Lectura de La Electiva
Lectura de La Electiva
Lectura de La Electiva
Si cada ser humano es único, esta característica también puede reflejarse en el proyecto de vida
elegido por una persona de forma libre y coherente con sus intereses. Esto significa que más allá
de cualquier tipo de visión reduccionista de aquello que supuestamente corresponde a cada edad
en la madurez, tú te haces tus propias preguntas y, por tanto, encuentras tus propias respuestas
sobre cuál es tu vocación existencial y tu misión. ¿Cómo hacer un proyecto de vida?
Este proyecto de vida aporta sentido a tu existencia, estructura tu tiempo en torno a aquello que
es esencial para ti. Por tanto, esta deliberación parte de una elección que se concreta en una
decisión. La decisión de quién deseas llegar a ser y en qué deseas invertir tu tiempo para ser feliz.
El viaje hacia la búsqueda de la felicidad tiene tu propia mirada. Por tanto, es tu responsabilidad
definir las características de tu proyecto para poder sanar tu relación contigo mismo.
Planificación y gestión del tiempo. El tiempo avanza sin pausa. A través de este programa puedes
anticiparte al futuro por medio de la planificación en torno a este esquema.
Ofrecer esperanza a los demás. Cuando tú eres feliz, también haces más felices a los demás. Por
ello, los efectos de este proyecto de vida van más allá de ti mismo.
Cómo hacer un proyecto de vida - Objetivos del proyecto de vida: cinco razones para hacerlo
Nadie puede hacer tu proyecto de vida por ti, esta decisión es totalmente personal. Por tanto,
incrementa tu autoconocimiento en torno a preguntas que te ayudan a meditar sobre las claves de
una existencia auténtica. ¿Cómo hacer tu proyecto de vida?
1. ¿Cómo te visualizas a ti mismo en un escenario de felicidad en tu vida?
Tómate tu tiempo para reflexionar sobre esta pregunta y encuentra en esta visualización una
forma de inspiración para escribir tu proyecto personal.
La pregunta número uno te ayuda a concretar la dirección a seguir, sin embargo, para diseñar un
plan de acción que unifique ambos puntos tienes que concretar cuál es el punto de partida que
describa la realidad de tu presente.
Tomas decisiones constantemente puesto que tienes la libertad de elegir entre distintas
posibilidades. Sin embargo, la coherencia en tu plan de vida parte de la diferenciación de aquello
que es prioritario frente a aquello que ocupa una posición menos importante. No cometas el error
de convertir en un asunto trascendental una cuestión que para ti es secundaria.
La motivación principal de este proyecto es su aplicación práctica para llevar las reflexiones
teóricas a la realidad de la experiencia. ¿Qué puedes hacer tú para dar forma a este esquema
vital? ¿En qué manera puedes ocuparte de aquello que depende de ti en este proyecto? ¿De qué
recursos y medios dispones actualmente para utilizar esas herramientas de forma constructiva en
este proyecto?
¿Cuáles son los valores que guían tus pasos y que son una brújula constante para ti en la toma de
decisiones sobre tu vida?
Para saber cómo hacer un proyecto de vida no basta con hacer la estructura de tu proyecto, debes
tener en cuenta qué pasos dar y qué errores debes evitar.
Tu referencia en la realización de este guión no son los demás, sino tú mismo. Se trata de tu vida y
del modo en el que quieres vivirla para sumar alegría, sentido, realización y superación personal a
este camino.
Si tu voz interior te envía mensajes constantes que te recuerdan que el lugar en el que te
encuentras está lejos del punto en el que quieres estar realmente, es importante que abras tu
mente y tu corazón al cambio como motor de transformación.
3. No te centres en aquello que no depende de ti
Es cierto que existen muchos factores inesperados que condicionan la realidad de un ser humano.
Sin embargo, para crear tu proyecto de vida es recomendable que observes tu realidad, pero
también, tu capacidad para tomar decisiones. Tu proyecto de vida solo es realmente inspirador
cuando te lleva a posicionarte en el papel de protagonista.
4. Evita la impaciencia
En un tiempo tan marcado por la inmediatez, conviene recordar que existen preguntas que no se
responden desde una mirada superficial ante la realidad. La búsqueda de respuestas y el
establecimiento de conclusiones de un proyecto de vida parte de la paciencia como clave de
observación, aprendizaje y calma.
Si cometes este error caes en la trampa de tu propio autoboicot ya que tu luz interior queda
eclipsada por una visión distorsionada de tu potencial.
Por medio de un proyecto de vida puedes contextualizar el trazado vital que conduce a esos
objetivos que son esenciales para ti desde el punto de vista del sentido, la motivación y el
compromiso contigo mismo, tus valores, tus creencias y tu propia felicidad. Sin embargo, el
proyecto de vida también puede contextualizarse en un período concreto de tiempo. Es decir, el
proyecto de vida puede tener objetivos a corto, medio y largo plazo. Por ejemplo, puedes acotar
tu reflexión en torno al corto plazo. Pero también puedes ampliar el plan de acción a través de la
visión del medio y el largo plazo. De hecho, estos tres escenarios están interconectados cuando
vinculas las decisiones que tomas ahora con el propósito general que deseas cumplir a largo plazo.
