfiles han posibilitado diseñar los
objetivos de los planes de estudio y han posibilitado la selección y recorte de los contenidos y temáticas de estudio.
154
Nos hallamos en la actualidad en una situación de emergencia referente al problema de la salud y la enfermedad
mental, hay una necesidad de elaborar y aplicar planes de basto alcance social en el terreno de la higiene mental y
la salud pública, no solo en cuanto a los enfermos mentales sino también conductas antisociales y perturbaciones
conflictivas de todo tipo, es necesario un enfoque desde la profilaxis. Se destacan los siguientes hechos:
1) Necesidad de mejorar y difundir la asistencia a los enfermos mentales.
2) Atender los requerimientos del diagnóstico precoz y la rehabilitación.
3) Necesidad de actuar en situaciones que –sin ser enfermedades mentales– se beneficiarían con la ayuda
profesional del psicoanalista, psicólogo o psiquiatra.
OM
4) Gran limitación social de muchos procedimientos que son, de índole terapéutica y no preventivos.
5) Gran limitación de muchos procedimientos por ser, de índole individual (a lo sumo grupal) con los que sólo
podemos atender a una pequeña proporción de individuos.
6) La índole de las afecciones mentales, no tiene causas específicas, sino una compleja constelación multifactorial
de índole social (educación, relación madre-niño, trabajo, alimentación, vivienda, etc.), con lo cual el problema a
enfrentar se hace sumamente complejo.
.C
7) El problema es social y nuestros instrumentos son individuales (o grupales –
Cuanto más–); enfocamos en primer lugar la enfermedad y lo que se requiere es la profilaxis y la promoción de
bienestar y salud.
DD
Entonces no se debe enfrentar el crecimiento de las enfermedades mentales con un incremento de la cantidad de
psiquiatras y psicoterapeutas que trabajan de manera individual.
Entre los psicoanalistas no nos hemos ocupado sistemáticamente del tema de la higiene mental, profilaxis. Este
problema se enuncia
LA
su más alto nivel. El problema está en construir una estrategia que permita aplicar y aprovechar nuestros
conocimientos (psicoanalíticos) en más vasta escala.
PSICOANÁLISIS CLÍNICO
El psicoanálisis se define por constituir al mismo tiempo una terapia, una teoría y una investigación, sin embargo
debemos reconocer que el valor social del psicoanálisis en cuanto terapia es bastante limitado, es decir, hay una
limitación social de psicoanálisis, ya que es utópico pretender formar tantos psicoanalistas para que toda la
población sea sometida a tratamiento psicoanalítico.
La importancia social del psicoanálisis reside en su capacidad de ser un método de investigación de los fenómenos
psicológicos, aporta conocimientos valiosos sobre las leyes psicológicas que rigen la dinámica de la salud y la
enfermedad. Pero el psicoanálisis clínico no puede resolver por sí solo el problema de la salud mental en la amplitud
y extensión en que ello se hace necesario en el presente, por lo tanto formar más psicoanalistas para enfrentar este
problema es insostenible. Pero la investigación del psicoanálisis clínico aporta resultados y conocimientos de gran
valor, que son los que sí pueden y deben emplearse en vasta escala en los programas de higiene mental.
Sus aportes pueden ser utilizados en dos estrategias de la salud pública:
155
OM
El psicoanálisis aplicado Freud lo utilizó en el caso Schreber, Totem y Tabú, etc. es un verdadero procedimiento de
investigación. Es posible utilizarlo en el estudio de distintas manifestaciones culturales, comportamientos o
actividades y también en el estudio de pautas culturales y en el de la interacción individuo sociedad.
Psicoanalisis operativo, puede considerarse como una variante del aplicado, ya que al igual que este, se realiza
fuera del contexto en el que se lleva a cabo el psicoanálisis clínico, se caracteriza por:
Se utiliza en situaciones humanas de la vida corriente, en cualquier actividad o quehacer o en toda institución en la
.C
que intervienen seres humanos, es decir, en la realidad y la situación viva y concreta (educación, trabajo, juego,
ocio, etc.), y en situaciones de crisis normales por las que necesariamente pasa el ser humano (cambios de lugar,
de estado civil, de empleo, paternidad o maternidad, muerte de familia-res, eta.), además de las crisis normales del
DD
desarrollo.
Se indaga los dinamismos y las motivaciones psicológicas inconscientes, pero se utiliza dicha indagación para lograr
modificaciones a través de la comprensión de lo que está ocurriendo, cómo y por qué.
Esta intervención (operación) se realiza a través de múltiples procedimientos, sea interpretando las relaciones, la
tarea, los procedimientos, la organización, la institución, la comunicación, etc., para lograr una modificación de las
LA
1) No admitir ninguna urgencia por formar más psicoanalistas para resolver el problema social de la salud y la
enfermedad mental, es necesario no perder la rigurosidad y condiciones para su formación.
2) Revisar nuestros programas de estudio para que no se orienten a formar profesionales del psicoanálisis, sino
investigadores del psicoanálisis, incrementando la enseñanza de metodología, filosofía de la ciencia, etc.
3) El único organismo encargado y habilitado para formar psicoanalistas es el instituto de psicoanálisis, no permitir la
formación de psicoanalistas silvestres.
Entonces el eje fundamental es la formación del psicoanalista clínico en cuanto científico y técnico de un método
de investigación.
156
OM
debe proporcionar los conocimientos e instrumentos necesarios para actuar antes de que la gente enferme dentro
de actividades grupales, institucionales, y de trabajo en la comunidad.
Los psicólogos legalmente deben ser autorizados para ejercer la psicoterapia pero no deben ser alentados a ello,
ya que desde el punto de vista social no es lo óptimo preparar profesionales que se dediquen en su mayor
proporción a la actividad asistencial e individual, porque lo que necesitamos es la atención de la salud pública en el
plano de la promoción de salud y en escala social.
.C
El campo específico del psicólogo es el de la psicohigiene, no el de la enfermedad mental. Psicohigiene quiere
decir utilización de recursos (conocimientos y técnicas) psicológicos para mejorar y promover la salud de la
población (y no sólo evitar enfermedades), tanto como quiere decir administración adecuada de esos recursos a
DD
nivel de la organización de la comunidad.
La preparación de los psicólogos como auxiliares de la medicina es totalmente errónea, ya que su campo está
principalmente fuera de la medicina y fuera de la enfermedad. Hay que aclarar que, no significa que no debe
enseñarse psicoanálisis a los psicólogos, todo lo contrario. Lo que no debemos hacer es transformar a los psicólogos
en psicoanalistas silvestres, es decir no enseñarles a manejar el psicoanálisis clínico. Lo que si es necesario es que
LA
enseñemos el psicoanálisis de tal manera que les permita comprender el comportamiento de los seres humanos
en la vida cotidiana, tanto en el ámbito individual, grupal, institucional y comunitario, comprender las motivaciones
inconcientes, reconocer los conflictos, los mecanismos de defensa y las ansiedades.
FI
PSICOANÁLISIS Y MÉDICOS
Es importante incorporar la formación y el pensamiento psicoanalítico en los médicos, pero sin que estos
abandonen su campo específico para transformarse en psicoanalistas, ya que se considera esto como nocivo,
porque entonces el psiquiatra, pediatra, u otro médico, que emprendía un análisis o requería información sobre
157
EL PSICOANALISTA EN EL HOSPITAL
Cuando el psicoanalista va a trabajar al hospital, lo que no debería hacer es tomar pacientes del hospital en
tratamiento psicoanalítico dentro del hospital (psicoanálisis individual) y este se ve abrumado por una enorme
cantidad de trabajo. Lo que debe hacer es enseñar a sus colegas a pensar psicoanalíticamente (no a hacer
OM
psicoanálisis clínico), a utilizar los conocimientos dinámicos de tal manera que ellos los puedan utilizar dentro de
otras técnicas terapéuticas o bien dentro de sus propias relaciones grupales, o dentro de toda la propia organización
institucional, de la sala o del hospital, tanto como en la comprensión del trabajo de comunidad.
La práctica demuestra que el psicoanalista es más útil en el hospital cuando forma grupos operativos o de
enseñanza, que cuando se dispone a una tarea asistencial con el psicoanálisis individual.
.C
DD
LA
FI
158
¿Cuestionamos qué?
Somos psicoanalistas y nos importa el psicoanálisis, hemos comprobado que sirve para que el hombre se conozca
mejor a sí mismo y al otro, para que se mienta menos y sepa manejar más lucidamente su destino, lo que
cuestionamos entonces son la omisiones que comete el pensamiento psicoanalítico corriente. Escotomiza el modo
en que la estructura de nuestra sociedad capitalista entra a través de la familia como cómplice en la causación de
la neurosis, y en que se introduce, a través de nuestra pertenencia de clase, y nuestra práctica clínica, invade
nuestro encuadre y distorsiona nuestros criterios de curación.
OM
No cuestionamos al Freud científico que nos muestra cómo la ideología de la clase dominante se transmite a través
del superyó, de generación en generación y vuelvo lerdo al hombre en su capacidad de cambio. Pero cuestionamos
al Freud ideológico que toma la sociedad como dada y al hombre como fundamentalmente incambiable (para Freud
la historia no era un proceso dialectico sino eternamente evolutivo, por eso no entendía las guerras imperialistas o
la lucha de clases). Cuestionamos además la institucionalización actual del psicoanálisis y su pacto con la clase
dominante. Cuestionamos una práctica que se vuelve elitista, es decir el aislamiento de las instituciones
.C
psicoanalíticas, sus estructuras verticales de poder y el liberalismo operante de su ideología.
¿Desde cuándo cuestionamos? Es una crónica de un proceso. Se mencionan los diversos hechos que llevan a los
psicoanalistas a asumirse políticamente:
DD
El 16 de julio de 1927 hay huelga en Viena, se realiza una gran manifestación donde la policía hizo fuego sobre la
gente desarmada. Reich, quien había participado de la manifestación, a partir de esta experiencia, tomó la decisión
de instrumentar su saber psicoanalítico, en favor de la lucha de la liberación. Para Reich la lucha contra el fascismo
y en pos del socialismo, pasa por la liberación sexual. El padre de la familia actual llena de tabúes, el tiránico padre
edípico que reprime la manifestaciones eróticas y rebeldes del niño, lo transforma en un ser sumiso presa fácil para
LA
cualquier dictador, por eso para cambiar al hombre, no basta eliminar su explotación económica, hay que cambiar
la familia.
Las masas frustradas sexualmente se neurotizan y el neurótico sabe sufrir pero no sabe luchar, por eso la miseria
sexual conviene a la sociedad capitalista, a la cual la iglesia provee de argumentos morales para justificar la
represión.
FI
En el proceso argentino, a nosotros como institución nos despertó el Cordobazo. La gran mayoría de los
psicoanalistas argentinos pedimos que nuestra sociedad (APA) se pronunciara políticamente. Nos respondió, pero
sin permitir que lo de afuera se mezclara con el ámbito interno institucional.
La mayoría de nosotros miembros de APA, éramos también miembros de la FAP (Federación Argentina de
Psiquiatras). Unos cuantos asumimos un papel activamente en FAP, y es allí donde pudimos adquirir nosotros,
psicoanalistas de alta categoría “calle”, en sentido político, pues frente a una huelga general que hubo,
distribuíamos volantes (que fijaron su posición frente al paro) de manera inocente en APA, y esta reaccionó mal,
tal así que el presidente en nombre de la población de APA nos lo prohibió terminantemente.
Se formó un núcleo de desidentes dentro de APA llamado Grupo Documento, ya que cuestionó a través diversos
documentos y actitudes, la estructura vertical de poder en la institución y el monopolio de los analistas didácticos.
Puso además en duda las reglas de juego vigentes en APA, y por primera vez una comisión directiva no fue dirigida
por unanimidad.
¿Por qué cuestionamos? Justamente por una necesidad de integración, también por considerar que el análisis
cuestionado, repensado, enriquecido por investigaciones hechas desde un abordaje Marxista y con nuevas
aperturas en lo social, puede ser un instrumento más útil en el presente e indispensable en el futuro.
159
OM
¿Para quiénes cuestionamos? Para todos los que se incluyan en nuestro proceso y este capacitados y dispuestos a
seguir trabajando a fin de desarrollar todas las posibilidades de aplicación del psicoanálisis en la lucha por una
nueva sociedad.
.C
DD
LA
FI
160
OM
político en el que se practica. El psicoanálisis ha sido distorsionado y detenido necesitando para retomar su línea
de innovación, de la contribución de otras ciencias, y de una inscripción social distinta en este momento histórico.
El ejercicio científico está ligado a nuestro estilo de vida y a la organización institucional a la que pertenecemos,
está condicionado e ideologizado por su inserción en el sistema, siendo tan solo una particularidad de las
instituciones que lo integran y sostienen.
La razón de nuestro alejamiento pasa por disidencias con la organización societaria psicoanalítica a todos los
.C
niveles: teórico, técnico, didáctico, investigativo, económico, e ideológico. En este plano el enfrentamiento y las
exigencias de acción concreta que comporta, es insuperable e impugna a la ideología global de la Institución, por lo
cual no nos impulsa ninguna intención reformista ni reivindicatoria intra-institucional.
DD
Esta separación, producto de un largo proceso es indispensable, nos declaramos abiertamente partidarios de una
inscripción cualitativa y cuantitativamente distinta dentro del proceso social, económico y político nacional y
latinoamericano. Tenemos el propósito de poner nuestros conocimientos al servicio de las ideologías que
cuestionan sin pactos al sistema que en nuestro país favorece la explotación de las clases oprimidas, y que reprime
toda manifestación política que tienda a rebelarse contra él. Nos comprometemos con los sectores combativos de
LA
la población que luchan por el advenimiento de una patria socialista. La política que se ejerce desde los cargos
directivos tiene como efecto consolidar cada vez más la estratificación jerárquica destinada a sostener el privilegio
económico de quienes están en el vértice de la pirámide. Se establecen pactos ideológicos entre Ciencia y Sistema,
articulaciones entre estructura institucional e ideología de clase dominante. La Asociación Psicoanalítica Argentina
está compuesta por 367 personas, de las cuales 194 pertenecen como miembros a la Institución y el resto al Instituto
FI
de Psicoanálisis como egresados y candidatos. Este sector no tiene acceso a la política institucional, ni puede recibir
información exhaustiva de la misma. Solo algunos miembros Titulares tienen voz y voto en las decisiones
importantes.
Un candidato a psicoanalista se ve forzado a destinar a su formación entre 40 y 50 horas semanales de trabajo-
estudio-dinero, lo cual significa, renunciar a otra actividad esencial por cuatro años, o realizarlo en el tiempo de
descanso, a costa de la salud física y mental. Son en última instancia los pacientes quienes pagan ese artificial
sobrecargo.
Este ordenamiento vertical en que la autoridad jerárquica no coincide con el mayor nivel científico, sino con la
antigüedad y la experiencia burocrática, tiene como resultado que se desnaturalice la función específica de la
institución de promover la evolución teórico-técnica del psicoanálisis, sustituyéndola por la búsqueda de prestigio,
status y logros económicos. Las características del modelo institucional son indicadores de la necesidad del sistema
socio-político-económico de sostenerse sobre un poder científico prestigiado y monopolista del conocimiento.
Lo que nos separa esencialmente de la Institución, es que esas modalidades de funcionamiento societario, aíslan a
la Institución con la realidad en cuanto a la política externa, van encastillando a los psicoanalistas, en el reducto de
161
OM
la Asociación Psicoanalítica Internacional. Esta decisión es parte de un proceso signado por la crisis en que se
encuentra el Psicoanálisis y la institución que hasta hoy aparecía representándolo. Para entender esta crisis hay
que referirse al contexto socio-enconómico en que se da. Es inseparable nuestro cuestionamiento a la APA de un
proyecto político mínimo en el que se exprese la reinscripción del Psicoanálisis en condiciones diferentes. Nuestra
disidencia con la APA es de base y nos obliga a replantear cuál es nuestro papel como profesionales de un campo
específico –El psicoanálisis- en el proceso de transformación de nuestra sociedad.
.C
La crítica a la APA que desarrolla el Grupo Documento, no es una crítica a una asociación profesional que
simplemente “funciona mal”. La APA es coherente con un sistema social del que reproduce, sus relaciones de
explotación, sus privilegios y los métodos de deformación y represión de cualquier pensamiento cuestionador.
