Trabajo - Ausencia y Desaparicion Art 47
Trabajo - Ausencia y Desaparicion Art 47
Trabajo - Ausencia y Desaparicion Art 47
ALUMNA:
TACNA – PERÚ
21/10/2022
DEDICATORIA
¡SE optimista!
INTRODUCCIÓN
Ausentes han existido siempre, desde tiempos remotos. Así lo atestigua la leyenda de
Penélope en la Odisea de Homero, quien asediada por pretendientes, pero fiel a su marido
La primera consistía en la protección del presunto ausente. Este período permitía al Tribunal de
Primera Instancia tomar ciertas decisiones sobre la familia o incluso algunas medidas
provisionales relativas a la administración de los bienes del presunto ausente. Es decir, durante
esa época, solo se trataba de tomar las medidas conservatorias de los bienes del presunto
ausente. La segunda fase comenzó cinco años después de que la persona haya dejado de
mostrar signos de vida o de regreso a su domicilio. El año siguiente, al final de la primera fase,
se realizó una investigación con el fin de obtener pruebas de que el presunto ausente
efectivamente lo estaba. Si ese era el caso, la persona resultaba declarada ausente y sus
herederos entraban posesión de sus bienes sin convertirse en propietarios de los mismos.
Finalmente, la tercera fase tuvo lugar treinta años después de la declaración de ausencia ocien
años después del nacimiento del ausente. Después de estos retrasos excesivamente largos, el
La ausencia, al igual que otras instituciones del derecho civil (muerte, nacimiento, prescripción,
caducidad, ocupación, nacimiento, etc.), es un hecho jurídico que produce efectos una vez que
determinados requisitos previstos por la ley se verifiquen. En el caso de la desaparición, se
dicha, se requiere que previamente la persona esté en calidad de desaparecido, haya pasado
un lapso de tiempo mayor y además de una sentencia judicial que declare su ausencia. En el
caso de la muerte presunta, no se requiere la declaración de la ausencia sino que haya pasado
un largo periodo de tiempo sin tener noticias del paradero de la persona alejada de su domicilio
En sede peruana, en los códigos civiles de 1836, 1852 y 1936 se había regulado el régimen de
El ponente del libro de personas diferenciaba la situación del simple “desaparecido” de aquella
tratamiento y efectos difieren de los que el Código de 1936 reservaba, en el inciso 4 del artículo
jurídicos que tienen como característica común el paso del tiempo y el que constituya las tres
La ausencia, en sentido lato, es un fenómeno jurídico que se manifiesta por el hecho de que
una persona no está presente en el lugar de su domicilio, en condiciones que dan un entorno
encontrarse, aunada a determinadas condiciones que, según el caso, generan diversos efectos
jurídicos.
la desaparición y la declaración de ausencia dentro del Título VI del libro 1, mientras que la
declaración de muerte presunta ha sido ubicada dentro del Título VII del mismo libro relativo al
fin de la persona-. En la presente apostilla al Código Civil Peruano, se analizan las dos
una persona no sea hallada, que deje de estar presente donde habitualmente se le encontraba
(domicilio, familia, trabajo, círculo de amistades, etc.) sin tenerse noticia alguna sobre su
habitual en una persona que se aparta cotidianamente de su residencia por diversas razones o
motivos (ir a su trabajo, a la escuela, de compras, hacer un viaje de turismo, negocios, salud,
Doctrina española define a la desaparición como “una ruptura de hecho inicialmente entre el
medio social en que se mueve una persona y esta persona, dudándose incluso de su existencia
actual”. Se agrega que esta institución “ciertamente es típica de ciertos momentos históricos,
Por su parte, Cabanellas indica que “la desaparición constituye una de las fases de la ausencia,
justamente la que pone en marcha todo el dispositivo legal que puede conducir incluso a la
ocurre en circunstancias tales como un naufragio, un hecho de guerra, peligro inminente para la
vida, de los cuales, pasado cierto tiempo sin recibir noticias del desaparecido, lo más probable
paradero. En esta eventualidad, que se caracteriza por ser una situación de hecho, el juez del
último domicilio del desaparecido o el del lugar en que se encuentren sus bienes, es
Doctrina portuguesa opina que el derecho faculta la toma de medidas tendientes a evitar los
perjuicios surgidos de la falta de administración de los bienes de la persona ausente, así como
de la imposibilidad de gestionar las relaciones de las que el ausente era sujeto (activo o
pasivo).
Doctrina ecuatoriana advierte que los términos desaparición y ausencia se relacionan con la
presunción de muerte, ya que, para que exista una declaración de muerte presunta,
previamente debe existir una condición imprescindible, que es la ausencia o desaparición del
individuo.
Por tanto, concebimos a la desaparición como aquella situación de hecho (y una de las tres
residencia por un determinado lapso de tiempo (por más de 60 días) y sin que se tenga noticias
o información de su paradero y/o dónde se pueda encontrar y que además no cuente con un
representante con facultades suficientes para hacerse cargo de los bienes que deje mientras su
Finalmente, cabe mencionar que el hecho de la desaparición termina con el regreso del
para los efectos de las consecuencias jurídicas contempladas en nuestro sistema jurídico, con
47º del Código Civil. Viene a ser un hecho jurídico que se configura cuando la persona no se
halla en el lugar de su domicilio y han transcurrido más de sesenta días sin noticias sobre su
paradero3• Adicionalmente se requiere, para que el hecho de la desaparición surta los efectos
desaparecido tuviese representante o mandatario con las cualidades indicadas pero, ante esta
efectos jurídicos en supuestos como, por ejemplo, el del artículo 294º numeral 2º del código.
