Principales Factores Climáticos de Costa Rica (V-Asec)
Principales Factores Climáticos de Costa Rica (V-Asec)
Principales Factores Climáticos de Costa Rica (V-Asec)
La importancia del clima como factor regulador del medio natural y su influencia sobre el ser
humano, y sus actividades, es innegable. En este sentido el Sol como fuente de calor, que se
manifiesta en forma lumínica y calórica en un espacio geográfico determinado, contribuye a elevar
la temperatura,, tanto del agua como del aire, alterando la presión atmosférica, lo que origina las
corrientes de viento, que se desplazan llevando humedad hacia la atmósfera, formando la
nubosidad que en determinado momento se manifiesta mediante el fenómeno de la precipitación,
caracterizando el clima de una región (Araya & Sanabria, 2010).
En este sentido, la precipitación, al igual que la temperatura, son los elementos climáticos que más
influyen sobre la naturaleza y su modelado. Su distribución temporal y espacial condiciona los
ciclos agrícolas y forestales, así como el desarrollo de las principales especies vegetales y animales.
Esta variable también influye, notoriamente, sobre otros rubros de la economía y la
correspondiente producción de bienes y servicios, especialmente cuando es escasa (Araya &
Sanabria, 2010).
a. Precipitación
La precipitación es el término con el cual se denominan las formas de agua en estado líquido o
sólido que caen directamente sobre la superficie terrestre. Esta se presenta cuando por efecto de
la condensación la gota de agua alcanza un peso ideal que la hace caer por gravedad, o bien por
efecto de los vientos descendentes que se presentan en el interior de las nubes. Esto incluye la
lluvia, granizo y nieve.
La humedad relativa es la capacidad del aire para absorber agua; la relación entre la cantidad de
agua que contiene el aire y la que puede contener antes de saturarse. Se mide en porcentaje (Araya
& Sanabria, 2010).
Se considera que una masa de aire está saturada cuando la humedad relativa es del 100%. En ese
momento, el agua que ya no puede contener el aire; comienza a condensarse en las partículas de
polvo y otros sólidos que encuentra en el ambiente, formando nubes, gotas de agua que cuando
son lo suficientemente grandes precipitan en forma de lluvia. Esta capacidad depende de la
temperatura. Para una misma humedad absoluta, la humedad relativa aumenta cuando desciende
la temperatura. Las masas de aire pierden temperatura a medida que ascienden y la gana cuando
descienden, por lo que sólo puede llover cuando el aire asciende. Una masa de aire saturada, o
cercana a la saturación, es una masa de aire húmeda de la que las plantas pueden aprovechar su
agua sobrante.
c. Temperatura.
La temperatura es una medida del calor o energía térmica que depende de los factores como la
latitud y altitud.
2. La temperatura disminuye con la altitud. En otras palabras, a mayor altitud, menor temperatura.
La disminución de la temperatura en general bajo determinadas condiciones atmosféricas es de
0.65ºC por cada 100 metros.
Según Gandía y Meliá (1993), citado por Araya (2010) “…la correcta descripción térmica de un lugar
exige, cuando menos, manejar la variación anual, (preferiblemente por períodos de diez días en
lugar de los mensuales, tradicionalmente usados), de cinco parámetros: La temperatura media,
máxima media, mínima media, máxima absoluta y mínima absoluta. La amplitud de las oscilaciones
diurnas y anuales, junto al número de días o frecuencia de heladas; o de temperaturas nocturnas
o diurnas por debajo o por encima de ciertos umbrales, aportarán criterios imprescindibles para
aplicaciones diversas, como por ejemplo de índole agrícola”.
En Costa Rica la temperatura varía debido a la altitud. Por ejemplo en planicies que son secas como
la región Pacífico Norte, las temperaturas del día van desde los 20 a 35 ºC, en altitudes medias el
rango es 20 a 25 ºC y tiende a bajar hasta los 5 a 10 ºC en las cumbre de las montañas (Araya &
Sanabria, 2010).
3.2 Zonas Climáticas de Costa Rica.
Geográficamente, la franja planetaria comprendida entre los paralelos Trópico de Cáncer y Trópico
de Capricornio, se define como Zona Tropical. La ubicación de nuestro país en esta región le
confiere características tropicales a su entorno ecológico: bosques, red hidrográfica, suelos y clima.
La fauna y la flora que se adapta a estas condiciones, son por lo tanto, de tipo tropical. El clima
Tropical de nuestro país, es modificado por diferentes factores como el relieve (la disposición
de las montañas, llanuras y mesetas), la situación con respecto al continente (condición ístmica),
la influencia oceánica (los vientos o las brisas marinas, la temperatura de las corrientes marinas )
y la circulación general de la atmósfera (IGN 2005 citado por IMN, 2008).