DD
La APA llegó a constituir una empresa que lucha por la posesión monopolista del Psicoanálisis. Su intención
monopolista con respecto al resto de los profesionales de la salud mental, se refleja en su estructura interna, en
que un reducido número de personas detenta formalmente todo el poder político; este poder se ejerce en la
restricción del voto y a través del sistema didáctico. Así se constituye una pirámide institucional donde están
regladas las jerarquías, y no se puede modificar la instrumentación ideológica del Psicoanálisis al servicio de las
LA
clases dominantes de nuestra sociedad. Pero la minoría en la APA que ejerce el poder dentro de la misma debe
apelar, para mantener la hegemonía, a la censura de cualquier expresión que tienda a un cambio real. Esto generó
condiciones que dificultan un auténtico cuestionamiento de los supuestos básicos de la teoría y de la práctica
psicoanalítica, enfatizándose en cambio desarrollos secundarios y detalles formales de la técnica. Resultó una
FI
autocensura, ya que era menos riesgoso hacer aportes parciales sobre líneas ya aceptadas que exponerse a las
consecuencias de la disidencia. Este fue uno de los factores que incidieron para el estancamiento científico del
Psicoanálisis.
La orientación dominante de la APA consiste en desarticular al Psicoanálisis del resto de las disciplinas científicas,
bajo el pretexto de preservar una supuesta pureza del Psicoanálisis. A esta concepción estrecha en el plano teórico,
corresponde una práctica igualmente limitada: no se profundizaron múltiples aplicaciones de la teoría psicoanalítica
en otros campos de actividades distintas del Psicoanálisis individual.
El valor social del Psicoanálisis está dado por ofrecer un cuerpo teórico cuya elaboración permitiría crear
instrumentos terapéuticos para grupos cada vez más amplios de la población, no por los pocos individuos a los que
se puede asistir. Los psicoanalistas deben asumir su limitación actual para dar solución al problema de grandes
masas de población. Las posibilidades de cambio de la institución en el plano científico e ideológico están limitadas
por su forma de inserción social.
Nuestra renuncia debe contextualizarse en relación al momento actual del movimiento psicoanalítico, ligado a las
condiciones existentes en nuestro país, en el que se agudizan las contradicciones entre los sectores que detentan
el poder económico-político y masas de la población cada vez más amplias. Las clases dominantes presionan
162
OM
Melillo, Lea Rivelis de Paz, Aída Dora Romanos, Jorge Rovatti. Leopoldo Salvarezza, Fanny Elman de Schutt, Jaime
P. Schust, Horacio Scornik, Gilrberto Simoes, Raquel Kozicki de Simoes, Femando Ulloa.
.C
DD
LA
FI
163
La mesa fue coordinada por el Dr. Guillermo Ferschtut, y se realizó en la Facultad de Filosofía y Letras de Bs As en
1965.
Más que tomar partido a priori por alguna de las posturas, el objetivo es repensar los conceptos que aquí se
presentan. Reiniciar un diálogo, actualizarlo, constituye una apertura.
Se propone una mesa redonda donde se discuta sobre la Psicología concreta, así se va a intercambiar información
acerca del significado y sentido de la Psicología Concreta.
Este término fue acuñado por Politzer(1), que intento interrelacionar lo interno y lo externo, lo subjetivo y lo
objetivo, también se ocupa del grado de compromiso que tiene el psicólogo frente a su teoría científica
OM
Dr. Rozitchner: (es filósofo). Me voy a ocupar de la relación que existe entre la ideología y la Psi. Concreta, esta
comprende el carácter más particular, más singularizado der una conducta, en este sentido aparecería aquí
contrapuesta a la ideología, que se refiere a los caracteres más generales que la encuadran. Ideología seria la
expresión conceptual de loslímitesmás amplios dentro de los cuales se halla encuadrada una determinada clase o
un determinado grupo humano. Ideología seria el marco racional en el cual una clase o un grupo humano toman
conciencia de sí misma.
.C
Por lo tanto la comprensión psicológica de la conducta concreta de un individuo singular, dependerá de este campo
más amplio de ideas, dentro del cual la psicología se inscribe.
Hay dos maneras diversas de considerar la significación de una conducta dentro del marco más amplio del contexto
DD
ideológico que encuadra.
1.- podemos tratar meramente de comprender, en tanto psicólogos y dentro de una determinada concepción
psicológica, como una conducta es coherente respecto de la ideología del actor. En estecaso no nos estaríamos
refiriendo al campo de la verdad de la ideología: no nos preguntamos como la conducta individual asume su
significación dentro del proceso histórico.
LA
2.- o podemos tratar de comprender el problema de la verdad en la relación que el hombre mantiene con el mundo
a través de la ideología. Esta nueva relación ya no se refiere a la media entre psicología y la ideología, sino entre la
psicología y la verdad de la ideología, por lo tanto lo que tendríamos que debatir seria como esa ideología, en tanto
teoría del mundo, da cuenta del proceso histórico que engendra el sentido de las conductas y como contiene la
necesaria modificación de la estructura material, concreta, histórica de la cual esa concepción ideológica pretende
FI
dar cuenta.
Es importante señalar, que lo concreto no es algo ya dado, sino fruto de un proceso, de un trabajo y por lo tanto lo
concreto debe ser constituido. Para Marx lo concreto “es la síntesis de las múltiples determinaciones” que
constituye cada objeto.
Entonces concretizar es todo aquello que hace un objeto, que aparece entre nosotros, pueda recibir todas esas
relaciones que lo constituyen, pu8eda hacerse el receptáculo significativo de todas las relaciones que lo
entrecruzan, que llevan a una conducta a ser conducta concreta, a un objeto a ser concreto.
Concretizar SIGNIFICA así integrarlo al orden del mundo del cual recibe su verdadera significación. Por lo tanto,
cuando enfocamos a partir de esta descripción el problema de la psicología concreta, se nos plantea la necesidad
de saber si las síntesis a las cuales llegamos son efectivamente síntesis concretas. No toda síntesis puede alcanzar
el grado de concreta. En el nivel que nos movemos tanto el psicoanálisis como el psicólogo sintetizan, unifican, para
comprender. Pero en la medida en que esas síntesis y esas significaciones no dan cuenta de su relación con la
totalidad del campo en el cual esa conducta analizada se inscribe, dejan de contener en esa síntesis el carácter de
verdad que solo lo adquieren en tanto aparecen referidas a toda la estructura. En la medida en que esa síntesis no
164
OM
de la que forman parte los anormales y las conductas anormales, que el analiza, se produce esta otra evidencia:
necesariamente tendrá que comprender de qué manera el mismo esta encadenado, en su tarea de comprensión
de la realidad humana, a la tarea de modificar toda la estructura que lo produjo, a él en tanto desequilibrado, y al
otro en tanto anormal.
Para poder alcanzar una teoría verdadera de la realidad requiere necesariamente introducirse dentro del campo
concreto y material de la época, comprender su sentido que se revela en las luchas de clase de su propia comunidad
.C
para esbozar desde allí el modo mediant5e el cual los desequilibrios que esa estructura suscita pueden ser
resueltos. Si el psicólogo no asume esta decisión que lo conecta con su propio desequilibrio y no acepta la aparición
de desequilibrios como producidos por una estructura común que los provoca, creerá al ejercer su profesión, que
DD
está ayudando a superar los determinismosque pesan sobre el otro, pero en lo que a él se refiere permanecerá sin
asumir los determinismos que restringen su óptica científica tanto como su propia vida. Su vida
profesionalserádeterminada por una estructura social, que en mejor de los casos, por el status que le concede, le
permitirá gozar de una libertad aparente que no es sino otra de las formas de enfermedad social, esta sociedad se
encuentra fundada en una división que conspira contra la síntesis verdadera. De esta manera el sentido de toda la
LA
estructura no puede aparecer para cada uno de los individuos que forman parte de ella: los condena a la disociación,
a la abstracción y a la soledad.
Si el teórico o el profesional acepta la trampa de esta propuesta para “ganar su vida” lo más probable es que pierda
en el sentido humano, no podrá comprender la estructura a la que pertenece. Romper el privilegio, hacer, darse la
FI
posibilidad de una verdadera teoría significara asumir lo concreto de su situación, su ser político, su ser histórico,
etc.
Dr. Bleguer: Politzer, es el que habla de psicología concreta, tiene una obra psicología que cambia por su ser político.
Él es un ejemplo de cómo se trabaja con la ideología en un campo científico, utiliza lo que llamamos modelos
165
OM
La E.C.R.O está constituido en su parte consiente, por los conocimientos adquiridos y por la parte inconsciente por
fantasías que cada uno tiene de acuerdo a su historia personal sobre 3 situaciones básicas: las fantasías de
enfermedad, de curas y de análisis.
Este instrumento de trabajo debe ser analizado constantemente, se descubrió que cada aprendiz, tiene 4,5,6
esquemas referenciales que provienen de su análisis individual, de dos analistas de control, de los profesores del
instituto, de las discusiones que escucha, etc, y cuando va ainterpretar tiene una verdadera neurosis de duda y no
sabe que vector tomar.
.C
En el individuo hay un grupo interno y hay una dialéctica interna, que tiene un proceder y algunas características
muy particulares que son el reflejo de la dialéctica externa. La neurosis es un proceso fundamentalmente ligado a
DD
la perturbación del aprendizaje de la realidad, de la lectura de la realidad, el aprendizaje es de vínculos, donde está
un sujeto, el yo y el otro, donde están incluidos dos aparatos transmisores y receptores. Y estos procesos de
codificación están condicionados por el grupo interno, que envía mensajes a través de canales diferentes al
terapeuta para que los decodifique.
La interpretación, instrumento básico del trabajo de análisis, es la fantasía que el terapeuta hace de la fantasía del
LA
analizado, es la hipótesis que el terapeuta hace de los contenidos inconscientes del analizado. Esto es importante
porque en la psi. Concreta su unidad de trabajo está dada por 3 elementos, el existente de ese momento-
emergente de una situación interna-, la interpretación que cae sobre ese existente y en la relación entre estos dos
surge el tercer elemento el “yo emergente”, sobre el cual vamos a valorizar la operatividad de la interpretación. Es
FI
frecuente ver trabajos en psicoterapia donde está la interpretación pero no el emergente nuevo, y este es
fundamental porque el terapeuta toma este emergente y vuelve a interpretar, de esta manera el proceso
terapéutico tiene la forma de espiral permanente donde se van resolviendo las contradicciones.
De esta manera el conocimiento de los nuevos emergentes evaluados en términos de operatividad da la posibilidad
de hacer predicciones de nuevos procesos. Cumplidas estas consignas el método psicoanalítico termina por ser el
método científico de lo más concreto posible.
DR. Rozitchner: Es importante señalar que la ideología debe ser explícitamente expuesta, tematizada en el campo
teórico en el cual se realiza la tarea psicológica, el problema ideológico forma parte del campo del análisis y tiene
que aparecer en la definición misma del objeto de la psicología.
Es importante señalar que la “relación objetal”, donde los objetos a los cuales el sujeto se conecta son al mismo
tiempo que objetos, también mercancías, tienen por lo tanto un valor de uso y un valor de cambio. Sucede que si
yo los considero meramente como “objetos” y analizo la relación inmediata, ese objeto solo aparecerá como valor
de uso, en la medida que posee solo una significación relativa al sujeto, pero dejara afuera lo que Marx considera
el “valor de cambio”, es decir como ese objeto se inserta y se inscribe en las categorías que lo produjeron como
objeto mercancía dentro de un campo más amplio que engloba la totalidad el proceso social.
166
OM
El problema reside en que hay urgencias en todas las épocas, en esta también hay urgencia, entonces no tenemos
por qué cerrar todas las escuelas de psicología para dedicarnos a la economía y militancia. Yo pienso que hay otro
camino que es más correcto y concreto. Creo que una modificación radical de estructuras económicas no liquida la
necesidad de la psicología y comprensión del hombre.
¿Qué tiene que hacer el psicólogo? Pienso que tiene que ver la sociedad en la cual vive comprendiendo su dinámica,
tratando de insertar su campo científico y profesional dentro de lo que está ocurriendo en el mundo social a la que
.C
él le interesa ligarse o plegarse como científico o psicólogo, por lo tanto el primer paso que hay que dar ahora es
pasar de la psicología de la terapia a la de la psicohigiene, de la psicoprofilaxis, de la curación a la psicología del
aprendizaje, de la individual a la institucional, tenemos que llevar a la psicología a la vida cotidiana, no esperar que
DD
la gente se enferme para intervenir.
Dr. B: Tenemos que volcar a los psicólogos hacia otra cosa, y esto nos enfrenta a una tarea nueva, construir nuevas
categorías conceptuales, teorías e instrumentos para esta nueva tarea.
Hay dos integraciones a realizar: una es la de la actividad ideológica con la científica, la otra la de la praxis del campo
científico en sí mismo. Todo esto integrado y sintetizado es la psicología concreta.
LA
Dr. Caparros (C): Politzer, el no dejo la psicología para abstenerse de toda actividad, el cambio por otra área de
conocimiento donde se sentía más valioso y trascendente para lo que se jugaba en ese momento. Él fue uno de los
fundadores y directores de la universidad obrera y uno de los primeros fusilados por los nazis en Francia, no creo
que eso sea un automutilamiento de nadie.
FI
Quisiera decir que no sólo debemos ocuparnos de cómo se integra la Psicología en el quehacer del hombre, de
cómo integra el psicólogo sus otras tareas sino también de cómo integra la Psicología al hombre que hace Psicología.
Ya se dan dos campos: aquel campo en el cual el hombre actúa ya en el campo psicológico y aquel en que actúa
fuera del campo psicológico. Por así decirlo, fuera del campo psicológico pero con una unidad entre estas tareas y
su tarea científica. Porque de lo contrario, en la medida en que como psicólogo es una persona y como hombre es
otra, denuncia su propia alienación.
No basta con ser psicólogo, hace falta ser hombre, es decir asumir su momento, su tiempo, su etapa histórica y
militar según determinados objetivos, y como psicólogo hay que ser un militante que hace psicología. Para ello
tiene que plantearse tanto reflexionar sobre la finalidad de su tarea como sobre los métodos que usa, como sobre
los medios que emplea, acorde a la forma explicitada de su ideología, es decir, pienso que no puede ser psicólogo
de empresa, o sea aquel que busca la manera de aumentar la explotación. Pienso que en todo tratamiento
terapéutico hay que tener presente a que sociedad reintegraremos a un hombre y en base a eso revisar el
tratamiento.
Dr. Ferschtut: Ya lo había predicho Pichón, quizá en todo aprender, que la obligación del psicólogo sería la de
responder primero con la comprensión y después con la acción, sin excluir de la acción, por supuesto, que tenemos
167
OM
encuadra, enjuicia y modifica prácticamente los hechos, en cambio la postura política no solamente preside y
condiciona sino que está actuando sobre los hechos.
Dr. Caparros: la psicología si es una faceta del enfoque del estudio del hombre (y concreto por ende) no puede ser
disociada de la ideología. Una ideología que no debe restringirse a una formulación global puesto que en nuestra
disciplina ello no es lo adecuado sino que debe verse como aparece en la conducta de cada hombre.
Decía Marx que: “por mucho que el hombre sea un individuo particular, y es precisamente su particularidad lo que
.C
lo hace individuo y un verdadero ser social, es también la totalidad la existencia subjetiva de la sociedad, pensada
y experimentada presente para sí”.
Esta totalidad pensada presente para sí, del todo social idealmente vivido, es la ideología que en cada sujeto
DD
fundamenta en última instancia su conducta y que se debe a la elaboración individual de la estructura del mundo y
de sí mismo lograda a través de la praxis y que se intercala como factor codeterminante del comportamiento. Esta
ideología puede ser consciente o inconsciente, no nos quedamos en el estudio de la ideología en general sino de la
ideologíaeste hombre concreto, pero esta ideología debe ser tomada en relación a la estructura material y la
superestructura ideológica y las paraestructuras de la sociedad.
LA
Los rasgos ideológicos toman en un momento existencia real y concreta, en esa conducta que siempre es un
momento social y psicológico, o sea genérico e individual simultáneamente, por eso es preciso en cuanto psicólogos
sabercuál es nuestra propia ideología en general y además cual es la que subyace en nuestra practica psicológica.
Esto es, que al actuar como psicólogos debemos de tener clara conciencia de que nuestra propia ideología es un
FI
factor que modela nuestro trabajo de campo y esto es esencial porque así como se exige que todo terapeuta haga
su propio análisis para poder realizar un buen trabajo personal es indispensable que todo psicólogo tenga una
conciencia lucida de su ideología si quiere manejar realmente y en profundidad una psicología concreta y un
hombre concreto.
Bleger citaba el ejemplo de Wallon, él tuvo una militancia que fue pionera entre los intelectuales de su país y cuando
llego el momento de la ocupación alemana se incorporó sin vacilar a las fuerzas de la resistencia y lucho por la
misma causa por la que fue fusilado Politzer pero al mismo tiempo escribía en los ratos de descanso lo que había
de ser uno de sus libros más importantes “Del acto al pensamiento”, todo ello prueba que no se oponen ni excluyen
la actividad militante y la científica, la actividad militante es la actividad del hombre y la científica la del especialista.
Sin la praxis militante, no se puede efectivizar una comprensión y una práctica verdaderamente concreta de la
psicología.