La redacción original del artículo 47º (que fuera modificada por el Código Procesal Civil)
noticias de su paradero, el juez de primera instancia del último domicilio o del lugar donde se
encontrasen sus bienes podía proceder, a petición de parte interesada o del Ministerio Público,
deben haber transcurrido más de sesenta días sin noticias sobre el paradero del desaparecido.
Consideramos que la razón para la modificatoria ha sido establecer un plazo prudencial antes
de tomar medidas que puedan generar costos innecesarios tanto para los administrados como
para el propio sistema jurisdiccional. Sin embargo, el plazo no deja de ser arbitrario, más aún
cuando pueden darse casos en que la necesidad determine actuar con prontitud.
facultades suficientes inscritas en el registro público. Esta redacción es mejor que la original
que sólo hacía referencia al mandato (negocio jurídico bilateral por el cual el mandatario se
obliga a realizar por cuenta y en interés del mandante uno o más negocios jurídicos)
ejercerse o no. Así, no necesariamente ante la configuración del supuesto de hecho del artículo
47º se generará su consecuencia jurídica. Solicitar un curador puede no ser la medida más
el derecho de solicitar la designación de un curador interino. Para estos casos el pariente más
próximo excluye al más remoto. Es claro el legítimo interés de los parientes. Por su parte,
también puede solicitar el nombramiento cualquier tercero que invoque legítimo interés en los
negocios o asuntos del desaparecido. Se contemplan por un lado, todos aquellos casos en que
una persona (natural o jurídica) esté interesada en los negocios del desaparecido abarcando
todos los aspectos de índole empresarial correspondientes a la esfera jurídica del mismo (se
contemplan los casos de los acreedores que pueden ver perjudicado su crédito, de los socios,
etc.). Por otro lado, se hace referencia a los casos en que existan personas interesadas en los
asuntos del desaparecido, supuesto que es más genérico y abarcaría, por contraposición,
aquellos casos no referidos a los negocios de la persona incluyendo, por ejemplo, el del
derechos.
A pesar que resulta aparentemente claro que la desaparición es un hecho jurídico y que lo que
busca el artículo 47º del Código Civil es el nombramiento de un curador interino, a la luz de
otras normas de nuestro ordenamiento, esto se torna ambiguo. Así, el artículo 2030° del propio
Código Civil establece en su numeral 2° que las resoluciones que declaren la desaparición, la
Personal.
Este artículo (que no ha sido modificado desde la entrada en vigencia del código) estaría
de un curador interino.
La situación anterior se agravó cuando entró en vigencia el Código Procesal Civil que regula,
en la Sección Sexta del Subcapítulo 5° del Título II relativa a los procesos no contenciosos, las
declaraciones de desaparición, ausencia y muerte presunta. Así, el
artículo 790º del Código Procesal Civil indica que se puede solicitar la declaración de
desaparición, ausencia o muerte presunta. Por su parte, el artículo 44º literal d) de la ley 26497,
Ley Orgánica del Registro nacional de Identificación y Estado Civil, indica que se inscriben en
literal d) del Decreto Supremo 015-98-PCM Reglamento de Inscripciones del Registro nacional
Finalmente, cabe mencionar que el hecho de la desaparición termina con el regreso del
para los efectos de las consecuencias jurídicas contempladas en nuestro sistema jurídico, con
presunta o confirmado la muerte. Por supuesto, el fin de la desaparición, como hecho jurídico,
es un problema distinto al relativo al fin de la curatela interina, la cual culminará cuando el juez
revoque el nombramiento.
elemento fundamental para su determinación. Coviello apunta que el domicilio constituye una
relación positiva de la persona con su lugar mientras que la ausencia es la relación negativa. El
declaración de ausencia, la mayoría de los autores se refieren a ella como el segundo periodo
La ausencia requiere por tanto de una expresa declaración judicial que tiene como importante
consecuencia la entrega de la posesión temporal de los bienes del ausente a quienes serían
existencia de dos elementos. De una parte, que se presente, el caso de una desaparición, es
decir, de una situación de hecho. De la otra, el transcurso del tiempo que, en este caso, es de
dos años contados a partir de la última noticias que se tuvo del desaparecido.
Por tanto, concebimos a la ausencia como aquella situación extraordinaria que, en primer lugar,
presupone la desaparición, en segundo, que haya pasado un lapso de tiempo mayor, (2 años) y
tercero, de una declaración judicial. Luego de la cual, la posesión de los bienes del declarado
La declaración judicial de ausencia tiene como efecto que el juez al dictarla otorga la posesión
temporal de los bienes del ausente a quienes serían sus herederos forzosos, es decir a las
personas indicadas en el artículo 724 del CC. Nos referimos a los hijos y demás descendientes,
normalmente por un administrador común, el que está autorizado, previa la reserva que debe
constituirse según lo dispuesto en el segundo apartado del artículo 51, a distribuir entre los que
serían los herederos forzosos del ausente los saldos disponibles de los frutos de sus bienes. El
juez, en situación de notoria necesidad o utilidad, puede aún autorizar al administrador judicial
El derecho supone que el ausente está vivo. No existen evidencias ni indicios del
deceso. Sin embargo, de forma antelada se beneficia a sus herederos en razón de que son los
llamados a proteger en mejor forma los intereses económicos del ausente y, junto a ello,
definitiva.
