Representaciones Sociales
Representaciones Sociales
Representaciones Sociales
políticas educativas
Revista académica evaluada por pares, independiente,
de acceso abierto y multilingüe
Citación: San Román, S., Vecina, C., Usategui, E., del Valle, A. I., y Venegas, M (2015).
Representaciones sociales y orientación educativa del profesorado. Archivos Analíticos de Políticas
Educativas, 23(128). http://dx.doi.org/10.14507/epaa.v23.2088
orientadora1, así como de los estudios previos en cuyos resultados nos hemos apoyado para
avanzar en nuestras hipótesis. Nuestro planteamiento parte de la consideración de las
transformaciones sociales y su influencia en la institución escolar, favoreciendo un contexto de
incertidumbre para el profesorado, consideramos claves las representaciones sociales como guía
de su actuación en la relación con los alumnos, pudiendo determinar la orientación escolar y
profesional que sobre éstos ejercen. Como punto final, se pretende analizar desde una mirada
sociológica, la identificación de criterios y posibles modelos de orientación desplegados y
practicados por los docentes, como un fenómeno que se construye socialmente.
Para acabar se presentan brevemente los resultados de estudios previos realizados por el equipo
de investigación, referentes a las representaciones sociales de los alumnos en el profesorado,
cuestiones que hacen plantear el camino que toma la orientación de dichos estudiantes. Estudios
que nos han aportado conclusiones para la configuración del trabajo de investigación actual.
Palabras clave: Orientación educativa; orientación laboral; representaciones sociales; función
docente; profesorado de secundaria; cambio social
1 Se trata de un proyecto de I+D+i, Contexto Socioeconómico y Orientación Educativa y Profesional del Profesorado
de Secundaria, aprobado por el Ministerio de Economía y Competitividad (España), para su realización
durante el período 2014-2016, con referencia CSO2013-47168-R, bajo la dirección de la investigadora
principal Sonsoles San Román Gago (Universidad Autónoma de Madrid).
2 This is an R + D + I, Socioeconomic and Educational and Vocational Guidance Teacher of Secondary, approved by
the Ministry of Economy and Competitiveness (Spain), for implementation during the 2014-2017 period,
with reference CSO2013-47168-R, under the direction of principal researcher Sonsoles San Roman Gago
(Autonomous University of Madrid).
3 Este é um de I + D + i, Socioeconômico e educacional e Orientação Profissional do professor de secundário, aprovado
pelo Ministério da Economia e Competitividade (Espanha), para implementação durante o período 2014-
2017, com referência CSO2013-47168-R, sob a direção de investigador principal Sonsoles San Román
Gago (Universidade Autónoma de Madrid).
Representaciones sociales y orientación educativa del profesorado 3
para guiar o seu desempenho em relação aos alunos, a escola pode determinar a orientação e eles
exercem profissional sobre. Como ponto final, que tem como objetivo analisar a partir de uma
perspectiva sociológica, identificando possíveis abordagens e modelos implantados orientação e
praticadas por professores, como um fenômeno que é socialmente construído.Finalmente, os
resultados de estudos anteriores pela equipe de pesquisa sobre as representações sociais dos
alunos em professores, levantar questões que tornam o caminho que leva a orientação destes
estudantes são brevemente apresentados. Estudos que nos trouxeram para configurar as
conclusões do trabalho de pesquisa atual.
Palavras-chave: Orientação educacional; orientação profissional; representações sociais; ensino
profissional; professores do ensino secundário; mudança social
A esta situación hay que sumar la aceleración de los cambios culturales, sociales y la
variación de los modelos de comportamiento que están provocando la introducción de las
nuevas tecnologías en nuestras sociedades. Son sociedades abiertas, en las que los flujos de
información, la innovación permanente, la cultura de la imagen y de la virtualidad rigen y afectan
a las instancias más cotidianas. Una de las transformaciones importantes que se dan dentro de la
sociedad de la información es que el aprendizaje no depende tanto de lo que está sucediendo en
la escuela, como de la correlación entre lo que pasa en la escuela y lo que pasa en el resto de los
lugares donde los niños y las niñas se desenvuelven. La escuela ya no es el principal proveedor de
conocimiento, ni tan siquiera aquel que los chavales y sus familias respetan más. Además, la vida
social está cambiando en tantos aspectos y de forma tan rápida que las respuestas que se dan
desde la escuela se quedan obsoletas enseguida. Y el alumnado con los recursos de que dispone,
tiene una posibilidad de acceder a la información mucho más rápida, más certera y más atrayente
que la capacidad de transmisión tradicional que tiene y tenía un profesor (Vecina, San Román y
Doncel, 2015).