Ya que la mayoría de psicólogos trabajan en el terreno clínico es importante preguntarnos ¿Por qué ha ocurrido
esto? Creo que está determinado por la estructura de nuestra sociedad, un momento histórico dado por el
desarrollo de la clase media. ¿Por qué? Porque en nuestra estructura alienada esa capa media esta tremendamente
conflictuada. Hay una alienación a nivel de las costumbres, de los ideales. Una deuteroalienacion que exige a esta
168
OM
tome como modelo las apariencias que le ofrece la clase dominante, en su intento de llegar a incluirse en ella. Es
esa clase media que tiene sus pies hundidos en las capas trabajadoras sobre las que se apoya, pero que tiene su
corazón elevándose permanentemente a los poseedores.
Además en esta clase media el llegar a la meta es siempre individual, por lo tanto el fracaso también es vivido como
una incapacidad personal. Se le prometen grandes cosas, pero pocas veces es factible que lo lleguen a conseguir, y
por eso la pequeña burguesía entra en un disconfort de no realización que le suscita una desadaptación al medio,
.C
un inconformismo que no pueden resolver intentando cambiar radicalmente su sociedad.
Tiene así que intentar salir del disconfort individual y mantener su status de clase con posibilidades hipotéticas de
ascender aúnmás todavía, y es en ese momento en que recurre a la psicología como solución.
DD
Y así surge como emergente Freud, él es indudablemente el primer psicólogo concreto. Él aborda lo individual pero
sin poder sobrepasar las limitaciones de esta consideración individual que aísla al individuo de su inclusión de clase.
Las circunstancias tendían a estimular y fomentar el surgimiento de una psicología que tratase el drama humano,
ese drama que no podía ser otro como objetivo de la Psicología, que el drama del hombre de la pequeña burguesía
alienada. Entre otras cosas, porque eran los que necesitándola podían pagar sus tratamientos, lo que permite que
LA
Segundo nosotros debemos recoger los aportes de Freud y otros teóricos, pero no reiterar la misma teoría errónea
consecuencia de la alienación, como ocurrió en Freud.
Nosotros debemos hacer una psicología que responda verazmente, que sea una verdadera ciencia del hombre
alienado y que también incluya la manera de que él tome conciencia de su propia alienación.
Es necesario hacer una psicología concreta del ciudadano abstracto de nuestra sociedad y contribuir en lo que
podamos a señalarle caminos de concretización o que almenos tome conciencia de su abstracción para que luego
decida mantenerse en ella o tomar caminos que lo conduzcan a su mayor y plena humanización. Y la única forma
de lograrlo es comprender en profundidad el conjunto de sus relaciones reales (la de este hombre abstracto).
Tercero estamos atravesados por contradicciones que cabe señalar, en general hacemos psicología no para la gente
que quiere desalinearse, sino para la gente que quiere alienarse., adecuándose mejor una sociedad alienada de la
que se saca provecho material., esta es una primera contradicion de la que tenemos que tomar conciencia, procurar
una práctica donde no seamos cómplices de esta situación.
(1) Filósofo francés de origen húngaro. Estudió filosofía en la Sorbona y luego enseñó en los institutos de Moulins y
Cherburgo. Fue militante comunista, y, unido a H. Lefebvre, P. Langevin y H. Wallon, fundó varias revistas de
orientación marxista.
169
OM
publicando dos revistas antifascistas: L'Université Libre y La Pensée Libre, en 1940. Continúa su resistencia
clandestina contra el régimen nazi hasta que es detenido en 1942 por los alemanes, tras lo cual es torturado y
posteriormente fusilado en mayo de ese año. Son conocidas sus últimas palabras antes de su fusilamiento en la
cual resume su comportamiento desafiante característico: "¡Yo os fusilo a todos!"
.C
DD
LA
FI
170
OM
Índole de la materia.
El psicoanálisis se halla unido a la terapéutica (fuente de la que emergió el psicoanálisis). Terapéutica e
investigación son inseparables en el psicoanálisis, que en su totalidad sólo tiene sentido pleno, como una praxis en
la que se enriquecen recíprocamente teoría y práctica. La teoría es permanentemente verificada, modificada y
perfeccionada en el campo de trabajo. Esto corresponde al psicoanálisis clínico y es función privativa del
psicoanalista. De su campo de trabajo derivan conocimientos que pueden aplicarlos especialistas de otras ramas
.C
científicas a sus campos específicos; esto es, el psicoanálisis aplicado. Esto también enriquece el psicoanálisis (la
aplicación del psicoanálisis por ej. a la antropología, sociología, psicología social, han redundado de distinto modo
sobre distintos tópicos de psicoanálisis).
DD
El psicoanálisis aplicado tiene un campo muy vasto, tanto como el de la psicología general. La psicología es un oficio
que puede enriquecerse con el psicoanálisis aplicado. No existen fenómenos que sean privativos (para ser
comprendidos o explicados) del psicoanálisis, o de otras corrientes psicológicas. El hombre interviene en todo, y no
hay actividad en la que no pueda o deba intervenir el psicólogo, que pueda ampliar su comprensión, su pensamiento
y su operancia con el psicoanálisis aplicado.
LA
un trabajo científico ingresa como miembro adherente de la Asociación Psicoanalítica Argentina. Así se hace
evidente que no esto no puede realizarse en la Universidad, por tanto, la cátedra universitaria no puede tener como
objetivo de la enseñanza del psicoanálisis, la formación de psicoanalistas.
171
La información.
Esta debe cubrir todos los aspectos del psicoanálisis: historia, técnica, teoría, la formación del psicoanalista, la
extensión del psicoanálisis aplicado y sus perspectivas; su desarrollo, disidencias, planteamientos, la problemática
OM
que involucra, sus puntos firmes y sólidos y sus aspectos no resueltos. Además, aprender y enseñar debe consistir
en reexaminar, problematizar y no sólo repetir.
Estudiar el desarrollo histórico de una disciplina científica tiene una función normativa, pero justamente la tiene en
su grado máximo cuando se reconsidera la historia en función de los resultados últimos en que ha devenido. Por
tanto será lo más esencial el estudio de lo actual del psicoanálisis. Lo que enseñaremos no será “lo elemental”
(concepto engañoso), la realidad rica y compleja, nunca es elemental.
El pensar dinámico.
.C
Trataremos que se obtenga información, y que se sea capaz de utilizarla, que se incorpore en el esquema referencial
del estudiante. Sólo así se aprenderá psicoanálisis aplicado.
DD
La psicología no es materia de lucubración; para ser psicólogo hay que asimilar la psicología como oficio y trabajar
con ella en un campo concreto de la realidad. En psicología hay por lo general gran distancia entre lo que se formula
y lo que se aplica; cada vez debe ser menos frecuente la desvinculación de la teoría y la práctica. Cual sea el campo
en el que trabaja el psicólogo, este puede beneficiarse con el psicoanálisis aplicado y el pensamiento dinámico.
Un pensar dinámico o psicoanalítico implica:
LA
1Actuar y pensar en el nivel humano de lo que se estudia; en el hombre como mediador o actor de todo. 2 tener
en cuenta el carácter significativo de la conducta. 3 enfocar permanentemente al ser humano y su conducta como
un proceso en permanente interjuego con el medio cultural, en el que el hombre construye la cultura y se construye
a sí mismo. 4 el estudio de la conducta en sus motivaciones, objeto y finalidades. 5 comprender el vínculo de los
FI
fenómenos psicológicos con la vida real y concreta, en sus complicadas interacciones; y 6 abrir la comprensión y la
sensibilidad para todas las facetas de la vida humana con sus problemas y conflictos.
Cómo enseñar.
Hay que integrar el qué enseñar con el cómo enseñar. Hay que enseñar elaborando contradicciones y sintetizando
fragmentos. Es una aberración “saber” psicoanálisis como conductismo, gestalt, etc. pero todo separado entre sí.
Sintetizar no es injertar, no es borrar diferencias, no es ocultar contradicciones, ni es conciliación; sintetizar es
reelaborar los conocimientos de manera operativa; es abrir la problemática y avivar los puntos de contradicción, es
examinar, revisar conocimientos de un campo con las hipótesis extraídas de otros. Por ello vamos a reconsiderar
problemas de la psicología académica, (como la atención, memoria, juicio, etc.) y al psicoanálisis en función de los
puntos de vista extraídos de la gestalt, el conductismo, la fenomenología.
Sostenemos que todo lo que se enseña debe ser al mismo tiempo objeto de la investigación mientras se enseña. La
única manera viva y completa de enseñar es la de investigar y aprender mientras se enseña. Postulamos una
elaboración que no es solamente elucidación y confrontación histórica; para alcanzar una tarea completa teórica y
práctica, es imprescindible que el psicólogo haga trabajo de campo.
172
OM
médica; es un problema de carácter legal, pero su discusión no toca a la enseñanza impartida en la Universidad,
porque los psicoanalistas se forman exclusivamente en los institutos de psicoanálisis.
El análisis silvestre, es el uso de la terapéutica del psicoanálisis por personas no preparadas técnica y teóricamente
(sean médicos o no). Es para el psicoanálisis un problema más serio.
La enseñanza de la materia a mi cargo no tiende a formar psicoanalistas profanos ni silvestres. Se trata de
enriquecer el campo de trabajo del psicólogo con el manejo del psicoanálisis aplicado que incluye en forma
.C
indispensable, que incluye necesariamente un pensamiento dinámico.
DD
LA
FI
173
¿Qué son las ciencias del hombre? Estas disciplinas tienen como objeto común el hombre, la acción y el
pensamiento humano, y sus productos. En ellas incluimos a la antropología, la sociología, la economía, la psicología,
la historia, etc. ¿Y qué es el psicoanálisis? En sentido muy amplio, son las doctrinas freudianas originarias y sus
desarrollos posteriores.
El estado actual de las ciencias humanas no podría ser comprendido sin tener en cuenta los aportes psicoanalíticos.
Dicho en otros términos: la problemática, los contenidos y la metodología de las diferentes ciencias han sido
profundamente influidos por el psicoanálisis. Sus conceptos, términos, problemas y método se han incorporado de
manera directa o indirecta a las ciencias sociales y humanas, a veces hasta en sectores insospechados, y esta
influencia, en la actualidad, lejos de disminuir, parece más bien ir en aumento.
OM
El aporte psicoanalítico ha contribuido a crear lo que podría llamarse un clima de opinión: ha permeado los
fundamentos, los supuestos implícitos de las diferentes ciencias humanas. Esta influencia podría fácilmente
rastrearse incluso en aquellos autores y en aquellos aspectos de estas disciplinas aparentemente más alejados de
los conceptos y la problemática directa o indirectamente vinculada a Freud. Se trata aquí del tipo de impacto que
sólo las grandes revoluciones científicas logran efectuar sobre el desarrollo del conocer. Contribuyen a crear un
estilo de pensamiento, a penetrar positivamente incluso en las formulaciones de sus adversarios. El psicoanálisis
.C
posibilitó una nueva visión de la realidad humana.
El psicoanálisis mismo es parte de una profunda revolución ocurrida en la realidad humana: es parte de la serie de
cambios registrados en la realidad histórico-social y en el conocimiento de ella, desde fines del siglo pasado.
DD
El desarrollo del psicoanálisis tampoco sería comprensible si no se tuviera en cuenta la permanente reciprocidad
entre la labor de los psicoanalistas y la de los demás científicos sociales. En algunos casos, la simbiosis con la
antropología y la sociología, especialmente, han contribuido a originar nuevas corrientes dentro del psicoanálisis.
Es conveniente advertir, subrayar, aspectos de la doctrina freudiana que las ciencias del hombre rechazan. El
psicoanálisis ha originado una ortodoxia que se muestra particularmente rígida y agresiva. Toda ortodoxia es un
LA
grave obstáculo para el progreso de la ciencia, en tanto la meta de la ciencia es la verdad, la cual es esencialmente
provisoria. Por ello toda ortodoxia es un grave obstáculo para el progreso de la ciencia.
La inmensa influencia ejercida por Freud sobre el conocimiento social, se ha operado casi siempre fuera y a menudo
en contra de la ortodoxia freudiana. La causa de este hecho debe buscarse en ciertas particulares circunstancias
FI
que acompañaron el surgimiento de las doctrinas originarias de Freud. Todo innovador, aunque rebase su tiempo,
es también hijo de su tiempo. Si por un lado apunta y alcanza el porvenir, por el otro queda anclado a las
formulaciones de sus contemporáneos. A menudo se trata de supuestos implícitos, no claramente examinados, que
encuadran el pensamiento en determinado momento de su desarrollo. Entre esos supuestos implícitos que las
ciencias del hombre no aceptan en la actualidad, podemos recordar aquí a los dos principales: una concepción del
individuo y de la sociedad, como entidades abstractas y recíprocamente aisladas que hace particularmente difícil y
hasta incomprensible el efectivo desarrollo de la vida social y de las personas dentro de ellas; e íntimamente
relacionada una posición – que ha sido calificada de “biologista” – que implica una noción de la naturaleza humana,
particularmente rígida, como que se la vincula al juego universal de ciertas fuerzas instintivas.
La Sociología, la Psicología Social y la Antropología fueron paulatinamente revisando y rechazando en su mayor
parte la doctrina de los instintos. Sin negar la naturaleza biológica actuante en el hombre, la dicotomía individuo-
sociedad, paso a ser comprendida como fusión, reciprocidad, unidad dialéctica.
Justamente en el problema de las relaciones entre individuo y sociedad, y en la superación de esta dicotomía, los
conceptos freudianos proporcionaron un aporte esencial, aunque fueron incluidos en un marco algo distinto del de
su formulación originaria.
174
OM
incluía necesariamente en su enfoque perspectivas múltiples, surgió de estos contactos. Me refiero a la psicología
social.
.C
DD
LA
FI
175
Resumen
Este artículo da cuenta de las distintas relaciones intelectuales que establecieron con el marxismo en general y con
la figura de Georges Politzer en particular dos de los protagonistas centrales de la evolución del psicoanálisis en la
Argentina. Si bien José Bleger y Oscar Masotta sostuvieron concepciones diferentes en torno al psicoanálisis,
ambos encontraron en Politzer un modelo para pensar la relación entre el estudio del inconsciente y las
transformaciones sociales a través de la política. El artículo señala además la paradoja de que ambos autores
eludieron, deliberadamente o no, el hecho irrefutable de que Politzer más allá de su muerte heroica en manos de
OM
los nazis se había convertido en un firme opositor a cualquier intento de conciliación entre el psicoanálisis y el
marxismo. Este trabajo presenta este caso, en apariencia menor, como un ejemplo del malentendido que
caracterizó la evolución del psicoanálisis en la Argentina a partir de los años '60.
¿Por qué para introducir la obra de Lacan en nuestro medio Masotta recurre a Politzer del mismo modo en que
había recurrido Bleger al mismo autor más de diez años atrás para proponer una revisión radical del psicoanálisis y
.C
al mismo tiempo fundar una nueva psicología?
Dos maestros y dos estilos de practicar el psicoanálisis en épocas de vacios teóricos y de adscripciones políticas de
DD
izquierda, pero la confluencia de una misma zona de problemas que comprendía fundamentalmente las relaciones
entre marxismo y psicoanálisis. Desde la institución psicoanalítica oficial como Bleger, un defensor de la reforma
desde adentro, o desde afuera como Masotta, la discusión del dispositivo inaugurado por Freud desde el
materialismo dialéctico no deja de estar presente. Ya sea en sus desarrollos teóricos como así también en la
definición de una nueva práctica que encontrará una especial adhesión en un público joven de psicólogos y médicos
LA
Bleger publicó en 1957 luego de varios años de estudio e investigación, Psicoanálisis y dialéctica materialista. El
primer capítulo de este libro, destinado explícitamente a "abrir nuevos caminos" a los que se inician en la psicología
FI
y la psiquiatría, está dedicado a Politzer y se titula Georges Politzer: la psicología y el psicoanálisis. A comienzos de
la década del 60 Bleger se propuso publicar una edición de las obras completas del pensador húngaro y traducir
por primera vez al castellano gran parte de sus artículos. Esta empresa se concretó finalmente entre 1965 y 1966
en tres tomos.
Paralelamente, Masotta comenzó con la divulgación del pensamiento de Lacan en la Argentina a través de la
referencia a Georges Politzer. Esta iniciativa del pensador local siguió los lineamientos planteados por sus colegas
psicoanalistas franceses en el famoso Coloquio de Bonneval que convocó en 1960 y bajo el padrinazgo del Dr. Henry
Ey a psicoanalistas, psiquiatras y filósofos para discutir acerca del Inconciente.
¿Qué signficó primero para Bleger y luego para Masotta la alusión a la obra y especialmente a la figura de Georges
Politzer en sus respectivas revisiones del psicoanálisis? Y esta referencia compartida no puede ser comprendida sino
es en el marco de una común apelación a un nuevo público interesado en otras lecturas y usos del psicoanálisis así
como también en el intento de articulación de un problema teórico, epistemológico y también político: el de las
relaciones entre psicoanálisis y marxismo.