Si bien ante la constatación del hecho de la desaparición, conforme a las reglas del artículo 49,
nuestro ordenamiento otorga a cualquier persona que tenga legítimo interés, o al ministerio
entonces, que ante la verificación del hecho puede declararse la ausencia, esto es, no
De conformidad con el artículo 59, cesan los efectos de la declaración judicial de ausencia por:
posterioridad a la declaración.
En los dos primeros casos, se procede a la restitución del patrimonio a su titular, en el estado
encontramos ante un supuesto de mayor complejidad que la simple desaparición y que lleva
consigo consecuencias jurídicas mucho más dramáticas. Lo primero que hay que analizar es el
hecho jurídico que desencadena la declaración. Este se configura cuando transcurren dos años
desde que se tuvieron las últimas noticias de la persona, ya sean éstas la presencia del sujeto
domicilio o no se tengan noticias sobre su paradero y que hayan transcurrido por lo menos dos
Nos encontramos ante una desaparición calificada que, debido al elemento temporal que se le
47º del código. En este caso, la persona ha desaparecido por un lapso que el legislador ha
considerado lo suficientemente amplio como para tomar medidas mucho más radicales que el
nombramiento de un curador interino. Se entiende que transcurridos dos años desde que se
tuvo la última noticia de la persona su patrimonio e incluso todos sus derechos corren mayor
transcurridos dos años, se pone en duda. Finalmente, se ponen en riesgo los intereses de la
La redacción del artículo 49º del Código Civil lleva a confusión en cuanto indica que deben
pasar dos años desde que se tuvo la última noticia del desaparecido con lo que,
aparentemente, primero deberán transcurrir sesenta días desde las últimas noticias de la
persona, esto es, que se configure el hecho de la desaparición bajo las reglas del artículo 47º,
para recién contabilizar el plazo de dos años bajo las reglas del artículo 49º. Esto resulta ser un
absurdo por cuanto el mismo artículo indica que las últimas noticias sobre el paradero de la
persona determinan el momento inicial para la cuenta del plazo y no así la configuración del
contabilizará a partir del momento en que se tuvieron las últimas noticias del paradero de la
persona.
Ante la constatación del hecho de la desaparición, conforme a las reglas del artículo 49º,
nuestro ordenamiento otorga a cualquier persona que tenga legítimo interés, o al Ministerio
entonces, que ante la verificación del hecho puede declararse la ausencia, esto es, no
El legítimo interés al que se refiere el artículo, aunado a lo estipulado en el artículo VI del Título
naturaleza individual y comprende a todos los familiares, en cuanto éstos son los llamados a
proteger los intereses del desaparecido, incluyendo, asimismo, a los acreedores y cualquier
otra persona que tenga un interés patrimonial relativo a la persona en cuestión"'. Finalmente,
Hay que agregar que los legítimos interesados, ante la verificación del hecho al que se refiere
este artículo, pueden optar por solicitar el nombramiento de un curador interino conforme a las
reglas del artículo 47° del código en cuanto, definitivamente, nos seguimos encontrando ante
un supuesto de desaparición. La decisión queda al arbitrio de los interesados quienes
Es importante aclarar que sólo las personas señaladas en el artículo 47º podrán efectuar esta
opción ya que si estamos, por ejemplo, ante un familiar que no se encuentra entre el cuarto
grado de consanguinidad o afinidad, sólo se podrá optar por solicitar la declaración de ausencia
hasta para solicitar tres cosas diferentes: que se nombre un curador interino, que se declare la
interino para solicitar la declaración de ausencia. Finalmente, debe hacerse hincapié en que
representante con facultades suficientes. Así, se puede declarar la ausencia de una persona
aun cuando tenga designado un representante. Esto se puede desprender del contenido del
artículo 53º del código. Se discute, sin embargo, el supuesto en que el sujeto ha dejado
supuesto que aparentemente haría innecesario declarar la ausencia. Sin embargo, debemos
manifiesta importancia, sobre todo en la vida familiar, por lo que consideramos que aún en la
última hipótesis mencionada, esto es, cuando haya representantes con facultades suficientes
ausencia.
2.2. Declaración de ausencia- procedimiento
Cualquier interesado o el Ministerio Público, como hemos visto, estará facultado para
años siendo esta última, entonces, un presupuesto, y no un elemento, para que se configure la
primera.
En este sentido, ninguno de los efectos a que se refiere el capítulo sobre declaración de
Concuerda lo anterior con el artículo 790º del Código Procesal Civil, que indica que se puede
procesales dicha solicitud se tramitará como proceso no contencioso, debiendo incluir, además
de los requisitos generales de la demanda, la relación de bienes y deudas que se conozcan del
ausente así como el nombre de sus probables sucesores, tal y como lo establece el artículo 79º
El Código Civil establece en el segundo párrafo del artículo 49º que, territorialmente, es
competente el juez del último domicilio que tuvo el desaparecido o el del lugar donde se
encuentre la mayor parte de sus bienes. Mediante esta norma se faculta a los interesados, o al
Ministerio Público, a solicitar la declaración judicial de ausencia ya sea ante el juez del último
encuentren la mayoría de sus bienes, medida que busca hacer más eficientes los mecanismos
La resolución que admita a trámite la solicitud será notificada mediante edicto conforme lo
estipula el artículo 792º del Código Procesal Civil. El mismo artículo establece que, debido a las
consecuencias que acarrea la declaración de ausencia, se notifique a quienes pudiesen tener
A fin de declarar fundada la solicitud presentada, el juez deberá evaluar si es que la persona no
que deberá ser unido al elemento temporal, esto es, que por lo menos medie un lapso de dos
años desde que se tuvieron las últimas noticias de la persona hasta el momento de
interposición de la solicitud.
