Biosensores en La Industria Alimentaria
Biosensores en La Industria Alimentaria
Biosensores en La Industria Alimentaria
INTRODUCCIÓN
Hoy en día la contaminación de las materias primas se produce mayoritariamente debido a prácticas
agrícolas inadecuadas y durante el procesado de los alimentos. Entre los microorganismos
patógenos más comunes están Salmonella spp Campylobacter spp y Listeria monocytogenes, a los
que podemos incluir los parásitos y virus. Los agentes patógenos pueden encontrar en las superficies
de trabajo en contacto con los alimentos el hábitat idóneo y que como consecuencia se produzcan
contaminaciones cruzadas. La presencia de agente patógenos en la maquinaria y áreas de trabajo
supone un riesgo que los biosensores ayudan a combatir.
Debido al aumento en la demanda y el cambio de hábitos alimenticios de la población, la producción
masiva de alimentos enfrenta el reto analítico de asegurar su calidad fisicoquímica y microbiológica.
La seguridad alimentaria, como mecanismo de garantía para la trazabilidad de alimentos sanos e
innocuos, constituye el concepto central que relaciona la producción de alimentos y la salud pública.
El análisis de la mayoría de los contaminantes químicos implica no solo mecanismos invasivos, sino
complejas etapas de tratamiento y procesamiento de la muestra, con técnicas instrumentales de alto
costo, como la cromatografía líquida de alta eficiencia acoplada a diferentes sistemas de detección,
como fluorescencia, ultravioleta con arreglo de diodos, o diferentes sistemas y filtros de masas y
masas en tándem, electroforesis capilar o cromatografía gaseosa con detectores como fósforo-
nitrógeno, ionización de llama, captura de electrones, espectrómetros de masas y masas tándem,
entre otros, mientras que los controles microbiológicos están sujetos a procedimientos en el tiempo y
obtiene resultados, en algunos casos, cuando el alimento ya se ha consumido.
Un biosensor es un dispositivo de análisis conformado por un elemento biológico de reconocimiento
(célula, tejido, receptor, ácido nucleico, enzima, ribozima o anticuerpo, entre otros), o
nanomateriales (nanopartículas, nanocompuestos), materiales inteligentes o compuestos
biomiméticos (aptámeros, polímeros de microporosidad intrínseca, sondas de ácidos nucleicos),
asociado a un mecanismo que garantiza la detección e interpretación de la variación de propiedades
ópticas, fisicoquímicas, eléctricas, entre otras, obtenida de la interacción entre el analito y el
dispositivo analítico. Cabe destacar que las características fisicoquímicas del analito de interés son
las determinantes para la elección del material biológico/biomimético, mientras que el tipo de
elemento de reconocimiento es el que determina el sistema transductor.
Las potenciales aplicaciones de esta tecnología ya han tenido un desarrollo destacado en el área de la
salud y en la actualidad están siendo empleados en agricultura y en la industria alimentaria. Esta
última, aprovecha las cualidades técnicas de los biosensores para garantizar la calidad alimentaria, el
control de procesos y por supuesto, la seguridad alimentaria. Hasta el momento, los métodos
tradicionales se apoyan en el análisis de laboratorio, dichos análisis requieren personal técnico
altamente cualificado y necesitan tiempo (al menos 24 horas de incubación del microorganismo) para
aportar resultados. Con la implementación de los biosensores, podremos evitar estos inconvenientes
y aprovechar numerosos beneficios. (Jimenez, 2020)
DESARROLLO
Biosensores
Un biosensor es un dispositivo de análisis conformado por un elemento biológico de reconocimiento
(célula, tejido, receptor, ácido nucleico, enzima, ribozima o anticuerpo, entre otros), o
nanomateriales (nanopartículas, nanocompuestos), materiales inteligentes o compuestos
biomiméticos (aptámeros, polímeros de microporosidad intrínseca, sondas de ácidos nucleicos),
asociado a un mecanismo que garantiza la detección e interpretación de la variación de propiedades
ópticas, fisicoquímicas, eléctricas, entre otras, obtenida de la interacción entre el analito y el
dispositivo analítico. Cabe destacar que las características fisicoquímicas del analito de interés son
las determinantes para la elección del material biológico/biomimético, mientras que el tipo de
elemento de reconocimiento es el que determina el sistema transductor. (Gonzales, 2016)
Tipos de Biosensores
Los biosensores se clasifican de acuerdo con la heterogeneidad de materiales, las variables de sus
componentes estructurales, los mecanismos químicos, físicos o fisiológicos de su funcionalidad, y
también de acuerdo a los mecanismos de detección de la señal. Los biosensores se pueden clasificar
atendiendo a las siguientes variables:
• Tipo de interacción: biocatalíticos o de bioafinidad.