176
OM
al psicoanálisis y si bien, el inconsciente freudiano no representa "más que la medida de la abstracción que
sobrevive en el interior de la psicología concreta" es en el descubrimiento del sentido del sueño donde Politzer
encuentra la positividad y el valor de verdad de los descubrimientos de Freud así como también para afirmar su
psicología concreta en la definición del sueño como realización de deseos.
Los textos de Politzer sobre psicología se agrupan en dos períodos diferentes de su vida determinados por una
relación de adscripción diferente al marxismo.
.C
En 1929 el filósofo húngaro adhiere al Partido Comunista Francés y no solo abandona el proyecto en el que estaba
trabajando sino que a partir de ese momento el psicoanálisis pasará a ocupar la categoría de un objeto rechazado
por su ideología reaccionaria y antirevolucionaria.
DD
Por lo tanto, cuando Politzer se propone una crítica constructiva del psicoanálisis que rescata sus aportes para la
construcción de una psicología concreta al tiempo que su capacidad para iluminar los errores de la psicología clásica,
el autor no es todavía plenamente marxista. Y cuando Politzer se reconoce finalmente como marxista abandona el
psicoanálisis y la psicología para dedicarse de lleno a la economía política y a la militancia.
¿Por qué elegir a Politzer entonces como la figura privilegiada para hacer dialogar al psicoanálisis con el marxismo
LA
si una lectura a la letra de su obra da cuenta más de los obstáculos que de las vías para compartir ambos proyectos?
No obstante, la elección de Politzer por parte de Bleger da cuenta también de la ausencia de figuras rectoras para
realizar este ansiado proyecto de lectura del psicoanálisis desde el materialismo dialéctico al mismo tiempo que de
la fragilidad de este proyecto que sólo se sostiene en la fuerza de una crítica más que en la afirmación de una obra.
FI
Como dirá ocho años después de la publicación de Psicoanálisis y materialismo dialéctico un autor central que se
convertirá en guía para otra generación distinta a la de Bleger:
"Esta es la realidad que tuvimos que aprender a deletrear y a deletrear completamente solos. Solos pues no tuvimos
aquí, en filosofía marxista, verdaderos y grandes maestros para guiar nuestros pasos. Politzer que hubiera podido
ser uno, si no hubiera sacrificado la gran obra filosófica que llevaba en él a tareas económicas más urgentes, no nos
había dejado sino los errores geniales de su Crítica a los fundamentos de la psicología. Había muerto asesinado por
los nazis. No teníamos maestros”.
Acto seguido, Bleger se propone desarrollar un aspecto problemático de la trayectoria de Politzer: "desarrollar su
faceta de psicólogo”,sin dejar de advertir al lector que se trata de una empresa compleja que conlleva en la misma
propuesta una "traición". Porque resulta difícil encasillarlo en algunas de las definiciones posibles del accionar del
psicólogo. No fue un profesional de la psicología ni un psicólogo de laboratorio ni un implementador de técnicas
psicológicas sino que "fue el crítico de la psicología y el psicólogo de una vida vivida en plenitud" .Y más adelante
agrega una cita de un pensador francés que según Bleger define a Politzer con exactitud: fue un "filósofo activo y
militante, no sólo investigador de la verdad, sino soldado de la verdad"
177
OM
No resulta relevante para la lectura de Bleger, que la Crítica a los fundamentos de la psicología sea una obra
renegada y rechazada por su autor o que el mismo Politzer afirmara pocos años después que, "La sociología
psicoanalítica es idealista y reaccionaria. La sociología psicoanalítica aparece así como el contraveneno contra la
sociología marxista"
Estas cuestiones implican un problema menor para Bleger en relación a las potencialidades que él encuentra en
este trabajo y en la figura de Politzer para revisar el psicoanálisis desde la perspectiva de los nuevos intereses de
los jóvenes
.C
Bleger encuentra entonces en Politzer lo que efectivamente fue a buscar. Esto es un psicoanálisis con un objeto
concreto de estudio: la dramática que permitiría fundar un nuevo abordaje de la disciplina aunque se encarga de
DD
aclarar que el uso que hace de este término "no se atiene estrictamente a la acepción que tuvo para Politzer".
Reflexión que no sólo es teórica sino que también, y como la vida de Politzer se encarga de demostrar por sí misma,
es fundamentalmente acerca del sentido de la función del intelectual y del científico en nuestra sociedad.
Por lo tanto, Politzer vale por sus ideas pero sobre todo por su vida que se propone como modelo ideal del
intelectual contemporáneo que -aunque se haya visto envuelto en el dogmatismo del stalinismo como luego Bleger
LA
intentará explicar- asume sus decisiones -no importa cuáles sean- hasta las "últimas consecuencias”.
¿Cuáles serán estas últimas consecuencias que lo conducen a abandonar la psicología y hasta a renegar de sus
preocupaciones teóricas con respecto a ella? Volvemos otra vez al tema de la muerte heroica y al ideal de la lucha
política revolucionaria.
FI
"Politzer fue el único en el campo del marxismo que pudo enseñarnos el camino de la psicología a algunos de los
que hace veinte o veinticinco años buscábamos orientarnos, saber y reconocer qué era la psicología, sus objetivos,
fines, problemas y caminos. En una época en que nadie pudo decirnos que estudiar economía política no era
psicología, que estudiar neurología y biología no era psicología, que estudiar filosofía no era psicología, Politzer fue
quien nos pudo enseñar qué era psicología y qué no. Sigo creyendo que Politzer -a través de sus escritos- puede
seguir enseñando hoy mucho a todos: que la psicología está en la vida cotidiana, en los seres humanos de carne y
hueso”.
Y es este, según entiende Bleger, uno de los legados más importantes que nos dejó Politzer, el de resolver este
problema: el de las relaciones entre marxismo y psicología que, tal como podemos seguir en los escritos ulteriores
de Politzer ha dejado de ser un problema para él pero no para su lector José Bleger quien insistirá en este intento
hasta su muerte.
Pero Bleger no es el único y podemos encontrar como él, a un nuevo grupo de intelectuales que llegarán desde la
misma zona de problemas a elaboraciones teóricas radicalmente diferentes. Es interesante destacar que, es en el
seno de este mismo movimiento donde se darán las condiciones necesarias para la primera recepción del
pensamiento lacaniano en la Argentina.
178
Como señala Rudinesco, Lacan le debe al pensador marxista Althusser un reconocimiento público que le permitió
salir del campo circunscripto del psicoanálisis para lograr la adhesión de una nueva elite intelectual comprometida
con las luchas políticas de la izquierda.
Es a través del interés de Althusser que un grupo de jóvenes filósofos alumnos suyos -entre los que se encontraba
Jacques Allain Miller- comienzan a leer a Lacan a comienzos de la década del 60 desde una perspectiva filosófica
que les permite abordar los textos freudianos por fuera de las instituciones psicoanalíticas y de la práctica clínica.
Althusser inició un proyecto de renovación radical del pensamiento marxista en el marco de la crítica a la
fenomenología y la construcción del campo estructuralista. En este proyecto eligió a Lacan como un compañero de
OM
ruta privilegiado para legitimar sus desarrollos antihumanistas convocando a Freud junto a Marx.
Por lo tanto, Lacan le permite a Althusser avanzar en una dimensión teórica: el descentramiento del sujeto moderno
y la crítica al yo especular e imaginario para articularlo con el concepto de formaciones ideológicas basadas en la
estructura de desconocimiento del yo. En esta misma dirección, Lacan representa la alternativa de un psicoanálisis
que se construye en la oposición y la denuncia de los ideales considerados adaptativos de la escuela americana para
proponer una revisión epistemológica y técnica de la disciplina freudiana de carácter subversivo para el "status
quo" establecido.
.C
Tal como se desprende de la cita de Althusser anteriormente mencionada, el filósofo francés se propone retomar
con otras herramientas teóricas la tarea que señaló y que no completó Politzer . Necesidad revolucionaria que
DD
Althusser encuentra en la lectura que hace Lacan de Freud y que integra con su propia lectura revolucionaria de
Marx.
Lacan recordará la importancia del proyecto abortado de Politzer y resaltará al mismo tiempo el dolor por su
pérdida, la valentía de su lucha y la vigencia del anhelo politzeriano de construir una psicología científica.
En tal sentido, Politzer es presentado como un pionero que ofició a través de su crítica un rol de maestro del
LA
pensamiento al plantear una lectura diferente del psicoanálisis, "liberadora" y antidogmática al mismo tiempo que
propuso la introducción más clara al problema del inconciente:
En marzo de 1964 Masota no pensaba todavía que el estructuralismo y la fenomenología eran incompatibles. El
análisis existencial y el pensamiento de sus maestros -Sartre y Merlau Ponty- no eran "prefreudianos" y Lacan se
convertía para él en el pivote de una convergencia posible entre fenomenología, estructuralismo, marxismo y
psicoanálisis. Es más, en esta misma dirección Masotta le reprocha al psicoanalista francés, su falta de arrojo para
OM
Psicoanálisis y marxismo
Tal como ya hemos señalado, poco es lo que tienen en común ambos autores y no nos detendremos en ello sino
para insistir sobre nuestro interrogante inicial: ¿por qué Politzer?
Porque pese a las diferencias entre ambos, tanto Bleger como Masotta funcionaron como líderes indiscutibles de
sucesivos movimientos de transformación del psicoanálisis argentino al tiempo que ocuparon un lugar de
.C
privilegio como maestros de nuevas generaciones que se acercaron al psicoanálisis buscando algo más que una
técnica psicoterapéutica.
Si bien el peso específico de la figura de Politzer es evidentemente desigual en la obra de ambos psicoanalistas e
DD
interroga de un modo distinto a uno y a otro autor, en Bleger oficia de estímulo central para iniciar su empresa de
revisión del psicoanálisis desde el marxismo y en Masotta ocupa un lugar de puente entre la fenomenología y el
estructuralismo nos encontramos con un núcleo de significados comunes que no pueden dejar de soslayarse.
Estos significados comunes están estrechamente relacionados con el aurea que rodeaba a esta figura -convertida
LA
rápidamente en mito por su muerte trágica- que podía integrar por un efecto de lectura singular el psicoanálisis, el
marxismo y el compromiso heroico con la existencia.
Politzer, en este sentido ilustra con claridad al mismo tiempo las ilusiones y los malos entendidos que conmovieron
FI
a una parte importante de la intelectualidad psicoanalítica y es el del vínculo de esta con la cultura de izquierda, el
pensamiento progresista y el marxismo.
En Argentina, podemos encontrar algunas iniciativas en este sentido a partir de la Revista Psicoterapia dirigida por
Gregorio Bermann en la década del 30 pero con el abandono del psicoanálisis por parte de este grupo de psiquiatras
de izquierda, el inicio de las investigaciones de Bleger a comienzos de los 50 sentará las bases para una nueva
discusión del tema en otros términos.
Este tema, el de las relaciones entre psicoanálisis y marxismo -entre una teoría desarrollada para explicar las
neurosis modernas a partir de una propuesta destinada a aliviar el malestar subjetivo y una teoría desarrollada para
explicar la historia y el funcionamiento de las clases sociales que concluye en una propuesta de revolución colectiva-
, es complejo y no se entiende sin una referencia concreta a las condiciones de implantación y de recepción cultural
de estos dos grandes modelos de pensamiento elaborados por Freud y Marx.
Señalamos esto para tratar de comprender cómo el movimiento de expansión del psicoanálisis argentino en los 60
no puede analizarse sólo en su alusión al campo específico en cuestión sino que, como intentamos demostrar a
180
OM
.C
DD
LA
FI
181
OM
estructura. Esto determina un salto de las ciencias de la naturaleza a las ciencias del signo… el estructuralismo
representó un corte epistemológico dentro de las ciencias del hombre. No propuso un cambio de episteme por otro
sino que significó el paso de una ideología a una ciencia. Es por ello que encontramos una primacía de lo teórico y
una actitud antifilosófica. Lo importante era la búsqueda de un lenguaje científico y la necesidad de una teoría de
la ciencia.
Este pensamiento trastocaba las ideas y polémicas acerca del “compromiso”, “la voluntad” y “el hombre dueño de
.C
su historia”, propias del existencialismo sartreano y del marxismo. Sus consecuencias políticas eran evidentes. Si el
sujeto dependía de la estructura, ¿cómo se podía realizar el proceso de transformación social? ¿Quién realiza la
revolución?
DD
A finales de la década aparecieron dos textos del filósofo Althusser, en los cuales aplicaba ciertas categorías
estructuralistas a la obra de Marx. En su lectura, Marx rompía con el humanismo, al desaparecer de su preocupación
teórica la problemática del hombre ya que éstos eran sólo restos de la ideología humanista que se enfrentaba a la
ciencia de la historia, el materialismo histórico. De esta manera afirma que “hay que prescindir del concepto de
hombre, que es un concepto ideológico.” Entre otras cuestiones, al desaparecer la noción de sujeto histórico
LA
dejaban de tener valor los sujetos de una determinada clase social y sus acciones concretas, ya que era la acción de
las estructuras, y no las luchas concretas entre las clases, las que prevalecían en la historia.
Reportaje a Lévi-Strauss de 1969:
“-¿Piensa que hay una ruptura infranqueable entre la filosofía de Sartre y las búsquedas estructuralistas?
FI
- Esa ruptura está más en el pensamiento de Sartre que en la realidad. Desde mi punto de vista, considero que las
dos actitudes son complementarias, y que Sartre razona en el interior de cierta sociedad y de cierto momento
histórico. Nosotros, por el contrario, procuramos colocarnos fuera de toda sociedad y de todo momento histórico.
Así, yo soy completamente relativista. Sartre se sitúa en una perspectiva desde la cual es él quien tiene la razón.
Eso no excluye que sus razones no puedan aplicarse sino a aquellas cosas para las cuales fueron hechas, de las
cuales arrancan.”
De esta manera, con el estructuralismo empezó a aparecer una nueva categoría de “trabajadores” que realizaban
una “práctica teórica” y que pertenecían a diversos campos del mundo intelectual: lingüistas, filósofos, lógicos,
psicoanalistas, epistemólogos, sociólogos, etc. Estos tenían intereses múltiples y, a veces, divergentes, que “se
reagrupan bajo un común denominador: el objeto por explorar es de naturaleza estructural y, así, la ciencia, en su
generalidad y en sus especialidades, es reconocida como actividad teórica, de modo que la epistemología ya no es
‘teoría de la ciencia’, sino teoría de la ciencia como teoría. Está, pues, ya integrada a la ciencia, puesto que toda
ciencia sólo existe en el momento en el que se da un modelo teórico, y es reflexión sobre ese modelo. Sin embargo,
la categoría de “Trabajador de Salud Mental” comenzó a difundirse desde una perspectiva que planteaba la
necesidad de unir las reivindicaciones del campo de la Salud Mental con el conjunto de las luchas sociales y políticas.
182
OM
nuevamente horas difíciles en la Argentina: a mediados del onganiato. Como tantos otros egresados nóveles, mi
interés por la práctica efectiva del psicoanálisis no dejaba de permearse, de acuerdo con el espíritu de la época,
con las inquietudes y con las militancias políticas y gremiales tendientes a modificar las injusticias de la sociedad.
Como tantos otros suponía que la posible confluencia de ambas perspectivas podría lograrse mediante una práctica
“psi” novedosa y adecuada a la situación: breve, resolutiva, y de base psicoanalítica. Y, como tantos otros, suponía
que el “freudomarxismo” constituía la vía cierta para dar con la síntesis integradora, esto es, capaz de dar cabida a
.C
la posición procurada: la de un “agente de cambio”.
continuó con el existencialismo sartreano hasta que se encontró con el psicoanálisis. Así se fue produciendo un
corrimiento del “compromiso sartreano” con la política a una posición de difusor del pensamiento contemporáneo.
Masotta llegó a Lacan a través del problema de la conciencia. Había traducido la trascendencia del ego de Sartre.
Siguiendo las diferencias entre Merleau-Ponty y Daniel Lagache sobre el tema de la conciencia, había escrito en
FI
1959 el artículo “la fenomenología de Sartre y un trabajo de Daniel Lagache”. Allí planteaba que la conciencia debía
ser liberada por el psicoanalista de la fascinación sobre el Yo, que le hacía ver a éste fuente de sus actos. Pero la
conciencia no podía dejar de darse un Yo cuya “oscuridad” permitía que la “realidad” existiera para el sujeto. Luego
finalizaba diciendo: “y aquí la fenomenología se acerca a través de un camino insospechado al lenguaje del
freudismo.” Fue este texto donde citó por primera vez a Lacan cuando se refirió a la revista la psychanalyse,
publicación de la sociedad francesa de psicoanálisis. En una extensa nota, comentó que este grupo estaba presidido
por Lagache, pero cuyo inspirador es Lacan. Lo conformaban psicoanalistas que se había separado de la Sociedad
de París debido a una crisis interna, producto del modo de atender la formación del psicoanalista y la denuncia de
los lacanianos al positivismo y la pasividad del psicoanálisis francés ante la penetración del culturalismo
norteamericano.
