Cuad de Psiquiatria Vol 19 Final
Cuad de Psiquiatria Vol 19 Final
Cuad de Psiquiatria Vol 19 Final
COMUNITARIA
Vol. 19, número 1, 2022
Psiquiatría Social
Ander Retolaza Balsategui
(compilador)
CUADERNOS DE PSIQUIATRÍA
COMUNITARIA
Vol. 19, número 1, 2022
Psiquiatría Social
Ander Retolaza Balsategui
(compilador)
Fundada en 2001.
Consejo de redacción: Paz Arias García, Andrés Cabero Álvarez, David González Pando, Ignacio López
Fernández, Pedro Marina González, Celina Padierna Sánchez, Ana Esther Sánchez Gutiérrez, César
Luis Sanz de la Garza.
e-mail: [email protected]
Reservados todos los derechos. Ninguna parte de esta publicación puede ser reproducida,
trasmitida en ninguna forma o medio alguno, electrónico o mecánico, incluyendo fotocopias,
grabaciones o cualquier sistema de recuperación de almacenaje de información, sin la
autorización por escrito del titular del Copyright.
Depósito legal: AS – 3.607 – 01
ISSN: 1578/9594
Cuadernos de Psiquiatría Comunitaria no se editó por la crisis económica en España los años 2011,
2013 y 2016. Los años 2014, 2015 y 2017 solo se editó un número. Desde 2018 es una revista digital.
Los autores son responsables de la opinión que libremente exponen en sus artículos.
CUADERNOS DE PSIQUIATRIA COMUNITARIA 5
ARTÍCULOS ORIGINALES
¿Por qué una psiquiatría social?
Ander Retolaza ................................................................................................................ 7
y a la diversidad sexual
Élida Grande ................................................................................................................... 80
INFORMES
Estrategia de Salud Mental del Sistema Nacional de Salud (2022-2026):
análisis de situación ........................................................................................................ 117
6 CUADERNOS DE PSIQUIATRIA COMUNITARIA
RESEÑAS
Nadie nace en un cuerpo equivocado. Éxito y miseria de la identidad de género
(José Errasti y Marino Pérez Álvarez) ............................................................................... 121
IN MEMORIAM
Miguel Ángel García Carbajosa (1941-2021) .................................................................... 123
Recibido: 3/12/2021
Aceptado: 31/03/2022
RESUMEN ABSTRACT
La pandemia COVID-19 ha traído a la actualidad la The COVID-19 pandemic has brought to the present
extendida preocupación por los problemas psicoló- the widespread concern about the psychological and
gicos y psiquiátricos que existe en la ciudadanía y los psychiatric problems that exist in the citizenship and
medios de comunicación. También nos ha colocado the media. It also placed us before the evidence of
ante la evidencia del gran impacto que los determi- the great impact that social and gender determinants
nantes sociales y de género ejercen sobre la salud y,
en concreto, sobre la salud mental. En las siguientes health. A summary of this issue will be provided on
páginas se hará un resumen de esta cuestión, se the following pages, the current state of psychiatric
describirá el estado actual de la praxis psiquiátrica praxis will be described based on some theories that
en función de algunas teorías que la sustentan y se support it and an attempt will be made to reach useful
intentará llegar a conclusiones útiles. conclusions.
Palabras clave: salud mental, determinantes Key words: Mental health, social determinants,
sociales, psiquiatría académica, psiquiatría social, academic psychiatry, social psychiatry, psychiatric
psiquiatría práctica. practice.
PSIQUIATRÍA ACADÉMICA
pacientes y usuarios en la comunidad.
La actual hegemonía de la psiquiatría
A pesar de toda la investigación desarrollada
suficientes. Su posición de dominio se en las últimas décadas, no existen
traduce, en la práctica, en un obstáculo
que tiende a marginar una parte de la o la esquizofrenia sean el resultado
evidencia disponible. En la psiquiatría
actual se observa un claro sesgo hacia una biológicos. Se han invertido cantidades
conceptualización basada en un modelo ingentes de dinero con la expectativa de
biomédico reduccionista y hacia una hallar las bases biológicas de esa entidad
asistencia de predominio individualizado clínica que conocemos con el nombre de
y hospitalocéntrico. Alejada de la salud esquizofrenia sin que, hasta hoy, haya
pública, esta praxis resulta más cara y tiene aparecido ningún hallazgo determinante.
8 Ander Retolaza
es una de las más llamativas. Cada vez en la desigualdad social. El número de personas
mayor grado se evidencia un claro divorcio que padecen trastornos relacionados con
entre el bienestar material y el fracaso social síntomas de ansiedad o depresión parecen
experimentado por muchos ciudadanos mayores en los países que presentan mayor
de los llamados países avanzados. En desigualdad. A mayor diferencia entre
Norteamérica y Europa la desigualdad las personas más ricas y las más pobres,
social es la causante de un buen número de mayor presencia de trastorno mental en
malestares y problemas padecidos por las esa sociedad (9). También hay consistentes
personas. Entre estos problemas aparecen hallazgos de investigación que muestran
algunos muy significativos, tales como altas tasas de esquizofrenia entre la
mayor presencia de violencia social y tasa población más empobrecida. Estas tasas son
de personas encarceladas, peor rendimiento particularmente mayores entre las personas
académico, más embarazos adolescentes, expuestas a deprivación social y carencias
mayor prevalencia de obesidad, peor salud durante su infancia. Para no pocos autores
resulta razonable pensar que diversos
Una vez salvados los casos extremos de factores sociales ejercen un papel causal
miseria material o social, la desigualdad,
percibida por una gran mayoría como una contradicciones en la evidencia que no
radical manifestación de injusticia, se mete pueden ser fácilmente explicadas y existen
bajo nuestra piel y nos lleva a vivir, cuando lagunas aún por conocer mejor en esta
ello está a nuestro alcance, de una manera cadena de pruebas (8).
ventajista y en ocasiones poco escrupulosa. La pobreza emerge como una parte impor-
Una consecuencia de todo ello es que todos
tante de las constelaciones de desventaja
los grupos sociales, incluidos aquéllos que
en las que múltiples problemas interactúan.
en apariencia consiguen alcanzar estos
objetivos, acaban sufriendo una buena
dosis de malestar que se objetiva en
social. Los inmigrantes y sus descendientes
algunos de los problemas arriba referidos.
caen en desventaja de manera añadida por
Otra consecuencia de esta desigualdad se
medio del racismo implícito y explícito.
evidencia en la escasa movilidad social y la
Finalmente, las personas sin hogar son parte
falta de oportunidades para una gran parte
de una suma de desventajas particularmente
de nuestros conciudadanos, entre los que las
intensa. Resultan difíciles de ayudar y tien-
mujeres, los jóvenes, los discapacitados y las
den a morir jóvenes. La desventaja genera
minorías sociales destacan por su número.
más desventaja. De esta manera, educación,
Hay que subrayar que los datos sugieren migración, vivienda, poblaciones de alto
que el estrés, los trastornos mentales y riesgo y clase social baja se convierten en
el siempre presente consumo de drogas, factores determinantes de salud, incluida la
ocupan un lugar central en esta cuestión de salud mental.
16 Ander Retolaza
para apoyar una asociación entre clase 5. Edad: La depresión en mujeres ancia-
social y psicosis. Sin embargo llama la nas es un problema creciente. Parece
atención que este efecto muestra varia- que la presencia de estresores a lo largo
ciones temporales. Los estudios siguen de la vida produce un riesgo de padecer
un patrón cronológico. Los posteriores depresión mayor que el de sus parejas
a 2001 apoyan con mayor frecuencia la (19). Además, las mujeres ancianas pre-
relación entre psicosis y clase social baja sentan mayor probabilidad de padecer
(15). otros trastornos mentales comunes. Por
el contrario, el impacto relacionado
3. Pobreza: Un importante estudio rea- con la mortalidad de estos trastornos,
lizado en USA (16) concluye que el incluyendo el suicidio, es mayor en los
Trastorno Mental Grave (TMG) se asocia varones ancianos. Estos patrones varían
con mayor probabilidad de ser pobre y entre países y diversos contextos sociales
mayor intensidad de la pobreza. Se iden- (20).
-
sentan mayor riesgo de suicidio que la 8. Educación: Un estudio de cohortes de
población general (26). Los hallazgos base poblacional (32) evaluó el estado
sugieren un gradiente de riesgo (mayor de salud mental en 3416 sujetos de
edades entre 16 y 29 años, durante 4,8
menor si alta). El desempleo prolongado años de seguimiento. Los resultados
también se asocia a mayor incidencia muestran una pobre salud mental en el
de suicidio (27). Se evidencia un mayor 24% de los participantes. La mala salud
riesgo en los 5 primeros años. Aunque
estos resultados deben interpretarse con abandono escolar. Los varones con pobre
alguna prudencia dada la escasez de salud mental, pertenecientes a niveles
datos disponibles. educativos altos, presentaron un riesgo
5 veces mayor de abandono escolar que
7. Vivienda: La falta de calidad en las con-
las mujeres.
diciones de vivienda impacta en la salud
mental (28). Entre estas condiciones se Los hallazgos de una revisión sistemática
encuentran: hacinamiento doméstico, sugieren una fuerte asociación entre
problemas hipotecarios y desahucio, salud mental y educación en ambas
cambios de domicilio, régimen de pro- direcciones (33). Los trastornos del
piedad de la vivienda, inadecuación humor y ansiedad parecen tener menos
y malas condiciones físicas del aloja- consecuencias en el abandono escolar
miento. Todos ellos aparecen asociados temprano que el consumo de sustancias
¿Por qué una Psiquiatría Social? 19
mental en su ambiente social (38). En gran cuanto a las necesidades de los servicios, los
medida, puede ser entendida como una profesionales, los pacientes y sus familias.
psiquiatría relacional. Esta relación puede
La Epidemiología también se interesa
abarcar desde la que se desarrolla en un
por el estudio y descripción de los facto-
espacio de intimidad familiar hasta otras
res asociados a los diferentes trastornos
relaciones mucho más amplias e incluso
mentales. A partir de esta información de
grandes colectivos o masas sociales de
carácter descriptivo se hace posible esta-
carácter anónimo. Lo anterior incluye
blecer hipótesis sobre variables de posible
aquellos modelos de análisis teórico y las
efecto causal, coadyuvante o protector en el
técnicas de intervención terapéutica que
desarrollo de los trastornos. De ahí que se
focalizan su atención en la familia o en
hable, a veces, de Epidemiología Clínica,
grupos, sean éstos pequeños o grandes.
frente a una epidemiología más centrada
Un segundo campo de interés para la en datos, que tiene una evidente expresión
Psiquiatría Social se centra en lo que estadística y que ofrece sus resultados en
denominamos Acontecimientos Vitales grandes números que interesan, sobre todo,
Estresantes. Entendemos por ello aquellos a gestores y administradores.
sucesos ocurridos en el pasado de un indi- La Epidemiología Clínica es una disciplina
viduo (sea éste reciente o muy antiguo) que que intenta tender un puente entre la salud
son susceptibles de generar un impacto en pública y la práctica asistencial, buscando en
su salud mental y desencadenar un posible la primera pruebas lo más rigurosas posible
trastorno. Este territorio se relaciona, sobre que ayuden a mejorar el trabajo con los
todo, con lo que sabemos sobre el trauma pacientes. Algunas técnicas de psicoterapia,
psíquico y sus consecuencias. Aunque, en como es el caso de la Psicoterapia
sentido contrario, cuando los acontecimien- Interpersonal, se han desarrollado a partir de
tos y vivencias son de carácter positivo, o hallazgos de la epidemiología clínica. Con
las características de un determinado sujeto los años han cobrado creciente importancia
los estudios sobre servicios, necesarios para
pueden ejercer un efecto protector y éste juzgar la funcionalidad de los mismos y
resultar resiliente. poder evaluar de una forma contrastada el
grado de cumplimiento de los objetivos para
La Epidemiología es un tercer componente,
los que habían sido creados (39). Cada vez
y muy importante, de la Psiquiatría Social.
más, interesan los relativos a la mejora de
Estudia la distribución de los diferentes
la calidad de vida de pacientes y familiares
trastornos entre la población, examinado,
por ejemplo, si existen diferencias de
género, edad o clase social. Este tipo de
estudios permite conocer la realidad con la nuevos conocimientos en sociología, psico-
que administradores y clínicos tienen que logía social, antropología y, más reciente-
enfrentarse y ayuda a hacer previsiones en mente, en psicología cognitiva. Todas ellas
¿Por qué una Psiquiatría Social? 21
de la personalidad. Pero fue Burrow quien base empírica y presenta desarrollos más
primero hizo una propuesta de causalidad cercanos a los usuarios. Su riesgo está en
social directa sobre el trastorno mental. Por diluirse en la sociología o la política y olvi-
su parte Durkheim (41) acuñó el concepto
de Anomia que relacionó con la presencia de sostener a los pacientes en su entorno fami-
22 Ander Retolaza
liar y social). Sus métodos son más antro- afectada por ellas. Es preciso reconocer
pológicos, sociológicos, epidemiológicos la importancia de valores que afectan al
y ambientales. La investigación cualitativa enfoque de problemas sensibles, como
le favorece, aunque algunos de sus desa- por ejemplo la pobreza, la inmigración,
rrollos se adaptan bien a la investigación el sexismo o el racismo. Los clínicos
cuantitativa. A recordar que sus fronteras deben tener claros sus propios valores
con la psicología son más conceptuales al respecto.
que reales. Finalmente describiremos diez
características que permiten entender mejor 5. Postula una orientación clínica lo más
la perspectiva de la Psiquiatría Social (8): cercana posible a la vida cotidiana de los
usuarios. Está orientada a las realidades
1. Pone su foco en la forma en la que trans- tangibles mediante un tipo de trabajo
curre la vida de las personas, en cómo eminentemente práctico y útil para ellos,
éstas interactúan con los demás y en el así como relevante frente a los problemas
impacto de todo ello en su salud mental. que experimentan.
Trata de entender los contextos y factores
6. La Psiquiatría Social se preocupa por
por datos que puedan ser observados y encontrar un equilibrio entre las exigen-
puestos a prueba y por saber qué ocurre cias de la ciencia (objetividad, medicio-
cuando aparecen cambios. nes, evaluación, replicabilidad…) y las
cuestiones que interesan a los pacientes
2. Se ocupa tanto del comportamiento de las y sus familias.
poblaciones como de las conductas indi-
viduales. Comprendiendo, por ejemplo, 7. Sostiene que las intervenciones no deben
los orígenes y efectos de determinados de limitarse al nivel individual. Las rela-
patrones de expresión emocional en las ciones familiares y sociales, las redes de
familias o la naturaleza protectora de las contacto, la comunidad y la salud pública
redes de apoyo. son también áreas de intervención.
propio paciente. Para ello se hace preciso sociales deben ser sometidas a evidencia
poner a éste en el centro de todo el proceso contrastada. Deberán serles exigidas pruebas
de atención. Pero el paciente no es un de resultado, buena aceptabilidad por parte
mero ente individual aislado de su historia de los implicados y un adecuado balance
personal o de su entorno cultural o social.
Estos factores deben ser tenidos en cuenta
Como ya se ha dicho, la psiquiatría social
para una perspectiva de correcto abordaje
no se pretende exclusiva y permite una
de sus necesidades.
experiencia integrada donde otras concep-
tualizaciones y prácticas puedan tener su
del modelo biológico o del psicológico no lugar y ser convenientemente desplegadas.
hacen automáticamente válido el modelo En cualquier caso, se caracteriza por su
social que tampoco puede explicar muchas perspectiva más abierta al contexto de vida
variables, especialmente si éstas son de orden de los pacientes. Ello posibilita una visión
individual. También hay intervenciones holística que facilita una mejor integración
sociales que pueden tener riesgos, entre de variables médicas, psicológicas, antro-
los que destaca la excesiva dependencia de pológicas, culturales, sociales, de organi-
algunos pacientes respecto a los sistemas de zación de servicios e, incluso, políticas.
ayuda y protección social o, por el contrario, Una perspectiva social bien enfocada abre
los riesgos derivados de esperar demasiado
de pacientes muy discapacitados. Pero la más integrado y favorece el despliegue de
Psiquiatría Social debe tener una oportunidad las condiciones necesarias para superar las
para desarrollarse, tanto en el ámbito teórico
como en el práctico. Como cualquier y del estilo de atención individualista y
otro procedimiento, las intervenciones desarticulado que lo caracteriza.
