Factores Criminológicos
Factores Criminológicos
Factores Criminológicos
EL FACTOR POLÍTICO
EL FACTOR CULTURAL
Cultural es el nombre con que se designa a todas las realizaciones características de los
grupos humanos.
Para la escuela positivista moderna el delito refleja, en buena parte, el ritmo evolutivo
cultural de toda sociedad: a mayor cultura y desarrollo de la tecnología, el delito, en
consecuencia, presentará variaciones cualitativas y cuantitativas.
La televisión cumple un papel similar al del cine, con la ventaja del relativo aislamiento
del espectador, pero con la desventaja de la invasión del hogar y la gratuidad del
espectáculo; hechos que favorecen el que diariamente la violencia, el crimen, el
desorden familiar y la negación de los valores morales establecidos, sean proyectados
dentro del hogar.
Aquí el problema reviste mayor gravedad por el poco o ningún control de calidad en la
programación de las televisoras comerciales; y porque, además de a los jóvenes y
adultos, su influencia alcanza también al público infantil.
El socialismo científico de fines del siglo pasado consideró que la criminalidad era un
fenómeno de anormalidad social por influencia económica; en tanto que la llamada
“escuela socialista”, la consideró como una consecuencia directa del capitalismo.
Hoy se sabe, sin embargo, que en los países de regímenes no capitalistas también existe
la criminalidad.
EL FACTOR ECOLÓGICO
La ecología es el estudio de las relaciones entre los organismos y sus habitats. Tiene tres
ramas: botánica, animal y humana. A esta última se le denomina también Ecología
Social, en cuanto se la considera una rama de la Sociología que se ocupa del estudio de
las áreas de habitación humana y de la distribución espacial de los rasgos o complejos
sociales y culturales.
Ahora bien, en relación con la delincuencia, vamos a encontrar que a comienzos del
siglo pasado Adolfo Quételet, publico su famosa obra “Física Social” en la cual dio a
conocer sus no menos famosas “Leyes térmicas de la delincuencia”, basadas en la
influencia del medio geográfico sobre el individuo, las cuales formuló en la forma
siguiente:
1.- En invierno se comete mayor número de delitos contra el patrimonio que en verano.
2.- Los delitos contra las personas se cometen en mayor número en verano.
3.- Los delitos contra las personas tienden a aumentar según nos aproximamos al
ecuador y, a la inversa, los delitos contra la propiedad disminuyen.
4.- Los delitos sexuales se cometen con mayor frecuencia en primavera.
Desde luego, se trata de estudios estadísticos, realizados en Europa, donde las cuatro
estaciones tienen ciclos bien diferenciados y en condiciones que hoy día son ya historia
lejana. Por lo demás, la criminología moderna entiende que existen relaciones
dialécticas entre los factores del delito, los cuales, en todo caso, ejercerían su influencia
en constelación.
Middendorff por su parte, ha señalado que el ambiente local puede ejercer un fuerte
influjo sobre la extensión y clases de la criminalidad. Esta es la teoría de “los influjos
locales”, de gran desarrollo en USA con el nombre de Ecología Social o método
sociológico, usado en el estudio de las relaciones especiales o distributivas de los seres
humanos y las formas sociales. En este sentido son grupos ecológicos los formados por
los habitantes de la ciudad y los habitantes del campo; así como los de las ciudades
portuarias, barrios bajos y distintos fronterizos.
En este sentido ha sido utilizado también en el estudio de la criminalidad, especialmente
en USA, donde se ha encontrado que las cifras más altas de delincuencia corresponden a
lo que han denominado “áreas de desorganización social”, las cuales están
caracterizadas por una prosperidad deteriorada, existencia de “gans”, heterogeneidad
cultural y social, y ausencia de controles sociales.
En Latinoamérica, señala Héctor Solís Quiroga (1977), se tiene la experiencia de que las
zonas que circundan los mercados hay mayor delincuencia que en otras, al igual que en
los suburbios de las ciudades. Señala también que parece tener relación con la mayor o
menor delincuencia de un lugar, el tiempo que las familias vivan en él, el hecho que las
viviendas sean rentadas o adquiridas en condominio, la homogeneidad de la población,
la densidad de población, el tamaño de la ciudad, el conocimiento y trato que unos
tengan con los otros.