• Método de detección: directo o indirecto.
• Elemento de reconocimiento: célula, organela, tejido, enzima, receptor, anticuerpo, ácido
nucleico, polímero de impresión molecular(PIM), ácido nucléico peptídico (PNA) o
aptómero.
• Sistema de transducción: nanomecánico, piezoeléctrico, electroquímico, termoeléctrico u
óptico. (Logic Alimentaria, 2019)
Sensores de interacción biocatalítica y sus principales sistemas de reconocimiento.- Son sistemas in-
situ, constituidos por organelos, células, tejidos, sistemas enzimáticos o multienzimáticos de origen
animal o vegetal, utilizados para la detección de sustratos mediante el comportamiento
estequiométrico de productos o reactivos, o mecanismos de inhibición enzimática que intervienen en
el proceso, caracterizados por su capacidad regenerativa que no condiciona la dependencia del
proceso de la cantidad del mismo.
Sensores de bioafinidad y sus principales sistemas de reconocimiento. - Presentan una gran ventaja
en cuanto a sus aplicaciones para la detección de residuos de pesticidas, agentes microbianos y
alérgenos en alimentos. Se caracterizan por su capacidad para formar complejos entre el analito de
interés y el receptor, sin llevar a transformaciones químicas, pero generando excelentes mecanismos
de respuesta, aunque con grandes exigencias analíticas para determinar su magnitud.
Transductores ópticos. - Entre estos se destacan los sensores de fibra óptica u optodo, caracterizados
por tener inmovilizado en sus extremos el elemento de reconocimiento y el elemento de detección,
así mismo la presencia de marcadores que permitan detectar cambios entre el analito y el elemento
de reconocimiento y difundirlos a través de la fibra.
CONCLUSIONES
• Los biosensores se pueden utilizar para medir los hidratos de carbono, los alcoholes, y los
ácidos en comidas fermentadas. Los dispositivos se utilizan principal para los procesos del
control de calidad en la producción alimentaria.
• En la evaluación del valor nutritivo, los anticuerpos o los immunosensores se pueden utilizar
en análisis para descubrir las pequeñas moléculas tales como vitaminas solubles en agua y
contaminantes químicos. Pueden también ser utilizados para descubrir cualquier organismo
patógeno presente en carne, aves de corral, huevos, y pescados.
• El análisis de contaminantes químicos y biológicos constituye un reto analítico y social para
las industrias de agroalimentos. Obtener resultados en forma oportuna permite tomar
decisiones que garantizan la obtención de productos seguros e innocuos y, a la vez, ahorrar
grandes sumas de dinero.
BIBLIOGRAFÍA
AINIA. (20 de Enero de 2016). Obtenido de AINIA : https://www.ainia.es/ainia-news/biosensores-como-
ayudan-al-control-microbiologico-en-superficies-en-contacto-con-alimentos/
Gonzales, J. (1 de Julio de 2016). Tesis Doctorals en Xarxa. Obtenido de Tesis Doctorals en Xarxa:
https://www.tdx.cat/handle/10803/3237#page=1
Mandal, A. (26 de Febrero de 2019). News Medical Life Sciences. Obtenido de News Medical Life Sciences:
https://www.news-medical.net/health/Biosensors-and-Food-Industry-(Spanish).aspx