Finalmente, la sentencia que declare la ausencia, según el artículo 793º del Código Procesal
complejas que la simple desaparición, determina que las consecuencias jurídicas que se
que se da la posesión temporal de los bienes del ausente a quienes serían sus herederos
forzosos, en caso de muerte del mismo al tiempo de declararla. Esta situación se entiende
más cercanos, son los llamados a proteger los intereses económicos del desaparecido. Se
entiende, además, debido a que los herederos forzosos tienen una expectativa a salvaguardar
en herencia.
Los herederos forzosos son, según el artículo 724º del código, los hijos y los demás
personas se les puede otorgar, según el artículo 50 del código, la posesión temporal de los
bienes del ausente. Entendemos que se excluye a las personas declaradas indignas o
La distribución patrimonial de las cuotas en el valor de los bienes del declarado ausente, se
efectuará tomando como base las reglas de la sucesión intestada, pudiendo ser de dos formas:
Corresponderá exactamente el mismo porcentaje del valor de los bienes a los eventuales
herederos forzosos, si éstos tienen el mismo orden de acuerdo al artículo 816° excluyendo el
ascendiente, la distribución se efectuará por partes iguales, en principio, recibiendo por estirpe,
que ésta sólo se efectuará una vez comprobada la muerte de la persona o mediando una
declaración judicial de muerte presunta''. En este sentido, los herederos forzosos sólo ostentan
gravamen.
2.4. Consecuencias extrapatrimoniales de la declaración de
ausencia
que tendrían los parientes, ya sean herederos forzosos o no, y/o el curador interino, de ser el
caso, para proceder a la búsqueda del declarado ausente, tal y como establece el Código Civil
Español.
Por otro lado, si el declarado ausente tuviese hijos, la patria potestad respecto a éstos queda
en suspenso conforme al artículo 466º numeral 2º, Es importante indicar que si los dos padres
Ahora bien, si sobreviniere un hijo, esto es, si la cónyuge del declarado ausente tuviese un hijo
con posterioridad a la declaración de ausencia, se presumiría que el neonato tiene por padre al
declarado ausente por cuanto el nacimiento habría acaecido dentro del matrimonio de
conformidad con el artículo 361º del código (por lo que no correspondería, obviamente, efectuar
matrimonial. Teniendo en cuenta esto, y por su parte, en caso de que el cónyuge del
declarado ausente se casara nuevamente, el nuevo matrimonio sería nulo según lo establece el
artículo 274º numeral 3º del código, sin embargo, según el propio artículo sólo podría ser
impugnado, mientras dure el estado de ausencia, por el nuevo cónyuge y siempre que hubiese
Queda claro que si el declarado ausente regresa podrá solicitar que se declare la nulidad.
El código faculta a los ascendientes del declarado ausente para iniciar la acción de separación
en lo relativo a su conformación, tal y como lo establece el artículo 637º del código, o en lo que
respecta a la protección del declarado ausente, como lo indican los artículos 638º, 653º y 654º.
Finalmente, cabe anotar, que si el declarado ausente tenía el cargo de albacea de alguna
persona, conforme a las reglas del Libro de Sucesiones, su cargo termina con
El código establece en el artículo 31º que, como requisito previo para el otorgamiento de la
posesión temporal de los bienes del ausente a quienes serían sus herederos forzosos
razón resulta bastante clara: se busca evitar cualquier tipo de confusión entre el patrimonio del
declarado ausente y el que corresponde a los poseedores temporales del mismo. Entendemos
que el inventario correspondiente se deberá llevar a cabo conforme al artículo 791 o del Código
Procesal Civil.
temporal de los bienes del ausente indicando que éste tiene los derechos y obligaciones
inherentes a la posesión.
Tal y como lo establece el artículo 896° la posesión es el ejercicio de hecho de uno o más
poderes inherentes a la propiedad. En este sentido, la posesión temporal que se otorga a los
herederos forzosos los faculta a usar el o los bienes dados en posesión, esto es, utilizarlos para
Por otro lado, el poseedor temporal también puede disfrutar del bien o los bienes otorgados, en
otras palabras, hacer suyos los frutos, ya sean naturales, industriales, o civiles del bien.