De acuerdo con Fournier, Luis A, (2001) “el clima es el resultado de la interacción de un conjunto
de factores que actúan sobre los elementos meteorológicos. Los elementos meteorológicos de
mayor importancia son: temperatura, humedad, atmosférica, precipitación (lluvia, nieve, cellisca,
granizo), evaporación y luminosidad.... y son afectados por la latitud, el dinamismo de la atmósfera
local, el movimiento de las grandes masas de aire, las corrientes marinas costaneras, la altitud del
lugar, el grado de exposición, el relieve, el grado de continentalidad y los movimientos de la Tierra.”
Por lo tanto es de suponer que en los diferentes sitios de nuestro país, los efectos de dichos
factores obviamente son muy complejos y diferentes.
El tiempo atmosférico o tiempo meteorológico, puede interpretarse como las condiciones que
existan en la atmósfera, para un periodo corto de tiempo, por ejemplo un día, en la mañana, en la
tarde o una semana. Estas condiciones pueden ser: lluvia intermitente, con o sin actividad
eléctrica, vientos fuertes o moderados, presentes o ausentes, día nublado, despejado, mucho o
poco frío o calor, etc.
Los dos regímenes de precipitación (Pacífico y Caribe), la altura y orientación de las montañas,
junto con los vientos predominantes y la influencia de los océanos, permiten diferenciar siete
grandes regiones climáticas: Pacífico Norte, Pacífico Central, Pacífico Sur, Región Central, Zona
Norte, Región Caribe Norte y Región Caribe Sur. La siguiente figura muestra la nueva
regionalización climática de Costa Rica y algunos elementos meteorológicos significativos que
definen el clima regional (IMN, 2008).
Imagen 3. Regiones climáticas de Costa Rica. Fuente: (Instituto Meteorológico Nacional , 2008)
3.2.1 Régimen Pacífico
Se caracteriza por poseer una época seca y una lluviosa bien definidas. La seca se extiende de
diciembre hasta marzo. Abril es un mes de transición. El mes más seco y cálido es marzo. El inicio
depende de la ubicación latitudinal. Comienza primero en el noroeste de la vertiente y de último
en el sureste. Lo contrario sucede con el inicio de la época lluviosa. Este período va de mayo hasta
octubre, siendo noviembre un mes de transición. Presenta una disminución relativa de la cantidad
de lluvia durante los meses de julio y agosto (veranillo o canícula) cuando se intensifica la fuerza
del viento Alisio.
Los meses más lluviosos son setiembre y octubre debido principalmente a la influencia de los
sistemas ciclónicos, los vientos Monzones provenientes del océano Pacífico ecuatorial y las brisas
marinas, que son responsables de las lluvias intensas cuando unen su efecto a las barreras
orográficas (Muñoz et al 2002). La Zona de Convergencia Intertropical (ZCI) es un cinturón de
baja presión ubicado en la región ecuatorial del planeta, formado por la convergencia de aire
cálido y húmedo. La ZCI es uno de los factores más influyentes en el régimen de precipitación del
Pacífico, sobre todo hacia el sur del país. Puede desplazarse hasta alcanzar parte de nuestro
territorio. Las lluvias ocurren predominantemente durante la tarde y primeras horas de la noche
(IMN, 2008).
Según el mapa climatológico del IMN (2008), se sitúa en el este y noreste del país, extendiéndose
por toda la costa caribeña, desde Barra del Colorado hasta el río Sixaola. Hacia el sur está limitada
por la Cordillera de Talamanca, y al oeste la limita el río Chirripó. Comprende toda la provincia de
Limón y la parte oriental de la provincia de Cartago (de Turrialba hacia el este).
El régimen de esta vertiente no presenta una estación seca definida, pues las lluvias se mantienen
entre los 100 y 200 mm en los meses menos lluviosos, lo cual es una cantidad de lluvia
considerable. En las zonas costeras se presentan dos períodos relativamente secos. El primero
entre febrero y marzo y el segundo entre setiembre y octubre. El primer período seco está en fase
con el período seco de la vertiente pacífica, sin embargo, el segundo período coincide con los
meses más lluviosos de dicha vertiente.
Se presentan dos períodos lluviosos intercalados entre los secos. El primero va de noviembre a
enero y es el período máximo de lluvias. El segundo se extiende de mayo a agosto y se caracteriza
por un máximo en julio que coincide con el veranillo del Pacífico. El mes más lluvioso es diciembre,
el cual se encuentra influenciado por los efectos de frentes fríos provenientes del Hemisferio
Norte, los cuales se presentan entre noviembre y mayo, pero con mayor posibilidad de afectación
entre noviembre y marzo. Las lluvias ocurren con mayor probabilidad en horas de la noche y la
mañana (Manso et al 2005 citado por IMN, 2008).