9. Wilkinson R, Picket K. The spirit Level. Why More Equal Societies Almost Always Do Better.
Penguin Books.. 2009. Traducción española: Desigualdad. Un análisis de la (in)felicidad colectiva.
Madrid: Turner; 2009.
10. Reiss F. Socioeconomic inequalities and mental health problems in children and adolescents: a
systematic review. Soc Sci Med. 2013 Aug; 90:24-31.
11. Patel V, Burns JK, Dhingra M, Tarver L, Kohrt BA, Lund C. Income inequality and depression: a
systematic review and meta-analysis of the association and a scoping review of mechanisms.
World Psychiatry. 2018 Feb;17(1):76-89.
diagnosis of severe mental illness in England: a systematic review and new meta-analyses for non-
affective and affective psychoses. Soc Psychiatry Psychiatr Epidemiol. 2019 Nov;54(11):1311-23.
13. Cairns JM, Graham E, Bambra C. Area-level socioeconomic disadvantage and suicidal behaviour
in Europe: A systematic review. Soc Sci Med. 2017 Nov;192:102-111.
and risk of psychiatric disorder--a population-based longitudinal study. PLoS One. 2013 Nov
15;8(11):e77975.
15. Kwok W. Is there evidence that social class at birth increases risk of psychosis? A systematic
review. Int J Soc Psychiatry. 2014 Dec;60(8):801-8
16. Vick B, Jones K, Mitra S. Poverty and severe psychiatric disorder in the U.S.: evidence from the
17. Luddy G. Women, disadvantage and health. Ir Med J. 2007 Sep;100(8):suppl 71-3.
18. Denton M, Prus S, Walters V. Gender differences in health: a Canadian study of the psychosocial,
structural and behavioural determinants of health. Soc Sci Med. 2004 Jun;58(12):2585-600.
19. Whiteman K, Ruggiano N, Thomlison B. Transforming mental health services to address gender
disparities in depression risk factors. J Women Aging. 2016;28(6):521-529.
20. Kiely KM, Brady B, Byles J. Gender, mental health and ageing. Maturitas. 2019 Nov;129:76-84.
Income Women: A Literature Review and Innovative Screening Approach. Curr Psychiatry Rep.
2020 Jan 7;22(1):1.
recessions and unemployment affect illegal drug use: A systematic realist literature review. Int
J Drug Policy. 2017 Jun;44:69-83.
25. Kim TJ, von dem Knesebeck O. Perceived job insecurity, unemployment and depressive
symptoms: a systematic review and meta-analysis of prospective observational studies. Int
26. Milner A, Spittal MJ, Pirkis J, LaMontagne AD. Suicide by occupation: systematic review and
meta-analysis. Br J Psychiatry. 2013 Dec;203(6):409-16.
¿Por qué una Psiquiatría Social? 27
27. Milner A, Page A, LaMontagne AD. Long-term unemployment and suicide: a systematic review
and meta-analysis. PLoS One. 2013;8(1):e51333.
health and school dropout across educational levels and genders: a 4.8-year follow-up study.
downward spiral of mental disorders and educational attainment: a systematic review on early
school leaving. BMC Psychiatry. 2014 Aug 27;14:237
36. Lee SL, Pearce E, Ajnakina O, Johnson S, Lewis G, Mann F, Pitman A, Solmi F, Sommerlad A,
Steptoe A, Tymoszuk U, Lewis G. The association between loneliness and depressive symptoms
among adults aged 50 years and older: a 12-year population-based cohort study. Lancet
Psychiatry. 2020 Nov 9:S2215-0366(20)30383-7.
Press; 1939.
38. Leff J. The historical development of social psychiatry. En: Morgan C, Bhugra D. Eds. Principles
of Social Psychiatry. 2nd. Wiley-Blackwell. John Wiley & Sons Ltd; 2010. p. 3-11.
treatment for severely mentally ill patients in Denmark: a quasi-experimental trial. Nord J
Psychiatry. 2019 Feb;73(2):149-158
Press; 2005.
Ander Retolaza
Correspondencia: [email protected]
Cuad. Psiquiatr. Comunitaria,
Vol. 19, N.º 1, pp. 28-42, 2022
Amaia Bacigalupe
Virginie Despentes.
Recibido: 15/6/2021
Aceptado: 31/03/2022
RESUMEN ABSTRACT
En relación a los problemas de salud mental englo- In relation to mental health problems under the
bados en el “trastorno mental común” las mujeres umbrella of “common mental disorder”, women always
presentan prevalencias más elevadas. Esto podría show higher prevalences. This could be explained
explicarse por el hecho de que las mujeres viven vidas by the fact that women`s lives are surrounded by
más sufrientes como consecuencia de la desigualdad greater sources of suffering, as a consequence of
que experimentan en las sociedades patriarcales. Sin the inequality they experience in patriarchal societies.
embargo, el progresivo proceso de medicalización de However, the progressive process of medicalisation
los malestares cotidianos, unido a la construcción of common discomfort, together with the biologicist
biologicista y androcéntrista de la psiquiatría, puede and androcentric construction of psychiatry, may
Palabras clave: Desigualdad, género, medicalización, Key words: Gender, inequality, medicalization,
salud mental. mental health.
forma más intensa que los hombres, así mental a las mujeres (12). Friedan deno-
como de forma específica. Este hecho minó a todo ello como la “mística de la
estaría ligado a la existencia de relaciones feminidad” y Virginie Despentes detalló
sociales desiguales, estructuras de poder brillantemente cómo se aterrizaba en la vida
generizadas y límites materiales impues- cotidiana de las mujeres en su introducción
tos por la domesticidad convencional (9) a la (13).
que las exponen a historias de vida más
sufrientes. Además, el género, como Ante una realidad de tal complejidad, Jane
categoría primigenia de jerarquización Ussher (14) propone que construyamos una
social, disciplina nuestras subjetividades, mirada que combine dos perspectivas: lo
siendo uno de los ejes vertebradores más que aporta el construccionismo social y su
relevantes de la psique y de la construcción mirada cultural para entender la salud mental
normativa de las identidades femenina y como producto sociohistórico concreto,
masculina. A lo largo de la historia, las junto con la perspectiva materialista, que
mujeres han desarrollado lo que Almudena contempla el efecto real que las injusticias
Hernando (10) ha denominado la identidad material-socioeconómica y simbólica-
relacional, basada en cuidar los vínculos identitaria (15) tienen sobre la salud mental
interpersonales y los afectos, que dan sen-
tido de pertenencia a las personas, pero que perspectiva epistemológica crítica-realista
(14), que reconozca la importancia de
sí han hecho los hombres. Esta identidad, las experiencias de desigualdad social
ya de inicio devaluada, tiende a enfatizar en la materialidad/corporalidad de lo
la complacencia al resto, la subalternidad, somático/psicológico y su transformación
la sumisión, así como la representación en diagnósticos psiquiátricos, a la vez
del agrado de encontrarse en tal situación que entiende que tal materialidad está
(11), lo que trunca la autonomía de quien la condicionada por la cultura, los marcos
detenta y genera dependencia y culpa, tanto discursivos y las relaciones de poder
insertas en el desarrollo de las disciplinas
transgresión de los mandatos de género
través del análisis de indicadores mayorita- depresión, concluyó que hombres y mujeres
riamente clínicos. Pero, ¿qué es lo que nos diferían acerca de los temas a los que las y
muestran estos indicadores? ¿son neutros los profesionales debían hacer referencia.
al género o siguen perpetuando el doble Mientras que las mujeres consideraban
estándar de buena salud mental en hombres que los/as profesionales debían indagar
y mujeres? en cuestiones relacionadas con el llanto,
los hombres optaban por preguntas rela-
Es evidente que existe una estrecha relación
cionadas con comportamientos disruptivos
entre los mandatos normativos de género y
habitualmente agresivos (34).
la descripción clínica de los diagnósticos
psiquiátricos. Así, la construcción de los Estos resultados podrían tener importantes
diagnósticos psiquiátricos en base a las implicaciones conceptuales y diagnósticas,
subjetividades típicamente masculina y ya que, si en hombres y mujeres se vincu-
- lan diferentes emociones a la depresión,
rísticas no neutras de las herramientas de teniendo en cuenta que dichas emociones
diagnóstico clínico y de los instrumentos no están igualmente representadas en las
psicométricos de valoración de la salud herramientas de valoración, estaríamos ante
mental. Mientras que características tradi-
cionalmente asociadas a las mujeres (apatía problemas de salud mental. En el caso de
o llanto) forman parte, generalmente, de los los hombres, existe la posibilidad de estar
ítems de este tipo de herramientas, actitu-
des típicamente masculinas (agresividad mientras que, en las mujeres, se puede estar
o consumo de sustancias) no suelen estar
presentes, pudiendo tener, como resultado, sentido, Martin et al. (35) observaron que
al introducir en las escalas de valoración de
problemas de salud mental (31). La evi- la depresión síntomas alternativos masculi-
dencia en torno a los posibles sesgos de nos en lugar de los síntomas tradicionales
género en los instrumentos de valoración de (típicamente presentes en la identidad
la salud mental es escasa, pero la disponible normativa femenina), se detectaba un
insinúa que la inclusión de ciertos ítems mayor número de hombres que cumplía
los criterios de depresión. Asimismo, si se
que proporcionan. Por ejemplo, respecto incluían tanto síntomas alternativos como
al CES-D (instrumento utilizado para la tradicionales, no se encontraban diferencias
de género en la prevalencia de personas
depresión clínica) (32), la probabilidad de que cumplían los criterios para diagnosticar
que las mujeres respondan al ítem “episo- depresión.
dios de llanto” era más del doble que en los
hombres y, además, el hallazgo no variaba Si, además, trascendemos una mirada exclu-
en función de la gravedad de los síntomas sivamente clínica de valorar la salud mental,
depresivos (33). Otro estudio que valoraba para considerar otro tipo de indicadores
la perspectiva de los pacientes en torno a (no clínicos) de bienestar emocional como
qué cuestiones debería abordar el personal el optimismo, la felicidad o la satisfacción
con la vida, se observa que no muestran el
36 Andrea Cabezas-Rodríguez / Amaia Bacigalupe
mismo patrón de género que los indicadores Akasha Gloria Hull, Patricia Bell-Scott y
tradicionales. En este sentido, estudios en Barbara Smith.
1. Benedicto C. Malestares de género y socialización: El feminismo como grieta. Rev. Asoc. Esp.
Neuropsiq. 2018; 38(134):607–25.
3. Bacigalupe A, Cabezas A, Bueno MB, Martín U. El género como determinante de la salud mental
y su medicalización. Informe SESPAS 2020. Gac Sanit. 2020; 34 Suppl 1:61–7.
49(3):317–24.
5. Bandelow B, Michaelis S. Epidemiology of anxiety disorders in the 21st century. Dialogues Clin
Neurosci. 2015; 17(3):327–35.
9. Marecek J. Social suffering, gender, and women’s depression. En: Keyes CLM, Goodman S,
14. Ussher JM. Are we medicalizing women’s misery? A critical review of women’s higher rates of
reported depression. Fem Psychol. 2010; 20(1):9–35.
19. Ruiz-Cantero MT. Sesgos de género en la atención sanitaria. Escuela Andaluza de Salud Pública.
Nueva Salud Pública; 2009
24. American Psychiatric Association. Diagnostic and statistical manual of mental disorders (DSM-
5). 5ª ed. Arlington: American Psychiatric Association Publishing; 2013.
27. Kirk SA. The selling of DSM: The rhetoric of science in psychiatry. London: Routledge; 1992.
28. Roberts GA. Narrative and severe mental illness: what place do stories have in an evidence-
based world? Adv Psychiatr Treat. 2000; 6(6):432–41.
29. Burin M. Estudios sobre la subjetividad femenina. Mujeres y salud mental. Buenos Aires: Grupo
Editor Latinoamericano; 1987.
31. Smith DT, Mouzon DM, Elliott M. Reviewing the assumptions about men’s mental health: An
32. Radloff LS. The CES-D scale: A self-report depression scale for research in the general population.
Appl Psychol Meas. 1977; 1(3):385–401.
33. Cole SR, Kawachi I, Maller SJ, Berkman LF. Test of item-response bias in the CES-D scale. J
Clin Epidemiol. 2000; 53(3):285–9.
vs women: analysis of the National Comorbidity Survey Replication. JAMA Psychiatry. 2013;
70(10):1100-6.
in Norway increased over a 20-year period? Exploring age and gender differences in a prospective
37. Solé-Auró A, Jasilionis D, Li P, Oksuzyan A. Do women in Europe live longer and happier lives
health: The effects of optimism and gratitude. Psychol Rep. 2017; 120(4):639–49.
39. Crenshaw K. Demarginalizing the intersection of race and sex: A black feminist critique of
antidiscrimination doctrine, feminist theory and antiracist politics. Univ Chic Leg Forum. 1989;
1989(1):139-67.
42 Andrea Cabezas-Rodríguez / Amaia Bacigalupe
41. Crenshaw K. Mapping the margins: Intersectionality, identity politics, and violence against women
of color. Stanford Law Rev. 1991; 43(6):1241-99.
42. Kuehner C. Why is depression more common among women than among men? Lancet Psychiatry.
2017; 4(2):146–58.
43. Artazcoz L, Benach J, Borrell C, Cortès I. Unemployment and mental health: understanding the
World region of origin and common mental disorders among migrant women in Spain. J Immigr
46. Suess Schwend A. La perspectiva de despatologización trans: ¿una aportación para enfoques
de salud pública y prácticas clínicas en salud mental? Informe SESPAS 2020. Gac Sanit. 2020;
34:54–60.