Sin embargo, cabe anotar que esta facultad no es irrestricta. Según el artículo 31, mencionado,
el poseedor goza de los frutos con la limitación de reservar de éstos una parte igual a la cuota
de libre disposición del declarado ausente. Con esta medida se busca restituir los frutos al
Tal y como hemos visto, la declaración judicial de ausencia trae consigo que se otorgue
la posesión temporal de los bienes del ausente a quienes serían sus herederos forzosos. Sin
embargo, hay una prohibición legal para enajenar o gravar bienes derivada del artículo 52º del
código. Esto resulta claro en cuanto al no ser propietario de los bienes no podría hacer efectiva
Lo anterior es distinto a considerar que no se pueda celebrar un contrato sobre dichos bienes
ya que, en nuestro sistema jurídico, cabe la posibilidad de celebrar contratos sobre bienes
ajenos y establecer garantías sobre los mismos, por lo que el poseedor no propietario podría
efectuar dichos actos. Sin embargo, en el plano obligacional, no sería posible en cumplimiento
de la prestación a su cargo.
Por otro lado, a los poseedores temporales no les está prohibido celebrar contratos no
Incluso podrán celebrar un contrato de mutuo aplicando, a fortiori, el artículo 1651' del código.
La regla anterior tiene una excepción en el mismo artículo ya que los poseedores temporales,
según se indica, podrán enajenar o gravar los bienes en cuestión en casos de necesidad o
utilidad con sujeción a lo establecido en el artículo 56° "Así, al encontrarnos en alguna de estas
circunstancias será necesario que los poseedores temporales de los bienes del declarado
ausente soliciten autorización judicial para enajenar o gravar el bien o bienes que poseen,
Cabe anotar que no se puede interpretar la remisión al artículo 56° entendiendo que sólo el
administrador judicial puede solicitar autorización para enajenar o gravar los bienes del
administrador judicial es facultativa y obligar a los poseedores a nombrar uno para que en caso
de necesidad o utilidad éste pueda solicitar autorización para efectuar dichos actos sería un
absurdo.
que hagan necesaria una disposición patrimonial con el fin de evitar perjuicios al desaparecido
o, inclusive, a los mismos poseedores temporales. También podría darse el caso que la
declarado ausente.
Cabe hacer mención a lo estipulado en el artículo 307°,norma que facultaría, a fortiori, a los
poseedores temporales para transigir, con aprobación del juez, respecto de los bienes del
declarado ausente. En este caso, debemos indicar que la transacción es posible, siempre que
enajenación o gravamen de los bienes en cuestión, previa acreditación del caso de necesidad o
utilidad.
existe representante o mandatario con facultades suficientes. Esta situación será relevante sólo
en cuanto se quiera nombrar curador interino de bienes conforme al artículo 47° del código.
Una vez declarada judicialmente la ausencia de la persona, como hemos indicado, la posesión
de sus bienes se transfiere a sus herederos forzosos, situación que conlleva la administración
representantes o mandatarios que realicen actos relacionados con los bienes del declarado
Hay que tener en consideración que en realidad la extinción de los mandatos y poderes se
realiza con la resolución que declara la ausencia, sin embargo se hace efectiva a partir del
con ese acto, los poderes o mandatos que obren ahí. Sin embargo, hay que tener en cuenta
que el apoderado o el mandatario podría tomar conocimiento de la resolución por otro medio
El artículo 53º del código, ciertamente, no se refiere a la extinción de acto sino a la cancelación
del registro del mandato o poder que determinará, en algunos casos, la extinción efectiva del
mismo. Suponer lo contrario dejaría de lado todos los actos no inscritos ya que el supuesto de
Debemos tener en consideración, además, que hay un lapso entre el momento en que se
representante toma conocimiento de la extinción del mandato o poder, por lo que podrían
Por otro lado, queda una duda respecto a la extinción de aquellos poderes otorgados para
extrapatrimonial del declarado ausente. Consideramos que este tipo de poderes debería
mantener su vigencia.
El administrador judicial viene a ser la persona designada por un tribunal o un juez competente
encontremos ante varias personas que hayan obtenido la posesión temporal de los bienes de
ausente, por lo que la administración de los mismos se hará más difícil, siendo menores las
La solicitud para el nombramiento de administrador judicial la puede hacer cualquiera que haya
obtenido la posesión temporal de los bienes del ausente de conformidad con el contenido del
artículo 54º del código. Estamos hablando, entonces, de que puede haber una solicitud
individual: uno de los poseedores temporales podría solicitar el nombramiento de administrador
judicial. Por supuesto, podría también presentarse una solicitud basada en un acuerdo de un
El artículo 771 º del Código Procesal Civil indica que pueden solicitar el nombramiento de
administrador judicial de bienes, además del caso establecido en el Código Civil, aquellas
personas que, a criterio del juez, tengan un interés sustancial para pedir el nombramiento.
Consideramos que no sólo los herederos forzosos que han tornado posesión de los bienes del
aún,cuando puede que éstos no existan. También pueden solicitarlo, por ejemplo, los
acreedores del declarado ausente cuando su crédito se vea perjudicado por los actos que los
poseedores temporales efectúan. La redacción del artículo 772º del Código Procesal Civil
las normas del proceso no contencioso, conforme al artículo 749º Numeral 2º del Código
Puede que debido a la cantidad de bienes dejados por el declarado ausente, o por la
complejidad de los asuntos del mismo, sea necesario el nombramiento de dos o más
administradores. Dicha situación se efectuará al amparo del artículo 772º del Código Procesal
Civil.