En esta región de clima tropical húmedo, la lluvia es abundante, siendo más acentuada en las
partes montañosas donde llueve todo el año. La región presenta una serie de subregiones
pequeñas como producto de la misma diversidad de factores de la Región Norte, así se encuentran
áreas con clima lluvioso, principalmente en las llanuras y en alturas inferiores a los 60 metros sobre
el nivel del mar (msnm), áreas con clima de las faldas de la Cordillera Volcánica del Norte del lado
Caribe, en alturas de 600 a 1600 msnm. (Solano & Villalobos, s.f)
Es una región muy húmeda que alberga sistemas ecológicos importantes no solo para las
actividades productivas sino para la conservación de recursos naturales. El bosque tropical
húmedo característico de la región, es rico en una exuberante vegetación por lo que tiene un alto
potencial turístico. Por otra parte, las llanuras son utilizadas en el cultivo del banano, tubérculos
y granos (Morales, 2000). La región se caracteriza por presentar un porcentaje relativamente alto
de suelos jóvenes como lnceptisoles: y Andisoles. (CNP2000).
El sistema fluvial corresponde a las subvertientes Caribe y Norte de la Vertiente del Caribe. A la
primera pertenecen las cuencas de los ríos Sixaola, Reventazón, Parismina, Matina, Estrella,
Tortuguero, Pacuare, Moín, Banano, Bananito, Madre de Dios y Sini. A la subvertiente Norte
corresponde la Cuenca del Río Chirripó, drenada por el río de igual nombre, que nace en la
confluencia de los ríos Sucio y Patria.
La Región del Caribe pertenece a la unidad fisiográfica Fosa de Nicaragua (Bergoeing 1998), que
es dominada por unña amplia zona de llanuras que se extienden desde el Lago de Nicaragua, hacia
el sur de la costa caribeña. El límite suroeste lo componen las zonas altas de montaña de la
Cordillera de Talamanca y las estribaciones de la Cordillera Volcánica Central. Las llanuras costeras
del norte (Llanura de Tortuguero, Santa Clara y Matina) son más lluviosas que las del sur (Estrella
y Sixaola). De acuerdo con Zárate (1978) citado opor IMN (2008), analizando las estaciones de
Limón y Cobal, concluye que el viento predominante es del este o Alisio durante casi todo el año.
Durante la noche predomina la brisa tierra-mar cuya dirección tiene componente del oeste y bajas
velocidades. Esta brisa es más notoria cerca de la costa y su confluencia con los Alisios en el
océano, producen el desarrollo de nubosidad y lluvias. Durante el día predominan los nortes y
norestes con altas velocidades. Cuando disminuye la intensidad de los Alisios en setiembre y
octubre, las lluvias del Caribe presentan los mínimos relativos de su régimen. En el Caribe Sur es
usual en horas diurnas vientos del oeste, los cuales son producto de un rotor que es más
acentuado en la costa y durante condiciones de fuerte estabilidad del aire.
Presenta dos subregiones, ya que la precipitación mensual y anual registrada en la vertiente,
sugiere establecer una diferenciación entre la parte norte y sur de la región. Dado que el gradiente
de lluvia anual corre de norte a sur, se divide la región en El Caribe Norte y el Caribe Sur. La parte
norte de la región abarca desde Barra del Colorado, pasando por las llanuras de Tortuguero hasta
las estribaciones del Turrialba, cortando las filas Mirador y Asunción al sur de Siquirres y
terminando al sur de Limón Centro. El Caribe Sur comprende la ciudad de Turrialba, parte de la
Cordillera de Talamanca, el Valle de la Estrella y termina en Sixaola, hacia la costa.
La precipitación en el norte va desde 3500 a más de 4500 mm por año. Mientras que en el sur la
precipitación es menor, entre 3000 y 2500 mm. La temperatura, tanto la máxima como la mínima,
tiende a ser un grado más alta en la subregión norte. Otra distinción la establece el viento, ya que
el norte por poseer extensas zonas de llanura, predominan los vientos Alisios, mientras que al sur,
por ser más montañoso, de fuerte pendiente y cercano a la costa, se pueden registrar vientos de
componente oeste (Instituto Meteorológico Nacional , 2008).
Las temperaturas en el Caribe Norte son ligeramente mayores que las del Caribe Sur. Las
temperaturas elevadas de setiembre coinciden con un mínimo relativo de precipitación, mientras
que las altas temperaturas de mayo y junio no se asocian con períodos menos lluviosos, pero sí
con una disminución del viento Alisio de acuerdo con lo observado por Zárate (1978).