48. Arber S, McKinlay J, Adams A, Marceau L, Link C, O’Donnell A. Patient characteristics and
patients’ gender on informed decision making regarding total knee arthroplasty. Arthritis Care
Andrea Cabezas
Correspondencia: [email protected]
Cuad. Psiquiatr. Comunitaria,
Vol. 19, N.º 1, pp. 43-61, 2022
Recibido: 3/12/2021
Aceptado: 31/03/2022
RESUMEN ABSTRACT
Los profesionales de la salud mental estamos In recent years, the mental health professionals
siendo protagonistas en las últimas décadas are protagonist of increased demand of people
de un incremento de demandas de malestar with social problems and of everyday life which
en relación a problemas sociales y de la vida are considered normal processes and it don´t meet
cotidiana, que podrían ser considerados procesos criteria diagnostic criteria for a mental disorder
normales y que no cumplen criterios diagnósticos and, therefore, it should be outside the health
de trastorno mental y, por tanto, deberían estar
fuera del ámbito sanitario. Este aumento del modern society whose social, political, cultural
malestar está enmarcado en una sociedad
moderna cuyos aspectos sociales, políticos, experience of suffering from the medical point of
view, seeking a health response. The management
nueva vivencia del sufrimiento desde lo médico of discomfort to this day remains controversial and
en la que se busca una respuesta sanitaria. El uneven among the different professionals and it
manejo del malestar hasta hoy en día no está is, therefore, that we defend the indication of
consensuado, sigue siendo controvertido y dispar no-treatment as an intervention with some basic
entre los profesionales y es, por ello, que en este psychotherapeutic elements that professionals
artículo insistimos en la defensa de la indicación de should know and train, and whose objective is to
no-tratamiento como aquella intervención dotada avoid a psychiatrization / psychologization of daily
de unos elementos psicoterapéuticos básicos que life and a saturation of the health system.
deberían conocer y entrenar los profesionales para
ponerla en práctica en su día a día, y cuyo objetivo
es evitar una psiquiatrización/psicologización de la
sociedad y una saturación del sistema sanitario.
espacio y nuestras funciones para contribuir actualmente los enfermos, como las perso-
en dar a la sociedad una respuesta sanitaria nas sanas, deberían estar incluidos en las
adecuada. listas de sus médicos.” Y esta idea se incluyó
Y, por consiguiente, la pregunta entonces en los estatutos de la Organización Mundial
que nos deberíamos hacer: ¿cuál sería la de la Salud (en adelante, OMS) en 1946 en
intervención más adecuada para abordar el
malestar que nos evite la psiquiatrización/ de bienestar físico, psíquico y social”, una
psicologización de la vida cotidiana? A partir
de los estudios realizados previamente, abrió así la versión más completa del pen-
46 Beatriz García Moratalla
samiento salubrista, el cual promete en una nos normales que forman parte de la vida
primera fase la eliminación del sufrimiento humana, como el embarazo, la menopausia
(tanto físico como moral) y el retraso de la o el envejecimiento; factores de riesgo) o
muerte, y en una segunda fase, reclama el ciertas actividades que antes se consideraban
derecho a la felicidad. La salud tiene que ser inmorales, indeseables o criminales.
algo más que la ausencia de enfermedad. La
salud se equipara a felicidad y la felicidad Zola (1972) definió la medicalización
es salud. como el “proceso de la vida diaria que se
ha convertido más y más bajo el dominio,
En la Conferencia Internacional sobre
Atención Primaria en Alma Ata (1978), un cambio de rol de la medicina en la socie-
dad moderna, pues la medicina se acaba
el eslogan de “Salud para todos en el año convirtiendo en una institución de control
2000”, 134 países aceptaron por unanimi- social. Sobre este tejido social, en los años
dad que la salud debía ser concebida como 90, Lynn Palmer acuña el término de disease
bienestar, un “derecho fundamental del ser mongering (venta, invención, fabricación de
humano” que solo es posible alcanzarlo si enfermedades) describiendo cómo funciona
los gobiernos, que tienen la obligación de la invención de enfermedades mediante la
cuidar de los pueblos, toman las medidas dilución de los límites de la normalidad que
sanitarias y sociales adecuadas (3). La salud las transforman en enfermedades suscep-
se convierte así en EL valor social predomi- tibles de ser tratadas y, consecuentemente,
nante y, por tanto, se entiende que la protec- se etiquetan enfermos siendo sanos con
ción del mismo es una acción prioritaria. Se un mayor gasto económico y una mayor
convierte en la meta a alcanzar y mantener saturación asistencial (4-7).
por todos, en un producto de consumo más
y, por tanto, sometida a criterios sociales ¿Y la salud mental? Como ya he mencio-
y modas, a fuerzas políticas y económicas, nado, la salud en general es sinónimo de
incluso a leyes de mercado. Y todo ello pone felicidad, y más si cabe, la salud mental
el énfasis en el cuerpo como agente hedo- en particular. El derecho a la salud es el
nista y en las tecnologías corporales como derecho a la felicidad. La felicidad se ha
promesas de reversibilidad corporal, rejuve- convertido en un elemento fundamental en
necimiento y de felicidad. Se genera así un nuestras vidas, y se considera un conjunto de
culto narcisista a la juventud, a la salud y a estados psicológicos que pueden gestionarse
la belleza con miedo al envejecimiento y la mediante la voluntad del individuo (al igual
muerte, siendo el individuo el único respon- que la salud), cuyo único objetivo es que la
sable de mantener y de cuidar su salud. Y, a vida sea digna de ser vivida con el mínimo
su vez, conduce a una progresiva medicali- sufrimiento (o ninguno, a ser posible) (8).
zación de la vida desde el afán desmesurado Pero el problema no está en la búsqueda de
por la prevención que ahora abarca muchos la felicidad, sino que radica en los caminos
más problemas que antes no estaban consi- por los que transita para conseguirla. Por
derados como entidades médicas (fenóme- tanto, si el individuo no consigue alcanzar
Indicación de no-tratamiento para personas con malestar 47
este estado de felicidad permanente, recurre envuelve; como decía Bauman (10), “vivir
a los “especialistas” que le van a aportar los sin vínculos es la receta que da el indivi-
psicofármacos y/o las técnicas psicológicas dualismo”, con la importancia del presente
necesarias para desarrollar su potencial (9). y del “vivir para uno mismo”, la libertad y
Todo ello favorecido por la expansión y elección múltiple supone una pérdida de las
popularización que, en las últimas décadas, referencias y el declive de los valores socia-
han tenido los tratamientos psicofarmaco- les, de las tradiciones y las costumbres, de las
lógicos y psicoterapéuticos que han llegado creencias religiosas, de la escasez de lazos
más a la población general, gracias a las y compromisos sociales y familiares con
políticas externalizadas de atención a la vínculos emocionales laxos e inestables, una
salud mental que han contribuido al aumento crisis de los espacios de seguridad que antaño
de recursos asistenciales ambulatorios que suponía la familia, el barrio, la iglesia, el tra-
se produjo con la desinstitucionalización bajo, los amigos,…. espacios que nos servían
psiquiátrica. A ello también han contribuido de refugio, apoyo, protección, contención y
los profesionales de la salud mental que, que se han visto sustituidos por el autismo
a través de los medios de comunicación, tecnológico que nos lleva cada vez más a
estar solos y a interrelacionarnos por otras
vías como las redes sociales. Los colectivos
con intereses propios hacia sus negocios humanos se juntan hoy por tiempos cortos,
privados, promocionan la importancia de
estas disciplinas trasladando una imagen de y en un marco de competición por el consumo
“expertos” que pueden opinar acerca de casi que solo logran articular vínculos inestables
todo. Los profesionales ofertan solución casi incapaces de crear cultura popular. Hay una
para todo exagerando los efectos positivos
de lucha ante las desigualdades sociales y la
inoculando en la conciencia de las masas un explotación, no hay cabida para la solidari-
aumento mayor de enfermedades mentales, dad y el altruismo (no estamos dispuestos a
generando una hipocondría emocional que
conlleva una preocupación constante por
cómo conseguir la felicidad. Estos “exper- El individuo posmodernista es renuente a
tos” a su vez, a través de lobbies, asesoran
a nuestros políticos para dirigir las políti- inmediatez y la rapidez del bienestar, con
cas de salud mental que deberían mejorar escasa tolerancia a la frustración, al esfuerzo
la atención a nuestros enfermos mentales y al displacer, con la necesidad de sostener
pero que, paradójicamente, están muy lejos una euforia perpetua proclamando como
de la realidad clínica y asistencial. derecho básico el tenerlo todo sin renunciar
a nada. Se ha reducido la capacidad de
Siguiendo el hilo conductor del contexto experimentar alegrías y placeres sencillos
actual, otra de las causas que lleva al indi- de la vida, se necesitan cada vez estímulos
viduo de hoy en día a la búsqueda de la feli- más enérgicos para proporcionar a la
cidad, es la sociedad posmodernista que nos gente de una sociedad anestesiada alguna
48 Beatriz García Moratalla
más la puerta a una mayor laxitud en los cri- medios de comunicación que se hacen eco
terios diagnósticos ampliando los márgenes de supuestos descubrimientos revoluciona-
espaciales y temporales para incorporar, en rios, soluciones mágicas y terribles plagas
una patología mental en el futuro, lo someternos a tener una solución para todo
cual sea dicho de paso no cuenta con e inmediata y trabajar nuestra tolerancia
evidencia científica (ej., debriefing (y la del paciente) a la incertidumbre. Esto
en situaciones traumáticas como las
catástrofes, terapia en duelos normales, y ver” antes de prescribir y reivindicar la
tratamientos de relajación en pacientes indicación de no-tratamiento que evite efec-
propensos a la ansiedad…), pero no tos negativos de intervenciones innecesarias
olvidemos que estos tratamientos pueden o excesivas.
generar iatrogenia en personas sanas con
el buen propósito de protegerlas y que, Hay que devolver los problemas personales
una visión individualizada de la pre- a las personas y los problemas sociales a la
vención no debe obviar una perspectiva sociedad.
social o colectiva que suponga cambios
sociales, económicos y políticos favora-
bles para el conjunto de la población y ESTUDIOS ACTUALES SOBRE EL
que no nos corresponde a los profesio- MALESTAR
nales de la salud mental hacernos cargo
de ellos, sino a instancias superiores que Llama la atención que, a pesar este aumento
se deberían resolver en otras escalas: de la demanda por malestar, apenas hay
juzgados, sindicatos, políticas sociales estudios empíricos asistenciales que evalúen,
y ambientales….Es más fácil cambiar
los propios deseos individuales que el la década de los 90, se realizaron escasos
orden del mundo. Supone propugnar estudios al respecto, en países con un sistema
un adaptacionismo personal frente a las sanitario diferente al nuestro, retrospectivos,
situaciones sociales injustas y contribuye y solo valoraban la prevalencia así como
a bloquear cualquier posibilidad de un concluían que estas demandas suponían una
planteamiento colectivo para luchar carga asistencial.
contra ellas.
El primer estudio realizado en España (y
No podemos creer ingenuamente que nues- a nivel internacional) que analiza este
tras intervenciones, por mínimas que sean y fenómeno fue en el año 2000 en Madrid
siempre guiadas por nuestra buena voluntad siendo la autora firmante una de las
y el deseo de ayudar (a veces también por colaboradoras del mismo (21); se trata del
interés particular), van a ser inocuas. Nuestra primer estudio observacional descriptivo-
capacidad terapéutica como profesionales prospectivo de aquellos pacientes evaluados
de salud mental resulta bastante limitada y, en una primera entrevista clínica en el CSM
antes de intervenir, debemos reconsiderar del distrito de Salamanca durante un año
- y que no cumplían criterios clínicos de
mos proporcionar y los daños que podemos
Indicación de no-tratamiento para personas con malestar 53
(14%) fueron diagnosticados de códigos Z, tes centros de salud mental a nivel nacional
es decir, no presentaban un trastorno mental. con el objetivo de comparar si existen dife-
Esta prevalencia es menor a la del estudio rencias en los resultados y valorar cuáles
previo, y entre las hipótesis que se barajan serían los factores que pudieran estar en
posiblemente se podría pensar que se debe relación a ello para un análisis más profundo
a la población que se analizaba (menor
nivel socioeconómico, mayor tasa de paro, de recursos que hacen.
mayor problemática social,…característi-
cas asociadas a una peor salud mental) y
a los profesionales que participaron en el PROPUESTA DE INTERVENCIÓN
estudio (quizás menos concienciados con
SOBRE EL MALESTAR:
dicha demanda). Al igual que en el anterior,
se repetía el sesgo de género: 62 pacientes LA INDICACIÓN DE
(2/3) eran mujeres y 37 pacientes (1/3) eran NO-TRATAMIENTO
hombres. Otros resultados se repiten como
el previo: casi la mitad de ellos ya tenían
pautado tratamiento psicofarmacólogico mis pacientes ha sido no hacer nada en absoluto”.
desde Atención Primaria (benzodiace-
Sydenham.
pinas +/- antidepresivos) y casi la mitad
fueron por problemas familiares, seguidos
por problemas laborales y problemas en
Indudablemente, y muy a nuestro pesar, la
el estilo de vida. Más de la mitad fueron
demanda existe y no podemos ignorarla,
dados de alta tras la primera entrevista. Y
y ante esta evidencia, lo más sensato sería
en el estudio prospectivo a los doce meses,
pensar cuál es el manejo más correcto para
estos casos con las mínimas consecuencias
solo seis pacientes desarrollaron trastorno
negativas tanto para el usuario como para
mental siendo los diagnósticos en estos
los profesionales de la salud mental. A partir
casos de trastorno adaptativos y trastornos
de los resultados del estudio de Madrid de
de personalidad. A los doce meses, 73% de
los códigos Z en los que se comprobó que
los casos habían sido dados de alta; casi un
la mayoría de las personas que acudían por
20% habían abandonado el seguimiento a
malestar no desarrollaban trastorno mental
los doce meses. Los psiquiatras diagnostica-
y la experiencia subjetiva (tanto por los
ron mayor número de códigos Z (71 frente a
profesionales como por los usuarios) en
los 28 de los psicólogos) y tenían un mayor
cuanto a la indicación de no-tratamiento fue
porcentaje de altas a los doce meses, y los
positiva, se plantea que dicha intervención
abandonos se correspondían más con los
podría ser el abordaje “idóneo” para
psicólogos.
las demandas por malestar. Se decidió
Sería relevante que este estudio se pudiera denominarla indicación de no-tratamiento.
realizar de manera multicéntrica en diferen-
Indicación de no-tratamiento para personas con malestar 55
la que acordamos con el paciente no realizar de índole clínica, asistencial, personal del
ninguna intervención terapéutica y parte terapeuta y del usuario. Es llamativo que
del planteamiento potenciador basado en la una intervención tan frecuente, con tanta
relevancia clínica y que técnicamente
der Rohe (“Menos es más”). precisa de un manejo y un entrenamiento
de habilidades psicoterapéuticas haya
La indicación de no-tratamiento es la sido tan poco estudiada, poco entrenada
intervención paradigmática de la prevención y dignificada. Sería fundamentalmente
cuaternaria en salud mental que se trata del
conjunto de acciones que pretenden evitar ignorar el sufrimiento, ni trivializarlo; ni
la actividad sanitaria innecesaria y paliar y
revertir el daño que conlleva la actividad de enfermedad para el que corresponde
sanitaria necesaria. Y esta actuación se un psicofármaco. Y eso podría realizarse
en una única entrevista de evaluación, a lo
(primum non nocere) que es el primero y sumo 2-3, que, al mismo tiempo, suponga
más fundamental del profesional sanitario.
un encuentro psicoterapéutico en el que,
La indicación de no-tratamiento no es algo
más allá de la comunicación de una etiqueta
diagnóstica, se debería establecer una
quizás el término puede generar confusión,
no equivale a no intervención o no atención,
aceptación y colaboración entre terapeuta
sino a una intervención dirigida a reasignar el
y usuario, abandonando la actitud habitual
malestar y la demanda de la persona. Supone
paternalista y estableciendo una relación
trabajar para llegar a ser innecesarios, buscar
más horizontal que le permite al profesional
la máxima calidad con la mínima cantidad,
ofrecer intervenciones no invasivas y ver a esa persona como alguien que necesita
no negar la realidad social (2, 22, 23). ayuda y no como un usuario equivocado, lo
Curiosamente es una paradoja: intervenimos que permitirá a su vez sentirse comprendido
para no intervenir en personas no enfermas en su sufrimiento y no expulsado del
y, además, indicar no-tratamiento ya tiene sistema sanitario y favoreciendo a su vez
algo de psicoterapéutico. De esta manera, su autonomía y la capacidad en la toma de
reinvindicamos el “esperar y ver”, mantener
una actitud expectante, mantener la calma,
Desgranando más esta intervención, podría-
mos dividirla en tres etapas dentro de esa
positiva.
entrevista de evaluación. Estaría indicado,
Debería ser una intervención frecuente en el en la medida de lo posible, seguir el orden
día a día de los profesionales de salud mental, de estas etapas, pues si saltamos alguna de
y también en Atención Primaria, que depende ellas o intentamos adelantarnos, eso puede
del encuentro intersubjetivo profesional- generar obstáculos que entorpezcan nuestra
usuario y que está sujeta a múltiples variables actuación.
56 Beatriz García Moratalla
Va a ser una parte de la entrevista un poco de la misma habría que medirla mediante
más tensa porque el terapeuta tiene que cues- el grado de satisfacción del sujeto (y del
tionar y desmontar esa versión inicial para terapeuta) porque ya entiende su malestar
co-construir con el sujeto la nueva versión desde otra perspectiva. En la gran mayoría
en la que tanto el problema como su solu- de las ocasiones, las personas que reciben
ción están fuera del ámbito sanitario. Esto una indicación de no-tratamiento se sienten
supone que el individuo logre un cambio satisfechos por la buena atención que han
de perspectiva en torno a la narrativa que recibido y aliviados de no ser considerados
trae con el objetivo de que no se vea a sí “enfermos”, por eso hace que se considere
mismo como “un enfermo” necesitado de terapéutica. Sin embargo, algunos de ellos
Indicación de no-tratamiento para personas con malestar 59
1. Ortiz Lobo A, García Moratalla B, Lozano Serrano C. Las consultas sin patología en salud
mental. En Retolaza A, editor. Trastornos mentales comunes: manual de orientación. Madrid:
AEN Estudios, 41; 2009. p. 97-108.
