Cómo Redactar Un Texto Académico
Cómo Redactar Un Texto Académico
Cómo Redactar Un Texto Académico
INTRODUCCIÓN
Las introducciones de los escritos académicos cuentan con elementos relativamente estables, los
que cumplen funciones específicas de modo que podamos cumplir nuestro propósito comunicativo.
Estos elementos son los siguientes:
Una descripción del tema en el que se enmarca el texto: esta operación permite insertar
la temática trabajada en un contexto específico del conocimiento. En esta sección también
se suele entregar antecedentes que luego permitan llegar al problema de conocimiento
que abordarás en tu texto.
La indicación de un vacío en el conocimiento relativo al tema o un aspecto no explorado
de este que el texto intenta resolver. Este elemento es de especial importancia cuando
estamos generando un texto cuyo objetivo es introducir nuevo conocimiento sobre algún
fenómeno. Para presentar el vacío en torno al desarrollo de cierta temática, es necesario
dar cuenta de lo que ya se sabe sobre esta, a partir de la referencia a otros textos que ya
han abordado el área. De ese modo es posible indicar qué es lo que falta por desarrollar o
indagar.
La indicación de un propósito del texto que guía su desarrollo. Señalar el propósito de tu
texto resulta fundamental para guiar al lector en cuanto al sentido que adquirirá la
información desarrollada. Tu propósito puede variar dependiendo del tipo de texto que
estás escribiendo. Si es un ensayo, lo más probable es que tu propósito sea demostrar la
viabilidad de cierta tesis; si es un trabajo de investigación, puede ser que tu propósito esté
relacionado con el comprobar cierta hipótesis o responder una pregunta de investigación.
Cualquiera sea el caso, es necesario que lo indiques explícitamente. La anticipación de
cómo se estructurará la información en el texto: este paso le permite al lector contar con
una visualización de la forma en la que se organizará la información en el texto. De esta
forma, funciona como un apoyo para la lectura y la comprensión del texto.
DESARROLLO
Para realizar el desarrollo óptimo de las ideas en un texto académico, es necesario tener en
consideración los siguientes aspectos:
CONCLUSIÓN
Para elaborar la conclusión de un texto académico, debemos tener en cuenta ciertos pasos que nos
permitirán cerrar nuestras ideas, así como establecer alcances y proyecciones de la temática que
desarrollamos. Es así como una conclusión efectiva debe contener:
Una síntesis o recapitulación de las ideas desarrolladas en el texto: este paso permite
volver a conectar el propósito de tu texto con las ideas expuestas en él. Procura no volver
a mencionar todo el contenido, sino que elabora breve y sintéticamente los puntos
principales.
Presentar y enfatizar los aspectos novedosos desarrollados en tu propuesta.
Indicar si se logró o no tu propósito y por qué.
Discutir la utilidad de los conceptos y metodología de análisis utilizados.
Presentar posibles limitaciones de tu investigación.
Establecer alcances de lo indagado en relación con fenómenos relacionados.
Entregar proyecciones de futuras investigaciones relacionadas con la temática.