Calidad Capitulo 5
Calidad Capitulo 5
Calidad Capitulo 5
FEDERICO VILLARREAL
CURSO: Gestión de calidad
TEMA: Gestión de Calidad Total
DOCENTE: Ing. Torres Sanchez, Doris Concesa
INTEGRANTES:
-Arce Ruiz, Daphne
-Huamán Sanchez, Diana
-Mallqui Galindo, Leonel
-Vargas Tinoco, Ruth
2021
INTRODUCCIÓN
En el mundo globalizado en que
vivimos, y en el ambiente de los negocios,
la calidad es crucial para determinar
la ventaja competitiva. La Gestión de
Calidad Total incluye una serie de prácticas de
administración, filosofías y métodos para mejorar la forma
en que una organización hace negocios, fabrica sus
productos e interactúa con sus empleados y clientes.
La Gestión de la Calidad se ha convertido actualmente en
la condición necesaria para cualquier estrategia dirigida
hacia el éxito competitivo de la empresa. El aumento
incesante del nivel de exigencia del consumidor, junto a la
explosión de competencia procedente de nuevos países
con ventajas comparativas en costes y la creciente
complejidad de productos, procesos, sistemas y
organizaciones, son algunas de las causas que hacen de la
calidad un factor determinante para la competitividad y la
supervivencia de la empresa moderna.
CAPITULO 5
GESTIÓN DE CALIDAD TOTAL
1. CONCEPTO DE LA GCT
La GCT es un conjunto de actividades sistemáticas
conducidas a través de toda la organización para alcanzar
eficaz y eficientemente los objetivos de la compañía, así
como para proveer productos y servicios con un nivel de
calidad que satisfaga a los clientes, en el tiempo y al precio
apropiados.
El componente «gestión» destaca el papel de la
dirección, a través de su compromiso con el concepto, su
esfuerzo por asegurar la implicación de todos los
empleados y su decisión de fomentar un cambio en la
cultura empresarial.
El componente «calidad» reconoce la necesidad de
centrarse en la satisfacción de las necesidades y
expectativas de los clientes y de buscar la mejora continua
en todos los procesos.
El componente «total» alude a la participación y
esfuerzo de todos los miembros de la organización, así
como a la orientación de todos los procesos y niveles hacia
la satisfacción del cliente y la mejora continua.
2. CARACTERÍSTICA DE LA GCT
2.1. El cambio organizativo basado en la calidad
El cambio organizativo que la GCT implica exige alinear
adecuadamente los siete aspectos clave de la vida
organizativa
Misión: Cuando la misión es claramente definida y
ampliamente comunicada para que sea compartida, el
compromiso de los empleados es más alto.
Objetivos: Cuando los objetivos son claros, los
empleados saben lo que necesitan lograr, así como
cuándo lo han logrado.
Estrategia: La estrategia establece cómo van a ser
alcanzados la misión y los objetivos.
Estructura: La estructura es la relación entre las
personas y los roles y responsabilidades, organizados en
procesos, que los individuos y los equipos asumen para
el logro de los objetivos.
MISIÓN
PROCESOS OBJETIVOS
PERSONAS ESTRATEGIA
CULTURA ESTRUCTURA
Cultura: La cultura se define como las normas, las
creencias y los valores que guían el comportamiento de las
personas y que apoyan el modo en que trabajan juntas.
Aunque la cultura es un resultado de todos los aspectos
precedentes, es también el generador de la organización.
La cultura también condiciona en gran medida las
elecciones hechas en cuanto a la misión, los objetivos, la
estrategia y la estructura.
Personas: La gestión de las personas abarca, junto a su
integración dentro de una estructura, el diseño de sistemas
y procesos que hagan efectivo y satisfactorio su trabajo.
Procesos: La organización de las tareas y tecnologías en
procesos permite afrontar el trabajo organizativo con una
visión horizontal.
2.2. El cambio cultural en la GCT
Cualquier organización que quiera inducir a sus miembros
a buscar mejores formas de hacer las cosas debe poseer
una cultura que favorezca dichos cambios.
El cambio cultural es uno de los retos más complicados
para una organización y su dirección, puesto que implica no
sólo cambiar las rutinas organizativas sino las actitudes, los
valores y las creencias básicas de las personas.
Cambiar la cultura organizativa hacia la GCT significa dotar
al conjunto de los miembros de la empresa de un sistema
de valores compartidos, e implantar un método robusto y
comúnmente aceptado, encaminado a mantenerlo vivo
mediante su práctica continua
Estos pasos proporcionan una guía para liderar y gestionar
el cambio organizativo y cultural hacia la GCT, creando un
sólido sentido de movimiento corporativo en una dirección
compartida:
2.3. La vertiente intangible: crear un sistema de valores
La calidad jamás quedará enraizada en la cultura de una
empresa a menos que las personas la interioricen como
guía para pensar y actuar. La inculcación de un sistema de
valores en todos los miembros de la empresa busca que
éstos dispongan de un prontuario sencillo de ideas, sobre
las cuales debe descansar el desarrollo de sus actividades.