2013.
3. Petr Skrabanek. La muerte de la medicina con rostro humano. Madrid: Diaz de Santos; 1999.
5. Morell ME, Martínez C, Quintana JL. Disease mongering, el lucrativo negocio de la promoción de
enfermedades. Revista Pediatría de Atención Primaria. 2009;11 (43) Julio/Septiembre: 491-512.
8. Bruckner P. La euforia perpetua. Sobre el deber de ser feliz. Barcelona: Tusquets; 2001.
12. Rendueles G. Las falsas promesas psiquiátricas. Madrid: La Linterna Sorda; 2017.
13. Lipovetsky G. La era del vacío (3ª edición). Barcelona: Anagrama; 2005.
14. Sennett R. La corrosión del carácter (5ª edición). Barcelona: Anagrama; 2001.
15. Verdú V. El estilo del mundo (3ª edición). Barcelona: Anagrama; 2003.
19. Instituto Deusto de Drogodependencias. Mujeres y psicofármacos. Bilbao: Deusto Digital; 2020.
20. Pons i Antón Ignasi. Psicologización de la vida cotidiana. Átopos. 2008; 7: 48-53.
21. Ortiz Lobo A, García Moratalla B, Lozano Serrano C, de la Mata Ruiz I, Rodríguez Salvanés F.
Conditions that do not reach the threshold for mental disorder in spanish psychiatric outpatients:
prevalence, treatment and management. Int J Soc Psychiatry. 2011; sep 57(5): 471-9.
Indicación de no-tratamiento para personas con malestar 61
22. Sáinz F, Talarn A. Prevención cuaternaria en salud mental. Intercambios: papeles de psicoanálisis,
2009; 23: 59-67.
23. Ortiz Lobo A. Iatrogenia y prevención cuaternaria en los trastornos mentales menores. En:
Retolaza A, editor. Trastornos mentales comunes: manual de orientación. Madrid, AEN Estudios,
41; 2009. p. 313-23.
24. Ortiz Lobo A, Murcia García L. La indicación de no-tratamiento: aspectos psicoterapéuticos. En:
Retolaza A, editor. Trastornos mentales comunes: manual de orientación. Madrid, AEN Estudios,
41; 2009. p. 179-94.
25. Ramos García J. Medicalización del malestar. Alegato por una aproximación compleja para un
minimalismo terapéutico. Rev Asoc Esp Neurop. 2004; 91: 99-113.
26. García Moratalla B. Indicación de no-tratamiento para personas sin diagnóstico de trastorno
mental. Norte de Salud Mental, 2012; 10(43): 43-52.
Brouwer; 2008.
Recibido: 3/12/2021
Aceptado: 31/03/2022
RESUMEN ABSTRACT
El presente trabajo expone los orígenes y el método This work focuses on the origins and the method
conocido como Housing First, dirigido a personas que known as Housing First, aimed at homeless persons
viven en la calle y tienen problemáticas asociadas a and have problems associated with mental health
la salud mental y las adicciones. Esta metodología and addictions. This methodology is committed to an
apuesta por un abordaje desde los derechos huma- approach to human rights, support and continuity in
nos, el apoyo y la continuidad en los cuidados como care as an alternative to other models focused on the
alternativa frente a otros modelos centrados en la therapeutic aspect. An experience that allows us to
vertiente terapéutica. Se trata de una experiencia open the question about the existing work models in
the treatment of mental health, addictions and social
existentes en el tratamiento de la salud mental, las exclusion, paying special attention to community and
adicciones y la exclusión social, prestando especial network approaches.
atención a los abordajes comunitarios y en red.
nes. No olvidemos que si bien podemos nación y colaboración entre áreas sanitarias
-
psíquico, las adicciones y las problemáticas ciación, burocracia excesiva, burn out entre
del vínculo social, no es menos cierto que
entre ellas existen relaciones, efectos y con-
secuencias, y que en no pocas ocasiones se
presentan juntas. En mi práctica he podido han llevado a muchos profesionales, tanto
advertir que una toxicomanía puede ser la de la salud mental como de los Servicios
respuesta de un sujeto frente a un síntoma, Sociales, a interesarse por nuevos modelos
un malestar, un desencadenamiento o un de abordaje y nuevas formas de pensar la
fenómeno elemental en el campo de las red de atención y los servicios.
psicosis. En este mismo sentido, el aisla-
miento o la ruptura de los vínculos sociales
(familiares o laborales) pueden responder PRINCIPIOS DEL MÉTODO
a fenómenos de intrusión típicos de una
El modelo Housing First se postula como
estructura paranoica. Estas relaciones entre
la salud mental y los fenómenos de ruptura
en el lazo social pueden ser abordadas de
tratamiento de las estructuras estatales de
manera inter-disciplinar e inter-servicios
distribución de los cuidados y de la salud
organizando redes de colaboración entre
abordando estos tres fenómenos de manera
servicios sociales, salud mental y adiccio-
simultánea y relacional.
nes. El modelo Housing First responde a
esta lógica y apuesta por el factor social y Housing First utiliza la vivienda como punto
comunitario en la atención. de partida. Esto resulta novedoso ya que en
los modelos anteriores a HF la vivienda
Tanto la exclusión social como las adic-
ciones y las problemáticas de salud mental
intervenciones. HF subvierte esta lógica.
La vivienda es el comienzo y el inicio de
abordaje. En ocasiones, la red asistencial
la intervención. Una alternativa frente a
no sabe cómo abordar estas problemáticas
las políticas propias del llamado “modelo
concretas y se ve impelida a inventar nuevas
escalera” que es cómo se conoce al modelo
fórmulas de acceso, nuevas formas de hacer
hegemónico, más extendido y utilizado, en
institución y reincorporar a sus redes de
la red asistencial para el tratamiento del
atención a aquellas personas que han que-
“sinhogarismo” y cuyas características desa-
dado a la deriva, aislados o en desamparo.
rrollaremos más adelante. Por el contrario,
El programa institucional encuentra, en la
en un servicio Housing First lo primero que
atención de estos casos, obstáculos muy
se proporciona, previo a cualquier otro tipo
persistentes que a su vez repercuten tanto
de apoyo e intervención, es el alojamiento.
en los modelos y servicios de atención como
en los profesionales, pacientes y personas Housing First proporciona una vivienda
usuarias de estos servicios. Falta de coordi- unipersonal en un contexto comunitario. Se
64 Cosme Sánchez Alber
1 Pathways to Housing
Housing First 65
Pathways to Housing
Medical Center
66 Cosme Sánchez Alber
en el abordaje del sinhogarismo en personas quiátricos. Los colectivos que más adelante
con grandes necesidades de apoyo, tanto en accedieron al programa se fueron ampliando
EE.UU. como en Canadá así como en varios para incluir tanto a personas que pasaban
países europeos que, como Italia, Francia largas temporadas en los dispositivos de
albergue para personas sin hogar como
método conocido como HF. Como señala la para aquellas personas que se encontraban
Guía Housing First Europa: “Housing First en situación de riesgo de acabar en la calle
está diseñado para personas que necesitan cuando se les daba el alta en los hospitales
psiquiátricos o a su salida de prisión. Con
salir del sinhogarismo. Entre los grupos a
los que los servicios Housing First pueden prestada, los servicios Housing First se uti-
ayudar se encuentran personas sin hogar con lizan también en la actualidad con familias
enfermedad mental severa o problemas de y jóvenes sin hogar en Norteamérica.
salud mental, con consumos problemáticos
de drogas y alcohol, y/o con salud física En el Nueva York de los años ochenta,
delicada, enfermedades limitantes y dis- Tsemberis trabajaba en un servicio de emer-
capacidades” (1). Los servicios Housing gencias móvil adscrito al Hospital y dirigido
First también han demostrado ser efectivos
en personas con trayectorias de situación personas sin hogar. Es allí, en su práctica,
de calle largas o recurrentes que, además -
de otras necesidades de apoyo, a menudo cias de las redes asistenciales en sus intentos
carecen de apoyos sociales o familiares. En por alojar a estas personas. En la mayoría
Estados Unidos y Canadá, los programas de los casos la única respuesta posible era el
Housing First también se utilizan con fami- hospital o un centro de desintoxicación para
lias sin hogar y con personas jóvenes. el tratamiento de las adicciones. Los ingre-
sos en el hospital, vía urgencias o unidades
Housing First nace en Nueva York a princi- de psiquiatría, fracasaban una y otra vez en
pios de los años 90 de la mano del Dr. Sam el mejor de los casos funcionaban como
Tsemberis quien había creado con anterio- contención posible frente a situaciones de
ridad una organización llamada Pathways crisis que se repetían. En otra serie de casos,
to Housing, asociación sin ánimo de lucro la asistencia hospitalaria cumplía con la
destinada a la erradicación del sinhogarismo. función social de protección, alojamiento y
En sus inicios, Housing First fue pensado manutención, comida, ropa y cuidados gene-
para ayudar a personas con problemáticas rando frustración e impotencia en los equi-
de salud mental que estaban viviendo en la pos médicos y sociales adscritos al hospital.
calle, muchas de las cuales, además, eran Por su parte, los centros de deshabituación y
ingresadas frecuentemente en hospitales psi- desintoxicación veían frustrados sus esfuer-
Housing First 67
zos al no contar con espacios residenciales tienen en común el rápido realojo en perso-
donde el paciente pudiera dar continuidad nas que se encuentran en situación de sin
5
al trabajo comenzado en dichas unidades. hogar. El programa desarrollado
Lamentablemente, aquellos que no acaba- durante los años setenta en Toronto, Canadá,
ban en la cárcel volvían, una y otra vez, a nos interesa especialmente ya que durante
las calles tras su paso por estos servicios este periodo Canadá atravesaba un proceso
(Hospital y centros de desintoxicación) pro- de desinstitucionalización debido al cierre
duciéndose un efecto de “puerta giratoria” generalizado de hospitales psiquiátricos,
dejando en una situación muy vulnerable
implacable y sintomática que Housing First a las personas que salían de estos centros.
tratará de evitar creando un nuevo modelo Muchos se vieron forzados a vivir en las
de abordaje. El propio San Tsemberis4 lo calles en situaciones de abandono y preca-
decía en una entrevista “ibamos a la calle riedad. Así nace el , un programa
para buscar a los que tuvieran problemas de cuyo origen podemos situar en la acción
salud, gente que tosía sangre, que llevaba los comunitaria asociativa y que pone el acento
pies con ampollas… Muchos mejoraban en en el derecho al acceso a una vivienda y
el hospital, pero el problema es que después en la capacidad de decisión de las personas
volvían a la calle. Pensamos: este sistema no que acceden al programa, a la vez que se
va a ninguna parte. No querían ir al hospi- proporcionan servicios de soporte y acom-
tal primero, ni al dentista primero, ni a un pañamiento. Por otra parte, en el año 1988
tratamiento de desintoxicación primero… se lleva a cabo en la ciudad de Los Ángeles
6
No. Querían una casa. Yo pensaba: ‘¡Dios el programa denominado
mío! ¿Una casa? No tengo una casa. Tengo , primero en utilizar el término “housing
una clínica, una furgoneta, un sándwich, una -
manta… Una casa. Así que dejé el hospital cionar una vivienda lo más rápido posible a
y empecé mi ONG” (2). familias sin hogar, reduciendo el uso de los
refugios, albergues, ingresos hospitalarios
En cualquier caso y con anterioridad al o viviendas de transición, y favoreciendo el
modelo Housing First podemos hacer una realojo en viviendas permanentes (Cartoixa
breve referencia a otros dos programas que y Jobet, 2016).
Beyond Shelter
68 Cosme Sánchez Alber
UN CAMBIO DE PARADIGMA: DEL todas y cada una de las etapas y fases del
MODELO “EN ESCALERA” AL programa, de manera sucesiva, se conside-
MÉTODO HOUSING FIRST raba que la persona estaba “preparada para el
Antes de Housing First, en Norteamérica alojamiento”, ya que se la había “formado”,
sólo se ofrecía alojamiento permanente con “tratado” y “educado” para vivir de manera
apoyo a personas sin hogar después de que independiente, autónoma y plena. Como se
hubiesen pasado por una serie de etapas ha señalado anteriormente, a este tipo de
que empezaban por el tratamiento y la abs- servicios se los denomina habitualmente
tinencia, ambos preceptivos y obligatorios. “en escalera”, “tratamiento lineal residen-
Es decir, el modelo anterior se basaba en el cial” o “enfoque basado en el tratamiento”.
principio de tratamiento y el abandono per- Esta es la denominación que usaremos
en el presente artículo para referirnos al
dos condiciones previas necesarias para el modelo hegemónico que se ha replicado, y
acceso a una vivienda. La vivienda estaba se replica en la actualidad en multitud de
condicionada a estos dos requisitos, a estas países y ciudades del mundo occidental,
dos obligaciones, que debían ser mantenidos
y motivados en el tiempo durante toda la y profesionales que desarrollan su trabajo
intervención, de lo contrario el proyecto de en los diferentes servicios de la amplia red
- asistencial, unidades hospitalarias de des-
vamente descartado (3). intoxicación y deshabituación de drogas,
comunidades terapéuticas, centros de salud
Estos programas se basaban en el trabajo mental, Servicios Sociales y educativos.
por objetivos y en el cumplimiento riguroso
de las fases del tratamiento. Cada escalón Estos servicios en “escalera” son solidarios
de esta “escalera” estaba diseñado para con una cultura centrada en la “aptitud” y la
preparar a las personas a vivir de manera voluntad, la meritocracia o la “motivación
independiente en su propio hogar, en un para el cambio” y sus antecedentes los pode-
- mos encontrar en las prácticas realizadas en
vención. De esta manera se establecían una los hospitales psiquiátricos norteamericanos
serie de pasos que se irían cumpliendo de donde las personas con diagnóstico de tras-
manera sucesiva, razón por la cual a este torno mental severo eran consideradas como
modelo se lo conoce con el nombre de “incapaces funcionales” y, en consecuencia,
necesitados de atención y supervisión las
era la vida independiente que los esperaba veinticuatro horas del día. De estas consi-
deraciones limitadas de la salud mental y de
marcado y diseñado por los técnicos y pro- las llamadas “locuras”, en el sentido de la
fesionales de la red, fase a fase, paso a paso, psiquiatría clásica, se deduce una visión muy
pero sin tener en cuenta las diferencias y las
características propias de cada persona; su que no puede tomar sus propias decisiones,
palabra, sus tiempos, sus decisiones, su res- incapaz de contribuir al trabajo terapéutico
ponsabilidad. Cuando se habían completado de manera responsable y en colaboración
Housing First 69
con los médicos, los psiquiatras o los tra- que no hiciesen uso de drogas y alcohol
bajadores sociales. De alguna manera, se (abstinencia total).
consideraba que el paciente se encontraba
en una situación de inferioridad y menos-
cabo, y en consecuencia debía adaptarse al Housing First se aparta del enfoque diri-
modelo de “normalidad” imperante, seguir gido a la abstinencia y adopta un enfoque
escrupulosamente las técnicas de la época solidario de los métodos conocidos como
y abandonar las conductas consideradas de reducción de riesgos y daños en relación
antisociales o perjudiciales para su salud e al consumo de drogas de donde surgieron
higiene, sin tener en cuenta las condiciones iniciativas y proyectos inéditos e innovado-
particulares de cada caso, los derechos indi- res para su época. En el campo de las toxi-
viduales, sus tiempos, sus ideas, su palabra o comanías y los enfoques de reducción del
su capacidad para tomar decisiones y elegir daño podemos encontrar el nacimiento y la
las opciones que considere más oportunas. implementación de servicios tan interesantes
e imprescindibles en la actualidad como los
Durante los años 80, algunos profesionales Programas de Mantenimiento con Metadona
de la salud mental comenzaron a cuestionar (PMM), las salas de consumo supervisado,
la efectividad y la ética de aquellos servi- los programas de intercambio de jeringuillas
cios que basaban su metodología en unas o los servicios de acompañamiento de “baja
exigencia” que proponen un acercamiento
sobre la enfermedad mental. En cualquier diferente a las personas consumidoras
caso, el enfoque en escalera se estableció de drogas sin pasar necesariamente por
firmemente en Norteamérica como el la abstinencia. Trabajar con las personas
modelo prioritario (único y monolítico) para consumidoras implica incorporar una visión
ayudar a las personas sin hogar con grandes nueva frente al fenómeno de las adicciones.