En los años posteriores su pregunta era cómo articular el problema de la responsabilidad con el de la determinación;
de un sujeto de la estructura con la necesidad de la voluntad revolucionaria. A las lecturas de Heidegger, Husserl y
Hegel agregaba las de Levi-Strauss, Jackobson, Barthes y, por supuesto Lacan. Es decir, en todo este período pasó
de Sartre a Lacan, de la fenomenología al estructuralismo.
Masotta creía necesario introducir el pensamiento de Lacan recurriendo a la Psicología Concreta de Politzer, que le
183
OM
Politzer pero no lo suficientemente explicada, encuentra aquí su marco de sentido en la intersubjetividad y el deseo,
que constituyen el pasaje obligado para alcanzar la comprensión de las nociones que Politzer, al final de su libro,
consideraba como el aporte de Freud a la psicología concreta: la identificación y el Edipo. Hay en Lacan una
profundización de Politzer y una temática que nos devuelve a Freud sin amputaciones.
Es decir, la “vuelta a Freud” que inaugura Masotta en Argentina pasaba por Lacan como una profundización del
discurso de Politzer. Luego de estas aclaraciones necesarias para el debate de la época y del proceso intelectual de
.C
Masotta, comenzó a explicar algunos conceptos de la obra de Lacan, como el inconsciente estructurado como
lenguaje, el falo, el significante, la metáfora, la metonimia, para desembocar en la problemática que se presenta al
intentar articular el estructuralismo, el marxismo y el psicoanálisis.
DD
Un año después de esta conferencia, la contradicción entre la conciencia y la estructura lo llevaba a decir: “Recién
hoy comienzo a comprender que el marxismo no es, en absoluto, una filosofía de la conciencia; y que por lo mismo
y de manera radical, excluye a la fenomenología. A la alternativa ¿o conciencia o estructura? Hay que contestar por
la estructura. Pero no es tan fácil, y es preciso al mismo tiempo no prescindir de la conciencia.
LA
FI
184
Texto publicado en la revista argentina de psicoanálisis (RAP) en el año 1969.Fue la primera revista escrita,
producida y dirigida por psicólogos. El primer número de la revista se presentó a través de una nota editorial muy
corta en donde se destacaba a importancia de los desacuerdos y las polémicas como estructurantes de este nuevo
grupo profesional. Dentro de estas polémicas, resulta interesante la protagonizada por los psicólogos Juana Danis
y Roberto Harari ya que aborda la compleja relación entre psicología y psicoanálisis, sello diferencial de la historia
de la profesionalización de la disciplina en la Argentina, en un contexto caracterizado por ideales de cambio y de
transformación social. Danis fue una de las primeras egresadas de la carrera de psicología en la UBA y participó de
la fundación de la APBA - Asociación de Psicólogos de Buenos Aires. Harari también era licenciado en psicología de
la UBA, formaba parte del consejo de redacción de la RAP y presidente de la APBA (Esto aparece así en cursiva, no
OM
se entiende bien si es la misma Danis la que lo escribe o es del editor de la revista, por ejemplo….)
No hay psicólogo que en algún momento se haya enfrentado con el problema de su relación al psicoanálisis. Este
trabajo va dirigido a aquellos que buscan su identidad de psicólogos en una modalidad de trabajo profesional, que
es afín y a la vez diferente de la labor psicoanalítica.
Desde el punto de vista histórico, tanto el psicoanálisis como la profesión de psicólogo (no hay que confundir ciencia
.C
con profesión) son del mismo siglo. La psicología como profesión es más joven que el psicoanálisis. La diferencia de
nacimiento de una y otra profesión abarca unos 20 años.
El grupo de psicoanalistas parece a nuestros ojos de psicólogos como un grupo más cerrado, más coherente, más
DD
leal entre sí que el grupo de psicólogos.
Habrá un sentido diferente en la base de las dos profesiones? EL grupo de psicoanalistas, lejano, casi no se ve al ojo
de observador público. Trabajan en el silencio de sus consultorios, en las mentes de sus pacientes, en las escasas
publicaciones de sus revistas y en los comentarios intra e intergrupos (psicólogos-psicoanalistas)
Los psicólogos hacen más ruido social. Aparece una ley que públicamente los restringe en su trabajo terapéutico.
LA
Se produce la intervención de la Facultad que por dos años crea un cese casi total de la enseñanza de la psicología,
con la amenaza constante en forma de rumor de la desaparición de la carrera. Se publican noticias en diarios y
revistas que hablan de importantes investigaciones de psicólogos en otras partes del mundo. Y los psicólogos dónde
están? Los psicólogos también están en silencio, pero parecería que éste es un silencio distinto del de los
FI
psicoanalistas. Tiene que ver con la diferencia más profunda entre las dos profesiones, ya que ambas tienen como
meta trabajar con personas y sus problemáticas.
Cuando el psicoanálisis empieza a tomar forma, a ser un trabajo circunscrito y determinado por un encuadre
especial, su objeto, el ser humano en tratamiento, empieza a bifurcarse en dos aspectos: la curación de su
enfermedad psíquica y la investigación del sentido (el icc) de sus conductas. La hipótesis, según la cual si se hace
conciente lo inconciente, el hombre enfermo se transforma en sano, no se ha verificado. Lo que sí podemos postular
como resultado de esta hipótesis de trabajo es que el hombre que investiga con ayuda de un psicoanalista lo que
le es icc, amplía su horizonte, y al hacerlo, cambia.
Al mismo tiempo que el pequeño grupo de psicoanalistas echa cimientos cada vez más seguros en su investigación
el mundo interno de las personas, los psiquiatras empiezan a utilizar servicios de un grupo nuevo: los psicólogos
que como especie de ayudantes de psiquiatría ayudan, por medio de instrumentos nuevos (tests), a averiguar
rasgos de personas enfermas y sus vínculos concientes e inconcientes.
Las tres profesiones coinciden en un corte transversal del tiempo; las tres con núcleos de diferenciación en sus
respectivas tareas.
Pero el desarrollo sigue, y la ciencia psicológica obliga a cambiar enfoques, objetos, técnicas. Los psicólogos asumen
185
OM
que lo necesita, que lo hace nacer, emerger, desarrollarse y luchar. Se le requiere estar en todos los lugares donde
se necesite del especialista que sabe asistir los momentos de cambio, en todos los niveles, en todos los ámbitos, en
todo momento. Cambios como manifestación de la vida misma, en la sociedad, en el grupo familiar, en la persona.
Cambio implica duelo, duelo implica dolor. El psicólogo debe ayudar a que los cambios constantes y naturales, se
den con menos dolor, con menos ansiedad, con más comprensión del proceso mismo. Asique el psicólogo no crea
los cambios, ni los promueve, sino que los asiste. Esta comprensión le ayuda en el conflicto que libra en la
.C
adquisición de su identidad. Le da una dirección interna a sus objetivos y protege su autoestima tambaleante por
ser tan joven socialmente.
Si el psicólogo ha adquirido los conocimientos teóricos y prácticos de la clínica psicoanalítica, no deja de ser un
DD
buen psicólogo si trabaja como lo hace un psicoanalista. Sí deja de serlo si se contenta con su trabajo psicoanalítico
y más si pretende ser un psicoanalista. Es psicólogo en la medida en que queda abierto frente a todos los pedidos
que le llegan por parte de la comunidad, de ayudar en momentos de cambio, sea donde sea, sin honorarios
prefijados y más allá de sus “horarios completos” (los psicoanalistas suelen dar turnos de acá a dos años).
El psicólogo, partero de los cambios en la comunidad en la que vive; y como tal su encuadre va a ser muy elástico,
LA
más amplio y más colorido que el de su colega psicoanalista. Mientras más sepa de psicoanálisis y de sí mismo a
través de su propio análisis, y menos se confunda con psicoanalista, mayor va a ser su eficacia. Los psicólogos en
sus diversos campos de trabajo, con sus diversos métodos y técnicas, tiene entre su bagaje instrumental los
conocimientos psicoanalíticos, para ser aplicados y conocidos por todos. Han perdido quizás en sus manos algo de
FI
su estado de pureza pero están suficientemente elaborados para aguantar la amalgama con lo social.
186
Este trabajo intenta ahondar la problemática propuesta en tal artículo, contemplando accesibilidades conceptuales
divergentes de las postuladas por Danis.
Como es de rigor comenzar por el principio, abordemos el título que nombra el artículo de Danis. Se trata de vincular
y relacionar al psicólogo, por un lado, y al psicoanalista, por el otro. El psicólogo es un profesional, un trabajador en
el campo de la salud y la enfermedad mental.
Por su parte el psicoanálisis es (tal como lo puntualiza Freud) a- una una teoría psicológica, b- una terapia de las
neurosis y c- un método de investigación del psiquismo. ASpectos que no admiten un fácil desacople pero que se
diferencian. En consecuencia, el psicoanálisis es un significante que no denota por sí mismo profesión alguna; según
OM
Freud es “una parte de la psicología. Representa su infraestructura, quizás aún, todo su fundamento”. El PSA es una
ciencia, con su objeto de estudio: el ICC. Y como bien apunta Danis, “(no hay que confundir ciencia con profesión)”.
Pese a sus buenas intenciones de no confundirlas, Danis cae en un reduccionismo por el que se homologan
psicoanálisis y psicoanalista.
Adoptaremos en primera instancia la “vía histórica”, sobre la que discurre Danis, si bien de manera distinta. ¿Qué
era, qué hacía, qué podía un psicólogo con anterioridad al advenimiento del psicoanálisis?
.C
Politzer dice: el psicólogo no sabe nada y no puede nada. Se le preguntan en qué consiste su ocupación te hablará
de la vida interior; pero ante el deseo de “penetrar más adentro en el conocimiento del hombre” los mandará a un
laboratorio de psicología experimental para que conciban la ciencia tal cual es.
DD
Si la “objetividad” del dato perceptivo no pasa de ser más que una ilusión, preciso es reconocer que se debe situar
en la base de la ciencia psicológica un acto de conocimiento de estructura más elevada que la simple percepción...y
que consiste en la percepción complicada por una comprensión. Consiguientemente, el hecho psicológico no es un
acto simple: como objeto de conocimiento es esencialmente construido. (Todo esto desde Politzer, estaba
entrecomillado, pero no lo copie textual, asique va sin comillas….)
LA
Si todo esto ha sido posible por hacer del icc el objeto de estudio del psicoanálisis, es de lamentar, la confusión en
que incide Danis cuando afirma que dicho objeto es “el ser humano en tratamiento”. Reafirma, e tal manera, su
escotomización o desconocimiento del cuerpo de conocimientos teóricos que instituyen y permiten la práctica
psicoanalítica, la cual hace de la cura su objetivo, su propósito.
FI
Pero el error que comete Danis no vale sólo por sí, sino por las insospechadas consecuencias que trae aparejadas.
EN su urgencia por consignar supuestas diferencias en la práctica, en el quehacer manifiesto de “ambas
profesiones”, olvida la advertencia de Lacan: “La técnica no puede ser ni comprendida ni correctamente aplicada si
se desconocen los conceptos que fundamentan, que hacen de infraestructura a la labor del psicólogo. Danis llega a
caracterizar a esta última diciendo que “la investigación de lo inconciente, aun cuando su tentación sea muy grande,
no será reconocida como su principal misión…” Es decir, que la investigación de lo icc por parte del psicólogo está
connaturalmente sancionada por un juicio moral, ya que “tentación” denota la posibilidad de acceder a una fuente
de placer anhelado pero prohibido. La postura de Danis pareciera ser abarcadora e integradora, cuando en sí no es
más que una mezcla indiferenciada de objetos, prácticas, roles, teorías y opciones. Según Danis, el psicólogo debe
minimizar la importancia de “la investigación de lo ICC” puesto que si se excede en su interés se hará psicoanalista.
Una cosa es la teoría analítica que hace del “ser humano en tratamiento” su objeto, y otra cosa es la teoría analítica
que entienda, como decía Freud, que “el empleo del análisis para la terapia de la neurosis es solo una de sus
aplicaciones y quizás venga el porvenir a demostrar que no es siquiera la más importante.”
La investigación del inconciente es la condición que instaura y autoriza su quehacer, que lo valida y legaliza
científicamente. Es lo único que le permitirá “comunicarse verdaderamente con las personas que lo consultan”,
187
OM
del cliente con otros significantes, no cabría objeción alguna. En esa tentación se puede caer, no en la de “penetrar
más y más en lo ICC”. Y con esto no pretendemos denostar toda la gama de procedimientos técnicos que sean otra
cosa que la verbalización de una interpretación; por el contrario intentamos situar a todos ellos en la base fundante
de la interpretación. Es decir que a partir de la construcción de una interpretación que en primera instancia será
una “verbalización interior” del psicólogo, éste escogerá el recurso técnico más apropiado - y el momento más
oportuno - para transmitirle a su cliente la comprensión que ha logrado acerca de su propio acaecer psicológico. En
.C
consecuencia, le efectuará interpretaciones, señalamientos, preguntas, le dará información y asesoramiento de
acuerdo con el encuadre y los objetivos propuestos. Pero sus miras seguirán siendo hacer CC lo ICC. Si no lo
entendemos así, profesionalmente caemos en un caos improvisador y accionamos permanentemente en
DD
emergencia.
El psicólogo puede trabajar como psicoanalista, conveniente y suficientemente capacitado. Pero puede y -como
dice Danis: debería- trabajar en todas y cada una de las situaciones cotidianas donde conviven e interaccionan seres
humanos esclareciendo los conflictos icc habidos y por haber. Esas situaciones solo podrán ser indagadas, previa
jerarquización y sectorización de objetivos, a través y por medio de la teoría psicoanalítica, que es la que facultará
LA
al psicólogo tanto para la construcción del dato encuadrado en función de los objetivos, como para la consolidación
de una acción técnica concorde a los mismos. De aquí surge la eficacia del del psicólogo para poder abordar y operar
correctamente sobre su objeto en campos planificados especiales: psicopedagogía clínica, orientación vocacional,
entrenamiento de rol etc.
FI
¿Cómo entiende todo esto Danis?Considera que el psicólogo lleva hacia “los muchos” las “verdades, peligrosas y
valiosas”. Que en form de descubrimiento valiosísimo los psicoanalistas obtienen en su tarea bicorporal (cura) y
que en la mano de los psicólogos esas verdades “han perdido algo de su estado de pureza pero están
suficientemente elaboradas para aguantar la amalgama con la realidad social”. Esta situación, además, debe ser
protegida durante cierto tiempo, en virtud de que “el futuro de las dos profesiones indica una separación de tareas
y de miras”
En verdad, la separación de tareas y de miras que Danis desea amparar es la disociación del pensamiento y la acción,
par indisoluble que el psicoanálisis conquistó y ofrendó para la psicología y para los psicólogos. Según la autora, en
cambio, los psicoanalistas piensan y los psicólogos accionan.
EL psicoanálisis, en fin, constituye un quehacer intelectual totalizador que enfrenta y está en pugna con los intereses
creados por el establishment para sostener una psicología academicista, conciencialista o de ratoneras, desde la
cual se piensa acerca de ideas o de hombres puros, o acerca de animales, pero no acerca de hombres concretos
que se desconocen concretamente. Interés en desvincular del psicoanálisis, para maniatar y amordazar su mensaje,
plagado de luces ante las cuales algunos hombres persisten en convencernos acerca de la tierna bondad de las
tinieblas.
188
Voy a ver si vale la pena armar un punteo de esos textos (estoy casi segura que tal vez sí de uno de ellos), porque
tiene un modo de escribir muy complejo y si armo un resumen no se va a entender mucho. Ya a duras penas se
entiende el texto. Pienso que los más importantes son los que ya están resumidos en este archivo, y los del
mismo Masotta sirven para ilustrar su posición en relación al PSA y al marxismo. Asique en resumen, recomiendo
una lectura rápida de los textos de Masotta DESPUÉS de leer este resumen, que tiene lo más importante de la
unidad.
OM
.C
DD
LA
FI
189
Este texto se basa en la conferencia en el panel: “Las huellas de la memoria. Psicoanálisis y Salud Mental en la
Argentina de los '60 y ‘70”, que se desarrolló en la Universidad Autónoma de Entre Ríos, en el marco de la Semana
de la Memoria, Paraná, Entre Ríos, el 22 de marzo de 2005.
Poder hablar de la memoria en esta semana y en este lugar es un hecho muy importante para mí. Los efectos de la
última dictadura militar tienen aún una persistente presencia entre nosotros. Y por eso es necesario recordar.
La memoria tiene su importancia para la actualidad, es la que toma el pasado para el presente y el futuro. Las
OM
“huellas de la memoria” en dos sentidos. Por un lado, esas huellas que nos han marcado y constituyen el núcleo de
nuestra identidad. Por otro, las huellas son un camino para seguir. Porque sin huellas en cualquier campo o terreno
estamos perdidos.