Esta velocidad en la producción de nuevo conocimiento, provoca que, a diferencia del
pasado, los conocimientos e informaciones adquiridos en el período de formación inicial en las
escuelas o universidades no permitan a las personas desempeñarse por un largo período de su
vida activa. La obsolescencia será cada vez más rápida, obligando a procesos de reconversión
profesional permanente a lo largo de toda la vida.
En estas condiciones, y para decirlo rápidamente, la educación ya no podrá estar dirigida
a la transmisión de conocimientos y de información, sino a desarrollar en el alumnado la
capacidad de producirlos y utilizarlos, a capacitarle a construir y a promover aprendizajes e,
incluso, a construir su propia identidad.
Por otra parte, la labor del profesorado, como facilitador de aprender a aprender y a ser,
viene reforzada por los cambios en la organización del trabajo, que están obligando al
profesorado a cambios curriculares profundos (San Román, Frutos y Pascual, 2012). Desde el
mundo laboral se demanda un trabajador polivalente, capaz de adaptarse a situaciones
cambiantes y a diferentes tareas, autónomo, pero capaz de trabajar en equipo. Es decir, se
imponen formas de trabajar que obligan al sistema educativo a transitar desde las calificaciones a
las competencias, desde la rigidez de los contenidos a la solución de problemas, al empleo de
técnicas y tácticas creativas, al fomento de la iniciativa personal y al trabajo cooperativo.
profesiones. Este principio del sistema educativo, introducido en España por la ley General de
Educación de 1970, adquiere una mayor presencia en la citada LOGSE, que lo ratifica como
clave fundamental de la actividad y la calidad educativa, posteriormente más desarrollado en la
Ley Orgánica de Educación (LOE) 5 de 2006, que formaliza su presencia en los distintos planos
de la actividad educativa como parte de una educación integral. Los cambios legislativos inciden
en la concepción de la función educativa y docente, trastocando también el marco de la
orientación; se trata de propuestas legislativas con cierto contenido que incluso podríamos
catalogar de ideológico, así la Ley de la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE)6 de 2013 ha
recibido una fuerte oposición desde diferentes ámbitos sociales y políticos, con la denominada
“Marea Verde”, manifestaciones de protesta ante recortes y otras cuestiones, entre las que se
encuentran la propia ley y los cambios que implica para la comunidad educativa en general, junto
al predecible aumento de la desigualdad socioeducativa de las clases más desfavorecidas (March,
2014); en línea con este hecho está la obligación de escoger entre distintos itinerarios,
determinando la trayectoria académica de los alumnos, implicando también directamente a los
tutores e indirectamente al profesorado, en su acción para orientar a los alumnos, en la elección
de las materias troncales de opción (Art. 25.9). Asimismo, el cambio en las asignaturas y su
relevancia, la reforma de la Formación Profesional, las reválidas y las formas de acceso a la
Universidad, pueden generar incertidumbre en el profesorado, a la hora de acompañar al
alumnado en su proceso de aprendizaje y las injerencias que pueda ejercer en éste. A pesar de las
directrices establecidas, en España cada Comunidad Autónoma dicta sus propios decretos y
establece de esta forma condicionantes a lo que es la figura docente y el papel que desempeña en
la práctica sobre este campo, desde las Consejerías de Educación se mantiene relación directa
con los equipos directivos, los departamentos de orientación y tutores, también se lleva a cabo
formación en función de intereses preestablecidos, etc. (Doncel, 2015). No entramos aquí en la
orientación formal, pues nuestro trabajo no pretende profundizar en esa orientación, sino más
bien en la que ejerce el profesorado, tal vez inconsciente, sin dependencias de directrices
establecidas directamente desde las administraciones educativas. Así nos lo ponen de manifiesto
las aproximaciones realizadas recientemente sobre la orientación y el profesorado (del Valle,
Usategui, Venegas, San Román y Vecina, 2015).