Durante los eventos extremos lluviosos o secos se han producido impactos en diferentes sectores
de la región. Cuando ocurre un evento seco extremo, se puede esperar reducciones de hasta un
24% en la precipitación anual en ambas regiones y entre 17 y 20 dias menos de lluvia. En promedio
la temperatura máxima y la mínima pueden aumentar un grado o más en el norte y entre 1.2 y 0.6
(temperatura máxima y mínima respectivamente) en el sur. Con eventos lluviosos, la lluvia anual
puede aumentar entre 32 y 35%, con unos 23 días más con lluvia en ambas subregiones. Las
temperaturas máximas y mínimas en el norte pueden bajar 1.0 °C, y menos de un grado en el sur.
Las fases de ENOS suelen estar asociadas a eventos extremos tanto climatológicos como
meteorológicos. Durante la fase fría o La Niña, se favorecen escenarios climatológicos secos (a
nivel anual), mientras que durante El Niño, existe mayor probabilidad de que se presenten
escenarios climatológicos normales o lluviosos en toda la región. Los eventos secos hacen
disminuir la precipitación sobre todo en los meses de final y principio de año, probablemente
porque disminuye el número o la magnitud de los frentes fríos Durante este tipo de eventos la
temperatura máxima y mínima puede superar los valores normales en cerca de un grado
centígrado.
Los eventos lluviosos pueden provocar aumentos de la precipitación sobre todo entre noviembre
y febrero, donde la influencia de los frentes fríos es determinante. Durante mayo se puede
presentar un nuevo máximo de lluvia. Los eventos secos no hacen variar significativamente el
comportamiento normal, salvo entre diciembre y enero. Las temperaturas pueden disminuir
levemente, tanto en el día como durante la noche. Los eventos secos extremos en el Caribe se
pueden explicar en un 69% de los casos, por la presencia de eventos La Niña, mientras que el 93%
de los eventos lluviosos, han coincidido con eventos de El Niño.
De acuerdo con Alvarado (2008), el viento predominante durante las mañanas de toda la
temporada lluviosa es viento calmo o Alisio débil. Por las tardes predominan los oestes. En
la temporada seca y durante el veranillo, el Alisio domina todo el día. El Valle Occidental es
más lluvioso (2300 mm), que el Valle Oriental (1700 mm). Sin embargo, el Valle Oriental
posee más días con lluvia y posee mayor precipitación durante los meses de diciembre,
enero y febrero producto de una mayor influencia del Caribe, que se hace notoria también
en la menor magnitud del veranillo. Algunas zonas del Valle Oriental, presentan cantidades
de precipitación anual iguales o incluso inferiores a la zona más seca del Pacífico Norte
(Tempisque). La diferencia es la distribución, ya que durante los meses secos (enero a
marzo) se puede acumular más de 100 mm de lluvia, mientras que en el Tempisque, durante
ese mismo período se acumulan entre 20 y 50 mm. Por otra parte, la influencia del Caribe
durante el período seco, permite que la humedad ambiental no sea tan baja y las
temperaturas no tan altas como en el Pacífico Norte. Por lo tanto, la sensación térmica en
el Valle Oriental es menor.
Paradójicamente, el Valle Oriental es en promedio la zona más seca del país y a la vez,
presenta el mayor núcleo de precipitación en una zona de Orosi, Paraíso de Cartago, donde
la estación meteorológica T-seis registra en promedio más de 7000mm por año.
A pesar que la ubicación de los dos valles de la región Central es hacia el oeste de la divisoria
de aguas (vertiente Pacífica), ambos valles presentan depresiones o pasos que permiten la
influencia directa del Caribe en la zona montañosa y pie de monte. En el Valle Occidental,
el paso del Desengaño, entre el volcán Poás y Barva, permite el paso del viento Alisio
canalizado principalmente por la depresión del río Sarapiquí. El paso de la Palma, entre el
volcán Barva y el Irazú, permite la influencia directa del Alisio sobre las zonas montañosas
del Valle Occidental, que se canaliza por medio de la depresión del río Chirripó. La posición
del Valle Oriental, más cercano al litoral Caribe, junto con la depresión del río Reventazón
(entre el volcán Irazú y Turrialba), permiten una mayor influencia de los vientos Alisios y los
frentes fríos que afectan a fin y principio de año.
Existen diferencias entre el valle oriental y el occidental. El Valle Occidental es más bajo,
cálido y lluvioso sobre todo entre setiembre y noviembre, con mayor influencia del Pacífico.
El Valle Oriental es más alto, frío y de menor precipitación, con una mayor influencia del
Caribe durante los meses de final y principio de año (Instituto Meteorológico Nacional ,
2008). La mayor diferencia entre los valles (además de sus diferentes magnitudes), se
encuentra en los meses de noviembre, pero sobre todo diciembre durante escenarios
lluviosos.