En este caso me concentraré en los efectos que aún siguen presentes en la actualidad y que nos determinan en
el campo de la Salud Mental. ¿Qué continúa hoy de la última dictadura en nuestro medio? Los desaparecidos y
sus huellas.
.C
Hay dos clases de desaparecidos.
1) Los 110 Trabajadores de Salud Mental y los 66 estudiantes de nuestro medio Es necesario recordar que la
DD
impunidad del poder les quitó sus vidas. Se destacan como símbolo de todos a Beatriz Perosio, la presidenta de la
Asociación de Psicólogos de Buenos Aires y a Juan Carlos Risau, Secretario Gremial de la Federación Argentina de
Psiquiatras.
2) Los otros desaparecidos en Salud Mental. En el campo de Salud Mental tenemos otros desaparecidos: las teorías
LA
El golpe del 24 de marzo de 1976 vino para consolidar algo que había empezado con “el rodrigazo” en 1975: la
instauración del capitalismo financiero en nuestro país. Para ello, en nuestro territorio, se impuso el Terrorismo de
FI
Estado que focalizó sobre toda la sociedad, pero especialmente contra organizaciones intermedias tales como
gremios, instituciones, etc. En nuestro país, cosa que no se menciona, funcionaron 340 campos de concentración.
Se prohibieron todos los encuentros grupales, salvo que tuvieran autorización policial. Sino eran tildados como
“subversivos”. Este fue un método para aterrorizar y paralizar a la población frente al avance del nuevo “modelo”
(en 1976 el salario real descendió en un 30 %). (Desarrollado con detalle en el texto: “Entre silencios, miedos y
exilios”)
190
OM
comisión directiva con un grupo de los psiquiatras progresistas (entonces se denominaban de distintos sectores de
izquierda) de todo el país.
La Asociación Psicoanalítica Argentina había perdido una importante cantidad de miembros en 1971 con la partida
de los grupos Plataforma y Documento. Esta fue la primera ruptura por motivos ideológicos con la Asociación
Psicoanalítica Internacional. Estos psicoanalistas consideraban que el psicoanálisis no tenía que aliarse con el
sistema imperante, tal como lo solían hacer. Dichos grupos, junto con la Asociación de Psicólogos de Buenos Aires,
.C
la Federación Argentina de Psiquiatras, la Asociación de Asistentes Sociales y la Asociación de Psicopedagogos
habían fundado la Coordinadora de Trabajadores de Salud Mental. Esta había organizado una formación novedosa
para los Trabajadores de Salud Mental. Por otro lado, comenzaba el “volver a Freud” de los grupos lacanianos en la
DD
Argentina, liderados por Oscar Masotta.
Todo este magma que abarcaba no sólo nuestro campo, sino toda la sociedad, fue atacado desde la “Triple A”
primero, la derecha peronista de López Rega con sus acciones de gobierno, la intervención en la Universidad, cierres
de Facultades. Luego por la dictadura, que con su terrorismo de Estado persiguió, aterrorizó y desarticuló
experiencias, desarticuló punto por punto todo lo precedente.
LA
Por eso decía, no sólo hubo casi 200 desaparecidos. Sino que todas estas experiencias fueron “desaparecidas”
por un complejo mecanismo.
La implantación del terror implicó:
1- desarticularlas en el momento, con el Terrorismo de Estado.
FI
Las “experiencias piloto” en Salud Mental fueron todas cerradas: Comunidades terapéuticas. Por ejemplo, allí dejó
de funcionar como Comunidad terapéutica. Los trabajos comunitarios y barriales también. Los tratamientos
grupales tendieron a desaparecer. Luego vendría el desprestigio que comenzaron a tener hasta hoy. Los servicios
de Salud Mental más avanzados fueron atacados especialmente. Sus principales referentes fueron siendo
desaparecidos.
En los hospitales del país hubo cesantías por motivos ideológicos. Las Residencias de Salud Mental habían
comenzado a cerrarse durante el gobierno de Isabel Perón. La dictadura avanzó aún más. Había que desarticular la
formación de los denominados “Trabajadores en Salud Mental”. Desde ese momento hasta desapareció ese
nombre gestado a fines de los '60. Se comenzó a hablar de “profesionales de Salud Mental” o simplemente de
psicólogos, psiquiatras, psicoanalistas.
191
OM
del Psicólogo”, sino por los derechos humanos, antes y después de la desaparición de Beatriz Perosio. La inclusión
dentro de otras agrupaciones de profesionales y sus intentos de lucha.
La destrucción también llegaba a las teorizaciones que ponían en cuestión el estado de cosas. Sólo pudo continuar
una psiquiatría biológica - manicomial y un psicoanálisis que negara la determinación social mediante
un estructuralismo a-histórico.
El compromiso social fue dejado de lado por las instituciones psicoanalíticas, aunque no así por algunos
.C
psicoanalistas que siguieron trabajando y pensando y colaborando con organismos de derechos humanos en el
exilio interno o externo.
En la década del 70 comenzó a usarse un neologismo: el “psicobolche” cuyas raíces se hunden en un
DD
antecedente: Freudo/marxista. El uso de esta descalificación se usaba para señalar a aquellos profesionales de
nuestro campo con ideas de transformación social. Pero para el imaginario este “descalificativo” comparte con el
“freudomarxista” el hecho de que es alguien muy desprolijo. Es quien hace un entrecruzamiento de poca
consistencia teórica y clínica entre marxismo y psicoanálisis. En ese pastiche supuestamente se psicoanaliza mal la
política y se politiza peor a los pacientes. Un freudomarxista es alguien impresentable para el campo científico e
LA
intelectual. Se sostenía -entre otras cuestiones- en que estos terapeutas trataban de convencer a los pacientes para
que se comprometieran social y políticamente. Significativamente el término “psicobolche” se extendió durante la
dictadura militar del '76, y muy especialmente en los ‘80 y los ‘90 para todos aquellos que continuaron hablando
de las determinaciones sociales en la subjetividad.
FI
Luego del descrédito, vino la desaparición. Durante los ‘80 y ‘90 la hegemonía en nuestro campo intentó hacer
como que nada había sucedido y que había que importar las novedades. El mayor de los ejemplos está en los
abordajes psiquiátricos farmacológicos.
En este punto ya estamos en la actualidad.
Es porque este activo olvido de los desaparecidos físicos y las experiencias tienen un sentido de convalidar un
modelo de país y de subjetividad con técnicos en Salud Mental que promuevan la adaptación a este capitalismo
financiero que hasta ahora ha sido el vencedor
Por ello, la importancia de retomar la memoria, que no es cualquier memoria, sino una memoria de estas luchas,
estas teorizaciones, estas experiencias. No para repetirlas, sino para elaborarlas. Es necesario rescatar no sólo los
desaparecidos, sino quienes se enfrentaron a toda esta situación. A quienes resistieron. Los que en ese momento
pudieron luchar; los que se exiliaron afuera o dentro del país. En lo que se pudo, pero que allí y luego en desde los
80 fueron descalificados por las nuevas hegemonías. Los que seguimos luchando.
192
OM
que me hacían pensar que había que empezar por los clásicos. Entonces decidí darme mucho tiempo de trabajo
con Freud y fundamentalmente con la Metapsicología De modo que el discurso de Lacan, si bien me impactó
enormemente, me transmitía como una sensación dogmática y aunque participé del proceso y me consideraba
lacaniana, el dogmatismo me producía una cierta sensación de incomodidad, dándome la impresión de que yo no
me movía cómodamente en el interior de enunciados cerrados. Entonces me mantuve en un freudismo fuerte, si
bien atravesado por Lacan... ese fue mi punto de partida en psicoanálisis.
.C
Pero diría que mi formación estuvo fuertemente atravesada por Bachelard, Canguilhem, por la epistemología de la
segunda mitad del siglo XX, con una fuerte formación en los clásicos marxistas, y en particular en el llamado
marxismo occidental (cuando digo marxismo occidental me refiero por ejemplo a Habermas y Adorno en el marco
DD
de lo que se llamó "pensamiento post-metafísico." Esto marca de algún modo los orígenes teóricos de lo que yo
hago.... de lo que soy...
constitución del sujeto -que es lo que trabajo-, yo siento un enorme placer de trabajar con chicos. Yo fui una niña
que vivió una época muy intensa del país y del mundo: la post-guerra, el ascenso y caída del peronismo… de modo
que tengo una infancia muy atravesada por grandes problemas ligados a la vida y la muerte. Y es tal vez en virtud
de eso que siento un enormes placer de contacto con los niños y, al mismo tiempo, un enorme enojo y rechazo a
la puerilización de la infancia. Me molesta mucho el menosprecio por el pensamiento infantil. Además he ido
FI
avanzando en una investigación sobre problemas de la constitución psíquica, que se va extendiendo al campo del
análisis de adultos pero sigo trabajando con niños.
Acá en la Argentina alguien que influyó mucho en mi pensamiento fue Rafael Paz. En esa época, a comienzos de los
70´, se había fundado el Centro de Docencia e Investigación de la Federación de Psiquiatras, que fue un movimiento
político y científico de enorme peso y de gran alcance. Mi hermano, Hugo Bleichmar, también fue un referente muy
importante para mí. Hugo tenía una posición de confrontación fuerte con la irracionalidad psicoanalítica; él es un
hombre que viene de una perspectiva epistemológica muy distinta a la mía. Ellos fueron dos referentes
fundamentales en mi primera formación. Después, cuando me fui del país, me vinculé a Laplanche.
5- ¿Y con respecto a los psicoanalistas que han dedicado su obra a estudiar los momentos iniciales del niño como
Winnicott, Doltó o Piera Aulagnier?
OM
Bueno, a Piera Aulagnier yo la conocí después. Es alguien a quien yo accedo más tardíamente. En los años setenta
no estaba ni siquiera traducida. Después nos llegó "La violencia de la interpretación". Respecto de la cuestión con
Maud Mannoni y con Doltó..... Mannoni fue editada antes que Doltó… y me deslumbró. Después me di cuenta que
no sabía qué hacer con eso. Doltó me interesó, pero siempre tuve la sensación de que el suyo era un pensamiento
como de cierto humanismo entre comillas, casi místico, muy atravesado por la ideología y la religión. Me producía
como una cierta sensación que no lograba definir, como de cierta falta de coherencia teórica y de una impregnación
.C
un tanto vitalista. Doltó era muy inteligente y una persona muy encantadora. Pero yo quedé después, con los años,
más incomodada con ella por la actitud que tuvo acá, cuando vino a la Argentina, con las Abuelas de Plaza de Mayo:
lo que hizo me incomodó profundamente, primero dijo: "Si esa gente se quedó con esos niños es porque los amaba"
DD
(Nota: referencia a la apropiación de niños en la época de la dictadura militar)... Con lo cual, otra vez la idea de que
el que cría y ama es bueno. Y como si fuera poco - siendo ya terrible lo que había dicho porque implicaba aceptar
una impunidad de esta gente, que habiendo matado a los padres se apropió de los niños- hizo un paralelo con la
segunda guerra mundial, y el paralelo dejaba entrever un antisemitismo larvado que me impactó. Sentí que había
una profunda falta de respeto, una banalidad que no permitía en ella captar el profundo dolor que producía en el
LA
interlocutor, y fue ahí donde, pese a todo el afecto que conservaba por ella, aún en el marco de mis diferencias, se
produjo un quiebre.
6- Ya que ha recordado el tiempo de la dictadura... en su historia usted tuvo que exiliarse, ¿verdad?
FI
Yo me fui en el 76'. Allá en México, donde me exilié, me vinculé a un grupo lacaniano (estaba Carlos Pla, Marcelo
Pasternac, Néstor Braunstein, Estela Maldonado). Volví en el 86. En esa época me vinculé a este grupo del cual les
hablo y trabajé en el Hospital psiquiátrico infantil de México. Después me aparté y empecé mi trabajo con
Laplanche. Ahí yo lo voy a ver a Laplanche. Yo estaba muy marcada por el Coloquio de Bonneval, había leído el
coloquio y estaba muy marcada por ese texto. Y estaba muy marcada también por "Vida y muerte en psicoanálisis”.
Tengan en cuenta que en el 70' cuando se introduce Lacan en la Argentina, para uno era todo lo mismo.
Pensábamos que lo que decía Laplanche era una explicación más clara de Lacan, cuando en realidad había
diferencias. Era como en los comienzos del psicoanálisis, todo un movimiento. Todos tratábamos de entender el
concepto de metáfora y se leían textos que en realidad, por ahí, eran contradictorios. El diccionario de Laplanche y
Pontalis, El Vocabulario de psicoanálisis que había sido muy ordenador para empezar a comprender cómo se trabaja
el concepto y salir de la linealidad de Strachey, porque lo novedoso era una lectura en problemática, una lectura
epistemológica de Freud. Y estaba presente en todo este debate, por ejemplo el por qué no hacer una lectura
cronológica de Freud, o por qué el retorno a los clásicos. Era muy interesante en ese momento, era muy rico. Y ese
debate profundo se aborta por la llegada de la dictadura, y todo se coagula, y es en ese momento que me voy a
México. La soledad era terrible y una de las cosas que más lamentaba era no tener un maestro, porque yo era
194
OM
en su seminario y con eso me daban por aprobado el DEA, que es el diploma de estudios profundos o avanzados,
que son dos años, y después entraba en tesis doctoral. Y bien, a partir de eso empecé a viajar y viajaba cada tres
meses a París para cumplir el acuerdo.
.C
Lang que es un psiquiatra infantil maravilloso, psicoanalítico, Fedida y Laplanche. Fue muy emocionante, porque yo
defendí mi tesis justo en diciembre del 83', con el retorno de la democracia, y acababa de ganar Raúl Alfonsín.
DD
8- Usted nos comentó hace un instante que conoció a Lacan por esa época, ¿en los seminarios estuvo en algún
momento?
Fui a escucharlo una vez, pero ya no iba habitualmente a los seminarios, estaba ya muy viejito... ¡Un deterioro
terrible!.... Y recuerdo momentos en los cuales estaba muy ido, muy ido, muy. Lo escuche en uno de los seminarios
LA
de Encore... Fue muy impactante... muy interesante. Sin dudas él era un personaje extraordinario.... Muy zorro
cuando estaba bien, muy zorro, pero muy, muy brillante...y muy difícil. Tenía esa cosa de loco genial, mezcla de
compromiso profundo pero también a veces de impunidad...
FI
que salir corriendo, y otra volver así, Del mismo modo, dejando un tendal de pacientes abandonados sin tiempo de
elaboración, cuando en realidad se trata de un deseo de uno, ya que la Patria no lo está llamando... Era una decisión
personal, volver.
Entonces fuimos levantando el consultorio y -en medio de eso- se produce en el ’85 el terremoto de México y me
quedo un tiempo más, porque era una bajeza dejar a la gente en esas condiciones. Dirijo entonces acompañada
por mi marido, Carlos Schenquerman, algunos proyectos de UNICEF para los niños, y después sí, ya volvemos.... Ahí
sale mi libro, al mes de volver, ese primer libro que ya había salido en París. Acá en la editorial Amorrortu: "En los
orígenes del sujeto psíquico".
195
11- Desde "En los orígenes del sujeto psíquico", usted viene conceptualizando el tema de la represión originaria... Y la
fundación del inconciente... cuestiones de la metapsicología, nos gustaría si usted nos puede hacer una transmisión
sobre su posición al respecto...
Les voy a contar cómo surgió esta Silvia Bleichmar: a preocupación, el porqué de este tema. Cuando empecé a
trabajar una de las cosas que más me angustiaba era no saber cómo definir el inicio de un análisis con niños. ¿Cuál
era el momento en que uno podía decir: hago análisis, no hago análisis; hay síntoma, no hay síntoma? Ahí es donde
OM
me cae en las manos el Coloquio de Bonneval, con el concepto de represión originaria. Y comienza a armarse esta
idea de empezar a trabajar los momentos fundacionales del aparato psíquico. Entonces, el tema surgió del interés,
digamos, práctico, de mis preocupaciones clínicas, ahí comenzó mi relación con el concepto de represión originaria.
Tengo un pensamiento teórico, y disfruto mucho de la teoría, al mismo tiempo tengo constantemente como una
necesidad de responderme los enigmas que la práctica me genera. De modo que todo esto tuvo mucho que ver con
una necesidad de reconceptualizar los modelos del análisis de niños. Estando en desacuerdo con la idea de un
.C
inconciente existente desde los orígenes, ¿cómo puntuar los tiempos de su fundación para poder instrumentar el
método? Esto me llevó a la preocupación por desarrollar el concepto de represión originaria. Y de allí el interés por
la Metapsicología, que yo creo que es un momento culminante del pensamiento de Freud hay aspectos
DD
metapsicológicos que atraviesan toda la obra y que conservan permanencia...
los sistemas psíquicos... A tal punto que puede caer a lo largo de la vida y ser refundada. Hay dos aspectos de la
represión originaria: uno, que produce la separación entre inconciente y preconciente. El otro, que sepulta al
inconciente aquellos representantes de la sexualidad o del deseo infantil que no tienen transcripción y que forman
algo así como los elementos nucleares del inconciente. La idea de "originaria" tiene que ver con que da origen y
FI
que tiene que conservarse como algo que produce lo originario, como un campo diferenciado en el orden del
psiquismo... Porque lo originario no es lo primero, sino lo que ha sido diferenciado como espacio del inconciente.