Según Masson (1994), las características sociales y profesionales del profesorado
establecen un marco de referencia desde el que interpretar las evaluaciones del público escolar,
apreciar la concepción administrativa de la orientación y elaborar sus prácticas de selección
escolar. Suelen hacer referencia a su experiencia en el oficio, para justificar su competencia en
materia de orientación. El proceso de orientación determina sus condiciones de trabajo en
relación al reparto de clases y los problemas derivados de ello. Los criterios aplicados por el
profesorado a la hora de orientar a su alumnado hacia unas disciplinas u otras, según sus
previsiones de posible éxito, han cambiado (González Quirós y Martinez López-Muñiz, 2001;
Varela, 2007). Las transiciones educativas ya no son lineales; así se ha constatado que en la
Secundaria y la Universidad existe un proceso de “ubicación universitaria” e, incluso, de
5 Ley Orgánica de Educación (LOE), de 3 de Mayo de 2006 (publicada en el BOE de 4 de Mayo de 2006
(https://www.boe.es/boe/dias/2006/05/04/pdfs/A17158-17207.pdf). Puesta en marcha de nuevo por el
PSOE, al volver a acceder al poder tras dos legislaturas anteriores de un partido con ideología de
derechas, el Partido Popular (PP). .Modificada posteriormente por la LOMCE, que entra en vigor el curso
2014/15. En este caso estando en el ejecutivo dicho Partido Popular; se trata de la primera ley educativa
del partido de derechas que consigue aprobar, puesto que en la anterior legislatura en la que estuvo en la
presidencia, no pudo llegar a aprobar lo que había de ser la Ley Orgánica de Calidad de la Educación,
debido a las elecciones generales y el consecuente cambio de gobierno.
6 Ley Orgánica 8/2013, de 9 de Diciembre, para la mejora de la calidad educativa (publicada en el BOE de
10 de Diciembre de 2013).
Representaciones sociales y orientación educativa del profesorado 7
“reubicación” dando lugar a trayectorias cambiantes de una especialidad a otra (Villar, 2011,
2012; Villar et al., 2012).
En la actual situación socioeconómica, la incertidumbre que caracteriza los itinerarios de
formación e inserción sociolaboral de los jóvenes, en las sociedades del capitalismo tardío, se ve
agudizada por la carencia y precariedad del empleo. El incierto futuro social, económico y
educativo está muy presente en el debate público, un foco de atención muchas veces centrado
sobre la educación y los elevados índices de paro de los jóvenes. La estructura social tiene efectos
negativos sobre la equidad, por lo que las políticas de orientación educativa y profesional no
pueden obviar la necesaria inclusión social de las clases más desfavorecidas y reducir los
condicionantes sociales que la generan (Cabrera, Hernández, Villar y Frutos, 2015).
En un escenario que objetivamente desdice la promesa de la escuela, las motivaciones, los
intereses y las expectativas del alumnado se están viendo alterados y con ellos, cambia el sentido
de la formación y, necesariamente, de la orientación tanto escolar como profesional. Surgen
tendencias que impulsan el papel del alumnado como copartícipe del proceso de orientación y
demandan la colaboración de todos los miembros de la comunidad escolar (familias, agentes
sociales), enfatizando las dimensiones participativas y colaborativas del proceso (Domingo, 2006;
Monereo y Pozo, 2005; Portela y Nieto Cano, 2006; Rodríguez, 2006).
El docente, como agente activo en el proceso de enseñanza-aprendizaje, constituye una
figura clave en el proceso de (re)interpretar y (re)definir la acción orientadora (Brennan y Shah,
2004). Guichard (2006) destaca la importancia que para la orientación tiene el diálogo entre
familias y profesorado. Pareciera, dice, que la función principal de este diálogo sea llevar al
alumnado de procedencia más humilde a aceptar la orientación que el profesorado juzga mejor.
