Delitos Fiscales
Delitos Fiscales
Delitos Fiscales
Con frecuencia escuchamos acerca la evasión fiscal, contrabando, facturas falsas... Todas estas son figuras
que de alguna manera entendemos como incorrectas, sin embargo, muchas veces no reparamos en qué son
y cuáles son sus consecuencias jurídicas. Todas estas, y otras que abordaremos a continuación, son lo que el
Titulo Cuarto del Código Fiscal de la Federación de México denomina "Delitos Fiscales".
Los delitos fiscales, dentro del Derecho Penal, se clasifican como delitos especiales, que son aquellos que no
se encuentran regulados en el Código Penal Federal (o en algún otro código penal local) sino en una Ley
Especial o un Tratado Internacional (artículo 6 del Código Penal Federal). Lo que se traduce en que a pesar de
su naturaleza, estos son investigados por el Ministerio Público y sancionados por la el Juez Penal, como todos
los delitos; dejando a la autoridad fiscal únicamente como víctima u ofendido en los procedimientos penales
respectivos (artículo 92 del Código Fiscal de la Federación), siendo indispensable que esta solicite la
persecución del delito a través de la querella correspondiente.
Aunque la amplitud de la materia Fiscal pueda incluir ordenamientos diversos como todos los que rigen
todos los impuestos que existen, así como la prevención del uso de recursos de procedencia ilícita, por lo que
todos los delitos señalados en estas normas podrían considerarse fiscales, dentro de este artículo solo nos
referiremos como Delitos Fiscales a aquellos a los que expresamente se refiere el Código Fiscal de la
Federación.
Es pertinente hacer la aclaración de que los castigos por desobedecer la Ley Fiscal se dividen en dos
categorías las primeras son las infracciones, que son aquellas que por su gravedad únicamente se castigan
con multas u otras sanciones económicas y los delitos que se castigan con prisión.
Se conoce como delito de cuello blanco a aquél de índole económica cometido por una persona con cierto
grado de preparación y un alto o mediano estatus económico.
La delincuencia de cuello blanco se puede manifestar bajo la forma de manipulación de informes financieros,
sobornos comerciales, corrupción de funcionarios para conseguir contratos como desde acción de fondos
públicos o fraudes fiscales.
Los delincuentes de cuello blanco se caracterizan por mentir, inflaron maquillar cifras, falsificar y robar
documentos, estafar, así como sobornar; para las autoridades, representa un perfil difícil de detectar, pues
estas personas son expertas en aparentar ser buenos ciudadanos y no utilizan la fuerza, sino su mente para
delinquir.
Los delitos fiscales han considerados de cuello blanco, por lo que el delincuente conoce que el resultado que
radica en obtener un beneficio indebido en perjuicio del fisco federal.
DOLO Y CULPA.
¿Quiénes PUEDEN PARTICIPAR EN UN DELITO FISCAL?
El autor es que realiza la conducta prevista en la ley como delito, la capacidad de realizarla está en sus
manos. puede ser la persona física que se presenta en una declaración fiscal con datos falsos, o bien, el
representante legal de una persona moral.
Coautor es la persona que, junto con otras, intervino la realización de la conducta señalada como delito,
aportando elementos para su comisión. Puede ser los miembros del Consejo de administración o el director
de la empresa.
Autora intelectual es la persona que convence a otra para que realice la conducta prevista como delito
(podría ser el accionista de la empresa), y autor mediato es la persona que instrumentaliza la voluntad de
otra para realizar la conducta prevista como delito.
En algunos casos, se ha identificado que personas de escasos recursos pueden ser instrumentados para la
comisión de delitos fiscales: aceptan un pago mínimo para firmar documentos constitutivos de una empresa
o realizar trámites ante la autoridad fiscal y las instituciones bancarias. Algunas son engañadas para firmar los
documentos y sin que siquiera sepan leer o escribir.
quienes propongan, establezca no lleven a cabo actos, operaciones o prácticas, de cuya ejecución derive
directamente la comisión de un delito fiscal, son sujetos de un delito fiscal. incluso los abogados o
contadores que proponen esquemas de evasión fiscal a sus clientes.
estos asesores asumen que no serán imputados penalmente, dado que el acto materiales realizado
directamente por el cliente, quien presenta la declaración fiscal correspondiente; sin embargo, no están
excluidos de la sanción que establece la ley penal. sí asimilan a la figura del encubridor.
DEFRAUDACION FISCAL.
Hay personas que encuentran en la mentira y el engaño una salida fácil para mantener su riqueza, sin
preocuparse por quienes a diario se levantan y, con base en esfuerzo y trabajo, aportan un poco de sus
propios recursos para construir escuelas, comprar libros o comprar medicinas. A esas personas se les llama
defraudadores fiscales, dado que se valen del engaño o el aprovechamiento de errores de las autoridades
para reducir o eliminar sus obligaciones tributarias.
aunque mienten en sus declaraciones de impuestos, estos defraudadores son parte de la sociedad y
disfrutan de los servicios prestados por el Estado. Al igual que los ciudadanos honestos, gustan de los
servicios de agua, luz, escuelas, carreteras y muchos otros, si bien aportan nada para dichos gastos; por eso
su conducta es tan grave que debe considerarse delictiva. Este supuesto está previsto en el artículo 108 del
código fiscal federal.
La ley establece como delito la simulación de uno o más actos o contratos para obtener un beneficio
indebido con perjuicio al fisco federal. Existen esquemas en los cuales se pretende aparentar acciones legales
que no conllevan carga tributaria, aunque en realidad se trata de una simulación, simplemente cambian el
nombre a la actividad, esperando que sea una justificación me ayuda para su elusión.
Un ejemplo común es el de la subcontratación. el defraudador tiene empleados, solamente de hoy en todos
los sentidos, pero en una vez estén sus obligaciones correspondientes decide constituir una nueva empresa,
en la cual sus empleados son supuestos socios/dueños que aparentan ser proveedores externos.
Esta maquinación se realiza para no pagar los impuestos de la nómina de cada uno de sus trabajadores y
para no realizar las aportaciones de Seguridad Social que les corresponden.
PENAS.
Los delitos de defraudación fiscal y sus equiparados se sancionan de la siguiente forma:
Es muy importante a esta atura de nuestros estudios, tener presente cuales son los delitos fiscales en
nuestro país y en el mundo, pero sobre todo tener claro que al realizar dichos delitos siempre habrá una
consecuencia clara, y lo peor que podría suceder en esta ética profesional seria contribuir a aquellos
delitos.