Es un concepto muy válido para pensar si el inconciente está constituido o no, para definir la posibilidad de
aplicación del método
13- Usted hace frecuentes referencias a la cuestión de los cuidados maternos y la relación con la seducción originaria.
Sí, Lo que Laplanche tomó de Freud referido a la seducción originaria. Pero a esta altura me gustaría más llamarlo
pulsación originaria. La idea de Laplanche es extraordinaria, y es una contigüidad con la seducción freudiana, y una
recuperación de la teoría de la seducción como traumática. La diferencia de la seducción es que el seductor sabe
que seduce, mientras que lo que la madre produce viene de su inconciente. Por eso, creo que darle el carácter de
seducción es colocarlo en el orden de la psicopatología. Entonces, prefiero hablar de que la madre hace una
"pulsación primaria", aun cuando puede haber seducción también de ambos padres, pero creo que hay que dejar
más el concepto de seducción para algo que tiene que ver con la convocatoria erógena del sujeto y no con la
inscripción en la zona. Son puntos donde yo me apoyo en él, pero también abro algunas diferencias.
196
14- ¿A partir de su conceptualización, usted trabaja y tiene una posición respecto de las neurosis en la infancia?
Vamos a diferenciar o a hacer una diferenciación entre neurosis de infancia y neurosis infantil.... Para Freud la
neurosis i Silvia Bleichmar nfantil es la neurosis que se actualiza en la transferencia, que tiene que ver con el modo
con el cual se reconstituyen en el interior del análisis las mociones deseantes infantiles. Las neurosis de infancia
tienen que ver con otra cosa. Tienen que ver con el momento constitutivo neurótico, les diría como de
OM
normalización edípica. El momento en que se articula la posibilidad de producción de síntomas y de formaciones
del inconciente. Las neurosis de infancia tienen que ver con otra cosa. Tienen que ver con el momento constitutivo
neurótico, les diría como de normalización edípica. El momento en que se articula la posibilidad de producción de
síntomas y de formaciones del inconciente.
.C
El trastorno es... Por ejemplo, una enuresis primaria no es un síntoma necesariamente, no es una formación de
compromiso. En general, es un trastorno. Es una parte de la libido, de la vida sexual infantil que no ha encontrado
todavía un destino de rehusamiento y represión en el interior del aparato. Me importa para saber cómo interviene
DD
uno respecto a eso: qué lugar ocupa.
16- Hay otro tema de la clínica que también usted menciona en sus trabajos que es respecto del tema de las adopciones,
usted hace una referencia al lugar de lo arcaico y lo originario....
Lo arcaico lo planteo en relación justamente a lo traumático, a lo no metabolizable, no es en el sentido de Piera
LA
Aulagnier. Lo planteo más como esos elementos que entran en el psiquismo y no logran estabilizarse en el interior
de un sistema. No forman parte del inconciente reprimido y tampoco son concientes, circulan. Tiene que ver con
que las primeras representaciones nunca logran transcripciones completas. Quedan elementos siempre que nunca
van a ser transcriptos, que nunca van a ser representación palabra de las primeras inscripciones. Acá aparece otra
FI
diferencia importante con algunas teorías con respecto a que para mí, la inscripción es anterior a la represión
originaria, hay psiquismo anterior a la represión originaria, hay representación anterior a la representación
originaria, la represión originaria lo que hace es ordenar las representaciones pero no las crea, las ordena.
Yo considero que el inconciente es parasubjetivo, y el aparato, antes de la organización de la represión originaria y
17- Su opinión respecto de la situación actual, particularmente la situación actual del psicoanálisis en general y del
psicoanálisis con niños y cómo ve el porvenir del psicoanálisis.
Si el psicoanálisis cae, va a ser como el socialismo real. No va a caer por la fuerza de sus oponentes sino,
implosionado por sus propias dificultades internas. -en el marco de las dificultades de esta sociedad- el psicoanálisis
tiene que replantearse una serie de paradigmas que 17 lo constituyen para poder entrar dignamente al siglo XXI.
197
18- última pregunta: ¿A qué cuestiones piensa que deberíamos abocarnos los psicoanalistas que trabajamos con niños?
A reformular los modelos de intervención. Esa es la prioridad. Nosotros no podemos tomar a un niño "un poquito
OM
neurótico" para hacer un análisis para ver qué sale. Yo creo que es una barbaridad. Creo que habría que reformular
los modelos de intervención, pero no desde un punto de vista empírico, sino desde el punto de vista de una
comprensión de los procesos psíquicos y su constitución. No desde un punto de vista técnico, sino de reformular
los procesos de constitución en la infancia. Fíjense que yo estoy también abocada a eso hace tiempo. Esa es la tarea
más urgente. Inclusive reformular bajo qué modos hoy podemos pensar formas de intervención en otras instancias
de la sociedad. Creo que podríamos decir que nosotros debemos redefinir hoy modelos que tienen que ver con los
.C
modos con los cuales se constituye la subjetividad en el interior de las instituciones reales que tenemos, en las
nuevas condiciones históricas y con un modelo metapsicológico sólido. Definir cómo ayudar en estas
intervenciones.
DD
LA
FI
198
Hacia comienzos de los años ´70, la ruptura de la Asociación Psicoanalítica Argentina (1971) se produce en la Creta
de una expansión del psicoanálisis, que irrumpe por diversos circuitos a la faz “pública”. Cierta diseminación del
discurso psicoanalítico produce por primera vez alternativas de formación y trasmisión afuera de la corporación
“oficial”.
A esa expansión contribuyó decisivamente el despliegue de experiencias psicoterapéuticas nuevas (grupales,
familiares, comunitarias), desarrolladas en ámbitos que nacen en esos años (servicios de psicopatología en
hospitales generales, centros de salud) y sostenidos en términos numéricamente mayoristas por un nuevo actor en
el campo de la salud mental: el psicólogo.
Si se trata de tomar la ruptura de la APA como provisorio punto de partida se puede arriesgar que por entonces esa
OM
corporación totalitaria enchalecaba el desarrollo del psicoanálisis no sólo por su trivialización conceptual y la
pretensión retrograda de atesorarlo monopólicamente, sino porque la ilusión de mantenerlo guardado en el
placard era concomitante con la ceguera para advertir que los tiempos reclamaban una presentificación del legado
freudiano menos atada a las mezquindades de un empresario celoso de sus prerrogativas.
En quienes protagonizan esa ruptura se encuentra una común voluntad de salir al encuentro de la historia social,
del poder en las instituciones, y de confrontar la obra freudiana con otras disciplinas, desde el materialismo
.C
dialectico e histórico hasta la lingüística y la antropología. Lo que importa en el campo psicoanalítico argentino en
esos años acontece afuera de la corporación.
Este análisis de las vicisitudes de ese movimiento “crítico” del psicoanálisis, bastante alejado de toda
DD
homogeneidad, cuyo interés radica en que abrió, desde diversas perspectivas más política o más teóricas la efectiva
posibilidad de una transformación irreversible del campo psicoanalítico argentino y que someramente implicaba:
b) El cuestionamiento de un estilo de formación y el nacimiento de experiencias que procuraban romper con el modelo
de la institución totalitaria cerrada, y que no ocultaban las conexiones de ese modelo con la vigencia de un sistema
social de explotación y un régimen antidemocrático.
c) La presencia de de una flexión ético- política que sí apuntaba a ampliar su público crítico no lo hacía simplemente
para extender un mercado fundado en la afirmación de una misión histórica de ese psicoanálisis renovado en os
FI
cultural y político.
Detrás de la vertiginosa expansión de una “articulación” deseada del psicoanálisis y marxismo, cuyos efectos
ilusorios no escaparon entonces a los observadores más lúcidos, se señaló la ingenuidad y el eclecticismo que
dominó en sus comienzos esa magna y audaz apuesta, que lanzó a los psicoanalistas t aspirantes a una propuesta
de formación y concientización que acumulaba disciplinas teóricas y pronunciamientos ideológicos. Pero, en fin,
cualquier valoración de esa empresa imposible debe partir de reconocer que fue brutalmente golpeada cuando
apenas estaba en condiciones de aportar sus primeros frutos.
Reconstruir ese momento de crisis exige atender también a la riqueza y complejidad del mundo cultural y
universitario abierto en la década del ´60, golpeado en 1966 y reestructurado en una suerte de “resistencia”
intelectual que conformó una profusa red de formación alternativa hecha de instituciones, publicaciones y grupos
199
OM
¿Qué pasó con el psicoanálisis desde 1976?
La relación más bien ríspida de ese campo psicoanalítico (aunque no necesariamente de los psicoanalistas) con la
dictadura militar fue bastante notorio que los más golpeados fueron los espacios “públicos”, tanto los propiamente
formativos como aquellos centros asistenciales que nucleaban a un número considerable de profesionales e
intentaban introducir transformaciones en los criterios y modalidades de asistencia. Aquellos lugares donde el
desarrollo de nuevas prácticas hacía posible la intersección de cierto discurso del psicoanálisis con el movimiento
.C
de crítica de las instituciones psiquiátricas.
Si bien es cierto que la implantación de la enseñanza de Lacan es anterior a los años del terror militar su
desenvolvimiento no pudo, necesariamente, eludir las consecuencias de esa violenta irrupción que desde el poder
DD
dictatorial tronchó una porción muy importante del campo psicoanalítico nacido a principios de esa década.
Ante todo porque cuando el silencio forzado o el exilio se suman a la caída de las ilusiones puestas en el cambio
social inminente, el debate acerca del psicoanálisis y el orden del poder se queda sin interlocutores precisamente
en una zona que fie y es esencial para el destino del psicoanálisis en la Argentina: el de su relación con las
instituciones.
LA
En el mismo momento en que la presión despolitizadora era impulsada firmemente desde el poder, en el intento
más ambicioso que conoció la Argentina por transformar radicalmente a los sujetos en colectivos, sociales,
culturales y políticos, cuando la primacía del “orden” sobre la libertad y la justicia penetró bien hondo en un
conjunto de instituciones, en circunstancias en que el ideal totalitario de una sociedad compartimentada y
FI
disciplinada trasladaba el modelo militar de mando e imponía la sanción de tosa horizontalidad en la comunicación
y la interacción, un discurso psicoanalítico que se hace dominante impone, por un lado, cierto encierro esotérico
en su jerga y en sus rituales, y ,por otro lado, una negativa bastante radical a asumir como pertinente la relación
del psicoanálisis con las instituciones de la asistencia o de la cultura. Que las instituciones sean afirmadas,
unilateralmente sólo como “de discurso” en esa circunstancias que imponían el peso de su significación bien
material no podía tener otro efecto que el de una verdadera ilusión “deshistorizadora” que en el vacío provocado
por una alucinante negativa respecto del horror que dominaba el momento, instalaba la sobre abundancia del
significante, con el efecto notorio de sepultar cualquier análisis fundado sobre las propias condiciones de trasmisión
y ejercicio del psicoanálisis, incluso de aquellas que habían hecho posible a impresionante difusión de la obra de
Lacan.
Es cierto que ese silencio sobre las condiciones materiales y políticas (aún bajo formas alusivas y entrelineas)
caracterizó ampliamente el campo cultural, pero es este espacio psicoanalítico llegó a fracturar la existencia misma
de una “memoria colectiva”, capaz de hacerse cargo de las vicisitudes y contradicciones de su pasado.
Ni siquiera es cierto que la producción teórica no se haya visto afectada; no puede decirse que ese “cerrar los ojos”
haya coexistido con una concentración creativa en el desarrollo de la propia disciplina. Porque más allá de la
200
OM
.C
DD
LA
FI
201
Este es un estudio sobre la influencia del filósofo Raul Sciarretta (1922-1999) como referente fundamental en la
formación de intelectuales en general, y en los avatares de la constitución del campo psi en particular, en las
décadas del sesenta, setenta y ochenta en Argentina.
Muchos lo han definido de diversas maneras, pero ante todo él era marxista, se ha subrayado su capacidad de
enseñar a pensar por sobre la erudición y la sabiduría que sustentaban sus clases.
“Raul Sciarretta como intelectual estaba trabajando y enseñando al nuevo capo del marxismo: Althusser.
Pueden delimitarse tres periodos para ordenar su recorrido intelectual:
1. Desde mediados de los años cincuenta cuando hace su aparición entre los miembros del Centro de Estudiantes de
OM
Filosofía y Letras de la UBA, hasta finales de los ´60. El eje central lo constituye en esos años su militancia activa en
el Partido Comunista, su participación en los debates vinculados al marxismo y su giro hacia lo que se denominó “la
nueva izquierda argentina”. Además, intervino activamente en las polémicas al interior del comunismo argentino
que desenbocarían en las fracturas de grupos tales como Pasado o La Rosa Blindada.
Periodo dedicado exclusivamente a los debates que se producían al interior del marxismo argentino.
.C
2. Se extiende a lo largo de toda la década del ´70, en el cual se vincula directamente con psicólogos y psicoanalistas
a quienes va formando en lo que se puede denominar su Programas Epistemológicos, que tendrá un papel
fundamental por un lado en la histórica escisión de los grupos Plataforma y Documento de la APA, y por otro la
DD
implantación y difusión del psicoanálisis francés en nuestro país.
Este periodo es el de los grupos de estudio y su relación con Oscar Masotta. Los grupos de estudio surgieron en bs
as hacia fines de los años ´50 como consecuencia de la inestabilidad docente asociada a las frecuentes
interrupciones de la democracia, pero se consolidaron definitivamente a partir de la dictadura de Onganía en 1966,
cuando la gran mayoría de los que eran referentes principales fueron obligados a abandonar la universidad, en el
LA
acontecimiento conocido como “la noche de los bastones largos”. Muchos de los profesores cesanteados ofrecían
entonces en dicho dispositivo sus conocimientos y transmitían la recepción que iban haciendo de los textos que
llegaban directamente de Paris, que ya era el faro intelectual y académico de enorme peso en Argentina de los
sesentas. Allí se enseñaba lo que no se podía aprender en las facultades intervenidas por la dictadura. La oferta era
FI
tan amplia como los intereses intelectuales de aquella época: filosofía, lingüística, epistemología, vanguardias
artísticas y literarias, psicoanálisis, marxismo, estructuralismo y otras temáticas eran abordadas tomando como eje
autores o corrientes de pensamiento. Plotkin afirmó que estos grupos fueron una tradición, una especie de
“universidad de las catacumbas” en los que el intercambio interdisciplinar permitía a los actores del campo psi
articular precisamente el “pensamiento psi” con las problemáticas recortadas en otras ciencias humanas. En esa
época los psicólogos no eran admitidos en la APA ni avalados para el ejercicio de la psicoterapia, aunque muchos
médicos psicoanalistas de dicha institución si los aceptaban con gusto en grupos de estudio privados o de
supervisión o para realizar “tratamientos didácticos no oficiales”.
Sciarretta conoció a Masotta cuando ambos eran muy jóvenes, n una de las reuniones que organizaba el grupo
intelectual de la revista Contorno, al que Masotta pertenecía en ese momento. Luego se lo encontró en la calle
años ms tarde y allí Masotta le habló de Lacan con tanta fascinación que a posteriori llevaría a Sciarretta a
interesarse por la obra del psicoanalista francés.
Será desde su recorrido marxista que Sciarretta llegará al encuentro de la obra de Louis Althusser, de quien se
convertirá en uno de los introductores en la Argentina, y a través del cual profundizará definitivamente su interés
por la obra de Freud y la de Lacan. Es conocida la relación de Althusser con Lacan, y el rol fundamental que el
202
OM
1964 con la mítica conferencia “Jacques Lacan o el inconciente en los fundamentos de la filosofía”. Y en esa nueva
ruta la figura de Raul Sciarretta tendría un enorme protagonismo como referente de lo que algunos llamarían el
althussero-lacanismo y otros el psicoanálisis francés contemporáneo.
En este segundo periodo el autor ya aparece totalmente atravesado por el pensamiento de Althusser, que nombra
a Freud junto a Marx y Nietzsche y comienza a reivindicar lo que llama “la necesidad de una teoría científica de la
lectura”.
.C
El materialismo histórico producía, para Sciarretta, una ruptura epistemológica, y por lo tanto un pasaje de la
ideología (pre ciencia) a la ciencia. Iba tomando forma una suerte de grilla de lectura crítica, un verdadero programa
epistemológico que sería a partir de 1970 la herramienta principal con la que muchos psicólogos y psicoanalistas
DD
terminarían impugnando en sus fundamentos por un lado a la primera identidad profesional –blegeriana- del
psicólogo argentino y por el otro al paradigma psicoanalítico kleiniano sostenido sobre todo por lo miembros más
ortodoxos de la APA.