necesidades de atención. Este enfoque tenía Como señala la Guía Housing First Europa
tres objetivos fundamentales (4): de 2016 “Housing First está diseñado para
garantizar que las personas sin hogar tengan
1. Formar a las personas para vivir en
un alto grado de elección y control. Los
sus propias casas tras haber estado en servicios Housing First fomentan activa-
situación de calle o entrando y saliendo mente la reducción del daño en consumos
regularmente de hospitales, centros de drogas y alcohol y la participación en
penitenciarios o albergues sociales. tratamiento de las personas usuarias; pero no
2. Garantizar que las personas recibiesen están obligadas a ello. Otros servicios para
tratamiento y medicación por cualquier personas sin hogar, como los del “sistema en
problema de salud mental activo. escalera”, a menudo obligan a las personas
sin hogar a participar en un tratamiento y a
3. Asegurar que las personas no desarro- mantener la abstinencia de drogas y alcohol
llasen comportamientos que pudieran antes de que se les permita el acceso a una
poner en riesgo su salud, bienestar y vivienda. Además, pueden expulsar a una
estabilidad en la vivienda, especialmente persona de su alojamiento si no sigue el
70 Cosme Sánchez Alber
2. Las personas eran a menudo expulsadas Los servicios de “alojamiento con apoyo”
de los servicios residenciales debido al (germen del modelo Housing First) se
incumplimiento de la normativa, funda- desarrollaron en Norteamérica como una
mentalmente debido al quebrantamiento alternativa a los servicios en escalera,
de la obligación de abstinencia o a la sosteniendo un enfoque muy diferente al
falta de participación en un tratamiento anterior y convirtiéndose en una opción
psiquiátrico o de carácter terapéutico. posible frente al modelo hegemónico. Estos
servicios consistían en alojar inmediata-
3. Existía preocupación sobre si los servi- mente y con carácter de urgencia a antiguos
cios en escalera estaban marcando están- pacientes psiquiátricos en viviendas dentro
dares inalcanzables; se esperaba que las de las comunidades, donde recibían ayuda y
personas usuarias tuviesen un compor- -
tamiento ejemplar, ideal e inalcanzable, les de atención, dentro de un marco en el
más correcto y adaptado incluso que el que las personas usuarias del servicio tenían
de las personas consideradas “normales” amplia capacidad de elección y control sobre
(según la norma estadística). sus propias decisiones. Este apoyo se ofrecía
durante tanto tiempo como fuera necesario
Las personas expulsadas de los servicios garantizando una atención continuada en el
volvían inevitablemente a las calles aumen- tiempo y adaptada a las necesidades de cada
tando considerablemente su sentimiento paciente (6).
de fracaso y reforzando su rechazo a los
tratamientos, a los apoyos y a los servicios Es interesante replantearse el concepto de
que aún quedaban a su alcance (5). El uso “apoyo”, ya que en ocasiones puede tra-
Housing First 71
psiquiatra Manuel Desviat (7) en el libro miento del Uno del hospital psiquiátrico al
“En todos los “entre varios” de la atención en red, a la
procesos de reforma ha habido, aún hay, la
tentación al abandono de estos pacientes, lo médico, como única respuesta y como
dejándoles, con escasos recursos y con único saber en juego, a lo interdisciplinar:
social, comunitario, servicios de acompaña-
un progresivo deterioro en los restos de miento y redes de atención (salud mental,
los manicomios. No pudieron con ellos Servicios Sociales, participación comunita-
la comunidad terapéutica, la psicoterapia ria). La salud mental pasa a ser considerada
institucional o las asambleas basaglianas. en su vertiente social, subjetiva y clínica,
Tampoco las actuaciones terapéuticas y en consecuencia, su abordaje ha de con-
convencionales, desde la psicofarmacolo- templar diferentes disciplinas y servicios.
gía a la psicoterapia. La cuestión era otra. Señala Desviat: “El sistema sanitario, las
Y otras, por tanto, las respuestas. De los ciencias de la salud, ancladas hasta ahora
límites de una clínica y de unos servicios en una medicina reparadora, en la mitolo-
pensados en la cultura de la crisis y del gía de la “curación”, deben ensayar nuevas
paciente agudo, después de varias décadas respuestas para reducir esta, quizá inevita-
de desinstitucionalización, surgieron, bien ble cronicidad. Deben ensayar prestaciones
entrada la década de los 70, de la mano de -
asociaciones de voluntariado ciudadano, de cios sociales, centradas en el cuidado y la
familiares y de autoayuda que hacía tiempo rehabilitación. La descentralización de la
afectivas de los servicios de salud mental, áreas de salud, considerando las caracterís-
los programas de rehabilitación y de apoyo
comunitario. Hay un cambio de orientación. cobertura a toda la población y en especial a
Perdida la omnipotencia médica –el todo de los grupos de riesgo. Programas evaluables
la pronta reparación, que al hacerse impo- que contemplen la integración de recursos
sible lleva al fácil y habitual abandono-, se hospitalarios y ambulatorios, la atención
pasa de la curación al cuidado…” domiciliaria e intenten evitar el germen de
la propia cronicidad en su diseño, en la pro-
Es un desplazamiento que va del exterior,
pia respuesta” (7).
de los márgenes, hacia el interior de la ciu-
dad. Esto implica una conceptualización
diferente tanto de la salud mental como
UNA ALTERNATIVA FRENTE A LA
de su abordaje, así como de las respues-
HIPERMERCANTILIZACIÓN DE LA
tas posibles a implementar. Hay, al menos,
VIVIENDA
dos desplazamientos: El primero de ellos a
nivel topológico nos presenta un recorrido Housing First plantea una acción política
que va del afuera hacia dentro, al interior sobre la vivienda, en concreto priorizando su
de la ciudad y de las comunidades. Por otro uso social, su valor de uso, frente a su valor
lado, y no menos importante, un desplaza- de cambio, es decir, al precio que alcanza
Housing First 75
La vanguardia de este cambio son los fondos radical donde la vivienda se ha convertido
de inversión privada, que están alterando
por completo los sistemas de vivienda en primer orden, tanto para el capital como para
las grandes urbes. Estos fondos compran la el Estado, convirtiéndose en un espacio de
vivienda a precios totalmente desconectados producción y reproducción social central
de los salarios locales, mediante operaciones para el sistema económico.
76 Cosme Sánchez Alber
En general, la mayoría de las medidas orien- efectivos los derechos sociales, políticos o
tadas a desmercantilizar la vivienda, como sanitarios en nuestra localidad de residen-
por ejemplo la construcción de vivienda cia. La vivienda continúa siendo uno de los
pública o la regulación del precio del alqui- factores que en mayor medida determinan
- el acceso a los recursos sociales y sanitarios.
ces especulativos de los fondos de inversión La vivienda tiene un papel protagonista en
aunque no sea posible resolver el problema la creación y consolidación de los vínculos
de la vivienda en un contexto socio-político entre las personas, las comunidades y las
- instituciones democráticas contribuyendo
a estructurar la vida social.
proponiendo algunas prácticas alternativas.
Esto es precisamente lo que aporta Housing La situación de las personas sin hogar pone
First en el ámbito de las prácticas con perso- en evidencia que el papel de la vivienda
nas en situación de sin hogar; una interven- como inversión se encuentra muy por
ción de carácter socio-político sobre el uso y encima de su uso social, independiente-
distribución de viviendas en un ámbito local mente de que este uso se encuentre funda-
mentado en un derecho, en una necesidad,
“el fracaso del modelo basado en la vivienda en una tradición, en una jurisprudencia y en
en propiedad y la hipermercantilización ha una Constitución. Proyectos como Housing
disparado la alienación residencial. Con este First inciden en esta cuestión reivindicando
y priorizando el uso social frente a la mer-
todo aquello que sucede cuando un bien cantilización y la especulación de un bien
esencial para el desarrollo de nuestras vidas de primera necesidad. Visto así, la realidad
(la construcción de un hogar, de un sentido de las personas sin hogar, desde un punto
de un lugar en el mundo y la base emocional de vista sociológico, es consustancial al
que nos permite sentirnos bien en nuestro actual sistema de vivienda y afecta a fami-
entorno) es sujeto a explotación y control lias enteras, a amplias capas de la población,
por terceros actores. Que la vivienda se haya juventud, personas desempleadas, personas
convertido en fuente de especulación tiene mayores, trabajadores precarizados y clase
un impacto enorme en muchas esferas de la media. La subida de los alquileres provoca
vida más allá del techo”. que un sueldo medio no permita el alquiler
de una vivienda unipersonal.
Como señalan estos autores, la vivienda es
un bien pero es también un derecho que per- En España encontramos ejemplos donde la
mite una estabilidad y una vía de acceso a vivienda constituyó una reivindicación den-
una serie de derechos fundamentales, entre tro del movimiento obrero y urbano durante
ellos los que se derivan de la residencia en los años de la Transición. Las asociaciones
un lugar determinado, de manera que por de vecinos promovieron la construcción de
mediación de un padrón podremos acce- la ciudad desde abajo, participando en los
der al ambulatorio, Servicios Sociales o planes urbanísticos como máximo expo-
nente de una democracia redistributiva.
Housing First 77
Sin embargo, el periodo está marcado por movimiento por la vivienda ha resultado más
la ausencia de propuestas y alternativas para productivo cuando se ha aliado con otros
colectivos, como el Black Power, el movi-
la propiedad y la hipoteca como única fór- miento por los derechos civiles o con los sin-
mula socialmente aceptable de adquisición dicatos laborales, por citar algunos ejemplos
inmobiliaria. recientes. En nuestro caso, Housing First
conecta diversas ideas, colectivos e institu-
En Estados Unidos, la crisis de la vivienda ciones; asociaciones de personas sin hogar,
es especialmente grave en Nueva York. Esta usuarios de Servicios Sociales, colectivos
ciudad tiene en la actualidad más personas por una vivienda digna, etc.
sin hogar que en cualquier otro periodo
desde la Gran Depresión. Más de la mitad La cuestión de la vivienda va mucho más
de los hogares no pueden pagar el alquiler. allá de sus aspectos técnicos, se trata de
El desplazamiento de la población, la gen- un problema político, económico y social
de gran calado que implica una amplia
alarmantes. Dos pilares fundamentales del colaboración entre diferentes agentes, ins-
sistema de vivienda en Nueva York, las tituciones y colectivos dispuestos a remar
viviendas de titularidad pública y la regu- en una misma dirección. Lo residencial es
lación del alquiler están siendo gravemente
amenazados. Según los indicadores habitua- del sistema de vivienda es el resultado de
les de accesibilidad a la vivienda, no hay ni las luchas y tensiones entre grupos y clases.
un solo estado en Estados Unidos en el que Lo que nos plantea algunas preguntas sobre
una persona que trabaje a tiempo completo las medidas que toma el Estado y sobre el
y gane el salario mínimo pueda permitirse sistema económico en general.
alquilar o comprar una vivienda de un solo
dormitorio. La vivienda se encuentra amenazada por
diversos conflictos que interactúan de
manera simultánea y compleja. El más
los años setenta las organizaciones vecinales inmediato y próximo es el que existe entre
trataron de cambiar el sistema de vivienda la vivienda entendida como espacio social,
a través de acciones que incidieran en el en el que se vive y se construye un proyecto
control de los precios del alquiler en nom- de vida, y la vivienda como instrumento al
bre de la justicia social y el bien común.
Estas acciones incluyeron desde acciones
antidesahucio a campañas de desprestigio de hogar y la vivienda como bien inmueble
contra propietarios abusivos, litigios y huel-
gas de alquileres por bloques, vinculadas al plantea serios interrogantes sobre el poder,
concepto de vivienda como espacio de auto- la desigualdad y la justicia en la sociedad
nomía y emancipación, y a otras formas de capitalista, en la economía y en la política
liberación (laboral, étnica, racial, sexual). En contemporánea y, en consecuencia, es un
cualquier caso, nos interesa destacar que el ámbito que interesa, y mucho, a las polí-
78 Cosme Sánchez Alber
ticas sociales. Proyectos como Housing que todo el mundo tenga un lugar en el que
First pueden arrojar algo de luz sobre las vivir, sino que se produce y se distribuye
medidas a adoptar y los obstáculos a superar, como una mercancía para enriquecer a unos
entre otras cosas porque es un modelo que pocos. La crisis de la vivienda no se produce
se está desarrollando en diferentes países, como consecuencia de un fallo en el sistema,
municipios y ciudades adaptándose a las sino porque el sistema funciona como debe.”
particularidades del mercado inmobiliario
de cada comunidad. Además ofrece la
posibilidad de ampliar el campo de visión, CONCLUSIONES
evaluar los resultados y pensar en términos
Como agentes sociales nos interesa la
de política comparada entre los diferentes
defensa de la vivienda entendida como un
territorios donde ya se está desarrollando.
recurso al que todo el mundo debería tener
Friedrich Engels (9) escribe en 1872 uno acceso, la vivienda en su calidad de hogar,
de los textos clásicos sobre aspectos socio- y no como un simple producto de consumo
políticos de la vivienda; Contribuciones
al problema de la vivienda. Allí nos Housing First permiten profundizar en el
encontramos la consideración de que la concepto de vivienda como lugar de repro-
problemática de la vivienda es inseparable ducción social y no como fuente de riqueza
de las estructuras propias de la sociedad de y control poblacional.
clases y, por lo tanto, replantear hoy en día
La vivienda es también la puerta de acceso a
las conexiones que existen entre todos toda una serie de bienes sociales, culturales
los poderes en juego. Por su parte Henri y políticos. Sin ella resulta imposible parti-
Lefebvre (10) en El derecho a la ciudad cipar plenamente en la vida social, política
(1968) imagina un porvenir en el que las y económica de nuestras comunidades. Es
necesidades sociales no están subordinadas también el requisito previo tanto para el
a las necesidades puramente económicas, trabajo como para el ocio, otorgando segu-
en el que pudiera contarse con un espacio ridad ontológica. La vivienda estructura la
residencial “desalienado” y disponible para forma en que las personas interactuamos
todos, en el que tanto la igualdad como la en el espacio social, con las comunidades
diferencia serían principios básicos de la vida y en colectivos más amplios, nos dota de
social y política. Como advierten Maden identidad, privacidad y autonomía. En los
et al. (8) “la experiencia de la crisis en el últimos años ha ido creciendo una mayor
sensibilidad hacia el papel central de la
las tendencias generales hacia la inseguridad vivienda en la erradicación del sinhoga-
en las sociedades capitalistas. La crisis de la rismo. En ese contexto, cada vez es mayor
vivienda es el resultado predecible y lógico la atención que se está proporcionando al
de una característica básica del desarrollo modelo un enfoque que, sin
espacial capitalista: la vivienda no se ser revolucionario, subvierte en algunos
postulados las intervenciones tradicionales.
Housing First 79
El trabajo con personas sin hogar nos anima tipo de prácticas que permitan alojar a todas
a profundizar en alternativas de alojamiento aquellas personas que, por diversos motivos,
frente a la hipermercantilización del parque no han podido incluirse en un lugar, en un
de viviendas en la actualidad y promover otro hogar, o nunca lo han tenido (11).
2. Blanco S. Sam Tsemberis, el hombre que empezó la revolución por el techo. El País, 10 de noviembre
de 2016. Disponible en: https://elpais.com/elpais/2016/11/10/eps/1478732741_147873.html
una práctica basada en los derechos del sujeto. En Respuestas transdisciplinares en una
sociedad global: aportaciones desde el Trabajo Social. 2016.
campo de las desinserciones, adicciones y Salud Mental. Norte de Salud Mental. 2021;17(64):
47-56.
hoy. 2006; 1.