La retribución que corresponde al administrador judicial de los bienes del ausente será
determinada por el juez, conforme lo establece el artículo 778º del Código Procesal.
removido del cargo conforme lo establece el artículo 777º del Código Procesal. En estos
últimos casos la remoción puede deberse a voluntad de los poseedores temporales de los
bienes del ausente, o aquellos que solicitaron su nombramiento. La remoción también puede
deberse al término de la ausencia ya sea por regreso del declarado ausente, su muerte o su
declaración de muerte presunta. En este último caso, también será necesaria resolución
judicial.
institución. Ellos están encargados de custodiar los bienes que temporalmente han sido
otorgados en posesión a los que serían herederos forzosos del ausente. Esta situación no
determina necesariamente quitar la posesión a éstos últimos ya que la - hipótesis contraria, los
Una función que se desprende de los actos de administración es la de percibir los frutos de los
Es claro que el administrador no percibe los frutos para sí, sino que los obtiene para
custodiarlos hasta el momento en que se efectúe la distribución de los mismos a los herederos
forzosos, salvo la parte igual a la cuota de libre disposición del declarado ausente. Como
administrador, se entiende que deberá efectuar todos los actos conducentes a la obtención de
los frutos.
Así, tomará las medidas encaminadas a recoger los naturales como, por ejemplo, supervisar la
cosecha de una plantación. En caso sean frutos industriales deberá coordinar las actividades
- Pagar las deudas del ausente y atender los gastos correspondientes al patrimonio que
administra.
El administrador judicial tiene la obligación de efectuar el pago de las deudas del ausente.
Ciertamente, realizará los pagos con el patrimonio de éste, afectándolo según sea necesario.
Por su parte, es necesario que atienda los gastos correspondientes al patrimonio que
administra. Así, deberá efectuar el pago de impuestos y de servicios en general que conlleven
- Reservar en cuenta bancaria, o con las seguridades que señale el juez, la cuota a la
que se refiere el artículo 51°. Conforme se indica en el artículo 51º, si bien los
poseedores temporales gozan de los frutos provenientes de los bienes del declarado
ausente, esta situación no es absoluta ya que es necesario, tal como hemos visto, que
se reserve una parte equivalente a lo que vendría a ser la cuota de libre disposición del
ausente.
El administrador judicial de bienes, de acuerdo a esta norma, estará obligado a realizar los
actos encaminados a resguardar la porción de los frutos reservada para el declarado ausente,
en caso retorne.
Los mecanismos de reserva de los frutos serán distintos dependiendo de la naturaleza de los
mismos. Esta es la razón que justifica las diversas posibilidades que plantea el legislador para
este acto".
De acuerdo a lo anterior, si los frutos son civiles y tienen una naturaleza dineraria deberán ser
depositados en una cuenta bancaria, salvo que esto sea imposible debido a las circunstancias,
como la inexistencia de una agencia bancaria en la localidad, o porque puede ser conveniente
realizar otro tipo de acto, según señale el juez de acuerdo a las circunstancias
- Distribuir regularmente entre las personas que señala el artículo 50° los saldos
Este numeral se refiere a la distribución de los frutos conforme a la regla establecida el artículo
51 o del código. La redacción es ambigua porque debió referirse a los frutos y su distribución y
Lo que ocurre es que el administrador judicial de los bienes del ausente está obligado a pagar,
conforme a numeral zo del artículo 55º, las deudas del ausente y atender a los gastos
correspondientes al patrimonio que administra. Estos pagos los efectuará con los activos con
que cuenta. En principio, pagará sus deudas con el activo dinerario que tuviese, incluyendo los
frutos civiles de naturaleza dineraria. Eventualmente podrá cumplir las obligaciones del ausente
con activo no dinerario dependiendo de cada acuerdo. Entonces, de esta operación puede
Este saldo es el que se distribuye conforme a las reglas del artículo 51º.
El código debió referirse a la distribución de los frutos en caso quedase un saldo de éstos luego
de pagar las obligaciones con que está afectado el patrimonio de declarado ausente.
- Ejercer la representación judicial del ausente con las facultades especiales y generales
bienes del declarado ausente. Con el fin de proteger los intereses de éste último, el legislador
ha entendido que el administrador judicial ejerce la representación judicial del ausente. Tal y
como establece el artículo 74º del Código Procesal Civil, la representación judicial confiere al
administrador judicial de los bienes del ausente las atribuciones y potestades generales que
corresponden al representado, salvo aquéllas para las que la ley exige facultades expresas.
atribuciones no previstas en el listado del artículo 55º. Para esto, será necesaria la aprobación
De la redacción del numeral mencionado puede deducirse que para que el administrador
judicial ejerza una atribución no prevista en la ley, es necesaria la previa autorización judicial.
los bienes del ausente que tengan capacidad de ejercicio mediante acuerdo que
En caso de desacuerdo el administrador judicial tendrá las facultades que señale el juez
cuentas de su administración en los casos señalados por la ley. Esta obligación es inherente,
El administrador judicial de bienes está obligado a rendir cuenta e informar de su gestión en los
Conforme al artículo 774° del Código Procesal Civil estará obligado a rendir cuentas en estos
casos o, en su defecto, en los establecidos en el Código Civil y, en todo caso, al cesar el cargo.
