Motivo Periodo Frase

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INTRODUCCION

Seguramente usted habrá escuchado alguna vez una sinfonía, un nocturno, una
fuga, o una sonata. La diferencia básica entre estas obras, es la estructura, la
ordenación de sus partes, así como el desarrollo de las ideas musicales que
encierran.
Establecer estas diferencias, es el propósito de este módulo.

FORMAS MUSICALES
Las obras musicales, como cualquier obra de arte, poseen una estructura
determinada. Por estructura entendemos un esquema en la organización de los
elementos musicales, que da por resultado la coherencia y unidad de una
composición, comparable al plano que traza un arquitecto para la construcción de
una escuela, un templo o un edificio de departamentos. Así, en música, cada una
de estas formas o “planos” establecen diferencias en su organización y dan por
resultado rondós, sonatas, variaciones o fugas.
Estas formas o esquemas musicales, fueron el resultado de un desarrollo gradual,
que a través de siglos se fue produciendo en manos de muy diversos compositores.
Los compositores reconocen la validez de estas formas convencionales que el
tiempo ha consagrado y las aprovechan para organizar sus pensamientos
musicales, como una especie de apoyo que asegura la continuidad y coherencia de
la obra. Así, en la misma forma que el escritor puede escribir una novela, un ensayo
o un cuento, el poeta un soneto, una décima o un romance, el músico puede
componer una sonata, un tema con variaciones, o una fantasía.
Ahora bien, ¿cuál es el principio de toda esta estructura musical? La célula de toda
esta organización es el “Motivo”; un motivo es el primer elemento formal, que por su
constitución puede ser reconocido como una unidad. En otras palabras, el motivo
es la unidad formal más pequeña de una obra musical y debe tener un movimiento
rítmico y melódico muy pronunciado.
El motivo está formado por dos o más notas que combinando la diferente duración,
grados de apoyo, y entonación de sus notas, o sea los elementos rítmicos, métricos
y melódicos, presentan una personalidad propia.
Uno de los motivos más conocidos por todos nosotros, es el que aparece al principio
de la V Sinfonía de Beethoven.

Después del motivo, como punto de partida de las estructuras musicales, tenemos
el “tema”. El tema está formado por un grupo de motivos.

Así, con la repetición de un motivo, vemos aparecer un tema en el mismo


movimiento de la sinfonía.

Cuando el tema es cantable, es decir, si tiene cierta fluidez propia para el canto,
se le llama simple melodía.

Podemos considerar el motivo, como una especie generador de música, como un


estímulo, pues sus elementos presentan la posibilidad de innumerables variaciones
en la imaginación del compositor. Estas variaciones pueden ser cambios de
armonización, modificaciones rítmicas, repeticiones, aumentaciones o
disminuciones del motivo, cambios de los timbres orquestales, imitaciones, etc.

Otro término musical que nos interesa al hablar de las formas, es la frase musical.

Entendemos por frase musical una división pequeña o sección de una línea musical
(melodía) comparable a una oración en el lenguaje. Una melodía bien puede estar
compuesta por varias frases musicales. Estas a su vez pueden dividirse en algunos
casos en dos semi-frases, o medias frases llamadas arsis y tesis, o pregunta y
respuesta.

Fraseo es la ejecución justa de una frase musical, de acuerdo con las indicaciones
del compositor. Un buen frase musical, rasgo muy importante en el ejercicio de la
música, incluye la observación de todos los signos musicales, la distribución de los
acentos, el hábil manejo del arco los instrumentos de cuerda, el control de la
respiración en los instrumentos de viento y en el canto, así como el empleo de
pequeñas pausas, entre las frases musicales ejecutadas por otros instrumentos,
pausas que equivalen a la respiración natural. Un buen fraseo, un fraseo expresivo
por sobre todo, debe traducir las intenciones ocultas del compositor.

No hablaremos de otros términos resultantes de dividir la línea musical en otras


partes, como el período o semi-período. Solamente queremos aclarar que dada la
infinita variedad de situaciones y condiciones que se encuentran en la música, los
términos motivo, tema, frase, y período, se emplean con cierta libertad, y no siempre
en el mismo sentido. Sólo con las melodías de estructura muy simple y clara, pueden
estos términos usarse en una forma consistente. Para evitar confusiones, hemos
tratado de abarcar las características más generales en la definición de estos
términos.

Referencia:

SEP. (1983). APRECIACIÓN ESTÉTICA MÚSICA. MÉXICO: SEP.

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