Recibido: 3/12/2021
Aceptado: 25/03/2022
RESUMEN ABSTRACT
El objetivo de este trabajo es ahondar en el estudio The aim of this paper is to delve into the study of trans
de la subjetividad trans, en concreto la subjetividad
del “hombre trans”. Partiendo de la presentación de man”. Starting from the presentation of a clinical case
un caso clínico intentaremos profundizar a través de we will try to deepen through psychoanalytic theories
teorías psicoanalíticas y de otras disciplinas como la and other disciplines such as sociology and activism
sociología y el activismo en primera persona.
Palabras clave: : trans, hombre trans, subjetividad, Key words: trans, trans man, subjectivity, identity,
identidad, psicoanálisis, activismo trans. psychoanalysis, trans activism.
Colina en sus clases comenta: “No se está Con dieciséis años, Natalia siente “que
jaba en lo que son las chicas y que le nos comenta: “No necesito más que la
incomodaban los cambios corporales. testosterona por ahora”.
que no se sentía con deseo de cumplir las Al CSM acude a las consultas de manera
expectativas que se esperan de una mujer irregular. Le conocí a principios del año
y paulatinamente lo ha reivindicado: 2019, en los momentos de crisis aparece
el riesgo de autolesionarse e ideación
suicida. Según nuestro criterio clínico
es un paciente grave, que nos ocasiona
con el sentimiento de que a su cuerpo desasosiego a la vez que ternura. Acepta
“no era eso lo que le tenía que pasar...”. intervenciones puntuales, incluso farma-
cológicas
pero no exclusivamente. Impresión diag-
nóstica: Posible Trastorno de Identidad suave que me deje pensar…”.
de Género (TIG): de mujer a hombre. Las terapeutas que le atendíamos estába-
TIG Masculino”. mos de acuerdo en que es un hombre con
“Tratamiento hormonal: sí desea. un gran sufrimiento a la vez que se deja
Intervenciones Quirúrgicas: sí mastecto- acompañar y ayudar puntualmente desde
su distancia de seguridad, que el equipo
genital. Protocolo: Citas con Psiquiatría respetaba. Realiza un esfuerzo ingente
y cita con Psicología. Se entrega y por sentirse estable, le percibíamos como
un paciente responsable de sus síntomas.
Diagnóstico y Tratamiento”. Se acercaba al sistema cuando necesitaba
ayuda puntual de nosotras, luego seguía
Según la Ley 3/2007 ya se podía supri- su camino.
mir la necesidad de tener que someterse
a tratamiento hormonal para cambio de Sus crisis son como él mismo comenta:
inscripción relativa al sexo y nombre en “el drama”. Entra en crisis normalmente
el Registro Civil, antes era obligatorio por algún desencadenante emocional y
dos años de tratamiento2. En 2016 se le pide cita urgente. Se sienta en la sala
realiza el informe para cambio de nombre de espera en el suelo, en una esquina
a Kepa en la Universidad y luego en el concreta, llorando desconsoladamente,
registro. Completa las pruebas psicológi- cabizbajo como un niño. Era un hombre
cas con resultados dentro del rango de la de veintitantos años que mide menos
normalidad. Después de muchos avatares de 1.60 m y muy delgado, físicamente
comienza con el tratamiento hormonal atractivo, con expresión de género feme-
con testosterona y en 2019 se le realiza nina. Yo salgo a avisarle para atenderle
la intervención quirúrgica de una mastec- dirigiéndome directamente a esa esquina,
tomía bilateral. Desde ese momento deja
de acudir a la UTIG. Ya tenía decidido de los pacientes de la sala de espera que
no someterse a más intervenciones. Kepa observan “el drama”, diciéndolo con sus.
83
Para poder conocerle mejor aceptó cidad intelectual y verbal por encima de
realizar una Entrevista Estructural de -
- tivos y a él mismo con claridad, su uso
3
cimiento de su personalidad . del lenguaje es preciso, estructurado, lo
hacia una transición binaria, es decir, de En ese mismo texto, Deleuze comenta:
un género a otro. Unos piensan que es
para mantener el binarismo heteronor- estar atento a lo que llama a nuestra
mativo, otros pueden verlo como para puerta7”.
que sean más aceptados en la sociedad
patriarcal y tránsfoba en que vivimos, En ese estar atenta y acompañar a este
donde la transfobia, el odio y la violencia sujeto me encontré que de poco me ser-
que sufren estas personas es una realidad. vían los conocimientos previos, mi caja
de herramientas era de otra época, otro
La psicología y la filosofía aportan contexto histórico. Empecé, como se
quizá, perspectivas más comprensivas a hace normalmente, leyendo -leer, leer y
nivel conceptual sobre la subjetividad y leer- además de buscar y encontrarme
la identidad. Recordé un libro de con- con sujetos parecidos, con la vana idea
versaciones de Michael Foucault donde de buscar algún rasgo o esencia común
expresaba una concepción de “teoría” para guiar mi estudio.
con estas palabras:
Posteriormente añadí anotaciones e
“Entender la teoría como una caja de ideas que han ido surgiendo tras recorrer
herramientas quiere decir: caminos de estudio menos ortodoxos.
Que se trata de construir no un sistema Navegando por internet, viendo vídeos
sino un instrumento; una lógica propia y entrevistas a personas trans, centrán-
a las relaciones de poder y a las luchas dome en hombres trans. Utilicé esos
que se comprometen alrededor de ellas. medios creyendo que encontraría más
Que esta búsqueda no puede hacerse que verdad en sus experiencias, es decir, que
la existencia de cada uno de ellos podría
(necesariamente histórica en alguna proporcionar más perspectiva al saber de
de sus dimensiones) sobre situaciones lo que estaba ocurriendo.
dadas7.”
El eje del estudio es sin duda Kepa, un
En la misma página de ese libro, en una hombre trans, el objetivo es centrarnos
nota a pie de página, Foucault escribe: en la subjetividad de lo único, nuestro
paciente, a través de lo múltiple, las dife-
rentes teorías y experiencias. Primero,
pregunto si no podría pensarse”. nos acercaremos a las aportaciones de
los psicoanalistas (Freud, Stoller, Lacan,
Sus palabras: teoría como caja de Kernberg), para posteriormente, apor-
herramientas, construir un instrumento, tar pinceladas sobre las teorías trans*
de más actualidad (Preciado, Missé,
situaciones dadas, si algo pudiera pen- Halberstam). Es un acercamiento desde
sarse o no, me parecieron estimulantes lo particular a lo general, he hecho
para un acercamiento a la complejidad como una miniguía que me ayudara a
de este sujeto. abarcar un tema tan complejo pese a
86 Élida Grande
Los tres primeros conceptos se utili- Considerar el género como un rol nos
zan fundamentalmente en el discurso conduce a evaluar las relaciones de poder
médico. Los demás nos ayudarán a una y desigualdad entre ellos9. No es objeto
compresión más amplia del tema. de este estudio, pero no se debe olvidar
esta perspectiva. Al hilo de esto, comenta
- Sexo: Hembra, macho, intersexual. La Paul B. Preciado:
dotación biológica del sujeto incluye sexo convertirse en hombre (hombre trans)
cromosómico, genitales externos, góna- es conservar intacto el recuerdo de la
das, estructuras reproductivas accesorias opresión10”.
internas y sexo hormonal incluyendo
los caracteres sexuales secundarios. - Orientación Sexual: Homosexual,
Intersexual corresponde a un sujeto heterosexual, bisexual, asexual. Según
87
21
no se le haya permitido desarrollar sus . Me
enunciados. Me pregunto: ¿Qué no se pareció interesante añadirlo porque es
puede escuchar en un espacio de estas en internet donde se producen muchos
características? encuentros entre sujetos trans, donde se
Resume en su discurso tres ideas que que abren puertas a nuevas posibilidades
iluminan a nivel epistemológico lo que de ser o estar en el mundo.
está ocurriendo. Primero, que la episte-
mología política del cuerpo es histórica
y cambiante, segundo, que el binarismo 1.2. Desde el discurso
actual y jerárquico está en crisis desde
los años cuarenta y, por último, que la A. Identidad
diferencia sexual está en mutación, que
La “identidad” según el DRAE es:
cambiará hacia otra epistemología en
“Cualidad de idéntico. Conjunto de ras-
diez o veinte años. Quizá lo que quede
gos propios de un individuo o de una
desde la clínica y desde el psicoanálisis
colectividad que los caracterizan frente
a los demás. Conciencia que una persona
y evidencias.
o colectividad tiene de ser ella misma y
Como interpela Preciado a los psicoana- distinta a las demás”.
listas:
Según Kernberg, “la identidad se com-
es lo que van a hacer: ¿dónde se van a
pone del concepto o los conceptos del
dad”, o dice
nuestro sujeto en consulta: “El sujeto política que es la masculina” o descri-
birse como “disidente del sistema de
deriva de la reflexividad del yo (se sexo-género”5.
-
ciones interpersonales (tratando con
los otros). Se es sujeto para uno mismo MARCO TEÓRICO
1. Teorías sobre la construcción de la
en el Otro Interior (que aliena nuestra Identidad
intimidad) y el Otro Exterior (tradicio-
nal). Descubrimos así que no somos Son teorías complejas, indispensables
según nuestro criterio, a las que haremos
que en nuestro interior habita otro que breves acercamientos.
nos gobierna y confunde. (…). Sería la Lacan en 1936 propuso la “Teoría del
omnipresencia dialéctica del otro la que estadio del espejo” como “formador
del yo”. “El estadio del espejo debe ser
gravitatorio de la subjetividad estaría
pivotando en las relaciones interperso-
nales y el trato con uno mismo. Donde
tiene lugar en un sujeto cuando asume
se encontrarían también los síntomas y
el sufrimiento humano1.
sometido a su impotencia motriz y depen-
Según leemos en Foucaultiana1 el pri-
mer historiador de la subjetividad fue celebra jubilosamente su imagen espe-
Michael Foucault, investigando la modi-
sobre la que el Yo se cristaliza de una
las épocas. Colina escribe: “El estudio forma primordial. De manera que lo
de Foucault transita por dos vías que
instancia del Yo se sitúa en una línea
su creciente integración”4. -
En el libro de Psicopatología de Martín
y Colina proponen una teoría de la
identidad con estas palabras 24:
-
-
el no-yo. El corps ressenti o continente
lograr un sentimiento de unidad psico- del sujeto e implica la presencia del
física y de diferencia con el otro y con lenguaje. Pero a continuación hay una
la realidad. Este objetivo exige disponer
- implica al otro y que consigue llegar a
la sexuación psíquica del sujeto.
garantizan la intimidad y el sentimiento
de pertenencia y gobierno de sí mismo. Otros autores diferencian los procesos
-
-
blecemos a lo largo de nuestra biografía.
vuelve a dos individuos idénticos. Este
3. Kernberg OF. Structural Diagnosis and the structural interview. Severe personality disorders.
7. Foucault M. Un Diálogo sobre el poder y otras conversaciones. Madrid: Alianza; 2012. p. 123.
11. Misse M. A la conquista del cuerpo equivocado. Barcelona: Egales; 2019. p. 63.
13. Erroteta JM. “Disforia de Género: (El “ideal regresivo” y sus destinos)”. Norte de Salud Mental.2020;
16(62): 52-60.
17. Bernini L. Las teorías queer. Una Introducción. Barcelona: Egales; 2018. p 98.
19. Preciado BP. Mujeres en Psicoanálisis. Intervención en las Jornadas de la École de la Cause
Freudianne, París, 2019.
1975. p. 75.
28. Kernberg OF. Controversias contemporáneas de las teorías psicoanalíticas, sus técnicas y
aplicaciones. México: Manual Moderno; 2007. p. 208.
1975. p. 224.
30. Misse M. A la conquista del cuerpo equivocado. Barcelona: Egales; 2019. p. 23-41.
31. Misse M. Transexualidades otras miradas posibles. Barcelona: Egales; 2013. p. 64-71.
37. Kernberg OF. Desórdenes fronterizos y narcisismo patológico. Barcelona: Paidós; 1979. p.
149-152.
Élida Grande
Correspondencia: [email protected]
Cuad. Psiquiatr. Comunitaria,
Vol. 19, N.º 1, pp. 99-101, 2022
10 BÁSICOS 10
actuales.
Cofás; 2016.
Desde los años ochenta asistimos a una intensa transformación en el ámbito de la vivienda
a la que los autores denominan “hipermercantilización”. En defensa de la vivienda, escrito
Se trata de un ensayo que realiza una arqueología de las identidades desde las primeras
sociedades cazadoras-recolectoras, para comprender el proceso histórico por el que se
ha dado una progresiva jerarquización de las identidades de hombres y mujeres y sus
posiciones sociales, basada en una primigenia disociación razón-emoción. Así, las mujeres
han desarrollado una identidad relacional, basada en mantener los vínculos emocionales
entre las personas, lo cual ha permitido que los hombres se hayan individualizado, bajo la
falsa asunción o fantasía de que lo han hecho desde una superioridad racional, dando lugar
al orden patriarcal.
Cuad. Psiquiatr. Comunitaria,
Vol. 19, N.º 1, pp. 102-107, 2022
PUNTO CRÍTICO
TERAPIA ELECTROCONVULSIVA
David G. Pando (Compilador)
Introducción
David González Pando.
Enfermero especialista en salud mental y doctor en Psicología.
presume que los síntomas psicóticos las primeras ciudades, Batelli usa corriente
podrían revertirse induciendo crisis comi- doméstica para producir ataques epilépticos
ciales mediante fármacos convulsionantes. en animales. Este hallazgo es conocido por
Siguiendo esta hipótesis, cardiazol e insulina Cerletti, quien pronto comienza a trabajar
son utilizados para inducir crisis comiciales con perros induciéndoles experimentalmente
en años posteriores. A pesar de sus riesgos, ataques epilépticos. Entre 1936 y 1937 dece-
las convulsiones guían en la época los nue- nas de estos animales son suministrados por
vos desarrollos terapéuticos. Sin embargo, la la perrera a la clínica de Cerletti en Roma.
insulina produce hipoglucemias que pueden Solo la mitad de los perros sobreviven. Su
ser mortales, y el cardiazol causa frecuentes ayudante Bini comprueba que la superviven-
y graves fracturas. cia de los perros aumenta si los electrodos
se disponen bilateralmente en el cráneo del
Cerletti es un joven alistado en las tropas perro.
alpinas durante la primera guerra mundial.