El Valle Occidental presenta una mayor temperatura ambiental en comparación con el Valle
Oriental. De hecho, la temperatura promedio en el occidente, es aproximadamente la
misma que la temperatura máxima del oriente de la región. Mientras en el Valle Occidental
las mayores temperaturas se alcanzan en marzo y abril, en el Valle Oriental las mayores
temperaturas se alcanzan en abril y mayo. Las temperaturas máximas en el Valle Occidental
presentan mayor variación interanual que las temperaturas en el Valle Oriental.
Ubicación. Se localiza al norte del país, haciendo frontera con Nicaragua y el río San Juan.
Al sur limita con la Cordillera Volcánica Central, al oeste con la Cordillera de Guanacaste y
la Cordillera de Tilarán. El Rio Chirripó forma el límite convencional este entre la Zona Norte
y la Región Caribe.
Esta región pertenece al régimen de precipitación del Caribe, al cual se le identifica como
lluvioso todo el año, con una disminución de las lluvias en los meses de febrero, marzo y
octubre. Esta región presenta un clima tropical húmedo (típico ecuatorial desplazado), el
cual presenta dos rasgos esenciales que son: 1) ningún mes del año tiene temperaturas
inferiores a los 22 °C; 2) no presenta promedios pluviométricos mensuales superiores a los
75 mm. Es una región de contrates en la lluvia, ya que en ella interactúan tanto elementos
climáticos como factores geográficos propios de la región, debido a su relieve montañoso,
llanuras extensas y la influencia al nornoroeste, del lago de Nicaragua, estableciéndose una
serie de pequeñas Subregiones climáticas. (Solano & Villalobos, s.f)
Los suelos forman parte de las llanuras innundables del Caribe, y su relieve es por lo general
plano, producto del relleno aluvial con material de base de origen volcánico. El perfil
topográfico se caracteriza por colinas de hasta 382 msnnn, terrazas con altitudes entre 50
y 100 msnm y llanuras aluviales de terrenos, algunos de ellos pantanosos. El tipo de bosque
que se presenta es el Bosque Tropical Húmedo y hacia el noroeste, transición a lo seco
(Instituto Meteorológico Nacional , 2008).
No cuenta con grandes ríos o fuentes de agua, lo que da como resultado que en períodos
de verano mayores de tres meses se agraven significativamente los problemas asociados al
déficit hídrico en las explotaciones agropecuarias. Algunos de los principales ríos que corren
hacia el Oeste son: río Peñas Blancas y San Carlos. Al este, el río Sarapiqui. Al Sur, los ríos La
Vieja, Aguas Zarcas, Caño Negro, Toro Amarillo. Al norte, los ríos Frío, Medio Queso, y el río
San Juan. Además, cuenta la región con la laguna del Arenal, Río Cuarto y Caño Negro
(Villalobos et al 2002).
Los vientos predominantes durante el año son de componente este, con una velocidad
promedio de 10.7 km/h, que tienen mayor intensidad en los meses de diciembre a febrero.
Los vientos de componente suroeste, pueden afectar las zonas altas de la cordillera
Volcánica Central. El relieve influye sobre la distribución espacial de las lluvias.
La Zona Norte es la tercera región más lluviosa del país con más de 3200 mm anuales en
promedio. Es superada solo por el Pacifico Sur y el Caribe Norte. La Zona Norte presenta un
solo periodo lluvioso que se inicia en mayo y finaliza en diciembre o enero. Durante los
meses de fin y principio de año, el aporte de los frentes fríos es muy importante para
sostener las actividades agropecuarias de la zona. De hecho, durante años lluviosos, los
frentes fríos son los eventos que más aportan al total de lluvia anual. Se estima que cada
frente frío puede contribuir con un 6% del total anual (195 mm de lluvia).
Bajo la influencia de algunos fenómenos de variabilidad (como El ENOS), es posible que los
frentes fríos que afectan el sur de Centroamérica no sean tan frecuentes, o bien no aporten
cantidades importantes de lluvia. Cuando esta condición predomina, es posible que se
presenten sequías estacionales, principalmente entre diciembre y enero. Desde noviembre
y hasta febrero, se registran las mayores amplitudes de precipitación (diferencia entre
escenarios secos y lluviosos) (Instituto Meteorológico Nacional , 2008).
Imagen 6. Nubosidad sobre las llanuras de Santa Clara y San Carlos, zona norte de Costa Rica (al centro se aprecia la
cima del Volcán Arenal) Fotografía: Wendy Rodríguez.