Sus orientaciones y expectativas influyen en el alumnado y su proyección académica (Colectivo
Ioé, 2007; Díaz-Aguado, 2006; Pomeroy, 1999). Por ello, es relevante saber cómo interpretan y
despliegan esta labor, desde qué universo simbólico y en qué contexto social. Examinar los
discursos sobre la práctica orientadora de los docentes, desde la mirada sociológica, permite
descubrir los elementos y mecanismos sociales latentes que dan sentido y guían sus actuaciones y
estrategias en un determinado marco de interacción y organización social. Se trata de un ejercicio
necesario para desvelar la naturaleza social de sus prácticas y hábitos, en definitiva, para
identificar las representaciones interiorizadas que influyen y guían sus acciones (Chaib,
Danemark y Selander, 2012; San Román, 2002, 2009).
Teniendo en cuenta todo este marco, nuestro planteamiento parte de la consideración de
que las representaciones sociales son una actividad cognitiva utilizada para mantener una
posición frente a determinados acontecimientos, comportamientos y guiar los intercambios
sociales (Moscovici, 1975). Inciden en nuestra forma de pensar, de interpretar las acciones, de
entender la realidad, de comunicarla y de actuar en base a los condicionantes sociales que las
generan (Jodelet, 1988). En el caso de la institución escolar, se difunden a través del curriculum
expreso (las competencias a trabajar, los objetivos a lograr, el contenido de los programas…) y
del curriculum implícito (la organización del centro, los valores vivenciados, la metodología
didáctica, los recursos utilizados en clase, los libros de texto, las interacciones entre profesorado y
alumnado…).
El profesorado construye representaciones sociales sobre el alumnado a partir de sus
predisposiciones y esquemas de percepción marcados por el componente social; esto se refleja
en la relación con éstos y la forma de actuar en el aula (Kaplan, 1997). El profesorado parte de
un condicionante social y cultural y de unas determinadas representaciones que configuran y
difunden un conocimiento socialmente elaborado y compartido (Jodelet, 1988), por lo que
consideramos que la orientación, como actividad de interacción social, no está exenta de su
influencia. Características del alumnado como la clase social, el género, la etnia… así como la
edad y las propias ideologías de los profesores, tienen gran poder ideológico (Van Dijk, 2003) y
se encuentran en el discurso educativo y en la vida escolar cotidiana. Forman parte de
Archivos Analíticos de Políticas Educativas, Vol. 23 No. 128 8
Metodología
Resultados
de marzo de 2008.
10 Maestro de 1º de Educación Primaria, centro público, Palma de Mallorca (España), grupo de discusión,
20 de marzo de 2008.
Representaciones sociales y orientación educativa del profesorado 11
Frente a la crisis y la falta de salidas al mercado laboral, una parte del profesorado entiende que
es preciso introducir en el Currículo de Secundaria asignaturas que no estén pensadas tanto para
11 Profesor de 4º de ESO, centro público, Palma de Mallorca (España), grupo de discusión, 10 de marzo
de 2008.
12 Maestra de 2º de Educación Primaria, centro privado concertado, Palma de Mallorca (España), grupo
de 2008.
14 Profesor de 4º de ESO, centro público, Palma de Mallorca (España), grupo de discusión, 10 de marzo
de 2008.
15 Profesora de 3º de ESO, centro público, Palma de Mallorca (España), grupo de discusión, 10 de marzo
de 2008.