Es una persona ingeniosa y creativa, e Cauteloso, Cerletti teme que las descargas
introduce importantes innovaciones en equi- resulten mortales en humanos. No obstante,
pamiento militar. Estudiante destacado, se una visita al matadero local de cerdos le per-
- mite comprobar que el aturdimiento produ-
tigio como Alzheimer o Kraepelin, lo que le cido por la descarga es solo momentáneo, y
lleva a desarrollar una perspectiva biológica esta observación le lleva a considerar viable
para los trastornos mentales. Dicho de otro su uso en humanos. Cerletti y Bini presentan
modo, considera estos trastornos, al igual los resultados de sus experimentos en Suiza
que Kraepelin, como entidades clínicas que en el primer encuentro internacional sobre
tienen su referencia en las enfermedades terapias para la esquizofrenia. Corre el año
neurológicas. 1937. No se discute si la técnica es efectiva
-
El electroshock de Cerletti no fue el primer caz para producir convulsiones.
uso de electricidad para tratar problemas
del comportamiento. Algunos restos pictó- El primer ensayo en pacientes se produce
ricos de época romana permiten observar en 1938. Estamos en la clínica de Cerletti,
peces eléctricos dispuestos sobre cabezas en Roma, donde un vagabundo ha sido lle-
- vado por la policía debido a alteraciones del
orden público relacionados con comporta-
demonios, los jesuitas utilizan descargas mientos delirantes y alucinatorios. Mientras
en el siglo XVI mediante el contacto con se prepara la sesión, el paciente se muestra
peces capaces de producirlas, atribuyendo indiferente a la máquina, al procedimiento
propiedades sanadoras a la electricidad. En en curso y a los numerosos observadores
los siglos XVIII y XIX se emplean aparatos presentes, incluyendo varios médicos, un
eléctricos portátiles fabricados principal- enfermero y el director del centro. El aparato
mente en Francia o Inglaterra para tratar eléctrico es capaz de alcanzar algo más de
la ceguera psicógena o la depresión. En 100 voltios. Ha sido construido por Bini
gracias a la ayuda de un técnico, pues Bini,
104 David González Pando
contrariamente a lo que suele creerse, no era daños con efectos terapéuticos como euforia
un experto electrotécnico. Los observadores o hipomanía. Para algunos investigadores,
sudan copiosamente. La ansiada crisis con- esta revelación inicial es responsable
vulsiva se produce y la mejoría del paciente de la mala reputación de la TEC, y no el
es instantánea, pues recuperando la coheren- cine, como considera la APA (American
Psychiatric Association). El uso del electros-
descarga: “¡No, es mortal!”. El paciente hock se populariza en depresiones graves
recibe 11 sesiones en días posteriores hasta
observarse mejoría, y recibe el alta. muchos psiquiatras se entusiasmen con el
electroshock. Para prevenir las luxaciones
y fracturas óseas o dentarias que producen
con el uso del electroshock pueden deberse
las convulsiones, en los años cincuenta se
a que la técnica causa neuropatología gene-
introducen anestésicos y miorrelajantes en lo
ralizada y severa en el cerebro. Aunque en
estas líneas en modo alguno se pretende
analogar la TEC con la lobotomía prefron- Sin embargo, estos fármacos presentan
tal, sino analizar una creencia presente en propiedades anticonvulsivas, de forma que
ese momento histórico, es reseñable que se hace necesario contrarrestar este efecto
la vinculación entre daño y mejoría funda- incrementando sustancialmente la intensidad
menta la lobotomía transorbital introducida de la corriente eléctrica administrada al
por Walter Freeman algunos años después. paciente.
Freeman defendía que “a mayor daño, Los nuevos psicofármacos monopolizan la
mayor mejoría”. atención clínica bien entrados los años 50.
En Nueva York, Almasi e Impastato utilizan El uso del electroshock se mantiene, aunque
electroshock por primera vez en 1940, no sin ciertos sectores comienzan a verlo como
antes comprobar su seguridad en perros. Ya una práctica arcaica y no exenta de efectos
en marzo, Gonda ha administrado el trata- secundarios. Paralelamente, se extienden las
miento en Chicago a unos 40 pacientes en escuelas de psicoterapia, ofreciéndose ya a
una atmósfera de progresivo entusiasmo. A los clínicos como alternativas de prestigio.
España la innovación no llega con el retraso Aparecen en este contexto los primeros
acostumbrado, y ese mismo año el Dr. ensayos clínicos comparando TEC modi-
Prieto-Vidal utiliza un aparato construido
artesanalmente por un electricista militar profunda sin descarga). Estos ensayos no
que todavía puede verse en un museo de revelan ninguna diferencia entre los grupos.
Palencia. El entusiasmo que hasta entonces rodeaba
la técnica se desvanece.
En 1941 Jessner y Ryan publican el pri-
Algunos psiquiatras continúan utilizando
se recoge que el electroshock produce TEC. En 1978 la APA publica The Practice
pérdida de memoria, cambios en las ondas of Electroconvulsive Therapy
cerebrales, daños en las células y lesiones es improbable que los aspectos biológicos de
vasculares. Los autores relacionan estos la enfermedad desaparezcan sin una inter-
PUNTO CRÍTICO / “Terapia electroconvulsiva” 105
Catatonía
diagnóstico clínico con independencia de su origen.
Depresión
sin síntomas psicóticos, cuando existe inhibición intensa, alto
riesgo de suicidio o ansiedad/agitación severas, y cuando la
depresión precisa de una respuesta rápida o está en riesgo la
vida del paciente.
antidepresivos.
Esquizofrenia y otros
trastornos psicóticos o catatonía).
que presentan:
- Resistencia al tratamiento farmacológico antipsicótico.
- Imposibilidad de administrar la medicación antipsicótica por
el estado clínico del paciente.
- Existencia de efectos indeseables graves de los
antipsicóticos.
- Síndrome neuroléptico maligno.
- Existencia de clínica afectiva predominante y resistente.
Manía -
estuvieran contraindicados.
112 Luis Jiménez Treviño
for Mood and Anxiety Treatments (CANMAT) Clinical guidelines for the management of major
depressive disorder in adults. IV. Neurostimulation therapies. J Affect Disord. 2009; 117(Suppl
1):S44-53.
3. Fink M. ECT has proved effective in treating depression. Nature 2000; 403:826.
2005; 20(3):195-200
and meta-analysis. The UK ECT Review Group. The Lancet.Volume 361, Issue 9360, 8 March
2003, Pages 799-808
with acute electroconvulsive therapy (ECT): a Consortium for Research in ECT (CORE) report.
J Clin Psychiatry. 2004; 65:485-491.
10. Kennedy S, McIntyre R, Fallu A, Lam R. Pharmacotherapy to sustain the fully remitted state. J
Psychiatry Neurosci. 2002; 27(4): 269–280.
electroconvulsive therapy: a systematic review and pooled analysis. Acta Psychiatr Scand.
2017; 135(5):388-397.
2013.
Cuad. Psiquiatr. Comunitaria,
Vol. 19, N.º 1, pp. 113-116, 2022
Terapia Electroconvulsiva:
Una Mirada Crítica
David González Pando.
Enfermero especialista en salud mental y doctor en Psicología.
Todos los profesionales de la salud mental (1). Yo, el capítulo octavo de Modelos de
buscan lo mejor para sus pacientes. Los (2).
psiquiatras, anestesistas, enfermeras y enfer-
meros que participan en la aplicación de esta Discurso y experiencia se retroalimentan
técnica tienen las mejores intenciones para constantemente. Donde otros veían cam-
bios conductuales espectaculares, yo veía
lo que hacen con base en los consensos y la efectos transitorios que probablemente des-
- aparecerían en pocas semanas. Cuando no
sionales que mantienen su reserva ante la
técnica; aquellos que sencillamente no la no tenía mucho que ofrecer; otros lo que
recomendarían en ningún caso, o quienes
consideran que debería tenerse como un subyacente y en consecuencia la necesidad
procedimiento de uso restringido, limitado de más sesiones.
a situaciones en las que se han ensayado sin
éxito los numerosos tratamientos empírica- Todos los pacientes propuestos para este
mente apoyados disponibles, también. La tratamiento eran objeto de un estudio
controversia no se explica por cuestiones minucioso; la indicación clínica debía estar
gremiales, pues encontraremos psiquiatras, bien fundamentada y ser aprobada. Quiere
psicólogos, enfermeros y otros profesionales decirse que el rigor profesional era excelente
de la salud mental tanto entre los defensores entre los psiquiatras de esta unidad.
como entre los críticos. Tras una experiencia de entonces quince
Cuando, como enfermero especialista en años con personas con trastorno mental
salud mental en la Unidad de Psiquiatría del grave, me resultaban inconcebibles recu-
Hospital Universitario Central de Asturias, peraciones rápidas y milagrosas. De hecho
comencé a acompañar a pacientes a reali- no vi ninguna. Algunos pacientes, especial-
zar sesiones de TEC, hace algo más de diez mente con trastornos afectivos, mostraban
cambios notorios desde la primera sesión;
en la utilidad de esta técnica que observaba otros apenas ninguno. En paralelo, donde
entre mis compañeros. Ellos probablemente otros observaban mejoras en el ánimo depre-
habían leído el Consenso Español de la sivo, yo solo veía efectos secundarios tran-
Sociedad Española de Psiquiatría de 1999 sitorios (principalmente hipomanía inducida
114 David González Pando
por la TEC). Qué decir de las numerosas Más aún, estudiamos algunas implicaciones
indicaciones de uso. Lo que para otros repre- que podrían derivarse del uso de TEC como
sentaba una muestra de la versatilidad de la paradigma de una aproximación biológica
técnica, una fortaleza, para mí indicaba falta a los trastornos mentales, como un posi-
de fundamentación, una debilidad, pues al ble incremento del estigma o la pérdida
de valor que los profesionales de la salud
mental atribuyen a las circunstancias vita-
psiquiatría es una profesión de fe, decía
Schneider. resultan fundamentales para comprender
los problemas psicopatológicos. Esto nos
Con los síntomas psicóticos positivos tam-
parecía especialmente preocupante en los
poco observé cambios reseñables. Tras un
profesionales en formación. Así, con un
breve periodo de amnesia al regresar a la
título deliberadamente provocador, plantea-
Unidad de Psiquiatría, los pacientes con
mos algunos argumentos para profesionales
esquizofrenia retomaban su habitual deli-
irreverentes en el campo de la salud mental
rio paranoide. En algún caso, sí hubo una
(6), donde se ofrece un decálogo que permite
reducción de estos síntomas, pero también
entender por qué continúa utilizándose esta
transitoria.
forma de tratamiento en la actualidad. Uno
Cuando tras las jornadas asturianas de la AEN de esos diez puntos recoge la existencia
(Asociación Española de Neuropsiquiatría)
de 2019 surgió el debate sobre algunos a favor de la TEC cuya robustez es más
contenidos del Consenso Español reciente- aparente que real.
mente publicado (3), como el concepto de
A nuestro juicio, las evidencias de efectivi-
“inhibición terapéutica” o la necesidad de
dad de la TEC se relacionan inversamente
promocionar y extender la técnica garanti-
con la calidad de la evidencia disponible.
zando su disponibilidad universal, un grupo
Los metaanálisis aportan evidencia incues-
de compañeros consideramos que sería útil
tionable, pero no si se elaboran con estudios
realizar un trabajo de revisión. Aquel capí-
donde la técnica no se compara frente a un
tulo octavo podría haber quedado obsoleto.
placebo que implique toda la parafernalia
Sin embargo, los resultados de ese trabajo no y ritual terapéutico en idénticas condicio-
nes (sedación sin descarga). No se trata de
que no se había realizado ni un solo estu- paranoia metodológica, sino de considerar
dio siguiendo la propuesta metodológica de que, por su ubicuidad, el efecto placebo
campa a sus anchas en salud mental y debe
controversia sobre efectividad y que, por lo controlarse rigurosamente. Además, las
tanto, el uso de la TEC seguía sin ser cohe- expectativas, como procesos mentales que
rente con un enfoque basado en la evidencia producen efectos reales, pueden ser mani-
(5). Dicho de otro modo, que a día de hoy puladas por consenso. La propia Sociedad
continúa existiendo un desequilibrio entre Española de Psiquiatría Biológica (SEPB)
las creencias de quienes utilizan TEC y los (3), reconoce que las expectativas tienen un
resultados de la investigación.
PUNTO CRÍTICO / “Terapia Electroconvulsiva: Una Mirada Crítica” 115
TEC e invita abiertamente a potenciar este riguroso. Este principio ha sido reducido en
la práctica a la obtención del consentimiento
ciencia y asistencia. Para preservar la vali- informado, un consentimiento cuyo proceso
debería revisarse por varias razones. Estas
prioridad el control metodológico, de modo razones incluyen la necesidad de informar
que las expectativas de pacientes y familia- mejor sobre los efectos de la alteración de la
res representan una amenaza. Sin embargo, memoria en la experiencia vivida, que puede
para el clínico esta variable extraña es un cambiar de forma profunda implicando una
aliado a potenciar incluso mediante accio- transformación en cómo uno se comporta
nes deliberadas. Ello implica el riesgo de y orienta sus acciones en el mundo (13).
observar lo que uno mismo propaga sin Además, debería informarse al paciente de
la controversia existente sobre la efectividad
procedimiento que se promueve tiende a de la TEC a largo plazo, cuya evidencia no
obtener resultados favorables por sí mismo. existe, ofreciendo siempre la opción de tra-
En resumen, la efectividad de la TEC ha sido tamientos alternativos con mayor evidencia
reiteradamente sobreestimada en la historia y seguridad (14).
reciente de la psiquiatría.
A nuestro juicio, la TEC, como otros tra-
Por otra parte, consideramos que el concepto
tamientos conocidos clásicamente como
de “inhibición terapéutica” carece de fun-
-
damento para la TEC (6). De hecho, si a
cacia personal y autonomía que caracteriza
nivel institucional hubiera que hacer uso de
un funcionamiento mental sano, refuerza
un concepto así, habría que reservarlo antes
una concepción reduccionista de los proble-
que nada para los tratamientos psicológicos
empíricamente apoyados, pues, a modo de mas psicopatológicos y puede incrementar
ejemplo, no llega al 10% la proporción de el estigma social. Ni siquiera en el riesgo de
pacientes psicóticos que tienen acceso a este suicidio, donde se había propuesto como un
recurso (7). recurso de primera elección en pacientes de
alto riesgo (3) la TEC parece aportar venta-
Finalmente, estudiamos de forma exhaustiva jas (15, 16), e incluso para algunos autores
podría incrementarlo (17).
el punto de vista bioético (8), al advertir que
trabajos previos (9,10,11) habían sido rea- Por todas estas razones consideramos que la
lizados por defensores de la técnica. Estos TEC no debería anteponerse nunca a otras
opciones terapéuticas que tienen respaldo
y seguridad, apuestan en sus trabajos por un
mayor empleo de la misma. Aun cuando se asistencial es necesario seguir apostando
por el paradigma comunitario, centrado en
de la bioética recogidos por Beauchamp y la persona, en la perspectiva de la recupe-
Childress (12), el principio de autonomía ración y en la mejora de la funcionalidad y
resultaría especialmente crítico en un examen la calidad de vida.
116 David González Pando
2. Read J. La terapia electroconvulsiva. En: Read J, Mosher LR y Bentall RP. Modelos de locura.
5. Read J, Arnold C. Is electroconvulsive therapy for depression more effective than placebo?
2017;19(1):5–23.
9. Fink M. Is the practice of ECT ethical? The World Journal of Biological Psychiatry. 2005;6(2):38–43.
2013.
13. Seniuk P. I’m shocked: Informed consent in ECT and the phenomenological-self. Life Sciences,
Society and Policy. 2018;14(5): 1–19.
15. Peltzman T, Shiner B, Watts BV. Effects of electroconvulsive therapy on short-term suicide
mortality in a risk-matched patient population. Journal of ECT. 2020;36(3): 187–192.
16. Watts BV, Peltzman T, Shiner B. Electroconvulsive Therapy and death by suicide. The Journal
of Clinical Psychiatry. 2022;83(3):21m13886.
17. Munk-Olsen T, Laursen TM, Videbech P, Mortensen PB, Rosenberg R. All-cause mortality among
recipients of electroconvulsive therapy: Register-based cohort study. The British Journal of
Psychiatry. 2007;190(5): 435–439.
Cuad. Psiquiatr. Comunitaria,
Vol. 19, N.º 1, pp. 117-120, 2022
INFORMES
Estrategia de Salud Mental del Sistema Nacional de
Salud (2022-2026)
ANÁLISIS DE SITUACIÓN
Antecedentes
Diversos organismos internacionales, entre ellos la OMS, así como las observaciones de los
y las profesionales en su atención directa a las personas, alertan de que el incremento del
sufrimiento psíquico y de diversos problemas de salud mental está estrechamente vinculado
a los estilos, condiciones de vida y a todo el conjunto de factores denominados determi-
nantes sociales, que se suman a los determinantes biológicos, para hablar de determinantes
biopsicosociales, por lo que es necesario entender la salud mental como un aspecto más del
bienestar de cada persona. En el diseño de la presente estrategia se incluye la concepción
biopsicosocial, formulada por Engel, que posibilita un abordaje actualizado y con perspectivas
de futuro en su desarrollo .
Los determinantes de la salud mental y de los trastornos mentales incluyen no solo caracte-
rísticas individuales, tales como los factores neurobiológicos, la interacción entre la genética
del individuo y el ambiente (epigenética), la capacidad para gestionar los pensamientos,
118 INFORMES
emociones, comportamientos e interacciones con los demás, sino también factores sociales,
culturales, económicos, políticos y ambientales, como las políticas nacionales, la protección
social, el nivel de vida, las condiciones laborales o los apoyos sociales de la comunidad.