Conforme a lo anterior el legislador deja a criterio de los poseedores temporales de los bienes
del ausente establecer los plazos y el contenido de la rendición de cuentas. Dicho acto será
efectuado cuantas veces se establezca de común acuerdo o por mayoría de los legitimados,
El artículo 56º del Código Civil otorga al administrador judicial de bienes del ausente una
facultad especial adicional que es la de enajenar o gravar los bienes del declarado ausente en
Tal y como vimos, a propósito del artículo 52°, la regla general en caso que se declare la
ausencia de una persona es que no se pueden enajenar o gravar sus bienes. Las excepciones
a dicha regla son los casos de necesidad o utilidad dentro de lo que establece el Código Civil.
establecido en el artículo 52°. Consideramos que la sistemática de esta sección es poco feliz,
ya que, si la regla que prohíbe la enajenación o el gravamen de los bienes está en el artículo
52°, tanto la excepción como las condiciones de la misma deberían estar ahí también y no
hacer una remisión al artículo 56°, donde se encuentra un supuesto de excepción, mucho más
limitado que el de la regla. En todo caso, a pesar de esta situación, lo que busca el legislador
parece claro.
Nuestro ordenamiento establece, en el artículo 57º del código que, en aquello que no
haya sido previsto en los artículos 55º y 56º, esto es, respecto a las funciones y facultades del
administrador judicial de los bienes del declarado ausente, se aplicarán, por supletoriedad,
normas procesales.
Primeramente, cabe anotar que la rem1s10n de este artículo no es a todas las normas
Sólo se remite a las normas procesales que hagan referencia a las funciones y obligaciones del
Las normas a las que se remite son aquellas que contemplan las atribuciones, obligaciones y
prohibiciones que recaen sobre el ausente. Nos referirnos a los artículos 773º al 776º del
La norma del artículo 58º del código contempla la facultad de solicitar judicialmente la
asignación de una pensión alimenticia con cargo al patrimonio del declarado ausente. El
legislador mediante esta norma busca proteger a aquellas personas, del entorno familiar del
Según el artículo antes mencionado los legitimados para solicitar una pensión alimenticia
son los herederos forzosos del declarado ausente económicamente dependientes de él que no
recibieran rentas suficientes para atender a sus necesidades. De lo anterior se desprende que
forzosos. Queda claro que la redacción en mención es ociosa, ya que el cónyuge es uno de los
herederos forzosos conforme lo establece el artículo 724° del mismo. Esta última norma
establece que son herederos forzosos los hijos y demás descendientes y los padres y demás
ascendientes.
Hay que aclarar que la norma se refiere a la condición de heredero forzoso de manera
genérica, esto es, no interesa que el mismo esté en posesión temporal de los bienes del
ausente ya que el potencial heredero forzoso pudo no aceptar que se le otorgue la posesión
temporal de todos o parte de los bienes del declarado ausente lo que, obviamente, no enerva
su condición de heredero.
Siguiendo la idea anterior, el heredero forzoso que ha sido desheredado o declarado indigno no
entrará en posesión temporal de los bienes del ausente. Sin embargo, esto no elimina la
posibilidad de exigir alimentos sino que sólo los limita conforme al artículo 485° del código.
Los requerimientos del legitimado para exige la pensión conforme a este artículo
Conforme a lo que establece el artículo 472° del Código Civil los alimentos incluirán aquello que
Para el caso de los niños y adolescentes los alimentos son mucho más amplios. El artículo 92°
del Código del niño y del Adolescente establece que se entiende por alimentos todo aquello
adolescente.
del solicitante, esto es, apreciar su real necesidad. Por otro lado, será también necesario tener
en consideración la cuantía del patrimonio afectado con la finalidad de establecer una pensión
que cubra las necesidades del acreedor alimentario en base a la posibilidad real de afectarlo.
Lo anterior se desprende de la regla, establecida en el artículo 481 o del código, que indica que
los alimentos se fijan en función a las necesidades del alimenticias y a las posibilidades del
establecidas para el proceso sumarísimo regulado en el Código Procesal Civil, en lo que sea
aplicable.
Tal y como hemos visto al comentar el artículo 49° del código la declaración judicial de
El texto del artículo 59º indica que en ella se regulan los supuestos de cesación de vigencia de
Hay que considerar que jurídicamente las cosas se deshacen del mismo modo que fueron
creadas. Así, si se requiere una declaración judicial para configurar la ausencia, se requerirá
El artículo 794º del Código Procesal Civil contempla el reconocimiento de presencia y cesación
de los efectos de la sentencia que hubiera declarado la ausencia de una persona, el cual se
de esto se hace necesario que la persona solicite que judicialmente, por haber regresado,
desaparición.
Cabe anotar que, conforme al artículo 53º se inscribió en el Registro de Mandatos y Poderes la
reconocimiento de presencia en dicho registro antes de hacer efectiva la inscripción del poder o
mandato.
comprobación de la muerte del declarado ausente. Lo encontramos aquí ante un caso en que
a que el sujeto de derechos sobre el cual recaía la resolución judicial en cuestión, deja de
presunta.
Esta declaración contemplada en el artículo 63º y siguiente del código, genera los mismos
efectos que la muerte de la persona. Queda claro que no se requiere una resolución que haga
nombre mandatarios pero se constate su presencia en otro lugar distinto a su domicilio. Tal es
fotografías u otros medios. En este caso se podrá verificar su presencia y solicitar judicialmente
El artículo 60º del código contempla los efectos del cese de la declaración de ausencia,
estando los mismos determinados por la causal ante la cual nos encontremos.
