Manufactura de Clase Mundial
Manufactura de Clase Mundial
Manufactura de Clase Mundial
Sección 1802
02/11/2021
Honduras, C.A
Introducción
Objetivos específicos:
➢ Identificar cuáles son los aspectos más importantes de los que depende la
excelencia de la manufactura de clase mundial.
➢ Conocer cuales son normas de uso de maquinaria que se deben de tomar en
cuenta en la manufactura de clase mundial, asi mismo saber cuales son las
habilidades que los colaboradores deben de tener para poder ser aptos en la
empresa y de igual forma saber en que se basa y para que sirve el concepto
cero defectos y cero retrasos.
Manufactura de Clase Mundial
La manufactura de clase mundial, conocida por sus siglas en inglés “WCM”, se centra en
la gerencia mixta (por contraposición a un grupo separado de gerentes, estructurado tanto
de abajo hacia arriba como de arriba hacia abajo), capaz de brindar los recursos necesarios
para una mejora continua.
Para obtener un estatus mundial, las compañías deben lograr relaciones más productivas
con sus proveedores, compradores, productores y clientes, mediante la adopción de
nuevos procedimientos y conceptos.
El cambio presenta siempre ciertas dificultades; sin embargo, involucrar a los empleados
que trabajan como dependientes, en los procesos de toma de decisión y de resolución de
problemas, podría facilitar el panorama en este sentido.
Mejorar no sólo supone una modernización de los equipos, sino aprovechar al máximo
los recursos humanos.
• Conocer el cliente.
• Negociar eficientemente con los proveedores.
• Reducir los errores en la producción.
• Saber automatizar los procesos.
Los fabricantes exitosos han adoptado una producción del tipo “justo a tiempo” (JIT), y
unas estrategias de control de calidad comprobadamente más productivas. Las compañías
occidentales han aprendido dichas estrategias de las compañías japonesas, que aplican
conceptos de manufactura y gerencia, así como técnicas operacionales, un tanto diversas
de las utilizadas tradicionalmente en Occidente.
• Las compañías occidentales que han adaptado dichas técnicas dieron un rápido
vuelco y pronto fueron capaces de:
• Disminuir la tasa de tránsfugas entre empresas.
• Disminuir los tiempos de entrega.
• Triplicar el volumen de las ventas con tan sólo la mitad del espacio de la fábrica.
• Vaciar los almacenes y aprovecharlos en la fabricación.
• Automatizar el control de inventario, desmantelar las cintas transportadoras y
eliminar los montacargas.
• Reemplazar sistemas computarizados costosos y complicados por gráficos
manuales y pizarrones, y por operadores capaces de interpretar los datos.
• Actualizar los equipos existentes para mejorar las capacidades de producción.
• Reducir la cantidad de inspectores, proveedores y partes.
• Eliminar equipos gerenciales completos.
Así como las empresas aspiran a ser fábricas de clase mundial, los proveedores son tan
interesados en convertirse en proveedores de clase mundial.
El concepto de “cero defectos” comenzó en Estados Unidos en los años 60, y se ha vuelto
un elemento fundamental de la planificación estratégica en las últimas décadas. Este
concepto es el fundamento del control de calidad total, que abarca todos los sectores de
la compañía, y su éxito yace en el hecho de que constituye una medición visible del
desempeño de esta.
La reducción de los tiempos de entrega por parte del proveedor se ha vuelto también un
método poderoso y simple para medir el desempeño de una compañía, pues una fábrica
sólo puede reducir los tiempos de entrega resolviendo los problemas que causan los
retrasos.
Desde el punto de vista del modelo japonés de WCM, las responsabilidades del empleado
son muy diferentes a las que tenían en el sistema tradicional de manufactura:
Anteriormente, el trabajo del operario era ver funcionar la máquina. Ahora, se trata de
una rutina bien sincronizada, en la que el operador debe pensar cuál será la próxima
mejora que debe ser implementada.
Bajo el viejo sistema, la línea de ensamblaje estaba conformada por tareas tan simple que
cualquier trabajador no calificado podía hacer. Ahora, los trabajadores de la línea de
ensamblaje pueden asumir diversas tareas, recolectar información y resolver problemas.
La producción simplificada JIT genera una influencia efectiva en cada miembro del
personal. Dicha influencia se traduce en un mejor apoyo y menos gente por ventas en
dólares. Entre las mejoras, en este sentido, están:
Las normas relacionadas con el uso de maquinaria pueden obstruir o mejorar los esfuerzos
de WCM. En términos generales, no se deberían utilizar maquinarias para reducir el
trabajo. Las maquinarias no pueden pensar o resolver problemas, pero la gente sí. La
principal ventaja que presentan las maquinarias sobre las personas es su capacidad para
disminuir la variabilidad en el desempeño.
Las maquinarias son capaces de hacer movimientos uniformes en ciclos temporales
uniformes y con una calidad resultante uniforme.
La maquinaria pequeña es más fácil de mantener. Además, tener varias en lugar de una
sola, protege a la compañía en el caso de que alguna falle.