16 Profesor de 2º de ESO, centro público, Madrid (España), grupo de discusión, 05 de febrero de 2011.
Archivos Analíticos de Políticas Educativas, Vol. 23 No. 128 12
lanzar a los discentes al mercado laboral, que también, como para que desarrollen el potencial de
una generación que consideran muy creativa y con capacidad de autoconocimiento. En esta línea
de incorporar en el currículo conocimientos teóricos, no útiles para el mercado de trabajo,
curiosamente es el profesorado de Ciencias el que demanda una mayor presencia en el currículo
de asignaturas como Filosofía, que introdujeran aspectos que enfatizaran valores contrarios al
“aquí y ahora” para ir más allá en los objetivos de la enseñanza, para favorecer en el alumnado un
enriquecimiento, no únicamente destinado a la relación con un trabajo concreto, una vez hayan
acabado sus estudios, sino que sirva para el enriquecimiento personal, el desarrollo de sus
potencialidades. “…la cooperación, la solidaridad en lugar de la competencia feroz y el ir a la
yugular. No está esa materia en Filosofía…”17
En el centro del debate, el profesorado se plantea los posibles efectos sobre el alumnado
de la orientación hacia un itinerario de letras o uno de ciencias. Es en este punto donde el
profesorado queda dividido en dos bloques, entre aquellos que entienden que la función del
profesor es dirigir al alumnado, despertando su interés por la cultura sin determinar fortalezas y
debilidades, y los que apoyan que es su función orientar al alumnado según la capacidad
intelectual que demuestre para determinadas materias. Resulta éste un debate que interesa al
grupo, que retoma el tema una y otra vez en la marcha del discurso. Así, mientras un bloque del
grupo entiende que el alumnado puede tardar en mostrar preferencias por varios factores y el
profesor debe mantenerse expectante, el otro bloque considera que en el despertar de las
capacidades no inciden ese tipo de factores. “…hasta qué punto tenemos derecho para decirle
‘oriéntate a lo que eres más fuerte’. Lo que tú le puedes dar es ayudarle a conocerse, pero no
decirle “tú eres bueno en esto…”18. Es concretamente el profesorado de ciencias el que más
defiende un modelo de orientación vocacional, caracterizado por despertar vocaciones
potenciales en los alumnos.
Los desacuerdos con el modelo de cultura inmediata que se observa en el profesor de
tecnología, que no se preocupa por terminar el temario en caso de que no pueda hacerlo, y los
demás, es evidente. El modelo de cultura entra en conflicto. En un caso, la cultura de la
inmediatez, con despreocupación del tiempo escolar; en otro, un modelo de cultura que exige
confianza en el futuro y expectativas.
Conclusiones
17 Profesora de 4º de ESO, centro público, Madrid (España), grupo de discusión, 18 de febrero de 2011.
18 Profesor de 4º de ESO, centro público, Madrid (España), grupo de discusión, 05 de febrero de 2011.
Representaciones sociales y orientación educativa del profesorado 13
pero la distancia entre la escuela, las familias y el entorno sociocultural dificultan esa función. Los
docentes aparecen como víctimas de una situación compleja, mantienen bajas expectativas sobre
las posibilidades de éxito de estos alumnos.
Los docentes mayoritariamente consideran que el origen socioeconómico de los alumnos,
de más incidencia en el caso de pertenecer a minorías, es el que decide el futuro de los alumnos;
la escuela por tanto queda un tanto al margen de poder influir sobre su trayectoria. Esta situación
les lleva a considerar dos vías en la orientación, la primera destinada a aquellos alumnos con una
representación social positiva, basada en la proximidad social y cultural con los valores y cultura
dominante y, la segunda, la destinada a las minorías y colectivos en peor situación social.
Estas breves conclusiones sobre los estudios de la percepción del profesorado y del
alumnado de su experiencia escolar y el estudio de las representaciones de las minorías étnicas y
la escuela sirven al último estudio centrado en la orientación, pues abren el camino para
especular sobre la existencia de dos modelos de orientación en el profesorado: el vocacional y el
instrumental, enseñar para poder aplicar el conocimiento a un futuro inmediato y concreto,
vinculado con las representaciones sociales de las expectativas laborales de los alumnos.
Del estudio sobre la orientación, concluimos que el profesorado se encuentra dividido
entre quienes piensan en un sistema de enseñanza que llegue a todos y los que piensan que hay
que diferenciar en distintos itinerarios diversificados y además con prontitud para no impedir el
desarrollo de los más aventajados. Parece que la propia inercia del cambio social incide en el
profesorado y su capacidad de influir, en este caso los medios de comunicación estarían
sustituyendo su influencia en el alumnado en la elección de estudios. En este sentido, los
modelos de éxito se imponen sobre una cultura humanista y comunitaria, propiciando la
competencia hacia el triunfo individual y convirtiendo los estudios en estrategias instrumentales
más que en verdaderas vocaciones.
Es por tanto, a partir de estas conclusiones como nos adentramos en una investigación
que pretende profundizar en las raíces de la intersubjetividad del docente con su contexto y
biografía personal y en las sociales como condicionantes que, en cierta forma, influyen en su
práctica docente y la acción orientadora hacia el alumnado.
Referencias
Van Dijk, T. A. (2003). Ideología y discurso. Una introducción multidisciplinaria. Barcelona: Ariel.
Varela, J. (ed.) (2007). Las reformas educativas a debate (1982-2006). Madrid: Morata.
