Estudio de Caso Grupal El Costo de Ser Agradable
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ACTIVIDAD ASINCRÓNICA N° 2
CASO 2. EL COSTO DE SER AGRADABLE
FECHA DE ENTREGA:
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Preguntas
1. ¿Cree usted que los empleadores deben elegir entre trabajadores afables
e individuos con un alto desempeño? ¿Por qué?
Por esta razón los empleadores deben escoger dentro de lo posible personas que
posean ambas cualidades o características. Pero todo va depender del tipo de
trabajo para el cual se vaya a contratar a una persona, se debe tomar en cuenta el
rol que va a desempeñar esa persona dentro de la organización; para
posteriormente decidir si conviene que sea una persona afable o una persona con
alto desempeño en su puesto o función específica dentro de la empresa.
Podemos concluir entonces que ser afable o tener un alto grado de amabilidad en
el trabajo repercute de manera directa en el éxito de la organización a la cual
estamos prestando nuestros servicios, pero ser una persona con alto grado de
productividad y desempeño ayuda a la empresa a ser más competitiva.
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Recordemos que los principales objetivos de una organización es el buen
desempeño laboral gestionado con el mejor talento humano.
Los lideres mantienen su éxito debido a las relaciones que poseen con las
personas que trabajan en su circulo laboral, con las personas que trabajan para
ellos y para esas personas para quienes ellos trabajan (sus clientes), o sea dentro
de cada empresa hay dos tipos de relaciones, de persona a persona y la de
negocios y consideramos que ambas son importantes en las empresas.
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2. A menudo los efectos de la personalidad dependen de la situación. ¿Podrá
pensar en algunas situaciones laborales en las cuales la afabilidad sea una
virtud importante y otras en las que socave el desempeño laboral?
Las personas son mas efectivos cuando sus personalidades se ven ajustadas a la
naturaleza de su cargo, función y tareas que ejercen dentro de una organización,
por eso es importante saber elegir el tipo de personalidad que deseamos en los
puestos de trabajos y cuanto va a repercutir los rasgos de personalidad en el éxito
de la misma.
Hay que tratar al cliente con amabilidad total para que sigan auspiciándonos
porque si no optan por la competencia u otro lugar en dónde los traten bien. Los
supervisores tienen que ser afables con sus trabajadores para contribuir en el
desempeño organizacional al exhibir un comportamiento de ciudadanía. Por otro
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lado, no es bueno ser afables, cuando se va a negociar un salario inicial o solicitar
un aumento de su sueldo. Tampoco, es bueno ser afable en todo lo relacionado al
dinero.
Por ejemplo, una situación en donde impera la afabilidad sería una asociación de
rescate de animales, un colaboradore realmente dedicado y entregado a su
trabajo, no tendría inconveniente alguno en que lo levanten en media noche, para
atender un caso de abandono de cachorros, este iría sin recato alguno, tal sea el
caso de que no tenga transporte oficial, el estaría más que dispuesto a utilizar sus
propios recursos, con tal de salvar la vida de los cachorros indefensos.
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es conveniente, ya que existen acciones que se deben llevar a cabo sin que se
pierda tiempo y esfuerzo.
Por otro lado, puede ser por varias razones, como por ejemplo la de evitar la
discriminación hacia a la mujer, también el hecho de la evolución profesional tan
versátil que con el tiempo ha ido desarrollando la mujer de manera positiva, y la
forma de empoderarse profesional y laboralmente, ya que es de conocimiento que
al hombre se le pagaba más que a la mujer o porque la mujer exige más o es que
negocian más que los hombres. Tal vez, los hombres afables son más conformes.
Es una hipótesis interesante de estudiar, ser afable puede perjudicar tanto el
salario de un hombre como el de una mujer, cuando una persona es muy amable y
servicial, se vuelve por lo general muy conformista; y hay personas dentro de las
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organizaciones que tienden a aprovecharse de las cualidades o virtudes de los
demás. Esto no quiere decir que nos limitemos a ser amables, nuestra
personalidad no debe cambiar por nuestro puesto laboral al contrario debemos
encontrar una manera en que las organizaciones encuentren en nosotros
personas agradables, pero con alto grado de desempeño y productividad.
Debemos ser versátiles, no dejando atrás esa razón que hace bien la convivencia
en nuestro ambiente de trabajo que es la amabilidad y respeto, siempre en los
niveles adecuados lograra que la organización sea competente, competitiva y un
lugar agradable para trabajar, con una cultura organizacional ambiciosa y
dedicada a el bienestar de los colaboradores y de sus clientes. Estamos claros
que los empleados que son excesivamente amables le cuestan mas a las
empresas, por diferentes razones, no son capaces de tomar buenas decisiones,
son mas dados a dejarse llevar por las emociones que por la razón, evitan la
confrontación, quedan sometidos a los demás y en algunos casos el tipo mas
amable puede ser el perdedor de varias oportunidades de crecimiento profesional
por falta de carácter y excesiva amabilidad.
Esto quiere decir que cada individuo es diferente y cuando se incorpora a una
organización manifiesta su comportamiento y conducta de acuerdo a la
personalidad que ha venido formando en el tránsito de su existencia. Un
administrador de Recursos Humanos no puede ignorar ningún comportamiento, es
decir, la organización debe tomar muy en cuenta en beneficio de todos, que cada
persona tiene una manea particular de actuar y pensar, de esta misma manera lo
hace en el trabajo, basándose en los principios impuestos por la sociedad.
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