Por ejemplo, si deseas trabajar en un sector específico, un propósito a corto plazo es hacer tu
matrícula en un programa de formación que ofrece salidas laborales en esa dirección. El primer
paso para empezar con tu proyecto de vida es saber cómo hacer un proyecto de vida. Después,
podemos ver en qué áreas de nuestra vida queremos trazar el proyecto de vida. Lo veremos a
continuación a través de los distintos ejemplos que presentamos. Proyecto de vida personal
Un proyecto de vida personal una meta o conjunto de ellas en el ámbito personal sobre cómo
quieres ser y cómo conseguir la felicidad personal. Ese proyecto debe contar con los pasos para ir
alcanzando objetivos y finalmente conseguir esas metas del proyecto de vida personal. Ese
proyecto debe basarse en tus aspiraciones, tu manera de ser y tus valores y creencias. La manera
de acercarte a los propósitos es dividirlos en pequeñas metas y determinar qué acciones son
necesarias para completarnos. Para establecerlo puedes preguntarte: ¿qué te hace feliz?, ¿cómo
te gustaría verte en unos años?, ¿a qué quieres dedicar tu vida?, ¿cuál es tu propósito?, etcétera.
El ámbito del trabajo es muy importante no solo por ser un medio de estabilidad económica, sino
también una fuente de desarrollo personal y contribución a la sociedad. Si no sabes qué hacer con
tu vida profesional, puedes acotar tu proyecto de vida profesional para estructurar los pasos que
quieres seguir para que te ayude a ser tu mejor versión en ese escenario.
¿Cuál es tu vocación laboral? ¿Cuál es tu proyecto vital para lograr ese propósito? ¿Cuáles son tus
objetivos? ¿Qué acciones concretas te acercan a ellos? ¿Cómo puedes influir favorablemente en
estas circunstancias al centrarte en aquellas cuestiones que dependen de ti?
Al poner fin a la vida laboral, surge un punto de inflexión en la biografía de quien deja atrás su rol
profesional para iniciar un nuevo período en el que tiene que crear una nueva rutina. El proyecto
de vida centrado en la etapa posterior a la jubilación está dirigido a planificar este tiempo desde la
perspectiva de la realización, el crecimiento personal y la felicidad.
La jubilación marca un punto de inflexión en la vida de una persona, por ello, es habitual que el
protagonista necesite tomarse su tiempo para decidir hacia dónde quiere dirigir sus pasos. Son
muchos los aspectos que giran en torno al trabajo. Por ejemplo, los horarios, las tareas y las
relaciones profesionales. Por ello, el final de esta etapa no solo supone decir adiós a una empresa,
sino también a un capítulo de la vida que implica aspectos sociales, hábitos y costumbres.
Un proyecto de vida después de la jubilación es el que integra aquellas tareas con las que una
persona decide enriquecer su tiempo después de la jubilación. Por ejemplo, las actividades de
voluntariado, los planes de ocio, la vida familiar, las metas a corto plazo, el descanso, el regreso a
la universidad o los viajes.
Este proyecto académico está centrado en responder a preguntas vinculadas con esta etapa. ¿Qué
deseas estudiar? ¿Cuál es tu objetivo al cursar esa titulación? ¿Dónde estudiarás? ¿Cómo
planificarás tu tiempo de estudio?
Sin duda, existe un transcurso de tiempo desde el instante en el que una persona hace su
matrícula en la universidad o en un centro de Formación Profesional y el momento en el que
obtiene el título. Ese proceso queda definido por el plan de acción presente. El proyecto de vida
académica debe contener todas las respuestas en torno al cómo, por qué, con qué medios y para
qué se va a cursar o no una formación. Estas decisiones en torno a los estudios están muy ligadas
con el plan de vida profesional.
Este proyecto de vida es compartido cuando dos personas tienen un compromiso y desean crear
un camino en común. Este proyecto de vida tiene la particularidad de tener que ser compatible
con las expectativas de ambos miembros de la pareja.
Este proyecto de vida en pareja se puede basar en las respuestas a algunas preguntas esenciales
sobre esta historia de amor. Por ejemplo, dónde vivir, plan de conciliación establecer, orden de
prioridades, valores e intereses compartidos, visión del amor, deseo de formar una familia (y
momento adecuado para hacerlo en caso de estar de acuerdo en este propósito) y demás
decisiones que debe tomar la pareja. Por tanto, el proyecto de vida en pareja, está acotado a un
escenario concreto.
Proyecto de vida empresarial
El proyecto de vida empresarial está incluido en el ámbito profesional, pero también directamente
relacionado con la vida personal. El proyecto de una persona también puede ser emprender un
negocio a partir de una idea contextualizada en un nicho de mercado. El proyecto de vida
empresarial refleja el proceso asociado a esta puesta en marcha de una empresa, buscando el
equilibrio con la vida personal, con el fin de hacer viable ese reto.
Una persona puede tomar la decisión consciente de dar un giro a su existencia al darse cuenta de
que su felicidad está en una dirección diferente. Algunas de las decisiones más difíciles de la vida
parten de esa necesidad salir de la zona de confort, es decir, de romper con el efecto de la
costumbre para crear nuevas circunstancias. Para lograr grandes cambios tendremos que cambiar
muchos hábitos y acciones diarias. Crear una nueva rutina acorde con los nuevos objetivos y los
cambios que se quieren realizar.
Referencias
https://www.psicologia-online.com/autor/maite-nicuesa-9.html
https://www.psicologia-online.com/autor/maite-nicuesa-9.html