A pesar que las fases de ENOS no presentan una buena señal en la zona, los eventos
extremos, particularmente los secos, podrían estar relacionados con la presencia de
eventos El Niño o la Niña de fuerte magnitud. Se han registrado sequías estacionales en la
zona fronteriza, durante los Niños de 1965, 1982 y 1997. En 1995, se presentó una Niña que
causó una disminución de lluvias en los primeros meses del año. Más recientemente, en el
2008 se presentó una sequía asociada con una de Las Niñas de mayor magnitud. Por otra
parte, los eventos lluviosos se relacionan principalmente con excesos de precipitación en
los meses de diciembre, enero y febrero, lo cual está directamente asociado con una mayor
influencia de frentes fríos (Instituto Meteorológico Nacional , 2008).
Algunos eventos extremos secos pueden estar relacionados con fuertes episodios ENOS,
como por ejemplo las sequías producidas durante El Niño de 1982-1983 y 1997-1998. Este
efecto es previsible principalmente en la zona fronteriza con Nicaragua y cercana al Lago de
Nicaragua. Aparentemente el efecto de sequía producido por Niños fuertes sobre la
vertiente Pacífica de Centroamérica, puede eventualmente extenderse a las llanuras del
norte por el paso existente entre el Lago y volcán Orosí, afectando Upala, Los Chiles y
Guatuzo. Por otra parte, el fenómeno de La Niña puede explicar el 53% de los eventos
lluviosos extremos, pero a la vez tiene una posibilidad cercana al 50% de producir escenarios
secos extremos (Instituto Meteorológico Nacional , 2008).
En esta región predomina como característica relevante, la severidad del clima en la planicie
guanacasteca, en donde en algunos años suele hacerse angustiosa la escasez pluvial, pues
la irregularidad es lo normal, aspectos que se presentan en la Subregión PN2, Subregión
central del Pacífico Norte (Flores, 1987 citado por Solano y Villalobos, s.f).
En el Pacífico Norte se presentan pequeñas áreas de clima templado, estas son aisladas y
es posible encontrarlas en altitudes de 800 a 1500 msnm, en las laderas altas de los edificios
volcánicos, en la vertiente opuesta a los alisios. Se le conoce también como climas de faldas
de la cordillera del lado del Pacífico, por encontrarse en regiones montañosas. La región se
distingue por su temperatura, la cual va de moderada a alta, y un período seco relativo a
cada Subregión, que va de tres a seis meses (Solano & Villalobos, s.f).
El Pacifico Norte de Costa Rica es un área de extensa zona costera y rica en ecosistemas de
gran importancia nacional e internacional, como lo son los bosques tropicales, los tropicales
secos y los humedales. Predominan los suelos inceptisoles, alfisoles y los entisoles. En la
planicie, de constitución aluvial, se encuentran los suelos más fértiles de la región donde
predomina la agricultura y producción de carne de carácter extensivo.
Imagen 8. Vista del volcán Orosi desde el mirador del PN Santa Rosa. Fotografía: César Chaves.
Guanacaste es una de las zonas de menor riqueza hídrica del país. Pese a que todo su
territorio está regado por ríos, el caudal de su red hidrográfica, dominada por el río
Tempisque, disminuye notablemente durante la estación seca que se prolonga por cinco o
seis meses a partir de diciembre (Instituto Meteorológico Nacional , 2008).
Fisiográficamente, se distinguen tres unidades que pueden representar las principales
condiciones climáticas de la zona: la unidad continental constituida por la Cordillera de
Guanacaste y la Cordillera de Tilarán con una altitud media de 1000 msnm, la unidad
peninsular que comprende las penínsulas de Santa Elena y Nicoya con una altura media de
300 msnm y la unidad de la depresión del Tempisque, que es una zona llana con alturas
medias de 30 msnm. (Solano y Villalobos 2001). El viento predominante durante el período
seco y el veranillo es el noreste, mientras que durante el periodo lluvioso el suroeste
predomina (Zárate 1991). La influencia de estos vientos junto con la orografía determina la
distribución mensual de la precipitación. El periodo seco va de diciembre a marzo. En este
período precipita un 4% del total de lluvia anual. El Alisio es el viento dominante. Abril es
un mes de transición y en mayo se establecen las lluvias alrededor de la tercera década del
mes. El primer período lluvioso se da entre mayo y agosto cuando precipita el 50% del total.
En junio ocurre el primer máximo de lluvia, al intensificarse los vientos suroestes, que
provocan tormentas locales y fuertes aguaceros. Entre julio y agosto, los vientos Alisios
vuelven a intensificarse y como consecuencia se presenta el veranillo del Pacífico o canícula.
Un segundo período lluvioso se extiende desde setiembre hasta noviembre. Durante
setiembre y octubre se produce el mayor aporte de lluvia, asociado con una mayor
influencia de eventos ciclónicos. El 46% de la lluvia anual, precipita en este segundo período
lluvioso. Noviembre es un mes de transición hacia el período seco.