El enfoque GCT puede ser perfectamente caracterizado a
partir de ocho principios fundamentales y de su grado de
implantación según las prácticas y técnicas que se manejan
La GCT puede concebirse como la aplicación integral de un
sistema de dirección constituido por un conjunto de
programas en que participa y está comprometido todo el
personal de la empresa, así como sus grupos de interés
externos, integrados en un esfuerzo cooperativo liderado
por la dirección por mejorar el desempeño de cualquier
tarea con un triple propósito:
Crear valor para todos sus grupos de interés.
Lograr ventajas competitivas y rentas diferenciales
sobre la competencia
Configurar una cultura, una organización y un estilo de
dirección que fomente el compromiso, la participación,
y la cooperación internos, así como el aprendizaje y la
innovación.
2.4 La vertiente tangible: método y herramientas para
el cambio
• Acciones de la alta dirección.
• Establecer una estructura de apoyo a la gestión de la
calidad.
• La identificación de las necesidades y expectativas de
todos los grupos de interés clave de la organización y
seguimiento de su evaluación en función de los
cambios en el mercado.
• La justificación de un enfoque de GCT en su
contribución a los objetivos estratégicos de la
empresa.
• La elaboración de un manual y unos procedimientos
de calidad que estandaricen las mejores prácticas en
los procesos y el control de su cumplimiento por
medio de auditorias de calidad.
• La concertación con los proveedores, los clientes y
otros agentes externos,
fomentando alianzas estratégicas y relaciones
estables a largo plazo.
• El establecimiento de un diseño global y horizontal de
la organización. Creando una distribución y
coordinación de tareas favoreciendo la participación,
la cooperación y compromiso.
• Acciones de socialización.
3. PRINCIPIOS Y PRÁCTICAS PARA LA GCT
3.1. Orientación al cliente
3.1.1. ¿En qué consiste la orientación al cliente?
Este principio postula la
consideración de los
clientes como el eje de la
actividad empresarial, que
debe estar enfocada a su
satisfacción, por ser
quienes finalmente
enjuician la calidad del
servicio que la empresa les
presta.
Una definición completa del
principio de orientación al cliente comprende dos
dimensiones:
Cuidado del producto: Este primer principio, establece
que satisfacer al cliente implica ante todo lograr la
conformidad con las especificaciones que traducen sus
necesidades, manteniendo dicha conformidad en el tiempo
(minimizando la variabilidad).
El concepto de «especificación» tiene tres implicaciones
muy importantes:
Comporta un proceso de comunicación y consenso
entre suministrador y cliente (interno o externo)
Desde la concepción de la empresa como una cadena
de relaciones proveedor-cliente
Cualquier tarea es definible en términos de
especificaciones. La medición permite y facilita
entonces la gestión.
Cuidado del cliente.
Este principio propugna adelantarse a las
especificaciones actualmente exigidas, en pos de la
calidad latente o sorpresiva. Un riesgo del principio de
cuidado del producto es generar actitudes
conformistas con el puro cumplimiento de las
especificaciones, obstaculizando el progreso más allá
de ellas en pos de anticipar las expectativas futuras
del cliente. Este principio es aplicable tanto a los
clientes internos como a los clientes externos.
3.1.2. Prácticas para la satisfacción del cliente
En primer lugar, es necesario el estudio del mercado para
segmentarlo e identificar el mercado objetivo al cual la
empresa decide enfocarse. A continuación, es hacer un
seguimiento y evaluación permanente de los clientes, con
la intención de obtener información sobre sus necesidades,
la evolución de sus requerimientos, su satisfacción o su
reacción ante nuestro servicio, sus quejas y reclamaciones,
para mejorar la relación con ellos.
Tras identificar y especificar con seguridad los
requerimientos de calidad de cada grupo objetivo de
consumidores, debe asegurarse que cada empleado
comparte la misma definición de calidad difundiendo esta
información dentro de la organización.
3.2 Orientación estratégica a la creación de valor
3.2.1 DIRECCIÓN ESTRATÉGICA DE LA CALIDAD
La activación de este principio resalta cuatro aspectos en el
proceso estratégico:
La definición de un propósito compartido, plasmado en la
visión y la misión de la organización, que incorpore la
calidad como principio.
El desarrollo de una estrategia a medio y largo plazo
claramente definida, guiada por aquel propósito
compartido, que adopte prácticas de Gestión de la Calidad
tanto para la definición de objetivos como para el análisis
estratégico y para la búsqueda de ventajas competitivas
basadas en la calidad.
El despliegue de estrategias, programas y proyectos de
calidad apropiados a la misión y a la estrategia de
empresa, que sistematicen las actividades organizadas
para el control y la mejora de la calidad.
Apoyar la implantación de la estrategia de empresa y de
calidad en los procesos de cambio organizativo y cultural
que facilitan los principios de la filosofía de dirección
basada en la calidad, instaurando estructuras, sistemas,
culturas y procesos apropiados.
3.2.2 PRÁCTICA PARA INTEGRAR LA CALIDAD EN EL
PROCESO ESTRATÉGICO
La orientación estratégica hacia la creación de valor exige
recurrir a prácticas de distintos tipos, que garanticen la
integración de la calidad en el proceso estratégico de la
empresa.
Prácticas enfocadas a explotar el potencial de
creación de ventajas competitivas que la calidad
y su gestión encierran.
NOTA
La formación en calidad es un
requisito en ISO 9001:2015
¿Cuáles son los objetivos de la formación en calidad?
El nuevo sistema de valores para que toda la
organización comprenda lo que la Gestión de
Calidad Total significa.