Vayreda, A. (1997). Origen de la construcció de les representacions reciproques entre professors
i estudiants. En T. Ibáñez, (coord.), Psicología social de l’ensenyament (pp. 52-78). Barcelona:
UOC.
Vecina, C. (2008). Representaciones sociales, prensa, inmigración y escuela. El caso de Son Gotleu. (Tesis
inédita), Universitat de les Illes Balears Facultad de Ciencias de la Educación, ES.
http://hdl.handle.net/10803/32148
Vecina, C. (2013). Rendimiento escolar: Factores sociales, familia y discurso docente. Palma: Asbafi.
Vecina, C.; San Román, S., y Doncel, D. (2016). Una aproximación a la visión de los docentes
sobre la transformación social globalizada y su incidencia en la práctica docente. Revista de
la Asociación de Sociología de la Educación. RASE, 9 (1) en prensa.
Villar, A. (2011). Absències i ubicacions heterogènies en l’estudiantat universitari. Una recerca en
la Universitat de València. Quaderns de Ciències Socials, 18, pp. 5-53.
Villar, A. (2012). Des de la mirada dels desajustos. Absències educatives en els estudis
universitaris. Revista Arxius de Ciències Socials, 26.
Villar, A., Vieira, M.M., Hernàndez, F. J., y Almeida, A.N. (2012). Más que abandonos de
estudios, trayectorias de reubicación universitaria. Revista Lusófona de Educação, 21, pp. 139-
162.
Carlos Vecina
Universidad de las Islas Baleares
[email protected]
ORCID: 0000-0001-8439-8455
Doctor en Ciencias de la Educación (por la Universidad de las Islas Baleares), licenciado en
Sociología (por la UNED). Desarrolla su actividad profesional como sociólogo en diversos
proyectos de intervención social; ha colaborado con el Instituto Marco Marchioni como
asesor en Investigación Acción Participativa. Es profesor de Sociología en la Universidad de
las Islas Baleares y de Trabajo Social y Antropología en la UNED. Líneas de investigación:
Representaciones sociales, profesorado, inmigración, comunidad educativa, desigualdad
social e intervención comunitaria. Miembro del Grupo de Investigación y Formación
Archivos Analíticos de Políticas Educativas, Vol. 23 No. 128 18
Elisa Usategui
Universidad del País Vasco
[email protected]
Doctora en Filosofía. Profesora del departamento de Sociología y Trabajo social de la
Universidad del País Vasco. Su labor investigadora trata los problemas de cohesión social
suscitados por los procesos de individualización y globalización que marcan las sociedades de
la posmodernidad, centrándose, de modo especial en el campo de la cultura y la educación.
Otra área de trabajo la conforma el análisis de los aportes de la teoría feminista a la reflexión
y a la epistemología sociológica. En este sentido, ha revisado desde una perspectiva de
género los diversos paradigmas y autores dentro del campo de la Teoría sociológica. Entre
sus publicaciones cabe destacar: Valores en la formación inicial del profesorado (2012), Bigarren eta
unibretsitateko hezkuntzako ikasleen genero-estereotipoak: eskolari eta bestelako sozializazio guneei
begirada (2011), , Violencia de género en las relaciones de pareja de adolescentes y jóvenes de Bilbao
(2010), Escuela, familia y sociedad: la ruptura de un consenso (2009), La Escuela cuestionada: voces del
alumnado y las familias (2008), La escuela sola: voces del profesorado (2008), Título: Comunidad y
género en Alexis de Tocqueville (2005)
Mar Venegas
Universidad de Granada
[email protected]
Mar Venegas es profesora del Departamento de Sociología, Universidad de Granada
(España). Es Doctora en Sociología y Experta en Género e Igualdad de Oportunidades por
esta Universidad. Actualmente, es Subdirectora del Departamento de Sociología de la
Universidad de Granada y Secretaria de la Asociación Española de Sociología de la
Educación. Sus principales líneas de investigación son los Estudios de Género y Sexualidad y
la Sociología del Profesorado.
Representaciones sociales y orientación educativa del profesorado 19
Armando Alcántara Santuario IISUE, UNAM Fanni Muñoz Pontificia Universidad Católica de
México Perú,