Los determinantes de la salud de la población pueden conceptualizarse como estratos de
factores relacionados con los estilos de vida, las redes sociales y comunitarias, las condicio-
nes de vida y de trabajo y las condiciones socioeconómicas, culturales y ambientales. Para
establecer prioridades y proponer intervenciones y estrategias adecuadas, se debe evaluar la
importancia de la contribución de distintos factores de riesgo a la carga total de enfermedad.
la UE. En el informe publicado en 2018 se estimaba que el coste total de los problemas de
salud mental representa el 4% del PIB en los países de la UE.: 190.000 millones de euros
La atención a la salud mental debe girar, por ser coherente con una cuestión de derechos,
hacia un enfoque de atención centrada en la persona, lo que implica dotar de protagonismo
en su proceso de recuperación a la propia persona que ha experimentado problemas en su
salud mental. Es imprescindible evitar percepciones de la persona con problemas de salud
mental como solamente alguien que sufre, poniendo énfasis en todo momento en sus forta-
centrada en la persona.
Este modelo requiere un cambio en las relaciones entre las personas con problemas de salud
mental y los profesionales de los ámbitos sanitario y social. Se precisa un giro hacia una
posición de colaboración y construcción conjunta de planes de tratamiento, presentando
desde el ámbito profesional las opciones terapéuticas existentes y apoyando a la persona
con problemas de salud mental en la elección del camino de recuperación más adecuado a
sus propios intereses y posibilidades.
En 2018 se publicó la evaluación del modelo comunitario de atención a los trastornos men-
tales en España que se proponía en la Estrategia en Salud Mental del SNS aprobada en el
CISNS en 2009. Las conclusiones más importantes de este estudio fueron que las carencias
más importantes en la implementación del modelo comunitario en 2014 se relacionaron con
la ausencia de una perspectiva de salud pública, con la mala gestión y rendición de cuentas,
y la ralentización del desarrollo de equipos, servicios y redes de servicios de orientación
comunitaria.
Otras prácticas, como la historia clínica informatizada, los planes individualizados de atención
y el tratamiento asertivo comunitario, incrementaron su cobertura en algunas comunidades
a pesar de la recesión.
de salud mental” propone las acciones siguientes en relación con la educación y formación de
los y las profesionales, usuarios/as, cuidadores/as y la comunidad (se citan de forma literal):
- Los que diseñan e imparten la formación a los profesionales de salud mental tendrían
que cooperar sistemáticamente con los usuarios y cuidadores.
- Buscar formadores procedentes de diferentes campos, por ejemplo: de minorías étnicas
salud mental.
120 INFORMES
La aprobación de la Ley General de Sanidad de 1986 supuso uno de los mayores hitos en
la atención a la salud mental en el Estado Español al equiparar la atención de las personas
con trastorno mental con la atención al resto de problemas de salud. Dicha Ley incorporó
las líneas generales del Documento general y recomendaciones para la reforma psiquiátrica
y la atención a la salud mental, del Plan para la Reforma de la Asistencia Psiquiátrica y
de Salud Mental de 1985. La implementación de dichas recomendaciones fue desigual, en
particular en lo que respecta al desarrollo de algunos términos como, por ejemplo: servicios
comunitarios, integración, rehabilitación, interconsulta, psicoterapia, trabajo comunitario,
prevención, evaluación y calidad.
RESEÑAS
Nadie nace en un cuerpo equivocado es el título del polémico libro escrito por José Errasti y
Marino Pérez Álvarez, y prologado por la catedrática de Filosofía Moral y Política, Amelia
A través de los capítulos del libro, los autores muestran cómo los niños y adolescentes no
nacen en cuerpos equivocados que no se ajustan a lo-que-sienten, sino en sociedades que
sostienen discursos equivocados en los que aquéllos se ven inmersos y que, en ocasiones,
pueden llevar a grandes sufrimientos. Con una brillante solidez teórica, sin perder el humor y
la claridad expositiva, se repasa cuál es el origen de estos discursos y cómo han ido calando
en las formas de vida actuales sin tan siquiera darnos cuenta, de manera que pensamos desde
ellos, por defecto, o, más bien, somos pensados por ellos.
El recorrido comienza por explicitar cómo el sexo ha ido perdiendo su función reproductiva
hasta quedar esta función eclipsada por la subjetividad del individuo, acorde con el espíritu
de los tiempos. Precisamente, ocurre que en la actualidad se dan las condiciones para que,
añadidas a este sexo desquiciado, como lo denominan los autores, surjan toda una serie de
problemáticas relacionadas con el género y éstas se acompañen de unas ayudas particula-
res, en detrimento de otras. Ocurre que la vida en la ciudad moderna, las redes sociales,
122 RESEÑAS
la publicidad y los estilos de vida que se ofrecen en la sociedad neoliberal, llevan a los
individuos a hacer del cultivo de su yo la tarea de su vida. Y ese yo pasa por diferenciarse
del resto bajo la retórica narcisista del «yo auténtico» y del «ser especial». La ironía reside
en que para sentir que uno forma parte de la sociedad tiene que diferenciarse y, con ello,
distanciarse de los individuos que la conforman. La soledad es otro de los problemas a los
que los individuos se ven abocados debido al individualismo imperante, y se ha convertido
en una constante en las consultas de salud mental. La paradoja es que tal obsesión por el yo
es en realidad una obsesión por el reconocimiento de los demás de dicho yo.
Desde este punto de partida, se llega a explicar qué es el movimiento queer, cómo ha surgido
y cuáles son sus intereses y sus sombras. Todo ello apoyado por testimonios de personas
transexuales que han recibido como única solución a su problema la transición o terapia
forma estos nuevos sufrimientos, como es el caso de la disforia de género, y cuál es su sen-
cambio de los cuerpos de niños y adolescentes como primera y única línea de tratamiento,
se propone la exploración, la prudencia y la espera atenta, algo que en psiquiatría y psico-
logía clínica resulta esencial. Los autores dedican las últimas páginas del libro a tratar de
desentrañar qué hay detrás de nuevos términos tales como terfa o transfobia, los cuales en
muchas ocasiones se utilizan como forma de silenciar a todo aquél que esté disconforme
con la doctrina queer.
Un libro que, como ya he señalado al principio de este texto, resulta necesario para profe-
sionales de la salud, profesores, familias, estudiantes y, en general, para el conjunto de la
sociedad. Hacía tiempo que los profesionales nos encontrábamos frente al problema, pero
en silencio. Las únicas voces que se atrevían a alzarse eran las de feministas y familias
indignadas con todo lo que estaba pasando. Tan necesario se ha hecho, que el libro agotó
su primera edición antes de salir a la venta y actualmente se encuentra editando su cuarta.
Como agradecida antigua alumna de José Errasti y Marino Pérez, al tiempo que amiga,
rescato los versos de Ángel González que describen lo que ellos siempre me han enseñado:
jamás en el dominio
Carmen Rodríguez-Muñiz
Psicóloga sanitaria
Cuad. Psiquiatr. Comunitaria,
Vol. 17, N.º 1, pp. 123-125, 2022
IN MEMORIAM
Cuenta la historia que la rebelión militar del 36 cogió a su padre en Madrid. A pesar de
sus convicciones republicanas, y creo socialistas, decidió pasar a la zona nacional por la
familia. Fue represaliado y se salvó de la condena gracias a la esposa, de familia tradicional
salmantina. Ella se había formado en la institución libre de la enseñanza pero sus esperanzas
de una vida activa culturalmente se vieron truncadas con la situación de posguerra española.
Partimos pues de un padre forense – psiquiatra, de mentalidad progresista que desarrolla su
actividad profesional por diversos pueblos (La Cañiza, Béjar) hasta llegar a Salamanca. La
madre queda encerrada en casa, sin ningún interés por la vida de ama de casa. Miguel Ángel
como primogénito, y probablemente hijo preferido, parece mantener una peculiar relación
con el sufrimiento materno.
Miguel Ángel como era de esperar estudia Medicina y se hace psiquiatra. En la época uni-
versitaria hizo campamentos de verano en Alemania y después de su primera experiencia
profesional en Oviedo se marchó a Francia. En el siglo XX hasta los años 60, los profesio-
nales, y en especial los psiquiatras, viajaban a Alemania en busca de una buena formación,
a partir de entonces la peregrinación se dirigió a países anglosajones. Si bien en Psiquiatría
se produjo también el desplazamiento a Francia cuyas instituciones ofrecían no solo un
sólido bagaje psiquiátrico clásico sino también formación psicoterapéutica psicoanalítica y
de psiquiatría institucional.
por el Dr. J.L. Montoya, cuando se sectoriza el hospital, se abren consultas externas en las
áreas y se trata de favorecer la participación de los pacientes.
En la reforma del psiquiátrico de Conxo, Santiago, en el año 72, también dirigida por el Dr.
Montoya. Siendo entonces jefe clínico, teniendo como jefe de Servicio al Dr. José García
González.
otras entonces lo hizo con el despido y represión política de numerosos trabajadores. Volvió
a Francia donde formó familia.
Posteriormente mantuvo posiciones críticas de izquierda., cada vez más cercanas al PSOE.
deleguen la mayor parte de su labor asistencial a los subordinados pero él, a pesar de su
tendencia al desorden en la organización de su vida personal y profesional, siguió atendiendo
nuevos casos y siendo el referente terapéutico de numerosos pacientes.
Su formación psiquiátrica era amplia y solida, y además era un lector bulímico cuyo interés
se orientaba especialmente a la historia, inevitablemente la II República y la Guerra Civil
Española, pero también la historia europea. Poseía además una “cultura general” extensa
(literatura del XIX, en especial francesa, rusa, …), una abundante fantasía y aunque no
dedicaba atención a la vida cultural (exposiciones, conciertos, danza...) era sorprendente su
capacidad de entender el sentido de las manifestaciones artísticas.
Sobre todo y fundamental en la vida era un buen conversador; tanto a la hora de aproximarse,
de una manera bastante tradicional, a las mujeres como a la hora de compartir sobremesa
tras una buena comida.
Jose Filgueira
Psiquiatra jubilado
Cuad. Psiquiatr. Comunitaria,
Vol. 19, N.º 1, pp. 126-129, 2022
NOTICIAS BREVES
Asturias: en marcha un nuevo plan de salud mental
La administración sanitaria ha iniciado un proceso de consultas para el desarrollo de un
nuevo Plan de Salud Mental que sustituya al de 2015-2020. El 14 de diciembre de 2021
se realizó una consulta online para avanzar en este proceso.
con la psiquiatría española, llegando a ser miembro del consejo de redacción de la revista
de la AEN. Su libro “Un siglo de psiquiatría”, traducido al español, fue muy difundido
entre los psiquiatras españoles.
para reducir la brecha en salud mental) dentro de los estudios universitarios para obtener
los títulos de medicina, enfermería, psicología,..etc. El objetivo es que los profesionales
de salud conozcan este programa dentro de su formación de pregrado.
La mejora de la Atención a la Salud Mental en todos los niveles del Sistema Nacional de
Salud -tanto en atención hospitalaria como primaria- es una de las principales medidas
incluidas en el nuevo plan, junto al impulso a la Formación Sanitaria Especializada en
salud mental, la sensibilización y la lucha contra la estigmatización, la prevención de las
conductas adictivas, la promoción del bienestar emocional -poniendo el foco en la infancia,
la adolescencia y otros grupos vulnerables como las mujeres o los mayores- y la mejora
de la prevención, la detección y la atención de la conducta suicida.
REUNIONES CIENTÍFICAS
22 Congreso mundial de psiquiatría.
3-6 agosto 2022
Bangkok (Thailandia)
https://wcp-congress.com
REVISTAS AUTONÓMICAS
Editorial ................................................................................................................ 5
Iñaki Markez ..................... 7
de un paciente.
Jorge Serna Yepes, Cesar Pérez Franco, Pilar García-Margallo Ortiz de Zarate ............. 22
Pre-ocupaciones .................................................................................................
Miren Viña ..................................................................... 71
.......... 96
132 REVISTAS AUTONÓMICAS
Historia .................................................................................................................
Francisco Balbuena Rivera 101
y psiquiatría.
Julia Álvarez-Arenas, Ana Conseglieri ............................................................................. 111
Reda Rahmani, Sonsoles Pacheco, Juan Medrano, Oscar Martínez, Iñaki Markez,
Luis Pacheco ................................................................................................................... 124
.............................................. 135
NORMAS DE PUBLICACIÓN
Los manuscritos constarán de las siguientes partes, cada una de las cuales se iniciará en una
página independiente:
1. Primera página, que incluirá por orden, los siguientes datos: título del artículo (en
español e inglés); nombre y apellido(s) de los autores, indicando el título profesional,
centro de trabajo, dirección para correspondencia, teléfono, fax y cualquier otra indicación
adicional que se estime necesaria.
2. Resumen, de extensión no inferior a 150 palabras ni superior a 250. En los trabajos
originales se recomienda presentarlo en forma estructurada (introducción, métodos,
resultados y conclusiones). Irá seguido de 3 a 10 palabras clave seleccionadas
breves.
3. 4. Discusión: exposición de la opinión de los autores sobre el tema desarrollado,
destacando la validez de los resultados, su relación con publicaciones similares,
su aplicación práctica y las posibles indicaciones para futuras investigaciones.
pasar al título.
explicación al pie de cualquier abreviatura que se utilice. Se incluirá una sola tabla o
PROCESO DE EDICIÓN
Para una información más detallada, consulten «Requisitos de uniformidad para manuscritos
presentados para publicaciones en revistas bio-médicas». Arch Neurobiol (Madr) 1998; 61
(3): 239-56 y Medicina Clínica. Manual de estilo. Barcelona: Doyma; 1993.
135
136
137
ARTÍCULOS ORIGINALES
.................................................................................................................. 37
10 BÁSICOS 10 ............................................................................................................. 86
Repensar la contención
José Manuel Lalana Cuenca ............................................................................................ 93
INFORMES
Sobre la eutanasia. (Comisión Sociosanitaria de Comités de Ética de Euskadi) ............ 99
RESEÑAS
Ciencia y pseudociencia en psicología y psiquiatría. (Marino Pérez Álvarez) ................. 106
Manual de tratamientos psicológicos –adultos-. (Eduardo Fonseca Pedrero [Coord.]) .. 108
138
ARTÍCULOS ORIGINALES
A diez años de la sanción de la Ley Nacional de Salud Mental: coordenadas para una
cartografía posible. (Silvia Faraone y Alejandra Barcala) ................................................ 115
IN MEMORIAM
.......................................................................................... 124
Diana Rabinovich (1943-2021) ........................................................................................ 127
Raúl Fernández Vilanova (1943-2020) ............................................................................. 129
Nicolás Caparrós (1941-2021) ......................................................................................... 131
Nicolás Caparrós (1941-2021) ......................................................................................... 134
Junta Directiva:
Miembros de honor:
Franco Rotelli (Trieste-Italia), José Luis Montoya Rico (Alicante)(+), Federico Menéndez
Osorio (A Coruña) e Iñaki Markez (Bilbao).
SOLICITUD DE INGRESO EN LA
ASOCIACIÓN ESPAÑOLA DE NEUROPSIQUIATRÍA
(Y en la Asociación Asturiana de Salud Mental)
Nombre ............................................... 1º Apellido ................................................
2º Apellido ..........................................
profesional de la Salud Mental, con título de ...............................................................
que desempeña en (centro de trabajo) .........................................................................
y con domicilio en c/ ...............................................................................................
Población ................................. D.P. ....................... Provincia .............................
Tel ........................................... e-mail ................................................................
SOLICITA:
Su ingreso en la Asociación Española de Neuropsiquiatría y en la Asociación Asturiana de Salud
Mental, para lo cual es propuesto por los miembros:
D ........................................................................................................................
D ........................................................................................................................
(Firma de los dos miembros)
Firma:
Fecha / .................. / ............
Firma