La principal consecuencia jurídica es que los bienes que estaban en posesión temporal
Cabe precisar que la entrega de los bienes se efectuará en el estado en que éstos se
encuentren. Sin embargo, entendemos que, si se han efectuado mejoras a los bienes
otorgados en posesión, aquél que poseyó el bien hasta el regreso del propietario tendrá
derecho a que se le restituya el valor actual de las mejoras necesarias y útiles pudiendo retirar
las de recreo, conforme al artículo 917° del código, teniendo el derecho de retención hasta el
reintegro, de acuerdo al artículo 918°. Por otro lado, la persona cuya presencia ha sido
reconocida recobrará la diferencia del precio de aquellos bienes que han sido enajenados por
conforme a los artículos 52º y 56º del código. Dicha diferencia resulta de restar al precio de
venta del bien la parte que se utilizó para cubrir el caso de necesidad u obtener la utilidad.
conforme a lo estipulado en los artículos 51º y 55º numeral 3º. Estos frutos se restituirán en el
Los efectos extra patrimoniales también se harán efectivos. Así por ejemplo, si la persona
tuviese hijos y hubiese sido suspendido en el ejercicio de la patria potestad, la volverá a ejercer
En estos casos, conforme al artículo 660º del código, desde el momento de la muerte o
mediando la resolución judicial de muerte presunta, los bienes, derechos y obligaciones que
Los poseedores temporales de los bienes estarán obligados, sin embargo, a entregar los
bienes que hayan sido dispuestos por el causante a título de legados, conforme al artículo 756º
el código, a las personas designadas con este objeto"'. También estarán obligados a entregar
los bienes que poseían aquellas personas que han sido desheredadas a partir de la apertura
del testamento.
En caso de sucesión intestada la distribución se efectuará según las mismas reglas que
determinaron la posesión temporal de los bienes del ausente, salvo que durante la vigencia de
la declaración de ausencia se haya promovido un proceso de exclusión de la sucesión a uno de
los poseedores temporales. A partir de lo anterior, en los casos que corresponde, desde la
Respecto a los frutos reservados conforme a los artículos 51º y 55º numeral 3º cabe mencionar
que los mismos se distribuirán entre los herederos forzosos en el estado que se encuentren.
Finalmente, los efectos extrapatrimoniales, en los supuestos bajo análisis, son los que surgen a
(BGB), que prevé dicha declaración tanto para el caso de ausencia prolongada de una persona,
declaración judicial de muerte puede ser pronunciada por el tribunal de familia a solicitud de
cualquier persona interesada o del fiscal público siempre y cuando se cumplan cuatro
condiciones de forma acumulativa. Primero, que ningún certificado de defunción haya sido
Doctrina nacional define la declaración de muerte presunta como aquella resolución judicial por
por muerta presuntamente a una persona, del mismo modo que si se hubiera comprobado su
Por tanto, entendemos por muerte presunta a la tercera y última fase de la ausencia en la cual
se procede a la declaración judicial de la muerte de una persona cuando haya pasado un largo
lapso de tiempo sin tenerse noticias de su paradero (10 años); o un lapso de tiempo menor si
certeza de su deceso en aquellos casos en los que el cadáver no pueda ser encontrado ni
identificado.
Para el ponente del libro de personas, el artículo 63 del CC, contempla tres hipótesis sobre la
base de las cuales cabe la declaración de muerte presunta a solicitud de cualquier interesado –
o sea de quien tenga legítimo interés económico o moral o del Ministerio Público en
cadáver, excepto en el caso que de existir, no pueda ser reconocido, no obstante lo cual hay
certeza de la muerte.
La declaración de muerte presunta no requiere la previa declaración de ausencia. Los efectos
Al ser los efectos jurídicos de la declaración judicial de muerte presunta los mismos que los de
los de la muerte, corresponderá, en virtud del 660 del CC, la transmisión de los bienes,
desembocado en su extensión a otros ámbitos tales como el séptimo arte (El Naúfrago),
la literatura (la odisea), el derecho (que la regula en los diversos códigos civiles del
- La desaparición, la ausencia y la muerte presunta son hechos jurídicos que tienen como
característica común el paso del tiempo y el que constituyan las tres fases de la
finalidades distintas.
- La ausencia, al igual que otras instituciones del derecho civil (muerte, nacimiento,
efectos una vez que determinados requisitos previstos por la ley se verifiquen.
su paradero.
haya pasado un largo periodo de tiempo sin tener noticias del paradero de la persona
- Las tres instituciones (desaparición, ausencia y muerte presunta) son hechos jurídicos
que tienen como característica común el paso del tiempo y el que constituyen las tres
fases de la «ausencia.
- Concebimos a la desaparición como aquella situación de hecho (y una de las tres fases
residencia por un determinado lapso de tiempo (por más de 60 días) y sin que se
además no cuente con un representante con facultades suficientes para hacerse cargo
años) y tercero, de una declaración judicial. Luego de la cual, la posesión de los bienes
común.
- Los efectos de la declaración judicial ausencia cesan: 1. con el regreso del ausente; 2.
con la designación de apoderado con facultades suficientes, hecha por el ausente con
largo lapso de tiempo sin tenerse noticias de su paradero (10 años); o un lapso de
finalmente cuando existiera plena certeza de su deceso en aquellos casos en los que el
- Al ser los efectos jurídicos de la declaración judicial de muerte presunta los mismos que
los de los de la muerte, corresponderá, en virtud del 660 del CC, la transmisión de los