En general, presenta promedios de lluvia anual entre 1500 y 2500 mm, con grupos
climáticos que van desde el templado (mesotermal), hasta climas de tipo tropical seco
modificados por factores geográficos (MEH 1953). El Pacífico Norte es una de las zonas más
secas y cálidas del país. La mayor precipitación se presenta en la zona montañosa de la
Cordillera de Guanacaste y de Tilarán con valores anuales cercanos a los 2200 mm y
temperaturas que oscilan entre los 25°C durante el día y 17°C durante la noche. La región
central correspondiente a la depresión del Tempisque es la zona más seca con
precipitaciones anuales promedio de 1700 mm y temperaturas entre los 32°C durante el día
y 22°C durante la noche. La precipitación anual en la zona peninsular es cercana a los 1900
mm, con montos mayores en la zona cercana a los Cerros de Nicoya y el extremo sur y
sureste de la Península de Nicoya. Las temperaturas máximas durante el día pueden
promediar los 33°C, mientras durante la noche la temperatura puede ser de 22°C.
Situada en la parte central de la Vertiente del Pacífico de Costa Rica, se extiende desde
Playa Herradura o Jacó, hasta Dominical, Cerros de Herradura, Cerro Turrubares, Cerro
Cangreja, partes bajas (pie de monte) de la Fila Costeña; comprende el poblado de
Tinamaste, todo el Valle de Parrita, Quepos y Manuel Antonio. Esta región, al igual que el
resto de las regiones del Pacífico nacional, se caracteriza por presentar el régimen de
precipitación del Pacífico. Su posición geográfica al sureste, con la protección al norte por
la cadena montañosa de la Fila Costera o Brunqueña, impiden la incursión de vientos alisios
del noreste, estableciéndose una modificación de éste régimen del Pacífico, presentándose
una caracterización propia de la región, como es, un clima tropical con estación seca, con
un período lluvioso muy severo y largo, y un período seco corto y moderado (Solano &
Villalobos, s.f)
El viento predominante durante la mayor parte del día es de componente Sur, mientras
durante la noche es generalmente Alisio o calmo (Mena 2008). La protección de la Fila
Brunqueña al este de la región, impide la influencia directa de los Alisios, modificando el
régimen de precipitación pacífico. La distribución mensual de la lluvia es diferente de
acuerdo con la unidad fisiográfica y el viento dominante. Mientras que en las partes altas
de la fila Brunqueña el veranillo es perceptible en los meses de julio y agosto debido a la
influencia del Alisio, en las partes bajas o costeros, la montaña impide el paso de los
norestes, el viento es de componente sur y el veranillo desaparece. Cuanto más al sur de la
región, menor percepción del veranillo. El paso de los Alisios por la depresión del río
Tárcoles haca los cerros de Turrubares, y la influencia directa de estos vientos en la cumbre
de los cerros de Bustamante propician la presencia del veranillo. La cercanía de los cerros
de Bustamante impide que los vientos Alisios penetren hacia el Valle de Parrita, por lo que
el veranillo de mitad de año es imperceptible
El período seco va de enero a marzo donde precipita un 4% del total de lluvia anual. Abril
es un mes de transición, previo al establecimiento de la temporada de lluvias a inicios de
mayo. El primer período lluvioso se da entre mayo y agosto cuando precipita el 52% del
total. Durante el segundo período lluvioso precipita el 44% de la lluvia anual. Diciembre es
un mes de transición. Los fenómenos de variabilidad que desvían el comportamiento
normal de lluvia y temperatura, se asocian principalmente con las fases de ENOS (Instituto
Meteorológico Nacional , 2008).
Los extremos secos hacen aumentar la temperatura. Los meses de mayor variación son
febrero, marzo y abril, mientras que el resto del año las temperaturas casi no sufren
cambios. La precipitación puede disminuir durante el período lluvioso (de mayo a
noviembre) y es posible observar un aparente veranillo durante el mes de agosto. En los
eventos lluviosos, la temperatura máxima baja en forma más pronunciada que la
temperatura mínima, siendo inferior al promedio casi todo el año, especialmente en
setiembre y noviembre. La precipitación aumenta sobre todo en mayo y octubre.
Es una región extensa que se ubica al sureste del Pacífico Central, se extiende desde Punta
Uvita, San Isidro del General, estribaciones de la Cordillera de Talamanca del lado del
Pacífico, Cerro Darí, hasta Cerro Echandí, límite fronterizo con Panamá, hasta Punta Burica.