El libro “Psicología, Ideología y Ciencia” publicado en 1975 por Braunstein, Pasternac, Benedito y Saal, reviste un
carácter de solución ejemplar en términos kuhnianos, como representante del tipo de planteo que marcó esa
LA
coyuntura en el interior de la cual precipitó posteriormente la implantación del paradigma lacaniano sustituyendo
al kleiniano en la Argentina.
El psicoanálisis se erigía como una “teoría del proceso de constitución de sujetos”, por lo tanto una ciencia de los
procesos de sujetación que podía esclarecer en el hombre la estructura invisible (el aparato psíquico) edificada
FI
desde la infancia en los procesos de socialización y advertirlo acerca de su inserción en las relaciones y los modos
de producción analizados por el materialismo histórico de Marx en adelante.
Sus autores lo gestaron entre los años 1972-3 en Córdoba, a partir de su triple inserción en el Centro de Estudios
Psicoanalíticos (CEP), el Hospital de Clínicas y en la UNC, en la cual ingresaron apoyados por el movimiento
estudiantil. Sciarretta dictaba seminarios en el CEP junto a otros protagonistas de la ruptura de la APA como Ulloa
y Paz.
La propuesta de aquel libro y los efectos de su recepción resultan representativas de lo que se denominó “la vía
Althusser” en la recepción del psicoanálisis francés en Argentina, y en particular de un proyecto incipiente de
confluencia entre una lectura marxista de la época y una recepción del psicoanálisis lacaniano que no pudo
desplegarse con la llegada de la dictadura militar de 1976. Con el retorno de la democracia toda variante de
articulación de psicoanálisis y política en líneas generales había desaparecido por completo. En cuanto a Sciarretta
sólo continúo en los grupos de estudio en su casa particular durante los primeros años de la interrupción
democrática. Esto coincide con el crecimiento de su interés por el estudio de la obra de Lacan, que pasó a ser uno
de los temas específicos y mayoritarios de sus grupos de estudio y único objeto temático de las contadas apariciones
públicas en conferencias institucionales o revistas.
203
OM
Los medios de comunicación se encontraban censuradas, y muchos colaboraban activamente con la dictadura
(Revistas gente, Somos y Para Ti, por ejemplo), así como periodistas que se transformaban en voceros de los
militares.
El verdadero objetivo del golpe militar: institucionalizar el poder de la gran burguesía y el capital financiero para
incorporar a la Argentina en el proceso de mundialización capitalista. Su objetivo era político y no militar (ya
durante el gobierno de Isabel las fuerzas armadas ya habían logrado el control de la represión contra las
.C
organizaciones guerrilleras, las que se encontraban derrotadas políticamente y fuertemente debilitadas.
“Subversivo” no se refería sólo a aquel que realizaba atentados, sino a todo el que pensara de manera diferente.
Para llevar adelante esta política era necesario lograr el disciplinamiento del movimiento social a través del terror.
DD
La población debía obedecer órdenes son reflexionar atendiendo sólo la vida privada, el trabajo y las noticias
deportivas.
Las víctimas de la dictadura fueron fundamentalmente trabajadores. Durante los primeros años del golpe
centenares de sindicatos fueron intervenidos prohibiéndole su actividad y el derecho a huelga, las fábricas fueron
ocupadas militarmente con el acuerdo de los empresarios, etc. En el campo de la educación educadores de todos
LA
los niveles fueron despedidos. Más de 90 carreras fueron eliminadas. Se creó un Centro de Inteligencia Militar en
el Ministerio de Educación donde funcionaba una red de informantes que actuaban en colegios y universidades. En
la Universidad Nacional de Tucumán se instaló un campo de concentración. También se iniciaron acciones dentro
de los Colegios Secundarios, el caso paradigmático fue la protesta de un grupo de estudiantes secundarios de La
Plata por el boleto estudiantil a los que el coronel Ramón Camps ordenó secuestrar, fueron 20 los secuestrados,
FI
La represión abarcaba todas las áreas de la vida de nuestro país. La metodología central en que se basó el
Terrorismo de Estado: los campos de concentración- exterminio. La dictadura militar llevó delante un plan
organizado y sistemático de represión basado en estos campos para hacer desaparecer a miles de personas.
Cinco grandes campos conforman el centro del sistema represivo de los militares: el Vesubio y Campo de Mayo en
las afueras de Bs As, la ESMA y Club Atlético en la ciudad de Bs As, y La Perla en Córdoba. Los campos de
concentración fueron un dispositivo ideado para concretar la política de exterminio. En ellos se encerraba a los
detenidos para iniciar un proceso de destrucción de su condición humana, es decir, se los transformaba en cosa, un
número, para luego eliminarlos. Cuando entraban, como método, se los torturaba durante varios ias, luego se los
ataba, se los mantenía con una venda y se les asignaba un número. En algún momento eran llevados a la enfermería
donde se le inyectaba un calmante para ser “trasladados”. Este eufemismo se utilizaba para sacarlo del campo de
204
OM
posibilidad del recuerdo.
No puede haber campos de concentración en cualquier sociedad, o en cualquier momento de una sociedad; solo
puede existir en medio de una sociedad que elige no ver. La existencia de los mismos a su vez cambia, remodela,
reformatea a la sociedad misma.
Sobre la sociedad misma debía deslizarse el terror generalizado para grabar la aceptación de un poder disciplinario
y asesino. Sólo así los militares podían imponer su proyecto político y económico pero, sobre todo, un proyecto que
.C
pretendía desaparecer de una vez y para siempre lo disfuncional, lo desestabilizador, lo diverso, anulando toda
rebeldía contra el orden social establecido a través del miedo instalado en nuestros cuerpos.
En este clima de represión hubo formas de resistencia, en el campo de la cultura Boris Spivacow continúo editando
DD
libros pese a las amenazas, unos pocos directores de periódicos reproducían información prohibida, los sectores
obreros puestos a la defensiva organizaron métodos de lucha más acordes con la represión desatada, pero fue en
el campo de los derechos humanos donde comenzó a denunciarse abiertamente al terrorismo de Estado. La entidad
que simboliza esta época fueron las Madres de Plaza de Mayo, en donde infiltrados dieron información para que
se sucedieran los secuestros de varios dirigentes de derechos humanos y de la monja francesa Alice Domon, luego
LA
humanos (Carter), las personalidades y organismos mundiales reclamaban contra la represión de la dictadura. Los
gobiernos de España, Francia, Italia y Suecia pedían explicaciones acerca de los ciudadanos desaparecidos de sus
respectivos países. Los militares aprovecharon la realización del Mundial de futbol en la Argentina.
En el ´79 una comisión de la Organización de Estados Americanos llegó al país para investigar la situación de los
derechos humanos. Desde los medios se convocaba a la gente a festejar en la Plaza de Mayo, los festejos pasaban
por enfrente de la sede de la OEA donde familiares de desaparecidos hacían una larga cola de más de tres cuadras
para presentar las denuncias. Mientras, en la ESMA, los prisioneros eran rápidamente eliminados y otros
trasladados secretamente a una isla de Tigre, propiedad del episcopado.
Para esta época la homogeneidad exhibida inicialmente por la dictadura ocultaba una sorda lucha de intereses. La
codicia y la corrupción enfrentaban a los diferentes grupos para mantener áreas de poder.
205
OM
contradicciones internas estallaron en la Junta Militar ante la gravedad de la crisis social y económica. La
desocupación, inflación, descenso de los salarios, cierre de industrias, quiebres de algunas entidades financieras y
la fuga de capitales comenzaron a volcar a la clase media y a sectores de la burguesía a la oposición. El poder militar
se apoyaba casi exclusivamente en su aparato represivo.
En 1981 asumió la presidencia Viola, quien anunció una apertura hacia algunos sectores políticos y sindicales que
se había nucleado en la “Asamblea Multipartidaria”. Su Ministro de Economía, Sigaut, trató de superar la crisis con
.C
una devaluación del 400%. La recesión se agudizaba y crecían la desocupación y la pobreza. En noviembre se
organizó la “marcha de la bronca” con la consigna “pan, paz y trabajo” donde participaron más de 50.000 personas.
Las Madres de Plaza de Mayo continuaban con sus rondas.
DD
Viola fue reemplazado en diciembre por Galtieri, quien semanas antes había sido alabado por el gobierno
estadounidense, lo que lo llevó a disponer la invasión a Malvinas creyendo que contaría con el apoyo de EEUU. La
guerra de Malvinas fue un intento desesperado para salir de la crisis en que se encontraba el poder militar. Fue una
aventura del poder militar para perpetuarse.
El 2 de abril las tropas argentinas (5000 efectivos) desembarcaron en Puerto argentino. Esa mañana el país se
LA
enteraba que las Fuerzas Armadas Argentinas habían recuperado las Malvinas luego de un siglo y medio de
usurpación. La noticia fue recibida con júbilo por la mayoría de la sociedad.
El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas el 3 de abril ordenó que retiren todas las fuerzas argentinas de las
islas, el 25 de abril una avanzada de las fuerzas inglesas recuperaron las Islas Georgias donde el teniente Alfredo
FI
Estos hechos fueron ocultados por los medios de comunicación que, por el contrario difundían una versión
triunfalista que se manifestaba en un optimismo general alimentada con la organización de colectas y
manifestaciones de solidaridad en la Plaza de Mayo.
En este momento la guerra era analizada por muchos periodistas como si fuera un partido de futbol y muchos de
los desastres de la guerra comenzaron a aparecer. El 3 de mayo un submarino inglés disparó contra el crucero
general Belgrano y lo hundió dejando 368 muertos. Dos días después aviones de la marina argentina hundieron el
destructor Sheffield con un misil.
Finalmente en la noche del 20 al 21 de mayo varios buques de guerra británicos llegaron a las islas donde
desembarcaron infantes de marina y paracaidistas. Lo que los militares argentinos en su improvisación
consideraban imposible, ocurrió. Se libraron desiguales combates entre conscriptos mal preparados y fuerzas
militares profesionales hasta que el 14 de junio el general Menéndez se rindió. La guerra duró 73 días. Nunca se
206
OM
sociedad. Camino comenzado en la soledad de sus rondas por las Madres de Plaza de Mayo, en su lucha, en la
sencillez de sus objetivos, y en la intransigencia de su conducta, introdujo una dimensión ética, más allá de la razón
del Estado que fue parte irrenunciable para construir la memoria.
.C
consolidó y amplió el desmantelamiento iniciado en 1974.
El objetivo era someterlos y obligarlos a recluirse en el ámbito privado. El poder volvió a encontrarse en los grupos
manicomiales que apoyaron este nuevo orden.
DD
El 3 de abril las fuerzas militares ocuparon el Policlínico con la justificación de que era una base de operaciones de
la guerrilla. Ahí fueron maltratados profesores, enfermeros, y trabajadores del Hospital.
En ese marco se les dio "licencias extraordinarias" a algunos jefes de Servicio, a profesores de planta permanente
y a concurrentes de los servicios hospitalarios. La justificación legal era ser promotor de presunta o potencial
perturbación ideológica fue así que muchos servicios fueron desmantelados.
LA
La dictadura estaba aniquilando en el campo de la Salud Mental, no sólo el pasado manicomial retornaba, sino que
se produjo el mayor vaciamiento de recursos humanos de los hospitales de nuestra historia.
El 31 de agosto de 1976 el Poder Ejecutivo Nacional aprobó una nueva estructura por lo cual el INSM pasó a ser
denominado (DNSM) " Dirección Nacional de Salud Mental". Se le asignaron nuevas funciones entre las que se
FI
destacaban. "La adaptación de los individuos a la sociedad". Las medidas de la DNSM implicaban un control
persecutorio de las autoridades en todo el campo de la Salud Mental, ya que brindaban todas las herramientas para
instalar el terror, desmantelar los avances en el campo y otorgar el poder a quienes compartieran su ideología. Las
consecuencias fueron que aumentaron las camas en la institución psiquiátrica en distintos lugares del país durante
este período.
La FAP fue un objetivo preciso en esta política de terror. Este gremio contaba con militantes de organizaciones de
izquierda estaba en la mira de la dictadura.
La mayoría de los que sostenían la FAP se habían ido del país, otros estaban desaparecidos. Así, las actividades de
la FAP fueron extinguiéndose.
Al inicio de la Dictadura quedaron solo 40 profesionales trabajando en el servicio.
Se prohibieron todas las actividades grupales, como sucedió en todos los servicios de Salud Mental se redujeron a
la mitad las internaciones, se cerró la residencia de psiquiatría.
A partir de entonces el terror terminó de penetrar en los cuerpos de quienes trabajaban allí y lo sucedido tuvo un
efecto devastador creando el pánico y la confusión entre quienes se quedaron.
La mayor parte de los TSM se recluyeron en el AMBITO PRIVADO.
207
OM
A partir de entonces se comenzó a encubrir la manicomialización con títulos que aparentaban alguna reforma.
Comenzaba un camino de la hegemonía de una psiquiatría biológica sobre la psiquiatría social, de los psiquiatras
sobre los trabajadores de Salud Mental y del trabajo individual psiquiátrico sobre el trabajo comunitario. Empezaba
el fin del Campo de la Salud Mental.
.C
El proyecto de la dictadura era instalar otro modo de país. El mismo implicó que la discusión ideológica y la práctica
política que se opusiera debían "desaparecer", lo que llevó a un ataque a los centros de estudio y a las
organizaciones gremiales. El aislamiento y terror inundaron las Universidades y los Sindicatos, ya que muchos de
DD
ellos tenían una organización y una tradición de lucha, que abarcaba un gran número de estudiantes de Psicología
y psicólogos. Un estudiante entraba a una Universidad y tenía que negar la política.
Su corolario, era un profesional que sólo se dedicara a su especialidad, que dejará de lado autores considerados
"peligrosos", que iban de Freud a Marx. Y que tampoco tuviera prácticas grupales, trabajo preventivo, comunitario,
etc.
LA
Por eso, durante estos años solamente pudieron crecer teorizaciones y prácticas, dentro de la psicología, que
dejaron a un lado cualquier compromiso social.
La mayoría de las carreras de psicología en el ámbito público del país fueron cerradas durante la Dictadura. Sólo
quedó funcionando la Carrera en San Luis, Rosario y Buenos Aires, con un plan de estudio acorde con el proyecto
FI
de la dictadura.
Todos los docentes tenían que ser investigados y aprobados por la Secretaria de Inteligencia del Estado para poder
trabajar de modo que muchos profesores fueron personas ligadas a organismos de seguridad. Se hacían
investigaciones sobre los nuevos ingresantes a la carrera.
A partir de 1976 el cupo de ingresantes desciende, siendo en 1976 563 los ingresantes y en 1980 había alrededor
de 200.
Si no se había cerrado la carrera la idea era que quedara la menor cantidad de estudiantes posible. Muchos
aspirantes debieron cursar en Universidades privadas, que tuvieran una importante afluencia de estudiantes lo que
era, por supuesto, parte del proyecto de la dictadura. Las reglamentaciones y los controles policiales eran moneda
corriente para los alumnos.
Además la orientación de la carrera cambió drásticamente. Como era de esperar la carrera se alejó del psicoanálisis,
el trabajo comunitario y lo grupal. Solamente había que "venir a estudiar". Fue prohibido el funcionamiento del
Centro de estudiantes.
El texto "La estructura de la personalidad " de Lersch, se convirtió en un texto obligatorio para varias materias.
208
OM
con otras organizaciones.
En 1981 la APBA convocó a su 1° Congreso Metropolitano de Psicología. Éste marcaba el avance del conjunto de
psicólogos y quienes los apoyaban dentro del campo de la Salud Mental.
Durante y después de la Guerra de Malvinas comenzó el fin de la dictadura. Y la asociación de psicólogos ofrecieron
asistencia a familiares y excombatientes.
En 1982 comenzó a funcionar el Movimiento Solidario de Salud Mental (MSSM). Produjo una primera declaración
.C
en Septiembre de 1982, y comenzó a gestar un programa psicoasistencial para personas afectadas por las
violaciones de los derechos humanos junto con familiares de desaparecidos y detenidos por razones políticas.
Desde Marzo de 1983, su equipo de niños y adolescentes lo hizo conjuntamente con familiares de Desaparecidos y
DD
Detenidos por razones Políticas, y más tarde se unieron con abuelas de Plaza de Mayo.
A fines de mayo de 1983, los efectos del conocimiento sobre la violación a los derechos humanos ligado a la apertura
democrática hicieron que se recibieran gran cantidad de consultas que llevaron a la implementación de guardia de
24 horas para la urgencia.
No sólo se les impedía saber de los familiares el destino de las víctimas, sino que se pretendía la negación
LA
209