Aislamiento de Linfocitos Mediante Centrifugación
Aislamiento de Linfocitos Mediante Centrifugación
Aislamiento de Linfocitos Mediante Centrifugación
Introducción
Las primeras técnicas empleadas para aislar los linfocitos sanguíneos consistían en
mezclar la muestra con un agente aglutinante de eritrocitos, con el fin de que estos se
separaran debido a la sedimentación de los grumos. Sin embargo, estas técnicas son lentas,
dan un bajo rendimiento final y una baja pureza. Posteriormente se desarrollaron las
técnicas de centrifugación en gradientes. Bøyum (1958) ideó un método basado en la
centrifugación de la muestra sobre un gradiente de densidad discontinuo, cuyo medio
original consistía en una mezcla de ficoll y metrizoato de sodio, con densidad de 1,077
g/ml. Este método es rápido y simple, por lo que se utiliza muy comunmente para obtener
preparaciones enriquecidas de linfocitos sanguíneos. Aunque estrictamente esta técnica
resulta en la separación de los leucocitos mononucleares, que incluyen tanto a los
linfocitos como a los monocitos, los primeros superan ampliamente en número a los
segundos, cuando se trabaja con muestras de sangre periférica.
El medio de separación
Fundamento de la separación
5.Con cuidado de no mezclar las capas, sacar el tubo de la centrífuga y aspirar el plasma
(capa superior) con una pipeta, delicadamente, dejando intacto el anillo blanquecino de
células mononucleares en la interfase.
8.Centrifugar a 100 xg por 5 min. Botar el sobrenadante mediante la inversión rápida del
tubo (las células se quedan adheridas al fondo, formando un botón) y repetir el lavado.
9.Después del segundo lavado, los linfocitos pueden ser resuspendidos suavemente en el
medio apropiado que se va a utilizar para cada propósito.