Comprende todo el Valle del General, la Península de Osa, Valle de Coto Colorado, Valle
de Coto Brus, Golfito. Esta región se ubica en la parte más sureste del Pacífico de Costa
Rica, los contrastes geográficos, entre ellos, los extensos valles, la barrera montañosa de
la Cordillera de Talamanca al norte, como su influencia oceánica, generan en esta región
un régimen de lluvias sumamente contrastado con relación al resto de las regiones de la
vertiente, esta heterogeneidad se percibe en un clima en donde el período seco, es muy
favorable y corto y el lluvioso intenso, además, aparecen áreas pequeñas con clima tropical
húmedo y lluvias todo el año (MEH, 1953 citado por Solano y Villalobos, s.f).
Predomina una topografía irregular formada por montañas, filas y serranías, áreas de pie
de monte, valles, llanuras, y cuencas hidrográficas.(Solano y Villalobos 2001). En la
plataforma peninsular se encuentran reductos de bosque tropical lluvioso con una
biodiversidad impresionante, que hacen del Parque Nacional de Corcovado una de las áreas
biológicas más ricas de Latinoamérica. Se destacan los suelos inceptisoles y ultisoles. Los
inceptisoles son rojizos, profundos, arcillosos, fuertemente ácidos en regiones de pie de
monte, asociados con suelos de mal drenaje en las depresiones. Los suelos ultisoles son
aquellos que poseen materiales orgánicos, poco profundos, asociados con suelos derivados
de cenizas volcánicas, oscuros, permeables, se localizan cerca de los ríos, por lo que son
suelos fértiles (Villalobos et al 2003). Esta región posee un rico componente hidrográfico
producto de su relieve montañoso, lo que la convierte en una zona de alto potencial
hidroeléctrico y para el abastecimiento de agua a la población y actividades socio
productivas (PDR 1995).
De acuerdo con Bergoeing (1998), el Pacífico Sur posee dos unidades flsiográficas: La
cordillera de Talamanca que se subdivide en la Fila Costeña o Brunqueña y la Zona Baja
Tectónica que comprende el Valle del General, el Valle de Coto Brus y la zona baja hacia
punta Burica. La otra unidad es la peninsular que comprende la Península de Osa. La
magnitud de la precipitación anual aumenta hacia el sur de la región. La lluvia es menor en
las parles altas de la cordillera (2500-3000 mm en promedio) donde hay influencia del Alisio
en los meses secos y de veranillo. La lluvia aumenta en el pie de monte y los valles (3000 a
4000 mm) donde se produce un importante aporte de las brisas de montaña. Los mayores
núcleos de precipitación (4000-6000mm), se presentan en la península, al norte de Golfito
y en Ciudad Neily. Esta es la zona más lluviosa del país gracias a su estructura geográfica (la
cordillera más alta), la influencia de la Zona de Convergencia Intertropical y los vientos
predominantes. Los Alisios afectan la zona alta de la región y durante la noche son brisas de
montaña (Instituto
Meteorológico
Nacional , 2008).
De acuerdo con
Zárate (1978), el
viento durante el día
es
predominantemente
del oeste o del
suroeste.
Corresponde a brisas
del mar y vientos
ecuatoriales. Durante
las noches
predominan los
Imagen 10. Nubosidad sobre Bahía Drake, Zona Sur. Fotografía: Wendy Rodriguez. vientos calmos y
corresponden con
brisas de montaña originadas en la Cordillera de Talamanca, con direcciones Noreste y
Norte (Mena 2008).
El veranillo se presenta en las estaciones de toda la región excepto en la zona del Valle de
Coto Colorado limitada al norte por la fila Brunqueña y al sur por los cerros de Punta Burica.
La precipitación anual sobrepasa los 4500 mm. Las estaciones pertenecientes a la Zona Baja
Tectónica fuera del Valle de El General y Coto Brus, no presentan periodo de veranillo.
Varios factores contribuyen a que el Pacífico Sur sea la región de mayor precipitación anual
en el país: la posición suroeste favorece la influencia de la Zona de Convergencia
Intertropical. Además el límite norte compuesto por la cordillera montañosa más elevada
del país permite el desarrollo de lluvia convectiva sobre los valles. Por último, es una zona
de marcada influencia oceánica. Cuando se presentan variaciones en el comportamiento
normal de precipitación y temperatura durante eventos secos extremos, se puede esperar
un promedio de reducción de 20% (744 mm) en la precipitación anual y un aumento de la
temperatura de más de un grado Celsius durante el día y la noche. Por otra parte, eventos
extremos lluviosos pueden aumentar en un 23% (777 mm) la lluvia anual, y hacer descender
entre 0.3 y 0.6°C la temperatura diurna y nocturna respectivamente. Comparativamente
con todas las regiones de la vertiente Pacífica, esta región presenta la mayor disminución
del número de días con lluvia durante eventos secos extremos. Por el contrario, en los
extremos lluviosos el aumento en el número de días con lluvia es el más bajo (Instituto
Meteorológico Nacional , 2008).